Franscisco Rades de Andrada, cronista y linajista : adiciones a la Crónica de la Orden de Caballería de Calatrava: Adiciones a la Crónica de la Orden y Caballería de Calatrava [1 ed.] 840010126X, 9788400101268

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FRANCISCO RADES DE ANDRADA, CRONISTA Y LINAJISTA

BIBLIOTECA DE HISTORIA, 83

Director Francisco Villacorta Baños, Instituto de Historia-Centro de Ciencias Humanas y Sociales, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (lH-CCHS, CSIC)

Secretaría Cristina hilar Pérez-Alfaro, Instituto de Historia-Centro de Ciencias Humanas y Sociales, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (lH-CCHS, CSIC)

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MIGUEL FERNANDO GÓMEZ VOZMEDIANO

FRANCISCO RADES DE ANDRADA, CRONISTA Y LINAJISTA

ADICIONESA LA CRÓNICA DE LA ORDEN Y CABALLERÍA DE CALATRA VA

CONSEJO SUPERIOR DE INVESTIGACIONES CIENTíFICAS MADRID,2016

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CSIC Miguel Fernando Gómez Vozmediano

Ilustración de cubierta: Dibujo de siglo XVII. Colección privada

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caballero calatravo. Desahogo de escribano del

ISBN: 978-84-00- 1 0 1 26-8 e-ISBN: 978-84-00- 1 0 1 27-5 NIPO: 723 - 16-047-3 e-NIPO: 723-16-048-9 Depósito Legal: M-35466-2016 Maquetación, impresión y encuadernación: RB, Servicios Editoriales, S.L. Impreso en España. Printed in Spain En esta edición se ha utilizado papel ecológico sometido a llll proceso de blanqueado ECF, cuya fibra procede de bosques gestionados de forma sostenible.

A Carmen, María e Isabel, los luceros de mi vida, por las horas que les robo cada dí persiguiendo mis sueños de papel

ÍNDICE GENERAL

Índice de cuadros

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Siglas y abreviaturas empleadas

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Prólogo. Francisco Femández Izquierdo Introducción

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Capítulo 1 . La persona: el hilo de la vida 1 . El linaje

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

1 . 1 . El necesario origen legendario de la estirpe paterna y su proyección tardomedieval . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1.2. La ascendencia materna: los Rades de Neyla, unos hidalgos rurales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1.3. Los hermanos: , Article author query grieshaber ep Journal of Latin American

Studies. 12/2 ( 1 980). pp. 223-269.

88 MORRONE, Ariel Jorge. «Reconfiguración de alianzas políticas en contextos críticos: los caciques de San Andrés de Machaca (Pacajes, Audiencia de Charcas, siglos XV-XVII)>>, Boletín Americanista, año LXIV/l, 68 (2014), pp. 187-210.

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Corno quiera que los españoles vivían fundamentalmente en ciudades, don Jerónimo de Soria ernigró junto a otros peruleros al altiplano andino, colaborando con don Alonso de Mendoza a fundar en Laja, un descansadero entre Lima-Cuzco y Potosí-Charcas, la ciudad de La Paz, El acta fundacional de la ciudad de Nuestra Señora de La Paz, rubricada el sábado 20 de octubre de 1548, contempla que algunas de las personas designadas para vivir en la ciudad en calidad de vecinos (encomenderos) no se hallaban presentes «por estar corno estaban en la ciudad de Lima y en el asiento de Potosí y en otras partes remotas» , procediendo a elegir a las primeras autoridades urbanas; de este modo fueron nombrados por alcaldes ordinarios a Juan de Vargas y a nuestro Jerónimo de Soria (ausente), además de seis regidores y un pro­ curador, quienes en su mayoría tampoco estuvieron presentes a tan solemne acto. 89 Tal vez con motivo de sus andanzas en ultramar, tuvo a su primogénito bastardo, Jerónimo de Castro, quien heredó su nombre de pila y resucita un antiguo apellido del linaje paterno, del cual no tenernos más noticias que su aparición entre sus últimas voluntades, En todo caso nos resulta curioso cómo en marzo de 1585, su hermano fray Francisco Rades Andrada, en cali­ dad de patrón de capellanía fundada por r otro espacio emplazado a los pies del templo. SERRANO RODRÍGUEZ, Eugenio. Toledo y los Dominicos en la época medieval: Instituciones, economía, sociedad, Cuenca, Universidad de Castilla-La Mancha, 2014. p. 239. 108 ZAPATER y LÓPEZ , Miguel Ramón (OSB). Cister mílítante en la campaña de la Iglesia contra la sarracena furia. Historia General de las . . . cavallerias del Templo de Salamon, Calatrava, Alcantara, Avis, Montesa y Chrísto, Zaragoza, por Agustín Verges, 1 662.

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ÁRBOL GENEALÓGICO I>E LA FAMILI,\ SONIA ANIlRAIl¡\-RIHAI>ENEIRA TOU:nANA

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lmooja ... ....u. l'lomio¡p" Antl..... 101. Surandino Monográfico, Segunda Sección de Prohaf Monográfico, t Il/2 (2012), p. 13.

LA PERSONA: EL HILO DE LA VIDA

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No cabe duda de que este soriano trasplantado a Indias y radicado en la Ciudad Imperial quería dejar en orden sus asuntos terrenales, pero también la vida de ultratumba. En este sentido, Jerónimo de Soria ejerce de mecenas en su parroquia de San Martín de Tours, una de las más pobres en la rica urbe levítica que es la Toledo del Siglo de Oro, donde reedifica su coro 134 y construye una capilla funeraria asistida por dos capellanes; 135 además de en­ cargarse un nuevo retablo (1565). 136 Por entonces Toledo concentraba a unos 50.000 habitantes y conocernos bastante fidedignamente corno era su perfil urbano, gracias a la panorámica esbozada por Wyngaerde. 137 Creernos que todavía se conserva su impresionante portada, aunque cam­ biada de emplazamiento, 138 flanquedada por dos blasones con las armas los Andrada, puestas sobre la cruz de Calatrava, ahora en la calle San Román, en la manzana que ocupa la toledana Casa de Mesa. Su testamento hológrafo data del 18 de junio de 1563. En vísperas de su muerte, doña María Aguirre llamó a su cuñado, el capellán Francisco Rades, a quien el agonizante quiso confiarle el cumplimiento de sus últimas volun­ tades. En plena canícula de 1563, en previsión de los gastos que se avecinaban, las madrileñas doña Juana de Escobedo, doña Catalina de Sahnón, junto a la toledana doña María de Ribaneideira vendieron a Catalina Ruiz de Saldaña (viuda del capitán Remando de Salmón) un censo al quitar de 2.678 mrs., impuesto sobre una casa que habían vendido al pintor Pedro Ortiz en la pla­ zuela de Valdecaleros (Toledo) y este dinero aplicaron al saneamiento de las casas que tenían en Madrid >, Hispania Sacra, v. 62/126 (2010), pp. 563-619. en concreto pp. 598 Y 615. 34J 20-I1-l578/19-VII-1579. AMT. Cofradías y Hermandades, San Pedro, San Miguel y San Bartolomé, caja 78. Citado !Xlr GARCÍA RUIPÉREZ, Mariano. «Catálogo de los expedientes de admisión de hermanos en las Ilustres Hermandades de San Pedro, San Miguel y San Bartolomé», Archivo Secreto, 3 (2006), pp. 32-68, en concreto p. 39.

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ahnonedan sus bienes, tanto los traídos de Puertollano corno los hallados en su celda de Almagro, salen a la venta una estantería para los libros; además los sobrinos del romano de Ahnagro341 compraron quince cuerpos de libros de la Facultad de Cánones por 106 reales; el doctor Luis Sánchez se llevó volúmenes por valor de 88 reales; los Abades se enajenaron por 132 reales; las obras de Covarrubias se vendieron, junto a una limpiadera, por 55 reales; la obra de Soto de Justic;ia Jure y el cuarto en dos volúmenes por otros 50 reales; un breviario de la Orden y un diurnal alcanzaron los 50 reales; con­ signándose que «22 cuerpos de libros se embiaron a vender a Salamanca por que aca no avia quien los comprase y se vendieron todos por el re[c ]tor todos en 29 ducados», Pero de entre todos los asientos de esta almoneda, el que más nos inte­ resa es el que señala que el « el doctor (sic) Andrada llevo seis cuerpos en 56 reales» , 342 Este dato, aunque escueto, nos habla de dos cosas; de la bibliofilia de Francisco Rades Andrada (presumida, pero no probada hasta ahora, a pe­ sar de que no consta por qué títulos se interesó el licenciado) y de la presen­ cia de dicho freile en Calatrava la Nueva, entrado 1579 o, tal vez, los años siguientes, pero en cualquier caso antes de 1583, 343 Aunque no tenernos demasiado con que comparar, sospechamos que los escritos personales pertenecientes a los freiles calatravos de entonces serían más bien modestos en cantidad y calidad, Corno muestra, cuando en 1570 se dirime quién se queda reahnente con los bienes dejados a su muerte por frey Juan l\1anzano, rector de la parroquia de Argamasilla de Calatrava, que pretendía legar a su colega de Puertollano, frey Antón Gutiérrez, solo se consignan «mis libros que tengo para mi estudio [" , ] un libro de cuentas de criados [" ,] siete cuerpos de libros viejos y un breviario romano y una mar­ gueleta [" , ] [más] ciertas escrituras» , 344

341 Creernos que se trata de Rcxlrigo de Pisa Sanabria a quien el almagreño Diego Luis Sánchez se obliga a pagar 200 reales por varios libros que le compró, entre los que se hallan la obras de los juristas italianos medievales más famosos de la época (la Leclura de Jason de Mayno, Pablo de Castro, Baldo de Ubaldo, Bartolorné Saliceto, Felino Sandeo), además de diversos juristas españoles (Juan L6pez de Palacio Rubio y Castillo, ccx:lificador de las Leyes de Toro, 1505; y Fuentes), junto a las Leyes de la Partida y un Digesto Nuevo; 16-1-1574, Almagro. AHP. Ciudad Real, leg. 1 654, f 843r. 342 AHN, OOMM. Consejo, lego 42.436, s. f. El profesor Juan Zapata Alarcón cita esta almoneda, allllque da corno fecha de la muerte del Pitancero 1583, cuando es 1579, en tooo caso su publicación nos puso tras la pista de las lecturas de Rades. ZAPATA ALARCÓN, Juan. «La Biblioteca de Calatrava la Nueva: 1 526-1803», en Jerónimo López-Salazar Pérez, Las Órdenes Militares en la Península Ibérica, JI La Edad Moderna, Cuenca, Universidad de Castilla-La Mancha, 2000, pp. 1389-1405, en concreto, p. 1398, nota 40. 343 A comienzos de ese años no hallarnos su nombre entre la nómina de conventuales presentes en la capital espiritual de la Orden de Calatrava. 16- III -1 583, Sacro Convento. AHN, OOMM, AHT (RSC), leg. 42436, s. f ""' AHN, OOMM, AHT (Pleitos), leg. 40872, s. f.

LA PERSONA: EL HILO DE LA VIDA

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A. Administrador del Colegio de Doncellas Nobles (1578-1593) Pero, sin duda, donde derrochó más esfuerzos en su periodo toledano fue en la administración del Colegio de Nuestra Señora del Socorro, más cono­ cido corno de las Doncellas Nobles, una de las fundaciones más importantes del arzobispo Juan MartlÍlez Silíceo (1545-1557, cardenal desde 1555). Su origen se remonta a 1 5 5 1 , cuando el riguroso prelado le asignó una renta perpetua de 6.000 ducados para este fin. La sede primitiva de esta fun­ dación fue la Casa de Mesa, un palacio mudéjar vendido en 1 5 5 1 por su due­ ño, Gómez Enríquez de Ayala, al arzobispo Silíceo, quien encargó algunas reparaciones a Alonso de Covarrubias para el nuevo destino que le aguar­ daba. No obstante, el estado del irnnueble en 1558 era casi ruinoso, según informó el propio Covarrubias, por lo que fue vendido en febrero de ese año a Arias Pardo de Tavera, sobrino del difunto cardenal Tavera, señor de Ma­ lagón, mariscal de Castilla y marido de Luisa de la Cerda, perteneciente a la Casa de Medinaceli. Esta familia restauró y agrandó el palacio, conservando el salón mudéjar, sede durante casi cien años de la Real Academia de Bellas Artes y Ciencias Históricas de Toledo. 345 Silíceo compra en 1554 la casa del conde de Mélito, , Toletvm, 5 (1972), pp. 76-77. 345 AHNOB. Osuna, caja 2073, doc. 1 . 347 Décadas después, en l a visita ad límÍna de 1 650, se informa a Roma que su instituto «es criar doncellas naturales del Arzobispado y limpias de toda mala raya e infeccion de sangre; entran desde siete hasta diez años, y en tiniendo hedad para tornar estado se les acude con trescientos ducados de dote, o perseberan en castidad mientras viven, a expensas del Colegio; havian de ser yiento según la fundación, hanse reduído a cuarenta y dos por la falta de hayienda. Gobiérnalas una rectora que el prelado elije cada trienio, y para la administración de la hayienda elije Su Majestad una de dos personas eclesiasticas de prudencia y virtud, que le propone el prelado». FERNÁNDEZ COLLADO, Ángel. Los informes de visita ad limina de los arzobispos de Toledo, Cuenca, Universidad de Castilla-La Mancha, 2002, p. 212.

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gre, nominalmente naturales de todo el Arzobispado, aunque en la práctica son preferentemente toledanas, Sus estatutos también señalan quiénes serían sus patrones: el rey y el ar­ zobispo de Toledo, que tenían que designar qué doncellas debían entrar al co­ legio, Asimismo, se dispuso que el prelado propondría el nombre de dos clé­ rigos candidatos para ser su administrador, entre cuyos nombres debía elegir el rey; si bien los primeros años de esta fundación quedaron exclusivamente en manos archiepiscopales, La última morada de Juan l\1artinez Guijarro fue precisamente esta institución toledana, trasladada a las casas de don Diego Hurtado de Mendoza, conde de Mélito en 1557, donde hoy permanecen, Una década más tarde la Ciudad Imperial se enorgullecía de contar con 37 funda­ ciones religiosas, 14 de varones y 23 femeninas y la tendencia fue a saturarse aún más su casco urbano y sus alrededores de tales casas de oración, Por entonces, Felipe II hizo examinar el testamento, codicilo y constitu­ ciones del Colegio de Doncellas Nobles, y el administrador le informó sobre las relaciones rey-arzobispo de dicho patronato de modo que, considerando la piedad y santidad de la Institución, el servicio de Dios, el beneficio de la ciudad y Reino de Toledo y los feligreses de su arzobispado, además de ha­ berla instituido quien fue su maestro, el monarca expresa que sesi6n del obispado de Michoacán y Puebla de los

Ángeles el doctor [rey Antonio Morales de Molina, antiguo canónigo de Córdoba y freile santiaguista, quien fue luego Obispo de Tlaxcala ( 1 575). Precisamente en el Hospital de San Marcos (León), donde se formó, cuelga aún hoy su retrato. 433 Corno muestra, entre los 22 primeros virreyes de Perú, 6 son de Santiago; 2 de Calatrava; 2 de Alcántara y 1 de Montesa. MONTORO LÓPEZ, José. Los vÍrreyes españoles en AmérÍca, Barcelona, Mitre, 1991 cit. por BRENA y SANCHIZ, Rafael de la. «Pervivencia de las Órdenes Militares», en María Dolores Burdeus, Elena Real y loan Manuel Verdegal (eds.), Las Órdenes Militares: Realidad e Imaginario, Castellón, Universitat Jaurne 1, 2000, pp. 6172, en concreto p. 66.

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5,000 ducados; el de Antequera, con un estipendio de 4,000 pesos anuales; y el más pobre de Yucatán, Pues bien, el 10 de noviembre de 1580 aparece por primera Rades en la terna de candidatos a su sede vacante de Jalisco, presentada en una consulta del Consejo de Indias, Veamos el párrafo en cuestión: El licenciado Rades, muy buen canonista y es administrador del Colegio de Don,ellas que en Toledo fue fundado por el cardenal Siliceo. El maestro Francisco Gil, colegial del Colegio de Cuenca en Salamanca y cathedratico de Philosofia Moral en aquella uni versidad. El licenciado Martinez, colegial que fue del Colegio de Valladolid y despues provisor en Oviedo y del Consejo del Ar,obispo de Toledo, y agora es Inquisi­ dor Apostolico en C;:aragoya. 434 Sin embargo, al margen del asiento se anota por Felipe II «el de Xalisco a fray Juan de TrugillQ» , aunque el Consejo lo había propuesto en primer lugar para la sede de Antequera, calificado de «docto, muy buen letrado y ha tenido muchos cargos en su Orden» . No obstante, fray Juan de Trujillo, prior del monasterio de San Jeró­ nimo de la Villa y Corte, renunciaría a dicha dignidad con excusas fútiles. Otro tanto pasó con el obispado de Antequera, ya que se designó al maestro Francisco Gil, catedrático de Filosofía Moral en la Universidad de Salaman­ ca, quien tampoco aceptó excusándose por su poca salud. Solo aceptó el de Yucatán el dominico frey Gregario de Montalvo, exprior de Plasencia, que había impartido teología en Ávila y Segovia, >, en Aurelio Musi y Maria Anna Noto, Feudalita laica e feudalita ecclesiastica nel!'Italia Meridionale, AssoCÍazione Mediterranea, Quaderni Mediterránea. Ricerche Storiche, 19 (201 1), pp. 275-292, en concreto, la figura de Neila se cita en pp. 286-287. 582 «Las Casas en que se congregaban los caballeros, solian quedar con el nombre de Sancti Spiritus . . . Y por las Bulas de Inocencio IV y Alexandro IV se reconoce que las Casas que la Orden tenia en Sicilia en la Diócesi Salpiense, se llamaban de Sancti Spiritus de MaytirD>. Regla de la Orden de la Caballería de Santiago: con notas sobre algunos de de sus

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Ya en España, hacia 1633, sabernos que es nombrado, corno religioso, para tramitar los pruebas de ingreso en la Orden de Calatrava del toledano Juan de Ayala Manrique, hijo de Pedro de Ayala, señor de Peromoro, una familia desde antaño inmersa en el círculo clientelar de los Rades-Rivade­ neira. 583 Bajo la protección de Felipe IV, este freile calatrava alcanzó sus mayores cotas de poder, Así en la Corte se rumoreaba que podía beneficiarse de un trueque entre prelados; de este modo, en marzo de 1644 un padre de la Com­ pañía de Jesús da cuenta del cambalache que se gestaba: Dícese que el cardenal Espínola por orden de Su 1.1ajestad va á Roma á ser protector y á tener la voz de España; que en orden á esto deja el arzobispado, y que el obispo de Sigüenza va á Santiago, y á Sigüenza el de Segovia y á Sego­ via D. Pedro de Neila, regente que hoy es del Consejo de Italia; de esto no hay cosa cierta. 584

No iba desencaminado este bien informado jesuita, ya que en las cova­ chuelas se estaba orquestando esta jugada a tres bandas, de modo que el do­ minico Pedro de Tapia terminaría en Sigüenza y su titular Francisco de An­ drade y Sotomayor (de nuevo un Andrade/Andrada se cruza en su camino) intentaba ser promocionado a la sede compostelana, Por su parte, el inmortal Quevedo, con su fina ironía, nos evoca el ansia y vanidad que consumía a frey Pedro de Neila, quien intentaba medrar a toda costa en esta hoguera de las vanidades que es la Corte de los Austrias, pues habiendo sido toda su vida religioso conventual de su Orden, ya septuagenario solicitó ser caballe­ ro calatravo,58 5 siendo aceptado en dicha calidad el 30 de junio de 1644, 586 Por fin, al año siguiente fue investido obispo de Segovia,587 sede que ocupó hasta su muerte, acontecida en dicha ciudad el 8 de noviembre de 1647, siendo sepultado en su catedraL En sus últimos años de vida construyó un palacio en Vinuesa, localidad de donde procedía su abuela paterna, que actuahnente se conoce corno palacio de Pedro de Neila, Todavía se conser-

Capítulos, y un apéndice de varÍos documentos que conducen a su íntelígencía y observancia, y mayor ilustración suya, y de las antigüedades de la Orden, Madrid, Imprenta de Sancha, 1791, p. 48. 58 3 Fue aprobado su hábito de caballero e1 15 de febrero de 1 634. SALAZAR y CASTRO, Luis de. Historia genealogica de la Casa de Lara . . ., op. cit., p. 128. 534 Cartas de algunos padres de la Compañía de Jesús sobre los sucesos de la monarquía entre los años de 1634 y 1648, en MHE, Madrid, 1 863, t. XVII, p. 445. 58 5 «Habiendo adquirido toda la hacienda y puestos que tenia siendo fraile de su Orden, ya hombre de setenta años, pudo con él tanto la vanidad descaminada que pidio y torno hábito de caballero.» CROSBY, James o. (ed): Nuevas cartas de la última prisión de Quevedo, Londres, Tarnesis Books, 2005, pp. 186 Y 343. 536 DÁVil,A JALÓN, Vicente. NobílíarÍo de Soda, Madrid, 1 %7, pp. 178-180. 537 Bula de Inocencio X, dirigida a Felipe IV, con el nombramiento de Pedro de Neila corno obispo de Segovia. l 2-VI-1 645, Roma. AGS. Patronato, lego 63, doc. 1 1 6.

LA PERSONA: EL HILO DE LA VIDA

165

va una notable colección de objetos artísticos, adquiridos fundamentahnente durante su periplo siciliano, pero dispersos en la actualidad: tapices, reposte­ ros con su blasón, colgaduras, camas con dosel, ricas escribanías de ébano y marfil, relojes de bronce, un oratorio con seis retablos de ébano; esculturas, cuadros y estampas piadosas salpicadas de algunas obras de arte profanas (de terna mitológico, bodegones, paisajes, dos cuadros de batallas, dos retratos de gran formato, uno del príncipe y otro de la reina); un mapa del reino de Sicilia; un óleo con sus armas episcopales; así corno diversas alhajas sun­ tuarias, entre las que destacarnos dos veneras lisas de oro con la cruz de Calatrava. 588 De su rica herencia dejó corno usufructuario y administrador a su pa­ riente Juan de Vinuesa, presbítero y mayordomo de confianza del obispo Neila. 589 Algunas de las obras atesoradas por este afortunado príncipe de la Iglesia, se agregaron con posterioridad a los bienes del mayorazgo fundado, a caballo entre los siglos XVI y XVII, por su antepasado Pedro Bravo. 590

5 88 MA1ESANZ DEL BARRIO, José. «La colección de arte de don Pedro de Neila, obispo de Segovia (1645-1 647)>>, Boletín del SemÍnarÍo de Estudios de Arle y Arqueología, 61 (1 995), pp. 433-452 Y «El mecenazgo artístico de Don Pedro de Neila, obispo de Segovia (1 6451647» >. Estudios segovianos. 92 (1 995). pp. 5-40. 5 89 Litigio entre Juan de Vinuesa, presbítero, cesionario de la Cámara Apostólica en el espolio Pedro de Neila, obispo de Segovia, con la justicia real y Diego Arnezquita, vecino de Madrid, sobre la validez de lUla bula de reserva de pensión, otorgada en favor de este último, y sobre jurisdicción del corregidor de Segovia para resolver la causa de nulidad de esta gracia (1 648). AHN. Consejos. leg. 27784. exp. 4. 590 Pedro Bravo de Neila, vecino de Gallinero (Soria), litiga con los herederos de Juan Mateo Gutiérrez, vecino de Soria, por el mayorazgo de su bisabuelo Pedro Bravo ( 1 685). AHPS. Corregimiento de Soria, caja 3529, doc. 4. Lustros antes Pedro Bravo Neila y su hij o homónimo, vecinos de Gallinero y Vinuesa (Soria) pleitearon con el soriano José de Neila, señor de la villa de Quintanar. al disputarle algunos bienes (1651-1659). ARCHV Pleitos Civiles, Alonso Rodriguez (F), caja 21 15, exp. 1 .

CAPÍTULO 2 EL PERSONAJE: RADES COMO A UCTORITASHISTÓRICA De quantas empresas esige la animosa fatiga de los estudiosos, ninguna tan ardua, en el sentir de graves varones, corno la composición de la Historia; no tanto por lo que consume de tiempo y estudio, ni por el vario genio de los lectores, a que es casi imposible satisfacer, por mas que el escritos se desvele en procurarlo; corno por ser tan difícil la averiguacion de la verdad. Francisco PrNEL y MONROY.

Retrato del Buen Vilssallo copiado

de la vida y hechos de D Andres de Cabrera, primero marques de Moya,

Madrid, en la Imprenta Imperial, por Joseph Femandez de Buendia, 1677.

El legado escrito dejado por frey Francisco Rades de Andrada desborda con mucho su obra cumbre, su trilogía de las Órdenes y Caballería de Santia­ go, Calatrava y Alcántara, fij ando las normas que regían no solo a santiaguis­ tas, calatravas y alcantarinos, sino dictando los estatutos de la Orden filial de Montesa, siendo pionero en imprimir una historia común de las Órdenes Militares castellanas. Es más, ahora sabernos que su obra de madurez, toda­ vía inédita, abarca la tratadística nobiliaria y que tampoco vacila a la hora de pergeñar la crónica de alguna de las familias de poder de la época. De escribir acerca de los linajes en la historia de las Órdenes pasó a cultivar la historia de los linajes, poniendo singular esmero en ponderar las estirpes de su círculo clientelar.

1.

Una pluma al servicio de las Órdenes Militares

A lo largo de su vida, Francisco Rades Andrada puso su bien afilada pluma al servicio de las Órdenes Militares a las que pertenece y bajo cuya

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sombra despliega una brillante carrera profesionaL Sus escritos evidencian una prosa ágil y su compromiso con la verdad histórica, pero también sus deseos de cumplir fielmente los encargos emanados de la corte filipina, en­ comendados a través del Consejo de las Órdenes, Este organismo colegiado de la administración polisinodial de los Habsburgo tenía sede en la Corte y su cabeza visible era el propio monarca, en calidad de administrador perpe­ tuo, confiándosele la gestión del gobierno y la justicia tanto a los vasallos de maestrazgos y prioratos corno a los mismos miembros pertenecientes a las Órdenes de Alcántara, Calatrava y Santiago. 1 No podernos descartar que Felipe II conociese personahnente al licen­ ciado Rades cuando visitó el Sacro Convento en Semana Santa de 1560, acompañado de la reina Isabel de Valois. Es más, probablemente coincidiera con él cuando presidió el Capítulo General de Calatrava celebrado en Ma­ drid entre 1560-156 1. Además, la estancia en la Corte de su capellán real, a caballo entre las décadas de 1560-1570, le haría frecuentar los crrculos de sociabilidad de los caballeros de hábito de las distintas Órdenes que pulula­ ban alrededor de palacio o las covachuelas, en calidad de catarriberas, bus­ cando cargos o intentando gozar del favor regio. 2 Sin embargo, no es casualidad que sea en el reinado de Felipe lI cuando Rades logre descollar de entre el resto de freiles al servicio de la monarquía. Durante su gobierno, se hace palpable la necesidad de trasladar los decretos emanados del Concilio de Trento a las Órdenes Militares, adecuándolas a los criterios contrarrefonnistas.3 En primer ténnino, era necesaria la reno-

1 ÁLVAREZ-COCA GONZÁLEZ, Maria Jesús. «El Consejo de las Órdenes Militares», Cuadernos de Historia Moderna, 15 ( 1994), pp. 297-323 Y «El Consejo de las Órdenes Militares y el Archivo Histórico Nacional. Historia de una excepción al sistema archivístico de la AdministraciórD>, en Ricardo Izquierdo Benito y Francisco Ruiz G6mez (coords.), Las Órdenes Milítares en la Península IbérÍca. \01. /l. Edad Moderna, Cuenca, Universidad de Castilla-La Mancha, 2000, pp. 1235-1 270. 2 GÓMEZ VOZM:EDIANO, Miguel Fernando. «Los catarríberas. Avatares, frustraciones y desengaños de los pretendientes a cargos de justicia en la Corte de los Felipes», en Maria Jesús Fuentes, Alfredo L6pez Serrano y Fernando Palanco (coords.), Temas de Historia de España. Estudios en Homenaje al Profesor Don Antonio Domínguez Ortiz, Madrid,Asociación Española del Profesorado de Historia y Geografía, 2005, pp. 1 95-217. 3 Una reforma que en el siglo xv se había intentado entre los freires santiaguistas y calatravos. A este respecto nos remitirnos a RODRÍGUEZ BLANCO, Daniel. «La reforma de la Orden de Santiago», En la España Medieval, 5 (1 986), pp. 929-960 Y O' CALLAGHAN, Joseph F. «Algunas peticiones de los frailes conventuales de la Orden de Calatrava», En la España Medieva¡ 1 6 (1 993), p. 55-58. Por entonces se imprime la obra Reformación de los conventos de la Orden de Sanctiago instítuyda por los Reyes Catholícos de gloriosa memoria, con authoridad Apostolica del Pontijice Alexandro, Papa Sexto de felice recordacion y mandad moderar e imprimir por la Catholíca E.M del rey don Phílípe Segundo, nuestro señor, y administrador perpetuo de la dicha Orden, Madrid, 1 567; así corno el Libro del origen diffiniciones y actos capitulares de la Orden de la ynclita caballería de Calatrava, Valladolid, 1 568.

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vación espiritual de sus miembros. En segundo lugar, es precisamente ahora cuando la Orden de Calatrava se desvincula del abad de Morimond. 4 del que dependía desde fines del siglo XII, fruto de la política regalista del Rey Pru­ dente, empeñado en conseguir una iglesia nacional. y, por último, tampoco debernos olvidar que este drama en tres actos se desarrolla con el telón de fondo de una fuerte pugua soterrada entre los caballeros cruzados y la mitra primada de Toledo. j De esto modo, en las décadas centrales del siglo XVI, el arzobispo de Toledo esgrimió su derecho de visita sobre maestrazgos y prioratos, al calor de los designios conciliares proclives al poder episcopal, enzarzándose pueblos y autoridades en un espinoso conflicto jurisdiccional que, en realidad, duró toda la Modernidad. En este contexto enrarecido, hay que enmarcar la trilogía de Rades de An­ drada y otros libros coetáneos. Con el bagaje académico atesorado en las famo­ sas Universidades de Alcalá y Salamanca, sus ávidas lecturas 6 y el acceso fran­ co a diversas bibliotecas y archivos tanto corporativos corno privados, Rades se rinde a la imprenta. En su breve autobiografía solventa con la parquedad que le caracteriza su primera relación con la cultura escrita: >, en José Manuel Lucía Megías y Maria Carmen MarÍn Pina (eds.), Amadís de Gaula: Quinientos años después. Estudios en Homenaje a Juan Manuel Cacho Blecua, Alcalá de Henares, Universidad de Alcalá, 2008, pp. 674-675. Sobre este género literario ver también GAUCHER, Élisabeth. La bíographíe chevaleresque. Typologíe d'un genre. XII"-.xV' sNxle, Paris, Champion, 1 994. 55 Por solo citar llll caso ver GARIBAY ZAM:ALLOA, Esteban de. I11vstraCÍones genealogÍcas de los Catholícos Reyes de las Españas y de los chrÍstianÍssÍmos de Francia, y de los Emperadores de Constantinopla, hasta el Catholíco Rey nuestro Señor Don Phílípe el JIy sus serenÍsÍmos hijos ( 1 596), Valladolid, Maxtor, 2012. 56 Una concepción nada novedosa, por otra parte. El famoso poeta y linajista Pedro Gracia Dei en su obra Blasón del linaje, apellído y armas de los Ma1donados asevera que «las cosas que son mas antiguas y remotas se estiman por mas preeminentes que las zercanas y nuevas», de paso que remonta la estirpe de los Maldonado hasta los godos. Una copia de dicho manuscrito genealógico, de fines del siglo XVII o inicios del XVIII, enAHNOB. Villagonzalo, caja 1 1 2, doc. 6, s. f. 57 PÉREZ DE LARA, Alonso. CompendÍo de las tres gracias de la Santa Cruzada, subsÍdÍo y escusado, Lyon, por Pedro Chevalier, 1 672, p. 206.

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se exigió el excusado, 58 para financiar su papel como paladines del catoli­ cismo, en un momento de apuros hacendísticos " y en vísperas de la quiebra de 1576, Había que dilucidar la dimensión eclesiástica de las Órdenes Mi­ litares, casi mesiánica, para que contribuyesen al esfuerzo articulado desde Madrid y que contaba con la complicidad de Roma, Además, en 1573 tanto don Sebastián en Portugal como Felipe II en España estuvieron de acuerdo en que debían respetarse los privilegios tradicionales de tan loables institu­ tos, tamizando desde el regalismo monárquico los postulados episcopalistas emanados del Concilio de Trento, Que había que poner una vela a Dios y otra al diablo lo demuestra que, a la par que se exige una mayor presión fiscal sobre comendadores y maes­ trazgos (lo que necesariamente habría de repercutir sobre sus vasallos), por entonces Felipe II impulsa la construcción sistemática de pósitos de trigo (una especie de bancos rurales, que prestan trigo para la siembra o el panadeo) en todos los partidos y villas de la Orden de Calatrava, concediéndoles unas mismas ordenanzas 60 que intentan garantizar el abasto básico de sus vasallos,

1 3.

Diffiniciones de la Sagrada Religion, y Cavalleria de Sancta Maria de Montesa y Sanct Jorge, jiliacion de la indita milicia de Calatrava ( 1573)

La visita girada, a inicios de 1573, a la Orden de Montesa por el caballero don Álvaro de Luna Mendoza y el licenciado Francisco Rades de Andrada, acompañados de fray Jerónimo de Valls, abad del monasterio de Valldigna, tenía un alto significado simbólico. La situación que hallaron era una Orden dominada por los Borja y sus clientelas, la relajación de sus votos eclesiás­ ticos y el amparo del fuero de la Orden para perpetrar abusos, traicionan­ do los estatutos primigenios de Montesa. Para remediar tales desajustes, los visitadores designados por el monarca emprendieron la renovación de sus estatutos. El peso de esta labor recayó en Rades, quien a instancia del soberano añadió nuevas reglas que ordenaron publicar y difundir de imnediato entre los miembros del santo instituto. El resultado fueron las Diffiniciones de la Sagrada Religion, y Cavalleria de Sancta Maria de Montesa y Sanct Jorge,

58 CARPINTERO AGUADO, Lucía. «La contribución de las Órdenes Militares al Subsidio y Excusado», en Jerónimo López-Salazar Pérez, Las Órdenes Mílítares en la Península Ibérica, n. Edad Moderna, Cuenca, Universidad de Castilla- La Mancha, 2000, pp. 1737-1757. 59 BOUZA ÁLVAREZ, Fernando Jesús. «Críticas al rey en la década de 1 570: rezos y hacienda» en José Martínez Millán (dir.) 1 , Felipe II (1527-1598): Europa y la monarquía católica, Madrid, Universidad Autónorna de Madrid, 1998, 11, pp. 103-132. ro 7-X-1 572, Madrid. AHN, OOMM,AHT (RSC), leg. 44879, fI 53ry ss.

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filiacion de la inclita milicia de Calatrava. Hechas por los ilustres Fray Don Á1varo Luna y Mendoza cavallero de la dicha Omen de Calatrava, y e1 licen­ ciado Francisco Rades y Andrada, visitadores generales; con asistencia del Muy Reverendo Padre Frey Hieronimo Valls, abad de Valldigna de la Omen de Císter. En el año de MDLXXIII, Valencia, imprenta de Pedro de Huete. 61 Definiciones que, solo con unos mínimos añadidos, regirían dicha Orden, al menos en teoría, hasta su extinción. Así, según su propio testimonio: , Studia Historica. Historia Moderna, 24 (2002), pp. 97140, p. 1 0 1 . 63 CERDA 1 BALLES1ER, Josep. EIs cavallers i religiosos . . ., op. dt., 1, pp. 1 66-167. 69 CERDA 1 BALLESTER, Josep, «El castell de Montesa en 1585: un exemple de mala gestió», 1 Congrés d'Historia de La Costera, Valencia, Universitat de Valencia, 2006, pp. 283-293. 70 «Después vino el Maestro de la caballeria de Montesa, varón de mucha autoridad en el reino de Valencia, con algunos caballeros suyos, al cual, corno Su Majestad le negase las manos corno a persona que merecía más, en señal de mayor amistad le abra9ó con mucha cortesía y se fue». COCK, Emique. Relación del viaje hecho por Felipe II en 1585 a Zaragoza, Barcelona y Valencia. escrita por . . ., Alfred Morel-Fatio y Antonio Rodríguez Villa (eds.), Madrid, Imprenta y Estereotipia de Aribau y Compañía, 1876, p. 226.

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jación de normas religiosas, incumplimiento de los expedientes para infor­ marse de los linajes de los candidatos, embargos inquisitoriales arbitrarios en menoscabo de su patrimonio,7 1 etc. Tales irregularides intentarían ser atajadas de raiz por ambos visitadores; 72 que se pasaron los siguientes me­ ses recorriendo las posesiones montesinas y tornando posesión de ellas en nombre del monarca. Por fin, en 1593, la Orden de Santa l\1aría Montesa y San Jorge de Alfama quedó definiti varnente bajo la órbita de los monarcas españoles. Su gobemanza se atribuyó al Consejo de Aragón; un freile de Montesa ejercería de asesor gene­ ral; otro caballero seria lugarteniente general, residiría en el reino y presidiría un tribunal, asesorado por dos letrados de la Real Audiencia; también ese mismo año se fundó en Valencia el Colegio de San Jorge, donde se alojarían los freiles de la Orden que se formaban en la universidad. Corno colofón de su renovación corporativa, el 9 de octubre de 1595 se giró visita al convento-fortaleza de Santa l\1aria de Montesa por freiles de su propia Orden; 73 unos religiosos que, desde 1604, serían destinados a los curatos bajo jurisdicción de la Orden.

1.4.

Diffiniciones de la Orden y Cavalleria de Calatrava (1576)

Pasa el tiempo inexorablemente, y en la asamblea de la Orden Calatrava celebrada en la Villa y Corte entre 1573-1576 se decide comisionar a Rades para compilar las normas, reglas y estatutos calatravas. 74 El 13 de febrero de 1573 se recordó a los caballeros de hábito la obligación de cumplir el pre­ cepto que les obligaba a que, tras ser investidos, debían profesar tres meses en un convento, después de servir otros seis meses en galeras, lo que muchos

71 El pésimo estado de las finanzas de la Orden en ANDRÉs ROBRES, Fernando. «Política y economía en el Consejo de Arag6n: entre la euforia y la ruina (La obra del último maestre y la situación económica de la Orden de Montesa a finales del siglo XVI)>>, en As Ordens Militares e de CavalarÍa na Const11l(:ao do Mundo Ocídental, Lisboa, Colibri, 2005, pp. 271-291. 72 El original, con las firmas autógrafas de los visitadores, en «Ordinaciones para el sacro Convento de la Orden de Montesa, hechas por Don Juan Pacheeo, caballero de la Orden de Calatrava, y el licenciado frey Juan de Quintanilla, capellán de su Magestad y Prior formado de la Iglesia e Santa María de Calatrava de la ciudad de Valencia, delegados del señor rey Don Philipo 11, tercero administrador perpetuo de la Orden de Calatrava, en 16 de deciembre (sic) 1592» . RAH. Salazar y Castro, 1-51, ff. 43r-50r. 73 «Principio y Origen de la Orden de Montesa»; manuscrito anónimo, sin fecha ni lugar, pero datable por su letra a fines del siglo xvrn o principios de la siguiente centuria. AHN, OOMM. Consejo, lego 64%, exp. s. n., s. f. 74 Llama la atención este encargo, cuando hacía solo llll lustro que se había impreso la compilación del Capítulo General de 1560 por MARAÑÓN, Miguel. Libro del origen, diffiniciones y actos capitulares de la amen de la ynclíta cavalleria de Calatrava, Valladolid, imprenta de Adrian Ghemart, 1568.

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obviaban. 75 En esta senda, sabemos que en el capítulo Definitorio de la Or­ den, celebrado en el convento de San Jerónimo madrileño se platico y acordo que seria bien y convenia a la Orden y personas del habi­ to della, que se ordene e yrnprirna un libro en que se pongan todas las leyes, Diffiniciones y actos capitulares de la dicha Orden [ . . . ] El qua! se acordo en el dicho Capitulo Diffinitorio se sometiese al licenciado fray Francisco Rades de Andrada [ . . . ] para que lo haga con mucho cuidado y curiosidad, como el caso lo requiere [ . . . ] y por la presente es nuestra voltmtad [ . . . ] que las costas que en todo ello se hiziere, se pague el Tesoro de la dicha Orden. 76

Además, los congregados acordaron que >, 77 así como que los colegiales de la Orden en Salamanca debían hablar siempre en latín. Signo de los tiempos, las Definiciones calatravas de 1573, a buen seguro seducidas por la gloriosa crónica de la Orden glosada por Rades y tal vez a su instancia, aborda en sus capítulos 18 al 20 dedicarle una especial atención al Archivo y Biblioteca del Sacro Convento de Calatrava la Nueva. A este tenor, en su capítulo 18, se prescribe que, a partir de entonces, el prior o su sustitu­ to, designarían por bibliotecario a un freile conventual, encargado de barrer cada semana la estancia, limpiar los libros y tenerlos ordenados, ocupándose en abrir y cerrar la biblioteca una par de veces cada día >, 134 unos personajes amantes de las crónicas escritas por Rades; 135 para luego pasar a desgranar en profundidad la genealogía

127 ACC, cajas 48, does. 5-12 y 65, doc. 40. 128 ACC, cajas 5 1 , 1 0 - 1 1 Y 13, así como caja 54, doc. 56. Por ejemplo, se conserva la carta de pago otorgada por el impresor Juan González al apoderado de Eugenio Álvarez Ponce de León, por los 393 reales del resto de la impresión del porcón presentado en el pleito de tenuta por el condado de Casares. 20-IX-1626, Madrid. ACC. caja 57, doc. 45. 129 Solo un dato. A su muerte, las maltrechas arcas ducales arrojaban una deuda que ascendía a más de 150 millones de rnaravems. GARCÍA HERNÁN, David. Aristocracia y señorío en la España de Felípe JI. La Casa de Arcos, Granada, Universidad de Granada, 1999, p. 162. 1 3 0 Volumen facticio con la genealogía de la Casa de Cedillo. Letra del siglo XVIT. ACC, caja 42, doc. 1 , fI 9r-28r. 1 3 1 ACC, caja 42, doc. 1 1 . 132 Genealogía de los Ponces de León, escrita por Rades de Andrada, en Papeles Genealógicos BNE. mss. 1 1 596, ff. 138r-161 v. Exlibris: «De la libreria de don Juan Alphonso Guerra», signatura olim «Y-63». De formato folio, carece de notas marginales. Acerca de su colección genealógica ver ANDRÉs, Gregorio de. «La biblioteca nobiliaria del cronista Juan Alfonso Guerra, rey de armas de Felipe V, en la Biblioteca Nacional», Boletín de la Real Academia de la Historia, 1 8713 ( 1 990), pp. 373-402. 1 33 Ibídem, ff. 138r-148v y 1 57r- 16lr. 134 Ibídem, f. 148v. 1 35 La librería de obis¡:x> placentino Pedro Ponce de León (t1 573), fue visitada por Ambrosio de Morales para incorporarla a las colecciones reales. FERNÁNDEZ POMAR, José Maria. «Libros y manuscritos procedentes de Plasencia. Historia de una colecciórD>, Hispania Sacra, 1 8/35 (1965), pp. 33-102.

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de los señores de Cedilla y Tocenaque. 136 Es evidente que para historiar a esta estirpe consulta sus lugares de la memoria toledanos habituales, en especial el monasterio cisterciense de San Clemente137 y el archivo del mayorazgo Antonio Álvarez de Toledo Heredia Ponce de León y Luna (III señor de Cedilla y futuro 1 conde, cuyo título compra en 1624). Así, al hablar de su abuelo y patriarca de los Álvarez de Toledo, el secretario regio Femán Álvarez de Toledo, escribe que fundó mayorazgo por facultad de los Reyes Católicos a favor de su primogénito y de su esposa l\1aría Ponce de León « cuia facultad y mayorazgo yo e visto y las demas escrituras tocantes a los hijos de dicho Eman Alvarez de Toledo ansi de las encomiendas que tuvieron corno de otras haciendas en que los heredó su padre: que por escusar prolijidad no las cito aquÍ». 138 Asimismo, al referirse a su heredero, Antonio Álvarez de Toledo, intentó acrisolar su imposible fidelidad a la Corona durante las Comunidades sobre el débil andamiaje de las fuentes familiares orales (que evocan un incidente en el ayuntamiento de Toledo con Juan Padilla) y documentales (las graves heridas recibidas en combate por su mayordomo Gonzalo Mexía « corno me consta por papeles que e visto de mucha fe y relaciones de personas que yo vi que se hallaron presentes» ). 139 Peor aún, resbala peligrosamente al aceptar por buena una carta, posiblemente falsa, en que el emperador agradece su fidelidad al señor de Cedilla nada menos que desde Londres, el 10 de junio de 1522, y le promete que a su retomo le haría alguna merced; 140 cuando la merced que en realidad le hizo fue despojarle de su señorío y de su acosta­ miento por comunero. El epilogo de este breve nobiliario manifiesta su devoción por los linajes que glosa, así corno su firme voluntad para continuar en su lmea, historiando en cuan­ do pudiese la estirpe de los Álvarez de Toledo. Pero atengámonos a su escrito: Con este papel va la genealogía de los Ponyes de Leon solo se me tenga en servicio la voluntad con que he tornado este trabajo juntando tan gran numero de escrituras y privilegios reales que e visto con los ojos para comproballa sin apartamos de la puntualidad y estilo breve con que cornunmente escrivo; y si mi salud diere lugar dejare escrita la genealogía de los señores de Ajofrín y de Cedillo que es una misma desyencencia por linea masculina. Donde parezera quan estimados merecen ser estos cavalleros en este Reyno donde tienen tan antigua naturaleza: y casi se iba acabando su memoria, corno el de otros linajes muy ilustres de esta ,iudad como son los Fuensalidas y Palomeques y Roelas y otros hasta que tope con el testamento de Nuño Alonso gran alcalde de Toledo [ . . . ] ll111tase con esto ayer casado Antonio Alvarez de Toledo con doña Maria Pon�e de Leon primogenita de la Cassa de Arcos y ser yo tan aficionado servi136 Ibídem, ff. 148v y ss. 137 Ibídem, f. 1 50r. 138 Ibídem, f. 1 53r. 139 Ibídem, f. 1 53r. 14J Ibídem, f. 1 54r.

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dor de los cavalleros de este esclarecido linaje de los Ponces; por sus grandes meritos y señalados hechos de armas. 141

En dicho manuscrito, también se recoge el siguiente escolio explicativo: «En Toledo a 18 de henero de 1598 y firmado de su nombre en un papel suel­ to que su original a la letra concuerda con este embio la dicha genealogía, Anse añadido en ella algunos casamientos hechos después del dicho año y los hijos que dello s an procedidQ» . 142 Obsesionado por la historicidad de sus escritos, Rades anota, rectifica y amplia sus informes genealógicos hasta el último aliento y no deja de enaltecer a los grandes grupos de poder coetáneos en una perfecta simbiosis entre la pluma, la sangre y el mérito, los tres pilares que sustentaban el microcosmos caballeresco. Curiosamente sabemos que una breve referencia de los Ajofrines fue es­ crita a caballo entre los siglos XVI y XVII. 143 El borrador que hemos localizado está cuajado de apresurados bocetos heráldicos, aunque no nos atrevemos a atribuirle su paternidad a Rades de Andrada. Desde luego, no es el mismo manuscrito que se conserva en la Real Aca­ demia de la Historia, Colección Salazar y Castro, incluido en un compendio genealógico intitulado Familias de Toledo, mucho más prolijo y atribuido al padre Jerónimo Román de la Higuera (1538-1611), jesuita profeso desde 1563 y autor también de unos descabellados cronicones que pretendían afian­ zar la primacía de la iglesia de Toledo. 144 No obstante, este fabulista es un perfecto conocedor de los entresijos históricos de la Ciudad Imperial y de sus familias de poder, 145 hasta el punto que cuando aborda la trayectoria del linaje toledano de los Ortiz cita corno autoridad a nuestro Rades de Andrada. 146

3.

Crónicas y cronistas oficiales en la encrucijada del Siglo de Oro (1570-1620)

En el pasado, las instituciones o linajes más poderosos, corno la Iglesia, la Corona, determinadas Casas aristocráticas o las Órdenes Militares, inter­ pretaron que ellos habían sido claves para el devenir de la historia del reino

141 Ibídem, ff. 16lr-v. 142 Ibídem, ff. 161 v. 143 'De los Ajofrines'. Genealogía de la Casa de Cedillo desde Tello Meléndez hasta Baltasar Álvarez de Toledo. ACC, caja 42, doc. 7, ff. 42r-43r. 144 RAH. Salazar y Castro, lego 9/229, Casa de Ajofrín (ff. 180r Y ss) De los Ajofrines y Toledo, señores de Cedillo (ff. 1 93r-ss). 145 ROMÁN DE LA HIGUERA, Jerónimo (SI). Familias de Toledo (mss.), RAH, mss 9/229. 146 ROMÁN DE LA HIGUERA, Jerónimo (SI). Memoria de 10 que escribio el padre Ygueras

de la Compañia de Jesus del linaje de los Ortizes de Toledo y otras familias que casaron con el (ms3.). RAH, Salazar y Castro, 9/264, f 524v.

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y hallaron quiénes glosaran sus gestas, dándole un halo de verosimilitud a sus escritos al basarse en anales, libros de hazañas, crónicas o cronicones, todavía más antiguos, que acrisolaban la sangre derramada por los reyes del Cielo y de la Tierra. En este contexto, no era tan importante decir toda la verdad, sino incidir en los pasajes más interesantes para adobar una buena narración. Además, cuando estos panegíricos aludían a virtudes tales corno la fe, la piedad, el valor, la prudencia, la generosidad o la inteligencia de personajes e instituciones, de algún modo justificaban su esplendor presente y su afán de proyectarse hacia el futuro. Así pues, los cronistas oficiales se insertan en la gigantesca maquinaria de la propaganda regia, 147 en tanto que las oligarquías orquestan toda una ofensiva de papel para consolidar o acre­ centar la reputación heredada. Desde inicios de su reinado, Felipe II encargó a los cronistas glosar el pasado antiguo y medieval de España. 148 Uno de los primeros en recoger este testigo fue Jerónimo Zurita ( 1512- 1580), qnien entre 1562-1580 dio a la imprenta su magua obra sobre la Corona de Aragón, que abarcaría desde la época islámica hasta Fernando el Católico. 149 De este modo, consciente la Corte de la importancia en conocer el pasa­ do, se propicia la monumental encuesta conocida corno Relaciones Topográ­ ficas de los pueblos de España ( 1572-1580), continuadora de la Cosmografía de Fernando Colón y de los trabajos de Pedro Medina y Florián de Gcampo. Las autoridades civiles y eclesiásticas debían responder a un cuestionario que les hacían llegar corregidores y gobernadores. El proyecto inicial abar­ caba toda Castilla, pero en realidad solo respondieron la mayor parte de las villas y ciudades de la submeseta sur (lo que hoy serían Madrid, Guadalajara, Toledo, Cuenca, Ciudad Real), parte del Reino de Murcia (sobre todo de la

1 47 GARCÍA HERNÁN, Enrique. «La España de los cronistas reales enlos siglos XVI y XVII», Norba, Revista de Historia, 1 9 (2006), pp. 125-150 Y KAGAN, Richard L. Los Cronistas y la Corona. La política de la historÍa en España en las Edades Medía y Moderna, Madrid, Centro de Estudios Europa Hispánica-Marcial Pons, 2010, p. 106. 1 43 El papel medular concedido JXlf la corte filipina a la historia en MONlERO DÍAz, Santiago. La doctrina de la Historia en los tratadistas del Siglo de Oro, Madrid, Cosano, 1 948 pero sobre todo en BOUZA ÁLVAREZ, Fernando Jesús. «Monarchie en letlres d'imprimerie: typographie et propagande au temps de Philippe 11», Revue d'hisloÍre moderne el conlemporaine, 41 (abril-junio de 1994), pp. 206-220; ALVAR EZQUERRA, Alfredo. «Sobre la historiografía castellana en tiempos de Felipe 11», Torre de los Lujanes, 32 ( 1 996), pp. 89-106 Y «La historia, los historiadores y el rey en la España del Humanismo», en Alfredo Alvar Ezquerra y Miguel Ángel de BUlles Ibarra (coords.), Imágenes Históricas de Felipe JI, Madrid, Centro de Estudios Cervantinos, 2000, pp. 217-254; así corno USUNÁRIZ, José María. «El historiador del Siglo de Oro o la historia. Narración de verdades JXlr hombre para enseñar a vivir biero>, en Ignacio Arellano Ayuso y Marc Vitse (coords.), Modelos de vida en la España del Siglo de Oro, Madrid, lberoamericana/Vervuert, 2004, 11, pp. 91-1 16. 14) ZURITA, Jerónimo. Anales de la Corona de Aragón, Zaragoza, Juan de Lanaja, 1 6 1 0, 7 vols.

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provincia de Albacete, más algunos pueblos de Murcia), además de determi­ nadas localidades limítrofes (pertenecientes a actuales provincias de Cáce­ res, Jaén y Alicante), Aunque la calidad de las respuestas es muy dispar, y parece que se perdieron algunas respuestas, la información acumulada en la Real Biblioteca de El Escorial y la Real Academia de la Historia nos ofrece un caleidoscopio fascinante y costumbrista de la Castilla profunda, Lustros después se acometería una empresa similar, aún más colosal, para el Nuevo Mundo, Entre los renovadores de la historiografía de este fecundo periodo tuvo renombre el guipuzcoano Esteban de Garibay y Zamalloa (1533-1599), 1 50 coetáneo de Rades, y con quien a buen seguro se topó durante la estan­ cia de ambos en Toledo, si no antes, Ya maduro, en 1574 se desposó con una quinceañera toledana, Luisa de Montoya, con quien se veló dos años después, Al menos desde 1572, Garibay ya anduvo por la Ciudad Imperial, intentando trasladar, con más pena de gloria, las reliquias de San Eugenio y Santa Leocadia a la catedral primada, Por entonces ya picaba alto e in­ tentó, infructuosamente, ser nombrado cronista regio, Instalado en Toledo, se carteó con cortesanos y visitó en diversas ocasiones palacio, haciéndose ver entre la legión de catarriberas (pretendientes a un cargo) que pululaban en la Corte del Rey Prudente, Su suerte cambió en la década de 1580, gracias a su familiaridad con el clan de los Idiáquez. 1 5 1 En 1583, el secretario Juan Idiáquez quedó fascinado por sus ilustraciones genealógicas y frey Francisco de Albornoz, consejero de Órdenes, llegó a decir « que en su Consejo tienen mucha necesidad de esta obra» . 152 En febrero de 1585 volvió a Toledo para seguir haciendo acopio de papeles para afrontar el encargo regio de hacer una genealogía de la Casa de Austria; además, en 1587, se cumplió su anhelo de trasladar a la Ciudad Imperial los restos de santa Leocadia, aunque no llegó a capitalizar este soberbio acontecimiento para los toledanos. Mientras

1 5 0 ALVAR EZQUERRA, Alfredo. «Esteban de Garibay ( 1 533-1599), o doce claves y algunas relectiones para entender cómo paralizó la renovación historiográfica española», Revista de Historiografía, 1 5 (20 1 1 ) , pp. 90-97. 1 5 1 Don Juan Idiáquez ( 1 540-1614), señor de esta Casa en la anteiglesia de San Juan de Anceta de Tolosa (Guipuzcoa). Su padre fue [rey Alonso Idiáquez, comendador de Alcolea (Calatrava) y Estriana (Santiago), secretario y consejero de Estado de Carlos V, a cuyo servicio murió en Alemania (1547). Menino del principe don Carlos; en 1 545, el emperador le concedió un hábito de la Orden de Santiago, y luego disfrutarla de las encomiendas de Villaescusa de Haro y Momeal, además de la Mayor de León y la dignidad de Trece. Feli­ pe II le hizo embajador en Génova y Venecia. A su vuelta fue consejero del Real de Guerra. En 1599, Felipe III le nombró presidente del Consejo de Órdenes y caballerizo mayor de la reyna. Murió a la sombra de su sobrino, el obispo de Segovia. 152 ALVAREZQUERRA, Alfredo. «Esteban de Garibay ( 1 533-1 599)>>, 2011, p. 57; consultado en línea http://www.proyectos.cchs. csic.es/humanismoyhumanistas/s:ites/proyectos. cchs. csic. es.humanismoyhumanistas/files/ESTEBA N%20DE %20GARIBAY % 20PA RA %20LA %20 WEB%20CERRADO. pdf.

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tanto, entre 1587-1580, consulta los diplomas del Hospital de Santiago de los Caballeros (Toledo). Cuando, por fin, fue nombrado cronista por el rey en 1592, disfrutó poco de este anhelado título que lo consagraba en el fir­ mamento de quienes velaban por el buen nombre de la monarquía católica. Es más, parece que buena parte de su obra genealógico-nobiliaria fue pla­ giada por Alonso López de Haro, consejero de Órdenes Militares, 1 53 lustros después de su muerte. Por otra parte, la descomunal empresa de centralizar en la residencia filipina todo el saber de la época condujo también a emular esta conducta a los hombres más eruditos de la época. Tal es el caso del arzobispo An­ tonio Agustín, humanista precursor del estudio histórico de las fuentes del derecho, participó en la confección del Corpus Iuris Canonici, compilación oficial del Derecho canónico auspiciada por Gregorio XIII en 1580; 154 gran aficionado a la numismática, la epigrafía, la heráldica y los emblemas, fue pionero en emplear una arqueología en ciernes con visos científicos para analizar tanto la numismática corno la epigrafía clásica; 1 55 de manera que su colección de libros engrosará los fondos escurialenses en 1586. Una biblio­ teca real a la que, por cierto, también fueron a parar más de cuarenta y seis libros de lina-jes que se custodiaban en el Archivo de Simancas, según Pedro Jerónimo Aponte, para que «estuviesen con mas recato y se oscureciesen las manchas tan reparables que tocan a las Casas» . 156 Sin embargo, después de la derrota de la Armada Invencible ( 1588), la Corona decidió dar un giro copernicano a la labor de sus cronistas y comienza a ensalzarse la historia más reciente para galvanizar los ánimos patrios y contrarrestar la Leyenda Negra que comenzaba a cernirse sobre el Imperio español. No es casualidad que sea por entonces cuando se fragüe la polémica de quién podía escribir historia y quién podía acceder al hasta entonces hermético patrimonio documental de la Corona. Así mientras que la Instrucción para el gobierno del Archivo de Simancas, a imagen y se­ mejanza de la Torre do Tambo portuguesa, recientemente incorporada a la Corona de Castilla, prohíbe explícitamente entregar copia de sus fondos, salvo licencia firmada por el rey, y negaba la posibilidad de que salieran

153 LÓPEZ DE HARO, Alonso. NobílíarÍo de los Reyes y Títulos de España, Madrid, por Luis Sánchez, 1 622. 154 Su vasta erudici6ny aficiones enALCINA ROVIRA, Juan Francisco y SALVADÓ RECASENS, Juan. La biblioteca de Antonio Agustín: los impresos de un humanista de la Contrarreforma, Zaragoza, Instituto Fernando el Católico, 2008. 155 No es casualidad que emplee el castellano para escribir sus Diálogos de medallas, inscripciones y otras antigüedades, Tarragona, Felipe Mey, 1 587 y el inédito hasta el siglo XVID, Diálogos de las Armas y línajes de la nobleza de España. 155 CARRASCO MARTÍNEZ, Adolfo. Sangre, honor y privilegio. La nobleza española bajo los Austrias, Barcelona, Ariel, 2000, p. 143.

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originales sin la quiescencia regia; 157 en paralelo, Claudia Acquaviva, Gene­ ral de la Compañía de Jesús, ordenaba a sus correligionarios limitarse solo a escribir historias religiosas, También es ahora cuando se apuesta por una narración directa de los acontecimientos históricos que relatasen los logros de unos dominios so­ bre los que nunca se ponía el sol, pero sin adornos ni excesivos circun­ loquios y cimentados en las crónicas o los documentos de los archivos reales, monásticos, municipales o catedralicios, El licenciado Francisco Rades pertenece a una generación de cronistas que, corno Ambrosio de Morales o Jerónimo Zurita, no dan pábulo a leyendas y cronicones, En este sentido, nos parece tremendamente esclarecedor el testimonio recogido por Gregorio Mayans ( 1748), descubridor de la figura de Antonio Agustín y de su manuscrito Dialogo de las armas i linajes de la nobleza de España, cuando, en su prólogo, el autor comenta un pasaje de la correspondencia mantenida entre dicho arzobispo de Tarragona y don Pablo de Santa María, condenando la costumbre de su época de recurrir a fábulas para construir las genealogías: Dice Seneca, que los hombres de su tiempo, contando su linaje, donde les [al­ tava a su gusto algun ascendiente, ponian un Dios; assi agora todos quieren en sus linajes reyes, i no se contentan menos que con coronas reales, i si el escritor que ha de buscar las verdades, i no los deseos, i devaneos, no contenta con ellos, es luego condenado. 1 58

Esta misma senda fue seguida, con acierto, por Antonio de Herrera ( 1549-1626), cronista oficial de Felipe II, primero mayor de las Indias (desde 1596), y luego real ( 1598), culminando su carrera corno secretario de Feli­ pe III (1605), cayendo luego en desgracia. 1 59 No hay que perder de vista que, por entonces, en los círculos cortesanos más cultos solo se hablaba del escándalo provocado por la publicación de la obra de Juan Femández de Velasco, intentando demostrar un anacronismo inverosímil pero que se tenía corno dogma de fe por estos lares : la venida a

157 RODRÍGUEZ DE DIEGO, José Luis. Instrucción para el gobierno del Archivo de Símancas, Madrid, Ministerio de Educación y Cultura, 1998. 15 8 MAYANS 1 SISeAR, Gregorio. Dialogas de las armas, i línages de la nobleza de España los escrivio D. Antonio Agustín, Arzobispo de Tarragona; cuya obra posthuma ha cotejado con varías Libros, assi manuscritos, como impressos pertenecientes a los mÍSmos assuntos, i con dílígencia ha procurado enmendarla Don f. . .}. autor de la vida adjunta de Don Antonio Agustín, Madrid, por Juan de Zúñiga, 1734, XXXIX. LÓPEz y LÓPEz, Ángel Manuel. «La obra de Antonio Agustín, vista por Gregorio Mayans y Sisear» , Teoría y derecho: Revista de Pensamiento Jurídico, 4 (2008), pp. 289-293. 159 Esta evolución en GARCÍA ORO, José y Sn,VA PORlELA, Maria José. La monarquía y los libros del Siglo de Oro, Alcalá de Henares, Centro Internacional de Estudios Históricos Cisneros, 1999.

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España del apóstol Santiago el l\1ayor. 160 Escrita en 1603 pero impresa en 1605, esta obra fue duramente censurada por el padre Mariana, por emplear fuentes poco o nada fiables como eran los falsos cronicones. 161 En respuesta a tan dura crítica, el condestable de Castilla elevó una consulta al Consejo de Estado para que se prohibiese escribir historia a nadie que no fuese cronista reaL Había demasiados intereses enjuego, como para perder el control sobre la memoria colectiva. En esta coyuntura debe enmarcarse la conocida misiva, fechada en 1606, enviada por Diego Sarmiento de Acuña al duque de Lerma y su dictamen sobre la propuesta de nombrar cuatro cronistas y atajar los problemas sus­ citados por el descontrol de las obras que se imprimían en España. Recojo aquí solo parciahnente esta carta, por otra parte archiconocida por los espe­ cialistas: De los Reyes Católicos Don Fernando y Doña Isabel, del emperador Carlos V, y de Don Felipe 11, nuestro señor y padre de Vuestra Majestad, han escrito mu­ chos. Pero no sé si tan bien corno lo merecían los heroicos hechos de tan glo­ riosos príncipes, ó si algunas historias y relaciones no les han menguado más la gloria que pudiera hacerlo el silencio [ . . . ] [Lamentando] la infinidad de libros desordenados que cada dia se imprimen y publican, medicinando á la nacion, y su omisión y vicio, y acudiendo á ello con remedio tan eficaz y justo como pide mi obligación al servicio de Vuestra Majestad, y mi inclinación a la historia, y el amor a mi patria [ . . . ] mirando con este cuidado algunas impresiones, he topado con las que he dicho, lo que me ha movido a escribir este papel, y para ello he visto muy gran parte de lo que se ha escrito en la materia de que trata, y me ha sido más fácil reducirle á la verdad que contiene, y me ha parecido justo ponerle en las reales manos de Vuestra Majestad, trayendo desde su principio la relación de las historias, para que se vea y reconozca el cuidado y atención que se debe tener en la elección de coronistas, y contener la turbia corriente de libros que en todo género de facultades hoy se publica, y cuánto conviene procurar con cuidado y premio que se escriba bien, y estorbar con rigor el que se escriba mal. 162

1ro FERNÁNDEZDE VELASCO, Juan. Dos discursos en que se defiende la venida ypredicacion del Aposto1 Santiago en España sacados de la líbrería de Juan de U:-1asco, Condestable de Castilla [ . .} impressos por orden del Reyno en Iunta de Cortes, Valladolid, por Luis Sánchez, 1605.

1 61 Este intelectual fue siempre incómodo para el poder. Si en 1599 justificaba el

tiranicidio, en 1 609 clamaba contra las manipulaciones monetarias y el uso torticero de la dispensa de hábitos o encomiendas, demlllciando la corrupción del sistema, por todo lo cual fue apesadumbrado con un litigio que le hizo recluirse en su propio mundo desde 1609-1610. Gonzalo FERNÁNDEZ DE LA MORA: «El proceso contra el padre Mariana», Revista de Estudios Políticos, 79 (1993), pp. 47-98. 162 SARM:IENTO DE ACUÑA, Diego. Cinco cartas político-líterarias de Diego Sarmiento de Acuña, primer conde de Gondomar, embajador a la corte de Inglaterra, 1613-1622, ed. Pascual de Gayangos, Madrid, imprenta Rivadeneyra, 1 869, pp. 99 Y ss.

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En 16 14, el Consejo de Estado, ocupado por lo general en asuntos graves de los reinos de España, debate la idea de restringir para que escribieran y, sobre todo, publicaran los libros de historia en exclusiva los cronistas regios, Vana pretensión cuando el hamo tipographicus ya campaba por sus respetos y todas las imprentas europeas se hacían eco de lo divino y de lo humano, Corno colofón del espíritu reinante entre quienes cultivaban la historia en la España de la época valga lo escrito en un memorial anónimo acerca de los secretarios señoriales: Todos estos historiadores digo y tengo para mi a todos y a cada uno que son to­ das sus historia muy buenas y excelentes y que nos enseñan mucho, pero tengo por seguro cierto y verdadero los instrumentos originales antiguos, pues en me­ dio de la mucha y notable representacion y autoridad que se debe dar a plumas tan eruditas los instrumentos antiguos estan ellos por si mismo representando autoridad, gravedad y verdad. 163

4. ¿Quién le pone el cascabel al gato? La desaparición de frey Francisco dejó un importante vacío historiográ­ fico. Las Órdenes Militares españolas necesitabau un cronista oficial y e! advenimiento al trono de Felipe III en 1598 aconsejaba que el nuevo monar­ ca tornase una decisión al respecto. Mientras tanto, no faltaron eruditos que redactaron por iniciativa propia alguna apología de los freiles castellanos. Es e! caso de! dominico Agustín Salucio (1523-1601), teólogo y predicador famoso del reinado de Felipe II, a quien se le atribuye el manuscrito Dis­ curso sobre limitación de estatutos y de las calidades de los caballeros de Calatrava, 164 donde ensalza la aquilatada limpieza de sangre de la que hacían gala los miembros de esta renovada Milicia de Cristo. Una senda transitada por memorialistas y una suerte de arbitristas nobiliarios 165 empeñados en

163 AHNOB. Osuna, caja 2279, doc. 4, f. 1 3r. 164 MAR1ÍNEZ-VIGll" Ramón (OP). La Orden de Predicadores. Sus glorias en santidad,

apostolado, ciencias, artes y gobierno de los pueblos, seguidas del ensayo de una biblíoteca de dominicos españoles, Madrid, 1884. 165 Como QunnELA DE SALAZAR, Antonio. Qué cosa es nobleza e hidalguía, 1590. BNE, mss. 9645, ff. 70r-76r o EZQUERRA, Ramón. Recuerdo dado a Su Magestad de . . . sobre las tres Órdenes Militares de Santiago, Calatrava y Alcántara, y ejercitar la nobleza de España, s. l., 28-XI-15% [BNE, mss. 904, ff. 1 69r-172v.]. La dimensión de este imaginario y su plasmación sobre el papel en CARRASCO MAR1ÍNEz, Adolfo. «Herencia y virtud.

Interpretaciones e imágenes de lo nobiliario en la segllllda mitad del siglo XVI», en Luis Ribot Las sociedades ibéricas y el mar a jinales del siglo XVI. La Corona de Castilla, Madrid, Sociedad Estatal para la Comnemoración de los Centenarios de Felipe 11 y Carlos V, 1998, IV, pp. 231-271 Y GUIlLÉN BERRENDERO, José Antonio. La Edad de la Nobleza. Identidad nobiliaria en Castilla y Portugal (1556-1621 ), Madrid, Polifemo, 2012.

y Ernest Berenguer (coords.),

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redifinir los valores y significado de la nobleza a estas alturas de la historia. Por supuesto, desde la Orden de Santiago tampoco faltaron apologistas que insitían en la nobleza, antigüedad y glorias atesoradas por el más prestigioso de tales institutos. 166 La convocatoria de un Capítulo General de las Órdenes se demoró, por motivos políticos y dinásticos, mucho más tiempo del que contemplaban sus estatutos. Pero es que, además, era perceptible el comienzo de la inflación de hábitos que caracterizaría la siguiente centuria, a rebufo del ascenso fulgu­ rante del valido Lerrna. 167 Cuando por fin, se celebra la asamblea o capítulo conjunto de las Órdenes de Calatrava y Alcántara en el convento de San Jerónimo, extramuros de l\1adrid, en 1600, posiblemente se plantearía quién tornaría el testigo del capellán de honor de Felipe II recientemente muerto, 168 además de proyectarse trasladar a algunos freires a los siempre amenazados presidios norteafricanos. 169 Tampoco olvidemos que se trata de una coyuntura en la que había que compensar lealtades y pagar favores por parte del nuevo monarca. Luis Ca­ brera de Córdoba, siempre atento a los sucesos de Corte, escribía a inicios de 1599: >, en Emique Soria Mesa y Juan José Bravo Caro (coords.), Las élites en la Época Moderna: la Monarquía Española, IV Cultura, Córdoba, Universidad de Córdoba, 2009, pp. 165-184, cita una trilogía de las Órdenes Militares en p. 180, que identifica el autor con la obra de Rades. 274 Entre los 429 tomos contabilizados en 1718 había auténticas rarezas y bellezas bibliográficas. PRIErO BERNABÉ, José Manuel. «Análisis de un fondo bibliográfico: la biblioteca del palacio de Pastrana durante la Edad Moderna», Hispania, 48/169 (1 988), p. 726. 275 «Fr. Francisco Rades Historia de las Ordenes Militares un tomo de a folio . . 36 rs . . fr. Francisco de Rades obligaciones de los caballeros de Calatrava un torno en octavo . . 1 0 rs». BARRIO MOYA, José Luis. «La gran biblioteca de la dama manchega, doña María del Padre Eterno Varona y Rozas, marquesa de Añavete (1755)>>, Cuadernos de Estudios Manchegos, 19 ( l 989), p. 141 . 276 «Catálogo de los libros españoles, franceses y latinos que tiene en su biblioteca el señor don Joseph Domingo de Gortazar, caballero de la Orden de Calatrava» y «Memoria de los libros que he comprado en Madrid en este año de 1760». GÓMEZ GÓMEZ, Agustin. «El coleccionismo en el Bilbao de finales del siglo xvm: el caso de la familia Gortázar», BidebarrÍeta, Anuario de Humanidades y Ciencias Sociales de Bilbao, 2 ( 1997), pp. 1 15-124. m QUINTANllLA, Ana Isabel. «La biblioteca de Pedro José Pérez Valiente», Cuadernos de Historia Moderna, 24 (2000), p. 149, nota 103. 272

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del secretario regio Simón de Santander ( 1792) . 278 No olvidemos que es la época en que se escribió que entre los papeles de sus archivos y bibliotecas (. 279 Otros tomos viajaron mucho más lejos. Entre los dos fardos de libros que en 1583 se embarcan rumbo a Lima desde la metrópoli, propiedad del teso­ rero Antonio Dávalos, oriundo de Guadalajara, está la trilogía de Rades de Andrada, tasada en 272 mrs. 280 También atesoraba esta obra Gómez Suárez de Figueroa, más conocido con el sobrenombre del Inca Garcilaso de la Vega ( 1539- 1616), considerado el primer gran cronista criollo peruano. 281 Todavía más exótico es el periplo que sigue otro libro de esta tirada, adquirido por Piotr Dunin Wolski ( 1530-1590), un diplomático polaco que permaneció en la Corte de Felipe II entre 1561-1573 y cuya colección termina en la Bi­ blioteca de la Universidad Jaguellona de Cracovia (Polonia). 282 Algo similar ocurre con otro ejemplar, que ostenta un gran exlibris del duque de Baviera, fechado en 1618, custodiado en la actualidad en la Biblioteca de Neuburg; asimismo, la Biblioteca Estatal de Baviera atesora hoy en día un ejemplar de dicha trilogía, con un sello de tinta de la «l3ibliotheca Regia Monacensis» , junto con un catálogo de las obligaciones de los comendadores calatravos y las Definiciones de Montesa. 283 Así pues, detectamos tales obras impresas en las librerías de castillos o palacetes urbanos de buena parte de la aristocracia española, portuguesa,

278 SERNA SANTANDER, Charles Antoine de la. Catalogue des lívres de la bíblíotheque de feu don Simon de Santander, secretaÍre de sa majesté-catholíque, Bruselas, 1792, t. I1I,

p. 236, n.o 4101. 279 RODRÍGUEZ, Cristóbal. AdíCÍon a la Biblioteca Universal, en la qua1 se da reglas para

componer y coordinar por su antigüedad y por el A . B e. cualesquiera archivos. Bíblíotecas, librerias pontificias, regías, generales, particulares. Y se ponen las partidas que debe tener el archivista para su perfecta composición, 1738. BNE, mss. 9205, f. 14r.

280 La lista de embarque recoge un total 97 títulos. HAM:PE MARTÍNEZ, Teodoro. «Libros profanes y sagrados en la biblioteca del tesorero Antonio Dáva10s (Lima, 1 583)>>, Revista de Indias, 46/178 (1 986), pp. 385-402. 281 DURAND, José. «La Biblioteca del Inca», Nueva Revista de Filología Hispánica, 2/3 (jul.-sept. de 1 948), pp. 239-264. 282 Biblioteca Jaguellona de Cracovia CIM. F.8376. Sendos estudios sobre dicha colección en POREBo\VICZ, Edward. «Catalogue des livres castillans du XVI" siecle, qui se trouvent dans la Bibliotheque de l'Université (JagiellonieIllle) de Cracovie», Bulletín Internatíonal de J'Académie des SCÍences de Cracovie, 1 5 (1891), pp. 246-255 Y CEREZO RUBIO, Ubaldo. «Catálogo de los libros españoles del siglo XVI en la Biblioteca Jagellona de Cracovia», Criticón, 47 (1989), pp. 77- 150. 283 Nada extraño en una librería que compró en 1571 la colección de JohaIlll Jakob Fugger, llll banquero Íntimamente unido a los destinos del imperio español. Bayerische Staatsbibliothek, Herald. 34 s, 1 1 9 y Herald. 27 f. Sin embargo, nos extraña que confimdan al frei1e ca1atravo cronista soriano con el cronista mayor JXlrtugués Francisco de Andrada ( 1 5401614) y le atribuyan su Cronica de Joan III (Lisboa, 1613).

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italiana, flamenca o alemana e incluso en las casas solariegas de los hidal­ gos de solar conocido rurales o de ricos mercaderes toledanos no suele fal­ tar algún ejemplar de dicha obra, muchas veces hojeada y cuyos pasajes de cuando en cuando eran leídos en voz alta a sus vástagos para adoctrinarlos en la cultura caballeresca y en el culto a su estirpe guerrera. O lo que es lo mismo, instruyéndolos en la esencia de su estatus y vertebrando su concien­ cia de grupo. Sin embargo, tampoco podemos creer que la aceptación de sus obras fue fuhninante ni universal. Veamos algunos ejemplos. Los Mendoza habían sido unos reputados bibliófilos desde que el marqués de Santillana cultivase las letras, allá por el siglo xv y lo fueron siglos después. 284 En el último cuar­ to del siglo XVI su biblioteca es descrita y organizada de la siguiente manera: La librería del duque mi señor esta en una pieya cuadrada en la qual ay tres estantes y en cada uno quatro ordenes en cada pared la suya y que para esta tabla se ponen los libros por memoria corno estan asentados cornenyando por el estante alto que comienza en la pared frontera corno entrarnos por la puerta desde la primera orden que esta sobre la ventana primera viniendo sobre la mano derecha hasta acabar todo el estante de las quatro paredes dividiendolos en quatro partes cada estante. 285

El inventario realizado el 4 de agosto de 1575 de la formidable librería del duque de Infantado en su palacio de Guadalajara asciende nada menos que a 774 títulos diferentes, pero no hay ni rastro de la obra de Rades. No nos extraña demasiado. Había pasado relativamente poco tiempo desde que la obra circulara por los circuitos nobiliarios de la época y el duque del Infan­ tado lleva una vida azarosa fuera de su Casa. En cambio, en el inventario de bienes realizado en 1601 por muerte de Íñigo López de Mendoza, marqués de Cenete y duque de Infantado, se recoge este ejemplar: « Yten otro libro grande ques de poco volumen ques de las Constituciones y Orden de Cala­ trava que tiene correas y pergamino blancQ» . 286 Mucho más nos llama la atención que no se halle la trilogía entre las lecturas del duque de Híjar y conde de Salinas. En 1631 solo nos consta que tenía en propiedad >, en Ángel Alloza Aparicio, Francisco Femández Izquierdo y Elena García Guerra (eds.), Comercio, banca y sociedad en los reinos hispánicos (siglos XIV-XVIII), Madrid, CSIC, 2012, pp. 228-277. 37 El ideal y la realidad del círculo cortesano en BOUZA ÁLVAREZ, Fernando. «Servir de lejos. Imágenes y espacios del Cursus Honorum cortesano de la España de los Austria», en Ramón Tamames, Javier Femández Conde el al., Europa: proyecciones y percepciones históricas, Salamanca, Universidad de Salamanca, 1997, pp. 71 -86.

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hasta el momento en que se nombraba un nuevo titular lo normal era que una encomienda vacante fuese conferida corno administrador a un caballero profe­ so o comendador de la propia Orden de Calatrava. Sin embargo, la política pre­ mial de Felipe II y las exigencias cortesanas o militares fomentaron las figuras de administradores con goce defrutos, cuando el beneficiario o la beneficiaria de sus rentas no eran caballeros profesos, sino menores de edad, damas o ins­ tituciones piadosas; así corno la encomiendas en espera (es decir, prometi­ das). Además, en casos excepcionales, corno cuando se persuade a Pedro Luis Garcerán de BOIja, último maestre de la Orden de Montesa, para que cediese su poder al soberano, este le otorga la encomienda mayor de Calatrava corno administrador en propiedad, una distinción única debido a la trascendencia de la fagocitación de la última de Órdenes Militares hispanas por el monarca. 38

3. Freiles y cultura escrita: las bibliotecas privadas Cuando Martin Vázquez de Arce, el doncel de Sigüenza, joven caballero santiaguista muerto en la Vega de Granada en 1486, es sepultado en la ca­ tedral de Sigüenza, en su sepulcro es representando recostado leyendo. Se trataba de una iconografía inédita en España, que simbolizaba el nuevo ideal de caballero cristiano y humanista propuesto en el Renacimiento.39 En esta senda, en un tratado moral de los años centrales del Quiuientos se cifra uno de los goces del caballero cristiano el tener « por gran bien aver ayuntada muy hermosa y adornada librería, donde he puesto gran copia de libros de todas ciencias, tengolos con linda orden. Leo quando me plaze, y huelgo de saber lo que en ellos esta escriptQ» . 4O En suma, la librería doméstica se había erigido en uno de los lugares de memoria predilectos de esta elite de poder. Pero, aun asumiendo estos postulados, nos preguntarnos cuál era el au­ téntico bagaje cultural de este colectivo humano, toda vez que algunos torna­ ron alguna vez la pluma e incuso imprimieron en vida sus escritos, cuando no fueron destinatarios de libros del más distinto pelaje. 4 1

3 8 Agradezco esta noticia a Francisco Femández Izquierdo, que tanto me ha ayudado para perfilar este complejo grupo de poder.

39 CORTÉS ARRESE, Miguel. El espacio de la muerle y el arte de las Órdenes Milítares, Cuenca, Universidad de Castilla-La Mancha, 1999. 40 MEDINA, Pedro de. Libro de la verdad: Donde se contienen dozientos dialogas que entre la verdad y el hombre se contractan, sobre la conversión del pecador (Sevilla, 1 549), Perpiñán, en casa de Louis Roure, 1 626, p. 28. 41 Paradigma de las inquietudes intelectuales tan diversas que pudo tener este colectivo puede ser la siguiente obra, dedicada al caballero calatravo Francisco de Alfaro y que glosa el uso terapétuico de algunos animales. VÉLEZ DE ARCINIEGA, Francisco. Libro de los quadrupedos y serpientes terrestres, recebidos en el uso de mediCÍna, y de la manera de su preparación, Madrid, imprenta de P. Madrigal, 1 597.

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Aunque, desde luego, somos plenamente conscientes de nuestras limita­ ciones y de que la cultura de la época era tanto oral y visual corno escrita y gestual,42 nos detendremos aquí en la bibliotecas de los caballeros de hábito, haciendo especial hincapié en los repertorios genealógicos que poseen, las crónicas caballerescas que leen y las reglas de sus respectivos institutos que custodiaban entre sus anaqueles, Lo primero que nos llama la atención es que, aunque menudean los es­ tudios sobre tales bibliotecas,43 ninguno aborda la casuística concreta que aquí nos incumbe.44 La verdad es que las fuentes son esquivas, sobre todo para la primera mitad del siglo XVI, donde apenas podernos dar unas toscas pinceladas de un cuadro que se nos antoja mucho más complejo del que podernos trazar en estas páginas. Corno muestra, cuando Fernán Pérez de Gúzmán, regidor de Toledo y caballero de la Orden de Santiago, inventaría las pertenencias legadas por los difuntos Ramiro Núñez de Guzmán y Juana Carrillo, en Toledo, Polán y Alcaudete de la Jara, entre sus bienes registra (>, Documentos para la historia del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, 7, Madrid, 1 964; BARRIO MOYA, José Luis. «La librería del hidalgo asturiano don Antonio Pe1áez Suárez, caballero de la Orden de Calatrava ( 1727)>>, Boletín del Real Instituto de Estudios Asturianos, 49/146 ( 1 995), pp. 463-474; DADSON, Trevor. «Inventario de los cuadros y libros de Ruy Gómez de Silva, III duque de Pastrana ( 1 626)>>, Revista de Filología Española, 67/3-4 (1987), pp. 245-268; del mismo autor, «El mlllldo cultural de llll Mendoza del Renacimiento: la biblioteca de Diego Hurtado de Mendoza, I conde de Mélito ( 1 536)>>, Boletín de la RealAcademia Española, 73/260 ( 1 993), pp. 383-432 Y Libros, lectores y lecturas: estudios sobre bibliotecas particulares españolas del Siglo de Oro, Madrid, 1998, etc. Mucho más ambiciosa es la obra coral de DíEZ BORQuE, José María (dir). Biblíotecas y librerías en la España de Carlos V, Barcelona, Calambur, 2015. 4+ Lo que, paradójicamente, síse ha esoozadopara el finde1 Medievo castellano. RODRÍGUEZ­ PICAVEA MATILLA, Enrique y PÉREZ MONZÓN, OIga. «Mentalidad, cultura y representación del pooer de la nobleza calatrava en la Castilla del siglo XV», Hispania, vol. 661 222 (2006), pp. 199-242. 45 26-IX-1508, Toledo. ACC. caja 59, doc. 29.

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>, en José Martínez Millán (coord.), Carlos V y la quiebra del humanÍsmo político en Europa (1530-1558), Madrid, Universidad Autónorna de Madrid, 2001, 11, p. 316. 13 0 AHN, OOMM. Expedientes de Caballeros, Calatrava, exp. 766. m 8-X-1562. AHN, OOMM. Consejo, lib. 336C, tI 95v. 132 Ibídem f 96v 133 Fue s�t:itrnd¿ en el Consejo de Órdenes por el licenciado Diego de Castejón, al ser promovido al Real de Castilla [ 1 2-XIl-1 565; AHN, OOMM. Consejo, lib. 337C, f. 56v]. Véanse, además, las quitaciones de Juan Díaz de Fuenmayor: Cédulas para que se le libren mil ducados por lo que sirvió y el tiempo que estuvo vacante la plaza de presidente del Consejo [10-VIII- l 564; AGS. Escribanía Mayor de Rentas, Quitaciones, 3 1 , 314-322]. 134 BRIEVA, Matias. Coleccíon de Leyes, Reales Decretos y órdenes, acuerdos y circulares pertenecientes al ramo de Mesta desde el año 1 729 al 1827, Madrid, 1 928, XII. 135 «Profesó Fr. Rcxlrigo de Fuemnayor, natural de Salamanca, hijo lexitirno de el licenciado Juan Diaz de Fuemnayor, i de Doña Beatriz de Figueroa á 14 de septiembre de 1571». VIDAL, Manuel (OSA). Augustínos de Salamanca: Historia del observantissimo

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boda de conveniencia ( 1582), esta vez con doña Beatriz Pedrosa Pimentel, hija del también consejero real y licenciado Melchor de Pedrosa 136 y doña Guiomar Pimentel, vecina de Sahagún y a su vez viuda de Nuño Cabeza de Vaca, señor de Villahamete y Villaquilambre. 137 Del segundo matrimonio de ambos nacieron: Margarita de Fuenmayor (casada primero con Juan Alonso de Vinuesa y luego con el marqués de Falces; fundadora del convento de recoletas agustinas en Ágreda, en 1612); Fernando de Fuenmayor y Pedrosa (señor de las Villas de Castellanos y Las Cuevas, caballero calatrava desde 1579, casado pero sin descendencia, t 1606); Alonso de Fuernnayor y Pedrosa (sucede a su hermano corno titular del ambos señoríos y viste hábito de Calatrava desde 1603, casado pero sin sucesión); Antonio y Francisco, muertos mozos; así como Alonso y Eugenio, muertos niños; aparte de otros vástagos, difuntos al poco tiempo de nacer. 138 Tantos años sirviendo en audiencias y corno consejero en la Corte le hacen amasar una enorme fortuna. Su monto es difícil de estimar. Solo un dato, los peritos agrimensores nombrados por el corregidor de Ágreda en 1584 para hacer un apeo de sus propiedades contabilizan 1.075 heredades repartidas por los lugares de Castel-Ruiz, Trébago, Valdelagua, Montenegro y Anavieja (todas aldeas de Ágreda), que sumaron 4.256.298 pasos y 6 1.764 varas, 139 además de 35.000 mrs. de censo anual impuesto contra la Casa y Estado de Benavente y multitud de censos más. 140 Cuando el licenciado Díaz de Fuenrnayor testa en Valladolid, el 7 de diciembre de 1587, vincula la mayor parte de dichos inmuebles, junto a 500 ducados de juro situado en las alcabalas de Medina del Campo; 76.500 rnrs. impuestos sobre las rentas de la Merindad de Saldaña y 25.000 de juro sobre las alcabalas de Sahagún. Su última voluntad contemplaba que, si se redimían dichas rentas, su importe había de depositarse en un arca de tres llaves cus­ todiada en el convento de San Agustin de Ágreda. Asimismo, dejaba un juro de 76.500 mrs. sobre las alcabalas de Saldaña a su cuñado, Rodrigo Pimentel,

convento de San Agustín de dicha ciudad, Salamanca, por Eugenio García de Honorato, 1751, p. 150. Este personaje incluso inspiró llll romance y unas redondillas atribuidas a Juan de Salinas, «Al P. Fuemnayor agustino que se socarró al verter sus apreturas en brasero». 136 A la sazón pariente de Antonio de Pedrosa, oidor en la Audiencia de Galicia y la Chancilleria de Valladolid, siendo después consejero de Órdenes, además de amigo de Juan de Fuenmayor. 137 SALAZAR y CASIRO, Luis de. Los comendadores de la Orden de Santiago, Madrid, 1949, pp. 214-215. 138 GÓMEZ DE OLEA y BuSTINZA, Javier y MORENO MEYERHOFF, Pedro. «Los señores y marqueses de Fuentehoyuelo», Anales de la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía, 6 (2000-2001), pp. 87-154, en concreto pp. 1 5 1 - 1 52. 139 AHNOB. Femán Núñez, caja 712, doc. 4, f. 22v. 14J A modo de ejemplo, en el Consejo de Hacienda hemos documentado lllljurO a favor de Juan Díaz Fuemnayor de 150.000 rnrs.; inserto el testamento de Alonso Fuenmayor. AGS, eME, leg. 348, doc. 18.

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dueño de un exiguo mayorazgo, Entre los bienes que lega a su muerte se hallan también un crucifijo y un Niño Jesús durmiendo sobre una cruz que habían pertenecido a su madre; el sentimiento religioso de este freile se puede vislumbrar en muchos pasajes de su vida y de sus actos cotidianos, Cuando redacta un codicilo, el 24 de julio 1590, también en Vallado­ lid, pero ya muerta su segunda esposa, fundaba un segundo mayorazgo, en principio destinado a su segundogénito, al que incorporaba 150,000 mrs, im­ puestos sobre las salinas de Atienza y la compra de la capilla de San Agustin, Una de sus cláusulas preveía que su primogénito podía optar por el mayoraz­ go que prefiriera, a buen seguro para evitar rencores entre hermanos, Murió en 1593, Según el propio testimonio de Rades, cuyos intereses y aficiones le harían necesariamente coincidir con este circunspecto togado, ya anciano, Felipe II le propuso corno presidente de la Real Chancillería de Granada, pero « sintiendose viejo se escusa de aceptarlo, Jubilole Su Mages­ tad y hizole mercedes, y con esto se fue a vivir en Valladolid, corno vivio y muria en la casas del conde de Benavente con quien tenia deudo doña Beatriz Pimentel su segunda muger» . 141 Pero lo que nos llama más atención no es tanto su trayectoria vital ni profesional sino su vertiente cultural, y en concreto tanto su bibliofilia corno su relación con algunos de los historiadores más consagrados de su tiempo, corno son Ambrosio de Morales o Gonzalo Argote de Malina. Así, el primero de ellos, cuando da a la imprenta su continuación de la Crónica General de España, escribe en su prólogo una glosa de dicho caballero: El muy ilustre señor el licenciado Fuemuayor caballero de la Orden de Ca­ latrava y del Consejo y Camara de S.M., me presto un original antiguo de la Historia Compostelana donde ay cosas de mucha substancia para la Historia de España en lo adelante. Esta merced puedo señalar que si el señor Fuenmayor me hizo, mas no me da en este lugar anchura para estendenne en contar siquie­ ra, aunque no las celebrase corno devo, las otras muchas y rnui grandes que su merced me ha hecho, y siempre me hace en favorecer y adelantar de muchas maneras todo esto que escrivo. Y aunque es general el favorecer su merced a todos los buenos ingenios y señaladamente a los que se emplean bien en las cosas de nuestra historia de España. Por lo mucho que su merced sabe con grandes primores y averiguaciones, en ella. Mas yo en particular estoy tanto mas obligado, quanto ha sido siempre mas continuo y mas aventajado el favor y merced que se me ha hecho. 142

Mucho más cercana aún fue la relación personal e intelectual con el se­ villano Gonzalo Argote de Malina, veinticuatro de su cabildo y Provincial de la Santa Hermandad de Andalucía, además de conde-consorte de Lanza141 Adiciones, f. Sr. 142 MORALES, Ambrosio de. Los otros dos líbros, undécimo y duodécimo, de la Crónica General de España, Alcalá de Henares, por Juan Iñíguez de Lequerica, 1577, f. l Oro

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rote. Parece evidente que el cronista andaluz utilizó su ascendiente con di­ cho consejero del Real de Castilla, primero con el fin de conseguir licencia para imprimir un libro con las hazañas de los caballeros del obispado de Jaén (1574) y luego obteuiendo permiso de la Real Chancillería de Granada para consultar todos los archivos de Andalucía, para espigar las gestas de su elite estamental (1576), unas hazañas que estaban sepultadas por el transcurso de los siglos. En agradecimiento a su mediación, Argote escribió una Historia de Baeza, manuscrito que se da por perdido pero que evocaba su clara vocación de genealogista. En el epistolario del cronista-linajista se conserva una carta remitida desde Baeza donde se menciona que « al señor licenciado Fuenmayor envió ricas cosas que he hallado de sus abuelos; no deseo acabar mi historia sino por servir a su merced y recibir yo honra con dedicársela» ; 143 y meses después nos consta que Argote le regaló un ejemplar del conde Lucanor. Es más, entre los manuscritos que consultó Argote para su Nobleza de Andalucía ( 1588) reseña unas «Anotaciones sobre todas las Historias de España de Juan Diaz de Fuenmayor, del Consejo y Camara de S. ]\1» y en el proemio de dicho libro impreso inserta una carta literaria al camarista, fechada en Sevilla, el 5 abril de 1588, donde glosa su agradecimiento y admiración: Aviendo vuesa merced sido la causa principal, presidiendo en el Real Consejo de Carnara, porque por orden del Rey nuestro señor me ocupase en su servicio en escribir esta Historia y con mucha razon debe a vuesa merced el Reyno de Jaen lo que en esta ha rezivido corno a los antecesores de vuesa Merced el averse es­ clarecido con sus famosas azañas, y asi yo corno mas obligado a satisfacer que la eleccion y confianza que de mi persona se hizo no fue oziosa, he travajado entre el rigor de las jornadas de guerra en que he servido y de la ocupación de los oficios que el rey Nuestro Señor tengo para que esta pudiere llegar a la presencia de Su 1.1agestad a quien ninguno de los presentes excede en noticia de la historia antigua y moderna destos Reynos. Con cuya aprobación y satisfacionme atrevo a sacarlo a la luz, suplico a Vuesa Magestad la tenga por suya como yo lo he sido siempre. 144

Este compendio histórico del licenciado Fuenmayor fue manejado por los más eminentes cronistas de la época. Según Luis de Salazar y Castro, tales glosas las escribió « sacandolas de las escrituras que llegavan a sus ma­ nos, o ya porque cuidadosamente las buscase, o porque se presentaron en los pleitos de tiempo de Felipe II, en que en la Chancillería de Valladolid y en el Consejo donde sirvio aquel docto ministro muchos años» . 145 Lo cierto es que 143 27-VIII-1 576, Baeza. LÓPEZ MARlÍNEZ, Celestino (comp.). Algunos documentospara la biografía de Gonzalo Argote de Malina, Sevilla, Tipografía de Eulogio de las Heras, 1921, p. 69. 144 Copia manuscrita de dicha carta enAHNOB. Conquista, caja 5. doc., s. c. Abundando sobre este patrocinio véase MHE, VII, Madrid, 1 854, pp. 284-288. 145 La cita completa es un excelente ensayo para conocer la transmisión libraria en los tiempos modernos: «Un excelente libro de memorias que por su curiosidad escrivia el doctor Juan Diaz de Fuenmayor del Consejo y Camara de Castilla, comendador de Havanilla, de la Orden de Calatrava, sacandolas de las escrituras que llegavan a sus manos, o ya porque

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entre los fondos antiguos de la actual Biblioteca Universitaria de Salamanca se conserva un cronicón atribuido a San Piro y que continuó San Pelayo, obispo de Oviedo, que abarca hasta Alfonso VI, sacado de otros escritos en pergamino que pertenecieron al licenciado Fuernnayor, 146 La fascinación por la historia del camarista de Felipe II debía ser célebre en­ tre los círculos eruditos coetáneos, toda vez que otros epigrafistas y anticuarios de la talla de Juan Femández Franco (t 1601), letrado al servicio del marqués de El Carpio, le dedicó el manuscrito titulado Sumario y compendio breve de la fondación romana de la villa de Agreda (1574 o 1578),147 Por su parte, Esteban de Garibay le califica en sus memorias de «grande investigador de las antigüe­ dades de España» 148 y asegura que le vendió varios tornos de sus crónicas, En esta línea, el menos durante unos años, fue censor y protector del im­ presor alcalaíno Luis Gutiérrez ( 1564-1570), 149 hasta el punto de que uno de los devocionarios que salen a la luz en su taller está dedicado a su esposa. 150 Asimismo, también sabernos que otros personajes de la escena cultural de la época buscaron su protección, corno es Andrés Femández, hermano de Jerónimo Femández, autor de un conocido libro de caballerías castellano, Belianís de Grecia, quien costea una edición póstuma con la continuación de la obra y le regala un torno al freile camarista. 151

cuidadosamente las buscase, o porque se presentaron en los pleitos de tiempo de Felipe 11, en que en la Chancilleria de Valladolid y en el Consejo sirvio aquel docto ministro muchos años. Don Joseph [Pellicer de Ossau (1602-1679)] vio estas memorias enla libreria de Don Jer6nimo Mascareñas, obisJXl de Segovia, como 10 confiesa el en fol. 12 de Cabe19

31. Hoyo, Pedro de

[1558]'"'

[Hijo de Pedro González de Hoyo, alguacil Mayor de las Guardias de su Majestad, y contino regio; flll1dan mayorazgo, 1544. Un hermano canónigo en Toledo. Casa con Catalina del Hoyo]. [Casona con blasón en Colindres, de donde era su esposa]181 [Su hija Catalina se casa con lll1 hijo del secretario Juan de Escobedo]

[Protegido de Juan Vázquez de Molina, sobrino de Francisco de los Cobos; Oficial de la Secretaria del Príncipe Felipe 1554-1556, con quien viajó a Inglaterra. Alférez mayor y corregidor de Laredo. Secretario de Felipe 11 desde 1556; Secretario de Obras y Bosques hasta 1568; Secretario de Justicia del Consejo de Castilla; Secretario del Consejo de Inquisición desde 1566;1 82 camarista y consejero de Estado. Compra convento de la Merced (Colindres)]

l.' Montanchuelos [15611568 1 ]'"; 2.° [Contador mayor de la Orden de Calatrava, 15651568]'8'

[Laredo (Cantabria)]

Nombre

Origen

Año toma háabito

Familia

Méritos personales

Cargos/Encomienda

32. Lanuza [y Viola], Miguel de

Plasencia (Cáceres)

[l530]'e,

[Miembro de la Casa de Lanuza, caballeros aragoneses que monopolizan la dignidad de Justicia mayor hasta 1591]

[Fracasa al pacificar vasallos del señor deAriza, 1560. Asiste Corte de Monzón, 1563]'"

1.' [Fresneda, 1540-1572] 2.° [Gobernador de AragÓi1 y Valencia, 1540]187 3.0 [Administrador de Aleañiz, 1543 y 1565]'� 4.° [Administrador de Momoyo y Peñarroya, 1546 y 1559]W' 5.° [Visitador Partidos calatravos de Aragón y Valencia, 1548]1\0) 6.' Ráfales [1572-1585 t] 7.° [Pesquisidor del gobernador del Partido de Aragón, 1582]

33. Luna Mendoza, Álvaro de

Toledo

[1560]'"

Nieto de Garcilaso de la Vega, comendador mayor de León. Hijo de Pedro Lasso [de la Vega], señor de Cuerva y Batres. Casó: 1.0 Guiomar de Sá, 2.° Inés de Quemada, con quien tuvo hijos.

[Fundó mayorazgo]

1.0 Gobernador Campo Calatrava [1568-1571 y 1574-1579] 2.° [Administrador de Montanchuelos, 1568]192 3.0 [Administrador del Moral, 1570]'" 4.° [Administrador de Aleolea, 1571] 5.° Visitador Orden de Montesa [1572] 6.° [Administrador Castellanos, 1576]194 7.° [Administrador de Almagro, 1576]'" 8.° [Bélmezy su fortaleza, 1582]'96

34. Manrique

[Paredes de Nava (Palencia)]

[1582]>91

Hijo de los condes de Paredes y duques de Nájera. Muere en desastre Annada Invencible (j 1588) [con 25 años de edad]

[VII] conde de Paredes

1.° Casas de Plasencia y Fuentes Dueñas [15841588]>n

35. Manrique [de Laray Manrique], Pedro

[Paredes de Nava (Palencia)]

[1590]'"

Hennano del anterior. [Casó con Catalina Femández de Córdoba, 1592, hija de Diego Femández de Córdoba, IV señor de Annuña, caballerizo mayor de Felipe 11 y comendador mayor de la Orden. Sin descendientes; j 1636]

[VIII] conde de Paredes. [XIV señor de Amusco y Redecilla, tras pleito de tenuta resulto por la Chancillería de Valladolid en 1618]. [Ayo de Felipe IVpoo [Goza juro de 10.000 rs. sobre las salinas de Murcia]. [Renuncia a su título en favor de su hennano menor Manuel Manrique de Lara en 1625, retirándose a Paredes; al morir su sucesor recae el título en su sobrina M.J Inés Manrique de Lara].201

1.0 Casas de Plasencia [15911597]'01

36. Manrique

Toledo

[15331'w

[de Laray Manrique], Antonio

de Ayala, Garcl1a]

2.° [Portezuela y La Magdalena (Orden de Alcántara)]

Hijo de Álvaro de Ayala, sucesor al [Capitán del tercio de Lombardía. condado de Fuensalida,204 e hija del Regidor y Procurador en Cortes por marqués de Aguilar. Casó con su paisana Toledo, solicita una compañía de gentes María de Niño [sin autorización]; con de annas o la guardería mayor de hijos Zacatena, 1586]205

1.0 [Administrador de las Casas de Toledo, 1575] 2.' Daimiel [1582-1590 j]'06

3.0 [Depositario del Tesoro de Calatrava]207

37. Manrique, Felipe

¿La Rioja?

[1534]'ffi

[Hijo del duque de Nájera y hennano de frey Juan Manrique, comendador de Aleolea]

1.0 Ballesteros [1549-1567 j]1m 2.° [y alcaide de Almadén, 1550-1567]''"

38. Manrique, Gómez

¿ &!.lamanca?

[1539]'

[Hijo de Juan de Silva, marqués de Montemayor]

1.0 [Casas de Plasencia, 1544-1550] 2.° Corral de Caracuel [15501578 HU 3,' Cañaveral [1569-1578 j]m

Nombre

Origen

Año toma hábito

Familia

Méritos personales

l.' !.opera [1559-1572 t p" 2.° [Administrador de Víboras, 1569f1 6 3.0 [Administrador de Castilserás, 1570]217 4.° [Administrador Casas de Ciudad Real, 1571p18 5.° ¿Huerta de Valdecaraoanoo?

39. Manrique [y ¿La Rioja? Padilla], Gómez

[l552p13

Hijo de Antonio Manrique, (Adelantado mayor de Castilla desde 1538 y señor de Valdeizcaray) y de Lnisa de Padilla (señora de Calatañazor y Santa Gade!.). [Pleitea coo sus sobrinos, los condes de Castrojeriz, 1555p14

40. Manrique, Jerónimo

Valladolid

[1560p19'

Hijo de Íñigo de Mendoza. Casa con Ana Mayordomo del cardenal-infante de Lucena y con hijos Alberto, arzobispo de Toledo.

1.0 Fuente el Emperador [1571-1574] 2.° ¿Alrncxlóvar?22 0

41.

[Guadalajara]

[1565f"

[Tercer hijo de Pedro Goozalez de Castellaoo de Castilnovo (Nápoles, Mendoza (señor de La Torre de Estaban 1565). Militar en Flandes. Hambrán, castellano de Castilnovo [Gentilhombre de cámara de Felipe 11 y (Nápoles), veterano de las guerras de del Consejo Lateral de Nápoles],ll3 Italia) e Isabel Alarcón y usón (11 marquesa de la Valle Siciliana y de Renda, en Italia). casa cm Ana de Toledo, hija de Pedro de Toledo virrey de Nápoles y de M.a Osorio Pimentel, marqueses de Villafranca, señores de Cabrera y Ribera. Tuvieron dilatada descendenciaFll

l.' Villarrnbia [1569-1582] 2.' Mestanza [1582-1599 t p14

42. [Hurtado de] Mendoza, Francisco de

[Granada]

[1562P"

Linaje de los Mendoza; hijo de Íñigo López de Mendoza, �ll] marqués de Mondéjary virrey de Valencia y Nápoles; su madre era hija del duque Infantado. Casa con María de Aragón Folch de Cardona, marquesa de Guadalest y pretensa duquesa de Veragua y [1584].226 [Tienen lll1a hija, que muere en la infanciaF27

Mendoza [y Alarcón], Álvaro de

[Maestresala de la Casa de Castilla del príncipe Felipe 11, 1543-1548. Gentilhombre de la Casa de Borgoña del príncipe Felipe, 1548-1552. Gentilhombre de la Casa del príncipe Carlos, 1552]

Cargos/Encomienda

[Lucha en Guerra de Las Alpujarras, l.' Valdepeñas [1582-1622p31 1569-1571] 2.° [Administrador de El Viso Almirante de Aragón y las Indias. y Santa Cruz]232 [Recluido en Sacro Convento, 15901591] [Pleitea con su la marquesa de Guadalest por la sucesión en el ducado de Veragua y de la Vega, el marquesado de Jamaica y Almirantazgo de Indias, 1584-1609f'8

[Almirante en Flandes; embajador en Polonia (1597), Francia y Hungríal229 [El nuncio en Colonia le regala 3 cabezas de las Once Mil Vírgenes (15971598) Y varias reliquias de Santa Bárbara (1599)] .'10 [Cautivo de los holandeses, 1600-1602. Investigado por su actuación militar, fue recluido en Santorcaz, Lupiana y Guadalajaral [Propuesto obispo de Sigüenza, 1623 t] [Enlerrado en Colegio jesuita de Alcalá que cofundó su hermana Juana de Mendoza] 43. Mendoza

[y Manriqne], Jerónimo de

[Valbdolid]

44. Mendoza, Juan de

45. Mendoza, Juan de (El Payo)

Toledo

[1571pTI'

[Nieto de Iñigo López de Mendoza, segundogénito del señor de Almazán.234 Hijo de Iñigo López de Mendoza y María de Bazán. Casó 1.° Ana de Lodeña y Lnzón (]>Idrino de lxxla Lope de Guzmán, consejero de 6rdenes) 2. ° doña Casandra de Grimaldo]235

[Paje de Felipe 11. Capitán. Cautivo en 1.0 [Administrador de Béhnez Argel hasta 157IF" y su fortaleza, 1572] [Gentilhombre de cámara del archiduque 2.0 Alrnnradiel [1582-1596] Alberto; capitán general en Portugal; 3,0 Alrnooóvar [1596-1597 t] corregidor de Córdobal237 [Pleitea con cofradía de N.a s.a de la Antigua, parroquia San Nicolás (Madrid), por trasladar imagen del altar mayor la capilla de los Lodeña, en 1594.238 Muere en Granada, 1597, endeudando a su farniliap' [Testa, en 1597P"

[1559]'

¿Casó con Juana de Cárdenas?24!

[Capitán]

[1547]1al, Grande de España, VIII alférez mayor del Peooón de la Divisa]27O

1.0 Casas de Plasencia 2,' [Ahnodóvar, 1609-1617 JFl 1

Nombre

Origen

Año toma hábito

Familia

Méritos personales

Cargos/Encomienda

55. Pacheco de Toledo, Fernando

[Escalona (Toledo)]

[1593P11

[Señor de Garganta la Olla (CA)]. Hijo de Francisco [López] Pacheco, duque de Escalona y marqués de Villena, [Embajador en Roma. Sus reliquias en así como de Juana de Toledo, hija del santuario-hospital de la Caridad, Illescas conde de Oropesa. [Nace en 1567] (fO), al que lega tcxla su herenciaF73 y donde se sepulta

1.0 AuñÓi1 y Beminches (Juro) [1594-1622]

56. Pacheco, Diego

[Puebla de Montalbán (Toledo)]

[1559]'1
. [Veme 2 esclavoo a Alonso Vázquez de Arce, por 200 escudos de oro, 1588p27

73. Ulloa, Pedro de

Toco (Salmanca)

[1560]318'

[Padres: García Alonso de Ulloa y Guiomar Saravia; fundan mayorazgo].329 [Casa con la abulense Aldonza del Águila Guzmánp3Q [Alonso de Ulloa, comendador de Huerta de Valdecarábanos, 1548-1561; Momoyo y Peñarroya, 1561-, y Castellanos, 15711576 1]

Capitán [y alcaide deAlmuñécar]331

l.' Cañaveral [1567-1569] 2.' Vlooras [1569-1575 1]

74. Velasco, Pedro de

[1552P"

Hijo de Diego López de Velasco, IV conde de Nieva333 y virrey de Pero [15611564],"'y María Fnríquez, hija del marqués de Alcañices. [Licencia para casarse con illisa de Ulloa, hija de Rodrigo de Ulloa y Quiñones, I marqués de la Mota, y Marina de Tavera, en 1580].335 [Su heredera fue Mariana de Ulloa, 11 marquesa de La Mota, casado con su tío paterno]33ó

[Paje de Felipe 11.] Gentilhombre de cámara de Felipe 11. [Pleitea con el concejo de Puertollano y contra los Fúcares]. 337 [Apoderado de varias ciudades y villas del Virreinato de Perú, 1564-1569P� Introductor de embajadores y pemonalidades (1580 y 1585) Mnere en Monzón (11585)

1.0 [Administrador Puerto llano, 1553] 2.° [Piedrabuena, 1554]339 2.° Puertollano comendador en 1554-1570]�O 3,' Almnradiel [1571-1580p'l 4.' Obrero [1580-1585 1]

75. Zúñiga y CÓfdova, Alonso de

[1567]'

Hijo de Pedro de Ávila, I marqués de la Navas, y María Emíquez de Córdova, hija del marqués de Priego. Casa con Jerónima Dávila y Zúñiga, su prima hennana y III marquesa de Mirabel, hija del comendador mayor deAlcántara y de la marquesa de Mirabel.342 [Sin descendencia, aunque su viuda se vuelve a casarpü

Gentilhombre de cámara de Felipe 11. [Fernando Calvo le dedica su Libro de Albeitería, Salamanca, 1587]. [Capitán de una compañía de las guardas de Castilla]

l.' Mestanza [1567-1582] 2.' Almodóvar [1582-1589] 3.0 [Administrador y alcaide de Bexís y Castell de Castells, 1586] 4.' [Viso y Santa Cruz, 15891593 1] 5.° ¿Fuente el Emperador?

Claudio

Nombre 76. Zúñiga Sotomayor, Juan Luis

Origen [Córdoba]

Año toma hábito [156IP"

Familia Nieto del señor de Lubrín y de la señora de El Carpio (CO). Hijo de Diego de Haro, caballerizo mayor [y 1 marqués de El Carpio, 1559], y Antonia de Guzmán, hija de un veinticuatro cordobés. [Su hennanaAldonza de Haro encargada de cobrar las rentls encomieooa de Bélmez]

Méritos personales [Caballerizo mayor de los príncipes de Bohemia. Testa en 1572 y pide ser enterrado en convento de Santa Clara (M); deja por heredero a su hermano Juan de Haro y albaceas al caballerizo Diego Femández de Córdoba y Beltrán de la Cueva, duque de Alburquerque, a quien encomieooa a sus 2 lacayoo]3-i'i

Cargos/Encomienda 1.' Bélmez [1563-1572 t] 2.° ¿Auñón?

Cuadro de elaboración propia. Entre corchetes la ¡nfonnación que no proporciona Rades en sus Adiciones.346 *No se conserva expediente de pruebas a ingreso.

NOTAS DEL CUADRO 61 GARCÍA TAPIA, Nicolás. Un inventor navarro: Jerónimo de Ayanz y Beaumont (1553-1613), Pamplona, Universidad Pública de Navarra, 200 1 . " 21-VIlI-1585, Monzón. AHN, OOMM,AHT (RSC), leg. 44895, s. f 63 Comienza las pruebas en 1 544; tiene 20 años de edad cuando inicia las pruebas de ingreso. AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 37. 64 Inicia expediente de acceso en 1 5 9 1 ; cuenta con 40 años de edad al presentar las pruebas AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 69. 65 SALAZAR y CASIRO, Luis de. Historia genealógica de la Casa de Lara, Madrid, 1697, 111, pp. 399-400. 66 Real Provisión ordenando que le armasen caballero; 23-1-1558. AHN OOMM. Consejo, lib. 335C, f. 80v. 67 RIvERO RODRÍGUEZ, Manuel. «El Consejo de Aragón y la fimdación del Consejo de Italia», Pedralbes, 9 ( 1 989), p. 82. w 5-IlI-1576, Madrid. ACC, caja 2, doc. 14. 69 MATILLA TAscóN, Antonio. Testamentos de 43 Personajes del Madrid de los Austrias, Machi.d, Instituto de Estudios Machi.leños, 1983, pp. 41-44. 70 Existe llll personaje homónimo, orilmdo de Ronda y vinculado de algún mooo a los Bazán, que fue alcaide de Marbella hasta 1573, pero que no se trata de la misma persona. URBANEJA RuIZ, Catalina. «El inventario post mortem de Alonso de Bazán, alcaide de la Fortaleza de Marbe11a», CÍ1nÍana. Revista de la Asociación Cilniana para la Defensa y Difusión del Patrimonio Cultural, 18 (2005), pp. 31 -52. 71 Sa1azar y Castro recoge que «el año 1 562, JXlr titulo dado en Aranjuez a 22 de octubre . . . le mando Felipe 11 que armase cavallero de la Orden de Calatrava a D. Alonso Bazan, hij o de D. Alvaro Bazan. . . que después fue General de las Galeras de Portugal, comendador del Viso y Santa Cruz». De SALAZAR y CASIRO. Historia genealógica de la Casa de Lara, Madrid, 1697, 11, p. 267. Sin embargo, Francisco Fernández Izquierdo puntualiza que en una Real Provisión fechada en 1 572, dirigida a frey Bernardino Manrique de Lara, comendador de Herrera y a otros comendadores de la Orden, se les pide que armasen caballero a Alonso de Bazán; 22-X-1572. AHN. OOMM. Consejo, lib. 339C, f. 349r. 72 Autorización para casarse con esta hija de don Gómez de Figueroa, vecino de Zafra; 2-XII-1589. AHN, OOMM. Consejo lib. 344C, f. 544r. Diccionario geogájico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de Ultramar, Madrid, t. 16, 1850, p. 335.

73 Pascual Madoz: Diccionario geográfico-estadística-histórico de España, y sus posesiones de U!tramar, Madrid, t. 16, 1850, p. 335. 74 «Capitán de quatro galeras en la Mar de Levante y comendador de Ballaga y A1moguera de la Orden de Calatrava desde el año de 1582»; AHNOB. Cañete, caja 1, doc. 1, f. 1 55v. El contenido de este borrador inédito se corresponde, inequívocamente, con el «Torno octavo de las obras no impresas de Esteban de Garibay» copiado por Luis Sa1azar y Castro que se conserva en RAH. Garibay, 12-1 0-6/8. 75 AHN. Osuna, caja 3521, doc. 52. AlUlque estaba previsto que formase parte de una segunda Gran Armada que reforzase la invasión de Inglaterra ( 1 588), pero la realidad es que hubo de contantarse con trasladar la infantería que aprestaba a La Coruña y Lisboa para prevenir lUl eventual contraataque inglés; logra hundir lUl navío de la flota de Francis Drake ( 1 589); en 1590 participa en el embarque de los tercios desde España a territorio francés, para reforzar la Liga Católica; en 1591 comandó lUla armada de 55 naves que puso en fuga a una escuadra inglesa, cuando estaba dispuesta a interceptar la Flota de Indias; asimismo, en 1594 en las Azores vuelve a derrotar a los navíos ingleses, comandados por el conde Cumberland, enviados a capturar los galeones de la plata. 76 Tiene 27 años de edad cuando presenta las pruebas en 1590 [AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 284] y e125 de julio de ese mismo año ya se le daba merced de hábito calatravo [AHNOB. Frías, caja 24, doc. 97]. Sin embargo, no profesa hasta abril de 1593 [AHNOB. Frías, caja 24, doc. 98], dispensándole de servir seis meses en galeras [AHN, OOMM. Consejo, lib. 345C, f. 348r y AHNOB. Frías, caja 24, doc. 99); poco antes recibía la encomienda de Abanilla, el 12-V-1 593 [AHN. OOMM. Consejo, lib. 345C, f 357r] . 77 AHNOB. Frías, caja 24, doc. 96. 78 Muerto de forma prematura, mientras jugaba a espadas con lUlOS criados de su primo, el conde de la Bañeza, en el palacete de su tío, el conde de Miranda. 79 AHN, OOMM. Caballeros, Calatrava, exp. 274ter. 8 0 Vacante por muerte del licenciado Fuenrnayor. Ibidem, doc. 100. 8 1 Rades le atribuye la encomienda de Daimiel, pero según Francisco Femández Izquierdo quizá sea lUla promesa que no se materializó, al fallecer en 1595; en cambio, nos consta que dicho beneficio fue administrado por Juan de Sandova1, comendador de Camón, entre 1 590-1 597 [AHN, OOMM. Consejo, lib. 344C, f. 572r y AHN, OOMM. Consejo, lib. 346C, f. 218r]. Por entonces, Francisco Sfrondato, marqués de Mirabel, fue nombrado comendador de Daimiel. 82 RrvAROLA y PINEDA, Juan Feliz Francisco. Monarquía Española, Blasón de su Nobleza, Segunda Parte, Madrid, Imprenta de Alfonso Mora, 1736, p. 459. 8 3 Contaba 24 años de edad al presentar sus pruebas, en 1 563 [AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 324]. Su contenido transcrito por URAGÓN, Francisco Rafael de (marqués de Laurencín). «San Francisco de Borja, caballero y comendador de la Orden de Santiago», Boletín de la Real Academia de la Historia, 22 ( 1 893), pp. 139-167, doc. 8. A fines de ese mismo año Fernando de Borja, ya intitulado caballero de la Orden de Calatrava, traspasa llll censal a Juan de Borja, caballero y comendador de Villarrubia (Orden de Santiago). AHNOB. Osuna, carpo 1 56, doc. 12. M Hasta profesar Luis de Sandoval; 1-IX-1 582, Lisboa. AHN, OOMM, AHT (RSC), leg. 4483 1 , s. f y AHN, OOMM. Consejo, lib. 342C, f 371v. 8 5 Por muerte de Francés de Álava, desde 7-V- 1586;AHN. OOMM. Consejo, lib. 344C, f. 79v. 86 Tenía 28 años al presentar las pruebas y ya estaba casado (1 588) AHN. OOMM. Caballeros Calatrava, exp. 325. No obstante, en el Índice de Vignau se consigna la fecha de 1584, que no concuerda conla del expediente original, que abarca desde e1 20-VI a1 21 -IX-1588. Véase VIGNAU y BALLESTER, Vicente y URAGÓN, Francisco Rafael de (marqués de Laurencín). Í ndice de las pruebas de los caballeros que han vestido el hábito de Calatrava, Alcántara y Montesa desde el siglo XVI hasta lafecha (Madrid, 1 903), A Coruña, Órbigo, 201 O. 87 Este caballero de la Orden de Montesa murió de manera prematura, en septiembre de 1588, antes de que se vieran las informaciones en el Consejo de Órdenes, y parece que nlUlca llegó a ser investido freile calatravo. 88 ANDRÉS, Fernando: «Borja y Castro, Pedro-Luis Galcerán de», voz en Diccionario Biográfico Español, Madrid, 201 1, vol. IX, pp. 1 54-158.

89 Era llll niño al realizarse sus pruebas, ya que apenas contaba con 8 años de edad. AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 5 1 3 . 90 Genealogía de Diego de Castej6n para ingresar enla Orden de Calatrava ( 1564). ACDA. Cadreita, lego 1, doc. 18. o, AHN, OOMM. Consejo, lib. 343C, f 211v. W Su boda precisó de licencia, otorgada eI 1 8-VIII- 1593. AHN, OOMM. Consejo, lib. 345C, f 391v. 93 No se conserva su expediente de pruebas, pero síla orden para que se le despache el hábito en la Corte ( 1 2-XII-1 565) [AHN. OOMM. Consejo, lib. 337C, f. 56r] . Seria nombrado consejero de Órdenes ese mismo día, para lo cual deberia ser caballero profeso, sustituyendo al licen­ ciado Juan Díaz de Fuenrnayor, promovido al Consejo Real [Ibídem, f. 56v]. Real Cédula para su profesar en la Corte, ante el capellán real frey Jerónimo Triviño, 17-1-1567 [Ibídem, f. 257r]. 94 La Orden de Calatrava le otorgó licencia para contraer nupcias; 27-VI- 1 572. AHN, OOMM. Consejo, lib. 339C, f. 299v. 95 Tenía 13 años cuando se hacen sus pruebas en 1563 [AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1074]. En 1565 se notific6 al achninistra­ dor del priorato del Sacro Convento, el monje benedictino fray Luis Álvarez de Solís, que debía recibir la profesión de sus votos corno caballero (7-VI-1565) [AHN. OOMM. Consejo, lib. 337C, f 14v]. 95 Tenía 23-24 años en el momento de hacer sus pruebas, en 1543. AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1074. 'iI n

Ibídem.

5-IX-1554. AHN, OOMM. Consejo, lib. 333C, f 253v. 00 AHN, OOMM. Consejo, libs. 335C, f 275r y 337C, f 201v. 100 Fue relevado de este último cargo por su vejez y enfermedad; 6-VIII-1572, Madrid. AHN, OOMM. Consejo, lib. 339C, f. 3 1 6v. 101 Tenía 17 años en el momento de tramitar su ingreso en la Orden y presentar pruebas, en 1561 [AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1074]. Su profesi6n expresa como caballero calatravo tuvo lugar el 29 de mayo de 1563 en el Sacro Convento [AHN, OOMM. Consejo, lib. 336C, f 3 1 8r]. 1 02 Obtuvo licencia de la Orden de Calatrava para contraer matrimonio con su paisano e17-VIII-1574. AHN, OOMM. Consejo, lib. 340C, f. l88v. 103 RAMOS, Antonio. DescrÍpdon genealogíca de la Casa de Aguayo, Málaga, 1781, p. 338. Licencia para contraer matrimonio con doña Leonor de Sotomayor, el 26-VII-1 584, enAHN, OOMM. Consejo, lib. 343C, f 300v. 1 04 Ibídem. 105 Nombramiento de visitador del convento femenino de la ASllllción enAlmagro; 29-111-1 593. AHN. OOMM. Consejo, lib. 345C, f. 335v. 1 05 Sus pruebas enAHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 766. 1 07 AHNOB. Fernán Núñez, caja 712, doc. 4. 108 MARlÍNEZ MILLÁN, José. «Grupos de poder en la Corte durante el reinado de Felipe 11 . . , op. dt. 109 EDELMAYER, Fiedrich. «Honor y dinero . . . », op. dt. '" 3-V- 1569, Madrid. AHN, OOMM. Consejo, lib. 338C, f 188v. 111 Tenía 28 años en el momento de tramitar las pruebas, en 1559 [AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 818]. No logra profesar sus votos hasta el año 1564. 112 Su expediente está en mal estado de conservación, pero su genealogía se conoce gracias a que su hermano, Enrique Enriquez Manrique, también recibió también merced de hábito. Ibídem, exp. 819. 11 3 AGI. Panamá, lego 236, lib.lO, ff. 409v-41 l r e Indiferente General, 1eg. 1968, lib. 20, f. 255. '" ADT lib. 8 1 l , f 27v.

11 5 Se le autorizó a profesar sus votos enla Corte en 1 560 [AHN, OOMM. Consejo, lib. 335C, f. 220r]; ala semana ya se le nombraba comen­ dador de pleno derecho [Ibídem, f. 223v]. Sin embargo, no debió de profesar en la Corte, ya que se envió Real Cédula el 6-1-1562 al administrador del priorato del Sacro Convento, frey Gonzalo de Calatayud, para que recibiera sus votos [Ibídem, lib. 336C, f. 4lr]. 11 6 «Al marques de Villanueva del Río antes que fuese a Valencia le dieron una encomienda para su hij o y sy se moria en el camino y se murio y se la dieron y que murio su hij o y dieron otra encomienda a su hermano, mmque no la tenia.» MARTÍNEZ HERNÁNDEZ, Santiago. «Memoria y escritura privada . . . », op. dt., p. 416. 11 7 GUTIÉRREZ CORONEL, Diego. Historia Genealógica de la Casa de Mendoza, Ángel González Palencia (ed.), Madrid, Instituto Jeronimo Zurita-Ayuntamiento de Cuenca, 1 946, 1, p. 137. 11 8 Sus rentas se reducían a unjuro de 287. 165 rnrs. anuales, por haberse enajenado dicha encomienda; 24-XII-1 558. AHN, OOMM. Consejo, lib. 335C, f 1 1 2r. 11 9 Nombramiento de Presidente el 5-VI- 1564. AHN, OOMM. Consejo, lib. 336C, f. 302v. 120 En 1587 se le concede licencia para casarse con doña Mariana Manrique, hij a del difimto don Garci Fernández Manrique, conde de Osomo. 121 GUlIÉRREZ CORONEL, Diego. Historia Genealogica de la Casa de Mendoza, rnss. (Jadraque, 1762) t. 11, f. l 60v en en AHNOB. Osuna, caja 3408. 122 Ibídem, f. 1 62v. 123 AHNOB. Cañete, caja 1, doc. 1 , f. l 64v. 124 CARLOS MORALES, Carlos Javier de. «El poder de los secretarios reales: Francisco de Eraso», en José Martínez Millán (dir.), La Corte de Felipe II Madrid, Universidad Autónoma de Madrid, 1 994, pp. 1 07·148. 125 SÁNCHEZ BALMASEDA, Maria Isabel. Análisis de redes sociales e historia: una metodología para el estudio de redes clientelares, tesis Universidad Complutense de Madrid, Madrid, 1995, p. 369. 126 ÁLVAREZ BAENA, José Antonio. Hijos de Madrid, Madrid, 1790, 11, pp. 87-89. 127 FLORES GUERRERO, Pilar y LÓPEZ PUERTA, Luis. «La encomienda de Mohemando. Su desmembración y enajenación», Wad-al-Hayara: Revísta de estudíos de Guadalajara, 13 ( 1 986), pp. 339-356. 128 Su nombramiento fue el primer doclUllento, suscrito por Felipe 11 tras acceder al trono, que aparece en el registro de despachos de la Se­ cretaria de Calatrava y Alcántara; 13·IV·1556. AHN, OOMM. Consejo 334C, f 176v. 129 Se le concedió en espera la encomienda de Torroba en 1557, beneficio al que accedió en 1 558, tras profesar sus votos corno caballero, y una vez que había fallecido frey Pedro Zapata de Ayala, su comendador titular. 1 30 Tal vez se trate de una promesa, mmque no consta que se materializase, corno supone Rades. 1 3 1 Gracias a Francisco Femández Izquierdo no he terminado por confundir a este caballero con frey Diego (Hernández) de Córdoba, error que en su día tuvo el misIIÚsimo Rades. 1 32 Se le concedió merced de hábito en 1566, para cuando clUllpliera diez años, con 10 que no pudo tomar el hábito de caballero hasta 1 572. Allllque no se conserva su expediente de pruebas, hay constancia de que acudió al Sacro Convento para tornar el hábito de caballero, y profesó sus votos en 1 574, allllque no se asienta en la nómina de profesos calatravos hasta1579, cuando se le menciona corno «hij o de conde de Alcaudete», seguramente para diferenciarle de sus homónimos coetáneos de la Orden. Sigue en dicha nómina hasta 1597. 1 33 FERNÁNDEZ IZQUIERDO, Francisco. La encomíenda calatrava de Vállaga, síglos AlI-XWll. Su explotación económica y la administración de sus rentas, Madrid, CSIC, 1985, p. 37. 1 34 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 2579. Entre sus pruebas se aporta una genealogía con los blasones de sus apellidos realizada por Francisco Damant, rey de armas de la Orden del Toisón de Oro. FERNÁNDEz IZQUIERDO, Francisco. La amen mílitar de Calatrava f. . .}, op. dt., p. 233.

135 HORTAL MUÑoz, José Eloy. «La concesión de mercedes en los Países Bajos durante el gobierno del duque de Alba. La importancia del control del gobierno de las ciudades y de las provincias», en Jesús Bravo Lozano (ed.), Espacios de poder: Cortes, ciudades y víllas, Alicante, Universidad de Alicante, 2002, vol. 1, p. 189, nota 9. Una visión global de este colectivo en NAVARRO, Federico, MORTERERO, Comado y PORRAS, Gonzalo. La nobleza en las armas: Noble Guardia de Arqueros de Corps, Madrid, Hidalguía, 1995. 136 Hacia 1588, llll demoledor memorial de sus subordinados le acusaban de arbitrariedades y excesos en la provisión de plazas y el manejo de dineros. Véase GARCÍA HERNÁN, David. «Nobleza y seguridad enla Corte: los capitanes de las Guardias Reales a finales del siglo XVI», Madrid: RevÍsta de arte, geografía e historia, 4 (2001), pp. 15-46, en concreto p. 36 Y HORTAL MUÑoz, José Eloy. «Las guardas palatino-personales de Fe­ lipe lb en José Martínez Millán y Santiago Femández Conti (dirs.), La Monarquía de Felipe //: la Casa del Rey, Madrid, Universidad Autónoma de Madrid, 2005, 1, pp. 453-506, en especial pp. 464-468. Más información sobre este personaje en FERNÁNDEz IZQuIERDo, Francisco. «Caballeros flamencos en las Órdenes Militares españolas. Algunas notas sobre la integración en el sistema nobiliario de la Monarquía Hispánica», enAna Crespo Solana y Manuel Herrero Sánchez (coords.), España y las 17 Provincias de los Países Bajos: una revisión historiográfica (XVI-XVIII), Córdoba, Uni­ versidad de Córdoba, Ministerio de ASlllltOS Exteriores y Flllldación Carlos de Amberes, 2002, 1, pp. 101-136. 137 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 2472. Allllque no debió profesar corno caballero en este tiempo, pues se ordena que lo haga lustros después [2l-1V-157l; AHN. OOMM. Consejo, lib. 339C, f. l48r]. 138 ROCAFORT, Guillermo. El Principe de Éboli. Ruy Gómez de Silva, Barcelona, Ámea, 2007. 139 REED, Heleny DADSON, Trevor. Epistolario e historiadocumenJalde Ana de Mendoza yde la Cerda princesa de Éboli, Machi.d-Fráncfcrt, Vervuert, 2013. 14J GUlIÉRREZ CORONEL, Diego. Historia Genealogica de la Casa de Mendoza, rnss. (Jadraque, 1762) t. IV, ff. 4oov-414v enAHNOB. Osuna, caja 3408. '" 24-XlI-1535, Madrid. AHNOB. Osuna, caja 3366, doc. l . 142 Privilegio Felipe 11 confirmando a Ruy G6mez de Silva y a Ana de Mendoza, su mujer, la donaci6n, cesi6n y traspaso hecha :(Xlr Diego Hurtado de Mendoza, su padre, de las ciudades de Mélito, Rapolla y las tierras de Franchica, La Roca, Anguitola, El Pizo, Carida, Monte Santo, Amendolea y Santo Laurenzio en Sicilia, con todos los derechos; 8-X-1 555, Bruselas. AHNOB. Osuna, caja 2029, docs. 13-16. 143 6-V-I 566, Lisboa (Portugal). AHNOB. Osma, caja 2207, doc. 1 . 1+! SÁNCHEZ BALMASEDA, María Isabel. Análisis de redes sociales e historia . , op. cit., p. 379. 145 GUIlÉRREZ CORONEL, Diego. Historia Genealogica de la Casa de Mendoza,mss. (Jadraque, 1762), t. I1I, ff. 400v414v enAHNOB. 0slUla, caja 3408. 1 45 La enajenación de ambas encomiendas santiaguistas en FERNÁNDEZ IZQuIERDo, Francisco. «Las ventas de bienes de las Órdenes Militares en el siglo XVI corno fuente para el estudio del régimen señorial: la J?rovincia de Calatrava de Zorita», Hispania, 42 (1 982), pp. 41 9-462 Y MARTÍN GALÁN, Manuel M. «Desmembraciones y ventas de bienes de las Ordenes Militares en el siglo XVI», en Jer6nimo L6pez Salazar Pérez (coord.). Las Órdenes Mílítares en la Península IbérÍca. Vol. //: Edad Moderna, Cuenca, Universidad de Castilla-La Mancha, 2000, pp. 1651-1659. 147 ROCAFORT, Guillermo: El Principe de Éboli f. .}, op. cit. 143 Por dejarla vacante su suegro, el duque de Francavila; 2-11-1 568, Madrid. AHNOB. Osuna, caja 3366, doc. 6. 1 4) Mayorazgo fmdado por Ruy Gómez de Silva y Ana de Mendoza; l l -XI-1572. AHNOB. Osuna, caja 1759, doc. 8 (1 -2). 150 GUlIÉRREZ CORONEL, Diego. Historia Genealogica de la Casa de Mendoza, mss. (Jadraque, 1762) t. 111, ff. 4oov-414v en AHNOB. Osma, caja 3408. 151 Provisión de Felipe 11 por la que hizo merced de la tenencia de la fortaleza de Zorita al Príncipe de Éboli, Ruy Gómez de Silva. Adjmto su pleito homenaje [17-11-1 565, Madrid. AHNOB. Osma, caja 2015, doc. 1 ] . Dicho nombramiento era vitalicio y se prolongarla por la vida de llll hijo, con la condici6n de invertir en ella 22.000 ducados a lo largo de doce años para su restauración, cláusula que no lleg6 a ejecutarse [17-111 565. AHN, OOMM. Consejo, lib. 336C, f. 403r]. . .

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1 2 30-IV-157l; AHN, OOMM. Consejo, lib. 339C f. l62v. Provisión de la Claveria de la Orden de Calatrava, vacante por defimción de Juan Manrique de Lara, hecha por Felipe 11 a favor de Ruy G6mez de Silva [2-V-157l, Madrid; AHNOB. Osuna, caja 3366, doc. 7. 153 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 1 06b. Tenía Con 51 años de edad al realizarse sus pruebas de ingreso. 154 GOÑI, Pedro y MUÑoz DE SALAZAR, Baltasar. Libro de las dijiniciones, instituciones y reformaciones de la orden e inclyta Cavallería de Montesa: con la forma que han de tener los caballeros de dicha orden en rezar las Horas Canónicas, Psa1mos y Psalterios, hechas por los muy magnificas, y Reverendos Señores Frey don Pedro de Coñi cavallero professo de la Orden de Calatrava, y del muy alto consejo de las Órdenes, y Frey Balthasar Muñozde Sa1azarprior de Vá1enCÍa, visitadores generales de la dicha Orden, y cavallería de Montesa: assistentes al muy reve­ rendo padre Frey don loan Fama Abad del Monasterio de nuestra Señora de Valdigna en el año 1556, Valencia, casa de Pedro de Huete, 1 570. 155 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 193. ,,, 7-XII-1 545. AHN, OOMM. Consejo, lib. 330C, f. 147r. '" 1 2-1X-1551. AHN, OOMM. Consejo, lib. 332C, f. 1 90v. 158 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 178. Terna 20 o 22 años al realizar sus pruebas. Profesa sus votos el l 6 de octubre de 1563. 159 Licencia de la Orden de Calatrava para casarse con doña María Pimentel, hij a de don Jerónimo Fonseca y Zúñiga, y doña Inés de Velasco y Tovar, condes de Monterrey ( 1 575). 1 éD «Por este tiempo, el Conde de Olivares, aviendo cumplido el tiemJXl de su embajada en la Corte Romana, donde se opuso con mucho valor a los empeños de Sixto V, fue nombrado Virrey de Sicilia, a quien su Magestad JXlr su industria, inteligencia y buenos servicios que avia hecho a la Corona de España, le aumento el salario ordinario de Virrey de Sicilia hasta en cantidad de 5.000 ducados y lUla encomienda para su hij o mayor». LABRADOR ARRoyo, Félix (ed.). Diario de Hans Khevenhüller, embajador imperial en la Corte de Felípe JI, Madrid, Sociedad Estatal para la Conmemoración de los Centenarios de Felipe 11 y Carlos V, 2001, p. 403 y HERRERA GARCÍA, Antonio. El Estado de Olívares. Origen,formación y desarrollo de los tres primeros condes ( 1535-1645), Sevilla, Diputación Provincial de Sevilla, 1990. 161 SALAZAR, BIas de Arbo1 y dezendezia de los de1 línage y antiquisima Casa de los apellído Osario, mss. Granada, 1 634, ff. 248v y ss. Ice Título comendador Puertollano a don Enrique de Guzmán, conde de Olivares; 5-VIII-1570, Machi.d, AHN, OOMM, AHT (RSC), lego 44906, s. f. >ó, 18-Vlll-1 569. AHN, OOMM. Consejo, lib. 338C, f. 24lr. 164 hmto a Cristóbal de Moura y, desde 1580, con Fernando Enriquez, comendador del Moral. 165 También se denomina en otras fuentes Juan Femández Carlos de Heredia. 1 65 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 202. Tenía 30 años de edad al hacer las pruebas. AlUlque recibió su hábito de caballero de Calatrava en 1564, siete años después se le incluye en lUla orden dirigida al prior del Sacro Convento para que reciba sus votos, jlUltO a otros caballeros; 21-Vll-1571. AHN, OOMM. Consejo, lib. 339C, f. 189r. 167 Parece que las crónicas no evocan a lUl noble muy popular entre sus vasallos; así se dice de él que «el conde de Fuentes don Carlos de Heredia era extrañamente aborrecido del vulgo, y estaba retirado en su tierra». ARGENSOLA, Lupercio Leonardo de. Información de los sucesos del reino de Aragon en los años de 1590 y 1591, Madrid, Imprenta Real, 1808. 1 63 Licencia consiliar para contraer matrimonio con la hij a de Emique Enriquez, mayordomo mayor del rey; 21 IX-1 584. AHN, OOMM. Consejo, lib. 343C, f. 275r. "" 28-11-1574, Madrid. ACC caja 21, doc. 45. ''" 29-Vlll-1571. AHN, OOMM. Consejo, lib. 339C, f. 189r.

171 En 1590 aparece corno comendador de Bolaños y administrador de la encomienda de Almagro [18-I1I-1590; AHN, OOMM. Consejo, lib. 344C, f. 572r]. Francisco Femández Izquierdo cree posible que esta promoción se debiera al impago del juro sobre la seda de Granada, que compen­ saba la desmembración de la encomienda de Moratalaz, de lo que se quejó Carlos de Heredia al rey en varias ocasiones, y su apoyo a la causa regia durante la revuelta aragonesa de 1591 fuese el motivo de su promoción a una encomienda más productiva. Véase además GASCÓN PÉREZ, Jesús. Alzar banderas contra su rey. La rebelión aragonesa de 1591 contra Felipe Il, Zaragoza, Institución Fernando el Católico, 201 O, p. 567. 172 Su pariente, el toledano Pedro Femández de Córdoba, era hermano del I marqués de Valenzuela; se casó con doña Juana de Obregón, hij a de Alonso de Obregón, veinticuaro de Granada desde 1 579 (tras muerte de su padre) y veinticuatro de Córdoba (tras renuncia de su suegro 1584), tam­ bién fue caballero de Calatrava y visitador de Partidos de Almagro y Andalucía, además de comendador de Torres y Canena, corregidor de Guadix, Málaga y Toledo y gentilhombre de boca de Felipe III. SORIA MESA, Emique. «En el corazón de la élite local: los Obregón, un linaje de la nobleza granadina. Materiales prosopográficos para su estudio», en Antonio Jiménez Estrella, Julián José Lozano Navarro, Francisco Sánchez-Montes, Margarita Birriel Salcedo (eds.), Construyendo historia: estudios en torno a Juan Luis Castellano, Granada, Universidad de Granada, 2013, p. 76l. 173 AHN, OOMM. Consejo, lib. 329C, f. l3v. Se autorizó que profesara sus votos en la corte en 1544, pero no parece que lo hiciera hasta el 1 8 de octubre 1 5 5 1 ; Ibidem, lib. 332C, f. 374v. 174 Concordia hecha por Luis Méndez de Haro y Sotomayor y Beatriz de Haro y Sotomayor, IV marqueses de El Carpio, con Diego Fernández de Córdoba, comendador mayor de Calatrava, sobre la herencia de Diego de Haro y Femández de Córdoba, 111 marqués de El Carpio. 175 «De una bala perdida que le quitó la cabeza». 176 http://www.iulce.es/verpersonaje. aspx?id=7705. 177 FERNÁNDEZ DE BÉ1HENCOURT, Francisco. Historia genealógica y heráldica de la Monarquía española, Casa Rea1y Grandes de España, Madrid, Establecimiento tipográfico de Enrique Teodoro, 1905, t. 6, cap. VII. 178 Los cronistas afirman que fue gran amigo del Rey Prudente. ASÍ, Baltasar Porreño nos cuenta la anécdota de que «echándose a dormir [el monarca] una tarde en que había de ir a unas fiestas, dixo a don Diego de Córdoba que lo despertase a tiempo. Don Diego se quedó dormido en una silla. Despertó su Magestad y, llegando a don Diego, que estaba dormido, le dixo: "Despierte vuestra Magestad, que ya es hora", a lo que respondió el caballero "Dexadrne dormir, que no es tarde"». PORREÑO, Baltasar. Dichos y hechos de [...} Phelípe Segundo, Madrid, 1748, p. 33 1 . 179 A su muerte se suscita lll1 enojoso pleito con sus antiguos vasallos, que denlll1cian la falta de inversiones en la parroquia de Agudo de su antiguo señor. Su hij o y heredero, don Diego Fernández de Córdoba, deán de la catedral de Sevilla, sostuvo el litigio hasta 1 606. AHN, OOMM. AHT (Pleitos), leg. 40551 . 180 Autorización para que se le despeche el hábito y haga su profesión expresa en la Corte [29-IX- 1558; AHN. OOMM. Consejo, lib. 335C, f. 1 26v]. Se verificó su profesión de votos al año siguiente [25-XII-1 559] y se asentó su mantenimiento como caballero en 1560 [8-11-1560; AHN, OOMM. Consejos, lib. 335C, f. 21lr]. 181 «Las armas del esudo son una águila, debaxo della un hoyo entre dos bandas y media banda que corre hacia abaxo, de ellas seis flores de lis y seis hoces divididas en cuaro partes, y al Iado izquierdo del escudo quatro flores de lis y uas ondas, y en medio en la parte de abaxo un árool con dos lobos; dividido el escudo en cinco cuarteles, con su celada y encima della lll1 águila con lll1 hoyo en los pechos». GONZÁLEZ CERECEDO, Antonio. El viejo hogar (I) f. . .}, op. dt., p. 1 9 1 . 1 82 SÁNCHEZ BALMASEDA, M . 1 . Análisis de redes socialesf. . .} , op. dt., p . 383. " , 17-IX-1561. AHN, OOMM. Consejo, lib. 336C, f. 1 9r. 124 Sustituyó al recién fallecido Antonio Gómez de Eraso [2-IX-1563; AHN, OOMM. Consejo, lib. 336C, f. 201 v]. Ejerció dicho cargo hasta su muerte en 1 568; su viuda, doña Catalina del Hoyo, recibió merced de cobrar el salario que le hubiera corres¡xmdido a su marido hasta fin de 1 568 [ 17-XI-1568; AHN, OOMM. Consejo, lib. 338C, f. 96v].

185 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1353. Aún era menor cuando inició las pruebas, pues tan solo contaba con 17-18 años. 1&5 GASCÓN PÉREZ, Jesús. «Don Manuel de Lanuza y Manuel Donlope. Precisiones y nuevos datos biográficos y genealógicos», Argensola: Revista de CienCÍas SOCÍales del Instituto de Estudios Altoaragoneses, 1 1 3 (2003), pp. 297-298. '" 20-XII-I540. AHN, OOMM. Consejo, lib. 328C, f 383v. '" AHN, OOMM. Consejo, libs. 329C, f 1 29r; 335C, f 299r y 337C, f 43r. '" 22-V- I546 y 9-IV- 1 559. AHN, OOMM. Consejo, libs. 330C, f 203v y 335C, f 1 22v. '" 1 6-09-1 548. AHN, OOMM. Consejo, lib. 331C. f 198v. 1 9 1 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1458. Natural de Toledo, con 40 años al realizase las pruebas. Profesa sus votos el 20 de septiembre de 1 564, cuatro años tras haber tornado su hábito, según consta en su asiento en la nómina de caballeros de Calatrava; 13-XII -1 564. AHN, OOMM. Consejo, lib. 336C, f 373r. '" 6-IX-1568. AHN, OOMM. Consejo, lib. 338C, f 70r. " , 21-IV-1 570. AHN, OOMM. Consejo, lib. 339C, f 30v. '''' 30-V- 1 576. AHN, OOMM. Consejo, lib. 341C, f 1 1 4r. '" 1 576-06-04, AHN, OOMM 341C, f. 1 06r. 195 7-V- 1 582. AHN. OOMM. Consejo, lib. 343C, f. 52v. Sin embargo, Rades yerra y lo hace titular de Auñón y su castillo. 197 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1492. Contaba con 18 años al realizar las pruebas de ingreso. 1 98 9-VII-1 584. AHN, OOMM. Consejo, lib. 343C, f. 239v Y GUTIÉRREZ CORONEL, Diego. Historia Genealogica de la Casa de Mendoza, mss. (Jadraque, 1762) t. I1, f 1 23v enAHNOB. Osuna, caja 3408. 1 99 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1496. Con 20 años al realizase las pruebas, en 1589, cuando ya era conde de Paredes. Realiza su profesión expresa corno caballero en 1590. 200 GUTIÉRREZ CORONEL, Diego. Historia Genealogica de la Casa de Mendoza, mss. (Jadraque, 1762) t. 11, f. 1 23v enAHNOB. Osuna, caja 3408. 201 Ibidem, ff. 1 23r-124v.

"" 12-1-1591. AHN, OOMM. Consejo, lib. 345C, f 81v. 203 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1487. Era un niño de 6 años al presentarse sus pruebas; no obstante, no se registra su nombre corno caballero profeso en la nómina de Calatrava hasta 1 544. 204 Su linaje y hermanos han sido glosados, entre otros, por ARANDA PÉREZ, Francisco José. «EL Palacio de Fuensalida. Un escenario para la historia», en Mario MUELAS Y otros, El PalaCÍo de Fuensalída, Toledo, llmta de Castilla-La Mancha, 2010, pp. 13-50, en especial pp. 36-38. 205 AGS. Patronato Real, lego 79, doc. 248. M 19-VIII- 1 582. AHN, OOMM. Consejo, lib. 343C, f 52v. "n 1 9-III-1 587. AHN, OOMM. Consejo, lib. 344C, f 22Ov. 200 Inició los trámites para entrar en la Orden en 1530. AHN. OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1485. M 4-VII-I 549. AHN, OOMM. Consejo, lib. 331C, f 332r. ", 25-1-1 550. AHN, OOMM. Consejo, 332C, f 34v. 211 En 1550 Gómez Manrique ya era comendador en espera y administrador de la encomienda de Corral de Caracuel, a la cual accede por fin como titular el 4- IX-1551. 212 Cuando se le concede la encomienda de Cañaveral se le permite continuar hasta su muerte también con la de Corral de Caracuel; 18-VII1 569. AHN, OOMM. Consejo, lib. 338C, f 24Ov.

213 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1499. Expediente concluido en 1 544, aunque contiene pruebas desde 1543. En 1544 se da orden de armarle caballero, pero no hay constancia de su asiento en la nómina de caballeros de Calatrava en los años inmediatamente posteriores. Sin embargo, en 1552 se ordena a G6mez Mamique, junto a otros caballeros en iguales circlUlstancias de no haber profesado aún, acudir al Sacro Convento a profesar sus votos, pues habían pasado cuatro años desde su torna de hábito. 214 ARCHV Pleitos Civiles, Fernando Alonso (F), caja 717, exp. 3. 215 23-1-1 559; AHN, OOMM. Consejo, lib. 335C, f. 1 1 8v. Dicha encomienda la disfrutaría hasta su muerte, cuando pasó a manos de su hermano, Martín de Padilla, a la sazón comendador de las Casas de Ciudad Real. ' " 15-1-1569. AHN, OOMM. Consejo, lib. 338C, f. 1 25v. w 15-X-1570. AHN, OOMM, lib. 339C, f. 94v. 'w 7-V-1571. AHN, OOMM. Consejo, lib. 339C, f. 1 66v. 219 Orden de armarle caballero [8-VIII-1560; AHN. OOMM. Consejo, lib. 335C, f. 277r]. Profesa sus votos en 1 563, según consta en su asiento en la nómina de Calatrava. 22D No consta que disfrutase dicho beneficio. Tal vez fuese lUla equivocación con Jerónimo de Mendoza, su comendador entre 1 596-1597. 221 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 606. Tenía 34 años cuando se tramitaron sus pruebas. Se orden6 armarle caballero en 1 564, siendo alcaide de la fortaleza de Castilnovo de Nápoles. En 1566 se le autoriza a realizar su profesi6n expresa en Nápo1es [ 14-XII-1566; AHN, OOMM. Consejo, lib. 337C, f. 246v]. Corno quiera que aún no lo había hecho un año más tarde, se la vuelve a dar licencia en idéntico sentido [ 1 2V-1 567. AHN, OOMM. Consejo, lib. 337C, f. 324r] . Se verifica su profesi6n el 30-VI-1567, según el asiento de su mantenimiento en la nómina de caballeros de Calatrava. m GUIlÉRREZ CORONEL, Diego. Historia Genealogicade la Casa de Mendoza,rnss. (Jadraque, 1762) t. I1I, :ff 149r-15Ov enAHNOB. Osuna, caja34a3.

223 Ibídem. '" 25-1-1 582. AHN, OOMM. Consejo, lib. 343C, f. 52v. 225 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1617. Tenía 9 años cuando se hacían sus pruebas. Se ordena armarle caballero en 1561, y se le asienta corno caballero profeso desde 1 562. 226 Sus capitulaciones matrimoniales enAHNOB. Osuna, caja 292, doc. 4l. Licencia de la Orden para casarse con la susodicha despacahada el 26-I1I-1 584; AHN, OOMM. Consejo, lib. 343C, f. 174v. 227 Rades, por su parte, asegura que no tuvieron descendencia. 228 AHNOB. Osuna, caja 2418, docs. 3-5. 229 http://www.uames/personatjJCli/ciencias/depaz/mendoza/fcomalmi.htm 230 AHNOB. Osuna, caja 105, docs. 73-75. '" 9-IV- 1582. AHN. OOMM. Consejo, lib. 343C, f. 52v. m 20-X-1 587. AHN. OOMM. Consejo, lib. 344C, f. 293r. 233 La merced de su hábito es de 1562. Armado caballero el 21 de enero de 1571, hizo profesi6n de votos el 21 de septiembre de 1 572, con relevación de estancia en galeras, conmutada por su cautiverio enArgel; 9-VI-1572. AHN. OOMM. Consjeo, lib. 339C, f. 290r. 234 Francisco Hurtado de Mendoza y Chacón, hasta entonces señor de Alrnazán, fue elevado al rango de marqués por merced de Felipe 11 (1575). 235 Autorización para casarse con doña Ana de Ludeña, hij a de Pedro Femández de Ludeña y doña Francisca de Luzón, vecinos de Madrid [24-I1I-1572; AHN, OOMM. Consejo, lib. 339C, f. 263v]. Segunda autorización para el matrimonio con Casandra Grimalda, vecina de Madrid [4-IX-1596; Ibidem, lib. 346C, f. 162r).

236 237 238 239 24J 241 242

SUS experiencias, narradas en primera persona, en su libro MENDOZA, Jerónimo de. Jornada de África, op. cít. AHNOB. Ovando, caja 82, doc. 3843. AHNOB. Ovando, caja 82, doc. 3884. AHNOB. Ovando, caja 82, docs. 3834 y 3835. AHNOB. Ovando, caja 82, doc. 3835. GÓMEZ DE OLEA y BUSTINZA, Javier y MORENO MEYERHOFF, Pedro. «Los condes de Fuentes [ . . . ]», op. cit, p. 296. Recibe la merced de la encomienda de las Casas de Toledo en espera en 1561, antes de su profesión expresa, que realizó el 9 de mayo de 1 562, y recibió la encomienda en junio; 19-VI-1562. AHN, OOMM. Consejo, lib. 336C, f 78r 243 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1610. Tenía entre 25-30 años cuando se hicieron sus pruebas. Realiza su profesión el mismo año 1 547, pues está asentado en la nómina de caballeros y permanece en ella hasta 1 554. 244 AHNOB. Cañete, caja 1, doc. 1 , f. 2 1 l r. 245 Juro a favor del maestro Cristóbal de Palomares y Alonso de Sotomayor, capellán de las capellanías que instituyó don Juan de Mendoza y Rivera de 100.000 maravedís. AGS. Contaduría mayor de Hacienda, leg, 503, exp.. 22 245 Realizó su profesión expresa e1 2 de abril de 1546. Fue quien armó caballero en Calatrava a Rui Gómez de Silva, cuando pasó de Alcántara a Calatrava, ese mismo año. 247 http: //bib.cervantesvirtual.com/historia/CadosV/ 1557.shtrn1 . 243 Proceso de fe de Pedro de Momoy, comendador de las Casas de Toledo (Orden de Calatrava) y gobernador del partido de Almonacid de Zorita, IX)f proferir palabras escandalosas ( 1 562). AHN. Inquisición, lego 206, exp.23. 24) AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1725. Contaba con 25 años al hacerse sus pruebas. Profesa sus votos corno caballero el 31 de marzo de 1545. 25J MÁRM:OL CARVAJAL, Luis del. Historia de la rebelión y castigo de los moriscos del reino de Granada, Málaga, 1600. 251 VÉRONNE, Chantal de la. Les sources ínédítes pour l'hístoÍre du Mame. /JI (1560-1578), Paris, École des Chartes, 1961, XIII. 252 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1740. Tenía 18 años de edad al hacerse sus pruebas. Se le autorizó a profesar en marzo de 1561, mmque no hubiera acudido al servicio en las galeras. 253 Licencia para contraer matrimonio; 17-11-1 578. AHN, OOMM. Consejo, lib. 341C, f. 249v. 254 DANVILA y BURGUERO, Alfonso. Don Cristóbal de Maura, primer marqués de Castel Rodrigo (1538-1613), Madrid, Establecimiento ti¡:x:>gráfico de Fortanet, 1900. '" I I -XII- 1578, Madrid. AHN, OOMM. AHT (RSC), leg. 449 1 1 , s. f 255 Juan de Noycarmes citado por CASELLAS, Esteban. Arbol genealogico historico de la nobilisima Casa y familia de los Excelentisimos duques de Bournonvílle, coronado de doze relevantes frutos, Barcelona, s.i., 1680, p. 5 1 . 257 Recibe la merced del hábito en 1 567, pero no se da orden de armarle caballero hasta 1 568, cuando recibe al mismo tiem¡:x:> la encomienda de Jimena y Recena. Sin embargo, no fue hasta 1 569 cuando no profesó sus votos como caballero. ''B 17-I1- 1578; AHN, OOMM. Consejo, lib. 34IC, f 249v. 259 AHN. OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 8 1 8. Tenía nada menos que 50 años al hacerse sus pruebas. Fue nombrado freile para asumir el cargo de consejero en Órdenes (Año 1592). Profesa el 26 de marzo de 15%, con relevación de estancia en galeras. 2éD MOREAU CUErO, Juan Javier. «Doña Catalina de Trillo. Fin de una fama», Ana1ecla Malacitana Electrónica, 26 (2009), pp. 59-83.

261 REZABAL y UGARTE, José. Biblíoteca de los escritores que han sido individuos de los seis colegios mayores, Madrid, imprenta de Sancha, 1805, p. 239. 262 Conservando por su menguada renta el pan y agua de los caballeros, pagado por la Mesa Maestral de Calatrava ( 1 2.000 rnrs. anuales). 263 AHN. OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 868. Tenía entre 1 9 a 23 años al hacerse sus pruebas (1531) y profesa como caballero el 4 de julio de 1 532. 264 ARCHV Registro de Ejecutorias, caja 1470, exp. 23. 265 AHN. OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1895. De 7 años al hacerse sus pruebas ( 1 541). Se le concede la merced de hábito ese mismo año y un breve pontificio con dispensa de edad para gozar los frutos de la encomienda de Valdepeña. Así las cosas, se ordena armarle caballero en 1542, pero habría de esperar a tener 14 años para profesar sus votos, por 10 que en 1547 se le ordena acudir al convento de Calatrava la Nueva. No profesará hasta 1552. 265 SALAZAR DE CASTRO, Luis de. Arboles de costados de gran parte de las primeras Casas f. ..}, op. dt. , p. 30. 267 Licencia para contraer seglUldas nupcias; 7-V- 1582. AHN. OOMM. Consejo, lib. 342C, f. 3 1 6r. 263 AHN. OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1885. Con 15 años de edad al hacerse sus pruebas; asentado en la nómina de caballeros en 1590, donde aparece consignado hasta 1 597. 269 Licencia matrimonial despacha el 10-1-1594. AHN, OOMM. Consejo, lib. 345C, f. 415v. 2íD SALAZAR DE CASTRO, Luis de. Historia genealógica de la casa de Lara f. . .}, op. dt., p. 1 13. 271 A su muerte le sucede corno titular de la encomienda almodoveña su propio hijo, Pedro Álvarez Osorio. 272 Tenía 24 años al presentar sus pruebas. En 1 594 comienzan a tramitarse sus pruebas ante el Real Consejo de Órdenes; poco después se hizo su profesión expresa. m AGS. Contaduría Mayor de Hacienda, 1eg. 612, exp. 39. 274 Con 34 o 36 años al hacerse sus pruebas. Tras tornar su hábito en 1559, no hizo su profesi6n expresa hasta 1572, para lo cual acudió al Sacro Convento. AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 9 1 3 . 275 Sin embargo, Rades l e hace hij o de Diego Pacheco, duque de Escalona. 276 Caballeros, exp. 1917. De 32 años al hacerse sus pruebas, en 1560. m AHN, OOMM. Consejo, lib. 341C, f 49r. 278 GUTIÉRREZ CORONEL, Diego. Historia Genealogica de la Casa de Mendoza, mss. (Jadraque, 1762) t. I1I, f. 62r enAHNOB. OSlUla, caja 3408. 279 Su padre, Gutierre L6pez de Padilla era pensionista sobre una parte de las rentas de la encomienda calatrava de las Casas de Sevilla (de la que Gutierre había sido también comendador al tiem¡:x:> que era comendador mayor de Arag6n de Calatrava), y en 1560 se le concedi6la merced de ceder dicha pensi6n en favor de su hij o Antonio [17-11I-1560; AHN. OOMM. Consejo, lib. 335C, f. 22lr], alUlque a su vez este la traspasó a su madre en 1561, aduciendo que tenía muchas hijas y pocas rentas. dD AHN, OOMM. Consejo, lib. 332C, f 149v. 281 Aparece ya corno caballero profeso enla convocatoria del capítulo general de Calatrava; 1 9-IX-1534. AHN, OOMM. Consejo, lib. 328C, f. 99r. 282 Licencia matrimonial expedida el 3 1 -1-1 574. AHN, OOMM. Consejo, lib. 340C, f. l 1 8v. Brianda parece que fue amante del secretario Escobedo, quien es asesinado en 1 578 tras un encuentro amoroso, víctima de las intrigas palaciegas. 283 LÓPEZ TORRIJOs, Rosa. «Documentos genoveses para la venida de Luca Cambiaso a España», en Real Monasterio-Palado de El Escorial. Estudios inéditos en conmemoración del IV Centenario de la terminación de las obras, Madrid, Real Patromonio, 1 987, pp. 243-248. 224 RAH. Salazar y Castro, U-37.

285 AHN. OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 932. Contaba unos 30 a 36 años al hacerse sus pruebas, en 1 565. hasta 1571 no hace su profesión expresa de caballero. 2&5 REZABAL y UGAR1E, José de. Biblioteca de los escritores f. . .}, op. cit., pp. 263-266. 2í::7 ARCHV Registro de Ejecutorias, caja 1 564, exp. 7 l . 283 Testamento de Antonio de Padilla, obrero de l a Orden de Calatrava, presidente del Consejo de Órdenes y del de Indias. RAH. Colección Salazar y Castro, D-16, tI 263r a 265v. 289 Se orden6 armarle caballero el 20 de octubre de 1545, aunque la orden se reiter6 en 1 547, por no haberse verificado, y no llegó a promm­ ciar sus votos como caballero de Calatrava hasta el 9 de mayo de 1561, tras cinco meses de noviciado en el Sacro Convento. 29J SAGASTI LAcALLE, Maria José y SAGASTI LACALLE, Blanca. «El linaje de los Peralta en los siglos xv y XVI. Blasones de la pinceladura del castillo de Marcilla», Príncipe de Ví'ana, 62/224 (2001) pp. 665-683. 291 Al menos en 1527 se dio orden de armarle caballero siendo menor de edad, y esperar a que tuviera 14 años para acudir a su noviciado en el Sacro Convento de Calatrava, 10 que se verific6 el 9 de abril de 1 534, cuando quedó asentado en la nómina de los caballeros. 292 CABRERA DE CÓRDOBA , Luis. Historia de Felipe Il, op. cit." lib. IX, cap. xv. 293 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 2064. Natural de Jaén, mmque vecino de Mengíbar, de 22 años al hacerse sus pruebas, el año 1583. 294 AHN, OOMM. Casamiento Calatrava, exp. 406 y RAM:os, Antonio. DesCTipcion genea10gíca de la Casa deAguayo y líneas que se derivan de ella desde que se conquistó Andalucía por el Santo Rey D. Fernando IJIhasta el presente, Málaga, imprenta de Miguel de la Cuesta, 1781, p. 150. M Confiaba, desde Jaén, que el servicio de Dieciocho Millones se «a de hazer con su boto y de sus deudos y amigos que son muchos en el ayuntamiento». AGS. Patronato Real, lego 90, doc. 571, n.o 2. 295 2'017

Ibidem.

En la convocatoria del capítulo general de 1 534 se le menciona como comendador de Almagro, siendo aún caballero novicio, al no haber profesado tooavía sus votos. 293 JWÉNEZ ESTRELLA, Antonio. «Linajes y alcaide en el Reino de Granada bajo los Austrias ¿Servicio militar o fuentes de enriquecimiento y honores?», en Antonio Jiménez Estrella y Francisco Andújar Castillo (eds.), Los nervios de la guerra. Estudios sociales sobre el ejército de la Monarquía Hispánica (siglos XVI-XVIII): nuevas perspectivas, Granada, Universidad de Granada, 2007, pp. 89-120. M FERNÁNDEZ CONTI, Santiago. Los Consejeros de Estado y Guerra de la Monarquía Hispana en tiempos de Felipe II. 1548-1598, Vallado­ lid, Universidad de Valladolid, 1998, p. 95. 3 00 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 24. Tenía alrededor de 10 años al hacerse sus pruebas, en 1535. Se ordena que reciba su pro­ fesión expresa en 1538, que verifica el 1 8 de noviembre. 3 01 AHN, OOMM. Caballeros Calatrava, exp. 24. 3CQ AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 2234. Tenía entre 36-40 años de edad al hacerse sus pruebas de ingreso, en 1 5 9 1 . Se le autorizó a recibir su hábito de caballero de Calatrava en Nantes (Francia), donde estaba al servicio de Su Magestad; l l -XII-1593. AHN, OOMM. Consejo, lib. 345C, f 413v. 3 03 También llamado en las fuentes Diego Gómez de Sandoval, hasta 1 567. 304 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 1 074. De edad de 12-14 años al hacerse sus pruebas, en año 1563. Dicho expediente de pruebas lo comparte con su hermano Gonzalo Chacón, también consignado en este repertorio. Se da orden de armar a ambos caballeros [ 1 0-VIII-I 563; AHN, OOMM. Consejo, lib. 336C, f. 266v]. En 1565 orden para que se reciba de ambos su profesi6n expresa. 3 05 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 544. Entre 24-30 años de edad al hacerse sus pruebas, también en 1573. Tom6 el hábito el 16 de noviembre de 1 573, pero no hizo su profesi6ny se le record6 en 1575y 1576, poco antes de concederle la encomienda de la Peña de Martos (Jaén).

305 ARCHV Registro de Ejecutorias, caja 1 155, exp. 9. 20-XI-1 574. AHN. OOMM. Consejo, lib. 34OC, f. 222v. 308 ENCISO ALoNso-MUÑUM:ER, Isabel. Linaje, podery cultura. El virreinato de Nápoles a comienzos del siglo XVII. Pedro Fernández de Cas­ tro, VII conde de Lemos, tesis Universidad Complutense de Madrid, Madrid, 2002. ce; l l-IV-1 576. AHN. OOMM. Consejo, lib. 341C, f. l OOr. 310 Calatrava, Caballeros, exp. 2383. Entre 10-12 años de edad al hacerse sus pruebas, en 1535. Profesión expresa corno caballero de Cala­ trava el 2 de octubre de 1 537. 311 Autorización para contraer matrimonio; 2l -VII-1552. AHN, OOMM. Consulta, lib. 332C, f. 326r. 3 12 SALAZAR y CAsrn.o, Luis de y MANUEL y ARruOLA, Alfonso de (eds.). Árboles de costados de gran parte de las primeras Casas f. . .}, op. cit., p. 124. 313 Conservando la asignación de 30.000 rnrs. de mantenimiento con cargo a la Mesa Maestral de Calatrava, por la menguada renta de la encomienda, y 10.000 mrs. más de la tenencia de Zorita. 3 14 AHN. OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 2422. Tendría entre 23-24 años de edad al hacerse sus pruebas, en 1549. Armado caballero ese año, o en 1550, no hizo su profesión hasta 1558. 315 AGS. Contaduría Mayor de Hacienda, lego 120, exp. 28. 3 16 AGS. Patronato Real, lego 67, doc. 6. 317 SALAZAR y CASIRO, Luis de. Advertencias historicas sobre las obras f. . .}, p. 203. 318 http://www. tercios. org/personajesJsanniento_francisco.htrnl. 319 GONZÁLEZ CARVAJAL, Tomás. Registro y relación general de minas de la corona de Castilla. Primera Parte, Madrid, por Miguel de Bur­ gos, 1832, p. 601. 32D Malherido en la batalla de Mazalquivir (1578), su brazo izquierdo quedó inútil, siendo identificado por el profesor Bouza con el retrato del Caballero con la mano en el pecho que pintó El Greco. BOUZA ÁLVAREZ, Fernando Jesús. «Corte es decepción [ . . . ]», op. cit. 321 Le armó caballero de Calatrava freyTello Rarrúrez de Guzmán, comendador de Moratalaz, e1 6 de julio de 1 544, alUlque no hizo sus votos hasta el l O de junio de 1 552 en Calatrava la Nueva. Se hizo merced de que tornase su hábito en la corte, jlUltO al barón Adarn de Dietrichstein, mayordomo de los principes de Hungria, 10 que se verificó el 29 de agosto de 1570, y se pidió que le tornase sus votos también en la corte a frey Francisco de Rades, capellán real. No obstante, no acudió al Sacro Convento para realizar su profesión expresa hasta julio de 1571. 322 Sus ascendientes en GóMEZ-:MENOR, José Carlos. «Datos documentales sobre la rama toledana de los Silvas», Tolefvm, 17 (1 985), pp. 217-225. 323 Siendo embajador en Portugal, recibió licencia para contraer matrimonio con doña Felipa de Silva, nieta del conde de Portalegre [5-VI1 577; AHN, OOMM. Consejo, lib. 341 C, f. 208v]. Su boda en SoUSA MOREIRA, Manuel. DesCTiptíon genealogica y historical de la ilustre casa de So usa, Madrid, imprenta de Francisco Javier García, 1770, p. 277. 324 SOARES DE AzEVEDO BARBOSA DE PINHO, Augusto. Portugal antígo e moderno. Diccionario geographico, estatístíco, chorographico, he­ raldico, archeologico, historÍco, biographico e etymologico, de todas as cidades, villas e freguezias de Portugal e de grande numero de aldeias, Lisboa, imprenta Martos Moreira, 1 873-1890, 12 vols., en concreto, VII, p. 228; pero, sobre todo, BOUZA ÁLVAREZ, Fernando Jesús: «Corte es decepción [ . . . ], op. cit. 325 AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 2636. Tema 49 años de edad al hacerse sus pruebas, en 1 568. '" 26-1-1571; AHN. OOMM. Consejo, lib. 339C, f. 122r. 327 PÉREZ PASTOR, Cristóbal (comp.). Noticias y documentos relativos a la Historia y Literatura españolas, Madrid, RAH, 1910, p. 368. , en

328 Aparece asentado en la n6mina de caballeros de Calatrava desde 1 560. 329 AGS. Contaduría Mayor de Hacienda, lego 294, exp. 26. 330 Licencia para desposarse el 19-I1I-l 565; AHN. OOMM. Consejo, lib. 336C, f. 433v. Su matrimonio en CAÑADA QUESADA, Rafael. «Ex­ pedientes de limpieza de sangre conservados en el Archivo de la catedral de Jaén», Elucidario, 5 (marzo de 2(08), p. 193. 33 1 Plaza dotada con 243.333 rnrs./año. JWÉNEZ ESTRELLA, Antonio. «Patrimonializaci6n y enajenaci6n de oficios militares: el caso granadino (siglo XVI)>> en Manuel Bamos Aguilera y Ángel Galán Sánchez (coords.). La historia del reino de Granada a debate: viejos y nuevos temas, perspectivas de estudio, Granada, Universidad de Granada, 2004, pp. 455-472. 332 No se conserva su expediente, pero sí una nota de la Real Provisi6npara armarle caballero de Calatrava [8-VI-1552;AHN, OOMM. 333C, f. 19r] y profesa sus votos en Calatrava la Nueva a fines de 1 553. El Registro de dicha Real Provisión enAHN, OOMM, AHT (RSC), lego 44.847. 333 Niebla en el original; se trata de lll1 evidente error del copista. ACC. f. 2v. 334 BUSTO DUIHURBURu, José Antonio del. El conde de Nieva, virrey del Perú, Lima, Instituto RivaAgüero, 1963 y SARABIA VIEJO, Maria Justi­ na. «Luis de Velasco el Viejo y Francisco de Toledo: dos tipologías virreinales de la Arnérica de Felipe 11», ChronÍCa Nova, 26 (1 999), pp. 333-345. m l5-I1I-1580; AHN, OOMM. Consejo, lib. 342C. f. l55v. Su viuda se casó en segundas nupcias con Gómez Emíquez, con quien tampoco tuvo descendencia. ;yo AHN, OOMM. AHT (RSC), leg. 44935. 337 AHN, Consejos, lego 25407, exp. 2. 338 AGI. Justicia, Autos entre Partes. Lima, 1 062. 339 Francisco Femández Izquierdo piensa que, aunque hay una provisi6n nombrándole comendador de Piedrabuena [24-IV-1554; AHN. OOMM. Consejo, lib. 333C, f. 1 69r], parece que nlll1ca la disfrutó. 34J Provisión de encomienda Puertollano a Pedro de Velasco, por promoción de Pedro de Guzmán, conde de Olivares, a la de Piedrabuena; 25-XIl-1 554, Bruselas. AHN, OOMM,AHT (RSC), �70, s. f 341 Merced a frey Pedro de Velasco ortorgándole la encomienda de Alrnuradiel, dejando la de Puertollano; 2l-IV- 1 57l, Escorial. AHN. OOMM. AHT (RSC), leg. 44971. 342 Licencia matrimonial; l7-X-1567. AHN, OOMM. Consejo, lib. 337C, f. 407v. 343 SALAZAR y CASIRO, Luis de. Historia Genealógica de la Casa de Lara [. J, 1, p. 560. 3+t AHN, OOMM. Calatrava, Caballeros, exp. 2636. Se postula su ingreso en 1560. Hizo su profesión de votos en el Sacro Convento, el 1 2 de noviembre de 1561. 345 RAH. Salazar y Castro, D-l l , f. l59r. 345 Flllldarnentalmente, FERNÁNDEZ IZQUIERDO, Francisco. «Los caballeros militares en su temtorio: Los comendadores en el Campo de Cala­ trava entre 1 550 y 1630». Actas. Congreso itinerante Tierra del Quijote Tierra de Órdenes Militares (Almagro-Uclés-Consuegra-Alcázar de San Juan, 19-23 de septiembre de 2005), Toledo, Empresa Pública Don Quijote de la Mancha 2005, 2007, pp. 93-152, Y «Los comendadores de Cala­ trava en los territorios de Zorita, Andalucía, Arag6n y Valencia. 1550-1630», en Isabel Cristina FERNANDES (coord), As omens mílítares e as ordens de cavalaria entre ocidente e o oriente. Actas do V Encontro sobre Ordens Militares, Palmela, Editorial GesOs-Municipio de Palmela, 2009, pp. 259-321. Además, este autor ha tenido la gentileza de prop:)fcionarme datos complementaros inéditos y ha solucionado algunas dudas planteadas por la agobiante homonimia de la época. . .

FRANCISCORADES DE ANDRADA, CRONISTA YLINAllSTA

382

3.2.

Losfreiles priores

Un colectivo aparte lo constituían los religiosos de la Orden, así corno los priores cistercienses que rigieron los destinos del convento de Calatra­

va la Nueva. En total Rades escribe sobre la trayectoria profesional de 40

eclesiásticos varones. Nos hallarnos ante la elite espiritual de la Orden, con

un poder y un protagonismo que no tenían ni los freiles conventuales ni los rectores parroquiales, y solo comparables con las linajudas abadesas de los cenobios femeninos calatravos.

En la cúpula de todos ellos estarían los administradores del Sacro Con­

vento: 6 religiosos calatravos, además de otros 3 monjes cistercienses (2 de

los cuáles llegaron a ser abades de monasterios de su regla), en los que alaba sus letras y religión. Intuimos que su origen estamental es más modesto que

el de los comendadores; no obstante, sabernos de frey Jerónimo Triviño, que

su linaje era de los más respetados de Ciudad Real y ó 13-XII - 1 578, Madrid. AHN, OOMM, AHT (RSC), leg. 44914, s. f. m 13-I1I-1583, Sacro Convento. AHN, OOMM,AHT (RSC), leg. 42436, s. f.

LAS ADICIONES ALA CRÓNICA DE LA ORDEN Y CABALLERÍA DE CALATRAVA

385

ejercido antes corno párrocos y 1 corno capellán. Hay incluso 1 capellán­

examinador en el Consejo de Órdenes, para tamizar a los candidatos que aspiraban a alguna rectoría. Además, 1 de ellos llegó a ser vicario general

(Gabriel del Rincón, en el Partido de Andalucía); también hay 1 inquisidor de Uerena (el licenciado [rey Rodrigo Gutiérrez de Páramo)358 y hasta 1

obispo de Canarias (Fernando de Figueroa).359

Salvo notables excepciones, antes comentadas, el cronista da pocas refe­

rencias personales de dichos priores, aparte de su procedencia geográfica.

Únicamente del licenciado Páramo apunta que es hijo de Fernán Suárez de

Páramo y del maestro frey Juan Pérez, prior de San Benito (Toledo) escribe que tuvo muchas comisiones y se le concedió ayuda de costa por ser de­

masiado tenue dicha prebenda; sin duda lo conoció personahnente durante sus largos años de estancia en la Ciudad Imperial.

358 Un Rodrigo Gutiérrez del Páramo, vecino de Borox (Toledo) pleiteó entre 1 5341536 en la Audiencia de Valladolid para ver reconocida su hidalguía [ARCHV. Sala de Hijosdalgo, caja 155, exp. 6]. E1 3 de julio de 1573 aparece como freile calatravo e inquisidor de Llerena [AHN. OOMM. AHT (RSC). leg. 44953. s. f.J; pero el 3 de febrero de 1576 ya lo documentamos corno prior de la Coronada e inquisidor de Sevilla [AHN. Archivo Histórico Toledo (RSC), lego 44919, s. f.] No obstante, a fines de 1 575 ya era inquisidor en Sevilla, investigando nada menos que a la futura santa Teresa de Jesús, acusada de ser alumbrada; a este respecto véase CAM:PESE GALLEGO, Fernando Javier. «Rodrigo Álvarez S.l. El sucesor del profeta ( 1 523-1587)>>, Revista Jerónimo Zurita, 85 (2010), pp. 207-228, en concreto p. 216, nota 45. 359 Fernando de Figueroa ( 1 533-1 608). Oriundo de Sabiote (Jaén), de padres hidalgos, doctor en Teología por la Universidad de Salamanca; corno capellán real acompañó a Felipe en la jornada de Portugal; luego fue gobernador del obispado de Plasencia y en 1587 obispo de Canarias. Cuando en 1595 el pirata Drake ataca las Palmas se puso a la cabeza de sus clérigos y religiosos para repeler su ataque. En 1596 fue promovido al obispado de Zamora y con 75 años volvió a su tierra, para ser enterrado en Baeza. VIERA y CLAVIJO, José de. Noticias de la Historia General de las Islas de Canaria (1 772), facs., Valladolid, Maxtor, 2004. pp. 1 02-104.

CUADRO 1 2 CURSUS HONORUMDE LOS PRIORES CALATRAVOS Nombre

Origen

Año*

Grado

Priorato 1.0

Álvarez de Cobanubias, Pedro

Lillo (TO)

[1567]

Licenciado

Coronada

Ávalos, Juan de

Úbeda (lA)

[1571]

Doctor

[Zuqueca, 1589-1591]

Barba, Jerónimo

Priorato 2.°

Priorato 1°

Otros cargos [Visitador del Partido de Zorita, 1589] Administrador convento de San Fel�es (Burgos) [1593]'60

Coronada

Visitador General del Partido de Calatrava [1591]. [Emigra a Perú, 1598]36 1

Fuencaliente [1566]

[Pitancero del Sacro Convento, 1539]

Cervera de la Torre, Antonio

Ciudad Real

[1575]

Licenciado

Coronada

Cisneros, Diego de

Ciudad Real [oAldea del Rey (CR)]

[1559]

doctor

Coronada

[Visitador del partido de Andalucía (1577)]

Figueroa, Fernando de

[Rnte (CO)]

[1563]

Coronada

Obispo de Canarias

Gallego, Diego

[1553]

licenciado

Porcuna

García, Jorge

Moral de [1543] Calatrava (CR)

Valencia

Guevara, Luis de

Ciudad Real

[1551]

Coronada

Gutierrez de Páramo, Rodrigo

Borox (TO)

[1561]

Guzmán, Ramiro de

licenciado

Coronada Zorita

Granada y Alhama

Zuqueca

Rector Colegio de Calatrava (Salamanca) y Sacristán Mayor [1594-1600; [Cronista, 1599"' y Preside Capitnlo General de 1600]

Alcañiz

Granada y Alhama

Fuencaliente [1574] Inquisidor de Llerena

Hazaña, Alonso de

[Borox (TO)]

1542]

Hidalgo, Diego

Corral de [1570] Calatrava (CR)

Alcañiz maestro

Lorenzo, Cristóbal

Valencia3ó3

Rector de Bexis

Toledo

[Rector de DaimieFI'i4]

Mexía, Cristóbal

[Ciudad Real]

[1557]

Fuencaliente [1594]

Rector de Valdepeñas; administrador convento Asunción (Almagro

Merlo, Jerónimo de

Valdepeñas (CR)

[1570]

Sevilla

[Rector Santa Ma, Daimiel, hacia 1590] Rector Colegio Salamanca

Merlo, Pedro de

Torralba de [1562] Calatrava (CR)

Millán Guerra, Gonzalo

Llerena (EA)

[1573]

Muñoz, Juan

Valdepeñas (CR)

[1542]

Ordóñez, Francisco

Móstoles (Madrid)

[1536]

Ortega Vallejo, Miguel de

Marta; (lA)

[1567]

Zuqueca [1587]

licenciado

Pérez, Juan Polo, Juan

Almonacid de Zorita (GU)

[1554]

licenciado

Alcañiz

[Prior Sacro Convento, 1575-78; prior de Zuqueca, 1587; Visitador del Partido deAlcañiz, en 1590, y del Campo de Calatrava, en 1600, 1603 Y 1607] [priorJaén, 1600-1615]

Toledo

Subprior del Sacro Convento

Zorita

Rector de Valdepeñas

Coronada doctor

Toledo

Sevilla

Rector San Bartolomé (Almagro). 3ó'i [Visitador de Andalucía, 1577]

Toledo

Rector Colegio de Calatrava (Salamanca); administrador convento Asunción (Almagro). [Familiar del Santo Oficio de Córdoba, desde 1584]3"

Toledo

Rector de Martos

Zorita

Fuencaliente [1592]

Nombre

Origen

Quintanilla, Juan Bautista de Toledo

Año* [1553]

Grado licenciado

Priorato 1.0 [Zuqueca, 1581]

Priorato 2.° Alcañiz

Priorato 1° Valencia

Otros cargos [Rector de Argamasilla de Calatrava, 1571];367 [capellán examinador de candidatos a rectores, 1587];368 [Rector de Valdepeñas y Visitador convento de San Benito, en Sevilla (1590)];%9 Visitador [Orden Montesa, 15921593; Partido de Andalucía, 15941595]

Rades de Andrada, Francisco San Andrés (SO)

[1557]

licenciado

Coronada

Rincon, Gabriel del

Yepes (TO)

[1564]

licenciado

Granada y Alhama

Vicario General del Partido de Andalucía y rector del Colegio de Calatrava (Salamanca)

Rodero, Luis

MigueltlliTa (CR)

[1558]

doctor

Zuqueca

Rector del Colegio de Calatrava (Salamanca) y subprior del Sacro Convento; visitador

Ruiz, Sebastián

[Almagro (CR)]

[1537]

Sevilla [l567pl0

Sánchez, Juan

[Calzada de Calatravapn

[1576]

Sevilla

Triviño [de Hoces], Jerónimo

Ciudad Real

[1538]

[Toledo, 1584]113

Valles, Cristóbal de

Granátula (CR)

[1548]

[licenciado]

Porcuna

Granada y Alhama

Jaén

Visitador y administrador Colegio de las Doncellas (Toledo)

Zorita

Capellán en AlmagroTIl

Jaén [1588]'1
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