Educando En Salud Respiratoria Y Medioambiental

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ISBN: 978-84-938706-4-5 Dep. Legal: Copyright 2011. SEPAR Diseño de portada: Ala Oeste. Diseño de la colección: Ala Oeste.

Editado y coordinado por Editorial Respira. RESPIRA. FUNDACIÓN ESPAÑOLA DEL PULMÓN - SEPAR

Provença, 108, Bajos 2ª 08029 Barcelona - ESPAÑA [email protected] Reservado todos los derechos. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida ni transmitida en ninguna forma o medio alguno, electrónico o mecánico, incluyendo las fotocopias, grabaciones o cualquier sistema de recuperación de almacenaje de información, sin el permiso escrito del titular del copyright.

Índice 3

Introducción medio ambiente.

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Reduce, reutiliza, recicla.

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Clasificación de residuos.

12 Consejos para el día a día. 15 Entorno laboral saludable. 18 Enfermedades medioambientales. 21 Glosario. 24 Dónde encontrar información. 27 Bibliografía y webs consultadas.

Coordinadores Sánchez Gómez, Esperanza Enfermera UCRI, Máster en Ciencias de la Salud. H. San Pedro de Alcántara. Cáceres González-Barcala, Francisco Javier Neumólogo. Servicio de Neumología. Complexo Hospitalario de Pontevedra.

Autores: Garrido Cabañas, Mª Luisa Enfermera Neumología. H. San Pedro de Alcántara. Cáceres. Macian Gisbert, Vicente Enfermero Pruebas Funcionales Respiratorias. H. La Fe Valencia. Martín-Lancharro, Pablo. Licenciado en Química. Servicio de Medicina Preventiva. Unidad de Prevención de Riesgos Laborales. Pintos-García, María Enfermera Inspección Sanitaria. Consellería de Sanidade-Xunta de Galicia. Porras Pérez, Eva Mª Enfermera Neumología. H. San Pedro de Alcántara. Cáceres. Prego-Paz, Francisco José. Diplomado en Relaciones Laborales. Técnico Superior en Prevención de Riesgos Laborales. Serrano Pérez, Francisca Enfermera Neumología. H. San Pedro de Alcántara. Cáceres

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Para comenzar una pequeña reflexión atribuida a S. Rimpoché:

Construimos casas cada vez más grandes… y familias más pequeñas. Gastamos más…pero tenemos menos. Compramos más…pero lo disfrutamos menos. Habitamos en edificios más altos… con vidas poco profundas. Vamos por autopistas más amplias… con mentes cada vez más estrechas. Tenemos más comodidades…pero vivimos más incómodos. Tenemos más conocimientos…y menos sensatez. Son tiempos de comida rápida…y de digestiones lentas. De casas fantásticas…con hogares rotos. De enojarnos enseguida…pero de perdonar lentamente. De salir muy temprano…y llegar siempre tarde. Levantamos la bandera de la igualdad, pero sostenemos los prejuicios. Los estantes llenos de libros que jamás leeremos. Nos ganamos la vida, pero no sabemos cómo vivirla. Poseemos cada vez más cosas, y desperdiciamos casi todas.

S. Rimpoché

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Introducción: Medio Ambiente

La transformación científica radical y profunda respecto al pasado inmediato en los países desarrollados sucedida en algo más de un siglo, ha desatado el cambio más importante de toda la historia de la evolución humana que no es otro que el incremento de la esperanza de vida en más de 40 años. La población ha ido creciendo de forma imparable, pero nuestro planeta, la Tierra no ha crecido siguiendo el mismo ritmo. Actualmente somos más de cinco millones de especies, incluidos los seres humanos, los que habitamos la Tierra. El cambio climático, la fragmentación del territorio, la sobreexplotación de los recursos o el comercio de especies hace que cada año se extingan de 10.000 a 50.000 especies, a pesar de que cada día se descubren y catalogan un buen número de nuevas especies sobre todo en las selvas ecuatoriales y en los fondos marinos. No hace tanto tiempo, nuestras ciudades, pueblos y hogares no tenían medidas higiénicas ni de salubridad suficientes, podíamos ver nuestras calles con residuos sólidos y líquidos, que provenían de la descomposición de fuentes orgánicas y minerales (heces, orina, alimentos en mal estado, animales muertos, etc.), animales que convivían con la población humana sin control e incluso la higiene de la población era precaria debido a diferentes causa entre ellas la falta de aguas potables y canalizadas. El hedor cubría a todos y todo en cualquier época del año. Plagas y enfermedades sin control mermaban a una población hacinada, desnutrida y enferma. Las

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personas morían jóvenes y sus carencias eran tan diferentes a las actuales que no había tiempo para pensar o percibir las necesidades que podían derivarse del progreso industrial y científico. El hombre, como ser racional e inteligente, consiguió transformar aquella sociedad dando paso a un desarrollo espectacular, donde el deseo y la exigencia de incrementar la calidad de vida nos invita a luchar por un planeta sano, limpio y una vida saludable. No nacemos con un manual de instrucciones sobre aquello que es mejor para nosotros y nuestro planeta. Quizás todo lo que sabemos es que tenemos demasiada contaminación por el uso o abuso de combustibles fósiles (petróleos), por las emisiones de la industria, la agricultura, nuestras ciudades y nuestros hogares, pese a que cada vez existe mayor información sobre estos temas gracias a la globalización de la misma. Sabemos que este planeta es patrimonio de todos los seres vivos, de nuestros hijos, de las generaciones futuras. La mejor herencia será dejarles un conjunto de valores naturales, sociales y culturales que influyan en mejorar su calidad de vida y el medio ambiente para ellos y para las generaciones venideras. Abarcando no sólo el espacio en el que se desarrolla la vida, también a los seres vivos, objetos, suelo, aire, agua y las relaciones entre ellos.

La ONU, en su informe Mundial sobre la Diversidad Biológica, nos dice que el suministro de comida, medicinas, agua dulce, y la protección contra desastres naturales están amenazados por los cambios en la biodiversidad.

Conseguirlo es simple, solo hacen falta sencillos hábitos para vivir una vida más sana en un mundo más sostenible, un simple cambio, un aumento de concienciación y conocimientos.

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Cada uno de nosotros genera de uno a dos kilos de basura por día, pudiendo llegar a la cantidad anual de 500 kilos, que mayoritariamente permanece en los vertederos y solo un 13% se recicla. Multipliquemos esa cantidad por otra, los millones de habitantes de nuestro planeta. El resultado son millones de toneladas de basura.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en un informe, publicado el 4 de marzo de 2008, advierte que “la contaminación del aire va a tener efectos crecientes sobre la salud a nivel mundial”; y si no se hace nada para remediarlo, advierte, en “2030 el número de fallecimientos prematuros relacionados con el ozono troposférico se multiplicará por cuatro.”

Más del 91,7% de los desperdicios generados por el ser humano pueden ser reutilizados. Esta reutilización sólo es posible si la población que genera la basura, defiende y sigue debidamente los principios de reciclaje, clasificando correctamente los diferentes materiales en sus respectivos contenedores.

La endosimbiosis Sabemos, gracias a los científicos, que en la historia de la evolución sólo con la conservación de las especies, la interacción y la creación del conjunto de organizaciones conectadas entre sí por intereses comunes (redes) podremos evitar un fin anticipado de nuestra especie. Conocemos que un organismo que solo piensa en función de su supervivencia destruirá (sobreexplotación) su medio ambiente y por consiguiente se destruirá así mismo. La peor estrategia para nuestro planeta es la sobreexplotación de un bien público llevada a cabo por un grupo humano, ya que esa acción lleva inapelablemente a la degradación del medio ambiente. Los biólogos y geólogos llaman a la colaboración y la interdependencia constructiva entre los seres humanos endosimbiosis.

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La historia de la evolución nos enseña que todos los seres vivos de este planeta dependemos unos de otros, por lo que el resultado de nuestras acciones están supeditadas al comportamiento de lo demás, de ahí la importancia actual que le damos los profesionales de la salud a la interdisciplinaridad en todos los ámbitos.

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Reduce, reutiliza recicla

Las fórmula de “las tres R” La formula de las tres R es una solución sencilla que podemos ampliar tanto como queramos: reducir, recuperar, rellenar, recargar, restaurar, reparar, recolectar, reutilizar, realizar, respetar, reincorporar, repoblar, reciclar. La denominada Ley de las 3R, propuesta que popularizó la organización ecologista Greenpeace, propugna la reducción, la reutilización y el reciclaje de los productos que consumimos. Reducir y reutilizar: ocupan el primer lugar por importancia propia y por ser los más fáciles de conseguir, todo aquello que compramos y consumimos tiene una relación directa con lo que tiramos. Por ello, consume racionalmente y evita derrochar. Nuestro planeta tiene recursos limitados en un espacio limitado, pero nosotros cada vez somos más, generamos más basuras y consumimos más recursos. Hay que procurar reducir el volumen de productos que consumimos. Muchas veces adquirimos cosas que no son necesarias sólo por el afán de comprar (consumismo). No pensamos que para su fabricación se precisan materias primas que no podemos derrochar como

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el petróleo o el agua. También hay que tener en cuenta la enorme cantidad de basura que se genera por el exceso de envoltorios en muchas de las cosas que compramos. También podemos reutilizar el mayor número posible de objetos con el fin de producir menos basura y gastar la menor cantidad posible de recursos en fabricar otros nuevos. Hay ocasiones en que los materiales reciclados dan lugar a productos diferentes al material de origen: con ocho cajas de cereales se puede crear un libro, con 80 latas una llanta de coche, con seis briks una caja de zapatos, y con 40 botellas de plástico PET (las típicas de agua mineral) se puede hacer un forro polar…

Para destruir estos materiales no necesarios debemos buscar la sostenibilidad. Nuestra primera acción seria: reeducar, recuperar, rellenar, recargar, restaurar, reparar, repoblar, y dejar como última opción el reciclaje que ya de por si consume recursos. ¿Si seguimos acumulando cada vez más basura, tendremos suficiente planeta para un número también creciente de población?

¿Si seguimos consumiendo indiscriminadamente, podremos conservar la tierra, el agua y un aire suficiente y saludable para cubrir nuestras necesidades? nítido

turbio

¿Si gastamos nuestros recursos en destruir nuestros desechos, no sería más lógico intentar producir menos?

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Clasificación de residuos

En ocasiones no es posible reducir y reutilizar. La única alternativa que nos queda es reciclar. Los españoles reciclamos menos que la media europea: apenas el 13% (Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino). En España se generan cada año 23 millones de toneladas de residuos sólidos urbanos. Un 33% (en peso) de ellos son envases.

De los residuos que generamos anualmente, tiramos y desechamos, al no reciclar, gran cantidad de excelentes materiales que no sólo no utilizamos si no que se acumulan convirtiéndose en basura contaminante, pudiendo ocasionar altos niveles de toxicidad para nosotros y para nuestro ecosistema. Cada uno de nosotros somos el primer paso para frenar este proceso. En todas las ciudades encontraremos puntos de información. Generalmente son los ayuntamientos los que nos notifican todo el proceso: recipientes, puntos limpios, qué se puede reciclar y cómo separar. Es sencillo, pero requiere que se haga por sistema por lo que se debe organizar con facilidad y rapidez para que las normas se instauren en todos los miembros de la familia. ¿Qué tipo de basura se recicla? Se recicla todo lo que se puede vender para hacer nuevos productos. • • • • •

Materia orgánica (restos de comida) Papel y cartón Vidrio Metales (hojalata, aluminio, plomo, zinc, etc.) Plásticos (polietileno, piliestireno, polipropileno, etc.)

Reciclar es: • • • • •

Ahorro de energía Ahorro de agua potable Ahorro de materias primas Menor impacto en los ecosistemas y sus recursos naturales Ahorro de tiempo, dinero y esfuerzo 14

La basura es aquello a lo que ya no podemos dar otro uso y por tanto debemos deshacernos de ella. Un residuo es algo que nos sobra al realizar alguna actividad pero que puede ser reutilizado en cualquier otra, como las botellas de plástico o las latas de aluminio.

Ya sabemos que una persona produce, por término medio, un kilo de basura al día. Separar los residuos y dar a cada uno el tratamiento adecuado es la clave de la recuperación. La separación más habitual es:

Tipos de residuos que incluye

Color típico del contenedor

Envases

Amarillo

Materia orgánica

Verde, naranja, marrón

Papel-cartón

Azul

Vidrio

Verde claro

Resto

Puede adoptar diferentes colores

Normalmente incluyen los plásticos, metales y tetra-briks. Restos de comida, pañales, cenizas, etc. Periódicos, revistas, embalajes... Botellas, frascos, botes, etc.

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Incluye los residuos que no están en ninguno de los apartados anteriores: trapos, envases de otros materiales, etc.

Puntos Limpios Es importante saber que en los puntos limpios de nuestros pueblos y ciudades se recogen aquellos residuos especiales como: • • • • • • •

Aceite mineral y vegetal. Electrodomésticos, residuos eléctricos, informáticos, cartucho, tóneres. Escombros y madera. Fluorescentes y bombillas de bajo consumo. Medicamentos. Muebles. Restos de pintura, disolventes, pesticidas, sustancias químicas. Una sola pila puede contaminar hasta 3.000 litros de agua y una pila botón de mercurio puede contaminar hasta 600.000 litros de agua, el equivalente al consumo de 30 personas durante toda su vida.

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Consejos para el día a día

En este apartado vamos a anotar algunas conductas fáciles de llevar a cabo y de realizar por cualquier persona. Veremos cambios de conducta sencillos y saludables, como por ejemplo tener una vida más sana, más activa, mejorar la dieta, mejorar el ambiente doméstico, etc.

Los mejores cuidados personales •

Dieta mediterránea y cinco comidas al día. La Unesco ha declarado la Dieta Mediterránea como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Intenta consumir alimentos de temporada, su calidad mejora al tener más vitaminas y sabor, son más económicos para nosotros y para el ecosistema, al necesitar menos agua, menos fertilizantes, menos pesticidas, menos transportes, menos ceras protectoras.

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Carne roja magra

unas cuantas veces al mes dulces Algunas veces por semana

Aves y huevos Pescados

Aceite de oliva y aceitunas

A diario

Queso, yogurt y otros productos lácteos Alubias, otras legumbres y frutos secos Frutas

Verduras y hortalizas

Pan y cereales, incluyendo pasta y arroz

•

Lava la verdura y la fruta para quitar los pesticidas, sumérgelas en agua con un poquito de vinagre. Otra alternativa son los productos de agricultura ecológica.

•

Exige el etiquetado en los alimentos. También en carnes y pescados. Las normas de la UE sobre el etiquetado de los alimentos reconocen al consumidor el derecho a saber lo que come y los tiempos de caducidad o de consumo adecuado.

•

El agua es la bebida más sana, verdaderamente extraordinaria y esencial para la vida: los alimentos y los gases se transportan en medio acuoso, los productos de desecho se expulsan del cuerpo mediante la orina y las heces, el agua regula nuestra temperatura, lubrica nuestras articulaciones y contribuye de forma decisiva a dar estructura y forma al cuerpo mediante la rigidez que proporciona a los tejidos. Según la Organización Mundial de la Salud no está reconocido que el agua envasada sea más sana, pero sí genera más CO2 por su transporte y gran cantidad de desechos y contaminación.

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No reutilices las botellas de plástico por la posible filtración de sustancias químicas. Algunas botellas de plástico están fabricadas con componentes como el PVC u otro tipo de resinas que pueden desprenderse al ser reutilizadas.

Puedes informarte de la calidad del agua que bebes en la Consejería de Sanidad de tu Comunidad Autónoma. •

Son muy útiles los sistemas de filtración conectados a grifo o jarra.

•

Toma zumos naturales y el vino con moderación.

•

Si consumes comida preparada, elige aquellas que tienen menos aditivos y evita aquellos aditivos que no sabes lo qué son.

•

Cuida tu higiene personal, lávate las manos tan frecuentemente como sea necesario con jabón natural y agua templada. El jabón debe estar hecho con ingredientes naturales evitando los ingredientes antibacterianos como el triclosán. El lavado de manos está demostrado científicamente que es el mejor sistema para prevenir infecciones y trasmitirlas.

•

Usa productos de higiene sin perfume y sin colorantes, usa la opción bola en vez de aerosoles.

•

Usa cremas de aceite de oliva, aloe o con ingredientes naturales para tu hidratación.

•

Protégete del exceso de radiaciones solares no tomando el sol cuando los rayos son más perpendiculares, entre las 12h. y 16h. La capa de ozono deteriorada por la contaminación atmosférica cada vez filtra menos los rayos UVA y UVB.

•

La Unión Europea ha empezado a estudiar una lista de sustancias químicas detectadas en los productos de higiene personal y limpieza del hogar con posible perjuicio para la salud. REACH.

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Campaña del Gobierno sobre las frutas de temporada

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•

Permanece activo durante el día. Puedes conseguirlo con el simple hábito de caminar durante media hora diaria a buen ritmo. Reforzarás tu musculatura y mejorarás tus pulmones y corazón. Comienza poco a poco y ponte metas. Aprende a respirar: la respiración es automática por lo que no le prestamos la suficiente atención. ¿Sabemos inspirar y espirar de una forma adecuada? Si lo hacemos correctamente es la puerta de entrada hacia el interior de nuestro cuerpo y de sus funciones, consiguiendo un cuerpo más saludable y más capaz de afrontar las situaciones de la vida cotidiana. Un patrón ventilatorio más eficaz, lento y profundo como mínimo nos aportará una mejora en la calidad de vida, incluso para quienes padecen algún trastorno respiratorio. Practiquemos la ventilación controlada, en la que se combina inspiraciones lentas y profundas con espiraciones también pausadas.

•

Controla el estrés respirando mediante respiración abdominal: tumbado en la cama pon la mano izquierda. en el pecho y la derecha sobre el abdomen, inspira y espira tres veces por la nariz concentrando tu atención en hinchar y deshinchar el abdomen lentamente, evitando mover el pecho. Con los ojos cerrados respira normalmente (respiración torácica) de 8 a 10 veces, después alterna ambas respiraciones, torácica y abdominal durante 3 minutos.

•

Aprende a bailar, haz senderismo o apúntate a los equipos del barrio o polideportivos cercanos. Es muy importante que los niños eviten el sedentarismo, por lo que habrá que procurarles actividades donde puedan ejercitar sus músculos y liberar energía.

•

Disfruta y haz disfrutar de la naturaleza a tus hijos. Recuerda la importancia del mundo natural para el desarrollo de los niños y que ellos serán los futuros administradores de la Tierra.

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Vivir la naturaleza aumenta el uso de los sentidos, nuestros hijos adquirirán mayor pensamiento crítico, facilidad para resolver problemas, toma de decisiones y estimulará la creatividad.

•

Evita el tabaco, mejorarás considerablemente tu calidad de vida y la de los que te rodean.

•

Los adultos necesitamos entre 7 y 9 horas de sueño continuadas cada noche. En este ciclo de descanso se produce la recuperación y reparación metabólica, funciones reparadora de los tejidos, homeostática y de consolidación de algunas funciones cognoscitivas.

•

Haz la siesta, está comprobado que un sueñecito de 15 a 20 minutos de duración, ya sea tumbado o sentado en un cómodo sofá, basta para aliviar tensiones, descansar, despejar la mente, aumentar la capacidad creativa y de razonamiento y coger fuerzas para el resto del día. Algunos estudios aseguran que su efecto reparador combate los radicales libres, previene el envejecimiento y alarga la vida, incluso puede reducir la mortalidad coronaria.

El mejor ambiente doméstico Nuestro hogar es donde más horas pasamos al día, y muy especialmente los niños, ancianos y enfermos que necesitan un ambiente más limpio y sano por sus particulares necesidades. Pero nuestras casas no están libres de contaminación por gases y/o partículas reconocidas como compuestos orgánicos volátiles (COV), que se encuentran en pinturas, muebles y materiales de construcción. Igualmente pueden proceder de los productos de limpieza, pesticidas, aerosoles y humo del tabaco. Todo ello va formando en nuestro hogar un aire insano que producirá dolores de cabeza, picores, cansancio e incluso enfermedades como el asma y otras enfermedades respiratorias y cardiacas.

Tendremos que conocer y eliminar nuestras fuentes de COV.

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•

Las viviendas deben utilizar los materiales menos tóxicos en su construcción y en su decoración.

•

Elige para amueblar tu casa maderas naturales y tejidos naturales: algodón, lino, lana. Los chapados y las moquetas contienen COV peligrosos.

•

Revisa y asegura que todos las estufas, radiadores, calderas, chimeneas están bien ajustadas y no tiene pérdidas de monóxido de carbono (CO) o dióxido de nitrógeno (NO2).

•

Ventila tu casa abriendo las ventanas como siempre se ha hecho, por la mañana y por la tarde de 15 a 30 minutos en las horas de menos tráfico.

•

Una atmósfera cargada con iones positivos, como la que nos agobia antes de una tormenta, nos hace sentir inquietos, es debido al estrés electromagnético o electroestrés. En nuestros hogares y lugares de trabajo el uso de electrodomésticos, aire acondicionado, ordenadores, etc. nos causa problemas de salud como alergias, asma y cefaleas, especialmente en las personas más expuestas y sensibles.

•

El Síndrome del Edificio Enfermo (SEE) se produce por el deterioro de las cualidades del aire que respiramos en espacios cerrados y cargados de iones positivos. Se conoce también como: Sick Building Syndrome (SBS). El Síndrome del Edificio Enfermo fue reconocido como enfermedad por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1982, incluye los edificios en los cuales un

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porcentaje de más del 20% de personas experimentan efectos agudos sobre la salud y el bienestar.

Las plantas y el aire Las plantas purifican el aire, aumentan en él los iones negativos, generan oxígeno, absorben el anhídrido carbónico y otros gases contaminantes, regulan la humedad y la temperatura ambiente, tienen un efecto sedante sobre las personas y atenúan el ruido. Este ambiente ionizado negativamente, facilita el relax físico y mental, mejora la memoria y la concentración, ayuda a superar algunos problemas emocionales como la ansiedad y la neurosis. Algunas plantas que pueden ayudarte son: •

DRÁCENA. La Dracaena margarita y la Dracaena deremensis son plantas que están muy indicadas para habitaciones y espacios recién amueblados, ya que filtran el formaldehido y el xileno que estos desprenden. Las Drácenas necesitan humedad y luz indirecta.

•

PALMERA. Como la Drácena, la palmera Chamaedoria filtra el formaldehido y el tricloretileno de los muebles nuevos o recién barnizados. La Chamaedoria necesita humedad y buena iluminación.

•

CACTUS. El cactus Cereus peruvianus resulta un notable armonizador de las radiaciones que crean los ordenadores, por lo que es muy útil colocarlo sobre la mesa de trabajo.

•

HIEDRA. La hiedra Hedera belix filtra hasta el 90% del benzeno en una habitación cerrada, así como el formaldehido. Es ideal para colocarla junto a equipos plásticos, como ordenadores, fax, equipos musicales, etc.

•

CINTA. Las cintas filtran el 96 % del monóxido de carbono, xileno y formaldehido. Son muy útiles tantos en cocinas que usan gas como en salones y comedores donde hay reuniones de mucha gente.

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Otros consejos •

Cuando recojas ropa de la tintorería antes de guardarla airéala en el balcón o la ventana, lo productos usados para su limpieza contienen contaminantes nocivos que se expanden por el aire de la casa.

•

Usa la campana de extracción cuando guises, evitará que respires el gas.

•

Elige aislar bien tu vivienda, la calefacción y el aire acondicionado de nuestros hogares representa el 20% del gasto energético total de España, y el 70% de nuestras casas están mal o nada aisladas.

•

Elige temperaturas en tu hogar que no obliguen al organismo a cambios bruscos que debilitan las defensas. En verano entre 22/25ºC y en invierno 19/22ºC.

•

Elige controlar la temperatura si no estás en casa o por la noche, debemos saber que un solo grado aumenta o reduce el gasto de energía en un 10%.

Podemos elegir entre decenas de miles de productos de limpieza y de detergentes. Con los avances en la química moderna, estos productos pueden llevar hasta 400 ingredientes que además de su actuación deseada también tienen una influencia sobre la calidad de las aguas y la salud humana. ¿Qué productos de limpieza potencialmente peligrosos tenemos habitualmente en nuestras casas? Lejía, productos anti-cal, detergentes, refrigerantes, desinfectantes, desatascadores y limpiadores para vajillas, hornos, cristales y suelos. Son potencialmente peligrosos los productos que, en general, muestran en su etiqueta un símbolo de color naranja, con los siguientes epígrafes: “explosivo”, “inflamable”, “irritante”, “nocivo”, “tóxico”, “carcinógeno”, “corrosivo”, “infeccioso”, “tóxico para la reproducción”, “mutagénico” o “peligroso para el medio ambiente”.

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Antes de comprar deberíamos preguntarnos: ¿realmente lo necesito? •

Lee las etiquetas de los productos.

•

Evita productos como lejías, amoníaco, disolventes, fosfatos y perfumes.

•

No uses ambientadores perfumados artificiales pues emiten más toxinas al aire.

•

Usar siempre la mínima cantidad de producto.

•

Nunca debemos mezclar productos (lejía y amoníaco, lejía y desinfectante WC, etc.), pues podemos correr riesgos de intoxicación.

•

Utiliza recetas naturales menos agresivas y tóxicas. Con agua, vinagre y jabón suave se limpia perfectamente toda la casa. El esparto sigue siendo un buen estropajo. Si la suciedad está incrustada o necesitamos rascar, podemos utilizar zumo de limón, bicarbonato o bórax.

•

Utiliza productos de limpieza ecológicos.

•

Recuerda que en el mercado puedes encontrar bayetas, detergentes y bolsas de basura reciclables con los cuales no se daña el medio ambiente en los procesos de fabricación. De este modo, reducirás la demanda de productos agresivos y aumentarás la demanda de productos ecológicos, forzando así a las empresas a prestar más atención a la ecología en sus productos.

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En el mundo circulan entre 500 mil millones y un billón de bolsas de plástico cada año. Este tipo de bolsas no son biodegradables y pueden tardar muchos años en descomponerse, su incineración genera contaminación atmosférica dañando así la salud de las personas y el medio ambiente. Pero aún así las bolsas de plástico son un elemento casi imprescindible en nuestro día a día, por lo que debemos procurar reutilizarlas en la medida de lo posible, por ejemplo como bolsas de basura. Encontrarás soluciones como el reutilizabolsas, un práctico utensilio que se adapta a tu cubo de basura y que permite utilizar las bolsas usadas de la compra de forma práctica, limpia e higiénica.

Utiliza bolsas de basura de plástico reciclado o bolsas compostables fabricadas con almidón de maíz en vez de plástico.

Hacer nuestros propios productos de limpieza Desatascador: Mezclando 50ml de vinagre, 1/4 de taza de café de bicarbonato y agua hirviendo. Limpia-manchas: Mezclando agua fría y vinagre a partes iguales, añadiendo unas gotas de aceite esencial de lavanda, limón o romero. Es muy eficaz para manchas de café, sudor, vino, óxido y cerveza. Para manchas de grasa, usa agua de sosa, de seltz o gaseosa. Limpiador Universal: Mezclando un poco de agua con alcohol y jabón. Bicarbonato. Jabón natural de Marsella. Abrillanta-suelos: Cera de abeja para aplicar directamente en los suelos de madera y aceite de linaza si son de terrazo o azulejos.

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Lejía: Sustituye la lejía por media taza de café con vinagre blanco y media de bicarbonato. Limpia cristales y suavizante para la ropa: vinagre blanco destilado.

Nuestro medio de transporte más usado: el automóvil El reciclado de los coches usados se ha convertido en la primera fuente de obtención de hierro en España, por encima de las minas naturales. En España la industria de la recuperación ha confirmado que el aprovechamiento de los materiales que componen un vehículo usado es superior al 85%.

Los ciudadanos con nuestros vehículos, viajes y hábitos de consumo somos responsables del 60% (según el Ministerio de Medio Ambiente) del total de las emisiones de gases de efecto invernadero de España. Somos muchos los ciudadanos que abusamos del uso de nuestro vehículo. En nuestras ciudades los coches son la principal fuente de contaminación ambiental y acústica, provocando la intoxicación del aire que respiramos y un aumento del ruido que excede los niveles aceptables.

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Reciclar no solo es bueno para el medio ambiente sino que además genera puestos de trabajo, ya que a partir del aceite usado se pueden elaborar jabones, biodiesel, etc. Verter el aceite vegetal usado por el fregadero es altamente contaminante, además de poco higiénico, porque un solo litro de aceite puede contaminar 1.000 litros de agua. Para transformar el aceite vegetal usado (aceite de oliva) en biodiesel: •

Se analiza y filtra el aceite para eliminar las impurezas.

•

Se introduce el aceite puro en una máquina para separar grasas y metanol.

•

Se introduce el metanol en otra máquina que elimina su alcalinidad.

Sus beneficios principalmente en la reducción del coste en carburante puede llegar a un 80%.

Los contaminantes que emiten nuestros vehículos son: •

El monóxido de carbono, venenoso, a dosis reducidas produce dolores de cabeza, mareos, disminución de la concentración y del rendimiento.

•

Óxidos de nitrógeno y azufre, son irritantes de las vías respiratorias y tienen graves efectos sobre las personas que padecen asma.

•

Compuestos orgánicos volátiles, entre ellos el benceno que puede provocar cáncer, al igual que el amianto.

•

Las macropartículas son partículas sólidas y líquidas muy pequeñas que incluyen el humo negro producido sobre todo por los motores diesel y se asocian a una amplia gama de patologías, entre ellas las enfermedades cardíacas y pulmonares.

•

El plomo dificulta el desarrollo intelectual de los niños.

•

El dióxido de carbono no siempre se clasifica como contaminante, pero sí guarda relación con el calentamiento global.

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¿Qué podemos hacer ? •

Anda y pedalea. El 50% de los viajes que hacemos en coche en Europa es de menos de 5km. Es el correspondiente a 15 minutos en bici o ½ hora andando.

•

Usa el trasporte público, autobús o tren.

•

Comparte tu automóvil para ir de compras, recoger a los niños del colegio, ir al trabajo, etc.

•

Optimiza tu coche revisando filtros, neumáticos, líquidos, aceite, etc.

•

Usa gasolina de bajo octanaje, si tu vehículo lo permite, contamina menos.

•

Respeta los límites de velocidad y viaja evitando el peso sobrante.

•

Si tienes que cambiar de coche elige aquellos que consumen menos, serán menos contaminantes.

•

Infórmate sobre los nuevos coches híbridos. Aunque el coche que menos contamina es aquel que se utiliza sólo cuando es estrictamente necesario y si puede ser en compañía.

Aparatos que nos hacen la vida más cómoda y contribuyen a la sostenibilidad •

Opta por aparatos con etiqueta energética A o superior, son más económicos porque consumen menos energía y agua.

•

Elige aparatos de larga duración, bombillas de bajo consumo (consumen un 80% menos) y duran 10 veces más, LEDs (diodos emisores de luz), pilas recargables y no uses desechables.

•

Elige luces exteriores con sensores de movimiento o temporizador automático.

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Cada botella que acaba en el contenedor amarillo evita consumir la electricidad que necesitaría una bombilla de 100 vatios durante cuatro horas, mientras que con cuatro botellas recicladas se ahorra la electricidad necesaria para mantener encendido un frigorífico todo el día.

•

Los electrodomésticos que generan calor son los que más energía consumen.

•

El ordenador portátil gasta el 75% menos que el de mesa.

•

Elige productos con el menor embalaje posible, botellas grandes y no individuales.

•

Elige productos concentrados (detergentes, suavizantes) o con embalajes reutilizables.

•

Usa el papel de publicidad, revistas o periódicos para embalaje o dónalo a clínicas veterinarias.

•

Usa los botes de cristal para guardar desde lápices, canicas hasta botones o comida.

•

La ropa que no uses puedes donarla o trasformarla en paños de cocina, para el polvo, servilletas, etc.

•

Evita las porciones individuales tienen más embalaje que acabará como basura.

•

Usa las cajas para guardar juguetes, medias y calcetines, pañuelos, etc.

•

Elige compartir y pedir prestado cosas de poco uso para ti: herramientas, etc.

•

Elige productos con piezas reutilizables, como filtros de la cafetera, muebles desenfundables, etc.

•

Repara y cuida tus cosas para darles una vida más larga.

•

Compra productos que estén hechos con materiales reciclados.

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•

Si algo ya no te sirve, dónalo, regálalo, compártelo o véndelo.

•

Apaga todas las luces rojas o verdes de los aparatos eléctricos, son ladrones de energía.

•

Desconecta el cargador del móvil si no lo estás utilizando consume hasta 0,5 vatios.

•

Si sales de casa por varios días dale un descanso y desenchúfalo todo.

•

Restringe la utilización de productos de usar y tirar, como papel de cocina o pañuelos de papel.

•

Restringe el uso del papel de aluminio, en su lugar puedes utilizar fiambreras.

•

Restringe la utilización de bolsas de plástico para la compra, recupera el gusto por los cestos.

•

Restringe el consumo de energía, apaga las luces cuando no las necesites...

•

Restringe el consumo de agua, dúchate en lugar de bañarte, vigila que los grifos no pierdan...

•

La pérdida diaria de agua más importante en nuestros hogares es por el inodoro. Elígelos con pulsadores para ahorrar agua, o pon dentro de la cisterna un objeto que limite la capacidad del agua.

•

Las hojas escritas sólo por una cara pueden servir para notas o para dibujar: el papel de regalo puede ser utilizado una segunda vez.

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Con cada 133 toneladas de papel que se reciclan se ahorra en vertederos un espacio equivalente a una piscina olímpica llena. Si reciclamos una tonelada de papel ahorramos 14 árboles de tamaño mediano, 130.000 litros de agua y 9.600 kw/h de energía; la suficiente para suministrar electricidad a una familia media durante un año. Si esa familia recicla su papel durante un año, evitará que se talen 3 árboles, ahorrará 34.000 litros de agua y energía eléctrica para cuatro meses.

•

Los juguetes que tus hijos ya no utilizan, no los tires; hazlos llegar a asociaciones benéficas para que los entreguen a otros niños que los necesiten.

•

El vidrio: intenta comprar líquidos en botellas de vidrio retornable.

•

No mezcles vidrio con plástico, eso encarece más su reciclaje. “Las servilletas de papel se destruyen deprisa, los árboles crecen despacio”. Frase encontrada en una servilleta de papel de una cafetería.

Los desechos de origen biológico que se generan en casa (pieles de frutas, restos de comida, desperdicios de plantas…) pueden servir como abono o humus natural. Esta tierra fértil es perfecta para regenerar zonas verdes y puede conseguirse si se recoge toda la basura orgánica y se realiza un proceso de compostaje.

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Entorno laboral saludable

RESPETA EL MEDIO AMBIENTE TAMBIÉN EN EL TRABAJO El desarrollo de un método estructurado y dirigido con respecto al medio ambiente ocupacional, además de ahorrar dinero, permite mejores relaciones con los clientes. Son cada vez más las pequeñas y grandes empresas que ponen en práctica sistemas de gestión medioambiental.

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Metodología sistemática Los pasos para poner en marcha de forma sistemática un sistema de gestión medioambiental son: 1. Comprometerse: para mejorar la eficacia medioambiental es preciso realizar cambios que estén apoyados por la dirección de la empresa. Un compromiso por escrito dirigido a reducir los impactos medioambientales negativos de la organización es un primer paso positivo. 2. Analizar la situación actual: para identificar oportunidades para realizar mejoras medioambientales en la organización es necesario llevar a cabo un análisis de las prácticas existentes en la actualidad. Es preciso cuantificar los efectos medioambientales claves y así poder elaborar informes medioambientales. 3. Priorizar: es posible que no se disponga de tiempo o de los recursos para trabajar en todos los asuntos de mejora medioambiental ocupacional de una vez; por tanto, hay que establecer prioridades. Evaluar la eficacia actual en cada una de las áreas y escoger algunos asuntos para empezar a trabajar a corto, medio y largo plazo puede ser un buen comienzo. El papel y los residuos suelen ser los mejores aspectos a valorar para comenzar el trabajo. 4. Asignar responsabilidades: este es uno de los pasos más importantes para conseguir que las mejoras se tomen en serio. Si no se asignan responsabilidades a personas concretas será difícil que puedan obtenerse mejoras reales o que pueda realizarse un control de los progresos conseguidos. 5. Comunicar: la comunicación es una pieza clave en la mejora del rendimiento y la eficacia medioambiental. Todos deben comprender lo que se pretende y el porqué. Debe facilitarse información sobre los objetivos y logros de forma continua al personal. La información externa también es importante. Puede realizarse mediante informes a los medios de comunicación, dotando así a la organización de una imagen positiva. 6. Controlar los éxitos: un análisis regular es clave para implantar una metodología sistemática. Comprobar los progresos realizados y en qué aspectos deben concentrarse las acciones futuras.

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Ciclo de mejora continua

PRINCIPALES ELEMENTOS PARA UN MEDIO AMBIENTE DE TRABAJO MÁS SALUDABLE Y RESPETUOSO CON EL MEDIO AMBIENTE El papel El consumo de papel continúa creciendo. Se calcula que un empleado de oficina utiliza hasta 100 hojas de papel al día. En una oficina tipo la mitad de los residuos totales está formada por papel. La compra y eliminación de papel es uno de los gastos principales de una oficina media, aunque es un gasto que puede aminorarse con facilidad mediante la reducción, reutilización y reciclaje. La producción de papel virgen está asociada a aspectos medioambientales como son la pérdida del hábitat natural y los daños causados a los niveles freáticos debido a una plantación intensiva de árboles, al elevado uso de productos químicos y energía para su fabricación, así como los efectos negativos de la deposición en vertedero o la incineración. Si consideramos que el papel es un recurso natural que puede ser reciclado hasta cinco veces, los impactos ambientales podrían reducirse considerablemente. Las máquinas, los ordenadores, los sistemas eléctricos como el aire acondicionado, se revisan y actualizan regularmente, sin embargo, este tipo de controles no se realizan sobre los aprovisionamientos de papel.

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El papel se considera un gasto inevitable y la descoordinación entre los departamentos de compras dificultan las funciones de control. Un programa sistemático y sencillo de revisiones, acompañado de una centralización de las decisiones de compra contribuyen a un ahorro continuado en su consumo. Plan de acción: Medida 1: calcular el uso y coste de papel de la empresa Los siguientes cálculos pueden ayudarte a registrar los consumos de papel, su coste total y la proporción de papel que utilizas y que tiene un contenido reciclado: Total de remesas de papel adquirido en el año

Coste total

1) Uso total de papel (remesas por persona y año)

Número de empleados

÷

2) Coste (€ por persona y año)

×

Es conveniente informar al personal del consumo diario de papel, para ello puedes utilizar la media diaria de consumo por persona, teniendo en cuenta que cada remesa contiene 500 hojas. Medida 2: calcular el uso de papel reciclado en la empresa Remesas de papel reciclado adquirido por año

Total de remesas adquiridas por año

÷

3) % de papel con contenido reciclado

×

100

=

Una vez realizados estos cálculos hay que marcar objetivos como por ejemplo usar el papel por las dos caras, que puede reducir en un 50% su consumo e incrementar el uso de papel reciclado.

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Medidas prácticas para reducir el consumo de papel pueden ser: •

Verificar que todas las fotocopias y publicaciones se realizan a doble cara y con papel reciclado. Recordar e insistir al personal mediante instrucciones visibles en la fotocopiadora sobre el buen uso del papel.

•

Eliminar los informes y copias innecesarias para reducir los residuos de papel.

•

Controlar y reducir el gasto excesivo en folletos e informes publicitarios.

•

Fomentar el uso de los comunicados electrónicos y reducir el uso del fax y de la impresora, formando e informando al personal. Evitar la impresión innecesaria de los correos electrónicos.

•

Reutilizar todo el papel que se ha imprimido por una cara y darle un nuevo uso para borradores.

•

Contactar con las empresas especializadas en recogida de papel para reciclaje.

•

Poner a disposición de todo el personal contenedores de recogida de papel, especialmente cerca de la fotocopiadora y de las impresoras.

•

Comprobar que todo el personal se compromete con el programa de control de consumo y reciclado, pasando a formar parte de sus tareas.

•

Comunicar e informar al personal puntual y regularmente de los avances del programa, aportando cifras y datos sobre la evolución del mismo.

Los residuos Se calcula que su coste anual para la industria es del 4% sobre la facturación total. Se deduce de esto que resultan altamente costosos para el sistema productivo. Si además, se toma en consideración el valor de las materias primas, la energía y la mano de obra no optimizada, el coste real de los residuos puede ser hasta 20 veces el coste de eliminarlos.

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La mejor forma de realizar importantes ahorros en los gastos relativos a los residuos y de minimizar el impacto de tu empresa en el medio ambiente, es la reducción de los residuos en origen, optimizando las compras y mediante una mejor utilización de los materiales. Hecho esto, debería reutilizarse y posteriormente reciclarse la mayor cantidad posible de los productos de la oficina. Eliminar los residuos mediante su deposición en vertedero debe ser el último recurso una vez valoradas todas las opciones anteriores. Medidas prácticas con los residuos: •

Escoge productos con embalajes mínimos o solicita a tu proveedor que entregue los productos con embalajes reducidos y prescinda de excesos de embalaje.

•

Minimiza el uso de productos desechables de catering: vasos y platos de plástico o de papel, recipientes de leche, sobres de azúcar…

•

Negocia con tu proveedor de productos informáticos la recogida de los equipos a renovar y, en la medida de lo posible, la percepción de ingresos a cambio del valor residual.

El reciclaje El reciclaje goza cada día de mejor reputación como medida para hacer frente a los residuos de una organización o empresa. Frente a la deposición en vertedero y al uso de materiales vírgenes, sus beneficios son evidentes, sin embargo, el

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reciclaje también conlleva impactos ambientales derivados del transporte de los materiales y la energía consumida durante el proceso. Dicho esto, la opción del reciclaje debe considerarse una vez tenidas en cuenta las posibilidades de reducción y reutilización. Con la reutilización se reducen los costes de adquisición y de eliminación. Es importante cerrar el ciclo del reciclaje, no solo con la recogida selectiva, sino también mediante la compra de materiales con contenido reciclado. Medidas prácticas con el reciclaje: •

Comprar productos reciclados siempre que sea posible.

•

Establecer un claro compromiso por parte de la dirección respecto de las medidas adoptadas en cuanto al reciclaje.

•

Colaborar con empresas locales para ahorrar costes en la recogida de productos reciclados.

•

Disponer de contenedores separados para latas y vidrios y facilitar su recogida.

•

En caso de que el consumo de latas sea elevado instalar compactadores.

•

Comprar cartuchos de toner reciclados, son de gran calidad, su precio es inferior y el rendimiento es igual al de los nuevos.

•

Devolver los cartuchos de toner usados a una empresa de reciclaje a través de una empresa especializada en reciclaje de este tipo de materiales.

Agua En general, la mayor parte de las organizaciones no son conscientes o dedican poca atención al consumo de agua. En una oficina, más de dos tercios del consumo de agua se produce en el cuarto de baño, siendo aquí donde se pueden realizar ahorros considerable en su consumo. Al igual que ocurre con los residuos, el coste real del agua es superior a los costes de depuración y suministro.

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Medidas prácticas en el consumo de agua: •

Controlar que los grifos están siempre cerrados.

•

Instalar dispositivos que reduzcan el volumen de agua. Simplemente poniendo una botella de plástico de un litro de agua en las cisternas de los servicios reducen la cantidad de agua en cada uso.

•

Comprobar que no hay escapes en las tuberías. Además de originar daños en el edificio, conllevan un mayor gasto en el consumo de agua.

Energía Uno de los costes más elevados en cualquier organización lo constituye el consumo de energía. El uso generalizado de equipos eléctricos contribuye a que la factura por consumo de energía eléctrica sea cada vez más elevada. El 40% de las emisiones de gases efecto invernadero provienen del uso directo de la energía y de las emisiones procedentes de las empresas, incluyendo la producción de energía y el transporte. Existen medidas prácticas sencillas que pueden reducir los costes de energía de los equipos hasta en un 50%. Medidas prácticas en el consumo de energía: •

Valorar la posibilidad de obtener parte de la energía de fuentes renovables.

•

Optimizar el uso de los sistemas de calefacción y refrigeración.

•

Desactivar la refrigeración y la calefacción de estancias que no se usen, comprobando que poseen buena ventilación para evitar la formación mohos.

•

Programar los equipos de calefacción y refrigeración para que no entren en funcionamiento en los días que no están ocupados, salvo que sea necesario para un calentamiento o refrigeración previa.

•

Cerrar bien las puertas y ventanas cuando el aire acondicionado o la calefacción están en funcionamiento.

•

Utilizar electrodomésticos de calificación A o B.

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•

Substituir las bombillas de tungsteno por lámparas fluorescentes de bajo consumo. Estas lámparas permiten ahorros de hasta el 50% y su ciclo de vida es mucho mayor.

•

Utilizar la luz natural siempre que sea posible.

•

Instalar controles de detección de iluminación en lugares que no sean de uso constante.

•

Controlar los ahorros de energía a largo plazo. Determinados dispositivos pueden exigir un desembolso inicial, que se ve compensado en los ahorros energéticos a lo largo del tiempo.

•

Equipar tu oficina con equipos que cumplan la normativa “Energy Star” o similar, y asegúrate de que están activadas.

Informes medioambientales Una prática necesaria en la gestión organizacional es la medición de la eficacia medioambiental. Un informe bien elaborado tiene que cuantificar, ya que no es posible gestionar si no se puede medir. La empresas más vanguardistas y punteras están valorando criterios medioambientales para escoger a sus proveedores con el fin de contribuir a mejorar su propia gestión medioambiental. Los informes medioambientales que se elaboren deben ser precisos, utilizando mediciones normalizadas (por persona o por m2) y no convertirse en un ejercicio de marketing. Medidas prácticas para elaborar informes medioambientales: •

Poner por escrito el compromiso de la dirección y asignar responabilidades para que el compromiso se transforme en medidas reales.

•

Identificar los impactos ambientales más relevantes de las operaciones comerciales.

•

Definir qué iniciativas de buenas prácticas se han implementado.

•

Elaborar por escrito una declaración medioambiental y examinar las políticas actuales de la organización.

•

Elaborar una política medioambiental que incida sobre las operaciones y efectos medioambientales clave de la organización. 40

•

Establecer un sistema de gestión eficaz y un plan de comunicación para la puesta en práctica de la política medioambiental.

•

Elevar el control y la gestión medioambiental implantada a asunto regular en el orden del día de las reuniones, y comparar los progresos con los de otras empresas del sector.

•

Desarrollar indicadores y objetivos claros, alcanzables y medibles, realizando un seguimiento puntual en el tiempo de cada uno de ellos.

•

Elaborar un informe medioambiental cada año. En la medida de lo posible haga que sea verificado por expertos externos independientes.

•

Publicitar el informe y ponerlo a disposición de otras instituciones y personas con participación en la organización.

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Enfermedades medioambientales

ENFERMEDAD RESPIRATORIA DE ORIGEN LABORAL: TUS PULMONES Y EL LUGAR DE TRABAJO Si el aire que respiras en tu lugar de trabajo tiene polvo, humo, gases, vapores o aerosoles de sustancias que pueden causar enfermedad pulmonar, puedes estar en riesgo de desarrollar este tipo de patología. Si además fumas, el riesgo es mucho más alto. Nuestra primera preocupación será conocer qué sustancias pueden causar enfermedad pulmonar y si éstas están presentes en nuestro ambiente de trabajo. Si clasificamos estas sustancias por el estado en el que las percibimos (estado de agregación de la materia) hablaremos de: a. Polvo, como los provenientes de madera, algodón, carbón, asbestos, sílice o talco. El polvo que se origina por granos de cereal, pesticidas, ciertos medicamentos, metales y fibra de vidrio también pueden hacer daño a tus pulmones.

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b. Humos, procedentes de la combustión, el asfalto o los originados por metales que alcanzan altas temperaturas y en este proceso producen partículas sólidas y finas que son transportadas por el aire. Ejemplos de trabajos que implican exposición a humos a partir de metales y otras substancias que se calientan y enfrían rápidamente, incluyen: soldador, fundidor, personas que trabajan en las calefacciones para casas, los que trabajan haciendo cerámicas, en fabricación de plástico y en operaciones con caucho (hule). c. Gases orgánicos e inorgánicos, tales como benceno, formaldehído, tricloroetileno, amoniaco, cloro, dióxido de azufre, ozono y óxidos nitrosos. Estos gases se pueden encontrar en trabajos donde existen estos productos químicos, bien como puros o presentes en mezclas de productos con un determinado nombre comercial. d. Vapores, originados por el calentamiento de líquidos. Los vapores, como los que despiden los disolventes, usualmente irritan la nariz y la garganta antes de afectar los pulmones. e. Aerosoles producidos por su forma de aplicación: pinturas, lacas, barnices, fijadores para el cabello, pesticidas, productos de limpieza, ácidos, aceites y disolventes orgánicos. Si hacemos una clasificación de las sustancias contaminantes por sus efectos tóxicos hablaremos de: 1. Corrosivos: efecto de destrucción de los tejidos sobre los que actua el tóxico (ácidos, etc.). 2. Irritantes: efecto de irritación de la piel o las mucosas en los puntos en los que se produce el contacto con el tóxico (disolventes, amoníaco, etc.). 3. Neumoconióticos: efecto de fibrosis pulmonar producido por partículas sólidas de determinadas substancias insolubles en los fluidos biológicos (polvo de carbón, amianto, algodón, etc.). 4. Asfixiantes: efecto de anoxia producido por desplazamiento del oxígeno del aire (asfixiantes físicos) o por alteración de los mecanismos oxidativos biológicos (asfixiantes químicos) (nitrógeno, CO2, CO, etc.).

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5. Narcóticos: producen inconsciencia (cloroformo, éteres, alcoholes, cetonas, etc.). 6. Sensibilizantes: reacción de tipo alérgico del organismo ante la presencia del tóxico, que puede manifestarse de múltiples formas como asma o dermatitis (compuestos de níquel, cromo, fibras vegetales o sintéticas, etc.). 7. Cancerígenos: producen cáncer debido básicamente a la inducción de cambios en los cromosomas de las células (amianto, benceno, cromo, etc.). 8. Mutagénicos: modificaciones hereditarias debidas básicamente a la inducción de cambios en los cromosomas de las células (ácido nitroso, hidroxilamina, etc.). 9. Teratogénicos: malformaciones en la descendencia debidas básicamente a la inducción de cambios en los cromosomas de las células (partículas ionizantes, etc.). 10. Sistémicos: efectos sobre el sistema nervioso, sistema hematopoyético, hígado, riñones, etc., por alteraciones en órganos y sistemas específicos debidas a la acción sobre los mismos del tóxico, una vez absorbido y distribuído por el cuerpo (alcohol etílico, uranio, etc.).

¿Qué tipo de enfermedades respiratorias pueden aparecer después de haber estado expuesto a tales sustancias? Lesión por irritantes respiratorios: Los irritantes causan una lesión aguda del epitelio respiratorio y pueden desencadenar procesos de oxidación celular que generan lesiones definitivas. También las sustancias cáusticas como álcalis, los humos metálicos y los vapores de polímeros pueden desencadenar episodios agudos de compromiso general (fiebre) y dificultad respiratoria. Neumonitis por hipersensibilidad: enfermedades denominadas de acuerdo a los agentes, como pulmón del granjero, del criador de aves o del trabajador de queso, caracterizadas por una reacción de anticuerpos y células a un agente específico, con manifestaciones pulmonares. Esta respuesta genera un infiltrado intersticial, lesiones radiológicas y síntomas como tos, fiebre o dificultad respiratoria.

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Neumoconiosis: acumulación de polvo en los pulmones y las reacciones tisulares provocadas por su presencia. Pueden ser a causa de polvos fibrogénicos como sílice, asbesto, talco y carbón. La génesis de la neumoconiosis depende de características físicas de la fibra, es decir, largo y diámetro, de su toxicidad por composición mineral y de las características químicas de la superficie. El cuadro esencial de la neumoconiosis fibrogénica consiste en la fibrosis pulmonar, producto de la reacción inflamatoria al polvo. Algunas de las neumoconiosis son progresivas y cancerígenas (asbesto, sílice en discusión). Otros cuadros respiratorios importantes son la enfermedad bronquial obstructiva crónica y cuadros infecciosos, virales o bacterianos. Asma laboral: se caracteriza por una obstrucción reversible y variable de la vía aérea, desencadenada por un agente presente en el sitio de trabajo. Se asocia a polvos de madera (aserraderos, carpinterías, barracas), harinas (panaderías, molinos), isocianato de tolueno (fábricas de espuma para colchones). Otros agentes son productos animales, desechos de pájaros, polen de plantas, enzimas biológicas (detergentes), metales, humos, drogas (penicilinas, cefalosporinas, metildopa, tetraciclina). Cáncer laboral: tiene su origen cuando un contaminante laboral inicia el proceso interactuando con el material genético contenido en los cromosomas; después otra sustancia llamada promotor actúa provocando la reproducción de las células alteradas, y por último tiene lugar la progresión que da lugar a la expresión clínica del tumor. El cáncer respiratorio, especialmente del pulmón, es el que presenta con mayor frecuencia un origen laboral. Sus causas son múltiples: asbesto, radón, hidrocarburos aromáticos, nitrosaminas, bifenilos policlorados. Asbestosis: el asbesto es una fibra, compuesta principalmente por sílice y oxígeno, además de calcio, magnesio, hierro y sodio. Sus efectos pueden dividirse en no malignos y malignos. Entre las formas no malignas, la más notable es una neumoconiosis fibrogénica denominada asbestosis, que parece ser irreversible aún detenida la exposición.

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Enfermedades Asociadas al Asbesto Tipo

Órgano afectado

Enfermedad

Pulmones

Asbestosis (fibrosis intersticial difusa): enfermedad de las pequeñas vías aéreas (fibrosis limitada a la región peribronquial). Enfermedad Crónica de las vías aéreas.

Pleura

Placas pleurales. Reacciones visceroparietales (derrame pleural benigno, fibrosis pleural difusa, atelectasia redondeada).

Piel

Callos de amianto.

Pulmones

Cáncer de pulmón.

Pleura

Mesotelioma pleural.

Cavidades revestidas por mesotelio

Mesotelioma del peritoneo, pericardio y escroto.

Tracto intestinal

Cáncer de estómago, esófago, colon, recto.

Otros

Ovario, vesícula biliar, vía biliar, páncreas y riñón.

No maligna

Maligna

¿Qué debo hacer si creo que hay algo en el aire de mi trabajo que me está haciendo enfermar? Ve a ver a tu médico. Probablemente encontrará muy útil que le lleves escrito las cosas que habitualmente haces en su trabajo. Asegúrate de tener en cuenta tu turno o las horas de trabajo y los días de semana que trabajas y que tienes libres. Trata de recordar trabajos previos, pasatiempos y hábitos como fumar; cualquier cosa que pudiera haberte afectado los pulmones. Si dispones de una historia clínica laboral en tu empresa o en tu mutua/servicio de prevención, trata de obtener una copia con toda la información de las pruebas realizadas anteriormente.

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Las frases R y S A tu médico puede serle útil saber todos los compuestos químicos existentes en los recipientes de los productos que usas en tu lugar de trabajo. Haz una lista de estos compuestos y escribe cualquier frase R y S que estén impresas en el rótulo. Las frases R y S (de riesgo y de seguridad) son unas oraciones estandarizadas por la Unión Europea para indicar el manejo básico de las sustancias peligrosas y reducir el riesgo que conlleva su manipulación. Se dividen en dos grupos; las frases R (Riesgo, “Risk” en inglés) y las frases S (Seguridad, “Security” en inglés) dependiendo de la naturaleza descriptiva de la frase. Ejemplos de frases R: R20- Nocivo por inhalación; R23- Tóxico por inhalación; R26- Muy tóxico por inhalación; R37- Irrita las vías respiratorias; R42- Posibilidad de sensibilización por inhalación; R49- Puede causar cáncer por inhalación; R39/23- Tóxico: peligro de efectos irreversibles muy graves por inhalación; R39/23/24/25- Tóxico: peligro de efectos irreversibles muy graves por inhalación, contacto con la piel e ingestión. Ejemplos de frases S: S9- Consérvese el recipiente en lugar bien ventilado; S22No respirar el polvo; S23- No respirar los gases/humos/vapores/aerosoles: S38En caso de ventilación insuficiente, úsese equipo respiratorio adecuado; S41- En caso de incendio o de explosión no respire los humos; S63- En caso de accidente por inhalación, alejar a la víctima fuera de la zona contaminada y mantenerla en reposo.

¿Cómo puedo prevenir que me dañe los pulmones algo a lo que estoy expuesto en mi lugar de trabajo? •

Siempre que haya presencia de un contaminante peligroso, la acción preventiva prioritaria debe ser la eliminación del contaminante peligroso mediante sustitución por otro que no sea peligroso, o mediante la modificación del proceso que lo genera (emplear otro tipo de soldadura o distintos electrodos).

•

Si la eliminación del contaminante peligroso no es posible, la acción preventiva se dirigirá hacia la reducción de los riesgos debidos a su presencia.

•

Por tanto, realiza cualquier actividad en un local bien ventilado, propón que el número de trabajadores expuestos sea mínimo y que el tiempo de exposi46

ción de cada uno de ellos también sea mínimo. La rotación de puestos de trabajo o el reparto de tareas entre varios trabajadores son ejemplos de cómo, mediante la organización del trabajo, se puede reducir la exposición. •

Lee la etiqueta y consulta las fichas de datos de seguridad (FDS) de los productos químicos antes de emplearlos por primera vez. Las FDS facilitan la información necesaria para conocer las sustancias, sus características, la forma de empleo, las precauciones de uso y las actuaciones en el caso de exposición accidental.

•

Si existen procedimientos de trabajo, utilízalos. Pueden evitar exposiciones innecesarias (por ejemplo, es recomendable que una operación puntual que ocasiona una contaminación ambiental importante, se realice cuando el lugar de trabajo no esté ocupado, para evitar la exposición de trabajadores no implicados directamente en su ejecución).

•

Utiliza los sistemas de extracción de aire presentes en el lugar de trabajo.

•

Comprueba que los equipos e instalaciones de trabajo se someten a una planificación estricta de revisiones y mantenimiento, con registro documental de su ejecución.

•

Lleva a cabo unas buenas prácticas de higiene personal (prohibición de comer, beber o fumar en los lugares de trabajo; limpieza de la ropa de trabajo usando ésta habitualmente y no emplear la ropa de calle; utilización de las instalaciones para la higiene personal antes de las comidas y al finalizar la jornada).

•

Mantén el lugar de trabajo limpio y ordenado (ejemplo, la limpieza de pequeños derrames se hará, según el caso, con agentes absorbentes o neutralizantes que, una vez usados, se depositarán en recipientes para residuos, para su retirada y, en su caso, posterior tratamiento).

•

En el almacenamiento de agentes químicos debe diferenciarse entre aquellas áreas o zonas destinadas exclusivamente a almacenamiento y las situaciones en que, por necesidades de proceso, se requiere la presencia de cantidades de productos químicos peligrosos en el lugar de trabajo.

•

Comprueba que los productos con los que trabajas disponen de etiquetado y reetiquetado en su caso. 47

•

Cierra los recipientes herméticamente después de su uso.

•

Conoce y utiliza los procedimientos de actuación en caso de incidentes (fugas, derrames, emisiones y similares).

•

Conoce y utiliza los procedimientos en caso de emergencia.

•

Si es necesario el empleo de protección respiratoria, sigue las siguientes indicaciones: a. Utiliza el equipo para los usos previstos, siguiendo las instrucciones del folleto informativo del fabricante. b. Colócate y ajusta adecuadamente el equipo conforme a las instrucciones del fabricante y a la formación e información recibida a este respecto. c. Utilízalo mientras estés expuesto al riesgo y ten presentes las limitaciones del equipo indicadas en el “folleto informativo del fabricante”.

•

Si fumas, deja de hacerlo. Esto es lo más importante que puedes hacer por tu salud en general, independientemente de los riesgos que haya en tu trabajo. Los fumadores tienen un riesgo mayor de desarrollar algunas enfermedades pulmonares relacionadas con el trabajo que las personas que no fuman.

•

Deberían tenerse en cuenta las necesidades particulares de las trabajadoras embarazadas o en periodo de lactancia.

LA PROTECCIÓN RESPITORIA OCUPACIONAL Cómo implantar un programa de uso de protección respiratoria en la empresa en cinco pasos Este apartado pretende proporcionar una información general sobre la protección respiratoria en el lugar de trabajo, y pretende ayudar a las pequeñas empresas y trabajadores aportando consejos para implantar un plan de protección respiratoria. El uso de protecciones respiratorias en el lugar de trabajo puede proporcionar beneficios a la salud, pero también es una obligación. El uso de Elementos de

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Protección Individual (EPI) puede reducir la exposición de las personas a riesgos presentes en el aire pero, si no se usan las protecciones adecuadas, pueden presentarse serias enfermedades o incluso la muerte. A continuación se describen cinco pasos sencillos para implementar un plan de protección respiratoria: •

Identificar y eliminar riesgos

•

Efectos de los contaminantes en la salud

•

Seleccionar los protectores adecuados

•

Implementar el programa de protección respiratoria

•

Control de la eficacia del programa

PASO 1: Identificar y eliminar riesgos El uso de mascarillas protectoras es costoso e implica gastos corrientes efectuados a través de evaluaciones médicas, pruebas de ajuste anual y compras de equipo. Las mascarillas pueden obstaculizar la comodidad y la productividad de los empleados, y su uso siempre conlleva el riesgo de sobreexposición inesperada. El primer paso para garantizar la seguridad de los empleados es eliminar, siempre que sea posible, la necesidad de utilizar mascarillas de protección respiratoria mediante el uso de materiales menos tóxicos o proporcionando controles de ingeniería para reducir los riesgos respiratorios. Las mascarillas de protección respiratoria deben utilizarse como último recurso en la prevención de la exposición dañina a los trabajadores y no como un sustituto de otras medidas de control viables. El objetivo de la protección respiratoria es preservar la salud de las personas que respiran en ambientes nocivos. Los contaminantes se clasifican en: •

Partículas con o sin aceite (polvos, neblinas, humos).

•

Moléculas (gases y vapores).

La peligrosidad de los contaminantes depende principalmente de su toxicidad y de su concentración en el aire. La legislación establece concentraciones máximas permisibles para diversos contaminantes. 49

PASO 2: Efectos de los contaminantes en la salud Las defensas naturales del aparato respiratorio no consiguen filtrar las partículas menores a 10 micrones. Pueden penetrar entonces más profundamente, provocando enfermedades como la neumoconiosis y fibrosis. Ciertos contaminantes como el plomo, cadmio o mercurio, pueden pasar de los pulmones a la sangre y alcanzar órganos como el cerebro, el hígado y los riñones provocando graves perjuicios. En la mayor parte de las ocasiones el daño que se está produciendo no se percibe de inmediato (efectos agudos) sino después de transcurrir meses o años (efectos crónicos). Al aparecer entonces los síntomas, el daño ya es irreversible. Hay tres grupos básicos de riesgos respiratorios: 1. Deficiencia de oxígeno: cuando los niveles de oxígeno bajan a menos de 19’5%, el aire tiene una deficiencia de oxígeno. 2. Partículas Contaminantes: los tipos diferentes de estos contaminantes pueden ser clasificados de la siguiente manera: a. Gases: aerosoles creados cuando materiales sólidos son vaporizados a temperaturas altas y después enfriados. Los gases resultan de operaciones como el soldar. b. Polvo: partículas hechas al despegar partículas más grandes. Operaciones como lijar, moler, aplastar limpiar con chorro de arena son los peores productores. c. Neblinas: un aerosol formado por líquidos. Las neblinas pueden ser creadas por operaciones tales como pulverizar, hervir o blindar. d. Gas y contaminantes de vapor: los contaminantes de gas son similares al aire ya que poseen la misma capacidad de difundirse libremente dentro de un área o un envase. Ejemplos de gases son el nitrógeno, cloro y dióxido de carbón. Los vapores se forman cuando algunas sustancias sólidas y líquidas se evaporan debido al cambio de temperatura. Algunos ejemplos de líquidos que producen vapores son la gasolina, los solventes y los diluyentes.

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PASO 3: Seleccionar los protectores adecuados Debe darse la prioridad al control ambiental. Si éste no es suficiente, es necesario usar respiradores o mascarillas. Los respiradores son dispositivos utilizados para reducir la exposición de los trabajadores a riesgos respiratorios, tales como los humos, nieblas, gases, vapores o polvos nocivos. Se utilizan también para proteger a los trabajadores contra atmósferas deficientes de oxígeno. Las protecciones respiratorias adecuadas deben utilizarse cuando no ha sido posible eliminar la fuente contaminante o implementar otras medidas de control. Existe una gran variedad de equipos, modelos y tamaños cuya selección debe basarse en el riesgo existente. Los contaminantes en la atmósfera y el aire a los que se enfrentan los trabajadores en un lugar de trabajo dictan el tipo de respirador a elegir. Al seleccionar los respiradores, los factores críticos son: •

Eficiencia de filtración.

•

Resistencia a la respiración.

•

Ajuste a la cara.

•

Aceptación del trabajador.

•

Calidad del aire respirable.

PASO 4: Implementar el programa de protección respiratoria Una vez realizada una evaluación de los riesgos respiratorios y seleccionados los EPI adecuados, se deben desarrollar y aplicar procedimientos de trabajo por escrito, adaptados a las condiciones específicas del lugar de trabajo, que especifiquen cómo usar los EPI adecuadamente, su cuidado y mantenimiento. Desarrollar y escribir los procedimientos de trabajo específicos in situ es la forma más eficiente para garantizar que el programa refleja las características únicas del lugar de trabajo. También se debe formar a los trabajadores en todos los aspectos del programa de protección respiratoria. Aún seleccionados correctamente los equipos, si su ajuste a la cara es inadecuado, habrá fugas por sus bordes. Existen técnicas simples para su control. Si no es usado, aún durante una pequeña parte de la jornada, la protección global caerá drásticamente. La capacitación contribuye a 51

lograr la aceptación del trabajador y un elevado tiempo de uso. Para prevenir el mal funcionamiento debe realizarse su inspección, mantenimiento y limpieza en forma periódica. PASO 5: Control de la eficacia del programa Un programa de protección respiratoria con éxito tiene que ser evaluado periódicamente para asegurarse de que está actualizado y es eficaz. La frecuencia con la que se debe evaluar el programa dependerá de la complejidad y el alcance de los peligros respiratorios en el lugar de trabajo. Cada vez que se presenten cambios en las condiciones de trabajo, debe procederse a evaluar los riesgos respiratorios (por ejemplo, la introducción de nuevas sustancias, procesos, procedimientos o equipos) ya que pueden cambiar los niveles de exposición o la existencia de nuevos factores de riesgo a los que están expuestos los trabajadores. El proceso de evaluación del programa consiste en los siguientes pasos: 1. Verificar que no existen alternativas viables para los respiradores. 2. Realización de evaluaciones periódicas de los puestos de trabajo en los que estén presentes factores de riesgo respiratorios. 3. Obtener la participación activa de los empleados en la revisión y actualización del programa de respiradores. 4. Realizar los ajustes del programa.

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Glosario de términos

En este apartado hemos querido recopilar términos de uso frecuente en los medios de comunicación cuando se habla del medio ambiente. Muy pocas de las palabras contenidas en el glosario han sido usadas en este libro, ya que nuestro fin era transmitir ideas sencillas y soluciones prácticas, pero hemos creído oportuno, su inclusión por su carácter pedagógico. Acuífero: aquel estrato o formación geológica permeable que permite la circulación y el almacenamiento del agua subterránea por sus poros o grietas. Agroforestal: relaciones que se establecen cuando se combinan árboles, cultivos, y animales-pastos en la misma unidad de terreno, manteniendo los principios de sostenibilidad, productividad y adaptabilidad. Agroforestería: aprovecha los beneficios interactivos de combinar árboles y arbustos con cultivos o/y ganado. Aguas residuales: agua que transporta desechos de hogares, negocios e industrias. Por lo general, una mezcla de agua y disueltos o sólidos en suspensión. Aguas subterráneas: acuíferos bajo la superficie de la Tierra. Algas: diversos organismos autótrofos de organización sencilla que hacen fotosíntesis productora de oxígeno y que viven en el agua o en ambientes muy húmedos. Ambiente: la dotación de aire que rodea la Tierra. La mayoría de la masa total de la atmósfera se encuentra dentro de la troposfera y la estratosfera. La mayoría de los fenómenos meteorológicos se limitan a la troposfera, la parte baja de 8 a 12 km de la atmósfera. La capa de ozono se encuentra en la estratosfera, que generalmente se extiende desde 10 hasta 40 km sobre la Tierra. Ambiente doméstico: son todos aquellos factores que provienen del exterior y sobre los cuales el ser humano tiene control. Los productos químicos domésticos alteran gravemente el ambiente doméstico y pasan a las personas a través de los alimentos a los cuales contaminan fácilmente por estar almacenados en los mismos habitáculos durante periodos de tiempo. 53

Ambientalmente racional: lo que no daña el medio ambiente. Antropogénica: inducida por el hombre o causada por humanos, derivada de la raíz griega anthropos que significa “hombre”. Árido: las regiones donde las precipitaciones son insuficientes en cantidad para la mayoría de los cultivos y donde la agricultura es inviable sin riego. Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD): lo que un país, generalmente del Norte, se compromete a dar a otro país, por lo general del Sur, con el propósito de ayudar a su desarrollo. Las Naciones Unidas están tratando desde hace muchos años de que cada país en el mundo desarrollado se comprometan a destinar el 0,7% de su PNB a los países en desarrollo como AOD. Bioacumulación: es el proceso de acumulación de sustancias químicas en organismos vivos de forma que éstos alcanzan concentraciones más elevadas que las concentraciones en el medio ambiente o en los alimentos. Biodegradable: es el producto o sustancia que puede descomponerse en los elementos químicos que lo conforman debido a la acción de agentes biológicos como plantas, animales, microorganismos y hongos, bajo condiciones ambientales naturales. No todas las sustancias son biodegradables bajo condiciones ambientales naturales, a dichas sustancias se les llama sustancias recalcitrantes. Biodiversidad: diversidad biológica. La variedad de organismos vivos de cualquier fuente, incluidos los ecosistemas acuáticos marinos y terrestres, y la variedad de los diferentes ecosistemas que forman. Esto incluye la diversidad dentro de cada especie, entre especies y de ecosistemas, y la variabilidad genética de cada especie. Biológicos, recursos: incluye organismos o partes de ellos, poblaciones o cualquier otro componente biótico de los ecosistemas con uso real o potencial o valor para la humanidad. Biomasa: materia orgánica originada en un proceso biológico, espontáneo o provocado, utilizable como fuente de energía. Biosfera: es el sistema material formado por el conjunto de los seres vivos propios del planeta tierra, junto con el medio físico que les rodea y que ellos contribuyen a conformar.

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Calidad del agua: término usado para describir las propiedades químicas, físicas y biológicas del agua con respecto a su idoneidad para un uso particular. Calentamiento Global: el calentamiento global y el enfriamiento mundial, estrictamente se refieren al calentamiento natural y las tendencias de enfriamiento que la Tierra ha experimentado a lo largo de su historia. Sin embargo, el término generalmente se refiere al aumento gradual de las temperaturas de la Tierra que podría resultar de los gases acumulados que se encuentran atrapados en la atmósfera. Cambio climático: las variaciones lentas de las características climáticas en el tiempo en un lugar determinado. Por lo general se refiere al cambio de clima atribuido directa o indirectamente a la actividad humana que altera la composición de la atmósfera mundial y que es, en suma, la variabilidad natural del clima observada durante períodos comparables. Cataratas: opacidad total o parcial del cristalino que deteriora la visión. Componente importante en el desarrollo de cataratas es el efecto de la luz UV. CFC (clorofluorocarbonos): cualquiera de los diferentes compuestos que contienen cloro, hidrógeno, flúor y carbono. Fueron introducidos por primera vez por DuPont Corporation en 1928 y han sido ampliamente utilizados como refrigerantes, propelentes de aerosoles, disolventes de limpieza y en la fabricación de espuma de plástico. En 1972, los científicos descubrieron que los CFC gaseosos pueden agotar la capa de ozono cuando se va elevando a la estratosfera y sus átomos de cloro reaccionan con las moléculas de ozono. Los esfuerzos están en marcha a través del Protocolo de Montreal para reducir y luego eliminar la producción de esta sustancia en todo el mundo. Ciclo Hidrológico: el ciclo del agua a través de su proceso natural de evaporación y precipitación: desde el mar, a través de la atmósfera, a la tierra. Clima: el promedio de las condiciones del tiempo en una zona determinada. CO2: el óxido de carbono es un gas también denominado dióxido de carbono, gas carbónico y anhídrido carbónico. El óxido de carbono, junto al vapor de agua y otros gases, es uno de los gases de efecto invernadero (G.E.I) que contribuye a que la Tierra tenga una temperatura habitable. Por otro lado, un exceso de óxido de carbono se supone que acentuaría el fenómeno conocido como efecto invernadero.

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Combustibles fósiles: carbón, petróleo, gas natural y otros hidrocarburos. Se llaman combustibles fósiles porque se hacen de fosilizados, ricos en carbono de laa plantas y restos de animales. Estos restos fueron enterrados en los sedimentos y se comprimen con el tiempo geológico, poco a poco se convierten en combustible. Compostaje: abono. La materia orgánica se descompone por vía aeróbica o por vía anaeróbica. Llamamos compostaje al ciclo aeróbico (con alta presencia de oxígeno) de descomposición de la materia orgánica. Compuestos Orgánicos: compuestos de carbono e hidrógeno. Los compuestos orgánicos forman los bloques básicos de construcción de tejido vivo. Conservación: la protección a largo plazo y la gestión sostenible de los recursos naturales de conformidad con los principios que garanticen los beneficios sociales y económicos a largo plazo. Contaminación: contaminación de un ecosistema natural, especialmente con referencia a la actividad de los seres humanos. Contaminante: se refiere a toda sustancia biológica, química, física o radiológica que actúa con un efecto negativo en el aire, el suelo o el agua. COV (compuestos orgánicos volátiles): a veces llamados VOC por sus siglas en inglés. Término utilizado para describir los gases y vapores orgánicos que están presentes en el aire. Muchos compuestos orgánicos volátiles son peligrosos contaminantes del aire. DDT: compuesto clorado usado como insecticida. Se ha prohibido desde 1969 en la mayoría de los países desarrollados debido a que es una causa probable de cáncer. Sin embargo, todavía se utiliza ampliamente en los países en desarrollo. Deforestación: tala de árboles, generalmente con fines comerciales. Degradación del suelo: reducción o pérdida de la productividad biológica o económica de las tierras de cultivo de secano, las tierras de cultivo de regadío o rango, pastos, bosques y tierras arboladas. La degradación del suelo por lo general es resultado de la explotación insostenible de la Tierra. Desarrollo sostenible: desarrollo que garantice que el uso de los recursos y el medio ambiente de hoy no comprometa su uso en el futuro.

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Desertificación: degradación de la tierra como resultado de las variaciones climáticas y las actividades humanas. Dióxido de carbono: gas incoloro, inodoro, que resulta de la combustión de combustibles fósiles. Dioxina: cualquiera de una familia de compuestos conocidos químicamente como dibenzo-p-dioxinas. La preocupación acerca de ellos se deriva de su potencial toxicidad y la contaminación en los productos comerciales. Ecosfera: se refiere al ecosistema global que abarca toda la atmósfera, la litosfera, la hidrosfera y la biosfera como componentes inseparables. Ecosistema: sistema dinámico y complejo de plantas, animales y comunidades de microorganismos y su entorno que interactúan como una unidad funcional dentro de un lugar físico definido. El término puede aplicarse a una unidad tan grande como la ecosfera entera, pero por lo general se refiere a una división de la misma. Efecto invernadero: calentamiento de la atmósfera de la Tierra causado por la presencia de gases que atrapan el calor (por ejemplo, vapor de agua, dióxido de carbono o el metano). Estos gases absorben la radiación emitida por la Tierra, lo que retrasa la pérdida de energía del sistema en el espacio. El efecto invernadero ha sido una característica de la atmósfera de la Tierra durante millones de años y es responsable de mantener la superficie de la Tierra a una temperatura habitable para los seres humanos. Un Efecto Invernadero reforzado es cuando el aumento de las concentraciones de estos gases incrementan el efecto invernadero natural. El mayor incremento del “efecto invernadero” se espera que cause un rápido y gran aumento de la temperatura media global. Efluentes: descarga de materiales residuales urbanos o industriales en el medio ambiente. Electricidad: la mayoría proviene de recursos naturales renovables o no renovables como carbón y petróleo, estos se queman y producen vapor haciendo funcionar a los generadores de electricidad, emitiendo a la atmósfera gases como el CO2 que contribuye al calentamiento global. Emisiones: en el medio ambiente, se refiere a las emisiones de gases de efecto invernadero o sus precursores a la atmósfera en un área y un período de tiempo.

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Energía renovable: la energía que se obtiene de fuentes naturales virtualmente inagotables, unas por la inmensa cantidad de energía que contienen, y otras porque son capaces de regenerarse por medios naturales. Erosión: desgaste de la superficie terrestre por el viento, el agua, los glaciares, los productos químicos y la exposición a la atmósfera. La erosión se produce naturalmente pero puede ser intensificada por el desbroce de tierras para prácticas relacionadas con la agricultura, la construcción residencial o industrial, la construcción de carreteras o la deforestación. Escorrentía urbana: es el agua procedente de la lluvia o de la nieve fundida que no se absorbe ni se mantiene en el suelo, sino que corre por la superficie y a través de pavimento y calles. A medida que se desplaza, recoge y transporta contaminantes que se pueden depositar en estanques, lagos, costeras y fuentes subterráneas de agua potable. Especies en peligro: una especie en peligro de extinción. Especie extinta: especie que ya no sobrevive en ninguna parte del mundo. Estratosfera: la capa de la atmósfera entre 10 y 40 km de la Tierra por encima de la superficie en la que la temperatura aumenta con la altitud. La estratosfera contiene el 90% del ozono (O3) de la atmósfera. Eutrofización: se dice del enriquecimiento en nutrientes de un ecosistema. Su uso más extendido se refiere específicamente al aporte más o menos masivo de nutrientes inorgánicos en un ecosistema acúatico. Evaluación del Impacto Ambiental (EIA): evaluación crítica, tanto positiva como negativa, de los efectos probables de un proyecto, actividad o política sobre el medio ambiente. Fisión nuclear: es una reacción nuclear, ocurre al fraccionar los isótopos de uranio para producir calor, que se aprovecha para producir energía eléctrica entre otros aprovechamientos. Fitoplancton: plantas acuáticas microscópicas. Forestación: la acción de plantar árboles en zonas despobladas de ellos.

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Forma de vida: es la suma de decisiones por parte de los individuos que afectan a su salud, entre otras cosas, de una u otra manera. Fotosíntesis: es la conversión de energía luminosa en energía química estable. La fabricación por parte de las plantas de hidratos de carbono y oxígeno a partir de dióxido de carbono y agua en presencia de clorofila, usando la luz solar como fuente de energía. Fusión nuclear: es la fusión de los elementos para producir cualquiera de las partículas con carga eléctrica o calor, que luego se aprovecha para producir electricidad. Esta tecnología está siendo investigada, pero hasta ahora no es una energía estable. Gases de efecto invernadero: son aquellos componentes gaseosos de la atmósfera, tanto naturales como artificiales, que absorben y reemiten la radiación infrarroja. Son responsables del calentamiento global. El gas de efecto invernadero más potente es el dióxido de carbono. Hábitat: se dice de la ubicación geográfica y del conjunto asociado a condiciones ambientales que son necesarias para el florecimiento de un tipo peculiar de plantas o animales. En otras palabras, su hogar. Halocarbonos Industriales: son grupos de compuestos químicos sintéticos que contienen carbono y uno o más cloros, flúor o bromo. Sólo los halocarbonos industriales que contienen cloro o bromo suponen una amenaza para la capa de ozono. Halones: compuestos químicos desarrollados a partir de hidrocarburos mediante la sustitución de átomos de hidrógeno con átomos de halógenos, como flúor, cloro o bromo. Los CFC son halones. Los halones son ampliamente utilizados como agentes extintores de incendios. Hidroclorofluorocarbonos (HCFC): son sustancias orgánicas compuestas de hidrógeno, cloro, flúor y átomos de carbono. Estas sustancias químicas son menos estables que los CFC, y por lo tanto, menos perjudiciales para la capa de ozono. Hidroelectricidad: se denomina a la energía eléctrica producida por turbinas de generadores alimentados de agua.

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Hidrofluorocarbonos (HFC): son productos químicos con flúor (pero sin cloro), que por lo tanto no dañan la capa de ozono. Sin embargo, los HFC son potentes gases de efecto invernadero. Humedales: son tierras donde la saturación de agua es el factor dominante que determina la naturaleza del desarrollo del suelo y los tipos de comunidades vegetales y animales que viven en el medio circundante. Otros nombres comunes para los humedales son pantanos, lagunas, estuarios y marismas. Inorgánicos: son materias que no contienen una combinación de carbono, hidrógeno y oxígeno, presentes en todos los seres vivos. Lluvia ácida: cuando los ácidos fuertes caen de la atmósfera en forma de lluvia, nieve, niebla o partículas secas. El ácido es el resultado de la contaminación causada principalmente por óxidos de azufre y óxidos de nitrógeno que se vierten a la atmósfera por la industria. También se crean al quemar carbón y aceite, en las fundiciones y en el transporte. En la atmósfera, estos gases se combinan con vapor de agua para formar ácidos que luego caen a la Tierra, y a menudo deterioran los bosques y esterilizan los lagos. Medio ambiente: son todos aquellos factores externos, condiciones e influencias que afectan a un organismo o una comunidad. Moléculas: son un grupo de átomos unidos por fuerzas químicas. Mundo desarrollado: países que poseen un alto nivel de vida y un muy alto desarrollo humano. El indicador más usado para considerar a un país como desarrollado es el Índice de Desarrollo Humano. Dicho índice tiene en cuenta la distribución de la riqueza, la esperanza de vida, seguridad, educación, derechos humanos, sanidad, etc. Mundo en desarrollo: son aquellos países cuyas economías se encuentran en desarrollo económico partiendo de un estadio de subdesarrollo. La mayoría de las organizaciones, incluidas las Naciones Unidas, estiman que entre el 60% y el 80% del mundo cabe en esta categoría. Orgánica: la relación con o derivadas de organismos vivos. En química, orgánica se refiere a cualquier sustancia que contenga carbono. Organismo: ser vivo.

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Organización No Gubernamental (ONG): es una entidad de caracter privado con diferentes fines y objetivos humanitarios y sociales definidos por sus integrantes, creada independientemente de los gobiernos locales, regionales y nacionales, así como también de los organismos internacionales. Ozono: es un gas compuesto de tres átomos de oxígeno (03). El ozono filtra parcialmente ciertas longitudes de onda de la luz ultravioleta que llega a la Tierra procedente del sol. Es un gas deseable en la estratosfera, pero en altas concentraciones a nivel del suelo es tóxico para los organismos vivos. Ozono, capa (ozono estratosférico): es el ozono que se forma en la estratosfera de la conversión de las moléculas de oxígeno por la radiación solar. El ozono tiene la capacidad de absorber la radiación ultravioleta e impide que ésta alcance la Tierra. Ozono troposférico: es el ozono (O3) que se produce cerca de la superficie de la Tierra y tiene efectos tóxicos. Partes por millón (PPM): es el número de “partes” en peso de una sustancia por millón de partes de agua. Esta unidad se usa comúnmente para representar concentraciones de contaminantes. Grandes concentraciones se expresan en porcentajes. pH: expresión de la acidez y alcalinidad en una escala de 0 a 14. Con 7 representa la neutralidad; valores menores de 7 indican aumento de la acidez y los valores mayores de 7 indican aumento de la alcalinidad. La lluvia ácida puede reducir el nivel de pH del agua de un lago matando toda su vida. Plaguicidas: son sustancias o mezcla de sustancias destinadas a prevenir, destruir, repeler o mitigar cualquier plaga. Los pesticidas pueden acumularse en la cadena alimentaria y/o contaminar el medio ambiente. Plancton: se denomina al conjunto de organismos, principalmente microscópicos que flotan en aguas saladas o dulces. Son la base de la cadena alimentaria. Clasificado como: zooplancton (plancton animal) y fitoplancton (plancton vegetal). Planificación integral de los recursos: es el manejo de dos o más recursos en la misma área general, como el agua, el suelo, madera, tierras de pastoreo, pesca y vida silvestre.

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Planta de tratamiento de aguas residuales: instalación que contiene una serie de tanques, pantallas, filtros y otros procesos por los cuales se eliminan contaminantes y sustáncias sólidas orgánicas e inorgánicas del agua. Precipitación: cualquier forma de presentarse el agua, ya sea líquida o sólida, que cae de la atmósfera y alcanza la superficie de la Tierra. Un día con precipitación mensurable es un día en que precipitación de agua es igual o superior a 0,2 mm. Producto Nacional Bruto (PNB): es el valor total de mercado de los bienes y servicios producidos por una nación durante un período específico de tiempo. Proliferaciones algales: se denomina al rápido crecimiento de algas en la superficie de lagos, ríos y estanques, estimulada por el exceso de nutrientes. Un explosivo aumento en la densidad de fitoplancton en una zona puede eliminar la flora y la fauna autóctona por privación del oxígeno en las aguas. Radiaciones Ultravioletas (UV): son radiaciones electromagnéticas con longitud de onda de 200 a 400 nanómetros. También conocida como luz ultravioleta. Reciclables: son productos como papel, vidrio, plásticos, petróleo y metales que pueden ser transformados de nuevo en productos en lugar de ser eliminados como residuos. Recursos: persona, cosa o acción que se utiliza para producir un efecto deseado o producto, por lo general para satisfacer las necesidades humanas o mejorar la calidad de vida. Recursos naturales: por ejemplo, la biomasa de árboles, agua dulce, peces... cuyo suministro esencial nunca se agota ya que se producen continuamente. Recursos no renovables: recursos naturales que no se reponen naturalmente una vez usados. Los recursos no renovables se pueden utilizar por completo o bien utilizarse hasta tal punto que no es económicamente factible obtener más de ellos. Los combustibles fósiles y los minerales metálicos son ejemplos de recursos no renovables. Recursos renovables: son recursos naturales que tienen la capacidad de ser repuestos naturalmente (por ejemplo, bosques, peces). El suministro de los recursos naturales, en teoría, nunca se agota, ya que se produce continuamente.

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Reforestación: proceso de restablecimiento de la masa forestal en tierras previamente despejadas. Residuos peligrosos: son residuos que podrían presentar riesgos a través de la contaminación del medio ambiente. Para su eliminación se requieren técnicas especiales. Revolución Industrial: la Revolución Industrial comenzó en los años 1800 y anunció el nacimiento de los tiempos modernos. Después de la Revolución Industrial, el trabajo que se hacía a mano se llevó a cabo a través del uso de las máquinas. Se inició con la llegada de la máquina de vapor, la desmontadora de algodón, la máquina de coser, el papel, el telégrafo, el ferrocarril y vio el comienzo de muchas de nuestras industrias presentes. Si bien se inició en los países del hemisferio norte, los efectos de la revolución industrial han afectado al mundo entero. Sequía: fenómeno de origen natural que se produce cuando la precipitación es significativamente inferior a los niveles normales, haciendo que decienda los niveles de agua de los acuíferos y la vegetación acabe por morir. Si la sequía se produce por un largo período de tiempo o dura más de lo esperado, conduce a pérdidas muy importantes y en algunos países a la hambruna y la desertificación. Smog (niebla tóxica): literalmente, una contracción de “humo” y “dificultades”, el término coloquial utilizado para niebla fotoquímica, que incluye la capa de ozono y otros contaminantes. El smog se visualiza como una neblina marrón en la atmósfera. Sostenible (desarrollo): desarrollo perdurable o sustentable. Se aplica al desarrollo socioeconómico. Puede dividirse conceptualmente en tres partes: ambiental, económica y social. Se considera el aspecto social por la relación entre el bienestar social, con el medio ambiente y la bonanza económica. Sumideros: actúan como desagüe natural para el agua de lluvia o para corrientes superficiales como ríos o arroyos. En algunas zonas del mundo los sumideros han sido o son utilizados como vertederos, lo cual afecta la calidad del agua subterránea y por tanto la de los acuíferos. Otros han sido sellados con hormigón u otro material para poder así construir sobre ellos, lo que puede afectar al caudal subterráneo.

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Tanque séptico: tanque (por lo general subterráneo) que se utiliza para verter los desechos domésticos, cuando no hay disponible una tubería de drenaje para llevarlos a plantas de tratamiento. Acumula los residuos sólidos hasta que las bacterias los descomponen, el agua potable es relativamente absorbida por el suelo. Tetracloruro de carbono: disolvente considerado tóxico que puede causar cáncer en humanos. Se utiliza principalmente como materia prima para la producción de otros productos químicos, incluidos los CFC. Tóxico: sustancias nocivas para los organismos vivos. Troposfera: capa de la atmósfera que contiene aproximadamente el 95% del aire y se extiende alrededor de 6 a 17 kilómetros de la Tierra, dependiendo de la latitud y la estación.

La educación ambiental es una corriente internacional de pensamiento y acción. Su meta es procurar cambios individuales y sociales que provoquen la mejora ambiental y un desarrollo sostenible. > Libro Blanco de la Educación Ambiental en España