373 121 1MB
Spanish Pages [363] Year 2013
2
LA LIBERACIÓN DE HEBRÓN Ramón Acevo
3
ISBN-13: 978-148276749 ISBN-10: 148276749X Ramón Acevo y/o Fundación Caftánrojo AC 3ª calle de Xicoténcatl nº 44 Coatepec, Veracruz, México 91500 52 (228) 816 3151 fundació[email protected] www.caftanrojo.org
Esta obra está licenciada bajo la Licencia Creative Commons Atribución-No Comercial-Compartir Igual 3.0 Unported. http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/3.0/.
4
A Verónica, Luís Enrique y Selva Ámbar
5
6
Agradezco a Naftali Modek y a Mario Pedro Wainstein sus observaciones puntuales y su paciencia, sobre todo su paciencia. También agradezco el gran interés y apoyo de Laila Schneider, Juanita Feldman, Fany Beckerman, Mijal Tal, Leonardo Fierro y Fernanda Amaranta López.
7
Nota aclaratoria: lo contenido en esta novela es ficticio, los nombres de ciertos personajes públicos sirven como referencia de la época y el lugar en que ocurre la acción, pero NO representan el carácter, intenciones o aspectos de la vida de esas personas.
8
Serán vecinos el lobo y el cordero, y el leopardo se echará con el cabrito, el novillo y el cachorro pacerán juntos, y un niño pequeño los conducirá. La vaca y la osa pacerán, juntas acostarán sus crías, el león, como los bueyes, comerá paja. Hurgará el niño de pecho en el agujero del áspid, y en la hura de la víbora el recién destetado meterá la mano. Nadie hará daño, nadie hará mal en todo mi Santo Monte, porque la tierra estará llena de conocimiento de Yahvé, como cubren las aguas el mar. Aquel día la raíz de Jesé que estará enhiesta para estandarte de pueblos, la gente la buscará, y su morada será gloriosa. Aquel día volverá el Señor a mostrar su mano para recobrar el resto de su pueblo que haya quedado de Asur y de Egipto, de Patrós, de Kus, de Elam, de Senaar, de Jamat y de las islas del mar. Izará bandera a los gentiles, reunirá a los dispersos de Israel, y a los desperdigados de Judá agrupará de los cuatro puntos cardinales. Isaías 11/6-12
La conservación de la especie se debe a que el ser humano sabe perdonar. Mahabharata
9
10
I
Era mayo, esa noche no había luna ni brillaban las estrellas. Más allá del alcance de los reflectores el mundo desaparecía de súbito, la oscuridad era densa, tan espesa que podía palparse y la tierra ardía, parecía empeñarse en negar la existencia del frío nocturno del desierto del que hablan tantas viejas historias. Las tinieblas descendían hasta rozar la árida superficie cuya silueta perfilaba una tenue línea de resplandor rojizo, como si el Neguev fuera la cavidad de un horno colosal con la flama al máximo bajo la plancha inferior. La sed de siglos de la tierra se manifestaba en polvo, inmensas nubes de polvo ocupaban el vacío, polvo, todo era polvo, todo era cubierto por el polvo, todo quedaba velado tras esa neblina huérfana de humedad, tamo nostálgico de hierba que invadía cada rincón y dotaba al ambiente de un aspecto irreal, difuso, donde resultaba temerario moverse, estar, aún respirar era osado, las lenguas se retraían dentro de las bocas en búsqueda del último resquicio de saliva. Miles de millones de partículas flotaban suspendidas en el ambiente, mónadas que navegaban en el limitado paisaje de aspecto lunar, ingrávido, movimiento 11
browniano en seco de corpúsculos que se extendían sobre los objetos hasta atraparlos bajo su manto intangible para otorgarles un carácter impreciso, etéreo, volúmenes extraviados en el tramado minúsculo que envolvía a cada persona y a cada cosa en su literal monotonía, color de barro seco que homologaba ropas, cuerpos, muebles, armas, construcciones. Lo único que lograba establecer un menguado contraste eran las persistentes manchas de humedad en el uniforme de faena de la Oficial Schneider, descendían sobre su vientre desde la parte inferior de los voluminosos senos, ascendían a partir de la oquedad de las axilas, trazaban un mapa de geografías ignotas en la parte media de la espalda, abarcaban el lado interno de los rotundos muslos y marcaban una ruta amplia sobre el hombro derecho, la franja de sudor rebasaba por ambos lados la ancha correa de fibra incombustible del rifle IMI Galil AR reglamentario. El aburrido sonido del ventilador cenital hacía más desesperante la larga noche que tenían por delante, no lograba siquiera ser asumido como anhelo de brisa, la estela circular de las seis aspas que giraban al máximo removía apenas un ápice el ambiente caldeado. Daniela estaba agotada, detrás de los cristales inastillables de los anteojos sus párpados insistían en caer sobre el añil de su mirada, se desperezó, con la mano izquierda se rascó el pubis sin ningún recato, irguió la espalda, apoyó las manos en las rodillas, dejó el arma colgar libre del hombro y comenzó a respirar profundo para obligarse a permanecer despierta; estaba concentrada en aplicar la técnica kapalabhati, que había aprendido desde su primer viaje a India, cuando la intromisión repentina de un sonido metálico le hizo perder el ritmo, de manera automática miró el reloj en el dorso de su muñeca derecha, eran las 0257, 12
se levantó y caminó hacía el mirador, alzó el reflector, la luz marcó la borrosa silueta de Beit Hanoun, un amasijo de construcciones cúbicas, empequeñecidas bajo la polvareda, las cosas parecían estar en calma. – ¿Qué ocurre? – Preguntó el Cabo Froiem Wachowski, otro de los integrantes de la guardia nocturna en el Paso de Erez. – Ese ruido, parece un buldózer… – Si, pero viene del norte, por la ruta cuatro, o estás dormida o estás perdiendo el toque, me extraña de ti, siempre tan certera, además por el sonido te puedo asegurar que son bastante más que uno. Se dirigieron al otro extremo de la torre y encendieron el proyector de localización, arrojaron el haz de luz sobre la carretera, en la cima de la lejana colina asomaba una hilera interminable de máquinas que avanzaban con parsimonia hacía ellos, cubrían por completo el vago horizonte, que se hacía más incierto en la medida que su lento avance levantaba cúmulos de arena finamente molida por la fricción de las pesadas orugas y las enormes ruedas de caucho. – ¿Qué crees que estén haciendo, será una huelga de operadores de maquinaria pesada? – ¿A las tres de la mañana?, no me hinches las pelotas Froiem, mejor tomá el teléfono y llamale al Mayor. – Llámale tú. – La jefa de guardia soy yo, llamá, es una orden. – Enseguida Teniente, gracias por recordarme el principio de autoridad. Contestó irónico mientras se rascaba el pene sobre el pantalón, imitando el movimiento que había hecho Daniela poco antes, ella le respondió mostrándole el dedo cordial de la mano izquierda. Justo en ese instante, las 0305, sonó el 13
teléfono de la torre de vigilancia, los otros cinco militares dieron un salto involuntario, Froiem se apresuró a tomar el auricular. – Erez Aleph. – ¿Teniente Schneider? – Habla el Cabo Wachowski, Mayor Feldman. – Froiem reconoció la voz de su superior. – Ya me parecía que había enronquecido, por favor comuníqueme con Daniela. – Alargó el teléfono inalámbrico en dirección de su superior jerárquico, quien lo tomó enseguida. – ¿Mayor? – ¿De qué está enterada Daniela? – ¿Qué es lo que ocurre señor? – ¿Por qué siempre me responde con otra pregunta, acaso sufre del síndrome de Marylin Monroe? – No conozco ese síndrome señor y tampoco estoy tan buena, por lo que se refiere a las novedades le informo que cientos de buldóceres vienen hacia la frontera, estábamos por llamarle, espero instrucciones, Mayor. – La cifra exacta es de doscientos ochenta y tres, cubrirán todo el extremo noroeste y se extenderán a una sección del noreste, hasta Karni. Aguarde a que se acerquen más, cuando considere que en la avanzada están en posibilidad de escuchar con claridad el altavoz, emita la orden de alto tres veces, después disparen salvas al aire, tres veces también, registren la operación y no hagan nada más, limítense a observarlos, manténgame al tanto de cualquier movimiento y no lo olvide, salvas, no deben disparar más que salvas. – Pero los disparos van a alertar a los pobladores. – Me parece, Daniela, que a estas horas el ruido de las 14
máquinas debe haber despertado hasta al Primer Ministro Vitalicio de Hamás, aun cuando tuviera encima de la cabeza a las tres esposas que le permite la Ley Islámica, lo importante para nosotros es dejar evidencia de que tratamos de impedir que llegaran a la frontera y, sobre todo, que lo hicimos sin recurrir a la violencia. – ¿Pero qué está pasando Mayor, quienes son los que vienen? – No se lo podría decir por teléfono, si lo supiera con exactitud, únicamente me informaron que son ciudadanos israelíes e integran un operativo del que el Gobierno quiere deslindarse. Por contradictorio que parezca las instrucciones son no enfrentarlos. – ¿Y si intentan pasar a Gaza? – Teniente le puedo asegurar que eso es precisamente lo que van a hacer, van a traspasar las barreras, a retirar los muros y alambradas y avanzarán a lo largo de toda la frontera, su intención es tomar Gaza, por mí que les aproveche… cero reacción, cero intervención, la misión de ustedes es cumplir con el protocolo de impedimenta con tres avisos verbales y tres de salvas para que quede constancia de que el Tzáhal no tiene nada que ver con esto, ni mi vieja y sorda abuela se lo va a creer, pero esa decisión rebasa mis atribuciones. Ustedes, insisto, limítense a ver, escuchar y reportar… – Señor me parece prudente que los de la Maguen David Adom o la Cruz Roja Internacional den fe de las advertencias, es una sugerencia mayor, eh, y, bueno, para tomar las precauciones debidas, ¿tiene contemplado modificar el cambio de guardia? – Como siempre agradezco su interés, las ambulancias de la Maguen David Adom, Yad Sarah y Zaka van justo detrás de los buldóceres y los de la Cruz Roja Internacional aparecerán bastante más temprano de lo deseable, junto con cinco 15
docenas de oenegés y enjambres de periodistas, por el momento limítese a cumplir las instrucciones. En cuanto al cambio de guardia no están previstas modificaciones, de cualquier manera esta va a ser una noche muy larga para ustedes. En unos minutos arribará el Capitán Fainstein, seguro que eso las pondrá felices a usted y a sus compañeras. – Puede apostarlo Mayor, pero no lo considero gracioso. Colgó y vio doce ojos pendientes de ella, en lugar de informarles les espetó una pregunta. – ¿Quién de ustedes sabé que boludez es esta? Los seis pusieron cara de sorpresa, aunque alcanzó a distinguir un pequeño gesto extraño en el veterano Suboficial Goldfinger. – ¿Y bien Sargento? – Bueno Dani, perdón… Teniente, – Para él era un poco complicado ser subalterno en el Tzáhal de quien había sido alumna suya en la universidad y todavía era su ocasional subordinada en proyectos de investigación académica, fuera del ejército era el maestro, dentro estaba obligado a obedecer sus instrucciones. – no es mucho lo que sé y ahora puedo contarlo, ¿cierto?, la operación ya inició, no me lo esperaba, no por aquí, es genial, ¿cierto?, en unas horas se sabrá todo con lujo de detalles, este cambio de último momento fue una jugada genial, digna de un partido de ajedrez en un certamen internacional. Casi toda mi familia está dentro, no creo que haya familia judía en Israel que no tenga a uno o más de sus miembros participando, ¿cierto?, es una idea muy, como les diré, muy poco convencional pero factible, están movilizando a mucha gente, a mucha... La emoción impedía al Sargento expresarse de forma clara, se vieron entre sí, nadie entendía nada, el sonido de los 16
buldóceres se escuchaba cada vez más cerca. – Explícate por favor. – Dijo Daniela mientras colocaba la mano izquierda sobre su propia frente. – Sí, sí claro, la impresión me ha turbado, perdón Da… Teniente, el punto es que miles de personas penetrarán a Gaza en unos minutos, decenas de miles en realidad, aunque se suponía que la acción sería en otro sitio, todo el plan se consideró originalmente en base a… a otro lugar, por eso me sorprende; la modificación del objetivo es fabulosa, una decisión impresionante, aunque quizá… sí, sí, entiendo, de nuevo ando por las ramas. Está bien prometo evitar las dispersiones, voy al punto, ocurre que la gente no confía más en los políticos, nosotros tampoco, ¿cierto?, y algunas personas, muchas de hecho, han decidido pasar a la acción para lograr una paz civil. Una paz real y duradera para que los pobladores de los territorios en conflicto decidan por ellos mismos sin estar bajo la mira de las armas de esos impresentables de la Yihad. Se trata del Movimiento Shalom, así se llama, la respuesta ciudadana al fallido Plan de Desconexión, una respuesta desde la gente, en pocas palabras es una reconexión para buscar una vida en armonía entre árabes y judíos. No me vean así no es idea mía aunque sí la secundo. Por utópica que parezca se me hace más razonable que las genialidades de los políticos desde la Guerra de Yom Kippur hasta hoy, incluido el dichoso programa que brindó generosamente la autonomía territorial a los terroristas, en lugar de llamarlo Plan de Desconexión debieron asignarle un título más acorde, como “Dotación gratuita de bases de lanzamiento para misiles” o “Yo te dejo en paz y tu dedícate a joderme”. 17
Con este operativo se busca construir un espacio común donde los únicos excluidos sean los amos del odio, barrer de la zona a los esquizofrénicos para que no puedan actuar contra Israel ni utilizar como escudos humanos a quienes quieren vivir tranquilos. Se trata de generar el ambiente propicio para que cada quien haga su vida libre de temores, para eliminar esta sombra distópica con la que hemos iniciado el siglo XXI. Que se libere ese territorio sin definición legal que los fundamentalistas islámicos utilizan para atacarnos un día sí y otro también sin que ningún país asuma ninguna responsabilidad de las agresiones. En el fondo ellos y nosotros sabemos que el plan de dos países no funcionará, es un vano anhelo de los moderados judíos y una jugada de engaño de los promotores de la Yihad, si quedamos divididos en dos países las posibilidades de entendimiento se nulifican, los rencores se extenderán por generaciones completas hasta que uno aplaste al otro o alguien nos invada a los dos, arriemos las banderas, debemos despojarnos de las telarañas cerebrales y aprender a convivir ya mismo, ahora… Mientras Osher Goldfinger hablaba, con emoción ascendente en la medida que avanzaba su explicación, el Capitán Archibaldo Fainstein había entrado sigilosamente a la torre de vigilancia, en el momento que Daniela iba a preguntar algo interrumpió con un par de palmadas que más que aplausos parecían los golpes que se utilizan para espantar a las gallinas cuando invaden los campos de cultivo, engoló su gruesa voz de locutor de radio nocturna. – Muy bien, bastante bien, felicidades a todos, me parece un buen resumen, ¡excelente!, congratulaciones Sargento Goldfinger por su claridad y emotividad. También me parece magnífico que usted Teniente y su destacamento, buenas 18
noches señoritas, señores, se preocupen por estar bien informados, es una virtud de las mujeres querer estar enteradas de todo. Ahora me podría explicar, ¡quién carajos está de guardia!, quién está vigilando lo que ocurre a uno y otro lado de la valla. En lo que sus eminencias se ponen al día algo está sucediendo ahí afuera, el ruido que los despertó, ah no, no, no, perdón, si ustedes siempre están despiertos en su guardia, pongámoslo de otro modo, antes de que vayan a enviar una queja en mi contra al alto mando, acusándome de maltrato verbal, – Cambió a un tono de voz pausado, para hacer enfática la mordacidad. – el ruido que los puso en estado de alerta también colocó sobre aviso a esos desquiciados del Hamás, en un par de minutos vamos a tener a los soldados muertos mejor documentados de todo el ejército. ¿Quieren saber una cosa? Prefiero ignorantes vivos. De inmediato Schneider, instale una guardia. Con la sola mirada Daniela envío a Esther Rodríguez y Amin Burman a cubrir el lado de Gaza y a Froiem Wachowski y Mihail Ashkenazi el lado de Israel, quienes de inmediato se colocaron en sus posiciones, ella se encaró con su superior. – ¿Qué nos espera Capitán? – No sé más de lo que acaba de decir el Sargento y de lo que ya le informó el Mayor Feldman, los cacharros esos llegarán pronto, dentro de quince minutos usted les marcará la primera orden de alto por megáfono, sesenta segundos después la segunda y a los ciento veinte la tercera, exactamente noventa segundos más tarde dispararán las primeras salvas y posteriormente las otras dos con pausas idénticas, para ellos será como oír llover, pero qué mierda digo, esa palabra está fuera de lugar en este desierto donde jamás cae una jodida 19
gota de agua, ahora hasta de noche arde la tierra, ¡bah!, da igual… – “Las noches del desierto pueden ser frías, pero aquella había sido un fuego…” – ¿Qué dice? – Recordé algo que escribió Jorge Luís Borges. – ¿Quién es ese Borges?, ¿en qué unidad está? – No vive más, combatió una larga batalla imposible de ganar, con plena conciencia fue partícipe de la derrota que da origen a todas las guerras. En realidad eso no importa, usted nos explicaba lo que tenemos que hacer. – Eh, sí, por supuesto, no vuelva a interrumpirme con anécdotas de sus amistades. Tras la última descarga no haremos nada más que observar y reportar, permaneceremos viendo a través de los binoculares como retiran las jodidas barreras y las alambradas. Cuando penetren al territorio enemigo empezarán a caer como tristes patitos de metal del módulo de tiro de una feria, si el Tzáhal no logró resultados contundentes en Plomo Fundido, un puñado de civiles tiene mucho menos posibilidades, muchísimo menos, carecen de la menor oportunidad. Sin remedio caerán en las trampas de los terroristas, esos sujetos no se andan con miramientos, así aprenderán estos idiotas a no jugar al soldadito. – ¿No cree conveniente… – No creo nada Teniente, no me interesa saber cómo le parece a usted que deban ser las cosas, ya tiene sus instrucciones, limítese a lo indicado y no me haga hablar más que cada vez que abro la boca acabo tragándome este jodido polvo de mierda. – Miles de personas no son un puñado. Intervino Goldfinger molesto por el desparpajo del 20
Capitán. – Sargeeeento – alargó la palabra mientras alzaba la mano derecha juntando los cinco dedos – nadie organiza una operación clandestina involucrando a miles personas, si eso hicieron puedo apostarle a que hay un terrorista infiltrado por cada cinco ilusos que participan en esta mascarada; esto es un disparate que va a costar muchas vidas, es el fin de este gabinete. Haberse hecho los desentendidos les va a costar la carrera a más de veinte políticos y militares del Alto Mando. ¡Mierda!, no me provoquen, no he dicho nada, esto es mera especulación, no me interesa, no debe interesarme, nuestra función es cumplir con el teatrito ese de la disuasión y documentarlo. Se reportarán a esta torre un camarógrafo y dos fotógrafos militares, además de diez refuerzos. Su misión Schneider, abra bien los oídos Oficial, su misión es que no caiga ningún cadáver del lado israelí, si esos bastardos atacan formen una cortina de contención que les permita a nuestros tontos escapar y cierren el paso al enemigo con la misma maquinaria con la que los ilusos estos están iniciando el jueguito: ningún jodido pistolero árabe debe lograr penetrar, las bajas civiles deben reducirse al mínimo y bajo ninguna circunstancia debemos tener bajas militares. Extremen precauciones, recuerden que estos son civiles divirtiéndose con guerritas, manténganlos protegidos. El que muchos de ellos sean o hayan sido reservistas no garantiza nada, la experiencia acumulada durante años por un ejército, por un verdadero ejército, no es posible reproducirla en unas cuantas semanas, por mejores que sean sus jodidas intenciones. Lo peor que nos puede ocurrir es que los “promotores de la paz y la comprensión entre los pueblos” 21
queden atrapados entre fuego cruzado, los redentores siempre acaban crucificados. Prioridad uno – Enfatizó colocando el índice izquierdo sucesivamente sobre los dedos índice, cordial y anular de la mano derecha. – proteger a los civiles israelíes, prioridad dos, que en la confusión no se introduzcan a Israel terroristas musulmanes, prioridad tres, cero bajas del ejército. Además está estrictamente prohibido que ustedes entren a la Franja de Gaza, si tienen que disparar debe ser en respuesta a un ataque, bajo ninguna circunstancia disparen primero y deben hacerlo desde aquí, desde esta torre o desde cualquier punto detrás de la línea del armisticio, no pueden colocar ni siquiera la punta de la bota más allá de esa línea. Voy a seguir el recorrido en Erez Bet, Gimmel y Dalet y en sesenta minutos estaré de regreso. No quiero sorpresas Schneider, usted siempre dice que las mujeres pueden responder tan bien como los hombres: hoy lo va a demostrar. Observó el reloj. – En ocho minutos empieza la función. – Están huyendo, van armados. Indicó la Soldado Rodríguez. – ¿Cómo que están huyendo?, ¿quiénes? Preguntó Fainstein. Burman le colocó en la mano unos binoculares de vista nocturna, desde las casas cercanas a la frontera salían vehículos sobrecargados de personas, en el interior por lo menos duplicaban el cupo normal de cada transporte, otras viajaban en las bateas de las camionetas o sentadas sobre el capacete de los automóviles o dentro de las cajuelas, que llevaban abiertas, casi todos portaban armas largas, partían a velocidad inmoderada con las luces apagadas, enfilaban rumbo a Beit Lahiya. 22
Daniela, Osher, Esther y Chaim Govesenzky colocaron sus armas en posición de tiro. – No disparen, mi orden fue precisa, la única acción justificable es en respuesta a fuego enemigo. Indicó tajante el capitán Fainstein. – Mantengan la vigilancia y sigan las indicaciones al pie de la letra, los yihaidistas ya se percataron de su inferioridad numérica para resistir aquí, quizá eso resulte benéfico para estos locos; se van a hacer fuertes en la Conjunción Norte de Gaza, al Este de Beit Lahiya, o fijarán la contención en ese laberinto demencial de Jibaliya, eso lo sabremos muy pronto. Si ellos no disparan déjenlos marcharse, limítense a observarlos, no estamos autorizados para intervenir sin evidencias contundentes de que ellos dispararon primero sobre instalaciones militares. El Capitán avanzó tres pasos y casi al empezar a descender los escalones volteó hacia la Oficial Schneider. – Para que esté usted a gusto Teniente, ocho de los diez refuerzos son mujeres, mazel tov. Con furia Daniela quitó el seguro del Galil al tiempo que giraba el cuerpo ciento ochenta grados con el rifle apuntado hacía el techo, trató de hacer el mayor ruido posible con este movimiento pero estaba segura de que Fainstein no se había inmutado, enseguida movió la cabeza hacia los lados reconociendo para sí misma que el Capitán la había atrapado de nuevo en su juego recurrente, – Es un macho insufrible, un cerdo sexista. – dijo por lo bajo y enseguida salió al corredor perimetral de la torre. Ordenó revisar la situación del blindaje por los cuatro costados y cambiar a cargadores con salvas, – No olviden sacar la bala de la cámara de detonación, revisen dos veces que el cargador que retiran contenga la munición 23
completa, veintinueve balas, presionen la última bala con el índice para confirmar que no queda espacio en el cargador. – tomó el megáfono mientras pensaba qué iba a decir, poco a poco su enojo disminuyó. Desde que había realizado el servicio militar sentía que en el Tzáhal, las Fuerzas de Defensa de Israel, estaba su lugar en el mundo, sin embargo la misoginia de algunos de sus integrantes le provocaba serias dudas sobre lo que el futuro le deparaba en esa forma de vida, algunos oficiales como Fainstein utilizaban el cargo para proyectar sus frustraciones, eran expertos en generar odios. En cuanto llegaron los refuerzos y los camarógrafos, distribuyó las posiciones. – ¡Alto!, están invadiendo zona reservada para operaciones militares, den vuelta de inmediato, esta es la primera advertencia, ¡Alto!, den vuelta y regresen por donde vinieron, dispararemos si no se detienen. Tras las otras dos advertencias doce militares dispararon salvas al aire mientras sus compañeros se mantenían en alerta ante cualquier reacción desde Gaza, noventa segundos después repitieron los disparos y ciento ochenta segundos más tarde percutieron las salvas por última vez, con tan eficiente coordinación que cada descarga sonó como un único y contundente disparo. Desde la parte alta de la torre un camarógrafo grabó la acción, el avance no se detuvo ni siquiera un segundo, no obstante el procedimiento reglamentario se había cumplido. En cuanto llegaron a la línea divisoria los operadores empezaron a retirar con todo cuidado sección por sección del muro de concreto y a desmontar la alambrada, a los maquinistas no parecía importarles la presencia militar, en clave Daniela envió el primer mensaje al Mayor desde el 24
teléfono satelital, eran las 0333, – Algún cabalista está detrás de esto. – pensó. En algunas casas cercanas a la zona de control empezaban a encender las luces, tomó un rifle M89SR, apuntó, la mira telescópica infrarroja le permitía ubicar el blanco en la oscuridad, – Si arman lío me los chingo. – dijo en castellano, a media voz, recordando ese término de múltiples significados que había aprendido durante sus vacaciones en México. – Esa no es buena palabra para una señorita. – Señaló sonriente Froiem en el mismo idioma, con marcado acento. Atrás de la maquinaria la avanzada estaba lista. – Daniela, Esther, Osher vengan a ver esto. – ¿Ahora qué ocurre Froiem? – Miren, obsérvenlo con sus propios ojos, por primera vez en mi vida puedo decir que lo he visto todo, ya puedo morir tranquilo. El primer frente está formado por falanges de religiosos, jaredim en formaciones griegas de ataque, esto es insólito, contradice el carácter pacifista de los ultraortodoxos y, vaya, que utilicen ese alineamiento es increíble, conozco bien su aversión a todo lo que les recuerde la profanación helénica del Templo. – No traen armas. – ¿Qué dices Osher? – Que son una avanzada pacífica, sin armas, únicamente llevan los escudos blindados, los estandartes y toletes, ¿te das cuenta? Además el sincretismo lo han llevado al extremo, los portadores de los estandartes llevan un arnés como los que utilizaban los samuráis en el medioevo japonés: religiosos judíos que combaten desarmados, en formaciones griegas y con banderas de inspiración japonesa. Ver para creer. –Pero los estandartes no tienen nada, son simples rectángulos 25
de tela azul, sin símbolos ni letras, qué extraño. Esto huele raro. Mencionó Chaim Govesenzky. – Están locos, los estandartes los convierten en un blanco fácil y esos escudos son para motines urbanos, la malla del blindaje apenas puede detener balas de calibre 22 a diez metros de distancia y que yo sepa nadie se anda con esas pequeñeces por aquí. Al primer disparo de M16 o de Kalashnikov van a derribar hasta la tercera hilera, va a ser como botar con el índice la ficha del frente del dominó, ¿viste?, las demás empiezan a caer una tras otra, clanc, clanc, clanc. Comentó la Teniente con una mezcla de ironía y preocupación. – Bueno, también llevan talit katán. – ¿Es broma?, Osher, los jaredim siempre llevan puesto el talit, es como su segunda piel, pero dudo mucho que les garantice la protección divina por más largos que tengan los tzitziyot. Hace rato que se no ve a Dios por estos rumbos.
26
II
Enrique provenía de una antigua familia sefardí convertida al cristianismo en el siglo XVI por razones de supervivencia, en una vitrina de cedro labrado, colocada en el recibidor de su casa en la ciudad de Antigua, estaban guardadas las reliquias de la familia: dos viejas lámparas de aceite, una Séfer Torá dentro de un portarrollos de cerámica, en miniatura, con las cincuenta y cuatro parashiot escritas con pluma de ganso en pergamino kosher, una gastada kipá ceremonial de seda azul bordada con hilo de oro, una Janukiá de bronce con baño de oro, dos charolas de bronce, una de plata con agarraderas de latón dorado y la vetusta Menorá de plata labrada que había sobrevivido a trescientos años de persecución de la Inquisición Española, un delicado trabajo de orfebrería que se remitía a los maestros toledanos del siglo X. Su pátina y melladuras daban fe del tiempo que permaneció escondida, enterrada primero, más tarde oculta en una chimenea que fue testigo de fríos inviernos sin fuego en el hogar o bajo las tablas de un establo, en el rincón que jamás piso pezuña alguna; de generación en generación la ubicación 27
del candelabro ceremonial fue el secreto mejor guardado por la familia Bartomeu, hasta que los aires independentistas llegaron a Guatemala se permitieron airearlo, al principio con precaución extrema. A lo largo del siglo XIX miles de familias criptojudías fueron recuperando su identidad pública en Latinoamérica, el apego a las tradiciones ancestrales pudo más que el odio visceral y destructivo de la “Santa” Inquisición, la más sanguinaria de las instituciones coloniales del Imperio Español y de su interesada cómplice, la Iglesia Católica. A pesar de conocer y comprender las angustias y sufrimientos de sus antepasados, Enrique Bartomeu no se consideraba religioso, a la muerte del abuelo su padre había relajado bastante el ceremonial, si bien nunca dejaron de contribuir a la sinagoga y de apoyar a la comunidad en los momentos necesarios. El día que Enrique informó al viejo Eleazar que se casaría por lo civil con una mujer goy, su padre reclamó indignado. – ¡A la gran chucha!, lo bueno es que vuestra madre no vivió para verlo, mucho le hubiera dolido el alma de pensar en que vino a acabar tanto dolor y privaciones de los nuestros ancestros, tanto llanto contenido mientras se hincaban en las misas o comían cerdo frente a los goyim para no acabar devorados por el fuego y vos olvidás todo y te unís a una de ellos. No te desheredo porque no tengo otro hisho al que darle lo que tengo y porque tampoco te afectaría en nada, tu ganas más dinero que yo. Cada cual hacé su vida hisho mío, la decisión que tomás la respeto aunque me desgarre por dentro. Eres toda la familia que me queda, si te declaro muerto a qué árbol me arrimo. Nada más pido a vos, Enrique, que por HaShem, por vuestra 28
Ima, nunca olvidés cual es vuestro origen. El dolor y el temor en el que vivieron los nuestros abuelos nos obliga a con ellos, nuestras creencias no son una tu chumpa que podés quitarte y colgar en el armario para acordarte de ella sólo cuando llueve. Con los años Enrique y Valentina tuvieron dos hijas, Myriam y Judith, su educación hizo surgir la cuestión religiosa, Enrique le daba vueltas al asunto para evitar conflictos con su esposa, los suegros presionaban para que las bautizaran en una pila de agua bendita y él escuchaba aterrado los comentarios sobre las fastuosas ceremonias y fiestas de primera comunión a las que los señores Pérez Mitre acudían, – Tan hermosa que se veía Clarita Portillo Santacruz con su vestido de blanca seda, su breviario con tapas de marfil y su rosario de perlas perfectas engarzadas en oro. – Comentaba con envidia la suegra. – Si no te conviertes al catolicismo nunca vas a ser aceptado del todo por la alta sociedad guatemalteca Quique, por nuestros buenos oficios te toleran pero no te sueltan prenda; los buenos contratos están con ellos, con los de la Fraternidad Internacional de Hombres de Negocios del Evangelio Completo, para que te inviten a sus fiestas y mejoren tus relaciones necesitas liberarte de tu estigma, ser perdonado por Dios Nuestro Señor. – Le espetaba el suegro cada tanto. En esas ocasiones lanzaba miradas de auxilio a su esposa y ella, no siempre de la mejor manera, marcaba el alto a sus padres o llevaba la charla hacia otros derroteros. Un viernes al atardecer dedos infantiles tocaron a la puerta de su estudio, al abrir se sorprendió al ver a Valentina y a las niñas con la cabeza cubierta con velo y a su padre con la kipá puesta, no preguntó nada, desdobló las mangas de su camisa, se puso el saco, abrió un cajón del armario para buscar una kipá, eligió la de seda blanca y ribetes en dorado, señal de 29
que para él esta era una celebración muy importante, y fue a lavarse las manos. En el comedor Valentina encendió las velas mientras oraba –Shalom aleihem, malahei hasharet…– tuvieron el primer Kabalat Shabat de su vida de casados. A partir de ahí empezaron a participar en pareja en algunas actividades de la comunidad sefardí y a sufrir, en consecuencia, el continuo acoso de las matronas que insistían en que también debían casarse bajo la jupá, esa posibilidad la habían considerado algunas veces, era la misma presión la que los hacía resistirse, estaban a la espera del momento adecuado. Su vida no tenía sobresaltos, el trabajo de Enrique como arquitecto proporcionaba lo suficiente para pasarla sin apremios, había sabido mantenerse lejos de los contratos de obras públicas que igual enriquecían en poco tiempo a sus colegas que los empobrecían con mayor celeridad, era frecuente que la voracidad de los funcionarios del gobierno hiciera quebrar a los constructores; ellos no iban en camino de forjar una gran fortuna pero sus recursos mantenían un nivel prudente. Valentina tenía algunas clases en la universidad, cosía muñecas de trapo y se encargaba de las cuestiones administrativas del despacho de arquitectos de su marido, no quería buscar el tiempo completo académico mientras sus hijas estuvieran pequeñas, conocía de sobra la situación de gran parte de sus compañeras metidas de lleno en la carrera de las ratas en el campus, la acumulación de puntos, el continuo interés por sumar méritos académicos y el cuidarse de empellones y traspiés ocupaba de tal manera sus vidas que la formación de sus hijos había quedado a cargo de los maestros de educación básica y las empleadas domésticas. La mayoría de sus compañeras había sacrificado el amor por la cátedra en aras de la politiquería universitaria, el escalafón 30
como dogma, la titularidad como emblema de pertenencia a la nobleza académica y el decano como sacerdote ungido, apenas un escalón debajo de la suprema autoridad del rector. Ninguna universidad del mundo escapa a esas situaciones. Sobrevivieron los años de la guerra sin nada grave que lamentar, de la misma manera resistían la creciente inseguridad que había provocado la desmovilización cuando se firmó la paz, toda esa gente con armas y sin ocupación fija había terminado por formar grupos de bandoleros que tenían a las comunidades de origen hebreo entre sus víctimas propicias para robos y secuestros. No resultaba extraño que antiguos militares y guerrilleros, enemigos acérrimos durante décadas, ahora fueran socios en negocios criminales con el beneplácito de los gobernantes en turno. Familias judías de Guatemala estaban emigrando a Florida, las señoras de la comunidad comentaban alarmadas en las reuniones que en Miami costaba una fortuna tener empleadas domésticas y el trato no era lo mismo, – Esas cubanas son unas insolentes. – aunque a cambio vivían sin el temor a los raptos y había menos hurtos. Durante el último Seder de Pesaj don Eleazar, en cuyo rostro asomaban las huellas de la edad, les propuso a su hijo y a su nuera. – ¿Y si esta vez hiciéramos realidad el brindis: el año que viene en Jerusalem?, no sentís que necesitamos un cambio, los cinco; las cosas aquí cada día se tornan más violentas, cómo voy decir algún día a las mis nietas “novia que te vea” si los novios se han ido, juyido, como dicen los compadritos. La casamentera nos va a costar la mitad del patrimonio buscando maridos por todo México, Estados Unidos o Canadá y la familia, sin que lo podamos evitar, va a acabar desperdigada, 31
ustedes aquí, una de ellas en Nueva York, otra en Filadelfia o en Toronto, la Misericordia Divina nos brinde su protección, el fin de los Bartomeu. No, no voy a volver a insistir en que tengás otro hisho, eso es asunto zanjado, ustedes saben su vida y no importa el apellido, importamos nosotros, la familia, permanecer unidos hasta que HaShem nos llame a rendir cuentas. Hijos, estoy cansado, la mí espalda se dobla bajo el peso de los años, cada vez que mido otro metro de tela pienso cuántos metros me faltan por medir, el entusiasmo se me ha esfumado, se largó con mi lozanía el infeliz; comienzo a actuar mecánicamente, la rutina vil, ni siquiera me preocupa ahora que tras el primer tijeretazo siga perfecto el corte a todo lo ancho de la tela, eso había sido siempre mi máximo orgullo, vos lo sabés, los cortes impecables, rectos. Me molesta hacer las cosas sin el debido cuidado, sin sentirlas, sin más objeto que el negocio y ni eso; no me alegra igual que antes el sonido de los centavitos de quetzal cayendo en la caja registradora, eso no es justo para este su viejo ni para la mi clientela, perdí el estilo, me sofoco pronto, quiero venderla mi tienda pero si vendo no me queda nada más que hacer aquí. Es posible que en Eretz Israel haya un algo en lo que un anciano decrépito pueda ayudar, quizá haya un algo para ustedes, todos los nuestros se van y ser los últimos yudíos de Guatemala no nos será reconocido como mérito por nadie, no va a quedar nadie para aplaudir nuestra hazaña. Enrique y Valentina cruzaron la mirada atónitos, nunca habían pensado en esa posibilidad, no tenían la menor idea de cómo era Israel, de hecho jamás se habían planteado la posibilidad de abandonar Guatemala y aún dentro de su comunidad era bastante más frecuente refugiarse en Estados 32
Unidos que retornar a Israel. En Guatemala tenían su hermosa casa en Antigua, un búngalo en Atitlán, relativamente cerca del lago, cuando necesitaban quedarse en la Capital estaba la residencia del abuelo en la Zona Cuatro, además de la modesta casa de playa en Puerto San José, en la costa del Pacífico, también de don Eleazar; en términos generales vivían mejor que la media, por lo que no consideraban que hubiera una buena razón para dejar la tierra donde habían nacido. Iban de vacaciones a Florida, a Costa Rica o a Puerto Rico, con relativa frecuencia viajaban a Ciudad de México o a Monterrey por negocios o por compromisos familiares, pero ni por casualidad Israel les había atravesado por la mente, no se explicaban de dónde salía ahora el abuelo con esa loca idea. Después de platicar el asunto entre ellos, medio en broma medio en serio, decidieron empezar por conocer Eretz Israel, la tierra prometida, le propusieron a don Eleazar tomar unas vacaciones para Rosh HaShana. Enorme fue su sorpresa cuando, al investigar, vieron que la extensión de Israel era apenas la quinta parte de Guatemala, ellos que pensaban que vivían en un paisito, esa fue la primera de muchas cosas que les llamarían la atención. Myriam tenía cinco años y Judith tres cuando pusieron pie por primera vez en tierra de la que habían salido sus antepasados tres mil años atrás para asentarse en la península Ibérica, la mítica Sefarad, en la vecindad de las colonias fenicias y griegas. Por recomendación del Rabino Zacarías no tomaron uno de tantos tours que les ofrecían en la agencia de viajes, rentaron un departamento de Herzliya, a unas cuadras de la orilla del Mediterráneo. Alberto Ayadón, un maduro olé 33
argentino, jubilado, se puso a su servicio como guía y conductor con su gastada vagoneta Toyota, símbolo de una de las máximas premisas israelíes: si funciona no lo cambies, que lo mismo aplica a electrodomésticos que a vehículos e incluso a autoridades, algunos alcaldes han sido reelectos en cinco o seis ocasiones. A través de Alberto conocieron a muchos sudamericanos que habían hecho aliyá y por ellos supieron lo que realmente implicaba vivir en Israel, a pesar de que la subsistencia no era fácil todos se sentían orgullosos de haber tomado esa decisión. Anduvieron de Rosh Hanikra a Eilat, de Haifa a las colinas del Golán, de Ashkelon a Ein Gedi, estuvieron en todos los sitios de rigor: Akko, Metula, Megido, Caesarea, Tiberias, Jericó, Masada, el Mar Muerto, Sde Boker, Hebrón. A don Eleazar el viaje le había sentado de maravilla, parecía haber rejuvenecido veinte años. Valentina se veía en aprietos por momentos, no se atrevía a preguntar abiertamente por lugares sagrados para su anterior religión, aun cuando estaba convencida de que su sitio estaba en el judaísmo, sentía curiosidad por conocer los sitios que habían sido sus referentes en la infancia y la adolescencia, su anciano suegro se percató del dilema y como por causalidad mencionaba. – ¿Y si mañana vamos a Betleheim?, no perdemos nada con ver la cueva donde dicen que nació el Rabí Joshua. – ¿Ya que estamos en el norte por qué no visitamos Nazaret? – ¿A vos hija cuál os parece que sea el verdadero sepulcro, el que está al final de la Vía Dolorosa o el que se encuentra fuera de la ciudad amurallada?, quizá sea mejor ir a los dos y nuestras propias conclusiones sacar, que igual ninguno es. Leí qué, un par de años hace de eso, encontraron otra sepultura de 34
un hombre llamado Joshua Ben Joseph, también en Jerusalem, con esa suman tres, es probable que ese nombre fuera bastante común en aquellos años. Un buen día abordaron en Tiberias un barquito de madera para recorrer el lago Kineret, Enrique no pudo evitar comentar con sorna. – Cuando Jesús recorrió el entonces llamado Mar de Galilea, acompañado de los pescadores que conformaban su grey, el barco no podía haber ostentado una cruz, la cruz fue lo último que le sucedió a ese santo hombre en la vida y no nada más a él, cientos de miles fueron crucificados durante siglos para mantener la supremacía del Imperio Romano. La cruz fue asumida como símbolo religioso bastante después del deceso del Rabí, sin embargo estas barcazas que pretenden recrear a las de aquella época tienen una cruz como mástil, eso sin tomar en cuenta que funcionan a motor, lo que hace aún más burdo el montaje; pero eso sí, te venden la idea de recorrer el lago en una barca de pescadores como en los tiempos en que Jesús predicaba por estos rumbos. Alguien está llevando las cosas demasiado lejos con tal de sacarle dinero a los turistas. – Por lo menos tuvieron la precaución de retirar del agua las piedras sobre las que caminó el Rabí. Se burló don Eleazar restándole importancia al comentario de su hijo, mientras volteaba a izquierda y derecha, temía que les hubiera escuchado alguien que hablara castellano. Las niñas estaban felices, corrían y saltaban por todas partes, si acaso a Judith había que cargarla un rato por las tardes porque sus pequeñas piernas no daban más; en cuanto tenían algún momento libre las dos se iban a jugar a alguno de los muchos parques que hay en todas las poblaciones de Israel, la preocupación que sienten en el país 35
por los niños contrasta con el carácter habitualmente hosco de sus habitantes, Sabras al fin, son espinosos por fuera y dulces por dentro. A Enrique le incomodaban una serie de casualidades, parecía que en cada lugar los estuvieran esperando, siempre había un erudito religioso dispuesto a guiarlos, a resolverles sus dudas, a acompañarlos. Con regularidad sucedía que estaba una comida dispuesta con anticipación, aún en lugares de la Iglesia Católica o de la Iglesia Ortodoxa e inclusive en esos sitios lograba percibirse la presencia discreta de tres o cuatro jaredim, era consciente de que les concedían una importancia que ellos no tenían y resultaba notorio que los turistas convencionales no eran objeto de las mismas atenciones. – ¿No estarán conduciéndonos a una trampa? Le preguntó una mañana a Valentina. – ¿Quién y para qué?, sos paranoico Enrique, vos y yo no somos nadie, aún padre no destaca entre la comunidad por su fortuna, es buen comerciante, respetable, pero no es temido, ni odiado, vaya ni siquiera envidiado. Todos saben el trabajo que le ha costado lo poco que tiene, él lo dice en todo momento: a los Bartomeu nos pueden alzar por los tobillos y no obtendrán nada, lo único que nos sacarán de los bolsillos serán unos céntimos de quetzal, nuestro único patrimonio es el trabajo. Es probable que sean amigos del Rabino Zacarías y al atendernos manifiestan el aprecio que le dispensan, a fin de cuentas él fue quien nos puso en contacto con el dueño del piso, con la OLEI y con Alberto, por cierto, ¿viste vos cómo se tensa nuestro querido guía cuando está cerca de los jasidim? – Pobre, esta es una dura prueba para él, un veterano combatiente socialista y ateo teniendo que llevarnos a través 36
de sitios religiosos, únicamente en Sde Boker estuvo a sus anchas, mostrándonos orgulloso la austera vivienda donde vivieron David Ben Gurion y Paula Monbesz y hablando de los ideales sionistas. Su discurso frente a las tumbas en los jardines del mirador fue un derroche de pasión, los ojos se me llenaron de lágrimas, ¿no te parece que todo el país es un inmenso museo, que nuestros anfitriones más que personas son personajes? – No, discúlpeme usted señor Arquitecto Bartomeu pero esta vez no estamos de acuerdo, mi impresión es opuesta, si en algún lugar he logrado sentir la intensidad de la vida es este. La religiosidad extrema de las comunidades ultraortodoxas y el espíritu de colectividad de los sionistas son dos aspectos esenciales del judaísmo, aspectos vigentes, vivos, dos de muchas partes que se complementan, porque ellos son los extremos pero en medio hay una gran variedad de maneras de entender y vivir la fe y la ética de nuestro pueblo y aquí en Israel todas esas formas conviven cada día, se toleran, negocian y por momentos también se confrontan, cierto, pero siempre construyen, trabajan, coinciden en un aspecto esencial: la tierra, la tierra prometida. Me siento orgullosa de ser judía. – Vaya declaración de principios, en el Colegio Monte Sinaí hubieras obtenido sobresaliente, ten cuidado o acabarás convertida en una yiddish Ima, preparando guefilte fish con la receta de la abuela y educando a nuestras hijas para que sepan cómo atender a sus maridos. – Eso quisieras vos, quedar libre del tormento de lavar la loza. – Mi padre está que no cabe de dicha, igual que las niñas, pero no ha vuelto a decir nada de venir a vivir aquí. – Es discreto, no ha pronunciado ni media palabra al respecto 37
pero estuvo indagando en el hotel de retiro en Nahariya, creo que le atrajo la idea de aprender macramé y tener una hora diaria de natación en la pileta. – Sí, recuerdo que lo sorprendí admirando las nalgas de una enfermera rusa. – Vos sos un macho vulgar, no podés negar tu origen chapín. – Cuidado, ahí viene Alberto seguido de nuestros benefactores del día. – Al final verás que no pasó nada, miedoso. Al Muro Occidental acudían una vez por semana, cuando se aproximaba la fecha contemplada para su regreso a Guatemala decidieron realizar la que, pensaban, sería su última vista; al iniciar el día dejaron en el Museo de Jerusalem al abuelo con las niñas, acompañado de Lucy, una pianista bielorrusa, jubilada, guapa, pequeña y vivaracha, que cuidaba niños de cuando en cuando para sentirse activa y permitirse pequeños lujos que estaban fuera del alcance de su menguada pensión. Se quedaron instalados en la hermosa área destinada a los niños, Judith de inmediato se subió a una escultura que representa dos manos unidas, vació arena en la parte superior y bajó corriendo para observar divertida como caía, desde la estrecha separación entre las palmas de las manos, una cascada de minúsculos granos que brillaban al recibir la luz del sol. Mientras tanto Alberto condujo a Valentina y Enrique al Museo Yad Vashem, durante el recorrido por las salas puso especial énfasis en el hecho de que, sin importar que ellos no hubieran perdido a ningún familiar cercano en la tragedia, eran receptores de la atroz afrenta que había significado la Shoá. El delito de millones de personas no fue otro que ser diferentes, no ser arios ni estar de acuerdo con el ideario nazi, 38
porque en los campos de exterminio además de judíos murieron disidentes políticos alemanes, testigos de Jehová, gitanos, homosexuales, discapacitados físicos y mentales, combatientes rusos. – En este sitio – Les mostró la Sala de los Nombres, el impactante archivo cónico excavado en la roca. – existe un cartapacio por cada uno de los nuestros que estuvo en los campos de exterminio durante la Segunda Guerra Mundial, mirá, los diferentes museos de la Shoá en el mundo se preocupan por reunir información fidedigna de todos y cada uno de los seis millones de seres cobardemente asesinados por los miembros de las Waffen SS y sus secuaces, hasta ahora contamos con datos de más de tres millones y medio de personas: pasaportes, acreditaciones, cartas, dibujos, fotografías, setenta y cuatro millones de páginas de información relacionada con el Holocausto. Cada prueba de una existencia que se consigue en uno de los museos es codificada y cargada en todas las bases de datos de inmediato, resulta impresionante la cantidad de información que todavía va apareciendo por aquí y por allá, a más de sesenta años de distancia, muchas veces por casualidad. Como el diario y los dibujos de Petr Ginz que permanecieron guardados dentro de una valija en un ático de Praga, hasta que ocurrió aquella desgracia de la nave espacial Columbia que se desintegró al entrar en la atmósfera, en el 2003 si la memoria no me falla. Entre los tripulantes de la nave estaba Ilán Ramón, el primer astronauta israelí, él había pedido a los administradores de este museo, de aquí donde estamos ahora, algo significativo para llevar a su viaje por el espacio exterior, ellos le proporcionaron la copia de un dibujo a lápiz de un paisaje lunar realizado por Petr, un chiquillo que devoraba las obras 39
de Julio Verne y que murió en Auschwitz con tan sólo dieciséis años. Al ocurrir el accidente y salir en televisión la ilustración que llevaba el astronauta, Jiri Ruzicka, un residente de Praga, recordó que tenía guardados unos dibujos parecidos en su desván, al revisar entre esos papeles encontró también el diario que el muchacho había escrito, ahora todo eso está aquí, además de que el diario fue publicado en varios idiomas por Chava Ginz, la hermana de Petr, ella logró sobrevivir y vive aún, en un pequeño poblado cerca de Beersheva, he platicado con ella un par de veces. En la medida en que preservemos el recuerdo de esos seis millones de tragedias personales mantendremos viva la memoria colectiva. Conservaremos la puerta abierta para que más y más información sea localizada, no puedo entender por qué no hacen esto mismo los rusos, los alemanes, los polacos, los franceses, los gitanos, recuperar la identidad de sus muertos es la mejor forma de prevención contra el olvido, recordar es una forma de evitar que la historia se repita. Documentar, para que locos de atar, como el Mahmud Ahmadinejad ese, no osen negar o minimizar los hechos, porque el nazismo ahí sigue con los skinheads en todas las barriadas europeas, con el odio a los emigrantes, con la semilla de los viejos SS en los ejércitos sudamericanos, les aseguro que no es coincidencia que el mayor número de desaparecidos durante los años sangrientos de la Operación Cóndor haya sido de judíos argentinos. Mirá que vosotros, los sefardíes, deberíais hacer lo mismo con las víctimas de la Inquisición Española, esos ilustrísimos hijos de su pérfida progenitora, aunque de seguro muy ferviente. Estáis obligados a recuperar los datos de todos los torturados y asesinados en nombre de su Iglesia, esa que según ellos es 40
“Una, Católica, Apostólica y Romana”, una, sólo una, la verdadera, la de ellos. Qué cara dura tienen, cómo pueden atreverse a decir tamaña barbaridad, su retórica es tan trasnochada, tan pobre y maniquea, que equivale a la de los fanáticos del Islam que afirman que Alá es uno y Mahoma su profeta, la concha de su tía, acaso es tan difícil entender que cada cual tiene derecho a creer en lo que quiera y que el resto del mundo viva en paz. Es importante registrar los hechos, porque, ¿viste?, en el caso concreto de los inquisidores y las otras tantas lindezas de la época de la Colonia, los españoles han resultado muy olvidadizos. De pronto han dejado en el pasado el daño que causaron a los pueblos indígenas de América, a los judíos que llevaban más de dos mil quinientos años asentados en la península Ibérica y también a los árabes que estuvieron ahí por más de siete siglos, que se dicen fácil. A los gachupines les resulta cómodo olvidar, dejar que el agua pase bajo el puente, pero eso sí, se llenan la boca para acusarnos de ocupar los territorios palestinos, ¿de qué ocupación hablan esos atorrantes?, ¿cómo vamos a ocupar un país que no existe y que jamás existió en el pasado?, ¿captás? Ellos se ocuparon medio mundo y lo sangraron, vaya que si lo sangraron, no hay agua que alcance para lavar tanta sangre. Durante tres siglos cargaron con todo lo que encontraron a su paso y asesinaron al que se les puso enfrente y ahora sin ningún remordimiento se erigen en nuestros jueces y se pasean orondos por Las Ramblas con la kuffiyah al cuello, ese pañuelo terminará por ahorcarlos, amnésicos e ignorantes van rumbo al matadero, espero no vivir para ver a las niñas españolas con la burkha, arrastrando la mirada gacha por las calles. 41
Perdón por la rabia, pero me parece inconcebible que España sea el país con mayor antisemitismo en todo Europa, su cinismo me reta, para ellos yo soy objeto de discriminación por partida triple, por ser viejo, por ser judío y por ser sudaca. Muy diplomáticos eso sí, se disculparon por expulsar a un pueblo que llevaba siglos en la península Ibérica, se disculparon por sus abusos en América, ¿y el parné?, ¿dónde quedó la pasta que se embolsaron?, ¿y la de gallegos que nos dejaron allá?, ¿y los recursos que todavía nos exprimen con sus petroleras, sus bancos y sus telefónicas?, a pesar de la rabia que me provocan no les deseo ningún mal, pero no comprendo su ceguera, no me cabe en la cabeza que no sepan reconocer quién es su enemigo. Mientras andan encandilados con las supuestas inversiones de los emiratos, el Islam repta al acecho para recuperar Al Andaluz, lo del once de marzo fue la primera advertencia. Después del almuerzo se dirigieron juntos al Kotel, Valentina, Myriam y Judith, con las cabezas cubiertas, entraron a la sección de mujeres acompañadas por Jaia, joven esposa del Rabino Oheb Montefiore, de la Yeshivá Mercaz HaTalmud Torá; Enrique, Eleazar, Alberto y el Rabino entraron a la sección más amplia, la destinada a los hombres. En la zona femenina había un pequeño jaleo, maduras mujeres jaredim discutían con un grupo de rabinas reformistas que trataban de orar con el talit gadól sobre la cabeza y el tefilín colocado en la frente y el brazo izquierdo, en el área abierta, las ultraortodoxas insistían en que utilizaran el espacio reservado, a lo que finalmente accedieron las rabinas, como siempre. – Es parte del ritual – le explicó Jaia a Valentina – para nosotros las mujeres no deben ser rabinas ni utilizar talit ni 42
filacterias, si ellas consideran que pueden hacerlo está bien, lo que les pedimos es que no lo hagan en público por respeto a nuestras creencias y las de otros sectores judaicos, sin embargo ellas insisten en hacerlo abiertamente y así seguirán. A fin de cuentas son judías y la terquedad es una de nuestras características, el problema es que no saldrá nada bueno de confrontar terquedad contra terquedad. Oheb me ha dicho que HaShem, en Su Sabiduría Infinita, nos bendice dándonos enemigos para que no nos destrocemos entre nosotros mismos, quizá tenga razón… ¿Por qué me ves así Valentina, dije algo que te molestara? – No Jaia, discúlpame, pero no me parecía que vos fueras una mujer sumisa. – No lo soy, no lo somos las mujeres religiosas, nadie nos obliga a vestirnos así y si aceptamos quedarnos en casa es porque consideramos que es mejor para la familia el que exista una distribución de responsabilidades. Observa lo que ocurre en muchas familias reformistas, el hombre y la mujer trabajan y entonces la educación de los hijos queda a cargo de la televisión, se supone que quieren brindarles a sus niños mejores condiciones de vida pero únicamente consiguen darles más dinero a cambio de casi nada de atención, para qué entonces traerlos al mundo, los niños necesitan del amor de sus padres. No pretendemos imponer nuestra razón, respetamos la decisión de cada cual, nosotras consideramos la maternidad un privilegio y vivimos sin televisores ni aparatos costosos porque esas cosas producen insatisfacción, la austeridad y la dedicación son nuestra forma de realización. A las que consideraban opresivo nuestro ambiente las hemos visto marcharse, algunas se instalaron a menos de dos cuadras de Mea Sharim, con eso es suficiente para librarse de nuestras 43
“cadenas”, no hay resentimientos, aunque es inevitable que los lazos de convivencia se desgasten, ninguna cuerda resiste demasiada tensión. No es fácil hablar de esto. – Lo sé, estoy consciente de que en muchos casos ocurre como vos cuentas, pero en otros, hombre y mujer comparten la responsabilidad en la educación de los hijos y pueden atenderlos sin tener que renunciar a desarrollarse en su profesión. Eso no significa que critique vuestra forma de vida, me parece bien siempre que sea asumido como una opción, a fin de cuentas hay muchas maneras de afrontar la existencia. – Por supuesto, además ninguna de las manifestaciones del judaísmo es proselitista, nosotros no pretendemos convencer a nadie de que adopte nuestras costumbres, sin embargo nos negamos a que pretendan cambiarlas desde fuera; nuestras convicciones se nutren en la energía que brota de este Muro, pueden considerarlas arcaicas, nosotros estamos convencidos de que son sólidas. Jaia sonrió a Valentina y a las niñas. –Todas las opciones son respetables, te agradezco que nos hayas compartido vuestro punto de vista, ¿Te parece bien si nos acercamos al Muro para orar?, las niñas quieren dejar un papelito, aunque se niegan a develarme su contenido, es algo secreto. Enrique se colocó la colorida kipá que había comprado una semana antes a un anciano artesano en la escalinata que conecta la explanada del Muro Occidental con el barrio judío de la ciudad antigua, en el tejido estaba primorosamente plasmada la urbe amurallada, un trabajo grácil y delicado, digno de estar en la vitrina de la casa en Guatemala pero no del todo correcto para ir a orar en compañía de un religioso; al notar la mirada de desaprobación del Rabino, Alberto se le 44
acercó con una sobria kipá de terciopelo negro y le sugirió que guardara la otra. Desde que se lavaban las manos con las jarras, en la explanada, Enrique tuvo la sensación de que algo extraño le ocurría, entró en una especie de trance cuando colocó la frente y las palmas de las manos en las piedras de los restos del Templo que mandó a construir el Rey Herodes sobre los sillares del Templo reconstruido por los judíos que volvieron de Babilonia, quienes a su vez lo habían hecho sobre las ruinas del primer Templo erigido por el Rey Salomón. En cada una de las visitas anteriores había sentido la atracción de esas moles, involuntarias protagonistas de una historia milenaria, no dejaba de sorprenderle la permanencia de su gente a pesar de siglos de penurias y del tremendo esfuerzo que ha significado mantener vigente la cultura de un pueblo que durante casi mil ochocientos años fue considerado extranjero en su propia tierra; sabía que mucha de esa fuerza emanaba de la religiosidad, aunque al final se imponía siempre su carácter racionalista, inquisitivo y laico. Un par de días atrás un académico de la Universidad Hebrea de Jerusalem le había planteado sus sentimientos de culpa, –…un árabe te puede mostrar donde vivían sus antepasados hace doscientos años, nosotros qué respuesta podemos dar…– pensaba en eso mientras percibía la frescura de las piedras en la frente y las manos, cómo es posible, se preguntaba mentalmente, que un profesor que vive en Jerusalem no se dé cuenta de lo que les puede contestar, nuestros antepasados vivían aquí hace cuatro mil años, no hace doscientos; dos mil seiscientos años antes de la existencia del Islam había judíos en esta tierra y siguió habiéndolos a pesar del exilio en Egipto y en Babilonia y de las diásporas 45
romanas, numerosas familias judías han permanecido aquí por siempre a pesar de los pogromos de árabes, cruzados y otomanos. Hubo años de esplendor bajo la protección de sultanes turcos que tuvieron aprecio por el “pueblo del libro”, también cada tanto resurgían las persecuciones, pero nunca dejó de haber judíos en la tierra de Israel, caminando tranquilos por las calles y caminos de Judea, Galilea y Samaria durante las épocas de tolerancia u ocultos en cuevas en medio del desierto en épocas de oscurantismo, nunca, desde la llegada de Abraham, la tierra de Israel ha dejado de ser sembrada por manos judías, está probado que a mediados del siglo XIX, todavía en la plenitud del dominio turco, los judíos eran la población mayoritaria de Jerusalem. El debate interior fue cediendo lugar al vacío, un vano que lejos de provocarle angustia le agradaba, perdió la noción del tiempo mientras estuvo ahí sumido en ese profundo letargo, una sensación de calma invadía sus sentidos, el análisis había cedido ante la nada, el bienestar que le producía ese espacio en blanco, la purificación, el Aleph. Cuando recuperó la conciencia estuvo más de diez minutos sin moverse, seguía de pie, a medio metro del Muro pero ahora dándole la espalda, miraba hacia el frente sin entender con exactitud que ocurría, una leve sonrisa asomó en sus labios, destilaba felicidad por los poros. Con lentitud empezó a recordar donde estaba, notó entonces la ausencia de sus acompañantes y buscó alrededor, no vio a su padre ni al Rabino ni a Alberto, salió a la explanada casi corriendo, tampoco encontró a Valentina ni a sus hijas, empezaba a desesperarse cuando se le acercó un niño jaredí, de unos diez años, que lucía largos peyot castaños, rizados, portaba lentes de montura de pasta y vestía un extraño pantalón que llegaba 46
apenas debajo de la rodilla, largas medias, un impecable caftán encima del chaleco y la camisa, en la cabeza un amplio biber hit que le cubría la kipá y buena parte de la frente, todo en negro, en un día en que la temperatura alcanzaba los cuarenta y dos grados, uno de los últimos calores con los que el verano cedía el paso al otoño, Enrique pensó al verlo, que tenía suerte de no tener que utilizar aún el talit katán, por lo menos hasta hacer el Bar Mitzvá o hasta que contraiga matrimonio, eso depende de la corriente religiosa a la que pertenezca. El pequeño lo abordó mirándolo de manera imprudente a través de los gruesos cristales de sus gafas y le dijo en perfecto castellano. – Señor Zvi Bartomeu, ¿puede acompañarme por favor? – Zv… ya, sí, mi nombre en hebreo. Sí, soy yo. ¿A dónde quieres que te acompañe ishto? – Al lugar donde vivirá una de las más intensas experiencias de su vida. – ¿Y esa cuál es ishto? – ¿Qué es ishto? – Niño, en mi país así decimos a los niños, pero usted me intriga ishto, dígame, quién lo envió, de qué experiencia habla. – La del matrimonio. – ¿Quién se casa ishto? – Usted y me llamo Amos. – Pues déjeme decirle Amos que anda usted errado, en una de esas me confundió con otro Bartomeu, yo ya estoy casado y con una mujer maravillosa. – Pero no ante quien nos brinda su protección eterna. – Que bien enterado está usted, pues sí, no nos hemos casado bajo el palio. ¿Y usted? Acaso no puede decir la palabra Dios. – Zvi, usted sabe que somos insignificantes ante su grandeza, 47
podemos hablar con HaShem pero no debemos hablar de HaShem, somos indignos de pronunciar su Santo Nombre, el cumplir con esta pequeña norma es una de las maneras de manifestarle nuestro agradecimiento por permitirnos despertar cada amanecer. – Sí, sí Amos, no vaya ahora a darme ahora un repaso del Vayikrá, sé de sobra que merezco ser lapidado por mi manía de afeitarme el rostro cada mañana, pero nunca me he acostumbrado a la barba. ¿Y qué es eso del matrimonio del que me habla, tampoco me puede decir de qué se trata? – Ya casi llegamos. Contestó Amos secamente, resultó evidente que no le gustaban las bromas en torno a los asuntos religiosos. Enrique Bartomeu no sabía qué pensar de lo que ocurría, o ese niño estaba loco y él era más loco al seguirlo o había una confusión, pero… ¿Dónde estaban Valentina, las niñas y los demás? Entraron a una añosa casa del barrio judío de la ciudad vieja de Jerusalem, tras una pequeña puerta, casi oculta en medio de un grueso muro de piedra, se abrió como por arte de magia un cuadrángulo amplio y agradable, con un cuidado jardín interior, pletórico de verdes y de encendidas anémonas azules, rojas y violáceas, en el centro los restos de columnas romanas establecían un curioso contraste con los arcos medievales del corredor, testimonio de dos de las muchas ocupaciones que había sufrido la antigua ciudad de los jebuseos. Bajo un palio adornado con narcisos lo esperaba Valentina, escoltada por Myriam y Judith, las tres vestían de blanco, la ropa era de una sencillez exquisita y era evidente que estaba hecha a su medida; el diseño del vestido de Valentina resultaba bastante provocador, a pesar de que en 48
realidad no mostraba nada, tan sólo lo sugería, la cubría del cuello hasta la punta de los zapatos, el velo aumentaba el volumen de su cabeza y resaltaba su belleza. Se detuvo sorprendido, pensó que estaba en medio de un sueño, sólo entonces se percató de que su aspecto estaba fuera de lugar, rodeado de medio centenar de personas vestidas con pulcritud y elegancia, casi todas en tonos oscuros, él desentonaba con su atuendo de paseante: pantalón caqui con bolsas en las piernas, polo azul con marcas de sudor, una pequeña mochila de lona colgada al hombro, botines de excursión, de lona con suela de goma, si hubiera estado desnudo no se hubiera sentido más intimidado; antes de que pudiera decir nada un anciano de larga barba blanca, con el talit gadól sobre la cabeza y los hombros, le tomó del antebrazo y le dijo casi en un susurro. – Zvi, tenemos que hablar unos minutos antes de pasar a la ceremonia, seré breve. Perplejo, se dejó conducir dócilmente a una pequeña habitación, se sentaron en una rústica banca de madera en la semipenumbra, el anciano le habló en un tono apenas más alto que un susurro. – Hijo, tú crees que todo esto es una trampa, pero no es así, el Santo, Bendito sea su Nombre, en su inmensa sabiduría te ha designado para una importante tarea, ese es el aviso que recibiste hoy en Kotel Hama’aravi, pero antes de hacer lo que te será encomendado es necesario que ustedes purifiquen su unión, que la consagren como es debido bajo la Jupá, deben ser bendecidos por el Poder Eterno para alcanzar la dignidad que les será conferida. Como sabemos que se marcharán pronto de regreso a su país hemos tenido que actuar hoy, precipitadamente en apariencia, en realidad teníamos todo 49
preparado desde el día que arribaron. Ocurre que queríamos que fuera una sorpresa para ustedes, por eso tuvimos que mantenerlo en reserva; eso es lo lindo de las sorpresas, lo inesperado, si se revelan antes de tiempo se diluye toda la emoción, espero que sabrás disculpar nuestro atrevimiento y que no te negarás a cumplir con lo que te ha sido asignado ni a casarte religiosamente con la mujer que amas. – Hubiera sido un magnifico detalle de su parte que nos preguntaran nuestro parecer, caramba, no sé qué pensar, la boda, es nuestra boda no de ustedes, por qué no nos tomaron en cuenta, además me viene con lo de una designación divina, discúlpeme Rabino pero me parece absurdo, al menos resulta anacrónico, cómo creer que este tipo de cosas ocurren todavía, estamos en el siglo XXI y usted quiere que crea que el mar se abrirá de nuevo. Qué tipo de misión me será encomendada, Rabino, no quiero ofenderlo, usted me parece un hombre bien intencionado, pero así de súbito boda, encomienda, podría habernos dosificado las cosas, no sé, un día la boda, otro el asunto ese que no acabo de entender, o viceversa, mire, me ha colocado usted entre la espada y el abismo. Valentina está allá afuera con las niñas, vestidas de blanco, resplandecientes, bellísimas… bueno bellas son de cualquier manera pero esas ropas las resaltan, las tres se ven emocionadas, mi padre igual, vestido con toda propiedad y yo aquí con usted, hecho un guiñapo y sin entender nada. Resulta evidente que no puedo decirle a Valentina y las niñas cámbiense y vámonos, su aspecto es tan radiante, supongo que al aceptar la boda también me comprometo con el encarguito ese, vaya el asunto que… – El asunto que te acaba de ser notificado y que aún no logras decodificar, de asimilar, las señales de Quien Todo lo Puede 50
no siempre son literales, tenemos que asumirlas, imbuirnos en ellas, comprender cómo tenemos que actuar; no podemos negarnos a cumplirlas, no está en nuestras manos, quiénes somos nosotros para oponernos a los designios del Creador de todo lo que vemos y disfrutamos, así ha sido desde el principio de los tiempos. Los milagros ocurren en cualquier momento, en todas las épocas, no siempre son tan espectaculares como cuando Moisés abrió el mar al levantar su cayado y tampoco están la totalidad registrados en los libros sagrados, pero suceden, provienen del Poder Absoluto, Elohim, Yahvé, Adonai, el Santo Bendito, HaShem, Dios… espero no haber invocado su nombre en vano, debes entender de dónde proviene todo. Maimónides, el gran filósofo, lo explicó con claridad hará unos ochocientos años, “Cuando el hombre contempla Sus obras y creaciones grandes y maravillosas, vislumbrando por medio de ellas Su sabiduría inconmensurable e infinita, de inmediato lo ama, lo alaba y lo glorifica y es presa de un inmenso anhelo por conocer su Gran Nombre”. En cuanto a lo que te espera no tengo idea de su naturaleza concreta, tampoco te ha sido comunicado todavía, lo que hoy recibiste fue únicamente el aviso de que debías prepararte, cuando llegue el momento el resto te será revelado, a ti directamente. – ¿Valentina estaba de acuerdo con ustedes para este viaje, está de acuerdo con la boda?, es probable que quisiera que estuvieran sus padres, ¿mi padre lo sabía? – Ellos lo supieron una hora antes que tú, tu larga oración, tu revelación, nos permitió prepararlos, creyeron como debes creer tú ahora, no en mí sino en el Poder Supremo. En cuanto a lo de tus suegros, me parece que a ellos no les emocionaría 51
una boda judía, bastante les pesa que Valentina se haya reconvertido, es recordarles que sus antepasados, obligados por las circunstancias, abandonaron la fe de Abraham y de Moisés y se sometieron al yugo del cristianismo, digo esto no porque el cristianismo resulte perjudicial en sí mismo sino porque las cosas impuestas se viven como afrenta. Sí Zvi, ella también, como miles de católicos, como miles de cristianos ortodoxos y de musulmanes, tiene origen hebreo; es una paradoja que las religiones que surgieron de las prédicas de un rabino judío hayan obligado a abandonar su fe a quienes la compartían con el hombre que adoptaron como guía espiritual, cómo pueden adorar a un judío y odiar al resto, se equivocan por partida doble, tan erróneo es su antisemitismo como su idolatría hacia un ser humano, únicamente al Ser Supremo debemos rendir pleitesía y siempre desde la razón y el espíritu, la fe no debe cegar sino iluminar. Lo mismo, con diferente matiz, ocurrió con la religión surgida de un pastor judío, árabe de La Medina, quien desconoció a sus correligionarios cuando no aceptaron la refundación que sus devaneos de iluminado le dictaban; cómo no estuvieron de acuerdo con su manera de vivir la fe mandó a asesinar a miles de islamitas, árabes judíos, singular manera de predicar con la cimitarra tenía el Profeta. No obstante que el origen de la fe cristiana y de la islámica está en el judaísmo, ministros de ambas religiones han obligado durante siglos a muchos judíos a convertirse, como si las creencias pudieran implantarse; lo que le sucedió a la familia de Valentina es que con los años ellos olvidaron donde habían ocultado su Menorá y les pesa, ella es una bnei anusim, por eso se ha adaptado sin dificultad, porque no se convirtió a una religión diferente a la de su origen sino que retornó a la religión de sus ancestros, nuestras 52
creencias siempre han fluido por sus venas. En cuanto a la misión para la que fuiste señalado, cuando mi entrañable amigo el Rabino Zacarías me escribió y me pidió que lo ayudáramos para que ustedes tuvieran un viaje placentero, de inmediato nos fue revelado que tú eras la persona designada, no te voy a aburrir con la descripción de todo el periplo que nos llevó a descubrir que tú eres aquel por el que hemos estado esperando durante estos años, no tenemos ninguna duda de tu identidad, meses de oraciones y ayunos se ven compensados ahora. – ¿Designado para qué, qué tan grande es lo que se supone de debo hacer? – No te asustes, no eres El Mesías, HaShem me perdone el exabrupto, tampoco eres un profeta y confiemos en que la Todopoderosa Presencia no permita que llegues a creerte uno de ellos en algún momento; a bastantes lunáticos que se han hecho pasar por profetas hemos sufrido a lo largo de los tiempos. No, no, tu misión no es de esas dimensiones, es importante, por supuesto, es muy importante, pero no es la más importante, tu trabajo es uno más de los que preparan el camino, lo que tienes que hacer es vital para el pueblo de Abraham, tú pueblo, nuestro pueblo, pero de momento no puedo decirte más porque no lo sé. No, no pongas esa cara por favor, qué más quisiera que tener todas las respuestas, no soy más que un humilde rabí, ignoro demasiadas cosas, esa es la razón por la que estoy obligado a estudiar todos los días a todas horas, a pesar de que tengo la absoluta certeza de que nunca alcanzaré a saber la millonésima parte de lo que debería y de que no tendré jamás la posibilidad de entender los designios del Ser Supremo; estoy obligado a aceptar que todo tiene una lógica, pero es una lógica universal, Divina, superior 53
a nuestra capacidad de discernir, ¿quiénes somos nosotros para aceptar, rechazar o cuestionar las decisiones del Creador?, nadie, somos apenas organismos un poco más evolucionados que una cucaracha y habrá científicos que me rebatan que ni siquiera eso. ¿Por qué fuiste elegido?, no tengo idea, ¿para qué fuiste elegido?, ¿tú lo sabes Zvi?, yo tampoco. Debes ser paciente, en unos días o semanas cuando estés a miles de kilómetros de aquí descubrirás cuál es la causa que tenemos que emprender y nos lo harás saber, la información vendrá de ti a nosotros, en esa dirección, eres tú el señalado para indicarnos el camino, tú sabrás qué o cómo cuando llegue el momento, por lo pronto debe bastarte saber que eres alguien especial para tu pueblo, el pueblo elegido. Enrique respiró profundo, cerró los ojos, descansó los brazos y volvió a preguntar. – ¿Será un sueño, tendré una revelación, cómo ocurrirá?, deme una pista por lo menos. – Cómo saberlo, puedes ir descartando las espectaculares apariciones de arcángeles a vírgenes embarazadas, los éxtasis místicos donde te invade la presencia de una mujer hermosa rodeada de destellos que solicita que le construyan un templo para adorarla y cubrirla de joyas o la entrega de planchas de oro por ángeles de dorados cabellos. A los judíos no nos ocurren esas cosas, generalmente las señales nos llegan de manera humilde, simple, recuerda que a nuestro buen Moisés una cabra perdida lo condujo a la Divina Presencia, ¿se te ocurre algo menos espectacular que eso?, sin embargo fue suficiente para que creyera y aceptara la alta responsabilidad de liberar a los suyos de la esclavitud en Egipto. Podría ser un sueño, como el de Jacob en Betel, quién no dudó ni un segundo del regalo que el Ser Supremo le otorgaba, nada más 54
roguemos para que tu sueño no vaya a ser en arameo, que en buen lío estarías entonces para traducirlo. No, no te preocupes, te aseguro que tú tampoco tendrás dudas cuando llegue el momento. – ¿Y cómo se lo haré saber cuándo ocurra, usted será informado de forma simultánea, de manera inconsciente le enviaré un mensaje telepático, le será revelado en un trance hipnótico, volarán a través del Atlántico y del Mediterráneo palomas mensajeras o un ángel le traerá el aviso? – No, por favor, entiende, – contestó el Rabino haciendo caso omiso del sarcasmo – el mensaje te llegará a ti, insisto, a nadie más que a ti, si HaShem me lo quisiera decir a mí para qué estaría yo ahora aquí contigo, sería una absurda pérdida de tiempo, no, tú eres el favorecido para recibir el mensaje de lo que tenemos que hacer y no me obligues a preguntarme por qué te eligió a ti que vives en un país del que nunca había escuchado hablar y no a un cabalista de Safed o a una mujer hermosa, como, quién podría ser, la modelo Bar Refaelli acaso, no, yo no soy nadie para cuestionar Sus decisiones, HaShem tendrá sus razones para encomendarte esta tarea. Por lo demás, en cuanto sepas qué tenemos que llevar a cabo utiliza el mismo medio que el Rabino Zacarías, envíame un e-mail o contáctame por Skype, es más rápido; desde que existen UPS y la Internet el Santo, bendito sea, en su infinita sabiduría le ha asignado a los ángeles misiones que nada tienen que ver con la mensajería y que yo sepa ningún rabino practica la telepatía. Siempre es posible, como están las cosas, que ande por ahí algún rabí mesiánico con esos dones, HaShem lo perdone y lo colme de bendiciones; en cuanto a la hipnosis, tampoco, le temo mucho a ese tipo de prácticas, hace unos meses el Ministerio de Salud solicitó a los psicoterapeutas que 55
no utilizaran el hipnotismo para indagar sobre las vidas pasadas de sus pacientes porque en ocasiones se abren puertas que es difícil volver a cerrar, me parece muy bien, imagínate si llego a descubrir que en una vida anterior fui un inquisidor dominico que enviaba a los judíos a la hoguera o un soldado del Zar que participaba en un pogromo o, peor aún, un fraile guerrero de las cruzadas, uno de esos caballeros templarios que para mayor gloria del Creador atravesaban con su espada a musulmanes y judíos por igual, no por favor, ¿a quién se le habrá ocurrido eso de que tuvimos otra vida?, seguramente a alguien que no tenía en que ocupar su tiempo. Ahora relájate, tus temores son fundados pero debes afrontar esta nueva situación con valentía y con fe, con la fe como tú la entiendes, no pretendemos que te transformes en uno de nosotros, respetamos tu manera de vivir el judaísmo y esperamos el mismo respeto hacia nosotros de tu parte, sea cual sea la misión que te espera y que nos espera a nosotros contigo. No te impondremos cargas adicionales y trataremos de que tu vida y la de tu familia se altere lo menos posible, por otra parte ya es tarde para ti, si no estás acostumbrado al bekishe desde la infancia lo llevarías de mal modo, lo portarías como algo ajeno, como vestir un tuxedo rentado. Te hago énfasis en qué, por favor, tomes en cuenta que esta no es una decisión nuestra, ni tuya, es un designio, algo a lo que tenemos que someternos y que, sobre todo, tenemos que agradecer, la oportunidad de servir al Creador Supremo y de contribuir a la causa de Israel es una gran mitzvá. Mientras tanto continuemos con lo que hay que resolver hoy, lo inmediato, Moshé Amato, uno de mis alumnos, te acompañará a una habitación para que te refresques un poco y te pongas el traje que tenemos listo para ti, no es un caftán, es 56
un traje apropiado para una ceremonia, lo podrás vestir en otras ocasiones sin tener que modificarlo. Está hecho de la seda más suave que se puede encontrar, el corte es impecable, fue confeccionado aquí en este barrio por uno de los miembros de nuestro admor, un maestro cortador de la escuela antigua, verás que estas prendas tienen una caída tan buena como la de un Armani y en condiciones normales hubiera sido igual de costoso. Quita esa cara de susto, lo conseguimos a muy buen precio y ya está pagado, cuando quieras comprar algo déjalo en mis manos, mi infancia transcurrió en Esmirna de la yeshivá al shuk y no hay quien me gane en el regateo, bueno, continuemos, no me permitas perderme en el océano de las divagaciones porque no concluimos nunca. Esa kipá que traes va bien, aquí tienes un biber hit que te mantendrá fresco como agua del manantial, un talit gadól y un talit katán, ambos de lana pura tejida en un telar de madera de un taller que existe hace treinta y dos generaciones, si sientes que te abruma tanta tela es suficiente con que utilices el talit gadól, y los anillos, observa que hermoso trabajo. Todo es un obsequio de nuestra comunidad, al igual que la ceremonia y la fiesta, por favor actúa como buen judío y ponte feliz, no nada más vas a casarte con una mujer hermosa que es madre de tus hijas, también te vas a ahorrar una buena cantidad de shekels, no tienes que desembolsar nada, ni las flores, ni las viandas, ni el vino, vaya ni siquiera mis honorarios, sólo eso a mí me haría bailar de felicidad. Los anillos eran una obra maestra de orfebrería, se midió el suyo en el dedo anular, la medida era exacta, el traje y la camisa de algodón egipcio, cultivado en Israel, también eran de su talla, al igual que los zapatos, acostumbrado a usar 57
mocasines batalló un poco para atar los cordeles, entró a la ceremonia con la seguridad de que el anillo de Valentina entraría en su dedo sin problemas. Ese fue su primer encuentro con el Rabino Nathaniel Baruch, la sorpresa incluyó un viaje de bodas, un viaje dentro del viaje, en el que el abuelo y las hijas trataron de hacerse invisibles para que tuvieran la mayor privacidad posible, dos semanas después regresaron a Guatemala sin don Eleazar, quien al final no se decidió por la residencia de retiro de Nahariya, compartir con Lucy el cuidado de sus nietas puso al descubierto sus afinidades, a él le surgieron deseos de aprender yiddish y ella quería estudiar las diferencias entre el castellano actual y el ladino, – Hablas como personaje de El Quijote. – le comentó a don Eleazar nada más conocerlo; la casa de ella le pareció pequeña al viejo comerciante al principio, sobre todo comparada con su casona al otro lado del mundo, pero pronto se dio cuenta de que ahí cabían perfectamente ellos dos, de momento era todo lo que necesitaban. – Los esperamos para Janucá – les dijeron don Eleazar y Lucy como despedida en el aeropuerto David Ben Gurion en Lod, Enrique aún estaba aturdido por los acontecimientos, él, casi ateo, ahora resultaba mensajero de Dios y estaba en tratos con una de las ramas más rigurosas del judaísmo religioso, al tomar su lugar en el avión notó que en la fila de al lado viajaban cuatro hombres con atuendo jaredim, – Espero que no sean mis guardaespaldas. – pensó. En cuanto las niñas se durmieron Valentina le preguntó. – ¿Vos te arrepentís de haberte casado conmigo? – No, ni ahora ni hace nueve años, pero tienes que reconocer 58
que esto es difícil de digerir, fue una auténtica sorpresa. – Si, lo fue para ambos o sigues pensando que me comploté con el Rabino para tenderte una trampa, ya éramos un matrimonio y no nos hacía falta confirmarlo bajo la jupá, aunque confieso que ni en sueños me había imaginado una boda tan hermosa, una comida tan deliciosa y la música, ah, la música, creo me voy a volver fanática de la música klezmer. – Mientras no te conviertas en fanática religiosa. – Hey, hey amiguito, el mensajero divino sos vos, yo aparezco en esta historia únicamente como la acompañante del héroe, mi papel, si alguna candela tengo en este funeral, se equipara al de Luisa Lane al lado de Superman. – No te burles, aún no se si esto es una broma. – No creo que destinen tanto dinero a bromas, para empezar acordate que compramos boletos de clase turista y desde que tomamos el avión en Guatemala resultó que no se explicaban el error y nos pasaron a primera clase, en Israel no pagamos ni siquiera el departamento. Alberto no aceptó ningún dinero y al final estuvo de acuerdo en que le obsequiáramos nuestro telefonito nada más porque el suyo no tenía cámara y la idea de poder andar mostrando las fotos de sus nietos lo enloqueció, y ahora… ahora quién sabe que sigue, ¿Has pensado vos cuál va a ser el precio de todo esto? – Alto, muy alto, nada es gratis en esta vida. ¿Qué compraste de recuerdo a mi suegra? – Me pidió un poco de tierra de Tierra Santa y agua del río Jordán. – ¿Pagaste por esa tierra y agua del charco que venden las tiendas de suvenires? – No, qué vos piensas, llené un frasquito con agua del grifo y tomé tierra del jardín del edificio en una bolsa Ziplock, toda el 59
agua de Israel proviene del río Jordán y todo Israel es Tierra Santa, qué más da, el problema hubiera sido si me pide una astilla de la cruz. – Creo que todavía las venden, en alguna tienda del shuk seguro tendrán, aunque si juntáramos todas las astillas que se han vendido durante los últimos siglos nos toparíamos con que la cruz era del tamaño de una secuoya. Siete semanas después del retorno a Guatemala, Enrique empezó a cambiar sus hábitos, delegaba la supervisión de las construcciones más de lo habitual, se encerraba en el estudio a escribir durante horas en la laptop; Valentina lo observaba preocupada aunque, como siempre, respetaba esos cambios repentinos, generalmente formaban parte del proceso creativo al estar dedicado a una nueva idea. Lo raro es que Enrique siempre bocetaba a mano e incluso prefería trazar en la mesa de dibujo y trasladaba todo al programa en la computadora hasta que tenía la idea precisa del desarrollo estructural, además ahora se escuchaba el apagado sonido de los dedos sobre las teclas con demasiada frecuencia, eso no era lo usual en sus proyectos arquitectónicos. Por parte de Valentina la rutina no era fácil, supervisar las tareas de la casa, coordinar los horarios del colegio de las niñas con los de las clases que impartía en la universidad le causaba dificultades, últimamente él no mostraba mucha disposición para colaborar, así que decidió sacrificar un poco del tiempo que dedicaba a su gusto por la manufactura de muñecas de tela mientras superaban ese escollo, lo cierto es que nada más tenía un par de pedidos pendientes en la tienda con la que trabajaba. Como contable ella estaba incorporada a las 60
necesidades del despacho de su marido, primero él definía perfectamente la idea básica y después veían juntos la cuestión de costos, ese sistema en ocasiones implicaba un completa transformación de la propuesta cuando ella analizaba los precios de los materiales y de los tiempos y movimientos, alguna vez habían intentado coordinarse desde el inicio de un proyecto y no había funcionado, someter una idea desde su gestación al corsé presupuestal afectaba el desarrollo creativo, era preferible trabajar el doble para ajustar la idea a las posibilidades reales; Valentina esperaba ansiosa el momento adecuado para conocer la nueva obra en la que suponía que trabajaba Enrique, con el trajín diario había olvidado el asunto de la encomienda sagrada. Un par de semanas más tarde por fin se atrevió a preguntarle de qué se trataba, su risa brotó espontánea cuando Enrique, con evidente desasosiego, le confesó que escribía una novela. – Pero si existe alguien ágrafo en esta vida sos vos mi amor, jamás me escribiste una carta romántica, vaya, ni siquiera una dedicatoria en alguno de los libros que me regalaste durante tu discreto galanteo; no redactás ni las notas de justificación para la escuela de las niñas y en los proyectos los aspectos señalados son totalmente técnicos, las explicaciones que das a los clientes sobre la naturaleza de la edificación siempre son orales… – Surgió de repente. – ¿Tiene algo que ver con lo ocurrido en Israel, con la misión que te sería revelada? – Es probable, por lo menos tiene una estrecha relación. – ¿De qué trata? – Mira, lee lo que llevo. Valentina se sentó frente a la máquina y leyó en la 61
pantalla: “Era mayo, esa noche no había luna ni brillaban las estrellas. Más allá del alcance de los reflectores el mundo desaparecía de súbito, la oscuridad era densa, tan espesa que podía palparse y la tierra ardía, parecía empeñarse en negar la existencia del frío nocturno del desierto del que hablan tantas viejas historias, las tinieblas descendían hasta tocar la árida superficie cuya silueta perfilaba una tenue línea de resplandor rojizo, como si el Neguev fuera…” Dos horas después se levantó, se frotó los párpados, miró la hora en el reloj, le avisó que iba por las niñas al colegio, al regreso llamaría a su madre para preguntarle si podía ayudarla encargándose de llevarlas por la tarde a la clase de natación, tenían que charlar con calma. – Cuando surgió la idea de tu padre de hacer aliyá me dijiste que apenas y sabías donde quedaba Israel, que a diferencia de muchos de tus amigos jamás te atrajo al idea de ir a pasar una temporada en un kibbutz y menos aún la de hacer el servicio militar allá, como aún lo hacen un buen número de jóvenes judíos de medio mundo; cómo es que ahora tenés datos del ejército, armamento, poblaciones de Gaza, aspectos geográficos, todo eso, ¿Me engañaste? Le dijo mientras le daba una copa del vino tinto que habían traído del lagar de Motty y Esther en Zijron Ya’akov. – En realidad tengo infinidad de dudas, empiezo a escribir y me sigo, hasta que siento que estoy a la deriva, que no tengo datos concretos para aterrizar, entonces busco mapas, atlas, consulto manuales de armamento, rastreo en la Internet a ver que encuentro, invariablemente descubro que las referencias que coloqué son ciertas, pero es información que no poseía previamente, son datos del todo ajenos a mis áreas de interés habituales. 62
– Al menos lo son de manera consciente, quizá por algún subterfugio de tu mente fuiste captando aspectos concretos durante el viaje o en los noticiarios, en la prensa, que sé yo. – No deja de ser absurdo, ¿ahora Dios dicta novelas? – Te diré, de cosas peores le acusan, Abraham le achaca bromas de mal gusto y promover las relaciones extramaritales, Moisés nos lo presenta como xenófobo, homofóbico, misógino y quisquilloso con la comida, Jesús le endilga embarazos en adolescentes, actos de prestidigitación y hacerse el desentendido cuando las cosas se complican y por si fuera poco llega Mohammed y nos dice que es intolerante con los que no creen en Él y con las flatulencias. ¿Te pusiste ya en contacto con el Rabino Baruch? – No, temo que se burle, además la idea aún está inconclusa, tengo planeado enviarle el texto cuando tenga todos los detalles listos. – Quizá el conozca algún estratega militar que te oriente. – No todavía, es preciso avanzar más sobre la idea, estoy seguro de que sabré cuando es el momento de ponerlo al tanto. – ¿Crees que si hacemos el amor ahora se suscite alguna interferencia en la divina señal a través de la que te llega la información? – ¿Podría vuestra señora madre llevar a las niñas a natación con mayor frecuencia? – No creo que sea problema, pero natación es únicamente dos veces por semana, música es tres. –Sí, pero la maestra de música viene a la casa a impartirles la lección, prefiere que destrocen nuestro piano y no el suyo, babosa no es, tendremos que conformarnos con natación. – Coloca el seguro de la puerta, no vaya a venir Clarita a 63
informarme que terminó de limpiar la cocina, ya ves cómo es de oportuna, tamaño papelón haríamos si nos llega a encontrar en pelotas. Mientras hablaban las manos de Enrique exploraban bajo la ropa de Valentina, ella decidió andar con menos rodeos, el asunto de la novela había ocupado buen número de las últimas noches de su marido y el deseo la desbordaba, atacó directo al cierre de la bragueta, esa tarde los mensajes divinos y los problemas de Medio Oriente se difuminaron entre los sillones del estudio en la planta baja de una casona de Antigua, la vieja ciudad que aún mostraba las heridas de su destrucción en el terremoto del siglo XVII. Cuatro días más tarde llamaron a Enrique de la embajada de Israel, el Embajador quería verlo lo más pronto posible, se sorprendió de que alguien importante, que además no conocía, le pidiera con tanta premura que se reunieran. En la sala de juntas de la embajada estaban tres personas además del Embajador, se presentaron como encargados de negocios, de cultura y de cooperación institucional, Enrique supuso que alguno de los tres era el delegado del Mossad, pero su instinto de conservación le recomendó no tratar de averiguarlo. – Por la naturaleza de mi puesto estoy consciente de que en algunos casos es mejor no hacer demasiadas preguntas. Dijo el Embajador abriendo la reunión. – Tenemos mucha información sobre usted y a pesar de eso no sabemos qué está ocurriendo, en Israel hay mucho hermetismo al respecto, lo que me hace suponer que tampoco encontraremos mucha disposición de su parte para aclarar las cosas, comprenderá usted que no es normal que un ciudadano guatemalteco tenga cuatro guardaespaldas ultraortodoxos. 64
– ¿Tenga qué? – Por favor, no pretenda burlarse de nosotros, siempre que sale de su casa lo siguen una o dos sombras, del Ministerio del Exterior de su país nos están acosando, quieren saber si tenemos algo que ver, pretendían detener a los jasidim que lo cuidan. – Señor Embajador, con todo respeto, le aseguro que no soy la persona que tiene las respuestas; sí, con frecuencia he tenido la sensación de ser seguido, pero no se lo he comentado ni a mi esposa porque me va a decir que me estoy volviendo paranoico. – Hay uno de guardia afuera del colegio sefardí donde asisten sus hijas, otro la sigue a ella y uno o dos a usted. No podemos creer que no sepa nada o que no se haya dado cuenta de la vigilancia, no hay manera de que sus guardianes pasaran desapercibidos, aspecto de chapines no tienen, en fin, no vamos a insistir; ustedes no son ciudadanos israelíes, no aún y no me diga que tampoco sabe nada de los trámites que tiene listos la Sojnut. – Siga mejor, así me entero por usted, señor… ¿excelencia? – Esos términos están en desuso, tengo entendido que únicamente los españoles mantienen el apego a esa formalidad institucional, debe ser por su pasión enfermiza por la monarquía, ¿alguna vez ha visto la revista Hola?, no, mejor no me responda. Me llamo Joshua, Joshua Peleg y veo que usted Arquitecto Bartomeu no confía en nosotros, ustedes los guatemaltecos cambian del vos al usted cuando no confían en su interlocutor, está bien, me hubiera gustado que tuviera más disposición a colaborar, a explicarnos de qué se trata. Es obvio que están por irse a vivir a Israel y que además tienen buenos contactos allá, algo que no es frecuente en los olim, sin 65
embargo eso no explica ese despliegue de seguridad. Ignoro a qué mente brillante se le ocurrió enviar a cuatro hombres de fe a cuidarlo, en este país se notan más que si estuvieran disfrazados de payasos, pero ya lo arreglamos… quiero decir está arreglado, en Israel, nosotros oficialmente no tenemos nada que ver, al menos eso creo. Han llegado los relevos, dos de ellos no pueden ocultar que son extranjeros y los otros dos podrían pasar por guatemaltecos si no hablan, su acento los delata, su acento en castellano, son olim argentinos, por lo menos ninguno de ellos utiliza vestimenta religiosa. Para que ahora no le quede ninguna duda en unos momentos se los presentaremos, igual que los anteriores no tendrán contacto directo con ustedes pero serán su protección hasta que esto, cualquier cosa que sea, se solucione o ustedes se vayan de una buena vez; confío en que sea pronto porque destacados miembros de su comunidad están indignados, creen que nuestro Gobierno les está proporcionando custodia y preguntan, cada vez más fuerte, por qué a ustedes y no a ellos que tienen una mayor fortuna que proteger. Es mejor si al terminar esta reunión nos deja una relación de sus actividades habituales, aunque entendemos que siempre pueden surgir imprevistos. Lo que sí cambia es que ahora les daremos los números de los teléfonos móviles de sus guardianes y podrán notificarles cualquier movimiento extraño que vean. – Vaya, pensé que nunca se detendría a tomar aire. Señor Embajador, no quiero contradecirlo pero conmigo no acertó en su apreciación sociolingüística, estudié desde la instrucción básica fuera de Guatemala, en México y en Estados Unidos, por eso mi forma de hablar es una mezcla de acentos e 66
inflexiones y no corresponde del todo a las costumbres del país. En cuanto a lo que me cuenta trato de seguirlo pero no acabo de entenderlo. – Estamos en igualdad de circunstancias Arquitecto, al menos eso me gustaría pensar, pero no puedo creer que usted no esté al tanto de lo que ocurre, le aseguro que no me gustan nada este tipo de asuntos en los que los del Shabak y del Mossad nos piden dar la cara ante las autoridades locales pero se niegan a soltarnos prenda, tenemos que actuar a ciegas, la lógica diplomática tiene límites. Es mi deber advertirle que si algo llegara a ocurrirles no debe buscarnos, no son aún ciudadanos israelíes y no tenemos ningún tipo de compromiso con ustedes. Nuestro vínculo con sus anteriores guardaespaldas y con los nuevos es que ellos sí son ciudadanos nuestros, aunque ignoro quién les paga, por qué lo protegen y si tienen relación alguna con nuestro Gobierno; tal como suponía no va a ser a través de usted que logre enterarme de lo que ocurre, bien, no le hago perder más tiempo. De cualquier manera me dio gusto conocerlo. Los otros tres asistentes a la reunión tomaron nota, grabaron lo dicho y guardaron silencio hasta el saludo de despedida, en la sala estaban instaladas dos cámaras de video; Enrique trató de ver de reojo qué habían anotado, todo estaba en hebreo, idioma que no había vuelto a leer desde que con mucha dificultad chapurreó los párrafos necesarios en su Bar Mitzvá. Al salir el Embajador los tres consejeros permanecieron en la sala, un par de minutos después entraron tres hombres y una mujer, hablaron poco, le dieron cuatro números de teléfono móvil y una dirección de correo electrónico, acordaron que al día siguiente ella acudiría a su casa como 67
visitante para ver lo de la agenda de actividades y para que la registraran en el colegio de sus hijas como una de las personas que podría recoger a las niñas en caso de emergencia, ahora que sabían que estaban en la mira de la policía era mejor extremar las precauciones. Esa noche Valentina y Enrique charlaron largamente, a ella no le gustaba la idea de registrar el nombre de la agente de seguridad en el colegio, acordaron esperar a recibirla al día siguiente, entonces decidirían. Su presencia tranquilizó a Valentina, las cuestiones de vigilancia y protección las abordaron de manera directa en breve tiempo, el resto de la mañana platicaron del clima, los bordados indígenas, el mercado de Chichicastenango, la inmensa gama de colores del maíz americano, recetas de platillos locales, la visitante descubrió que el pollo era igual de importante en Israel que en la mesa diaria de Guatemala, durante la comida se la presentaron a las niñas como la tía Shoshana, de Haifa. El tener conciencia de que lo que hacían era observado por sus guardianes y por los del Gobierno de Guatemala, significó presión extra para Enrique, decidieron afrontar las cosas, analizaron los pros y contras durante horas y días en privado hasta que un buen día Myriam y Judith protestaron. – Por favor ya dejen de encerrarse para hablar y hablar y hablar, nosotras queremos irnos a vivir a Israel para estar cerca del abuelo y comer falafel y shawarma. Explicó Myriam. – Con mucho humus. Ratificó Judith. – Eso fue lo que escribimos en los papelitos que dejamos en el Muro, aunque no sabemos si Dios puede leer en español. 68
Queremos ir a la playa todas las tardes y salir a jugar al parque sin que tengan que cuidarnos tanto como aquí, allá podemos correr por todos lados sin miedo, aquí los maestros nos repiten y repiten que cualquier extraño que se nos acerque puede ser un secuestrador o alguien que quiere abusar de nosotras, nos da miedo hasta asomarnos por la ventana. Judith asentía con rotundos movimientos de cabeza, expresión seria y los brazos cruzados sobre el pecho, como forma de ratificación de lo explicado por Myriam. Fue claro que había consenso para adquirir la nueva nacionalidad, eso implicó buscar un socio que se hiciera cargo de los asuntos en Guatemala, trasladar el estudio de arquitectura a una oficina convencional para desvincularlo de su vivienda y que Enrique se dedicara de tiempo completo a terminar la novela. De momento lo que estaba escribiendo era lo más parecido a la esperada revelación, quizá ese ejercicio de redacción era únicamente el camino para llegar al objetivo, la cabra que lo conducía al arbusto ardiendo. Por su parte Valentina informó en la universidad que al concluir el semestre no renovaría las horas de clase que tenía asignadas, recopiló los documentos de acreditación de estudios de los dos y pidió en la Sojnut que le indicaran a dónde enviarlos a traducir, le entregaron una serie de manuales sobre los derechos y obligaciones de los ciudadanos israelíes, empezaron a actuar en función de la inminente aliyá. Un buen día llamaron a Shoshana para contarle la idea que habían tenido, fue necesaria una reunión con los cuatro vigilantes, quedaron de consultarlo con sus superiores, sin que ellos aclararan a quienes se referían, aceptaron, las sesiones de música fueron cambiadas por clases de hebreo para toda la familia, nadie sufrió por eso, ninguna de las dos niñas parecía 69
querer emular a Rubinstein y sus desentonadas ejecuciones terminaban por enervar a todos, a pesar de que los gruesos muros amortiguaban el sonido considerablemente. Shoshana se transformó en la improvisada profesora, una maestra eficiente que a todos imponía respeto, quizá por la pequeña pistola que no siempre lograba ocultar entre sus ropas de forma adecuada; en reciprocidad planearon un recorrido de despedida por todo el país, así sus guardianes tuvieron un buen pretexto para hacer turismo: protegerlos. En Tikal, detenidos a la entrada del Mundo Perdido, bajo los paraguas, durante uno de los repentinos chubascos de la selva, Valentina dijo muy seria. – Los dioses mayas nos han dado su anuencia, podemos marchar tranquilos.
70
III
Los buldóceres aparcaron a quinientos metros de la frontera, dentro de la Franja de Gaza, la avanzada desfiló hacia el frente en cerradas falanges griegas enarbolando sus crípticos estandartes de tela azul, al marchar entonaban cantos religiosos en yiddish, en sefardí y en hebreo. Lo correcto de las formaciones y la distancia entre los cuerpos de infantería les permitirían afrontar con éxito cualquier ataque con lanzas o flechas, inclusive resistir un ataque de la caballería o de aurigas, pero la estrategia se antojaba frágil ante un embate de rifles de asalto y no se diga ante lanzacohetes RPG, en eso pensaba Daniela Schneider mientras observaba todo el trajín con sus binoculares. Justo detrás de las máquinas empezaron a instalar las primeras tiendas de campaña, tan grandes como carpas de circo, de varias de ellas salían cables de fibra óptica que se conectaban a tractocamiones con enormes antenas parabólicas en las plataformas, mientras tanto decenas de técnicos en uniforme del color de la arena del desierto, algunos en estampado de camuflaje, colocaban paneles solares conectados 71
a largas series de baterías de litio y transformadores eléctricos, el avance inició formalmente a las 0432, diez minutos después sonó la primera alarma, de inmediato seis vehículos blindados todoterreno partieron con siete ocupantes cada uno, los extraños 4x4 recordaban vagamente a los dromedarios, en el capacete asomaba una joroba, una torreta de trescientos sesenta grados de giro, coronada con una ametralladora FN Mag 60-40, los ocupantes iban armados hasta los dientes. A lo largo de la frontera norte se estaban instalando ochenta campamentos similares, otros diez entre los pasos de Nahal Oz y Karni, cinco en Kissufim, cinco en Sufa y cuarenta en Kerem Shalom, en la frontera con Egipto, ciento dos patrullas vigilaban el desierto en el lado israelí. Doscientas veintiséis embarcaciones de diferentes tipos y calados navegaban frente a la costa de la Franja de Gaza, desde los campamentos de Kerem Shalom se extendía la barrera de contención en la frontera, hasta el mar, aunque sabían que no sería suficiente en caso de una desbandada masiva hacia la parte egipcia de Rafah, de la reacción de El Cairo dependería buena parte del éxito o fracaso de la operación. Cada quince minutos Daniela enviaba un nuevo mensaje, su habilidad para encriptar la información le facilitaba las cosas. A las 0535 el Capitán Fainstein la llamó aparte. – Teniente Schneider tengo que reconocer que estos son unos idiotas con suerte, confío en que eso no cambie. El relevo viene en camino, pero a usted y su tropa los han asignado a otra misión, los siete más cinco que seleccionará de los refuerzos que le enviamos, se incorporarán a la Liberación. – ¿Cuál liberación señor? 72
– La Liberación de Hebrón, ¿no lo sabía?, ese es el nombre que estos desquiciados le dieron a su operativo. – ¿La Liberación de Hebrón?, Capitán, estamos a las puertas de Gaza, qué tiene que ver Hebrón aquí… señor. – Al parecer ese fue el primer movimiento considerado en su estrategia, hicieron creer a todo el mundo que el ataque sería sobre Hebrón, recuerde lo que contó Goldfinger; pero no vine a comentar con usted las vicisitudes de estos infelices, no estamos en el café de un canyon sino en el desierto, en el punto de partida de una nueva guerra, así que escuche con atención y no me interrumpa: el Estado Mayor logró contactar con los dirigentes del Movimiento Shalom para que elementos del Tzáhal actúen de manera encubierta en sus operaciones y nos mantengan informados de todo lo que ocurre ahí dentro. Esas son las ordenes, aunque me resultan doblemente absurdas; los miembros de un ejército formal, el mejor del mundo aunque les pese a muchos, piden permiso a civiles para participar en un jodido acto bélico en nombre de la paz, nunca había escuchado algo tan contradictorio, por lo menos no ha muerto nadie hasta ahora, no me queda más que esperar que concluya bien esta locura. – No le veo nada de contradictorio, todas las guerras del siglo XX se hicieron en nombre de la paz, hasta el siglo XIX los generales y los políticos eran más honestos, atacaban por razones económicas y de poder, eran conquistadores natos que actuaban sin escudarse en eufemismos, ahora todo se hace en nombre de la paz, incluido el matar, señor. Fainstein la fulminó con la mirada. – Usted siempre encuentra una explicación para todo. Volvamos a nuestro asunto, conforme a lo acordado por el alto mando incorporaremos ciento veinte militares al Shin 73
Mem, los doce de su compañía forman parte de ese destacamento. A las 0600 ustedes serán relevados, tienen unos minutos para darse una ducha y estar listos, a las 0620 se reportarán a la tienda Yod 323 ubicada a menos de un kilómetro de esta torre, su enlace es el General Meir Ben Shaul, él les asignará sus funciones. No deberán llevar consigo ninguna identificación militar, su participación se considera voluntaria e incluso corren el riesgo de que les levantemos acta por deserción si la imagen del ejército estuviera en riesgo. – No me diga, si me entrega la orden por escrito con todo gusto la asumo, señor. – Teniente Schneider, entienda el brete que se está armando a nivel internacional, no podemos comprometer al Tzáhal en esto. – Tampoco puedo aceptar una orden que vaya contra mis principios o que deliberadamente ponga en riesgo mi integridad, la de mis subordinados o la de la población civil, disculpe si le digo que no tengo claro el que seamos el mejor ejército del mundo pero sí que somos el único donde podemos negarnos a cumplir una orden de esa naturaleza, señor. – Usted muere de ganas por unirse a esos desadaptados, por qué ahora se hace la estrecha. – Solicito autorización para hablar con el Mayor Feldman, señor. – Sueño con el día en que me entreguen el informe de su caída en combate o por lo menos el aviso de su baja. – Es curioso, me ocurre lo mismo con respecto a usted Capitán. – Tiene mi autorización para llamar. – ¿Está seguro que podemos llegar a ser considerados desertores? 74
– Es probable que haya exagerado un poco. – Lo suponía, esa instrucción parecía sacada del argumento de Misión Imposible, señor, no es sano que pase tantas horas viendo televisión. Voy a hablar con mi gente y a seleccionar entre la dotación de refuerzo a las otras cinco voluntarias. – Voluntarios, hay dos hombres entre esos diez. – La denominación de género se aplica por mayoría, llegaron ocho mujeres y dos hombres, por lo tanto el artículo correspondiente es ellas, el falo en este caso no tiene más función que librarlos de tener que acuclillarse para orinar, aunque usted insista en mantener vigente la obsoleta relación pene-mando, señor. – No me fastidie, en este momento no estoy de humor para sus enredados discursos feministas, lárguese a hacer su trabajo. Para las 0620, recién duchados y sin nada más que una rebanada de pan con queso en el estómago, se dirigieron a la tienda Yod 323; aún para ellos, militares con muchas horas de fogueo, resultaba impresionante el funcionamiento del campamento. En unas cuantas horas se perfilaba lo que serían los servicios: hospitales, comedores, dormitorios, sanitarios y duchas, centros de adiestramiento, almacenes de todo tipo, zonas de aparcamiento, dos pequeñas pistas de aterrizaje para aviones robot Hermes 450 y Heron, el helipuerto, el centro de control maestro para los portaaviones terrestres de las micronaves de observación Birdy, Spy There y Mosquito, aviones teledirigidos tan pequeños que caben en una mochila; por todos lados se movían operarios que montaban estructuras, tensaban cables, tendían líneas, colocaban el mobiliario. Los esperaba un hombre que aparentaba alrededor de 75
sesenta años, en realidad diez años mayor que eso, cabello y barba blancos, sin bigote, vientre un poco abultado, vestido con el uniforme de campaña en versión pantalón corto, utilizaba un notorio distintivo triangular de color marrón en la boina y las hombreras, sus galones denotaban su condición de general de división, al que seguramente habían ido a sacar de su cómodo retiro, les sorprendió que mantuviera el acento argentino incluso al hablar en hebreo. – Lamento no poder dedicarles mucho tiempo, me gustaría atenderlas como es debido, invitarlas al Gaza Mall a tomar el té con pastitas y charlar con tranquilidad, pero comprenderán que estamos en medio de una operación militar de gran envergadura y eso limita un poco las posibilidades de sociabilización. Tres de las mujeres serán asignadas a la brigada Sara de bastimento de tropa, la cocina, que depende de la división Esther, tendrán que utilizar la versión ortodoxa del uniforme, cubrirse el cabello con la sheitel y apegarse de forma estricta a la dieta y las normas higiénicas kosher. El sitio es estratégico, al lado del fogón es dónde circulan de inmediato todas las noticias, no me pregunten cómo ocurre pero así sucede siempre, no existe gente mejor informada que las cocineras. Recomiendo que sean las que tienen cabello largo y no porten percings, es mejor si tampoco tienen tatuajes y mucho mejor aún si por lo menos saben rebanar una cebolla con propiedad, la Comandante Daoud no tolera el uso negligente del equipamiento militar, vigila con celo el manejo eficiente de sus cacerolas y sartenes. – ¿Nada más mujeres? Preguntó Yotam Ullman, un joven que estudiaba alta cocina. – Es preferible, si un chico tené un interés particular por los 76
fogones puede incorporarse, la cuestión es que esa brigada está bajo control jaredim, entrar ahí equivale a transitar por terreno minado, los hombres deben evitar cualquier contacto físico o visual con las mujeres, un roce accidental o ver a alguna de ellas directo a los ojos puede desatar un conflicto de dimensiones catastróficas; no va a resultarles fácil a los hombres sobrevivir en ese ambiente, sin embargo es posible. Otros cuatro se integrarán a la división Herodes, conmigo; aquí no importa si son hombres o mujeres, entramos a dominio laico, nuestro trabajo es instalar, adecuar o reconstruir escuelas, hospitales, dormitorios, sanitarios y espacios comunitarios. Necesitamos proyectistas y operarios. – ¿Los campamentos? – Preguntó Daniela. – No, eso corresponde a la brigada Esaú de instalaciones militares que forma parte de la división David, lo nuestro son los espacios destinados a la población civil, hoy mismo deben funcionar lugares para que la población de Gaza tenga acceso a un mejor nivel de vida diez minutos después de que los grupos opresores sean erradicados. Los doce se vieron entre ellos. – Si, también ustedes creen que es una locura, lo verán dentro de poco, de hecho lo vivirán. A los militares más experimentados los requerimos en las brigadas Bar Kojba, de respuesta inmediata, y Sansón, de limpieza profunda: neutralizar acciones de resistencia, desmantelar minas terrestres y misiles superficie-aire y superficie-superficie, desmantelar, recuperar o eliminar arsenales, demoler túneles; dependen de la división David. – ¿Cómo detectan los escenarios? – Volvió a preguntar la Teniente con evidente nerviosismo. – Aviones rastreadores, imágenes satelitales, vehículos de 77
observación, exploradores camuflados entre los Osos Trogloditas, avisos de los oficiales de avanzada, advertencias de las brigadas, denuncias de la población civil o de observadores estratégicos, sonido de explosiones y de disparos, más lo que se presente. – ¿Osos qué? – Preguntaron a coro. – Oficialmente son la brigada Jericó, la avanzada, de la división David, pero cuando se vieron entre ellos, miles de jaredim con sus largas barbas y con esas ropas que los hacen parecer más obesos de lo que son, mirá, alguno de ellos mismos dijo que parecían osos trogloditas y el sobrenombre cundió; se han convertido en una especie de emblema amable, algo curioso para la primera línea del frente. – Sobre las denuncias de la población civil, ¿Usted cree que los palestinos van a denunciar a su propia gente? Preguntó Froiem Wachowski. – Mirá querido, empecemos por no seguirles el juego con una denominación propagandística, no hay tal pueblo palestino y si lo hay nosotros formamos parte del mismo. Para los ingleses Palestina era de la Costa Mediterránea hasta los actuales límites de Jordania con Irak y palestinos todos los que vivieran en ese territorio, eso incluía a judíos, cristianos, zoroastrianos, animistas y musulmanes; a partir de la Independencia nosotros pasamos a ser israelíes, jordanos los de Cisjordania y egipcios los de Gaza, independientemente de las cuestiones étnicas o religiosas. Lo de retomar la denominación de palestinos para identificar a los fedayines fue un invento de Arafat en los sesentas, una contradicción perversa, vino a colgarse de una palabra latina para crearse una identidad: Palestina significa tierra de los filisteos y filisteo viene de la voz hebrea p’lish que significa invasor; cuando la diáspora en 78
tiempos de romanos, los conquistadores cambiaron el nombre de Judea por el de Palestina para reventarles el hígado a nuestros antepasados. Le asignaron al territorio el nombre de los que habían sido enemigos históricos de los judíos, los filisteos, un pueblo proveniente de Creta que se asimiló desde los tiempos del Rey David, para la época de los romanos apenas y quedaba evidencia física de ellos y la intención de los conquistadores era que los judíos también nos extinguiéramos. Mirá por donde les vino a salir el tiro, se equivocaron por completo, hoy no hay sino ruinas de su poderío y nosotros aquí estamos, plantados sobre las cenizas imperiales de asirios, egipcios, babilonios, griegos, romanos, bizantinos, cruzados, otomanos e incluso sobre las pavesas del Tercer Reich. En cuanto a los pobladores de Gaza ellos no son descendientes de los filisteos, no pueden serlo; por razones gramaticales, étnicas, históricas, genéticas y geográficas no son palestinos. Una cifra importante son descendientes de judíos obligados a convertirse al Islam, el resto son árabes, árabes sunitas, árabes chiitas, árabes jariyitas, árabes hachemitas, árabes católicos, árabes maronitas, árabes ortodoxos griegos, árabes coptos, árabes drusos, árabes bahá’ís e incluso árabes judíos, recuerda que los árabes son los descendientes de Ismael, hijo de Abraham, por tanto nuestros medio hermanos, y sembrando el odio entre todos ellos se incrustaron los terroristas, árabes y no árabes, como los que vienen de Irán, que son persas y otros que son turcos o libios, de raíces beréberes-cartaginesas, o tuaregs o tunecinos o indonesios o alemanes. Una sarta de fanáticos y alborotadores que no sólo han provocado daño a los judíos, también lo han causado y mucho a los civiles árabes que no quieren otra cosa que dormir tranquilos, comer su humus con kebab en su pita, 79
permitir que las aceitunas lleguen a su punto en la salmuera, tomar el café con cardamomo saturado de azúcar y fumar sin prisas su narguilé al atardecer. Y sí, aunque lo dudes, todos los que están hartos de los terroristas nos van a ayudar a echarlos fuera. Muchas cosas les van a asombrar a ustedes y al mundo en esta semana. Fin de la charla, voluntarias para el comedor, voluntarias y voluntarios para la división Herodes, expertos en explosivos para la brigada Sansón y quienes se suman a la Teniente para la brigada Kojba. – ¿Cómo sabe que prefiero esa brigada? – Querida, las piadosas damas jasidim a usted no le confiarían ni los pretzels y algo me hace suponer que utiliza mejor el Galil que un destornillador, ¿cierto? La operación acordada es la siguiente, vuestra integración es total, no decorativa, esto es: sos miembros del Movimiento Shalom, Shin Mem para ahorrarnos la vuelta, no sos espías del Gobierno ni mucho menos, durante vuestra estancia aquí están de permiso en sus batallones y son integrantes plenos del Shin Mem; además del trabajo asignado que deberán de cumplir en rigor, tendrán teléfonos satelitales para informarle a la Teniente de las novedades, de ustedes doce ella es la única autorizada para establecer comunicación con el Tzáhal, la idea es proporcionar información trascendente para que sus altos mandos evalúen si en algún momento es necesaria la intervención militar, lo cual les puedo asegurar que no ocurrirá, sin embargo esa es su función, cualquier contravención a esta norma significará su inmediata baja del Shin Mem. Su único vínculo con el Tzáhal, repito, es a través de la Teniente Schneider. – ¿Y si algo le pasa a Daniela? – Preguntó Esther. – Si algo le ocurre de inmediato su llamada será redirigida a 80
otro de los nueve oficiales asignados a la operación, nuestro centro de comunicación monitorea las señales de forma permanente, en cuanto se pierde el rastro de un teléfono, en fracciones de segundo se redireccionan las llamadas y se busca el origen del problema, les aseguro que ninguna de sus llamadas quedará sin respuesta.
81
82
IV
A las 0845 por fin hubo un pequeño respiro en la oficina principal de la Residencia Oficial de la Primera Ministro en Jerusalem, capital del Estado de Israel; las llamadas de los presidentes de Estados Unidos, Egipto, Francia, Alemania, China, de la Autoridad Nacional Palestina, del Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas y de los primeros ministros de Rusia, Japón e Inglaterra asolaron a la Premier Tzipi Livni desde el amanecer. Enfrente de ella estaba sentado el Ministro de Defensa. – El Presidente está que trina, Ehud, me advirtió que si en ocho horas no tenemos controlada la situación internacional pedirá la disolución del gabinete. Se suponía que intentarían tomar Hebrón y que ahí los escudos humanos internacionales les impedirían avanzar; ese era el plan que aprobamos, dejar actuar al Movimiento Shalom para tener mejores herramientas con las que negociar con la Autoridad Nacional Palestina, pero que al final no harían otra cosa que eso, presionar, utilizar la gran movilización para atemorizar, no para realizar una avanzada… y menos sobre Gaza, eso equivale a aventar 83
una granada en una base de misiles, la explosión se va a escuchar hasta en Moscú. – Pues al parecer los planes de ellos eran otros. – ¿Y tú no lo sabías?, ¿dónde está todo tu aparato de espionaje?, ¿o sí lo sabías?, Ehud, ¿a qué juegas?, ¿con quién estás?, acaso todo el tiempo supiste que iba a pasar y no me informaste. – No te alteres, no hay nada que temer, algo sospechaba pero no tenía la certeza de lo que se traían entre manos; era obvio que no se irían sobre Hebrón, pero podría ser Jericó, Nablus, Ramallah o el mismo Jerusalem…la parte Este, y por supuesto también Gaza. – No juegues conmigo, los tractores y armamento se estuvieron concentrando en puntos intermedios entre Gaza y Hebrón, ahora me doy cuenta. Muy cerca de Hebrón pero no tan lejos de Gaza, no podían tener a Jericó en la mira, ni siquiera a Ramallah, los principales arsenales los colocaron en Beit Kama, Lajish y Dvira, todo apuntaba a Hebrón. Ahora tenemos un polvorín latente ahí y otro encendido en Gaza, si intervenimos vamos a resultar responsables de una invasión, si no hacemos nada estamos poniendo en riesgo miles de vidas de ciudadanos israelíes. Los demás ministros nos esperan, debíamos haber empezado hace una hora. ¿Qué posibilidades tenemos de salir vivos de esta? – Un noventa y nueve coma nueve por ciento, – Contestó sonriente. – siempre existe un pequeño riesgo, eso es lo que hace las cosas más emocionantes, qué sería de la vida sin estas cargas de adrenalina. – Muy gracioso, espero que tengas un as bajo la manga, ¿dónde está el General Gaby Ashkenazi? – No vendrá, estamos en alerta máxima, todas las fronteras 84
están resguardadas y tenemos tres divisiones acuarteladas en el Neguev por si la situación se les sale de las manos a los del Shin Mem. Como Comandante en Jefe de las Fuerzas de Defensa el General Ashkenazi tiene que estar al frente, no podemos distraerlo con reuniones, por importantes que sean. – Esta bien, no podemos hacer esperar más a los ministros, ¿estás listo? – Vamos, no te angusties, nuestra intervención abierta no va a ser necesaria y tampoco va a ocurrir ninguna masacre, todo va a salir bien. El secreto era un imperativo por cuestiones de seguridad nacional, pero en todo momento hemos tenido el control de la situación. No quise arriesgarme a una filtración de tu oficina, siempre hay docenas de asesores zumbando como abejas a tu alrededor, ninguno de ellos está vendido al enemigo, eso te lo puedo garantizar, pero a varios de ellos les encantan las atenciones de los corresponsales extranjeros y de los grupos de inteligencia de nuestros aliados. Confía en mí, no hemos aceptado nada que no sea en absoluto beneficio de tu gobierno. La Primera Ministro enrojeció de cólera, se le hincharon las venas del cuello y apretó los puños, tras medio minuto dio un trago largo a su café, dejó la taza sobre el escritorio, inclinó la cabeza hacia delante, metió los dedos de ambas manos entre el cabello y lo echó para atrás al tiempo que levantaba la cara con los ojos cerrados, lentamente sus párpados se abrieron para fulminar con la mirada a su interlocutor. – Ehud, estás reconociendo que tu gente me espía, a mí y a mis colaboradores cercanos. Suceda lo que suceda voy a pedir tu remoción, esto fue un abuso, en cuanto termine la emergencia tendrás que hacer las maletas, ¿está claro? Ehud Barak sonrió de nuevo. 85
– Señora, mi obligación es protegerte, no podemos permitir que se te acerque nadie que no sepamos perfectamente quién es y qué intenciones tiene, eres la cabeza del Estado. Cualquier cosa que hagas o dejes de hacer afecta la vida de los habitantes de Israel y de los judíos de la diáspora, no tienes derecho a vida privada, lo lamento pero así son las cosas. Por lo demás mi cargo está a tu entera disposición, aunque primero tenemos que resolver el problema que nos tiene aquí desde la madrugada, la seguridad de Israel vale más que nuestros cargos y que nuestras vidas. Si me permites nada más una pequeña observación, considero que aceptar ante los demás que no estabas totalmente enterada de lo que ocurre puede afectar tu liderazgo, yo puedo asumir la culpa de todo si las cosas salen mal pero tú debes proteger la investidura, no eres únicamente Tzipi Livni, también y más importante aún, eres la sucesora de David Ben Gurion, Golda Meir, Menahem Beguin, Yithzak Rabin y Ariel Sharon. Ocupas un cargo que existe gracias a ellos, gracias a que lucharon con rabia por defender a nuestro país y vencieron contra todos los pronósticos. Ahora es nuestro turno, tu turno como cabeza del Estado, recuerda que el Islam puede perder mil veces, pero el día en que nosotros tengamos la primera derrota, esa será la última… adelante señora, el triunfo nos espera, después poco importa si mi cabeza rueda. Tzipi Livni lo miraba con la barbilla recargada en los nudillos de la mano izquierda, cuando fue evidente que Ehud había concluido sacudió los hombros y se incorporó. – Tienes razón, me enerva pero tengo que reconocer que estás en lo cierto, primero debemos resolver esto; por lo menos tuviste la humildad de no colocar tu nombre entre los ministros que me antecedieron y el buen gusto de no 86
mencionar a Bibi como uno de los pilares de la patria, vamos, nos esperan. Justo antes de salir de su oficina le informaron a la Primera Ministro que el premier italiano se encontraba en la línea telefónica. – Me parece que yo soy un poco madura para sus gustos y él es demasiado mayor para los míos. Bromeó, indicó que con la mayor diplomacia posible les pidieran un par de horas para devolverles la llamada a él y a los demás líderes mundiales que reclamaban atención. En el camino el anterior titular la abordó, a una seña suya el Ministro de Defensa se adelantó para calmar los ánimos. En cuanto Ehud Barak entró a la Sala de Consejo se apagaron los murmullos, se deshicieron los corrillos que se habían instalado en torno a la pequeña barra de café y de cara al ventanal, él hizo un saludo moviendo la mano en dirección a los presentes y todos fueron a ocupar sus lugares en la mesa. La sala no es muy diferente del salón de juntas de cualquier empresa mediana, cuenta con las instalaciones adecuadas para su función y brinda a los ministros algunas comodidades, como tener rápido acceso a los sanitarios, una buena cafetera, agua fría para beber, clima artificial que se enciende únicamente cuando es indispensable, una pantalla retráctil con proyector digital y cierta amplitud; los muros son de concreto pintado en el color de la piedra de Jerusalem, lo único que cuelga de ellos es un pizarrón en uno de los extremos, una Menorá de bronce está empotrada justo detrás del asiento principal, las lámparas que cuelgan del techo son de un modelo común que se puede conseguir en cualquier tienda de iluminación, con focos de led en tono cálido, la mesa 87
de cedro data de la época de la Guerra de Independencia, es probable que haya sido parte del mobiliario dejado atrás por los ingleses, los asientos están tapizados en tela, en general emana un aire de respetable austeridad. En cuanto se sentaron, Ehud Barak se dirigió al Ministro de Asuntos Religiosos. – Mi estimado Avigdor, mucho me temo que de nuevo tendremos que posponer nuestra partida de golf, qué tiempos aquellos en que bastaba con echarle un vistazo a la agenda de Arafat para saber si tendríamos la tarde libre. Todos rieron. Enfocó entonces sus baterías contra la Ministro de Relaciones Exteriores. – Fany, estimada Fany, te aseguro que nadie en este momento quisiera estar en tu lugar, durante la próxima semana vas a ser el sparring del Consejo de Seguridad de la ONU. – Es lo que temo, supongo que nunca tendré mejor momento que este para solicitar un aumento de sueldo, nadie aceptaría hoy el cargo, ni siquiera por el doble de lo que me pagan. Guardaron la compostura cuando la Primera Ministro entró a la sala. – ¡No vamos a lograr que nos crean que no tenemos nada que ver en este asunto! Espetó ella casi gritando, a modo de saludo a los miembros del gabinete. – Ni siquiera nosotros lo creemos. Contestó el Ministro de Defensa. – Tenemos que ser breves y directos, Bibi me abordó cuando venía por el pasillo y le pedí quince minutos antes de permitirle el acceso, así que lo estrictamente confidencial tenemos que resolverlo de inmediato, recuerden que nuestro amigo muere de ganas de quitarme el puesto y ser primer 88
ministro por tercera vez. Ehud ¿Ya les explicaste por qué se cambiaron los planes originales? – Señora Minis… – Ehud, dejémonos de formalismos, esto está que arde, la Autoridad Nacional Palestina grita a los cuatro vientos que es víctima de la mayor infamia jamás perpetrada, como si no hubieran sido ellos los que se dejaron arrebatar Gaza por los intolerantes del Hamás. El presidente Obama no quiso asumir ningún compromiso hasta que le informemos con exactitud de qué se trata, vamos al grano pronto. – Esta bien, hace cuatro semanas estuve aquí con el Comandante en Jefe de las Fuerzas de Defensa y los directores del Aman, del Mossad y del Shabak, les mostramos a todos lo referente al Movimiento Shalom. – Sí, pero, recapitulo para que todos podamos compartir la visión de conjunto, dijiste que estaban dejando fluir demasiada información, que grupos armados islámicos y organizaciones no gubernamentales tenían tomada Hebrón para bloquearlos por la vía de las armas y mediante escudos humanos, entonces sugeriste al Consejo de Ministros tu plan para aprovechar sus errores, con diez mil personas y tanto descuido en la confidencialidad de las acciones no podrían avanzar, ¿no fue así? – Exacto, sin embargo, tal como pudiste constatarlo en los últimos días, su nivel de organización resultó extraordinario y rebasaron las expectativas, su jugada de engaño resultó, es justo reconocerlo, una tirada a la altura de las de los mejores estrategas militares de la historia. Esta información se mantuvo en reserva por motivos de seguridad nacional, la Ley Fundamental contempla los casos de excepción en caso de amenaza a la integridad del Estado, las Regulaciones de 89
Emergencia, por esa razón no se informó hasta ahora a la Knéset y al Consejo de Ministros. – Por supuesto, estamos al tanto de todo, sin embargo ha llegado el momento de compartir la información con los ministros y el Presidente de la Knéset ¿Puedes decirnos al final cuánta gente están movilizando? – Ciento cincuenta mil y en esta semana esperan incorporar por lo menos cincuenta mil voluntarios más. La cifra tomó por sorpresa a la Primera Ministro. –Dios mío. Los ministros del Shas, Yahadut HaTorah e Israel Beytenu se pusieron de pie como si un resorte los hubiera impulsado, eran obvias sus intenciones de abandonar el salón. –No, por favor, señores, Ministro Lieberman, pido una disculpa, no vuelvo a pronunciar ninguna referencia injustificada a HaShem, lo lamento, les pido que retornen a sus lugares y nos dejemos de nimie… de consideraciones de índole semántica, comprendan, esto es muy grave, a pesar de estar al tanto de todo el operativo la cifra aumenta cada vez que pregunto, de ahí el desplante, se trató de una expresión coloquial sin ninguna connotación religiosa. En este momento tenemos que conformar un frente común, no es el momento adecuado para dirimir nuestras diferencias sino para actuar juntos por el bienestar de Israel. ¿Cómo nos van a creer en el exterior que no estamos detrás de una movilización de esa naturaleza?, líderes políticos de todo el planeta quieren saber cuáles son nuestras intenciones, cuáles las intenciones del Shin Mem, nos están acusando de invasión. Paseó una mirada escrutadora por la sala, percibió algo que podía utilizar a su favor, sonrío y entrelazó las manos, su pose acostumbrada cuando se sentía dueña de la situación. 90
– Es una idea mía o todos ustedes están demasiado tranquilos frente a este aparente caos, acaso tienen algo que ver en lo que está pasando. Me parece que el secreto que compartimos el Ministro de Defensa y yo no es tan secreto, al menos no en lo general, por favor, nada más para poner las cartas sobre la mesa sin que tengan que mostrar su juego: pueden alzar la mano los ministros que hayan aportado algo o intervenido en lo que está pasando. Las miradas se cruzaron, algunas sonrisas asomaron en las hieráticas máscaras de importancia que asumían y poco a poco todos los ministros y el Presidente de la Knéset levantaron la mano. – Vaya, estamos hasta el cuello… ¿Alguno de ustedes ha autorizado el uso recursos o equipo del Gobierno para esta operación?, de nuevo les pido que levanten la mano. Nadie hizo ningún movimiento. – ¿Y usted quién es? En ese momento reparó en un religioso jaredim, sefardí, delgado, de piel olivácea, cuidada barba oscura y baja estatura, que estaba de pie justo detrás del respaldo de la silla del Ministro de Defensa. – El Rabí Oheb Montefiore es el vocero del Movimiento Shalom, es el interlocutor con el Gobierno, le invité para que responda todas las inquietudes que seguramente tendrán los ministros. – ¿Por qué está de pie?, por favor Rabino tome asiento, disculpe nuestra descortesía. Le indicó la señora Livni. – Bueno, una vez que hemos aceptado nuestra participación oficial y oficiosa es obvio que esta reunión no es para ver cómo afrontamos la cuestión con el Movimiento Shalom sino 91
para acordar cómo vamos a justificar lo que ocurra ante el Presidente Peres y ante el mundo. Dana Navon, Ministro de Cultura, alzó la mano para pedir la palabra. – Discúlpeme, entiendo que el Presidente Peres tenga que asumir una postura pública, pero él también es un donador importante del Movimiento Shalom. Percibo que todos estamos sorprendidos por el giro que han tomado las cosas, en algún momento consideramos que podrían ser de gran ayuda para maniobrar políticamente la situación con la ANP y ahora tengo la impresión de que quienes tienen la sartén por el mango son ellos, aunque en principio somos aliados, ¿cierto? – ¿Tiene algo que decir Rabino Montefiore? Señaló la Primera Ministro. – A nombre del Consejo General del Movimiento Shalom les pido una disculpa, nos incomoda no haberles informado con exactitud cómo se desarrollarían las acciones, era un secreto. Si un secreto lo saben más de cuatro o cinco personas ya no es tan secreto, únicamente cuatro personas del Shin Mem y una persona de ustedes conocían el plan real, sin embargo no queremos que se sientan engañados o traicionados, lo que hacemos es por el bien de Israel y contribuirá a que su gobierno tenga una larga vida, ustedes y nosotros luchamos por la misma causa: Israel; por eso es importante que estemos de acuerdo. Todos voltearon a ver al Ministro de Defensa. – No me vean, la única persona facultada para asumir una decisión de esta magnitud es nuestra Premier. – Gracias por la aclaración Ehud. – Dijo molesta al saberse atrapada en la toma y daca. – Se nos agota el tiempo, Rabino ¿Por qué Gaza y no Hebrón, puede informarlo a los señores 92
ministros en forma breve? – Con todo gusto, a partir de lo que ocurre desde el fallido Plan de Desconexión consideramos que el pueblo de Gaza está secuestrado por los grupos armados, tenemos a Al Fatah, Hamás, Yihad Islámica, Ansar Jud Alá y Mártires de Al Aqsa entre los más importantes, pero existen otros grupos terroristas y clanes con menos presencia mediática que tienen un peligroso poder por enclaves, de acuerdo con nuestros informes la cifra es de ochenta y tres. Entre ellos se pelean el control de la población y hacen creer al mundo que sus deseos son los deseos del llamado pueblo palestino, esto ustedes lo saben muy bien, voy a lo importante: la única manera de que la gente en Gaza y Cisjordania alcance condiciones de vida dignas y que logremos las condiciones necesarias para edificar con ellos una paz duradera es, si el Ser Supremo nos lo concede, quitando a los terroristas de en medio. Para aspirar a la paz es imprescindible reventar las redes del odio. – Perdón por insistir, ¿por qué le llamaron la Liberación de Hebrón y se movilizaron hacia Gaza? Intervino Ehud Barak moviendo la mano en círculo con la palma hacia arriba, lo que indicaba que el carácter didáctico de la pregunta. El Rabino Montefiore se acomodó las gafas rectangulares de montura dorada con la mano derecha, enseguida reunió las yemas de sus diez dedos al frente, como si sujetara una pequeña pelota. – El sentido es simbólico, nadie nos puede acusar de arrebatar o invadir Hebrón, el acto de compraventa de la cueva de Macpelá por parte del Patriarca Abraham está plasmado en el Bereshit, la presencia judía en Hebrón es casi tan antigua como el pacto de nuestro pueblo con el Creador del Universo, la sola idea de poder recuperar Hebrón despertó de inmediato 93
la simpatía de millones de judíos israelíes y de la diáspora. En cuanto al sitio real en el que pretendíamos actuar, comprendan, por la magnitud de la operación la puesta en marcha era un secreto a voces. Todos ustedes sabían cuáles eran nuestras verdaderas intenciones, pero no sabían el cómo, cuándo y dónde, esa fue la información que mantuvimos en reserva. Hebrón, de momento, no es el objetivo sino el símbolo, la idea que alimenta el movimiento, lo que mantendrá viva la esperanza una vez que se alcancen las metas en Gaza. Gaza, no les descubro ninguna novedad, es el nido de los grupos más radicales, la incubadora de los huevos de serpiente; al dejar filtrar hace un mes el rumor de que íbamos sobre Hebrón los frentes armados de los diferentes grupos y gran parte de los extranjeros de las organizaciones no gubernamentales se trasladaron a Hebrón, unos para organizar la resistencia armada y los otros para formar el escudo humano internacional destinado a “proteger a la población civil”, como dicen siempre. Mientras tanto los líderes se quedaron en Gaza con menos guardia de la habitual, desde hace treinta días los hemos tenido en tensión y colocados en el punto equivocado, le aseguro que en este momento se están dando cuenta de su desgaste físico y psicológico y de su vulnerabilidad. Y como estoy justo en este punto, aprovecho para solicitarles que el Tzáhal acordone Hebrón, es muy importante que nadie tenga manera de regresar a Gaza, eso facilitará nuestra misión. La Premier giró el rostro hacía el Ministro de Defensa. – Esta madrugada tomamos nota de esa jugada, ni una rata puede asomar las narices fuera de Hebrón. – Rabino, ¿qué tan autosuficientes son, realmente cuentan con 94
la infraestructura necesaria para llevar a cabo todo el plan? Preguntó la señora Livni. – Tenemos en nuestra mano los elementos tácticos y financieros para garantizar el éxito de la operación, aunque de la actitud de Egipto depende buena parte del resultado a futuro, si ellos le abren la puerta de escape a los principales terroristas nuestro triunfo será breve, en unas cuantas semanas se reorganizarán y volverán por sus fueros. – ¿Por qué no trataron de actuar abiertamente en coordinación con el Estado de Israel desde el principio? Preguntó el Presidente de la Knéset. – Señor Diputado, con el respeto que debo a usted y a lo que representa, una operación de este tipo era imposible desde la figura del Estado, nos hubiera llevado años de negociaciones y con seguridad habrían existido todo tipo de filtraciones reales, no como lo ocurrido en estos días en que soltamos información falsa para que los terroristas y sus comparsas mordieran el anzuelo; además ustedes hubieran tenido que violar compromisos signados, sin contar con que era necesaria la aprobación parlamentaria y ya sabemos por dónde tiran las fidelidades de algunos representantes de los partidos árabes, créame que esta fue la única vía posible. La negociación abierta hubiera sido como tratar de almacenar vino en un colador, HaShem no lo permita. – Sí, pero su operación es muy arriesgada en lo referente al equilibrio de la población de Israel ¿Qué vamos a hacer si los habitantes de Gaza eligen ser parte del estado de Israel? Preguntó Avigdor Lieberman, el Ministro de Asuntos Religiosos. – Esa es tan sólo una de las opciones a futuro, tendremos que confrontar el qué quieren ellos con el qué queremos nosotros y 95
encontrar una solución justa para todos. La integración, la existencia de dos o de tres países, la conformación de estados libres asociados o de autonomías son algunas de las posibilidades, pero primero, con el favor Divino, tenemos que eliminar las armas que apuntan a las cabezas de las personas, no puede haber democracia cuando los votos se exigen con fusiles o los resultados se imponen mediante el fraude. Por lo que se refiere al equilibrio demográfico esta acción ha vuelto a despertar el interés entre los judíos de la diáspora, le aseguro que las cifras de absorción se triplicarán durante un lustro, por lo menos. Replicó el Rabino. – El mundo se nos va a venir encima, jamás vamos a poder justificar una operación de esta naturaleza, además tenemos que tomar en cuenta las reacciones directas hacia intereses e instalaciones judías en todo el mundo, ¿consideraron eso? Señaló Fany Goldin. En ese momento un edecán se acercó a la Premier con una tarjeta que ella leyó de inmediato, hizo una mueca de resignación. – El ex ministro Netanyahu insiste en incorporarse a la reunión, le voy a solicitar cinco minutos más, en los cuales quiero que el Rabino nos explique el plan de la manera más concreta posible, sobre todo me interesa saber qué esperan de nosotros, por favor nadie lo interrumpa, las preguntas al final. Adelante señor Montefiore. – Gracias. La operación la Liberación de Hebrón en su primera etapa durará seis días, concluiremos, de acuerdo con el Plan Divino, justo antes del próximo Shabat; en ese tiempo liberaremos por completo el territorio de la Franja de Gaza, atraparemos o haremos huir a todos los integrantes de grupos hostiles a Israel, iniciaremos la reconstrucción de escuelas, 96
guarderías, hospitales, mezquitas, iglesias, sinagogas, casas. Localizaremos, expropiaremos o inhabilitaremos los arsenales por completo, inutilizaremos la totalidad de los túneles que conectan a Gaza con Israel y Egipto y los campamentos de adiestramiento de muyahidines, crearemos centros de distribución de alimentos y opciones laborales de mediano y largo plazo, reactivaremos las actividades culturales y la educación y en todo este dispositivo procuraremos que no muera nadie, ni civiles ni integrantes de los grupos armados. Hasta este momento, a casi cinco horas de iniciadas las actividades, tenemos únicamente tres heridos. Este conjunto de acciones demostrará al mundo seis cosas: Uno, que los grupos armados tienen secuestrados a los habitantes de Gaza, los sufrimientos de la gente en la Franja son resultado de los conflictos y acciones de sus supuestos protectores, por más que estos últimos insistan en responsabilizar por sistema al bloqueo defensivo israelí. Dos, que un número importante de integrantes de los grupos terroristas instalados en Gaza y Cisjordania no son originarios de esos territorios, sino mercenarios musulmanes extranjeros. Tres, que los grupos armados no representan los intereses del pueblo sino los de grupos de poder que buscan la hegemonía en el mundo musulmán. Hamás está al servicio de Irán y Siria, es un apéndice de Hezbollah, Al Fatah está relacionado con Arabia Saudita y Egipto, Ansar Jud Alá con los talibanes más extremistas y con Al Qaeda, otros grupos como Yihad Islámica y Hermanos Musulmanes están vinculados a movimientos fundamentalistas multinacionales y hay decenas de membretes más, de grupúsculos que sirven a diferentes países, organizaciones, grupos de poder o líderes que buscan la supremacía en el mundo árabe o musulmán, como el extinto 97
Muammar Al Gaddafi, que Alá lo tenga en el lugar que le corresponde. No hay tiempo para enredarnos en este momento en todos los detalles, gracias al intercambio de información con el Ministro Barak contamos ahora con un mapa completo de todas las ramificaciones. Cuatro, mostraremos las consecuencias de permitir que la administración de Gaza quedara en manos de un grupo radical como Hamás: las fuentes de trabajo han desaparecido, la infraestructura sanitaria está destruida, la población cristiana, sunita, bahá’í y drusa es víctima de continuas vejaciones, el nivel de la educación en las escuelas es deplorable, se ha sacrificado la educación en las ciencias en aras de la educación religiosa, adoctrinamiento en lugar de conocimiento. Se aplica la Sharia a toda la población por igual, incluidos los no musulmanes, las mujeres están siendo obligadas a usar burkha en las calles y escuelas, es un requisito para permitirles estudiar, han vuelto a practicar la ablación en la niñas, se promueven los matrimonios forzados de menores de edad con hombres mayores y existen redes esclavistas al servicio de Irán o de Arabia Saudita: viudas y huérfanos de mártires musulmanes son enviados a esos países bajo pretexto de brindarles apoyo y educación, ellas terminan como parte de la servidumbre de los jeques o como servidoras sexuales sin paga y los niños son utilizados como limosneros por dirigentes religiosos, en no pocos casos sufren mutilaciones para que provoquen compasión y que la recaudación sea mayor, entre otras bajezas. Además demostraremos el fraude electoral que, con el apoyo de observadores internacionales “neutrales”, le permitió a Hamás asumir el gobierno de forma ilegítima. Cinco, sectores de la Comunidad Europea y grupos 98
estadounidenses consideran a Israel una amenaza a su liderazgo, el antisemitismo persiste en esas zonas geográficas, se mantiene en los niveles previos a la Segunda Guerra y los gobernantes e instituciones de esos países actúan en consecuencia; al final de la semana tendremos pruebas de que, con pleno conocimiento de los donantes, los recursos para ayuda humanitaria se han utilizado en la compra de armamento y en mantener el alto nivel de vida de los jefes de las diferentes facciones islámicas, a costa de la población. Los recursos disfrazados de asistencia social son en realidad un pago para frenar el desarrollo de Israel. Seis, la mayoría de las organizaciones no gubernamentales instaladas en Gaza y Cisjordania esconden tras su fachada humanitaria intereses comerciales, políticos, bélicos, religiosos y étnicos. El capital árabe se sustenta en la extracción del combustible fósil y la principal amenaza a su dominio es el desarrollo de las tecnologías de energía alternativa que impulsa Israel. El dinero del petróleo ha invadido la industria automotriz, los medios de comunicación, la industria de la moda, la industria alimenticia y farmacéutica, el mercado inmobiliario, las bolsas de valores; en pocas palabras los capitales árabes y persas se han ramificado tanto en la superficie como bajo ella, en la búsqueda de utilidades rápidas y sin riesgo. Miembros destacados de la política, las finanzas y la nobleza europea son socios de los plutócratas musulmanes. Las acciones de terroristas y organizaciones de fachada humanitaria en Gaza y Cisjordania están enfocadas a la destrucción del modelo israelí como opción de vida; el espíritu de colectividad y la búsqueda de alternativas sustentables del pueblo de Israel representan una amenaza a sus ambiciones depredadoras. Nuestra visión de futuro, comunitaria y 99
respetuosa de lo creado, choca con sus ansias de poder y de dinero inmediato, ellos buscan vanagloria y riqueza superflua ahora, aunque el planeta perezca. Evidentemente van a intentar bloquear o deformar la divulgación de esta información, lo han hecho muchas veces en el pasado, por eso nos hemos preparado también en la relación con los medios para permitir que se conozca nuestra versión en igualdad de circunstancias. En lo que respecta a los intereses judíos… – Perdón por la interrupción Rabino, se nos ha terminado el tiempo, ¿Tiene alguien alguna objeción en que Biniamín Netanyahu se incorpore a la reunión? Preguntó la Premier Livni. La mayoría encogió los hombros en señal de aceptación, sabían que el protagonismo del anterior ministro no ayudaría a agilizar la agenda, pero no podían excluirlo más tiempo sin que se tomara como afrenta al Likud, su partido, que aún conservaba la tercera posición en el electorado. Exactamente tres minutos después reinició la reunión. – ¿Podemos continuar Rabino? Preguntó la Primera Ministro. Antes de que el Rabino pudiera contestar, Biniamín Netanyahu se adelantó. – Tengo entendido que… – Perdón señor “ex” Ministro, su presencia aquí obedece a una cortesía hacia su partido, pero está usted en calidad de observador. De momento únicamente yo hago las preguntas, es mi prerrogativa como Jefe de Gobierno, al final los ministros en funciones podrán aclarar sus dudas, le suplico que respete esta mecánica. El Rabino Montefiore es el portavoz del Movimiento Shalom, por la cantidad de veces que vibra su Blackberry supongo que cada minuto recibe 100
información actualizada que nos resulta de vital importancia. Netanyahu recorrió con la mirada los rostros de la mesa buscando respaldo, aún los dos ministros integrantes de su organización política se hicieron los desentendidos, asintió con un movimiento de cabeza, sin reprimir la mirada de rencor dirigida a la Premier. – Adelante Rabino. – Se lo agradezco, volviendo al punto en que estábamos, la seguridad de los lugares judíos a lo largo y ancho del planeta ha sido reforzada con la participación de miembros de las comunidades locales, ellos son ciudadanos de los países donde se encuentran las instalaciones, así evitamos violentar las leyes de cada lugar. Desde hace cuarenta y cinco días se han extremado las medidas de control en todos los comercios, industrias, sinagogas, centros sociales, mutuales, museos, centros culturales, escuelas, asilos, clubes, organizaciones lgbtt, en todo sitio del planeta donde sea evidente la participación hebrea se mantiene una alerta ante posibles actos terroristas. Siempre puede ocurrir algo que escape a nuestro control, como un atacante suicida con un supositorio explosivo, que nada más de pensarlo me da escalofrío; – De manera automática todos se reacomodaron en sus asientos. – por eso hemos entrenado a miles de personas para actuar de manera defensiva ante cualquier indicio por insignificante que parezca, lo cual reduce las posibilidades de atentados. – ¿Perdón, dijo usted lgbtt, de lésbico-gay-bisexual-transexualtransgénero?, nunca imagine que escucharía a un devoto hablar de homosexualidad sin alzar los brazos al cielo invocando la ira divina. El Rabino se sonrojó, sonrío antes de continuar. – Para poder estructurar una operación de este nivel tuvimos 101
que partir del respeto mutuo y del reconocimiento de todas las formas de vivir el judaísmo, largo es el tiempo que hemos dedicado a meditar, orar y ayunar para limpiar nuestras mentes y nuestros corazones, liberarnos de los prejuicios, del odio, de la arrogancia que nos lleva a discriminar al pretender que no hay más verdad que la nuestra. Hemos tenido que reaprender los principios de humildad para ser dignos de cumplir con esta tarea, ese fue el primer paso para establecer reglas de convivencia que garantizan el entendimiento entre las diferentes corrientes que están presentes en el Movimiento Shalom. Con el favor de El Ser Supremo hemos logrado incluir a casi todos: Jaredim orientales del Shas, Jaredim lituanos y húngaros, Jasidim de Agudat Israel, algunos radicales moderados de Edah, por llamarlos de algún modo, Gush Emunim, Caraitas, Samaritanos, Observantes, Liberales Reconstruccionistas, Reformistas, Mesiánicos, Agnósticos, Laicos, Ateos, Sionistas, Protosionistas, Ultra sionistas, Socialistas, Anarquistas, Capitalistas, Altermundistas, Heterosexuales, Homosexuales, Asexuales, Askenazíes, Sefardíes, Yemenitas, Beta Israel, Misrajíes, Parsis, Sabras, Bnei Anusim, integrantes de todos los kibbutzim y moshavim, sindicalistas, empresarios, voluntarios de la diáspora que han llegado de Canadá, Estados Unidos, Inglaterra, Francia, Argentina, Marruecos, Etiopía, India, Sudáfrica, Australia, México, Guatemala, Italia, España, Bélgica, Holanda, Alemania, Polonia, Rusia, Rumania, Lituania, la lista es inmensa, tan diversa como rico en expresiones es nuestro pueblo; la mayor parte de las manifestaciones del mundo judío están participando. Además contamos con el apoyo de árabes drusos y cristianos y de cristianos europeos y americanos e incluso de grupos de musulmanes liberales, 102
musulmanas para ser preciso. – ¿Eso incluye en realidad a todos? – Casi todos, con excepción de los jaredim antisionistas y los de la izquierda dogmática, nada pudimos negociar con Neturei Karta, ni siquiera su neutralidad; seguramente los veremos en los próximos días del brazo del señor Ahmadinejad, incomprensiblemente al lado de los otros a los que hice referencia, aquellos que consideran que no hay más verdad que la que sale de la boca del Comandante Fidel Castro. No es que tengamos nada contra el legendario líder cubano, el problema es de los que deifican a los líderes, cualquier opinión vertida por ellos se considera ex cathedra, paradójicamente como las del Papa. Antes obedecían ciegamente al Camarada Stalin y ahora, bueno, me parece evidente que lo de la ceguera prevalece, son incapaces de comprender que los principios de Karl Marx emanan de la Torá y que no puede existir socialismo cuando hay autoritarismo… me excedí, humildemente les pido perdón, no es este el momento ni el lugar para discutir eso. Lo que no pueden negar es que desde la Guerra de Independencia no se había dado en el judaísmo tal confluencia en torno a una acción. – Tal diversidad me hace presumir que no veremos en Gaza autobuses donde las mujeres tengan que ocupar los lugares posteriores, como ocurre ahora en algunas líneas en Jerusalem. Preguntó la Ministro Livni, alzando una ceja con ironía. – De las concesiones otorgadas a Neturei Karta pueden preguntar al señor Netanyahu, aquí presente, ellos piden demasiado y no son recíprocos, vociferan su negativa a reconocer al Estado de Israel mientras disfrutan cómodamente 103
de los privilegios que la ciudadanía les otorga, la cuestión es quién les ha permitido llegar tan lejos. Los jaredim tenemos derecho a mantener nuestra forma de vida, pero no podemos ni debemos pretender que el resto de la población acate nuestras normas, hacer eso nos equipararía al fundamentalismo islámico. Esta es otra de las discusiones que tenemos que postergar, que no es lo mismo que olvidar o relegar. – El Ministro Barak manejó la cifra de ciento cincuenta mil militantes, ¿Qué tan exacta es esa cantidad, cómo están organizados? Intervino la Ministro de Relaciones Exteriores, inclinada hacia adelante, sentada apenas en la orilla de su silla, muestra del interés con el que seguía el desarrollo de los acontecimientos. – Ciento cincuenta y seis mil trescientos ochenta y tres son los que están participando en las acciones en Israel y La Franja de Gaza en este momento, esta semana se incorporarán por lo menos otros treinta mil voluntarios de Israel y veinte mil procedentes de otros países y hay cuarenta mil doscientos catorce en actividades en la diáspora, en labores de seguridad, manejo de medios y acciones preventivas enfocadas a la protección de los intereses judíos. Para la operación hay doce divisiones, no necesito hacer énfasis en la analogía, el número de brigadas en cada una varía de acuerdo a sus funciones: División David, la buena nueva, estrategia, son los responsables de la operación de liberación por mar, aire y tierra, nuestro ejército de paz. División Herodes, el hogar, reconstrucción, rehabilitan todos los hospitales, escuelas, centros religiosos, centros culturales, 104
centros de trabajo, parques infantiles, casas y la red de agua potable. División Yussef, el sustento, los recursos, se encarga de la administración de las donaciones, de impulsar los proyectos productivos y de que los recursos económicos y bienes recuperados lleguen a sus destinatarios originales. División Esther, el cobijo, protección, se encarga de la alimentación, de la dotación de vivienda y de las redes solidarias. División Solomon, el despertar, consolidación, impulsa la generación de fuentes de trabajo, el establecimiento de una nueva organización productiva y administrativa para los territorios liberados. División Abraham, los cimientos, cultura, promueve la reactivación o instalación de centros artísticos de los diferentes grupos étnicos y religiosos, incentiva la interculturalidad y la convivencia mediante las artes, se encarga de las publicaciones y supervisa la operación de medios de comunicación locales y el acceso al contenido de los internacionales: prensa, radio, cine, televisión, la Internet. División Moshé, el impulso, educación, coordina los centros de educación laica, elemental, media, superior e investigación y se encarga de la relación con los centros de educación religiosa. División Shmuel, el aliento, el cuidado y desarrollo del cuerpo, instalación y operación de espacios deportivos y acciones de salud preventiva, buscando que sean compatibles con las diferentes condicionantes religiosas. División Jeremías, la apertura, comunicaciones, recuperación del aeropuerto, caminos, rehabilitación de la red ferroviaria, telefonía, señales de radio, televisión e Internet. 105
División Rebeca, la tierra, medio ambiente y energía, aplicación de soluciones que no alteren el ecosistema, paneles solares, biodigestores, generadores eólicos, generadores marinos, aprovechamiento de la basura, manejo racional del agua, cultivos orgánicos. División Ruth, la integración, soluciones sociales, atención a niños huérfanos, viudas, ancianos solos, inválidos, personas con traumas derivados de actos militares y terroristas, deprogramación de los jóvenes y niños atrapados en la espiral sectaria de odio y violencia, acceso a una infancia y juventud que puedan disfrutar. División Tobit, el ser, la salud, se encarga de los hospitales y de la medicina preventiva. En apariencia hay duplicidad o triplicidad de funciones, en la práctica son confluencias estrictamente delimitadas, como en el caso de la medicina preventiva: para la división Esther representa el cuidado del cuerpo desde la alimentación, el balance nutricional y los alimentos orgánicos, procurar que no exista sobrepeso ni anorexia: para la división Shmuel constituye la integración de cuerpo y espíritu a través de disciplinas como el yoga, el tai chi o el judaísmo zen, se estimulan las actividades deportivas que permitan el desarrollo armónico del cuerpo en estratos alejados del alto rendimiento, no se trata de impulsar atletas de competencia sino equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu, no medallas sino paz interior y concordia colectiva: para las divisiones Abraham y Moshé significa la conciencia de la incorporación de normas higiénicas y de prevención en la cotidianidad, lavarse las manos previene infecciones gastrointestinales, cubrirse la boca al toser reduce la propagación de gérmenes, colocarse el condón disminuye el riesgo de contagio de infecciones de 106
transmisión sexual, pensar en los demás es un principio cultural: para la división Rebeca simboliza el cuidado de la tierra donde sembramos, del agua que bebemos, de la biodiversidad de la que nos nutrimos, si en el punto anterior se habla de pensar en los demás aquí la preocupación es lo demás, si cuidamos a la naturaleza ella es recíproca, ese es el orden establecido por nuestro Supremo Benefactor, El Santo Bendito: para la división Tobit esto implica la materialización de la concepción holística enfocada a la prevención, basados en la experiencia de Yad Sarah y Zaka, los recursos de la alopatía, la homeopatía, la naturopatía, la acupuntura y la psicología se complementan para reducir al máximo los índices epidemiológicos, mientras los mercaderes de la salud tratan de convencernos de lo enfermos que estamos, nosotros buscamos que la gente proteja su privilegio de estar sano. – Impresionante, en verdad resulta interesante el universo que abarcan, lo que en principio parece una operación militar, de repente cobra el aspecto de un, cómo decirlo, quizá la denominación adecuada sea experimento social… no estarán pensando instaurar un estado dentro del estado, ¿cierto? – De ninguna manera, nos mueve el anhelo de paz no las ansias de poder, formamos parte de esa mayoría que aspira a tener tiempo para jugar con sus hijos, para celebrar las fiestas y para sentarse en un café a conversar con los amigos, lo único que deseamos es vivir con la seguridad de que no nos caerá encima un misil y que lo que obtenemos por nuestro trabajo nos alcanzará para las compras de la semana, eso es todo, de un lado y otro de esa valla, que hoy demolimos y que confiamos en que nunca vuelva a levantarse, las personas queremos lo mismo: vivir en paz. En Gaza no pueden seguir aferrados a la falsa promesa de qué cuando Israel sea 107
destruido ellos mejorarán su situación, el que haya estudiado un poco de historia sabe muy bien que sus antepasados vivieron en una Palestina donde no había un estado judío y estaban peor, mucho peor que ahora, la devastación provocada por las demandas de insumos del Imperio Otomano no dejó árbol en pie, la carestía y la insalubridad eran de tal grado que a finales del siglo XIX en este territorio vivían apenas unas setecientas mil personas entre árabes, judíos y funcionarios turcos. Por lo que a nosotros respecta no podemos estar con la preocupación permanente de a ver a qué hora nos cae un proyectil en la cabeza o cuando un pobre alienado se hace explotar a nuestro paso, si ustedes pudieran brindarnos la mínima protección que pedimos a cambio de nuestros impuestos le aseguro que no estaríamos aquí. – Ya veo porque lo nombraron interlocutor, Rabino Montefiore, a pesar de su juventud maneja la discusión como un talmudista de la antigua escuela. Me sorprende lo que escucho, no podemos cuestionar su nivel de planeación, sus argumentos son irreprochables, aunque resulta obvio que no era conveniente que estuviéramos al tanto desde el principio de las dimensiones y pormenores de esta movilización, no dejo de preguntarme si en realidad fueron capaces de ocultar su estrategia a nuestras fuerzas de seguridad o si nuestro acuerdo de tolerancia se interpretó como complicidad, no, no se preocupe, reconozco que tiene razón en que este no es el momento para entrar en aclaraciones, ya habrá tiempo para eso, ¿verdad Ehud?. Vamos a lo que es urgente resolver, la presión internacional, ¿cómo se manejará el asunto con la prensa? – Esta tarde los corresponsales podrán ingresar hasta Nazla y Sheih Radwan desde el control en el paso de Erez, esa zona 108
estará fuera de peligro. – ¿Y qué encontrarán? –Con el favor de HaShem y en su Santo Nombre, ellos van a encontrarse con niños árabes jugando con niños judíos, a rabinos, imanes y sacerdotes cristianos conviviendo, a miles de personas de diferentes países, colores de piel, religiones y lenguas trabajando juntos en la reconstrucción de escuelas, hospitales y sitios religiosos. Podrán sentir el alivio de los habitantes de Gaza al no tener a los terroristas encima e incluso podrán verlos asistiendo a conciertos, obras de teatro, presentaciones de danza o en talleres de lectura, narrativa y de creación plástica. – ¿Ésta misma tarde? – Esta misma tarde. – ¿Invitaron a Baremboim? – Invitamos a músicos que dan conciertos, a bailarinas que danzan, a actores que actúan, a escritores que escriben, a pintores que pintan, no nos interesan los músicos que hacen política. Respetamos al señor Baremboim, que El Santo, Bendito Sea, lo proteja y lo colme de bendiciones. En lo personal considero que es uno de los mejores directores de orquesta del mundo y hay que escuchar la música que él dirija en toda oportunidad que se presente, hasta ahí, debemos poner atención a sus composiciones e interpretaciones no a sus palabras, no entendemos sus sentimientos de culpa por ser judío. Preferimos a los judíos orgullosos de ser judíos, a los musulmanes y a los cristianos que se precian de lo que son, sobre todo si respetan las creencias y los derechos de los demás. – ¿Está seguro que podrán con la prensa? Recuerde que siempre nos buscan los pies. 109
– Muchos de ellos, como siempre, verán únicamente lo que quieren ver, pero día a día el peso de la verdad nos permitirá ganar terreno; son tantas las cosas que tendremos para mostrar que al final los dejaremos sin argumentos. En los países que han estado enviando ayuda a Hamás la indignación crecerá cuando mostremos la diferencia de vida entre los dirigentes y el pueblo, el abandono en que se encuentran inversiones como las plantas de tratamiento de aguas residuales que nunca han puesto a funcionar, los hospitales que nunca han recibido las medicinas y equipamiento que les donaron y que no están ahí no por culpa del bloqueo israelí, sino porque se convirtieron en botín de las milicias, evidencia de que la corrupción en Gaza es tan alta como la de los países latinoamericanos o africanos, ni siquiera los de Haaretz podrán poner objeciones. Pero también, ya lo mencione antes, hemos tomado precauciones, hemos convencido a hombres de negocios de Israel y de la diáspora de adquirir acciones de periódicos y canales de radio y televisión en diferentes países, aunque aún estamos en desventaja de cuatro a uno frente a los intereses islámicos en esos ramos, las nuevas condiciones nos permiten contrarrestar sus estrategias de desinformación. En la Internet nos hemos consolidado y llevamos una ventaja de dos a uno, tenemos páginas y blogs en casi todas las lenguas. – Me pregunto quién está pagando todo eso. – Mucha gente, ustedes entre muchos, agradecemos su generosidad, pero creo que tampoco es necesario ver eso ahora, le informaremos con detalle llegado el momento, ahora la prioridad es ganar esta batalla. Barak, el Ministro de Defensa, alzó levemente la mano, la Ministro le cedió la palabra. 110
– ¿Un olé guatemalteco llamado Zvi Bartomeu tiene algo que ver en este asunto? Oheb Montefiore respiró profundo, sabía que las explicaciones que tendría que dar inmediatamente después de contestar esa pregunta, requerían de toda su lucidez y de su habilidad para navegar en aguas turbulentas, imploró mentalmente la ayuda Divina antes de responder con calma. – Así es… él recibió la revelación que puso en marcha esta operación. – Rabino, van varias veces que menciona la intervención de la Divinidad, la intervención directa, estamos en el siglo XXI, las revelaciones y los milagros ocurrieron hace miles de años, no me diga que ustedes también andan rascando entre viejas profecías. Recuperó la palabra la Jefe de Gobierno, todos sabían del escozor que le provocaban las manifestaciones religiosas extremas. – No, no se trata de ninguna antigua profecía, en este caso por Gracia Divina se trata de una novela escrita recién por el señor Bartomeu, en ella se describe como debíamos estructurar la operación y todo lo que ocurrirá, hasta llegar al triunfo justo antes de Shabat. – ¿Y después? – Ahí concluye la novela, después HaShem, que Su Luz ilumine nuestros pasos, nos permite utilizar nuestro libre albedrío para concluir con inteligencia su obra. – La p…, perdón señores ministros, no quiero soltar improperios pero esto me parece por lo menos extemporáneo, Rabino, está hablando en serio cuando dice que armaron ésta operación por inspiración divina. – Así es señora, con todo el respeto que usted merece, le 111
recuerdo que lo único infinito es El Creador de todo lo visible y lo invisible, Adonai no caduca ni podemos considerarlo extemporáneo, no está sujeto a nuestra temporalidad, ha aparecido y aparecerá cada vez que considere necesario indicarnos que debemos enderezar el rumbo, porque somos el pueblo que Él eligió. Su Divina Presencia se hizo manifiesta cuando le indicó al Patriarca Abraham que debía de abandonar Ur e ir a buscar la tierra donde germinaría su semilla, le recordó a los sometidos en Egipto que eran hombres libres y envió al Patriarca Moshé a mostrarles cómo sacudirse las cadenas, les recordó a quienes se dejaban envolver por los ensueños de Babilonia que su lugar estaba aquí, en la tierra que todavía hoy nos alimenta, envío al Profeta Elías a señalar a los israelitas que no eran para ellos el fasto y la lujuria sino el trabajo y el amor, encendió después la furia de los Macabeos contra quienes pretendieron que Zeus podía suplantarlo. Hace unas décadas nos mostró que la atractiva Europa es cruel y traicionera, que nuestro suelo es este por más que a principios del siglo pasado no quedara aquí más que un amasijo de rocas y arena, hoy ha vuelto a señalarnos nuestras fallas. Todos los ministros escuchaban azorados, sabían que la reunión había entrado en una zona peligrosa, esa línea imprecisa entre religiosidad y laicismo donde todos los gobernantes de Israel se han movido con tiento, cuando el Rabino Montefiore calló nadie tomó la palabra, transcurrió casi un minuto antes de que la Primera Ministro preguntara con voz muy baja. – ¿Qué está tratando de decirnos? – Que hemos olvidado la generosidad que teníamos cuando no poseíamos nada, fuimos magnánimos en la pobreza y hoy 112
somos mezquinos en la riqueza, hemos abandonado la sencillez, ¿recuerdan los trajes luidos y las camisas arrugadas de Menahem Beguin?, ¿acaso eso le restaba autoridad?, los actuales líderes son soberbios, se transportan en vehículos de lujo, utilizan el dinero del pueblo para comprar joyas, trajes de diseñador, habanos, coñac, helado, gastan fortunas enteras en cortes de cabello y escatiman recursos a los olim. El Estado de Bienestar cedió su paso a las Amutot, caridad en lugar de trato digno. Han dejado a su suerte a los pensionados, reducen los presupuestos para educación, niegan becas a los estudiantes de las yeshivot, han olvidado las promesas de ayuda a los países en desarrollo, que eran nuestros amigos, han dejado a nuestros hermanos árabes de Gaza y Cisjordania en manos de los señores de la guerra, colocan altos muros para no ver su miseria, hablan de ganancias como si el gobernar fuera un negocio y no la oportunidad que Ha Shem les brinda de servir a los demás. Sabemos lo que los terroristas son capaces de hacer, pero eso no justifica que no hagamos nada por detenerlos, no han pensado en la posibilidad de que cada misil Qassam lanzado a Sderot contenga los gritos de auxilio de la población civil de Gaza, ocultos entre la inmensa carga de odio del fundamentalismo islámico. A nosotros no nos ha sido asignado el venir a decirles qué está mal o qué está bien, no pretendemos tener esa atribución, nuestra misión es ir a tender la mano a quienes necesitan ayuda, pero aprovecho que puedo dirigirme a ustedes para invitarlos a no dejar pasar la oportunidad de ver hacia su interior, aún es posible reconstruir la relación entre pueblo y gobierno, sin ese primer paso no podremos reconciliarnos con el exterior. Si me permiten abusar de su tiempo y paciencia les cito un 113
ejemplo: cuando la señora Golda Meir instituyó el Mashav su idea era compartir nuestras pequeñas experiencias con las naciones en desarrollo, ese eufemismo de la pobreza, para ayudarles a encontrar el camino del desarrollo sostenido. Hoy los procesos de selección de los becarios tienen que ver más con las posibilidades de negocios que representan en el corto plazo para los instructores de la institución que con las necesidades de quienes nos están solicitando apoyo, la intención no es más el dar sino el lucrar. Esa es tan sólo una pequeña muestra de cómo se han pervertido las diversas instancias públicas, hemos olvidado nuestros mitzvot, hemos renunciado al placer de compartir, al privilegio de poder mirarnos al espejo cada mañana y sonreírnos a nosotros mismos al saber que tenemos la conciencia tranquila. De qué sirve el dinero si no tenemos tranquilidad espiritual. En la mesa más de la mitad de los ministros habían cerrado los ojos para concentrarse en las palabras del Rabino, tras unos instantes la Premier sintió que era necesario dar un giro para reactivar la sesión, tenía que encontrar unos momentos en el día para reflexionar sobre lo que acababa de escuchar, pero en ese instante era necesario seguir adelante, con todo el aplomo del que pudo hacer acopio preguntó. – ¿Todo eso dice su novela? – No, eso lo dicen nuestras conciencias, la novela narra lo que está aconteciendo y lo que ocurrirá en estos siete días, nada más. – ¿Y no menciona que le voy a decir al Presidente Barack Obama saliendo de esta reunión?, ¿podría proporcionarme un ejemplar? – Sí a lo primero, no a lo segundo, lo lamento, no puedo entregarle ningún ejemplar, únicamente existen cuatro. 114
Además de los señores Bartomeu, me refiero al matrimonio, no a padre e hijo, únicamente tres personas conocen el contenido completo, si algo les pasa a alguno de ellos yo soy el siguiente en la jerarquía y entonces podría leer la novela en su totalidad. Hasta donde tengo entendido es muy específica aunque, por supuesto, ocurrirán cosas que no están escritas, sin embargo señala que usted logrará sortear los problemas con los líderes mundiales durante toda la semana, hasta que logremos cumplir con la primera parte de nuestro objetivo. En el transcurso irán sucediéndose eventualidades que le ayudarán a acallar las protestas, como la agenda electrónica que viene en camino y que fue encontrada en poder del líder de los Mártires de Al Aqsa, la cual contiene los números de los teléfonos móviles de los señores Bush, los dos ex presidentes y los que fueron gobernadores de Texas y Florida, de por lo menos diez miembros de la familia Bin Laden, de los que siguen vivos, además aparecen directivos y propietarios de por lo menos quince compañías petroleras, varios jeques con intereses en occidente, empresarios de la talla de Carlos Slim y Mohammed Al Fayed y personajes peculiares como Carlos Saul Menem, no pretendemos acusar a nadie de complicidad en actos terroristas o ilegales, que quede claro, pero coincidirá usted conmigo en que resulta un tanto extraño que un extremista tenga contacto con esas buenas personas, ¿no le parece?. Por lo pronto esa información bastará para enrarecer el ambiente respecto al operativo, mañana puede llegar a servirnos para demostrar algún tipo de relación, ya se verá, le aseguro que a más de uno de los mencionados esto le va a provocar dolor de cabeza. La agenda viene en camino junto con el teléfono satelital del detenido; se nos ocurre, si están de 115
acuerdo, que ustedes podrían llamar a algunos de esos números desde el teléfono decomisado, un código que los receptores tienen registrado, tres o cuatro llamadas serán suficientes para que el tono de los reclamos internacionales disminuya. – ¿Tienen a Zacarías Zubeidi?, ¿qué van a hacer con él? Preguntó efusivo Ehud Barak. –Sí señor Ministro, está en una prisión que hemos habilitado en un punto del que a usted, sólo a usted, puedo dar la ubicación exacta. Pido con sincera pena perdón a los demás por esta precaución, aunque el lugar está fuertemente resguardado ninguna cautela es poca, les toca decidir a ustedes en que momento empezaremos a transferirles a los prisioneros. – ¿Cómo está? – Sin un rasguño, no hubo muertos ni heridos en su captura, aspiraron un poco de gas hilarante pero en este momento se encuentran en perfecto estado de salud, su estado físico lo certificó la Maguen David Adom y la Cruz Roja Internacional podrá hacerlo cuando guste. – Algo en mi interior me decía que esto iba a funcionar, por disparatado que parezca. Dijo Barak. – Aquí surge uno de los puntos en que necesitamos ponernos de acuerdo, Zubeidi tenía en su poder trece millones de euros, quince millones de dólares y cuatro millones de shekels, en números redondos, esos recursos han sido requisados por nuestro movimiento para la reconstrucción de Gaza, podemos entregarles a los terroristas que encontremos, pero los recursos económicos, los bienes y las armas no, los necesitamos para seguir adelante. 116
– ¿No me diga y qué otra cosita necesitan de nosotros? Preguntó la Jefe de Gobierno con una mueca de desagrado. – Que contengan las protestas internacionales, que se nieguen a cualquier intervención de los cascos azules de la ONU, de efectivos de la OTAN o de las fuerzas armadas de cualquier país, que convenzan a Egipto de colaborar para que los militantes de los grupos armados no se desborden por su frontera y que mantengan el cerco sobre Hebrón, porque para nosotros no resulta conveniente desviar fuerzas y recursos que necesitamos en Gaza. – ¿Nada más? Contestó con frialdad. – Permítame decirle Rabino que lo de qué no les conviene actuar fuera de Gaza no lo tienen del todo claro, hay por lo menos ochenta patrullas de ustedes cubriendo el Neguev, recorren la frontera desde nuestro lado. Intervino Barak, en actitud tranquila. – Son ciento dos exactamente, si ustedes prefieren hacerse cargo las retiramos de inmediato; la función de esas patrullas es impedir la huida a través de los túneles en el desierto, el Tzáhal tiene torres de vigilancia cada tanto, pero algunos túneles se adentran hasta dos kilómetros en Israel. – ¿Y qué va a ocurrir cuándo todo termine, estimado Rabino? – Las armas se las entregaremos al Tzáhal en su totalidad, las requisadas y las adquiridas para la operación, a excepción del equipo prestado o rentado que estamos obligados a devolver a sus propietarios y lo que se requerirá para la seguridad de la operación de reconstrucción que llevará un largo tiempo, eso dependerá del acuerdo final con su Gobierno. El dinero y bienes se utilizarán íntegramente en los fines para 117
los que fueron asignados en origen, para ayuda humanitaria, se realizará una auditoría y los organismos internacionales podrán conocer las cifras y su aplicación, no se destinará de ahí ni un shekel para cubrir los gastos de la operación del Shin Mem, todo se hará llegar a sus destinatarios mediante obras, servicios y alimentos. La situación política futura en Gaza dependerá de los deseos de sus habitantes y de las negociaciones y decisiones a que lleguen ellos con ustedes. En cuanto a nosotros, cuando todo haya concluido el Shin Mem transferirá al Gobierno los asuntos de competencia oficial y continuará como una oenegé más, actuando dentro del marco de la ley en la búsqueda de la paz. – Perdón por insistir, ya me dijo que lo veremos más adelante, pero quizá pueda adelantarnos en líneas generales cómo están financiando una operación de esta magnitud, esa es una de las primeras preguntas que los presidentes de otros países me hacen. – Con la ayuda de miles de empresas y personas, incluidos ustedes, todos los que están aquí sentados han sido donadores generosos, al igual que empresas judías de todo el mundo, muchos kibbutzim, moshavim y yeshivot, cineastas, artistas famosos, modelos, deportistas, empresarios millonarios, incluyendo a dos o tres que de momento disfrutan de la hospitalidad de alguna institución penitenciaria en sus países de origen, ah, e iglesias cristianas, pese a que nos negamos rotundamente a asumir el compromiso de invadir la Plaza de las Mezquitas, recuerden que están muy interesados en la edificación del tercer Templo, por aquello de las profecías. Además están los recursos decomisados y mucho equipo que tenemos prestado para probar su efectividad: ordenadores, 118
generadores, barcos, vehículos, aviones, armas… – Va a parecerle necedad, pero, ¿de casualidad el Tzáhal no les habrá prestado armas o vehículos? – De ninguna manera, algunos proveedores del Tzáhal sí, pero no el ejército, un considerable número de empresas israelíes, europeas, rusas, japonesas, chinas y norteamericanas están probando armas, vehículos y dispositivos electrónicos en esta operación. Al final les entregaremos un informe para que se cercioren de que no hay nada ilegal, ni siquiera evasión fiscal. – ¿Están pagando impuestos de todo lo adquirido y lo que proviene del extranjero? – Bueno, mmh, – vio nervioso a su alrededor, notó que el Ministro del Tesoro se enderezó en su asiento – le aseguro que evasión no hay, muchas cosas adquiridas en el exterior se están descargando directamente en playas de Gaza, por lo que técnicamente no han tocado suelo israelí. – Muy listos, veo que pensaron en todo, ¿y cuál fue el acuerdo con los colonos, acaso piensan llenar La Franja de asentamientos ilegales? – No, ilegales no, los grupos de colonos aceptaron que únicamente se construirán asentamientos judíos en terrenos adquiridos mediante transacciones estrictamente comerciales, sin ningún tipo de coerción, pero tampoco permitiremos que sean vejados, encarcelados o ahorcados por la Autoridad Nacional Palestina o por Hamás, los habitantes árabes que decidan de manera libre vendernos tierras o inmuebles. Además se establecerán asentamientos cristianos, drusos, bahá’ís y una comunidad budista tibetana, la pluralidad será la garantía para una paz permanente. Si en Israel pueden vivir personas que profesan la fe islámica, 119
al igual que lo hacen en países de África, Europa, Asia o América, entonces en territorios de población mayoritaria musulmana también pueden y deben vivir personas que profesan otras religiones, la diversidad enriquece a las sociedades, el dramaturgo Amos Oz dijo en alguna ocasión que “imaginarse al otro es un antídoto poderoso contra el fanatismo y el odio”, pues convivir con el otro es aún mejor, a través del conocimiento surge el respeto. – Bien, bien, ¿y qué pasará con Cisjordania? – Si la novela lo dice aún no estoy enterado; pero me parece que antes de pensar en Cisjordania es necesario resolver nuestros pendientes en la Franja de Gaza. – Rabino, vamos a necesitar mucho más que una agenda y un teléfono satelital. – Lo sabemos señora, conforme surjan los problemas encontraremos las soluciones. – Por lo que respecta a Egipto le informo, Rabino, que al menos en principio parece que habrá colaboración. La protesta inicial del presidente egipcio fue por mero formalismo, para que quedara registrado por la televisora Al Jazeera y se mantengan sus índices de popularidad, sin embargo hace cuarenta minutos nos comunicó por canales extraoficiales que su frontera está blindada, nadie de Hamás o de la Yihad Islámica podrá escapar por ahí, pero es evidente que los de Al Fatah, la Organización para la Liberación de Palestina, Mártires de Al Aqsa, Hermanos Musulmanes y otros grupos afines gozan de su protección. En todo lo que resulten afectados los grupos protegidos por Irán, Siria y Al Qaeda él estará feliz. – De cualquier manera ya hemos destruido veinticuatro túneles hacia Egipto, sin herir a nadie, aunque tres militantes 120
menores lograron huir. – Los detuvieron al salir, quizá van a tener que dejar escapar a otros para que el presidente egipcio demuestre al mundo su celo en la lucha antiterrorismo, pero eso dependerá del rumbo que tomen los acontecimientos en los medios internacionales. – Señora, esta misma tarde cuando los corresponsales de prensa ingresen a la zona liberada recibirán la primera sorpresa. – ¿Y si todo sale mal? – Si sale mal perdemos todos, no podemos negar el riesgo, las señales de HaShem son claras pero nosotros somos humanos, podemos interpretar mal sus designios. – ¿Alguna pregunta señor Netanyahu? Invitó la Premier. – Tengo miles de preguntas. – Por favor, no tantas, los ministros también desean preguntar algunas cosas y me parece que el Rabino tiene poco tiempo, ¿No es así? – Bueno, no precisamente, por lo menos nuestra intención es otra, si ustedes están de acuerdo en que permanezca aquí, mi función es estar a su disposición el tiempo que sea necesario, ya notó que mi teléfono está vibrando con frecuencia, además mis asistentes me cambian el aparato cada hora, las emisiones vienen desde señales distintas, es prácticamente imposible que nos intercepten o nos infiltren información falsa. Lo hicimos para proporcionarles a ustedes información de primera mano sin interferencias, desde nuestro alto mando, la veracidad de lo que les decimos la pueden corroborar con los datos de los ciento veinte militares que aceptamos que ustedes colocaran en posiciones estratégicas y con lo que les envían sus satélites y aviones de observación, hemos delimitado coordenadas y 121
altura para no interferirnos mutuamente, ¿no es así señor Barak? El Ministro de Defensa afirmó. Un edecán pasó una tarjeta a la Premier. – Rabino, en diez minutos el Papa estará en la línea, alguna idea de cómo sortear las cosas con el Vaticano. El Rabino Montefiore dedicó medio minuto a buscar entre los mensajes recientes y sonrió. – Garantícele que no habrá pérdidas humanas, que se respetarán absolutamente todas las instalaciones de la Iglesia Católica, que se destinarán recursos a la reconstrucción de iglesias, albergues y conventos, y que, a pesar del profundo dolor que nos causa en el alma hemos tenido que aprehender al capellán y a tres religiosas del programa Cipo per il Bambini Palestiniano, de la orden de Santa María del Sacre Cuore. En la bodega de alimentos de su sede, en el campo de refugiados de Jibaliya, encontramos dos toneladas de armas y municiones y un lote importante de películas de pornografía infantil, algunas de ellas realizadas con niños de su propio albergue, además el Padre Nino ocultaba en su habitación a un peligroso terrorista, al parecer amigo suyo, íntimo. En este momento clasifican el material, esta misma noche podrán ustedes enviar al Vaticano una relación detallada. Si lo considera prudente puede ofrecerle a Su Santidad nuestra absoluta discreción al respecto, no creo que deseen otro escándalo de pederastia en estos momentos, con lo que les ha llovido a esos pobres hombres. La Primera Ministro se levantó para tomar la llamada en su despacho, a pesar de todo se veía relajada.
122
V
Tras una capacitación intensiva en las claves y el tipo de acciones, los reservistas, militares retirados y militares encubiertos que se acababan de incorporar a la brigada Bar Kojba entraron al comedor del campamento Aleph Tav, más o menos a la misma hora en que en Jerusalem iniciaba la reunión de ministros. La Teniente Schneider disfrutaba de su desayuno a base de yogur con trozos de pepino fresco, rociados con hojas de eneldo, aceite de oliva extravirgen y una pizca de sal y pimienta verde, cuando sonó la alarma –escuadrón Lamed Nun – emitió el altavoz, engulló el contenido del tazón en un suspiro y al levantarse se llevó un par de huevos cocidos para el camino, mientras se colgaba la mochila. Fue la última en abordar la unidad que ya arrancaba. – ¿Qué tipo de vehículo es este? – Preguntó a su compañera de asiento. – Es un prototipo, un Dromedary evx, el viejo sueño medieval de la rueda del movimiento perpetuo, es un todoterreno eléctrico que se autoabastece de energía por tres vías: la 123
rotación de sus propias ruedas, un sistema helicoidal de absorción del aire que impulsa con su propio avance y la captación de energía solar en los paneles adosados al capacete; puede rodar cien mil kilómetros sin detenerse, esa es la vida de los neumáticos, no tiene caja de embragues ni necesita de filtros al no existir la fricción que ocurre dentro de un motor de combustión interna, las piezas de tracción y frenado están selladas y tienen una vida promedio diez veces superior, su potencia es equivalente a la de un tractocamión, además cuenta con un sofisticado sistema de rastreo y más sorpresas y juguetes que el Aston Martin de James Bond, si todo funciona como pretendemos estos vehículos sustituirán a los Granito en el Tzáhal. – ¿Cómo sabes tanto? – Soy parte del equipo que los desarrolló, mi área es la electrónica, en cada escuadrón donde tienen prototipos hay un técnico de la empresa para observar su comportamiento, aunque también participamos en el resto de las acciones, tenemos un doble interés en el asunto, como voluntarios del Shin Mem y como diseñadores del vehículo, si lo deseas tanto como yo, cuando acabe el jaleo tomamos una copa en algún bar de Tel Aviv y te explico mejor cómo funcionan. Daniela la vio a los ojos, sonrió con coquetería, introdujo la mano entre los senos de su compañera y extrajo la placa de identificación que colgaba de su cuello, de un vistazo retuvo el nombre. – Es un trato Noa. Noa también metió la mano entre los senos de Daniela y vio su nombre en la placa. – De acuerdo Daniela. Del asiento delantero llegó el comentario efusivo del 124
soldado de infantería Biniamín Tamir. – Qué bonito, un romance entre las dos tenientes, eso es un excelente augurio para todos, siempre que el amor surge en plena acción las cosas marchan bien. – ¿Por qué no te dedicas a tu trabajo y dejas de andar de fisgón? Le espetó Noa. – ¿Puedo encender el IPod integrado? Preguntó Biniamín sin darse por aludido al reclamo. – ¿De casualidad no querrás poner La cabalgata de las Valquirias?, ¿acaso te la pasaste viendo Apocalypse Now anoche por enésima vez?, olvídalo, esto no es el cine, estamos en el mundo real, si vamos por ahí tarareando canciones volaremos en pedazos en cualquier momento, aguza la vista y el oído, por donde circulamos debe haber cientos de trampas, ya tendrás tiempo para Wagner o Lady Gaga en los descansos… si es que llegamos a tener alguno. Le contestó firme Noa. En el veloz recorrido por las callejuelas de Beit Hanoun, Daniela pudo observar que el trabajo de los Osos Trogloditas se parecía más al de los vendedores puerta por puerta que al de militares conquistando posiciones, alcanzó a escuchar algunas risas de las mujeres que les abrían la puerta cada que, con un derroche de amabilidad que rayaba en la comedia, solicitaban revisar el interior de las casas. Diez minutos más tarde un muro de negros caftanes se abrió para que pasaran los tres vehículos, que se detuvieron enseguida, a veinte metros estaba un portaaviones terrestre, el jefe del escuadrón, Comandante Machir Meir, les hizo una seña para que lo siguieran, pasaron frente a la cabina individual donde estaba el conductor, en la caseta posterior 125
encontraron a los operadores que maniobraban los controles remotos de los pequeños aviones robot y codificaban las imágenes que enviaban mediante las computadoras conectadas vía satélite a la central en el campamento y al cuartel general, desde ahí observaron la batea plana posterior que funcionaba como pista de despegue y aterrizaje de los cincuenta Birdy a cargo de esta unidad, la autonomía de vuelo de las mini naves es de un kilómetro únicamente, por lo que el centro de control debe ubicarse relativamente cerca del lugar donde se utilicen. Machir, Daniela y Noa analizaron en pantalla una casa situada a doscientos metros. – Logramos colar adentro uno de los Birdy, eso nos permitió dar un vistazo antes de que lo destruyeran, la casa tiene cinco habitaciones, por lo que vemos hay unos diez tipos armados, aunque es posible que existan instalaciones subterráneas donde se escondan más, no se aprecian espacios para emplazar baterías antiaéreas o lanza misiles. En estas imágenes notamos que se mueven con extremo cuidado en el jardín trasero, por lo que creemos que debe estar minado, así que si los atacan por el frente su propia barrera de protección les cortará la retirada, de cualquier manera es casi imposible huir por esa ruta, la barda linda con una callejuela que ustedes pueden bloquear sin problemas, es angosta. Podemos lanzar cargas de gas lacrimógeno desde un Herón, estaría aquí en cinco minutos, así ustedes los atrapan cuando quieran salir por cualquiera de los dos lados posibles. Les indicó el oficial del portaaviones. – Quizá existan vías de escape por las casas colindantes. – Negativo, lo tenemos verificado, los Osos pudieron acceder a las casas de ambos lados, no hay manera de que se cuelen por ahí, además no gozan de la simpatía del vecindario, son 126
sauditas e iraquíes, sunitas, el barrio es cristiano. – ¿Tienes el desplante del inmueble, de la parte visible? Pidió Machir. – Aquí está junto con toda la manzana y la anterior y posterior, podemos verlo en planta y en perspectiva, en la construcción original tenemos una sola planta sin sótano, pero la pueden haber modificado, por el frente hay nada más una puerta de una sola hoja, de menos de dos metros de altura, y dos ventanas, las contraventanas de madera están cerradas. Por la parte trasera la puerta al jardín ha estado abierta todo el tiempo y la única ventana carece de contraventanas, el problema es el jardín mismo. Enfrente hay una casa de dos plantas con una pequeña terraza, me parece que desde ahí se tiene un buen ángulo de tiro. – Sí, no tiene caso arriesgar un Herón, ya perdimos un Birdy, vamos a intentarlo con ballestas. Regresaron al todoterreno donde se reunieron con los comandantes de otros dos escuadrones, treinta y un militares se colocaron mascarillas antigás y avanzaron para rodear la construcción de una planta donde se había detectado la presencia de terroristas. Daniela colocó el adaptador lanza dardos al Galil SAR y le abatió la culata, se lo colgó a la espalda, en las manos llevaba una de las ballestas para lanzar granadas de gas; cuando estaban a cincuenta metros del frente que tenían que atacar, un comandante de la brigada Jericó les indicó que podían utilizar la casa, los habitantes estaban de acuerdo, subieron a la planta alta y desde la terraza, agachados, comprobaron que la visibilidad era buena. En el frente de la terraza cabían nada más tres personas, un tanto apretadas, Daniela eligió a dos de los integrantes de la patrulla, Noa y Machir se fueron con los 127
demás para rodear la casa y resguardar el frente, a fin de agilizar los movimientos Daniela decidió que podían asumir un pequeño riesgo. – Dejen el Galil recostado en el piso, frente a ustedes, con las cargas de dardos listas, sujeten el cargador de balas en la mano izquierda, nuestra primera opción será inmovilizarlos, si las cosas no salen bien retiren el adaptador con la derecha mientras colocan el cargador con la izquierda, sujetan el arma con las piernas; primero disparamos el gas con las ballestas, ustedes dos por la puerta y yo por la ventana, tiramos, soltamos y tomamos enseguida los rifles, cada uno cubre treinta grados, el del centro quince y quince a partir de cero, que es la puerta, ¿entendido?. Gove izquierda, Tamir centro, yo derecha. Se comunicaron con Machir por el teléfono satelital y acordaron la hora del ataque. A las 0917 dispararon las tres cargas de gas que entraron con limpieza, por el frente lanzaron una flecha con una carga mínima de explosivo plástico C4, en cuanto impactó en la puerta se produjo una detonación con la fuerza suficiente para derribarla, dos segundos más tarde penetraron por el hueco otras dos cargas de gas lacrimógeno, tres fedayines salieron al jardín trasero en desorden, uno de ellos olvidó la presencia de las minas, dos cuerpos volaron mientras el tercero, malherido, alcanzó a trepar la barda, Daniela le ensartó un dardo con narcótico en la pierna, el hombre cayó sobre la callejuela. A una señal de Daniela cambiaron los lanzadardos por los cargadores de balas de sus rifles pero ya no hubo más movimientos en ese lado. Por el frente treinta y cuatro cañones estaban atentos a 128
cualquier reacción, una ventana se abrió y asomó una mano que agitaba con desesperación un pañuelo blanco, uno a uno empezaron a salir hombres y mujeres con un brazo en alto, con la otra mano sujetaban contra la nariz y los labios sus kuffiyot humedecidas en agua. Con movimientos del rifle el comandante Meir les indicaba que caminaran en dirección a un corredor formado por dos vehículos estacionados en paralelo, donde eran revisados y despojados de las armas, teléfonos móviles y relojes electrónicos, tras sujetarles las manos a la espalda con cintas plásticas de cremallera, los enviaban con los paramédicos quienes les colocaban una mascarilla de oxígeno por unos minutos y comprobaban sus signos vitales. Meir le preguntó al médico a cargo. – ¿Finalmente acordaron algo respecto a los supositorios explosivos? – Es suficiente con retirarles los teléfonos y relojes, no es posible detonarlos a más de diez metros, consideramos que no tiene caso someterlos a una revisión humillante, además para nosotros representaría bastante más tiempo, en realidad el explosivo plástico no es tan fácil de conseguir en el mercado negro, por eso siguen siendo más populares los cinturones de dinamita alrededor del tórax. En la casa sí existían instalaciones subterráneas, se entregaron veinticinco personas, en cuanto se despejó el humo en el jardín se confirmó que había dos cadáveres, el herido iba ya a bordo de una ambulancia. Minutos más tarde arribó el General Mordechai Mesel, comandante en jefe de la división David, un hombre robusto, calvo, de mediana estatura, una de esas personas que no necesitan portar insignias para mostrar quién es el que da las 129
órdenes, se veía profundamente contrariado, lo acompañaba el General Nitai Maron, el comandante de la brigada Bar Kojba, alguien difícil de imaginar en tareas militares, de baja estatura, aspecto frágil y mirada huidiza, llevaba colocada una kipá tejida, sujeta con un broche a su cabello ralo, ambos acompañaron a Meir en la entrevista con la Teniente Schneider y los soldados, sin aspavientos solicitaron ser informados del desarrollo de los acontecimientos, revisaron las armas para comprobar que el único disparo fue el del dardo. Mesel se comunicó al Comando Central. – Vamos a tener que hacer algo que no me gusta Meir, vamos a ocultar a los muertos, vienen en camino otras dos ambulancias, los trasladaremos como heridos, en cuanto se despeje el gas desactiven todas las minas y trampas posibles, la brigada de Limpieza borrará toda huella de la explosión, los cadáveres se llevarán a un depósito refrigerado, reconoceremos las bajas en un par de días, pero no hoy, justo cuando estamos iniciando. Los Birdy reportan que no hay más gente dentro, pero abajo hay muchas cajas, esto es un arsenal, tengan mucho cuidado, pueden haber dejado un detonador activo. Sigan con su trabajo y que no mencione nadie lo ocurrido, esto no es su culpa pero no debe haber bajas en ninguno de los bandos, no hoy por lo menos. Dos horas después la operación había concluido, tras tres nuevos recorridos de los microaviones robot pudieron reconocer en las imágenes la presencia de trampas explosivas en la escalera al sótano y un sensor de movimiento conectado a un detonador, con los detectores de metal encontraron otras cuatro minas en el jardín, en las cajas había componentes rusos e iraníes para armar quinientos misiles Grad. 130
Las ambulancias tomaron el rumbo de la costa por Atatra, los cuerpos fueron llevados en un yate a un almacén refrigerado en Ashdod. Cuando abandonaron el lugar ya estaban en acción efectivos de las brigadas de Reconstrucción y de Almacenaje. Daniela se acercó al comandante Meir. – ¿Cómo descubrieron el enclave? – Cuando una falange se acercaba fueron recibidos a tiros. – Tuvimos heridos. – Ninguno, que bueno que me lo preguntas, alcancé a escuchar en el desayuno tus dudas sobre los escudos, ven, quiero mostrarte algo. En un vehículo de carga estaban cuatro escudos, cada uno tenía atrapadas entre seis y diez balas. – Observa esto Daniela. – Son balas de nueve milímetros, es increíble. – Es parte de la tecnología que se está poniendo a prueba, están fabricados de policarbonato con una micromalla integrada, de una aleación rara, titanio, platino y algún otro metal, desconozco los componentes exactos pero me han dicho que resiste más de mil grados centígrados, cada hilo está formado por un centenar de microfilamentos, el sentido de colocación de los hilos es muy importante, fíjate en la torsión que provoca cada bala en su impulso, una espiral idéntica en todos los casos, las balas no logran avanzar más de dos centímetros, ninguna parte del cuerpo queda a menos de cuatro centímetros del escudo, ese es el espesor de la barra de sujeción; al impactar, los proyectiles quedan atrapados en esos filamentos de apariencia frágil, es uno de los logros de la nanotecnología, el principio de las telarañas aplicado al blindaje. 131
La estrella de la función es el escudo líder, pesa únicamente trescientos cincuenta gramos más que los otros pero su costo es diez veces mayor, lo distingue la banda oscura superior, la que ves aquí, por el lado exterior oculta una cámara con ciento ochenta grados de movilidad, en el lado interior tiene un GPS, una pantalla similar a la de un smartphone, con prestaciones como telecomunicación, brújula, mensajes, sensor de temperatura y de movimiento, reproducción de audio y video y un botón que emite una señal de auxilio en caso necesario, este hilo incrustado al costado, el que es ligeramente más cobrizo, es la antena. Aunque le hemos encontrado un defecto. – ¿Qué defecto puede tener esta maravilla? El Comandante sacudió el escudo, algo sencillo para alguien con sus dimensiones, al hablarle Daniela tenía que levantar el rostro. – En la parte inferior tiene una hoja de aluminio reforzado con filo de platino y diamante, que se extrae por impulso, así el escudo pasa de ser un elemento de defensa a un arma de ataque, si lo alzas y lo esgrimes contra un atacante puedes llegar a decapitarlo, el problema es que con cualquier movimiento brusco la hoja se desliza hacia afuera, corremos el riesgo de que le rebane un pie a su propio portador; ya informamos al fabricante y estamos retirando las navajas a todos, lo bueno es que este modelo lo utilizan únicamente los comandantes de falange, porque retirar el artilugio a cinco mil escudos hubiera sido una monserga. – ¿Cinco mil?, me parece que hay más de cinco mil jaredim por aquí. – Sí, bastante más, treinta mil, pero actúan por periodos de tiempo, cada falange está en acción cuatro horas, descansan veinte horas antes de volver, el ritmo de avance es frenético y 132
reventarían si estuvieran más de ese tiempo en acción, mantener el compás de marcha en el desierto es agotador. El otro problema es que el proveedor no pudo proporcionarnos más de cinco mil escudos, fabricar todos los que necesitábamos en el corto tiempo de que dispuso hubiera requerido de la ampliación de su fábrica y mucho más personal, eso hubiera llamado la atención al Gobierno y a espías del enemigo; para aprovechar al máximo los escudos las falanges se sustituyen de forma escalonada, y la impresión general es que hay una fuerza mucho más grande en acción, los jaredim les parecen todos iguales a los goyim, por lo que no logra ser percibida la rotación. – ¿Qué harán con estos escudos que recibieron los impactos, se desechan? – No, van de regreso a la fábrica, les van a servir para promover sus ventas, una buena muestra de alta tecnología israelí. – Alta tecnología contra herramientas de la edad de piedra. – Eso es absolutamente falso, no le hagas el juego al enemigo, ese fue su argumento en la Segunda Intifada. En dos horas más nos toca descanso, si quieres vamos al bunker donde atrapamos a Zubeidi, está a kilómetro y medio de nuestro cuartel, podemos ir caminando; es un despliegue de sofisticación, millones de euros en tecnología de última generación, colocan a los niños con piedras por delante pero ellos en la retaguardia están protegidos por armas altamente letales y cuentan con medios de comunicación de última generación. – ¿Cómo entonces estamos avanzando tan rápido? – Buena pregunta, es probable que los jaredim tengan razón, el hedonismo reblandece las estructuras, es curioso pero buen 133
número de nuestros mejores militares han surgido de los kibbutzim o de los religiosos que se incorporan al servicio militar, con frecuencia provienen del batallón Netzá Yehudá, su forma de vida austera les permite integrarse de inmediato a la disciplina marcial, en cambio los conservadores, reformistas y liberales de las ciudades sufren para lograrlo, no están acostumbrados a la falta de comodidades, eso mismo les ocurre a los líderes de las facciones islámicas, llevan demasiado tiempo siendo mimados por la Comunidad Europea y por los emires petroleros, la champaña los ha debilitado. Al abordar los vehículos notaron que no quedaba rastro de la avanzada, un grupo de niños jugaba en torno a una instructora con la que cantaban canciones en árabe, las brigadas de Educación y las de Cultura habían iniciado su trabajo. De regreso al campamento observaron cómo instalaban un par de comedores comunitarios, al lado de uno de ellos un rabino y un imán charlaban sentados en una banca. Mientras tanto en Beit Lahiya hubo otra alerta, la avanzada de los Osos Trogloditas se detuvo a cincuenta metros de una mujer con burkha que avanzaba decidida hacia ellos, –Reina de Corazones – avisó por radio su comandante, mediante un rápido movimiento una línea de escudos de acero, más altos que los utilizados en la avanzada, quedaron cubriendo el frente, la mujer se detuvo en un gesto dubitativo, estaba sola frente a una muralla de planchas metálicas pulidas donde se veía reflejada, el nerviosismo era evidente en los rostros de los integrantes de la primera línea, el silencio fue roto por el ruido del roce de metales, dos escudos se separaron 134
para dar paso a un anciano, el Rabino Nathaniel Baruch avanzó con calma en dirección a la mujer, cuando estaba a unos pasos de ella empezó a hablarle en árabe. – Amor de mi vida, flor hermosa del desierto, bella niña tus ojos no me engañan, tus lindos ojos no saben mentir, quieren transmitir odio pero a tu tierna edad no ha logrado alojarse la hiel en tu alma, eres muy joven y hermosa para sacrificar tu vida de una manera tan absurda. Alá, que te ve desde el cielo y te colma de bendiciones, no quiere que mueras hija mía, su deseo es verte crecer, dar frutos dulces como la miel y que cuando llegue el tiempo de marchitarse estés rodeada de nietos. Mírame, mírame bien, estoy muy cerca de tener que irme de esta vida por mi propio pie, soy un arrugado saco de huesos, no será ningún mérito que me acortes la existencia, tú en cambio tienes muchos años por delante. Tu arrojo es estéril, observa a tu alrededor, todos están a cubierto, no ganas nada si explotas ahora, no habrá gloria alguna en tu sacrificio, no concluirás tus estudios, no volverás a ver el mar, no escucharás de nuevo tu disco favorito de Nirvana ni podrás realizar tus sueños, no serás una mártir porque Alá, Bendito sea su Santo Nombre, nunca ha querido mártires. El paraíso de los mártires es la más ruin de las mentiras de los hombres del terror, de los infames que se ocultan tras tu shador; hija, suelta el cordel que llevas en la mano, permite que te desmonten ese artefacto inmundo que pone en riesgo tu vida, tú estás en edad de amar, no de odiar, no de destruir. Cuando entraste a la universidad querías hacer algo por tu gente, tu pueblo no necesita más víctimas, necesita doctoras, maestras, ingenieras, manos que construyan querida mía, los tuyos están hartos de tanta destrucción. ¿Dónde están los valientes que te convencieron de inmolarte?, 135
¿por qué no vienen ellos a enfrentarnos?, ¿por qué se valen de ti para verter su odio?, pequeña, indefensa criatura de Alá, suelta el cordel y permite que te salvemos, la vida no debe acabar hoy para ti, hoy debes empezar una nueva vida libre de rencores, alegre, con esperanza, la causa del odio no es tu causa, la causa del odio no es la causa de Alá, es bondad lo que nos predican sus ángeles. De una puerta lateral salió un imán con su larga túnica color caqui y la cabeza cubierta por un gorro blanco de oración, tejido a ganchillo, en las manos estrujaba nerviosamente una kuffiyah de cuadros blancos y rojos, avanzó hasta colocarse al lado del rabino, chorros de sudor bajaban por su redonda cara hasta perderse en su barba cuidadosamente recortada, su voluminoso vientre se movía agitado. Desde las partes altas de casas cercanas ocho francotiradores israelíes cubrían la escena, a doscientos metros de altura la cámara de un avión robot cubría el área, dos kilómetros arriba un avión radar Sentry AWACS E 3ª, rentado a la Fuerza Aérea de Estados Unidos, abarcaba toda la extensión territorial de Gaza, en la órbita terrestre las cámaras de ochenta y cinco satélites peinaban la zona. – Este hombre santo tiene razón hija, suelta el detonador y permite que te desconecten la bomba, nadie te verá como traidora, los que te instalaron ese artilugio del demonio huyeron esta madrugada, no sacrifiques tu vida en vano. El silencio de la joven elevaba la tensión de los protagonistas y testigos de la escena, en el sitio y en los puntos remotos, aún en los que veían todo en una pantalla a más de diez mil kilómetros de distancia, en el cuartel general de la CIA, en Langley, Virginia. 136
Hasta los más acostumbrados a las elevadas temperaturas estaban sudando, nadie podía prever el diámetro de alcance del impacto. A trescientos cincuenta metros otro francotirador, este de la Yihad Islámica, apuntaba al cuerpo de la joven, desde la mira telescópica de manufactura cubana adaptada a su Ak74, variante para largas distancias, estaba pendiente del momento en que ella tensara el cordel para dispararle y provocar que al caer muerta se accionara la bomba, como la tenía de espaldas su única referencia era el movimiento del brazo izquierdo, con cuya mano sujetaba ella el cable que activaría el detonador, no quería arriesgarse a eliminarla y que la carga no explotara, cuando se percató de la presencia del Imán en un acto reflejo retiró un instante el dedo que presionaba el gatillo, un par de ojos estaban fijos en ese punto a través de potentes binoculares, bastó ese leve movimiento, se emitió la señal, en menos de cuatro segundos un dardo narcotizado atravesó su epidermis, la mano derecha resbaló, en un rápido movimiento sincronizado le retiraron el arma y lo colocaron en una camilla, la ambulancia partió con sigilo. El movimiento resultó imperceptible desde el lugar donde la joven candidata a mártir del Islam mantenía a su entorno en la expectativa, los nervios se crispaban. Las imágenes recibidas en el Cuartel General mostraban que no había más francotiradores enemigos en el área, el acercamiento de una cámara al rostro semicubierto por la niqab permitió albergar esperanzas, sus ojos denotaron pesar, su postura perdió aplomo, los miembros de la patrulla Nun Tzin de la brigada Sansón recibieron en sus auriculares la orden de preparase para actuar. Cuando Amira Murat soltó el cordel y agachó la 137
mirada fue rodeada de inmediato por un círculo de pesados escudos metálicos, el Sargento Osher Goldfinger ingresó a la zona protegida enfundado en un traje con el que parecía astronauta, al instante se escucharon gritos de protesta en árabe. Afuera la Mayor Ofra Yaish rompió con su risa el desconcierto, se desabrochó el cinturón y lo retiró junto con la funda donde portaba la pistola Uzi, buscó en su mochila una falda larga que se colocó encima de los pantalones cortos, sin más armas que unas pinzas de corte se dirigió a la abertura por la que Osher salía confuso, mientras se anudaba el pañuelo le dijo. – El asunto no es que no hables árabe, tampoco te has preocupado nunca por conocer sus costumbres, bajo ninguna circunstancia esta mujer va a permitir que la toques. Le dijo la oficial de origen yemenita, mientras le clavaba sus profundos ojos negros, ella era maestra de lenguas semíticas en la Universidad David Ben Gurion de Be’er Sheva. – ¿Va a entrar sin el traje de protección? – Háblame de tú, esto no es el Tzáhal, y sí voy a entrar así, ella no quiere ver a un marciano, necesita estar segura de que es una mujer la que manipula esa porquería pegada a su cuerpo, alguien que entienda sus razones, no un militar que la humille. Cinco minutos después el peligro había pasado, el imán pretendía llevar a la mujer a su casa para calmarla pero el Rabino Baruch lo convenció de que la dejara en manos de la psicóloga árabe israelí que lo acompañaba, para que la confortara y le ayudara a afrontar sus miedos, era difícil aceptar que no llegarían terroristas a tocar a su puerta esa noche para vengarse del fracaso de la operación. Le garantizó 138
al Imán que no sería detenida ni molestada por la policía de Israel. El comandante a cargo se acercó sorprendido al Rabino, sabía que él era la cabeza visible de todo el Movimiento. – ¿Cómo supo lo que iba a ocurrir? – Obedezco a mis impulsos, una fuerza superior los guía. – Habla usted bien el árabe, quién lo hubiera pensado. – También hablo arameo, turco, kurdo, ladino, farsi, yiddish y griego, pero no sé hablar inglés, desconozco el único idioma útil a la hora de solicitar donativos, qué paradoja ¿no crees? Le respondió sonriendo, su interlocutor se quedó perplejo, el Rabino lo tomó del brazo. – Todo marchará bien, con el favor Divino, ahora debo regresar al lado de los otros Consejeros, tenemos mucho trabajo, ¿por dónde quedó el helicóptero? – Lo llevo. – Creo que la maniobra de distracción funcionó mejor de lo esperado. Comentó la Mayor Ofra al Sargento Osher. – ¿Por qué lo dices? – La bomba no iba a explotar nunca, el cable del detonador estaba mal colocado, no había contacto, al unirse los dos polos no ocurriría nada, el positivo no era conductor, todo el trabajo denotaba inexperiencia, amarres torpes, cartuchos sin aislar impregnados de la humedad de la piel, la sucia huella de un aprendiz lerdo, supongo que los expertos están en Hebrón doblándose del coraje, cayeron como ratones en la ratonera y dejaron a la retaguardia a cargo, imploro no equivocarme. – El riesgo es que traten de crear un segundo frente para romper el cerco en Cisjordania, ¿cierto?, y atacarnos por la retaguardia. 139
– Se encontrarían con una desagradable sorpresa, créemelo, los arsenales y maquinaria emplazados en torno a Hebrón ahí siguen, no fueron colocados como utilería nada más para hacer creer que la incursión sería allá, son también un cinturón de seguridad, eso sin contar que primero tendrían que pasar por encima del Tzáhal. – Me gustaría algún día jugar una partida de ajedrez con quién planeó esto, debe ser un campeón. – Si los rumores son ciertos se trata de alguien muy ocupado y un tanto etéreo. En una escuela cercana el Cabo Wachowski bocetaba en su libreta el mural que se le antojaba pintar en un amplio espacio frente al patio, en ese momento fue abordado por el General Meir Ben Shaul. – ¿Qué pasa muchacho, qué dibujas?, muy bien, ya habrá oportunidad más adelante para pintar esto y lo que quieras, ahora vení conmigo, te necesito en una pequeña reunión, nos esperan varios días sin dormir. Se encontraron con el resto del grupo, todos escucharon atentos las instrucciones. –En seis horas tenés que hacer el levantamiento y las propuestas de reparación, en la carpeta “inmuebles” de sus máquinas están las imágenes satelitales de todas las construcciones de Gaza, en algunos casos incluso contamos con los planos estructurales, eso les ahorrará trabajo. Esta misma tarde llegarán los materiales y los operarios, de ustedes siete uno se quedará dirigiendo la reconstrucción de esta escuela y los demás se irán al siguiente punto, su número no irá disminuyendo, en cada obra será sustituido el arquitecto o dibujante que queda atrás. 140
En el manual electrónico están las medidas de puertas y ventanas empotrables, así como de módulos prefabricados de escaleras, muros, techos y materiales de los que disponen. Las existencias en bodega se reponen con celeridad, como les indicamos en la capacitación no reserven nada por temor a que se agote, eso no ocurrirá, no marquen ningún material en el programa hasta no estar absolutamente seguros de que lo utilizarán, no tenemos tiempo que perder en devoluciones o transferencias. Peleen, muérdanse, discutan, pero deben tener listo el proyecto a la hora indicada, generen una red local con sus máquinas para compartir la información, estudien a conciencia las condiciones de la infraestructura existente, si hay dudas es preferible tirar todo a poner en riesgo las vidas de los pequeñitos que tomarán clases aquí, pero tampoco tomés decisiones por cuestiones ornamentales, aprovechen lo que esté en buen estado. La escuela debe quedar firme, funcional y agradable, traten de que sea un espacio orgánico, amable, donde se sienta uno a gusto, recuerden cuando eran pibes, proyecten sus sueños, construyan su escuela ideal. Quiero ver arquitectura no cajas de zapatos, ergonomía, funcionalidad y estética son los factores a considerar, ustedes están acostumbrados a trabajar bajo presión y vamos a abusar de esa virtud suya. Es fundamental el control de tiempos y movimientos, por ejemplo, no programen pintura hasta que el aplanado de los muros esté concluido y seco, revisen bien si funcionan las redes de agua potable y de drenaje, si no existen o están dañadas contemplen cisternas, pero si resulta factible utilícenlas, la red de electrificación ignórenla, los de Hamás nunca se preocuparon por el mantenimiento y está obsoleta, 141
intentar repararla nos costaría tres veces más que tender una nueva red, la alternativa es que en todos los edificios que sea posible se instalen paneles solares, generadores eólicos y biodigestores para que sean energéticamente autosuficientes, esa es la mejor solución, aquí tenemos sol de sobra, el Mediterráneo nos brinda su brisa con frecuencia y los humanos somos grandes productores de mierda, aprovechar eso nos brinda la posibilidad de dotar de autonomía eléctrica a cada inmueble y de paso reducimos las posibilidades de sabotaje. No olvidés habilitar jardines de juego para los niños en todas las explanadas disponibles, al igual que espacios para teatro, música y danza, estos pequeñitos han vivido demasiado tiempo entre temores y lavados de cerebro, es tiempo de que disfruten su infancia… ¿Preguntas? El ambiente de la avanzada era casi festivo, la labor de exploración y la capacidad de respuesta de las brigadas de respuesta inmediata y de limpieza profunda permitía que el trabajo de las falanges fuera casi simbólico, sin embargo los integrantes de cada unidad estaban conscientes del riesgo que afrontaban, tenían la obligación de revisar calle por calle, callejón por callejón, casa por casa, habitación por habitación, a la menor sospecha debían resguardarse y dar aviso de inmediato. No faltaban los percances, en distintos puntos los Osos Trogloditas habían sido recibidos a pedradas, su avance con los escudos cerrados al frente, por encima y a los lados, de la misma manera que lo hacían las falanges griegas y que siglos más tarde utilizaron las centurias romanas, impedía que salieran lastimados, era como un tren que rodaba en dirección 142
a los agresores hasta ponerlos en desbandada, por lo general. La falange Gimmel Vav persiguió a una pandilla bien organizada que cada tanto tenía piedras apiladas en reserva para utilizarlas como proyectiles, de modo que atacaban y corrían hasta el siguiente abastecimiento con una coordinación que empezó a despertar el recelo de sus perseguidores, las cámaras de los aviones descubrieron que eran conducidos a una trampa y de inmediato se les ordenó reducir el ritmo de avance para dar tiempo a que dos escuadrones actuaran desde la retaguardia de los agresores sin que estos sospecharan que había sido descubierta la maniobra de engaño, gracias a la prudencia de los militares de la brigada Kojba los muyahidines fueron neutralizados mediante una acción envolvente, antes de que hicieran el primer disparo cada uno de los milicianos tenía el cañón de una pistola apuntándole a la sien, los que lograron escapar tomaron la única ruta disponible que los condujo a una infranqueable barrera de ametralladoras y rifles, se rindieron. Los pandilleros quisieron desandar sobre sus propios pasos cuando descubrieron que los fedayines habían sido atrapados, pero los Osos Trogloditas les estaban pisando los talones, no fue necesario ni siquiera desenfundar los toletes, ante lo inminente de la derrota alzaron las manos para entregarse; fueron capturados quince brigadistas de Ezzedin Al Qassam y cuarenta pandilleros, la mayoría resultaron adolescentes cooptados y adoctrinados en los campamentos de verano de Hamás, de los restantes, combatientes en activo, cuatro eran peligrosos inductores buscados desde varios años atrás por su participación en la organización de atentados suicidas que provocaron la muerte de civiles israelíes, era fácil prever una larga temporada alta en los juzgados y años de pingües beneficios para los 143
abogados. La falange Zayín Samej se enfrentó a niños y jóvenes que les arrojaban piedras, algunos con hondas, los hicieron retroceder hasta que los acorralaron en un callejón sin salida, la falange avanzó sobre ellos hasta obligarlos a recargar la espalda contra el muro, una vez ahí el comandante comenzó a cuestionarles en árabe los motivos que tenían para odiar, tras cuarenta minutos de mayéutica pura se organizó un partido de futbol. De acuerdo con lo recomendado en el manual de operaciones, capítulo sociabilización, el encuentro no fue de judíos contra árabes, sino que jugaron mezclados, los equipos se armaron con el tradicional método de lanzar la moneda al aire para ver cuál de los dos capitanes empezaba a elegir a los integrantes de su equipo, otra falange continuó con el avance interrumpido, establecer relaciones cordiales era una de las prioridades. Los equipos se distinguían con kuffiyot azules y amarillas, resultaba extraño ver correr a los jasidim tras la pelota, de negro y con un pañuelo al cuello, la mayoría ni siquiera se quitó el caftán, tan extraño como el que jóvenes árabes portaran pañuelos con Estrellas de David, las kuffiyot azules estaban estampadas con un diseño a base de estrellas de seis picos y las amarillas con estrellas de ocho picos, el “Milán Nazla” derrotó al “Baytcelona” por tres tantos a dos, al final del partido celebraron todos juntos con agua con hierbabuena. Las Soldados Rodríguez y Abramov y el Soldado Ullman comprobaron que el General Ben Shaul tenía razón, la cocina era un hervidero de chismes, en el incesante trajín de las mesas frías y las barras calientes, en la zona de lavado de vajillas y en las alacenas se ejercitaban al mismo ritmo piernas, 144
brazos y lenguas, el problema era jerarquizar la información y encontrar un minuto libre para hablar con la Teniente Schneider, el segundo problema es que ella pudiera contestar, la normatividad impedía dejar mensajes por si el aparato caía en manos extrañas, a veces tenían que hacer dos o tres intentos hasta que ella podía atenderlas, por lo que era indispensable primero establecer cuál información era prescindible y cuál no. Debido a los costos y las limitantes en el número de trasportes refrigerados, además de la especial recomendación de la división Tobit, la dieta era lactovegetariana, el consumo de carne o pescado en el desierto representaba un riesgo por la conservación y las infecciones gastrointestinales. La eliminación de cárnicos evitaba la necesidad de tener doble vajilla, doble cantidad de tarjas, doble número de cámaras de refrigeración, además se libraban de la necesidad de establecer roles estrictos para cumplir con la Halajá, eso sumado a que cada vez más israelíes son vegetarianos o incluso veganos. La chef del campamento Aleph Tav era una pequeña mujer norteamericana de origen turco, Andra Daoud, experta en comidas orientales; aun cuando el Shin Mem en su mayoría había sido integrado por reformistas y laicos, se decidió que la comida fuera kosher, los laicos podían comer kosher sin tener conflictos éticos o gastronómicos, pero los ortodoxos no podían comer nada que no tuviera certificación rabínica, era necesario simplificar porqué además se cocinaba para la gente de las zonas liberadas y con buena parte de ellos había que cumplir las normas Halal, la dieta islámica; aunque en muchos aspectos hay similitudes, existe un punto irreconciliable, en la halal no puede beberse alcohol ni utilizarse en los platillos, así que se acordó que las comidas cumplieran con ambas 145
condicionantes, dentro de lo posible. El dinamismo de la chef Daoud era sorprendente, de un manotazo quitaba a una pinche que no estaba cortando bien las calabazas y en un destello realizaba los cortes, sin decir nada volteaba a ver a la infractora directamente a los ojos como diciéndole ¿viste bien cómo se hace?, y de inmediato se iba a supervisar la zona de estufas, degustaba y daba indicaciones para corregir sazón o aprobaba con un escueto bien, que hacía brincar de gusto a la cocinera o cocinero que tenía enfrente, enseguida continuaba su recorrido para verificar la desinfección de lechugas o el lavado de la loza, cuando se cruzaba con alguno de los jasidim encargados de supervisar la aplicación estricta de la Kashrut se cruzaban miradas hostiles y ocasionales palmadas reconciliatorias.
146
VI
La bodega de la International Seeds Incorporated en el puerto de Ashdod no tiene ninguna diferencia respecto de las otras que se encuentran en la zona de los muelles, salvo que en la esquina izquierda del fondo permanece un contenedor anclado al piso, situación imperceptible aun para observadores expertos, esa caja de metal es uno de los accesos a las instalaciones subterráneas del Shin Mem, su Cuartel General, las otras dos entradas son un túnel de ciento cuatro metros de largo al que se penetra por un muro abatible camuflado en el fondo de un taller de mantenimiento, al lado del helipuerto, en una de las entradas a la zona portuaria, y un túnel que da al mar, con esclusas de nivelación, por el que se accede en minisubmarinos. El bunker tiene dormitorios para ciento cincuenta personas, duchas, cocina, almacén, dos comedores, la sala del Consejo Supremo, dos salas de juntas, sala de oración, el centro de operación informática, oficinas, guardería, salón de juego para niños, tres garitas de guardia para diez elementos cada una, embarcadero y un salón de mil metros cuadrados y 147
seis metros de altura donde se ubican cuatro grandes maquetas electrónicas, una que abarca de Egipto al Golfo Pérsico y de Turquía a Yemen, otra del territorio completo de Israel, la tercera de la Franja de Gaza y la cuarta de Cisjordania, en los muros están colocadas doscientas pantallas planas donde se proyectan imágenes satelitales de la zona de operación y los más importantes noticieros televisivos del mundo, un equipo de editores selecciona entre miles de imágenes lo que se proyecta segundo a segundo, en uno de los extremos un pequeño jardín de cactáceas permite aislarse a quienes necesitan descansar o meditar, de dónde proviene la luz natural que lo nutre es uno de los secretos mejor guardados del Cuartel General, un lugar rebosante de secretos, el jardín es el único lugar donde está permitido fumar. La alimentación de energía proviene de dos fuentes, paneles solares y una serpiente metálica que aprovecha la energía del oleaje, ambas dirigidas a la subestación de una fábrica a kilómetro y medio de distancia y redirigida al bunker por cableados subterráneos, el diseño del tendido consideró las posibilidades de sabotaje, es casi imposible dejar al Cuartel sin electricidad, agua o alimentos. – Me preocupa que estemos encontrando tan poca resistencia, con todo y la jugada de engaño esto no es normal, debemos estar en alerta máxima para no llevarnos una sorpresa desagradable. Decía Zvi Bartomeu al anciano Teniente General Naftali Mostovich, veterano de la guerra de independencia, quien se movía inquieto en su silla de ruedas. – ¿Qué le preocupa Capitán General? – Naftali, recuerda que acordamos que teníamos que usar los 148
grados por el carácter de la operación, pero que cuando no hubiera extraños los cuatro consejeros podíamos hablarnos sin tanta pompa, te aseguro que el título de capitán general me fastidia, es el mismo nombramiento que fue asignado a Hernán Cortés, el conquistador de México y Centroamérica. – Un tipo brillante, un gran hijo de puta, pero brillante, con una impresionante capacidad de negociación, intrigante, mentiroso, audaz y fiel a su rey. – Estás pensando dónde le colocamos un monumento. – No Cap…Zvi, tienes razón, olvidemos los protocolos, no pretendo hacerle un monumento a Cortés, pero en términos de eficiencia el tipo se las cargaba, con la misma habilidad que utilizaba para huir de los maridos engañados logró someter un territorio que equivale a la mitad de Europa, puso a los pies de su señor las riquezas de cinco millones de kilómetros cuadrados, qué riquezas, en cinco siglos no han podido agotarlas y mira que se han afanado en ello. Cortés supo aprovechar la debilidad de sus enemigos, la superioridad que le daban los caballos, los arcabuces y las lanzas de metal no hubieran bastado, al reponerse del susto inicial los guerreros indígenas los hubieran aplastado a fuerza de superioridad numérica, las verdaderas fortalezas de Cortés fueron su percepción y su labia. Logró convencer a un buen número de pueblos tributarios de qué con su apoyo podrían derrotar a los aztecas, pero nunca les habló de lo que les esperaba a ellos inmediatamente después de haber logrado el triunfo, hasta el momento no he encontrado un estudio sobre ese hombre que me convenza, o lo vilipendian o lo glorifican, aún no se le ha hecho justicia, no han sabido mostrarnos su grandeza y sus debilidades, era un ser humano como cualquiera, pero notable. 149
No me des cuerda Zvi, bien sabes que chocheo, el Rabino Baruch alaba tu capacidad para escuchar pero si no me marcas el límite sigo horas y horas con la cháchara, traigo a cuestas ochenta y seis años de vivencias e historias aprendidas, ya no recuerdo bien qué es lo que realicé y qué lo que leí o lo qué vi en las películas. Volvamos al punto, qué es con exactitud lo que te preocupa. – Que las cosas están saliendo conforme al manual, eso me asusta, todo ocurre de acuerdo a lo previsto, me siento como títere apegado al libreto, ni siquiera la voz que emito es mía, proviene de atrás del escenario. – Pero de qué te quejas, tú escribiste todo. – Mira, respeto tu ateísmo, pero, debes creerme, más que escritor soy un transcriptor. – De eso ya hemos hablado, siempre estuviste consciente, no entrabas en trance cuando te ponías a escribir ni te dictaban el texto en tus sueños, la novela es una obra tuya, una ficción creada por ti a la que las circunstancias imitan… ¿tienes miedo? – ¿Tú no? – Me cago de miedo, dale vistazo a mi ejemplar, está casi deshojado de tanto que lo reviso, por eso lo traigo aquí a mi lado en la silla de ruedas, aunque el Rabino insista en que lo dejemos en la caja de seguridad, me aterra ver que todo encaja tal y como lo pusiste, ahora que terminemos esta charla voy a volver sobre sus páginas para descubrir con horror que pronunciamos casi palabra por palabra de lo que está escrito, ¿No serás un chamán maya? – No le preguntes a un guatemalteco por los mayas, dirígete a las universidades alemanas y rusas, ahí están los actuales herederos del conocimiento de las culturas precolombinas. 150
Esto no es posible, el guión no puede ser tan exacto, por qué evaden la confrontación, me recuerda la invasión a Irak, durante todo el avance estuvieron esperando el contraataque de los ejércitos de Sadam Hussein y nunca hubo tal, sabían que el dictador no tenía la fuerza de la que alardeaba, pero de ahí a no tener la mínima capacidad de respuesta había mucha distancia. La corrupción es el principal enemigo de la moral de un ejército, su sistema estaba podrido por completo, los militares iraquíes estaban más preocupados por transferir su dinero a bancos extranjeros que por defender a Hussein, a él, su amo y señor, el país les importaba menos que un maní, quizá aquí ocurre lo mismo, no puedo creer que retrocedan y nos dejen el camino libre sin ningún costo, por qué no defienden su cuota de poder, eso me parece insólito, por más que así lo haya escrito. – Ya que mencionas la experiencia iraquí, tenemos que aprender de ella otra cosa, aun cuando la liberación ocurra conforme a lo planeado es indispensable estar preparados para la reacción posterior, el contraataque mediante los actos de terrorismo y la guerra de guerrillas, de lo contrario también quedaremos entrampados en una guerra eterna. – Sí, de acuerdo, pero no eludas el punto. – No lo eludo, me gustaría encontrar una explicación mejor que la del plan divino, soy el primero en oponerme a esas acepciones, mientras tanto, divino o no, está funcionando y es mejor seguirlo que improvisar y errar. – Observa Naftali, aplicaron a la perfección tu recomendación de utilizar un movimiento envolvente de dos escuadrones con los de la emboscada en Sheikh Za’id. Cambió el tono de Zvi Bartomeu mientras señalaba una de las pantallas. 151
– Mejor me río, no sé si lo recomendé porque así estaba escrito o si primero lo dije y después resultó coincidir con la novela, qué más da, que esto salga bien es lo importante, reventar los tentáculos del rencor es lo único que en verdad importa. Mientras se concentraban en las imágenes de las pantallas escucharon una voz femenina. – Montefiore quería venir para el almuerzo con el Consejo General, lo convencí de que se quedara en Jerusalem, podrían seguirlo, no debemos correr riesgos. Les interrumpió Argoya Yarden, cuarta integrante del Consejo Supremo, doctora en filosofía y autora de varios tratados sobre el conflicto árabe-israelí, en ese momento el Rabino Baruch regresaba de su viaje relámpago a Gaza, bajaba un tanto mareado de una de las pequeñas naves marinas. – Estas estrategias de distracción me van a enloquecer, en menos de veinte minutos viajé por aire, tierra y mar, ¿no sería mejor decirles dónde se encuentra el Cuartel General? – Sí, para que una de las becarias del Tzáhal lo divulgue y en un segundo tengamos aquí a todos los terroristas del planeta. Le respondió Naftali. De acuerdo con la normatividad establecida si uno de los cuatro dirigentes salía los otros tres debían permanecer en el Cuartel General, para los integrantes del Consejo General la medida aplicaba en proporción, no más de tres de los doce integrantes, generales del estado mayor, podían salir al mismo tiempo, cada uno estaba pendiente del desempeño de una división y asesoraba a otras dos, en caso de baja de uno de los generales de división debían designar al sustituto, por esa razón los doce generales del estado mayor, salvo emergencias, debían hacerse cargo de las acciones desde el bunker, situación molesta para los que estaban acostumbrados al olor de la pólvora. 152
El Rabino Nathaniel se dirigió a la sala de oración, todos lo siguieron en silencio y escucharon la plegaria por los dos jóvenes que habían muerto al pisar una mina terrestre, de reojo el Rabino miró para comprobar si estaba completa la miniá, al darse cuenta la Doctora Yarden hizo un movimiento para retroceder y colocarse atrás de los hombres, pero una seña del religioso la detuvo, era claro que no aplicarían las normas ortodoxas en el bunker. Al concluir las oraciones el anciano se inclinó a encender un pebetero que sobresalía apenas sobre un cuadrángulo de grava blanca, a partir de ese momento permanecería encendido hasta que llegara el momento de disolver el Shin Mem. En algunos rostros resbalaron las lágrimas, durante la invocación de esa madrugada, al iniciar las operaciones, habían leído con especial fervor el párrafo que reza “que el mechero permanezca frío, que ninguna llama emane de su vientre”, antes de siete horas su flama ardió en señal de que el operativo había cobrado vidas. Debido a la tensión que flotaba en el ambiente el almuerzo se sirvió en el salón principal y no en el comedor, ninguno de los dieciséis dirigentes quería perder detalle de lo que ocurría, apenas y tocaban la comida. – Por Gracia Divina, deberíamos estar celebrando, ¿por qué están tan nerviosos? Preguntó el Rabino Baruch sonriendo. – Salvo por las dos lamentables bajas todo está saliendo bien, demasiado bien, estamos cuatro kilómetros adelante de lo programado para estas horas, es posible que se hayan replegado para organizar la resistencia en Gaza, no lo hicieron en Jibaliya, y si tampoco ocurre en Gaza el último sitio posible en Khan Yunes, pero me extraña que no hayan aprovechado la 153
situación del campamento de refugiados. Explicó Bartomeu. – Capitán General, todavía estamos dentro de Jibaliya, es muy pronto para asegurar que no hay resistencia, aunque es cierto que las cosas se están dando sin demasiadas complicaciones. Permanentemente estamos insistiendo a los generales de división que no bajen la guardia. Recuerden que los diseños de las instalaciones en los campamentos fueron como deslizarnos divertidos por un tobogán, hasta que surgió el problema de la superficie rígida en las entradas para colocar las mezuzot, ese pequeño detalle nos provocó dolores de cabeza durante quince días, algo así puede ocurrirnos ahora, avanzamos rápido pero cualquier pequeñez puede frenar la marcha en algún momento. Dijo el general Lumbroso Modigliani, estratega militar. Zvi fijó la mirada en una de las pantallas. – ¿Problemas? Preguntó Naftali. – No, en absoluto, me sorprende la estética que logramos con la superposición de lonas paraboidales y las carpas geodésicas, Fuller estaría feliz de ver como aprovechamos la energía, los espacios son frescos, funcionales, es sencillo mantenerlos limpios y encima de todo proyectan una imagen escultórica. – ¿No cree qué es un tanto superficial hacer esas apreciaciones en estos momentos? Reclamó la Doctora Yarden con visible molestia. – De ninguna manera. Se escuchó la voz suave y relajada del Rabino Baruch. – Estos días son de tensión pero también de disfrute, de goce, recuerde además que la belleza es una de nuestras armas 154
secretas, tan importante como la no violencia. – Pero tiene razón, tenemos demasiadas cosas que hacer, revisemos los pendientes, ¿cómo va nuestra presencia en la Internet, qué reacciones hay? Preguntó el Capitán General al General Ariel Schreiber, el experto en informática. – Arrasamos, los Osos Trogloditas están alcanzando buenos niveles de popularidad, el videoclip del partido de futbol con la música de Naguila Hava lleva casi cinco mil visitas en Youtube en la primera hora y media, el del avance de las falanges con un remix de Así hablaba Zaratustra y Lord of the dance va punteando con veinte mil en cuatro horas, el del montaje de las carpas con el Himno a la Alegría de Beethoven anda en ocho mil, va a resultar difícil alcanzar el millón que logran los videoclips de Nicky Minaj en un par de días, no hemos logrado convencer a los comandos de la avanzada para que enseñen las piernas, sin embargo rebasaremos con facilidad las trescientas mil visitas por cada video, en promedio. De acuerdo con los informes de los rastreos que realizamos en forma periódica, hasta ahora los grupos pro islámicos no han subido nada; tenemos participación en más de mil seiscientos foros sociales y foros de periódicos, proporcionamos datos concretos frente a ofensas y ataques difamatorios, por cada denuesto colocamos tres respuestas en promedio, la táctica es esclarecer sin insultar y no caer en provocaciones, aunque cuesta trabajo aguantar el cúmulo de comentarios estúpidos, se ve que la ignorancia está de moda. Trabajamos ahora en la realización de otros videoclips con las imágenes del trabajo en el hospital que recién empezó a funcionar y la labor con mujeres y niños, conforme a lo acordado evitamos destacar la presencia de armas para hacer 155
énfasis en el pacifismo del movimiento, aunque en ciertas circunstancias tendremos que mostrar la tragedia de la guerra. – Beethoven… bien, muy bien, grave hubiera sido tener de fondo musical a Wagner. Comentó con sorna el General Munhos, especialista en economía, de blanca cabellera larga, barba corta, con aspecto juvenil pese a los años que cargaba a cuestas, si bien caminaba con dificultad. – ¿En televisión y prensa, General Hebel? – Hay un desconcierto general, tratan de culpar al gobierno israelí pero nadie tiene elementos concretos ni imágenes, la cúpula gubernamental está encerrada a piedra y lodo y no concede declaraciones, los líderes mundiales se están negando a soltar prenda hasta que tengan información detallada, la excepción son los presidentes de Irán y Turquía que hablan de limpieza étnica y genocidio, pero ni siquiera Al Jazeera les hace mucho caso. Nadie tiene evidencias de bajas y no hay manera de que las tengan mientras no ocurran, en la explosión de Beit Hanoun pudimos aplicar a tiempo ruido electrónico a las imágenes satelitales, salvo nuestra memoria principal no existe ninguna grabación de lo que ocurrió en la siguiente media hora, ni siquiera los vecinos o los fedayines que estaban en la casa tienen una noción exacta de lo sucedido, ya habrá oportunidad de aceptar esas bajas del enemigo en otra operación, mañana o pasado mañana. Tenemos aglomeraciones en la oficina de acreditaciones en Ashkelon, todos esperan ansiosos que den las 1630 para poder entrar a la Franja de Gaza, aunque están a disgusto ante la disposición de que no podrán utilizar sus propios vehículos. En cuanto a la información sobre accionistas e intereses árabes en los medios no tenemos mayores datos que lo recabado 156
hasta hace dos semanas, pero considero que es suficiente si fuera necesario utilizarlo. En resumen me parece que la palabra adecuada para describir la situación es: estupor. ¿Ya decidió quién dará la conferencia de prensa en la tarde, Capitán General? – Tengo una sugerencia, el General Abed Bashara, Comandante en Jefe de la división Jeremías, la presencia de un Oficial árabe cristiano llevará el desconcierto al límite; mi primera opción era la General Esti Zisano, ustedes saben que es una reconocida feminista, cuando su familia llegó de Etiopía ella tenía siete años y ahora es una de las académicas más respetadas, pero creo que esa carta debemos guardarla de momento. ¿Qué opinan? Intervino la General Levana Casque, esposa del general Munhos, académica y activista en derechos civiles, especialista en cuestiones de género. – Su elección me parece acertada, es importante dosificar las sorpresas, hasta este momento el icono del Shin Mem es la avanzada utraortodoxa, es probable que consideren que se está sustituyendo un fundamentalismo por otro, espero que no le moleste el uso del término Rabino. – No vamos a entrar en esas especificidades ahora, Levana, tiene razón al plantearlo como una percepción generalizada, continúe por favor. – Si hoy les da la cara un árabe israelí maronita y mañana una mujer beta Israel reformista, necesariamente sus conceptos preestablecidos se debilitarán. En occidente suelen pensar que los árabes en Israel viven en condiciones de opresión y miseria, Bashara ha sido diputado y ministro, es un destacado constructor, experto en carreteras y 157
puentes, sus hijos estudian en las mejores universidades del mundo y como si no bastara es uno de los líderes del Shin Mem. Su principal aspiración es que los árabes de Gaza y Cisjordania tengan las mismas condiciones de vida que los árabes israelíes, que son las mismas que las de los demás israelíes. Si esta tarde él da la cara va a resultar complicado encontrarle objeciones a la operación. Y si además mañana su anfitriona es la doctora Zisano los periodistas van a afrontar muchas dificultades para mantener su discurso antisionista, ella ha sufrido en carne propia el racismo, la discriminación religiosa y la miseria, ha convivido con mujeres a las que les practicaron la ablación, sabe nombres y apellidos de víctimas de la misoginia de los fanáticos del Islam, es una de las eruditas de mayor peso en los foros feministas internacionales y su trabajo en pro de las minorías, de las mujeres y de los niños de todo el mundo es reconocido en la ONU, por eso comanda la división Ruth. Sus ideas son precisas y transparentes, a diferencia de los políticos nunca elude un tema, siempre deja en claro su postura, no hay forma de tergiversar sus palabras. – ¿Los demás están de acuerdo? La votación fue unánime. – ¿Respuestas militares, Naftali? – Nada aún, el Tzáhal está en alerta máxima en las fronteras, el escudo antimisiles Iron Dome está preparado, sobre todo en el norte, Hezbollah no tarda en tratar de llevar agua a su molino. La presión sobre Cisjordania es fuerte, primordialmente en Hebrón, que está a punto de estallar, quizá habrá que abrir un poco la válvula para despresurizar el ambiente, Montefiore y Barak lo están analizando. En Gaza hasta el momento se han decomisado seis toneladas 158
en armamento, cuatrocientas veinticuatro toneladas de alimentos, de las que una quinta parte únicamente podemos aprovecharla para composta, comida podrida o infestada de roedores, además de alcohol, drogas, pornografía, todo lo que prohíbe el Corán, una fortuna en efectivo que supera los noventa millones de dólares, oro en joyas y en lingotes, no está nada mal para las primeras ocho horas, aunque todavía están sistematizando las cifras, puede resultar una cantidad superior. Lo fuerte nos espera en la ciudad de Gaza. Sugiero que para determinar qué películas porno destruimos o cuales preservamos, las veamos una por una con especial detenimiento, con respecto a las drogas les cedo el sitio, estoy demasiado viejo para andar buscando los paraísos artificiales de los que hablaba Baudelaire. – Envidio tu energía Naftali, no vamos a destruir nada, es una prueba de la corrupción de Hamás y Al Fatah, más tarde las entregaremos a la nueva Autoridad de Gaza, cuando quede constituida, ellos sabrán si las venden o las queman, aunque tengo dudas en cuanto a pedirles que te dejen ver algunas de esas películas, a tus años pueden provocarte un infarto. Doctora Hidekkel, le solicito que se comunique con el General Jacob Bauer para que localicen de inmediato en la zona liberada a representantes incuestionables de la población, dos de los líderes tradicionales, ancianos de preferencia, que funjan como primeros consejeros para la administración de los recursos, en los próximos días integraremos a otros cuatro, del centro y sur de la Franja de Gaza, es muy importante que desde el primer momento haya participación local en la administración de los recursos económicos incautados. – Disculpen, ¿cómo queda el plan con la prensa? Preguntó el Rabino Baruch, le respondió el General 159
Hebel Camondo, escritor, periodista y especialista en semiótica de los medios de comunicación. – A las 1630 ingresará la prensa acreditada al campamento del Paso de Erez, son doscientos ochenta, en el auditorio dará la conferencia de prensa el General Bashara, a las 1715 los periodistas podrán elegir uno de los siete recorridos que visitarán siete puntos cada uno, a las 1930 serán llevados de regreso a Tel Aviv a la conferencia de prensa del Gobierno de Israel, doscientos se quedan allá, ochenta nos han pedido alojamiento, sesenta serán hospedados en Sderot y veinte en la primera empresa de la nueva era de Gaza, el Hotel California. – ¿Y podrán salir de ahí mañana? Preguntó Levi Munhos mientras con las manos tocaba una imaginaria guitarra eléctrica. – Claro, la única referencia a la canción de The Eagles es el nombre, o más bien será, el trato se cerró hace media hora, la familia Habibi de Atrata no aceptó vender tierra a los Wasserman, prefirieron asociarse, los Habibi ponen el terreno y los Wasserman la infraestructura, la división Yusef ya les autorizó los recursos. – ¿Y esta noche funcionará el hotel?, ¿es eso posible? – Una parte, concluirlo llevará un par de meses pero desde hoy estarán habilitados algunas habitaciones, el comedor y los baños, estos últimos de forma provisional en remolques, será una especie de enclave beduino, cada habitación una jaima, nada más que utilizando el diseño de paraboidales y cúpulas geodésicas con las que los arquitectos Bartomeu y Ben Shaul rinden homenaje a Richard Buckminster Fuller, además ya sabes que los colonos son expertos en edificaciones rápidas y eficientes, la división Herodes logró captar a miles de militantes del Gush Emunim, su precisión y capacidad de 160
improvisación es una gran ventaja, de la noche a la mañana ¡plum!, un nuevo asentamiento judío aparece donde el Gobierno menos se lo espera, estamos aprovechando su experiencia, las primeras diez habitaciones quedarán listas esta misma tarde. – ¿Quién saldrá perdiendo en una sociedad mercantil entre árabes y judíos? Preguntó Naftali. – El sistema tributario. Contestó con seriedad el General Aharon Magnus, las carcajadas duraron casi tres minutos. – ¿Qué hay respecto a la solicitud de varios periodistas de quedarse en alguno de los campamentos militares? – El riesgo es alto, sabemos que esta noche nos lanzarán veinte misiles y nuestro escudo antimisiles fallará en uno de los casos, con todo y que se supone que es más avanzado que el Iron Dome, además no tenemos idea del lugar en qué caerá ese proyectil, estamos jugando a la ruleta rusa, esta noche tendremos por lo menos una baja y no podemos hacer nada para evitarlo. Afirmó el Rabino. – ¿No estamos siendo demasiado fatalistas Rabino Nathaniel?, únicamente ustedes cuatro conocen la profecía en su totalidad, pero quizá debamos reforzar el sistema antimisiles, en una de esas logramos hacer que todos estallen en el aire, las cosas pueden resultar bien en lo general sin que ocurran al pie de la letra. Intervino la General Edén Hidekkel, experta en finanzas y administradora del Shin Mem. – Tiene razón, las cosas pueden ser diferentes, estamos tomando todas las precauciones, pero por favor, los términos 161
aceptados son La novela o La liberación de Hebrón y nada más, no es una profecía, si alguien los escucha no va a faltar el ferviente que vea a Zvi como profeta y entonces sí vamos a tener problemas, por un rumor de esos pueden llegar a crearse quinientas nuevas formas de vivir el cristianismo y otras diez de vivir el judaísmo o hasta gestar una nueva religión madre, como ha ocurrido ya dos veces en el pasado. – ¿Considera usted religión madre el catolicismo? Insistió Edén. – No, la religión madre del cristianismo murió en Alejandría o en Tesalónica, aunque bien pudo haberse mantenido en agonía hasta la destrucción de los enclaves cátaros, si hemos de hacerle caso a algunos historiadores y escritores de best sellers, el catolicismo es una religión padre, misógina hasta los huesos. Intervino la Doctora Tzipora Hartman, internista con una brillante trayectoria en asuntos de salud pública. – Por favor, no empecemos con una discusión bizantina, bastante tenemos ya con lo que nos espera, seamos discretos y respetuosos con las creencias de los demás, me disculpo por lo que exista de inapropiado en mi comentario anterior, lo que me preocupa es que ustedes acepten a la ligera el uso de la palabra profecía, esto no es parte de ninguna profecía, es simple y llanamente una novela. – Estimado General Schwartzer podría usted dejar de incordiar con su dedo cordial sobre la mesa, el casi imperceptible sonidito me fastidia, no sé por qué hace usted eso cuando quiere hablar, porque no simplemente levanta la mano para solicitar la palabra. Irrumpió Naftali Mostovich a punto de estallar. – Toma las cosas con calma Teniente General, todos estamos 162
nerviosos. Intervino Zvi Bartomeu. – Tienes razón, discúlpeme General, ¿necesita usted comunicarnos algo? – Los drusos… Transcurrió medio minuto en el que todos se interrogaban con la mirada. – Perdón General Schwartzer, ¿qué ocurre con los drusos?, ¿los drusos que están dentro del Movimiento? – Preguntó el Capitán General. – Eh, lo siento, estoy pensando cómo decirlo… son los drusos del Golán, quieren garantías, acudí esta mañana, desean participar pero necesitan estar seguros de que Los Altos del Golán seguirán siendo israelíes, su apego a Israel se enfrío cuando se implementó el Plan de Desconexión, se dieron cuenta de que los políticos los podrían sacrificar en cualquier momento por acuerdos internacionales. Si el Gobierno aceptó desalojar a los colonos judíos de Gaza, a ellos en cualquier momento les pueden salir con que sus aldeas de nuevo están en territorio sirio. – Tienen razón. Intervino Levana Casque. – La desconexión ha sido un fracaso en todos sentidos, nunca tomaron en cuenta las consecuencias directas ni las derivadas, les preocupó más la imagen internacional que el futuro nacional, fue una estrategia ingenua, la única manera de satisfacer por completo a los países europeos e islámicos es anunciando la disolución del Estado de Israel y el suicidio masivo de todos los judíos del mundo, por supuesto que no pensamos complacerlos. Sin embargo a los drusos debería bastarles el sentido mismo de nuestro movimiento. 163
Mientras tanto la Doctora Elisa Peretz, pianista y escritora, encargada de los programas de arte y cultura en el Shin Mem, se había servido una copa de vino y la observaba con detenimiento mientras la hacía girar con lentitud. Alzó la mano para pedir la palabra, Zvi Bartomeu asintió. – El argumento es simple aunque quizá no lo entiendan porque ellos son abstemios por principio religioso. Las colinas del Golán son nuestra defensa contra Siria, desde ahí observamos cualquier movimiento enemigo y nuestros cañones penden sobre Damasco como espada de Damocles, estamos tan cerca que cada mañana podemos ver que desayuna el Presidente Bashar Al-Asad, desde esa perspectiva sería un suicidio ceder el territorio, la punta de la espada dejaría de estar suspendida sobre las cabezas sirias y pasaría a pender sobre las cabezas de los habitantes de todo el norte de Israel, además de que dejaríamos a su suerte a las poblaciones drusas y tendríamos que desalojar a poblados judíos enteros. Pero hay otra razón, es esta, – Dijo mostrando a todos la copa. – nuestros mejores viñedos están en esa zona, desde Noah, el noble patriarca del arca, el vino es nuestra sangre, el líquido que corre por las venas de nuestra tradición, si los drusos se atrevieran a decantar el vino de esta copa no les quedaría duda de lo imprescindible que nos resulta la zona del Golán. Para los sirios el Golán es un lugar estratégico, nada más, el vino no les interesa, el Islam se los prohíbe, qué bueno porque así lo podemos disfrutar nosotros, incluso con exceso en cada Purim. – Podría la Doctora Peretz acompañar al General Alberto a visitarlos de nuevo, él se entiende mejor con tubos metálicos y plantas de tratamiento de agua que con líderes comunitarios, si aceptó acudir a la reunión de esta mañana fue por su 164
antigua amistad con patriarcas drusos. Sugirió Levana Casque. – Jamás negociarán un trato con una mujer, su tradición marca que el Mesías nacerá de un hombre, por eso utilizan esos pantalones con el tiro tan abajo. Aclaró Naftali. – Creo que podré convencerlos, ¿en qué los necesitamos?, ¿cuál sería el paso a seguir si se incorporan al Shin Mem? Preguntó el General Alberto Schwartzer. – Pueden sumarse a las brigadas drusas que trabajan en ocho de las divisiones, es importante señalarles que hasta el momento ningún militante druso participa en acciones armadas, también sería interesante que sondearas la posibilidad de fundar una segunda aldea drusa en Gaza, en el sur, entre más diversidad logremos más esperanzas de paz duradera tendremos. La Generala Casque pidió la palabra. – ¿Sabemos algo sobre la chica que se iba a hacer estallar? La doctora Hartman alzó la mano. – Hace unos minutos autoricé que la sedaran, estaba muy alterada y la psicóloga sugirió dormirla, la trasladaron al hospital en Ashkelon, mañana cuando despierte su habitación estará llena de flores para crear un ambiente propicio que marque el inicio de su nueva vida y de su tratamiento. Sin prisa desahogaron los asuntos surgidos durante la mañana, hora y media más tarde tres de los generales del estado mayor abandonaron el cuartel general, los demás siguieron en sesión permanente, atendían las llamadas de los generales de división, emitían recomendaciones o solicitaban información para complementar lo que veían en las pantallas, la mayoría de los asuntos eran resueltos de inmediato por 165
miembros del Consejo General, aunque eventualmente tenían que consultar a los miembros del Consejo Supremo.
166
VII
Siete autobuses blindados trasladaron a los periodistas acreditados desde Ashkelon hasta la entrada de la sala de prensa del campamento del Paso de Erez, en cuanto los corresponsales se hubieron acomodado el General Abed Bashara salió de atrás de una cortina azul con el símbolo de Shin Mem estampado en blanco, dos manos abiertas enlazadas por los dedos pulgares, formando la silueta de una paloma, con una Estrella de David en el centro; el anfitrión se colocó frente al atril, al lado de una enorme pantalla digital. – Buenas tardes señoras y señores, antes de salir de Ashkelon les explicaron la mecánica de la rueda de prensa. Por cuestiones de tiempo no podemos contestar más de veintiún preguntas, ¿eligieron ya a sus interlocutores? – ¿No siente que traiciona a su pueblo al colaborar con los sionistas? Disparó el corresponsal de Le Monde en una evidente maniobra de ataque. – Mi pueblo es Israel, le he servido durante cuarenta años en diferentes cargos. Israel tiene una conformación multiétnica, 167
aquí convivimos personas que hablamos lenguas diferentes, tenemos creencias distintas, que nacimos aquí o hemos llegado de más de setenta países. Los israelíes tenemos el nivel de vida más alto de Medio Oriente, hablo de todos los israelíes, judíos, musulmanes, bahá’ís, drusos y cristianos, mientras que en los países vecinos unos cuantos viven en la opulencia y la gran mayoría apenas y tiene algo que llevarse a la boca. Somos la única democracia auténtica en la región. Al participar en esta operación sirvo a Israel y sirvo a mis hermanos árabes asentados en Gaza de dos maneras: al librarlos de la opresión terrorista y al permitirles aspirar a vivir, en lugar de difícilmente sobrevivir. – ¿Debemos entender operación por invasión? – Nosotros preferimos llamarle liberación, sin embargo deberíamos despojar al término “invasión” de su carga peyorativa, a fin de cuentas somos quienes somos como resultado de una invasión, soy un árabe nacido en Nazaret como resultado de las invasiones árabes del siglo VII que abarcaron todo el norte de África, el sur de la península Ibérica, parte de Europa del Este, Medio Oriente y el sur de Asia, en principio hasta la India, aunque con el tiempo la expansión se dio hasta los archipiélagos del Océano Pacífico; soy maronita a consecuencia de otras invasiones, las de los Cruzados a partir del siglo XI. Si se pone a investigar su pasado descubrirá que lleva en el cuerpo la sangre de invasores nórdicos, germanos, galos, godos, romanos, mongoles y tártaros, por lo menos. El mundo se mueve y nosotros con él. – ¿Cómo quieren hacernos creer que esto es una liberación si están atacando a un gobierno elegido democráticamente? Intervino el corresponsal de El País con un tono de 168
clara insidia. El General se mantuvo en silencio, con la mirada al frente, la intensidad de las luces disminuyó de forma gradual, su silueta quedó diluida en la oscuridad y se iluminó la pantalla digital, donde presentaron los testimonios de veinte habitantes de Gaza, que narraban cómo habían sido amenazados para votar por Hamás, la integridad de los miembros de su familia, la posesión de sus campos de cultivo o de sus negocios, la permanencia en sus casas fueron algunos de los argumentos de coacción, los entrevistados señalaron que en todo momento los militantes de Hamás les apuntaban con las armas mientras les decían que tenían que votar por ellos para no perder sus bienes o sus vidas, tras cinco minutos de proyección se encendieron las luces nuevamente. – Además de lo que les hemos mostrado, en este momento les haremos entrega de una carpeta con pruebas documentales del fraude: grupos de boletas en las que es obvio el trazo de una misma mano, inconsistencias en las secuencias de los folios de cada urna, concentrados con registros de resultados diferentes a los de las actas de cada mesa de votación. Si alguien me dijera que los funcionarios electorales fueron adiestrados en México o en Ghana lo aceptaría sin chistar, el engaño no es un accidente sino una tendencia a todo lo largo de la cadena electoral: votos comprados u obtenidos mediante amenazas, votantes con acreditaciones falsas, extravío del registro de simpatizantes de Al Fatah y de otros partidos, urnas con más votos que el total de personas registradas en esa demarcación, diferencias entre los votos contabilizados en las mesas y los registrados en los formatos electrónicos, fórmulas amañadas en la totalización; en suma una verdadera estrategia de estraperlo. 169
No agredimos a un gobierno democrático, Hitler llegó al poder a través de un proceso bastante más limpio que este. Estamos liberando al pueblo de Gaza del control ejercido por un grupo terrorista, usurpador, antidemocrático, corrupto y fundamentalista. Limpiamos de amenazas un territorio que está en la vecindad de nuestro país, para protección nuestra, para beneficio de sus propios habitantes y para salvaguarda de la civilización occidental, nuestra civilización, la cual, con todos los defectos que tenemos que reconocer y asumir, es la que en este tiempo y en una extensa geografía brinda mayores libertades y posibilidades de desarrollo a sus ciudadanos. Los dirigentes islámicos acusan a occidente de ser una civilización decadente, sin embargo no pueden impedir que su gente emigre hacía los países que desprecian, ¿quién en su sano juicio arriesgaría la vida por llegar a Irán, Irak o Libia a buscar empleo o a tratar de encontrar una mejor calidad de vida? Europa cometió el error de abandonar a su suerte al Imperio Bizantino entre los siglos XI y XIV, el resultado fue que el Imperio Otomano se extendió hasta las murallas de Viena y durante ocho siglos impuso su ley en gran parte de Europa del Este, en Medio Oriente y en el Norte de África, si no hubiera sido por los descubrimientos de territorios y nuevas rutas de navegación en los siglos XV y XVI, aún seguiríamos bajo control turco, ese error no debe ocurrir otra vez. Israel ocupa tan sólo el uno por ciento del territorio de Medio Oriente, el otro noventa y nueve por ciento está en manos del Islam, si dejamos que ocupen nuestra minúscula porción de tierra, occidente lo lamentará de nuevo. – ¿Están pidiendo que Europa y Norteamérica respalden su invasión? 170
Preguntó el mismo reportero ante la molestia de sus colegas, evidencia de que había roto el rol acordado. – Con respecto al uso del término invasión remítase a la respuesta anterior, les quedan diecisiete preguntas. – ¿Esperan apoyo de occidente para su operativo? Intervino el corresponsal del New York Times en un tono moderado. –No, no esperamos ningún apoyo, pero tampoco queremos interferencias. – ¿Quieren que los dejen masacrar palestinos a gusto? Irrumpió la reportera de Haaretz de forma agresiva. –Su pregunta ha sido grabada, puede retirarla públicamente en este momento o mantenerla, es su privilegio, este operativo concluirá en cinco días, en ese momento la demandaremos por difamación, porque, puede usted estar segura, no tendrá el mínimo asidero para demostrar una masacre, este es un movimiento pacífico; yo no participaría en un ataque contra mi propia gente. – Retiro mi pregunta anterior… ¿Si son un movimiento pacífico por qué tantas armas y equipamiento militar? – Para esta hora hemos decomisado casi diez toneladas de explosivos, municiones y armamento, ustedes podrán comprobar su existencia en cuanto acabe esta rueda de prensa, apenas tenemos controlada la cuarta parte de Gaza, en los próximos días encontraremos más instrumentos bélicos, muchos de ellos apuntados contra nosotros, nuestra intención es traer la paz a este territorio sin embargo no podemos evadir la realidad, quienes se hicieron con el poder en Gaza permanecen por la fuerza de las armas, convenceremos con flores a quienes les gusten las flores pero no somos suicidas, en algunos casos tendremos que utilizar otras formas de 171
afrontar la situación, cuidaremos que no haya más bajas que las necesarias. –Como en Plomo Fundido, mil trescientos a uno, ¿van a negar también ustedes que existe un genocidio contra el pueblo palestino? Preguntó el corresponsal del Corriere Della Sera con tono burlón. – Aunque no soy miembro del Tzáhal tengo pruebas de que sus cifras no son correctas, pero no voy a enredarme en una discusión sobre algo en lo que nosotros no participamos, de lo que ocurra aquí podremos hablar… cuando concluya. Con respecto al uso indebido que usted hace de la palabra genocidio le informo que los datos aproximados de bajas en batalla son: de 1948 al 2010 en el conflicto árabe-israelí han muerto cuarenta y un mil novecientos árabes, persas y africanos y veintidós mil cien israelíes, eso incluye combatientes de países vecinos que han participado en acciones contra Israel, no nada más habitantes de Gaza y Cisjordania, lo cual nos muestra que se trata de una guerra donde hay bajas en ambos lados, mayores, por supuesto, en el bando que ha sido derrotado, a la vez resulta evidente que no existe un plan de eliminación sistemática, la afirmación de que se trata de un genocidio es insostenible. Si sacamos un promedio vemos que los muertos de ambos contendientes desde la Guerra de Independencia hasta el momento, por día, representan dos coma ochenta y cuatro, menos de tres personas cada veinticuatro horas, esto no deja de ser grave, un solo deceso sería suficiente para que estuviéramos preocupados, sin embargo ¿sabe usted cuántas personas son victimadas cada día por los narcotraficantes y militares en Colombia, Venezuela, Brasil o México?, ¿cuántos 172
asesinatos ocurren al día en Los Ángeles?, ¿cuántos mueren en accidentes de tráfico en cualquier megalópolis del planeta?, ¿cuántas personas perecen por inanición cada día en Beirut, en Estambul, en Bagdad, en Teherán, en El Cairo, en Riad, mientras los jeques viven en la opulencia? Vivimos una guerra con la que tenemos que acabar, esa es nuestra intención, pero gran parte del problema de esta confrontación surge de ustedes, los que siembran odio con la divulgación de datos falsos o con la proyección desmesurada de cualquier pequeño conflicto o accidente. A la altura de la pregunta dieciocho los ánimos estaban al rojo vivo, la actitud de varios corresponsales era de franco reto a su interlocutor, a una seña imperceptible del General Bashara fue ordenado el arribo de diecinueve vehículos de la brigada Bar Kojba, repletos de comandos armados y con las sirenas sonando al máximo, tras la confusión orquestada doce de los Dromedary evx se retiraron y los otros se quedaron al lado de los autobuses, los ocupantes descendieron en actitud relajada pero con los Galil en las manos, permanecieron fuera de la carpa. El nerviosismo entre la mayoría de los periodistas fue evidente. – No tienen motivo para asustarse, están en medio de un operativo militar, ellos son la escolta de sus autobuses para los recorridos que iniciarán en unos minutos, quizá no debieron hacer tanto ruido en su arribo, trataremos de que en lo futuro no sean sigilosos en su arribo. Aclaró el General. Las siguientes preguntas se desperdiciaron en recriminaciones sobre un supuesto intento de intimidación a la prensa libre, tras la última respuesta Abed Bashara respiró 173
profundamente e hizo uso de la tribuna para concluir. – Lamento que no preguntaran nada sobre las acciones concretas que estamos llevando a cabo para garantizar la paz en Gaza, el tiempo se ha agotado, ahora podrán ver lo que hemos avanzado hasta el momento, tienen absoluta libertad de hablar con quién quieran excepto con los elementos que portan armas y que, resulta obvio, están en servicio; el mapa les marca la zona liberada hasta el momento, pueden moverse en ella sin temor, pero con precaución debido a que no descartamos la posibilidad de una contraofensiva, lo recomendable es que en todo momento estén a una distancia no mayor de cien metros de sus autobuses, por si fuera necesario evacuarlos. Está prohibido ir más allá de los límites marcados, cualquier violación a esa norma significa el retiro inmediato de su acreditación. Buenas tardes, paz para todos. Antes de que alguien pudiera protestar el General Bashara había desparecido, un corresponsal de Bélgica comentó que si no estuviera en medio de una acción bélica hubiera jurado que se había tratado de un truco de magia, no estaba equivocado, en el instante que pronunció la última palabra los autobuses encendieron motores y justo ahí se activó el mecanismo que ocultó a Bashara hasta que el último reportero abandonó la sala de prensa, dieciséis ilusionistas habían sido reclutados por el Shin Mem y sus conocimientos serían de gran utilidad durante todo el operativo. Cada autobús siguió una de las siete rutas marcadas. En la reserva de agua dulce de Beit Lahiya un catamarán había iniciado el dragado y en las orillas quince camiones cisterna 174
bombeaban para extraer el agua, filtrarla y devolverla en cuanto retiraran del fondo del lecho acuático la basura. Hileras de mujeres con cubos se formaban a los costados de cada unidad para llevar agua a sus casas a pesar de que los brigadistas les explicaban que ese mismo día se dotaría a cada domicilio con depósitos externos y antes del fin de semana se instalarían cisternas selladas y también se reconstruiría y ampliaría la vieja red inglesa de agua potable. Los periodistas iban de fila en fila tomando el parecer de las mujeres. – ¿Cuál es su impresión de esta nueva invasión, no se sienten defraudadas porque Hamás no ha emprendido una defensa férrea? En la mayoría de los casos no volteaban siquiera a mirarlos, algunas los veían a los ojos y movían la cabeza, finalmente una anciana les dio una breve respuesta. – Necesitamos agua limpia, comida, electricidad, si truecan odio por vida no me quejo, cuando mi hambre esté satisfecha podré pensar en otras cosas, no ahora. Al lado suyo una joven repentinamente se quitó la burkha y la estrujó con las manos, le mostró la tela arrugada a un camarógrafo. – Durante la administración israelí nunca tuve que usar esta porquería, Hamás es hambre, es humillación, ¿por qué no se lleva esto para que su hermana se lo coloque para salir a la calle en su país? – Tienen el espectáculo bien montado, estás mujeres deben ser árabes de Nazaret o de las poblaciones cercanas a Jerusalem, vamos a ver si encontramos palestinos auténticos. Comentó el reportero a su compañero. En Beit Hanun había iniciado la reconstrucción de una escuela, brigadistas de diferentes nacionalidades estibaban 175
ladrillos, colocaban andamios, demolían muros en mal estado, sobre una tabla de aglomerado colocada encima de dos caballetes se extendían los planos, tres arquitectos israelíes discutían acaloradamente cada detalle con cinco operarios árabes, a prudente distancia un grupo de familias observaba el trajín. – ¿Sus hijos asisten a esta escuela? Preguntó un periodista danés a un hombre de poco más de treinta años. – Sí. – ¿Y por qué no ayuda a su reconstrucción?, ¿acaso no quiere acercarse a los judíos colonialistas? – Estamos esperando a nuestro capataz, Abdel Alim, un maestro albañil que es vecino del barrio, está adentro con ellos negociando cuánto nos van a pagar. – ¿Entonces va a trabajar para los israelíes? – Voy a trabajar para reconstruir la escuela de mis hijos y no me interesa saber si el dinero de mi salario viene de Arabia Saudita, de Estados Unidos o de Israel; esta es la escuela de mis hijos, se estaba cayendo en pedazos. Los imbéciles que huyeron esta mañana repetían todo el día que cuando acabáramos con Israel viviríamos mejor, mientras tanto había que aguantar el hambre y enviar a los hijos a una escuela donde el techo se les podía venir encima. Israel ahí sigue, dónde están los de Hamás, ¿usted los ve por acá?, dónde están los valientes que iban a defender la causa del Islam con su propia vida, corrieron en cuanto oyeron los cantos de esos gordos de negro. Nos abandonaron, ¿qué hubiera pasado si la intención de los judíos fuera eliminarnos?, ¿quién nos hubiera protegido?, ahora esto sería un reguero de cadáveres porque ellos huyeron y se llevaron sus armas, nada más nos quedaron 176
las piedras para defendernos, y el miedo, eso fue todo lo que nos dejaron: el miedo; pero Alá es Grande, vea, en lugar de balas hay comida y trabajo, cuando creíamos que nos iban a matar, los demonios sionistas nos ofrecen pan. No me gustan los judíos, nos han causado mucho daño, en cada cabeza, en cada familia está en carne viva el recuerdo de afrentas, de muertes, de desalojos, estoy obligado a odiarlos y al mismo tiempo tengo que reconocer que con ellos la escuela va a estar mejor, tendremos trabajo para comprar comida, volveremos a alzar la cara, así era antes de que tuvieran la maldita idea de entregarle el territorio a Al Fatah, esos inútiles que se dejaron aplastar por Hamás y Hamás nos convirtió en mendigos. Para comer había que hacer fila durante horas por un vale ante las oficinas del gobierno o de las organizaciones, después otra larga fila para canjear el vale por comida, para llevarnos un mendrugo a la boca teníamos que tirarnos al piso, lamer las sandalias de los terroristas o de los europeos por un puñado de trigo. Ahora, si Alá permite que esto no sea un sueño, yo tendré trabajo y mi familia comerá. Cobraré un salario por mi trabajo y con eso podré comprar comida, ropa, zapatos, queremos comida y enseñanza de cosas que sirvan para vivir, no nada más sudras y sudras del Corán, eso está bien para el alma pero también hay que aprender oficios para vivir sin angustias, ¿es eso mucho pedir, le parece poco digno? El reportero se sintió abrumado por la respuesta, aunque entendía árabe no pudo seguir el ritmo a la velocidad y tono que produjo el enojo del entrevistado, no obstante percibió su conformidad con los cambios que se estaban viviendo; en su afán de encontrar repudio a la invasión abordó a otro hombre y le preguntó señalando al anterior. – ¿Conoce usted a este señor, es vecino suyo o llegó hoy con 177
los israelíes? – Abdul es mi sangre, su abuela ha sido siempre vecina de mi abuela, crecimos jugando con estas piedras, por Alá el Misericordioso, ¿qué le molesta a usted?, ¿acaso quiere que vivamos siempre como perros? Mi único temor ahora es que en unos años los judíos le vuelvan a dejar la tierra a esos fanáticos que quieren obligarnos a vivir el Islam como a ellos se les ocurre. Yo fui obrero en una fábrica hasta que los judíos se fueron, dejaron la fábrica y todavía trabajamos una semana, llegaron entonces los de Hamás y la hicieron explotar, después empezaron a lanzar cohetes a Sderot, ¡qué valientes!, primero nos dejan sin lugar para trabajar y después con sus cohetes provocaron el boicot ¿o acaso pensaban que los israelitas se iban a quedar cruzados de brazos?, esos tipos no miran más allá de sus narices. Yo no tengo tierra, mi mujer se puso a cocinar y salíamos a vender té y comida, pero muy pronto casi nadie tenía para comprar. La ayuda que llegaba, la comida en cajas de cartón, se la quedaban ellos, los encargados de repartirla, te dan si tienes un mártir en la familia, te dan si les besas la suela de las babuchas, aun así te dan las sobras, ¿por qué me ve así?, ¿quiere héroes?, no hay, ya se murieron todos, se hicieron explotar por nada… no amo a los judíos, odio a algunos, tanto como odio a algunos musulmanes, gente con malasangre hay en todas las creencias, que Alá en su infinita sabiduría perdone mi impertinencia. En Sheik Za’id funcionaba un pequeño hospital, un tercio en una antigua construcción recién encalada por la brigada de reconstrucción de centros de salud y el resto en carpas montadas a su alrededor, en las camas estaban tres niños y dos niñas con desnutrición aguda, una anciana con 178
una vieja fractura mal atendida y una mujer joven a punto de parir, decenas de menores con sus mamás ocupaban la sala de espera, la movilidad era constante, los consultorios trabajaban al límite de su capacidad. Los corresponsales observaban todo con detenimiento y preguntaban en vano sobre heridos de bala, víctimas de explosiones, golpeados, encontraron a una mujer que salía de consulta con un niño de tres años al que faltaba una pierna, lo habían revisado, pesado y tomado medidas, a la mañana siguiente le harían pruebas para una prótesis, la abordaron dos periodistas italianos. – ¿Cómo perdió la pierna su hijo, fue en un ataque israelí contra la población civil? – No, fue por un error de Hamás, lanzaron un Scud hacía Sderot pero cayó en mi casa, en Beit Hanun, ¿quiere verla?, nos destruyeron dos cuartos y dejaron a mi Jalil inválido, nadie se hizo responsable. Preguntaron entonces a la doctora, imaginaban que había una demanda de centenares de prótesis para heridos de guerra. – Eso creíamos nosotros, estamos preparados para atender a cientos de pacientes que necesiten prótesis, pero hoy han venido únicamente tres personas, quizá aún no tienen la suficiente confianza, veremos que ocurre en los próximos días. – Pero hace un momento vimos a más de diez personas en sillas de ruedas eléctricas, salían del hospital. – Si, dos las necesitaban por la edad, tienen más de noventa años, otras siete no pueden caminar por sobrepeso o problemas derivados de la diabetes, va a resultar complicado convencerlos de modificar sus hábitos alimenticios; a uno le faltan las dos piernas por un accidente de trabajo, era electricista y ustedes pueden comprobar en qué estado se 179
encuentra la red de suministro, la gente de Hamás consideraba que era un derroche destinar recursos a los servicios para la población, mejor compraban armas. En Nazla se trabajaba en la reconstrucción de dos escuelas, una guardería, una clínica, una mezquita y un templo católico, al salir de la iglesia se advirtió a los periodistas del autobús cinco que se iban a bajar las cortinas de pvc controladas desde el tablero y se cerraría la mampara colocada entre los asientos y el conductor, nadie podría ver nada del exterior durante veinte minutos, hasta que llegaran a la prisión. Un sonar mantendría inhabilitados los aparatos con GPS y todos los dispositivos electrónicos. Al descender, en el interior del patio de acceso a las celdas, se les indicó que a los detenidos podían interrogarlos libremente, además estaba permitido hacer preguntas a los representantes de la Cruz Roja Internacional y de la Maguen David Adom que prestaban servicio en el penal, pero que se abstuvieran de dirigirse a los guardias, estaban prohibidas las fotografías y el uso de cámaras de video. Para sorpresa de los corresponsales eran pocos los prisioneros que hablaban árabe con el acento de la zona, algunos ni siquiera entendían esa lengua, tuvieron que proporcionarles traductores de farsi, pashto, ruso, alemán, swahili, francés, tamil y malayo. – Tenemos que encontrar dónde está el truco. Comentó uno de los reporteros veteranos. – Hamás no tarda en responder, los judíos están muy confiados pero esto no les va a resultar tan fácil. Le contestó su camarada más cercano. – Sabemos que tienen a Zubeidi, queremos hablar con él. 180
– Hace dos horas fue entregado a la policía israelí, lo sentimos, era demasiada responsabilidad tenerlo en esta prisión. En una explanada cerca del mar se extendía una larga carpa, las oraciones del atardecer habían concluido y los vecinos se encontraban en torno a una serie de mesas bajas repletas de comida: humus, falafel, tabule, berenjenas cocinadas de siete modos distintos, pepinillos, coliflor en curry, cuencos llenos de arroz de un blanco deslumbrante, panes de pita con satar, melones, sandías, cerezas, damascos, ciruelas, dátiles. Algunas mujeres se llevaban platones enteros a sus casas, de inmediato eran cubiertos los huecos en todas las mesas. Samira, la anciana esposa de un imán, caminó indignada hacia una de las casas donde había entrado un grupo de mujeres que llevaban platos de alimentos, empezó a discutir con ellas. – Nos están invitando a comer con ellos, podemos negarnos o aceptar, pero no debemos robar su comida, por gloria de Alá hijas, debemos actuar con respeto por nosotras mismas, si nos sentamos a su mesa debemos compartir lo que tenemos, no sólo tomar y mucho menos arrebatar, la comida no va a acabarse, no han visto las cantidades que sacan de los camiones, podremos hartarnos y sobrará por lo menos para una semana. Devuelvan esas bandejas al lugar donde estaban y lleven algo cocinado por ustedes, muestren la cortesía del Islam, que Alá el todopoderoso nos cuida y nos protege pero también nos pide cuentas. – Parece que no tendremos que someternos a la dieta vegetariana. Comentó el General Ben Shaul al Cabo Wachowski 181
cuando vio venir a pequeños corrillos de mujeres portando platos de kepi, shawarma, kebab. – Alá es grande, tanto como mi estómago. – Calla muchacho, muchos de ellos hablan hebreo, no digas imprudencias. En la mesa central la señora Samira quebró una docena de huevos crudos sobre un enorme cuenco de arroz blanco y vertió encima grasa de cordero, metió los brazos hasta los codos para mezclar los ingredientes, se limpió con una tela y con la mano sirvió sobre un plato de cartón que pasó a la mujer que estaba a su lado, esa fue la señal para que todos empezaran a comer. Por los alrededores una escena empezaba a repetirse, con el paso de los días se convertiría en el emblema de la nueva época de la Franja de Gaza, ancianos o ancianas contaban historias a grupos de niñas y niños que compartían el espacio sentados en bancas o en la arena, la narración de cuentos dejaba de ser terreno exclusivo de los religiosos y se diluía el tabú de que niñas y niños tenían que permanecer separados; de los baúles salían antiguas leyendas de duendes, hadas y djinns que se mezclaban con anécdotas de la tierra, de la siembra, del pastoreo, palabras con aroma de aceitunas amargas y dulce sabor de dátiles que hacían olvidar a los pequeños el sonido del tableteo de las ametralladoras. Sobre la tarima colocada en uno de los extremos de la carpa comedor un grupo de músicos inició un concierto de música sefardí, con guitarras, violines, panderetas y cajones acústicos, lo que resultó una verdadera provocación, más de veinte d’rbukas aparecieron como por arte de magia y se incorporaron al ensamble, poco a poco fueron transformando el ritmo, el ambiente se llenó de un vaivén de ritmos árabes y 182
judíos, los músicos gozaban, decenas de niñas, niños, jóvenes, bailaban y cantaban, entre ellas Myriam y Judith, algunas mujeres maduras se incorporaron a la danza en franco reto a la mirada de reprobación de los tradicionalistas; mientras eso ocurría, Valentina charlaba con un grupo de voluntarios sobre la funcionalidad de los uniformes, ella había participado en el diseño y quería saber qué tan prácticos resultaban, su habilidad en la manufactura de ropa para muñecas de trapo le había resultado útil, todo era alegría en el atardecer… hasta que en el cielo sonaron las detonaciones, diecinueve estallidos en el aire y uno en tierra, muy cerca de la fiesta. – ¡La mezquita!, ¡la mezquita!... Fueron los gritos de un niño, un misil había caído sobre una mezquita de Atatra, la multitud corrió en esa dirección. Mientras empezaban a formarse cadenas humanas para llevar cubos de agua, paramédicos voluntarios del Shin Mem y de Zaka se introdujeron temerariamente a buscar a los heridos, antes de diez minutos los bomberos lanzaban chorros de agua desde las torretas de sus camiones cisterna, pronto fue extinguido el fuego, los corresponsales de la ruta tres obtuvieron la primicia del contraataque: ocho heridos, tres graves, y un muerto: un imán radical. El religioso y sus alumnos se habían negado a departir con el enemigo, tal fue su afirmación categórica, la imprecisión de los muyahidines causaba bajas entre sus coterráneos. En las pantallas del Cuartel General se observaban todavía las acciones en Atatra cuando entraron Valentina y las niñas al salón principal escoltadas por Alberto Ayadón que cargaba a la pequeña Judith, Zvi respiró tranquilo. – No te preocupes, nadie sabe que existimos, al que todos 183
ubican al frente es al Rabino Baruch, tú y nosotras estamos a salvo. Dijo Valentina dándole un beso. – Te tengo malas noticias, el gabinete israelí sabe de nuestra existencia, lo confirmó Montefiore esta mañana, el problema no es que ellos nos tengan en la mira, pronto los otros van a descubrir que tan metidos estamos, lo menos que podemos esperar es que nos dediquen una fatwa. – Vaya, espero que eso no signifique que tendremos que permanecer encerradas aquí o en la casa en Ein Hod. – No, únicamente es preciso extremar la seguridad, coman algo en lo que vemos qué están haciendo los de la brigada de reacción inmediata.
184
VIII
– Primera salida del libreto, ignoro si esto es bueno o malo, pero tanto apego a lo escrito me tenía con los cojones en la tráquea, empezaba a sentirme personaje bíblico. Exclamó el Teniente General Naftali Mostovich. – Pues la cifra de misiles bloqueados y del que estalló es exacta, la única diferencia es que se anticipó hora y media y la baja la pusieron ellos, no nosotros, no es que este dato me produzca alegría, sin embargo tienes que reconocer que fue una metida de pata monumental la de Hamás. – No tanto, el imán muerto era del Ansar Jud Alá, vinculados a Al Qaeda, enemigos jurados de Hamás y antítesis de Al Fatah, recuerda que entre ellos se odian tanto o más que a nosotros; Aharon ¿qué ocurre?, se ve preocupado. Preguntó el Capitán General al General Aharon Magnus. – El punto de lanzamiento está muy al sur, pero no tanto como para que nos puedan proteger los destacamentos que tenemos en Rafah, la posición es +31º 24’8.94”, +34º 19’12.21”, al suroeste de Dayr Al Balah, justo en el centro del actual 185
territorio enemigo, la única ventaja es que no hay edificaciones cercanas, podemos intentar un ataque sin temor de daños colaterales. Mostró el General Magnus en una de las pantallas el sitio desde donde fueron lanzados los cohetes. – ¿Vamos a bombardear? Preguntó el General Levi Munhos, le contestó el General Modigliani. – Olvídelo, la prioridad son las vidas, no debemos alterarnos por sus medidas defensivas, era de esperarse, la cuestión es cómo evitar el derramamiento de sangre y neutralizar a los atacantes sin quedar atrapados, no podemos permitir que ellos capturen a nuestros efectivos o los maten, en este momento tres helicópteros vuelan sobre el mar, a baja altura para evitar que los detecten los radares, en caso de que les quede alguno que funcione, y tenemos cuatro embarcaciones listas para el desembarco. – Silencio todos, tenemos una comunicación desde el helicóptero insignia. Señaló Zvi Bartomeu. La imagen del interior de la nave se agrandó hasta ocupar doce pantallas, Machir Meir estaba al habla. – Solicitamos autorización, plan de ataque intención cero bajas, propuesta de Schneider, antecedentes operativos positivos. Vean en pantalla, perímetro de quinientos metros en torno al blanco con cero asentamientos, factible cero pérdidas humanas, requerimos subordinar respaldo marítimo, contamos con lo necesario. Zvi vio al Rabino Baruch, este extendido la mano izquierda en dirección a Naftali y a los Generales Aharon Magnus y Lumbroso Modigliani, los tres aprobaron. 186
– Aceptado Comandante, no escatimen precauciones. – El historial de la Teniente Schneider es interesante, debería ser coronel por lo menos, ha acumulado buena cantidad de méritos en el Tzáhal, pero entre el machismo imperante y sus iniciativas no pasa de teniente, a algunos de sus superiores les molesta que sea tan participativa y hablantina. Intervino Mostovich una vez apagada la comunicación con la nave. – ¿Una especie de Custer en femenino? Preguntó Munhos. – No a ese extremo, ella no es imprudente ni se siente el centro del universo, su cerebro es ágil y siempre anda buscando como resolver las cosas, no siempre con apego al reglamento o a lo cotidiano; hasta ahora no ha salido mal en ninguno de sus operativos, su lógica no es del todo militar pero funciona, sobre todo logra el objetivo sin causar bajas. Aclaró Naftali. – Tuvimos una excelente reacción de Lucy on the Sky with Diamonds, el escudo antimisiles, están buscando por qué el vigésimo logró pasar, es probable que hubiera un error en el análisis electrónico de la trayectoria. Recuerden que el sistema deja que continúen su recorrido los que van a impactar en despoblado, eso ahorra recursos. El General Schreiber está inmerso en la investigación, ¿salieron ya todos los periodistas de Gaza? Preguntó Bartomeu. – Los de la ruta tres van retrasados, se entretuvieron demasiado con lo del misil, tuvieron la primicia de la primera baja conocida, hasta este momento no había nada que pudiera considerarse como imagen de guerra; supongo que llegarán tarde a la rueda de prensa en la sede de gobierno en 187
Jerusalem. ¿Capitán General, Paul McCartney y Ringo Star estuvieron de acuerdo en que un escudo antimisiles llevara el nombre de una de las canciones de su legendario grupo? Preguntó el General Hebel Camondo. – De acuerdo con los informes es un nombre provisional, LSD es un prototipo con mejoras sobre el escudo Iron Dome, quizá tenga alguna referencia a las aficiones de los físicos que lo desarrollaron, de alguna manera deben abrir su mente para entendérselas con operaciones matemáticas tan complejas – Los que gusten de las emociones fuertes pueden quedarse a ver el desenlace del operativo, yo prefiero tomar los alimentos tranquilo en el comedor, por cierto, Andra Daoud va a levantar su voz hasta las nubes cuando sepa que un ser misterioso introdujo de contrabando pizzas a nuestras instalaciones ultra secretas, confío en que no hayan sido solicitadas por teléfono y nos las haya entregado a la puerta uno de esos repartidores suicidas en motocicleta, menos mal que son Margherita, mis favoritas, y son kosher, eso nos permite aspirar a cierta indulgencia por la afrenta. Dijo el Rabino Baruch como despedida. La mayoría permaneció pendiente del operativo. – Vamos a sobrevolar a los yates, retornamos desde el oeste en un movimiento perimetral y aterrizamos equidistantes a trescientos metros del blanco, el aterrizaje debe ser simultáneo al estallido de los cohetes. Las coordenadas son +31º24’14.22”, +34º19’21.48”, dos proyectiles juntos y otros tres a intervalos de dos minutos, con eso tendremos tiempo de rodearlos. Indicó Daniela Schneider a sus compañeros de vuelo, Machir Meir retransmitía en clave las instrucciones a los otros dos helicópteros y a las cuatro naves marítimas, desde uno de los yates lanzaron misiles Spike sin proyectil, al mismo tiempo 188
desde los helicópteros lanzaban misiles Popeye modificados, al hacer contacto provocaron una estruendosa detonación y liberaron un humo denso y multicolor, con eso lograron cubrir el descenso de las aeronaves en el lado opuesto. Veinte minutos después de los estallidos en Atatra inició el ataque israelí, las explosiones y la humareda eran efectos obtenidos de los trucos de los ilusionistas, aplicados a escala gigantesca. Los muyahidines rieron, pensaron que los brigadistas habían fallado el blanco. Sesenta segundos más tarde estalló el tercer proyectil, para cuando detonó el quinto el campamento estaba impregnado de gas lacrimógeno extraído de bhut jolkia, la guindilla más picante del mundo, la intensidad de su efecto paraliza sin intoxicar ni dejar secuelas, aún con las kuffiyot sobre la cara no podían dejar de toser, la capsaicina del condimento hindú se les metía por la boca, la nariz y los ojos y les provocaba escozor en la piel, las máscaras antigás estaban en el arsenal, cincuenta metros fuera de su alcance. La imprevisión de los artilleros de la Yihad actuaba a favor del operativo del Shin Mem. Al aterrizar los helicópteros, descendieron cuarenta y ocho militares, de cuatro de los yates habían desembarcado otros tantos, con las ballestas dispararon más cargas de gas y cohetes de serpentina, de uso festivo, avanzaron hasta llegar al campamento por el sur y el oeste, los milicianos corrían tratando de esquivar los fuegos de artificio, mientras tosían y lloraban sin parar, quien no supiera qué ocurría podía imaginar que se trataba del baile de una celebración popular. Los comandos se deslizaron sigilosamente para sorprender a los yihaidistas antes de que pudieran hacer uso de sus armas, en algunos casos fue necesaria la lucha cuerpo a cuerpo e incluso se llegaron a soltar cuatro o cinco culatazos, no se 189
escuchó ni un disparo. Seis milicianos lograron huir, fueron capturados veinticinco, al momento del ataque estaban a punto de lanzar otra andanada de misiles. Los marinos se llevaron consigo a los prisioneros mientras los integrantes de la brigada Bar Kojba desactivaban los misiles, amontonaban las armas y colocaban explosivos C4 en la zona de lanzamiento y en el arsenal, por la situación de riesgo no era posible transportar el armamento y los misiles, estaban en territorio enemigo, Machir Meir dio unas palmadas de tristeza sobre cajas de munición. – Es una lástima tener que deshacernos de toda esta munición, pero no hay manera, espero que no lo lamentemos más tarde. Su voz sonaba bastante extraña a través de la máscara antigás. – Es basura Machir, basura que mata, entre más rápido hagamos volar esto más seguros estaremos todos, para qué queremos más armas y explosivos, vámonos de aquí de inmediato, que toda esta porquería vuele de una vez. Le contestó Daniela Schneider. Noa estaba de guardia en uno de los helicópteros, cubría la retirada con una FN Mag 60-30 montada sobre una base al lado de la puerta corrediza derecha de la nave, observó que Daniela cojeaba, hacía un gran esfuerzo para mantener el ritmo de la marcha, en cuanto subieron todos y se retiraron las máscaras antigás le preguntó. – ¿Te hirieron en la pierna, te golpearon con algo? – No, me torcí el tobillo mientras agarraba a culatazos a uno de esos tipos, él no logró asestarme ni un manazo, es por culpa de mi sobrepeso pero no digas nada, no quiero pasarme el resto de la fiesta en la enfermería. – En cuanto regresemos te reviso, igual con una buena fricción y una venda elástica se soluciona, pero hay que comer con 190
moderación ¿eh? – No fastidies, mi problema es tiroidal, mis malditas glándulas se empeñan en mortificarme, y no te vayas a emocionar con lo de la fricción. – Te mueres de ganas, pero no creo que tengamos tiempo, además con tantas cámaras sobre nuestras cabezas y tanto religioso alrededor más vale no buscarle, podemos provocarles un trauma irreversible, te imaginas, tendríamos que solicitar una sección especial de terapia para damnificados del voyerismo del sexo convexo. Chaim Govesenzky exclamó con dolor. – Me arde el brazo, de qué demonios está hecho ese gas, nunca había sentido algo así. – Les advertimos que era necesario humectar generosamente con aceite de oliva las partes del cuerpo que fueran a permanecer expuestas, vacíate la cantimplora sobre el brazo, sécalo y úntate Caladryl o gel para quemaduras por exposición al sol, se pasará en un par de minutos. Le indicó Machir. – Vale, pero qué es, huele bastante más fuerte que el gas que hemos utilizado antes. –Es una de las sorpresas que tenemos a prueba, hasta ahora se había utilizado capcina de dos variedades de ají mexicano, jalapeño y habanero, esta es de bhut jolkia, del norte de India, según el informe químico es dos veces más picante que el habanero y doscientas más que la Salsa Tabasco, ya comprobaste como nulificó su capacidad de respuesta, lo mejor es que en diez minutos empieza a disminuir el picor y a la media hora desaparece por completo la sensación, no hay ningún efecto secundario. – Vaya, la cocina llevada a la guerra, quién iba a imaginar, ¿de 191
quién fue la genial idea? – Es bastante vieja, tendrá unos cien años, en la Revolución Mexicana, cuando los zapatistas sitiaban posiciones enemigas colocaban alrededor una franja de ramas secas a las que prendían fuego y arrojaban chiles, ajíes, el humo picante doblegaba a sus opositores. – ¿Los zapatistas esos de los pasamontañas negros? – No, esos son recientes, Emiliano Zapata era un general que peleaba en un pequeño territorio, en el centro de México, como a mil kilómetros de distancia de Chiapas y ochenta años antes, no más preguntas, ya me cansé de hablar a gritos, al rato te documentas en la Wikipedia en lugar de andar viendo videos triple equis. Una vez que despegaron los helicópteros, Machir utilizó una frecuencia de su teléfono satelital para activar el detonador, la explosión se vio hasta Port Said en Egipto y Tel Aviv y Be’er Sheva en Israel, tras la extinción del fuego hicieron vuelos rasantes de reconocimiento para confirmar que no había bajas. En diez minutos todo había terminado, al elevarse escucharon ráfagas de ametralladora, pero ellos se encontraban fuera del alcance. Dividieron a los prisioneros en dos de los yates, donde los revisaron y les retiraron los teléfonos móviles, relojes electrónicos, armas blancas y armas de fuego ocultas, tres de los detenidos presentaban fracturas que fueron atendidas por los médicos de a bordo, las naves tomaron rumbo al norte de Gaza, informaron sobre el tiempo aproximado de llegada para que vehículos blindados aguardaran en la playa por los detenidos. Cuando comunicaron al Rabino Baruch del resultado, 192
sonrío, concluyó con calma su comida, se levantó a lavarse y se dirigió a la sala de oración. A las doce de la noche se realizó la tercera reunión del Comando Central, el rabino Oheb Montefiore había arribado minutos antes. – La situación es compleja, en la rueda de prensa la Primera Ministro deslindó al Estado de Israel del Shin Mem, pero afirmó que no tomarán medidas inmediatas en nuestra contra, dada la magnitud de la movilización existe el riesgo de una guerra civil; tampoco va a permitir la injerencia de organismos internacionales. Aseguró que va a continuar convocándonos a desistir de seguir adelante y que en caso de rebeldía procederá legalmente en nuestra contra, afirmó que los abogados del Gobierno están instrumentando los cargos. Informó Montefiore. – Me parece una buena forma de distracción, aunque dudo que la prensa tome en serio sus amenazas. Intervino la Generala Levana Casque. – De momento esa fue la mejor idea que tuvieron para mantener tranquilos a los embajadores, el Presidente de Estados Unidos respaldó la opción, no podemos negar que eso del riesgo de guerra civil fue una buena salida, es del Ministro de Defensa Ehud Barak, por algo ocupó antes los cargos de Director del Mossad y de Primer Ministro. Necesitamos brindarles más elementos para que puedan cubrirnos, es recomendable proporcionarles algo contundente antes del amanecer, ¿tenemos algo de peso entre los detenidos en Dayr Al Balah? – Nada, muyahidines de base y un mando medio, recibieron las instrucciones vía teléfono móvil de uno de los líderes encajonados en Hebrón. 193
– ¿Por qué no fue detectada esa llamada? – Tenemos que actualizar nuestros códigos, el mensaje no contenía ninguno de los términos considerados sospechosos, la decodificaron por fin hace unos minutos y cargaron de inmediato al programa las nuevas claves, pero es probable que tengan más de los quince lenguajes cifrados que tenemos registrados. – Habrá que extremar precauciones. – La primera precaución es mantenernos con la suficiente lucidez, tenemos que descansar un poco. – Apliquemos el primer rol de guardia, el avance es muy lento a esta hora, así estaba previsto, lo mejor es recuperar fuerzas, llevamos casi dos días sin dormir, un par de horas de descanso profundo no nos vienen mal, ¿qué opina el Capitán General? – De acuerdo, conforme al rol me corresponde la guardia de 0100 a 0300 y duermo de las 0300 hasta las 0500, nos quedamos ocho, buenas noches a los demás. El primer grupo descansó las dos horas acordadas, el Capitán General se retiró a dormir a las 0301, a las 0323 Zvi fue despertado violentamente, tres minutos más tarde, con la cara empapada y una toalla en torno al cuello, entró al salón central. – Espero que exista una buena razón para haberme hecho esto, quién fue el chistoso que programó la alarma junto a mi cama en el volumen máximo, es una infamia, siento como si me hubieran dado un mazazo en la cabeza, en cuanto encuentre al culpable voy a hacer uso de mis prerrogativas de grado por vez primera. – No te alteres, Quien Todo lo Puede nos ha bendecido con el 194
mayor logro de la operación hasta ahora, alégrate querido Zvi. Dijo eufórico el Rabino Baruch, primer Teniente General. – Rabino, sinceramente hubiera preferido un término como ¡Eureka! o algo así, pero bueno, habrá que conformarse con lo que hay, tienes que ver esto Zvi. Señaló Naftali, tercer Teniente General. – Mira el regalito que tenemos en la cubierta de este barco, nada menos que a Ismail Haniyah y a Khaled Mashal, con su plana mayor, se ven tan buenas personas, así, compungidos, frágiles, los pobres huían en un yate de lujo, ese que ves al fondo de la pantalla, una embarcación digna de Montecarlo, por su línea, sin considerar que todas las riquezas de las Mil y Una Noches están bajo su estilizado casco: joyas, oro, diamantes, el Ak47 del piadoso señor, con las piezas de metal chapeadas en oro e incrustaciones de rubíes en la culata de ébano. Hace media hora los Osos Trogloditas tomaron por asalto la casa del Santo Mulá en el boulevard Jimmy Carter en Shati, fue entonces que se descubrió la huida y se inició el rastreo, no tardamos mucho en localizarlos, la revisión de la casa no se ha realizado a fondo pero te puedo anticipar que el señor Haniyah tiene una gran debilidad por el whiskey escocés. – Bueno Rabino Montefiore, tiene usted lo que quería, Haniyah y Mashal tienen tantos cargos en contra que deberían ser juzgados en Ginebra, creo que el que necesita un trago de whiskey soy yo. – Lamento no poder ofrecerle JW etiqueta azul, que es de lo menos costoso que se aprecia en las bodegas de nuestro amigo, algunas de las botellas que tiene en vitrinas bajo llave alcanzan precios superiores a los dos mil euros, las he visto en 195
aparadores en licorerías europeas de altos vuelos ¿se conformaría nuestro líder con un modesto Chivas Regal 12 años?, siempre traigo en mi equipaje media docena de botellines de cinco centilitros, por si las dudas. Intervino el general Aharon Magnus. – Debemos reconocer que los dirigentes árabes son unos verdaderos sibaritas, a fin de cuentas fueron los árabes los que enseñaron a los Cruzados a disfrutar de las comodidades. – El dilema para la humanidad estriba en decidir si mantener el esnobismo a costa de las desigualdades o lograr la igualdad y pasar a retiro a los diseñadores de modas, los huevos de Fabergé, los Ferrari de doce millones de euros, los restaurantes gourmet y de paso permitir que los esturiones se repongan, porque su población está en franco declive. – Naftali, te faltaron los edificios de Dubai. – Quiero ver a esos magnates ahí dentro, cuando no exista más petróleo para mover los ascensores y mantener en funciones el clima artificial. – Observen la pantalla Gimmel Nun. Señaló Edén Hidekkel. – La tapa del toilette es de piel de foca con bordados de oro, las manijas también son de oro, igual que los grifos del lavamanos y de la tina de baño, el espejo tiene incrustaciones, la frase “Alá es uno y Mohammad su profeta” está realizada con lapislázuli y la maquinilla con que cada mañana se recortaba la barba ese ejemplo de la humildad humana tiene aplicaciones de zafiro y base de platino, su ascetismo es conmovedor, tanto como su buen gusto, estoy segura que estaba cumpliendo algún voto de pobreza. – ¿Cómo va el traslado? – Veinte embarcaciones, tres submarinos y cinco helicópteros 196
forman parte del convoy, más seis guardacostas de la Marina Israelí. Hubo una demora porque el Ministro Barak quería que se hiciera la entrega antes de desembarcarlos pero la Primera Ministro no lo autorizó, primero quiere que sus asesores revisen los procedimientos legales, para no entrar en conflicto con tribunales internacionales. No creemos obtener gran cosa en los interrogatorios y son un peso demasiado grande para tenerlos en nuestra prisión, tenemos que extremar las precauciones, pueden atentar contra ellos para endilgarnos el fiambre. – Acaba de realizar su aparición estelar Hezbollah, – Intervino Naftali – el escudo antimisiles Iron Dome hizo explotar en el aire nueve proyectiles procedentes de Líbano y dejo pasar otros siete, cinco cayeron en zonas despobladas, hubo dos fallas pero no hay pérdidas humanas; tropas de Siria avanzan hacia la frontera. – Esto se pone interesante… ¿algún movimiento en el mar? Preguntó Munhos mientras se frotaba las manos. – Cuatro portaaviones norteamericanos en el Mediterráneo, uno en el Mar Rojo, dos en el Mar Negro y tres en el Golfo Pérsico, mañana los precios de las acciones de los fabricantes de armamento van a colocarse por las nubes. – El presidente egipcio acaba de comunicarse con la Primera Ministro, para felicitarla, ¿dónde tenemos la fuga de información? Preguntó el Rabino Oheb Montefiore con visible disgusto, su aceitunado rostro estaba del color de un tomate y los ojos parecían quererse salir de las cuencas. – Relájese, no gana nada con enojarse, – respondió Naftali – la fuga se llama Sentry, supongo que en la CIA están aprovechando la operación para llevar agua a su molino. 197
Deberíamos reconsiderar el cobrarles una prima en lugar de pagarles la renta de ese avión, nos van a causar muchos dolores de cabeza con su actitud. – General Munhos, por favor comuníquese con el Secretario de Estado Norteamericano y dígale que queremos que retiren el Sentry de inmediato, lo que hicieron viola los acuerdos. Indicó Zvi Bartomeu. – Es un acto contundente. – No, por supuesto, nada más es una llamada de atención, que entiendan que esta es nuestra operación y no queremos que nos obstaculicen la posibilidad de utilizar el factor sorpresa, ¿qué son esos gritos? – De júbilo, los editores de imágenes pasaron al altavoz el audio de lo que ocurre en la mansión de Haniyah. No han encontrado guardias ni trampas, abandonó a sus esposas a su suerte, todo un harén, hay menores de edad y son bastante más de las tres que se supone que están permitidas por la Sharia. En las bodegas hay toneladas de goma de opio, hachís, cocaína, comida para un ejército y alcohol suficiente para llenar su alberca semi olímpica diez veces. Explicó el General Maskaram Masala. Las miradas de Zvi y el Rabino Baruch se cruzaron con las de la Segunda Teniente General, le dieron la palabra. – Que se proteja a esas mujeres de inmediato, instruyan a la Doctora Zisano para que envíe cuanto antes un grupo de psicólogas, es urgente revisar la situación de todas y cada una de las mujeres del harén, sobre todo de las menores de edad, este Haniyah es un digno… representante de su Profeta, si Aisha fue prometida a Mohammad cuando ella tenía 6 años y él 54, qué más da que el Mulá anduviera con niñas de 12 o 14 años a sus 52, la sindéresis no es lo suyo. Soliciten a la Doctora 198
Bejira Calanit que envíe una cuadrilla médica, para saber en qué estado de salud se encuentran, recordemos que los de Hamás reimplantaron la práctica de la ablación que se había prohibido bajo la administración israelí y que hemos encontrado demasiados casos de violencia contra las mujeres. Es importante saber a cuales podemos reintegrar a sus familias y a cuales hay que brindarles nuevas opciones de vida, su situación es sumamente frágil, es probable que para los militantes de Hamás ellas sean intocables, pero los de las otras facciones pueden tratar de convertirlas en objeto de su venganza. Instruyó la Doctora Yarden. – Si me permiten. Asomó Valentina en la sala principal. – Aun cuando opté por participar únicamente de manera marginal para poder cuidar personalmente de Myriam y Judith, utilizo ahora la pequeña rendija que me dejaron abierta para cuando quisiera opinar, sin pretender interferir… – Por favor Valentina, prosiga. Señaló Argoya Yarden. – El maltrato a las mujeres es una de las constantes de los fundamentalistas islámicos, desde esa perspectiva considero que tendría una fuerte carga simbólica que la residencia de Haniyah se transforme en un centro de atención a las mujeres maltratadas, un refugio para las víctimas de la violencia machista, habrá que ver cuál es la situación legal del inmueble, siempre podemos solicitar una expropiación con indemnización para sus beneficiarios. – Excelente idea, ¿quién la respalda? Preguntó el Rabino Baruch, todas las manos se levantaron, aprobando. 199
– Entonces fijemos prioridades, que resguarden a las mujeres en el interior del harén, en cuanto a lo demás que no se toque, que un escuadrón de la brigada de limpieza profunda realice una revisión minuciosa para eliminar cualquier trampa o situación de peligro, pero que dejen todo intacto, el primer inventario que se efectúe únicamente hasta donde se pueda ver sin mover las cosas de su lugar. Soliciten al general Shlomo Levy la instalación de un corredor de seguridad para que a primera hora lleven a la prensa a ver las dependencias y despensas del líder espiritual de Hamás, a la Comunidad Europea le va a dar mucho gusto saber cómo se invertían sus recursos. Una vez realizado el espectáculo que se levante el inventario a fondo y se retire del inmueble lo que no se vaya a necesitar ahí, al medio día el Arquitecto Ben Shaul y sus muchachos pueden empezar a trabajar en el proyecto de adaptación para el centro de atención a mujeres maltratadas. Señaló Naftali. – ¿Y qué hacemos con los muchachitos? Preguntó con una sonrisa sarcástica Levana Casque. – ¿De qué muchachitos hablas? Preguntó intrigada Valentina. – Pantalla Dalet Jet, dos menores de edad que formaban el harén alterno del Santísimo Señor Mulá, la prueba de que las reglas del Islam tienen un rasero duro para el pueblo y otro, bastante más suave, para los dirigentes… lo que ocurre es que estos niños quedan en la misma situación de las mujeres, pueden ser el blanco de venganzas, ¿A dónde los enviamos? – Bien… supongo que de momento es mejor tenerlos a resguardo en la misma residencia, que también sean validados y veremos, no creo que vayamos a lograr que de la noche a la mañana el homosexualismo sea aceptado en Gaza, si aún 200
continúa proscrito en los barrios ultraortodoxos de Israel, ahí el asunto llevará mucho más tiempo. – Siempre hay la opción de enviarlos a Tel Aviv. – Estimado General Magnus, su comentario está en el borde de lo políticamente correcto, justo en la orilla. Le espetó Levana Casque. – No exageres Levana, algo hay de cierto, en algún lugar leí que se considera a Tel Aviv la segunda ciudad gay del mundo, un escaño por debajo de San Francisco, está por encima de Ámsterdam o Barcelona, que tienen lo suyo, así que lo que dijo Aharon no nos ofende. – Aclaró el general Ariel Schreiber, quien llevaba veinte años de vida en común con Menahem, su pareja. – No debemos adelantar juicios, pueden haber sido víctimas de abuso pero eso no determina su preferencia sexual, tampoco es relevante saberlo, como sea necesitan protección. Concluyó Valentina, de reojo todos vieron al Rabino Baruch, quien prefirió mantenerse ajeno al tema. – Vean esa cama, en la pantalla Zayin Kaf, este tipo debe haber contratado al decorador de interiores de Michael Jackson, hasta el eclecticismo tiene un límite: cabecera y columnas talladas y recubiertas de hoja de oro, barrocas, como las de los retablos de iglesias dominicas, cortinas de terciopelo rojo con brocados en vino y oro, la pantalla de la lámpara de la mesilla es de acrílico, el tapete de piel de cebra no encaja con nada y sobre la recargada tapicería del muro ese óleo impresionista, parece un Monet. Dijo Elisa Peretz en una mezcla de admiración y escarnio. – No lo dudes, el hombre reúne todas las características de un auténtico nuevo rico, tiene discos de estrellas pop 201
autografiados por sus autores, una filmoteca nada relacionada con las cuestiones del alma, con su buena dotación de cine erótico y pornografía de alta intensidad, también, eso sí hay que reconocerlo, un espacio reservado para los devedés de los mártires. Lo mejor es su ejemplar del Corán con cubiertas de piel de cocodrilo y broches en filigrana de oro, para variar, ese es el único libro que se ha encontrado hasta el momento en la parte develada de la residencia. – Un auténtico musulmán tiene más que suficiente con el Corán. – Como un auténtico judío tiene de sobra con la Torá. – Entonces ¿por qué esta mañana leía Titus Andronicus, Rabino? – Porque no soy un auténtico judío, la verdad es que creo que voy a morirme sin conocer a uno solo, debo aceptar que tengo debilidad por Shakespeare, igual que por Cervantes y hasta por ese antisemita de Quevedo. – ¿Y usted considera seriamente que la Torá es el legado de Dios, su palabra? – HaShem, Naftali por favor, concédenos ese pequeño privilegio, nombrar al Poder Supremo de acuerdo con lo que marca la tradición, por lo demás no tenemos tiempo ahora para ese tipo de disertaciones, se requieren años de estudio para enfrascarse en estas discusiones que también necesitan sus años para desahogarse. Lo único que te puedo decir es que de cuando en cuando me asalta la preocupación de que algún sobreviviente asirio vaya a querer entablar una demanda por plagio contra el Creador, porque la historia de Noah, me parece, le debe mucho a La epopeya de Gilgamesh. Zvi, Valentina, traten de dormir un poco más, casi va a amanecer y todos requerimos de la lucidez de los Capitanes Generales. 202
– Gracias Rabino pero prefiero que no me adjudiquen sobrenombres, el Capitán General es Zvi y nada más, podría considerar que yo soy Campanita, aunque tampoco, porque el capitán de ese cuento es Garfio, tiene razón, necesitamos dormir.
203
204
IX
– ¿Nos perdimos de algo? Preguntó nada más entrar al salón principal el Capitán General, con gesto relajado y fresco tras dos horas y media de descanso y una buena ducha. – Parece que el impacto de la captura de Haniyah y Mashal rebasó lo que esperábamos, el silencio en Europa, América y Asia es inusitado, dentro de Hamás también fue un golpe contundente. Hemos tenido que movilizar a buena parte de los que estaban descansando para capturar a los que huyen, basados en el principio de qué el que trata de escapar es culpable de algo, no siempre, claro. Ahora el problema es que la cárcel está a reventar, le hemos solicitado al General Ben Shaul que habilite una segunda prisión en tiempo record, es un abuso el que estamos cometiendo con la división Herodes. También hemos colocado más personal en el área de investigación sobre la situación de los prisioneros para transferirle a Israel la mayor cantidad posible cuanto antes, aunque ellos también están teniendo dificultades con la recepción de los detenidos, son demasiados. Por lo menos 205
Haniyah y Mashal ya no son responsabilidad nuestra, los entregamos en el Paso de Erez hace media hora, de buena nos hemos librado. ¿O preferías que los guardáramos de recuerdo… perdón, siempre olvido el protocolo, prefería usted que los retuviéramos, señor Capitán General? Informó el General Levi Munhos. – No te preocupes… eso fue lo que acordamos, librarnos de ellos cuanto antes. – Por si fuera poco hemos capturado la cárcel de Gaza, quizá no debimos hacerlo, es un embrollo mayúsculo, necesitamos por lo menos un par de días para analizar la situación de los internos, mientras tanto hemos reforzado la guardia y enviado médicos y comida. – Tenemos problemas en Jibaliya, con el clan Al Ahued, adeptos de Al Fatah. Pretenden que se les permita conservar las armas y sus privilegios territoriales, son tipos duros. Los de Hamás no pudieron tenerlos bajo control, simulan someterse para seguir haciendo de las suyas. Comentó Naftali. – ¿Cuál es la situación exacta? – Están atrincherados en un área de perímetro irregular, el equivalente a unas cinco manzanas, ahí viven hacinadas unas cuatro mil personas. Los tenemos rodeados pero no queremos recurrir a la violencia, sin embargo sus condiciones de rendición son inaceptables, si cedemos ante este clan otros van a solicitar los mismos privilegios. – Y en unas cuantas semanas volvería todo a ser como hasta ahora. Señaló el Rabino Baruch. – ¿Quizá Oheb podría negociar con ellos? – Desde hace una hora está en Jerusalem, en reunión urgente 206
con el Gabinete de Gobierno. – ¿La Teniente Schneider no tendrá alguna de sus opciones no violentas? – Está en el hospital, el daño a su tobillo fue más grave de lo que ella creía, pero vamos a planteárselo, la mujer es creativa. Comentó Hebel Camondo. – ¿Dónde están las imágenes? – En la línea jet de gimmel a hey, le acabo de encender los indicadores. Mostró el General Modigliani. – Es una boca de lobo, sería una locura tratar de entrar por la fuerza, pero, por otro lado ellos no tienen vías de escape… ¿Túneles? – No, probables instalaciones subterráneas, pero no túneles, si quieren salir tendrán que hacerlo por la superficie, me preocupan los centenares de niños de las familias del clan. – Mantengamos la situación de sitio unas horas, sin mostrar ningún interés en negociar, quizá eso les ablande un poco, en el entorno tenemos seis puntos donde colocar tanquetas y podemos duplicar el número de efectivos visibles con armas de alto poder. Que sobrevuelen el área un helicóptero y tres aviones Hermes, mientras tanto necesitamos todos los datos de los líderes del clan, es preciso encontrar sus puntos débiles, por la parte comercial o por la religiosa debe haber alguna posibilidad de hacerlos entender. – Bien, los sobrevuelos y las tanquetas les infundirán temor, pero a la vez requerimos acciones que les despierten deseos, sugiero que justo detrás de nuestro cinturón de asedio se instalen grupos de trabajo con niños, en actividades que generen el suficiente ruido, risas, necesitamos el sonido de risas infantiles. 207
Intervino Naftali. – ¿No es eso peligroso? Pregunto alarmada Levana Casque. – Sí, lo es, podemos realizarlo si extremamos las medidas de seguridad, vamos a analizarlo con calma; de momento dejemos que transcurran un par de horas, abordemos la situación por partes, primero la intimidación. ¿Qué más hay? – Tuvimos que detener a ocho voluntarios, por saqueo, se les envío al centro de detención para asentar los hechos en su expediente y de inmediato serán enviados fuera de la Franja, expulsados del movimiento. Es vergonzoso, no obstante me parece que no debemos hacer nada más, nos complicaría demasiado establecer un área para detenidos judíos. Explicó la Doctora Yarden. – No, con todo respeto Doctora me parece que no podemos dejarlos ir así nada más, estamos obligados a aplicar una sanción mayor que la expulsión. Cuando firmaron como voluntarios aceptaron deberes equivalentes a los miembros de cualquier ejército, ahora deben cumplir con lo pactado. Coordínese con el General Meir Ben Shaul, que forme con ellos un grupo de excavación o algo que requiera de gran esfuerzo físico, él necesita todas las manos disponibles y no va a ser este el único caso que tendremos, no los vamos a encerrar para tenerlos ociosos. Solicite al General Mesel un pelotón para mantenerlos vigilados. Que cada caso sea juzgado y se cumpla la condena con trabajos que beneficien a la población de Gaza, trabajo rudo, la expulsión procederá en cuanto hayan cumplido con el castigo. – Lo bueno es que ayer incorporaron ocho mil nuevos voluntarios. – Confiemos en que en medio del entusiasmo se sigan 208
observando las políticas de reclutamiento. – Así es, a la menor duda se envía el caso a revisión especial, en el Centro de Incorporación en Ashkelon doscientos casos requirieron de doble revisión y ochenta y siete fueron analizados una tercera ocasión, al final se rechazaron cuarenta y cuatro y se detuvo a dos sospechosos, espías que trataban de infiltrarse, los entregamos a la policía israelí. – ¿Cómo sigue el asunto de la frontera con Líbano? – Hezbollah detuvo los ataques, lanzó ciento treinta misiles de los que ciento quince fueron destruidos en el aire por el escudo antimisiles, los quince que continuaron su derrotero impactaron en zonas despobladas o en sitios donde no causaron daños graves, ni siquiera ellos pueden darse el lujo de tirar tanto dinero en operaciones fallidas. Por lo pronto ya tienen claro que el Shin Mem no es una parte del Tzáhal sino que se trata de dos fuerzas distintas, la liberación de Gaza no ha provocado la distracción de las actividades de vigilancia del ejército. Explicó el General Lumbroso Modigliani. – ¿Naftali, cuál es la situación general de la avanzada? – Vamos más de seis horas adelante de lo proyectado, con Hamás descabezado la resistencia se está desmoronando, los Osos Trogloditas están ahora en Wahsh y Kubá, salvo pequeñas islas como la del nudo de Jibaliya, otro caso en Al Shati, cierta resistencia en Rimal, en el Centro de Derechos Humanos de Palestina, en Gaza, están atrincherados, aún no sabemos si tienen armas. La división Tobit tomó a su cargo el hospital Al Shifa, la división Shmuel el estadio Palestina y la división Jeremías el puerto, esperábamos una fuerte resistencia en la Universidad Islámica de Gaza, pero las instalaciones estaban vacías, ni un alumno, ni siquiera el personal de 209
limpieza. – Actuemos con prudencia, en unas horas se habrán reorganizado, hemos roto el equilibrio de fuerzas pero no debemos confiarnos, ¿cómo está la situación en Hebrón? – En Hebrón y en toda Cisjordania están en alerta máxima, el Tzáhal reforzó su presencia en las fronteras con Líbano, Siria, Jordania y Egipto y han confrontado escaramuzas en Hebrón, Ramallah, Nablus, Jericó y Jenín. La Autoridad Nacional Palestina está pidiendo ayuda con desesperación a sus aliados, pero no encuentra apoyo, el cúmulo de evidencias en su contra es aplastante. Los medios afines a los intereses islámicos están frenando el flujo de información pero no van a poder contener la avalancha de datos por mucho tiempo, hay reuniones de alto nivel en El Cairo, Teherán, Abu Dhabi, Riad, Paris, Moscú, Bruselas, Washington; hasta Ahmadinejad ha optado por el silencio, saben que lo importante no es tanto el oro y las drogas que hemos decomisado, los nodos de sus redes están quedando al descubierto. Los suizos van a tener buenos pretextos para congelar cuentas de corporativos y gobiernos, igual que los americanos, en unas horas la economía mundial va a verse alterada. Hamás y la Autoridad Nacional Palestina están empezando a descubrir que en el tablero internacional son peones sacrificables, hemos intervenido la mayoría de sus llamadas, en lugar de armar la resistencia están transfiriendo dinero a paraísos fiscales, evidencia de que temen lo peor; a nosotros también nos va a afectar el drástico giro que dieron las cosas esta madrugada. Me temo que algunos de nuestros patrocinadores no imaginaron que pudiéramos destapar la cloaca tan a fondo y no les va a gustar lo que puede salir a la superficie, hay recursos judíos amarrados a capital árabe. 210
Explicó el General Ariel Schreiber con evidente preocupación. – Hay algo que no me han contado. – No te lo hemos contado pero tú lo sabes, ocurrió tal y como lo escribiste, tenemos los archivos secretos de Hamás, seis discos duros y treinta kilogramos de documentos que dan cuenta de sus fuentes de financiamiento, la función real de las organizaciones no gubernamentales afines a ellos, los nexos con Hezbollah, Siria e Irán, sus inversiones en empresas en Sudamérica y África, la complicidad de sectores de la Unión Europea y Norteamérica para desprestigiar al sionismo, sus estrategias de difamación, el cómo atizan el fuego con el viejo mito del Gran Israel. Esto significa, simple y llanamente, que nuestros aliados nos utilizan para mantener a raya a los musulmanes y a ellos los utilizan para mantenernos a raya a nosotros, maquiavélico el jueguito. El problema ahora es cómo vamos a aprovechar toda esa información, como dijo Schreiber, si soltamos de repente toda la suciedad también nos va a salpicar a nosotros. Hemos topado con la anagnórisis del Shin Mem, estamos frente el meollo del asunto. Tras la explicación de Naftali las miradas reflejaban el nerviosismo, los consejeros veían sus carpetas y ordenadores portátiles y levantaban la vista a las pantallas, Zvi Bartomeu guardaba un obstinado silencio, tenía la frente perlada de sudor, a una seña suya el Consejo Supremo ingresó a la sala de juntas reservada, el “Sancta Sanctorum”, los miembros del Consejo General permanecieron en el gran salón del Comando Central pendientes del desarrollo del operativo. En cuanto entraron Naftali pidió la palabra. – Quizá debemos acelerar el avance, avanzar desde el sur y desde el norte para concluir hoy mismo. 211
– “La paciencia crea cosas buenas” reza el Talmud, debemos apegarnos a los que está escrito, los cambios que hemos tenido no son significativos, sabíamos que hoy caería la cúpula de Hamás, sabíamos que la información que encontraríamos encerraba un grave peligro, sin conocer su contenido exacto, las diferencias son de horas pero no de hechos, lo que implica que debemos mantenernos en lo establecido, HaShem, en su infinita sabiduría, nos envía esta dura prueba, confiemos en que los capitanes de los grandes ejércitos del planeta puedan mantener fría la cabeza. – Rabino, la gravedad es mayor, el conflicto que desatamos adquirió esta madrugada un alcance mundial, no van a impedirnos avanzar ni van a atacarnos, Europa y América tienen que ocultar su nivel de participación en la lucha contra Israel, su aparente aliado, ese es ahora el problema. La cuestión es que no pueden callarnos, no ahora, hemos llegado demasiado lejos. Me preocupa que tengan una de sus salidas habituales, provocar una guerra para desviar la atención, Irán está al rojo vivo, cualquier movimiento en falso puede provocar una tragedia, el centro geográfico de la atención se está desplazando a Teherán. Nadie va a apoyar a Hamás ni a la ANP porque han dejado de tener importancia estratégica, estamos ante el umbral de una guerra multinacional. Vamos a tener que negociar, no nos conviene un conflicto de esas dimensiones tan cerca, si hay un enfrentamiento con Irán el Tzáhal tendrá que invadir Gaza y Cisjordania por seguridad, pero entonces será una invasión militar en forma sin ningún plan de amortiguamiento social, nuestro proyecto de paz fenecerá de inmediato. – ¿Propones negociar nuestro silencio? Preguntó Argoya Yarden. 212
– Exacto. – No se supone que sería así. – No del todo, si sabíamos que tendríamos que enfrentar un conflicto grave, no previmos que tan grave. El teléfono de Zvi Bartomeu sonó, levantó el auricular y escuchó, del otro lado de la línea el Rabino Montefiore lo ponía al tanto, lo escuchó con la mirada fija en el muro que le quedaba enfrente, hacia un gran esfuerzo para no mostrar la angustia que lo invadía. – Vamos a analizarlo, necesitamos cinco minutos. Colgó. – Tzipi Livni nos pide no divulgar el contenido de los documentos, cree que es suficiente lo de las drogas y el dinero para acabar con la imagen de Hamás, nos garantiza que nadie, ningún país, moverá un dedo en nuestra contra, ni siquiera los países musulmanes. Esta tarde planean instalar un corredor hacia Siria para aligerar la presión en Hebrón. Irán está llamando a varios líderes de facciones para reforzarse y Ehud Barak considera que lo mejor es dejarlos marcharse, la presión en los centros penitenciarios está al máximo. Es posible que en unas horas Jordania realice una petición similar a la de Siria, salvoconductos a cambio de no intervención. – Pero eso va a implicar su retorno en el futuro. – No necesariamente Naftali, si logramos consolidar nuestra propuesta pacífica la defensa a futuro será la actitud de los pobladores de Gaza, en la medida en que se sientan merecedores de un vida digna tendremos nuestra garantía de paz duradera. Explicó la Doctora Yarden. – Es necesario someterlo al Consejo General, vamos, nos quedan tres minutos, que El Santo, Bendito Sea, nos ilumine y 213
nos indique la ruta correcta. Tras el planteamiento de lo solicitado por la Primera Ministro hubo un incómodo silencio, lo rompió Levi Munhos. – Con un carajo, ahora vamos a tener que mentir. – No vamos a mentir, sino a posponer la divulgación de la verdad, en el fondo no es lo mismo aunque lo parezca. Dijo tajante Naftali. La evidencia de que las cosas podían salirse de control pesó en la decisión, sin embargo a todos les molestaba ceder a las presiones. Cuando el Rabino Montefiore llamó nuevamente al Capitán General únicamente escuchó una palabra: adelante. El acuerdo fue unánime, era necesario evitar un mal mayor. Una guerra de gran magnitud afectaría el frágil equilibrio de Medio Oriente. Naftali Mostovich informó que se retiraba a su habitación, necesitaba estar a solas unos momentos, el Rabino Baruch, los Generales Munhos, Modigliani, Camondo y Peretz se dirigieron al jardín de cactáceas, Zvi entró a la capilla de oración. – Pensé que no fumaba, Rabino. Dijo Levi Munhos. – Yo pensaba lo mismo, no, gracias, no necesito un cigarrillo, bastante tengo con el humo de ustedes, no te rías. En este momento no tengo la paz necesaria para orar, necesitaba aire fresco y este jardín es lo más parecido que tenemos a eso, aún con el humo que ustedes arrojan. Levana Casque los alcanzó con una charola de vasitos de vodka sumergidos en hielo frappé. – Aunque tenemos el estómago vacío me parece que esto nos va a caer bien, no hay como un buen trago de vodka para aclarar las ideas. – Lehaim. 214
Brindaron alzando sus vasos, el alegre sonido del choque de cristales no logró desvanecer la pesadumbre que sus rostros.
215
216
X
En la residencia de la Primera Ministro llevaban dos horas dando vueltas en torno al mismo asunto, el Gobierno de Estados Unidos solicitaba con insistencia la documentación encontrada en poder de Hamás, para resguardarla. El Consejo de Ministros tenía copias de una pequeña parte de la documentación, pero la totalidad obraba en poder del Shin Mem, Oheb Montefiore había transmitido en reiteradas ocasiones la negativa de los miembros del Consejo General del Movimiento. – Rabino Montefiore, el señor John Kerry ha vuelto a llamarme personalmente, me recuerda el desagradable asunto de Anat Kam, recuerda, la becaria acusada de sustraer material confidencial, en eso fundamentan su “desinteresado ofrecimiento” de resguardar la información en Washington, tienen pavor a que esa información sea filtrada. – Señora Livni, lamento que en algún momento el Tzáhal haya considerado que la información clasificada podía ser vista por jóvenes del servicio militar, supongo que aprendieron la lección, aun así el argumento norteamericano no tiene ningún 217
peso, ellos han tenido filtraciones gravísimas en la CIA y el FBI, su historia está llena de puntos oscuros. Gracias a su celo para resguardar la información confidencial hoy el mundo está lleno de ojivas nucleares, eso sí es peligroso. Entiendo que no vamos a ponernos a discutir sus fallas, no es diplomático, aunque tampoco podemos entregarles un papel más de los que ya conocen, los documentos completos fueron vistos por los miembros de nuestro Consejo General, únicamente vistos, les entregamos copias de los mismos papeles que ahora tienen ustedes en sus manos, nada más, el resto, cuyo contenido desconocemos, fue colocado en valijas selladas que fueron enviadas de inmediato a la caja de seguridad del Shin Mem en alguna parte de Israel. Los guardianes ignoran el contenido de las valijas y el de todas las cajas bajo su custodia, no existe ningún respaldo electrónico o impreso de los discos duros y papeles, la caja está blindada y resguardada por los sistemas de seguridad más sofisticados que existen y, creo conveniente aclararlo, no está dentro de nuestro Cuartel General. Lo menciono porque me parece que es una pérdida de tiempo que tantos elementos del Shabak anden tratando de ubicar el emplazamiento de nuestras instalaciones centrales, el enemigo no somos nosotros ¿recuerdan?, al enemigo lo tenemos en Gaza, en Cisjordania y en una veintena de países islámicos. Ustedes no van a ganar nada ubicando nuestro centro de operaciones, lo único que van a provocar es que tengamos que gastar millones de shekels y perder nuestro valioso tiempo en trasladarnos al cuartel B, en cuanto tengamos la certeza de que nos tienen localizados. Nosotros estamos confiando en ustedes y esperamos un trato reciproco, desde el principio hemos manifestado que no tenemos ninguna aspiración política, cuando todo haya concluido disolveremos buena parte de las 218
ramificaciones del Shin Mem y la mayoría volveremos a nuestras casas. – ¿Y qué va a ocurrir entonces con los archivos? Preguntó Ehud Barak. – La estructura social del Shin Mem se mantendrá activa, es necesario coordinar las acciones de reconstrucción física y emocional, el desarrollo económico de Gaza va a requerir de algunos años y debemos apoyarlos de forma sostenida, dentro de ese esquema de continuidad está previsto el resguardo de datos. Transmitan a los líderes mundiales nuestra intención de impedir que esa información se difunda, nuestro interés es construir, no destruir; sin embargo no somos tontos, la posesión de esa información nos garantiza el éxito del operativo. – Están jugando con fuego. – Señores ministros, en los gobiernos suele haber cambios, ¿recuerdan cuando el Ministro Netanyahu trató de transformar a Israel en un estado neoliberal, retirando muchos de los beneficios sociales, que se consideraban inamovibles porque habían sido establecidos desde la fundación del Estado de Israel?, ¿acaso no se ha abandonado el principio de que la tierra es de Yahvé y la administra el Estado? Alrededor del quince por ciento del territorio de Israel es ahora propiedad privada y con eso la especulación inmobiliaria, que no existía aquí, niega ahora a muchos israelíes del derecho a tener un techo. La pasión por el poder y el dinero ha provocado demasiados disturbios en la historia de la humanidad, el mejor ejemplo son los documentos que hoy tantas preocupaciones causan, si empresas y gobiernos no hubieran colocado los intereses económicos por encima de los intereses sociales hoy no estarían preocupados por el contenido de esos 219
archivos. Una de las terribles razones por las que no podemos entregarlos es porque provocarán un efecto búmeran, no únicamente están involucradas empresas norteamericanas y europeas, también hay empresas judías que pusieron sus intereses comerciales por encima de la seguridad de su pueblo, confiamos en que su actitud va a cambiar ahora que saben que tenemos las pruebas de su ambición en nuestro poder. No tenemos ningún interés en que estas corporaciones desaparezcan o sean llevadas a juicio, sobre todo porque sería inequitativo condenarlas cuando no se va a hacer lo mismo con los gobiernos que actuaron con la misma falta de ética. Existe un Poder Divino que todo lo observa y lo juzga, nosotros no somos nadie para hacerlo, es muy probable que nos estemos equivocando al permitir que esta información permanezca oculta, pero asumimos el riesgo, hasta ahí, no estamos dispuestos a asumir un riesgo mayor, no vamos a entregarle a nadie los documentos que son prueba del antisionismo y la mezquindad de occidente. Aun si la actitud de los norteamericanos fuera sincera, su percepción es errónea, recuerden cuando el Presidente Barack Obama dijo que los atentados del 11 de septiembre no habían sido realizados por una religión sino por un grupo terrorista, – La tensión alcanzó su punto máximo en el Consejo de Ministros, criticar de esa manera al presidente de Estados Unidos ahí, en el pleno, resultaba insólito, las miradas se concentraron en el rostro del Rabino, cada uno de sus gestos era registrado por todos y cada uno de los presentes. – su afirmación es muestra del equívoco. La Yihad es la esencia del Islam, parte fundamental de su existencia, la Guerra Santa es el vehículo para lograr que todo el planeta se convierta en Dar Al Islam. Desde su gestación el Islam ha estado en guerra con todos los 220
pueblos que no comparten sus creencias, los ataques del 11 de septiembre del 2001 fueron parte de la Yihad, por lo tanto provienen del Islam, independientemente del grupo o facción que los haya ejecutado, mientras los líderes musulmanes no renuncien públicamente a la Yihad, el Islam como religión es una amenaza para los demás pueblos, en tanto que los musulmanes consideran que la única forma válida de relacionarse con el Creador es la suya… y no van a renunciar a la Yihad porque está plasmada en el Corán. Un profundo silencio invadió la sala, la Ministro se levantó y caminó rumbo al ventanal para ver la antigua ciudad amurallada de Jerusalem en la distancia, la tensión se prolongó durante siete minutos. Con la mirada fija en la Puerta de David la Primera Ministro comentó. – Sería un buen canje entregarles esos sucios papeles a cambio del reconocimiento internacional de Jerusalem como nuestra capital. – No Señora Livni, no tenemos por qué dar nada a cambio de lo que es nuestro, Jerusalem es nuestra capital desde que los ejércitos de David derrotaron a los jebuseos hace más de tres mil años, ellos serían los únicos que podrían reclamarnos la Ciudad Santa pero ya no existen, no como jebuseos, se convirtieron al judaísmo y juraron fidelidad al Rey David. Durante siglos nuestra ciudad pasó de un dominio a otro hasta que logramos recuperarla durante la Guerra de los Seis Días, no necesitamos que nadie nos reconozca nada, es nuestra capital y punto. No la vamos a compartir con la Autoridad Palestina ni vamos a permitir que la nombren territorio internacional, si los cristianos quieren creer que aquí murió el Rabí Yoshua y ascendió a los cielos o si los musulmanes están 221
seguros que aquí descendió la escalera por la que se elevó a las alturas el Profeta Mohammed, es su problema, pueden venir y rendirles culto, son bienvenidos como visitantes, los recibiremos con gusto, siempre que acepten que están dentro de territorio israelí. Expresó el Ministro Lieberman con estremecedora firmeza, la Ministro Goldin empezó a aplaudir con timidez, todos los presentes en la reunión la secundaron estruendosamente, cuando los aplausos cedieron la Ministro Livni estaba de nuevo sentada en su lugar. – Tienen razón, tuve un momento de debilidad, no necesitamos que nos reconozcan la posesión de lo que nos pertenece por derecho, sin embargo me afrenta pensar en que el Gobierno sea susceptible de chantaje por una organización ciudadana, ¿Rabino Montefiore están conscientes de que están colocando al Estado bajo una amenaza continua? – Le garantizo que esa amenaza no existe, ni en este momento ni en el futuro, la situación es simple: no haremos ningún uso de esos documentos, nadie podrá revelar su contenido ni siquiera bajo tortura porque nadie del Shin Mem los conoce en su totalidad, dudo incluso que alguien de Hamás, además de los dos líderes detenidos, tenga un panorama general de los contenidos. Los papeles y archivos digitales permanecerán depositados, durante generaciones si es preciso, hasta que su salida a la luz pública no signifique nada más que una referencia histórica. Tampoco podemos destruirlos, no debemos, sería una gran irresponsabilidad hacerlo, por lo que representan. Los papeles permanecerán en manos judías aunque no estén en manos del Gobierno, así como los Rollos del Mar Muerto están en el Museo de Jerusalem y no en la sede de la Knéset. Sin embargo, 222
si cree que prometer su destrucción calmará los ánimos puede decirles que lo haremos cuando el operativo haya terminado, entonces habrán dejado de ser considerados como un peligro y está habrá sido una más de las múltiples promesas incumplidas en los acuerdos internacionales. Lo importante ahora es que la amenaza bélica se pospuso con nuestra aceptación de silencio… no obstante sabemos que la guerra viene en camino, impedirlo es algo que está lejos de nuestro alcance, de nosotros como pueblo y de ustedes como Gobierno, el fantasma de la guerra duerme bajo las arenas de Medio Oriente y cada tanto despierta fortalecido. – Bien, lo prudente es dejar las cosas así, por el momento, prometeremos al presidente Obama la destrucción de los papeles para cuando su operativo llegue a término y entonces ya veremos, como ciudadanos israelíes podríamos incluso llevarlos a juicio por desacato si se niegan a entregarlos entonces. – Vuelvo a recordarle que el enemigo no somos nosotros, en este momento somos sus aliados, en la cotidianidad somos sus gobernados, pero bajo ninguna circunstancia debemos ser considerados como sujetos al capricho del sistema, la relación que tendrán en el futuro con el Shin Mem no tiene por qué ser diferente de la que existe ahora con la Maguen David Adom, con Yad Sarah o con el Centro de Estudios de la Shoá. Usted no será por siempre la titular del cargo, ni usted ni nosotros sabemos quién le sucederá en el puesto ni cuáles serán las intenciones de los gobernantes en el futuro. Estamos conscientes de que lo que estamos haciendo resulta complicado de definir jurídicamente, con el tiempo se verá que actuamos en beneficio de quienes aman la paz y la tranquilidad. En lo personal no tengo más anhelo que lograr 223
que La liberación de Hebrón llegue a buen término y poder regresar a mi yeshivá a estudiar los Textos Sagrados, HaShem lo permita. Si en algún momento, en algunos años, llego a formar parte del Consejo Supremo, tendré una responsabilidad directa en la seguridad de esos y otros documentos y lo asumiré con gusto, será mi mitzvá mientras viva. El ministro Ehud Barak pidió la palabra para explicar la situación respecto a la seguridad fronteriza y a los disturbios en Cisjordania, el resto de la mañana transcurrió en relativa calma, en su momento la Primera Ministro brindó al Gobierno Norteamericano las suficientes garantías respecto a la confidencialidad de la documentación incautada y en el mundo el espectro de la guerra parecía diluirse, en buena parte del planeta se relajó la tensión de los ejércitos, salvo en el caso de Irán donde la amenaza de invasión les daba un buen pretexto para mantener su política represiva hacia la población, en la absurda creencia de que el miedo puede espantar el hambre.
224
XI
– Zvi, ¿Puedo hablar contigo? Preguntó Levi Munhos en voz baja, se encontraban en la sala de oración, Enrique Bartomeu asintió. – Imagino cómo te sientes, sabíamos que tendríamos que remover estiércol pero nunca nos imaginamos la pestilencia que se desprendería. Estuve veinte minutos en la ducha y aún me siento sucio, no, no me digas nada, lo sé, no hay manera de lavarnos por dentro y tenemos que cuidar el agua… Hermanito, llevas aquí tres horas, no has probado bocado, no tengo idea de lo que estás pensando, quizá opinas lo mismo que yo, Dios nos jugó una mala pasada al meternos en este brete, no soy tan duro como Naftali y me cuesta asumir lo que los humanos somos capaces de hacer. Mis padres creyeron que después de la Shoá la humanidad no volvería a vivir algo igual de espantoso y ya ves, cuando no es en Sudamérica es en Asia o en África, siempre aparece un hato de desquiciados que se adjudica prerrogativas sobre las vidas de los demás, parece que es imposible extirpar de raíz la sevicia. No estoy seguro de que venga al caso pero de repente recordé aquella frase de 225
Galileo cuando tuvo retractarse de todos sus planteamientos sobre la rotación de la tierra y al final, juzgado y condenado, en voz apenas perceptible culminó con “… y sin embargo se mueve”. Podemos negar la verdad, pero la muy terca permanecerá ahí. En este caso lo cierto es que amamos la guerra tanto como la paz, los humanos somos capaces de cometer los crímenes más atroces y a la vez somos fuente de bondad, a veces las dos cosas el mismo día. La gente en la Franja de Gaza ha soportado la infamia de los fanáticos del Islam y el estado de guerra latente con Israel, donde también han ocurrido excesos, algunos de los miembros del Tzáhal se las gastan. Sin embargo confío en que lo que estamos haciendo resarcirá un poco a estas personas, no te prometo que de la noche a la mañana dejarán de odiarnos, hay muchos rencores enquistados y entre los amorosos niños que están naciendo en este instante hay algunos donde ya están instalados los deseos de perjudicar al prójimo, eso es inevitable, sin embargo el propósito de nuestra misión es claro: proporcionarle a la gente la libertad de elegir. Tú eres la cabeza del movimiento, te estamos esperando, necesitamos analizar cómo se desenvuelven las cosas allá afuera y no hay manera de hacerlo sin ti. Naftali promete no decir “te lo dije” respecto a tu afán de creer en Dios y en la bondad de nuestra especie, conoces bien su ateísmo a ultranza, en cambio yo nada más soy ateo del domingo al viernes a mediodía, siempre vuelvo a creer en cuanto empieza el Shabat, aunque no estoy muy seguro de poder lograrlo esta semana. Es bueno verte sonreír, vamos hombre levántate de esa banca, nos espera una sabrosa ensalada, baggels con queso, por desgracia sin salmón, y como mil doscientos problemas. 226
Zvi y Levi se dirigieron a la sala principal, nuevamente el almuerzo sería a la par que la reunión, Zvi se sentó junto a Valentina, le dio un beso en la mejilla y la emprendió con furia con el primer baggel que se le atravesó, mientras revisaba datos en un ordenador portátil. – ¿Logró la Teniente Schneider solucionarnos el problema con esos bribones de los Al Ahued? – Recordó una buena estrategia, aquella que utilizaron los marines norteamericanos para sacar al Coronel Noriega de la sede del Vaticano en Panamá, pero decidimos no utilizarla para el problema en Jibaliya, la aplicamos en el Centro de Derechos Humanos en Gaza, funcionó de maravilla. Explicó el general Modigliani. – No me digan, ¿qué música utilizaron, Metallica, Iron Maiden? – Teníamos preparado el disco 7th Symphony de Apocalyptica, fabuloso, imagina la resonancia de las cuerdas con los decibeles al máximo, pero cuando estábamos a punto un voluntario tuvo una idea mejor y prestó su Ipod para recetarles el álbum Dudu, de Tarkan, al cuarto remix emitido a todo lo que las bocinas podían soportar, no quedaba un alma adentro, nadie opuso la menor resistencia. Yo no hubiera aguantado esa música ni un minuto, al parecer eso no viola los acuerdos de la Convención de Ginebra ¿o sí? – Esos acuerdos son lo más ridículo que se haya visto, pretenden darle un carácter civilizado a las guerras, cuando las guerras son la expresión máxima de la estupidez humana, en lugar de ver cómo golpearnos con cierta decencia, deberíamos acordar respetarnos, es lo que dijo el Rabino Hillel cuando le pidieron definir la esencia del judaísmo “No hagas a otros lo que no quieras para ti”. Pero eso es imposible mientras existan tipos que quieran todo el pastel para ellos, 227
¿alguna novedad en el Centro de Derechos Humanos, acaso se dedicaban en realidad a proteger a las personas, sería una sorpresa? – Los angelitos se especializaban en rifles de asalto, todo un muestrario de armas chinas, rusas, checas, alemanas, belgas, francesas y unos infames artefactos iraníes que es casi seguro que le estallen en las manos a quien pretenda utilizarlos. La ubicación del CDH, a dos cuadras del muelle, lo convertía en un sitio estratégico, una especie de almacén de distribución, del puerto a su oficina y de ahí a los campamentos y arsenales terroristas, la mayoría de los detenidos son europeos, ninguno pasó la prueba de parafina, todos tienen restos de pólvora en las manos, es probable que también de sangre. – ¿Jibaliya sigue igual? – El nerviosismo aumenta. – ¿Qué datos tenemos de este clan? – Comerciantes de productos basura que importan de China, recipientes de plástico, juguetes de bajo costo, ollas, cubos para el agua, baratijas, son parte de una extensa familia con ramificaciones en Siria, Líbano y América Latina, una partida de bribones que operaban dos túneles hacia la parte egipcia de Rafah, para meter su mercadería; son supersticiosos e ignorantes, aunque hábiles en lo comercial. Se supone que son adeptos a Al Fatah pero tampoco están en malos términos con Hamás, de hecho lo que tratan de hacer es negociar con nosotros para que sus trapicheos no salgan afectados, dudo que se atrevan a confrontarnos con las armas, ¿qué sugieres que hagamos? – ¿Cómo está el clima? – Cómo va a estar, despejado, con un calor terrible, estamos en mayo, aquí si acaso caen dos o tres gotas en invierno. 228
– Esta tarde se nublará, vamos a seguir esperando, alrededor de las cinco se entregarán incondicionalmente. Los consejeros intercambiaron miradas, el Rabino Baruch encogió los hombros al tiempo que mostraba las palmas de las manos, continuó la reunión, el avance era satisfactorio, las pocas escaramuzas habían sido resueltas sin tener bajas, las obras de reconstrucción mantenían un ritmo frenético y habían resultado una excelente fuente de trabajo para los habitantes de Gaza. Fue necesario transferirle más recursos económicos a la división Herodes para hacer frente a los requerimientos, el General Ben Shaul estaba incorporando a todo el que solicitara empleo, se consideró una buena forma de incentivar la reactivación económica de Gaza, sin descartar que en el corto plazo tendrían que buscar la diversificación productiva. Se acordó ascender a siete elementos destacados cuyas acciones estaban siendo aprovechadas para generar simpatía internacional hacía el movimiento, al menos eso fue lo que se informó al Consejo General. Ariel Schreiber tenía una sorpresa. – Hemos capturado Pallywood, cerca de la intersección de las rutas veinticinco y cuatro, en Kubá, es un complejo de tres naves industriales que se encontraban abandonadas tras la desconexión, ahí están instalados el canal de televisión de Hamás y los estudios donde se realizan los montajes de las escenas que han conmovido a occidente, son expertos en trucos: en una de las cintas unos camilleros suben a la ambulancia el cadáver de un hombre abatido por supuesta artillería israelí, en medio de llantos y gritos de amigos y familiares, dos cuadras después el muerto desciende de la ambulancia por su propio pie: cuarenta personas posan para la cámara mostrando cada uno a su pequeña hija asesinada, 229
cuarenta fotos aparentemente distintas, aun concediendo que la niña haya sido víctima de una bala israelí, lo cual es muy grave, se trata de una sola niña, no de cuarenta, en las tomas los adultos cambian, hombres, ancianos, mujeres, todos con cara compungida, pero la niña es la misma en todas las imágenes. – Qué tanto es ficción y qué tanto es verdad en los supuestos crímenes de guerra de los que tanto acusan a Israel. Preguntó Elisa Peretz. – Es muy pronto para saberlo, tenemos que analizar miles de cintas de video, tampoco vamos a decir que no ha muerto nadie ni que los casos de abusos de autoridad son inexistentes, pero al parecer no han sido suficientes para demostrar el enorme sufrimiento del pueblo árabe a manos de los usurpadores israelíes, por eso han tenido que montar esos estudios especializados en trucaje. Intervino Maskaram Masala. – Tenemos documentado un caso del 2006, poco antes de la Segunda Guerra de Líbano, no se trata de un caso de edición sino de manipulación de la información: Hamás denunció el horror vivido por una familia que fue a la playa y se supone que ahí les dispararon desde una fragata israelí, murieron un médico y su sobrino, quedaron mal heridos el padre del niño, su esposa, la esposa del médico y el abuelo, milagrosamente la abuela resultó ilesa. A simple vista no había justificación alguna para el ataque que costó dos vidas y causó cuatro heridos graves, el marinero acusado de efectuar los disparos fue detenido de inmediato. En el hospital Al Shifa de Gaza se quejaron de no contar con equipo para atenderlos y fueron llevados de inmediato al hospital de Ashkelon, ahí se pudo desmontar el tinglado. 230
Ninguno de los heridos escuchó ráfagas de metralla sino una sola y contundente explosión, que no provino del mar sino de la playa, los ingresados no presentaban heridas de bala, tenían incrustadas esquirlas metálicas de una mina terrestre de fabricación iraquí y en el hospital Al Shifa no pudieron atenderlos porque no había ningún médico de guardia, no por la escases de medicamentos y equipo que, lo sabemos muy bien, es “culpa del infame bloqueo israelí”. Esa mañana habían ocurrido dos hechos aislados, a las 10:45 de la mañana un marino israelí disparó sobre una playa desierta de la Franja de Gaza para jugar un poco con la nueva ametralladora que habían montado en la popa de la lancha de patrullaje, no hubo más consecuencias que el desperdicio de balas. Hora y media más tarde una familia llegó a otra playa, distante ocho kilómetros, y se sentó a hacer picnic, eligieron justo el lugar donde había una mina terrestre colocada por militantes del ala militar de Hamás, como medida de protección ante un eventual desembarco israelí, no había ninguna señal de que la playa estuviera minada ni se encontraban milicianos de guardia. De esa manera Hamás transformó dos graves errores suyos y un pequeño error israelí en un terrible atentado sionista contra los indefensos musulmanes. El marino fue severamente sancionado, en cambio nunca sabremos quienes fueron los fedayines responsables del doble asesinato y de los cuatro heridos graves, los gastos médicos los asumió por completo el Gobierno de Israel, al igual que el desprestigio por tamaña afrenta. – Supongo que esto si podemos darlo a conocer. – No vamos a preguntar, ya lo subimos a internet y lo están transmitiendo y publicando en los medios afines. 231
Aclaró Ariel Schreiber. Albert Schwartzer pidió la palabra. – Es evidente que las cifras de bajas árabes dadas a conocer durante los últimos años descenderán de manera drástica una vez que cotejemos las diferentes fuentes, pero no serán las únicas cifras a la baja. De acuerdo con los datos que nos están proporcionando los Osos Trogloditas o en este momento la mayoría de los habitantes de Gaza huyeron hacia el sur y seguramente no se puede dar un paso desde Khan Yunes hasta Rafah, aquello debe estar tan saturado como el Techno Love Parade, o escaparon a nado por el mar, situación que ya hubiera sido descubierta por nuestros guardacostas. Lo más probable es que las organizaciones humanitarias que trabajan en la Franja hayan estado maquillando las cifras respecto a la densidad de población. Según las proyecciones actuales la cifra de habitantes en la Franja de Gaza está un poco arriba de los setecientos mil habitantes, cuando los números de la UNHRC son de entre millón y medio y dos millones, al menos los fondos que destinan son para esa cifra de personas, tan sólo la UNICEF tiene un programa para atender a ochocientos mil niños en Gaza, los deben tener escondidos debajo de las camas, no hemos visto a esa cantidad de chiquillos por ahí. Lo patético es que jamás he leído que les preocupen un poco los niños de Sderot, que han crecido entre el sonido de las explosiones de los misiles que lanzan los pauperizados habitantes de Gaza, quienes, según parece, no tienen dinero para comida pero sí para explosivos. – ¿Cuántos estarán implicados en este negocio?, porque es evidente que estamos ante un gran montaje que ha llenado muchos bolsillos. Concluyó Naftali. 232
XII
Noa observaba el artefacto de fibra de carbono que llevaba la Oficial Schneider en la pierna, un armazón consistente en un aro forrado de látex, sujeto a la rodilla, al que están adheridas varillas de fibra de carbono que en el otro extremo se conectan a un talón de caucho, para liberar al tobillo del peso del cuerpo y de la pierna. – ¿Estás segura que con ese aparato puedes caminar bien? – Cojeo un poco, mirá, pero no tengo intenciones de pasarme aquí el resto de la tertulia, este es el mejor operativo en el que he participado en mi vida, no me lo voy a perder por un desgarre. Ahora sé lo que sienten los jugadores de fútbol cuando se accidentan a unos días del mundial. – Sí, claro, argentina, por supuesto que tenías que sacar el tema del futbol tarde o temprano. Enseguida vas a contarme de tu pasión por el Boca Junior, de tus sueños húmedos con Maradona o Messi y de la increíble experiencia orgásmica de gritar gol al unísono con otras veinte o treinta mil personas. – No pienso responderte, no tiene sentido discutir con alguien que no entendé la fenomenología de la catarsis colectiva; acaso 233
te prestaron el Dromedary para qué vinieras por mí. – Ni que fueras la ministro de defensa, con la de trabajo que tenemos con dificultad convencí a Machir que me dejara venir. Tuve que hacer uso de mis encantos para convencerlos de que me prestaran un Íbice, es un biplaza de tres ruedas, de tracción trasera, otro de los prototipos; la diferencia primordial es que este no es eléctrico, se desplaza por un sistema de atracción y rechazo de energías magnéticas. Apenas y cabremos las dos en los estrechos asientos pero el viaje es corto y el triciclo es ágil, puede subir y bajar dunas sin problemas, aunque no está blindado y en las actuales circunstancias eso implica cierto riesgo, de cualquier manera el Comandante me indicó que le avisemos al salir para que vayan a recogernos en el campamento en Shati, hasta ahí todo está bajo control. Del hospital de campaña en Erez tardaron menos de quince minutos en llegar a Shati, una vez ahí abordaron la unidad a la que estaban asignadas, tenían instrucciones de acudir a reforzar el sitio al clan Al Ahued en Jibaliya, cuando circulaban por Sheih Radwan la Teniente Schneider alcanzó a ver un destello en la azotea de una casa de cuatro niveles, de inmediato gritó al soldado Leo Abramovicz, el conductor, que realizara una maniobra. – ¡Frená a tope y acelerá de inmediato! Abramovicz obedeció sin chistar, a menos de treinta metros tuvo que esquivar a un grupo de niños jugando, por lo que estuvo a punto de impactar con un muro. Pudo evitar la colisión pero se vio obligado a frenar bruscamente de nuevo, en ese momento se escuchó la explosión, les habían disparado con un RPG 29 Vampir, el proyectil impactó cerca de su posición final, la fuerza de la onda expansiva levantó la parte trasera del vehículo más de cuarenta centímetros, todo ocurrió 234
tan rápido que al caer no tuvieron forma de sujetarse, lo resintieron en el cuello, si bien nadie tuvo heridas ni contusiones severas. El cristal del medallón trasero se estrelló sin llegar a desprenderse, salvo los arañazos producidos en la carrocería por las esquirlas metálicas, y lo de la ventanilla de la puerta posterior, no se apreciaban mayores daños al vehículo. En la calle, a veinticinco metros del todoterreno, quedó un pequeño cráter. Daniela distribuyó tareas de forma tan precisa que parecía que tuviera un plan previo. – Leo, ubicá nuestras coordenadas en el GPS y envía la señal de auxilio a Machir, revisá en el mapa de pantalla si ese edificio tiene salida trasera, Noa y Biniamín acudan a ver si los niños que jugaban están bien, Aaron, Job y yo los cubrimos, Job levantá el cañón de la torreta cuarenta y dos grados, en dirección al edificio, para que mantengas a raya a los que están en el techo, Aaron, tú y yo cubriremos desde la acera de enfrente. Los voluntarios de la División Abraham que coordinaban el juego con los niños los habían puesto a resguardo tan rápido como vieron que algo anormal ocurría, no había heridos, se lo hicieron saber a la Teniente Noa; como la movilidad de Daniela no era buena ella buscó un enclave con buena cobertura y se atrincheró con un fusil M89SR, Biniamín y Noa avanzaron a cubierto para colocarse al otro extremo de la entrada del edificio, ambos portaban rifles IMI Tavor. La silueta de un miliciano se perfiló en la orilla de la azotea, apenas asomó fue derribado por Job Rosner. Daniela notó que había gente tras las ventanas de algunos departamentos del inmueble, por radioteléfono le indicó a Leo que con el altavoz del vehículo les diera la orden de desalojar. 235
Mujeres con niños empezaron a salir, Noa les indicó que caminaran pegadas al muro. En ese momento arribaban los otros dos Dromedary del escuadrón Lamed Nun, otra silueta asomó apenas para disparar sobre los recién llegados, Daniela logró dos blancos limpios, uno en la parte superior del gatillo, inhabilitando el arma, y otro a la cabeza del miliciano, que cayó sobre la calle, como buena francotiradora jamás disparaba en ráfaga. Un minuto después un helicóptero sobrevoló el área, barrieron el tendido de la azotea con secuencias de disparos de metralla, mientras tanto Machir entró al edificio con otros cinco integrantes del escuadrón, la situación se complicó porque seguían saliendo personas de las viviendas, preguntó por radioteléfono si era factible que realizarán un descenso desde la escala del helicóptero, la respuesta fue afirmativa. Los demás cubrían las ventanas. Cuando cuatro integrantes de la unidad aérea arribaron a la parte superior encontraron tres cadáveres, el del hombre abatido por Job y dos que ellos ultimaron desde la aeronave, no había nadie más; al asomarse al hueco de la escalera fueron recibidos por una andanada de tiros a los que respondieron de inmediato, mientras tanto Machir y su gente habían ascendido cautelosamente, el área por fin estaba despejada. Dispararon desde abajo para que los enemigos atrincherados en el pasillo del cuarto nivel asumieran que se habían quedado sin rutas de escape, en cuanto se vieron atrapados entre dos fuegos improvisaron una bandera blanca para rendirse. En principio se entregaron cuatro muyahidines, el número aumentó a nueve en la posterior revisión a fondo de todas las habitaciones de la intrincada edificación. En una habitación del fondo, a nivel de la calle, se localizó una 236
trampilla que conducía al sótano, donde encontraron un arsenal, una estrategia frecuente de Hamás, Hezbollah y Al Fatah: ubicar depósitos de armamento y munición en edificios habitados por civiles, proteger sus explosivos con vidas inocentes. Con todo y el arnés en la pierna Daniela Schneider resintió en el tobillo el ajetreo, Machir la alcanzó antes de que abordara el vehículo. – No debí disparar dos veces Comandante, fue un acto reflejo. – De cualquier manera se hubiera matado al caer, son más de diez metros, no tuviste opción, si no ha sido por tu capacidad de reacción es probable que no estuviéramos aquí platicando, el blindaje no hubiera resistido el proyectil a tan corta distancia. Regresen al campamento, vamos a tener que cambiarles el vehículo, este hay que devolverlo al proveedor, como son prototipos nadie puede meterles mano. Además, ignoro por qué razón te requieren en el Comando Central, descansa un poco, toma una buena ducha y almuerza con calma, a las 0430 te llevarán al puerto de Gaza para que abordes una lancha, hoy mismo estarás de regreso. – ¿Estás seguro de que no sabés para qué me hacen ir? – No tengo idea, váyanse ya, tengo que ver quienes los sustituirán en el cerco de Jibaliya, las cosas se están poniendo tensas con ese clan, no me gustaría otra confrontación hoy y menos si tú no estás para protegernos. – Gracias por la confianza querido, por cierto ¿dónde está el Comando Central? – Muy pocos lo saben, unos cuantos elegidos, ni siquiera los generales de división están al tanto y tú tampoco lo vas a saber, tengo entendido que te van a llevar con una venda en los ojos y tapones en los oídos, mazel tov. 237
Leo tomó el fusil de Daniela y lo colocó en el soporte en la parte interior de capacete, Rosner mantenía su posición en la torreta, Daniela subió al asiento trasero, el dolor del tobillo aumentaba, afuera se escuchaba el ajetreo del operativo de revisión, arribaron los vehículos de la brigada de limpieza profunda, ellos se harían cargo del resto; en ese momento Daniela se derrumbó, se tapó la cara con las dos manos y empezó a llorar sin control, aunque sin hacer ruido, subió los pies al borde del asiento y se abrazó las piernas, encajando la cara entre las rodillas, así se quedó dormida. Media hora después la mano de Noa le acarició la rubia cabellera. – ¿Estás bien preciosa? Despertó tranquila, se limpió el rostro y sonrió. – Lo lamento, me afecta mucho perder el control, en cuanto accioné el segundo disparo supe que no debía haberlo hecho, pude haber evitado la pérdida de una vida, no tengo ni idea de quién era, de cuál era su edad. – Ni la tendrás, ya retiraron los cadáveres. Daniela, estamos en guerra, nos guste o no era su vida contra la de siete de nuestros compañeros, si la situación hubiera sido a la inversa él tampoco te hubiera dejado con vida; tanto ellos como nosotros sabemos cuál es el riesgo y lo asumimos, sería muy bueno que todos pudiéramos vivir en paz, quizá esa era la idea de los políticos con su extraño plan de concederle la autonomía a Gaza, pero los terroristas lo vieron como la oportunidad de tirarnos desde más cerca, ahora les estamos respondiendo. Por cierto, en menos de dos días te has convertido en un personaje en Gaza, no nada más entre los miembros del Shin Mem, escuché cómo hablaban de ti las mujeres árabes, las que 238
evacuamos de la casa, se dieron cuenta de tu preocupación por los niños y por la población civil. En toda tus maniobras resulta evidente que consideras prioritario el proteger a la gente, lograr el objetivo sin causar bajas de tu equipo ni del equipo enemigo. El operativo de ayer en la tarde ya es leyenda, gracias a tu idea hicimos volar casi la cuarta parte de las reservas de municiones de Gaza sin tener que levantar cadáveres de ninguno de los dos bandos, alguien comentó algo de un video en Youtube donde eres protagonista; espero que no tengan registro de lo que te acaba de ocurrir, no nos conviene que nuestra heroína aparezca en un momento de debilidad, aunque eso es casi imposible porque hay cámaras hasta debajo de las camas. Desde el desembarco de los marines en Senegal las cámaras se han transformado en parte indispensable del equipamiento de combate, ahora tienes que tener en cuenta la posición del enemigo y la colocación de las cámaras para estar segura de que vas a salir bien en las imágenes, el resultado es importante en la medida de lo impactante que resulte el registro en video. Bueno, vamos a estrenar vehículo, hablé a la fábrica y viene en camino otro Dromedary, pero la versión xl, además de la torreta trae otra Mag montada en la parte posterior, la visión de lo que vamos dejando atrás se controla con una pantalla colocada en el respaldo del asiento del conductor. – Me dijo Machir que tengo que reportarme al Comando Central, así que volverán a prescindir de mí por el resto del día, quizá sea mejor, mirá, nada más llegar y se armó el jaleo. – O sea que tendremos una tarde aburrida. Comentó Biniamín. – Ruega por qué así sea. 239
240
XIII
La conferencia de prensa de la General Esti Zisano, cabeza de la división Rut, tuvo menos altibajos que la del General Bashara un día antes, la visita matutina de la prensa a la lujosa residencia del líder espiritual de Hamás y la evidencia de la gran obra de reconstrucción pesaban más que cualquier discurso, sin embargo los corresponsales extranjeros no cejaban en su intento de encontrar evidencias que relacionaran al Shin Mem con supuestos afanes expansionistas del Estado de Israel, los antecedentes de la Doctora Zisano como defensora de los derechos de las mujeres y el prestigio de su labor humanitaria los hacía irse con tiento, además las acusaciones no encontraban asidero. – ¿Considera que el elevado número de casos de desnutrición que están atendiendo en los hospitales de campaña tiene su origen en el prolongado bloqueo del gobierno israelí? Cuestionó el representante de France Press. – Cuando fueron derribados dos fragmentos del muro de la frontera con Egipto en el 2009, miles de personas pasaron a la parte egipcia de Rafah, en menos de tres horas se habían 241
agotado en las tiendas los televisores, los hornos de microondas, los teléfonos móviles y las computadoras personales, no la comida, ¿considera usted que esa es la actitud normal de un pueblo depauperado y famélico, puede un habitante de las barriadas de la periferia de Paris adquirir esos productos pagando al contado? Es fácil generalizar, resulta evidente que no todos los habitantes de la Franja de Gaza pudieron comprar esos aparatos, conozco a muchas personas que hubieran querido tener unos cuantos dólares para comprar comida, en cambio vemos que unos pocos tienen alacenas saturadas de caviar beluga, vodka ruso, cava y jabugo, alimentos y bebidas que, por cierto, están prohibidos por el Islam. ¿Vio o percibió usted el olor de la comida putrefacta encontrada en al menos veinte bodegas de Hamás?, notó que las cajas y lonas tenían el sello de la Comunidad Europea, considera justo que esa comida se descompusiera en sus empaques mientras miles de niños estaban mal alimentados, tiene idea de cuantas toneladas de ropa para mujer donada por gente de su país se han dejado como comida para las ratas, por considerar que es impura, inapropiada para ser utilizada por las mujeres musulmanas, de acuerdo con los criterios misóginos de Hamás. Es muy fácil culpar a Israel de la miseria en Gaza, ¿Israel es también culpable del lujo ofensivo en el que viven los dirigentes palestinos? Estamos atendiendo muchos casos de desnutrición, como bien afirma, pero no se olvide de las numerosas cirugías reconstructivas que se están realizando, en mujeres y niñas a las que practicaron la ablación, generalmente en condiciones de absoluta falta de higiene, hemos encontrado infecciones graves que han provocado daños que les impedirán concebir, 242
¿tiene idea de lo que eso significa para una mujer en la machista sociedad islámica?, una esposa que no pueda tener hijos es repudiada y en la mayoría de las ocasiones ni siquiera le devuelven la dote que aportó al casarse. Les informo además que estamos atendiendo numerosos casos de mujeres golpeadas o quemadas con ácido, antes de empezar esta rueda de prensa pude constatar en nuestro hospital la situación de una mujer que tenía fracturadas las costillas desde hace seis meses, se imaginan lo que implica acarrear agua, limpiar la casa, atender a los hijos y cocinar con las costillas rotas, el marido nunca le permitió acudir al médico y, por supuesto, no podía denunciarlo a “las autoridades”, un atajo de infelices de igual o peor calaña que su cónyuge. – ¿Se consideran ustedes los buenos colonialistas que vienen a traer el progreso a la atrasada población aborigen? Cuestionó la reportera de Haaretz con sorna. – En todos los hospitales están trabajando juntos médicos originarios de Gaza y médicos de Israel. En las obras de reconstrucción se han incorporado albañiles, plomeros, electricistas y carpinteros de Gaza, que trabajan a la par con voluntarios provenientes de todo el mundo, también están participando ingenieros y arquitectos de Gaza, por desgracia pocos, la mayoría emigró a Europa y Estados Unidos porque durante el gobierno de Hamás aquí no se construyó nada, la política de ellos era primordialmente destructiva. El pueblo árabe ha sido un faro para la civilización en momentos clave de su historia, bajo califatos que fueron ejemplo de tolerancia y respeto a la diversidad cultural, al igual que ocurrió bajo algunos sultanatos turcos, pero también han tenido momentos tristes en que la intolerancia ha 243
provocado que gire a la inversa el reloj de la historia, la intolerancia es resultado de la ignorancia, la gente productiva y pensante de Gaza fue expulsada o eliminada por la ceguera de Hamás, al igual que los grandes pensadores persas que han sido expulsados, encarcelados o eliminados por los guardianes de la Revolución Islámica. Los tiempos de opresión en Gaza habrán terminado si sus habitantes así lo deciden en libertad, pero también existe el riesgo de que ellos prefieran la intolerancia, esa será su elección, nosotros no venimos a colonizar. – ¿Y qué me dice de la colonia judía que se está construyendo al este de Beit Hanoun, casi enfrente de la Reserva de Nir Am? Insistió la misma reportera en pose retadora. – Esas tierras fueron legalmente adquiridas ayer, en una operación netamente comercial, eran de la familia Housseini; esa ubicación es estratégica para protección de la población de Sderot. En otras tierras adquiridas en Sheikh Za’id se instalará una comunidad drusa y se negocia un terreno en Netzarim para un monasterio budista tibetano, en Israel hay barrios musulmanes, cristianos y judíos, entre otros, por qué no puede darse esa diversidad en un territorio de población mayoritariamente musulmana; en Suiza existen fuertes presiones para que el gobierno permita la construcción de más mezquitas, eso es un indicativo de que cada vez más musulmanes viven entre calvinistas, protestantes y católicos, entonces por qué no puede haber sinagogas en Gaza. – Pero ustedes conocen muy bien la intolerancia de los colonos judíos. Intervino el corresponsal de Público, un diario español. – Los colonos son el ejemplo más claro de la tenacidad del pueblo de Israel, tras la Guerra de los Seis Días ellos hicieron 244
florecer el Sinaí, después de años de esfuerzos fueron obligados a marcharse cuando se firmó la paz con el Presidente Anuar El Sadat. Convirtieron la Franja de Gaza en un vergel e integraron centenares de pequeñas empresas, ¿dónde están los invernaderos y las fábricas que tuvieron que abandonar cuando los políticos idearon el Plan de Desconexión?, en un par de meses no quedaba nada, Al Fatah y Hamás destruyeron la infraestructura que había costado años edificar y no tuvieron nada que ofrecer a cambio. El desencanto de los colonos tiene su origen en las traiciones de los políticos, su fuerza de trabajo y su espíritu creativo son parte medular del Movimiento Shalom, su experiencia será aprovechada para reactivar la economía de Gaza, a cambio de eso ellos tendrán la seguridad de que nunca más podrán ser desalojados de sus hogares ni de sus campos. Si algún gobierno pretende en el futuro otro brillante plan que contemple la expulsión de nuestros hermanos se va a topar de frente con el pueblo de Israel en pleno, la experiencia del Shin Mem ha demostrado que los ciudadanos ya no estamos dispuestos a que nuestra participación se limite a las elecciones, los políticos deben aprender también el verdadero significado de la palabra democracia. ¿Me permite preguntarle cuándo devolverán ustedes Ceuta, Melilla, el Peñón de Alhucemas, el Peñón de Vélez de la Gomera y las islas Chafarinas, cuando resarcirán a los países de América, de África y Asia del saqueo a que los sometieron durante siglos?. También puedo preguntarle a los norteamericanos sobre los dos millones de kilómetros cuadrados de México que mantienen ocupados desde 1846, ¿ahora no quieren más mexicanos en Arizona?, es una ironía, hace ciento sesenta años Arizona era parte de México, ¿quiénes deben irse 245
entonces, a quiénes corresponde la denominación de pueblo originario?. Extiendo mi pregunta a los ingleses sobre el Peñón de Gibraltar, las islas Malvinas e Irlanda, quizá debiera incluir también a Escocia y el país de Gales; pregunto también a los franceses sobre Córcega, las islas Guadalupe, Saint Martin, Saint Barthelemy y Martinica, la Guyana Francesa, las islas Saint Pierre y Miquelon, Tahití, Wallis, Futuna y Nueva Caledonia, las islas de La Reunión y Mayotte, o a los chinos sobre el Tíbet, o a Turquía, Siria, Irán e Irak sobre el Kurdistán, o de nuevo a Turquía sobre la mitad del territorio de Chipre o a Argelia, Libia, Mali, Níger y Burquina Faso sobre el Tuareg. ¿Quieren hablar de ocupaciones?, vamos a necesitar un par de días, quizá más, la única razón por la que critican tanto lo que ocurre aquí, en este pequeño rincón del mundo, se llama antisionismo. Critican que Israel considere a Jerusalem su capital e incluso se atreven a decir que es ilegal que el Muro Occidental aparezca en nuestras guías de turismo porque según ustedes corresponde a Cisjordania, pero no dicen nada de que en los mapas de la Autoridad Palestina se borre por completo la existencia de Israel, acaso han protestado porque en los mapas de Guatemala se considere a Belice como parte de su territorio, muchos pueblos indígenas de América consideran que viven bajo una ocupación de blancos y mestizos, igual que muchos vascos y catalanes consideran que viven bajo ocupación española, por qué no mira cada cual los problemas que tiene en su casa antes de venirnos a cuestionar. – ¿Nos pide que miremos hacia otro lado mientras ustedes exterminan a la población palestina? Preguntó con marcado enojo el corresponsal de Der Spiegel. 246
– Les pido honestidad, memoria histórica, coherencia; la división política de Medio Oriente es un invento de ingleses y franceses, ustedes los alemanes quedaron fuera del reparto porque perdieron las dos guerras, lo siento; no, corrijo, la verdad es que no lo siento… Las fronteras de los países de Medio Oriente no corresponden a situaciones geográficas o étnicas sino a intereses políticos y económicos vinculados al petróleo, no hay diferencia étnica, lingüística ni cultural entre los árabes que viven en Israel, en Gaza o en Cisjordania y los que viven en Jordania, en Líbano o en Siria, salvo que Líbano y Siria quedaron bajo dominio francés a principios del siglo pasado y Palestina, que abarcaba los actuales territorios de Israel, Gaza, Cisjordania y Jordania, estuvo bajo dominio inglés, el por qué ahora unos árabes son Jordanos y otros no, es necesario preguntárselo a los ingleses, y el por qué los árabes de la Franja de Gaza y Cisjordania son considerados palestinos se debe, única y exclusivamente, a una decisión propagandística de Yaser Arafat, necesitaba inventarse un pueblo y se tomó la latinización de una palabra hebrea que fue utilizada por los romanos para que no se hablara más de Judea. Ahora, palestinos o no, de ningún modo pretendemos acabar con los árabes que viven en Gaza o en Cisjordania, como tampoco hemos acabado con los árabes que viven en Israel. Ellos son ciudadanos israelíes, con los mismos derechos y obligaciones que todos los demás israelíes, sí, no me lo diga, puedo entender su expresión; me va a decir que muchos árabes israelíes se consideran ciudadanos de segunda clase, puedo ponerlo en contacto con otros que asumen como una bendición vivir bajo nuestro Gobierno, también puedo presentarle a judíos que se consideran ciudadanos de segunda 247
clase en Amberes, o turcos que se consideran ciudadanos de segunda clase en Berlín. Ese tipo de percepciones están relacionadas con la forma en que la gente se concibe a sí misma, es algo que no tiene que ver con las posibilidades económicas sino con qué tan a gusto se siente cada cual consigo mismo. En cuanto a los árabes de Gaza y Cisjordania, desde el principio hemos buscado vivir en paz con ellos, pero entre miles de personas que también quieren la paz están enquistados una serie de imbéciles que se han dedicado a lanzarnos misiles y a convencer incautos para que se hagan explotar en nuestros autobuses y centros de reunión y eso, pueden tenerlo por seguro, no lo vamos a permitir más. –Entonces niega tajantemente que exista una limpieza racial. Inquirió un reportero del Komsolmoskava Pravda. –La sola idea es ridícula, míreme a la cara, vea mis manos: soy negra. ¿No ha abordado un autobús en Tel Aviv, en Haifa o en cualquier población de Israel?, ¿no ha caminado por las calles?, judíos blancos llegados de Hungría, judíos negros provenientes de Etiopía, judíos morenos de Yemen, judíos amarillos de China, judíos de India, de Argentina, de Uruguay, de Estados Unidos, de Francia, de Rusia, de Rumania, de Lituania, de México, de Irán, de Marruecos, de Turquía y, por supuesto, los Sabras, los nacidos aquí, entre ellos mis hijos y mi hermosa nieta. Tenemos todas las lenguas, todos los colores de piel, todas las estaturas posibles, de qué raza me habla, a qué características étnicas se refiere, ni siquiera vivimos todos la religión de la misma manera, somos una muestra de la diversidad del mundo, la tolerancia es la piedra angular de nuestra ética. No puedo más, otra pregunta tan estúpida como esa y reviento. 248
En ese instante la magia volvió a hacer de las suyas, repentinamente la Doctora Zisano desapareció de la sala de conferencias, antes de que pudieran protestar surgió de los altavoces la advertencia de que los autobuses estaban por partir a los recorridos del segundo día.
249
250
XIV
Mientras la conferencia de prensa se llevaba a cabo la Franja de Gaza entera se cubría de nubes, la gente salía a las calles para observar ese fenómeno insólito, desde el sur de Ashkelon hasta más allá de Rafah todo era cubierto por nubes negras, pesadas. En apariencia la excepción era un pequeño círculo donde los rayos de luz descendían verticalmente, iluminando Jibaliya, justo sobre la zona dominada por el clan Al Ahued. Mahmud Al Ahued, el patriarca del clan, observaba lo que ocurría desde la terraza en la parte superior de su casa, sus lugartenientes corrían de un lado para otro con los Ak47 en alto, mostraban el mismo nerviosismo que los numerosos perros del barrio que daban vueltas una y otra vez en torno a los mismos postes, nadie entendía nada, las mujeres se agrupaban en un patio interior y se repetían entre ellas que eso era sobrenatural, una joven, estudiante universitaria, dijo en voz alta que eso era consecuencia del cambio climático pero enseguida una abuela le mandó callar –…qué cambio climático ni que las babuchas del Profeta, tú no sabes nada, 251
nada más pierdes el tiempo con tantos libros, esto es un castigo divino, hemos ofendido al Supremo y grande será nuestra penitencia…–. El patriarca se postró sobre una alfombra y empezó a orar con el rostro en dirección a la Meca, cuando concluyó llamó a los ancianos y cabezas de cada familia del clan, veintisiete hombres se sentaron alrededor de la antigua alfombra, un trabajo de anudado de extraordinaria perfección, ese tapete llevaba más de doscientos años de estar en el centro de las ceremonias, su posesión era uno de los atributos del patriarca. – Vamos a rendirnos, debemos entregar las armas y acogernos a la protección israelí de la misma forma que lo hicimos en el pasado, cuando dejamos de estar a la sombra de los ingleses; esa es la decisión de Alá, Bendita sea Su Gloria, Grande Su Benevolencia. Vean el cielo, las nubes cubren todo el territorio de Gaza excepto el nuestro, eso encierra un claro mensaje, si no accedemos todas las tierras serán regadas, menos la nuestra, el verdor que cubrirá los campos no pasará por nuestro suelo. Les digo, con honestidad, con el corazón en la mano, que no tenemos ninguna posibilidad de ganar. Hamás ha sido vencido y Al Fatah no tiene con qué oponer resistencia, por lo menos no aquí en Gaza, Hamás se cebó sobre ellos, nunca imaginaron que algún día los necesitarían como aliados, olvidaron que la generosidad es atributo de un líder, quisieron todo, todo Gaza para ellos solos, ahora no será para nadie. La vieja historia se repite, la avaricia siempre conduce al mismo callejón sin salida, ellos abusaron de su poder y hoy todos los clanes estamos viendo como los judíos los destruyen y no movemos un dedo en su defensa porque nos duelen sus afrentas, su ruindad destruyó los antiguos amarres, Gaza está fracturada, tampoco nosotros tenemos 252
asidero, todas las viejas alianzas han sido quebrantadas. Nunca debimos pelear entre hermanos, eso ha causado la furia de Alá, Grande sea Su Gloria, Infinita Su Misericordia, Él en su Inmensa Sabiduría nos castiga dejándonos a merced de los perros judíos. Tenemos que aceptar con humildad este severo castigo para merecer el perdón, llegará el día en que podremos derramar la sangre de los infieles, llegará el día en que Dar Al Islam abarque todo el mudo, en que no quede tierra hollada por pies inmundos, pero aún no ha llegado el momento. Alá, Alabado sea Su Nombre, nos señala que debemos permitir que Dar Al Harb vuelva a instalarse sobre esta tierra sagrada donde descansan los restos benditos de Hashim ibn Abd Manaf, el abuelo del Profeta, que Eterna sea Su Gloria. Estamos obligados a simular que hemos sido vencidos por la pérfida Sion, ese es el castigo, es la muestra de sometimiento que El Señor nos pide para perdonar nuestros pecados. Ceder hoy para triunfar mañana, que la luz del Profeta nos ilumine en esta dura prueba. Ayer durante el crepúsculo creí que estábamos llamados al sacrificio, que teníamos que morir como mártires para mostrar al mundo la cobardía de los hebreos, ahora comprendo que me equivoqué, estamos muy lejos de merecer la gloria de ser mártires, lo que se nos pide es un sacrificio mayor porque grande es la expiación que debemos realizar, debemos rebajarnos ante esa raza impura para ser dignos de acceder al Reino Sagrado. Tres veces se sirvió té antes de que se llegara al acuerdo definitivo, cuando los líderes guardaron silencio doscientas mujeres cubiertas con hiyabs iniciaron el estremecedor sonido de los funerales, mientras tanto los hombres, uno a uno, caminaron hasta los puntos donde estaban las tanquetas y dejaron sus armas sobre el piso. El general Mordechai Mesel 253
ordenó que colocaran una mesa cerca del acceso principal al barrio, bajo una carpa, con una silla de cada lado, dos tazas y una jarra de té, en cuanto estuvo todo listo se sentó a esperar. Sin que mediara mensajero alguno llegó al cabo de un rato el patriarca del clan y ocupó la otra silla, la entrega fue incondicional. Apelaron a la piedad de los vencedores para que ninguno de los miembros del clan fuera detenido, el Gobierno Israelí había emitido numerosas órdenes de aprehensión sobre nueve de ellos; pidieron que su barrio y sus negocios en el bazar contaran con la protección de las fuerzas de seguridad, porque al desarmarlos los dejaban sin forma de enfrentar a sus enemigos. El general Mesel accedió, le señaló que los imputados contaban con veinticuatro horas para dejar Gaza, se les condenaba al ostracismo, les entregaron nueve salvoconductos para que cruzaran la frontera con Egipto. Se establecería vigilancia armada en el barrio y se les informó que para el shuk ya había un destacamento. Fueron advertidos de que cada rincón del enclave del clan sería revisado, se especificó al anciano Mahmud que se buscaban drogas y armas, todo lo demás que tuvieran almacenado podrían conservarlo. Como una prueba de buena voluntad les entregaron para las familias del clan dos toneladas de trigo, una de garbanzos y otra de lentejas. – General, es usted un gran hombre, no tome esto como un acto de rendición sino como la garantía de la eterna amistad de mi gente con el pueblo judío. Somos hermanos, siempre lo hemos sido, no sabe la infinita tristeza que nos embargó cuando Israel le dejó vía libre a los perros terroristas, cuando se fueron los judíos esto se volvió un caos, rogábamos a Alá, Grande es Su Poder y Su Gloria, por su pronto regreso. Hoy el Señor nos ha colmado de bendiciones al permitir que 254
ustedes volvieran a poner orden en esta tierra, para los verdaderos habitantes de Gaza es un acto de justicia que ustedes hagan correr a esos fanáticos, esos que han pervertido el mensaje del Islam, el terrorismo no es el Islam, esos son asesinos, gente sedienta de sangre, tan enemigos nuestros como de ustedes… El patriarca Al Ahued hablaba de manera compulsiva, era clara su intención de congraciarse; el General Mesel lo observaba en silencio, cada tanto afirmaba con movimientos de la cabeza para mostrar que prestaba atención, estuvo tentado a mostrarle el video de la reunión en la terraza, donde el patriarca había manifestado sus verdaderas intenciones. Descartó la idea, era mejor que no supieran que conocían su juego, lo dejó seguir un poco más y después le colocó enfrente el borrador del compromiso que tenían que firmar. Mientras se afinaban los puntos del acuerdo las nubes se cerraron por completo, acababa de estampar su firma el patriarca Mahmud cuando se soltó un chaparrón que se mantuvo durante casi una hora. La mayoría de la gente de Gaza nunca había visto caer tanta agua del cielo, menos aún por un espacio de tiempo tan prolongado, los niños saltaban felices en los charcos, un anciano bailaba mientras lloraba de felicidad bajo el torrente. En todo Gaza la lluvia provocó alegría y desconcierto, un oxímoron válido debido a la situación, en los territorios liberados en el norte y el sur la gente respiraba con alivio al haberse librado de la opresión fanática de los integrantes de Hamás, pero desconocían las intenciones del Shin Mem. No resultaba fácil creer que de un momento a otro se recuperara la libertad de movimiento, se abolieran los impuestos absurdos que los terroristas se inventaba cada semana y que 255
hubiera trabajo y comida en abundancia. Mientras unos danzaban alegres otros se mostraban adustos, sabían que el agua apagaba la ira, que con la humedad no hay pólvora que encienda. En Bani Suhela un enloquecido militante de Yaish al Islam disparó contra un grupo de jovencitas que danzaban alegres bajo la lluvia, mató a dos e hirió a otras tres, el padre de una de ellas se abalanzó sobre el asesino y antes de que pudiera reaccionar le enterró el puñal media docena de veces. Cuando otros muyahidines quisieron vengar a su compañero fueron rodeados por la población, mujeres, ancianos, jóvenes, todos defendieron al hombre que detuvo la demencial agresión, la tensión aumentó en esa zona que aún se mantenía bajo el precario control de Hamás. Tuvieron que permitir que ambulancias del Shin Mem y Maguen David Adom entraran por las jóvenes heridas, la gente se los exigió; muchos de los muyahidines buscaban cómo huir o se ocultaban en bunkers, ante la evidente pérdida de su poder temían la venganza de las bandas rivales, nadie parecía tener la cordura y el poder para organizar la resistencia, en los cafés subía el tono de voz en las conversaciones, que concluían en que lo mejor era no permitir que se diera la gran batalla que los líderes trataban de acordar, sin éxito hasta ese momento. Los parroquianos empezaban a dejar de temer a los sembradores del terror. – Esta no es nuestra derrota, es la derrota de esos locos, nosotros hemos perdido siempre: los otomanos nos sangraron, al igual que los ingleses, los judíos y los yihaidistas de todas las facciones, todo el que tiene un arma en las manos se siente con derecho a pisotearnos. Con ingleses y judíos por lo menos funcionaban los hospitales y había comida y trabajo, si ahora regresan los judíos la situación no será tan grave, lo grave 256
sería que Hamás se quedará por siempre. – Alí, ten cuidado, todavía están muchos desquiciados sueltos por aquí, bien haríamos en tomar nuestros burros y escapar esta noche con lo poco que nos queda de trigo y de garbanzos, que estos libren su última batalla como puedan sin tenernos en medio. Alá en su Gloria Infinita les tiene un lugar reservado en el paraíso, allá que se los lleve, porque acá nos tienen hartos. Por desgracia a Haniyah lo atraparon con vida, ¿era mucho pedir que una bala perdida lo quitara de sufrir?, no vaya a ser que un día le gane la nostalgia. – No me parece que tengamos que irnos Salim, la defensa piensan hacerla en Khan Yunes, Alá lo permita y nos socorra, para allá se marcharán mañana y nos quedaremos solos, en tierra de nadie, hasta que los hebreos vengan a hacerse cargo; por lo menos ellos tienen leyes claras y no se inventan impuestos cada mañana. Que Alá nos brinde su protección y nos llene de mártires en la última batalla, los que mueren ya no pueden regresar, los que huyen sí. – ¿No tienes un yerno que es miliciano?, consideras digno desear la muerte de tu yerno. – Es un hijo de mala madre, escoria vil. Benazir está de nuevo en casa con nosotros, este infeliz la golpeaba porque salía el sol o porque se ocultaba, cualquier pretexto era bueno para justificar sus golpes. Le entregamos una bella flor y el malnacido nos regresó la flor marchita, ella soportó lo indecible, llegó a pensar que se merecía ese trato, que era culpa suya que él se pusiera histérico. Si lo matan volveré a creer en la justicia divina, que maten a todos los de todas las facciones, no los necesitamos para mantener nuestra fe, no los necesitamos para vivir; mira alrededor, el café está lleno, hace cuanto que esto no ocurría, no podíamos venir a charlar con 257
tranquilidad porque siempre llegaban a fastidiar. ¿Ahora dónde están?, escondidos, esperando que caiga la noche para salir a hurtadillas y huir; les han cerrado todas las puertas, no les queda más que dar la cara en Khan Yunes, aunque te puedo apostar que no habrá allá ninguna masacre, esos cobardes van a rendirse. En cuanto la lluvia cesó el calor retomó su intensidad, con la misma rapidez con la que llegó el agua ocurrió la desaparición de su rastro, lo que no se evaporó lo absorbió el suelo enseguida, hasta la última gota, no quedó siquiera un charco de recuerdo. Los miembros del clan Al Ahued condujeron a los integrantes de la brigada de limpieza profunda hasta su almacén de municiones, en la revisión de las casas y almacenes no fueron encontradas más armas ni balas ocultas, el hallazgo fue media tonelada de hachís, que se decomisó pese a sus airadas protestas y afirmaciones de que no era para venta sino para el consumo familiar, para los narguilés que los hombres del clan fuman al atardecer. Según se comprobó tenían suficientes reservas de alimentos y mercadería para mantener sus negocios funcionando por un buen tiempo, si bien la apertura de las fronteras les iba a significar mayor competencia. Ellos sabían deambular por esas dunas. Del sur llegaron noticias de que varios túneles se habían inundado, lo que facilitó descubrir su existencia. En las zonas norte y sur, bajo control del Shin Mem, poco antes de la lluvia miles de personas habían recibido su paga por el primer día de trabajo que habían tenido, para muchos era el primer sueldo que recibían en años; el Consejo General había acordado pagar cada día, durante las dos primeras semanas, para ayudar a reactivar la economía y que 258
la gente recobrara la confianza. Para los que llegaron a sus casas con dinero la lluvia significó el inicio de una nueva era, para quienes veían cómo su poder mermaba minuto a minuto, la lluvia fue la contundente evidencia de que el final estaba cerca, pero no pensaban facilitarle las cosas al enemigo. En el Comando Central todos veían sorprendidos al Capitán General, la lluvia parecía producto de un milagro; la Doctora Tzipora Hartman lo acorraló. – Zvi, no se ría, está obligado a contarnos cómo supo de la tormenta que se avecinaba, ¿tuvo una revelación divina o fue intuición? – Ninguna de las dos cosas, revisé en la Internet el canal internacional del clima. Había una formación anómala de nubes en el noreste de África, sobre el Mar Mediterráneo, avanzaba sobre Alejandría, en la costa egipcia; al corroborar la dirección del viento me di cuenta de la alta posibilidad de lluvia, en unas horas Gaza estaría nublado, eso hubiera sido suficiente para influir en el ánimo de los Al Ahued, me aventuré a pronosticar lluvia y ocurrió, supuse, desde mi ignorancia en asuntos meteorológicos, que tras un trayecto tan largo esas formaciones bien podían reventar aquí y sucedió, suerte de principiante. Lo demás es producto de la sugestión colectiva, hubo varios huecos entre las nubes por donde se filtraron rayos de luz solar, coincidentemente uno de esos huecos quedó donde convenía, ni ustedes ni ellos se percataron de que ese fenómeno se estaba repitiendo en otros lugares. Para ellos fue una señal, para nosotros una feliz casualidad, punto. Vivimos una época de modificaciones severas en el comportamiento climático, consecuencia de acciones humanas que afectan los ciclos naturales, quizá en el 259
futuro cercano las lluvias se conviertan el algo habitual en la región, no podemos saberlo; por lo pronto hoy ocurrió y nos ayudó, es algo que debemos agradecer al Creador pero que no proviene de ninguna revelación. El Rabino Baruch concluyó complacido. – Me has quitado un peso de encima. Asumo tu sugerencia de orar en agradecimiento, quien quiera acompañarme es bienvenido.
260
XV
En una playa cercana al campamento de Shati, estaban sentados sobre la arena el Sargento Osher Goldfinger y la Mayor Ofra Yaish, observaban la caída del crepúsculo sobre el mar. – ¿Estás seguro de que esta playa está limpia de minas? – No, por favor, no me menciones la palabra minas una vez más, hemos desactivado más de quinientas en menos de treinta y seis horas; está limpia, esta playa está limpia, podemos asegurar que hay quince kilómetros de playa completamente libres de artefactos, nada más nos faltan otros veinticinco kilómetros por revisar. – Veintiuno, la brigada que está en Rafah ha avanzado hasta Tel Jinan, cuando nos encontremos ellos habrán avanzado diez kilómetros, así que a nosotros nos tocan nada más otros quince, fabuloso, ¿cierto? – Sin contar el tener que desactivar trampas, personas y burros, lo del burro es lo más sórdido, ¿a quién se le ocurriría? – A los talibanes, lo utilizaron en Kandahar hace como cinco años, ¿se te hace peor enviar un burro que una mujer suicida? 261
– Sí, por supuesto, al burro ni siquiera intentaron convencerlo, simplemente lo cargaron de explosivos y lo arrearon para que fuera hasta cierto lugar y estallara, el pobre burro no tiene elección; las mujeres son sometidas a un lavado de cerebro y reciben una fuerte presión social para convertirse en mártires, pero pueden negarse, están en ejercicio de su libre albedrio, si aceptan no tienen mayor disculpa que un drogadicto o un alcohólico, ¿cierto? No ocurre lo mismo con el asno, el animal no aceptó ni negó nada, nada más sintió que lo amarraban a un poste y le colocaban encima la carga, una carga más, no tiene capacidad para discernir que esa carga es peligrosa. Es un abuso total, te apuesto que no le prometen un lugar en el paraíso de los burros, tampoco le toman video con una cinta verde entre las orejas, una granada en el hocico y el Kalashnikov colgado del lomo, ni siquiera pegan carteles con su foto por las calles “Khalid, el burro mártir”. Cualquier día nos salen con perros bomba o gatos bomba, con la de gatos que hay en Haifa imagínate el riesgo. – Lo bueno es que pudimos salvar al burro. – Al burro y al subnormal que tenía que hacerlo explotar, lo libramos del remordimiento de haber sacrificado a un pobre animal. – No me digas, tú crees que tienen remordimientos los tablajeros de los rastros, su trabajo es sacrificar cientos de vacas, cerdos, corderos, gansos y gallinas todos los días. – No lo sé, por eso soy vegetariano, los dejo a ellos con todo el peso de la culpa. – Hay cuatro cosas que me gustaría saber de ti. – Hay veinte cosas que me gustaría saber de ti. – Mmh, está bien me quedo con la duda. – No, pregunta, quizá nos alcance el tiempo de descanso para 262
resolverlas, y tenemos más días para que yo haga mis preguntas. – ¿Cómo le haces para ser vegetariano en el ejército? – A veces tengo que someterme a dieta de humus, si le pones suficiente aceite de oliva no te produce tantos gases, aunque siempre es bueno tener bicarbonato a la mano. – ¿Por qué a tu edad apenas eres sargento? – Lo cierto es que soy más joven de lo que piensas, el uniforme me hace verme con más años, además no soy militar profesional, soy reservista, este es el mes que me toca prestar servicio, y vaya mes que me vino a tocar… es broma, si no hubiera estado de servicio también estaría aquí como voluntario. – ¿Entonces a qué te dedicas? – Soy psicoterapeuta. – Acabarla de… no me digas, ahora entiendo lo de las veinte preguntas, fin de la charla, no me gusta estar en el diván. – Estas sentada en la arena, en la playa, ¿cierto? y eres tú la que empezó el interrogatorio. No acostumbro psicoanalizar a todo el mundo, sobre todo si no han solicitado consulta ni me han pagado, lo de los honorarios es la parte fundamental, si pretendiera psicoanalizarte verías un reloj enfrente de mí, no concedo ni un segundo más de los cuarenta y cinco minutos de rigor. – ¿No es una hora lo normal? – No, el tiempo que requiero para despejarme entre paciente y paciente, más el saludo y la despedida están incluidos, así que al diván le corresponden en concreto cuarenta y cinco minutos. – Ya entiendo, está bien, vamos por la tercera pregunta… – Lamento decirte que agotaste tus cuatro preguntas. 263
– Me parece que me enfrento a un profesional. – Bueno, aceptemos otra pregunta. – ¿Por qué no hablas árabe? –…Desde ayer, cuando ocurrió lo de la chica árabe que se iba a hacer estallar… – Amira, Amira Yunes, ella tiene un nombre y un rostro. – Sí, sí, se llama Amira, lo siento… de repente no los vemos, eso es lo que me pregunto desde ayer, no estoy seguro pero me parece que casi todos los árabes israelíes y una buena cantidad de los de Gaza y Cisjordania hablan hebreo, sin embargo la mayoría de los judíos no hablamos árabe… – Habla por ti, muchos judíos hablamos árabe, igual que inglés y hebreo, son nuestras tres lenguas oficiales, ¿lo recuerdas?, pero te pregunto a ti, me interesa saber por qué… – Necesito pensarlo, supongo que en mi interior me he estado negando a entender al otro, a conocerlo, aunque comparto con ese otro un territorio, aunque caminamos a diario sobre la misma tierra. Voy con frecuencia a comer en un pequeño restaurante de Abu Ghosh, el propietario siempre me saluda en árabe y yo le contestó en hebreo, no puedo recordar ahora cómo es el saludo en árabe y debo haberlo escuchado un centenar de veces… – ¿Cómo se llama el restaurante? – El letrero está en árabe, nunca se me ha ocurrido preguntar cómo se pronuncia o qué dice, tienes razón, cómo quiero vivir en paz con alguien que ni siquiera tomo en cuenta… – Yo no he dicho nada, ni pongas palabras en mi boca. – Tenemos que dejar pendiente esta pregunta, necesito pensar detenidamente al respecto… ¿Cuál es la cuarta pregunta? – Me parece que eres soltero, si es así ¿por qué no te has 264
casado? – Para evitarme sentimientos de culpa, puedo estar platicando con una hermosa mujer en la playa sin que me remuerda la conciencia ya que, esa sería la situación, mientras tanto mi esposa estaría sola en la casa, cuidando a los niños. Es más cómodo así, ¿puedo empezar a preguntar yo? – Se nos agotó el tiempo, tenemos reunión de pelotón en quince minutos, justo lo que hacemos caminando de regreso al campamento, es necesario revisar el plan de acción para mañana. Ofra se levantó primero y le extendió la mano a Osher para ayudarlo a levantarse, con el jalón él dio un pequeño traspié, escucharon entonces un sonido que conocían muy bien. – ¡Osher no te muevas!, mantén la presión con el pie, voy a revisar de qué tipo es. Se hincó a su lado mientras él empezaba a sudar frío, ella fue retirando con cuidado la arena por debajo del pie, hasta descubrir la parte superior de la mina, suspiró con alivio cuando vio que era de fabricación rusa; de una de las carteras sujetas a su cinturón de campaña retiró una pequeña laminita metálica y se la dio a Osher, sacó un largo cuchillo de la funda que colgaba del cinturón, talló la hoja con arena y con extremo cuidado lo introdujo entre la suela de la bota y el botón del artefacto, él hacía esfuerzos por concentrar todo el peso de su cuerpo en la pierna derecha, para mantener la presión mientras sentía como la hoja se deslizaba y se atoraba por momentos en los relieves de la suela. – No retires el pie hasta que yo pueda sujetar el puñal con ambas manos, necesito que pase al otro lado de la suela de la bota, no hables, atiende mis instrucciones. 265
Cuando unos diez centímetros de la hoja del puñal pasaron al lado izquierdo del pie derecho de Osher, Ofra ejerció presión hacia abajo con ambas manos, en cuanto asintió con la cabeza, Osher retiró el pie lentamente, dio un par de pasos hacia atrás y también se hincó, en una de las pequeñas rendijas que rodean al botón obturador introdujo la laminita que Ofra le había dado, la empujó para forzar el doblez, que apretó con las pequeñas pinzas que sacó de una de las bolsas laterales del pantalón, pasó entonces la lámina por encima de la hoja del cuchillo y repitió la operación del otro lado, verificó la tensión y apretó con las pinzas. – Me parece que ya puedes soltar. – Ni lo sueñes, no tendríamos tiempo de saltar la distancia necesaria si el cuchillo se resbala o el sujetador no resiste; llama a Saúl por radio-teléfono, el campamento está muy cerca, con la camioneta estará aquí en tres minutos, dile que verifique que la campana esté en la batea. Cinco minutos más tarde arribaba el vehículo de su escuadra, Saúl, Shmuel y Liat descendieron de inmediato, Shmuel cargó la pesada campana de aleación y se acercaron al lugar donde Ofra y Osher permanecían postrados. Liat observó la situación. – No hay forma de colocar la campana y que retires las manos, o te las pillamos con el peso de la campana o te alcanza la explosión. – Entonces traigan la pala, vamos a sacar la mina. – Tu idea es buena, pero no con la pala – señaló Osher – Saúl de un lado y yo del otro vamos a retirar la arena con las manos, en cuanto lleguemos a la base introduzco las manos debajo para empujar hacia arriba mientras tu mantienes la presión, así Saúl coloca uno de los cinchos de sujeción por 266
debajo de este artefacto infernal y lo asegura encima del otro sujetador. En tres minutos la operación fue concluida. – ¿Quieres recuperar tu cuchillo? – Preguntó Shmuel. – ¿Cómo ves? – Olvídalo, vamos a cavar. – ¿Por qué descartas el robot anti detonación? – Por los cinchos que le colocamos, el robot está diseñado para desmontar el seguro de sujeción convencional, pero no para estos cinchos y menos aún con un cuchillo de explorador en medio, nos arriesgamos a perder un robot y no andamos sobrados; insisto en que es mejor cavar y colocar la campana. – Bien, pero primero realiza un barrido en la zona, no quiero más sorpresas. Con dos detectores de metal revisaron el área, no hubo más minas, cavaron un hoyo de dos metros de profundidad por setenta centímetros de diámetro, colocaron un detonador en el fondo, encima la mina, después la campana de aleación y cubrieron todo con arena, se alejaron cincuenta metros y activaron electrónicamente el detonador, se hizo un pequeño cráter en la playa, de cuarenta centímetros de altura, volvieron a cavar, recuperaron la campana, sacaron el cuchillo de entre los restos de la mina destruida, cubrieron de nuevo el agujero. – Me parece que quedó un poco torcido, no demasiado, pero te va a costar un poco de trabajo mondar naranjas. Bromeó Osher. – Osher, te tengo una mala noticia. – ¿Estás casada? – No me… no es eso, nuestro trabajo no es confiable. Tenemos que volver a peinar los quince kilómetros de playa que considerábamos libres de peligro, vamos a tener que solicitar 267
refuerzos, quizá haya expertos en explosivos entre los voluntarios que se incorporaron durante el día; vamos a hablar con el Coronel Aharonovitch. – Por lo menos estaban vestidos, hubiera sido bochornoso que afrontaran esto desnudos, se imaginan. Intervino Liat Koch, sonriendo. – Querida Liat, en primera Osher y yo estábamos platicando, tan sólo platicando, lo cual la gente común suele hacer con la ropa puesta; en segunda, te lo comento para que tomes tus precauciones, hay miles de cámaras sobre Gaza en este momento, todo lo que ocurre está siendo observado, si se te ocurre llegar más allá de la charla con alguien procura hacerlo bajo techo; y tercera, si Osher hubiera estado descalzo cuando pisó esa mina no estaríamos aquí tratando de poner freno a tu imaginación desbordada, porque por muy dura que la tenga, la planta del pie, cosa que ignoro y te aseguro que no me interesa, no hubiera sido suficiente para detener la presión del obturador, los resortes rusos son gruesos y tienen demasiado brío. – Discúlpame Ofra, pensé que eras judía, me parece que tienes conflictos con tu cuerpo, no considero que exista nada malo en un cuerpo desnudo, encima estás desperdiciando la doble promesa que este hombre encierra en su nombre y apellido. Pero no tengo ningún derecho a cuestionarte, te pido disculpas de nuevo. – Soy tan judía como tú, pero no es lo mismo un kibbutz que la casa de una familia ortodoxa llegada de Yemen, tampoco Be’er Sheva es Tel Aviv, soy yo la que debe disculparse, quizá estar tan cerca de la muerte afectó mi sentido del humor. – Llevó cinco años en Israel y no acabo de acostumbrarme a esa manía nacional, se pelean por cualquier cosa, se dicen 268
hasta de lo que se van a morir, y cuando te emocionas porque crees que ya van a llegar a los golpes, repentinamente los contendientes recuperan la cordura, se piden disculpas y casi se besan, mientras no logre entender por qué actúan así no seré un auténtico Sabra. Comentó Saúl, quien era olé chileno. Justo cuando Ofra y Liat se daban un abrazo conciliatorio, sonó el radio de Shmuel. – Tus sospechas de las cámaras se confirman, el coronel Aharonovitch nos felicita por haber resuelto el problema y nos espera de inmediato en el campamento de Erez, hay junta de brigada, así que los planes cambian.
269
270
XVI
Siete personas ingresaron al bunker del Comando Central fuertemente custodiadas, traían los ojos vendados, un guardia guiaba a cada uno, los condujeron a una de las salas de consejo donde se sentaron alrededor de una enorme mesa redonda, les retiraron las vendas. Las tres mujeres y los cuatro hombres se saludaron sin pronunciar palabra, veían aturdidos a su alrededor, ninguno sabía para que habían sido convocados, en los muros del salón circular las pantallas de led cubrían los trescientos sesenta grados; en ese momento se proyectaba la imagen del avance de una de las falanges, lo que ocurría al frente, a los lados y atrás, de forma simultánea, resultaba un tanto angustiante estar en medio de la refriega. Sirak Abebe alzó los brazos de manera instintiva para protegerse cuando vio que les arrojaban una piedra, en ese momento el centro de la mesa descendió y un minuto después emergió un anciano sentado en una silla de ruedas, desde su posición giró noventa grados para ver cara a cara a cada uno de los sentados en el lado opuesto, el Teniente General Naftali Mostovich sonrío. 271
– Puedo adivinar los cuestionamientos que no se atreven a externar, ¿es esto el Comando Central?, ¿quiénes son los que están sentados a mi lado?, ¿para qué me trajeron aquí?, ¿quién es este viejo loco que se apareció en medio de la mesa con todo y silla de ruedas? – Dijeron que sí al unísono. – Me decepcionan, esperaba que me interrumpieran para decirme que no, que no estoy loco, quizá un tanto senil, pero nada preocupante. Estalló en carcajadas, todos lo miraron perplejos. – Se están preguntando qué tan peligroso es que estén viendo esas pantallas con imágenes de lo que está ocurriendo en Gaza… la respuesta es: muy peligroso; están viendo parte del cerebro de Movimiento Shalom, el lugar donde se toman las decisiones, si tuviéramos la menor desconfianza hacia alguno de ustedes nos veríamos obligados a eliminarlo. Todo lo que ocurre aquí dentro es secreto, están aquí es porque confiamos en ustedes, confiamos tanto en ustedes que en este momento les voy a presentar a alguien que nadie, fuera del círculo cercano, conoce; han escuchado rumores sobre él y no dudo que exista quien considere que se trata de una leyenda, les voy a presentar al Capitán General del Movimiento Shalom, el hombre que elaboró la estrategia de la Liberación de Hebrón. En ese momento se apagaron las pantallas, en la parte del muro que les quedaba enfrente se abrió un nicho de intenso color naranja que contrastaba con el color arena en que estaba pintada la habitación, tres cuartas partes de la mesa, las secciones que estaban vacías, descendieron hasta el nivel del piso y el hombre que salió del nicho caminó hasta colocarse al lado de Naftali. – Señoras y señores, les presento al Capitán General Zvi Bartomeu. 272
Señor Capitán General, le presento a la Capitán Sirak Abebe, la Teniente Daniela Schneider, la Sargento Sara Abenafia, el Cabo Moshé Amato, el Teniente Shmuel Friedman, el Sargento Azamel Ben Nahon y el Capitán Hobidiente Belinfante, quienes han realizado un trabajo destacado en sus brigadas durante esto dos primeros días de operaciones. Las pantallas volvieron a encenderse y los presentes pudieron verse en diferentes momentos de sus actividades y después en videoclips en los que eran protagonistas, iban de sorpresa en sorpresa. Sirak Abebe curaba la pierna purulenta de un anciano mendigo, arrullaba a un bebé, leía un cuento a un grupo de niñas en sillas de ruedas que se mostraban divertidas, limpiaba el rostro de una anciana postrada en la cama del hospital; Daniela Schneider lograba un tiro perfecto con una ballesta, se colocaba la mascarilla antigás y saltaba del helicóptero cuando el aparato aún no completaba el descenso, se enfrentaba con el rifle a la espalda a un militante islámico que la encañonaba con una metralleta, lo desarmaba y lo golpeaba con la culata del arma que le había quitado, ayudaba a un enemigo derribado a levantarse, arrastrando la pierna lograba parapetarse y libraba a sus compañeros de una muerte segura, en el asiento trasero del Dromedary lloraba; Sara Abenafia repellaba la parte alta de un muro colgada de un arnés en un acto de malabarismo, escuchaba con atención la explicación de un albañil, enseñaba a unos jóvenes como preparar la mezcla de argamasa, cargaba a una de sus compañeras sobre sus hombros para alcanzar un balcón donde un pequeño se deshacía en llanto, derribaba de una patada de krav maga a un hombre que había abofeteado a su esposa sin percatarse de que ella estaba presente; Moshé 273
Amato detenía un tiro a gol y al mismo tiempo recuperaba su kipá en el aire en un partido de futbol, cargaba con extremo cuidado hasta la ambulancia a un joven con síndrome de down, que fue encontrado desnudo y cubierto de suciedad en un agujero oscuro donde su familia le arrojaba comida un par de veces al día, calmaba a un camello asustado por una explosión, liberaba y alimentaba a dos perros que habían sido atados a un poste bajo el sol inclemente; Shmuel Friedman cantaba a todo pulmón mientras avanzaba al frente de su falange, platicaba sonriente con una mujer a la que pedía permiso para revisar su casa, cargaba a una anciana con todo y silla para colocarla bajo la sombra de un olivo, compartía su botella de agua con un gatito sediento; Azamel Ben Nahon organizaba un coro infantil, sobre una gran tela extendida en el piso pintaba en compañía de veinte niñas y niños pequeños, ayudaba a comer a una señora afectada con mal de Parkinson, vendaba la pata lastimada del borrico de un beduino; Hobidiente Belinfante escribía en un pizarrón, en árabe, las características de un invernadero, que explicaba a un corro de mujeres, ayudaba a empujar la gastada camioneta de un vecino para que arrancara, cargaba un bulto de trigo hasta el interior de la casa de una pareja de ancianos, libraba a uno de sus compañeros de un ataque con puñal y más tarde trataba con respeto al atacante cuando lo entregaba a una patrulla de la brigada de vigilancia. Tras diez minutos las pantallas se apagaron nuevamente y Zvi Bartomeu tomó la palabra. – Todos ustedes participan en el Shin Mem de manera voluntaria, todos han ido más allá del simple cumplimiento del deber, no son los únicos, miles de personas brindan su mejor esfuerzo en esta operación; sin embargo los actos de 274
ustedes han sido seleccionados por su emotividad y su carisma, cada uno ha destacado tres o cuatro veces en menos de cuarenta y ocho horas, eso es lo que les otorga notoriedad, por eso los hemos elegido para ser el emblema visual de nuestra misión. Los siete han sido ascendidos a comandantes de patrulla, escuadrón o falange, según la división a la que están asignados, lo que les permitirá desarrollar su iniciativa de mejor manera, pero también eso representa una mayor responsabilidad y desgaste. Están en la mira de todo el mundo y lo estarán todavía más, sus acciones podrán llegar a ser consideradas como actos heroicos, si resultan bien, aunque habrá mucha gente y medios interesados en destruirlos; van a escarbar en sus vidas, gustos y preferencias y a la primera oportunidad se les lanzaran a la yugular. Queremos que acepten esta carga extra, les ofrecemos respaldo psicológico y estratégico mayor que el que tienen los demás militantes, pero no podemos protegerlos del todo; es posible que resulten afectadas sus familias o las personas de su entorno cercano, sabemos del encarnizamiento de los medios de comunicación, en especial de la televisión. Para que tengan idea de la magnitud del riesgo les comento que tres horas atrás decodificamos una señal, los operadores de una de las plataformas de aviones de observación estaban vendiendo imágenes a televisoras extranjeras, las secuencias de la Teniente Schneider en crisis son parte de la información que enviaron; los actos de traición y las conductas impropias son casos aislados, sin embargo existen. Disculpen la manera abrupta de plantearles esto, pero todo ocurre muy rápido en estos días, ¿aceptan? – Disculpe Capitán General, tal como usted lo dice suena 275
como a “queridas, están en riesgo de ser violadas y no tenemos ni preservativos ni lubricante”. Intervino Daniela Schneider, Moshé y Shmuel, los dos jaredim presentes, abrieron los ojos de forma desmesurada molestos por lo descarnado del lenguaje de la oficial, los demás rieron. – Bueno, digamos que esa es una de las maneras de traducir mis palabras y, por cierto, son sus preferencias sexuales el primer objetivo de la prensa. Por supuesto que no vamos a intentar ocultarlas, ni a modificar nada, no hay nada vergonzoso en su manera de ser, no para nosotros, son seres humanos con virtudes y defectos, como el resto del mundo. En el judaísmo no tenemos santos ni semidioses, jamás hemos tratado de ocultar los defectos de nuestros líderes, eso enfatiza su carácter humano, sabemos que la única perfección posible está en el Creador. Ustedes, las figuras destacadas del Shin Mem deben ser mostradas igual, con sus virtudes y defectos, pero no será fácil afrontar que su vida sea ventilada en público, algo que ocurre ya, ahora mismo, la prensa husmea en todos los rincones para saber más sobre lo que hacen. Como parte de las políticas de este operativo aceptar o no les corresponde a ustedes, los que se nieguen serán trasladados a posiciones más discretas, también tienen derecho a pedir su baja si lo desean. Shmuel Friedman levantó la mano, le concedieron la palabra. – Aceptamos participar porque compartimos con ustedes la esperanza de paz, al ingresar como voluntarios lo hicimos con la plena conciencia del riesgo que esto representa para nuestras vidas, si arriesgamos la vida qué más da arriesgar el prestigio, que no es sino una banalidad… si aparecer en esas 276
pantallas sirve al Shin Mem está bien, supongo que no nos solicitarán actuar o posar, no me gustaría pervertir la realidad, esto que vimos en las pantallas ocurrió de manera natural y espero que podremos seguir con nuestro trabajo de manera normal, en la inconsciencia de la existencia de tantas cámaras, algo que al menos en principio va a resultar complicado ahora que nos dimos cuenta de qué tan estrechamente vigilados estamos. – Por supuesto, no estamos realizando una película, estamos cumpliendo con un Plan Divino. No pretendemos hacerlos cómplices de un montaje, quizá en el cambio de rol alguno, alguna, disminuya en presencia, eso no es relevante. Nuestro deber es advertirles de las consecuencias de convertirse en personajes públicos. Los políticos, deportistas y artistas viven esto todos los días y hay quienes hasta parecen disfrutarlo, pero es algo que ellos eligieron. La fama, quizá efímera, que ustedes están adquiriendo, puede llegar a causarles mucho daño, pero en definitiva es útil para el Shin Mem. De manera unánime los convocados aceptaron el nuevo reto, pasaron a la sala central a conocer a todos los miembros del Consejo General y asistieron a una breve ceremonia en la sala de oración, más tarde se reunieron en salones diferentes con los consejeros del área a la que estaban asignados. La Comandante Daniela Schneider se sentó en el sillón de una pequeña sala, frente al Teniente General Mostovich y el General Lumbroso Modigliani y al lado de la General Levana Casque, la charla tenía el tono de una reunión informal de viejos conocidos. En algún momento el Teniente General encendió una pantalla que les quedaba al lado y mostró a Daniela diferentes ángulos del operativo de esa mañana. – Su capacidad de respuesta es formidable, igual que la forma 277
en que organiza las cosas; no sea tan dura consigo misma, efectuar el segundo disparo fue un acto reflejo, que además no cambió en nada el resultado final, la primera bala chocó de lado contra la ranura superior del gatillo del RPG y se desvió dando al combatiente en el cuello, cuando recibió el segundo disparo ya estaba muerto. Observe, vea la torsión de la cabeza, me parece que la segunda vez usted apunta a la nuca pero la bala impacta en pleno rostro por el movimiento de la cabeza al quedar sin el sostén de los músculos del cuello, después se le doblan las rodillas, cae con el arma y a la contundencia de la caída se suma que el cañón se le encaja en el tórax, cuatro circunstancias se suman en esta muerte, los musulmanes dirían que estaba escrito, con mayúsculas y negritas, que ese hombre moriría esta mañana. Supongo que no le sirve de mucho saber que lo mató al primer disparo y no al segundo, o cuando impactó con el suelo o al encajársele su propia arma en el cuerpo, sin embargo, Daniela, su intención primaria no era matar a nadie sino proteger a sus compañeros, no estaba en situación de gritarle que no disparara. Intervino entonces la General Casque. – Daniela, está lastimada del tobillo y sufrió un intenso daño emocional con las acciones de hoy, hemos revisado su historial y sabemos de su permanente preocupación por no lastimar a nadie. Necesita atención médica y psicológica, estamos dispuestos a prescindir de usted aun cuando no es fácil encontrar quien la sustituya, de ninguna manera queremos que sufra un daño irreparable, además de que nos sería difícil explicar al Tzáhal las razones por las que expusimos de esa manera a una de sus mejores oficiales. – Les agradezco su preocupación pero no soy una niña, esto, con todos sus riesgos, es mejor que estar controlando quién 278
pasa y quién no por una barrera. En ocasiones me siento basura cuando retorno a casa después de días de estar viendo injusticias en ambos lados de la valla: hombres que obligan a sus mujeres e hijas a andar con burkha por “respeto” a las tradiciones, mientras ellos visten camisas Tommy Hilfider, pantalones Levi’s y zapatillas Nike: nos hemos visto obligados a derramar el trigo de un bulto por sospechas de que en el interior haya armas, ante la mirada de desesperación de los pobres campesinos que necesitan esa comida: vemos niños con hambre y a su lado fedayines que festejan cualquier tontería disparando sus armas al aire, desperdiciando en segundos cargadores enteros de balas que cuestan más de lo que necesita una familia para comer durante un mes. Quizá llevo demasiado tiempo en el ejército y sea hora de solicitar mi baja, pero antes quiero llegar hasta lo último con esto, ignoro si va a resultar pero es un hálito de esperanza. No se preocupen, no volveré a dar muestras de debilidad. El Rabino Baruch había entrado segundos antes e intervino. – Por favor, llore cuantas veces lo necesite, usted es humana no es una máquina, cada cual libera sus cargas emocionales de la manera que mejor le parece, no tema que HaShem guiará sus pasos. Naftali le comentó. – Su escuadrón es el Lamed Resh, actuará muy de cerca con el Lamed Nun del comandante Machir, donde ha estado estos dos días; él está dispuesto a cederle a dos de los que han sido sus compañeros, espero que no le moleste mi sugerencia, le pido que no elija a la Teniente Noa, no tenemos nada en contra de lo que haya surgido entre ustedes pero consideramos que es mejor que estén en comandos distintos, de cualquier manera 279
estarán casi juntas. Daniela buscó la mirada del Rabino, quien sonrió, alzó las manos mostrándoles las palmas y explicó. – No tengo que ver en esto, es una cuestión puramente operativa y supongo que Naftali tiene sus razones, hay cosas que se supone que no son bien vistas por los rabinos ultraortodoxos como yo, sin embargo tengo muy claro que no tengo derecho a juzgar a nadie. Levana Casque la tomó del hombro. – No lo tome como una invasión en su vida privada, es… bueno, en estos momentos ninguno de nosotros tiene vida privada y por otro lado es mejor que ninguna de las dos se sienta responsable de la otra frente a la multitud de riesgos que van a afrontar en las próximas semanas. – ¿Semanas?, ¿no se supone que el operativo concluye en Shabat? Los miembros del Consejo cruzaron miradas, Naftali se apresuró a contestar. – El proceso de liberación sí, pero ya ha visto todo lo que hay que reconstruir, ustedes los militares tendrán también parte activa en las obras por hacer, además de las labores de vigilancia para garantizar la paz. Los siete comandantes fueron vendados nuevamente, se les llevó al muelle subterráneo donde abordaron diferentes minisubmarinos, cuando estaban en frente a las playas de la Franja de Gaza transbordaron a otras embarcaciones, ahí les retiraron las vendas. – No les parece que debimos haberles pedido que dijeran “Salve César, los que van a morir te saludan”. Dijo Zvi Bartomeu en la mesa del Consejo. – No seas sarcástico quizá no mueran, la novela ha sido exacta 280
hasta ahora en lo general, pero hay detalles significativos que se han modificado. Señaló Naftali. – Sobre todo en los que se refiere a vidas, recuerda que originalmente el misil cobraría vidas judías y que la unidad del Comandante Machir sería destruida con todos sus ocupantes dentro, finalmente el proyectil impactó sobre una mezquita y Schneider disparó antes que el fedayín y modificó el rumbo de las cosas. No crees que la Divina Presencia te haya inspirado para plantear el sacrificio del pueblo hebreo tan sólo para probarnos, para ver hasta dónde estábamos dispuestos a sufrir por alcanzar la paz, una prueba como la que puso a nuestro padre Abraham. Intervino el Rabino Baruch. – Momento… – irrumpió airado Levi Munhos – no me venga ahora con que el Señor en lugar de corderos nos da vidas árabes para el sacrificio, eso es terrible, inhumano, los ismaelitas son nuestros hermanos, provienen también de Abraham, nuestro patriarca. – No, no, eso que dices es una barbaridad, jamás nos atreveríamos a considerar siquiera la posibilidad de fincar la supervivencia del pueblo judío en la sangre de otros. De acuerdo con el texto original de la novela en este momento la cifra de bajas árabes debería ser cuatro veces mayor y en el caso nuestro, alabemos al Creador, no tenemos ninguna baja que lamentar cuando deberíamos tener al menos diez decesos… mencioné el caso de Abraham con el único objeto de poner un ejemplo referente a que las cosas que HaShem nos pide no siempre ocurren tal cual pero no para equipararnos a un pasaje de la Torá, sería blasfemia, no, no creo que nos esté pidiendo más sacrificio que el haber 281
emprendido esta campaña, hacer que se sacrifiquen los bolsillos judíos es ya bastante sacrificio. Hubo una carcajada general. – Pero entonces – preguntó Tzipora Hartman – ¿Estas siete personas que estuvieron aquí están destinadas a morir?, ¿no podemos evitarlo? – Recapitulemos un poco, – propuso Argoya Yarden – ustedes saben que el plan general parte de una novela, una novela que conocemos por completo cinco de los que estamos aquí, y no cuatro como se ha manejado, porque es obvio que Valentina la leyó incluso antes que el Rabino Baruch; – Valentina Pérez Mitre asintió. – ustedes están al tanto del plan general y día tras día les hemos ido entregando los textos que corresponden a lo que ya ocurrió, lo hacemos así con la intención de evitarles la tentación de tratar de modificar lo señalado. En lo personal, al igual que Naftali, me niego a creer que la novela sea un dictado divino, pero tampoco tengo claro si nuestro Capitán General es un mago, un iluminado o un escritor que logró que convirtiéramos su novela en una experiencia de vida. En esta parte conviene recordar que el señor Bartomeu es arquitecto y no tenía ninguna aspiración literaria, además de que varios meses antes de que iniciara la redacción del texto que nos mueve, el Rabino Baruch recibió una interpretación cabalística de un amigo suyo, donde le decían que el tranquilo y despreocupado Arquitecto Zvi Bartomeu se convertiría en el líder del plan que nos brindaría una época de paz. Quizá formamos parte de un Plan Divino, o, es probable también, no somos más que un atajo de locos poniendo en práctica una obra de ficción, como si algún tunante de repente se pusiera una armadura y montara un viejo caballo para recorrer los caminos de La Mancha…que 282
ahora son autopistas de cuota. El caso es que el texto existe, las situaciones, casi en su totalidad se están dando de acuerdo con ese texto y los pocos cambios que han ocurrido, los que validan el uso del término “casi”, han sido ajenos a quienes sabíamos que podía pasar. Ese fue el acuerdo que asumimos los cuatro integrantes del Consejo Supremo y que Valentina también aceptó; aun cuando ella no quiso formar parte del Consejo su colaboración ha sido muy valiosa y ha aceptado con nosotros la gran responsabilidad y angustia que implica no tratar de modificar las cosas, a pesar de las simpatías que pudiéramos tener por determinadas personas o lugares. Nuestros siete invitados de esta tarde son el rostro visible del Shin Mem porque con sus acciones han confirmado los actos heroicos que la novela les asignó, e incluso han modificado o superado algunos, como sucedió con Daniela Schneider, pero no debemos hacer nada para alterar lo que ocurrirá en el futuro. Estamos obligados a seguir el plan al pie de la letra, si se salvan de morir será por ellos mismos, si mueren… es mejor pensar que no estaba en nuestras manos impedirlo. – Imagino que no podrán decirnos si alguno de los miembros del Consejo General sufrirá algún percance… – preguntó Maskaram Masala. – Moriremos todos… – dijo Naftali, la sala quedó en absoluto silencio – algún día, pero no durante la Liberación de Hebrón, este cabrón de Zvi concluyó su novela sin decirnos siquiera a qué restaurante vamos a ir a celebrar cuando concluya este brete en el que nos hemos metido, negándonos el derecho a saber que nos depara el futuro. – Bueno, eso es un alivio, – dijo Levi Munhos soltando un suspiro – siempre me he negado a que me lean la mano o que 283
me echen las cartas, eso de los oráculos no va conmigo, sin embargo aquí estoy, con ustedes, en algo que cuando menos parte de un texto premonitorio. Esta guerra en la que estamos enfrascados es curiosa, un ejemplo de eclecticismo o postmodernismo si abusamos un poco del término, nos basamos en un escrito que proviene de la Divinidad, como ocurría hace miles de años, tenemos miles de toneladas en armas de última generación para no dispararlas, su uso es disuasivo, las balas que sí utilizamos son imágenes, sin embargo nuestras batallas no son virtuales. – ¿A qué te refieres? – Preguntó su esposa, Levana Casque. – Uno de los chicos del salón de informática, un doctor en física, me mostró las cifras que ha calculado en sus escasos descansos, la munición disparada hasta ahora pesa alrededor de sesenta kilogramos, en cambio los discos duros donde están almacenados los miles de terabytes de fotografías y videos que hemos recabado, representan cerca de una tonelada de peso y miren que esos gadgets no pesan casi nada, ya habrá tiempo para analizar esto, quizá Argoya logre algún día desentrañar el contenido simbólico de esta especie de sueño en el que estamos. – Para eso hace falta tomar distancia, en el futuro, cuando hayan pasado unos años, te prometo intentarlo. Le respondió la Doctora Yarden. Entrada la noche Daniela llegó en una lancha Zodiac al puerto de la ciudad de Gaza, Leo Abramovicz la esperaba al volante de un flamante Dromedary, en cuanto llegaron al campamento se presentaron los otros veinte integrantes de su comando, entre ellos estaba Chaim Govesenzky, su subordinado del Tzáhal, en ese momento se dio cuenta de que en ningún momento había dicho a quienes quería con ella, de 284
los dos integrantes del escuadrón Lamed Nun que podía escoger, alguien había elegido por ella pero estaba de acuerdo con los que le habían asignado, la manera automática en que Leo respondía a sus órdenes, sin cuestionar, les había salvado la vida ese medio día y Chaim era un combatiente incansable, con una extraordinaria sensibilidad en el olfato. La revisión de la asignación de elementos por vehículo, habilidades de cada uno de los integrantes, dotaciones de armamento, munición y los preparativos para la jornada del día siguiente, requirieron más tiempo del que le hubiera gustado, estaba agotada, se dirigió a la zona de duchas, donde estuvo un tiempo considerable bajo el agua, hasta que se sintió culpable por el derroche de líquido; recuperada, fresca y optimista, aspirando el aroma de jabón que brotaba de su piel, se dirigió a la tienda individual a que le daba derecho su nuevo rango – Bienvenida Comandante – dijo una voz desde la oscuridad en cuanto entró, encendió la lámpara y vio a Noa sonriendo, con dos copas en una mano y una botella de Yarden Brut Galilée en la otra, era todo lo que llevaba puesto.
285
286
XVII
Antes del amanecer inició el movimiento en las obras de reconstrucción de la escuela elemental de Sheih Radwan, el Cabo Froiem Wachowski, artista plástico y arquitecto intuitivo era el residente de la obra, subía y bajaba para supervisar los trabajos de los voluntarios del Shin Mem y los operarios contratados entre la población local; por momentos estaba a punto de enloquecer ante la cantidad de idiomas que se utilizaban para la comunicación interna, mientras atendía a una consulta en árabe era interpelado por otra persona en hebreo o en inglés y no faltaban un plomero o un electricista que insistían en hablarle en castellano, por haberle escuchado un par de altisonancias en ese idioma, del que conocía muy poco, o en polaco, del que no entendía nada en absoluto aunque algunos parecían creer lo contrario por el origen de su apellido. Cuando el sol salió por completo observó que decenas de niños estaban sentados frente a la escuela, con sus mochilas entre las piernas – Parece que están ejerciendo presión. – pensó. 287
Llamó a sus dos asistentes, uno judío y otro musulmán, entró con ellos a la improvisada oficina y extendió los planos sobre la mesa. – ¿Qué podemos hacer para que hoy inicien las clases? – ¿Estás loco?, no hay manera, no tenemos una sola habitación en condiciones utilizables, la lluvia de ayer nos provocó inundaciones en varios salones y eso implica un grave retraso, aunque el agua se evaporó tenemos acumulaciones de barro seco; otro punto importante es que no teníamos considerada la impermeabilización y el meteorológico marca probabilidad de lluvia para dentro de unos quince años… por la tarde. Le respondió Yehudá Luria, Abdalá Mansur se limitó a sonreír. Froiem se mesaba la larga cabellera mientras veía el plano general por enésima ocasión, encendió su laptop y revisó unos datos en el inventario, los dos asistentes le observaban intrigados mientras tecleaba y abría ventanas y ventanas del sistema operativo Ubuntu, hasta que encontró la solución, una sonrisa iluminó su rostro. Colocó un pliego de papel transparente de dibujo sobre el plano principal y comenzó a rayar encima con trazos rápidos. – Vamos a modificar el plan original, tenemos que derribar parte del muro de colindancia para comunicar el patio central con la cancha deportiva, podemos solicitar que envíen una motoconformadora para aplanar el terreno y que nos presten unas jaimas, en cuatro horas habrá escuela. Abdalá preguntó. – ¿Puede revisar si hay en existencia apisonadoras manuales? Froiem lo vio de soslayo, se inclinó sobre la máquina y tecleó con rapidez. – Cien, treinta de ellas en el campamento de Shati, a dos 288
pasos, parece que a nadie le interesan. – ¿Podemos ir por diez? – ¿Para qué quieres diez?, no podemos distraer a tanta gente y la motoconformadora está en Erez, la tendremos aquí en menos de media hora. – Tengo diez hombres sin empleo allá afuera, el callejón lateral no tiene tráfico a esta hora y puedo pedir telas prestadas a los vecinos, en la misma media hora es factible colocar un tendido en el callejón y las clases empezarán un minuto después; mientras tanto habrán llegado las apisonadoras y las jaimas, para el final del día estarán listas, se desmonta entonces el manteado y mañana las clases se dan en las jaimas, el trabajo no se atrasa porque no distraemos a nuestra gente en eso y diez familias tendrán algo que comer esta noche, ya mañana buscarán por otro lado. Wachowski se quedó pensativo, revisó de nuevo los inventarios, tomó el teléfono satelital para comunicarse a la brigada de Construcción de Escuelas, lo comunicaron directamente con el General Ben Shaul a quien explicó la idea, colgó, les indicó que había que esperar unos minutos para que el General consultara con su similar a cargo de los programas educativos; en cuatro minutos sonó el teléfono, Froiem asintió varias veces y se frotó las manos en cuanto colgó de nuevo. – Bueno, las ansias de conocimientos de niñas y niños podrán ser colmadas, Yehudá, te vas ahora mismo en la camioneta por las apisonadoras, vas a necesitar unos tres viajes más para traer las jaimas, que un par de los recomendados de Abdalá te auxilien, mientras los otros ocho colocan el tendido, en una hora llegarán pedagogos de la división Moisés para respaldar a los maestros. En cuanto a ti Abdalá, tus diez hombres tendrán trabajo por 289
más tiempo, en cuanto acaben aquí los llevaran a otra escuela, les pareció bien la idea de reiniciar las clases cuanto antes. Una vez que concluyas con el tendido en el callejón, realizas las modificaciones a los planos en el Autocad, no se te olvide o más tarde vamos a estar jalándonos los pelos por no saber dónde encajan los cambios. Los tres salieron a hablar con los maestros, cuatro hombres y una mujer que estaban sentados entre los niños, ellos y los pequeños alrededor empezaron a reír y a saltar, todos juntos fueron a tocar en las casas vecinas para pedir las telas. A media mañana llegó el General Ben Shaul a supervisar el avance, Froiem y él subieron a la azotea y desde ahí observaron la improvisada escuela del callejón. En grupos separados niños y niñas, ellas con hiyab, repetían a coro las enseñanzas de los maestros, los enviados de la división Moisés observaban en silencio. – Bueno, supongo que así eran las clases en Europa en el siglo XIX, no podés modificar todo en un día, ni en dos; vamos a lo nuestro David, es necesario cambiar de posición una de las jaimas para que no te entorpezca la construcción de la cisterna. ¿Cómo vez a Yehudá para quedar al frente de la obra? – ¿Y yo? – Calev enfermó, por eso me transfirieron la llamada, quizá no fue buena idea integrar a tantos ancianos decrépitos como yo al Shin Mem, algunos nos caemos al menor soplo del viento; te necesito como suplente de Calev, veo difícil que se recupere pronto, con el chubasquito de ayer casi le dio pulmonía, ¿cómo ves? Pasarás a general de brigada, ¿lo tomás?, no me mirés de esa manera, ignoro quién fue el gracioso que asignó 290
rangos militares a todo. Se justifica un poco porque cuando se trabaja bajo tanta presión es necesario que la línea de mando sea clara y expedita, que cada cual sepa a quién tiene que hacer caso y hasta donde puede tomarse atribuciones, aún con eso considero que se les pasó la mano, nada es perfecto. Al principio es molesto escuchar general para acá, general para allá, pero pronto te acostumbrás, tampoco es algo que duela. – ¿Puedo solicitar a Abdalá como asistente? – Mirá nene me la colocás complicada, balón alto para un delantero con marcaje; es musulmán, vamos a tener que cederles espacio con el paso del tiempo pero no estoy seguro de si es conveniente hacerlo tan pronto. Tomó el teléfono, se le quedó mirando, dudó en realizar la llamada, alzó la cara para ver a Froiem, observó desde arriba cómo Abdalá daba instrucciones a los operarios y encogió los hombros. – Asumo el riesgo, es uno de mis privilegios, hay que buscarle los dos asistentes a Yehudá; resuelve pronto y me alcanzás en Erez cuanto antes, estamos hasta ahora con ciento cuarenta y tres obras y antes de Shabat estaremos cerca de las quinientas, te aseguro que ni siquiera el Rey Herodes, el gran constructor, tuvo que afrontar tal cantidad de edificaciones al mismo tiempo… aunque claro, con una reconstrucción y un palacio le hubiera bastado para figurar en la historia como el grande que fue, y ya viste, vinieron a joderle la posteridad con el numerito ese de los primogénitos sacrificados, un burdo plagio de la Shemot. Tu brigada está a cargo hasta ahora de veintidós escuelas y esta tarde hay que echar un vistazo a la universidad, vamos a acabar locos… lamento que tengás que posponer tus proyectos de murales, te aseguro que habrá tiempo para que te pongás a pintar más adelante. 291
Cuando descendían se escucharon las risas de los niños en clase. – Esas risas valen todos los esfuerzos. – Se despidió Meir Ben Shaul.
292
XVIII
Los tres Dromedary aparcaron al sureste de Dayr al Balah, en el campamento beduino del clan Mafuz de la tribu Twara, frente a una amplia construcción rectangular de láminas de zinc; en la cercanía había otros cuatro cajones similares, entre ellas ramoneaban una veintena de camellos. Antes de descender del vehículo la Comandante Schneider murmuró disgustada. – Vaya con estos tipos, ahora me van a obligar a entrar a ese maldito sauna, desmontaron las jaimas de pelo de camello para que no imaginemos que son ricos, los seis Land Rover los ocultaron detrás de aquella duna, es claro que ignoran que los tenemos bajo vigilancia, ¿alguien tiene alguna idea de cómo tratar con sufíes? – Los sufíes son gente dedicada al estudio y la búsqueda de la paz espiritual, su vida gira en torno a la espiritualidad, incluso a través del contacto con el mundo mágico, pero no te confíes, los assasins también eran sufíes. Contestó Abramovicz. – ¿Quiénes? 293
– Los assasins, combatientes espirituales, una especie de monjes guerreros, la versión musulmana de los caballeros templarios, era tal su fervor por matar infieles que de su nombre derivó la palabra latina “asesinos”. – Está bien, no imaginás como me conforta saber que tengo que vérmelas con esotéricos y santos combatientes. ¿Tienes particular interés en investigar sobre grupos herméticos? – Nada de eso, hace tiempo cayó en mis manos un pequeño libro, Los Cuentos de Derviches de Idries Shah, retorno a su lectura cada tanto porque me intriga el sentido de algunas de las narraciones, no he logrado determinar del todo cuáles son herméticas y cuales ocultan tras su máscara de indescifrables la carencia de significado, es un juego personal, estoy seguro que si me acerco a preguntarle a un sufí me va a salir con que las que no logro entender es porque no estoy preparado para hacerlo, no soy un iniciado. Te esperan tus anfitriones, mazel tov. – Gracias, aunque el paracaídas que te pedí no abrió, tendré que improvisar, ¿todo bien con las dos cámaras Gove? – Perfecto, recuerda que el portafolios debe quedar dirigido hacia ellos por el lado donde tiene la pequeña muesca, fíjate bien porque apenas y se nota, la otra cámara es imposible distinguirla entre todas tus nuevas condecoraciones, nada más no le vayas a sacar un ojo a alguien con tanto metal colgando al frente. – ¿Insinúas que estoy tetona? – Nooo, cómo crees, ¿alguna vez preguntaste a alguno de tus múltiples pretendientes del colegio si recordaba el color de tus ojos? – No me fastidies, ya está ahí el comité de recepción, pobres de ustedes si no logran rescatarme a tiempo. 294
– Pobres de ellos si no lo logramos, mazel tov jefa. Jair Al Mafuz, patriarca del clan, esperaba a la puerta del galerón de chapa de zinc, acompañado del Mulá Sufí Abdel Alim y del patriarca de los clanes Twara en Israel, el anciano Hadi Al Mu’tassim, además de otros tres prominentes miembros del clan Mafuz, todos vestían kibrs de seda encima del thawb y charlaban entre ellos en badawi, lengua extraña para la Comandante, en cuanto ella se acercó los saludos fueron en árabe, al igual que el resto de la charla. Tras las prolongadas salutaciones penetraron a la precaria edificación qué, como Daniela temía, tenía una temperatura interior superior a la del exterior, se sentaron sobre mullidos cojines en torno a una hermosa alfombra pakistaní, al fondo estaba encendido un enorme televisor de plasma al que nadie miraba, su sonido se escuchaba como un lejano rumor. Le sirvieron una pequeña taza de espeso café con cardamomo y mucha azúcar, al celebrarse la reunión a media mañana no habría almuerzo, el prestigio de anfitriones de los beduinos fue asumido con una profusa variedad de baklavas – primero me achicharran en esta caseta de metal y ahora vienen a perjudicarme la dieta, estos dulces son deliciosos – pensó la Comandante. Cuando esa mañana el Comando Central recibió el aviso de que el clan Mafuz deseaba rendirse se revisó la etiqueta para las relaciones con los beduinos, la primera regla marcaba que el trato debía ser entre hombres, el Capitán General indicó que sería rota, si sus deseos eran sinceros tendrían que aceptar a una mujer como interlocutor para negociar las condiciones, era hora de dejar de lado las consideraciones ante los complejos ceremoniales de las negociaciones con los árabes. En principio la reacción fue de 295
ofensa, pero al no haber ninguna muestra de interés por la parte israelí volvieron a comunicarse con la exigencia de que fuera una persona de alto rango, aceptaron cuando se les mencionó que sería la comandante que aparecía en televisión, para ellos no era grave que ella hubiera ultimado a un militante de Hamás, se trataba de un chiíta. La nueva andanada de saludos, agradecimientos e invitaciones a degustar de las baklavas y el café le parecieron eternos, cada punto del acuerdo requirió de intensas discusiones, en algún momento ella descubrió que el Mulá veía de manera insistente el portafolios y optó por abrirlo para mostrarles las hojas del borrador de los términos de rendición, eso relajó un poco la tensión, quizá temían que se tratara de una bomba. Tras hora y media aceptaron entregar sus armas a cambio de la libertad de tránsito entre Gaza e Israel y la promesa de respaldo legal para el trámite de pasaportes israelíes, sin garantizarles que pudieran obtenerlos. Fueron firmes en su negativa a establecerse en una de las ciudades del Neguev creadas por el Gobierno, ellos eran nómadas, no podían permanecer demasiado tiempo en el mismo lugar; la confusión que más tarde alcanzaría proporciones legendarias surgió cuando preguntaron por enésima vez sobre las facilidades para mover sus campamentos una vez que la liberación de la Franja de Gaza hubiera concluido. – Este es un día de alegría para nosotros, sus palabras son luz en nuestros corazones Comandante Syeider, ponemos de testigo a Alá, Infinita es Su Gloria e Inmensa Su Misericordia, ante su promesa de que no habrá más murallas que nos atrapen, porque, disculpe que lo mencionemos de nuevo, ahora nos sentimos ahogar, llevamos cinco años sin poder 296
salir de Gaza, desde que esos infames de Hamás, el Profeta los maldiga y escupa sobre sus tumbas, se hicieron con el poder por medio de malas artes. –En el Shin Mem sabemos que los muros no sirven, emigrar, moverse de un lado a otro es parte esencial de la naturaleza humana, es un atributo común a todas las especies animales. Las aves vuelan de un continente a otro porque necesitan protegerse de las variaciones climáticas en los cambios de estación, eso favorece a sus ciclos reproductivos, lo mismo ocurre con los peces, las personas nos movemos con más lentitud pero tampoco soportamos estar siempre en el mismo lugar; no hay pared, por alta y resguardada que esté que pueda detener a la marea humana, desde el derribo de las murallas de Jericó sabemos que no hay barreras infranqueables. – En seguida soltó una cita, al momento que la decía algo en su interior le avisó que estaba entrando a un terreno peligroso, pero era demasiado tarde, más valía soltar la cita completa. – “¿Eres de los nuestros o de nuestros enemigos?… Cuando el shofar suene todo el pueblo prorrumpirá en un gran clamor y el muro se vendrá abajo”… Los seis beduinos se vieron a los ojos una y otra vez, confundidos, el patriarca Jair carraspeó un poco antes de hablar, con la mano temblorosa se sirvió café y lo tomó de un trago, se había quedado con la boca seca, estaba pálido, minúsculas gotas de sudor perlaban el extremo de su prominente nariz. – Comandante Syeider, no comprendo, alguna vez hemos estado en Jericó pero no pusimos atención, no nos hemos percatado de nada de lo que menciona, no sabemos nada de las murallas derribadas; nos conmueve que algo tan horrible le haya sucedido a la más antigua de nuestras ciudades, 297
nuestra de nosotros y de ustedes, por supuesto, y… de quienes la habitaron antes de… que ustedes… que Alá con Su Inmensa Sabiduría me ilumine y coloque la verdad en mis labios, ¿no creerá que tuvimos algo que ver? En el Cuartel General, Naftali estalló en carcajadas y el Rabino Baruch mesó su larga barba, todos los ojos atendieron las borrosas imágenes de las microcámaras que llevaba Daniela consigo, el audio estaba limpio, cada palabra se escuchaba con claridad, desde uno de los Dromedary captaban el diálogo con un micrófono teledirigido. –Patriarca, por favor, le pido sinceras disculpas, he cometido un grave un error. Existe una terrible confusión, Mulá Alim ¿puede brindarme su generosa ayuda? Daniela se debatía entre retener la risa y asumir la pena por su desafortunada derrapada verbal, buscaba desesperada como subsanar el error. – Comandante Syeider, conozco a todos los Mafuz, son mi gente, son mi pueblo, fueron de los primeros en adoptar el sufismo generaciones atrás, los padres de sus padres eran sufíes, es grande su temor de Alá, Bienaventurada sea Su Gloria, debe confiar en ellos, créame, son incapaces de participar en una atrocidad como la que usted menciona, cada piedra de Jericó es sagrada para nosotros. Daniela veía las caras de cada uno de sus anfitriones y continuaba explorando en su interior la forma de salir del embrollo en que se había metido, a la vez imaginaba lo divertidos que estaban los integrantes de su comando disfrutando del aprieto en que se encontraba, ignoraba las carcajadas y caras de angustia en el mando central; en otro cuartel, el de la división David, el general Mordechai Mesel se mordía los nudillos desesperado mientras repetía – Daniela, 298
por favor, Daniela, por favor. Daniela miró a los ojos al patriarca de la tribu y bajó de inmediato la mirada, en señal de respeto, él habló en voz apenas audible. – Comandante Daniela Syeider, heroína de esta gran liberación y mujer comprensiva y compasiva, con su inteligencia y arrojo supera a muchos generales a pesar de ser hembra, es una lástima que Alá, con su Poder Infinito, no le haya concedido el ser hombre, cada atardecer pediré en mis oraciones, mientras tenga vida, que la proteja y multiplique su descendencia. Yo, Hadi Al Mu’tassim, humilde patriarca de la tribu Twara, descendiente directo del Sheik Fawzi Al Suleiman, anciano hombre de fe, amigo eterno e incondicional del pueblo de Israel y de usted, le aseguro la inocencia de nuestro pueblo, expongo mi honra por los Mafuz, clan de prestigio y posición, fiel a las enseñanzas del Profeta; sin embargo entendemos que el daño está hecho. ¿Desea usted que contribuyamos a reconstruir las murallas de Jericó? Aquí están nuestras manos, aquí está nuestro sudor, con la misma habilidad que guiamos camellos podemos amasar el barro, desbastar las piedras. Trabajaremos hasta que el sol nos doblegue, díganos qué quiere de nosotros, todos los clanes Twara trabajaremos con ahínco para que el pueblo de Israel vea que puede confiar en nosotros o, mejor aún, permítanos participar en la gran batalla que habrá mañana en Khan Yunes, el último intento de resistencia de los cobardes sediciosos, queremos empuñar las armas del lado de ustedes como una forma de refrendar nuestro pacto. Todos los presentes movieron la cabeza en señal de asentimiento, la Comandante casi se desmaya con la propuesta y la noticia de la batalla que se preparaba, iba a 299
decir algo cuando se escuchó que tocaban a la puerta. Chaim Govesenzky entró haciendo unas extrañas genuflexiones ante los líderes beduinos y se disculpó. – Les pido que perdonen mi atrevimiento por irrumpir en esta importante reunión, pero ha surgido una emergencia, el General Mesel necesita hablar urgentemente con mí superiora, ella saldrá un par de minutos y en seguida retornará con ustedes. Daniela sonrió lo mejor que pudo, apuró la quinta taza de café que le habían servido y se incorporó con dificultad, tomó el portafolios y caminó de prisa hacía el Dromedary, al subir cerró la puerta, en cuanto se sintió a salvo exclamó. –Por si no fuera poco con el embrollo, me estoy orinando. – Atendió el teléfono satelital, todas las miradas estaban atentas a su rostro, aún las de sus anfitriones, que observaban desde la puerta, ella pasó del blanco al rojo y de ahí su piel recobró poco a poco el color normal, finalmente dijo – Entendido. – y colgó. Cerró los ojos, respiró profundamente y dijo en voz alta – Espero que mi vejiga aguante el último round. Caminó despacio hacia donde se encontraban los beduinos, entró nuevamente al caluroso espacio de reunión y se acomodó de inmediato, una vez que todos estuvieron listos informó sin preámbulos. – Tenemos una emergencia en Gaza, por eso me llamaron, lamento mucho tener que retirarme; aproveché la llamada para informar al General Mesel de su propuesta y me pide que les transmita su inmenso agradecimiento por la información y sus intenciones, la noticia que ustedes amistosamente nos compartieron confirma nuestros datos de Inteligencia… con respecto a lo de participar en la batalla… estamos muy agradecidos con su ofrecimiento, confiamos plenamente en su 300
clan y por esa razón modificaremos el acuerdo original, podrán conservar las armas hasta que la liberación de Gaza haya concluido, de esa manera les permitimos protegerse ustedes mismos, sin menoscabo de la vigilancia que les ofrecimos. Sin embargo consideramos que no es prudente que participen en las acciones de mañana, esa acción podría ser considerada como un acto de traición por parte de los otros fieles del Islam y no queremos causarles problemas en el futuro, nos queda clara su nobleza y su lealtad para con el pueblo de Israel. Si aún tienen dudas o no están del todo conformes con lo que les proponemos, pueden volver a analizarlo con el Coronel Silbersatz, el segundo al mando de la brigada Bar Kojba, que estará aquí en unos minutos… con enorme pena les pido que me disculpen pero me requieren con urgencia en la Comandancia, en cuanto el Coronel llegue tendré que partir. Insisto en pedirles que disculpen mi descortesía, comprendan que soy una militar y obedezco órdenes, con gusto me quedaría a disfrutar de su hospitalidad. Los minutos se le hicieron eternos, en cuanto arribó el coronel lo presentó con amabilidad extrema pero sin permitir que sus anfitriones tomaran la palabra, para abreviar el trámite, en cuanto consideró cumplido el protocolo salió casi corriendo y dejó al Oficial con los beduinos; los tres vehículos arrancaron tan rápido como ella abordó, ante la curiosa mirada de los integrantes de la escolta del Coronel, dos minutos más tarde se detenían tras la discreta protección de las dunas, colocaron los Dromedary en triángulo y todos voltearon hacía el exterior para brindar un mínimo de privacidad a su superior. En cuanto volvieron a partir se escucharon risas abiertas. 301
– ¿Por qué no aclaraste el malentendido? – preguntó Chaim Govezensky. – Me lo prohibió el alto mando, consideraron que sería una afrenta imperdonable, no puedo creer el lío que armé por sacar a relucir la única cita de la Torá que recuerdo. En el cuartel general el Rabino Baruch reprendía cortésmente al Teniente General Mostovich. – Naftali, no es sana la risa que proviene de la burla. – No me burlo de ellos, me hace reír la situación. Ellos jamás han leído la Torá, su único referente es El Corán, así que no podemos considerarlos ignorantes, no están obligados a saber sobre lo que les es ajeno, a pesar de eso no deja de ser divertido el lío en que se metió la Comandante. La confirmación de la llamada batalla final ensombrecía el panorama, los planos y vistas aéreas de Khan Yunes y Bani Suhela eran revisados centímetro a centímetro, desde diferentes puntos la información fluía para armar el rompecabezas que implicaba el plan de resistencia final de los grupos islámicos, alguien había logrado lo que parecía imposible, poner de acuerdo a casi cincuenta facciones armadas.
302
XIX
La noche del miércoles era de un extraño nerviosismo, las fiestas se prolongaban, la gente permanecía en las calles aunque era casi la medianoche, aún los niños, como si nadie quisiera dormir ante la posibilidad de que al otro día las cosas volvieran a ser como antes; en ambos bandos los mandos mantenían en absoluto secreto la batalla que se esperaba para el jueves, lo que no impedía que todo el mundo estuviera enterado. La principal sorpresa del desarrollo del operativo fue la aceptación de la nueva situación por parte de la mayoría de la población, estaban hartos de las imposiciones absurdas del Hamás, de su incompetencia a la hora de dar respuesta a las necesidades mínimas en servicios como agua, drenaje, electricidad y seguridad, de su intolerancia en cuestiones religiosas, en general la gente consideraba la presencia israelí como un mal menor, aunque en el fondo nadie creía el discurso de que en pocas semanas los propios habitantes de Gaza podrían decidir su futuro como territorio. La mayor Ofra Yaish en su tertulia explicaba que tantos meses de opresión y carencia habían rebasado el límite de 303
tolerancia de la gente. – Ya nadie sabía qué era exactamente lo que estaba prohibido, cualquier cosa que hicieras podía ser sancionada por un guardia menor de Hamás, si colocabas una mesa fuera de tu negocio para colocar la hornilla de los kebabs, era una multa, aunque hubieras estado colocando esa hornilla cada tarde durante los últimos treinta años, cualquier día ellos llegaban y te decían que a partir de ese momento estaba prohibido poner esa mesa ahí, al día siguiente prohibían que las niñas fueran a la escuela con hiyab de telas con estampados de flores, de la noche a la mañana modificaban la ruta de una línea de autobuses y una semana más tarde multaban al conductor por asumir los cambios que ellos mismos habían indicado, bailar y cantar se convirtió en un delito grave, barrios enteros se quedaban meses sin agua, pero tenían que seguir pagando la cuota del líquido. La gente veía con desagrado el reclutamiento forzoso de los jóvenes y la asistencia obligada de los adolescentes y niños a los campamentos de verano, centros de lavado cerebral disfrazados de espacios recreativos, la inoculación del odio era su principal objetivo, no la formación, prueba de ello es que varios campamentos juveniles montados por la ONU fueron incendiados por los esbirros de Hamás. – Pero ese odio no se va a borrar de la noche a la mañana. – Señaló Osher Goldfinger. – Por supuesto, todos nos ven con recelo, diluir eso requiere de mucho líquido y de bastante tiempo, debemos actuar con cautela; sin embargo observa, a unos cuantos metros de nosotros bailan y cantan familias enteras, ayer eso era un crimen, los niños corretean, se escuchan risas, date cuenta de cuantas mujeres están en pantalones y sin hiyab. Esta tarde fui 304
a comprar unos calcetines al Gaza Mall y descubrí con sorpresa que otra vez han colocado la ropa interior en los aparadores de las tiendas de lencería, a nosotros eso nos parece normal, pero estaba prohibido hace una semana. Por la mañana una anciana me mencionó al pasar “así era bajo la administración israelí”, así está volviendo a vivirse aquí, que porten burkha o hiyab las que quieran, es su derecho, pero que las demás se sientan con libertad de vestir como les venga en gana, que salga agua del grifo, que no tengas que rezar cuando oprimes el obturador de la energía eléctrica para ver si ahora sí enciende la lámpara, que los niños tengan escuelas dignas y parques donde jugar, que encuentres comida en las tiendas y puedas elegir libremente que tipo de bragas te puedes poner, sobre todo que exista una manera legal y productiva de obtener ingresos para resolver tus necesidades. La libertad de elección y la posibilidad de vivir en condiciones salubres es lo que provocará el cambio de actitud, en el video de los Osos Trogloditas es muy claro, los mismos niños que les arrojaban piedras más tarde jugaban futbol con ellos, no va a resultar fácil, pero la armonía es posible. Liat Kosch llegó a reunirse con el grupo. – Acaban de llamar, las unidades del sur llegaron a Dayr Al Balah, toda la playa está libre de minas, por el lado de la frontera Este está pendiente únicamente el área que cubre de Abasan Al Sair a Khirbat Ikhza’a, mañana a las diez de la mañana Gaza estará libre de minas terrestres, hemos retirado cerca de cuatro mil, aunque de esas aún resta detonar como mil seiscientas, tenemos saturados los robots. – A Shmuel le encanta hacer hoyos – dijo Osher – ¿Qué te parece Shmuel, cavar mil seiscientos hoyos? 305
– Basta con un hoyo Osher, pero hay que taparlo y destaparlo mil seiscientas veces, desconozco el límite de resistencia de la campana, tú dices ¿Traigo dos palas y vemos quién logra detonar más minas? – Olvídenlo – Intervino Ofra. – además del tiempo que llevaría el riesgo es alto, los marinos propusieron reunir todas las minas en un lugar y detonarlas juntas en una gran y colorida explosión, ellos han sacado más de dos mil minas flotantes, encontraron una carta marina con las zonas de peligro marcadas, la tenía el capitán del yate donde huían los líderes del Hamás, eso facilitó las cosas. Por desgracia en tierra cada facción colocó minas donde se le ocurrió, todavía podemos encontrarnos sorpresas. Vamos a descansar, mañana será un día muy largo. En el cuartel general el Consejo General revisaba una vez más los pasos a seguir, el plan de Hamás contemplaba un motín en la cárcel en Gaza, levantamientos en Gaza y Hebrón, lanzamiento de misiles desde Khan Yunes y en la fronteras desde Líbano, Siria y Egipto, además de un desembarco procedente de Libia, si todo funcionaba como lo tenían planeado, en un par de días varios países musulmanes tendrían pretextos suficientes para invadir Israel y dar un giro a la situación. Zvi Bartomeu levantó el rostro del mapa y dirigió la mirada hacía el Rabino Oheb Montefiore. – ¿Cómo dijo que se llama la batalla de mañana?, siempre me han parecido simpáticas esas denominaciones rebuscadas, tipo La madre de todas las batallas. – El esplendor del fénix. – Interesante, reconocen que los hemos dejado en las cenizas, 306
aunque me temo que la analogía más apropiada sea la cabeza de la Hidra, por cada grupo terrorista que el Mossad y el Tzáhal han puesto fuera de combate han resurgido tres, nuestra Hidra tenía ochenta y tres cabezas hace una semana, ¿cuántas tendrá en un par de meses?, ¿Oheb, cuál es la situación del Tzáhal para mañana? – De acuerdo con los datos que me proporcionó el Ministro Barak tienen un despliegue de situación de guerra, alerta máxima, todas la fronteras están protegidas y las costas resguardadas, Hebrón está cercada y casi vacía, los últimos líderes religiosos y cabecillas de grupos armados, al igual que los representantes de las organizaciones no gubernamentales, salieron esta tarde rumbo a Jordania y Siria por los corredores que se habilitaron durante los últimos dos días; permanecen algunos altos cargos militares para organizar el levantamiento y los demás confían en regresar cuando el país sea invadido, ante la inminencia de las acciones a nadie le pareció buena idea quedarse a integrar escudos humanos, sobre todo porque de acuerdo con sus planes el ataque procederá de ellos. – Y los barcos que vienen de Libia. – Venían, un portaaviones norteamericano los bloqueó, son cinco embarcaciones de mediano calado repletas de armas, con los puentes atiborrados de combatientes de diferentes países islámicos; fueron abordadas sin contratiempos, esta vez no les serviría de propaganda resistirse. Desde los barcos siguen emitiendo mensajes de que están en camino, aunque en realidad van a atracar en Chipre en unas horas, serán confinados en instalaciones de la OTAN, mañana la prensa tendrá con qué entretenerse. – ¿En realidad creían que podrían desembarcar? – No, su idea era enfrentarse con la marina israelí, armar una 307
escaramuza peor que la de la llamada Flotilla de la Libertad, recuerdan, cuando infiltrados de Al Qaeda agredieron a los marinos israelíes con cuchillos y palos en el momento que estos abordaron el barco turco. En esta ocasión pretendían dar un pretexto a la intervención de otros países, las naves tienen banderas de Libia, Irak y Líbano, hundirlas o abordarlas hubiera sido una declaración de guerra, por fortuna Washington ofreció hacerse cargo del asunto en aguas internacionales, muy lejos de nuestros puertos y con un despliegue de fuerza tal que los convencieron de rendirse, la otra alternativa que tenían era dormir esta noche en el fondo del Mediterráneo. – General Aharon, qué informes tiene de Hebrón, de nuestra gente. – Tenemos localizados siete arsenales, todos en edificios habitados por civiles, en cinco de los casos tenemos previstos operativos de evacuación; en cuanto estén vacíos los haremos explotar, estimamos poder realizarlo a las 0530, todos al mismo tiempo, les vamos a arrebatar el primer paso. Los dos polvorines restantes están en una zona céntrica, es imposible evacuarlos sin que se den cuenta, el plan es que una vez que exploten los otros cinco nuestro comando penetre en la ciudad y tome por asalto los restantes, para las 0800 no tendrán donde abastecerse de munición. – ¿Cuál es el riesgo? – Extremo, para poder realizar las evacuaciones tenemos que neutralizar o eliminar a los guardias, además en tres de los casos es preciso desalojar también a los ocupantes de los edificios vecinos, va a resultar complicado tener un control absoluto de la operación, tenemos que realizarlo en quince minutos para que el Tzáhal no alcance a impedirnos actuar, esa 308
zona está bajo su vigilancia y hay que guardar las formas. Los escuadrones Aleph coordinarán las evacuaciones, colocarán a los civiles a resguardo y retrocederán, los escuadrones Bet se encargarán de los guardias, detonarán los arsenales e igual desparecerán tan rápido como llegaron, en Adora tendremos helicópteros esperando. Al momento de las explosiones el Rabino Montefiore informará por teléfono al Ministro de Defensa la ubicación de los otros dos arsenales, así queda clara la responsabilidad del Shin Mem en las cinco explosiones, en caso de que la llamada sea interceptada. – ¿Ehud Barak aún no está enterado? – Sí, por supuesto que está enterado, pero quiere protegerse la espalda lo más posible, de cualquier manera esta tarde ordenó la situación de tanques del Tzáhal para cubrirnos la retirada. Informó el Rabino Montefiore. – Entiendo. Cómo será el operativo en la cárcel, General Munhos. – En el pabellón de condenados a muerte hay catorce acusados de colaboración con Israel, cinco culpables de vender tierras o hacer negocios con judíos, tres homosexuales y dos asesinos. En las otras galeras hay novecientos presos, de los que sesenta y tres están en proceso por colaboracionismo, los demás son ladrones, traficantes de drogas, militantes de facciones enfrentadas a Hamás, comerciantes y campesinos que se negaron a pagar impuestos, una cuarta parte están bajo el control directo de mafias afines a Hamás; según los estudios preliminares más de la mitad podrían ser inocentes, pero se consideró arriesgado realizar una liberación masiva, vamos a revisar los expedientes partir de la próxima semana. Los presos que están en el complot fueron provistos de ganzúas, cloro y aceite por algunos de los custodios que 309
mantuvimos en sus cargos, no podíamos asumir de la noche a la mañana el control de una cárcel desconocida, por eso conservamos un segmento de la estructura anterior, cincuenta, de los cuales veintinueve estaban implicados en el plan del motín: los hemos detenido; por ellos sabemos que pretendían incendiar el pabellón de los condenados a muerte y las cuatro celdas donde están apiñados los colaboracionistas, a las 0530, al mismo tiempo desde el exterior planeaban abrir un boquete en el ala oeste y entregarles armas llevadas hasta ahí en un camión de transporte de verduras. En medio del levantamiento la mayoría de los implicados escaparía de la cárcel para unirse a células de diferentes grupos a fin de generalizar el caos en la ciudad de Gaza. Ese es su plan ultra secreto, uno de nuestros espías lo escuchó con lujo de detalles en un café del shuk y fue confirmado por los custodios detenidos. Nuestra respuesta entró en marcha hace tres horas, en este momento la mayoría duerme con placidez, el humus de la cena contenía una buena dosis de narcóticos, se disimuló el sabor agregando más comino y tahini. A las 0200 serán evacuados con el máximo sigilo los condenados a muerte, los dos asesinos serán llevados a nuestra cárcel en el norte y los demás serán liberados, inmediatamente después en la prisión se esparcirá gas somnífero como precaución extra, a las 0300 un grupo de camilleros se llevará al campamento de Shati a los presuntos colaboracionistas para liberarlos en cuanto abran los ojos, los demás despertarán alrededor de las nueve de la mañana con dolor de cabeza, sin armas, ganzúas ni sustancias incendiarias y con custodios nuevos, nos brindó apoyo el sistema penitenciario israelí. En cuanto al camión de verduras, misteriosamente le cayó 310
azúcar al tanque de gasolina; está aparcado a diez kilómetros del penal, cuando vaya a la mitad del camino el motor colapsará, hasta ese momento detendremos al conductor y sus acompañantes, queremos saber si en su ruta pasa por alguien más o establece algún contacto. Hasta este momento han sido desintegradas quince de las diecinueve células que participarían en el levantamiento en la ciudad de Gaza, en el transcurso de la noche serán desactivadas las demás, la ayuda de los beduinos y de los informantes ha sido clave en este operativo. – Setenta y siete colaboracionistas detenidos, ¿acaso se ha relajado el sistema de reclutamiento del Mossad? – No, no se ha relajado una micra, los espías del Mossad en Gaza son cinco, colocados en sitios estratégicos, únicamente uno de ellos está en prisión y no porque lo hayan capturado, su misión era estar ahí unos meses, se hizo detener por robo menor, aún no hemos descubierto como envía la información de lo que capta. Los acusados de colaboracionismo son inocentes, fueron detenidos a consecuencia de la paranoia de Hamás, a cualquiera que sorprendían tomando una Fizzy Bubbleh lo consideraban traidor. – Ya veo. ¿Y en Khan Yunes General Modigliani? – Tenemos localizados los cuatro emplazamientos desde donde pretenden lanzar los misiles, su hora de inicio es la misma, las 0530, tres minutos antes cuatro escuadrones de aviones Herón se encargarán de que ni un solo misil sea disparado, esta vez no recibirán del cielo humo púrpura sino fuego real, el riesgo de daño colateral es bajo. Con respecto a los arsenales tienen ocho, cada uno corresponde a grupos diferentes, las armas y calibres son incompatibles en la generalidad de los casos, sus reservas 311
corresponden a la décima parte del armamento que había en Gaza el sábado pasado; el resto está en nuestro poder o ya lo hicimos explotar. Ese armamento sería insuficiente aún si estuviera homologado, van a tener que cuidar muy bien cada disparo. Nuestra respuesta la esperan por el norte, es donde tienen sus posiciones más fuertes, por esa área tendremos un ataque de distracción a las 0545, con seis pelotones, al mismo tiempo doce pelotones arribarán por el sur, tres por el oeste y seis por el este, desde esta tarde tenemos el control total de la salida al mar. Sus fuerzas fluctúan entre quince y veinte mil fedayines a los que vamos a enfrentar con la mitad de la brigada Bar Kojba, la cuarta parte de la brigada Jericó y otra cuarta parte de la brigada Sansón, en suma un tercio de la división David, elementos de las divisiones Esther y Tobit apoyarán en el suministro de alimentos y en la atención médica, en total veinte mil elementos, si las cosas se complican tendremos lista una retaguardia de diez mil. En el norte los grupos islámicos han colocado un escudo de civiles para cubrirse, las brigadas del este y oeste actuarán como cuñas para separar y proteger a los civiles, las integrantes de seis escuadrones vestirán shador negro para confundirse con la población e impulsar la salida de civiles antes del inicio de las acciones. Esperamos para las 0645 haber volado cinco de los ocho arsenales, en cuanto esté libre de civiles cada zona, los tres restantes caerán cuando cese el fuego, no tenemos posibilidades de hacerlos estallar sin poner en riesgo a los civiles. Para las 0700 se darán cuenta de que están solos, no habrá desembarco, ni motín en la cárcel, ni alzamiento en Hebrón, ni 312
misiles desde ningún lado. – Cómo sabe esto último. El Rabino Montefiore alzó la mano con picardía. – Se lo comenté al General Modigliani antes de que iniciáramos, el Mossad tiene localizadas diecisiete bases de lanzamiento de misiles en Siria, en Líbano y en el Sinaí, estallarán espontáneamente a las 0527, Israel no pretende reivindicar esas explosiones, ni aceptara ninguna responsabilidad…de cualquier manera es difícil que esos países reclamen que en su territorio explotaron bases de misiles apuntados contra Israel; desde Entebe esta es la mayor operación israelí en el extranjero. – ¿Creen que obtengamos una rendición? Naftali Mostovich dio una palmada en la mesa. –Ni soñarlo, hemos arrinconado en Khan Yunes a los más torvo de los movimientos islámicos en Gaza, asesinos duros, insensibles, además saben que si se rinden se enfrentan a la venganza de la población a la que tanto han fastidiado, recuerden lo que les pasó a los tontons macoutes en Haití a la caída de Duvalier… fueron linchados; estos van a pelear hasta el final, el riesgo para nosotros es que el número de bajas enemigas puede ser muy alto y entonces la prensa internacional se nos va a venir encima. Nuestra prioridad debe ser proteger a los civiles, vamos a tener horas de lucha casa por casa, Khan Yunes no va a caer de tajo, lo tenemos que ganar con precaución extrema y pese a eso me temo que nuestras bajas serán de más de uno; pero también tenemos que ahorrarles bajas a ellos, eso es lo que va a resultar más difícil, cómo evitar matar a quien está enfrascado en una lucha a muerte. – Les propongo que oremos unos minutos y tratemos de 313
descansar un poco, la última batalla será agotadora. Propuso el rabino Baruch. – La última batalla en Gaza. Precisó Zvi Bartomeu. Cuando se dirigían a la sala de oración llegó un mensaje, bajo fuertes medidas de seguridad el presidente de la Autoridad Nacional Palestina y sus principales ministros habían abordado el vuelo nocturno a Paris en el aeropuerto Reina Alia de Amman, en Jordania, compraron únicamente boleto de ida. – Van a montar el gobierno en el exilio mañana mismo, están dando Gaza por perdida y de paso Cisjordania. Comentó Naftali con emoción en la voz. – No debemos confiarnos, puede tratarse de una jugada de distracción… vamos a tener dificultades para conciliar el sueño esta noche. – Ellos también. – No lo creo, acostumbran viajar en primera clase, la cena incluye champaña y galletitas con foie gras, eso siempre relaja. – De qué te quejas, nosotros acabamos de cenar falefel y Malti, no tenemos nada que envidiarle al menú de Air France.
314
XX
El Comandante Shmuel Friedman despertó alrededor de las cuatro de la mañana, estaba empapado en sudor a pesar de que la temperatura había disminuido quince grados durante la noche; en ese momento soplaba una suave brisa procedente del Mediterráneo, la primera desde que había iniciado el operativo. Hasta su tienda en el campamento en Tel Ridan llegaba el rumor de las olas, se sentó en la orilla del catre de campaña y se puso a hilvanar sus ideas a partir de lo que había soñado, tenía que ver con una cinta de vaqueros, una de las tres películas que había visto en su vida, – Puede ser – se dijo a sí mismo. Se asomó por la pequeña ventana al costado de la cama y notó que afuera aún estaba oscuro, no obstante consideró que era mejor empezar el día de una vez; en la jofaina realizó las abluciones rituales, alzó ambas piernas del pantalón para colocarse las rodilleras de protección, se calzó las botas altas con plataforma aislante y plantillas de micro membrana que mantienen ventilada la planta de los pies, las vainas laterales de los fustes estaban vacías, ningún jaredí había aceptado 315
llevar dagas ocultas, se enfundó el caftán negro con forro térmico antibalas y chip localizador, y se caló el biber hit de alma metálica, acomodó con las palmas de las manos su larga barba oscura, acomodó también la caída de los tzitziyot a los costados por encima del cinturón, besó su libro de bolsillo de alabanzas y lo colocó en la bolsa interior del bekishe, su aspecto era imponente, se veía más alto y más robusto de lo habitual. Al salir de la carpa decidió dirigirse a las oficinas de la brigada para ver si de casualidad encontraba a alguno de sus superiores, con tanta tensión alguno debería estar despierto; en el camino notó que había luces encendidas en la biblioteca, entró, se encontró al Coronel Ahuv Guilam, subcomandante de la brigada, quien estaba enfrascado en un grueso volumen. – Buenos días Coronel, pensé que aquí nada más tenían Ebooks, con tanto derroche de tecnología por donde quiera no imaginé que siguieran utilizando los arcaicos textos impresos en papel. Le comentó al Coronel tras saludarlo en un intento de pose marcial. – Tenemos algunos miles de ejemplares en papel e incluso algunos rollos de temas religiosos en pergamino kosher, aunque los brigadistas han convertido esto en aparcadero de equipo electrónico, observe ese estante, casi mil tabletas y laptops nada más de los voluntarios de este campamento, debe haber una seis máquinas por cada diez elementos, si la cifra no aumenta es gracias a ustedes que mantienen una sana distancia con la modernidad; esta es la primera vez que se asoma por aquí, ¿cierto?, a ustedes les basta con un libro, o con tres si hemos de ser justos. Pero este ejemplar no es de la biblioteca, – alzó el libro con las 316
dos manos para mostrárselo – es uno de los tomos de mi acervo personal, uno de los que me acompañan a todos lados en un pesado baúl que ha despertado la animadversión de mis asistentes. – En cuanto acabe de entender el verdadero significado de la Torá, del Talmud y del Zohar le prometo leer otro libro. – Algo me hace sospechar que no será en esta vida Comandante, si pretendiera entender el verdadero significado de todo lo que leo, todavía estaría releyendo El Principito. Shmuel simuló una sonrisa para disimular el impacto y contuvo sus deseos de devolver el golpe, buscó cómo suavizar la charla. – ¿Y qué es lo que lo tiene despierto a estas horas? – El tomo VI de la Anábasis de Alejandro Magno, de Flavio Arriano, el estudio más antiguo con que contamos de lo que fueron las campañas de Alexander Mokdon, las fuentes en las que Arriano se basó desaparecieron en la marea de los tiempos, incluidos los textos de Calístenes, el sobrino de Aristóteles, y la biografía escrita por Ptolomeo, una verdadera tragedia. – Y lo está leyendo en griego, sí, no necesito ser un experto para darme cuenta de que esos no son caracteres latinos, omega, creo que debí poner más atención a la clase de etimologías griegas y latinas en la escuela, no recuerdo nada más allá de omega y épsilon. Mmh, ahora descubro que hablaban de usted, alguien comentó del oficial que instrumentó el uso de estrategias griegas de combate como la formación de falange, una idea un tanto perversa para una brigada integrada por jaredim, por más que provenga de uno de los más importantes helenistas israelíes, ¿no le parece? – Alejandro fue muy respetuoso de las culturas de los pueblos 317
que conquistó, él no podía imaginar lo que los seleucidas harían cien años más adelante, lo que sí es perverso es mantener latente un odio durante dos mil trescientos años, nadie debería odiar tanto. La profanación de los sitios sagrados ocurrió dos mil años antes de la existencia del primer jasid, además ustedes no toman en cuenta que la recuperación del Templo fue posible gracias a la circunstancia de que los seleucidas tenían que mantener su dominio sobre un territorio inmenso y con frecuencia actuaban en varios frentes al mismo tiempo, en esta zona estuvieron bajo la presión constante de la última dinastía de faraones egipcios, la ptolemaica, que también era de origen macedónico. – Las explicaciones racionales terminan por negar la Presencia Divina… – De ninguna manera Comandante, la Presencia Divina está en todo, es el origen de la razón misma. Esta noche, antes de venir a estudiar este texto, contemplé con la lupa un almacigo que preparé de forma rudimentaria la noche en que iniciamos las acciones, planté un par de semillas de lima dentro de una lata vacía de soda a la que quité la tapa superior con mi navaja y rellené de tierra, en cuatro días asoma ya una minúscula puntita verde en medio del oscuro sustrato, mide menos de un milímetro, dentro de un par de semanas esa planta tendrá un centímetro y para el próximo Tu Bishvat, dentro de ocho meses, alcanzará la altura de mi rodilla y podré trasplantarla en algún campo de Gaza, dentro de cuatro o cinco años podremos cosechar los primeros frutos. Eso es tan sólo una pequeña muestra de la grandeza del Creador, de una pequeña semilla obtendremos miles de limas durante generaciones enteras; ¿No considera posible que de la misma manera pudo HaShem haber movido la mano de Lisias para que nuestro 318
pueblo recuperara la libertad religiosa?, aunque supongo que no vino usted a discutir conmigo sobre el periodo Macabeo, si es así le solicito que me permita posponer este diálogo unos días, porque a pesar de que se trata de un tema que me fascina, en unas horas tenemos que librar una batalla importante, ¿supongo que está enterado? Shmuel consideró que resultaría ridículo contarle su sueño, así que planteó la idea desde el punto de vista estratégico, el Coronel no pudo contener las carcajadas, se tuvo que levantar para sujetarse el estómago, que le dolía de tanto reír, de repente se detuvo y le sostuvo la mirada poco más de un minuto. – Suena a broma, si no fuera porque ustedes no acostumbran ir al cine diría que lo tomó de una vieja película de vaqueros, sin embargo es una idea viable, ¿dónde piensa encontrar tantos? – Jaziel me comentó de un lugar en Khirbet el-Adas, le llamó la atención la cantidad que había, si nos hacen falta más quizá nos permitan comprar otros en la parte egipcia de Rafah, si usted autoriza puedo ir a despertar al capitán tesorero. – No hace falta, podemos utilizar el fondo para emergencias, vamos a la oficina a llenar el formato y sacar el dinero de la caja de seguridad, le advierto que tenemos muy poco tiempo, Shmuel, tiene que comprometerse a estar listo para las diez de la mañana, de lo contrario la idea no sirve; llévese a su falange en el autobús, le daré la orden para el conductor. En lo que van en camino llamaré al Coronel Nefesh que está en Rafah para que le proporcione los camiones de carga que necesite, si no le alcanza este dinero le pide más a él, en cuanto esté listo me avisa para enviarle las coordenadas donde debe ubicarse, mantenga oculta su mercancía hasta que reciba la orden de 319
ataque; dispone de menos de seis horas, ¿cree poder lograrlo? El operativo en la prisión no tuvo complicaciones, los condenados a muerte fueron liberados, con excepción de los dos implicados en asesinatos, se reforzaron las medidas de seguridad y se nulificaron las posibilidades de motín. Durante el desayuno la mayoría de los internos presentaba síntomas parecidos a los de la resaca y era notoria la ausencia de los tipos duros, estos ocupaban las camas de la enfermería, sedados y sujetados a las barandillas de las camas. Lo mismo ocurrió con el levantamiento en Gaza, la ciudad amaneció en completa calma, el shuk reanudó su febril actividad desde el amanecer mientras miles de personas se afanaban en las obras de reconstrucción; la poca sangre derramada en altas horas de la noche había sido limpiada con esmero, las contadas armas que hicieron fuego tenían colocado el silenciador, los detenidos fueron neutralizados con sigilo y trasladados a la cárcel habilitada en el norte, bajo el amparo de la oscuridad. No hubo nada que perturbara el sueño de los tranquilos habitantes de la ciudad, ni siquiera los escasos trasnochadores percibieron nada extraño. A las 0528 las poblaciones libanesas de Chebaa, Kfar Chouba, Quazanni, Borj El Mouk y otros enclaves bajo control de Hezbollah recibieron el nuevo día con explosiones impresionantes que anunciaron la cercanía del amanecer e hicieron vibrar a los edificios cercanos en un radio de por lo menos un kilómetro, igual ocurrió en Siria, en las aldeas Khan Ar Ribah, Jabah, Kafar Nasej e incluso en Daraiya, en las inmediaciones de Damasco, y en las cercanías de Taba, en Ras el Masri y Ras el Barqa en la península del Sinaí en Egipto. Las 320
cuantiosas pérdidas en armamento y las bajas, sobre todo entre altos mandos, impidieron que hubiera contraataques inmediatos, habían quedado sin posibilidades de resistir una incursión israelí. En las cercanías de Akbarabad, en las montañas de Irán, estalló un depósito de uranio enriquecido que no se suponía que existiera, las imágenes satelitales recorrieron los despachos de la CIA, la ONU, la OTAN y el Kremlin, los países afectados guardaron un extraño silencio, no había evidencia del ingreso de tropas israelíes a esos países ni de vuelos que violaran sus espacios aéreos, oficialmente nada de eso había ocurrido. En el profuso intercambio de llamadas telefónicas entre jerarcas y mandos militares de países islámicos, ocurridas a lo largo de todo el día, fue notoria la preocupación por la existencia de aviones fantasma, naves que pudieran evitar ser detectadas por los radares y tuvieran el volumen suficiente para transportar grandes cargas explosivas, hasta donde todos sabían eso aún no existía. En Jericó, Junín, Nablus y Ramallah el Shabak aprovechó la ocasión para deshacerse de un buen número de arsenales del enemigo; en Hebrón las explosiones fueron cinco, simultáneas, las únicas realizadas por el Shin Mem fuera de Gaza, aunque noticieros de diferentes países les atribuyeron también las de las otras poblaciones de Cisjordania. Tras el silencio estremecedor que produjo la onda expansiva de las detonaciones, Hebrón se llenó del sonido de sirenas, multitud de alarmas se activaron, las ambulancias y patrullas policíacas generaron un caos de tráfico, las indicaciones que recibían de sus dirigentes incrementaron la 321
confusión, los mandos medios dictaban órdenes contradictorias y no quedaba en la población ninguna autoridad con la jerarquía suficiente para implantar el orden; en medio del desconcierto un destacamento de Shin Mem tomó por asalto la ciudad, cuatro pelotones se dirigieron hacía dos enclaves en el centro de la zona urbana, en ambos hubo resistencia armada, se establecieron cercos que impedían la huida masiva de los sitiados y durante diez minutos mantuvieron un asedio de fuego con francotiradores apuntando a blancos concretos, para proteger a los habitantes de los edificios; al final se permitió la evacuación de los civiles y los guardianes de los arsenales se rindieron, las cajas de armamento y munición de los dos polvorines fueron estibados a transportes militares, a los detenidos los condujeron a los autobuses blindados, la larga caravana se dirigió a donde esperaban los helicópteros en las afueras de Hebrón, en una especie de desfile que los niños festejaron con tal algarabía que hizo aún más evidente la expresión sombría de los adultos. Un pelotón del Tzáhal los esperaba, los combatientes del Shin Mem descendieron de los vehículos, entregaron las llaves de los mismos a los militares y subieron a las aeronaves, que despegaron de inmediato. La ciudad quedó rodeada por el ejército israelí, aunque las calles de Hebrón permanecieron bajo control de la policía de la ANP, que se mantuvo ocupada el resto del día afrontando pequeños brotes de violencia, los yihaidistas agotaron pronto los cargadores de sus armas, a media tarde dejó de escucharse el tableteo de las ametralladoras, los combatientes de las facciones árabes se habían quedado sin parque. En el resto de Cisjordania los comercios permanecieron cerrados, al igual que las escuelas, le gente había optado por 322
recluirse en sus casas hasta que pasara el peligro, nadie asomaba la nariz fuera si no era indispensable. Las acostumbradas marchas de la ira que por tradición formaban parte de los cortejos fúnebres, estuvieron ausentes en los funerales de los custodios de los arsenales que habían explotado, apenas y se reunieron unas cuantas decenas de militantes y familiares que acompañaron a las sandápilas; la huida de los dirigentes del gobierno en Cisjordania provocó una generalizada sensación de desesperanza. Sobre Khan Yunes volaron al amanecer ochenta y cuatro aviones no tripulados, su sombra bloqueó los rayos de sol sobre la aldea, esa prolongación de la penumbra de la noche provocó que los que empezaban a salir de sus casas regresaran a ellas tan rápido como sus piernas se los permitieron, tras sobrevolar la población doce veces, a modo de advertencia, arrojaron las bombas en los cuatro sitios donde estaban emplazados las baterías de cohetes con los que se iniciaría el Esplendor del Fénix, las explosiones siguieron una cadena comunicante con los almacenes de proyectiles y de combustible, cientos de misiles Qassam, Scud y Círít estallaron en pedazos en sus bases de lanzamiento y en los arsenales, el ambiente se llenó del olor a pólvora y a metal fundido. A las 0545 la Comandante Schneider se afanaba infructuosamente tratando de ocultar un enorme fusil FN– Mag bajo el shador negro que vestía, a su pesar tuvo que conformarse con un Tavor retráctil, un arma de alta eficiencia aunque sin la contundencia que le gustaba. Cuando cientos de figuras con shador negro abordaban los vehículos, a las 0615, llegó la contraorden: había que quitarse los disfraces, se 323
cancelaba la operación cuña. Tras las detonaciones del amanecer la población reaccionó, miles de mujeres la emprendieron a cacerolazos contra los muyahidines de las distintas facciones que integraban el frente de batalla, la inesperada rebelión en plena primera línea los obligó a replantear la estrategia, se vieron obligados a permitir la evacuación masiva de ancianos, niños y mujeres, la gente se negó a seguir siendo utilizada como escudo para proteger a los militantes de la Yihad. Grandes banderas blancas aparecieron en diferentes puntos de la aldea, en el crucero del norte de la población se reunieron representantes de los grupos islámicos y del Shin Mem para acordar una tregua que permitiera a los civiles abandonar Khan Yunes, cuando se les invitó a rendirse los muyahidines sonrieron con desprecio, aún ignoraban lo ocurrido en Cisjordania y los países vecinos. A partir del mismo cruce se instaló una larga valla doble de escudos de la brigada Jericó, los Osos Trogloditas, todas las personas eran escrutadas por los penetrantes ojos de los integrantes de la avanzada, al menor indicio de una anomalía enviaban sin pestañear el mensaje en clave y en menos de un minuto expertos en explosivos de la brigada Sansón retiraban de las filas al sospechoso, se detectaron hombres vestidos de mujer: desertores de los movimientos islámicos que de inmediato eran detenidos y enviados a la prisión en el norte para investigar sus antecedentes; mujeres que ocultaban armamento, extranjeros de las organizaciones no gubernamentales que trataban de colocarse a resguardo: desde el inicio de las acciones el gobierno israelí había instalado una sección especial en el aeropuerto David Ben Gurion para agilizar las deportaciones. 324
Cinco personas, dos ancianos y tres mujeres jóvenes, se acercaron con discreción a oficiales del Shin Mem para entregarse, traían instalados dispositivos explosivos en el cuerpo. Otros ocho candidatos a mártires fueron detectados por su actitud sospechosa, por segunda vez, desde que el movimiento había iniciado, se encontró un burro bomba, la cuerda con la que el asno era jalado le pareció demasiado larga a uno de los jaredim de la brigada Jericó. Resultó evidente que el lavado cerebral no había sido convincente, todos querían ser descubiertos, excepto el burro, que estaba un tanto extrañado por tanto jaleo, aceptó agradecido una paca de alfalfa que despachó mientras le retiraban los cartuchos de dinamita y los detonantes, pero cuando le despegaron la cinta adherida al lomo sacó a relucir su carácter, Osher Goldfinger estuvo cerca de ser alcanzado por una coz del animal y los rebuznos le ocasionaron problemas auditivos y jaqueca, le advirtió a la Mayor Yaish que al próximo burro bomba que encontraran lo iba a abandonar a su suerte. En el cuartel general Argoya Yarden hacía cuentas una y otra vez, cuatro ancianos, un burro y ocho mujeres. –Nos falta una, hay una mujer más con explosivos, que estén atentos, algo grave puede ocurrir. –Ahí Argoya, en la pantalla samej nun, debe ser ella, rápido que alguien lo comunique directamente a un oficial del frente. Exclamó nerviosa Valentina. Tres mujeres de la brigada Sansón rodeaban a una anciana que fue sorprendida cuando cargaba con dificultad un bolso de lona lleno de municiones, otra mujer cubierta con burkha corrió hacia ellas deteniendo en la mano derecha un cable con detonador que salía de su shador, el Comandante Moshé Amato se percató del peligro y gritó a las brigadistas que se pusieran a cubierto, tomó su 325
escudo por el frente para embestir a la suicida con la parte cóncava, la derribó y cayó sobre ella. El cuerpo de Amato cayó a quince metros del sitio de la explosión, la fuerza de la detonación le causó la muerte desde el primer instante; hubo veintidós heridos entre civiles que eran evacuados e integrantes del Shin Mem, la reacción del Comandante Amato había logrado salvar muchas vidas. En el cuartel general el Rabino Baruch se jalaba la barba mientras lloraba sin poderse contener, las palabras del Kadish se ahogaban en su garganta, Naftali acercó a él su silla de ruedas, con suavidad colocó su gruesa mano sobre el hombro derecho del Rabino y, para sorpresa de todos, entonó el Kadish con voz clara, grave – Itgadal veitkadash shemé rabá… – el Rabino recargó la barbilla sobre su propio pecho, cerró los ojos, empezó a tranquilizarse y en voz baja fue repitiendo las palabras de la oración que el viejo ateo más que rezar exhalaba con fuerza, cada palabra era un ahogado grito de dolor, un sonido que desgarraba el alma. En voz baja Zvi dijo a Valentina, – Tenemos que salvar a los otros seis, debemos avisarles. – con lágrimas en los ojos ella le respondió moviendo la cabeza de un lado a otro. – Ni siquiera lo pienses, seguimos un Plan Divino, no tenemos derecho a interferir. Es ahora cuando vos debes mantenerte firme, es justo en este instante cuando debes mostrar tu entereza, que el dolor no te obnubile… voy a ver a las niñas, les deben haber llegado los rumores de esta conmoción, estás sensaciones traspasan los muros más gruesos, no, no me acompañes, en este momento vuestro deber está aquí. La reacción del General Lumbroso Modigliani fue fría y determinante, cinco minutos después los ochenta y cuatro aviones no tripulados sobrevolaban de nuevo las posiciones 326
enemigas, la gente corría aterrorizada por todas la calles de Khan Yunes y Bani Suhela para ponerse a salvo, a las 0917 la tregua había terminado, tras veinte minutos de vuelos rasantes las naves volvieron al aeropuerto Yaser Arafat en Rafah, que desde esa mañana se encontraba de nuevo en condiciones de operar, si bien de manera limitada. El Consejo Supremo negó la autorización para lanzar más bombas, en medio del miedo provocado ningún muyahidín disparó contra las naves, las tres baterías antiaéreas y el medio centenar de lanzacohetes de que disponían permanecieron mudos, por la tarde se supo que los líderes yihaidistas habían estado enfrascados en una reyerta en ese momento, la decomisada televisora que operaba desde un día antes el Shin Mem, repetía cada diez minutos imágenes de los barcos capturados, las explosiones en Líbano, Siria, Egipto e Irán y de la captura de los cabecillas del levantamiento en la ciudad de Gaza, evidencia de que a la Hidra no le quedaba más que una cabeza y la estaban rodeando de espejos. Fathi Hamad, uno de los pocos líderes de Hamás que habían permanecido en Gaza, recomendó la rendición, los representantes de Al Fatah le llamaron cobarde y le espetaron su participación en el atentado en la boda del sobrino de Mohammed Dahlan, el jefe de la policía de la ANP, cuando cincuenta invitados resultaron heridos; en esa ocasión Hamás culpó a Yaish Al Islam de los hechos, por lo que también ellos insultaron a Hamad, un mulá de Ansar Jud Alá aprovechó la exaltación para gritar que la rendición era degradarse ante los perros de Satán, el martirio era la única vía para los verdaderos creyentes, en la trifulca Hamás perdió su menguado liderazgo y la facción cercana a Al Qaeda asumió el mando, que no el control, nadie podía siquiera intentar dirigir nada, la reunión se deshizo ante la 327
evidencia de que era más importante salir a hacer lo que se pudiera que seguir el alegato, a cada minuto el enemigo avanzaba y aumentaban las deserciones. Mientras se realizaba la evacuación varios escuadrones de la brigada Bar Kojba habían tomado posiciones, el de la Comandante Schneider ocupó una estratégica edificación de tres niveles en la Intersección Este de Khan Yunes, en la parte superior instalaron cuatro ametralladoras y los tres Dromedary custodiaban los accesos; mientras tanto el Comandante Machir había hecho lo mismo en el cruce que marcaba el centro geográfico de Bani Suhela. Otros cuatro escuadrones lograron avanzar sobre los invernaderos ubicados entre la ruta doscientos cuarenta y la ruta cuatro, la que corta a Gaza por la mitad a lo largo; desde el Sur también se había reducido la distancia, se iniciaba la ardua conquista del último bastión enemigo, aquí las cosas serían diferentes, extirpar el cáncer del terrorismo iba a requerir de una lucha cuerpo a cuerpo. Tras la retirada de los aviones las posiciones de Daniela y Machir se mantuvieron bajo asedio por espacio de una hora, hasta que recibieron el aviso de la comandancia de brigada, escuadrones procedentes de Abasan Al Kabir y Al Fukari estaban a punto de romper el cerco; la estrategia que ambos comandantes siguieron desconcertó a sus atacantes, hacían disparos esporádicos, tiro por tiro, contra quienes parecían ser los dirigentes y los que portaban lanza proyectiles, no permitieron que nadie empuñara un RPG dentro de su perímetro de alcance, los poco frecuentes disparos en ráfaga se dieron cuando trataban de acercarse a los Dromedary, las instrucciones a sus francotiradores eran herir, pero no matar, 328
el blanco principal eran los brazos, para inmovilizarlos. Una nueva llamada dio la alerta a Daniela, seis comandos de la escuadra Yod Pey estaban atrapados en un fuego cruzado, a ochenta metros de ellos, la Comandante observó la situación con los binoculares, dio la orden de cambiar cartuchos, seis combatientes cubrirían con ráfagas desde la altura mientras dos vehículos salían al rescate, desmontaron las puertas laterales para poder disparar con libertad desde el asiento posterior. En el Comando Central siguieron con atención la maniobra. – ¡Es una masacre! Exclamó conmocionado Levi Munhos al ver caer muyahidines a diestra y siniestra. – Observa bien lo que está ocurriendo, no realices conjeturas anticipadas. Le dijo Maskaram Masala. – Pues es lo que veo, acaso tus ojos te comunican algo diferente. – No estamos viendo lo mismo, tú ves cuerpos cayendo pero eso no significa que exista una matanza, no hay sangre, no los están liquidando, son balas de goma, esta mujer está loca, ellos sí que están utilizando balas de verdad y ella les responde con balas de goma, por qué no mejor les arroja bombones. – Maskaram, Maskaram, nunca has recibido el impacto de una bala de goma, esas cosas duelen, – intervino Lumbroso Modigliani – pueden llegar a matar, sobre todo si quedas debajo de una de esas ráfagas que están lanzando, si la Comandante hubiera lanzado ese ataque con balas de plomo entonces sí sería una masacre, cómo dijo Levi, pero de la manera en que lo está haciendo tiene el tiempo suficiente para 329
rescatar a sus compañeros con un mínimo de bajas enemigas; acabo de ver caer a uno bajo cinco impactos, no creo que pueda salir del todo ileso, no cualquiera sobrevive a eso por muy de goma que sean los impactos. En cuatro minutos despejaron el área, cuando los rescatados abordaban los vehículos llegó la nueva orden: los escuadrones de refuerzo estaban a tiro de piedra, era hora de iniciar la captura de enemigos. En cada Dromedary quedaron nada más el conductor y los tiradores de la torreta y el arma posterior, los demás descendieron, del edificio avanzó el tercer vehículo, cambiaron cartucheras nuevamente para la lucha en directo, a los que estaban heridos y los que se rendían los esposaban a la espalda con cinchos de plástico, los que resistían eran neutralizados con gas lacrimógeno, culatazos o disparos en las extremidades, la notoria superioridad numérica provocó la entrega masiva, los que aún se encontraban en las calles arrojaron sus armas al piso y alzaron los brazos, desde lo alto del edificio los francotiradores cubrieron la acción; cuando terminaban la captura arribó el grueso de los escuadrones que despejaban la zona, en varias casas asomaron banderas blancas e incluso aparecieron algunas banderas israelíes en los techos. Bani Suhela y el Este de Khan Yunes quedaron limpios, las cifras mostraban el éxito de la batida, únicamente tres milicianos muertos, catorce heridos de gravedad, cincuenta y cuatro heridos leves, mil quinientos ochenta y seis capturados, contra ocho heridos leves del Shin Mem. Antes de que llegara la brigada Sansón a hacerse cargo del lugar lograron interrogar a un puñado de fedayines, confirmaron la ubicación del arsenal principal, en la “Y” horizontal al sureste del núcleo principal de Khan Yunes, seis 330
escuadras tomaron esa ruta, la brigada Gabriel, aérea, cubría la marcha desde el aire, se extremaban las precauciones, las posibilidades de daños colaterales eran altas, la evacuación había quedado inconclusa tras la explosión de la mujer suicida. Mientras tanto en Jarara el Comandante Hobidiente Belinfante explicaba a unos niños el proceso de siembra de lechugas en un invernadero, estaba agachado removiendo un surco de tierra con un pequeño azadón, cuando escuchó un breve sonido metálico abajo a su izquierda, volteó y vio a Fuad, un niño de cinco años, a punto de alzar el pie con temor; se lanzó de inmediato sobre el pequeño y presionó con fuerza su pie hacia abajo, gritó que todos los demás salieran de inmediato del lugar, que corrieran lo más lejos posible. Buscó con la mirada algo plano y firme que le sirviera para oprimir el botón de activación, en una palangana cercana vio una cuña plana de metal, sin dejar de apretar con la mano derecha el pie de Fuad se estiró para alcanzarla, el niño lloraba por el dolor que le causaba Hobidiente al empujar con fuerza el pie hacia abajo; los dedos de la mano izquierda del Comandante quedaron a diez centímetros de la palangana, tomó un trozo de palo medio podrido y con él logró asir la ceja externa de la vieja vasija de plástico, deslizarla unos centímetros hacía ellos, repitió la operación seis veces, hasta que la alcanzó con los dedos. El sudor que le escurría por el rostro no le dejaba ver bien, con cuidado, temblando como si tuviera fiebre deslizó la cuña bajo la suela de la sandalia de Fuad, presionó hacia abajo el metal con ambas manos, entonces le dijo que corriera, que se encontrara con su compañeros, mantuvo oprimida la cuña metálica, adelantó la rodilla derecha para colocarla encima, 331
comprobó que no hubiera ningún vaivén, en cuanto se sintió seguro separó la mano derecha y tomó el teléfono satelital para solicitar ayuda: informó que la situación era atípica, la colocación de una mina terrestre dentro de un invernadero significaba que estaban protegiendo algo; colgó, miró a su alrededor y observo con alivio que estaba solo, no quedaba nadie dentro de la nave, entonces accidentalmente su rodilla resbaló… La nube de humo del plástico quemado ayudó a orientar a los vehículos de la brigada de limpieza profunda, a cincuenta metros del lugar encontraron un grupo de niños árabes que eran consolados por los agrónomos del pelotón de Hobidiente, les indicaron que se retiraran del lugar, iban a explorar en todo los invernaderos del área, poco después llegó el equipo de medicina forense y un escuadrón de respuesta inmediata, sospechaban la existencia de instalaciones subterráneas. En el invernadero donde murió el Comandante Belinfante desactivaron otra cinco minas, protegían un laboratorio subterráneo de procesamiento de goma de opio, parte de la conexión afgana del Jaish Al Umma, el sitio se encontraba vacío, con evidencias de que había estado ocupado recientemente, el equipamiento estaba en condiciones operativas, dos bodegas llenas de materia prima, en una tercera se notaba que habían logrado llevarse buena parte de la goma procesada, el desorden era prueba de la premura con la que abandonaron el lugar. En un depósito metálico de basura encontraron evidencias de contactos en Dresde y en Potsdam, más de la mitad de los papeles no habían sido consumidos por el fuego provocado para ocultar las evidencias; análisis posteriores darían cuenta de la existencia 332
de una red de complicidades que se mantenía vigente a pesar de la caída del muro soviético, viejos comunistas alemanes, ex agentes de la Stassi, seguían en activo en el negocio de las drogas, al servicio del terrorismo islámico, negocios son negocios, sin importar la ideología que los cobije. En el camino rumbo al arsenal Daniela pudo darse cuenta que en ese momento el principal enemigo de los líderes árabes de Gaza no era el Shin Mem sino sus propios combatientes, la cantidad de milicianos que se rendían era apabullante, tuvieron que detenerse varias veces al ser obstruidos por grupos con banderas blancas, ansiosos de entregarse, llegaron nada más tres escuadrones a su destino final y no completos, habían dejado a parte de sus integrantes vigilando prisioneros en la ruta. La defensa del arsenal resistió cinco minutos, sin bajas en ninguno de los bandos, las ráfagas que lanzaron los guardianes fueron de trámite, una manera de demostrarse que habían hecho lo posible por resguardar su posición, aunque sabían que ningún jefe estaría en posibilidades de reclamarles su inacción; el polvorín estaba casi vacío, era poco menos que una burla, cien cajas con cargadores de Ak47, cincuenta y dos misiles de fabricación artesanal, media docena de proyectiles PG29V para RPG y quince cajas de pistolas Glock 17, sin cargadores, si esa era la principal reserva de munición resultaba indiscutible que Khan Yunes estaba a punto de caer. En cuanto arribaron los de la brigada Sansón para hacerse cargo de la situación, la Comandante Schneider informó de los resultados por teléfono al general de la brigada y solicitó permiso para ir a revisarse el tobillo, el arnés le estaba lastimando, recibió instrucciones de dirigirse a la 333
clínica de campaña de Khirbat Ikhza’a con todo su escuadrón, esa mañana habían dejado ese campamento sin guarnición de protección al concentrar las fuerzas en Khan Yunes; como a esas alturas resultaba evidente que la situación quedaría bajo control antes del atardecer, bien podían ellos encargarse de la vigilancia del campamento de Khirbat mientras la doctora de la clínica le revisaba el tobillo. A cuatro kilómetros de distancia descubrieron tres columnas de humo, notificaron la situación de inmediato y aceleraron al máximo, al acercarse escucharon disparos, tres de las carpas se incendiaban, Daniela indicó que uno de los vehículos rodeara el campamento para llegar por detrás, por el lado Este, el de ella ingresaría por el frente, el Oeste, y el tercero por el lado Norte, giró la orden de disparar a discreción, de preferencia a las extremidades. Sesenta y seis desertores del Jihadi Salami, que habían huido de Khan Yunes y buscaban desesperados cómo salir de la Franja de Gaza, tomaron por asalto el campamento de Khirbat Ikhza’a al ver que tenía pocos guardias; los diecisiete voluntarios asignados a la clínica y el comedor, en su mayoría mujeres, y los cuatro guardias, llevaban quince minutos defendiéndose con valor. Los únicos que tenían rifles eran los vigilantes, se habían distribuido en diferentes posiciones para resistir, los demás contaban únicamente con pistolas Desert Eagle, la irrupción de los tres Dromedary modificó el equilibrio de fuerzas. El vehículo de la Comandante fue directo hasta la clínica, dos enfermeras resguardaban la farmacia, una de ellas estaba herida, les avisaron a gritos que tenían a la doctora retenida en el quirófano; al entrar Daniela vio que dos tipos sujetaban a la Doctora Sirak Abebe por los brazos mientras un 334
tercero se aprestaba a violarla, con la culata del rifle descerrajó un golpe en la nuca del fedayín que encontró de espaldas con las nalgas al aire, mientras Chaim Govesenzky hacía lo mismo con el segundo y el tercero recibía un balazo en un brazo disparado por Leo Abramovicz. Un cuarto atacante, que no vieron en principio, disparó sobre Daniela, Chaim giró el rifle a la derecha, se topó de frente con el muyahidín que tenía una pistola APS Stechkin en la mano, le apoyó el cañón del Tavor en el pecho a la altura del corazón – no pienso leerte tus derechos – le dijo en árabe y acto seguido jaló el gatillo, cuando los otros cuatro comandos entraron el jaleo había terminado. Leo ayudó a la Médico a incorporarse, mientras Gove acudía a donde había caído Daniela, vio la mancha de sangre en el hombro izquierdo, la levantó con cuidado, sonrió y le informó. – Fue un tiro limpio, te atravesó la clavícula, no huele mal, aunque me causa pena informarte que vas a sufrir baja de mi equipo de voleibol por el resto de la temporada. – No me embromes, ahora si estoy jodida, el tobillo derecho y el hombro izquierdo, no me quedá más que ver el resto de la fiesta por televisión, con lo que odio los anuncios. Gove envío a dos de los brigadistas a la farmacia por la enfermera herida y con los demás trasladó a la Doctora y a Daniela al área de convalecencia de la clínica, las colocaron en las camas disponibles, en el lugar se encontraban cuatro mujeres árabes que no habían podido huir por la gravedad de sus enfermedades, otras cinco sí habían podido colocarse a resguardo. – Me quedo con mi Baby Desert y vayan a ayudar a los demás, acaben con esos desgraciados de una vez por todas. Chaim ordenó que primero sacaran los cadáveres y a los prisioneros del quirófano, cuando lo hacían vieron algo 335
insólito, arribaba un destacamento de caballería, de camellería en realidad, todos con vestimenta beduina y portando banderas de Shin Mem, las primeras que veían a cinco días de iniciado el operativo, la política del Consejo Supremo era contraria al uso de banderas, los estandartes de la brigada Jericó carecían de cualquier símbolo, ¿de dónde habían sacado estos jinetes banderas con ese símbolo? Los milicianos de Jihadi Salami huían en diferentes direcciones en búsqueda de refugio, aventaban las armas, alzaban los brazos, ondeaban cualquier pedazo de trapo que fuera blanco o de un tono claro para entregarse, todo era en vano, desde los camellos disparaban a quemarropa, varios fueron lazados y arrastrados por el campamento en el mejor estilo de las películas del viejo oeste norteamericano. La súbita aparición de dos helicópteros y cuatro escuadrones de la brigada Bar Kojba puso término a la carnicería, el General de Brigada Nitai Maron descendió furioso de su Dromedary y se dirigió al líder de los beduinos. – ¿Qué se supone que hacen?, ¿están idiotas?, ¿con qué autorización intervinieron? – El Coronel Silbersatz nos dijo que nos integraría a la nueva policía de Gaza la próxima semana, pero al ver las columnas de humo supimos que nuestra ayuda era necesaria ahora mismo, así que adelantamos nuestra incorporación, nos sentimos obligados con ustedes. El General Maron colocó las dos manos sobre su kipá, veía a su alrededor y movía la cabeza desesperado, caminó hacía donde yacía uno de los hombres lazados desde un camello, cortó la cuerda y trató de incorporarlo. – Este hombre está agonizando. – Alcanzó a ver de reojo que uno de los beduinos sacaba una pistola para rematarlo. 336
– ¡No!, basta ya, guarden sus armas, a partir de este momento nosotros nos hacemos cargo, gracias, muchas gracias por su “generosa” ayuda, ya hemos tenido suficiente. Regresen a su campamento y esta tarde llegaremos por allá para indicarles cuando va a iniciar su entrenamiento, sus métodos fueron proscritos desde hace algún tiempo, nunca debieron haber existido en realidad; le reitero, gracias jeque por su ayuda, transmítale nuestro agradecimiento al patriarca… dónde obtuvieron esas banderas. El hijo del patriarca Jair Al Mafuz, Amhed, se sintió atrapado, tragó saliva, se puso pálido – Las robamos. – confesó. – No pudieron robarlas por una sencilla razón, nosotros no tenemos banderas, no luchamos para crear un estado, nuestro país ya existe y es Israel, no tendríamos por qué utilizar una bandera que no fuera la de la Estrella de David y tampoco podemos utilizarla porque… ah, es complicado de explicar, lo que sí es claro es que nosotros no utilizamos bandera alguna, dígame: dónde obtuvieron esas banderas. – Encontramos cortinas con su símbolo en un vehículo que esperaba a ser descargado en un campamento, logramos sustraer cinco paquetes de doce piezas, nuestras mujeres confeccionaron con ellas las banderas y les bordaron en dorado las letras de nuestro clan, era necesario tener una evidencia de que estamos de parte ustedes y no de los malditos terroristas infieles. – Eso significa que su aparición no fue producto de una reacción sino parte de un plan… – No, no General, no se enoje, las banderas las queríamos para identificar a nuestro cuerpo de vigilancia, queríamos darle una sorpresa al Coronel Silbersatz, lo que hicimos fue 337
adelantar su uso, era peligroso arribar al campamento sin identificarnos, sus soldados podían haber pensado que veníamos a atacarlos, no a ayudarlos. – Sí, menuda sorpresa, supongo que sus motivos en principio son correctos, aunque sus métodos son contrarios al espíritu del Shin Mem. Está bien, regresen a su campamento y los veré esta tarde, hasta entonces no vuelvan a utilizar sus armas, no nos obliguen a decomisarlas, gracias, de nuevo gracias. Les dijo mientras pensaba que tanto iba a afectar lo que acababa de ocurrir, volvió a ver alrededor y el panorama desolador lo deprimió: tiendas quemadas, brigadistas heridos, las avenidas del campamento sembradas de cadáveres de enemigos; acudió entonces a la clínica a ver a la Comandante Schneider, ella ya estaba al tanto de lo ocurrido. – Caramba General, para una vez que suceden estas cosas y yo aquí postrada sin poder ver el arribo del séptimo de camellería, ¿no le parece el colmo de la mala suerte? Cuatro mujeres y seis hombres del campamento tenían heridas graves, el resto presentaba heridas leves, quince de los agresores murieron, en su mayoría durante el ataque beduino. En Khan Yunes la resistencia decaía, las deserciones se multiplicaban, el mayor número de bajas era por las balas que los milicianos disparaban a los desertores, por la espalda, era necesario detener de inmediato esa locura. Shmuel Friedman, Comandante de la falange Vav Tet de la brigada Jericó, recibió la orden de avanzar. Poco antes del medio día una estampida de burros tomó por asalto las calles de la aldea, la explosión de cohetes de artificio, los rebuznos y los gritos de arreo de los impetuosos vaqueros jaredim causaron terror, la huida 338
descontrolada facilitó las defecciones, los pocos que estaban dispuestos a resistir hasta el final se quedaron sin armas en la carrera, otros aprovecharon la confusión para quitarse las camisolas con los galones de grado y hacerse pasar por simples soldados o incluso por civiles. Tras el paso de los borricos catorce lastimados vaqueros de caftán negro y larga barba quedaron tirados en las calles, era su primera experiencia como jinetes y habían pagado cara su osadía, el Comandante Friedman era el más afectado, doble fractura en la pierna izquierda y contusión severa en el codo del mismo lado, aun así sonreía cuando fueron a levantarlo los camilleros, su idea había funcionado. El último reducto terrorista se había rendido y se habían detenido las ejecuciones que los fedayines producían entre sus propias filas, un final digno de John Wayne, Shmuel jaló un poco su biber hit para que quedara ladeado. Khan Yunes había caído, sus terregosas callejuelas estaban llenas de excremento de asnos, algunos jumentos deambulaban sin rumbo mordiendo lo que tuviera apariencia comestible, las brigadas Bar Kojba y Sansón realizaban una limpieza a fondo, esa noche la aldea tenía que estar libre de armas y terroristas. Al atardecer en el Comando Central el General Munhos destapó la primera botella de vino espumoso Gamla Cavernet Sauvignon, todos voltearon a ver al Rabino Baruch sin saber cómo reaccionar, Moshé Amato había sido estudiante de su yeshivá, uno de sus más destacados alumnos. – Si no celebramos esto qué vamos a celebrar entonces, tenemos Gaza en nuestras manos, de aquí a mañana por la tarde cuando empiece el Shabat la Franja estará libre de 339
cualquier amenaza, Sirak y Daniela están heridas…pero vivas, al igual que Shmuel; Sara y Azamel estuvieron en peligro pero al final resultaron ilesos y, caramba, es muy triste lo de Moshé y Hobidiente, un daño irreparable y doloroso, pero al final HaShem nos perdonó cinco de las siete vidas judías y también perdonó más de doscientas vidas árabes, ellos tuvieron cuarenta y siete bajas, la mayoría víctimas de sus propias balas, nada que ver con las cifras de Plomo Fundido. – Pudieron haber sido cuarenta y cinco, la Comandante Schneider y el Soldado Govesenzky se excedieron, ella no disparó pero no podía pretender que alguien sobreviviera a un culatazo de esa intensidad en la nuca y el otro atorrante qué se creía, que era Rambo o Terminator, si está más chaparro que Stallone. Comentó molesto el General Modigliani. – Quizá si el intento de violación hubiera sido a un hombre estarías de acuerdo en su reacción. Intervino la General Casque. – Si te hubiéramos permitido soltar las bombas en Khan Yunes esos dos muertos serían una simple anécdota, tú no hubieras dejado ni una casa en pie. Le espetó indignado Hebel Camondo. – Moción, moción de orden… Pidió el Rabino Baruch. – Ya se votó en el Consejo el asunto desafortunado de Khirbat Ikhza’a y estuvimos de acuerdo por amplia mayoría en no ventilarlo, sobre todo porque se trata de dos integrantes del Tzáhal; la cámara estaba en el suelo, las imágenes eran confusas, eran, ahora no existen más y nosotros nos dimos cuenta muy tarde de lo que ocurría, con tanta acción de Khan Yunes no vimos lo que sucedía en otros lugares, en lugar de 340
culpar a esos jóvenes debemos culparnos nosotros, no atendimos bien las cosas, miles de millones de dólares en tecnología de punta y seguimos viendo cada uno nada más con dos ojos, además dirigidos siempre los dos hacia el mismo lugar. Las risas relajaron la tensión, Zvi Bartomeu tomó la palabra. – Tiene razón el General Munhos, en el balance global hemos ganado mucho más de lo que hemos perdido, noventa y seis importantes líderes terroristas han sido detenidos y entregados a Israel, les hemos transferido además otros mil quinientos presos y tenemos casi siete mil abarrotando nuestras tres cárceles, las bajas son menores de lo esperado, ocurre lo mismo con los heridos; la mayoría de las escuelas están funcionando nuevamente, si bien no hemos concluido la reconstrucción, la universidad estará lista en un par de semanas, las clínicas y hospitales, a excepción de la de Khirbat Ikhza’a, trabajan sin problemas, se han realizado ciento veintitrés intervenciones quirúrgicas importantes, hace cuarenta y ocho horas que no hay fallas en el suministro eléctrico y la cuarta parte de las edificaciones públicas han sido equipadas para generar su propia electricidad, se avanza con la red de agua y de las cloacas del drenaje, hemos iniciado la reconstrucción de la vía ferroviaria, hay comida para todos, reservas financieras para completar con éxito lo iniciado, tenemos más de cincuenta mil solicitudes de incorporación de voluntarios y se ha desatado una competencia entre las comunidades judías de diferentes países para ver quién hace las mayores aportaciones económicas al Shin Mem, entre muchas cosas más, señoras, señores, el primer paso está dado, HaShem nos ha brindado la oportunidad de servir a nuestro 341
pueblo y me parece que esa oportunidad la estamos aprovechando, Hobidiente y Moshé dieron sus vidas por una causa justa, Daniela y Chaim habían estado sometidos a demasiada presión y reaccionaron ante una situación violenta de manera instintiva, no tenían tiempo para pensar qué hacer o valorar alternativas, ignoro si las cosas hubieran podido ocurrir de otra manera, no los culpo, no tengo la menor idea de lo yo hubiera hecho en su lugar. La primera fase se ha cumplido con éxito, la segunda iniciará al concluir Shabat, aunque todo parece indicar que para nosotros será una especie de paseo, el Tzáhal no va a permitir que nos sigamos quedando con todos los méritos, es justo cederles el paso, serán ellos los que culminen la tarea de limpieza. Eso lo sabremos pronto, lo difícil está en la tercera etapa, lograr la reconstrucción del tejido social, tenemos el territorio, tenemos los recursos, si logramos conservar la humildad seremos capaces de concluir con éxito la tarea que nos ha sido encomendada. ¡Lehaim!.
342
XXI
Con los funerales de los Comandantes Moshé Amato y Hobidiente Belinfante comenzó a funcionar el nuevo panteón judío de Gaza la misma tarde del jueves, representantes de otras confesiones acudieron el viernes a primera hora a dar el pésame. Los entierros de los combatientes musulmanes y cristianos también transcurrieron con tranquilidad, no hubo exhibiciones violentas ni gritos clamando venganza. Se redujo un poco el ritmo de trabajo, los operarios musulmanes fueron muy rigurosos con lo del día de descanso el viernes, a pesar de que algunos habían estado años sin empleo, las labores de reconstrucción de las mezquitas se interrumpieron para dar paso a las oraciones. Al inicio del Shabat los integrantes de la Brigada Jericó y judíos ortodoxos de otras brigadas se retiraron a orar en las sinagogas provisionales que se habían instalado en diferentes puntos de Gaza, miles de gigantescas bolsas de pochochos fueron importadas desde Mea Sharim para cubrir la demanda; el grueso de los brigadistas judíos se acogió a la dispensa emitida por el Rabino Baruch y continuó con las actividades. 343
Al término del Shabat fueron inaugurados cuatro parques infantiles y había fiesta en cuarenta sitios distintos, obras de teatro, conciertos, danza, funciones de cine, muchas de las actividades artísticas y culturales que habían estado prohibidas bajo el gobierno de Hamás congregaron a miles de personas, la mayoría de la gente estaba en las calles sonriente, relajada, con ganas de respirar, en algunos barrios los habitantes se habían encerrado a piedra y lodo, representaban una minoría. Por los andadores provisionales de madera instalados en casi todas las playas, circulaba una mezcla variopinta de formas de vestir, los sorprendidos corresponsales extranjeros captaron imágenes de jóvenes árabes haciendo un corrillo de rap en torno a un enorme reproductor portátil de discos compactos, muchachas vestidas a la usanza tradicional, con hiyab, departían con otras que estaban en pantalones vaqueros, con zapatos de tacón y el cabello al aire, en un café un cura, un mulá y un rabino parecían estar enfrascados en alguna discusión teológica, en realidad jugaban backgammon, los tres guardaron respetuoso silencio cuando cuatro guapas mujeres pasaron cerca; en algún momento dos grupos de niños, unos musulmanes y judíos los otros, se toparon de frente, se observaron detenidamente y si bien no hubo un acercamiento contundente, sí sonrieron y se saludaron. Trescientas familias judías se instalaron esa noche en las diecisiete colonias de tiendas paraboidales y geodésicas que contaban ya con agua, biodigestores y paneles para generar electricidad. El legendario kibbutz Kfar Darom fue reinstalado por tercera vez, en su emplazamiento original, en la sencilla 344
ceremonia estuvo presente el bisnieto de uno de los fundadores de 1929 y tres de los refundadores en 1970, en torno a una fogata en un gran círculo hombres, mujeres y niños enlazados por los brazos danzaron felices, sus campos volverían a florecer. A las diez de la noche se encendieron las cuarenta pantallas gigantes que estaban distribuidas a lo largo de La Franja y las trescientas diseminadas por todo Israel, se transmitía en vivo la gran fiesta del triunfo en la avenida Ben Yehudá en Jerusalem, en las imágenes se apreciaba el inmenso río humano que se extendía por la avenida Rey Jorge hasta los jardines Meir Sherman y HaAtsmaut y por la avenida Yafo hasta llegar a la Torre de David. En el templete de la confluencia de Ben Yehudá y Lunz, frente a la plaza Tsiyon, se fueron sucediendo grupos de música klezmer, sefardí, yemenita, parsi, marroquí, ensambles llegados de Estados Unidos, Argentina, Francia, Rusia, estrellas del pop, del cine y de los deportes, desde las once de la noche las irrupciones de gritos de la multitud eran más frecuentes: ¡Osos Trogloditas!, ¡Osos Trogloditas! A las once y media los miembros del Consejo de Ministros se encontraban reunidos, el nerviosismo era notorio, algunos trataban de concentrarse en las imágenes de la celebración, en la pantalla aparecía Yazmín Levy cantando en sefardí, sonó el teléfono, la Primera Ministro atendió la llamada. – El verano será próspero, las parvadas asoman en el horizonte. Veinte minutos después el Ministro de Defensa entraba a la residencia de la Premier, le acompañaba el Rabino 345
Montefiore, en cuanto entró a la sala rindió su informe. – Cumplieron con lo acordado al pie de la letra, a las doce de la noche la división David queda bajo las órdenes del General Ashkenazi, eso incluye armamento e instalaciones, la brigada Jericó se disolverá al inicio del próximo Shabat y las demás brigadas cuando el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Israel lo considere conveniente, a fin de cuentas están integradas por reservistas y militares en activo, incluso los Generales Mostovich, Modigliani y Magnus son militares en retiro, en realidad el Tzáhal estuvo omnipresente en el operativo en Gaza. – ¿Qué ocurrirá entonces con el Shin Mem? Preguntó la Primera Ministro. – Tal como lo ofrecieron, se mantienen como organización civil, una gran organización civil que apoyará al Estado en cuestiones de absorción, vivienda, nutrición, salud, arte, cultura y atención a población vulnerable; la educación, obra pública y servicios serán transferidos a los ministerios respectivos en la medida que estemos listos para hacernos cargo, aunque ellos conservarán algunas escuelas y zonas habitacionales bajo su tutela. Han cumplido con su promesa de no constituirse en un estado dentro del estado, su trabajo no proyectará ninguna sombra sobre la autoridad nacional, son los primeros en afirmar que ninguna organización ni persona puede estar sobre la figura de la Nación, son ciudadanos israelíes leales, no debe cabernos la menor duda. Con el mismo ímpetu con que asumieron la iniciativa ahora se repliegan, continuaran con su trabajo en favor de la paz en los ámbitos a que tienen derecho como ciudadanos, nos corresponde ahora tratarlos con dignidad, reconocer su labor y aprovechar su esfuerzo. 346
– ¿Y esta noche? – Vamos juntos, a las 0215 se cierra el círculo, en las pantallas se verá al Comandante en Jefe del Tzáhal acompañado de su Estado Mayor y de miembros de la brigada Jericó, los Osos Trogloditas, el principal símbolo del Shin Mem, esa acción marca un fuera máscaras, espero que nuestros aliados reaccionen positivamente, la mayoría va a pensar que estuvimos detrás del Shin Mem desde su gestación, pero creo que eso ya no es relevante. En el templete nos acompañará Daniela Schneider, el Consejo Supremo del Movimiento Shalom prefiere no aparecer en público, debe ser la máxima autoridad de Israel quién informe de la buena nueva. En los rostros de los ministros apareció una sonrisa de alivio, en la pantalla se veía en ese momento al ensamble de cuerdas de la Orquesta Filarmónica de Israel, con Zubin Metha dirigiendo. Cerca de las dos de la mañana una ambulancia se acercó en reversa al templete, los paramédicos ayudaron a descender a la Comandante Daniela Schneider y la colocaron en una silla de ruedas, el Capitán Fainstein se acercó solícito a empujar pero descubrió decepcionado que ese era el sitio que correspondía a Noa, el Mayor Feldman las saludó y felicitó, les presentó al Ministro de Defensa, quien sonrió ampliamente al saludar a Daniela. – Ardía en ganas de conocerla Comandante, sus hazañas han recorrido el mundo. Daniela sonrío discretamente, contestó. – Gracias Ministro Barak, tan sólo he cumplido con mi deber, estoy obligada a aclararle que en el Tzáhal no soy comandante sino teniente. 347
– Bueno, no, ya no, su nuevo rango es de mayor, estuvo a un pelo así de ser coronel pero el alto mando consideró que era un tanto excesivo que saltara tres pasos del escalafón en un sólo brinco. Al Capitán Fainstein casi se le salen los ojos de la impresión, ahora ella era su superior jerárquica, el Mayor Feldman lo miró de reojo, sonrío y volvió a extender su mano hacia Daniela. – La felicito colega. En ese momento arribó la Primera Ministro acompañada de la titular de exteriores, Fany Goldin, y el Ministro de Asuntos Religiosos, Avigdor Lieberman, tras los saludos y felicitaciones de rigor comentó a la Mayor. – Que no presuma el señor Ministro Ehud, Daniela, ellos querían dejarla como capitán primero, pero insistí en que a sus logros militares hay que sumar su profundo interés por evitar el derramamiento de sangre… Señor Ministro ¿está todo en orden? – Los osos podrán hibernar en la cueva, todo el bosque está en calma, podemos dar la noticia. – En cuanto llegue el Presidente Peres subimos. Cuando ascendieron al templete la locura alcanzó su límite, los gritos se mezclaban hasta hacer ininteligibles los mensajes, lo que se escuchaba, lo que se sentía, era el ensordecedor sonido de la multitud, en todas las ciudades de Israel se repetía el fenómeno frente a las pantallas gigantes donde se proyectaba el festejo, comunidades judías de todo el mundo recibían la señal satelital. En la primera fila dos niñas y su mamá disfrutaban emocionadas, Alberto Ayadón las escoltaba al lado de Lucy y don Eleazar, habían querido estar entre el pueblo para sentir 348
en carne propia la euforia… el Consejo Supremo estuvo de acuerdo y con discreción les asignó vigilancia, seis brigadistas de Shin Mem en ropa de civiles, aunque el Tzáhal prefirió tomar sus propias precauciones, cerca de ellos personal de inteligencia militar, también de civiles, reforzaban el círculo; el Shabak tampoco había querido quedarse atrás, Valentina, Myriam y Judith eran la esposa y las hijas del hombre más odiado por las facciones radicales del Islam en ese momento, esa mañana los ayatolás herederos de la tradición sangrienta implantada por Ruhollah Jomeini habían proclamado en Irán una fatwa contra Zvi Bartomeu y su familia, quien los borrara del planeta tendría un lugar asegurado en el paraíso, los alegres celebrantes que se encontraban alrededor de las cuatro mujeres, del abuelo Eleazar, su esposa Lucy y su amigo Alberto eran, sin que ellos se percataran, sus veinte guardaespaldas, otras cuarenta personas atendían cámaras o vigilaban el entorno desde las miras telescópicas de sus rifles, en la parte alta de los edificios cercanos, en el Cuartel General observaban orgullosos la celebración y las reacciones que ocurrían en diferentes puntos del país. En cuanto el rumor descendió la Primera Ministro Tzipi Livni tomó el micrófono. –En esta bella noche de Jerusalem, la capital eterna del pueblo de Israel…– las aclamaciones de la multitud interrumpieron el discurso, la gente estaba al borde del paroxismo – les confirmo que la Franja de Gaza ha sido completamente liberada… – nuevas aclamaciones – en las próximas semanas sus habitantes decidirán por sí mismos su futuro, han dejado de ser rehenes del terrorismo islámico, han dejado de ser instrumento del hostigamiento contra el Estado de Israel, la paz, ¡La Paz que anhelamos todos!, está al alcance de nuestra 349
mano ahora más que nunca. La multitud irrumpió al unísono. – ¡Osos Trogloditas!, ¡Osos Trogloditas!... – Pasados unos minutos la Primera Ministro pudo hablar nuevamente. – Está aquí con nosotros una representante del Movimiento Shalom, la Mayor Daniela Schneider, una de las artífices de este logro…– vivas y aplausos volvieron a interrumpir, la situación se alargó, a una instrucción del Ministro de Defensa el cielo se iluminó con fuegos artificiales, los Ministros y la Mayor cruzaban miradas, tenían los ojos enrojecidos de emoción, cuando perdió su intensidad la última luz colorida en el cielo la multitud permaneció en silencio, bajo el manto estrellado de la noche, sólo entonces la Ministro Livni consideró que era el momento adecuado para dar el golpe final, cedió la palabra al Presidente Peres. – La Mayor Schneider nos trajo un mensaje, un mensaje que el Movimiento Shalom, el Shin Mem, nos envía… – la multitud estaba expectante, no se movía ni una hoja de los árboles, la suave temperatura de las noches de primavera hacía más propicio el ambiente – Pueblo de Israel, en este instante la sombra de David Ben Gurion vuela sobre nosotros, sientan su presencia en el aire, junto a él están Golda Meir, Moshé Dayan, Menahem Beguin, Yithzak Rabin; esta noche, esta noche salpicada de estrellas nos hubiera gustado compartirla con los Osos Trogloditas, ellos enviaron sus disculpas, – un leve murmullo inundó las calles, el presidente no lo dejó crecer – no pudieron venir a festejar con nosotros porque tenían otra misión que cumplir… – En las pantallas apareció la imagen del Estado Mayor del Tzáhal con la brigada Jericó haciendo su entrada triunfal en Mearat HaMacpelah, el 350
Presidente se hizo a un lado para que la Primera Ministro gritara al micrófono con emoción. – ¡Hebrón ha sido liberada!
351
352
GLOSARIO DE TERMINOS
Ablación en este caso se refiere a la ablación del clítoris, practicada por pueblos musulmanes de África y Medio Oriente para negar el placer sexual a las mujeres, aunque en cirugía el término abarca la extirpación de cualquier órgano o parte del cuerpo. Aliyá (Aliyot, pl) (en hebreo “ascenso”). Emigración de los judíos desde cualquier parte del mundo a la tierra de Israel (Eretz Israel). Es un derecho fundamental establecido por el sionismo. Al-Fatah o Fatah acrónimo de las palabra árabes que significan Movimiento Nacional de Liberación de Palestina, parte de la OLP (Organización para la Liberación de Palestina), ambos organismos fueron fundados por Yaser Arafat. Amutot organizaciones de caridad en Israel, no lucrativas. Bar Mitzvá (en hebreo “hijo de los mandamientos”). Ceremonia en la que los niños judíos pasan a ser considerados responsables de sus actos, a los 13 años, de acuerdo con la Halajá (la ceremonia de las niñas se llama Bat Mitzvá y se realiza a los 12 años). Bekishe caftán judío, saco largo de seda, lana tropical o poliéster que es utilizado por los jasidim y algunos jaredim, 353
generalmente es negro, aunque también los hay en tonos de gris. Biber Hit sombrero de ala redonda y plano, forrado de terciopelo negro, utilizado por jasidim y jaredim. Bnei Anusim (en hebreo “hijos de los forzados”). Descendientes de judíos obligados a convertirse al cristianismo, quienes tienen la opción de retornar al judaísmo, la mayoría son sefardíes. Burkha prenda islámica que cubre la cara de las mujeres, los hay de dos tipos, los que cubren sólo la cabeza, como complemento del shador (túnica que cubre el cuerpo a partir del cuello) o burkha completo, que cubre desde la cabeza hasta la punta de los pies, en ambos casos tiene una pequeña abertura con una rejilla de encaje o de tejido abierto para que puedan ver a través. Cábala (en hebreo “recibir”). Tradición que explica y fija el sentido oculto de la Sagrada Escritura, conocimiento en cuanto a las cosas celestiales mediante el ejercicio del estudio y cumplimiento de preceptos y reglas superiores. Canyon Centro Comercial, Mall. Falafel bolas fritas de pasta de lentejas, garbanzos o habas, muy condimentadas, se sirven dentro de un pan pita al que también se agregan encurtidos de pepinillos, coliflor, remolacha, cebolla, ají, berenjena, etc. 354
Goy (Goyim, pl) (en hebreo “nación” o “pueblo”). Se traduce usualmente como gentil y se utiliza como sinónimo de no judío. Hamás (en árabe “fervor”, acrónimo de Harakat alMuqáwama al-Islamiya “Movimiento de Resistencia Islámico”). Grupo terrorista que en su carta fundacional establece su intención de establecer un estado islámico en los actuales territorios de Israel, Gaza y Cisjordania, con Jerusalem como capital. No reconocen la existencia del Estado de Israel; su brazo armado son las brigadas de Ezzeldin AlQassam. Humus puré de garbanzos, tradicionalmente se le agrega tahini, miel, comino, pimienta, sal y aceite de oliva, aunque existen muchas formas de aderezarlo. Janucá fiesta de las luces, celebración de la purificación del Templo tras la rebelión Macabea contra los griegos, en el siglo II aec. Celebra el milagro de la lámpara de aceite que duró encendida ocho días, tras el retiro de la estatua de Zeus del Templo. Es una de las más hermosas celebraciones judías, dura ocho días, cada día se enciende una vela más en la Janukiá hasta completar las ocho más la vela piloto que se utiliza para encender las otras, los niños reciben regalos. Janukiá. Candelabro de nueve velas que se utiliza en la celebración de Janucá. Jaredí (Jaredíes/Jaredim, pl). (“Los que temen a Dios”). Judíos ultraortodoxos, seguidores estrictos de la tradición judía que 355
rechazan ciertas formas de modernidad; utilizan vestimenta oscura, se cubren la cabeza todo el tiempo, hombres y mujeres, y viven apegados a los seiscientos trece mandamientos, bajo la guía del rabino de su comunidad. El estudio de las Escrituras es una de sus actividades primordiales, otra es el comercio de diamantes. Jasid (Jasídicos/Jasidim, pl) (en hebreo “piadoso”). Cercanos a los jaredim, movimiento que se originó en Europa del Este en el siglo XVIII, tienen gran influencia de la Cábala. Se puede considerar que los jasidim son jaredim, pero que únicamente algunos jaredim son jasidim, las diferencias en vestimenta entre las diferentes comunidades son sutiles. Jupá palio nupcial, las bodas judías suelen realizarse a cielo abierto como buen augurio para que la simiente sea tan numerosa como las estrellas, pero los novios y el rabino deben estar bajo un dosel. Kabalat Shabat celebración del inicio del Shabat al atardecer del viernes, nombre del conjunto de oraciones que se rezan o cantan en la celebración del Shabat. La cena del viernes debe ser la mejor comida de la semana, con toda la familia reunida y con dos velas en las mesa. Kapalabhati (En sánscrito puede interpretarse como “cráneo o cabeza brillante”). Uno de los seis ejercicios de purificación o limpieza en el Yoga. Kibbutz (Kibbutzim, pl) (en hebreo “agrupación”). Comunas agrícolas de Israel basadas en el movimiento sionista356
socialista; actualmente han incursionado también en la producción industrial y en el turismo e incluso algunas se han semiprivatizado. El primer Kibbutz fue el de Degania, formado por olim rusos en 1909. Kibrs manto de seda o chaqueta de lana o algodón que va sobre el thawb (túnica), vestimenta beduina. Se sujeta con cinturón de cuero. Kipá (Kipot, pl) (en hebreo “cúpula, parte superior”). También llamada yarmulke (en yiddish) o solideo (sefardí), pequeña gorra ritual que utilizan los hombres judíos, algunos todo el tiempo y otros nada más en las ceremonias, de acuerdo con su tradición religiosa; en las ceremonias religiosas es de uso obligatorio aún para los goyim que se encuentren presentes. En algunas expresiones del judaísmo, como el reformismo y el liberalismo la pueden utilizar también las mujeres. Kosher (o Kasher o kashrut) (kashrut en hebreo es “correcto” o “apropiado”). Curiosamente está más generalizado el uso del término kosher, que es yiddish, preceptos de lo que los judíos pueden o no comer y tomar y de qué manera hacerlo, en base a lo establecido en el Vayikrá. Kótel (HaKótel Hama’aravi). Muro de los lamentos o Muro Occidental, el lugar más sagrado del judaísmo, último vestigio del Templo de Jerusalem. Kuffiyah pañuelo tradicional árabe que se utiliza en Jordania, Irak, la península arábiga, Líbano y Turquía, está hecho de 357
algodón o de lino y tiene una cuadrícula característica; también es conocido como ghutrah, hattah, mashadah o shemag en árabe y shmagh en turco. Algunas tiendas occidentales le han asignado el erróneo nombre de pañuelo palestino. Maguen David Adom Estrella de David Roja, equivalente israelí de la Cruz Roja. Menorá candelabro de siete brazos que representa el arbusto en llamas que vio Moisés en el Monte Sinaí, es uno de los símbolos del estado de Israel. Mezuzá (Mezuzot, pl). Pequeño receptáculo alargado, tubular o rectangular, de madera, plástico, cerámica o metal, que contiene la parashá de la Shemot donde HaShem ordena a Moisés que los judíos marquen las puertas de sus casas con sangre de carnero, para proteger a sus primogénitos. Tradicionalmente se coloca inclinado en el dintel de la puerta de entrada de las casas, del lado derecho. Mitzvá Mandamiento, cualquier ley de la Halajá o cualquiera de los 613 mandamientos distribuidos en la Torá (el Pentateuco). Moshav (Moshavim, pl) (en hebreo “asentamiento, población”). Comunidad agrícola de carácter colectivo; a diferencia de los Kibbutzim en el Moshav sí existe la propiedad privada, los granjeros son poseedores de su propia tierra y dueños de sus frutos, pero el trabajo se realiza en conjunto con los vecinos para optimizar los resultados. 358
Olé (Olá, fem, Olim, pl) Judío que emigra a Israel. OLEI siglas de la Organización de Latinoamericanos en Israel. Parashá (Parashiot, pl). Párrafo (versículo) de uno de los libros de la Torá. Pochochos denominación utilizada en Argentina y Uruguay para las Pop corns (inglés), Palomitas de Maíz (México y España), Canchita (Perú), Canguil (Ecuador), Pororó (Paraguay), Cotufas (Venezuela y Tenerife), Poropos (Guatemala), Crispetas y Maíz pira (Colombia), Cabritas (Chile), Pipocas (Bolivia) o Rosetas (Andalucía). Peyot tirabuzones, rulos, cabello rizado que los jasidim y algunos jaredim se dejan crecer en las sienes, en cumplimiento de un precepto de la Torá. (Levítico/Vayikrá 19/27). Purim (en hebreo “suertes”). Festividad anual que se celebra el 14 del mes Adar o el 15 en ciudades amuralladas, celebra el milagro de la salvación del pueblo judío relatada en el Libro de Esther. Es común que la gente se disfrace para esta fiesta, se cuentan chistes y cosas divertidas e incluso puede beberse sin moderación (algunos autores la consideran, junto con las Bacanales y fiestas Dionisíacas, un antecedente directo de los Carnavales cristianos, si bien las fiestas de Purim nunca han llegado a los excesos de griegos y romanos, por fortuna o por desgracia). Rosh HaShaná (en hebreo “cabeza del año”). Año nuevo 359
espiritual judío que se celebra el primer y segundo día del mes de Tishrei. Se considera que es el primer día de la creación del mundo, marca el inicio de los 10 días de arrepentimiento e introspección que culminan en Yom Kippur, a ese lapso de tiempo se le llama Yamim Noraim (los días terribles, no por el arrepentimiento sino porque de acuerdo a la tradición es el momento en que HaShem juzga al mundo). Sabra (del hebreo tsabar, tuna, fruto del cactus). Designación de los judíos nacidos en Israel después de 1948, por extensión designa a todos los nacidos en Israel. Shabat día de descanso, séptimo día, cuando HaShem descansó después de crear el mundo. Inicia al atardecer del viernes y concluye al atardecer del sábado. En las comunidades ortodoxas y ultra-ortodoxas se suspenden todas las actividades laborales y está prohibido encender fuego, luces o aparatos eléctricos o electrónicos, tampoco se puede conducir un auto, escribir o tocar el dinero. En Israel los elevadores de los hoteles funcionan en automático durante el Shabat, se detienen piso por piso para que nadie tenga que tocar los botones. Shawarma o Shwarma carne de cordero o de pavo puesta a asar en una varilla metálica colocada de forma vertical junto al fuego, de forma que se pueda ir girando para lograr la cocción homogénea, se sirve igual que el falafel. Séfer Torá copia manuscrita de la Torá colocada en dos pivotes dentro de un receptáculo de metal, madera o cerámica, 360
que se abre para poder leerla desenrollando el texto sin tocarlo con las manos. Sharia (en árabe “vía o senda”). Código basado en el Islam (pero que no es irrefutable, a diferencia de lo comprendido en el Corán), normas de conducta y culto, criterios de la moral y la vida, cosas permitidas y prohibidas. Se aplica en los estados musulmanes. Sheitel pañuelo o especie de bolsa que cubre el cabello de las mujeres judías practicantes, también se aplica a las pelucas. Shoá (en hebreo “catástrofe”). El Holocausto, exterminio de los seis millones de judíos que fue-ron víctimas de los nazis en la Segunda Guerra Mundial. Shuk bazar, mercado al aire libre. Sojnut Agencia Judía para Israel, encargados de los trámites de Aliyá y de los planes de absorción. Talit Gadól manto de plegarias, es blanco con franjas negras o azules, está tejido en lana y se coloca sobre la cabeza y los hombros en ciertas ceremonias y plegarias. Tradicionalmente lo utilizan los hombres después de haber realizado el Bar Mitzvá, aunque también es empleado por mujeres reformistas. Talit Katán manto que llevan siempre puesto los ultraortodoxos debajo de la camisa pero no directamente sobre la piel, se lo quitan para dormir o bañarse; tiene un agujero en el centro para que pase la cabeza, tradicionalmente 361
es de lana pero debido al clima de Israel también se fabrican en nylon con los tzitziyot de lana. Entre los sefardíes y judíos orientales lo utilizan solteros y casados, entre los jasidim únicamente los casados. Talmud obra que recoge las discusiones rabínicas sobre leyes judías, tradiciones, costumbres, historias y leyendas. Se divide en dos partes: Mishná y Guemará. Tefilín también conocidas como filacterias, son dos pequeñas cajas de cuero unidas a correas del mismo material, cada caja contiene cuatro Parashiot de la Torá escritas en pergamino kosher, para orar una de las cajas se coloca en la frente y otra en el brazo izquierdo, existe un ritual y forma específica de colocación. Thawb. Túnica completa de algodón blanco que utilizan los beduinos. Torá (de sus raíces hebreas podría interpretarse como “guía para dar en el blanco”). Texto de los cinco primeros libros de la Biblia (Jumash=Pentateuco: Génesis=Bereshit, Éxodo=Shemot, Levítico=Vayikrá, Números=Bemidbar, Deuteronomio =Devarim). Tzáhal siglas de Tzavá Haganá LeIsrael, Fuerzas de Defensa de Israel. Tzitzit (Tzitziyot, pl). Flecos rituales del Talit Katán que generalmente asoman a los lados del cuerpo por entre las faldas de la camisa, encima del cinturón. Tienen como objetivo 362
recordarle al hombre el cumplimiento de los preceptos y la salida del pueblo de Israel de la esclavitud en Egipto. Yad Sarah. Es la mayor organización israelí de voluntariado para ayudar a discapacitados, ancianos y minusválidos, cuenta con 104 centros y 6 mil voluntarios. Yeshivá (Yeshivot, pl). Centros de estudio de la Torá y el Talmud, generalmente para hombres, aunque existen para mujeres en el Reformismo, Reconstruccionismo y Liberalismo. Yom Kippur día de la expiación, perdón y arrepentimiento, es una jornada de ayuno, se celebra nueve días después del Rosh HaShaná. Zaka Siglas de Zihuy Korbanot Ason (Identificación de víctimas de desastres), organización civil que auxilia a víctimas del terrorismo, de accidentes de tránsito y otros desastres. Su sede está en Israel pero también tienen participación en acciones internacionales. La mayoría de sus integrantes son judíos ultraortodoxos. Zohar (en hebreo “Esplendor”). Libro central de la Cábala, que analiza la Torá para extraer su significado oculto. Fue escrito en la Edad Media, fue dado a conocer por Moisés de León quien se lo atribuyó a Shimon bar Yojai.
363