Enciclopedia de las ciencias filosóficas [1830] [2017 ed.] 9788416160570

ENCICLOPEDIA DE LAS CIENCIAS FILOSÓFICAS [1830] Georg W. F. Hegel (Edición bilingüe y crítica de Ramón Valls Plana) La E

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Table of contents :
Presentación - Rarnón Valls Plana
Nota sobre la presente traducción
Signos convencionales y siglas
Referencia de obras citadas
ENZYKLOPÄDIE DER PHILOSOPHISCHEN WISSENSCHAFTEN IM GRUNDRISSE
Vorrede zur zweiten Ausgabe
Vorrede Zur ersten Ausgabe
Vowort zur dritten Ausgabe
Inhalt-Anzeige
Einleitung
Erster Teil. DIE WISSENSCHAFT DER LOGIK
VORBEGRIFF
A. Erste Stellung des Gedankens zur Objektivität
B. Zweite Stellung des Gedankens zur Objektivität
I. Empirismus
II. Kritische Philosophie
C. Dritte Stellung des Gedankens zur Objektivität
Näherer Begriff und Einteilung der Logik
ERSTE ABTEILUNG. Die Lehre vom Sein
A. Qualität
B. Quantität
C. Das Maß
ZWEITE ABTEILUNG. Die Lehre vom Wesen
A. Das Wesen als Grund der Existenz
B. Die Erscheinung
C. Die Wirklichkeit
DRI'ITE ABTEILUNG. Die Lehre vom Begriff
A. Der subjektive Begriff
B. Das Objekt
C. Die Idee
Zweiter Teil. DIE NATURPHILOSOPHIE
Einleitung
ERSTE ABTEILUNG. Die Mechanik
A. Raum und Zeit
B. Materie und Bewegung. Endliche Mechanik
C. Absolute Mechanik
ZWEITE ABTEILUNG. Die Physik
A. Physik der allgemeinen Individualität
B. Physik der besonderen Individualität
C. Physik der totalen Individualität
DRITTE ABTEILUNG. Die Organik
A. Die geologische Natur
B. Die vegetabilische Natur
C. Der tierische Organismus
Dritter Teil. DIE PHILOSOPHIE DES GEISTES
Einleitung
ERSTE ABTEILUNG. Der subjektive Geist
A. Anthropologie. Die Seele
B. Die Phänomenologie des Geistes. Das Bewußtsein
C. Psychologie. Der Geist
ZWEITE ABTEILUNG. Der obj ektive Geist
A. Das Recht
B. Die Moralität
C. Die Sittlichkeit
DRITTE ABTEILUNG. Der absolute Geist
A. Die Kunst
B. Die geoffenbarte Religion
C. Die Philosophie
ENCICLOPEDIA DE LAS CIENCIAS FILOSOFICAS EN COMPENDIO
Prólogo a la Segunda Edición
Prólogo a la Primera Edición
Prólogo a la Tercera Edición
Índice
Introducción
Primera parte. LA CIENCIA DE LA LÖGICA
Concepto previo
A. Primer posicionamiento del pensamiento respecto de la
objetividad: Metafisica
B. Segundo posicionamiento del pensamiento respecto de la
objetividad
I. Empirismo
II. Filosofia critica
C. Tercer posicionamiento del pensamiento respecto de la
objetividad: El saber inmediato
Concepto mäs próximo y divisi6n de la L6gica
PRIMERA SECClON. La doctrina del ser
A. Cualidad
B. Cantidad
C. La medida
SEGUNDA SECCIÓN. La doctrina de la esencia
A. La esencia como fundamento de la Existencia
B. El fenómeno
C. La realidad efectiva
TERCERA SECCIÓN. La doctrina del concepto
A. El concepto subjetivo
B. El Objeto
C. La Idea
Segunda parte. LA FILOSOFIA DE LA NATURALEZA
Introducción
PRIMERA SECCIÓN. La mecánica
A. Espacio y tiempo
B. Materia y movimiento. Mecänica finita
C. Mecänica absoluta
SEGUNDA SECCIÓN. La física
A. Fisica de la individualidad universal
B. Fisica de la individualidad particular
C. Fisica de la individualidad total
TERCERA SECClON. La organología
A. La naturaleza geológica
B. La naturaleza vegetal
C. El organismo animal
Tercera parte. LA FILOSOFIA DEL ESPIRITU
Introducción
PRIMERA SECClON. EI espiritu suhjetivo
A. Antropologia. El alma
B. La fenomenologia del espiritu. La conciencia
C. Psicologia. El espiritu
SEGUNDA SECCIÓN. EI espiritu objetivo
A. El derecho
B. La moralidad
C. La eticidad
TERCERA SECClON. EI espiritu absoluto
A. El arte
B. La religión revelada
C. La filosofia
Apéndices
Vocabulario alemán-español
Vocabulario español-alemán
Índice de personas
Índice de materias
Índice
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Enciclopedia de las ciencias filosóficas [1830] [2017 ed.]
 9788416160570

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G. W. F. HEGEL Enciclopedia de las ciencias filos6ficas (1830)

LECTURAS Serie Filosofia Director

FEux DuauE

Cualquier forma de reproducciön, distribuciön, comunicaciön pöblica o transformaciön de esta obra sölo puede ser realizada con Ia autorizaci6n de sus titulares, salvo excep­ ci6n prevista por Ia ley. Dirijase a CEDRD (Centro Espanol de Derechos Reprograticos, www.cedro.org) si necesita lotocopiar o escanear algun lragmento de esta obra.

© MERCEDES SOLE FERRATER, 2017 de la introducci6n, traducci6n y notas de RAM6N VALLS PLANA

© AllA DA EDITORES, S.L., 2017 de Ia presente edici6n Galle del Gobernador, r8

28014, Madrid

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SABATICA GUADALUPE GISBERT

ISBN 978-84-16160-57-0 IBIC HPK dep6sito legal M-8766-2017

preimpresi6n impresi6n

DALUBERT ALLE COFAs, ARTES GRAF!CAS

G. W. F. HEGEL

Enciclopedia de las ciencias filos6ficas en compendio (183o) edici6n bilingüe de

RAMON VALLS PLANA

PRESENTACION Rarnon Valls Plana

lA ENCICLOPEDIA EN lA VIDAY OBRA DE HEGEL

La Enciclopedia de las cienciasfilos6ficas en compendio, Reidelberg 1817 (� a edi­ ci6n, Berlin 18�7; 3a edici6n, ibid. , 183o; en adelante ENC) , es una de las cuatro grandes obras que Regel public6 en vida, escritas y corregidas de su propia mano. Las otras tres, con su titulo completo, son: •





Fenomenologia del Espiritu (en adelante FEN) . Jena, 1807. Ciencia de la L6gica (en adelante LOG) . Nuremberg, 181� - 16. Lineas basicas de la Filosofta del Derecho (en adelante FDD) . Berlin, 18�1 (aunque estaba en las librerias a fines de 18�o).

Cada una de estas obras se asocia a una etapa de la evoluci6n de su autor y es comunmente vista como culminaci6n y expresi6n de una fase en el desarro­ llo del pensamiento hegeliano. Seglin este modo de ver vulgarizado, la F EN seria el fruto del tiempo de maduraci6n que signific6 para Regel su paso como docente novel por la Uni­ versirlad de Jena (1801-1807); con esta obra, Regel habria ya alcanzado lo que fue, hasta su muerte, el principio sintetico y generadar de su filosofia (la sus­ ' tancia-suj eto, el concepto de espiritu) , mientras las obras posteriores serian un simple despliegue de ese principio. Es cierto que, como escrito filos6fico, la F EN describe las distintas configuraciones o modos de ver y hacer por los que sucesivamente pasa la conciencia humana, individual y colectiva, hasta alcan-

Sustancia-sujeto es f6rmula que compendia las dos corrientes filos6ficas modernas que confluyen en el hegelismo, la sustancia spinoziana y la subjetividad kantiano -fichteana. Concepto de espiritu es f6rmula que se vale de los terminos tecnicos que el mismo Regel considera mas apropiados. Vease la N al § 384 y, mas abajo, las pp. 13-14 de esta misma Pre­ sentaci6n.

IO

RAMON VALLS PLANA

zar aquel saher (absoluto, dice el texto de la F EN; filos6fico - epistemico, inter­ pretamos nosotros) que merece la calificaci6n de verdadero. La descripci6n del transcurso de las figuras de conciencia se trenza alli con una interpretaci6n estrictamente filos6fica de esa historia de la conciencia, interpretaci6n filos6fica que descubre y destaca un hilo de necesidad en el despliegue hist6rico de la conciencia humana. La conciencia se ve llevada de una figura a otra superior en virtud de la experiencia transformadora que sufre cuando intenta ajustarse a la norma que la constituye en cada uno de sus pasos. El conjunto de las figu­ ras resulta ser asi, ultimamente interpretado, una secuencia necesaria de fen6 menos o manifestaciones del espiritu. A la F EN bajo esta perspectiva se le con­ cede por lo general un valor meramente introductorio al sistema, aunque no ha faltado quien ha visto ya en ella una cierta exposici6n de la totalidad del sistema hegeliano�. La LOG, por su parte, seria el tratado especulativo o metafisico por ex­ celencia en el que Regel habria conseguido la deducci6n, anteriormente fraca­ sada en Kant y Fichte, de los conceptos puros (o no empiricos) producidos por la raz6n; estos conceptos (Begriffe) , correspondientes a lo que Kant habia lla­ mado conceptos de la raz6n pura, son interpretados por Regel en su LOG como algo no meramente mental ni meramente subjetivo, sino ontol6gico. Son cate­ gorias en el sentido mas clasico de la palabra, mientras que para los conceptos en sentido corriente o vulgar (conceptos del entendimiento en Kant) , Regel reserva el nombre de representaciones (Vorstellungen) . Entiende el que el con­ cepto, como inteligibilidad pura, es estructura esencial, dinamica y permanente de las cosas mismas. La LOG seria entonces, segttn este modo simple de esque­ matizar, la obra representativa de la estancia de Regel en Nurernberg (18o8-16) y la mas filos6ficamente pura, si se puede hablar asi, de todas las que escribi6 . En aquella etapa de su vida, Regel se habia visto temporalmente apartado de la docencia universitaria como consecuencia de la dispersi6n de la Univer­ sidad de Jena que sigui6 a la bataHa librada por Napole6n cerca de la ciudad en 18o6. Regel se habia trasladado entonces a Bamberg, donde por un breve tiempo dirigi6 un peri6dico local y, a continuaci6n, se instal6 (y cas6) en Nuremberg. Fue alli donde, ademas de ejercer como profesor y director del Instituto de Bachillerato, escribi6 la LOG. Esta obra alcanz6 mayor notoriedad



Rudolf Haym, Hegel und seine Zeit, Berlin, 1857, reimpresi6n en Hildesheim, 196�. pp. 336337. A lo largo de su vida, Regel vari6 su propia visi6n de la FEN. Los textos pueden verse en el apendice � de la 3a edici6n de mi comentario a la FEN: Rarnon Valls, Delyo al nosotros, Barcelona, PPU, 1994, pp. 413-4�1. Cfr. aqui mismo, mas abajo, nota �7·

PRESENTACIÖN

II

que la FEN y le vali6 como merito para ser llamado , ahora ya como profesor ordinario o catedratico, a la Universidad de Reidelberg. Una vez incorporado a esta Universidad, Regel se encontr6 ante la nece­ sidad de dotar a sus alumnos de un manual que les sirviera de hilo conductor de las clases. Escribi6 entonces rapidamente y public6 la primera edici6n de la Enciclopedia de las ciencias filos6ficas en compendio. Esta obra puede verse, por tanto, como el primer fruto del regreso definitivo de Regel a la ensefianza uni­ versitaria. El libro es una exposici6n global y a la vez abreviada de todo el sis­ tema filos6fico; un compendio o manual escolar en el que estan muy presentes sus preocupaciones didacticas3 . La estancia de Regel en Reidelberg dur6 dos afios escasos (1817-I8), porque en seguida acept6 trasladarse a la Universidad de Berlin, donde pronto habia de alcanzar la cumbre de su fama (I8I8-3I). En esta ultima ciudad, capital entonces de la Prusia postnapole6nica, publica su Filosofta del derecho, obra que significa la intervenci6n del fil6sofo en el debate constitucional entre liberales y restauracionistas que tenia lugar entonces en Berlin. En la FDD, Regel expone, en efecto, su pensamiento etico, social y politico. Dicho muy brevemente: dejando aparte la obra fragmentaria que el no public6 , perteneciente a las etapas mas juveniles de su vida4 ' y prescindiendo tambien de otros escritos de menor alcance relativo5 , tenemos del propio Regel una introducci6n al sistema (FEN) , el nucleo mas duro de este (LOG) , el sistema logrado (ENG) y la aplicaci6n politica (FDD) . Esta ultima, seglin los t6picos mas divulgados, vendria a revelar precisamente el caracter conservador en ultima instancia, e incluso reaccionario, de la gran construcci6n te6rica que conocemos como filosofia hegeliana, la cual frecuentemente se identifica como . Un pensamiento vigoroso, inteligente y penetrante como pocos, desde luego, pero que se juzga a la vez como artifi­ cioso y alambicado. Es mas, se ve condenado al fracaso por causa precisamente

3 4

5

, en 0. Pöggeler (editor): Hegel, Friburgo I Munich, Alber, 1977- pp. 91- 105. Corno se sabe, los escritos juveniles de Regel fueron publicados por Hermann N ohl en 1907 con el titulo inadecuado de Hegels theologische Jugendschriften. Existe reimpresi6n en Frank­ furt a.M., Minerva, 1966. Haytraducci6n parcial al castellano: J.M. Ripalda (editor), Escritos dejuventud, Mexico, FCE, 1978 (en adelante]UV). Hay que insistir en que el menor alcance de las otras obras de Regel es meramente relativo. No solo los escritos publicados y no publicados de la epoca de Jena, sino otros textos que lle­ gan hasta su misma muerte, como por ejemplo las Lecciones sobre laspruebas de la existencia de Dias o el escrito Sobre la ley de reforma del Parlamento britanico (Wk 17, 347 ss. y Wk 11, 83 ss. respectivamente), no pueden minusvalorarse.

Asi por ejemplo F. Nicolin,

I�

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de su desmedida pretensi6n de darlo todo por racional y de haber pretendido desvelar esa racionalidad obj etiva de todo el universo con su propia raz6n humana. Esta visi6n simple, que responde al t6pico escolar de vidayobra del fil6sofo, no es del todo falsa. Sin embargo , como suele suceder con esta clase de sintesis, es poco exacta. Giftendome a la ENG, tratare de mostrar que este libro, mas que emblematico de la epoca de Reidelberg, ha de considerarse como representativo de la estancia de Regel en Berlin tanto o mas que la F DD, y mos­ trare tambien que la ENG, siendo desde luego la unica exposici6n completa del sistema hegeliano que su autor public6 por escrito, no es de ninguna manera el sistema acabado y completo que muchos quisieron y quieren ver en ella; es un simple manual abreviado que estuvo siempre en proceso de correcci6n. En un 6 cierto sentido, puede decirse que la ENG no sali6 nunca del telar , a pesar de haberse formulado e impreso por tres veces consecutivas.

*

*

*

La historia circunstanciada de la ENG, desde la concepci6n del proyecto hasta la publicaci6n en Berlin de la tercera edici6n, un afto antes de la muerte de su autor, la tenemos hoy disponible en los dos informes editoriales escritos por W. Bonsiepen y R.C. Lucas para los volumenes 19 y �o de la edici6n de la Aca­ demia7 . Si pues los planes de publicaci6n de una filos6fica hay que remontarlos hasta la epoca de Jena (I8oi-18o7), como se dice en el pri­ mero de estos informes, es util tomar como punto de partida del proyecto la siempre citada carta de Regel a Schelling, fechada aun en Frankfurt el � de noviembre de 18oo8. Dice alli Regel:

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7

Asi lo ve, por ejemplo, Glockner en su prologo a la edici6n de la ENG de Reidelberg (Stutt­ gart, 1 9�7) , p. VIII. Escribe alli: > . G.W.F. Regel, Gesammelte Werke (en adelante GW'), volumenes 19 y �o. Las partes de los dos informes editoriales en las que se expone la historia de los origenes de la ENG, escritos ambos por Wolfgang Bonsiepen y Rans-Christian Lucas, ocupan las pp. 4 54-47� del volu­ men 19 y las pp. 584-598 del volumen �o. En relaci6n con la misma historia es tambien recomendable, por su excelente informaci6n objetiva, la introducci6n de F. Nicolin y 0. Pöggeler como editores de: G.W.F. Regel, Enzyklopädie derphilosophischen Wissenschaften im Grundriße, ga edic., Ramburgo, Meiner (varias reimpresiones desde 19 59).

PRESENTACION

I3

.

El amigo SeheHing l e abri6 inmediatamente este camino de vuelta a , facilitandole la incorporaci6n a la U niversidad de Jena, donde debi6 aun ocuparse de perfeccionar su sistema filos6fico . A comienzos de 1801 residia ya en esta ciudad.

l . ANTES DE JENA. EL CO NCEPTO D E ESPIRITU

En la carta citada, Regel da por sentado que ciencia (filos6fica) y sistema son inseparables. La alusi6n al puede referirse con gran probabilidad al Fragmenta de sistema de septiembre de 18oo9. En el corto fragmento de este escrito que se ha conservado, Regel trata de determinar c6mo se produce la elevaci6n del ser humano al vertice supremo en el que han de superarse las contraposiciones (Entgegensetzungen) que nos desgarran. Pone primero de relieve la impotencia de la , es decir, de la filosofia de la Ilustraci6n y principalmente de la kantiana, para alcanzar la cumbre, por­ que esa filosofia se vuelve sobre el pensamiento, se ensimisma en el y pierde su contenido real, reduciendose asi a pensamiento formal y vacio. Inmediata­ mente afirma Regel que lo supremo es el espiritu, y a este lo caracteriza asi:

8

9

10

10•

El texto completo de la carta puede verse en JUV 433. El fragrnento que se cita en esta presen­ taci6n no puede leerse, nos parece, sin evocar a Plat6n. Dibuja un circulo desde la caverna a las ideas y desde estas, de regreso, a la caverna (Republica VII, 1-3; 514a - 518b). El texto conservado puede verse entero en Wk 1 , 419 -4�7; JUV 399-405. Se trata de dos pliegos sueltos pertenecientes a un manuscrito que comprendia un total de 49· El Ultimo de los pliegos conservados lleva la fecha de 14 de septiembre de 18oo. Wk 1 , 4�1; JUV 401. Modifico ligeramente la traducci6n.

14

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Este concepto de espiritu serä ya para siempre el distintivo preferido por Hegel para su filosofia11 • En el se condensan los conceptos de vida y amor en los que Hegel se habia centrado anteriormente buscando el centro de unificaci6n de los desgarras epocales, y es en este mismo Fragmenta de sistema donde su autor atribuye caräcter religioso a la elevaci6n a ese concepto supremo que ahora se designa ya con el termino 'espiritu'. Es en el culto, se dice alli, donde el espiritu se hace real como vinculo de la comunidad, en clara alusi6n a la doc­ trina cristiana del Espiritu Santo como alma de la iglesia1�. Hasta aqui, estas tesis formuladas todavia en Frankfurt, anticipan las que 3 luego podrän leerse en la FEN mucho mäs desarrolladas1 . Pero en el mismo Fragmenta aparece tambien la llamativa afirmaci6n, dificilmente conciliable con la FEN y con toda la obra posterior de Hegel, de que la filosofia tiene que cesar con la religi6n14 . Parece, por tanto, que en este escrito, aunque sea por un momento, la religi6n no ocupa el escal6n inmediatamente inferior a la filoso­ fia, sino que llega a suplantar a esta en el lugar supremo del saber. Sin embargo, la interpretaci6n mäs probable de tal afirmaci6n no es que Hegel, al fin de su estancia en Frankfurt, propugnara el abandono de la filosofia en beneficio de la religi6n, sino que afirmando la procedencia religiosa de lo que en cualquier caso ha de prevalecer como concepto supremo, niega a la filosofia de la reflexi6n, es decir, al racionalismo de la Ilustraci6n y a su lenguaje abs­ tracto, separadory fragmentador, la capacidad de camprender este concepto con el que se designa una comunidad viva de individuos vivos. Pone asi impli­ citamente la necesidad de avanzar hacia un lenguaj e teoretico globalizador, especulativo y conceptual, propio de la raz6n. Este nuevo lenguaje no parcela­ dor habrä de ser apto para camprender el espiritu. Solo se lograrä mediante la autodestrucci6n dialectica de la forma de la representaci6n; una destrucci6n que afectarä tambien, por supuesto, a las representaciones religiosas, ya que la forma de estas es inadecuada al elevado contenido que con ellas se quiere ex­ presar. Hegel juzgarä haber alcanzado esta meta pocos aiios despues con su teoria de la proposici6n especulativa1 5 . Y aun en la Ultima redacci6n de la ENG

u

1�

13 14 15

> , dice e n e l prologo al sisterna que antepuso a la FEN ( Wk 3, �8; Roces 1 9 ; G6rnez Rarnos 79). (Wk 1, 4�1;]UV401). FEN (Wk 3, 5�1 , 57�-574; Roces 41 5 , 4 55-4 57; Gornez Rarnos 8 1 5 , 891-895) . (Wk 1, 4��-4�3;]UV 40�) . Prologo de la FEN (Wk 3, 59 ss.; Roces 41 ss; Gornez Rarnos 1 �5 ss.) .

PRESENTACION

I5

podra verse, en el pasaje que introduce el espiritu absoluto como rubrica que abarca arte, religi6n y filosofia, c6mo toda esta esfera suprema puede desig­ narse como religi6n (§ 554) .

2.

E N JENA. LAs TESIS DE HABILITACIO N Y LOS PRO YECTOS DE ESCRIBIR

U NA EXPOSICIO N COMPENDIADA DEL SISTEMA. LA F'ENOMENOLO GIA

A su llegada a Jena, por tanto, Regel se encuentra en posesi6n de un esbozo de

su sistema, el cual descansa ya, como acabamos de ver, sobre el concepto de espiritu. Para incorporarse a la Universidad debe entonces habilitarse como profesor. Presenta por tanto el escrito de habilitaci6n (!Sol), dedicado a las 6rbitas de los planetas, en dependencia excesiva de la filosofia de la naturaleza 6 de su amigo Schelling1 , y presenta tambü�n entonces un elenco de doce tesis 1 en latin que tienen interes como lejano embri6n de la ENC 7 . Las tesis recorren muy sucintamente todas las partes de la filosofia, desde la l6gica hasta la etica, y constituyen asi, en su conjunto, una cierta abreviatura de la totalidad sis­ tematica. Con formulaciones energicamente parad6jicas y desde la tesis pri­ 18 mera de este elenco, Regel polemiza con la tradici6n racionalista y con el for­ malismo en el que aquella habia venido a caer. Dispara ahora directamente contra Kant valiendose, podriamos decir, de balas kantianas. La que aparece en la tesis 8 no puede ser otra cosa, en len­ guaje hegeliano, que el contenido absoluto1 9 y, como sea que el kantismo abriga ese contenido en su seno, la filosofia critica como filosofia de los limites insal-

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18 19

Hegel se retract6 de esta incursi6n en la congruentemente con su dis­ tanciamiento de la filosofia de la naturaleza schellingiana basada en softadas, semejanzas y esquemas superficiales. Veanse las lineas finales de la N al § �46 y nuestra ne 516. Veanse estas tesis latinas en Wk �. 5�3. Hay una traducci6n muy deficiente al castellano en G.W.F. Hegel, Esencia de lafilosofta y otros escritos, Madrid, Centro de Estudios Constitucio­ nales, 1980, pp. 159 -161. No hay ninguna obra de Hegel que lleve el titulo de . El articulo al que se refiere este titulo se llama . . . Veanse en la ENG los §§ 54 y 55· Segtin ellos, el punto de enlace de la filosofia hegeliana con la de Kant se sitU.a no tanto en la tercera Critica cuanto en la segunda. Schiller habia hecho pie en la obra de arte y la Filosofia de la naturaleza (Schelling?) en la teleologia, pero Hegel apela a la . Y al fin de laENC, en los dos primeras parrafos de la N al § 55�, Hegel muestra otra vez su vinculo con de la raz6n practica kantiana.

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vables contiene el germen de su autodestrucci6n, mal que le pese. Ha sido, pues, el mismo Kant quien ha puesto la bomba de relojeria en el kantismo. Y Regel, dando entonces un paso mas, se atreve a afirmar que el kantismo es (jhorror!) spinozismo larvado; afirmaci6n muy dura en aquel momento en el que Kant todavia vivia y cuando los ecos de la polemica envenenada en torno a Spinoza no se habian extinguido . Pero es mas: como esta tesis 8 implicita­ mente ensefia, de quien Regel habia aprendido a colocarse en el punto de vista absoluto era Spinoza. Como dira afios mas tarde: . [Y alli mismo, a rengl6n seguido:]

�o.

Dei tesario de Jena subrayemos tambien la tesis 6, porque en ella Regel sostiene ya que la filosofia se ocupa solamente de ideas (cfr. ENG§ I8 y FDD §I) �'. Y la idea, por su parte, se define aun alli como sintesis de finito e infinito, con una f6rmula demasiado dependiente tal vez del lenguaje kantiano y fichteano, un modo de hablar que se abandonara mas tarde como inadecuado para expre­ sar el fondo l6gico - conceptual del espiritu como totalidad concreta y viva de individuos vivos. En cualquier caso, puede ya sostenerse desde estas tesis que la idea, en tanto complejidad o sintesis, incluye contradicci6n, y que la verdad de cada cosa particular reside en su inserci6n en el todo. Las f6rmulas tan conocidas de la F EN, y , estan ya ciertamente prefiguradas en estas tesis primerizas ��. De momento, sin embargo, a su llegada a Jena, Regel no parece disponer de ninglin desarrollo satisfactorio de ese nucleo de su filosofia. Por una parte, seglin los anuncios de sus primeras clases hasta el verano deIBos, el profesor novel se propone explicar el conjunto del sistema. EI objeto de esas primeras

40 FIL, Wk 40, 165; WR III, 485. 41 . Tarnbien hay que evocar aqui el Primerprograma de sistema del idealismo aleman, documento enigmätico y sugerente como pocos para entender los origenes de la filosofia idealista. Se conserva sola­ mente la Ultima hoja, escrita de pufio y letra de Hegel, aunque el autor del escrito es dudoso (i,Hegel?, i,Schelling?, i,Hölderlin?) . En este «programa>> se lee que . Vease Chr. Jamme y H. Schneider (editores), Mythologie del Vernunft, Frankfurt, Suhrkamp, 1984. Vease en]UV 419-440. 44 Prologo de la FEN (Wk 3, 44-44; Roces 15-16; G6mez Rarnos 7'-?3).

PRESENTACION

Ieeeiones se deseribe alli, en efeeto, como universa philosophia, philosophiae speculativae systema, philosophiae systema universum o tota philosophiae scientia. Un sistema, por eierto, que ya desde entonees se nos presenta artieulado eon arreglo a las tres partes que encontraremos luego en laENG: (l) L6gica (y meta­ 3 fisica) � , (�) Filosofia de la naturaleza y (3) Filosofia del espiritu. Por otra parte, aparecen tambien en aquellos anuncios palabras tales como delineatio (que puede corresponder al aleman Grundriß), compendium y Encyclopedia; terminos que, referidos a la totalidad sistematica, s6lo pueden aludir a una exposici6n completa y abreviada a la vez�4 . Parece, por tanto, que desde 18o3 a 1805, Hegel se propone ofreeer en clase una visi6n a grandes rasgos del conjunto de su filo­ sofia, al mismo tiempo que anuncia la inminente publicaci6n de un compendio con el mismo contenido que el curso oral. El compendio se anuncia primero para el verano de 18o3 y despues para 1805. Pero en Jena, un compendio tal no lleg6 a publicarse, aunque seg(:tn los autores de los informes editoriales de ENG B y ENG G, la realizaci6n posterior de aquel proyecto sera precisamente la Enci­ clopedia de las cienciasfilos6ficas en compendio del a:fio 1817 (ENGA) . Desde el primer momento, por tanto, y tal como se dice al comienzo del prologo a su primera edici6n, dos caracteristicas en alg(:tn sentido opuestas definiran esta obra: completud y brevedad. Mientras tanto, Hegel redacta distintos proyectos de sistema que queda­ ran en buena parte incompletos y que el, desde luego, no public6 �5 . En ellos aparecen muchos de los conceptos y desarrollos que se podran ver mas tarde en la LOGy en la ENG, pero el orden de colocaci6n de tales elementos y el hilo de la argumentaci6n que los enhebra difieren aun considerablemente del orden que adoptaran luego en las dos ob ras que Hegel entregarä a la imprenta bastantes a:fios despues. Tal vez en funci6n de esos borradores de sistema, y en funci6n tambien del cambio que introdujo Hegel en sus lecciones, las cuales se

�3

L6gica y Metafisica no forman aun, en este momento, unidad estricta. En los esbozos de sis­ tema de esta epoca, la transici6n entre las dos disciplinas se sirna en la teoria del silogismo con la que acababa tradicionalmente la L6gica formal. Este lugar del silogismo es el mismo que le asignaba la tesis � de habilitaci6n: (W'k �. 533) . �4 Esta clase de cursos dedicados a la totalidad sistemätica en cuanto tal la repetirä Regel muchos aftos despues cuando llegue a Berlin (invierno de 1 818-19) y mäs tarde otra vez (invierno de 18�6 -�7), inmediatamente despues de la publicaci6n de ENG B. �5 Son los llamados Jenaer Systementwüife, que ocupan tres volumenes de la edici6n de laAca­ demia y tres volumenes tambien de la Philosophische Bibliotek de la editorial Meiner (Harn­ burgo, 1986, 198� y 1987) . Del tercer volumen hay traducci6n castellana por J.M. Ripalda: G.W.F. Regel, Filosofta real, Mexico, FCE, 1984.

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dedicaron desde el invierno de 1805 - o6 a una sola parte del sistema y no mas al sistema entero, Regel se encontr6 entonces con que el material disponible le habia crecido tanto por los papeles que ya no podia verterlo en un compendio. La totalidad no le cabia en un solo libro y, al anunciar las Ieeeiones del invierno de 18os-o6, cambia significativamente su prop6sito. Quiere ahora, en efecto, publicar un volumen que debera camprender no ya todo el sistema, sino sola­ mente su primera parte. Esta consistira en una l6gica y metafisica a la que pre­ 6 cedera unaphaenomenologia mentis � . Surge asi la primera noticia sobre lo que sera muy pronto la FEN. Sin embargo, esta phaenomenologia praemissa (esto es, antepuesta) cobra tambien un mayor volumen cuando de hecho se redacta. Lo que primeramente se habia concebido como un mero preliminar, se convierte a su vez en un libro independiente, hasta el punto de que, en el momento de ser publicada, la FEN suplanta a la l6gica y metafisica en la denominaci6n de . Esta obra, sin embargo, pierde pronto este lugary, cuando Regel se pro­ pondra revisarla para una segunda edici6n, lo hara constar expresamente �7. Resulta asi, por tanto, que desde finales deI8os en Jena, y desde luego mas tarde en Nuremberg mientras escribira laLOG, el proyecto de publicar una visi6n compendiada del sistema ha cedido el paso a la redacci6n y publicaci6n del sis­ tema in extenso. Este, sin embargo, como veremos mas adelante, tampoco lle­ 8 gara a completarse, y Regel no ira mas alla de la LOG.,_ como primera parte de el.

3. NUREMBERG. LO GICA Y PROTOENCICLOPEDIA

El trabajo de escribir la Ciencia de la L6gica, ahora ya como primera parte del sis­ tema y como tratado filos6fico con todos los requisitos argumentales exigibles,

2. 6 Vease Ia introducci6n del editor (J. Hoffmeister) de Ia FEN en Ia Philosophische Bibliotek (Hamburgo, Meiner, 1957.), pp. XXX ss. 2.7 Segunda edici6n que no se realiz6. EI prop6sito, sin embargo, de que Ia FEN no llevara el titulo de nos consta por una nota afiadida el afio 1831 al prefa­ cio de Ia primera edici6n de laLOG (Wk 1, 18; Mondolfo 3o). Sobre los cambios del punto de vista de Hege! acerca del lugar que debia ocupar la FEN en el conjunto de su obra, vease el apendice 7, afiadido a la 3a edici6n de mi comentario a la FEN: R. Valls, Del yo al nosotros, Barcelona, PPU, 1994, pp. 413-47.1. 2.8 Aunque el final de la nota de Hege!, citada en mi nota de esta Presentaci6n, sugiere tambien que los Iargos desarrollos de la Filosofia de la naturaleza y de la Filosofia del espiritu que ha incorporado la ENC desde su segunda edici6n equivalen suficientemente a las partes del sis­ tema completo y extenso que debian seguir a la publicaci6n de laLOG.

PRESENTACION

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es sin duda el esfuerzo de mayor enjundia que Regel lleva a cabo en Nurernberg (18o8-1816), despues del corto tiempo pasado en Bamberg como redactor de un peri6dico local (!8o7- 18o8) . La LOG se dividi6 en tres libros que fueron publicados por separado (Ser, 181�; Esencia, 18d; Concepto, 1 816) y constituye la parte mäs pura y dura del sistema. Su prefacio, fechado en 181�, es triunfante. Rezuma la satisfacci6n de Regel por haber conseguido expresar, despues de un Iargo trabajo, , y ello no mediante un metodo extrinseco a la materia tratada, sino con arreglo al de estos mismos pensamientos, movimiento que es la que los anima intrinsecamente, de modo que la deducci6n de las categorias intentada por Kant (y no conseguida, segU.n Regel) se convierte ahora en autentica generaci6n. Esta vida propia de los pensamientos es preci­ samente el medio por el que �9. Regel, mientras tanto, habia obtenido un puesto de ensefiante de filoso­ fia en el lnstituto de Bachillerato del que tambien fue director, y el trabajo docente que alli lleva a cabo es lo que hace reaparecer en Nurernberg aquel proyecto de compendio o que en Jena se habia visto despla­ zado. Tanto el nombre de como el caräcter sintetico de la expo­ sici6n se lo brinda ahora a Regel la normativa legal vigente en aquella epoca en los lnstitutos de Bachillerato de Baviera30, con la circunstancia empero de que

�9 Wk 5, 17; Mondolfo 3o; Duque 186. 3o Hay que seiialar, sin ernhargo, las sorprendentes coincidencias de la ENC de Regel con uno de los proyectos que Leibniz dej6 sin realizar, coincidencias no solamente en el nombre, sino sobre todo en la concepci6n misma de lo que debia ser una enciclopedia filos6fica. Vease L. Couturat, La logique de Leibniz d 'apres des documents inedits, reproducci6n de la edi­ ci6n de 1 90 1 en la editorial Georg Olms, Hildesheim, 1985. Ya en la päginaXII, Couturat destaca que el ocup6 toda la vida de Leibniz, y luego, en las pp. 570-571 (notaXII), se incluye una reflexi6n de Leibniz (probablemente del afio 1 68o) sobre la necesidad de perfeccionar y corregir la Enciclopedia de Alstedt, aparecida el 16�o. Segtin Couturat, el proyecto de Leibniz pas6 por diversas fases y tom6 diversas formas, pudiendose distinguir (p. 174) una enciclopedia o atlas univer­ sal de todos los conocimientos humanos, una enciclopedia , que seria la propia­ mente dicha, sistematica, demostrativa y analitica, acompanada de indices sin6pticos, y una enciclopedia , manual, memento o prontuario. Lo constante del proyecto leibni­ ziano seria la intenci6n de redactar la obra segtin un (p. 15�), incluir en ella, por supuesto, , sin excluir empero las ciencias experimentales, ni tampoco las tecnicas (pp. 154-156) y, en cualquier caso, con la finalidad de poner remedio a la multitud y confusi6n de los conocimientos adquiridos.

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la exposici6n enciclopedica debia hacerse, como estaba mandado, a los estu­ diantes de Bachillerato en el ultimo curso, despues de haberles enseftado ya, con mayor detalle, las materias que componen la filosofia entera. El curso 31 enciclopedico cumplia, pues, en el Bachillerato una funci6n recapituladora . Regel trabaj a en ello y, con el texto que prepara para los bachilleres, viene a 3 disponer de una versi6n muy compendiada del sistema � . De ella se valdra para 31

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En la normativa se lee: . La parte que se refiere a la Enciclopedia dice: (Wk 4, 5 98-5 99). Tanto la documentacion incluida en este volumen de las obras de Regel como las cartas alli mismo transcritas son de gran interes para conocer la genesis de la ENG. De todos modos, conviene no perder de vista que la llamada Propedeutica de Nurernberg no es una obra, sino un conjunto de cursos de intro­ duccion general a la filosofia (entre los que se incluye el curso resumen que lleva el nornbre de Enciclopedia) preparados mientras se ocupaba tarnbien de la redaccion de laLOG. Segan Maurice de Gandillac, traductor de laPropedeutica al frances, citado por Eduardo Vasquez en la presentacion de su traduccion castellana (Caracas, Equinoccio, 1 979) , . Interesa seiialar el orden no sistematico, sino claramente didactico, de estos cursos: el primero presupone la clase de religion y tematiza filos6ficamente la moral, el derecho y la religion misma. En el segundo curso propone la logica como estudio de las categorias; estas camprenden una ontologia o logica del ser y las o de la esencia. Sigue una psicologia, que arranca con la fenomenologia o estudio de la conciencia y finalmente, para la clase superior, propone una Enciclopedia que vale como Übersicht o vision panoramica de la conexion sistematica de la totalidad filos6fica mas los conceptos fundamentales de las ciencias particulares. Lo que mas llama la atencion en la Propedeutica de Nurernberg en su conjunto es el trata­ miento que reciben las partes etico-morales de la filosofia. Se establece alli una conexion directa de la con el derecho (§ 43 o 44 de las explicaciones a la introduccion; l!7k 4, 430 -431; Vasquez 3o-31), cosa que en la FDD de Berlin queda por lo menos oscurecida. La moralidad sufre un desplazamiento significativo. Mientras en el texto para el primer curso de 1810 (quiza 1809) la moral se sitU.a detras de la doctrina del derecho (incluyendo este al estado), segan el orden seguido por Karrt en laMetafisica de las costum­ bres, en el ultimo curso enciclopedico la moral se encuentra ya colocada entre derecho y estado, seg(tn el orden que sera definitivo desde la ENG de Reidelberg. Lo que mas tarde se Harnara se llama en Nurernberg «Espiritu real>> y comprende tan solo pueblo, constitucion e historia, sin rastro de la doctrina posterior sobre la . La moralidad, a pesar de los antecedentes kantianos, no es nunca meramente formal, como lo prueba la presencia dentro de ella de la familia y, en general, de la doctrina de los debe­ res (eticos) . l!7k 4 , 9-69. Ray traduccion castellana por Eduardo Vasquez contenida en: G.W.F. Regel, Propedeuticafilos6fica, Caracas, Universidad Sirnon Bolivar, 1980. La introduccion general y

PRESENTACION

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escribir con toda rapidez la Enciclopedia de 1817, ahora ya rnanual universitario, 33 en el rnornento de incorporarse a la Universidad de Reidelberg . 3 De rnanera explicita, Nicolin 4 considera la ENG corno en el Instituto de bachillerato de Nuremberg. Corno 3 puede verse en la introducci6n de esta enciclopedia para bachilleres 5, Regel explica alli de rnanera bien sencilla que es lo que ha de entenderse por y que por . A este respecto, es de interes el rnodo corno se relaciona, en este texto, la experiencia o ernpiria con el concepto racional, rnodo bien lejano, por cierto, del apriorisrno que se suele atribuir a Regel. Lo que si que, con toda energia, Regel exige para el conocirniento racional es el nexo de necesidad o enlace deductivo y deterrninante desde la universalidad a las particularidades, vinculo que venga a superar los enlaces rnerarnente facti­ cos de la ernpiria y su rnera subsunci6n en el concepto representativo. La corn­ paraci6n de esta introducci6n con la que luego figurara en la ENG perrnite ver aquella prirnera corno esbozo de las redacciones posteriores. Y desde Nurern­ berg, la introducci6n, en todas las versiones de la ENG hegeliana, contendra siernpre unas indicaciones sencillas, aunque no superficiales, sobre lo que es propiarnente , noci6n que Regel obtiene cornparando la forrna propia de la filosofia (el concepto) con otras forrnas de conocirniento rnas o rnenos afines (siernpre, a lo surno, representativas) . El § 12 de Nurern­ berg, perteneciente ya a la introducci6n especifica a la l6gica, prefigura rnuy de cerca el conjunto forrnado por los §§ 79 - 82 de la ENG. En el se ve c6rno Regel incluye ya el dialectivo o negativo corno constitutivo de todos los planos del conocirniento a partir del pelda:iio inferior en el que sirua la repre­ sentaci6n. Es la negatividad interior a esta lo que la irnpulsa, desde ella rnisrna

la introducci6n a la L6gica de esta primerisima Enciclopedia elemental ofrecen especial interes por la concisi6n y claridad didäctica de sus formulaciones, las cuales facilitan mucho la visi6n de conjunto, siempre pretendida por Regel. 33 Regel recibi6 la invitaci6n de la Universidad de Reidelberg en agosto de 1816. Un mes mäs tarde escribe en una carta a Tjaden: (Wk 4, 6o3) . 34 , p. 101 en Otto Pöggeler (editor), Hege!, Ein­ führung in seine Philosophie, Friburgo I Munich, Alber, 1977. 35 Wk 4, 9-n. Ray traducci6n castellana. Vease nota 3�.

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y por si misma, a su propia superaci6n. La negatividad inmanente destruye primero los limites formales de la representaci6n y conduce luego el con­ tenido, vehiculado hasta entonces por la forma de la representaci6n, hasta lo positivo de la especulaci6n o contemplaci6n teoretica pura. En los §§ I3 y 14 de esta primerisima Enciclopedia de Nurernberg (o Ur-Enzyklopädie) debeverse la polemica permanente de Regel contra el formalismo del racionalismo ilus­ trado, el cual, seglin el, contamina desde luego a Kant y alcanza incluso a Fichte. A la superaci6n de ese formalismo se orienta muy fundamentalmente toda la LOG de Nurernberg con el fin de dejar bien sentado de una vez por todas (?) que el concepto puro es esencia intrinseca de las cosas reales en si mismas.

4.

HEIDELBERG. ENCICLOPEDIA,

l.A

EDICION

La enseiianza a los bachilleres no satisfacia a Regel, y la LOGvino a facilitarle la salida en tanto le proporcion6 una fama que no le habia conseguido la FEN. Corno fruto de la LOG, le llega la invitaci6n para trasladarse a la Universidad de Reidelberg. Regel la acoge gustoso y, seglin nos informan Bonsiepen y Lucas36: .

Se habia cumplido, por tanto, el viejo proyecto de Jena, temporalmente desplazado por la redacci6n y publicaci6n de la LOG. Franz Rosenkranz, primer bi6grafo de Regel, escribe: 37•

36 37

GW 19, 455· K. Rosenkranz, G. W:F. Hegels Leben, Berlin, 1844, pp. 3o5-3o6. Hay reproducci6n fotomeca­ nica de esta primera biografia (Darmstadt, 1969). Rosenkranz, en esta vida de Regel, y en su obra posterior titulada Apologie Hegels gegen Dr. R. Haym (Berlin, 1858), de la que tambien hay

PRESENTACION

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En efecto, hay que conceder a Rosenkranz el acierto de su apreciaci6n. El o, si se quiere, la inspiraci6n, reside desde luego en la ENG de 1817. El mismo bi6grafo, cuando escribe acerca de la edici6n de 1827, regis­ tra 38 que, sin entrar ahora a discutir su alcance , si puede decirse que, en el plano mas inmediato, se percibe en seguida como perdida de aquella inspiraci6n original. Los textos de 1827 yI83o estaran mas trabajados, ganaran seguramente en pre­ cisi6n tecnica, pero al mismo tiempo se volveran mas farragosos. Sin embargo, a pesar del elogio y deseos de Rosenkranz, la primera edici6n de la ENG se per­ di6 de vista durante un largo tiempo y no fue reproducida hasta el a:flo 1927 en la llamada a cargo de Hermann Glockner. Hoy se dis­ pone de ella reimpresa y, quiza a causa de esa mayor frescura del texto, ha sido recientemente traducida al italiano y al frances39. En la presente edici6n de la versi6n ultima deI83o incluimos, como suele hacerse, el prologo de 1817. En cualquier caso, prescindiendo de comparaciones entre sus tres edi­ ciones, la ENG de Heidelberg es ya el sistema. En este punto se produce un acuerdo entre los bi6grafos de Regel, aunque no interpreten igualmente el modo de esta presencia del sistema en la ENG. Rudolf Haym, por ejemplo, segundo bi6grafo fuertemente critico con su personaje y opuesto por tanto a 0 Rosenkranz, bi6grafo hagiografico, escribe4 :

reproducci6n fotomecanica (Rildesheim, 1977), hace un elogio muy decidido de la figura de Regel y de su filosofia. Pone de relieve la profundidad de la interpretaci6n del cristianismo que el hegelismo comporta. Sin embargo, no por esa opini6n suya se puede adscribir a Rosenkranz a la formada por discipulos mäs directos de Regel. Fueron estos los que cuidaron de la edici6npost mortem de las obras de Regel y acentuaron mucho mas el caracter religioso, e incluso ortodoxo-luterano, de la filosofia de Regel, al mismo tiempo que limaban los aspectos mas liberales de su doctrina politica. Rosenkranz, por su parte, public6 tambien laENC el afio 1845 (vease ref. en la p. 36) y mas tarde el libro Erläuterungen zu Hegel 's Enzyklopädie der philosophischen Wissenschaften, Berlin, 1870. 38 lbid., pp. 405-409. 39 Al italiano, por un equipo de traductores coordinado por F. Chiereghin: Regel, Enciclopedia delle scienzefilosofiche in compendio, Heidelberg 1817, Trento, Verifiche, 1987. Al frances, por Bernard Bourgeois incorporada a: G.W.F. Regel, Encyclop edie des sciencesphilo sophiques. I. La science de la Logique, Paris, Vrin, 1986, y III. Philosophie de l 'Esprit, Paris, Vrin, 1988. Se trata de una edici6n en tres volumenes de la que han aparecido el primero y el tercero. Falta por tanto por publicar el que ha de contener la Filosofia de la naturaleza. Corno sea que en esta edici6n francesa el reparto en tres volumenes afecta a los dos textos principales (1817 y 18�7-183o), de momento no se dispone tampoco en ella del texto completo de Reidelberg, 1817. 40 R. Raym, Hegel und seine Zeit, Berlin, 1857, pp. 336-337. Existe reproducci6n fotomecanica impresa en Rildesheim, 196�. La biografia de Regel por R. Raym es radicalmente opuesta a

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.

Esta observaci6n es perspicaz en tanto contempla el mismo sistema en tres versiones de forma aparentemente muy distinta, pero Haym no parece camprender muy bien la necesidad de diferenciar las tres claves de trans­ cripci6n del mismo todo. Las claves fenomenol6gica, l6gica y real no son sim­ ple adorno de un mismo contenido. Son formas por las que este contenido identico ha de pasar. Por su parte, Rosenzweig, ya en nuestro siglo, escribe: 4'.

Juicio acertado, creemos, en la medida en que Regel no alter6 el modo general dialectico-especulativo de ordenar la totalidad, pero que deja en sus­ penso el analisis y valoraci6n de las diferencias particulares que las ediciones posteriores incorporan.

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la de Rosenkranz en lo que esta tiene de apologetica. Raym ataca a Regel principalmente por el flanco politico. Los argurnentos que todavia hoy se repiten contra Regel y su filosofia tienen alli una formulaci6n privilegiada, aunque quien los repite no sepa su procedencia. La polemica de Raym recoge argurnentos que, cuando el escribe, circulaban ya entre la llamada izquierda hegeliana. En efecto, la revista de Ruge (Deutsch-Jranzösische]ahrbücher) empez6 a publicarse el 1838 y en los aftos 40 habian aparecido en ella, entre otros, los primeras articulos de Marx. Raym ataca directamente el caräcter reaccionario que habia ido tomando la politica prusiana en aquellos aftos posteriores a la invasi6n napole6nica y polemiza con­ tra la escuela hegeliana por el soporte que esta significaba para la politica restauracionista de la monarquia absoluta. Con este fin, Raym (bastante resistente al concepto, por otra parte) pone de relieve los aspectos de la filosofia hegeliana que permiten desde luego su uti­ lizaci6n en clave reaccionaria, cosa que solo es posible en la medida en que se desgajan del todo y se altera asi su sentido de manera sustancial. Raym no se percata, por tanto, de que una utilizaci6n en sentido contrario seria y es tambien posible e igualmente falseadora. De hecho, en Espafta se produjo en aquellos mismos aftos una interpretaci6n que via en Regel a un jacobino. Corri6 a cargo de un grupo procedente de la disoluci6n de las Cortes de Cädiz que estuvo activo en la Facultad de Derecho de Sevilla en torno a 185o. Tales inter­ pretaciones son siempre unilaterales y descansan en el prurito de afiliar a Regel a alglin partido. De todas maneras, tambien se debe decir que Raym anticipa, en un cierto sentido, valoraciones hist6ricamente posteriores de Dilthey, en la medida en que el simpatiza con los componentes mäs ilustrados, revolucionarios y laicistas del primer Regel, aunque denuncia en el Regel Ultimo una acomodaci6n al estado prusiano que, seglin esta biografia, acab6 por traicionar los ideales juveniles que Regel habia abrigado. F. Rosenzweig, Hegel und der Staat, MUnichi Berlin, 19�0, p. 97· Ray reimpr. enAalen, 196�.

PRESENTACION

Todavia, antes de abandonar Heidelberg, Hegel publieo (1817) una reeen­ sion del tereer volumen de las obras eompletas de J aeobi que habia apareeido el afio anterior4�. En esta reeension, Hegel adopta una aetitud favorable haeia este 3 autor, muy distinta de la que habia adoptado en 180� (Glauben und Wissen) 4 y 1807 (FEN) . La valoraeion, ahora mas positiva, de la tesis de J aeobi sobre el eonoeimiento inmediato de Dios (vease el ultimo parrafo del prologo de Hegel a la primera edieion de la ENG) repereutira muy pronto en las Ieeeiones de Hegel en Berlin y determinara una modifieaeion muy importante en el cuando este se redacte de nuevo para la edieion de 18�7 (§§ 19 -78) .

5 . BERLIN.

LA ENCICLOPEDIA COMO CANAMAZO DE LAS LECCIONES ORALES

La estancia de Hegel en Heidelberg duro apenas dos afios. El �8 de oetubre de 1818 pronunciaba, ya en Berlin, la famosa Ieeeion inaugural de su profesorado en aquella Universidad fundada por Humboldt pocos afios antes. La Universi­ dad berlinesa era ya institueion puntera y modeliea para toda Alemania, y su fama empezaba a extenderse por toda Europa. En este discurso44 , despues de una primera parte en la que Hegel encarece la necesidad de eultivar la filosofia y canta la buena oportunidad que alli se le ofrece para este fin, pasa inmediata­ mente a impartir la primera clase de un curso que dedieara entero a la ENG. Esta se presenta en aquella Ieeeion como exposieion global y abreviada del sis­ tema y viene a asumir asi un cierto earacter de obertura de la enorme actividad docente que llenara la ultima epoca de la vida de Hegel. Aunque sobre la ENG en su conjunto Hegel solo volvera a dictar clases en el invierno de 18�6-�7, justo en el momento de aparecer la segunda edicion del libro, la Enciclopedia de las cienciasfilos6ficas presidira de hecho todas las Ieeeiones de Berlin eomo cafia­ mazo de ellas. Y, puesto que fue en esta ciudad ademas donde la ENG conocio sus dos ultimas edieiones, esta obra puede considerarse como lihro de Berlin tanto o mas que eomo obra significativa de la epoca de Heidelberg. La ENG no perdio nunea, y en Berlin se confirmo, su indole de ordenacion global de las distintas materias filos6ficas; unas materias que Hegel explanaba en las clases

42 El texto de la recensi6n de Regel se public6 en los Heidelbergische Jahrbücher der Literatury se puede leer en Wk 4, 429-461. 43 Creer y saber. Vease la conclusi6n de este opusculo en Wk 2, 43o-433. 44 Wk 10 • 399-417 ·

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y que recibian su verdad y sentido del compendio que las enhebra. Recorde­ mos, sin embargo, que el compendio en uso en Berlin, durante los primeras aflos de los catorce que vivi6 y ensefl6 alli, fue aun la ENG de Reidelberg, cosa que complica extraordinariamente la cuesti6n sobre los afladidos o Zusätze que los discipulos redactaron a partir de los apuntes de clase y despues incluyeron en la edici6n p6stuma. Rasta 18�7. en efecto, Regel s6lo podia referirse en clase a la ENG de Reidelberg, pero los afladidos se adhirieron abusivamente al texto bien distinto de 183o. Sobre las clases de Regel en Berlin, volveremos mas adelante. Sigamos ahora la historia del libro.

6.

ENCICLOPEDIA, 2 .A EDICION. NUEVO PAPEL DE JACOBI, REPERCUSION

DE LA FILOSOFiA DEL DERECHO Y SUPRESION DEL TRIPLE SILOGISMO FINAL

Corno escriben Lucas y Bonsiepen45: .

Resumamos ahora de este mismo informe editorial: en otoflo de 18�5 la primera edici6n estaba agotada y, durante el invierno inmediato, Regel esta ya trabajando en la preparaci6n de la segunda. Corno siempre, el trabaj o se le alarga mas de lo previsto, pero en mayo de 18�7 tiene listo el manuscrito. Baste decir que la extensi6n del libro resulta casi doblada para empezar a sospechar que, habiendo sido tan importante el trabajo de correcci6n, resulta ex­ tremadamente dificil valorar el alcance de las modificaciones introducidas. La magnitud de estas provoca en Regel un claro descontento porque, ahora mas que antes, la amplitud concedida a los detalles dificulta aquella mirada sin6p ­ tica sobre la totalidad del sistema que nunca dej 6 de ser uno de los fines pri­ mordiales del libro. A prop6sito de la segunda edici6n escribe Rosenkranz:

PRESENTACIDN

.

Opini6n que confirma la necesidad de estudiar con parsimonia las dife­ rencias. Por lo que se refiere a ellas en concreto, diremos aqui muy sucinta­ mente que se pueden cifrar en tres grandes grupos: (1) La nueva redacci6n del en el interior de la ENG, incluyendo en el como tercera actitud del pensamiento ante la objetividad la posici6n de Jacobi sobre el conocimiento inmediato de Dios46 ; Regel aproxima ahora esta doctrina al cartesianismo y la asume como parcialmente aceptable, siempre que su tesis basica (el inmediatismo en la captaci6n de lo absoluto) no se cierre al desarro­ llo de las mediaciones que toda inmediatez esconde. (�) La nueva redacci6n, ciertamente extensa, de la filosofia de la naturaleza y de la filosofia del espiritu subjetivo. (3) La supresi6n al final del libro de los tres silogismos que apare­ cian en la edici6n de Heidelberg y la inclusi6n (� en lugar de los silogismos suprimidos?) , a modo de colof6n, del texto de la Metaftsica de Arist6teles XII, 7· El primero de estos cambios le result6 muy laborioso y, como hemos dicho, era muy probablemente el fruto de la nueva estima que le merecia ahora Jacobi, seglin consta ya en la recensi6n de 1817. Ademas, antes de la muerte de este autor, ocurrida el afio 1819, habia tenido lugar un amigable encuentro de ambos fil6sofos. No seria extrafio, pues, que el nuevo papel asumido por la tesis jacobiana del conocimiento inmediato de Dios se asociara, como causa o como efecto, a un cierto tinte general que cobra el nuevo texto y que viene a destacar la conexi6n entre filosofia y religi6n de una manera ciertamente dis­ tinta de como esta relaci6n habia sido tratada en la ENG de Heidelberg47 . Esta

46 Corno ya hemos dicho mas arriba (p. �5 ) a prop6sito de la estancia de Hegel en Heidelberg, Hegel habia publicado en 1817 una amplia recensi6n critica del tercer volumen de las obras de Jacobi (Cfr. Wk 4, 4�9 y ss.) en la que muestra un mayor aprecio de este autor que el que habia mostrado en Glauben und Wissen (IBo�) y en la FEN. Jacobi muri6 en 1819 (VA) . 47 De la comparaci6n entre la redacci6n del § 5 de la ENG de Heidelberg con el § 1 de la ENG de Berlin resulta que en ambos lugares se establece la relaci6n entre el objeto de la religi6n y el de la filosofia, pero mientras en la redacci6n de 1817 Hegel declara explicitamente la inep­ titud de la forma representativa propia de la religi6n para expresar adecuadamente la ver­ dad, y establece que la raz6n y la libertad son el objeto de la filosofia, en la redacci6n de 18�7

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nueva coloraci6n del texto favoreci6 indudablemente el sesgo que mas adelante tom6 la llamada derecha hegeliana y fue tambii�n aprovechada por Raym para interpretar que la ida de Regel a Berlin signific6 la traici6n de los ideales mas laicos de su juventud para dar paso a una cierta acomodaci6n a los tiempos de la restauraci6n. El segundo capitulo de grandes cambios, ademas de determinar en muy buena parte el crecimiento material del libro, signific6 que el nuevo texto de la ENG podia considerarse como una cierta realizaci6n del proyecto de continuar despues de la LOG la prevista escritura in extenso de las dos partes restantes del sistema. Asi lo dio a entender Regel, poco antes de morir, en una nota que a:fia­ 8 di6 a la �a edici6n de la LOG4 . Este asunto, sin embargo, no es del todo claro, porque si esta nota se interpreta demasiado literalmente, se impone entonces decir que en laENG de 18�7 y I83o refluye el proyecto de escribir el sistema con todo detalle. Pero entonces seria tambien verdad que la ENG habria perdido el caracter de compendio, cosa que Regel esta lejos de pensar. Cierto que su lon­ gitud dificulta mas, piensa el, la mirada de conjunto, pero sigue siendo en singular, o sea, el mismo libro. Tarnbien los pr6logos de Berlin insisten en el caracter manual del libro y su titulo mantiene siempre la expresi6n im Grundrisse (en compendio) . Consideraciones estas que no borran la impresi6n, a pesar de todo, de que la ENG en sus dos versiones berlinesas ha venido a cobrar un cierto caracter hibrido, a mitad de camino entre compendio y tratado. La Filosofia de la naturaleza y especialmente la Filosofia del espiritu sub­ jetivo experimentan considerables ampliaciones. Por lo que se refiere a la Filosofia del espiritu objetivo (filosofia social y politica) , en el § 487 N de las ENG de 18�7 y I83o, Regel se dispensa a si mismo de ofrecer una redacci6n mas detallada . Sin embargo, a pesar de este prop6sito de mayor brevedad, introduce en los paragrafos siguientes de la ENG un cambio muy visible. Aparece ahora en esta obra la divi-

y l83o desaparecen los aspectos mäs criticos respecto de la religi6n y simplemente se afirma la identidad del objeto de ambas disciplinas, objeto que es . 4 8 (Wk 5· 18; Mondolfo 3o).

PRESENTACION

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si6n tripartita de la eticidad en familia, sociedad civil y estado tal como habia sido organizada esta materia en la FDD. La sociedad civil, como titular princi­ pal de los derechos de la particularidad, cobra tambien en la ENG, a partir de 1827, el importante puesto que le habia ya concedido la FDD en 1821. Este ultimo libro, por tanto, a la zaga de las Ieeeiones orales, habia modificado la distribuci6n de esta materia en la ENG de Reidelberg, y el cambio que ahora se introducia en la ENG B debe verse como una simple transferencia de la muta­ ci6n ya cuajada en la FDD. En efecto, mientras la ENGA estaba aun disponible en las librerias, podia considerarse suficiente como gui6n general de las clases sobre materias distintas de la teoria politica, pero la versi6n de la eticidad que ofrecia aquella ENGA no le resultaba satisfactoria a Regel desde las primeras Ieeeiones de Berlin, mäxime en un ambiente saturado de debate constitu­ cional. Las clases sobre > ocuparon siem­ pre un puesto muy relevante en la docencia de Regel. Desde el momento de su llegada a Berlin, ya a lo largo del primer semestre, imparti6 un curso sobre esta materia junto con el curso sobre la ENG en general. Roy sabemos ademäs49 que Regel habia emprendido desde muy pronto la reforma de esta parte de su sis­ tema. Era l6gico que esos cambios pasaran primero desde las clases a la FDD del a:fio 1820 y despues a la ENG de 1827. Por lo que se refiere a los variaciones observables al final de la ENG hay que decir en primer termino que resultan mäs dificiles de explicar. En cual­ quier caso es claro que el § 574· con el que acaba el texto de 1827, es una nueva redacci6n del § 474 de 1817, al cual seguian alli todavia tres mäs (475-477) . En

49 Lo sabemos gracias a la publicaci6n por parte de Ilting y otros de varios documentos sobre los cursos de Derecho natural y ciencia politica, a partir de 1817I 18, todavia en Heidelberg: Curso 1817- 18: Die Philosophie des Rechts. Die Mitschriften Wannemann (Heidelberg 1817/18 und Homeyer (Berlin 1818/19), editados por K.H. Ilting, Stuttgart, 1983. Vorlesungen über Naturrecht und Staatswissenschaft. Heidelberg 1817/18 mit Nachträgen aus der Vorlesung 1818/19. Nachgeschrieben von P. Wannemann, editados por C. Becker, W. Bonsie­ pen y otros colaboradores del Regel-Archiv con una introducci6n de 0. Pöggeler, Harn­ burgo, 1983. Curso 1818l19: Vorlesungen über Rechtsphilosophie 1818/31 , edici6n de K.H. Ilting, Stuttgart, 1973-74, vol. I (El manuscrito de Homeyer del curso de 1818119 se encuentra tambü'!n en el libro citado en primer lugar). Curso 1819h,o: Philosophie des Rechts. Die Vorlesung von 1 819/�o in einer Nachschrift, edi­ tado por D. Henrich, Frankfurt a.M., 1983. Curso 18����3: Vorlesungen über Rechtsphilosophie 1818-31 , editadas por K.H. Ilting, Stutt­ gart 1973-74, vol. III. Curso 18�4/�5: Vorlesungen über Rechtsphilosophie 1818-31 , editadas por K.H. Ilting, Stutt­ gart, 1973-74, vol. N.

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estos se presentaba la totalidad del sistema en forma de triple silogismo. Ahora bien, las dos redaeeiones de este paragrafo (474 primeramente y 574 despues) , a pesar de sus diferencias, destacan ya la cireularidad del sistema completo en tanto que en ambos se expresa con claridad que la filosofia, en la cima del espiritu absoluto, regresa a lo l6gico . Rabiendose, pues, cerrado el circulo total, este paragrafo es de suyo el ultimo. Los tres silogismos serian entonces, easo de incluirse, una explicitaci6n de ese regreso, el cual no seria un punto absolutamente final sino una cierta incorporaci6n al proceso eterno de la vida divina. Sobre el signifieado de la inclusi6n del texto de Arist6teles como colof6n de la ENG no diremos nada aqui, porque es cuesti6n muy diseutible. Solo apun­ taremos la posibilidad de que con esta eita se insinue la identidad de las auten­ ticas filosofias con la filosofia sin mas. En este punto final se contemplaria ahora, en el lugar sistemätico que le corresponde, aquella identidad que, de manera muy escolar, se habia antieipado en los §§ I3 y 14 de la introducci6n.

7.

ENCICLOPEDIA, 3.A EDICION. REINCLUSION DEL TRIPLE SILOGISMO FINAL

A fines del verano de 18�9 la �a edici6n se habia agotado . Era por tanto neeesa­ ria una 3a. Regel erey6 entonces poder revisar y corregir el texto rapidamente, porque no abrigaba la intenci6n de introducir graudes cambios. Queria que estuviera impresa para mayo de I83o, fecha en que debia empezar las Ieeeiones del semestre de verano, pero este deseo no se cumpli6. El libro no estuvo en las librerias hasta octubre del mismo afto . De los cambios introducidos en I83o destaquemos solamente la reinserci6n de los tres silogismos finales eon una redacci6n mas elaborada de la que habian eonoeido en Reidelberg. Tarnbien nos parece digna de ser destacada, como lo haeen Bonsiepen y Lueas en el irrforme ya citado, la modificaci6n de las transieiones o del dis­ curso principal. Son siempre importantes porque en ellas se decide la necesi­ dad 16gica que articula la unidad organica del sistema. Pues bien, Regel, al pre­ parar la 3a edici6n, realiza una sustituei6n sistematiea de los terminos genericos y por palabras mas especificas. Estas eorrecciones parecen indicar que el autor de la ENC siente ahora la neee­ sidad de expresar en cada paso de su discurso la clase especifica de determina­ ei6n a la que se refiere el texto y hacerlo asi mas eoncreto.

PRESENTACION

8.

31

LAs LEGClONES Y LOS > . Agradecere, e n fin, todas las observaciones que reciba e n orden a mejorar una eventual reedici6n. Los agradecimientos que he de hacer constar desde ahora son: Al Prof. J ose M. Valverde, querido maestro y colega, porque en una fase temprana de mi traducci6n, conoci6 algunos fragmentos de ella. Certificando que estaba escrito en castellano y se correspondia con el texto aleman, me sirvi6 de estimulo para continuar. Igualmente, al Prof. Mariano .Alvarez, de la Universi­ dad de Salamanca, a quien debo algunas observaciones del todo pertinentes. He de dar tambien las gracias al Prof. Manuel Garcia- Doncel, Catedratico en la Facultad de Ciencias de la U niversidad Aut6noma de Barcelona quien, a pesar de su poca simpatia por el , reley6 con mucho cuidado la parte de la ENG dedicada a la Filosofia de la naturaleza y me hizo atinadas

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correcciones, fruto de su buen conocimiento de la Ristoria de la ciencia. Al Prof. Josep Pla Carrera, de la Facultad de Matematicas de la Universidad de Barcelona, a quien pedi revisara la terminologia matematica y a la Prof. Encar­ naci6n Roca, de la Facultad de Derecho de la misma Universidad, quien revis6 los terminos juridicos. Con su ayuda me han hecho sentir que la Universidad es colaboraci6n y no solo un conglomerado de taifas. Par ultimo he de agradecer de forma especialisima las ayudas recibidas del Regel-Archiv de la Universidad de Bochum, de su D irector el Prof. Otto Pöggeler y de los Drs. Wolfgang Bonsiepen y Rans- Christian Lucas, prepara­ dores de las distintas ediciones de la ENG en el marco de las Gesammelte Werke. Especialmente el ultimo, que por sus excelentes conocimientos del idioma castellano es puente natural entre el Archiv y los estudiosos de Regel de nues­ tro ambito lingüistico. Muy amablemente han permitido usar sus propios tra­ baj os para la preparaci6n de la presente edici6n. BARCELONA, NOVIEMBRE DE

1995

SIGNOS CONVENCIONALES Y SI GLAS

Corno sea que el texto original de la ENG viene dividido en parägrafos nurnera­ dos (§) , incluyendo a continuaci6n en rnuchos casos una nota explicativa del rnisrno Hegel (en esta edici6n, en cuerpo rnenor) , las referencias internas las hacernos en general indicando el parägrafo correspondiente y, en su caso, si se trata de la nota de Hegel (Anmerkung) , afiadirnos una N. Asi p.e., § 55 rernite al texto principal o cuerpo del parägrafo que ostenta este nurnero, y § 55 N rernite a la nota del rnisrno parägrafo . Cuando la nota la coloca Hegel a pie de pägina lo indicarnos con npp. Si en alg(ln caso nos referirnos alZusatz afiadido por los dis­ cipulos de Hegel, lo indicarnos con una Z. Asi § 1 1 1 Z se refiere al afiadido al § 1 1 1 .

§ N z

l.c. npp ne o . c. p.

PP ·

s. ss. []

negrita

Parägrafo del texto principal Nota (Anmerkung) a un parägrafo del texto Afiadido (Zusatz) de los discipulos lugar citado nota a pie de pägina del rnisrno Hegel nota de esta edici6n, al final del libro obra citada pägina päginas siguiente siguientes Entre corchetes: palabras afiadidas por el traductor 1> En el texto de Hegel: palabras resahadas por el propio autor. Corno sea que Hegel no cita seg(ln el rnodo actual, sino que a veces resalta el nornbre del autor y, otras veces, el titulo de la obra citada 0 alguna palabra de el, hernos respe­ tado en el texto rnisrno este rnodo irregular de citar con el fin de conservar los enfasis que Hegel quiso introducir.

RAMÖN VALLS PLANA

44

1> En la presentaci6n y notas editoriales: palabras enfatizadas

por el autor respectivo .

cursiva VERSALITA

Titulos de libros o revistas y palabras en idiomas extranjeros. Tecnicismos que se deben distinguir de otros expresados con la misma palabra castellana: EXISTENCIA y existencia para traducir respectivamente Existenz y Dasein; OBJETO y objeto para traducir Objekt y Gegenstand; COSA y cosa para traducir

Sache y Ding.

REFERENCIA COMPLETA DE LAS OB RAS CITADAS ABREVIADAMENTE EN LAS NOTAS FINALES

Arist6teles. AQLOLO'tEAous; a:rtav'ta. Aristotelis summi semper philosophi, et in quem unum uim suam uniuersam contulisse natura rerum uidetur, opera quaecunque hactenus extiterunt omnia: quae quidem ut antea integris aliquot libris supra priores editiones omnes a nobis aucta prodierunt, ita nunc quoque, lucis & memoriae causa, in capita diligenter distincta in lucem emittimus. Praeterea quam diligentiam, ut omnibus aeditionibus reliquis, omnia haec exirent a nostra officina emendatiora, adhibueri­ mus, quoniam uno uerbo dici non potest, ex sequenti pagina plenius cog­ noscere licebit. Per Des. Eras. Roterodamum, � vols. , Basilea, 1550. Arist6teles.Aristotelis Opera. Edidit Academia Regia Borussica. Aristoteles graece ex recognitione lmmanuelis Bekkeri, � vols., Berlin, 183 1 . Autenrieth, Handbuch der empirischen menschlichen Physiologie. Zum Gebrauche seiner Vorlesungen herausgegeben von Dr. J oh. einr. Ferd. Autenrieth. T. 1 -3, Tubinga, 1801- 180�. Baader, Franz Xaver von, Sämtliche Werke. Systematisch geordnete, durch rei­ che Erläuterungen von der Hand des Verfassers bedeutend vermehrte, vollständige Ausgabe der gedruckten Schriften samt Nachlaß, Biographie und Briefwechsel. Herausgegeben von Pranz Hoffmann, Julius Hamber­ ger, Anton Lutterbeck, Emil August Von Schaden, Christoph Schlüter und Friedrich von der Osten, 1 6 vols., Leipzig, 185 1 -186o. Berthollet, Claude Louis, Über die Gesetze der Verwandtschaft in der Chemie. Aus dem französischen übersetzt mit Anmerkungen, Zusätzen und einer syn­ thetischen Darstellung von Berthollets Theorie versehen von Ernst Gott­ fried Fischer, Berlin, 180�. Berzelius, J .J. , Essai sur la theorie des proportians chimiques et sur l 'influence chi­

mique de l 'electricite. Traduit du Suedois sous les yeux de l'auteur, et publie par lui- meme, Paris, 1 8 1 9 .

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-, Lehrbuch der Chemie. Nach des Verfassersschwedischer Bearbeitung der Blöde - Palmstedt'schen Auflage übersetzt von F. Wöhler. Ersten Bandes erste Abtheilung. Ersten Bandes zweite Abtheilung. Dresde, I8:45·

-, Versuch über die Theorie der chemischen Proportionen und über die chemischen Wirkungen der Electricität; nebst Tabellen über die Atomgewichte der meisten unorganischen Stoffe und deren Zusammensetzungen. Nach den schwedis­ chen und französischen Originalausgaben bearbeitet von K.A. Blöde , Dresde, I8:4o. Biot, J.B., Traite dephysique experimentale et mathematique, 4 vols. , Paris, I8I6. Böhme, Jakob, Theosophia revelata. Das ist: Alle Göttliche Schriften des Gott­ seligen und Hocherleuchteten Deutschen Theosophi J acob Böhmens, :4 vols. [Hamburgo] , I7I5. Cicer6n, M. Tulii Ciceronis libri tres de natura deorum ex recensione ]oannisAugusti

Emesti et cum omnium ernditorum notis quas ]oannis Davisii editio ultima habet. Accedit apparatus criticus ex :XX: amplius codicibus mss. nondum collatis digestus a Georg. Henrico M osero [. . .] Copias criticas congessit Danielis Wyttenbachii selecta scholarum suasque animadversiones adje­ cit Fridericus Creuzer, Leipzig, I8I8. -, M. Tulii Ciceronis Operum volumen Quartum, Leipzig, I737. Descartes R. Renati Des Cartes Meditationes de Prima Philosophia, In quibus Dei existentia, & animae humanae a corpore distinctio, demonstratur. His adjunctae sunt variae obj ectiones doctorum virorum in istas de Deo et anima demonstrationes; Cum Responsionibus Auctoris. Editio ultima prioribus auctior et emendatior, Amsterdam, I663 . -, Renati Descartes Principia Philosophiae. Nunc demum hac Editione diligenter recognita, et mendis expurgata, Amsterdam, I656.

-, Oeuvres de Descartes publiees par CharlesAdam & Paul Tannery. Principia Philo­ sophiae. VIII -I. Nouvelle presentation, en co- edition avec le Centre Natio ­ nal de la Recherche Scientifique, Paris, I98:4 (Edici6n Adam-Tanne:ry) . Diels- Kranz, Die Fragmente der Vorsokratiker. Griechisch und deutsch von Her­ mann Diels. Neunte Auflage herausgegeben von Walther Kranz, :4 vols . , Berlin, I959 - I96o. Fichte, J ohann Gottlieb, Grundlage der gesammten Wissenschaftslehre als Hand­ schriftfür seine Zuhörer, Leipzig, I794 · -, Gesammtausgabe der BayerischenAkademie der Wissenschaften. Herausgege­ ben von Reinhard Lauth und Hans Jacob bzw. Reinhard Lauth und Hans Gliwitzky. Abt. 1. Stuttgart- Bad Cannstatt, I964 ss. Goethe, Zur Farbenlehre, :4 vols. , Tubinga, I8IO . - Vol. I, Entwurfeiner Farbenlehre. Des Ersten Bandes Erster, didaktischer Theil. Enthüllung der Theorie

PRESENTACION

47

Newtons. Des Ersten Bandes Zweiter, polemischer Theil . - Vol. �. Materia­ lien zur Geschichte der Farbenlehre. Des Zweiten Bandes Erster, historischer Theil. Gren, FriedrichAlbert Carl, Grundriß der Naturlehre. Vierte verbesserte Aus­ gabe, Halle, 1801. Haller, Karl Ludwig von, Restauration der Staatswissenschaft oder Theorie des

natürlich-geselligen Zustands, der Chimäre des künstlich-bürgerlichen entge­ gengesetzt. 6 vols. , Winterthur, 1816 ss. En las notas editoriales se cita por la segunda edici6n, Winterthur, 18�o ss. Regel, Georg Wilhelm Friedrich, Berliner Schriften. 1 81 8 - 1 831 . Herausgegeben von Johannes Hoffmeister, Hamburgo, 1956. -, Briefe von und an Hegel. Vol. I-3. Herausgegeben von J ohannes Hoffmeister, Hamburgo , 195�- 1954; vol. 4· T. 1 - � . Herausgegeben von Friedhelm Nicolin, Hamburgo, 1977- 198L -, Die Phänomenologie des Geistes, Bamberg / Würzburg, 1807. - Citado como FEN seguido de la sigla de la edici6n Suhrkamp (Wk) , numero del volu­ men y numero de la pagina. - Traducci6n castellana de Wenceslao Roces, Mexico, FCE, 1966. Citado como Roces seguido del numero de la pagina. [Hay traducci6n mas reciente de Antonio G6mez Ramos, Madrid, Abada,

�010. Citado como G6mez Rarnos seguido del numero de la pagina.] -, Encyklopädie der philosophischen Wissenschaften im Grundrisse. Veanse las distintas ediciones de esta obra en las pp. 35 y ss. Citada como ENG; si se anade una letra (A, B, C) se indica con ella de que edici6n se trata; si no figura ninguna letra, se sobreentiende que se trata de la tercera (C) . -, Gesammelte Werke. In Verbindung mit der Deutschen Forschungsgemein­ schaft herausgegeben von der Rheinisch-Westfälischen Akademie der Wissenschaften, Hamburgo, 1968 ss. Citado como GW. -, Grundlinien der Philosophie des Rechts, Berlin, 18�1. Traducci6n castellana de J . L. Vermal: Principios de la Filosofia del Derecho , Barcelona, EDHASA, 1988. Citado como FDD seguido del signo § y el numero del paragrafo . -, Theologische Jugendschriften, ed. Herman Nohl, Tubinga, 1907. Traducci6n parcial castellana de Zoltan Szansky y J ose Maria Ripalda: Escritos de fuventud, M exico, FCE, 1978 y varias reimpresiones posteriores. Citado como JUV. -, Vorlesungen über die Geschichte der Philosophie, Berlin, 1833 -1836. Texto redactado por Karl Ludwig Michelet, vol. XIII-XV de la edici6n de los dis­ cipulos (Werke) , reproducido en los vol. 1 8 - � 1 de la edici6n Suhrkamp (Wk) . Citado como FIL seguido de la sigla Wk, numero del volumen y de la pagina.- Traducci6n castellana de Wenceslao Roces: Lecciones sobre la His-

RAMON VALLS PLANA

toria de la Filosofta, 3 vols . , Mexico, FCE, 1955 . Citado como WR seguido

del numero del volumen y de la pagina. -, Werke. Auf der Grundlage der Werke von 183�-1845 neu edierte Ausgabe . Redaktion Eva Moldenhauer und Karl Markus Michel, �o vols. y uno de indices, Frankfurt, Suhrkamp, 1971 (Edici6n Suhrkamp) . Citado como Wk seguido del numero del volumen y la pagina. -, Wissenschaft der Logik, Nuremberg, 181�- 1816. Citado como W1 seguido de la sigla Wk , numero del volumen y de la pagina . - Traducci6n castellana de Rodolfo y Augusta Mondolfo : Ciencia de la L6gica, Buenos Aires, Solar­ Hachette, 1968. Citado como Mondolfo seguido del numero de la pagina. [Hay traducci6n mas reciente de Felix Duque, Madrid, Abada, vols. 1 (�ou) y � (�o15) . Citado como Duque seguido del numero de la pagina.] Hume, David Hume über die menschliche Natur aus dem Englischen nebst kritischen Versuche zur Beurtheilung dieses Werks von Ludwig Heinrich Jakob. Erster Band. Über den menschlichen Verstand. Halle 1790. - Zweiter Band, Über die Leidenschaften.- Dritter Band, Über die Moral, Halle, 179�. J acobi, Friedrich Heinrich, David Hume über den Glauben oder Idealismus und Realismus . Ein Gespräch, Breslau, 1787. -, Über die Lehre des Spinoza in Briefen an den Herrn Moses Mendelssohn . Neue vermehrte Ausgabe, Breslau, 1789. -, Über den göttlichen Dingen und ihrer Offenbarung, Leipzig, 1811. Jacobi, Friedrich Heinrich, Werke, 6 vols., Leipzig, 181�-18�5. Kant, Immanuel, Kants gesammelte Schriften. Herausgegeben von der Königli­ chen Preußischen Akademie der Wissenschaften, 190�- 1 9�3 . Edici6n reproducida con el titulo de Kants Werke, Berlin, Walter de Gruyter, 1968, con la paginaci6n original. Citado como Werke, seguido del numero del volumen y de la pagina. -, Critik der reinen Vernunft, Riga, 1781. -, Critik der reinen Vernunft, Zweyte hin und wieder verbesserte Auflage, Riga, 1787. Las dos ediciones se citan como Cr. r. pura seguido de las letras A, B, seglin se trate de la 1 a o la �a edici6n. -, Critik derpractischen Vernunft, Riga, 1788. Citado como Cr. r. pr. -, Critik der Urtheilskraft, Berlin y Libau, 1790. Citado como Cr. f j. seguido del signo § y el numero del paragrafo. - En castellano : Manuel Kant, Critica del]uicio, traducci6n de M . Garcia Morente, �a ed., Madrid, Espasa Calpe,

1981. -, Die Metaphysik der Sitten in zwey Theilen. Königsberg, bey Friedrich Nicolo­ vius, 1797. En castellano : Immanuel Kant, La Metaftsica de las Gastumbres, traducci6n de Adela Cortina, Madrid, Tecnos, 1989. Citado como Cortina.

PRESENTACION

49

-, Grundlegungzur Metaphysik der Sitten, Biga, 1785. Citado como Fundamentaci6n. -, Prolegomena zu einerjeden künftigen Metaphysik die als Wissenschaft wird auftreten können, Riga, 1783. Citado como Prolegomena. Kiesewetter, J. G. C., Logik zum Gebrauch für Schulen, Berlin, 1797. Kilian, Dr. C.I., Entwurfeines Systems der Gesammten Medizin. Zum Behuf seiner Vorlesungen und zum Gebrauch für praktizirende Aerzte. Erster oder fundamentaler Theil darstellend die Allgemeine Heilkunde oder genere­ lle Physiologie, Nosologie, Therapie undArzneymittellehre, Jena, 180�. Zweiter oder angewendter Theil darstellend die Besander Heilkunde oder Anatomie, spezielle Physiologie, Nosologie, Semiotik, spezielle Therapie und Arzneimittellehre, Jena, 180�. Lamarck, J.- B . - P. -A. , Philosophie zoologique, ou exposition des considerations

relatives a l 'histoire naturelle des animaux; a la diversite de leur organisation et des facultes qu 'ils en obtiennent; aux causes physiques qui mantiennent en eux la vie et donnent lieu aux mouvements qu 'ils executent; enfin, a celles qui produisent, les unes le sentiment, et les autres l 'inteligence de ceux qui en sont doues, � vols . , Paris, 1809. Leibniz, G. W. Oeuvres philosophiques latines et franr:oises de Jeu Mr. Leibniz.

Tin§es de ses manuscrits qui se trouvent dans la Biblioteque Royal a Hanovre , et publii�es par M . Rud. Eric Raspe. Avec une Preface de Mr. Kaestner. Amsterdam I Leipzig, 1765 (Edici6n Raspe) . Citado como Oeuvres

philosophiques. -, Gothofredi Guillelmi Leibnitii Opera Omnia, Nunc primum collecta, in Glasses distributa, praefationibus & indicibus exornata, studio Ludovici Dutens . Ginebra, 1768 (Edici6n Dutens) . Citado como Opera. -, Die philosophische Schriften von Gottfried Wilhelm Leibniz. Hrsg. von J . C. Gerhard, 7 vols., Berlin, 1875 - 189o (Edici6n Gerhard) . Citado como Phi­ losophische Schriften. -, Principes de la nature & de la grace, fondes en raison. En la edici6n Dutens , tomo II, parte I, pp. 3�-39. En la edici6n Gerhardt, vol. 6, pp . 598-6o6. -, Monadologie. En la edici6n Dutens , tomo II, parte I, Principia philosophiae, seu theses in gratiam principis Eugenii &c. , pp. � o-3I. En la edici6n Gerhardt, vol. 6, pp. 607- 6�3 . Traducci6n castellana: Monadologia. Traducci6n y notas de Julüin Velarde, Oviedo, Pentalfa, 1981. Lessing, G.E., Escritos filos6ficos y teol6gicos, trad. de Agustin Andreu, �a. ed. Barcelona, Anthropos, 1990 Maaß, Joh. Gebh. Ehrenr. , Grundriß der Logik. Zum Gebrauche bei Vorlesun­ gen. Nebst einigen Beispielen zur Erläuterungen für die jüngern Freunde dieser Wissenschaft, Halle, 1793.

50

RAMON VALLS PLANA

Newton, Isaac Optice: sive de reflexionibus, refractionibus, inflexionibus et coloribus lucis, libri tres . Authore Isaaco Newton. Latine reddidit Samuel Clarke . Editio secunda, auctior, Londres, 1719. Piur, Paul. Studien zur sprachlichen Würdigung Christian Wolffs. Ein Beitrag zur Geschichte der neuhochdeutschen Sprache, Halle, 1 903. Citado como Piur. Platon, IIAATONOL: AIIANTA TA L: OZOME NA . Platonis opera quae extant omnia. Ex nova Ioannis Serrani interpretatione, perpetuis eiusdem notis illustrata; quibus & methodus & doctrinae summa breuiter & perspicue indicatus. Eivsdem annotationes in quosdam suae illius interpretationis locos. Henr. Stephani de quorundam locorum interpretatione iudicium, & multorum contextus Graeci emendatio, 3 vols. [Basilea] , 1578. Schelling, Friedrich Wilhelm J oseph von, Sämmtliche Werke. Edici6n de K. F. A. Schelling, 10 vols. , Stuttgart / Augsburg, 1856 -1861 . -, Werke. Historisch-kritische Ausgabe . Im Auftrag der Schelling- Komission der BayerischenAkademie der Wissenschaften. Herausgegeben von Hans Michael Baumgartner, Wilhelm G. Jakobs, Herman Krings und Herman Zeltner, Stuttgart, 1976 y ss. (Edici6n de la Academia) . -, Bruno oder über das göttliche und natürliche Princip der Dinge. Ein Gespräch. Editado por Schelling, Berlin, 180�. -, Darstellung meines Systems der Philosophie. En: Zeitschriftfür spekulative Physik, editado por Schelling. Zweyten Bandes zweytes Heft. Jena I Leipzig, 1801. Simplicio, .6 IMITA IKIOY YITOMNHMA TA EI.6 TA OKTO API.6TOTE ­ AOY.6Y.6IKH.6 AKPOA.6E0.6 BIBAIA META TOY YITOKE I ME ­ NOYTOY API.6TOTEAOY.6. Simplicii commentarii in octoAristotelis phy­ sicae avscvltationis libros cum ipso Aristotelis textv. Venetiis, 15�6. Spinoza, B., Benedicti de Spinoza opera qvae svpersvnt omnia. Iterum edenda

cvravit, praefationes, vitam auctoris, nec non notitias, qvae ad historiam scriptorvm pertinent addidit Henr. Everh. Gottlob Paulus, � vols. , Jena, 18o�- 18o3 (Edici6n Paulus) . -, Opera. Im Auftrag der Heidelberger Akademie der Wissenschaften heraus­ gegeben von Carl Gebhardt, 4 vols. , Heidelberg [I 9�5] (Edici6n Gebhardt). -, Ethica ordine geometrico demonstrata. - En la edici6n Paulus, vol. � - - En cas­ tellano: Baruch de Espinosa, Etica demostrada segU,n el orden geometrico, traducci6n y edici6n de Vidal Pe:fia, Madrid, Editora Nacional, 1975. -, Correspondencia, edici6n y traducci6n de Atilano Dominguez, Madrid, Alianza, 1988. Tholuck, F.A. G. , Blüthensammlung aus der Morgenländischen Mystik nebst einer Einleitung über Mystik überhaupt und Morgenländische insbesondere, Berlin, 18�5·

PRESENTACIÖN

5I

-, Die Lehre von der Sünde und vom Versöhner, oder die Wahre Weihe des Zweiflers .

Zweite, umgearbeitete Auflage, Hamburgo, 18�5. Treviranus, Gottfried Reinhold, Biologie, oder Philosophie der lebenden Naturfür Naturforscher undAerzte, 6 vols. , Gotinga, 180� - 1 8��. Trommsdorff, J ohann Bartholomä, Systematisches Handbuch der gesammten

Chemie zur Erleichterung des Selbststudiums dieser Wissenschaft. Die Chemie im Felde der Erfahrung, vols. 1 -7, Erfurt, 18oo-18o4 . Wagner, Johann Jacob, Von der Natur der Dinge. In drey Büchern, Leipzig, 18o3. Wolff, Christian, Philosophia prima, sive ontologia, methodo scientifica pertrac­ tata, qua omnis cognitionis humanae principia continentur. Editio nova priori emendatior, Frankfurt I Leipzig, 1736. Wolff, Christian, Theologia naturalis methodo scienti.fica pertractata. Pars prior,

integrum systema complectens, qua existentia et attributa Dei a posteriori demonstrantur. Editio nova priori emendatior. Frankfurt I Leipzig, 1739.­ Pars posterior, qua existentia et attributa Dei ex notione entis perfectissimi et natura animae demostrantur, et atheismi, deismi, fatalismi, naturalismi, Spi­ nosismi aliorumque de Deo errorum fundamenta subvertuntur. Editio secunda priori emendatior, Frankfurt I Leipzig, 174 1 .

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@Srunbriffe.

Sum 0e&r4u� feiner $odefungett

f)r. , und das Böse ist neunmal schlimmer als vorher, weil sich ihm ohne allen Verdacht und Kritik anvertraut wird ; und als ob j enes Übel, das entfernt gehalten wird, die I Philosophie , etwas anderes wäre als die Untersuchung der Wahrheit, aber mit Bewußtsein über die Natur und den Wert der allen Inhalt verbindenden und bestimmenden Denkverhältnisse. Das schlimmste Schicksal hat dabei die Philosophie selbst unter j enen Händen zu erfahren, wenn sie sich mit ihr zu tun machen und sie teils auffassen, teils beurteilen. Es ist das Faktum der physischen oder geis­ tigen, insbesondere auch der religiösen Lebendigkeit, was durch j ene es zu fassen unfähige Reflexion verunstaltet wird. D ieses Auffassen hat jedoch für sich den Sinn, erst das Faktum zu einem Gewußten zu erhe­ ben, und die Schwierigkeit liegt in diesem Übergange von der Sache zur

PROLOGO A LA SEGUNDA EDICION

6r

E l importante resultado negativo en e l que se encuentra e l entendi ­ miento propio de la cultura cientifica universal, a saber, que sobre el camino del concepto finito [o representaci6n] no es posible ninguna mediaci6n con

la I verdad, acostumbra a sacar la consecuencia opuesta a la que reside de [8/r6l modo inmediato en aquel resultado . Aquella convicci6n, en efecto, ha sup rimido 8 mas bien el interes por la investigaci6n de las categorias y la atenci6n y la cautela respecto de su aplicaci6n9; en vez de alejar I del conoci- [vnl miento las relaciones finitas, el uso de estas a la desesperada se ha hecho

mucho mas despreocupado, inconsciente y acritico. A partir del malentendido de que la insuficiencia de las categorias para alcanzar la verdad com­ porta la imposibilidad del conocimiento obj etivo, se concluye la justi­ ficaci6n del hablar y condenar desde el sentimiento y desde la opini6n subj etiva; en el lugar [que deberia ocupar] la demostraci6n se presentan aseveraciones y narraciones de lo que [dicen] se halla en la conciencia como hechos, lo cual se tiene por mäs puro cuanto mas acritico10• Sobre una cate-

"

goria tan enjuta como la inmediatez y sin mayor investigaci6n de ella, se quieren colocar las aspiraciones mas elevadas del espiritu, y desde esta misma categoria se quiere decidir sobre tales aspiraciones. Sobre todo cuando se discute de cuestiones religiosas, ocurre que la filosofia es marginada expresamente, como si de esta manera se evitara todo mal y se consi­ guiera la seguridad contra el error y la ilusi6n, y a continuaci6n se dispone la investigaci6n de la verdad desde supuestos de cualquier procedencia y mediante raciocinios'�, esto es, utilizando las determinaciones usuales del pensamiento tales como esencia y fen6meno , raz6n y consecuencia, causa y e l fecto, etc. , o utilizando tambien el modo de sacar conclusiones que se

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atiene a esas o aquellas relaciones de la finitud. '3; y el mal es ahora peor que antes, por-

que nos confiamos a el sin sospecha ni critica; como si aquella calamidad

que ahora se mantiene alejada, la I filosofia, fuera otra cosa que la busqueda [8/171 de la verdad, pero con conciencia de la naturaleza y valor de las relaciones de

pensamiento que vinculan y determinan todos los contenidos. Su peor destino [, sin embargo ,J debia experimentarlo la filo sofia en manos de los que se ocupan de ella y, ora aprehenden, ora enjuician. Es el

factum de la vitalidad fisica o espiritual, especialmente el de la vitalidad reli­ giosa, lo que se desfigura por aquella reflexi6n [filos6fica] incapaz de cap ­ tarlo. Este aprehender, sin embargo , tiene de suyo el sentido de elevar ini­ cialmente el hecho a algo sabido, y la dificultad reside en ese transito desde la cosa al conocimiento, transito que [siempre] se efectUa por una cierta refle­ xi6n'4 . Y esta dificultad deja de estar [, por tanto,] en la ciencia misma. En

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Erkenntnis, welcher durch Nachdenken bewirkt wird. Diese Schwierig­ keit ist bei der Wissenschaft selbst nicht mehr vorhanden . Denn das Fak­ tum der Philosophie ist die schon zubereitete Erkenntnis, und das Auffassen wäre hiermit I nur ein Nachdenken in dem Sinne eines nachfolgenden Denkens ; erst das Beurteilen erforderte ein Nachdenken in der gewöhnlichen Bedeutung. Allein j ener unkritische Verstand beweist sich ebenso ungetreu im nackten Auffassen der bestimmt ausgesprochenen Idee, er hat so wenig Arges oder Zweifel an den festen Voraussetzungen, die er enthält, daß er sogar unfähig ist, das bare Faktum der philosop­ hischen Idee nachzusprechen. Dieser Verstand vereinigt wunderbarer­ weise das Gedoppelte in sich, daß ihm an der Idee die völlige Abwei­ chung und selbst der ausdrückliche Widerspruch gegen seinen Gebrauch der Kategorien auffällt und daß ihm zugleich kein Verdacht kommt, daß eine andere Denkweise vorhanden sei und ausgeübt werde als die seinige und er hiermit anders als sonst denkend sich hier verhalten müsse . Auf solche Weise geschieht es, daß sogleich die Idee der spekulativen Philo ­ sophie in ihrer abstrakten Definition festgehalten wird, in der Meinung, daß eine Definition für sich klar und ausgernacht erscheinen müsse und nur an vorausgesetzten Vorstellungen ihren Regulator und Prüfstein habe, wenigstens in der Unwissenheit, daß der Sinn wie der notlwendige Beweis der Definition allein in ihrer Entwicklung und darin liegt, daß sie aus dieser als Resultat hervorgeht. Indern nun näher I die Idee über­ haupt die konkrete, geistige Einheit ist, der Verstand aber darin besteht, die Begriffsbestimmungen nur in ihrer Abstraktion und damit in ihrer Einsei­ tigkeit und Endlichkeit aufzufassen, so wird j ene Einheit zur abstrakten geistlosen Identität gemacht, in welcher hiermit der Unterschied nicht vorhanden, sondern alles eins, unter anderem auch das Gute und Böse einerlei sei. Für spekulative Philosophie ist daher der Name Identitäts�s­ tem, Identitätsphilosophie bereits zu einem rezipierten Namen geworden. Wenn jemand sein Glaubensbekenntnis ablegte : > , so würde man sich wundern, wenn ein anderer schon aus diesem ersten Teile herausbrächte , daß der Bekenner an Gott den Schöpfer des Himmels glaube , also die Erde für nicht geschaffen, die Materie für ewig halte. Das Faktum ist richtig, daß j ener in seinem Bekenntnis ausgesprochen hat, er glaube an Gott den Schöpfer des Himmels, und doch ist das Faktum, wie es vorn anderen aufgefaßt worden, vollkommen falsch ; so sehr, daß dies Beispiel für unglaublich und für trivial angesehen werden muß . Und doch ist der Fall mit dem Auffassen der philosophischen Idee diese

PROLOGO A LA SEGUNDA EDICIÖN

efecto, elfactum [del que parte] la filosofia es el conocimiento ya dispuesto , y el apreheuder seria entonces I solamente un re-pensar, en el sentido de un

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pensamiento subsiguiente [y no de una simple reflexion] ; solo el enjuiciar exigiria una reflexi6n en el sentido corriente. Pero ocurre que aquel entendi­ miento acritico se demuestra tambü�n como poco de fiar en la mera aprehen­ sion de la idea, de la cual [, sin embargo ,J habla expresamente; siente tan poco malestar y tiene tan pocas dudas respecto de los supuestos bien solidifi­ cados que el mismo contiene, que es el precisamente el incapaz de repetir el purofactum de la idea filos6fica. Este entendimiento reune admirablemente la doblez dentro de si; por un lado, lo que le llama la atenci6n en la idea [filo ­ s6fica] es su total desviacion, e incluso su contradiccion, respecto del uso [corriente] de las categorias, pero al mismo tiempo ni se le ocurre sospechar que haya otra manera de pensar distinta de la suya y que esta se ejercite [efec­ tivamente por alguien] ; no sospecha [ese entendimiento] que el, consiguien­ temente, debiera ponerse a pensar de otra manera. Y asi sucede que, por un lado, retiene la idea de la filosofia especulativa seglin su definicion abstracta, creyendo que bastani una definicion para que la cosa aparezca de suyo clara y acabada (definicion que s6lo tiene su regla y piedra de toque en represen­ taciones previas) , mientras a la vez ignora (como minimo) que tanto el sentido como la ne I cesaria demostracion de una definici6n solo reside en su [8/18l desarrollo y que de este procede ella como resultado. Ahora bien, como sea que, ademas, I la idea es en general la unidad concreta y espiritual, mientras que el entendimiento consiste en comprender las determinaciones concep- . tuales en su abstracci6n y, por ende , en su unilateralidad y finitud, resulta entonces que esa unidad se convierte en identidad abstracta y carente de espiritu, en la cual, por tanto, no se da la distinci6n, sino que [en ella] todo es

uno, todo es una misma cosa, incluso el bien y el mal. Por ello ha sido aceptado generalmente el nombre de sistema de la identidad o de filosofia de la identidad para la filosofia especulativa'5 . [Pero] si alguien dij era, como con­ fesion de su fe , causaria sorpresa que [despues] viniera otro a sacar la consecuencia de esa confesi6n de que [supuesto que] el creyente cree en Dios creador del cielo, considera

por tanto

a la tierra como no creada y a la materia como eterna. El hecho

[enunciado] es correcto, es decir, que el creyente ha expresado en su confe si6n que cree en Dios creador del cielo, y sin embargo [tambien] ese hecho es enteramente falso tal como ha sido captado por el otro; tan falso es, que este ejemplo sera tenido por increible y trivial. Y, sin embargo, esta violenta par­ tici6n por la mitad es lo que ocurre cuando se trata de la comprensi6n de la idea filos6fica, de manera que en este caso y para que no se pueda entender

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gewaltsame Halbierung, so daß , um es nicht mißverstehen zu können, wie die I Identität, welche der Versicherung nach das Prinzip der speku­ lativen Philosophie sei, beschaffen sei, die ausdrückliche Belehrung und respektive Widerlegung folgt, etwa daß das Subjekt vom Objekt verschieden sei, irrgleichen das Endliche vom Unendlichen usf. , als ob die konkrete geistige Einheit in sich b estimmungslos wäre und nicht selbst den Unterschied in sich enthielte, als ob irgendein Mensch es nicht wüßte, daß das Subjekt von dem Obj ekte, das Unendliche von dem Endlichen vers­ chieden sei, oder die Philosophie, in ihre Schulweisheit sich vertiefend, daran zu erinnern wäre, daß es außer der Schule die Weisheit gebe, wel­ cher j ene Verschiedenheit etwas Bekanntes sei. I Indem die Philosophie in Beziehung auf die ihr nicht bekannt sein sollende Verschiedenheit bestimmter so verunglimpft wird, daß in ihr damit auch der Unterschied des Guten und Bösen wegfalle, so pflegt gern die Billigkeit und Großmut geübt zu werden, daß zugestanden wird, > daß die Philosophen in ihren Darstellungen die verderblichen Folgerungen, die mit ihrem Satze verbunden seien, nicht immer (-also doch vielleicht auch deswegen nicht, weil diese Folgerungen nicht ihnen angehören-) entwickelndaß auch der sittliche Maßstab des Menschen kein absolut wahrer ist, sondern eigentlich (ist vom Verf. selbst unterstrichen) Gut und Böse gleich und nur dem Schein nach verschie­ den sei< . Man würde immer besser tun, über Philosophie gar nicht zu sprechen, solange man bei aller Tiefe des Gefühls noch so sehr in der Einseitigkeit des Verstan­ des befangen ist, um nur von dem Entweder- Oder eines Urgrundes, in dem das indivi­ duelle Sein und dessen Freiheit nur eine Täuschung, und der absoluten Selbständig­ keit der Individuen zu wissen und von dem Weder-Noch dieser beiden Einseitigkeiten des, wie es Herr Tholuck nennt, gefährlichen Dilemmas nichts in Erfahrung gebracht zu haben. Zwar spricht er S . 14 von solchen Geistern, und diese seien die eigentli­ chen Philosophen, welche den zweiten Satz (dies ist doch wohl dasselbe , was vorher der erste Satz hieß) annehmen und den Gegensatz von unbedingtem und bedingtem Sein

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mal c6mo esta constituida aquella I identidad que, segtin aseguran, es el [x1J principio de la filosofia especulativa, se aiiade una enseiianza clara y el rechazo correspondiente; [se dice,] por ejemplo, que el sujeto es distinto del objeto, o tambien, que lo finito es distinto de lo infinito, etc . , [y rechazan entonces la idea especulativa] como si la unidad espiritual concreta fuese en si misma carente de determinaci6n y no contuviera dentro de si la distinci6n; como si hubiera alguien que no supiera que el sujeto es distinto del objeto, y lo infinito [distinto] de lo finito, como si la filosofia, profundizando en su sabiduria academica, debiera recordar que fuera de la academia tambien hay sabiduria para la cual aquella distinci6n es algo bien sabido. I Cuando se denigra a la filosofia de manera mas concreta refiriendose [8/19l a la distinci6n que, segtin se dice, ella ignora entre el bien y el mal, [ocurre entonces que] la superficialidad y la altaneria se suelen despachar muy a gusto al dejar bien sentado que los fil6sofos en sus ob ras no siempre desa­ rrollan las condenables consecuencias que se siguen de sus afirmaciones ( : -podria ser, por tanto, que rizas no lo hicieran [a veces] porque tales consecuencias no les ataiien-)* ' . La I filosofia I tiene que des- [8/2.ol [xnl *

[Nota de Regel] Palabras del se:iio r Tholuck en el , pg. 13. Incluso el Sr. Tholuck, Sentimentalmente profundo, s e deja aqui llevar por el camino trillado en el modo de entender la filosofia. Seglin el dice, el entendimiento s6lo puede sacar consecuencias de las dos clases siguientes: o se da un fundamento originario que todo lo condiciona, y entonces reside en el la raz6n ultima de mi mismo, y [en este caso tambien] mi ser y mi acci6n libres son s6lo ilusi6n, o yo soy realmente una entidad distinta del fundamento originario y mi acci6n no esta condicionada ni causada por el, de lo que resulta [en este otro caso] que el fundamento originario no es una entidad absoluta que lo condiciona todo y, por tanto, no hay un Dios infinito, sino una multitud de dioses, etc. A la primera proposici6n [siempre seglin Tholuck] deben adherirse todos los fil6sofos que piensen profunda y agudamente. (Ciertamente, yo no sabria por que la primera unilateralidad deberia ser mas profunda y aguda que la segunda) ; las consecuencias de ello, mencionadas en parte mas arriba, pero no entera­ mente desarrolladas, serian . Siempre seria preferible no hablar en absoluto de filosofia cuando uno, a pesar de toda la profundidad de sus sen­ timientos, esta tan cogido por la unilateralidad del entendimiento que s6lo sabe del : [o se da] el fundamento originario en el cual el ser individual y su libertad son s6lo una ilusi6n, [o se da] la absoluta sustancialidad de los individuos; y eso sin enterarse del >Auf dem europäischen Kontinent ist Protestantismus und Unitarianismus gegenwärtig meist synonym. > (en este sentido habla el Sr. Tholuck de un , p. ��1) . �No ha sido esta doctrina desde siempre (� o desde cuando, por lo menos?), en cuanto santisima, el contenido principal de la fe, incluso en el credo? �Y este credo no ha sido el fundamento de la fe subjetiva? � C6mo puede tener un sentido, sin este dogma, la doctrina de la reconciliaci6n que el Sr. Tholuck, en el escrito citado , trata de conducir con tanto energia al sentimiento? � C6mo puede tener un sentido mas que moral o, si se quiere, mas que pagano? � C6mo puede tener un sentido cristiano? Tampoco sobre otros dogmas especificos se encuentra nada en este escrito; el Sr. Th. siempre conduce a sus lectores solo hasta la pasi6n y muerte de Cristo, pero no hasta su resurrecci6n y ascensi6n a la derecha del Padre, ni hasta la efusi6n del Espiritu Santo. Una determinaci6n capital en la doctrina de la recon­ ciliaci6n es el castigo de los pecados; este consiste, seglin el Sr. Th. , pp. 1 1 9 ss., en la autoconciencia apesadumbrada y en la desdicha concomitante que se encuentran en todos los que vivenfuera de Dios, unica fuente de felicidad como lo es de la santidad; asi resulta que pecado, conciencia culpable y desdicha no pueden ser pensadas uno sin el otro (aqui se llega por tanto al pensamiento del mismo modo que en la p. qo se mencionan las determinaciones que fluyen de la naturaleza de Dios) . Esta determina­ ci6n del castigo de los pecados es lo que se ha llamado castigo natural de los pecados, y que es resultado y doctrina (como la indiferencia ante la doctrina trinitaria) de la raz6n y de la Ilustraci6n tan denastadas por el Sr. Th. en otros lugares. - Hace alglin tiempo se aprob6 una ley por la Camara alta del Parlamento ingles referente a la secta de los unitaristas; con ocasi6n de ella un peri6dico ingles public6 una noticia sobre el gran numero de unitaristas en Europa y America y aftadia: . Sir­ vanse decidir los te6logos si la dogmatica del Sr. Tholuck se distingue de la teologia corriente de la Ilustraci6n en mas de un punto o a lo sumo en dos y, si estos se miran de cerca, quiza ni en estos.

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und so lange wird auch diese nicht geachtete Religion nicht geliebt wer­ den, weil man doch nur herzhaft und aufrichtig lieben kann, was man aufrichtig geachtet sieht und als achtbar unbezweifelt erkennt, so wie der Religion auch nur mit einem solchen amor generosus gedient sein kann . . . Mit anderen Worten: wollt ihr, daß die Praxis der Religion wieder gedeihe, so sorgt doch dafür, daß wir wieder zu einer vernünftigen Theo ­ rie derselben gelangen, und räumt nicht euren Gegnern (den Atheisten) vollends das Feld mit jener unvernünftigen und blasphemischen Behauptung: daß an eine solche Religionstheorie, als an eine unmögliche Sache, durchaus nicht zu denken, daß die Religion bloße Herzenssache sei, bei der man des Kopfes sich füglieh entäußern könne, ja müsse. > die tiefe Demut dieses großen Denkers> Negligentiae mihi videtur si . . . non studemus quod cre­ dimus, intelligere.