270 9 10MB
Spanish Pages [186] Year 2010
RAICES HISTÓRICAS DEL ESTADO EN
CENTROAMERICA J.C. Pinto Soria
^Mk», ^•W**^ *
É m '
"'I?
•^-
::i>^l/¿^.: Sil
Digitized by the Internet Archive in
2010 with funding from
Universidad Francisco Marroquín
http://www.archive.org/details/raceshistric10pintguat
J.C. Pinto Soria
RAICES HISTÓRICAS DEL
ESTADO EN CENTROAMERICA 2a. Edición. Corregida
y aumentada
Colección Luis Lujan Muñoz Universidad Francisco Marroquín
www.ufm.edu - Guatemala
EDITORIAL UNIVERSITARIA DE GUATEMALA
EDITORIAL UNIVERSITARIA Colee Realidad Nuestra
(c) Universidad de San Carlos
de Guatemala
Carátula:
Fotografía de un grabado presentado
de Jacobo Haefkens, Viaje y Ce ntroa mér ica,
en
el libro
a
Guatemala
Editorial 1969.
Universitaria,
002525-2m-8-83 Impreso en Guatemala, Ce ntroam erica
Guatemala,
Impreso No. 1352 Editorial Universitaria
A
la
memoria del inolvidable compañero Alfred Gellert
.
ÍNDICE Pág.
Presentación
1
I.
La problemática
5
II.
La diferenciación
III.
Formación de fronteras y modalidades de dominación
41
IV.
La estructuración
del poder colonial
75
V.
La fragmentación
del poder
91
VI.
La administración compartida
VIL
La clase dominante Centroamérica
VIII.
15
original
y
el
125 poder en
Abreviaturas utilizadas y bibliografía
145 163
PRESENTACIÓN
Para el Instituto Sociales es motivo de
de Investigaciones Políticas y
mucha
satisfacción presentar la
edición corregida y aumentada de uno de los primeros libros que, con profundidad científica, estudia las
"Raíces Históricas del Estado en Centroamérica", del historiador Julio César Pinto Soria.
Respondiendo a
la
demanda de los sectores académicos, el autor preparó esta nueva edición, ampliando considerablemente en profundidad y extensión el estudio de ios factores que dieron origen a. la creciente
conformación de
los actuales estados centroamericanos.
El autor pasa revista a cuestiones de extraordinaria
trascendencia histórica, para comprender las diferencias
grado de desarrollo socioeconómico y político de de la región. Así, se destacan el análisis de la fragmentación socioeconómica precolombina, el
en
el
los países
carácter
y diferencial de la conquista; las económicas y demográficas del diferencias en que se expresó la
específico
características culturales,
territorio,
las
dominación colonial,
así
como
la
resistencia
de los
pueblos indígenas a
dominación española, etcétera.
la
Particularmente significativo es
el análisis
específico del
papel que jugó el capital comercial en
la
economía
función clave que tuvieron la Audiencia y y los Cabildos (elementos sustantivos de la administración colonial) en la conformación de las estructuras de poder en el territorio. Todo lo anterior, fundamentado en fuentes históricas primarias y con abundancia de colonial
la
referencias de alta confiabilidad científica. ,
Tal
como
lo
señala eL autor,
el
estudio de
las
"Raíces Históricas del Estado en (lentroamérica" es una
no sólo
tarea compleja debido,
factores
que ¿eben
objeto de
ser
de estudios exploratorios sobre
a la
multiplicidad de
análisis, sino a la falta
la
temática. Se trata de
un campo de estudio virgen dentro de la Ciencia Histórica, de ahí que algunas de las cuestiones planteadas en
estudio tengan el carácter de hipótesis,
el
que sólo podrán se
ser
sometidas a verificación conforme
No
profundice en estudios posteriores.
anterior, histórica
que
los estados
reconoce
se el
la
obstante lo
reconstrucción
excelente
autor realiza del proceso constitutivo de
centroamericanos, teniendo plena conciencia
de que queda una serie de cuestiones planteadas para futuros estudios, tales las
como
relaciones entre ésta
y
el
surgimiento de
el estado, etc.,
nación,
la
que ya señala
el
propio autor. Esta nueva edición pretente no sólo ser de
profundidad
en
el
tratamiento
de
los
mayor
factores
sino que a la vez busca un desarrollo más didáctico que la versión original; la exposición ha sido dividida en partes más sintéticas y
considerados, expositivo
accesibles al lector.
Esperamos
contribuya
en
que
el
mejor
libro
que hoy presentamos
forma con
los
sectores
interesados en conocer
profesionales
y estudiantiles, y científicamente nuestras raíces históricas. Al mismo tiempo expresamos un merecido reconocimiento crítica
al
Dr. Julio César Pinto Soria, investigador del Instituto
de Investigaciones Políticas y Sociales, por este esfuerzo la región centroamericana.
de gran valor académico para
Lie.
Rokael Cardona
Director Instituto de Investigaciones Políticas y Sociales
Guatemala, febrero de 1983.
(USAC)
LA PROBLEMÁTICA
momento
El
que
inician
histórico, principios del siglo
estados
los
latinoamericanos
XIX, en su
vida
independiente, estuvo determinado a nivel. internacional
por
el fin
de
la
época feudal y por
sociedad
y
América
Latina
el
estado
más
el
surgimiento de
la
hecho hace a "vieja" y más "madura", en burgueses.
Este
posesión de una serie de factores históricos y políticos específicos que la diferencian del resto de países del "tercer
mundo",
a pesar de
que en
las leyes
y fuerzas
motrices del movimiento anticolonial y antiimperialista exista
una
total identidad.
1
con seriedad el asunto del surgimiento del estado en Centro América, se debe partir del punto de vista de que no es la naturaleza del hombre la que hace necesaria la existencia del estado, ni que éste surge por sí mismo en forma repentina. La necesidad del surgimiento del estado hay que buscarla en el estado de la producción y en las relaciones que de Si
1
se
quiere
Kossok, Al. 1970,
tratar
p.
751.
6
ella
se
desprenden. 2
En
otras
palabras, la etapa del
que culmina con el aparecimiento un simple acto voluntario, grado de desarrollo sino del económico alcanzado por la sociedad en un momento dado de su evolución histórica. Creemos que sólo partiendo de este punto de vista se puede llevar a cabo el estudio científico del surgimiento del estado en Centro América. desarrollo de clases del estado
Por
no
ello,
es producto de
en nuestro caso, cualquier estudio sobre
dicha institución tiene que remontarse necesariamente a
época colonial, ya que este período constituyó un cardinal en el establecimiento de las bases más importantes en el proceso de formación estatal: formas de propiedad, pero ante todo clases y grupos sociales cuya naturaleza y comportamiento sólo se pueden comprender si logramos rastrear las raíces originarias de su dominio, que se dieron, esencialmente, alrededor del proceso de concentración de la tierra, que dividió a la sociedad en dos polos antagónicos: por un lado, la minoría parasitaria dueña del poder y de la riqueza, y por el otro, las mayorías despojadas, fundamentalmente campesinas. Es decir, la naturaleza y el carácter del la
momento
estado colonial sólo podremos ubicarlos
conocer
el
tipo
descansaron
las
implantadas durante 2
Hermán,
J,
y
si
llegamos a
de relaciones de producción en que distintas la
Sellnow,
instituciones
dominación española. i.:
1976.
de
poder
Se desprende también de
que tiene
para
nuestro
sí
mismo,
tema
el
desenvolvimiento económico. Sin conocer
de
líneas
colonial
la
importancia
análisis
evolución económica durante
la
por
es,
ejemplo,
del
las principales
prácticamente
la
época
imposible
comprender la posterior "balcanización" del antiguo Reyno de Guatemala. Investigaciones ya realizadas en esta dirección nos permiten adelantar la función preponderante del capital comercial sobre los centros propiamente productivos. 3 De interés para nuestro tema, principalmente en relación con la fragmentación poder al nivel local, podría ser la separación territorial que se dio entre la localización de la del
economía de exportación —ante todo en
las
provincias
de El Salvador— y el sector mercantil que controlaba su comercialización ubicado en la región guatemalteca. Las condiciones de intercambio impuestas añileras
por
el capital
comercial
constituyó, sin
en
la
al sector
productivo hicieron
desmembración política de
las
provincias de la
antigua Capitanía General de Guatemala. Así,
algunas
las
ambos especialmente conflictivas y duda, una de las raíces más importantes
entre
relaciones
el
4
presente trabajo se ocupa esencialmente de
cuestiones
que
consideramos
decisivas
en
relación con la historia del surgimiento del estado en 3
4
C: 1982. Nos referimos a menudo
Pinto, J.
a este aspecto. Ver el texto, principalmente
a la altura de las notas 212, 229 y 295.
8
Centro América; una profundización y extensión del tema que abarque el desarrollo y consolidación del estado nacional es de capital importancia y tiene que ser, lógicamente, objeto de un estudio aparte.
contenido
El
proclamación de
la
que
conservador
Independencia y
el
caracterizó
la
posterior fracaso
de la política reformista del período morazánico, determinaron que la cuestión del poder se resolviera al final en favor de aquellos grupos formados o influidos
por los viejos intereses coloniales. En esta forma,
metas que
se
propugnaban en cuanto
a la
las
independencia
—formación de un nuevo estado "soberano e independiente"—, pero no así las de carácter socioeconómico que perseguían ante todo encauzar y fortalecer un desarrollo económico de tipo burgués independiente, acorde con la época que se política fueron parcialmente cumplidas
iniciaba entonces.
5
El proceso de recolonización indirecta
en
el
XIX por
siglo
parte
de
que
se inició
grandes potencias
las
Alemania, EE.UU.), sólo vendría aún más esta situación de los países recién
capitalistas (Inglaterra,
a agudizar
independizados. 6
entre
A
partir de entonces, la contradicción
independencia
la
5
Pinto, J.
6
Sobre puede
política
y
la
dependencia
C: 1978.
proceso de recolonización de los países latinoamericanos se Fuñado, Q: 1978, p. 49 y siguientes, Halperin Donghi, T.: 1977, p. 207 y siguientes. La penetración del capital alemán en la economía guatemalteca ha sido analizada detenidamente por: Cambranes, J. 1977. el
ver:
C
económica tomará un lugar central en la vida de los nuevos estados nacionales. Esta contradicción,, es decir, los conflictos políticos que se desencadenan alrededor de este problema fundamental, vino a recrudecer la polarización de clases, agudizando las luchas populares contra el estado neocolonial y las fuerzas internas que lo sustentaban.
Conceptulamente,
en
Centro
el
asunto del origen del estado
América ofrece también no pocas Se penetra prácticamente en un campo
dificultades.
virgen: a la falta de estudios de carácter exploratorio, se
viene
a
sumar
la
forma no
clásica
que adopta
desarrollo de tal institución en la región
aquí
como
7 .
el
Esta surge
resultado del acto de ocupación colonial para
crear y mantener una relación de subyugación y dependencia frente a la metrópoli colonizadora. Este aspecto, que nosotros trataremos detenidamente en el trabajo, le presta a la problemática del estado una
que no podía caducar en 1821 con la proclamación de la independencia, ya que ella tuvo efectos de más largo alcance; condicionó en buena medida el funcionar económico interno de los actuales especificidad
centroamericanos mentalidades y formas
países
y,
de
ante todo,
dio
origen a
comportamiento en
los
futuros grupos dominantes "nacionales". Está fuera de los alcances de este trabajo tratar en
forma detenida 7
Pinto, J.
la
cuestión del surgimiento de
C. 1980.
la
Nación.
10
No ella
la íntima relación que existe entre problemática del estado, se harán algunas breves
obstante, dada
y
la
consideraciones
al respecto.
Los elementos esenciales de las naciones europeas se remontan a los tiempos más tempranos de la época feudal, pero su consolidación y formación definitiva 8 sólo son el resultado de la época burguesa. Es decir, la nación es el producto de un largo y complicado proceso histórico.
Como
categoría
histórica,
sólo
obtiene su
pleno sentido cuando surge y se consolida como nación burguesa; como expresión inmediata de determinadas relaciones de clase.
Teniendo
9
por
base
un
procesos anteriores tienen que
contexto sufrir,
colonial,
los
lógicamente, todo
tipo de cambios o se presentan con otro ropaje. Los dos
momentos
cruciales
Centro América
en
—como
la
formación del estado en
instrumento represor que surge
conquista y como institución que se conforma alrededor de 1821-1839— no fueron, evidentemente, la
con
la
culminación de un largo proceso interno de formación nacional. El factor externo fue el determinante en el primer momento y tampoco estuvo ausente en 1821,
cuando
proceso de formación nacional era todavía decididamente débil en la región. ¿Se podría entonces el
hablar, para el caso del
Reyno de Guatemala, de una
posible proclamación "prematura" de la independencia, 8
Kossok, M.:
p.
9
Kostng,
1976, p. 58 y siguientes.
A.-.
752.
'
11
la
cual habría venido a forzar, en el sentido literal de la
palabra, procesos
y aconteeimientos para los cuales el no estaban preparados? Son sin duda estas cuestiones a las que sólo la investigación futura podrá proporcionar una respuesta territorio
y su población aún
adecuada. 10 Así,
no
es tarea fácil seguir las líneas conformativas
América Latina; en primer lugar, elementos capitalistas, portadores de tal proceso, no pudieron imponer su hegemonía a lo largo de la dominación colonial. Al contrario, como en el caso centroamericano, su presencia fue marcadamente débil, vinculado ante todo con la economía de exportación y, por ello, altamente reversible. El fin del 'pacto' del proceso nacional en
porque
los
"
colonial,
como hoy sabemos, no
significó
una ruptura
hacia adelante, faltaron las bases económicas suficientes
para un crecimiento económico con algún dinamismo,
postemancipación de formas mantenimiento del
sin olvidar las presiones externas de la
que
pretendían,
neocoloniales
de
bajo
imposición
la
dominación,
el
viejo status.
Ya para mediados del siglo XVIII se puede destacar en América Latina elementos conformativos de un proceso nacional. Los distintos procesos que se habían iniciado
dos
siglos
antes
con
la
conquista
y
la
colonización española, culminaban para este tiempo, en 10
Lo trataremos en un
trabajo que se
ocupa con
la historia
público en la región centroamericana entre 1821 y 1871.
del sector
12
mayor o menor medida, con el surgimiento de grandes territorios unificados por un desarrollo económico
común y con aparatos estatales administrativos propios, como fue el caso del Virreinato de Nueva España, el Reino de Nueva Granada, etcétera. Es decir, la y continua ampliación de determinadas relaciones socioeconómicas fue generando la formación de territorios específicos, en los cuales, teniendo por base el desarrollo de grupos de población con una repetición
relativa
coherencia
imponiendo
su
diferenciada,
étnico-cultural
hegemonía una
o
van
más formas de
producción.
Como
ya
lo hizo ver
un historiador alemán, 11
la
esquemática y parcial de criterios propios para el estudio de la formación nacional europea ha llevado a no pocos historiadores burgueses al extremo de utilización
negar
la
existencia de naciones en países pequeños
como
centroamericanos.
Independientemente de la incapacidad innata de la historiografía burguesa para llegar a las raíces reales de cualquier proceso histórico, los
es innegable
que
el
caso centroamericano es complicado.
Complicado, ante todo, porque
la investigación histórica
científica sigue siendo pobre
en los aspectos decisivos: modalidades del desarrollo
desconoce todavía las demográfico y su incidencia sobre la cuestión étnica, la base económica en que descansaba el sistema colonial, se
11
Kossok.
Ai,.
1970.
13 principalmente
su
de intereses regionales gestados a siguen siendo hasta el momento
el tipo
alrededor,
insuficientemente investigados. 1
Por otro lado, del conjunto del imperio colonial español no cabe duda que fue en Centro América donde relación Estado- Nación alcanzó su desarrollo más complejo; condicionado, precisamente, por la extrema heterogeneidad de la sociedad colonial centroamericana la
en sus diversos aspectos económicos, sociales y étnicos, que el proyecto liberal reformista (1823-1839) tampoco pudo suprimir a través de la formación de un estado y una nación para todo el territorio de la antigua Capitanía General de Guatemala. De aquí se desprende la
necesidad de realizar estudios detallados sobre todos
aquellos
factores
internos
que
llevaron
a
la
diferenciación nacional y al fraccionamiento político estatal del Rey no de Guatemala.
El estudio del caso centroamericano sólo se puede abordar utilizando la metodología más moderna; es decir,
aquella
que
acentúa
la
investigación
en los
aspectos económicos que, en definitiva, constituye
única clave
desarrollo
la
que permite comprender el complicado de los procesos que se dan en la
superestructura política. 12
C
Sobre esto ver nuestro trabajo: Pinto, J. 1982. También puede Mac Leo d, M. /.. 1980. Una buena antología de trabajos históricos que cubren el período de 1750 a 1940, en: Lujan Muñoz, consultarse:
J..
1980.
n.
LA DIFERENCIACIÓN ORIGINAL
Los territorios que comprendería después la Capitanía General de Guatemala se encontraban poblados, a la hora de la llegada de los españoles, por pueblos indígenas en diversos estados de desarrollo sociaL 13 Estos se componían desde los descendientes de los antiguos Mayas en la región de Guatemala (Quichés, Cakchiqueles, Tzutuhíles, etc.) —pueblos sedentarios que vivían fundamentalmente de la agricultura y que atravesaban ya una etapa de transición, de una sociedad sin clases a una sociedad de clases— hasta los distintos pueblos que vivían en un estado inferior de desarrollo 14 social, como fue el caso de los Jicaques en Honduras. Si bien es cierto que la conquista española tuvo el efecto de una revolución al desarticular las distintas estructuras en que descansaba la vida indígena, no se llegó a superar el fraccionamiento socioeconómico
precolombino, sobre cuyas bases se inició después
la
colonización española. Ks importante destacar aquí
un hecho que
13
Sapper, K.. 1914; Schmieder, O.. 1934.
14
Schmieder
O..
1934.
explica
16
en mucho
la historia
posterior de las colonias españolas
y por consiguiente, el caso centroamericano. Al contrario de lo que sucede en las campañas
colonizadoras capitalistas,
dirigidas
bajo
la
de
egida
elementos
cuyo espíritu predominante radica en '
la
desarticulación total de las estructuras socioeconómicas 15 preexistentes, la expansión territorial ibérica se caracterizó por
la
conservación de aquellos elementos
precolombinos que pudieran más tarde facilitar su dominación. Por ello su éxito dependió siempre, en gran medida, del nivel de desarrollo socioeconómico alcanzado en un territorio dado, y de la existencia de formas de organización social con cierta extensión y grado de consolidación que pudieran ser canalizadas en favor del nuevo sistema de dominio que
le
darían, entre
un carácter de continuidad frente a la masa población colonizada. Este aspecto de la
otras cosas,
de
la
colonización española se destaca ya en
Burgos de 1512, donde se dispone las viejas
la
las
Leyes de
instrumentación de
autoridades indígenas en favor de las nuevas de poder. 16 Se creó así un sistema
estructuras 15 16
y Markow, W,: 1955-56. El artículo 6o de las Leyes de Burgos decía al respecto: "Y que los caciques tuviesen jurisdicción para castigar los indios en el lugar a donde fuesen superiores y también a los subditos de los otros caciques inferiores que viviesen en aquel pueblo, y esto con los que mereciesen pena de azotes (...). Que los caciques nombrasen los Regidores, Alguaciles y otros semejantes oficiales para la Kossok, M.
gobernación del pueblo, juntamente con el clérigo o religioso y Administrador puesto por el Rey." Remesal, Fray A. de: 1932; L, P. 109. Ver también la nota siguiente.
el T.
17 jerarquizado donde el cacique indígena llevaba, quisiera o no, 1 una gran responsabilidad en el funcionamiento del sistema de explotación colonial, situación 17
La sociedad colonial fue
estudiada
por
componentes:
donde
el
la
vista
algunos
que
se
en su propia época, y así es también
autores,
como
república "de los Indios" y
cacique indígena sería, junto con
el la
resultado
"de
los
el alcalde
de
dos
Españoles"
mayor, una
pieza imprescindible de engarce. La función desempeñada por los
caciques
fue
así
ambigua
y
se
presta,
por
consiguiente,
a
interpretaciones contradictorias. Entre otras cosas, se ha dicho que
jugaron un papel represivo y desleal frente a sus hermanos de sangre y que, al final de cuentas, se convirtieron en un grupo explotador más. Es evidente que el proceso de diferenciación económica y su posición jurídico social especial tendieron a colocarlos en un lugar difícil frente al resto de la población aborigen. En realidad, el sistema que se implantó después de la conquista no dio lugar a otra cosa. Tanto la legislación escrita, como la práctica diaria de los esbirros reales, los hicieron los responsables directos de las prestaciones que tenía que cumplir la población indígena ante los explotadores: pago de tributos, repartimiento de mano de obra y
una infinidad de cargas más. Por otro lado, el sistema colonial nunca dejó al cacique mayores posibilidades de encumbramiento social; indígenas acaudalados sólo fueron casos aislados y no llegaron a formar un grupo o estrato social de alguna significación. Los caciques tampoco estaban a salvo de las arbitrariedades y demás abusos que se cometían contra la masa indígena. El sistema fue con ellos también duro y denigrante: la práctica de los azotes, por ejemplo, les fue aplicada hasta el final de la dominación española, creándose así una tabla rasa de discriminación racial frente al indígena como totalidad. Las citadas Leyes de Burgos estipulaban ya el castigo de azotes para los caciques; Cortés y Larraz los menciona también constantemente para finales del siglo XVIII. Se trata a todas luces de una problemática que tiene que ser todavía le
investigada detalladamente; decisivo será sin duda, el estudio de los levantamientos indígenas y el papel jugado por los caciques. Ver
también
la
nota siguiente.
18
dominación española. 1 El legado precolombino fue entonces decisivo, ya que proporcionó no sólo estructuras de poder sino también formas comunales de trabajo, que los invasores españoles después utilizarían, lógicamente con otro contenido, a lo largo de tres siglos de dominación
mantuvo hasta
colonial.
los finales de la
19
Sin embargo, lo anterior no nos debe inducir a
que la dominación española conscientemente dejaba margen a la supervivencia de las naciones indígenas como tales; esto era incompatible con la esencia misma de la empresa colonizadora. El indígena pensar
era
el
vencido
y
fue
preocupación constante del todo aquello que pudiera
colonialista el desarraigo de
darle a éste el derecho a la autodeterminación
como
pueblo: cultura, religión, idioma, etc., como lo menciona en una oportunidad Remesal: "Fue estilo antiguo usado inviolablemente de los vencedores privar a los vencidos,
no sólo de
la
libertad y hacienda, sino del
lenguaje y modo de hablar que antes tenían, forzándoles a recibir su propia lengua y usar de ella: medio único
para 18
19
la
paz y comercio entre victoriosos y vencidos:
Como ejemplo se puede ver: Instrucción formada para el buen Govierno y Policía de ios Pueblos de Indios de la Intendencia de San Salvador en este Reyno de Guatemala, por su actual Intendente Don Josep Ortiz de la Peña; San Salvador, 18 de diciembre de 1787, AGI/AG, Leg. 576. Ver también: Martínez Peláez, &; 1973, p. 535 y siguientes. Este sería el caso de la mita incaica. Konetzke, R.: 1977, p. 183 y siguientes.
19
porque
la
diversidad de
las
20
lenguas impide y estorba lo
uno y lo otro". Los casos de Centro América y México bien
importancia
la
del
legado
ilustran
precolombino en
el
sentido que venimos señalando. El desarrollo económico
alcanzado por los Aztecas a principios del siglo XVI se precisamente en un considerable grado de centralización política que se extend ía ya sobre un vasto reflejaba
de más de 300,000 Km 2 21 y la caída de Tenochtitlan, si bien no significó un cambio automático del poder en favor de los españoles, sí facilitó enormemente la edificación del poder colonial sobre todo el territorio anteriormente dominado por los Aztecas. A Tomás Gage, observador inteligente, no se le pasó por alto este aspecto: "Pero Cortés considerando la reputación de aquella capital [Tenochtitlan]* y la autoridad que sus señores habían ejercido siempre en las territorio
ciudades y tribus vecinas, y conociendo la comodidad de sus asientos, la hizo reedificar de nuevo, y la repartió sus conquistadores,
entre solares
para
las
Ayuntamiento, y público". 20
Iglesias,
los
22
la
casa
del el
22
Remesal, Fray A. de. 1932, T. /., p. 425. Un escrito dominico de 1574 destaca el apego indígena a su idioma y demás valores precolombinos: "(. .) y acaso de tanto tiempo aún apenas les pueden quitar de sus lenguas porque adoran en ellas". Relación de la Provincia de la Verapaz (. .): 1955, p. 355. Chaunu, P.. 1973, p. 51. Los textos entre corchetes son introducidos por el autor del presente estudio. (N. delE.) Gage, T.- 1946, p. 71. .
*
mercados,
demás parajes necesarios para
.
21
después de haber señalado los
20
En Centro América la situación fue distinta. La fragmentación socioeconómica precolombina le imprimió en cierta forma su sello al desarrollo posterior de la región. 23 El ritmo como se llevó a cabo la Conquista y se introdujeron las nuevas formas de explotación fue distinto en cada región, en parte condicionado por las dificultades geográficas; pero fundamentalmente debido a la mencionada desigualdad del desarrollo de los pueblos indígenas,
que
facilitaron o
dificultaron, a través de su propia organización social, la
consolidación
de
socioeconómicas. 24
A
un
proceso
de
la
nuevas relaciones
las
vez, al contrario de introducir
centralización
distintos territorios,
como
y unificación
de
los
sucedió en México alrededor
de Cortés, en Centro América la conquista se prolongó por casi dos décadas y se realizó en forma extremadamente irregular, hubo momentos en que una de
la figura
sola región
disputaban tres y más Este carácter irregular de la conquista
o provincia se
conquistadores.
25
la
creó en cada región rasgos propios que sólo ahondaron el
localismo
existente,
23
más tarde que forma desigual en que
cual tuvo
lo
repercutir, necesariamente, en la
Las diferencias entre Nueva España y Centro América, en cuanto a condiciones socioeconómicas precolombinas, han sido también
las
señaladas por: MacLeod, Ai J 1 980, p. 34 y siguientes. Esta problemática ha sido tratada por varios autores; ver, por .
24 25
ejemplo: Jara, A.: 1969, P. 5 y siguientes. Ver también la nota 15. Sobre esta anarquía y localismo de las primeras décadas, abundante información en: Chamberlain, R. S.: 1966.
21
implanta y consolida
se la
el
sistema eeonómieo social de
colonia.
La premisa fundamental para el triunfo de La Conquista —ante todo de La Colonización españolafue la existencia de territorios densamente poblados y en metales preciosos, que podían ser explotados mayores dificultades. La medida en que estuvieron presentes estas condiciones determinó sin duda, desde el principio, la diferenciación económico social que se
ricos sin
daría después a lo largo del territorio centroamericano.
Densamente poblados eran guatemalteco y república
el
territorio
salvadoreña;
otros
el
que compone centros
altiplano la
actual
importantes de
población se extendían a todo lo largo del litoral del Pacífico. Según cálculos moderados, a principios del siglo XVI habitaban en estos territorios cerca de 800,000 aborígenes. 26
En
lado del Atlántico, por el predominaban condiciones desfavorables: el
contrario,
un clima
malsano y pueblos indígenas nómadas y aguerridos que no sólo no se sometieron a los españoles, sino que llegaron a constituir un serio peligro para los centros ya colonizados. Alrededor del año 1700, casi dos siglos después de la llegada de los españoles, un autor informaba todavía sobre la situación inestable en la zona litoral del norte: "(. pero no están totalmente .) .
26
Villa corta
Calderón,
JA.. 1942,
p. 365.
22 desiertas estas montañas, sino con algunos habitantes que todos son pocos respecto de lo dilatado de las tierras, como sucede en el resto de la costa del Norte de estas Indias. De aquí proviene la dificultad de su reducción, la cual se hace más ardua por los naturales de estas naciones de las costas del Norte, que to&os estos indios son varios, inconstantes, sin fe ni palabra ni
agradecimiento, tímidos, cobardes, crueles, traidores, sin
pueblo ni habitación fija, sino que viajan desnudos por 27 En los montes, sin política ni gobierno alguno (. .)'\ estos territorios, como veremos más adelante, la 28 presencia española fue prácticamente nominal. .
Así, fue lógico que la población española se volcara
hacia aquellos lugares de densa población indígena de
naturaleza sedentaria, situación que facilitaría enormemente la introducción de las nuevas formas feudales
de
españolas
fueron fundadas en los antiguos centros que basaban ya su vida económica en el
indígenas trabajo
común un
informa
Las
dependencia.
de
autor:
la
principales
ciudades
Para el caso salvadoreño
tierra.
"La magnitud de
la
primitiva
intrusión de los españoles en las comunidades indígenas
fue
tal
que,
de
los
seis
centros
principales
de
establecimiento español que se constituyeron durante veinticinco años después de la conquista, sólo dos eran
fundaciones nuevas;
el resto
27
Isagoge Histórica Apologética
26
Ver
el
(.
estaba situado dentro de .
.):
texto a la altura de la nota 79.
1935, p. 229.
las
23 29 comunidades indígenas más importantes". Información similar existe también para las otras cuatro
ciudades centroamericanas. 30
La mayor parte de
los inmigrantes españoles se
asentaron en los territorios que
componen actualmente
los estados de Guatemala y El Salvador. Se trataba de las regiones mayormente pobladas y con las tierras mas fértiles,
que ofrecían ya en ese momento, tres fuentes de abundante población indígena,
enriquecimiento:
metales preciosos y productos agrícolas comerciables, como el cacao. A partir de aquí organizaron los
tales
conquistadores
encaminadas
al
y primeros saqueo del
pobladores país:
las
medidas
esclavización de
la
población indígena para venderla luego en otras regiones americanas, 31 así
como
es decir, aquella etapa
privado
de
constituye
el pillaje
de metales preciosos;
en que predomina
el carácter
conquista y cuyo principal motor lo a capar ación rápida de riquezas, un rasgo
la la
típico de las empresas dirigidas por el capital comercial.
Como central 29
30
en
se sabe, el capital la
comercial jugó un papel
conquista de los territorios americanos.
Browning, D.: ¡975, p. 81. Para el caso de ciudad Guatemala, ver: R entesa l. Fray A. de: i 932, T. L, p. 37 y siguientes; información similar da también la Isagoge Histórica Apologética (p. 196) respecto a la primera fundación de ciudad Guatemala. Ver también: Cbamberlain, K. S.: 1966, pp. 63-64,
31
Remesal, Fray A, de: i 932,, T. I., p. 168. Ver también el texto a la de la nota 36. Cbamberlain, R. S.: 1966, da también información al respecto.
altura
24 Tanto
la trata
intensiva de esclavos indígenas,
como
la
explotación de los yacimientos de metales preciosos, hasta las distintas modalidades que cobró el negocio del cacao,
por
el
neto.
fueron actividades económicas protagonizadas forma más brutal de pillaje
capital comercial en su
32
A
la
etapa
anterior
le
seguiría
el
cultivo
intensivo del cacao y del añil, productos que pondrían
definitivamente a estos territorios en contacto con 33 naciente mercado internacional.
el
El proceso de colonización de las otras provincias
fue más lento. Mientras que en 1540 ya se cultivaba en Guatemala los nuevos productos introducidos por los españoles, como la caña de azúcar (que jugaría un papel importante en la economía colonial), y el ganado vacuno y caballar se multiplicaban en forma rápida, 34 en las otras provincias la tierra conquistada no se encontraba aún organizada definitivamente bajo las nuevas formas coloniales de explotación. El poder colonial se reducía en estos territorios a un corto número de españoles, quienes compensaban la falta de riquezas minerales con la esclavización intensiva de la población aborigen; es decir, la encomienda no pasaba 32
El carácter privado de el capital
33 34
la conquista y la importancia que tuvo en ella comercial ha sido destacado por varios autores: Kossok, M.
y Markow, W. 1955/56;
Jara, A.:
Guatemala
ver:
Cambrones,
55 y
siguientes.
se
puede
Pinto, J, C„. 1982, p.
Garda
1961. Para
Peláez, F, de P,: 1851, T. L, p.
].:
el
caso concreto de
1978, p. 118 y siguientes.
186 y
siguientes.
25 aún de su etapa puramente esclavista. Por este tiempo lanza Las Casas sus iracundos ataques contra la esclavización de la población indígena, asegurando que los
españoles habían transportado, en corto tiempo, la provincia de Nicaragua a 35
cerca de 25,000 indígenas de
Panamá.
A Las Casas se le ha acusado a menudo de exagerado. Sin embargo, no cabe duda que tanto los movimientos de población que trajo consigo la trata intensiva
de
esclavos
indígenas,
destructivo que tuvo para ellos
las
como
el
carácter
guerras civiles que se
produjeron entre los conquistadores por el reparto de las provincias, dieron como resultado la despoblación de grandes territorios, como sucedió principalmente con las provincias de Honduras y Nicaragua. El pillaje de metales preciosos tuvo que haber sido fatal
en
este sentido. El conquistador Pedro de Alvarado
más de veinte compuesta cada una
tenía en los años treinta, por ejemplo,
en
cuadrillas
Honduras,
aproximadamente de 75 indígenas, dedicadas a la búsqueda y explotación de oro. Francisco de Montejo, conquistador y colonizador de Honduras, preocupado por salvaguardar sus propios intereses, trató de frenar la la población aborigen por
explotación desmedida de
medio
del sistema de cuadrillas
que practicaba Alvarado
y su hueste; asimismo intentó frenar los consiguientes 35
Zavala,
S.
.
1945,
P.
19.
26 grandes movimientos de población de climas cálidos a
De todos modos,
fríos.
disminución rápida de
la
el
resultado
final
fue la
población indígena y su huida
hacia aquellas regiones aún fuera del control colonial.
Alrededor de
forma
estable
1540,
la
cuando Montejo
colonización
de
en
inició
Honduras,
este
territorio había dejado, prácticamente, de ser atractivo
para los colonizadores españoles; ante todo, porque
las
décadas anteriores de esclavización intensiva desde las Antillas habían ya diezmado fuertemente el territorio.
La situación no mejoraría en
el
población indígena
fue
restante
futuro, ya que repartida
la
poca
entre los
la época del cuarenta al cincuenta, así que los posibles nuevos colonizadores no encontrarían mayores alicientes para permanecer en una colonia en la cual su principal riqueza, los indígenas, se encontraba ya
colonizadores de
repartida. 36
Lo
anterior tuvo efecto de largo alcance, pues el
colonialismo español sólo podía desarrollarse en aquellas
zonas donde existieran núcleos densos de población indígena.
37 El poco desarrollo de las minas hondurenas,
por ejemplo, lo atribuyeron siempre
las
autoridades
36
Chamberlain, R. S.: 1966, p. 119 y siguientes. Según un informe de 1539, una encomienda común y comente de Nueva España tenía por ese tiempo más valor que la provincia entera de Honduras, ¡bid.,
37
Marko w, W. 1954/55,
p.
140. :
pp. 43-60.
27 coloniales a la escasez de
fue cierto. 3
mano
de obra, lo que en parte
8
Ya desde
los años treinta
y cuarenta del
siglo
XVI,
habían fundado las principales ciudades de las de Honduras y Nicaragua; sin embargo fueron a menudo abandonadas por la falta de fuertes incentivos económicos. Así, León —en Nicaragua— que se
provincias
al principio contaba con cerca de 500 vecinos españoles, no tenía más de 80 vecinos a principios del siglo
XVII. 39
Transformado, en
las
condiciones señaladas, en un
Honduras por un precisamente sobresalir tampoco podían no creciente desarrollo económico, ante todo porque los indígenas que lograron sobrevivir al impacto de la territorio prácticamente vacío, las ciudades" de
conquista fueron sumamente conflictivos y supieron utilizar el medio geográfico especial para evadir la 40 Como factor externo, la colonial.
dominación
41 vino a presencia inglesa desde mediados del siglo XVII 38
Un informe de 1744
atribuía la decadencia de las minas hondurenas hecho de que: "(. .) estando muchos de los minerales de aquel Rey no distantes de poblaciones, y por esta razón careciendo de operarios (. .)'*. El Presidente de la Audiencia de Guatemala Don Tbomas de Rivera y Santa Cruz sobre el estado de la Casa de la Moneda, Guatemala, 7 de diciembre de 1744, AGI/AG, Leg. 315. Vásquez de Espinoza, A.: 1948, p. 237 y siguientes. Ver el texto a la altura de la nota 1 30. al
.
.
39 40 41
Como se sabe, la presencia inglesa en la región del Caribe fue siempre creciente después de la ocupación de Jamaica en 1655. Al respecto, bastante información en AGI/AG, Leg. 665. Ver la nota siguiente.
28
un
ser
más
obstáculo
de
consideración.
El
rival
colonialista sería bastante astuto para ganarse la amistad
o
la
neutralidad para
de
los
indígenas
fronterizos,
contrabando y otras actividades que sólo irían en desmedro de los intereses españoles en la región. 42 utilizándolos
Así,
sin
realizar
el
que explotar
indígenas
en
sus
inmediaciones, los centros urbanos de esta región nunca tendrían mayor perspectiva de crecimiento. 43 Según la descripción hecha por Espinosa a principios del siglo
XVII,
en
trataba
se
realidad
de
lugares
bastante
rudimentarios. 44 Por este tiempo, el laboreo de minas se
encontraba paralizado debido precisamente a la escasez de mano de obra. 45 Hubo también otro hecho que fue desfavorable para el desarrollo de esta provincia: el principal puerto de
en 42
el
Capitanía General de Guatemala,
la
Atlántico, era Puerto Caballos, en la provincia de
Los ingleses se valdrían especialmente de los aguerridos indios Mosquitos para tratar de expandir su influencia en la región: "Spn los Zambos Mosquitos C .) Que en diferentes poblazones, señorean hoy la mayor parte de la Costa del Norte en distancia de más de 70 siendo tan feroces guerreros, a causa de la leguas (. ), comunicación, y trato que tienen, con los ingleses jamaicanos, sus confederados, y enemigos de la Real Corona de España, quienes les dan armas de fuego (. .)". Don Joseph Ruiz de la Garza hace una .
.
.
que se hallan aquellas provincias Guathemala 17 de junio de 1720, AGI/AG, Leg. 259. Ver
dilatada exposición de el estado en (...).
también
43 44 45
el
texto a
la
altura de
nota 130.
la
Isagoge Histórica Apologética (. .).- 1935, p. 226. Vásquez de Espino za A.: 1948, p. 224 y siguientes. .
t
ib id.
29
A
Honduras.
principios del siglo
XVI 1 fue trasladado
a la
Amatique, en la costa del Atlántico de Guatemala, la cual además de ofrecer mejores condiciones naturales para el mantenimiento de un puerto, facilitaba el control de los mercaderes bahía
de
46 guatemaltecos sobre el comercio exterior del istmo. El traslado del puerto contribuyó indudablemente a 47 importancia la provincia hondurena. a
restarle
En
conquista de Costa Rica encontraron también
la
los españoles grandes obstáculos.
Su colonización sólo
se
década del setenta del siglo XVI, con la fundación de Cartago. Esta sería también más tarde la 48 De la región de Costa Rica capital de la provincia. inició
46 47
en
la
Criado de Castilla, A.: 1958. El traslado se realizó en 1605, no obstante las protestas de los vecinos hondurenos que alegaban: "que no viniendo a él las naos de
España quedaría aquella Provincia desierta y desamparada". Que lo sucedió realmente, lo confirmó más adelante el propio presidente Criado de Castilla cuando informó al Rey que: "El dicho puerto de Caballos quedó del todo despoblado y sin ninguna vecindad porque los pocos vecinos que allí habían quedado se vinieron con las dichas naos al dicho puerto de Santo Tomás". Ibid.,
anterior
p. 64.
48
"En
el año pasado de mili y quinientos e sesenta el Ucencia do Jhoan Martínez de Landecho, vuestro Presidente e governador de la Real audiencia de los Confínes, ynformado de como en el dicho distrito estava un pedaco de tierra llamado las provincias de Nuevo Cartago e Costa Rica, lo qual por inconvenientes sucedidos, no se avia hasta aquí descubierto ni poblado, a lo menos, de la vanda del Norte al Sur, ni paseado, ni andado (. .)". El Cabildo de Garci-Muñoz al Rey, dando cuenta a S. M. de las expediciones del licenciado Cavallon y Juan de Estrada R avago, 22 de agosto de 1562. En: Acuña, V. H. y R. Herrera Blanco: 1980, pp. 41-47. .
30 solamente la península de Nicoya se encontraba, desde 1524, bajo la dominación española. 49 La población indígena (Chorotega) de esta región vivía desde tiempos precolombinos del cultivo común de la tierra, es decir, grupos humanos sedentarios que podían fácilmente ser integrados a las nuevas relaciones de explotación desarrolladas por los españoles. Esta circunstancia y el contacto comercial con las otras provincias, fueron las bases para el surgimiento del clásico latifundio español coloniaL 60 49
"(•
.
.)
yo me
partí
por
tierra
haziendo muchos caciques amigos y
vasallos de vuestra magestad, y tornándose todos cristianos muy de su voluntad, y llegue a un cacique que se llama Nicoya, el cual me dio de presente 14 mili castellanos de oro, y se tornaron cristianos 6 mili y tantas personas con el y sus mugeres y principales (...)". fcV
Capitán Gil (ionzalez Davila a S Vi el Emperador Carlos V. Rey Je España, sobre su expedición a Nicaragua. Santo Domingo 6 de marzo de 1 524, Ibid pp. 3-26. El Obispo Morel proporciona en su Relación información interesante sobre las condiciones en que se desarrolló Nicoya. Cuando él visitó el territorio, a mediados del siglo XVIII, la población indígena se encontraba ya fuertemente diezmada; la mestiza, por el contrario, iba en aumento. El Obispo Morel aseguró que anteriormente la provincia se encontraba con densa población indígena y que ésta fue desapareciendo en la medida en que se fueron intensificando los vínculos comerciales de la región con el exterior: "Asegurase, que en los principios, el número de Indios que tenía era considerable; que contaba de siete Pueblos, y que ahora treinta años floreció por medio del comercio con Panamá. En esto consistió su mayor ruina. El cebo era el fruto que entonces se traficaba, y como la extracción producía lucros muy ventajosos se dieron tanta precisa en la matanza de ganado vacuno, que las haciendas quedaron arruinadas. Los Indios también se disminuyeron, y los Pueblos se exterminaron." Relación de la Visita de la Diócesis de Nicaragua, hecha y remitida a su Magestad (que Dios guarde) en su Real y Supremo Consejo de estas Indias, por el Licenciado Don Pedro Agustín Morel de Santa Cruz, Obispo de aquella Yglesia Cathedral, 11 de julio de 1753, AGI/AG, Leg. 950. ,
50
M La situación fue
distinta
en
costarricense, principalmente
fue donde se asentó
la
en
mayor
el resto del territorio
la
Meseta Central, que
parte de los españoles. La
poca población indígena que encontró aquí su llegada,
si
no
como
se extinguió
efectos devastadores de
la
el
invasor a
consecuencia de los
conquista, escapó hacia
montañas colindantes con Panamá en Atlántico, 51 esquivando de esta manera
la
la
costa
las
del
explotación
colonial Este hecho tuvo dos efectos importantes que
contribuyeron a la
la
configuración de
lo
que
sería después
nacionalidad costarricense:
—
La formación de un conglomerado étnico del resto de las otras provincias.
elemento
blanco
desde
sería
determinante, dadas
las
En
distinto
esta región el
muy temprano
el
pocas posibilidades para
el
desarrollo de
un fuerte mestizaje que formaría, por
otro lado,
núcleo central de
el
la
población de
las
restantes regiones centroamericanas. La población
todo en aquellos territorios donde el latifundio se impuso como principal forma económica, como fue el caso de la península de Nicoya, donde según Espinosa la mestiza
se
población
51
Acuña,
V.
desarrollaría
indígena
U y R.
era
ante
muy
"ladina" y vestía
Herrera Blanco: 1980, pp. 103-122.
32 españolo. 52 o bien en las eostas del Pacífico, debido al contacto del aborigen con los españoles que iban de paso hacia los otros centros coloniales de América. El otro efecto importante, lógicamente inseparable del anterior, fue el surgimiento de. relaciones socioeconómicas en cierta medida distintas a las del
como
—
los
resto de las provincias del
Las
bases
indispensables
Revno de Guatemala. para
el
desarrollo
latifundio colonial, la existencia de abundante
obra y con el
el
del
mano de
contacto comercial de los centros económicos exterior, fueron débiles en esta región. En al primer factor, la población indígena
mundo
cuanto
costarricense se atrincheró en la zona montañosa de Talamanca y desarrolló un fuerte espíritu combativo contra sus enemigos externos, que fueron el invasor español y los propios indios Moscos.* 53 Así, el indígena costarricense fue reacio a aceptar la 52
Vásquez de Ispinoza, A.: 1948, p. 242. Son interesantes las observaciones del Obispo Morel cuando se refiere a la relación coníUctiva
entre
indígenas
y
ladinos
en
Nicoya:
"Cuando
los
Ladinos, cuyo total se reduce a 590, acuden al Pueblo a cumplir con
muchos trabajos, porque aún quieren darles posada. Por este motivo se ven precisados a mantenerse en las haciendas de campo, que llegan al número de ciento tres, repartidas por todo el territorio de la Provincia (. .)" Relación de la Visita (. . .): 1 753. Ver la nota 50. Ver nota núm. 130 y la paralela del Editor. Fernández Guardia, R,: 1966, p. 56 y siguientes. Ver también nota las
obligaciones de cristianos experimentan
los Indios ni
.
*
53
51.
33
dominación extranjera y primero se extingue como grupo étnico que someterse a las nuevas formas de explotación colonial.
Como
era
de esperarse,
intentó reiteradamente cambiar
el
colonizador español
tal situación;
de tiempo
en tiempo se hacían incursiones hacia las zonas montañosas con el objetivo de cazar indígenas que pudieron luego ser utilizados en las haciendas del lugar. El obispo Morel fue testigo ocular, mediando el siglo XVIII, de
las
campañas colonizadoras
realizadas en la
región de Talamanca y dejó también información sobre sus escasos frutos: "Cada año por el mes de agosto, que es el
más oportuno,
se
hace en Cartago una recluta de
cincuenta hombres pagados por
meses con 4,000 pesos que vienen de Goathemala. Pasan en compañia de uno de los misioneros a la Talamanca, que dista de aquella capital noventa leguas, se interna otras cincuenta seis
Panamá, entran en aquel tan vasto como despoblado país a aprehender Indios. Estos habitan en
hacia
lugares de difícil acceso, y están sobre sus armas, para
no
ser insultados
niños sin embargo los
de los Españoles. Las mujeres y los hábiles para la fuga son
como menos
que ordinariamente caen en
escapan, y a veces se
Los grandes se ponen en defensa dejando tendidos el lazo.
en el campo a algunos de los nuestros. Los que se aprehenden son traídos y puestos en lugares distantes. Los más de ellos mueren, o de tristeza viéndose
34 desterrados para siempre de su país, o de enfermedades
provenidas clima."
de
destemplanza
la
mutuaeión
y
Ante
hecho anterior,
el
colonizador español se
el
vio obligado, para poder sobrevivir, a trabajar él la
del
54
55 tierra.
La escasa población española
los valles de la
se
mismo
expandió en
Meseta Central y dirigió personalmente
abandonando parcialmente la ciudad de Cartago, no obstante las amenazas de la Corona y la excomunión de la Iglesia. 56 El origen de las
sus pequeñas haciendas,
ciudades costarricenses (San José, Heredia y Alajuela) fue el resultado de la actividad colonizadora de estos 57 primeros En condiciones, la gran españoles.
estas
territorial, típica
para
propiedad
el resto
de
la
Capitanía
General de Guatemala, no progresó mayormente en Costa Rica durante
el
período colonial. Todavía para
la
XIX, llama Stephens
la
década del cuarenta del
siglo
54
Relación de
55
Refiriéndose al pueblo de
la Visita
(.
.
.):
1
753.
Ujarrás, en las cercanías de Cartago, informó Morel: '•(. .) fáltales el fomento principal, que es el de los Indios, de los cuales ninguno ha quedado, y sus tierras se hallan ocupadas de los ladinos". Ibid„ Ver también: Fernández Guardia, .
R..
56
1966, p. 51.
"Viven en (.
.
.)".
Guardia,
hn
Ibid., p.
fin
en
los
Relación de
R
,..-
la
campos privados de Visita
1966, p. 59.
él y siguientes.
(. .
la
instrucción cristiana
J, 1753. Ver también: Fernández
35 atención 88 Rica.
sobre
Estas
poco valor de
relaciones
Costa Rica,
se
Lo
la
en Costa
tierra
socioeconómicas específicas de
fortalecieron
en que quedó
aislamiento
colonial
el
la
aún más
a
través
del
provincia en la época
anterior afectó, ante todo, los vínculos
comerciales con
el
exterior y con ello las posibilidades
de alguna expansión económica en
la región.
59
En
varias
oportunidades se quejaron sus habitantes de ser abandonados a su suerte por la Audiencia de Guatemala la propia Corona. En la segunda década del siglo XVII, por ejemplo, se dirigieron las autoridades locales a la Corte, pidiendo que la provincia fuera agregada a la
y por
Audiencia
de
Panamá. El argumento central lo que tal paso traería para el fomento del comercio local y lo difícil que era la comunicación con la lejana Audiencia de Guatemala. Esta petición, y otras, fueron deneagadas por la Corona constituía
las
ventajas
Española. 60 El mencionado aislamiento hizo también de la región una víctima fácil de las tropelías de los piratas, en 58
Stephens,
J. L.
1854, p. 243. Se trata evidentemente de una simple que ser comprobada a través de la investigación
hipótesis que tiene
del caso concreto costarricense. La impresión general que deia la documentación consultada es la del predominio de la pequeña y mediana propiedad, ver por ejemplo, la Relación del Obispo Morel. 1982, p. 57. Ver la nota 168. Al respecto ver también: Pinto, J.
C
Q: 1982,
59
Pinto, J.
60
AGCA, A1.23,
p. 14.
Exp. 10076, Leg. 1521, Fol. 139.
36 El poco comercio de Costa Rica, en el con Porto Belo (Panamá) y Santa Marta (Colombia), así como el que tuvo con el Perú en el Pacífico, en la primera mitad del siglo XVII, se vio
ambas
costas.
Atlántico,
prácticamente
por
imposiblitado
piratas a finales del
mismo
la
actividad
de los
siglo.
Las ciudades costarricenses fueron constantemente
creándose
un
clima de extrema inestabilidad que indudablemente tuvo que afectar el
asoladas,
así
desenvolvimiento económico. La ciudad de Esparza, en el Pacífico,
fue saqueada o incendiada dos veces entre
1685 y 1886, de
tal manera, que una parte de la población se vio obligada a emigrar a las otras provincias
del istmo
y sólo unos pocos
se trasladaron al interior de
Costa Rica, hacia Cartago. Todavía a mediados del
XVIII predominaba entre
los
el
habitantes de
siglo
mismo clima de inestabilidad Esparza, como lo destaca el
obispo Morel en su descripción: "Preténdese, que en lo antiguo tuvo Esparza algún nombre, por el comercio de
hoy en día es la mayor desdicha del universo todos huyen de ella así por este motivo [mal (. .), clima], como por el justo temor de ser sorprendidos de piratas, o enemigos como lo fueron tres veces en lo su Puerto, .
pasado, y de donde ha provenido la desolación de la vecindad, y el atraso en que sus moradores se versan." 61 Así, la poca participación de Costa Rica en 61
Relación de
la Visita (..,).
1
753.
Ver nota 60.
37 las
guerras
civiles
post-independencia
se
centroamericanas de lógicamente no en
explica
la la
barrera geográfica que separaba a la provincia del resto
del
istmo,
sino
fundamentalmente
en
el
señalado
carácter específico de sus relaciones socioeconómicas,
ya en formación desde El
la
época colonial.
desarrollo desigual de las regiones del istmo,
donde Guatemala mantenía como capital del Reyno una función hegemónica en todos los aspectos de la vida colonial, recibiría una base sólida con la diferenciación territorial económica que se implantaría al final, después de trescientos años de dominación española. Grosso modo, alrededor de 1750 se puede detectar en Centro América la formación de regiones económicas vinculadas a grupos dominantes que ejercían una buena parte del poder local por medio de los ayuntamientos o a través de los canales que ofrecía la administración media colonial. 62 La región guatemalteca, por ejemplo, se había especializado en básicos (maíz,
frijol, trigo, etc.)
el cultivo
y en
la
de artículos
elaboración de
que circulaban a lo largo del Reyno de Guatemala bajo el rubro "ropas de la tierra". 63 Aunque en menores proporciones, se practicaba también la textiles
64 crianza y el repasto de los distintos tipos de ganado. En la capital guatemalteca se concentraban además las 62 63 64
Pinto, J. íbid. lbid.
C
1982,
p.
12 y
siguientes.
38 de comercio, que se encargaban de comercializar aquellos productos de importancia clave: 65 el añil, medios de consumo, textiles, etcétera. principales casas
Honduras
y
Nicaragua
ganaderas, y en
centros
eran
regiones
esencialmente
primera se encontraban los principales mineros. En el territorio salvadoreño se la
mayor parte del añil que se exportaba al mercado europeo. Con "booms" pasajeros alrededor del cacao y el tabaco, Costa Rica producía casi exclusivamente para el autoconsumo. 6 6 Este desarrollo desigual y la especialización económica de los distintos cultivaba la
territorios aportarían, sin duda, las bases
de
la
futura
diferenciación social, política, estatal y nacional de las provincias del Reyno de Guatemala.
Otra particularidad del proceso de colonización en Centro América fue la existencia de extensos territorios
donde
las
instituciones
de poder
de
la
colonia no
lograrían afirmarse, es decir, regiones en las cuales la
presencia española no pasaría de ser nominal y que, consecuentemente, vendrían a fortalecer el desarrollo desigual que venimos subrayando. Refiriéndose a esto, Fuentes y Guzmán se lamentaba, finalizando el siglo XVII, de la debilidad del poder colonial que aún no
había logrado integrar efectivamente bajo su dominio a la
totalidad de los pueblos indígenas que habitaban el
65
Ibid.
66
¡bid.
39 territorio del
Reyno de Guatemala: "Y
más admirable
circunvalación,
su
conquistadores,
como
los
si
primeros,
sin
duda fuera
hubieran otros
que
hubieran
sujetado las seis provincias que están por conquistar,
como son
Manché, el Chol, el Jicaque, la Talamanca y Teguzgalpa; que aunque se ha intentado en ellas introducir el uso de nuestra santa fe 67 Este hecho católica, ha pasado jamás de intentarlo." las
Lacandón,
del
el
tuvo repercusiones serias en la evolución de la colonia, ya que no se trataba de simples territorios "vacíos" que las
economías
locales en expansión integrarían después
en su órbita sin mayores dificultades. La inexistencia de una economía de este tipo los convirtió en centros de inestabilidad para las zonas ya colonizadas, no sólo por la
presencia de indígenas aguerridos insumisos,
porque despertaron
el apetito
sino
expansionista de otras
potencias colonialistas, principalmente
el
inglés
cuya
presencia se empieza a sentir desde mediados del siglo XVII y se convertiría en un factor de extrema inestabilidad interna en la región hasta ya bien entrado el siglo
XIX.
68
67
Fuentes y Guzmán,
68
Zarina,
F.
A.M.. 1980
A. de: 1882, T.
/.,
p.
186
BDL
FORMACIÓN DE FRONTERAS
Y
MODALIDADES DE DOMINACIÓN Como
sucede
estructuración de
en
general
un imperio
cuando
se
inicia
colonial, las fronteras
la
que
fijó la administración española para la Capitanía General de Guatemala fueron inicialmente arbitrarias, dictadas no sólo por la necesidad inmediata de organizar la
explotación de los territorios recién conquistados, sino también para borrar cualquier indicio de la antigua personalidad cultural de los pueblos indígenas precolombinos que pudiera despertar en estos después el
derecho a
la
autodeterminación
como
tales.
69
En
esta
el imperio colonial español conformó una nueva unidad administrativa, compuesta de pueblos indígenas de origen económico y cultural completamente diversos, los cuales entrarían desde entonces en un largo proceso
forma,
de
nivelación
socioeconómica, en la medida como las nuevas relaciones de
fueran siendo incorporados en explotación. 69
Ver
el
texto a la altura de la nota 1 9.
42 Las fronteras
de la nueva colonia se segunda mitad del siglo a aunar, bajo una misma
externas
fijaron definitivamente
en
la
cuando se empezó temporal y eclesiástica, a las distintas provincias que llegaron a componer la Capitanía General de Guatemala. La concordancia entre el ramo civil y el eclesiástico fue una de las preocupaciones constantes de la Corona española a la hora de estructurar las distintas 70 secciones de su imperio. Sin embargo, en el caso del Reyno de Guatemala, ella no se logró imponer desde el primer momento. Alrededor de la fecha mencionada, la unificación se refería más que todo a las órdenes 7 religiosas * y no a los distintos obispados localizados en XVI,
jurisdicción
70
"Parque, según parece por una de las ordenanzas del Consejo Real, y Supremo de las Indias, que se hicieron año de mil quinientos y setenta y uno; y aún esta era más antigua que dice téngase siempre intento, que la división para lo temporal se naya conformando, y
correspondiendo, cuando se sufriere, a lo espiritual. Los Arzobispados, y Provincias de las religiones con los distritos de las Audiencias, los Obispados con las Gobernaciones y Alcaldías Mayores; los Ardprestazgos con los Corregimientos, y los curatos con las Alcaldías ordinarias". Remesal, Fray A. de. 1932, T. II, p. 278. 71
"Porque las provincias de las Religiones al principio, como cosa espiritual, seguía el distrito de los arzobispados, y de los obispados sufragáneos suyos; y por tanto la provincia de Honduras, cuyo obispo es sufragáneo al arzobispado de Santo Domingo premiado de las Indias. En las cosas de la Orden estaba sujeta al principal de Santa Cruz de la isla de Santo Domingo. Y porque el obispo de Nicaragua es sufragáneo del Arzobispado de Lima, los conventos que allí tenía la Orden, estaban sugetos al provincial de San Juan Bautista del Perú. Y porque los obispos de Guatemala, y Chiapas son sufragáneos del Arzobispado de México, los conventos de la Orden que en estas provincias había, estaban sujetos a la provincia de Santiago de México. Ahora dióse el orden del gobierno temporal, y nádense las provincias de las religiones por las jurisdicciones de las Audiencias, y no de los obispados, y arzobispados". Ibid., p. 279.
4:h
el territorio
centroamericano. Los grupos dominantes de
región insistieron siempre sobre
la necesidad y las ventajas de tal unión al nivel de los obispados. 72 Sin la
embargo, ésta sólo se logró en 1743 cuando se fundó un arzobispado en ciudad Guatemala. 73 El proceso de formación estatal civil tuvo, no obstante, su momento más importante a mediados del
XVI, cuando
siglo
un proceso administrativo
se inició
centralizado^ alrededor del grupo de conquistadores y primeros pobladores de la región guatemalteca, que fue
imponiéndose paulatinamente, con la ayuda de la Audiencia de México, a las pretensiones autonomistas de 74 A la altura los grupos locales de las otras provincias. de tal fecha, el grupo más fuerte de población española 72
"(.
.
.)
distrito
sirviéndose de
de
la real
mandar
advertir
que en
las
provincias del
audiencia, que en esta Ciudad reside, hay cinco
obispados, de los cuales los tres son el de Guathemala, Chiapa y
la
Verapaz sufragáneos a México, que está de ellos casi trescientas leguas, y los negociantes que han de acudir a México son molestados
con caminos y gastos excesivos, y mayores que suele ser el interés de Los otros dos obispados son el de Honduras, que es sufragáneo á Santo Domingo, y el de Nicaragua a lima, que para acudir a estos arzobispados es necesario navegar mucho por la mar,
los negocios.
con riesgos y peligros mayores sin duda que la importancia de los que son daños de mucha consideración. Los cuales se remediarán, si vuestra Magestad fuese servido de mandar que el pleitos y causas,
obispado desta Ciudad de Guathemala se haga arzobispado, como tantas veces se ha suplicado en vuestro real consejo de las indias (.
.
.)"•
Relación del Cabildo de Guatemala del 2 de
en: Isagoge Histórica Apologética
73 74
García Pcláez, F. de Pinto, J. C. 1980.
P.:
(.
.
mayo
J: 1935, p. 369.
/S52.,T. IL p. 240 y siguientes.
de 1604,
44 se localizaba evidentemente en la región guatemalteca, que hacía sentir su peso sobre las provincias vecinas en la forma de pillaje de metales preciosos y la posesión de
encomiendas. 75
La creciente importancia central de la región de Guatemala y su cabildo, fue ya notoria después de la muerte de Alvarado, cuando el cabildo guatemalteco dispuso nombrar, por su propia cuenta, a Francisco de la Cueva y al Obispo Marroquín como gobernadores interinos, no sólo de la región de Guatemala, sino también de los distritos de Honduras-Higueras, San Salvador y San Miguel, medida que sería después aprobada por la Audiencia de México. 76 Así, desde un punto de vista puramente administrativo, se puede destacar tres etapas en la conformación de la Capitanía General de Guatemala. La primera se inició con la conquista en la década del veinte y se extendió aproximadamente hasta el año de 1542, cuando se fundó en Honduras la Audiencia de los Confines. Se trataba de los primeros años del saqueo rápido
y
distintos
dominio
de
brutal,
las
guerras intestinas entre los
conquistadores por el reparto
de
territorios
los
consiguientemente, fue también
anarquía en cuanto a 75
Chamberlain, R. Aguilar, £..
76
S.:
196 1,
Chamberlain,, R.
p.
S„:
la
el
del
botín y
conquistados y, período de mayor
organización administrativa de
1966, p. 48 y siguientes. Ver también Chinchilla 22 y siguientes. 1966, p. 180 y siguientes.
45 las
La segunda etapa arrancó de
distintas provincias.
1542, fecha en que se empezaron a imponer los intereses metropolitanos y se unieron las distintas regiones que formarían al final el cuerpo político del Reyno de
Guatemala. Después del
en que
se trasladó
la
momento importante
de 1549,
Audiencia a ciudad Guatemala,
vino a culminar esta etapa en 1564 con
el
nuevo traslado
de dicha institución a Panamá.
Como cuanto a
de un período inestable en
se ve, se trató
la
demarcación de
las
fronteras de las distintas
unidades administrativas del naciente imperio colonial español en América.
A
esta
también, en última instancia, la
77
el
inestabilidad
se
debió
mencionado traslado de La
77 Audiencia de ciudad Guatemala a Panamá.
Esta inestabilidad la destaca también la documentación de la época: "Vuestra majestad ha sido servido de mandar pasar el Audiencia de los Confines a Tierra Firme y en ello ciertamente Dios e vuestra majestad fueron, serán e son muy servido por muchas cosas: la una por la grande orfandad que el reino de Tierra Firme padescía de justicia y los muchos negocios y pleitos importantes que allí de ordinario hay: lo otro que se escusarían las alteraciones causadas con atrevimiento, que allí no había Audiencia de vuestra majestad ques cosa de grande sombra e calor de justicia e resistencia contra
porque en Gua tímala hay pocos negocios e basta allí letrado personal tal, e lo mesmo en Honduras, e Tabasco e Nicaragua e que estos se muden e den sus
tiranos: lo otro
un gobernador Chiapa e
residencias den de a cuatro o
ano años de
sus proveimientos
(.
.
.)"
que Francisco Morales dirige al Rey don Felipe sobre las cosas que conviene proveer en Nueva España y Guatemala, México 1 Carta
(.
.
.)
de octubre de 1663. En: Paso
234-235.
y
Troncoso,
F.:
1940, T. 9, pp.
46 tercera etapa,
que tendría carácter
en 1570 con
el
retorno de
definitivo, se inició
institución a la región
la
guatemalteca. 78
Lógicamente, las fronteras anteriores fueron inicialmente más que todo formales, y mantendrían por mucho tiempo este carácter provisional; sólo se estabilizarían en la distintos procesos
continuó
la
medida en que se consolidaron los que se iniciaron con la conquista y
colonización.
La larga conjunción de una daría,
aunque sólo hasta
a las fronteras de la Capitanía
Está fuera
de factores
le
General de Guatemala.
de los alcances de este trabajo referirse
detenidamente limitaremos
serie
cierto grado, carácter definitivo
a
estos
factores;
nos
ello,
Estos factores fueron,
mencionarlos.
a
por
desde luego, de carácter socioeconómico, ya que estos constituyen en última instancia
la
base de sustentación
de cualquier tipo de fronteras entre cualquier clase de estados o comunidades políticas.
Dos grandes fuerzas se pueden destacar, grosso modo, como propulsoras y sostenedoras de las fronteras coloniales:
—
Aquellas
de
contenido
socioeconómico, es decir, en 78
Remesal, Fray A. de: 1932, T.
1851, T. 1980.
P.:
I.,
p.
164 y
II,
la
esencialmente
medida en que
se va
pp. 481-82; García Peláez, F. de
siguientes.
Ver también: Quesada
S.,
FJ.:
47 extendiendo y consolidando el sistema económico en que descansaba el poder de los grupos dominantes locales; concretamente, según el grado de propagación de las nuevas relaciones coloniales de producción a lo largo y ancho del territorio de Capitanía General de Guatemala.
la
Factores de carácter estratégico general; aquí nos referimos a
las
cabo
el
por
periféricas
campañas colonizadoras poder
con
colonial
objetivo
el
hacia
de
llevadas a las
zonas
fortalecer
las
fronteras del imperio español contra las potencias coloniales enemigas. El éxito de estas
dependía de
la
campañas
conquista o neutralización de los
pueblos indígenas que habitaban los territorios en cuestión.
Desde
el
punto de
de colonización tomaba
vista militar, este tipo
forma de campañas y fundación de presidios en aquellos territorios que
fueron 79
En la
considerados
la
de
importancia
clave,
79
el año de 1737, por ejemplo, propuso el presidente de Guatemala construcción de dos presidios militares en las provincias de
Honduras y Costa Rica para:
%
.
.)
que aquellas Provincias tengan
alguna defensa, y también para que no estén tan expuestas a que hagan en sus costas Asiento los Ingleses, como han ejecutado ahora, tiene por preciso que se erijan dos Presidios de cincuenta soldados cada compañía y sus oficiales, que el uno se ponga en la boca del Río de Matina, donde se construyera un fuerte para resguardo de la
guarnición y defensa de la Provincia de Costa Rica, que es
Que
la
más
Puerto de Trujillo
ponga otro igual Presidio en el así para anti mural de la Provincia de Coma y agua,
como
sirve
insultada de los enemigos.
para
que
se
de surgidero al guardacostas
cuando
le
4ñ que venía a ser completada, y muchas veces hasta reemplazada en su totalidad, por la actividad
labor
colonizadora realizada por las misiones 80 Sin embargo, no se puede hacer una
religiosas.
separación absoluta entre los factores de contenido
socioeconómico
que denominamos de carácter estratégico, ya que el triunfo de los últimos dependería, en última
esencialmente
instancia, de la existencia
y
aquellos
y grado de solidez de
los
primeros.
Después
del
estratégicos que, en
control sobre
la
dominio sobre aquellos centros una u otra forma, aseguraban el
totalidad del istmo centroamericano, la
ocupación efectiva del resto del territorio se llevó a cabo
en
forma lenta y
extremadamente
condicionada, por un lado, por
economía de
la
el
irregular,
poco dinamismo de
la
región; y por el otro, por la escasa
importancia que siempre tuvo
Guatemala dentro
del
la
Capitanía General de
conjunto del imperio colonial
español convenga, y con estos presidios, espera que se pueblen aquellas costas, al presente desiertas (. . .)". El Presidente de Guatemala Pedro de Rivera y Villalon, Guatemala 10 de junio de 1737, AGI/AG, Leg. 665. En este mismo legajo se encuentra bastante información sobre las distintas medidas militares y proyectos de colonización ideados por el poder colonial para contrarrestar la expansión inglesa en el litoral centroamericano del Atlántico.
80
García Peláez, F. de P.: 1851-52, se refiere detenidamente a la labor colonizadora de las misiones religiosas en el Reyno de Guatemala.
49
Como se sabe, la motivación primaría de la conquista y colonización española fue siempre el mayor drenaje posible de riquezas de las colonias hacia la metrópoli, la que descansó, desde sus inicios, fundamentalmente en riquezas minerales. En este sentido se destacaron, también desde los inicios, los 81
La riqueza de las minas hondurenas permaneció siempre el mito que crearon los conquistadores y primeros pobladores y su producción, con excepción del año de 1739 en que se Virreinatos de México-
y
el Perú.
amonedaron 38,000 marcos de 20,000 marcos anuales.
La
plata,
nunca rebasó
los
82
pobreza general
del territorio y el encarecimiento que sufrían los productos por su largo y costoso traslado desde los centros de producción, en el Pacífico,
Reyno
hicieron del
un
puerto
al
territorio
mercado las
si
embarque
en
el
Lo
anterior
Atlántico,
muy temprano
mayores atractivos para
mundial. 83
importancia,
con
sin
de
de Guatemala desde
el
tiene
naciente
mayor
se tiene presente que el comercio español
colonias
lo realizaban
grandes comerciantes
particulares que, lógicamente, preferían comerciar 81 8?
con
C.: 1978, p. 33 y siguientes. Sobre el desarrollo de las minas hondurenas y su producción en la época colonial, puede verse los siguientes documentos: AGI/AG, Legs. 18, 245, 289, 315, 423. Sobre la minería centroamericana se
Furtado,
encuentra también alguna información en García Peláez, F. de
1851-1852.
83
Pinto, J.
C. 1982, pp. 66-69.
P.:
50
como México, el Perú, Cuba, por ejemplo, opacó en mucho el desarrollo económico de la región, porque las riquezas
aquellos territorios ricos
México,
etcétera.
de esta colonia canalizaban hacia
ella la
mayor y mejor
parte del comercio ultramarino español. 84 Todos estos factores hicieron finalmente de la Capitanía General de
Guatemala
una
colonia
"pobre",
cuyas
principales
entradas
tributarias escasamente cubrían el mantenimiento de su propia administración colonial. 8 B Existe información abundante que ilustra la forma irregular y violenta cómo el poder colonial va tratando de integrar bajo la órbita de su dominio a la totalidad de pueblos indígenas, ante todo a los radicados a lo largo de la costa del Atlántico, debido a la importancia 86 Pero, por estratégica de la región. lo regular, faltaban
más indispensables, principalmente el humano, para llevar a cabo tales empresas colonizadoras. Así, por ejemplo, con la intención de someter a los Lacandones, situados en la región los
recursos
potencial
con el virreinato mexicano, el Capitán General de Guatemala se dirigió en 1667 a la Corte española pidiendo que se ordenara al Virrey de Nueva España y al Capitán General de Campeche que le prestaran toda la ayuda que fuera necesaria para, llevar a fronteriza
84
Ibid.
85
Pinto, J.
86
Ver
la
Q: 1980,
nota 80.
p. 100.
51
cabo
empresa. 87 Pedía, entre otras cosas, que
tal
le
remitieran a la Ciudad de Santiago de Guatemala: "los
vagamundos que hubiere y mal entretenidos", así como también a "los presos que hubiere en las cárceles por desgracias, y que no hubiera parte que les pida (...). Y si hubiere mulatos y negros esclavos, que sus dueños quieran enviarlos para lo dicho, los admitan y remitan a 88 esta Ciudad".
Los diversos intentos del poder español por hacer efectivo su dominio sobre la totalidad de estos territorios, que Fuentes y Guzmán enumera en la parte anteriormente mencionada, 89 se llevaron a cabo en distintas épocas, según la importancia que tuvieran los mismos para el imperio colonial en general, o bien para consolidación de los intereses económicos locales en
la
particular.
estas
Alrededor de los intentos colonizadores de
zonas
periféricas
se
pone especialmente en
evidencia lo que señalábamos atrás, respecto al grado de
condiciones mínimas para que
el
colonialismo español
pudiera echar raíces en un territorio dado. eran sin duda las zonas más pobladas con indígenas seminómadas difíciles de arraigar en centros poblados al estilo de los fundados por los españoles, como registra una fuente ya citada: "Y aunque en algunas provincias o parages de
Las
anteriores
inhóspitas,
87
O'Ryan,
88
Ibid.,
89
Ver
J. E. :
1960, T. L, p. 31 y siguientes.
el
pp. 32-33.
texto a
la
altura de la nota 67.
52
muchos pueblos y rancherías con multitud de Indios, no parece a propósito para fundar una villa de Españoles o pueblo estable, porque tampoco tienen estabilidad los Indios en la habitación de alguna provincia o parage, sino que cada año o por tiempos se mudan de una provincia a otra sin tener pueblo estas costas se hallan
Y
firme (...).
tienen alguna vecindad de Españoles o
si
90 de otros que no sean de su gusto, con más facilidad".
Como
se sabe, la
dinámica de
radicalmente de
diferencia
la
la
ciudad colonial se 91 Esta surge
europea.
como
parte y resultado de largos procesos históricos de integración socioeconómica de extensos territorios. En el
en
caso americano español,
su
las
ciudades fueron fundadas
mayor parte para
político- militares
como
servir
de donde debían partir
centros
las olas
de
colonización-explotación hacia los territorios circunvecinos. Fueron así, por mucho tiempo, núcleos administrativos consumidores que sólo
muy
lentamente
crearon con sus áreas circunvecinas nexos económicos similares
a
los
que
ciudades europeas. 9 2
se
En
conocen en
la
historia de las
otras palabras, sin poblaciones
indígenas sedentarias en los alrededores, faltaba también
una de
las
desarrollarse
premisas fundamentales para que pudieran centros urbanos de alguna extensión y
continuidad. 90
Isagoge Histórica Apologética
91
Pinto, J. C.: 1982, p. 25.
92
Ibid.
(.
.
.).-
1935, p. 226.
53
A
la vez,
faltaron los metales preciosos
como
el
otro factor esencial de arraigo colonial. La región era
pobre en este sentido, aspecto en realidad más que evidente, pero que los españoles, en su ansia por acaparar riquezas fáciles, tendían siempre a olvidar de 93 nuevo.
Tomás Gage
en una expedición de colonización en el norte de Guatemala, cuyo principal motor lo constituía la búsqueda de oro. Una figura central en la expedición era el prior de la orden de los dominicos de la Verapaz. 94 La expedición se puso en 93
participó
Sobre la Verapaz y la búsqueda de oro, informaba un religioso en 1574: "Grandes catas se han hecho en esta tierra los tiempos pasados por la fama de oro y metales que roban los corazones de los pobres hombres, mas como la tierra es terrible de romper y tan fragosa y montuosa como arriba se dijo y los naturales son pocos y de poco trabajo y codicia y los descubridores también eran gente flaca todo se volvió humo y después de muchas semanas de malos días y peores noches por los montes con guias ciegas se volvieron a sus casas rotos y descalzos y con las bolsas ligeras llenos de vergüenza y maldiciéndola." Descripción de la Provincia de la Verapaz (. .): 1953/54, p. 354. Ver: Montero de Miranda en bibliografía. Otra relación escrita el mismo año informa algo similar sobre la Verapaz: "Las cosas de que carece toda la tierra son oro y plata y otros metales, hase buscado con diligencia y pérdida de hacienda y vida de algunos españoles." Relación de la Provincia de la Verapaz (. .): 1955, p. 21. grandes riquezas en "(. .) él me decía que sin duda se encontrarían .
.
94
.
ese país nuevo, y que podía yo estar seguro de que tendría mi buena parte así como él". Sobre el oro como motor de la expedición informa Gage más adelante: "La esperanza de hallar el oro daba
esperanza a los unos, pero el miedo de tener que hacer con esta multitud de indios, hizo que los otros hubiesen querido salir de estos bosques y lugares desconocidos." Gage, T.: 1946, pp. 228, 230.
54 el intento fracasó: no había oro, pero sí sumamente aguerridos y conscientes de la dominación colonial que los amenazaba si llegaban a
marcha, pero
indígenas
la presencia hispana en su región: "Dijeron que ellos sabían bien que los españoles poseían ademas todo aquel país a excepción de esta pequeña comarca donde ellos vivían, y de que querían gozar en paz sin tener nada que hacer con nosotros; pero que si nosotros queríamos ver su país y pasar por él como amigos, que ellos nos lo permitirían sin hacernos ningún género de mal. Mas que si veníamos para atacarlos y hacerlos esclavos, como habíamos hecho con sus vecinos, que estaban resueltos a morir combatiendo antes que 96 rendirse".
aceptar
Como
el anterior, la
mayor
parte de los intentos
colonialistas hacia las zonas periféricas
totalmente,
dieron
sólo
resultados
menudo fueron también
reversibles.
si
no fracasaron que a
parciales
96
El origen del
fracaso se debe buscar no sólo en los grandes obstáculos
y el escaso material humano que lleva a cabo tales campañas —expresión final de una economía de poca expansión—, sino también en la tenaz resistencia que opusieron los indígenas de estas regiones, ya se tratara de seminómadas o de pueblos de naturaleza
geográficos
95 96
231. Graiño, A.: 1907. Al respecto puede verse la Relación del Obispo Ibid., p.
Morel que citamos en
la
presentan: Acuña, H. V.
nota 50. Ver también la documentación que y R. Blanco Herrera: 1980.
55 sedentaria,
como fue en
general el caso de los indígenas
situados al norte de Guatemala.
El intento de sometimiento de estos pueblos se
ya en
década del cuarenta del siglo XVI, a obra misionera del padre Las Casas. Respecto a Las Casas hay que tener presente varias cosas que ayudan a explicar su actitud frente al indígena. En primer lugar, es innegable su profundo humanismo —producto del renacimiento europeo— que sin duda se vio acicateado por las barbaridades cometidas por los españoles en el continente americano. Así se expbcan sus distintos proyectos colonialistas que van, desde su intento por separar a la población indígena de la española, la importación de mano de obra africana 98 para ser utilizada en tareas productivas, y por último, la utilización del indígena en actividades económicas a través del establecimiento de una relación laboral. En Centro América el terror de la conquista alcanzó las mismas dimensiones que en el resto del continente americano; por ello, no fue tampoco casual que fuera precisamente en Guatemala donde Las Casas inició
través
de
intentara
la
la
probar
la
validez
de
sus
métodos
sometimiento pacífico de la población Evidentemente, en comparación con 97 98
de
aborigen. el
pillaje
Konetzke, R.: 1977, p. 166. procurando que a los castellanos que vivían en las Indias se . .) diese saca de negros, para que con ellos en las granjerias y en las minas fuesen los indios más aliviados". Remesal, Fray A. de: 1932,
"(.
T. I M p.
116.
56 exterminador practicado en conquistadores
y
las
primeros
pobladores,
una forma
lascasiano significaba
de colonización; en
décadas iniciales por los distinta y
son ya notorias
ella
proyecto
el
más avanzada las
nuevas
formas de explotación del capitalismo temprano."
de Guatemala se transformó, un campo de experimentación del proyecto lascasiano. Los pueblos de Rabinal, Cobán y
norte
El
prácticamente, en
Cahabón, en este
la
"tierra
de
región de
de
espíritu
la
Verapaz, fueron fundados en
experimentación.
Kekchí,*
en
guerra"
Verapaz, "tierra de
la
se
Tezulutlán,
en
transformó
verdadera paz". 100 El contenido,
indudablemente, no cambió en nada indígena.
Fue dominación
luego
indígena
el
Así,
la
futura suerte del
a través de otros medios,
pagaría
caro.
que
Las Casas era una
excepción en Centro América y quienes determinaban
el
momento
la
sociedad
histórico colonial,
Además, conforme *
y
le
eran la
impondrían su Alvarado
y
sus
sello
a
sucesores.
sociedad colonial echó raíces, fue
Tezulutlán es, evidentemente, palabra náhuatl y no es originalmente aguda. Gran parte del territorio guatemalteco —y del istmo
centroamericano— fue repetidamente invadido por
los
mexicanos.
(N. del Ed.)
99 100
Markow, W, 1956, :
p. 321.
Vera Paz" denomina en una oportunidad Re mesa 1 al padre Las Casas (T. /., p. 94). Según este cronista, es a partir de 1547 cuando se empieza a llamar en los papeles reales Verapaz a la antigua Tezulutlán. Remesal, Fray A. de: 1932, T. II, p. 192. Ver también Biermann, B.: 1964, p. 126. "Apóstol de
la
57 surgiendo un divorcio radical entre los viejos postulados
defendidos por Las Casas y la actitud asumida por los dominicos que se asientan posteriormente en la región.
No
obstante estar vedado por
las leyes de la corona, el en su conjunto acaparó riquezas, 101 ante todo, en forma de tierras, que eran explotadas en su mayor parte
clero
con mano de obra indígena; en otras palabras, los dominicos se convirtieron en un grupo explotador más. Por otro lado, los supuestos privilegios concedidos a estos indígenas por haber aceptado sin resistencia la dominación española, exención en el pago de tributos, 102 etc., fueron después prácticamente burlados. Así, por mucho tiempo, el poder de los dominicos en la Verapaz careció de estabilidad. Como señalamos, se trataba de una forma enmascarada de dominación 101
La Corona española emite ya en
1 587
una
real cédula
ej?
que
se
hace
referencia a riquezas materiales acumuladas por las órdenes religiosas .) y como quiera que en este apostólico oficio, se hayan ocupado y ocupen haciendo tanto fruto como es notorio los religiosos de las órdenes; porque considerando, que el tener propiedad, o bienes particulares, contradice al rigor de sus institutos, preceptos y votos de pobreza C .)". Remesal, Fray A. de: 1932, T. IL, pp. 534-36. Sobre el mismo asunto ver también Ibid., p. 491. Ver también la nota 103. "Fueron asimismo recibidos [los indígenas como vasallos del Rey] debajo de ciertas condiciones y palabra real de su buen tratamiento (...), y como vienen tan a menudo a contarlos y aumentarles los tributos dicen cuáles son las palabras del rey, que cómo no se guardan, las cuales todas están confirmadas de nuevo por el Rey Fhilipo. Acá excusado decimos que no sabe su Ma gestad lo que pasa, en que sabiendo lo remediara porque su palabra es imposible faltar". Relación de la Provincia de la Verdpaz (. .): 1955, p. 23.
"(.
.
.
102
.
58 cuya verdadera naturaleza se pondría poco tiempo después en evidencia, a través de la explotación a que fueron sometidos los aborígenes por los propios 103 La reducción dominica no fue tampoco dominicos. para el indígena una alternativa de mejor supervivencia económica que la que conocía antes de la llegada de los españoles, o que la que vivían en ese momento los otros indígenas bajo la dominación española. Ellos, como los otros, habían sido confinados a exiguas y malas tierras que serían durante el período colonial la principal causa 104 La reducción fue, de la miseria indígena en general. ademas, por largo tiempo, probablemente un simple 103
Las formas que utilizaban los dominicos en la explotación de los indígenas son innumerables: elaboración de textiles, requerimiento de productos comestibles, mano de obra gratuita para las haciendas e ingenios azucareros, etc. Gage se refiere en varias oportunidades al poder económico de los dominicos: "A dos o tres leguas de la villa hay dos ingenios de azúcar: uno pertenece al convento de los dominicos de Chiapa la Real, y otro al de Chiapa de los Indios, y en uno y en otro hay cerca de doscientos negros y muchos indios que trabajan continuamente, para dar abasto de azúcar a todo el país (. . .)". Gage, r.; 1946, p. 160. Para la región de la Verapaz, en Guatemala,' informa más adelante: "Aunque este valle no se puede comparar con el de Mixco y Pinula, es sin embargo remarcable por tres cosas que allí se encuentran: la primera es un molino de azúcar llamado San Gerónimo, que depende del convento de los dominicos de Guatemala, y excede al de Amatitlán [ también de los dominicos], no sólo en la cosecha de azúcar, que mandan por medio de muías más allá de la montana de Guatemala, y en el número de esclavos, que son mandados por dos religiosos, sino particularmente a causa de los buenos caballos que allí se crian, siendo los mejores de
104
todo el país de Guatemala y muy estimados por todas de distinción (. . .)". lbid., p. 198. Pinto, J. C.: 1981, p. 12 y siguientes.
las
personas
59 centro de contaminación de
las
mortíferas enfermedades
traídas por los españoles y es lógico que los indígenas 105 Estos factores, 106 tratarán de evitarlas. y el ejemplo
de libertad que ofrecía
que 105
la
vecindad de aquellos pueblos
se resistían a aceptar la "(.
.
.)
lo
común mueren
sin
opresión colonial, tuvieron aplicar algunos
remedios que
les
aprovecharían o porque son medrosos y pusilánimes en la aplicación o porque los tienen espantados tanta diferencia de enfermedades
como han experimentado después que
comenzaron a juntar en
se
mudanza general de los ejercicios y vida y así vemos hombres vivían mucho antiguamente y libres de las
pueblos por
la
que los enfermedades que agora padecen como lo dicen los muy viejos que viven ahora como embalsamados". Descripción de la Provincia de la Verapaz (. . .): 1953-54, pp. 354/355. A lo largo de la dominación
española el indígena insumiso siguió evitando la reducción colonial fuente segura de enfermedades y muerte: "Estos que habitan las montañas y costa que median entre Trujillo y Omoa son llamados Payas y Xicaques, y excepto los robos de ganado que hacen en las haciendas inmediatas a sus Montañas, en lo demás son pacíficos y tratables; pero según las noticias que con cuidado especial he tomado, el verdadero camino de reducirlos sería entrar a sus montañas y formar en ellas poblaciones porque tienen horror a salir ha habitar nuestro territorio que la experiencia de que los más que lo han verificado han muerto a poco tiempo, de suerte que se precaven hasta para hablar con nosotros con una masa desconocida que conservan siempre en la boca y dicen los preserva de las calenturas, que no sin razón suponen ser naturales en los habitantes de esta Provincia." Informe de la Provincia de Honduras después de hecha su Visita de Ordenanza^ Comayagua 20 de febrero de 1818, AGI/AG, Leg. 423. Información similar presenta el obispo Morel en su Relación, que citamos en la nota 50.
como
106
La obligación de pagar
el tributo real
fue sin duda otro factor de
inestabilidad para las reducciones dominicas. Las fuentes informan
que muchos de los indígenas que dejaban el pueblo para buscar el monte de la contribución ya no regresaban; ver por ejemplo: Relación de la Provincia de la Verapaz (. .): 1955, p. 23 .
60
como
efecto general que los indígenas utilizaran
primera oportunidad para escapar hacia 107 fuera del control español.
La poca capacidad expansiva de
economía y
la
la
zonas aún
las
la
debilidad del aparato estatal dominante, principalmente
en su lado militar, movieron a los sectores dominantes a valerse de argucias para tratar de expander la
dominación insumisos.
colonial
Para
el
hacia
pueblos
los
colonialismo español,
cualquier colonialismo, se trataba de
indígenas
como
un asunto
para
esencial,
pues mientras amplias zonas permanecieran inconquistadas, peligraba
la
dominación colonial en su
totalidad.
Remesal cuenta, por ejemplo, cómo los dominicos enviaban "regalos", algunos "presentes" a los indígenas del
Manché en
la
región verapacense: "(.
.
.)
y
los priores
tenían gran cuidado de regalarlos y enviarlos a visitar a sus tierras con algunos presentes de cosas que ellos estimaban, en particular sal, que no hay en aquella
y siempre volvían los mensajeros muy contentos 108 de las muestras que les daban de ser cristianos". Persiguiendo fines similares, el presidente de la Audiencia de Guatemala enviaba también esta clase de "regalos", principalmente los nuevos instrumentos de trabajo introducidos por los españoles que, en forma tierra,
107
Lo tratamos más adelante a
108
Remesal, Fray A. de: 1932, T. VL % p. 573.
la altura
de
la
nota 199.
61 indirecta, ya
habían incorporado a sus economías estos
pueblos indígenas rebeldes: "La estimación del presente la medida de la necesidad que tenían de lo que en él se les daba, que eran hachas y machetes para sus
fue
labranzas y sementeras, porque todos los años rozan
grandes montes para hacerlas,
como
es estilo
en toda
la
Verapaz, y antes que alcanzasen las hachas de hierro, pasaban mucho trabajo, porque cortaban los árboles con hachuelas de cobre, y tardaban en cortar un árbol, aunque no fuese muy grande, un día entero, y eran mayores tardaban tres y cuatro días; porque las hachuelas se les quebraban con mucha facilidad; y como han experimentado la fuerza del hierro, aprecian mucho cualquier instrumento, y así estimaron estas hachas y
machetes." 109
Sin embargo, los indígenas sabían
muy bien lo que
vendría después de los "regalos" del presidente, sabían que aceptar la evangelización dominica era aceptar la
dominación española con todas sus cargas, como lo estaban viendo en los indígenas que habían dado tal paso. Remesal se percató de esto y expuso así las razones indígenas para no aceptar la fe católica: "La causa de haberse estos indios arrepentido fue: que algunos malos cristianos les dijeron que la ley de Dios era muy dificultosa, y muy pesada, y que mirasen bien lo que hacían, que luego en recibiéndola habían de 109
Ibid., p.
575.
62
que era gente muy cruel, y habían de cargar de tributos intolerables que no pudiesen pagar y servirse de ellos; sacándolos de sus tierras natural llevándolos cargados muy lejos." 110 entrar españoles en su tierra, los
y y La corona española tuvo en la iglesia católica un gran aliado sin cuya presencia la imposición y el mantenimiento de la dominación colonial es prácticamente impensable.
La importancia que tuvo las
misiones religiosas en
Humboldt en forma proporción en que
la
la
acción colonizadora de
región venezolana
bastante
plástica:
expone
la
"En
la
órdenes se esfuerzan en penetrar en las selvas y ganar terreno a los indígenas, los colonizadores blancos tratan, a su vez, de apoderarse de las tierras de las misiones. Para ello, el brazo secular las
constantemente de sustraer a los indios sometidos régimen misional. A costa de una lucha desigual, poco
trata al
a
poco
los
curas
párrocos van suplantando
a
los
misioneros; amparados por los corregidores, blancos
y
van estableciendo entre los indios. Las misiones se transforman en pueblos españoles, y los indígenas olvidan muy pronto que tuvieron una lengua propia. Así va avanzando la cultura tierra dentro desde mestizos
se
costa, lentamente, frenada por humanas cualidades, pero con paso seguro y regular." 1X1 la
110
Ibid.
111
Humboldt,
A von:
1971, p. 178.
63
De
cita anterior nos interesa destacar lo independientemente de que ésta haya sido la intención consciente o no, la misión religiosa cumple aquí dos funciones esenciales para la implantación del sistema colonial. Por un lado, se quiebra la rebeldía del
la
siguiente:
indígena al despojársele de sus propios rasgos culturales,
concepción
idioma, misioneros
del
han conseguido
mundo,
etc.:
desterrar
"(•••)U)8
algunas
viejas
costumbres observadas por los indios (...) han logrado persuadirlos de que no se pinten la piel o se hagan incisiones en la barbilla, la nariz y las mejillas; han 2 1 Por podido estirpar las ideas supersticiosas (. .)". * otro lado, expropiar al indígena de sus tierras comunales. En otras palabras, la misión religiosa es una punta de lanza, una avanzada que va preparando el terreno para que se pueda expandir la economía dominante de la región. .
Es evidente que en Centro América estos procesos más lenta, pero de todos modos no dejaron de estar presentes, aunque hayan tomado otra
se dieron en forma
forma. La actividad de
en su
conjunto—
la
no
misión religiosa
tuvo
aquí
transformadores de carácter radical que se final
en
la
—y
del clero
efectos expresaron al
los
práctica extinción del indígena; faltó,
como
señalamos, una economía en expansión que completara la labor de penetración realizada por la misión religiosa. 112
Ibid., p.
179.
64 Este fue al menos el caso de la región guatemalteca; sin embargo, para conocer con exactitud la relación entre
economía y labor misional, sería necesario investigar territorios más significativos; por ejemplo, las
otros
En nuestro
caso, la misión formas económicas que encuentra —habilidad textil artesanal, producción agrícola y mano de obra sedentaria— como base del
provincias
religiosa
salvadoreñas.
tendió a utilizar
las
.
1 sistema económico que implanta.
En
* 3
transformación del indígena en un ente colonizado, a través de la erradicación de sus propios la
valores culturales, la iglesia fue también en el
Guatemala
radical
y
persistente. Se
quemó
Reyno de
ídolos
y
fue especialmente duro con aquellos a quienes se
descubría 113
apego
La industria
por
textil la
sus
viejas
tradiciones.
tratamos en: Pinto, J. le permitió
fue sin duda una institución que
C
114
se les
No
1982. La cofradía
al religioso
misionero
organizar la vida económica local sin tener que introducir grandes
cambios en los sistemas tradicionales productivos del indígena. Sobre la capacidad económica de las cofradías verapacences hacia finales del siglo XVín ver: Informe detallado y curioso sobre la situación religiosa de la Provincia de la Verapaz (. .): 1928. Remesal refiere el caso de un dominico que después de largos años de catequizadón descubrió que los cofrades principales seguían adorando a sus antiguas divinidades: "Quebró el idolo delante de todos. Echóle en un fuego. Y después de quemado, esparció las cenizas en el aire. Castigo con mucho rigor los cofrades o capellanes abominables. Y el sacerdote que se llamaba Juan Doche, le entregó al señor Obispo que le hizo servir muchos años en la catedral, con un grillo al pie." Remesal, Fray A. de: 1932, T. IL, p. 537. Gage menciona casos similares, por ejemplo, el de una supuesta "bruja* indígena enviada por él prácticamente a la muerte en una de las .
114
65 obstante esto,
la
transformación del indígena fue en
general superficial, principalmente en lo que respecta al
lado religioso,
de
la
como
lo señalaron
ya
los
propios testigos
época. 116 Por ejemplo, los bautismos religiosos
—paso trascendental en
el
proceso de colonización—, se
realizaban en forma rápida y masiva 116
y,
consiguientemente, no pudieron haber afectado hondamente los fundamentos ético-religiosos en que mazmorras de tan mala, la
la capital:
"Pero para librar al pueblo de una criatura a Guatemala con todas las informaciones
Mee conducir
y testigos que yo tenía contra ella, y mandé al presidente y al obispo, quienes la pusieron en una prisión, donde murió dos meses después.»» Gage, T. : 1946, p. 247.
115
"Sin embargo imitan
la manera de nacer de los españoles y observan todo lo que los eclesiásticos les enseñan, gustan muchas ceremonias, pero son poco inclinados a la verdadera substancia de la religión." lbid., p. 220. Gage se dio cuenta, como otros, que el indígena sólo tomaba el lado exterior, el aspecto ritual del catolicismo. Así se logró burlar en una buena parte la labor colonista de la iglesia. Por
otro lado, los miembros de
la iglesia,
con un par de excepciones,
eran simplemente mercaderes a quienes sólo les interesaba hacer
fortuna o pasarla bien a costa del trabajo indígena. Mientras los indígenas les siguieran dando la infinidad de regalos que les hacían a los curas, estos se hacían" de la vista gorda sobre las formas que
adoptaban en
el
indígena
la práctica
esto ver principalmente el capítulo
de los ritos católicos. Sobre
XXI de
Gage. Ver también
la
nota 114.
116
Sobre Fray Tomás de Cárdenas, segundo obispo de destaca en una relación: "Bautizó infinidad de ídolos en Zacapulas'».
la
Verapaz, se
muchos miles de indios, quemó Visión de Paz. Nueva Yerusalem-
1936, p. 469. Ver Ceballos (bibliografía). Sobre los bautismos de: T. IL, p. 587 y siguientes. masivos ver también Remesal, Fray
A
66 descansaba
como su
mundo precolombino. 117
el
objetivo,
pues
si
bien es
transformar radicalmente se
neutralizó
a
la
cumplir su función el
Sin embargo,
agente colonialista, el clero logró en gran medida
de
sistema
conquista.
las
no
a
llegó
se
sí
masa indígena para que pudiera
como generadora que
explotación
En
cierto
formas de vida indígena,
se
de excedentes para
con
implanta
la
otras palabras, la conquista material era
inseparable de
la
conquista espiritual y a
la
espada del
tenía que seguirle —como puente imprescindible que sellaría conquista y colonización como un solo acto— el catecismo y la cruz enervante del cura misionero. 118
conquistador
En
la región
guatemalteca existieron dos pueblos
indígenas especialmente aguerridos, que dificultaron en
extremo
la
implantación de
Lacandones en
con México y
la
los territorios
los Itzaes
en
dominación española:
que formaban
el actual
la
los
frontera
departamento de El
Peten. 117
Finalizando la dominación colonial, Cortés y Larraz esto plenamente: "Ellos es de temer,
que tienen a
pudo
constatar
los españoles
por
forasteros y usurpadores de estos dominios, por cuyo motivo los
miran con odio implacable C
.
.)
Ellos
no quieren cosa alguna de
los
españoles, ni la religión, ni la doctrina, ni las costumbres.'* Cortés y Larraz, P.: 1958, T. L, p. 141.
1973, p. 208 y siguientes.
118
Romano,
R.: 1972.
Ver también: Martínez
Peláez, S.:
67 El Itzá fue uno de los últimos pueblos mayas que
luchó
dos
hispanos,
consecutivos
siglos
sin
aceptar
contra
nunca
ser
los
invasores
sometido
a
la
explotación colonial. Este pueblo indígena se atrincheró
en
la
montañosa del norte de Guatemala y
región
sostuvo una larga guerra de guerrillas contra
el
poder
español invasor.
En 1630
los
ofensiva contra cual culminó
la
Itzaes llevaron
a
cabo una fuerte
dominación española en
con
la
Verapaz,
la
levantamiento de once pueblos
el
indígenas que: "rechazaron la obediencia y la fe que habían recibido". 119 La presencia de los indígenas
insumisos
le
dio así toda la región hacia el norte
sumamente
carácter
un
inestable, viéndose obligados los
propios dominicos a utilizar métodos violentos para
poder
cumplir
con su
misión
colonizadora,
120
apartándose diametralmente de los antiguos postulados
Las Casas. Los Lacandones, pueblo nómada de cazadores, 121 no aceptaron nunca la dominación colonial. Su resistencia al poder colonial constituía un peligroso ejemplo para los pueblos que se encontraban ya bajo la dominación española y la Corona emitió varias cédulas ordenando su traslado a otras regiones. 122 La pacifistas del padre
119 120 121 122
Zavala, S.: 1945, p. 60.
Ver
la
nota 124.
Scbmieder, O.: 1934, p. 82. Zavala, S.: 1945, pp. 49-60.
68 colonización efectiva de los territorios de la Verapaz y 1 23 que la Corona Chiapas llegó a peligrar de tal manera, española, aconsejada por los
tuvo que declarar
mismos dominicos, 124
le
guerra abierta a estos indígenas 6 1 insumisos, * renegando así de cédulas reales anteriores
que prohibían 113
la
la
utilización de
medios
y
st
*6
al
W
le
i^2,T,It,psx * Kn Captado al
m
1
Así lo destacaba una isal Tomái Gasttlas Obispo