Mis Finales Favoritos Y Estudios De Grandes Maestros
265 72 17MB
Spanish Pages [165]
Recommend Papers
- Author / Uploaded
- Karpov Anatoli y Gik Evgeni
File loading please wait...
Citation preview
COLECCION AJEDREZ
Mis finales favoritos y estudios de grandes maestros
Anatoli Karp'ov Evgeni G.k
Traducción: Juan Luis Fernández Aguado Portada: Manuel Abia Quijano
© 1992, by Zugarto Ediciones, S. A. Pablo Aranda, 3 - 28006 Madrid, España Te!. 4114264 - FAX 562 2677 !.S.B.N.: 84-88155-03-4 Depósito Legal: M-5863-1992 Impreso en España - Printed in $pain Gráficas Muriel, S. A. Buhígas, s/n - Getafe (Madrid)
MIS FINALES FAVORITOS Y estudios de grandes maestros
Anatoli Karpov Evgeni Gik
Prólogo La solución de estudios artísticos es un tradicional y acreditado medio para el perfeccionamiento del jugador de ajedrez. En favor de ello basta con decir que todos los Campeones del Mundo son grandes entusiastas de las composiciones de ajedrez y que se dan estudios que incluso fueron elaborados por ellos mismos. La solución de un problema de ajedrez no sólo es válido para el progreso de la creatividad del jugador de ajedrez, sino que además - y esto no es menos importante- , le dispensa satisfacción y ciertamente el deleite que resulta de lo estético. Una composición o - tal como se dice frecuentemente- la "poesía del ajedrez", está inseparablemente unida con el ajedrez práctico y podría ser considerada como su más fiel compañero y ayudante. Resulta evidente por ello que, si los estudios son pretendidos, es sobre todo por su objetivo y su contenido, es en esencia el mismo que en la partida de ajedrez. (Los problemas de ajedrez guardan significativamente una menor relación con la práctica). Si un comentarista utiliza las expresiones "victoria de estudio" o "tablas de estudio", esto quiere decir que en el duelo se encuentra una aguda idea, una efectiva combinación o una ingeniosa maniobra que de forma elegante permite a uno de los bandos ganar o salvar la situación. El continuo entrenamiento mediante la solución de estudios ayuda al jugador de ajedrez, sin lugar a dudas, a no pensar durante el juego de forma rutinaria y desarrolla su sentido táctico, al igual que el poder para calcular largas variantes. No raras veces, la posición inicial de las piezas en un problema de ajedrez recuerda una partida aplazada, un complicado final y ciertamente, los estudios ocupan de por sí un importante lugar en la teoría de los finales. La dedicación a tales composiciones ayuda al jugador a desarrollar su técnica en el final de juego y a dominar los diferentes métodos de la estructuración del juego en esta fase de la partida. En la literatura constan un sinnúmero de libros dedicados a los estudios de ajedrez y conocidos libros publicados corresponden a unas muy amplias ediciones. El mundo de las ideas de la composición es ciertamente inagotable. Por tal razón es comprensible que en un libro no muy amplio difícilmente puedan ser tratadas todas las cuestiones que al jugador práctico interesan. Nosotros de toda esta base 9
hemos seleccionado algunos temas que según nuestra opinión resultan valiosos para todo amigo del ajedrez. En el primer capítulo se hace referencia a las "maniobras Reti", las cuales son aplicadas en los más diferentes finales, sobre todo en finales de peones. El lector es familiarizado con muchos estudios y una serie de ejemplos prácticos que ilustran en su histórico desarrollo este popular y fascinante tema. Existe una considerable relación entre la práctica y la composición. Muchos conocidos grandes del ajedrez han compuesto estudios, entre ellos -como ya fue dicho-, los Campeones del Mundo. El segundo capítulo está dedicado, en lo que a composiciones se refiere, a la obra de los "reyes". Junto a estudios de Steinitz, Lasker, Euwe, Botvinnik y Smyslov, son ofrecidos al lector interesantes partes de partidas de los Campeones del Mundo, soberbias combinaciones y esmerados finales de juego. El tercer capítulo contiene una singular selección de estudios. Se trata de una colección de cuartetos, es decir posiciones con cuatro piezas sobre el tablero. Todas estas clases de miniaturas son extensamente analizadas, las cuales en su mayor número son importantes para la teoría y la práctica del final de juego. El cuarto capítulo es una selección de ejercicios para el trabajo por cuenta propia. En total se ofrecen 50 estudios con soluciones y comentarios. Todas las posiciones son miniaturas (como máximo siete piezas sobre el tablero), y fueron elaboradas por conocidos compositores de ajedrez. • El quinto y último capítulo contiene, por último, 20 finales de Anatoli Karpov que son aportados en calidad de estudio. Como uno de los autores del libro, él comenta los más interesantes finales de su larga práctica en el tiempo. La mayoría de estos "estu dios" se originaron directamente de las partidas de competición, algunos junto al estudio casero o bien junto al análisis de partidas aplazadas. Sólo queda por decir que el presente libro ha sido escrito de una manera relajada y que no tiene ninguna pretensión en ser un libro de enseñanza marcado por una sistematización del material. Todo jugador práctico -tal como esperan los autores- puede encontrar en este libro algo útil e interesante para sí. A. Karpov E. Gik
10
Capítulo 1 Una sorprendente maniobra o la geometría del tablero La posición representada en el tablero fascina a todo aquel que la ve por primera vez. Fue ideada por el gran maestro de primera fila ycompositor de ajedrez Ricardo Reti. La habitual expresión de que "todo lo genial es sencillo" no encuentra mejor ocasión que precisamente en este trabajo de un valor artístico único en su clase. A primera vista uno cree en la reali dad del problema. El rey negro se encuentra sólo a dos pasos del peón enemigo, al tiempo que su propio peón se precipita hacia adelante casi por así decirlo de forma inevitable. ¡Y sin embargo, el blanco lo detiene! Resulta evidente que el rey no puede alcanzarlo en el caso de que eligiera el camino directo 1. 'it> h7, h4; 2. 'it> h6, h3; etc., pero el monarca blanco ejecuta una totalmente inesperada y paradójica maniobra. (Ver diagrama).
R. Reti, 1921 Tablas 1. ~ g7!, h4 . 2.
serían coronados al mismo tiempo. 3. 'i!fe5!, b7, ~ a5 4. 'Ot;l c6, h5 5. 'Ot;l d5, y el rey entra dentro del cuadrado de l peón . Esta idea basada en una ma niobra de entretenimiento con 14
La situación del blanco parece preocupante. Su peón h no es peligroso y por contra el negro amenaza en crear un peón libre en el otro flanco. Al tratarse de un fragmento de una partida histórica utilizaremos la numeración original de las jugadas. 40. h4!, 'itig4 41. ~ g6!, 'itih4 42. ~f5, El negro tiene que hacer ya esfuerzos para no perder. El encuentro se dirige así hacia sus últimas jugadas. 42 ...., 'Ot;l g3 43. d3; (3 .... , b5; 4. d4, Y las damas aparecen simultáneamente), 4. d5, y tablas. 2. d4,b4 3. d5!, 'iPb5 4. d6!, Wc6 5. Wf5!, El rey ha llegado a tiempo de lo que pueda ocurrir 5.... , ..t.>d6 6 . ..tJ>e4, o 5.... , b3; 6. ,.pe6, b2; 7. d7 con resultado de tablas.
(Se amenazaba 3. 'iPd7, y 4. c6). 3. d5 y el rey blanco se encuentra dentro del cuadrado del peón enemigo. Aún aquí una "comprobación matemática" del teorema ajedrecístico: ¡la suma de los catetos es igual a la longitud de la hipotenusa! l. Maiselis, 1921
E. Pogosjanz, 1976
Blancas ganan
Tablas 1. 2. 16
..t.>b5!, h5 Wc6!, 'i&? c8
Ahora tienen ante sí una posición en la cual el objetivo del blanco no son las tablas, sino conseguir la victoria. El peón de a7 está perdido y el único chance del negro después del inevitable ~ a7, consiste en mantener al rey enemigo en el borde del tablero por medio de ..tJ> c7. El camino más corto hacia el peón de a7 por parte del rey blanco
consiste en cinco jugadas y existen 30 posibilidades con las cua les el rey pueda hacer un recorri do tan rápido. Pero para el objeti vo perseguido sólo hay una. 1. ~ e6!, 'it?c3
2.
~ d5!!,
Todavía una importante maniobra que frecuentemente es aplicada en estudios o finales de partida . Obliga al rey negro a hacer una jugada que no implica avance ninguno de manera que no consiga llegar a tiempo al lugar de los acontecimientos. 2. ... , q"b4
3. ~ c6, ~ a5 4. ~ b 7, 'it?b5 5. g7, h5 (2 .. ", f5; 3. c;t;(f6, f4; 4. 'it;>e5, f3; 5. c;t;(d6). 3. d5?, ~ c7; 3. cJ; e6, h5). 2 .... , h5 3. g6, e4 4.... , cJ;l h4; 5. c;t>f5. 5. h5, con tablas. ~ g6, 'itt g4;
W . Korolkov, 1950
Gorgijev, 1928
Tablas
Tablas 1. g4+! Pero no 1. h4?, c5!; 2. g4+, w h4; 3. w g6, Wg4. 1.... , ~ g5! El negro no quiere oponerse al avance del rey contrario; si 1.... , w g4; entonces 2. w g6, c5; 3. h4! 2. w g7!
20
1. e6, h7 2. cJr>f5!, ~ g8 3. cJr> g6, d5! 4. Wf5, h5 5. cJr>e6!, ~f8 6. ~ d5, h4 7. ~ e4, con tablas.
Blancas ganan 1. a4, ~ b3! 2. a5, w c3! El rey negro se mueve según la idea de Reti. Se acerca a su peón pero se dirige también hacia el contrario (2 .... , Wc4; 3. a6, w d3; 4. a7, f2; 5. a8t'V, f1 ! ; 6. ,1, a6+). 3. 'iPg1! 21
En este caso el blanco frustra las intenciones del contrario; nada sirve 3. a6?, a3?, c;i;> g5; 2. ~ b3, ..t>f4; 3. h4, ..tff3; 4. h5, ..tte4; 5. h6, ~ d3, Y la maniobra Reti salva al negro. 1. ..., a2! 2. Wa2, 'it;g5 3. Wb1!! i Nuevamente el tema anti-Reti se muestra más fuerte que la maniobra Reti! 3. ..., Wf4 4. h4, c;i;>f3 5. h5, 'i.t7e4 6. h6, 'it;ld3 7. 'it;lc1!
y los esfuerzos del negro carecen de éxito.
Al término del capítulo conoceremos todavía algunos ejemplos más con peones, pero ahora nos dedicaremos a ejemplos con otra clase de fuerzas. El lector podrá convencerse, a partir de esto, de que la maniobra Reti no sólo es posible en los finales de peones.
1...., b3 2. 3.
liJd5, b2 liJc3, ~ b3
4. ~ d3, c4+ 5. ~ d2 y el blanco gana. W. Achontov, 1950
Comenzamos con una posi ción que fue ideada por el fundador de este tipo de maniobras.
R. Reti, 1922
Tablas
Blancas ganan El rey blanco tiene que participar en la liquidación de los peones enemigos pero no se da prisa en ello. 1. ~ e4! La sencilla 1. h5, 'i.tr> b3; 6. ~ d4 , al negro le falta , como de costumbre, un tiem po.
2.
lüa4
(2. lD c4?, b5; 3. b3, lD c5).
2. ..., b5 3. i.c3!, rJt>a4 yfinalmente hacia el modelo Reti: 4. e6!. 3. ... , c8" ¡Una jugada fantástica! En lugar
de ir a la caza del peón contrario, el rey blanco se aleja de él. Pero no por mucho tiempo. 1.... , b5 2. cotd71, b4 3. ~ d6!, ~f5 4. ~ e5!, ~ c8 5. ~ d4 y el rey se encuentra dentro del cuadrado. Entre la clásica posición de Reti y la de Sarytschev se puede encontrar cierta analogía . En la primera el "inalcanzable" peón se encuentra muy alejado del rey enemigo y, desde la perspectiva estética , esto es indiscutible. En la segunda posición el rey se encuentra cerca del peón negro, pero no puede acercarse a él directamente: 1. ~ d6 , ~f5 ; 2. ~ c5, ~ c8; 3. cotb6, e4; 4. e2! La última sutileza. después de 9. ~ e1(e3), el peón negro es coronado con jaque. 9. ... , c4
10.
a4 tablas.
Realmente un precioso estudio. Puede resultar más interesante en la medida en que E. Pogosjanz consiguió prorrogar la solución mediante varias jugadas, a pesar de la existencia en el tablero sólo de peones. Sorprendente, pero el blanco caza, por así decirlo, al peón libre con trario, una jugada que es explicada en la maniobra de Sarytschev. 1. ... , h5 2. \t>f6! ... pero ahora comienza la persecución a lo Reti. 2...., h4 3. ~ e5!, 'ittc6 4. rJ;>f4, 'ot>b6 5. \t>g4, c,t>a5 6. ~ h4, 'Ot>b4 En diferencia con la posición a la jugada 1. \t>f6, el rey blanco no se encuentra ahora en h7, sino en h4, lo cual resulta esencialmente importante. 7. ~ g3!! La descuidada 7. 'ót;> g4, pierde: 7 . .. ., ~ c4; 8. ~f3, ~ d3!; 9. a4, c4; 10. a5, c3; 11. a6, c2; 12. a7, c1 ; 13. a8 , h1+. 7...., ~c4 8. 'ót;>f21 Pero no 8. ~ f3?, 'ót;>d3; 9. a4, c4; 10.
E. Pogosjanz, 1985
Tablas 1. be! Sorprendentemente los peones son desligados, ya que después de 1. a4, cb; el negro ganaría fácil mente. 33
1. ... , ~ b6!! En el caso de 1. 'it' a6, le salva al blanco la maniobra de Reti: 2. ~ h7 , ~ b6; 3. 'it'g7, f5; 4. c;t>f6, f4; 5. 'it>e5, f3; 6. 'it'd6, f2; 7. c7, tablas. 2. a7!! Una jugada de desviación . Se amenazaba 2...., ~ c6. 2. ... , ~ a7 3. c;t>f7!! Bonita resulta también la temáti camente llamada captura equivocada: 3. r;3;> h7?, f5; 4. g6, f4; 5. 'lt;>f5, (5. ~f6, ~ b8!, todavía un detalle), 5.... , f3; 6. ~ e6, f2; 7. c7, f1 u ; 8. c8 , " h3+. ¡Anti-Reti, ejecutado a la manera de Duras! . 3...., ~ b6 Por fin tenemos ante nosotros la posición de Sinar. 4. ~ g7! Y el rey comienza con elló a reali zar el milagro. En este estudio están asociadas casi todas las ideas que nosotros hemos tratado en el presente capítulo. Para terminar vayamos todavía a dos interesantes episodios sacados de la práctica de torneo. Si bien uno ocurrió en una sesión de simultáneas y el otro en una partida por el Campeonato del Mundo, lo cierto es que en ambos se muestra significativa la particular geometría del tablero. Por lo demás guarda relación también con estos ejemplos otra circunstancia. ¡En ambas partidas tomaban parte auténticos reyes del ajedrez, Campeones del Mundo! 34
El primer acontecimiento su cedió a comienzos de siglo y es relatado en las memorias de W. Neistadt. Se trata de una sesión de simultáneas que el entonces futuro Campeón del Mundo dio ante los miembros pertenecientes al Círculo ajedrecístico de Moscú.
A. Alekhine - W. Neistadt Moscú, 1914
Como respuesta al salto de caballo liJ h7-f8, Alekhine jugó al instante 1. e6. Su adversario en un principio tenía intenciones de tomar el peón, pero cuando el jugador de las simultáneas regresó a la mesa, decidió cambiar de opinión (¡la victoria sobre el prestigioso maestro se encontraba ciertamente tan cerca!), y tomó el peón con el caballo: 1.... , liJe6. Alekhine sonrió y tomó el caballo del tablero: 2. liJe6.
"¿Con qué capturo yo?", pensó Neistadt. "Seguramente con el peón". Pero cuando el maestro se encontró nuevamente en el lugar (en este momento él había termi nado casi todas las partidas), el negro tomó mecánicamente con el alfil. Alekhine le propuso amablemente de tirar atrás la jugada, pero él declinó la oferta con orgu llo. "Lástima", dijo el gran maestro con cierto aire de misterio e inclinó el rey. Neistadt no podía entender lo que Alekhine lamentaba y después de la sesión de simultáneas se le acercó vacilan te y le pidió que le pusiera al corriente de su secreto. "Con mucho gusto", accedió Alekhine, y las piezas fueron nuevamente colocadas. "En esta para mí desagradable posición ", se di rigió él a Neistadt, "yo pensé que después de 1. e6, usted tomaría enseguida con el peón ": 1.... , fe; 2. tt:Je6, tt:J e6; 3. de, ~ e6; o en el caso contrario, siguiendo lo sucedido en la partida, 1...., tt:J e6; lo que haría en la siguiente jugada: 2. tt:Je6, fe; 3. de, ~ e6. En ambas variantes se produciría esta posición. (Ver diagrama)
"¿ Por qué usted, en el fondo, no ha capturado en e6 con el peón?", p reguntó Alekhine. "Yo en el fon do tenía previsto esto", respondió el participante en la sesión de simultáneas. "Pero entonces pensé, ¿qué diferencia hay en ello? Cuando miro ahora la posición
me doy cuenta que la captura con el peón era todavía más fuerte". "¿Qué dice?", preguntó Alekhine sonriente. "¡Sentémonos un minuto en el tablero!". El joven personaje que había ganado al gran maestro, se sentía sorprendido, pues, según su opinión, el rey blanco no tenía ninguna posibili dad de alcanzar el cuadrado correspondiente al peón negro lateral. Alekhine sonrió y con un suave gesto de mano movió su rey: 4. ~ g3. A partir de aquí se ejecutaron todavía dos jugadas más: 4 . ... , a5; 5. c;f¡>f4, a4; 6. ""e5!, y el jugador de las piezas negras reconoció que el avance de su peón no consigue nada: 6 .... , a3; 7. ~ e6, a2; 8. f7, y tablas. Caso de que el alfil marche sobre alguna de las casillas a2-g8, entonces después de 7. c;.t>d4, a3; 8. c3, a2; 9. ~ b2, el rey alcanza al peón. Sobre el tablero se produce una posición de tablas teóricas.
35
Los sorprendidos espectadores se encontraban alrededor de la mesa en la que había tenido lugar la discusión entre el jugador de las simultáneas y su rival. Se encontraban como si hubieran asistido al nacimiento de un milagro. El rey blanco se había acercado al peón negro de una manera incomprensible. ¡Así Alekhine ya había aplicado en la práctica, siete años antes que Reti, su sorprendente maniobra! En tanto él se movía intensamente en círcu lo, indicó a los oyentes no sólo la ingeniosa idea en base a la geometría del tablero, sino que además dio su refutación: 4. c;.t¡. g3, c8; 6. c7! , ..t>c7; 7 . ..t> b5, w d7; 8. c6+, bS; 11. ttJd6+, f5l; 7. 97, g8l ; 8. ll f6+, coP e4; 9. ' b7+, d5; 10. f3, 'iPd4; 11 . b6, 'Ot>c3; 12. ll c6+, o bien 7 . ... , ll h3; 8. ll f6+, coPe4; 9. g2+, 'Ot> d4; 10. n d6+, 'Ot>c3; 11. h3+, b4; 12. II b6+, 'iPc4; 13. b3+. I
Tal como pueden ver, la desventaja material del blanco exigió de éste grandes esfuerzos. Hubiera sido interesante saber si Capablanca habría sacrificado la torre en el caso de que se le hubiera presentado esta posición en una de sus partidas. Merece la pena, por ello, citar una máxima de él, que guarda relación directa con el tema de nuestro libro: "La solución de estudios es un entrenamiento muy útil para el jugador de ajedrez. No sólo ejercita la
imaginaclon, sino que se llega con ello, además, a posiciones idénticas a las que ocurren en el juego práctico".
A. Alekhine, 1933
En el trabajo de su libro dedicado al Torneo de Nueva York, el cuarto Reydel ajedrez,A.Alekhine, analizó cuidadosamente todas las partidas y descubrió muchas interesantes y sorprendentes variantes. Así menciona que en el encuentro Marshall -Reti, que finali zó en tablas, pudiera haberse producido, junto al inexacto juego del negro, un ejemplo de estud io. A. Alekhine, 1924
Blancas ganan Aquí conduce a la victoria el avance del peón a. Pero esto sólo fun ciona si se entrega la torre de forma gratuita.
1. a6, l:t h4; 2. l:t d8!, ~ d8; 3. a7, y el peón se convierte en dama. También otros intentos del negro para frenar el avance del peón libre están condenados al fracaso: 1... ., l:t g1; 2. a7, : a1 ; 3. l:t a3! , ba; 4. a8 u , ab; 5. b7+, Y 6. b2.
1. g5, ~ c6; 2. c;i¡l e5, ~ d7; 3. c;i¡l d5!, ~ d8;
4.
~ c6,
y el blanco gana.
El siguiente estudio representa una posición retocada a un final de partida sucedida en una sesión de simultáneas del Campeón Mundial.
En el juego práctico, Alekhine produjo en el tablero una gran cantidad de estudios altamente expresivos. A continuación un espectacular ejemplo. A. Alekhine - Colle París, 1925 (Ver diagrama)
49
1. ¡Vd7!, J:t d7; 2. J:t eS+, ~ h7; 3. J:t ccS. La dama y el peón g han dejado sin salida a su propio rey, y esto obliga al negro a abandonar. El quinto Campeón del Mundo en la historia del ajedrez, M. Euwe, dedicó mucho tiempo a la investigación teórica del final de partida. Entre sus hallazgos son numerosos aquellos que guardan perfectamente unas características de estudio. Pero también compuso verdaderos estudios. M. Euwe, 1940 Blancas ganan (Ver diagrama) Un final teórico con un remate de estudio. 1.a4,a5;2.c4,c5;3.b3,b6;4.h4, e5; 6. ~ g4, ~ e4; 7. h5, f5+; S. ~ h31!. Una brillante maniobra cuya idea 50
ya había sido publicada con anterioridad por Grigorjev ... S.... , f4; 9. h6, f3; 10. h7, f2; 11. ~ g2, Y el blanco gana. Cinco años después, esta misma idea fue realizada por Botvinnik de manera másespectacular(véase pág. 54). M. Euwe, 1924
Blancas ganan 1. '1t> gl!, '1t> g7; 2. ~fl, q;f7; 3. ~ el, ~ e7; 4. '1t>f2, '1t>f6; 5. '1t>e2, 'it>e6 A 5.... , )f¡> g6, decide 6. ~ d2!, Y el blanco se abre paso en el flanco de dama. 6. f4, ef; 7. gf, gf; 8. Wf3, ~ e5; 9. g5, Wf5; 10. g6, ~ g6; 11. f3; 7. '1t>d3, ~ g2; 8. ~ e2, el!. Malo es 2. : d5, lI f5; 3. lI d2, : b5!, o bien 2. lI b7, ~f5; 3. :t b5+, ~ e4; 4. lI h5, '1t>d4; 5. lI b5, Wc4; 6. l:t b8, Jl f5! ; 7. e3, Wc3; 8. lI c8+, 'it> b2; 9. l:t h8, Wc2; 10. l:t c8+, Wb1; 11 . 1I h8, b2; 12. h5, II f3+; 13. d7; 9. f3, ~ d6; 19. ll e2!, U hl; 20. f5, I! f1+; 21. w g4, ll f2; 22. ll e', g2; 23. ll g1!, Y el blanco obtiene, a pesar de todo, tablas. 5. l:t h5!, ll c3; 6. n b5, f3; 7. ~d2, ll c2+; 8. ~ e3, b2; 9. c;t;>f4, ll c4+; 10. We3, ll c2, tablas. ~ e4,
M. Euwe, 1956
contribución en el campo de la composición ajedrecística. Diez de los estudios compuestos porél tuvieron una gran popularidad, todos ellos basados en situaciones de partidas "en vivo" . iSU primer trabajo de composición lo publicó el posteriormente Campeón del Mundo cuando sólo era un colegial de 14 años! M. Botvinnik, S. Kaminer, 1925
Blancas ganan A pesar de los amenazantes peones enemigos, el blanco consigue ganar. 1. lbc5, ~ d5; 2. ttJb7!, c;t;>e5; 3. ttJd8!, g4; 4. ttJb7, ~d5; 5. ~f4, c;t;>c6; 6. ttJ c5, ~ d5; 7. ttJe4! Esta astuta maniobra de caballo lleva al negro a Zugzwang. 7.... , h4; 8. ttJf6+, w c4; 9. ttJ g4, c;t;>b3; 10. ttJe5, ~ a3; 11. ttJ c6, y el blanco obtiene una posición ven tajosa . El sexto Campeón del Mundo, M. Botvinnik, ofreció una gran
52
Blancas ganan 1. g4+, c;t;>h4; 2. j.h6!, ~ h6; 3. . h2+, g5; 4. I d2+, ttJf4; 5. ~ d8, mate. M. Botvinnik, 1939 Blancas ganan (Ver diagrama) Esta posición resultó del análisis correspondiente al final de partida entre Lowenfisch - Kotov del XI Campeonato de la URSS. El blan-
M. Botvinnik, 1941
co puede, naturalmente, capturar el peón d, pero esto sería "una falsa pista" : 1. ~f5, ~ b6; 2. ~ e5, ..tc6; 3. ~ e6, ~c7!; 4. ~ d5, ~ d7; 5. ~c5, ~ c7. Ahora el peón de a6 cubre la casi lla de b5 y después de 6. d5, ~ d7; 7. ~ b6, ..td6; S. 'iPa6, ~ d5; 9. 'iPa5, ~ c6, tenemos sobre el tablero una posición de tablas. Para con seguir el objetivo, es necesaria una maniobra envolvente en el campo enemigo, de cuyo resultado el peón de a6 juega un papel negativo. 1. ..tf5!, b6, (1 ...., ~c6; 2. ~ e6; 1... ., ~ c7; 2. ~ e5), 2. ~f6!, b7; 3. 'iPf7!, ~ b8, (3 ... ., ~ b6; 4. ..teS, ~ c6; 5. ~ dS, lleva a la variante principal). 4. e6, ~ c7; 5. ~ e7!, ~ c6; 6. ~ d8, ~ d6; 7. 'iPc8, ~ c6; 8. ~ b8, ~ b6; 9. ~ a8! . y el negro pierde porque su propio peón le estorba para mantener la posición.
Blancas ganan 1. e8 +! En el caso de que el blanco jugara 1. ll c2, sólo se conseguirían tablas: 1.... , ll e4; 2. eS¡f+, ll eS+; 3. ~ eS, ~f5; 4. ll g2, g4; 5. ~f7, ~f4; 6. ~ g6, g3; 7. I
~ h5, ~f3.
1.... , ll e8+;2. ~ e8, ~f5;3. 11 g7!!, g4; 4. ~f7, ..tf4; 5. ~ g6!, g3; 6. 'iPh5, ~f3; 7. ~ h4, g2; 8. h3, y el peón no consigue llegar. M. Botvinnik, 1944 Negras juegan, blancas ganan (Ver diagrama) El estudio se originó 'del análisis de la partida Boleslavski - Bondarevski (Moscú, 1941). El blanco amenaza sacrificar su caballo en g7 y avanzar así su peón lateral hasta h6, de forma que el peón g ya no pueda ser detenido. El negro sólo tiene una respuesta. 53
1.... , ~ d2; 2. lLlf3 Ahora se originan dos variantes diferentes entre sí: 2 .... , ~ c3; 3. h4, ~ b2; 4. h5, ~c3; 5. lLl h4, (5. g6+, ~ e6!, con inten ciones de dirigirse con el rey a g4), 5 .... , ~ d2; 6. g6+, (6. h6, g6!), 6 .... , ~f6; 7. lLlf5!!, c;t>f5; 8. ~ g7, c;t> g5; 9. 'it> h7, ~ c3; 10. h6, etc. O bien 2 .... , ~f4; 3. h4, ~ g3; 4. h5, ~f4; 5. g6+, 'it>f6; 6. lLle5!, ~ e5, (6 . ... , c;t> e5;7. 'it>g7), 7. h6, yel peón se transforma en dama.
como los preparativos, tienen un mayor valor artístico. 6.... , f4; 7. h6, f3; 8. h 7, f2; 9. ~ g2, Y todo está terminado. M. Botvinnik, 1949
M. Botvinnik, 1945 Blancas ganan 1. ~f2, 'it>f5; 2. g4, ~ e4; 5. h5, f5+; 6. 'it>h3! ! Una treta espectacular que a nosotros ya nos es conocida de una posición de Euwe que tratamos con anterioridad. En este caso la posición inicial de las piezas, así 54
Blancas ganan 1.e7, :t e4;2. :t c5+, ~ a4;3. 11 f5!!, e2; 4. lH 4, e1 ; 5. e8 +, y el blanco gana.
M. Botvinnik, 1952
Blancas ganan 1. ~ d5, ~f8 . Después de 1. ~ h6; 2. ~ e5, ~ g7; 3. ~ d6, ~f8; 4. ~ d7, f2 (5. ~ e1, .tf8; 6 . .tf8, ~ e3, y el rey elimina los peones), 5.... , .tc5+!; 6. c5, e1 I +!; 7. ~ e1, llevaría a un ahogado. 4.... , e2+. A 4.... , .tc1, decide 5. .th6, .td2; 6. ~ g2, .te1; 7 . .tc5, e2; 8. .tf2. 5. ~f2,e1 1 +!;6. e1, f3, h5; 14. w g3, g4; 15. g3. Y ahora el izquierdo ... 16.... , 'it>b8; 17. a6, C¡P c8; 18. b7+, Wc7; 19. b6+, Wb8; 20. 'it'g2, h4; 21. t>f2, g3+; 22. 'it'f3, g4+; 23. 'it>g2, h3+; 24. 'it'g3, ¡y la banderilla del negro cae! El reloj ha marcado en forma de tic-tac toda la partida ... El octavo Campeón del Mundo, M . Tahl, compuso el único de sus estudios en colaboración con un compositor de ajedrez cuyos trabajos en nuestro libro son numerosos. M. Tahl, E. Pogosjanz, 1969 Blancas ganan (Ver diagrama)
Blancas ganan La posición inicial no guarda hasta ahora ninguna asociación con un reloj, menos todavía con un reloj de ajedrez. Más adelante ... 1. b4!, f2; 5. f3+, gl; 6. ttJe2+, 'ii> h2; 7. fl, ahogado. Ahora se originan variantes conocidas: 4.... , f2; 5. ttJc2+, 'ite2; 6. h5+, o 4.... , ,.pd1; 5. e4!, e1+; 6. ~ b3, I f2; 7. b1+, 6 .... , d2; 7. h1+, ganando. I
4.
Muchas partidas y finales de M. Tahl pudieran servircomo base de inspirados estudios. La siguiente posición representa de por sí, ya , sin ninguna corrección, un verdadero estudio. M. Tahl - V. Kortschnoi Moscú,1968 (Ver diagrama) En esta situación el blanco jugó 1. h3, Y después de 1. ... , f6; 2. ..t>f4, e5+; 3. ~ e3, a6; 4. b3, 'ii> e6; 5. ef+, f5; 6. f3, ~ e6; 7. g4, f5; 8. gf+, 66
ii
'itf5; 9. h4, 'ii>f6; 10. '1P e4, ..t>e6; 11. a3, b5; 12. cb, ab; 13. '1Pd3, ,.pd6, la partida finalizó en tablas. Este final de peones fue sometido por algunos grandes maestros a un cuidadoso análisis y finalmen te se pudo demostrar que Tahl podía haber ganado de una manera propia de un estudio. El objetivo principal consiste, para el blanco, en alejar al rey contrario por medio de h2-h4, ocupar la casilla de f4 con el propio rey y después de f2-f3 y g3-g4, crear un peón libre. 1. e5, f6!. Sería malo 1.... , h4; 2. h3, a6; 3. a3, a5; 4. a4, ~ g6; 5. f4, 'it h5; 6. b3, hg; 7. fg, 'itr'g6; 8. g4, fg; 9. g4, etc. 2. h4+, e6 (2. ~ e6, c5), 2 .... , h5; 3. ~ e7, h6!! , y se hace claro que no existe ninguna manera de evitar la jugada 4.... , II b4, después de lo cual se consigue la posición de ahogado. Tablas. Interesante final el que presentamos a continuación, que podría tener como base el estudio precedente.
T. Petrosian - A. Karpov Moscú, 1981
das jugadas han dado, con frecuencia, origen a ideas de estudio. Nosotros presentamos la obra de cada uno de estos Reyes por medio de algunos episodios de la praxis de torneos. ¡¿Quién sabe si quizás utilizará el lector alguno de estos ejemplos para componer un interesante estudio?! El décimo Campeón del Mundo, B. Spasski, decidió, en una ocasión, una partida muy pronto a manera de estudio .. B. Larsen - B. Spasski Belgrado, 1970
El encuentro transcurrió muy interesante y, tal como parece, pudo tener un digno final :
1. ... , g4; 2. n d5, gf; 3. :t e5, 't\Ye5!; 4. be, fg. Una posición realmente merecedora de salir en cualquier libro ilustrado. La coronación del peón negro no se puede evitar. Sin embargo, la posibilidad de estudio 3 .... , c5!, fracasa igualmente de una manera también propia de un estudio 3. g4!. Después de 3.... , ed . 4. gf, el negro ya tiene que temer unas tablas. La partida tuvo, por lo demás, el mismo resultado: 1. ..., ll d4; 2. I d4, • c2; 3. hg, i..d3, Y los adversarios firmaron el tratado de paz. Los cuatro últimos Campeones del Mundo - Spasski, Fischer, Karpov y Kasparov- , no han sido autores, hasta la fecha, de ninguna composición, pero sus parti-
1. .i.
-
.l E,E, _
.1 _ ji El negro ha sacrificado ya una figura , una segunda se encuentra atacada y una tercera es ahora sacrificada .
1.... , ll h1!!. En la partida esto correspondió a la jugada 14.
2. 11 h1,g2!;3. n f1, h4+;4. c;t,(d1, gf +. El blanco abandona. 69
B. Spasski - B. Antoschin Sochi,1965
gana con 10. hg, ~ g5; 11. II b4, f5; 12. d6, f4; 13. gf+, 'Et>f5; 14. ~ c7, Il b7+; 15. b7, h4; 16. c6, h3; 17. Il b3!, 'Et> g4; 18. ll h3. 10. f6, f4; 11. gf, 'Et> h4; 12. 'Et> g6, 'Et> g4; 13. f5, h4; 14. f6, h3; 15. f7, h2; 16. n b1, ll b7; 17. n b7, h1 w. ; 18. l:t b4+, ~ h3; 19. f8~, I g2+; 20. h7, 'f:1c2+; 21. 'Et>h8, ~c3+; 22. ~ g8, g3+;23. g7.Elnegro abandona. B. Spasski - M. Botvinnik Moscú, 1966
En este tipo definales, el reyva en ayuda de su peón libre y abandona a los peones del otro flanco. El destino de la partida se decide, frecuentemente, por un solo tiempo y la victoria -cuando ésta es posible-, es el resultado de un estudiado camino. 1. ~d4!, IU 2; 2. ll e7!, Il b2 (2 ..... , g5; 3. hg, 1:tf5; 4. II e5, Il f3; 5. n e3, n f5; 6. n b3, 1l g5;7. b6, etc.) 3. ~ c4, ~f6; 4. n e3, f5; 5. II b3!. Bien calculado. El final está perdi do para el negro. 5 .... , l1 c2+; 6. d5, ~ g4; 7. b6, n c8; 8. b7, ll b8; 9. ~ e5!. Impide el contrajuego del negro en el flanco de rey. Los análisis muestran que el negro se puede salvar después de 9. ~ c6, f6; 10. ~ c7, ll g8; 11. b8 , b8; 12. ~ b8, g5. 9 .... , f5. Tampoco ayuda nada 9. ... , g5, porque después el blanco 70
En este enfrentamiento entre dos reyes del ajedrez, el blanco deja escapar una estudiada posibilidad de conseguir tablas en el final. El negro, en el fondo, posee un peón de más y su rey amenaza además con ir a a2 . El blanco jugó por ello 1. tt) c4, para mantener la casilla b2 bajo control. Pero después de 1.... , ~c3; 2. d 1, .i.d4; 3. ~ e2, e3, él cayó en zugzwang, y cuatro jugadas después: 4. tt) a5,
~ b2;
5. ltJc6, ..tc5; 6. ltJe5, ~ a2; 7. ltJd3, ..te7, admitió su derrota. Por contra, el blanco pudo con 1. ltJf1!, haber levantado una fortaleza infranqueable: 1.... , ~ c3; 2. ltJg3!, e3; 3. ~ d1, ~b2; 4. ltJe2, ~ a2; 5 . ..tc2, con tablas. El siguiente ejemplo de una partida del decimoprimero Campeón del Mundo, R. Fischer, es un ejemplo de curiosidad. Ocurrió en un Match de Candidatos ...
tivo. Pero después de 2 . ..tc8!, se hace evidente que el negro fraca sa. A 2.... , ltJf3, decide 3 . ..tb7+, ..t>f4; 4. ..tf3, ~f3; 5. ~ g5, Y a 2.... , ltJ d3, sigue 3 . ..tf5+. Así el negro tiene que consentir en entraren la continuación 2 .... , ~f4; 3. h4, ltJf3; 4. h5, ltJg5, pero 5. ..tf5, ltJf3; 6. h6, ltJg5; 7. ~ g6, le pone en zugzwang y tiene que abandonar. S. Gligoric - R. Fischer Yugoslavia, 1959
• R. Fischer - M. Taimanov Vancouver, 1971
La partida finalizó así 1.... , ll h8;2. ll b8+;3. ~ a4, ll a8+;4. '1t>b3, rI c8! y tablas. Después se demostró que las primeras jugadas de ambos maestros fueron erróneas. La maniobra de torre 1...., II h8, pierde después de 2. ll c7+!, ~ d6; 3. l:t c6+, ..tr>d7; 4. ~ b5, ll b8; 5. l:t b6, tt h8; 6. ll b7+, ~ c8; 7. ~ a6, II h6+; 8. fj;a7, o bien 2.... , fj;d8; 3. ll c5, ~ d7; 4. c5, c;,t>c7; 4. c;,t> b5, c;,t> b7, tablas.
T. Petrosian - R. Fiseher Portoroz, 1958
Adiferencia con la partida, el blanco se encuentra aquí un tiempo por delante, y esto es también decisivo. Nada ayuda al negro 1. ... , c5, por 2. ll d7+, c;,t>c6; 3. l:t d1!, ~ b5; 4. g5, c3; 5. g6, etc. Muchos motivos de estudio se originaron en partidas de los decimosegundo y decimotercero Campeones del Mundo,A. Karpov y G. Kasparov, repectivamente. Y también en confrontaciones entre ellos mismos. Estos estudios serán tratados tanto en el presente capítulo, como en la última parte del libro.
V. Kortsehnoi - A. Karpov Baguio, 1978
Otro interesante final de torres con elementos de estudio. Después de 1. n h1, Fischer consi guió salvarse: 1.... , c3; 2. g5, c5; 3. n d1+ (3. g6, lI g8; 4. f5, c;,t> e5; 5. c;,t>g4, c;,t>f6; 6. tt c1, n d8; 7. tt c3, n d4+; 8. c¡f¡¡ h5, c4; 9. ll g3, It d3!, etc.) 3.... , c;,t>c4; 4. g6, c2; 5. ll c1, c¡f¡¡ d3; 6. f5, II g8; 7. ~f4, C;; d2; 8. tt c2+, C;;c2; 9. c¡f¡¡g5, c4; 10. f6, c3; 11. f7 , tablas. Pero la jugada 1. l:t h7!, habría ganado: 1 .... , e6; 2. n d7+, ~ e5; 3. ll d1, c3; 4. g5, c;,t>e4; 5. g6, e2; 6. tt e1, c;,t> d3; 7. f5, lI g8; 8. 1;> f6; 4. c;t,( d1, ~ e5; 5. a7, y el blanco gana con facilidad. 3. n a2 (3. a7, d2l,3 .... , ll e7! (3 .... , ~f6?; 4. a7) , 4. l:t d2, l:t e6, tablas. Uno de los más interesantes finales de mis enfrentamientos con G. Kasparov por la Corona, se jugó en la novena partida del primer match. A. Karpov - G. Kasparov Moscú, 1984
La existencia del alfil "malo" del negro (los peones a6, b5, d5 Y h5, se encuentran en casillas del mismo color que el alfil), proporciona al blanco una estable superio-
ridad. ¿Pero es decisiva? Después de 46 ...., j.g6, no resultaría fácil destruir la fortaleza . Sin embargo , el negro capturó el peón h: 46. ... , gh4? El cambio de peón facilita (en el caso de que fuera realiza do) la consecución de tablas. Básicamente el avance g3-g4 ya no existiría y para penetraren el campo enemigo sólo le queda al blanco el punto f4. Pero ambas figuras, rey y caballo, no pueden penetrar simultáneamente a través de él. Sin embargo, el blanco encuentra un camino de estudio. 47. ltJg2!!. El negro no pudo prever una jugada tan psicológica como ésta. Por ejemplo, en el análisis casero, ante un cambio en h4, el peón blanco de h ni siquiera es tocado con la mano, en tanto ambos peones g son rápidamente alejados del tablero. La sorprendente maniobra del caballo está ligada a un sacrificio de peón, pero no se tarda mucho en recuperar la igualdad material una vez que ambas piezas han penetrado en el campo enemigo. 47. ... , hg+; 48. e3, ~e4; 4. coPd2, coPb3; 5. e4, a2; 6. e5, b3; 7. e6, b2; 8. e7, b1 ; 9. e8 . Tablas Si trasladamos el peón blanco de e2 a d2 obtenemos un interesante gemelo: 1. ..tr>f5!, ~ c5; 2. c;t>e5!. Abandona la peligrosa diagonal, pero no 2. ~ e4?, c4; 3. ~ e3, b4; 4. d4, b3; 5. \t> d2, ~ d4, Y el negro gana. 2 .... , b4; 3. d4+, \t>e4; 4. d5, b3; 5. d6, b2; 6. d7, b1 ; 7. d8 , tablas. F. Saekmann, 1923 Tablas (Ver diagrama) El blanco no tiene aquí mucha elección, pero puede serfácil caer en un error: 1. w f8?, f6; 2. ~ g8, 'iPe5; 3. rJ;;g7, w d4; 4. f6, 'iPc3; 5.
78
~ e5, \t> b2; 6. rJ;;d4, ~ a2; 7. 'iii>c3, 'iPb1, etc. 1. 'i.t?h8!. En este caso la persecu ción del rey transcurre con éxito: 1.... , rJ;;f6; 2. coP h7!, ~ e5; 3. ~ g6, 'iPd4; 4. 'i.t?f5, 'iPe3; 5. ~ e4, rJ;;b2; 6. 'iii>d3, ~ a2; 7. ~ e2, tablas.
Conviene observar que con tan pequeño material ajedrecístico, como son cuatro piezas, no siempre puede diferenciarse un estudio de un final teórico. Dicho correctamente, un interesante estudio, especialmente con peones, va a parar rápidamente a los libros didácticos de finales. Pero nuestro libro está dedicado a los estudios (si bien, también es cierto que está pensado para el jugador práctico) y por ello nos esforzamos en procurar ofrecer aquellas posiciones cuyas soluciones contienen espectaculares y originales variantes. Siempre se habla de finales de peones, entonces basta, para el
análisis, con la mayoría de los conocimientos normales de las leyes del final: oposición, casillas críticas y casillas conjugadas, regia del cuadrado, etc. El intento por incorporar todos estos cuartetos sobrepasaría enormemente los límites a los que está destinado este capítulo.
do para alejar al rey enemigo a empujones "con los hombros" nos es conocido. Por lo tanto la salvación consiste en una sutil maniobra que nos permita rehuir el desagradable encuentro: 1. g3!, e2; 2. ct>f2!, ~ d3; 3. ~ e1!, We4; 4. d2, b5; 5. e3, b6; 6. b4, tablas.
N. Grigorjev, 1931
Para estudiar el mecanismo del "empujón", al igual que la manera de evitarlo, consideremos otros casos respecto a la colocación del rey. Si el monarca se encuentra, por ejemplo, en c1, la maniobra salvadora también funciona: 1. ~ g3, d2; 2. Wf2, ~ d3; 3. e1, etc. Pero si la posición del rey corresponde a lascasillasd1,e1 o f1 (y el rey blanco se encuentra en h4), la derrota del blanco no se puede evitar: 1. g3, We2!, y el camino hacia la casilla e1 queda cubierto. Pero si el rey negro se encuentra situado en g 1 o h 1, entonces no llega a tiempo al peón enemigo y el blanco gana ya. Por lo tanto, en la presente posición existen tres posibilidades: 1. Que el rey negro se encuentre en a1, b1 y c1, en cuyo caso el blanco consigue tablas. 2. Que se encuentren en d1, e1 y f1, en cuyo caso el blanco pierde. 3. Con una colocación del rey en g1 y h1 gana el blanco.
Tablas
Las intenciones de ir con el rey hasta c7 -la casilla crítica es la del peón de b7-, no proporciona al blanco ningún éxito. En medio de estas cinco jugadas el rey negro llega a a6 y defiende el peón. Es decir, que la ruta de marcha del rey tiene que variarse. Como respuesta a la captura del peón de b6, el blanco tiene que alcanzar b4 para mantener la posición. Pero el movimiento en línea recta hacia esta casilla no es nada útil. 1. g4, c2; 2. ~ f4, ~ d3!, el méto-
Examinemos ahora las diferentes posibilidades de la colocación del rey blanco en la columna h. 79
Si se encuentra en las casillas h 1, h2 Y h3, éste puede evitar, todavía con mayor facilidad la maniobra del empujón del negro. Pero si él en la posición inicial se encuentra en h5, h6, h7 y h8, el asunto va mal. Por ejemplo: 1. c;P g4, '1Pc2; 2. f3, 'Ot> d3!, y el rey no llega a tiempo a la casilla de b4. Si el reyes trasladado, en la posición original, de b1 a a1, entonces el blanco lo consigue: 1. c;!;> g4, c;P b2; 2. c;¡,f3, c;¡,c3; 3. c;Pe2!, etc.
J. Averbaj, 1982 (Basado en N. Grigorjev)
rio se producen unas tablas cuando el blanco puede evitar esta maniobra y consigue salir de la retaguardia. Y esto es un claro ejemplo de una limpia investigación teórica de una clase de finales. La existencia de un peón por cada bando caracteriza, en princi pio, una relación equitativa de fuerzas. Portal razón uno encuentra frecuentemente estudios en los que el blanco tiene que aplicar una artimaña para finalmente triunfar. Este tema aparece en todos los ejemplos siguientes. Cuando el peón blanco se transforma en dama antes que el contrario, asegura la victoria. Pero a veces - también en el siguiente caso- hay que superar una tenaz resistencia. A continuación un antiguo ejemplo de ello. L. Bodding, 1852
Tablas
Según nuestra opinión, el más expresivo ejemplo de cómo se debe de combatir el intento de empuje del negro es: 1. g5, c;¡,b2; 2. ~f4, ~ c3; 3. c;¡,e3!, '1Pc4; 4. c;.t>d2, etc. En todas las posiciones que hemos examinado, el negro gana siempre que consigue cortar el paso al rey enemigo. De lo contra 80
Tablas
1. g7, h3; 2. g8 , h2. El rey blanco se encuentra muy alejado del peón negro y apenas se ven posibilidades de éxito. 3. w g6!, con este método, que evita la amenaza de ahogado, el rey se acerca a la escena principal. 3 .... , c;P g2; 4. ~f5+, w f1; 5. h8, ~ g1;6. a1+, ~ g2;7. a2+, 'it¡¡g1; 8. g4!, h1 ; 9. ~ g3!, Y la dama negra no puede salvar a su rey.
1.... , ~ g2; 2. b4, h5!; 3. ~ g5, g3; 4. b5!. 4. ~ h5? , ~f4. 4.... , h4; 5. b6, h3; 6. b7, h2; 7. b8 ! , ~ g2; 8. b2+, ~ g1; 9. -J;> g4, h1 ; 10. ~ g3, y el mate no se puede evitar. Esta posición de mate fue indicada por primera vez por el teórico italiano del siglo XVI Polerio, por lo que lleva, frecuentemente, su nombre.
A continuación una serie de estudios en los que el negro, aun consiguiendo una dama, no le es suficiente.
L. Prokesch, 1937
N. Grigorjev, 1933
Blancas ganan
Blancas ganan
1. c;Pf5. Pero no 1. a6?, h3; 2. a7 , ~ g1; 3. a8 , h2, con tablas. 1.... , h3; 2. ~ g4, w g2; 3. a6, h2; 4. a7, h1 5. a8 +, 'it¡¡ g1; 6. ~a1+, ~ g2;7. b2+, -J;>f1;8. c1+, c;.t> g2; 9. d2+, ~f1; 10. d1+, ~ g2; 11. ¡Ve2+, ~ g1; 12. w g3. y de nuevo nos encontramos con, la antes comentada, posición Polerio. I
1. w f6. Después de 1. b4, h5; 2. b5, h4; 3. b6, h3; 4. b7, h2; 5. b8 , ~ g2, el blanco, a diferencia del ejemplo anterior, no está en condiciones de tejer una red de mate.
;
I
I
81
S. Birnov, 1930
Blancas ganan 1. We2!. Después de 1. f5?, a5; 2. f6, a4; 3. f7, a3; 4. f8 , a2; 5. a3+, 'iP bl, resultarían unas tablas. 1.... , a5; 2. c;i¡>d3, Wb2; 3. f5, a4; 4. f6, a3; 5. f7, a2; 6. f8 I , a1 ti ; 7. b4+, c;i¡>c1;8. d2+, d5, h5; 2. c;i¡>e4, c;i¡>f2; 3. c;i¡>f4, c5. 3. a4, 'it>d3; 4. a5, c5; 5. a6, c4; 6. a7, c3; 7. a8 , c2; 8. d5+!. Pero no 8. e4+!, ~ d2; 9. ~d4+, ~ e2; 10. c3, dl; 11. I d3+, '>Pc1; 12. 'iPd4, '>P b2; 13. e2, ~ a1; 14. c2, ahogado. I
8 .... , 'itte2. Si 8 .... , We3, entonces 9. ~ g2!, c1 ; 10. ~ g5+. 9. ~a2!, ..t>d1; 10 . ..t>d4, c1 ; 11. '1t> d3, y el blanco gana.
K. Feiter, 1939
En las posiciones de Polerio y Lolli, el rey cae en red de mate en una esquina del tablero, donde se ve estorbado por su propia dama. A continuación tienen ante ustedes un caso curioso en el que, tras la aparición de dos damas en la octava línea, el rey, pese a encontrarse lejos de la esquina, es amenazado de mate.
A. Mandler, 1938 Blancas ganan
Blancas ganan 1. Wd6!, 'lt.fa3; 2. Wc5, ..t>a4; 3. f4, b5; 4. f5, b4; 5. Wc4!. No aporta nada 5. f6?, b3; 6. f7, b2; 7. f8 , b1 ; 8. a8+, ~ b3; 9. b7+, ..t> c2. 5 .... , b3; 6. ~ c3, ~a3; 7. f6, b2; 8. f7, b1 ; 9. f8 +, ~ a4; 10. a8+, con ganancia de dama. I
Con sólo un peón uno de los bandos puede ganar si éste se convierte en dama (o torre). Pero, a veces, es más importante inducir al rey enemigo a una casilla mortal. 1. ~ g5, b5; 2. ~f4, ..t>e2; 3. 'itte4, 'ittd2; 4. Wd4, 'ittc2; 5. ~c5, ..t>c3. Parece como si el negro se fuera a salvar por medio de la maniobra de Reti, i pero no! 6. h5. Y el blanco gana porque su peón entra en jaque. Aunque el peón blanco ya haya sido coronado en dama, en muchos casos en los que el peón negro se encuentra a un solo paso de la coronación en las columnas a, c, f y h, la posición se muestra como tablas. Incluso pueden producirse dificultades en casos en los cuales el peón enemigo no ha 83
alcanzado todavía la penúltima fila. E. Pogosjanz, 1981
.l
Blancas ganan
Blancas ganan 1. h5!. Después de 1. 'ót>c6, f5; 2. 'Wt;l d5, salva al negro la maniobra Reti: 2.... , g2!; 3. ~ e5, 'it> g3!; 4. h5, f4, etc. 1. "" f5; 2. h6, f4; 3. h7, f3; 4. h8 +, 'it>gl. El peón de alfil en la segun da fila garantizaría al negro las tablas, por lo que el blanco tiene que impedir su avance. Esto no es posible sin dar jaque, pero 5. 'ti'g7+, '01;1f11, o 5. tia1+, 'it> g2; 6. g7+, '01;1fl!, deja escapar la victoria, pues la dama no está en condiciones de poderse acercar al peón enemigo. 5. t g8+!!, fl; 6. c4+!, y el objetivo se alcanza.
1. Dobias, 1926 84
1. d4!. No es jugable 1. '01;1 d5?, b4; 2. 'ót> d4, b3; 3. f4, 'it>c2!; 4. ~ e5, c;t>d3; 5. 'i.tt>f6, 'Wt;le4, ni tampoco 1. f4?, c4; 2. c;t>e5, 'ót>d3; 3. f6, c;t>e4. 1.... , 'i.tt>c6; 2. 'i.tt>e5!, ~ c5; 3. f4!!. Pero no 3. ..t;>f6?, d4; 4. g6, c;t>e4 o 3. f3?, ~ c4; 4. c¡f¡>e4, c¡f¡>c5; 5. f4, c;t> d6. 3 .... , ~ c4; 4. 'ót>f6, ganando. Un estudio de extraña sutileza y brillantez.
L. Ljubojevic - W. Browne Amsterdam, 1972 (Ver diagrama) Presentamos aún un interesante episodio de la praxis de torneo, el cual muestra que el cuarteto de peones no es en absoluto un final fácil. En él se pueden equivocar incluso grandes maestros.
Después de 1. ..., f5??; 2. ~ b4!, ambos contrincantes acordaron tablas (2 ...., f4; 3. \tc3). Sin embargo, el gran maestro australiano, que jugaba con negras, podía haber ganado si hubiera estado familiarizado con el siguiente estudio clásico de Grigorjev.
A 1. f4?, sigue 1. ..., 'it>b5, Y el negro, o bien detiene al peón enemigo, o apoya al suyo. 1. ~ d4!, ~ b5; 2. ~ d5!, ~ a6; 3. f4, ~ b7; 4. f5, \tc7; 5. ~ e6, ~ d8; 6. ~f7!, b5; 7. f6, b4; 8. ~ g7, Y gana. Si uno mira la posición inicial, apenas puede imaginarse que sea posible inducir al rey negro a ir desde la cuarta fila a la octava ... Otra variante sería: 1. ... , b5; 2. f4, b4; 3. f5, b3; 4. 'it>c3, ~ a3; 5. f6, b2; 6. f7, b1 'ii; 7. f8'ir"+, seguido de mate o ganancia de dama. Sólo nos queda ahora por comparar los dos últimos diagramas para convencernos de que Browne tenía que haber jugado 1. ... , ~ d5! y se habría originado, con colores cambiados, la misma posición que en el estudio de Grigorjev después de 1. ~ d4!. Por tanto el final estaba ganado para el negro.
N. Grigorjev, 1928
R. Bianchetti, 1925
Blancas ganan
Blancas ganan 85
1. ~ h4!. La natural 1. c;,t> g4? d4, b3; 5. cb, 'iPd6, sólo da tablas. 1.... , Pc5, y el blanco gana. El siguiente cuarteto es uno de los más célebres en su estilo. Si hasta ahora la responsabilidad correspondía exclusivamente al rey blanco, mucho en este estudio depende también del peón.
d5; 11. g4, Y fi n. y para terminar dos "parientes" que son muy populares. Del manual K. Tattersoll, 1910
G. Adamson, 1915
Blancas ganan Blancas ganan 1. ..tc7 . Es insuficiente 1. ~ d7?, ~ b6; 2. ..ti>e6, c;i;1 c5; 3 . ..tf5, ..td4; 4. ..tg6, ..te4, y la posición resulta tablas. 1.... , c;i;1a6; 2. ~ c6. Si el rey se moviera hacia el peón antes de la sexta jugada sólo obtendríamos unas tablas. 2 .... , b6. 5 .... , ~ b6; 6. d5, ~f4; 9. ~ d4, d2; 3. liJc5, c;t;>c3; 4. liJ e4+, 'tt b4; 5. liJf2, 'it;>c4, y el peón se convierte en dama. 1 .... , c2. Tampoco es mejor 1.... 'ttd2; 2. liJeS!, d3; 3. liJf4+!, ~ d2; 4. liJeS !. 2. liJe2+!. Malo sería 2. liJd3+, c3; 4. liJ e4+, 'ttd4; 5. liJg3, ~ d3, etc. 2.... , c2!l. Ahora existen dos varian tes simétricas detablas: 1. ... , 'iPa1 ; 2. ~ c2!, o bien 1.... , ~ c1; 2. ~ a2!.
Torre contra peón
Con una relación tal de fuerzas, las tablas se consiguen sin grandes esfuerzos (siempre, naturalmente, que el rey no moleste a su propio alfil obstruyendo el camino del peón).
Finales en los que se enfrentan torre contra peón contienen, a pesar de la material superioridad de uno de los bandos, una gran cantidad de sutilezas. En ocasiones, el peón puede tener preparada también una desagradable sorpresa.
Nuestra colección contiene una posición que, sin exagerar, puede ser indicada como un estudio.
Ante ustedes se encuentra un estudio que forma parte de los dorados fondos del arte del ajedrez.
E. Pogosjanz, 1979
G. Barbe,F.Saavedra, 1985
Tablas
Blancas ganan
1. ~ b31. La única posibilidad de evitar la 92
1. e7, ll d6+. Después de 1.... , II d2; 2. c8
,
II b2+; 3. a5, el rey blanco "escala" hacia abajo las columnas a y b. 2. 'it;lb5. 2. b7, ll d7, y la torre captura el peón; tampoco la maniobra 2. ~ c5, no consigue su objetivo por motivo de 2.... , l:t d1, seguido de 3 ... ., l:t c1+. 2 .... , ll d5+; 3. q¡,b4, ll d4+; 4. 'it;lb3. La continuación 4. q¡,c3, ll d1; 5. Wc2, se diferencia de la variante principal sólo por la inversión de jugadas. 4.... , l:t d3+; 5. 'it;lc2!. Ahora la torre no puede atacar desde abajo y todo parece llegar a su fin. Sin embargo los emocionantes acontecimientos todavía no se han producido. 5 .... , ll d4!!. Una refinada posibilidad que to davía se le ofrece aquí al negro. A 6. c8 ,sigue el espectacular sa crificio de torre 6.... , ll c4+!, y después de 7. c4, tenemos sobre el tablero una posición de ahogado. Pero las esperanzas del negro no se cumplen. 6. ca ll !!, ll a4. Se amenazaba 7. ll a8, mate. 7. ~ b3!. El espectacular acorde final. El negro o pierde la torre o recibe mate. ¡Cuatro piezas organizaron un verdadero espectáculo de ajedrez! El estudio tratado es uno de los primeros del tema "coronación menor". En toda la literatura
del ajedrez, no se encuentra un final que sea tan ingenioso y rico en ideas como éste en lo que respecta a un material tan limitado. La historia del origen de este estudio es como sigue. En la partida Fenton - Potter, jugada en Inglaterra en 1875, se produjo una posi ción parecida a la de nuestro estu dio. El rey blanco se encontraba en c6, el peón en b6, el rey negro en h3 y su torre en a5. Aquí el blanco consintió en unas tablas sin percatarse que después de 1. b7, ll a6+; 2. c;i;>c5, su rey puede alejarse del peón y este transformarse en dama. Poco tiempo después Zukertort, uno de los más fuertes jugadores del pasado si glo y adversario de Steinitz en el primer (oficial) Campeonato del Mundo, publicó esta posición de la partida e indicó para el blanco el sencillo método de victoria : 2. ~ c5, l:t a5+; 3. Wc4, ll a4+; 4. ~c3, ll a3+; 5. q¡, b2. Transcu rrieron 20 años y cuan do G. Barbé, un profesor de len gua francesa, tuvo noticias de la muerte del maestro de ajedrez Potter, recordó la antigua partida, la analizó y encontró, en una posición parecida (ver diagrama) la sorprendente idea de ahogado c8 , ll c4+!. La posición fue entonces publicada, pero con una indicación algo distinta. El blanco juega y ... el negro hace tablas. El diario en el que apareció el estu dio de Potter cayó en manos de Saavedra, para entonces desco93
nacido jugador, y resolviendo el problema de Barbé, encontró un, para su tiempo, fantástico motivo: transformó el peón en una torre (c8 ll !) y evitó con ello el ahogado. Cuando Saavedra visitó el Club de Ajedrez de Glasgow se hizo célebre entre los miembros del Club por su sensacional descubrimiento. Poco después se hizo famoso en todo el Mundo. ¡Así Saavedra, con una sola jugada fue lanzado a la inmortalidad! Un caso merecedor de atención en la historia del ajedrez. Si bien, en la mayoría de los libros, este antiguo cuarteto con un peón blanco contra una torre negra, se le llama, frecuentemente, Posición de Saavedra, desde un punto de vista justo, este estu dio tiene que ser apreciado como un resultado colectivo que pertenece a dos autores: Barbé y Saavedra. Con el correr del tiempo, este estudio fue frecuentemente perfeccionado y como resultado, en su idea fundamental - coronación del peón portorre-, se produjeron algunos detalles. En el estudio clásico, el blanco tiene que recurrir a una artimaña, pero le resulta fácil conseguir la victoria . Troizki,1895 Blancas ganan (Ver diagrama) El rey negro molesta a su propia torre para que esta alcance la última fila y esta es la causa que lleva a la perdición. 94
1. d7, .l:t g6+; 2. ~ e5!. Lleva a tablas 2. e4, 1I g4+; 4. w e3, 1: g3+; 5. Wd2!. Es atravesada la línea de demarcación . 5 .... , .l:t g2+; 6. w c3, y el rey se dirige hacia c7, desde donde evita más jaques. El cambio de la presente posición, una columna a la izquierda o a la derecha, no altera la situación. Pero si las piezas se colocan dos líneas verticales a la izquierda, entonces se produce una posición de tablas. El juego transcurre así: 1. b7, ll e6+; 2. ~ c5, ll e5+; 3. w c4, ll e4+; 4. ~ c3, ll e3+; 5. w b2, .l:t e2+; 6. f7; 7. lLI h6+, ~f6; S. lLIgS+, y se producen unas tablas posicionales.
1. cotb51. Pero no 1. b67, ~ d3; 2. a5, 'it>c4; 3. a6, ll h6+; 4. ~ b7, ~ b5; 5. a7, l::t h7+; 6. ~ bS, b6; 7. aSlLI+, ~ c6, y el caballo está perdido. Pierde también 1. ~ b47, ~ d3; 2. a5, ~ d4; 3. ~ b5, c;t;> d5; 4. c;t;> b6, ~ d6; 5. a6, II bS+. 1...., cot d3. No aporta nada al negro 1.... , ll h5+; 2. c;t;> b4!, c;t;> d3; 3. a5, ~ d4; 4. a6. 2. a5, l::t h5+; 3. c;t;>b4! ( 3. c;t;> b67, ~ c4), 3 .... , c;t;>d4; 4. a6, ll h1; 5. q;,b5, l::t b1+; 6. ~ c6, y tablas. Los ejemplos tratados son muy interesantes, pero todavía lo es mucho más la lucha del bando más fuerte por la victoria. 95
En el siguiente diagrama el peón negro, protegido por su rey, se esfuerza en ir hacia adelante y el rey blanco no se encuentra en el lugar de los acontecimientos, por lo que no puede ayudar a su torre. En ocasiones el acercamiento al peón está ligado a un juego muy preciso. Una clásica ilustración de ello es el siguiente cuarteto de Reti. R. Reti, 1928
depende de la elección de su negro adversario. 3 .... , 'it>c4; 4. '1P e6!, d3; 5. e5, o 3 . ... , w e4; 4. ~c6!, d3; 5. 'Otc5, y en ambos casos el peón se pierde. Por lo demás, el blanco cae en zugzwang después de 1. ll d1, d4; 2. 'Otd7, d5!, y tiene que conformarse con unas tablas: 3. l:t d2, q;. e4; 4. ~ c6 , 'Ote3, y el negro gana un tiempo decisivo. Si bien el blanco en su primera jugada tiene la elección entre dos continuaciones, esto no disminuye el va lor del estudio. Resulta muy expresivo el hecho de que, a sus 20 años, el gran maestro Spielmann, impresionado por este trabajo, mantuvo la opinión de que si esta posición se originara en una partida, más de un maestro no encontraría la jugada correcta sino que movería la torre automáticamente a d1. Esperamos que para el lector del libro este peligro ya no será una amenaza ...
Blancas ganan
N. Kopajev, 1954 Blancas ganan (Ver diagrama)
La torre tiene que ser retirada y parece que lo mismo da un lugar que otro, por lo que 1. ll d1, se ve como la jugada más natural. Pero precisamente esta jugada dejaría escapar la victoria . 1. 11 d2(d3'!,d4;2. ll d1!. Ahora es el momento en el que la torre va a primera fila. 2 ...., Wd5; 3. b4, b2; 4. ll a8+!, cJ;>b1; 5. ~ b3, c1; 6. ll c8+!, 'it>b1; 7 . .ll c7, 'it>a1; 8 . .l:t a7+!, 'WPb1; 9. lI a2, y el blanco gana. El autor de este estudio se interesó en ver qué ocurría si se cambiaban las piezas una columna a la izquierda o a la derecha. Se demostró que el blanco, gana nuevamente en el primer caso, pero no así en el segundo. Trasladado a la izquierda: 1. cJ;> a6, a2; 2. ~ a5, a3; 3. 'iot;>a4, a 1; 4. b3!, a2; 5. l:t ha, 'it>b1; 6. ll h1, mate. Trasladado a la derecha: 1. 'i&i> d6, 'iot;> d4! (1 .... , ~ b2?; 2. ll ba+, 'i&i> a2; 3. lI ca, 'iiP b3; 4. ~ d5, c3; 5. ~ d4, etc.), 2. 'it>e6+ (2. 'it>c6, e3), 2.... , ~ e3, con tablas. Tampoco sirve la maniobra que en la posición del diagrama se toma como base del éxito: 1. ~ c6, ~ b2!; 2. ~ d5, c3; 3. ll ba+, ~ a2!. Precisamente en esto consiste el detalle: ahora el rey no está obligado a interponerse en el camino de su peón. 4. %l ea, ~ b2, y tablas. E. Pogosjanz, 1978 Blancas ganan (Ver diagrama)
Blancas ganan
Aquí el rey blanco se encuentra todavía más lejos del peón y, sin embargo, lo alcanza. 1. 'it>a7, b3; 2. Wa6!. Despuésde 2. b6?, ~ b4; 3. e4, f3; 4. ..td5, e3; 5. c;Pd4, e2; 6. ~ d3, etc. 1 .... , c;Pd3; 2. ll d5+!, ..t>c2; 3. ll e5, Qr>d3; 4. Qr>f5, e3; 5 . ..t>f4, e2; 6. ~f3, etc.
Dama contra peón Este final de juego ha sido ya investigado de tal manera que resulta difícil encontrar una posición original. Si el peón negro, protegido por su rey, ha alcanzado la segunda fila, entonces el resultado depende -en el caso de un alejado rey enemigo- de la columna en la que éste se encuentre. Si se trata de un peón de caballo o de un peón central, prácticamente no existen posibilida des de tablas. Pero el peón de alfil o el de torre facilitan al negro la posibilidad de salvarse por medio de un ahogado.
Blancas ganan Una excepción a lo dicho en el párrafo anterior es la que nos muestra el presente ejemplo.
1. ~d5+!, ..te3. 2. ... , w c3; 3. ~ d4+, c;P b3; 4. a1. 2. g2!!. La única posibilidad de separar al rey de su peón. 2.... , Qr>d3; 3. g5!, y el blanco gana. y a continuación un digno ejemplo, muy importante para este tipo de finales.
D. Lolli, 1763
N. Grigorjev, 1932
Blancas ganan Si el rey negro se hubiese encontrado en b1, lastablas serían inevitables. 1. ~ b3+, ..ta1!; 2. c2, produciéndose un ahogado.
99
En la situación dada, el blanco se sirve de la circunstancia de que su rey se encuentra muy cerca del lugar de los acontecimientos. 1. b3, 'iPd2; 2. " b2, ~ d1; 3. Wf3!. Al no ser posible 3 .... , c1 W, por 4. d2, mate, el blanco gana tiem po para la decisiva aproximación de su rey. 3 .... , Wd2; 4. \ti>f2, \ti>d1; 5. d4+, Wc1; 6. b4!, .,pd1; 7. e1, mate.
ciones de estudio que exigen del blanco un juego muy preciso. l. Horowitz, 1956
I
Después de 200 años el estudio de Lolli fue perfeccionado ... E. Pogosjanz, 1981
Blancas ganan La desfavorable posición del rey blanco, que se interpone a su propia dama, obliga a un tratamiento cuidadoso. El jaque natural dejaría escapar la victoria: 1. J h 1+, Wb2; 2. b7 +, Wc1!; 3. f6, c2; 4. ~ e5, 'it;>d1; 5. 't!Vd5+, e1 (pero no 5.... , 'iPc1; 6. a2, d1; 7. \ti> d4 c1 ~; 8. \ti> d3!, con mate inevitable, o 5.... , e2; 6. a2, ~ d3; 7. b2, d2; 8. \ti>d4, \ti> d1;9. \ti> d3), 6. r a5+, d1; 7. a4, d2; 8. a2, c3! , con tablas . 1. h6!. Simplemente esta tranquila jugada decide en favor del blanco. Después de 1. d3, c2!; 2. I c2, el negro quedada ahogado. 1.... , c2; 2. ' c1+, ganando. J
Blancas ganan 1. b7+!, ~ c1;2. \ti> g5!,c2;3. ~f4, .,pd2; 4. I b2, Wd1; 5. Wf3! , y a partirde ahora se origina sobre el tablero la antigua posición. Conviene mencionar que, en oca siones, un peón en la tercera fila, forma parte de verdaderas posi100
Si se coloca la dama del blan co en la casilla vecina, se obtiene otro interesante final. E. Pogosjanz, 1982
Blancas ganan 1. ~ a8+! (1 . . c4, c2!), 1.... , ~ b1; 2. b8+!. Tal como sabemos del anterior ejemplo, el blanco después de 2. h1+, ya no puede ganar. 2 .... , ~ c1; 3. f4+!. Y la dama blanca, liberada de la tutela de su rey, captura fácilmente al peón.
Torre contra Caballo La relación de fuerzas de estas dos piezas, es valorada, teóricamente, como tablas, pero si el caballo se desliga de su rey, su destino pende de un hilo. Seirab, S. IX Blancas ganan
Tiene usted ante sí casi la más antigua posición de un final. Un movimiento del negro: 1. ... , tLl c4, y la unión del rey con el caballo se restaura. Pero letocajugar al blanco y éste empuja al caballo al borde del tablero. 1. !t e3!, tLl g1; 2. ~f5!. Después de 2. c;;>f4?, 'i!i> d4, el blanco cae en un curioso zugzwang: 3. rI e1, tLl h3+; 4. ~ f3, tLl g5+; 5. ~f4, tLl h3+, con tablas. 2 .... , c;;> d4; 3. ~f4, \t c4; 4. ~ g3, \td4; 5. !t e1, y el caballo está perdido.
A continuación un ejemplo práctico sacado de una partida del Primer Campeonato del Mundo. Neumann - Steinitz Baden-BadeR,1870 Negras juegan (Ver diagrama) 1.... , ll h7; 2. tLl g4? 101
una con otra, el rey adquiere una posición desfavorable. E. Pogosjanz, 1982
Después de 2. lllg8, II f7; 3. 'iPe8, 1:t f1; 4. lLl h6, n g1; 5. 'iPf8, el blanco haría tablas. Pero después de la imprudente jugada con el caballo, éste ya no consigue unirse con el rey. 2.... , II h4; 3. llle3. 3. lbf2, lIt4+. 3 ...., II e4; 4. lLld1. Otras retiradas no son mejores: 4. lllg2, 'iPf6!, o 4. lllc2, 'iPd5; 5. lLla3 (5. 'iPf7, ..t>c5; 6. 'iPf6, II e2; 7. llla3, ..t> b4; 8. ttJ b1, 1:t b2), 5.... , 'iPc5; 6. lLl b1, Wb4; 7. lb d2, n e2; 8. lll b1, 1:t b2. 4.... , lIf4+; 5. w g7, lIf3. El caballo se encuentra ahora completamente cortado y fácil'de cazar. A 6. lb b2, sucede 6 .... , 'iPd5; 7. w g6, 'ittd4; 8. 'itt g5, lIt1!; 9 . ..t>g4, lI b1; 10. ttJ a4, n b4. 6 .... , ~ e5; 7. 'ittg5, Wd4; 8. 'ittg4, IU 1; 9. lLlb2, lI b1; 10. lLla4, lI b4. El blanco abandona. En el siguiente estudio, al intentar las piezas negras unirse 102
Blancas ganan 1. lI d7+!, We6; 2. lI a7t, lllb6; 3. lI a6; 1.... , 'itt e8; 2. n b71. El siguiente es un popular estudio, donde es significativamente más difícil superar al caballo . R. Reti, 1929 Blancas ganan (Ver diagrama) 1. 'iPf4, lLl h3+; 2. ~f3, lLlg5+; 3. 'itte3!. El blanco ha conseguido su primer objetivo, el negro tiene que jugar ahora. 3 .... , 'iPc2. Menor resistencia ofrecía 3. ... , ~ b3; 4. 'ittf4, lb h3+; 5. Wg4, ttJ g1; 6 . .ll f2. 4. g6, lLlf7; 5. 'iPd4, ttJ d8; 6. 'ittd5,
n
1. 'tfó>g5, lDf3+; 2. ~ g4, lD e5+; 3. f5, lDc4. El caballo no puede ir nunca aliado de su rey; por ejemplo: 3.... , lDf7 (3 .... , lDf3; 4. n d3, lD h4+; 5. ~ g5); 4. .ll d7, 'tfó>g8; 5. ~f6, etc. 4. .ll d4, lDa5 (4 .... , lD e3+; 5. ~ f4, lDc2; 6 . .ll c4, lD a3; 7. ll c5, ~f6; 8. We4, We6; 9. ~ d3, ~ d6; 10. l:t a5). 5. ~ e6, lDb3. A 5.... , lD c6, sigue 6. ll c4, lD a5; 7. l:t c7+, c;f;¡¡g6; 8. ~ d5, y a 6 .... , lD d8+, sucede 7. e5!, lD h3; 7. n f3, lD g5 (7 .... , lDg 1; 8. l:t e3),8 . .ll f4+, ~ c5; 9 . .ll f5, lD h3; 1O. ~ e4+, y 11. ~ e3, ganando. F. Amelung, 1900
Hemos considerado tan sólo algunos ejemplos que ilustran la lucha de la torre contra el caballo. Como usted habrá visto, el análisis de tales posiciones es muy complicado. Este tipo de final fue analizado en profundidad, de manera interesante, por la computadora. ¡El cerebro electrónico descubrió posiciones récord en las que el caballo es cazado después de 27 jugadas!. Computadora, 1979 Negro juega, blancas ganan (Ver diagrama)
Blancas ganan
Mostramos la solución principal de la variante. 1.... , lDe2+; 2. Wd2. La jugada 2. ~ c2, dejaría ya escapar la victoria. 2 .... , lDd4; 3. ~c3. Y ahora 3 . ..t>d3, sería erróneo. Por lo demás, el 103
Torre contra alfil También este final es, teóricamente, tablas, pero, si se tiene suerte, se consigue la rendición del alfil. A continuación dos posiciones clásicas en las cualestriun fa el bando más fuerte. B. Horwitz, J. Kling, 18S1
blanco tiene que hacer todavía muchas jugadas exactas antes de que llegue el momento en el que el caba llo sea cazado. Apenas resulta concebible que un jugador pueda en una partida encontrarlas todas, (¡ni siquiera en el análisis casero!). 3 .... , liJbS+; 4. ..tc4, liJd6+; S. cS, liJb7+; 6. ..tb6, liJd6; 7 . .ll f41. La torre se mueve con menor frecuencia que el rey, pero su reagrupaciQn es precisa. 7 .... , ~ b3'; 8. ~ cS, liJb7+; 9. ~ c6, liJd8+; 10 . ..tbS, liJe6; 11. ll f3+, c2; 12. ..tc4, Wd2; 13 . .ll fS, q.,c2; 14. lI f2+, ~ d1; 1S. d3, lLlcS+; 16. ~ d4, lLlb3+; 17 . ..tc3, We1; 18. ll b21, liJcS; 19. ~ d4, lLle6+; 20. q.,e3, ~ d1; 21 . ll b6, liJgS. Después de 21. ..., lLlc5, 22. ~ d4, lLl d7; 23. l'l d6, el caballo sevuelve inofensivo mucho antes. 22. lI c61, liJf7; 23. ll c7, lLleS; 24. We41 , liJg4; 2S . .ll g71, lLlf6+; 26. ~eS, liJhS; 27. ll gS, y el caballo está perdido. 104
Juegan negras, blancas ganan Se amenaza 1. ll d7, ~ b6 (1 .... , ~c5; 2. l:1 d8+, ~ f8; 3. ll c8); 2. .ll b7, ~ c5; 3. l:1 b8+, ~f8; 4. ll a8, ~ h8; 5. lI f8, mate. El negro sólo tiene una única posibilidad: esconder el alfil (si bien también es cierto que sólo pasajeramente). 1.... , ~ g1!. La misión del blanco consiste sólo en sacar al alfil de su refugio. 2. n f1, ~ h21;3 . .ll f2, ~ g3;4. ': g2, ~ eS (4 .... , ~ h4 ; 5. ~ h5+ o 4.... , ~ d6; 5. ll d2, ~ e7; 6. . ll c2, Y 7. ll c8).
5. l:t e2, ~ d6; 6. l:t eS+, ~fS; 7. ll dS, ~ hS; S. .!l fS, mate. B. Horwitz, J. Kling, 1S51
Blancas ganan Nuevamente el rey negro posee la posición y si él tuviera que jugar, podría salvarse por medio de 1...., ~ eS; 2. ~ e6, w dS; 3. Wd6, q¡,cS. La casilla c6 es para el rey blanco tabú y el primer jugador no está en condiciones de levantar amenazas de mate. 1. It g3, ~ e4. (1 .... , ~ h5; 2. l:t h3, iof7; 3. ll h8+, ~ gS; 4. ~ g6; 1 . ... , ~ c6; 2. ll c3. ~ d7; 3. .!l b3, ~ gS ; 4. ll bS+, h7; 5. ll b7). 2. ll e3, iog2; 3. ll e2!, ~f3; 4. l:t f2! . El alfil es echado de su apartado escondrijo y el blanco gana.
W. Platov, 1906 Blancas ganan
El rey negro se encuentra en la esquina y, si bien no se ve ninguna amenaza directa, a él no le es posible abandonar esa zona tan peligrosa . 1. q¡,f5, w gS (de lo contrario sigue 2. 'iti> g6). 2. ll a4!!. El alfil se encuentra en una posición desfavorable y el blanco utiliza esta circunstancia con gran efectividad. 2 .... , ~ e1 . El negro no tiene elección. A 2.... , ~ e7, o 2.... , ~ f2, decide 3. q¡,g6; pierden también 2. ..., ~ dS, y 2 . ... , ~ g3 . 3. 'iti> g6. Ante usted se encuentra una variación de la primera posición de Kling y Horwitz. 3 .... , f8; 9. l:t f3+, Y el blanco gana. El siguiente ejemplo también ha sido analizado por la computadora. Con un juego exacto el cerebro electrónico encontró que el blanco gana en 18 jugadas. Veámoslo. Computadora, 1979
Blancas ganan 1. cot>f5, cot>g7. A 1.... , .tb8, sigue 2. l:t e8!, .tg3! (2 .... , .tc7, o 2.... , .ta7, serían respondidas con 3. l:t e6+), 3. Il g8, .tf2; 4. Il g6+. Ahora se origina, después de 4. ... , cot> h7; 5. Q¡¡f6, la primera posición de Kling y Horwitz, y después de 4.... , cot> h5, la segunda. Una de ellas se obtiene también con 1.... , .tg3; 2. l:t g4, .te1; 3. l:t g6+. 2. l:t d4!. Una sutil jugada. A pesar de su aparente libertad, el alfil no puede realmente moverse: 2.... , .tb8; 3. l:t d7+, ~ h6; 4. l:t d8, .tc7; 5. l:t c8!, .ta5; 6. cot>f6, Q¡¡ h7; 7. Q¡¡f7, cot> h6; 8. l:t c6+, ~ h7, y en el tablero aparece nuevamente la primera posición de Kling y Horwitz. 2 .... , Q¡¡f8; 3. Q¡¡e6, .tg3; 4. l:t c41. El negro se encuentra ahora en zugzwang: 4.... , .te1; 5. Q¡¡f6, ~ g8; 6. w g6, Wf8; 7. l:t f4+, o 4.... , .t h2; 106
. Blancas ganan 1. Wa51, b7; 2. l:t b3+, ~ a7; 3. l:tf3!, .te2. Después de 3.... , .tc4 (3 .... , .tb7; 4. l:t f7, b8; 5. ~ b6), 4. l:t c3, .tf1; 5. J:t c7+, c;t;> b8; 6. ~ b6, logramos una posición análoga al primer estudio de Kling y Horwitz. 4. l:t f7+, b8. Después de S.... , ..t>dS, el blanco gana el alfil: 9 . .ll c2, ..td3; 10. ll d2!, ..tg6; 11. ll g2!, ..tf7; 12. ll h2, ~ cS; 13. ll hS+, ~ b7; 14. ll h7. 9 . ..t>e6, ..te4; 10. g7; 2. 1l g2+, c3, etc. 1.... , 'it;>a5;2. 'it;>e4! (2. ca 1 , Il c3+!; 3. tLlc3, ¡segundo ahogado!). 2 .... , ll d6;3. tLld4! (3. ca , ll c6+!; 4. c6, ¡tercer ahogado!). 3 . ... , n e6+!; 4. tLlc6+, 'it;>b6; 5. eS l:t ! (5. ca~ , ¡cuarto ahogadol). Todas las dificultades han sido ya superadas, el peón ha coronado en torre y el blanco consigue su objetivo. Como vemos, el popular estudio del siglo pasado, ha sido conti nuamente perfeccionado, pero siempre origina, junto al motivo principal, la coronación del peón en torre, otros elementos de estudio. Es comprensible que toda nueva generación de compositores de ajedrez utilice en su obra artística los mejores logros de los antiguos maestros, tanto lo que con cierne al juego práctico como a la composición . NI! 4 • M. Liburkin, 1925
NI! 3 • D. Gurgenidze, 1976 Si en el cuarteto de Barbe/Saavedra, el peligro de ahogado sólo ocurrió una vez, en el estudio anterior se originó dos veces. ¡Pero en el presente estudio se dan hasta cuatro finales de ahogado!
Un clásico estudio de ahogado: 1. n hS+, ~ g7; 2. ll gS+, ~ h7; 3. ~ a2, II a2+;4. f3; S. ~ d2, fiJeS+; 6. c;t,;>b7, fiJ b6. 4.... , fiJ d8+ (4 .... , fiJ h8; S. f6, fiJ b6; 6. w g7), 5. ~d7 (comienza con la persecución del caballo). 5.... , fiJ b7; 6. ~ c6, fiJ a5+; 7. c;t,;>b5, fiJ b3; 8. c;t,;>c4! (8. c;t,;>c6?, fiJd4+; 9. Wb7, fiJ e6). 8 .... , Wf3; 9 . ..tg5!, w g4; 10. ..te3!, fiJ a5+; 11. c;t,;>b5, fiJ b7; 12. ~ c6, fiJ d8+; 13. 'oPd7, fiJf7 (ahora se entiende que hubiera resultado falso 9 . ..th6), 14. 'it>e6!. El último detalle: si 14. 'i&>c6, entonces 14.... , fiJeS+; 1S. ~ b7, fiJ c4 y 16 .... , fiJ ab6. 14.... , c;t,;>f3; 15. ..td2!, tablas. 127
N2 18 • W. Korolkov, 1947 El objetivo del blanco consiste en cambiar el peón, pero no es tan fácil. 1. ""b2, 1t.a4!; 2. c;t>c3, lüd6; 3. d4!. Inesperadamente, en lugar del cambio, se ofrece un sacrificio de peón. 3 ...., lüb5+; 4. ~ c4, cd; 5. w b4, lüc3. La superioridad material del negro es enorme, pero ahora no puede utilizarla. 6. q;c4 (6. 1t.c4?, Q;f5). 6.... , lüb5; 7. ~ b4, lü c3; 8. e8; 3. d7+, Q;d8; 4. a5, ll b5; 5. a6, ll a5; 6. 1:. d6, ll a3 (un zugzwang mutuo). 7. c;t>f2!. Da tablas 7. ~f1?, ll a2;8. ""g1, g3; 9. c;t>f1, 1:. f2+, y 10 .... , 1:. a2. 128
7 .... , 1:. f3+; 8. e2! (8. c;t> e 1?, g3; 9. ~ e2, lI f2+; 10. ~ e3, n a2). 8 .... , ll a3; 9. ~ e1! (9. ~ d2?, g3; 10. w e2, 1:. a2+). 9 .... , 1:. e3+ (9 .... , g3; 1O. ~f1, l:t a2; 11. ~ g1).
10. ~ d2, 1:. a3; 11. We2, ll a2+; 12. c;t>f1!, XI a1+; 13. c;Pf2!, ll a3; 14. w g2. Finalmente le toca el turno al negro de hacer una jugada. 14.... , ll a2+; 15. c;t> g3, ll a4; 16. c;t>h4, n b4; 17. a7, 1:. a4; 18. ll h6, y el negro pierde la torre. N2 20. W. Korolkov, 1950 El caballo negro se encuentra suspendido en la esquina de abajo, donde, finalmente, muere. 1. 1t.b6!. (Un error sería 1. 1t.e1). 1.... , c;t>h2; 2. 1t.e3 (provisional mente se impide que el rey negro pueda apresurarse en ayudar a su caballo) . 2.... , d5; 3. ~f6, d4. Mediante un sacrificio de peón se consigue romper el bloqueo al rey. 4. 1t.d4, ~ h6; 5. ~f5, ~ h5; 6. ~f4, ~ h4; 7. ~f3!, ~ h3; 8. 1t.e51. Una última sutileza es 8. 1t.g1?, lü g3; 9. hg, ahogado. 8 .... , lüg3; 9. hg, y el blanco gana. N221 • W. Korolkov, 1951 Toda la lucha es coronada con un magnífico mate de caballo, que es la única pieza que queda con vida en el tablero. 1. f7, rt a6+;2. 1t.a3! (2. ~ b2, ll f6) . 2 .... , l:t a3+; 3. 'it>b2, ll a2+!; 4. ~c1!. Se dejaría escapar la victo-
ria con 4. ~ c3?, l:t c2+ !; 5. q.,b4, ll b2+. 4.... , l:t a1+;5. q.,d2, l:t a2+;6. e3, ll a3+; 7. Wf4, ll a4+;8. g5, Il g4+; 9. Wh6!. Si 9. ~ g4?, entonces sigue 9.... , ~f5 + ; 10. ~ f5, Wg7, con tablas. 9 .... , Il g8; 10. tLl e7, ~ e6; 11. fg \ +, ~ g8; 12. tLl g6, mate.
tonces6. ~ h7, f7+;7. ~ hS, I c4; S. ~ d5!, d5; 9. tLl b4+. 6. tLlb4+, ~ a1; 7. tLle2+, ~ a2; 8. tLlb4+. Jaque continuo sólo con el caballo no es corriente. Este trabajo abrió un nuevo tema de estudio con el nombre "Mchedruli", como recuerdo de una danza de jinetes georgianos.
NI! 22. W. Korolkov, 1952 NI! 24 • G. Nadareisehvili, 1970 Continuamos con otro final de torres con un final lleno de sutilezas. 1. n d8+, ~ g7; 2. e7!, d H 'h ; 3. Il d1, Wf7; 4. l:t e1, ~ e8; 5. a4!. Después de 5. l:t e2?, l:t b7 , 6 .... , Il e7, y cambio de torres, el rey entra oportunamente en el cuadrado del peón blanco . 5.... , Il b3+; 6. g2!, I1 b2+; 7. h1!, l:t b4;8.a5, Il b5;9.a6, It b6; 10. a7, It a6; 11. II g1!. La posición final recuerda a la del nl! 19, si bien el método de victoria es muy diferente. NI! 23. G. Nadareisehvili, 1958 Las piezas blancas se encuentran dispersas portodo el tablero, pero al final aparecen todas agrupadas. 1. tLlb4+, '\t>a5; 2. tLl e6+, ~ a4. El rey huye de uno de los caballos, pero ahora el otro pone caza tras él. 3. tLlb6+, a3; 4. tLle4+, a2. La persecución del caballo llega a su fin , ahora es el turno del alfil. 5. ~f3!!, f3. Si 5.... , u fS+, en-
1. ~ e4, ll e5; 2. ~ g81 1, Wb1; 3. It b8!, l:t e1+; 4. Wd2, Il c2+; 5. q.,d1, a1 ~ ; 6. ll b4, n b2; 7. ll e4!, ll e2; 8. ll b4+, ll b2; 9. It e4. Unas tablas posicionales. Uno de los más originales estudios al tema "amenaza continua de mate", (en el presente caso, ll c4-c1 mate). NI! 25. G. Nadareisehvili, 1979 El excampeón del Mundo M. Tahl, dijo en relación a este estudio: "La posición da la impresión, por así decirlo, que ha sido tomada del final de una partida práctica. Parece como si, independientemente de los peones que simultáneamente sean coronados, las tablas fueran fáciles de conseguir. Pero esta impresión es engañosa". De hecho: 1. Wc7, d1 ~ ; 2. bS~, d7, mate, por eso ... 1. q.,a8!!, tLl d7; 2. e6, d1 ; 3. ed, d7; 4. b8'/I:Y, b3, i.d1+; 3 . ..t>b2!, i.e2; 4. ~ c3.
Después de toda esta maniobra del rey en el triángulo b3-b2-c3, el negro tiene que avanzar su peón. 4.... , h6; 5. Wb3, i.d1+; 6. 'iti>b2!, ~ e2; 7. c3, h5; S. ~ b3, i.d1+; 9. Wb2!, i.e2; 10. ~ c3, h4; 11. c3, h3; 14. ~ b3, ~ d1+; 15. c;,t;>b2!, ~e2; 16. c;,t;>c3. y todo se acabó.
NI! 29 • E. Pogosjanz, 1965 1. ~f6, 'iti>h6; 2. d6, lLleS+!; 3. ~ eS, e3. El negro tiene esperanzas en 4. ~ b5?, e2; 5. ~ e2, ahogado. 4. d7!, e2; 5. dSlLl !, e1 '\W . Si el negro corona también un caba llo: 5...., e 1lLl , entonces sucede 6. lLlc6!, lLlf3; 7. lLle7, lLl h4; 8. lLlg8, mate. 6. lLlf7+, h5; 7. lLle5+, b2, ll d1. No 10. ... , 1l h3, por 11. lDf4+. 11. 'itó>c2. Tablas posicionales.
En el presente caso, los dos peones son más fuertes que la torre, pero hay que demostrarlo. 1. f6!, 1:[ g8!. El negro evita una defensa pasiva. 2. fe, ll g7+; 3. ~ h3, Jl h7+ (3 .... , ll e7; 4. 1l a1, mate). 4. 'iPg3, ll g7+; 5. Wf2!. Nuevamente el peón es invulnerable: 5. ..., n e7; 6. 1l h4+. 5 .... , : f7+. Esto huele a jaque continuo. Sin embargo, el blanco evita, con gran efectividad, la persecución de su rey. 6. ll f4!!, ll f4+; 7. h2, '1t;>e8; 50. l:[ d6, 1I d7. Después de 50 . ... , ll c5; 51. ~ c5 , Il c5; 52. ~ a6, le resulta difícil al negro defender simultáneamente la octava fila y la casilla d5. 51. Il d1, B e6-d6; 52. ed, e6; 3. 't'Vd3, ~a2; 54. ~a6. El éxito del blanco se concreta : un peón de más. 141
54...., e2; 55. a8+, Wf7; 56. d5+, Wg7; 57. n d2. Hubiera ganado enseguida 57. a6, a4; 58. d3, ~c6; 59. n a1!. 57 ...., e3; 58. ll a2, h5. Después de h5-h4, el negro puede contar con jaque continuo. Se hace evidente que en el fondo mi torre, en la segunda fila, no tiene nada que busca~ y que en su lugarse encuentra en la primera o en la tercera fila. 59. n d2!. Siempre le resulta difícil a un jugador "tirar atrás" una jugada ... 59 .... , h4; 60. ll d1, e2; 61. a6, ~a4; 62. d3, g5; 63. ll b1, f5; 64. ll b7, g4; 65. hg, fg; 66. e2!. El negro abandona. I
Nl!3 Karpov - Taimanov Leningrado, 1971
.1 .i.
El blanco sólo posee una pequeñaventaja en elfinal, ysiTaimanov hubiera jugado ahora 28 . ... , b6, 142
entonces la realización de ésta habría resultado extremadamente difícil, pero ... 28 .... , b57. Esta pseudo activa jugada deja al alfil sin protección y se muestra como un grave error. Por lo demás, era muy difícil prever los peligros que al negrp le esperan . Aparentemente, su situación parece favorable: la estructura de peones es simétrica, los reyes se encuentran uno frente al otro, cada bando dispone de una activa torre. Pero, el negro tiene, temporal mente, una desventaja: sus torres están desconectadas, lo que me permite poner en escena, como objetivo, un ataque sobre el punto f7 . 29. rt e1, w g7; 30. rt e41, n e4. Triste necesidad. Si el peón negro se encontrara en b6, entonces el segundo jugador podría defenderse con 30 .... , ll c6; 31 . .ll f4, ll f6. Pero ahora esto ya no es posible debido al cambio de una de las torres y la posterior clavada con rt c7 . 31. ttJe5, rt e4; 32. ~ e4, w g8; 33. f4!. Si bien un peón de más resul ta seductor, lo cierto es que no es ventajoso pasar al final de torres: 33. 1lf7, ~ d6. El blanco, antetodo, tiene la posibilidad de fortalecer la presión. 33 ...., ~f8 . La jugada defensiva 33 .... , rt f8, no era del agrado de Taimanov y prefirió entregar el peón con esperanzas en un contrajuego.
34. liJf7, ll e2.
.i.
.i.W éJ J.
1. it
fl
1. 1.
35. liJ g5!, ~ h6. Se amenazaba 36. II d8 Y 37. liJ e6. 36. liJe6!. El caballo maniobra con gran eficacia. 36 .... , II h2; 37. g7; 26. h5, i.b6. 144
.i.
IW .l.lJ.
El alfil negro no puede moverse a g5, debido a 27. ll c7 . 27. ll h3, i.e5; 28 . .ll f1, f6. Se amenazaba la mortal 29. h6+. 29. hg, ~ g6; 30. ll fh1, ll eS; 31. ll h7. Es evidente que el peón de b7 no me interesa, prefiero continuar jugando al ataque. El negro tiene que contar ahora con la maniobra .ll h1 -h5. 31 .... , Wg5; 32. ~ e2, ~ f4.
33 . .1'1 lh3!, ~ d4. Mecking no se percata de las amenazas y su rey cae en medio del tablero sobre una red de mate. Por lo demás, no salvaba 33 .... , ~ g4; 34 . .l:!. h 1, .l:!. g8; 35. ~ g8, .l:!. g8; 36. II f1, depués de lo cual el blanco gana de forma fácil. 34. ll g7!. El negro sobrepasó su tiempo, pero contra la amenaza de mate no existe ninguna defensa. N!! 6
Kurajica - Karpov Skopje,1976
.1
~
.1 .1 B. .i. B. E,
9
.1
.1 .1
E, . '§'B.
Otro interesante final con alfiles de distinto color. Pese a lo simpli ficada que se encuentra la posición, tiene mucho que mostrar y la consecución del éxito convierte el final de la partida en un estudio. 33 .... , h4!. El blanco tiene un peón doblado en la columna d, pero éste cumple excelentemente con
el papel de centinela que molesta al rey negro. Es importante fijar los peones del flanco de rey para, también aquí, crear las condiciones necesarias para una ruptura. 34. g3. Naturalmente el blanco tenía que jugar aquí g2-g4, seguido de h2-h3, para crear así una fortaleza infranqueable. Pero durante la partida, resulta difícil colocar los peones en aquellas casillas del mismo color a las del alfil del contrario. Por tal motivo, Kurajica juega de forma precavida. 34.... , ~f7; 35 . ..t>e3. El peón h no puede ser tomado. El rey no puede arreglárselas con toda la defensa del frente desde la columna d hasta la h, y su alfil es un mal colaborador, pues tiene que estar pendiente del peón pasado de la columna a. 35 .... , f5. El rey podría también haber ido hasta h5 y avanzar después los peones f y 9 hacia adelante. Pero yo me guardaba de no hacer ver a mi contrario cual era la decisión correcta a mover. Con el rey en h5 se incita a g3-g4+. 36. Wf4, ~ g6; 37. ~e3. Daba tablas la, a primera vista, arriesgada continuación: 37. gh, ..t> h5; 38. ~ f5, ~ f3; 39. ~ b2, ~ d5; 40. ~ c1, ~f7; 41 . ~ b2, ..t> h4; 42. d5!. 37 ...., ~ h5; 38. ~ b4, g5. El negro tiene ya una amenaza real de ruptura : 39 .... , f4+; 40. gf, g4! ; 41. fg+, ~ g4.
39. ~f2, ~ a2 . El peón de d3, tiene que ser atacado desde la diagonal a6-f1, a la 145
cual llevará el negro su alfil rápi damente. 40 . ..ta3, ..tbl; 41. c;to>e2, ..ta2; 42 . ..tel, ..te6; 43. c;to>f2, ..te8; 44. d57.
El blanco se pone ahora nervioso. Con una continuación correcta, hubiera podido mantener tablas: 44. ~ e2, ..ta6; 45. c;to>e3, f4+; 46. gf, g4; 47. f51. En el caso de 45 . ..tb2, hg; 46. hg, f4; 47. gf (perdería 47 . g4+, ~ h4; 48. ~f2, ~ h3, seguido de ..td3, ..tc4, ..te6 y ..tg4), 47 .... , gf; 48 . ..tc1, c;to>g5; 49 . ..tb2, c;to> h4; 50. ""f2, ..td3, el negro consigue una significativa superioridad . 44 .... , ed. Cuando el peón blanco estaba en d4 no parecía ser útil a nadie. ¡¿Por qué se encontraba él allí, como peón doblado, siendo alfiles de distinto color?! Pero ahora que ya no está allí, la situación ha cambiado mucho. 45. d4, f41; 46. gf. Ya no sirve 46. g4+, por 46 .... , ~ g6, y el rey negro sigue la ruta: ~f7 - e6- d7 -c6- b5-c4, y el alfil aparece en d3. 146
46.... , g4; 47. c;t;>g2, ..tf5; 48 . ..t>f2, gf; 49. c;t;>f3, ..te4+; 50. c;t;>f2, c;t;>g4; 51 . ..tb2. El blanco se encuentra en zugzwang y tiene que entregar un peón . 51 .... , c;t;>f4; 52 . ..tel+, c;t;> g4; 53 . ..tb2, e6; 54 . ..tel, c;t;>h3. Para ganar, el blanco tiene que ser llevado nuevamente a zugzwang. 55. f3, ..th5+; 59. g2, c;to>f5 (! la casi lla f3 ya no puede ocuparse!), 60. ..., c;to>e4.
N!! 7
Karpov - Larsen Bugojno, 1978
50. ~ b3, l:!. f2; 51. lLle3, lLlf6. El peón de f4 no puede ser tomado debido a 52. ll aS+, seguido de 53. lLl d5+. 52. lLlf5, l:!. f4; 53. lLld4, II f1; 54. J:I a8+, ~ e7; 55. a4, f7; 56. a5, cJ;?g7; 57. a6, lLld5; 58. ll d8. El negro abandona. N!! 8
Karpov - Hort Tilburg, 1979
Los caballos blancos han tomado como punto de mira el peón de c4, al que el negro defiende con todas sus fuerzas . Yo podría ya aquí haber realizado la captura 38. lLldc4, pero el negro hubiese mantenido después la posición de la siguiente manera: 38 . ..., lLlc4; 39. b4+, c;t> c6; 40. lLlc4, lLlc3; 41. J:I c5+, c;t> d7; 42. lLle5+, d6, y no se ve nada concreto. 38. ~ c2, lLld77. Larsen no se percata de la escondida amenaza del blanco. Tenía que jugar a la fuerza 38 ...., a5, depués de lo cual la posición era defendible. 39. It e1, lLl5b6; 40. lLldc4!. Con la pérdida de este peón se viene abajo la fortaleza negra. 40 .... , e5; 41. ~ d1, lLlc4; 42. b4+, ~ c6; 43. lLlc4, ll g7; 44. It d6+, ~c7; 45. J:I a6, g5; 46. hg, J:I g5; 47. J:I a7+, rJ¡¡d8;48. f4,ef;49. gf, ll g2+;
56. J:I a1 . El negro dispone de una sólida posición. Sin embargo, sólo se necesita una descuidada jugada y cae en un difícil final de torres. 56 .... , g67. o correcto era 56 .... , lLl bS. 57 . .td7!. Si el peón se hubiera encontrado en g7 el cambio hubiera equivalido a un ofrecimiento de tablas. Pero la circunstancia de que el peón se haya movido de su sitio produce un cambio esencial de valoración de la posición. 147
57 .... , l:t d7; 58. l:t f1!, ~ b8; 59. l:t f6, c:; a7; 60. h5, ~ a6. La única posibilidad de salvación consistía en 60 . ... , gh ; 61 . gh, ~ a6 . Al mover el negro con su rey, sólo contaba con 61. hg, fg; 62. l:t g6, l:t h7, y 63 .... , ~ a5. Pero le esperaba una amarga sorpresa. 61. 95!!.
Una ruptura de estudio que es típica en tales estructuras de peones. 61 .... , h9; 62. h6, ~ a5; 63. h7, l:t d8; 64. l:t f7, b5; 65. cb, ~b5; 66. l:t b7+!, ~ a6; 67. l:t 97, l:t h8; 68. 'i.t;le4, C:;b5; 69. ~f3, ~ c4; 70. l:t d7, ~ d3;71. ~ 94, l:t h7;72. l:t h7, ~d4; 73. l:t d7+!. El negro abandona . NI! 9
ljubojevic - Karpov linares, 1981 Un experto se daría cuenta fácil mente de que este final proviene de la defensa Caro-Kann. El blan148
co dispone de una fácil iniciativa, pero el negro tiene probabilidades suficientes de contrajuego. Aquí existe la interesante y palpitante variante siguiente: 28. g4, " c6!?, (también es posible la tranquila 28 ...., b7, con contrajuego en las casillas blancas), 29. 'iVd6+, 'i'f'd6; 30 . ed, ltJg8; 31. g5, ~ b7 , (31 .... , f6?; 32. g6, ~ b7; 33. b4, cb; 34. f5, e5; 35. c5), 32 . b4!, C¡Pc6, (32. ... , cb?!; 33. i.d4, f6; 34. g6, C¡Pc6; 35. c5, bc; 36. i.c5), 33. bc, bc; 34. i.c5, g6!, con probables tablas. 28. t d3?!. Y el blanco, nuevamente, no percibe el peligro. Una ju gada incorrecta y la valoración de la posición cambia totalmente. 28 . ... , 96!. Se levanta el bloqueo. El negro quiere fortalecer su ca ballo en f5, después de lo cual, en combinación con la dama, representa una poderosa fuerza. Pero para alcanzar la victoria, el segun do jugador tiene que hacer toda vía algunas jugadas de estudio ...
29. hg, fg; 30. a3, a5; 31. b3. A 31. g4, podría seguir 31 .... , h5!. 31 .... , h5; 32. e4, lLIf5; 33 . ..tf2, ! d7; 34. a4, Wc7!. En tanto yo movía el rey más hacia el centro del tablero, colocaba, al mismo tiempo, una trampa al contrario. Ahora habría perdido 35. l aS?, d3!; 36. a7+, ~ cS; 37. aS+, w d7; 3S. b7+, ~ eS; 39. bS+, C¡Pf7; 40. I~ b7+, lLIe7. 35. ~ c2. El blanco acerca su rey, sin embargo se muestra que precisamente en c2, se encuentra en una posición muy desfavorable. I
J
I
J
posición del rey blanco, es posi ble la horquilla de caballo. 36. ~ c1, g5!; 37. fg, ~ g5+; 38. ..t;>c2, lLIe7!. Ahora el peón de e5 está perdido. 39. 'v h7, ~ d7. También se podía capturar el peón después de 39 . ... , " 96+; 40. I g6, lLIg6; 41 . ..te3, Wd7, (41 . ..., lLIe5??, fracasa ante 42 . ..tf4), pero yo prefiero cambiar las damas en f5. El peón no puede conseguir nada. 40. I e4, I f5; 41. 1 d3+, ..t;>c6; 42. f5, ef; 43 . ..te3, lLIg6; 44. e6. El blanco intenta atacar con el alfil los peones negros del flanco de dama, pero esto es pura desesperación y no salva la situación. 44. ... , ..t;>d6; 45. ..tg5, ..t;>e6; 46. ~ d2 . En el caso de un rápido 46 . ..tdS, el avance f5-f4, llevaría a la victoria .
.l .l ii 35 ...., 1/ d8!. Una jugada tranqui la, pero de gran fuerza. El negro toma bajo control la casilla aS y prepara, al mismo tiempo, la ruptu ra g6-g5. A 36. e2, es desag radable 36 .... , aS, y el intento de afrontar 36 .... , 95, mediante 36. f3, no es suficiente debido a la sorprendente 36 .... , d4!. Si se captura en d4, entonces, vista la
.l
ii
.l ii
w ..
.l ál .l
46 .... , f4!. Una posición técnica en la que, el negro tiene, curiosamente, que echar mano de recursos tácticos. 149
47. gf, h4; 48. ~ e3, ..tff5; 49. ~f3, h3; 50. 'iPg3, lLIf4; 51. ~ d8, lLIe2+; 52. h3, lLId4; 53. ~ b6, lLIb3; 54. ~ d8, ..tfe4; 55. ~ g4, ~ d4; 56. ~f4, c4; 57. ~ e4, ~c3; 58. ~f6+, ~ c2; 59. ~ e5, c4; 60. ~ e3, c3; 61. ~f6, lLIc5; 62. e2. El intento de hacer tablas por medio de 62. ~ d4, lLIa4; 63. ~ c4, lLI b2+; 64. ~ b5, a4; 65. ~ b4, es evitado, a manera de estudio, con 63 .... , lLI b6+!; 64. ~ b5, a4; 65. ~ b4, lLId5+. 63 .... , ~ b3. El blanco abandona.
N 2 10 Torre - Karpov Moscú,1981
En esta difícil situación, para mí, fue aplazada la partida. Nuestro análisis, espléndidamente exacto, duró dos días; y justo diez minutos antes de la reanudación se consiguió ver la solución a este complicado estudio. El negro puede alcanzar las tablas a pesar de 150
los peones blancos de más y el protegido peón libre del contrario. 41. lLIb4. Es evidente que ésta era la jugada que tenía que ser entregada. La torre está atacada y no puede retirarse. 41 .... , lLIb4; 42. q,;,f3!. Tal como se comprobó, el negro no puede capturar en a2. Si 42 .... , lLIa2, entonces 43. lt d3, Y el peón a3 está perdido. A 42 .... , a2, sucede 43. Il a2, lLIa2; 44. ~ d2, Y el negro se queda sin el caballo. 42 .... , 'it>h7. El negro se mantiene a la expectativa. 43. d5. Mayores dificultades me causó, durante el análisis, la jugada 43. c5, (compárese con el diagrama a este análisis).
n
Ahora se presentan las siguientes variantes: 43 .... , 'it>g6; 44. J:l g2+, h7; 45. ~c1, lLId3; 46. ~ b2, ab; 47 . It g1, (después de 47. n b2, lLI b2; 48. c6, lLIa4; 49. c7, lLIb6; 50. a4, lLIc8, se consigue detener los
peones), 47 . ..., ttJc1 , y el blanco se encuentra con la maniobra de victoria 48. n g7+ y 49. l:r. b7. La salvación consistía en una sin gular jugada de retroceso del rey a su casilla inicial: 43 .... , ~ g8!. Ahora, después de 44. 1: g2+, el rey no va a h7, sino a la esquina del tablero (44 .... , h8!), y al final de la variante anterior, el blanco no tiene el decisivo jaque en g7. Despuésde45. 1: f2, ~ h7;46. l:t e2,
(46. n g2, ~ h8!), el peón ya puede ser capturado: 46 ...., ttJ a2!; 47. c6, 1:[ e2; 48. We2, ttJ c3+; 49. Wd3, ttJ d5, con tablas. 43 .... , ed; 44. cd, ttJa2. Mucho esfuerzo nos llevó el análisis de la continuación 44 .... , n d2; 45. ~ d2, ttJ d5; 46. We4!, ttJ e7; 47 . ~ c1, (47 . ~ b4, f5+ !; 48. ~f3, ttJc6; 49. ~ a3, ~ h6), 47 .... , f5+. Aquí lleva a tablas 48. We5, f4!; 49. ~f4, Wh6; o 49. ~f4, ttJ g6, pero después de 48. ~ d4! , el blanco conserva sus posibilidades de victoria . Porsuerte la captura con el caballo en a2 soluciona todos los problemas. Resulta sorprendente que Torre, que tanto se interesó por la variante del cambio de torres, dejara pasar por alto la jugada textual. .. 45. l:t d3, ttJb4; 46. ll a3, ttJ d5; 47. n a7+, ~ g6; 48. n g7+. Tablas. N211 Kortschnoi - Karpov Merano,1981 Quizás sea este el mejor final que, en mis enfrentamientos con V.
Kortschnoi, por la Corona de ajedrez, se me haya presentado. 30. f4. El único medio para protegerse de la amenaza e6-e5. Pero con ello se debilita el flanco de rey. 30 .... , b6; 31. n b4. Protege el peón d y confía, depués de 32. n c4, en poder penetrar en el cam po enemigo a través de la colum na c, pero ... 31 .... , b5!; 32. a4. No hay ninguna defensa contra la amenaza a7-a5. Si 32. 1:[ b3, entonces 32 .... , l:t c8, y 33 .... , n c4. 32 .... , bao El peón no es lo decisivo. El negro quiere aprovechar la posibilidad de sacar algún partido de la abierta posición del rey blanco y, a tal fin, le es muy útil desviar las pieza enemigas. 33. a3, a5; 34. n a4. A 34. r1 c4, habría seguido 34 .... , I b5; 35. a4, b2. 34 .... , b5!. Ata a la dama blanca a la defensa de su torre, desfavo151
rablemente colocada, yamenaza, al mismo tiempo, penetrar en la casilla e2. 35. ll d2. El blanco evidentemente, tenía que haberse decidido por 35. b3, pero también, en el final de torres que se origina después de 35 ...., ll b8, habría tenido pocas esperanzas de salvarse. Pero ahora se me presenta un elegante final. 35 .... , e5!; 36. fe, ll e5; 37. ¡;-a1, ¡;-e8!!.
Esta jugada, que, a muchos de los periodistas que cubrían la información del match, les pareció sorprendente, me produjo una gran satisfacción por su apariencia estética. El negro utiliza al máximo el poder de penetración de su dama, tanto en las verticales, como en las diagonales. Naturalmente, había tomado oportuna conciencia de las particularidades de la presente posición. El blanco se encuentra indefenso. 152
38. de, II d2; 39. II a5, It c6; 40. ll a8+, h7;41. ' b1+,g6;42. f1, " c5+. Está claro que el negro no puede jugar 42 ...., " a8? por 43. " f7 +. 43. h1, ' d5+. El blanco abandona . N212 Karpov - Miles Londres, 1982
No es difícil de reconocer que este final se originó de la variante del Dragón, en la Defensa Siciliana. El blanco dispone de una ventaja de espacio, pero bastante difícil de realizar. 17 . .te2, lbd7; 18. f4. El blanco quita al caballo la casilla e5, y restringe aún más la posición del contrario. 18.... , lbc5; 19. ll h3, tI c7? Este movimiento se debe a unas consideraciones generales, pero con ello la posición negra ha empeorado. Era necesario crear compli-
caciones por medio de 19 .... , ~ d4; 20 . .rt d4, e5!? No prometía nada al blanco 21. de, lD e6; 22 . .rt d6, lDf4;23. n e3, lDe2+;24. l::t e2, .rt c4!. Yo hubiera preferido 21 . fe, de; 22 . .rt d1, con perspectivas algo mejores. 20. II e3, b5; 21. ~ g7, ""g7; 22. tt d4, a5?!' Esta jugada se encuentra con una enérgica respuesta. Era más seguro 22 .... , lD a4, segui do de 23 .... , lD b6.
23. b4, lDa4. Ahora es ya muy tarde para la jugada 23 .... , e5, debido a 24. fe, de; 25. d6, .rt c6; 26. ll d5, y a 23 . ... , ab, es posible la sencilla 24 . .rt b4, y el peón de b5 se vuelve muy débil. 24. ba, lDe3; 25. ~f1, c;i¡lfS. Si 25 .... , .rt a8, entonces 26. ~ b2, lD a4+; 27. 'iP b3, lDc5+; 28. c;i¡l b4. El negro persigue colocar una torre en la casilla c5 y la otra en la columna a. Pero no lo consigue. 26. g1, ll hg6.
W 1.
En esta posición fue aplazada la partida, y el negro tuvo que hacer la jugada secreta. Debido a que después de la colocación del ca ballo en d4, la superioridad de éste sobre el alfil aumenta, el negro tenía que haber sacrificado un peón para dar vida a su figura de largo alcance: 41 .... , d4! ; 42. tLl d4, -te4; 43. g4! , l1 g8; 44. g5, h6; 45. II h1! , ll g6! ; 46. 'iPg1, ll g3; 47. l1 h2, l::t g4; 48. ttJ e2. El blanco hubiera tenido que esforzarse
Da la impresión de que el negro consigue un contrajuego, o por lo menos, sostener la posición. Por ello el blanco actua a manera de estudio. 48. f5!, J:t b6. Se demuestra que 48 .... , ll g3; 49f6!, tt g2+; 50. ~ h1 , es malo para el negro, y a 48 .... , ll f6, sigue 49. g4!, (pero no 49. l::t g7, C;P g7; 50. ll e7 +, ll f7 ; 51 . tLl e6+, ~f6; 52. 11 f7 +, Wf7; 53. ttJ d8+, ~f6; 54. tLl b7, ~f5, con tablas). 49. r1 7e6!. Esta enérgica jugada casi pone fin a la lucha . Debido a 155
que el abandono de la sexta fila decidiría 50. ll e8+ y 51. f6, el negro tiene que cargar con la formación de un peón pasado en la columna e. 49 .... , ll e6; 50. fe, ll g8; 51. e7, II e8; 52. liJf5, ~ c6; 53. liJd6, II g8. Tampoco ayuda 53 .... , ~ g7, por 54. liJe8+, ~ e8; 55 . .l:t fl, 1t.f7; 56. J1 f4, a5; 57. f2, a4; 58. 'i!f e3, a3; 59. c¡f; d4, a2; 60. fl . 54. e8 , ~ e8; 55. liJe8, n g3; 56. liJf6. El negro abandona.
.l
J.
.1
n
En las luchas por el Campeonato del Mundo con G. Kasparov, se dieron frecuentemente interesantes finales. Incluso se podría decir que nuestra contribución a la teoría, en esta fase de la partida, no fue menor que la contribución a la teoría de las aperturas. Algunos finales de nuestros encuentros por la Corona ya fueron tratados en el segundo capítulo. A continuación cuatro valiosos ejemplos.
N!! 15 Kasparov - Karpov 61! partida por el Campeonato del Mundo, Moscú, 1984 42 .... , ll a8. Esta fue la jugada secreta. La alternativa consistía en 42 .... , ll d5, pero decidí poner rápidamente el peón en movimiento. El plan de victoria en este tipo de final es claro: en tanto el peón va hacia adelante, ata las 156
fuerzas del contrario y entonces el propio rey se dirige al otro flanco. Naturalmente era difícil sospechar que la realización de este plan estuviera ligado con algunos temas de estudio. 43 . .l:t a5. Ninguna salvación proporcionaba al blanco 43. 1:t e6+, Wb5; 44. ll e7, por 44.... , a5; 45. n g7, a4; 46 . .l:t b7+, c¡f;a5, y el negro gana un tiempo decisivo: 47 . .l:t bl, a3; 48. f4, a2; 49. n al, b4. 43 .... , Wb6; 44. ll a2. En el caso de 44. 1:1. al, a5; 45. c;t>fl, a4; 46. e2, a3; 47. ~ d3, ~ c5, el blanco cae en zugzwang: 48. c;t> c3, Wd5; 49. f3, a2!. 44 .... , a5; 45. Wf1, a4; 46. c;t>e2, c;t>c5; 47. d2, a3; 48. c;t>c1, ..t>d4; 49. f4. El blanco no tiene tiempo de activar su torre y bloquear el peón con el rey: 49. n d2+, ..t>c3; 50. ll c2+, g3. 58 .... , We4; 59. f5, ll f2; 60. c1. 60. n g5, ~f3; 61. f6, ~ g3; 62. n g6, ll f4, y el peón 9 ya no se puede detener. 60 .... , 'itrf3.
El momento más interesante de este final. Algunos comentaristas indicaron que el negro cae en zugzwang después de 61. f6, w g3; 62. n h6, 'itrg2; 63. w d 1, g3; 64. ll g6, (a 64. ,.pe 1, sigue 64 .... , ,.pg 1; 65. l:t g6, g2; 66. l:t h6, n f5; 67. ,.pe2, l:t e5+; 68. c¡f.If3, cjo>f1; 69. ll g6, n e6!, etc.), 64 .... , ~ h2; 65.
l::t h6+, ~ g 1; 66. II g6, g2; 67. ~ e 1, y que 67 .... , n f5; 68. ~ e2, ll e5+; 69. ~f3, ~f1; 70. ll g2, l::tf5; 71. c¡f.Ie4, llevaba a tablas. Pero el gran maestro S. Dolmatov, encontró una victoria para el negro a modo de verdadero estudio.
Aquí, en lugar de 64 .... , ~ h2, (ver variante anterior), tenía que jugarse64 .... , l:t f5!,con laamenaza 65 .... , ~f2, después de lo cual la partida puede continuar así: 65. We2, n e5+; 66. cjo> d3, Wf3!; 67. ~ d4, (67. f7, se responde con 67 . ... , ll f5; 68. ll g7, n f4!), 67 .... , II h5!!, Y el neg ro ha ganado el tiempo decisivo. Ahora le toca jugaral blanco. Despuésde68. f7, n f5; 69. l:t g7, g2; 70. ~ d3, ll f4!; 71. ~ d2, ..tr>f2, no le queda más alternativa que rendir las armas. 61. ~ d1. Después de esta jugada, la realización de la ventaja resul ta, para el negro, más fácil. 61 .... , ~ g3; 62. w e1, w g2; 63. 157
ll g5, g3; 64. l:t. h5. Tampoco es mejor 64. 'itd1, c;t> h3!; 65. 'ite1, h4. 64.... , ll f4; 65. c,Pe2, n e4+; 66. c,Pd3, c,Pf3; 67. n h1. Nada cambia la situación la continuación 67. f6, nf4; 68. II h6, g2; 69. II g6, ~ f2. 67 .... , g2; 68. ll h3+, ~ g4; 69. II h8, n f4; 70. ~ e2, II f5. El blanco abandona. Un ejemplo muy particular, verdaderamente un estudio, que enriquece la teoría de los finales de torre. Karpov - Kasparov 27 1 partida por el Campeonato del Mundo, Moscú, 1984
1.
En el diagrama está representada la posición del aplazamiento, después de mi jugada secreta 41. ll g4. Considero este encuentro entre los más interesantes detoda mi carrera ajedrecística. Después de esta victoria se produjo en el 158
duelo por el Campeonato del Mundo un 5:0 a mi favor, pero el 6:0 no quiso caer. En los análisis caseros se hizo evidente que la posición era muy aguda y que el negro podía lograr contrajuego. Para encontrar el camino correcto hacia la victoria, tuve que solu cionar, con ayuda de mis analistas, algunos estudios. No es casual que este final haya encontrado posteriormente entrada en los manuales de teoría de los finales. 41 .... , h3!. No proporcionaba ningún éxito la defensa pasiva 41 ...., l::t h7. En este caso yo habría bloqueado el peón negro de h4, después de lo cual, Kasparov ya no habría podido esperar nada más. y después de 41 .... , e4, decidiría en favor del blanco 42. i.d1, n f7; 43. c;,t;> d4, n f2; 44. c5+, c;,t;> e7; 45. i.b3, n d2+; 46. ~ c3, l:t d3+; 47. ~ b2, e3; 48. i.a4+. 42. g3. El negro confiaba en la aceptación del sacrificio (42. gh), después de lo cual el radio de acción de su torre se hubiera extendido considerablemente. 42 .... , l:t e8. La torre, que se encuentra en la segunda fila, tiene que ir a la columna f. La rápida 42 . ... , n f7, no es posible por 43. c5+. 43. l::t g71, 1:tf8; 44. l::t a7, n f2; 45. c;,t;>b4, II h2. El blanco ganaba de forma elegante en el caso de 45. ... , ll b2. Aquí están las variantes principales: 46. c5+, ~ c6; 47. c,Pc4, .Jtc2; 48. l::t a6+, ~ c7, (48 . ..., ~ b7; 49. n b6+, ~ c7; 50. ~c3), 49. i.c2, ll c2+; 50. ~ d5, ll h2; 51. ll a7+, ~ b8, (51 .... , ~ c8; 52. ll h7, n h1;
53 . ..t>d6, h2; 54. ll h8+, Wb7; 55. c6+, w b6; 55. c7), 52. ll h7, ll h1 . 53. e4!, h2; 54. Wf3, e4+, (54 .... ,
N 2 17 Kasparov - Karpov 40ª partida por el Campeonato del Mundo, Moscú, 1984/85
.!W .l.!
1:!. a1; 55. ll h2, ll a3+; 56 . ..t>g4, ll c3; 57. 1:!. e2, n c5; 58 . ..t>f5, etc.), 55 . ..t>g2, ll c1; 56 . ..t> h2, .ll. c5; 57. lI e7, ll c4; 58. g4, e3; 59 . ..t>g3, ganando. 46. e5+, ..t>e6; 47. i.a4+, ~ d5; 48. ll d7+, ..t>e4. También 48 .... , ..t>e6; 49. c6, II b2+; 50. i.b3+, ll b3+; 51. 'it>b3, i.e4; 52. II d8, i.c6; 53. II h8, i.g2; 54. a4, 'it>f5; 55. II h4. 49. e6, lI b2+; 50 . ..t>a5!, lI b8. Si 50 .... , h2, entonces 51. c7! , y la dama negra, apenas haya aparecido sobre el tablero, estaría nuevamente perdida. 51. e7, II c8; 52. ~ b6, 'it>e3; 53. i.e6!, h2; 54. g4!. Quita al alfil negro la casilla f5. Ahora todo va perfecto. 54...., lI h8; 55. lI d1!, i.a2; 56. ll e1+, ~f4; 57. ll e4+, ~ g3; 58. II e5, ..t>g4; 59. II e2. El negro abandona .
El blanco posee, dicho elegantemente, un sano peón de más. Si hubiera continuado con 39. ~f3, seguido de un ataque en el flanco de rey, habría podido contar con un punto a su favor. Pero Kasparov actúa precipitadamente ... 39. h4, Wf8; 40. g51. Con la última jugada, antes del control, el blanco deja escapar la victoria de las manos. Por lo demás, el negro consigue tablas de una manera de estudio. 40 .... , hg; 41. hg. En esta posición Kasparov comete un error de método, apuntar la jugada secreta. Si hubiera capturado el peón enseguida, yo habría tenido que hacer la jugada secreta y habría tenido que encontrar la solución al estudio en el tablero. 159
41 .... , f5!1. Con lo que el negro impide que el caballo enemigo se haga fuerte en g4. Después de la respuesta del blanco, el resultado de tablas es inevitable; las variantes principales, todas ellas en relación a 42. gf, quedaron bajo el telón. Veamos por un momento cómo habrían tenido que desarrollarse los acontecimientos en este caso. 42 .... , 'it>f7; 43. lLlg4, 'óPe6; 44. ll e1+, ..tf5; 45. lO h6+, ..t>f6, (pero no 45 .... , 'it>f4; 46. f7, U. d6; 47. :t e7, lOf8; 48. ll e8, lLl h7; 49. ll h8), 46. lLlg8+, ..tf7;47. ll e7+, 'óPg8;48. 11 d7, ll c3!,(compararel análisis con el diagrama).
Es a partirde este momento cuando se hace evidente la razón por la que el blanco se precipitó diez jugadas antes. Su rey se encuentra cortado en la tercera fila y el negro se salvaría incluso con la pérdida del peón de g6. Por ejemplo: 49 . ..tf2, e8; 51 . .ll g7, U. h3; 52. ll g6, ..t>d7. 160
La partida por el Campeonato del Mundo continuó de la siguiente manera: 42. II d4, 'it>f7; 43. lOc4, 'it>e6. La fortaleza negra ya no puede ser tomada, y mucho menos ahora que el peón de d6 puede ser conquistado. 44. 'óPf3, l:t c5; 45. '>f¡¡e3, .ll b5; 46. ~ d2, ll d5;47. 11 d5, d5;48. lOe5, c;t;>d6; 49. lOg6, lLlc5; 50. lOh4, 'iPe6. El blanco conserva un peón de más, pero el final es completamente de tablas. Por cuestiones de formalidad adjuntamos las restantes 20 jugadas, que, por otro lado, nada cambian en el tablero. En esta partida se encontró, para el negro, unas tablas de estudio, pero no así para el blanco, donde no se encontró ninguna victoria propia de ser considerada un estudio. 51. 'óPe3, lOe4; 52. lL\f3, cJ¡¡f7; 53. d4, e6; 54. ~ c4, lOf2 1; 55. d6; 57. lO c2, lOc5; 58. ~ e3, lLle6; 59. lLld4, lOg7;60. Wd2, ..tc5;61. ~d3, ..td5; 62. lOe2, liJh5; 63. ~e3, liJg7; 64. lOg3, ~ d6; 65. ~f3, 'it>e7; 66. lOe2, liJe6; 67. liJg3, lO g7; 68. lOf1, g4, n a4+!, y no la jugada de la partida!. 39 . .ll g7+, 'iti>h8; 40. ll f7, ~e3; 41. ~ g3, ~ d2; 42 . .ll d7, ~e3; 43. c;t;f3, Wg8; 44. liJf4, Il f5; 45. c;t;e4, lU 7!; 46. n d8+. Mayores perspectivas de éxito se daban para el blanco en un final de piezas menores: 46. II f7, c;t;f7; 47. c;t;f5. Los entrenadores de mi contrario, J. Dorfman y J. Vladimirov, publicaron, poco después, un interesante análisis que proporcionaba al negro un buen método de defensa en este final. 46 .... , c;t; h7; 47. Il d3, .ll e7+; 48. c;t;f3, ~ b2; 49. ll b3, ~ e1; 50. liJd5, n e5; 51. liJf6+, c;t;g6; 52. liJe4, It f5+;53. 'iti> e2, l :te5;54. It b4, ll e7; 55. It e4, ll e8; 56. g3, ~ b2; 57. ~f3, .ll e6; 58 . .:t e5, .i.d4; 59 . .l:t d5, ~ e5;60. n b5, ~ e7;61. n e5, i.b6;
62. It e8, ~d4; 63. It g8+, .i.g7; 64. h4, n a6; 65. c;t;f4. Por desgracia, después de 65 . h5+, 'iti> h5; 66. Il g7, Il a3+; 67. Wf4, .l:t f3+, el negro 161
tiene todavía su "atrevida" torre. 65 .... , n a5; 66. n e8, ll f5+; 67. ~ e3, ll e5;68. l:t g8, ll e7;69. w f4, ll f7+; 70. g5, se ganaba un tiempo decisivo por medio de 61 . lLl d4, Y se amenazaba 62. lLlf3+. 58 .... , .ta5; 59. b4, .td8; 60. a5, h5; 61. \tlb5, .tg5; 62. a6, .te3; 63.