Volvamos a Galilea: Encuentro con el evangelio de Marcos y su comunidad [1 ed.] 849073965X, 9788490739655

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Presentación del curso Con cierta frecuencia, las parroquias nos piden un material de carácter popular, y listo para utilizarse, que invite a la gente a acercarse a la Sagrada Escritura, leída como palabra de Dios. Con motivo del ciclo B presentamos este acercamiento sencillo y serio al evangelio según san Marcos. El título Volvamos a Galilea hace referencia al mandato que Jesús resucitado da a las mujeres ante el sepulcro vacío (Mc 16,7). Es regresar a la vida cotidiana leyendo todo desde la experiencia de la muerte y resurrección de Jesucristo. Objetivos ▶ Llevar a los participantes a un conocimiento introductorio del evangelio según san Marcos desde tres acercamientos: histórico-literario, teológico y orante. ▶ Invitarles a conocer y leer la Biblia como palabra de Dios que tiene algo que decirnos hoy. Destinatarios Personas y grupos creyentes interesados en acercarse al evangelio según san Marcos: catequistas, grupos de liturgia, grupos de oración y lectura creyente de la Biblia, equipos de Cáritas, agentes de pastoral en general, etc. Estructura general del curso El curso está dividido en tres bloques, que pueden abordarse en un solo día o en varios. Cada uno de estos bloques tiene una duración aproximada de dos horas. ▶ 1er bloque: Dimensión histórico-literaria del evangelio según san Marcos. ▶ 2º bloque: Dimensión teológica del evangelio según san Marcos. ▶ 3er bloque: Dimensión orante del evangelio según san Marcos. Nota: Es imprescindible que los participantes lleven al encuentro Biblia y bolígrafo.

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s Orientacione para los animadores

1er bloque

Dimensión histórico-literaria del evangelio según san Marcos Objetivos Nuestros objetivos para esta sesión son: ▷ Iniciar a los participantes en la situación histórica que motivó el evangelio de Marcos. ▷ Descubrir que los evangelios reflejan no solo la historia de Jesús, sino también la situación en la que vivían las comunidades cristianas a las que van dirigidos. ▷ Descubrir algunas semejanzas y diferencias entre la situación histórica de la comunidad de Marcos y la nuestra hoy, para aprovechar mejor las enseñanzas que el autor ofrece en su obra.

Esquema Para trabajar este primer bloque, «Dimensión histórico-literaria del evangelio según san Marcos», hemos establecido dos momentos: 1. Dinámica: «La comunidad a la que Marcos dirige su evangelio». 2. Explicitación, que completará la dinámica y el trabajo realizado por los participantes.

Desarrollo de la sesión 1. Bienvenida. Presentación del trabajo (20’). 2. Dinámica: «La comunidad a la que Marcos dirige su evangelio» (75’). 3. Explicitación (30’).

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DINÁMICA: LA COMUNIDAD A LA QUE MARCOS DIRIGE SU EVANGELIO

s Orientacione para los s participante

Antes de comenzar, recordemos que el evangelio de Marcos (y los otros evangelios) se mueve en dos niveles. Un nivel, el de la historia que relata: la vida de Jesús, Mesías, Hijo de Dios, contada desde la fe en la resurrección. Otro nivel, el de la comunidad a la que, inicialmente, se dirige la narración: pequeños grupos de creyentes que en el año 70 forman una red de comunidades en torno a la región siropalestina. Esto significa que «detrás» del relato sobre Jesucristo hay otra historia «oculta», que es la de la comunidad a la que tal escrito fue dirigido. En este primer bloque nos acercamos a esa «historia oculta».

1. Un evangelio escrito en momentos difíciles Jesús de Nazaret murió hacia el año 33. Hacia el año 70, en el contexto social y político del Imperio romano, ve la luz el evangelio según san Marcos. Seguramente, tuvo una primera redacción en la región siropalestinense y un acabado final en Roma, lo que favoreció que se difundiera por todo el imperio. Sus destinatarios formaban un pequeño entramado de grupos con miembros tanto judíos como no judíos, que vivían en lugares geográficamente cercanos. Leamos Mc 12,13-17; Mc 15,1-15. ¿Dónde descubrimos, en ellos, el poder de Roma en el país de Jesús? En el evangelio de Marcos no es difícil descubrir referencias al Imperio: Herodes y sus partidarios, la presencia de Poncio Pilato como prefecto delegado de Roma o el pago de impuestos con el que todos los pueblos dominantes sometían a sus vasallos. De forma más oculta encontramos también alusiones a la llamada «primera guerra judía» (años 66-70), que se saldó con la entrada de las tropas romanas en Jerusalén, la destrucción de la ciudad y el incendio del templo. Las comunidades cristianas se vieron perseguidas por el poder romano (que no diferenciaba entre rebeldes judíos y creyentes en Jesús) y por el judaísmo, que ya empezaba a verlos como un grupo aparte.

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Leamos Mc 13,9.12-13a. Los creyentes en Jesucristo ¿cómo van a sufrir ante el poder político y el religioso su pertenencia a la comunidad cristiana? El clima de hostilidad, la sospecha y el miedo, se instalaron en los pequeños grupos cristianos de la región de Siria y Palestina. Podían denunciarlos ante los tribunales políticos o a los gobernadores por atentar contra el imperio. Podían sufrir azotes en las sinagogas por desviarse de la fe. Hablar de «evangelio», llamar a Jesús «Mesías» o «Rey» podía resultar peligroso si no era interpretado correctamente por este entorno. Leamos Mc 1,1: ¿Cuál es la proclamación de Marcos? ¿Os atrevéis a adelantar en qué sentido se opone al poder del emperador romano?

2. Una fe que se tambalea Pero los problemas con el mundo político y religioso no eran los únicos que atenazaban a los discípulos de Jesús que vivían en aquella región. El desconcierto sociopolítico penetró incluso en su fe, que entró en crisis, si bien las dificultades externas no fueron el único motivo. La desaparición de los testigos directos del Jesús histórico, la presencia de otros discípulos misioneros fuera de Palestina, la necesidad de organizarse para mantenerse en el tiempo, etc. Leamos estos pasajes y señalemos cuál es la dificultad que se trasluce en cada uno de ellos: • Mc 9,34: • Mc 9,42-47: • Mc 10,38: • Mc 10,42-44: • Mc 13,6: • Mc 13,9: • Mc 13,22:

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Por otra parte, las noticias que les llegaban desde otros lugares del Imperio no eran precisamente alentadoras. Nerón culpó a los cristianos del incendio de Roma (año 64), lo que originó una persecución directa contra ellos; Pedro y Pablo, dos columnas para el movimiento cristiano, han sido ejecutados. Confesar a Jesucristo puede llevar a un final similar al de Juan Bautista (Mc 6,7-13). Así que muchos, desalentados, decían: «El Señor pide mucho y no es fácil seguirlo. ¿Merece la pena exponerse por su causa?».

3. Afrontando la crisis A pesar de todas estas dificultades, los seguidores de Jesús de Nazareth no cedieron a la tentación de claudicar. Algunos se dispersaron hacia lugares más tranquilos, otros permanecieron en sus pueblos, pero todos potenciaron la casa como lugar para reflexionar sobre las enseñanzas de Jesús y apoyarse para vivir con coherencia y fidelidad su mensaje. Ahondemos un poco más en este tema de la «casa», que es muy importante en el evangelio de Marcos. Leamos los siguientes pasajes intentando responder a esta pregunta: ¿Qué hace Jesús «en casa»? • Mc 1,29-31: • Mc 2,15-17: • Mc 9,28-29: El texto de Mc 3,20-21.31-35 retrata a los auténticos seguidores de Jesús: ¿Quiénes forman la nueva familia de Jesús? Para Marcos, la casa es mucho más que un espacio físico. Es el lugar donde se desarrolla parte de la actividad y de la enseñanza de Jesús. Quienes están dentro de la casa, alrededor de Jesús, escuchando su mensaje, son la nueva familia del reino. Ya no se rigen por los criterios de la casa romana, en la que el paterfamilias gozaba de toda autoridad y poder. La casa y la nueva familia que forman los discípulos de Jesús lleva la impronta del Maestro: nueva relación entre los esposos, nueva valoración de los pequeños, estima diferente de los bienes (Mc 10,1-31). Todos sus miembros encarnan en la vida diaria las actitudes propias del discípulo.

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4. Actualización Seguramente nos habremos sentido reflejados en muchas de las dificultades que asolaron a estos creyentes en Jesucristo del año 70. Y también habremos sentido con ellos la necesidad de contar con una casa y familia donde se pueda expresar la fe y crecer en audacia misionera. Contadlo. Escribamos una carta en la que hablemos de las dificultades que experimentamos en nuestro contexto histórico para mostrarnos como auténticos discípulos de Jesús. Y no nos quedemos solo en lo negativo. Hablemos también de las fortalezas que descubrimos en nuestro entorno y que facilitan el testimonio misionero.

EXPLICITACIÓN: DIMENSIÓN HISTÓRICO-LITERARIA DEL EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS 1. Autor, lugar y fecha aproximada de composición: ▷ El autor, al que llamamos Marcos, fue el primero en escribir una «biografía» de Jesús para conservar la memoria de Jesucristo y expresar la fe en él como Mesías e Hijo de Dios. ▷ Nada sabemos de este autor, que transmite los recuerdos y la predicación apostólica reinterpretada y vivida desde las necesidades de su comunidad. ▷ Escribe probablemente alrededor del año 70. ▷ Una opinión generalizada sitúa el origen de este evangelio en Siria-Palestina. Sin embargo, es muy posible que la última redacción proceda de Roma, y que desde esta capital del Imperio se difundiera la obra. ▷ Influyó en la composición de los otros tres evangelios.

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2. Alarmas de guerra ▷ Contexto: Primera guerra judía contra Roma (años 66-70), que tuvo un gran impacto en Palestina, en la región de Siria y en el judaísmo de la diáspora. Implicó la destrucción de la ciudad de Jerusalén y su templo. ▷ Supuso la dispersión de las comunidades cristianas palestinenses. Esta dispersión amenazaba la continuidad de las tradiciones orales sobre Jesús.

3. Contornos de la comunidad a la que Marcos dirige su evangelio Comunidad en crisis: ⬦ Con las dificultades propias de la segunda generación cristiana (rutina, desaliento, abandono). ⬦ Dificultades acentuadas por la crisis política frente al Imperio (primera guerra judía). ⬦ Dificultades reforzadas por conflictos en el entorno social y frente al mundo judío.

4. Marcos responde: Es necesario redescubrir la verdadera identidad de Jesús para volver a él como comunidad del Reino ▷ Se estaba debilitando su identidad como seguidores de Jesús, flaqueaba su compromiso en el seguimiento. ▷ Marcos les invita a mirar a Jesús, que también tuvo un momento de máxima crisis: la cruz. Su forma de afrontarla es un ejemplo para sus seguidores. ▷ La lógica humana ha llevado al desastre y a la guerra. Es necesario «volver a Galilea» para recomenzar desde la lógica de Dios.

5. Compartimos la actualización de cada grupo —7—

s Orientacione para los Animadores

2º bloque

Dimensión teológica del evangelio según san Marcos

Ya hemos señalado que en la comunidad de Marcos no faltaban problemas. El evangelista los tuvo presentes cuando escribió su narración. Recogió las tradiciones, palabras y gestos que se contaban sobre Jesús y las transformó en espejo. Quería que las comunidades, leyendo el evangelio, descubriesen en él quién era Jesús y cómo ser su discípulo y discípula. En ello vamos a trabajar ahora.

Objetivos Nuestros objetivos para esta sesión son: ▷ Descubrir los acentos particulares que caracterizan el evangelio de Marcos, especialmente el rostro de Jesucristo y el perfil del discípulo. ▷ Realizar ese descubrimiento en comunidad creyente. ▷ Disponer al grupo para leer el evangelio según san Marcos y ofrecerle claves para actualizar su mensaje de fe desde las circunstancias históricas que hoy vivimos.

Esquema Para trabajar este segundo bloque, «Dimensión teológica del evangelio según san Marcos», hemos establecido dos momentos: 1. Dinámica: «Seguir a Jesús, Mesías, Hijo de Dios». 2. Explicitación, que completará la dinámica y el trabajo realizado por los participantes.

Desarrollo de la sesión 1. Bienvenida: Presentación del trabajo (10’). 2. Dinámica: «Seguir a Jesús, Mesías, Hijo de Dios» (85’). 3. Explicitación (30’).

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DINÁMICA: SEGUIR A JESÚS, MESÍAS, HIJO DE DIOS

s Orientacione para los s participante

El autor del evangelio de Marcos elabora de forma narrativa el primer retrato de Jesucristo. La pregunta de fondo sobre quién es Jesús y, como consecuencia, quién es discípulo, recorre toda la narración, de principio a final. No se responde con ideas, ni con conceptos abstractos, sino a través de un relato en el que hay que observar qué hace y dice Jesús, qué hacen y dicen otros sobre él y cuál es su reacción. Pongámonos en camino.

1. Jesús, Mesías, Hijo de Dios Todo el evangelio de Marcos está orientado hacia una confesión de fe. Su objetivo es que el lector termine convirtiéndose en discípulo y afirmando: Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios. Buscando este objetivo, el evangelista deja tres marcas claras en su escrito: al principio del evangelio (Mc 1,1), hacia la mitad de la narración (Mc 8,27-30) y prácticamente al final del evangelio (Mc 15,39). Sin embargo, Jesús no es el mesías y enviado de Dios que se esperaba en la época. Algunos esperaban un mesías rey que los librara de los opresores y devolviera el poder a Israel (Mc 15,9.32), otros un mesías profeta (Mc 6,4) o un mesías sacerdote que devolviera al culto todo su esplendor. Nadie esperaba un mesías siervo que pusiera su vida al servicio de los hermanos, un mesías siervo enfrentado a los que prefieren el privilegio y la dominación. Leamos Mc 8,27-33: ¿Cómo define Pedro a Jesús? ¿Qué significa que Jesús es el Mesías? ¿Cómo responde Pedro? Pedro confiesa que Jesús es el Mesías, pero cuando Jesús le explica lo que eso significa y lo que le espera, Pedro intenta corregirle. Se escandaliza de las palabras del Maestro y adopta ante él una postura autosuficiente, olvidando su lugar como discípulo. Debe colocarse de nuevo siguiendo al que le llamó: «Veníos detrás de mí» (Mc 1,17). A los discípulos les cuesta mucho aceptar que Jesús tenga que morir y que ellos deban seguirlo por el camino del servicio y la entrega hasta la

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cruz. Por eso, el Maestro se dedica a ellos y les explica el significado que tiene su muerte. Es precisamente en su muerte donde mejor queda expresado quién era Jesús. Leamos Mc 15,39. ¿Qué dice el centurión sobre Jesús? ¿En qué momento expresa esta confesión? El centurión romano aparece en el momento culminante del relato y se le dedica solo un versículo, pero lo que en él se dice es clave: «Verdaderamente este hombre era Hijo de Dios». En el Calvario, el centurión está delante de un hombre torturado, marginado, condenado por hereje, que grita encomendándose a Dios, y esa visión le lleva a confesar su divinidad. Al Hijo de Dios ya no hay que buscarlo en lo alto del cielo, sino en el ser humano marginado y sin belleza que tiene como estilo de vida la solidaridad y la fraternidad. Sin embargo, en otros momentos del relato, otros habían hablado de Jesús como Mesías e Hijo de Dios. ¿Cómo responde Jesús a estas confesiones? ¿Por qué? Pasaje

¿Quién habla?

¿Qué dice de Jesús?

¿Cómo responde Jesús?

Mc 1,24.34; 3,11-12; 5,6.7

Mc 8,29-30

Mc 9,7-9

Jesús manda callar cuando algunos personajes de su evangelio le definen como el Santo, el Mesías o el Hijo de Dios, porque tal confesión podía malinterpretarse. Solo se comprende quién es verdaderamente Jesús desde la cruz. Solo los discípulos que le hayan contemplado herido y humillado pueden confesarle sin temor a equivocarse

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como el Mesías sufriente, el Hijo de Dios obediente a la voluntad del Padre, que nos ha amado hasta entregar su vida por nosotros. A este recurso de guardar silencio ante una comprensión errónea de la identidad de Jesús, los especialistas lo han llamado «secreto mesiánico».

2. Las actitudes del discípulo Jesús llamó a sus discípulos «para que estuvieran con él y para enviarlos a predicar» (Mc 3,14). Acompañar a Jesús, estar con él, significa escucharle, ver sus signos, pero sobre todo contagiarse de sus actitudes, de sus más hondas motivaciones. Solo así sus seguidores serían capaces de descubrir su verdadera identidad. Sin embargo, cuenta el evangelio de Marcos que aquellos discípulos más cercanos que le siguieron desde el principio son incapaces de comprender su proyecto de vida y, en la pasión, le abandonan. Veamos algún ejemplo de esto que venimos diciendo. Leemos estos textos y respondemos en cada uno a la pregunta: ¿Quiénes abandonan a Jesús? • Mc 14,50: • Mc 14,43-46: • Mc 14,66-72: Judas, Pedro, todos sus discípulos… Sobre el trasfondo de este fracaso de los Doce como seguidores de Jesús, Marcos presenta a una serie de personajes secundarios que se comportan como verdaderos discípulos. Ahí están, por ejemplo, los niños (Mc 10,13-16), el ciego Bartimeo (Mc 10,46-52), el centurión romano (Mc 15,39) o José de Arimatea (Mc 15,43). Ahora queremos detenernos en algunas mujeres que, como personajes secundarios, reproducen de modo admirable el «retrato robot» del verdadero discípulo de Jesús. Partiendo de esta idea, intentemos completar el siguiente recuadro. Leamos el pasaje que se cita y completemos los recuadros en horizontal.

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Pasaje

¿Quién es la mujer?

¿Qué actitud encarna?

Jesús pide esta actitud en:

Mc 1,30-31

Mc 10,43-45

Mc 5,24-34

Mc 4,40

Mc 12,41-44

Mc 10,25

Mc 14,3-9

Mc 8,31; 9,31; 10,33-34

Sin duda alguna habremos descubierto que estas mujeres son prototipo de cuatro actitudes claves para todo seguidor de Jesús. La primera de ellas es el servicio, el hacer de la propia vida un don gratuito para los demás. Encarna esta actitud la suegra de Pedro tras ser curada por Jesús. La segunda actitud es la fe valiente para acercarse a Jesús, respuesta que aparece clara en la mujer que padecía flujos de sangre. La viuda pobre, aquella que teniendo dos monedas las entrega, nos enseña a hacer de lo que tenemos un don gratuito, a ofrecernos sin reservas. Por último, la mujer que derrama perfume sobre Jesús anticipando su sepultura confiesa al Señor como Mesías sufriente, algo que los Doce no aceptaron. Entre estos personajes secundarios, a los que podríamos denominar «los otros Doce», nos encontramos nosotros. ¡Queremos seguir a Jesús por el camino que lleva a la cruz y a la resurrección!

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3. Actualización Igual que hizo un día con sus primeros discípulos, hoy Jesús sigue preguntándonos: «Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?» (Mc 8,29). Hagamos de nuestra confesión una oración de súplica. Completemos para ello el siguiente cuadro: Jesús, tú eres…

Te pido que me ayudes a ser un discípulo…

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EXPLICITACIÓN: DIMENSIÓN TEOLÓGICA DEL EVANGELIO SEGÚN SAN MARCOS Ya hemos señalado que el evangelio de Marcos tiene un particular interés por responder a la pregunta sobre quién es Jesús. Pero junto a ello hay un segundo elemento, estrechamente unido a él, que es el tema del discipulado. Por eso, podemos abordar esta explicitación desde ambos intereses.

1. Introducción dialogada ▷ ¿Qué hemos aprendido sobre Jesús y el discipulado en la dinámica?

2. ¿Quién es Jesús? ▷ Jesús es el Mesías e Hijo de Dios… (los títulos y el secreto mesiánico). ▷ … que hace presente el reino [con palabras (parábolas) y acciones (milagros)]. ▷ Revela el verdadero rostro de Dios en la cruz.

3. ¿Quién es discípulo? ▷ Comunidad de personas llamadas para «estar» con Jesús, «seguirlo» y «ser enviados» por él.

⬦ Servicio y cruz (= arriesgar la vida) como exigencia del discipulado. ⬦ Los personajes secundarios en el evangelio de Marcos.

4. Compartimos la actualización de cada grupo

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3er bloque

Dimensión orante del evangelio según san Marcos Los creyentes no podemos quedarnos en un mero conocimiento intelectual de la Biblia. Es decisivo que sea palabra de Dios para nosotros hoy. Esta es la finalidad del tercer bloque.

s Orientacione para los animadores

Objetivos Nuestros objetivos para esta sesión son: ▷ Acercar a los participantes a la lectura creyente y orante del evangelio de san Marcos desde el itinerario de la Lectio Divina. ▷ Propiciar la lectura orante de la Palabra en comunidad creyente.

Esquema Para trabajar este tercer bloque, «Dimensión orante del evangelio según san Marcos», hemos establecido tres grandes momentos: 1. Explicitación: El itinerario de la Lectio Divina. 2. Lectura orante de Mc 10,46-52. 3. Puesta en común y evaluación final.

Desarrollo de la sesión 1. 2. 3. 4.

PRESENTACIÓN (5’) EXPLICITACIÓN (20’): El itinerario de la Lectio Divina. DINÁMICA (60’): Lectura orante en grupos de 8-10 personas. PUESTA EN COMÚN Y EVALUACIÓN FINAL (30’)

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EXPLICITACIÓN: EL ITINERARIO DE LA LECTIO DIVINA

s Orientacione para los s participante

¿Qué es la LECTIO DIVINA? • Es un método de acercamiento a la Biblia como palabra de Dios. Busca saborear la Palabra para conformar la propia vida con ella. • El iniciador de este itinerario fue Guigo II, un monje cartujo del siglo XII. • Es un método que, conservado en los monasterios, ha sido propuesto de nuevo por el Concilio Vaticano II: «Es necesario que todos conserven un contacto continuo con la Sagrada Escritura a través de la «lectio divina»..., y que recuerden que la lectura debe ir acompañada de la oración» (DV, 25).

¿Cuál es el itinerario de la LECTIO DIVINA?

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Lectura

¿Qué dice el texto? (Mensaje de fe)

Meditación

¿Qué dice de mí el texto? (Actualización)

Oración

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Compromiso

¿Qué me hace decirle a Dios? (Hablo con Dios) Estoy ante Dios-Amor que me habla, me ama, me vivifica... — 16 —

LECTURA ORANTE de Mc 10,46-52 «Que recobre la vista» (Mc 10,46-52) Nos disponemos Llevados de la mano del evangelista Marcos, nos hemos acercado al rostro de Jesús y a la figura del discípulo que propuso a su comunidad. Ahora queremos aproximarnos en actitud orante. Pedimos al Espíritu Santo que ponga luz en nuestros ojos y haga arder nuestro corazón para que podamos comprender y llevar a la práctica el Evangelio. Canto: Espíritu Santo, ven, ven (3), en el nombre de Jesús.

Proclamación de Mc 10,46-52 La curación de Bartimeo es el relato de un ciego que creyó cuando todo parecía estar en contra, poniéndose en camino detrás de Jesús. Marcos lo coloca como figura-símbolo del discipulado cuando los discípulos, cerca ya de Jerusalén, van con Jesús pero no lo siguen porque no comprenden sus enseñanzas. Necesitan luz para ver el camino de la cruz y del servicio.  En aquel tiempo, al salir Jesús de Jericó con sus discípulos y bastante gente, un mendigo ciego, Bartimeo (el hijo de Timeo), estaba sentado al borde del camino pidiendo limosna. 47Al oír que era Jesús Nazareno, empezó a gritar: —Hijo de David, Jesús, ten compasión de mí. 48 Muchos lo increpaban para que se callara. Pero él gritaba más: —Hijo de David, ten compasión de mí. 49 Jesús se detuvo y dijo: —Llamadlo. Llamaron al ciego, diciéndole: 46

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—Ánimo, levántate, que te llama. 50 Soltó el manto, dio un salto y se acercó a Jesús. 51Jesús le dijo: —¿Qué quieres que te haga? El ciego le contestó: —Rabbuní, que recobre la vista. 52 Jesús le dijo: —Anda, tu fe te ha salvado. Y al momento recobró la vista y lo seguía por el camino.

1. LECTURA: ¿Qué dice el texto? El evangelista señala que Jesús está saliendo de Jericó. Es la última ciudad que se atraviesa para ir a Jerusalén viniendo desde Galilea por el río Jordán. Jesús va a concluir su camino de subida a la ciudad santa, para afrontar sus últimos días. Va junto a sus discípulos, que lo siguen desde el inicio del viaje, y por una gran multitud que, atraída por la popularidad del personaje, lo acompañan hasta dejar la ciudad. Allí, a las afueras, se encuentra el ciego Bartimeo. Leamos Mc 10,46-47. ¿Cómo se describe al ciego? ¿Qué pide a Jesús? Bartimeo es un hombre ciego y mendigo, elementos que hablan de indigencia y marginación. Se encuentra al borde del camino, sentado y pidiendo limosna, evidenciando su dependencia social. Al enterarse de que junto a él está pasando Jesús, comienza a gritar. Le llama «Hijo de David», el título que los judíos daban al esperado mesías, y le pide que tenga compasión. No que le dé una propina, sino que tenga misericordia de él, indigente y necesitado, sacando su vida de la fosa (Sal 30,3; 113,7). Leamos Mc 10,48-50. ¿Qué obstáculos encuentra Bartimeo para llegar a Jesús? ¿Cómo los supera? La muchedumbre responde al grito del ciego tratando de callarlo porque, dicen, estaba importunando a Jesús. Sin embargo, Bartimeo alza con más fuerza aún su voz. Su tenacidad consigue que Jesús se detenga y pida que llamen al ciego. Este verbo «llamar» tiene tam-

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bién una carga teológica importante, pues es el que se utiliza para la llamada a los discípulos. Bartimeo se levanta soltando el manto. Se desprende de lo más preciado que tenía y acude junto a Jesús. Seamos testigos del encuentro en Mc 10,51-52. ¿Qué pide el ciego a Jesús? ¿Qué hace Jesús por él? Jesús hace a Bartimeo la misma pregunta que había formulado a los hijos del Zebedeo (Mc 10,35-45). Pero la respuesta es muy diferente. Mientras que los dos hermanos deseaban sentarse junto a Jesús en la gloria buscando honores, el ciego Bartimeo, cansado ya de estar sentado, desea recobrar la vista. Jesús, con la llamada y la visión, le ha devuelto a una vida nueva. El ciego, con esta luz nueva prendida en los ojos gracias a su fe, se pone en camino detrás del Maestro hacia Jerusalén, para ser testigo del acontecimiento redentor que allí va a tener lugar. Jesús sigue pasando a nuestro lado. Gritar para que se pare y «volvamos a ver» depende de cada uno.

2. MEDITACIÓN. ¿Qué dice de mí el texto? El evangelio nos permite identificarnos con Bartimeo. Nosotros también somos ciegos, necesitados de nueva luz. Jesús también nos llama y nos dice qué queremos que haga por nosotros. Dejemos que la fe de Bartimeo y la fuerza de su súplica nos interpelen. - ¿Cuáles son mis cegueras? - ¿Qué le pediría a Jesús en este momento de mi vida?

3. ORACIÓN. ¿Qué me hace decirle a Dios este texto? Cuando Bartimeo supo de la cercanía de Jesús, no cesó de alzar su petición de ayuda a Jesús, a pesar de quienes querían acallar su voz. Jesús está pasando en este momento a nuestro lado. Presentémosle también nuestra oración con la misma confianza de Bartimeo. ▷ En primer lugar, damos gracias a Dios por el don de la fe que abre nuestros ojos a la presencia del Señor en nuestra historia y nos llena de luz en medio de la oscuridad por la que hemos de caminar en tantas ocasiones.

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▷ Al mismo tiempo pedimos perdón por nuestras deficiencias en la confianza que ponemos en el Señor. Por no dejar nuestros «mantos» aferrándonos a nuestras seguridades mundanas y materiales, que nos impiden desprendernos totalmente para seguir detrás del Maestro. ▷ Nos quedamos contemplando a Dios con la mirada de la fe. Cerramos los ojos y dejamos que la luz de la gloria del Padre, el Hijo y el Espíritu resplandezca en nuestro interior.

4. COMPROMISO. ¿Qué hace surgir en mí/nosotros este texto? La reacción de Bartimeo al saber que Jesús le llamaba, levantándose de un salto y dejando su manto, así como su posterior seguimiento de Jesús manifiesta el cambio de su vida. Pongamos nosotros ahora delante del Maestro nuestro compromiso. ▷ Compartimos en el grupo nuestros compromisos.

Oración final Terminamos nuestro encuentro uniéndonos en esta oración pidiendo al Señor que cure también nuestra ceguera y nos haga fieles discípulos suyos: Libra mis ojos de la muerte, dales la luz que es su destino. Yo, como el ciego del camino, pido un milagro para verte.

Que yo comprenda, Señor mío, al que se queja y retrocede; que el corazón no se me quede desentendidamente frío.

Haz de esta piedra de mis manos una herramienta constructiva; cura su fiebre posesiva y ábrela al bien de mis hermanos.

Guarda mi fe del enemigo (¡tantos me dicen que estás muerto!). Tú que conoces el desierto, dame tu mano y ven conmigo. Liturgia de las Horas

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Índice Presentación.............................................. 1 1er bloque

Dimensión histórico-literaria del evangelio según san Marcos....... 2 Orientaciones para los Animadores....... 2 Editorial Verbo Divino Avenida de Pamplona, 41 31200 Estella (Navarra), España Teléfono: +34 948 55 65 11 www.verbodivino.es [email protected]

Orientaciones para los Participantes..... 3

2º bloque Dimensión teológica del evangelio según san Marcos....... 8 Orientaciones para los Animadores....... 8 Orientaciones para los Participantes..... 9

3er bloque 2ª reimpresión (año 2024)

Dimensión orante del evangelio según san Marcos....... 15 Orientaciones para los Animadores....... 15 Orientaciones para los Participantes..... 16

Autor: Equipo Bíblico Verbo © Editorial Verbo Divino, 2023 Diseño: Equipo diseño EVD Impresión: Gráficas Astarriaga, Abárzuza (Navarra) Impreso en España - Printed in Spain Depósito Legal: NA 2240-2023 ISBN: 978-84-9073-965-5