363 46 11MB
Spanish Pages [250] Year 1981
UNIVERSIDAD
DE
COSTA
2 ¡ f) FACULTAD
.DE
DE
ESCUELA
.
CIENCIAS
SOCIALES
HISTORIA
Y
~UNDACION
LA
COMUNISTA
RICA
GEOGRAFIA
DEL
DE
PARTIDO
COSTA
RICA
193 1.
TESIS
DE
LICENCIATURA
PRESENTADA
Ana
Maria
Ro do I fo
CIUDAD
EN
HISTORIA
POR
Botey
C is neros
Sobrado Castro
UNIVERSITARIA.RODRIGÓ
SEPTIEMBRE
DE
1981
FACIO
TRIBUNAL SXAMINADOR. Esta tesis ha sido examinada, el 24 de septiembre de 1981, por el siguiente Tribunala
/
r/~r. C~~raya Pochet Dr. Héctor Pérez Brignoli
Lic. Vladimir de la Cruz de Lemas
Lic. Mario Ram!rez Boza
Lic. Manuel
-~--·
-
AGRADECIMIENTO.
Agradecemos a nuestros profesores de la Escuela de Historia y Geograf Ía de la Universidad de Costa Rica, y muy especialmente al Dr. Paulino González v., quien nos inici6 desde muy temprano en la preocupación por una nueva concepci6n de la Historia. A nuestro director de tesis, Lic. Vladimir de la Cruz, y al Lic. Mario RarnÍrez Boza, por sus constructivas observaciones, que contribuyeron grandemente al mejoramiento de este trabajo. A ellos nuestro sincero reconocimiento.
Al Lic. Francisco Enríquez, por la lectura de los borradores iniciales, y que por razones de fuerza mayor no estuvo en este Tribunal. También a gradecernos al Lic. Manuel Calder6n, por hacerse cargo de la lectura iniciada ya,y bajo la premura del tiempo. A todos los entrevistados que nos brindaron importante inf ormaci6n y parte de su valioso tiempo.
El agradecimiento a nuestra compañera Marielos Aguilar Hernández, por proporcionarnos parte del material de sus entrevistas, y su apoyo solidario. A la Sra. Nina Urbina, por el cariño y el interés en el.trabajo mecanográfico. A los trabajadores de la Secci6n de Peri6dicos de la Biblioteca Nacional, en especial al s:• Marvin Avalas por su cooperación y ayuda desinteresada. A todos nuestros familiares por su apoyo moral y material, que hicieron posible la realización de este trabajo. Muchas Gracias.
INDICE GENERAL.
Introducción General CAP.I
El desarrollo del capitalismo en Costa Rica hasta 1930 1. Penetraci6n y desarrollo del capitalismo ••••••••••• 15 2. Intervención del capital monopólico en la estructura económica costarricense ••••••••••••••••• 24 3. Estructura Social ••••••••••••••••••• , •••••••••••••• 37 3.1. Origen y proceso de formación de la oligarquía burguesa costarricen~e ••••••••••••• 37 3.2. Conformación del proletariado c9starricense ••••••••••••••••••••••••••••••••• 39
CAP.II Antecedentes políticos. ideolÓgicos y organizativos de la fundaci6n del Partido Comunista. 1. Introducci6n ••••••••••••••••••••••••••••••••••••••• 50
2.·Primer Período• Las primeras organizaciones populares 1850-1913 •••••••••••••••• 52 3. Segundo Períodos La Confederación General de Trabajadores y las luchas económicas y políticas 1913-1923 •••••• 66 4. Tercer Períodos Búsqueda de una organieación política independiente de los trabajadores 1924-1931 ••••••••••••• es
CAP.III Las condiciones coyunturales• La crisis y su impacto l. Consideraciones Generales sobre la crisis ••••••••• 115 2. La crisis de 1929 en Costa Rica ••••••••••••••••••• 122 2.1. Reducción del Comercio Exterior •••••••••••••• 132 2.2. La crisis fi~cal ••••••••••••••••••••••••••••• 138 2.3. La crisis comercial •••••••••••••••••••••••••• 140 2.4. El desempleo •••••.••••••••••••••••••••••••••• 145
2.5. Vivienda.••••••••••••••••••••••••••••••••••••158
2. 6. Salud •••••••••••••••••••••••••••••••••••••• 161 2.7. Movimientos migratorios•••••••••••••••••••• 166 3. La crisis po1Ítica •••••••••••••••••••••••••••••• 169
CAP.IV La fundación del Partido Comunista El acontecimiento••••••••••••••••••••••••••••••• 181 2. Programa Mínimo del Partido Comunista de Costa Rica•••••••••••••••••••••••••••••••••••••• 193 3. Análisis del Programa••••••••••••••••••••••••••• 196 i.
4. El individuo y la historia•••••••••••••••••••••• 209 Conclusiones •• • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • 217 Bib1iografía •• • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • • 228 Anexos •••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••••
XNTRQDUCC~ON
GENERAL.
En el desarrollo hist6rico los acontecimientos socia1es no tienen una importancia homogénea, unos hechos son más significativos que otros, en la medida en que definen y manifiestan en s! mismos, la dinámica de los procesos de la sociedad en que están inmersos. El tema de nuestro estudios La fundaci6n del Partido Comunista -1931, tiene importancia, puesto que este hecho expresa en sí .mismo,
l~
síntesis de un proceso
políti~o
e ideo-
16gico en el desenvolvimiento del movimiento obrero. Representa, desde una perspectiva dinámica, dialéctica, la cÜlminación de un proceso y a su vez, el inicio de otro, con un contenido nuevo.
La fundaci6n del Partido Comunista marca en la histo-
ria del movimiento obrero costarricense una apertura y una orientaci6n cualitativamente diferente de las luchas sociales, a partir de este momento, comienza a adquirir una perspectiva política más profunda, en el sentido que las luchas sociales son encaminadas para la consecuci6n de un proyecto político proletario autónomo, dirigido por una organizaci6n partidaria popular. La mayoría de los estudios serios conocidos en el campo de las Ciencias Sociales, que tratan la temática del movimiento obrero en Costa Rica, coinciden en el criterio de que la daci6n del Partido Comunista es un hecho que _marca una etapa en el desarrollo de las luchas sociales. l.
fun~
nueva
Seleccionar
2.
este tema para su estudio, nos parece esencial pues nos permite entender el proceso de gestaci6n de1 partido
de 1a cla-
se trabajadora costarricense, que se p1antea la transformación estructural de la sociedad en que opera.
Además, de ofrecer
modestamente a la comunidad científica un punto de partida para el estudio de los partidos políticos populares. Nuestro objeto central de estudio es el análisis del proceso hist6rico, que culmin6 con la fundaci6n del Partido Comunista de Costa Rica, el 6 de junio de 1931. ria de este partido, en el sentido de que no la~so
No hacemos histoestudiamos un
temporal de su práctica política, estudiamos la proble-
mática de su fundaci6n,
tra~amos
de explicarnos el ¿por qu,.?
de este hecho. Nuestro trabajo, como toda producción material o inte1ectua1, tiene un contenido político. Nos interesa no s61o intentar 1a aplicaci6n de los conocimientos adquiridos en el campo .de 1a investigaci6n social, sino la orientaci6n operacional, 1a utilidad que debe tener el quehacer histórico. La naturaleza política del tema es un elemento imprescindible para que el trabajo del historiador, o el científico social en genera1, tenga una vigencia,
una actualidad, una razón de ser. Castrar e1 ca-
rácter po1!tico de la historia, o modernizarla en sus formas y no en sus razonamientos, no es más que decorar una vieja costumbre de describir sucesos. La reflexi6n sobre el desarrollo de las leyes sociales y su expresión particular en las diferentes facetas de la vida de los pueblos, debe servir para la
interpretaci6n e instrumentalizaci6n presente. es decir de la rea1idad concreta. De lo contrario. el trabajo del historiador se convierte en una tarea muerta, sin vida, sin utilidad actual. En esta r:erspectiva, recobra vigencia, ahora más que nunca, la historia de los trabajadores, de sus condiciones de vida, de sus organizaciones y sus pugnas; verdaderos dinamos de la historia. El trabajo del científico social, cobra vida en la medida que sirve para conocer las leyes que impulsan el desarrollo social, su funcionamiento concreto. Así
como para
contribuir al.esclareci~iento de las contradicciones que retrasan o dinamizan el desarrollo de la humanidad, y convertir su labor en una acci6n transformadora, viva. Los razonamientos y supuestos teóricos con que nos enfrentamos a nuestro objeto de estudio son varios, y se refieren tanto al hecho mismo estudiado, como al proceso que lo gestó,es decir a su
articulación con las instancias del organismo social
que lo condicionaron. Entenderemos que cualquier fenómeno social tiene una explicación más real, si comprendemos que su existencia es producto del desarrollo de una serie de contradicciones que lo engendran. Las conductas políticas de las clases sociales, y la creación de sus correspondientes expresiones partidarias, se dan por la maduración de condiciones ideo1Óqicas que les permiten desarrollarse y crear un organismo político que refleje su pensamiento y cana1ice su acción. En esta maduración ideo1Ógica,
4.
entran en jueqo factores de tipo económico y social, concretamente el planteamiento y la acción partidaria se
exp~ica
a
raíz del papel que juegan las clases en la dinámica social. La maduración ideol6gica, entendida como la precisión en la correspondencia del pensamiento político y la realidad, se da como producto de una práctica histórica, en donde la clase social toma conciencia de sí misma, y elabora un proyecto.para sí, esto se produce.como resultado de la confrontación y choque con otras clases que permiten
sociales y otras justificaciones ideolÓgicas,
en el caso de la clase trabajadora
superar la i-·
deologÍa dominante, y elaborar su propio pensamiento, sus propios métodos de acción y su propio partido.
Así pues, para entender la fundación de un partido político, hay que estudiar no sólo los planteamientos programáticos, sino también las fuerzas sociales que lo sustentan, el desarrollo de los movimientos que esas
~uerzas
han emprendido, y las
condiciones económicas y sociales en que surgen sus hombres etc., puesto que los procesos ideolÓgicos y políticos tienen una vinculaci6n y también una explicación en la base social y material en donde se producen, aunque no necesariamente son un reflejo mecánico de éstos. En una sociedad capitalista, las clases sociales en pugna geéran los instrumentos necesarios para la competencia política. Las clases dominantes crean partidos, ideologías, instituciones, con el fin de mantener el estado de cosas y asegurar su poder.
Las clases dominadas en su práctica histórica, van
s. comprendiendo y creando
sus propios instrumentos de lucha.
organizaciones. partidos políticos. a1ianzas, etc. En este sentido• entendemos que la fundaci6n del Partido Comunista de Costa Rica como cua1quier hecho significativo en 1a historia.
expresa esas contradicciones sociales. y sus
p1anteamientos se exp1ican por la natura1eza de estas contra_dicciones. Las contradicciones típicas de cada sociedad y segÚn sea el momento hist6rico y el nivel de desarro11o a1canzado• y por la
acción consciente de los individuos inmersos en
ellas. generan las condiciones necesarias para la creación de elementos novedosos. que entran en pugna, cogen fuerza y culminan en la creación de nuevas formas y nuevas relaciones. · A la luz de la fundaci6n
de estos planteamientos, entendemos que e1 hecho del Partido Comunista refleja esa confronta-
ci6n que caracteriza el desarrollo histórico.
La pugna entre
lo viejo y sus fuerzas sociales que tratan de perpetua5 o modificar no sustancialmente el estado de cosas, y lo nuevo que contradice ese estado de cosas y propone e impulsa la transformaci6n de la sociedad. La creación del Partido Comunista constituye precisamente ese salto cualitativo, en que la cantidad de experiencias
po~!-
ticas, ideol6gicas y orgánicas acumuladas por el movimiento obrero en el desarrollo de la lucha de clases, se transforma en una organización con una concepción política cualitativamente diferente, de nuevo tipo, que asume e impulsa la ideología y el proyecto político, de las clases que representa.
6.
Los trabajadores, la clase constructora y transformadora por excelencia, van conociendo y definiendo su propia visi6n del mundo y del hombre.
Es así que la fundaci6n del
Partido Comunista constituye un eslabón más del desarrollo del movimiento obrero, y es parte de
un proceso que opera
a nivel internacional. En el modo de producción capitalista, la inevitabilidad de la crisis se da por la naturaleza privada de su organización.
En estos períodos críticos de agudización de con-
tradicciones, los orocesos de polarización social se acentúan, la situación económica de la clase trabajadora se empeora, y· se crean condiciones objetivas y subjetivas que estimulan a los trabajadores a la participación política, y permiten la posibilidad de visualizar de mejor manera, las contradicciones y
las distorsiones del desarrollo del capitalismo.
Po~
consi-
quiente, entender la necesidad de crear una organización partidaria para la consecución de sus objetivos de clase. Partiendo de estos razonamientos globales, planteamos las siguientes hipótesiss 1.-
La fundación del Partido Comunista, en 1931, no fue un
hecho casual, sino respondió a leyes objetivas del desarrollo econ6mico social, a la existencia de condiciones en la estructura económica, social costarricense, dadas por
el grado de
7.
desarrollo del capitalismo y también por el grado de madurez política e ideolÓgica
del movimiento obrero de Costa Rica.
En Costa Rica, para 1931, el modo de producción capita-
2.-
lista era dominante, existían las contradicciones fundamentales de este modo de producci6n; la contradicción entre trabajo y capital, a nivel social, las contradicciones entre una oligarquía burguesa y una masa proletaria y semi proletaria duramente explotada, producto de la forma privada de la apropiación de la producci6n social. En el sistema mundial capitalista, las crisis en los
3.-
centros hegemónicos, se reflejan en las zonas
periférica~,
ge-
nerando graves consecuencias econ6micas y sociales. El empeoramiento de las condiciones de vida de las masas populares, creó premisas para el fortalecimiento de fuerzas antioligárquicas y antimperialistas; contribuyendo al desarrollo de la conciencia de clase de los trabajadores costarricenses.
La cri-
sis de 1929 generó una coyuntura propicia para que una serie de procesos políticos, ideo16gicos y orgánicos, maduraran
en
el movimiento obrero y desembocaran en la fundación del Partido Comunista,
como un salto cualitativo en el desarrollo del
movimiento obrero de Costa Rica.-Razón por la cual se explica, que
el naciente Partido Comunista se desarrollara y enraizara
rápidamente en la vida política nacional a partir de su fundaci6n.
8.
4.-
Al fundarse el Partido Comunista en 1931, se dió por
primera vez,
la ligazón orgánica y permanente, de la clase
trabajadora con la doctrina del socialismo científico, producto de la uni6n del movimiento obrero y la intelectua1idad progresista. El tema de la fundaci6n del Partido Comunista de Costa Rica, ha sido tratado en trabajos anteriores en fonna unilateral, y situándose dentro de otra perspectiva metodolÓgica. La obra más cercana es la de Vlademir de la Cruz, Las luchas sociales en Costa Rica 1870-1930, que constituye una síntesis de incalculable valos por el gran acopio de informaci6n que recobra para la historia política de Costa Rica. Otros trabajos del· mismo autor: El primero de Mayo de 1913 y Tendencias en el movimiento obrero costarricense 1870-1930, los cuales enriquecen su investigaci6n inicial >y fueron 1.ln punto 1e partida, sin el cual nuestra. labor hubiera sido doblemente difícil. Sin embargo, su objetivo fundamental no fue explicar el proceso hist6rico que conduce a la fundaci6n del Partido Comunista de Costa Rica, sino "esbozar una visi6n general de las luchas sociales en la Costa Rica de 1870 a 1930". Esbozo hist6rico que inevitablemente conduce a recorrer el largo proceso hist6rico que da origen al Partido 9omunista, pero que no profundiza en la explicaci6n de la fundaci6n misma. De la Cruz nos aclara los antecedentes políticos, ideol6gicos y organizativos, acumulados por el movimiento popular que dan por resultado l.a aparici6n del Partido Comunista. Sin embargo, creemos que esos
9.
aspectos no explican la totalidad del acontecimiento. Se plan teaba la necesidad de profundizar en el análisis de las condiciones objetivas, materiales, cuya maduraci6n explica en gran medida, el surgimiento del Partido Comunista, no como un hecho casual, sino producto del desenvolvimiento hist6rico. Nos referimos concretamente a un análisis más exhaustivo de la penetraci6n del capitalismo en la~structura econ6mic~y su repercu-
si6n en la dinámica socialo Al igual que el conocimiento
de
las condiciones a·e vida de los trabajadores, especialmente de los proletarios de los cuales el Partido Comunista se constitu-
y6 en expresi6n propia. Fueron de gran apoyo las investigaciones de Manuel Rojas B.1 Lucha
social v Guerra Civil en Costa Rica 1940-1948
y
Notas para la historia del movimiento obrero en Costa Rica, en las cuales se trata el tema de la fundaci6n del Partido Comunista muy colateralrnenteo La primera de ellas se centra en el an~ lisis de la década de 1940, período en el cual el Partido Comunista jug6 un papel de primer orden en la vida política. Por lo tanto, Rojas se introduce en la historia del Partido, partiendo desde las condiciones que originaron su fundación, en forma muy general. Notas para la historia del movimiento obrero en Costa Rica, enfoca lo relacionado con el surgimiento del Partido Comunista ,desde la perspectiva del movimiento obreroo A dife• rencia de
De la Cruz, elabora una periodizaci6n del movimiento
obrero partiendo de ciertos criterios que nos permitieron crear nuestra propia periodizaci6no
10 •.
Se deduce entonces que la investigación de Rojas, y especialmente 1a de De i·a Cruz, son las más Íntimamente relacionadas con nuestro objeto de estudio y con nuestro prop6sito de trabajar la historia. Pero que, sin embargo, no agotan las posibilidades de profundizar en el proceso histórico que da origen a la fundación del Partido Comunista, a través de las re1aciones entre lo económico y social, con lo político e ideo16qico y viceversa. Para 1os efectos de nuestra investigación, en lo que respecta a 1as fuentes
primarias~
nos hemos apoyado ent los peri6-
dicos de la época, las entrevistas, y los censos y anuarios estadísticos. Recurrimos al
análi~is
sistemático de la prensa para el
período de 1923 a 1931, el más cercano a la fundación del·· Partido Comunista. Utilizamos el procedimiento de comparar la prensa "burguesa" con la "prensa Obrera••, para adquii:iruna visi6n más objetiva. Fueron revisados los periódicos de orientación popular incluso desde el siglo pasado, y los diariosa La Tribuna y DIARIO DE COSTA RICA. Para la recolección de los datos periodísticos utilizamos las técnicas de recopilación bibliográfica, tales como las fichas de resumen, textuales y de comentario. Este material fue organizado temática y cronolÓgicamente, permitiendo observar las tendencias generales de los fenómenos. Las entrevistas cubrieron a varios representantes de esa primera generaci6n de comunistas, cuyos comentarios,_ observaciones
11.
y experiencias de lucha, amp1iaron nuestro conocimiento de1 contexto hist6rico y de los acontecimientos. La confrontación de la fuente periodística con la oral, permitió la precisi6n de detalles y hechos. El empleo de los Anuarios Estadísticos (1925-1935), El Censo de 1928 y el
Censo de Personas sin Trabajo de 1932, en-
riquecieron la información referente a la estructura económica y social, así como lo concerniente
a la comprensión de las con-
diciones de vida de los trabajadores, que tratamos en los capítulos I y III. En cuanto a la bibliograf Ía de carácter económico y social, queremos subrayar que no existen suficientes buenas obras de s!n~esis
general, exceptuando los libross
Desarrollo Social Costarricense, y
Estudio sobre Economía
Esto nos llev6
a consultar
blicación reciente, Historia
Interpretaci6n del
de José Luis Vega
Costarricense, ciertas
de Rodrigo
tesis de
Carballo, Facio.,
grado de pu-
que aunque tratan temas específicos
Económica, representan el
conocimiento más
de
avanza-
do, dentro de una nueva perspectiva metodológica y técnica. En tre ellas destacamos& El desarrollo del ccpitalismo en la industria 1870-1930 de Mario Ramírez B. y Manuel Solís,que.nos permitió aclarar el proceso de penetración del capitalismo, y la formación de una ol-igarquía burguesa paralelamente a las tendencias de proletarización de la masa laboral. El trabajo de Mario Sampers Rica
Evolución de la Estructura socio-ocupacional de Costa
constituyó un buen aporte para el
conocimiento de la
12.
evoluci6n. las tendencias y la composición de la estructura social. sobre todo 1os sectores populares. claves para la explicaci6n de·las fuerzas sociales que impulsaron la fundaci6n del Partido Comunista de Costa Rica en 1931. A nivel metodolÓgico, nuestro punto de partlda se situ6 /
en el\estudio de los sectores productivos de la estructura e-
¡ ,./ :...--
con6mica y social del país.f Esta problemática fue abordada de manera muy global y como punto de referencia, para descomponer la base material y social en que se fundó el Partido Comunista, y
luego llegar a una síntesis que nos aclarara el desarrollo
del capitalismo en Costa Rica. Posteriormente, Vtratamos de estudiar la coyuntura por la que atravesaba la vida del país,·y así tener un nivel
de concreci6n mayor en el análisis de1 a-
contecimientoº (~sto nos respondía a las interrogantes sobre t'
las condiciones generales y específicas en que se funda el Par- t tido Comunista. f
La
necesidad de tener una perspectiva histórica. para te-
ner una visi6n más explicativa del problema, nos llevó a estudiar la evoluci6n del movimiento obrero, para luego entrar al conocimiento del hecho de la fundaci6n.
/Tmtamoa
de partir de lo general
a lo particular. Sin embargo, esta manera de entenderlo nos acarre6 varios problemas. En primer lugar, si no existe claridad suficiente sobre el objeto de estudio específico y su evoluci6n ¿ cómo seleccionar los elementos de la realidad que son necesarios para explicar el tema ?
• Puesto que rio todos
los aspectos del organismo social
13. son necesarios para la explicación de un hecho. El trabajo de1 investigador, también consiste en hacer una se1ecci6n ágil y racional de
"las parcel.as" de la realidad, que le sir-
ven para explicar su problema concreto. Si se estudia un hecho -en este caso político - , lo fundamental es el esclarecimiento del problema en su nivel, partiendo del análisis del proceso en que está inmerso, y posteriormente plicación.
seleccionar los elementos necesarios para su
~
De esta manera se facilita hacer las relaciones el contexto al que pertenece, y 11e-
del hecho• estudiado
co~
gar a conclusiones
más integradas.
Los datos fueron clasificados en cuatro áreas fundamentales, los que se
r~ferían
a la estructura económica y social,
los vinculados a la evolución del movimiento obrero, lo referente a la coyuntura en que se inscribi6 la fundación del Partido Comunista, y por Último los que aclaraban sobre el acontecimiento de la.fundación misma.\En una primera etapa se dio una poca articulación e integraci6n de la información, exp1icada fundamentalmente por problemas te6ricos y metodolÓgicos
de
nuestra forrnaci6n. Estimulados por la crítica constnictiva de nuestros iectores, logramos re1acionar, integrar y aprovechar mejor la informaci6n, obteniendo una mayor síntesis e interpretación para explicar más objetivamente el
proceso. y la
arti-
culación de factores, que condicionaron la creación del Partido Cotmlnista en 1931. Así, queda pendiente para futuras investigaciones
el
14. estudio de 1a historia de este Partido, su desenvoivimiento e inf1uencia en 1a vida de Costa Rica.
Además, de la preci-
si6n y profundizaci6n en e1 método para el estudio de este tema, tan importante para el avance de1 conocimiento hist6rico de1 país. Para iniciar nuestro trabajo empezaremos por el estudio del desarrollo de1 capitalismo en Costa Rica.
"Aquellos que se. sentaron \
en sillas de oro para escribir serán interrogados por los que les tejieron sus vestidos' Bertolt Brecht
CAPITULO I
EL DESARROLLO DEL CAPITALISMO EN COSTA RICA HASTA 1930.
1. Penetración y desarrollo del capitalismo. Para comprender el desarrollo del
capitalismo en Costa
Rica, es importante remitirse a las condiciones en que se desarroll6 el país durante la época colonial.
La ausencia de gran-
des concentraciones indígenas, el desconocimiento de la existencia de metales preciosos, la lejanía de los centros político-administrativos de la Corona Española, y la ausencia de vías de comunicaci6n, provocaron en este territorio rasgos especÍ_ficos en su evolución posterior. La sociedad colonial se caracteriz6 por una pobreza bastante generalizada, aunque, no obstante, se establecieron mecanismos de diferenciaci6n social
originados
por los privile-
gios que la Corona otorgaba a los españoles, y en especial a sus funcionarios.
(1)
Al iniciarse la vida independiente encontramos un grupo social que había logrado acumular pequeñas fortunas a través de algunos cultivoss cacao, tabaco, etc.; y el comercio. Pero que, sin embargo, por los condicionantes apuntados en relaci6n a la situaci6n colonial, no logró transformarse en un grupo oligárquico, terrateniente, similar a los entronizados en otros países latinoamericanos. Por lo tanto, con el desarrollo del capitalismo a 15.
16.
mediados del siglo XIX • bajo la 6rbita del caf~ ~ste no encontrar¡ barreras a su expansi6n. El café, r'pidamente y sin
tropiezos, rompi6 las estructuras heredadas del período coloy logr6 constituirse en1a á.l.~rnativa econ6mica que la
nia1.
clase dominante necesitaba para estructurarse como ta1. puesto
que garantiz6
la vinculaci6n permanente al mercado in•erna-
cional. En el período que nos proponemos estudiar,el caf•
fue
el eje sobre el cual gir6 nuestra economía, cana1iz6 la mayo-
rfa de los esfuerzos sociales, y a su vez determin6 en.gran parte el desarrollo de
otr~s
actividades.
La producci6n cafetalera,
en
t~rminos
una realidad . debido al desarrollo de
capitalistas fue
proceso~
?e acumulaci6n
primitiva que tuvieron lugar en diferentes momentos.(2) El primero.
est~
referido a las pequeñas fortunas que se formaron
e~
?l período colonial mediante la producci6n cacaotera, el taba-
c-o, la minería
y
el comercio. -Luego,
los ~apitales acumulados
ex6genament. . principa1mente inq1ese~. que se invirtieron en nuestro país# y por d1timo, a partir de 1840, se produce un in-
cremento de la riqueza social interna creada mediante la apropiaci6n de plusvalía producida por los productores directos. El caf' promovi6 el crecimiento econ6mico,
dinamiz4
la
estructura econ6mica, y permiti6 que se expandiei:'a 1a riqueza
socia1 sobre e1 campesinado. Sin embargo, marc6 tambi'n la pauta para 1a concentraci6n y centralizaci6n de los capitales por parte de un pequeño grupo hegem6nico, que pas6 a controlar e1
17.
comercio importador y exportador, la usura, y la propiedad fundiaria. Este proceso de concentraci6n de los capitales se reflej6 en la tendencia a la concentraci6n de la propiedad fundia-
ria en el Valle Central.(3) Uno de los mecanismos más usuales fue la ocupaci6n de baldíos, promovida por e1 acceso a1 poder
político,
que permitió
a unas familias acaparar gran._cantidad
de tierra. También, en época de crisis, originada por los bajos precios del café
er.
el
mercado mundial' fue frecuente que muchos
pequeños productores se vieran despojados de sus tierras, por no poderle hacer frente
~
las
obligaciones crediticias.
Las estadísticas sobre la tenencia de la tierra no pueden mostrar claramente la concentraci-On fundiaria, porque ~sta se
di6 sin necesidad de que aumentara el tamaño de las fincas.(4) Las propiedades cafetaleras más extensas con frecuencia se encontraban fragmentadas. El impacto de la difusi6n y aplicaci6n de ciertos instrumentos y máquinas , a la producci6n cafetalera fue otro elemento que f avoreci6 el proceso de concentraci6n. Al respecto González Flores apuntaba. " ••• e1 adelanto que
representan los nuevos beneficios(donde se instala la máquinaria hidr~u1ica)
no es gratuito, talvés fuera imperioso para nuestra
industria, ya que sin él no fuera posible la competencia con
los
dem~s
países productores, pero el precio de tan importante
mejora se paga, en buena parte, con la desaparición de la peque-
ña propiedad ... (5)
18.
Hasta mediados del siglo pasado,
las técnicas de be-
neficiado eran artesanales y sumamente rudimentarias. Conforme el mercado
cafetalero fue ampli~ndose, se crearon con-
diciones para la separaci6n de la fase agrícola y la del beneficiado. ( 6) Este proceso se puede palpar en las listas de pedidos, patentes y exclusividades de fabricaci6n y venta de máquinas de beneficiar caféo (7) De esta forma las agroindustrias artesanales se fueron transformando en rama específica de la agroindustria capitalista. No todos los beneficiadores se encontraban en condiciones de efectuar grandes inversiones en técnolog!a, por lo que muchos se arruinaron contribuyendo º la concentraci6n. El número de beneficios tendi6 a reducirse, mientras
~e
se incrementaba el volumen de café exportado, al igual que la cantidad de café totalmente beneficiado y no en la forma de pergaminoº Este café procesado provenía de aquellos beneficios que utilizaban alt.::i tecnología y estaban mejor equípados.(8) Los beneficios manuales o simples tenderán a una disminuci6n relativa. El control del procesamiento por parte de un pequeño mero de beneficiadores,
n~
les perrniti6 apoderarse del plus tra-
bajo de muchos pequeños y medianos productores. La relaci6n de subordinación de los pequeños y medianos productores se agudiz6 a~n ~&s por la característica del sistema de cr~dito empleado, el cual puede catalogarse de usurario. El crédito que los grandes productores daban a los pequeños
productores, tenía por objeto asegurarse la producción de los segundos, y así cumplir con los compromisos contraídos con los compradores ingleses. Se form6 una cadena crediticia que se originaba con los adelantos de las casas
consignatarias ingle-
sas a los grandes exportadores, y éstos a su vez financiaban al pequeño productor ubicado en su área
de influencia. El no
cump1imiento a tiempo, de los compromisos econ6micos,
permiti~
despojar de sus tierras a los campesinos.(9) La contribuc"i6n de la banca nacional a1 crédito agrícola fue sumamente lirnitada.(10)
El Ban€o Anglo Costarricense,
e1
Banco de la Uni6n que luego se llamará Banco de Costa Rica, y el Banco Incernacional
no ofrecieron financiamiento permanen-
te al productor nacional. Todos esos procesos denotan que la producc~6n mercanti1 simple se subordinaba cada vez más al capital, reduciendo la independencia y l.as posibilidades de ganancia del pequeño productor. Fue entonces cuando se abrieron nuevas áreas de colonizaci6n fuera del Valle Central, por antiguos productores directos desplazados por el capital.(11) En estas áreas empezaron a surgir productores mercantiles dedicados a las subsistencias, el tabaco, la caña, y otros productos, proceso mediante el cual se contribuy6 a organizar el mercado interno. La producción cafetalera en el Valle Central generaliz6 la producci6n
para el mercado. En la medida en que los campe-
sinos se incorporaron a esta actividad, como productores directos, semiproletarios o jornaleros, se especializaron
y
20.
aumentaron su poder adquisitivo. Por lo tanto,
indirectamente
se estimulaba la producci6n artesanal. Desde fines del siglo XIX se observ6 un crecimiento de las industrias mercantiles campesinas;determinado por 1a expansi6n de las relaciones capitalistas de producción 1 y 1a constituci6n de un mercado interno. El desarrollo capitalista en el café, fue en s!ntesis quien cre6 e integró el mercado interno. En su fase inicial estimu16 el surgimie.nto de empresas mercantiles de carácter artesanal en el campo y la ciudad. Posteriormente, con la generalizaci6n
de la economfa de mercado,
los pequeños estableci-
mientos tendieror. a ser eliminados por la dinámica del capital, el cual no se centró exclusivamente en el café, sino que penetr6 otras actividades.(12) La acumulaci6n de capital originada en el caf~ posibi1it6 el desarrollo de la acumulaci6n en otros sectores de la economía, y la extensi6n de las relaciones sociales capitalistas. En la producci6n azucarera se :-onstituy6 un monopolio desde principios de siglo, producto de la concentraci6n.(13) En realidad, los
princi~ales
azucareros formaban parte
de una
oligarquía burguesa dinámica, con tendencias monop6licas alrededor de la cual convergía el capital agrícola, agroindustrial, mer.cantil, financiero y más tarde el industrial. De ah{ que las grandes haciendas azucareras, eran a su vez
cafetaleras y
contaban respectivamente con su ingenio y su beneficio.
21.
Por esta misma época, el desarrollo del capital también encamin6 sus pasos a otros niveles de la producci6n agroindustrial. ( 14) Se
fundaron sociedades industriales con el fin de
establecer empresas dedicadas al aserrado de las
maderas~
el
procesado de los cueros y tabacos; productos que contaban con una gran demanda interna y externa. La destrucci6n de la industria familiar de cigarrillos est~ ligada al establecimiento de la Republic Tabacco ··,..,,..;.....
cense en 1932.
'-·0:~
Co. en 1915 y la Tabacalera Costarri-
.
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El capital poco a poco se fue extendiendo al comercio, la usura,
las finanzas,
la
industria y
los servicios generales,
provocando una centra.1 ización productiva de los capitales· ya concentrados o En las. primerus décadas de este siglo se percibi6 un flujo de capitales hacia la industria,por parte de los sectores m~s
dinámicos de la clase dominante, conjuntamente con algunos
inmigrantes vinculados a ésta y grupos medios de burguesía pequeña y media.(15) Pareciera que las crisis provocadas por los bajos precios del c.=fé en el mercado mundial a fines de siglo, y
los efectos de la I
G~..lcrra
Mundial, condujeron al fortaleci-
miento de la participación de la oligarquíaburguesa en las actividades industriales. Hacia principios
d~:'!l
siglo XX el panorama de una industria
pre capitalista tendió a modif icarseo Hicieron su aparici6n algunas
f~bricas,
turas. ( 16)
y aumentaron considerablemente las manufac-
En el Censo Industrial· de 1915 aparecieron
154
22.
empresas industriales, sumo no duraderos,
la mayoría productoras de bienes de con-
especi1lmente alimentos. De ellas el 53%
correspondía a panaderí~y pastelerí~ 8% gaseosas, y 4% productoras de hielo, etc. En total el 73% producían
bienes ali-
menticios. Le seguía un 26% de bienes de consumo como velas, jab6n y artículos de cuero,
y un 11% de bienes de consumo que
podrían considerarse in.sumos de otras industrias. El Censo Industrial de 1915, vo en la estructura industrial,
refleja un salto cJalitati-
puesto que se observa la con-
sOlidaci6n de la empresa capitalista en algunos ramos: derivada de la harina,aguas gaseosas, cerveza, hielo, velas, calzado,
jabones, impresión, artículos de ~adera y de cons~picci6n.
Estas empresas pagaban
i~puestos
utilizaci6n de fuerza motríz
adicionales por derechos de
y de maquinaria, y se encontraban
concentradas en San José.(17) El aporte
de~
sector industrial fue muy limitado, ya que
aún hacia 1940 no sobrepdsaba el 8% del producto nacional bruto, ( 18) pero su creación nos plantea que el desarrollo del capitalismo en la industri~ surgi6 sobre la base del desarrollo del capitalismo interno. SegÚn lo afirman
~amírez y
Salís, el proceso de oligo-
polización econ6micque pertenecía
El~ctri
a la Costa Rica Electric Light
and Traction Company Limited.
En realidad el país contaba con una infraestructura vial caracterizada por la ausencia de caminos- de penetraci6n. Merz señalaba que el país contaba con apenas 1.500 Km en carreteras (y no en muy buen estado)
Km 2
para 1928 (44), y un
aún sin cultivar. Laexistencia de
era de
~rea
de 37·o000
líneas ferroviarias
850 Km aproximadamente (45) y su funci6n era en lo fun-
damental_, unir las
~reas
del cultivo del café en la meseta cen-
tral, con los puertos de exportación de la producci6n comercial. La construcci6n de carreteras y caminos estaba en función de la producci6n para el mercado
internacional~
los caminos
no
se orientaron a habilitar nuevas áreas y ampliar las fronteras de
producci6no Las vías de conrunicación expresaban la orienta-
ci~n
general de nuestra economía_., destinada fundamentalmente a
la satisfacci6n
del mercado internacional. De ahí que la prin-
cipa1 ruta de exportaci6n (la del Atlántico)
por el capital extranjero.
fuera controlada
3.
Estructura social
3olo
Origen y proceso de formaci6n de la oligarquía burguesa costarricense.* Hacia 1930, el desarrollo del capitalismo en Costa Ri-
ca había permitido la acumulación de importantes capitales en la agricultura, especialmente en el café, la agroindustria,
er
comercio, la banca y la industria,
trechamente vinculadosº
los cuales estaban es-
Esta interrelaci6n profunda en el con-
trol de las actividades económicas, diÓ origen a la formaci6n de una oligarquía burguesa, compuesta por un reducido número de capitalistas, aproximadamente a principios del presente si-
g1o. (46) Los elementos de esta oligarquía burguesa tuvieron diferente origen, algunos provenían de la " aristocracia colonial," luego se integraron en forma paulatina muchos inmigrantes europeos a españoles, alemanes, franceses,
ingleses, y por Último,
algunos campesinos costarricenses enriquecidos en la actividad cafetalera, como es el caso de don Julio sánchez y don Florentino Castroo (*) La caracterización de la clase dominante como "
oligarquía
burguesa " la hemos tomado de Mario Ramírez Bo y Manuel Solís expuesta en su trabajo. "El desarrollo capital.ista en l.a industria
costarricense " 1870-1930
38.
La ol.igarqu!a burguesa costarricense: no fue garquía cafetalera•• ni " ag roexportadora. ••
una .. ol.i-
exc1usivamente,
tal y como se ha venido afirmando. En el transcurso de este cap!tul.o hemos tratado de presentar el desarrollo del capitalismo en Costa Rica, clesde mediados del siglo diecinueve, sobre la base de la producci6n agrícola, especialmente la cafetel.era. Observamos posteriormente la consolidaci6n de los capital.es agrícol.as, fenómeno que se expres6 en una gran concentraci6n de los mismos, en la concentración de la propiedad fundiaria y en . 1a extensi6n de las relaciones capita1istas a otras actLvidades; como 1as agroindustriales, el comercio importador y exportador, 1a banca y la industriao Lo anterior significa, que la oligarquía b~r~esa ejerció una constante movilizaci6n y transferencia
de capitales de una
esfera a otra, por lo que suponemos, que no se inclinaba en lo fundamental hacia el derroche de ·sus ganancias en e1 consumo suntuario, sino hacia la permanente reproducci6n y· ampliaci6n del capital.. La nuestra no ~ue una oligarquía cafete1era tradicional, paternalista, como se ha qcerido pintar, sino una oligarquía burguesa, mancomunada y complaciente con el capita1 extranjero, que reinvertía en distintos
sectores productivos, controlaba
el comercio exterior y el aparato estatal.
3o2o·
C-onformación del proletariado costarricense. Estudiar 1as caraterísticas de los trabajadores costa-
rricenses, es conocer de la pobreza de un pueblo. Nuestro prop6sito es estudiar las fuerzas sociales y políticas que impulsaron el movimiento obrero, que culmin6 con la creaci6n del Partido Comunista de Costa RicaG Desde la época colonial las condiciones de trabajo y vida de la sociedad costarricense fueron de pobreza y Pero
tambi~n
retra~o.
desde entonces se present6 una dif erenciaci6n so-
cia1 en el interior de la misma. E1 elevado acceso a la tierra, la escasez
num~rica
mano de obra, la naturaleza agrícola de la producci6n,
_de la
ent~e
otros factores hizo que la nota prevaleciente en la masa trabajadora, fuera el predominio de campesinos y artesanos. pr~cci6n
La
poco tecnificada, la poca y elemental divisi6n del
trabajo, conf orm6 una poblaci6n: agrícola y artesanal en lo fundamental, hasta la vinculación permanente de nuestra economía al mercado mundial a mediados del sig1o XIX. Durante los años 1900-1930 nuestra integraci6n al mercado mundial capitalista estaba consolidada. Tanto como consumidores de mercancías manufacturadas, como productores de mate-. rias primas y productos agrÍcolaso La inyecci6n de capital extranjero ( inglés y norteamericano), y el desarrollo en general del mundo capitalista en su fase monopólica; aceleraron los procesos de concentraci6n del capital en Costa Rica 390
y fueron
40. modificando poco a poco la estructura social. Una de las tendencias sociales genera1es, consecuencia de 1a pau1atina concentración de la propiedad fundiaria y 1a riqueza socia1, fue el proceso de proletarizaci6n de 1os distintos tipos de trabajadores {artesanms, semi-proletarios agr!co1as, pequeños campesinos, empleados etc.), con la correspondiente pauperizaci6n de la masa laboral. Desde fines del siglo XIX se opera este proceso en la ·concentraci6n de la.propiedad de la tierra, agudizado por e1 cada vez más 1imitado acceso a los baldíos nacionales; y la diversif icaci6n de los canales de concentración de 1a propiedad ( sistemas crediticios, "adelantos", usura, otorgamientos de ba1d!os, extorsi6n en los precios, ventas, etc.). En el campo se da un aumento de los jornaleros, aunque 'stos no estaban totalmente proletarizados;
combinaban la
venta de su fuerza de trabajo, en·algunos casos, con su producci6n parcelaria partícula~ Y aunque las relaciones sa1aria1es estaban generalizadas,
existían otras relaciones de inter-
cambio y explotación: Boletos, cartones, fichas, productos, etc. Es así que crece este
semi-proletariado rural, que junto con
los pequeños propietarios, los obreros agríco1as y 1os peones en general, conforman la masa trabajadora agrÍcolaÍ E1 proletariado y semi-proletariado del campo, estaba poco cohesionado; por el hecho de que gran cantidad de mano de obra circulaba entre 1as haciendas, desp1azándose no s610 entre las grandes unidades productivas, sino también entre distintos tipos de pro-
41. ctucci6n
y trabajos.(47)
E1 hecho también del bajo desarrollo
t~cnico de la producci6n agrícola contribuy6
y a que sus luchas fueran espor~dicas,
a esta
dispersi6n,
a pesar de las duras con-
diciones de trabajo, los salarios miserables, la aguda explotaci6n y las malas condiciones de vida en los campos costarricenses~
Los movimientos y luchas de los campesinos se centraron en
1a 1ucha por la tierra, contra los grandes hacendada¡.MUy distinto es lo que sucedía en los enclaves bananero y minero, y las agroindustrias en que se trabajaba en condiciones técnicas m&s
desarrolladas, capitalistas, con una mayor división del tra-
bajo, mecanizaci6n etc. principalmente en algunas fases de la producci6n ( procesamiento de caf~, de la caña, construcci6n, transportes etc.). Mario
Samper en su trabajo sobre la evoluci6n de 1a es-
tructura socio ocupacional de Costa Rica (48), afirma sustentándose en 1os datos del censo de 1927, que percibe un aumento de los
jornalero~
para esta
~poca
se
que ocupaban el 40% del
tota1 de 1a poblaci6n censal ocupada. Esta categoría, la de jorna1eros inc1uía trabajadores de la agroindustria, construcci6n, transportes, mineros y trabajadores agrícolas,
que ya era una
fuerza de trabajo bastante proletarizada, aunque tuvieran diversas
ocup~ciones-
y
combinaran su trabajo salaria1 con otras for-
ma.s de subsistencia.
Los obreros agrícolas se concentraban en
lo fundamental alrededor de algunas fases de la producci6n ba-
nanera
y minera, transportes y
la agroindustriao
"E1 resto de 1os productores directos estaban constituídos
42.
en proporciones similares a los jornaleros, por agricultores y artesanos relativamente independientes "
(49)
Otra característica importante del período que nos ocupa, es la tendencia a la concentraci6n urbana y semi urbana; y la creaci6n de nuevos núcleos de poblaci6n (Ej. Turrialba, Ti1arán), creados por la expansi6n cafetalera, cañera y minera; por el. desplazamiento de los trabajadores agrícolas, la p~rdida de las propiedades campesinas, y el despido de mano de
o-
bra del banano. Estos sectores se agruparon alrededor de centros rurales
con elementos
~rbanos
( Cabeceras de cant6n, dis-
tritos, caseríos, etc.), aunque la mayoría de sus pobladores fueran trabajadores agrícolaso La elaboraci6n de varios artículos necesarios para el consumo y la producci6n, la reparaci6n de maquinaria agroindustria1, la construcci6n y mantenimiento de ferrocarriles y transportes. impulsaron el desarrollo de talleres, establecimientas manufactureros y algunas fábricas pequeñasº La disminuci6n y la diferenciaci6n al interior de los artesanos, la conversi6n paulatina de éstos en un proletariado artesanal, concentrado en los centros urbanos, fue crean•do un sector de trabajadores independientes, sin medios o pocos instrumentos de producción que trabajaban a domicilio o a destajo, oficiales de pequeños talleres, aprendices ayudantes, mecánicos, lit6grafos, ferrocarrileros y obreros. " En síntesis, a partir de la diferenciaci6n al interior de los talleres artesanales, del desplazamiento progresivo de
43.
las ac±ividades productivas domésticas y de la subordinaci6n de una parte de los artesanos al capital comercial, fue surgiendo poco a poco
u~
proletariado industrial que aún pesaba
poco en términos cuantitativos, pero cuya aparición constituía un cambio cualitativo importanteo"(SO)
E1 desarrollo de este proletariado artesanal y este pequeño sector obrero en la ciudad, es una muestra de la existencia embrionaria
de una industriaº Los obreros
,
agrico-
las y el proletariado rural expresan en alguna medida
-
netraci6n
la pe-
del capitalismo endagro. Debemos afirmar con res-
pecto a la industria, que su desarrollo fue débil, aunque en este sector secundario de l~ economía, empiezan a conformarse grupos de fabricantes industriules,
lo que refleja la exis-
tencia de pequeñas fábricas, manufacturas, talleres e ingenios
más tecnificados. A su vez, la naturaleza agraria y dependiente del desarrollo capitalista costarricense y la política econ6mica liberal del Estado, fueron limitantes a este tipo de producci6n. Pero las condiciones de vida y de trabajo 'impuestas por el capital, eran compartidns por el pequeño número de obreros, el pro1etariado artesanal, agroindustrial y agrícola. Las con-
diciones sociales estaban dadas para la fundaci6n de un parti-
do nuevo que se sustentara en estas fuerzas sociales. "En el campo y la ciudad se había
desarrollado un sec-
ter obrero pequeño pero no despreciable (agrícola, manufactu. ~ rero, d e transportes, construccion, e t c. )
., como
~si
un semi
44.
pro1etariado numeroso".(51) Los sectores medios, la pequeña burguesía urbanas empleados públicos de"levita", de comercio, maestros, profesionales. no tuvieron un papel destacado en las luchas populares. sus movimientos fueron esporádicos, por reivindicaciones económicas limitadas.
A excepción de un pequeño y valioso grupo de inte1ectuales que impulsaron movimientos antimperialistas junto con los trabajadores de la época, se sumaron a las luchas populares don .
Omar Dengo, Billa Zeledón, Aniceto Montero, Joaquín García Monge, Carmen Lyra y Luisa González, que se afilian
luego a las
luchas e ideas revolucionarias del mOV"imiento obrero (como las dos Últimas).
Estos
s~ctores
del proletariado artesanal, los obreros
agrícolas, bananeros, los mineros y ex mineros, un pequeño número de obreros fabriles, y un pequeño sector de la intelectualidad, fueron la base social en que se sustent6 el naciente Partido Comunista.
CITAS
(1)
Stone, Samue.l.• L.: d.in.astíc.. de los conquistadores. Educa., Centroamérica,
(2)
·so~.::..s.
v
~975.
p.p. 51-66.
Rarn!rez Bo, Mario; Solis ~3:ruelo El desarrolio capitalista en la industria costarricense 1850-19300 Tomo Io Tesis de
Licenciat~ra
de la
Es~Jela
Centroamericana de So-
ciolog!a, San José-Costa ~ica, 1979, p.17. ( 3)
,
.
V é ase: Ramirez. 5oza, Mar~o. La pol~mica de la concentra. , d . cion e la t l.er:}.-_a_. er.. Costa Rica; Mitos e ideo1og!as so-
_b.....r...e__e._l__d_e_s_a__r____r_o_~_-_1_o_c......._o....,p._i.....· .... t ....a_l__.._i.... s_t_c._ . . . __1_8_5_0,_-_1_9_3..___0 • Departamento
de Sociología,
Fac~lt..:.td
:le Cü:~~cias Sociales, Univ.ersi-
dad de Costa Rica,
1978~
(4)
Ramíre:z. B., t-:aric
SolÍs M~nucl,
(5)
González Flores, Luis Felipe. "El desenvolvimiento his-
1 ;
ob. cit., Tomo I p. 25
tórico del desarrolo de: café en Costa Rica y su inf luencia en lú cultu!"a nacionalº .e" nogra~ia
llo,
Jos~
d.e~~P., 1 e e' Tomo I
Luis. La
e~1 ~orge
Carranza editor Mo-
P•
24 • Tomado de Vega Carba-
evol~ci6n
agroecon6mica de Costa Ri-
ca en intep~o de periodización y síntesis (1560-1930),
mirneograf iado. i
Tomo I
( 6)
Ram!rez B., Mario; S01is Manuel, Ob. cit.
(7)
Cardoso, Ciro. "L.:l foi.-mación de .:.a hacienda cafetalera en Costa Rica sig!o XIX" americanos.
c.s.u.c.A,
p.36
En: Estudios Sociales Centro-
Centroamérica. septiembre-diciem-
bre 1973, Kr.6, p.37 • 45.
46.
(8)
Ram!rez B., Mario; Salís Manuel. Tomo I, ob.cit. p.49
(9)
Idem.
(10)
So1ey GÜéll, Tomás. Compendio de Historia Econ6mica y
P .• 26
Hacendaría de Costa Rica. Editorial Costa Rica. 2a. Edici6n, San José, Costa Rica, 1975, p.93 • (11)
Samper, Mario. Evoiución
de la estructura socio-ocupa-
cional costarricense: labrad-Gres, artesanos ros 1864-1935.
y
jornale-
Tesis de Licenciatura en Historia, u.c.R.,
p.188 • (12)
Ram!rez B., Mario; Salís Manuel. Tomo II, ob. cit. p.4
(13)
Idem. p.100
(14)
Idem. p.p. 87, 88, llS, 1160
(15)
Idem Tomo I, ob.dto, p.152
(16)
Idem. p.135
(17)
Idem. P•P• 144-145
(18)
Departamento de Investigaciones de la Escuela de Ciencias Econ6micas y Sociales, El desarrollo Econ6mico de Costa Ricas estudio del sector industrial. Tomo
II~.Universi
dad de CostaRica, Ciudad Universitaria, 1959, p.28 • Tomado de Ramírez B., Mario y Salís A. Manuel, Tomo
I, 1979,
p.134. (19)
R~!rez
B.,Mario, SolÍs Manuel, Tomo I. ob. cit., p.p.122-
125 • (20)
Gi~:Pacheco,
Rufino. Ciento cinco años de vida bancaria
en Costa Rica y algunos hechos sobresalientes de nuestra economía. s.P.I.,San José, Costa Rica, 1958, p.43
•
ir:~·. ·.-~-:
47.
(21)
Idem.
p.74
(22)
Idem.
p.104
(23)
Idem.
p.105
(24)
Idem.
p.151
(25)
Nuñez Soto, Orlando o El estado naciona1 al servicio de 1as empresas multinacionales.(El enclave bananero en Costa Rica). CSUCA. Serie análisis
econ6mico #4, 1976,
p.p.2-4 (26)
Facio, RodrigoÁ Estudio sobre economía costarricense. Editorial Costa Rica, San José,-Costa Rica, 1975. p.58
(27) · Véase. Casey Jeffrey. Lim6n 1880-1940. Un estudio de 1a Industria bananera en Costa Rica. Facultad de Filosofía y Letras. Instituto de Estudios Latinoamericanos, Uni-
versidad Nacional Autónoma, Heredia, Costa Rica, 1977, P• (28)
66-73
Fern~ndez
Mario; Schmidt, Anabelle; Besausi, Víctor.
~
pob1aci6n de Costa Rica. Universidad de Costa Rica, San José, Costa Rica, 1976, p.16 (29)
Véase. Casey Jeff rey ob. cit.
(30)
Loe. cit.
(31)
La Tribuna, 8 de noviembre de 1928, p.4
(32)
Facio, Rodrigo. Ob. cit. p.60
(33)
Ver~
p.p. 146-147
Merz, Carlos. El comercio internacional de 1a Repú-
blica de Costa Rica, Tomo II. Imprenta Nal, San José, Costa Rica, p.p. 28-35 (34)
Quesada Camacho, Juan Rafaelo Historia econ6mica del
cacao en Costa Rica 1880-1930. Tesis de Licenciatura en Historiao u.c.R. 1977. (35)
Idem
(36)
V~ase:
(37)
Araya Pochet, ca
P•P• 132-143
p.59
Quesada Camacho, Juan Rafael. 1977. ob. cit. ~arloso
1890-1930.C~tedra
Seoundo Ciclo Minero de Costa Ri-
de Historia de las Instituciones de
Costa Ricaº Escuela de Historia y Geografía,...Dniversidad de Costa
Rica, 1977, po8
(38)
Idem
P•P• 4-~
(39)
Idem
P•Po 10-15
(40)
Idem
p.11
(41)
Idem
p.14
(42)
De· aéllerdo a la Información de los Anuarios Estadísticos 1900-1932
(43)
Gaceta Oficial, 22 de octubre 1919, p.277. En Araya Pochet, Carlos. Ob. cito po29
(44)
Merz, Carlos. El comercio internacional de la RepÚb1ica de Costa Rica. Tomo IIo Imprenta Nal. • San José, Costa Rica, 1929. po26
(45)
Loe. cito
(46)
Ram!rez B., Mario; SolÍs A., Manuel. Ob. cit. p.160
(47)
Ver: Documentos del 9oncurso de Autobiografías Campesinas, organizado po~ la Escuela de Planificaci6n y Promo-
ci6n Social de la Universidad Nal. , Heredia
(48)
Samper K., Mario. Evoluciór. de la estructura socio-ocupacional costarricenseº Labradores, artesanos- y
49.
jornareros 1864-1935. (49)
Obo
cit. p"'
(50)
Obo
cit. pol38
( 51}
Ob. cit. p.128
12~
u.c.R.,,
1979, p.140
"Detrás de cada 1ucha 1a 1ibertad será
una perenne· ··11aga .. Jorge Debravo
CAPITULO II
Alfl'ECIDENT~
POLrricos, IDEOLOOICOS y OBGAN:rzA'!IVOS-
DE LA FUNDACION DEL PARTIDO COMUNISTA
Entendemos la fundaci6n como el producto de un 1argo proceso, que arranca desde mediados del siglo XIX, con las prime-
ras organizaciones populares de carácter mutualista y que culmina en 1931 con la fundaci6n del Partido Comunista de costa
Rica.
En realidad desde que existe objetivamente la contradic-
ci6n trabajo-capital, se dan las condiciones para la lucha de los trabajadores, i!J.a explotación es la que engendra las ideas~
los organismos, las fuerzas sociales y los hombres encargados de destruirla.
Hemos dividido este proceso en tres perfodos
tomando en cuenta la dinámica que
e~iste
entre el tipo de orga-
nizaci&n popular, la forrr.a de lucha que esta condiciona, y el nivel de desarrollo ideológico que expresa. A la vez tomamos cuenta el desarrollo de
~¿
en
conciencia antimperialista, como una
forma de conciencia popular y nacional, que se vincula con el fortalecimiento de la conciencia internacionalista, y en gene'• l. . ra 1 con el nivel po.J.~ .l.:
nos. campesinos,
·-:(;
0
ideol6gico de los obreros, artesa-
jornaleros, pequeños propietarios, intelectua-
1es y capas medias. La evolución
de
e~tos
elementos es la que nos ha marcado
1a pauta para la p~riodización, que no tiene un car~cter lineal
so.
Sir.
y, abso1uto. pues, las asociaciones
mutualistas, los gremios,
ios sindicatos, las confederaciones obreras, como formas de organizaci6n de los trabajadores coexisten hasta la fundaci6n del Partido Conrunista en 1931.
Destacamos los núcleos que den-
tro de los sectores populares, van avanzando hacia formas más desarrolladas y, marcan la pauta para intentar esta
p~riodiza-
ci6n. El primer período se inicia en la segundamitad del siglo XIX, cuando surgen°I.as primeras organizaciones de trabajadores, de carácter mutualista y concluye en 1913, con la fundaci6n de la Confederaci6n General de Trabajadores. Es un período de luchas aisladas, dispersas, y reivindicativas ciedades de artesanos, gremios, y
sind~c~.t.os.
el primer intento por centralizar y
impulsadas por soLa C"GT muestra
elevar a planos de orga-
nizaci6n superior el disperso movimiento popular, aunque ya habían surgido Federaciones Obreras desde 1905. El segundo período, parte de la creaci6n de 1a Confederaci6n hasta 1923, cuando ésta decide disolverse para fundar el Partido Reformista. deraci6n
f
A pesar de que 1a liquidaci6n de la Conre-
ren6 el desarrollo sindica1, es importante la deci-
si6n de los trabajadores de participar plenamente en la vida política de Costa Rica, y de buscar una organizaci6n independiente, que expresara los intereses de los sectores populareso Al disolverse la Confederaci6n esta pierde su identidad sindical para seguir al Reformismo. Otros sectores del proletariado buscan mantener ese perdido instrumento de 1ucha y ~
52.
fundan en 1923 la Confederaci6n Obrera Costarricense 0 A partir de 1923 y hasta 1931, delimitamos e1 tercer período. Es un período de búsqueda de una organizaci6n po1ítica de nuevo tipo, dado que era una necesidad aglutinar a los e1ementos más desarrollados y dispersos aún de los trabajadores costarricenses. Es una etapa plena de luchas políticas, con un gran desarrollo de la iucha antimperialista e internaciona1istao 2.-Primer período: Las prime!"a.s orqanizaciones populares 1850-1913 Este primer período contempl::i un largo proceso en el cua1 . -· .
se
-
-
-
sentaron las bases de la penetraci6n
ciedad costarricense.
·-
----- ---
----- ·---
---
capital.is~~_J.a_~o-
Partimos a mediados del siglo XIX cuan-
do la sociedad costarricense ha iniciado su inmersi6n en la ~rbita del capitalismo dependiente fetalera~
d
través de l.a producci6n ca-
evidenciada en l~ dominaci6n por parte del capital
agrario de las esferas de la producción y circulaci6n. Los productores directos se encontraban en este momento, sujetos de una forma u otra al capital, co!no asalariados puesto que algunos comenzaban a trabajar part2 de su tiempo para la hacienda, ·o a través del mercado.(1) En el Último tercio del siglo XIX el desarrollo capitalista se profundiz6 con la intervenci6n directa del capital extranjero)representado en la construcci6n del ferrocarril al Atlántico y en el establecimiento de los enclaves bananero y minero. Las agroindustrias
del café y la caña acrecentaron
53.
su tecnificación, por lo que los pequeños pr9ductores se subor dinaban cada vez más al capital agroindustrial financiero y comercial. Por lo tanto, el proceso de diferenciaci6n social en el campesinado tendi6 a ampliarse al igual que las relaciones salariales.
Por esta ?poca se abrieron nuevas zonas 1
de
colonizaci6n, destacándose la f ormaci6n de grandes haciendas en 1os Valles de Turrialba y Reventaz6n, en las cercanías de la vía ferrocarrilera. Entre fines del siglo XIX y primcipios del XX, se cansolidaron importantes talleres artesanales con fuerza de jo asalariada, en oficios
~as
zonas urbanas y semi-urbanas.
traba~
Algunos
artesanales tendieron :: disminuir por la competencia
de los artículos importados, sin embargo, les de 1907-1915, gunas fábricas.
~os
censos comercia-
revelan :a existencia de manufacturas y alEl trabajo en lo fundamental era de tipo
artesanal, predominaba el pequeño taller.
En el Censo Comer-
cial de 1907 las industrias más desarrolladas aparecen con un promedio de
16.2
trabajado~es.
En el Censo
de 1915, hay un
incremento cualitativo sustentado en la transformaci6n de talleres por manufacturas y =ábricas de mediano tamaño.(2) Este panorama nos muestra
U!-1
desarrol1o desigual del ca-
pitalismo en las distintas Legiones del país, y dentro de las diferentes actividadesº Las regiones m&s penetradas por el capitalismo eran, la Atlántica, la central que comprendía parte de las provincias de Heredia, Alajuela y San José y la zona
.
.
.;-
-
,
.
minera de Tilaran y Abangares. Pero, es en las areas de dominio del capital extranjero donde prevalecían las relaciones \
'l.
54.
secia1es de producci6n eminentemente
capitalistas, la genera-
1izaci6n de las re~aciones salariales, y por lo tanto era más fáci1
visualizar la explotaci6n capitalista. El desarrollo desigual del capitalismo se ref1ejaba tam-
bién
en las formas de organizaci6n popular, y en la coexisten-
cia de formas de organizaci6n poco desarrolladas con otras de avanzada. En las zonas urbanas, especialmente en San José a1rededor de 1850, es explicable que las primeras formas de organización fueran las sociedades mutualistas, puesto que 10 que existían eran pequeños talleres artesanales. Las sociedades mutualistas eran uniones de artesanos que tenían por objeto brindar.solidaridad entre sus asociados.
Con este fin creaban cajas de
ahorco > para dar socorro a sus miembros en caso de enfermedad, accidente o muerte. En las primeras organizaciones mutualistas fue frecuente la participaci6n de los patronos, probablemente pequeños propietarios, como un asociado más. ciedades
En casos aislados, estas so-
mutualistas abandonaron los límites del socorro mu-
tuo. y elevaron sus protestas ante
rebajas en los salarios o
pro1ongaci6n en la jornada de trabajo.
La participaci6n de los
patronos en estas sociedades, al igual que su orientaci6n. revela en gran medida el carácter de la
sociedad
costarricense
de ésa época1 y el poco desarrollo del capitalismo en la industria, que no le permitía a los artesanos detectar el origen de sus problemas y desarrollar
un instrumento de organizaci6n
ss. independient.e. Sinmunista en 1931. En e1 Atl~ntico, el capital extranjero fue el habiLitador y explotador de la zona. Para la c0nstrucci6n del ferrorril, la obra
m~s
importante realizada durante el siglo XIX,
fue neeesario importar mano de obra puesto que los procesos de expropiaci6n apenas se iniciaban, y las condiciones inhospita1arias de la zona, y de trabajo, no ofrecían ninguna atracci6n a los habitantes del interior. Fue así como hicieron su aparici6n las inmigraciones china e italiana. Los chinos y posteriormente los italianos comprendieron rápidamente la naturaleza de las relaciones de producci6n capitalista, para el~os
era más
f~cil
que para el pequeño productor, el semipro-
letario de las zonas cafetaleras y el
artesano~
que se encon-
traban mediatizados por vínculos "paternalistas" (14). y respondieron
a la explotación con motines y levantamientos.
protesta de los chinos (1874) fue reprimida en forma tan
La
59.
vio1enta por las autoridades nacionales, que varios chinos resultaron ttaíllLtos.(15) Los obreros italianos fueron los protagonistas en 1888 de 1a primera gran huel· .
10. peder.
Fue capaz de enfrentarse a los viejos líderes del Re-
pUb1icano, Máximo
Fern~ndez y
Ricardo Jiménez por considerar
que 1a crítica situaci6n econ6mica no permitía cancelar la deuda po1!tica. (31) G·onz~1es
Flores busc6 el apoyo del pueblo, se acerc6 a los
trabajadores para que comprendieran la dimensi6n de los proyectos de reformao
.
Con este fin se publicaron folletos en 1os que_
de manera clara se trataba de explicar los alcances de la reforma econ6mica, sin embargo, el nivel de vida del pueb1o se encontraba sumamente deteriorado,y el bajo nivel político no 1e permitía detectar la causa de la grave situaci6n econ6mica. La oposici6n de González Flores petroleros Pinto Grew1ich
a los famosos
contr~tos
fue la causa inmediata de su caída.
puesto que afectaba los intereses econ6micos del imperia1ismo y de 1os entreguistas nacionales.
E1 aislamiento po1{tico creiS
1as condiciones para la realizaci6n
del golpe de estado per•
petrado por su ministro de Guerra, Federico Tinaco• El movimiento chas.
obrero se mantuvo al margen de estos "1he-
N:o era lo suficientemente fuerte para detener el golpe.
ni tampoco hab!a comprendido con claridad las intenciones reformistas de
Gonz~lez
Floreso
Costa Rica vivi6 entonces una
diz6 adn
m~s·
ho~_rible
dictadura que agu-
los problemas econ6micos y sociales.
Se elimi-
naron 1as libertades públicas, los cuerpos represivos genera1izaron el terror con el fin de ahogar cualquier intento de rebe1i6n.
71.
Tinoco cont6
con el apoyo directo
e indirecto de los
viejos políticos "liberales", de la burguesía y los terratenientes que se habían sentido
.
,
amenazados, y de Keith quien
.
le presto su ayuda financiera. La oposici6n al r~gimen
agrupó a personas de todas 1as
clases socia1eS;Y en ella se destacaron los artesanos
pro1e-
tarizados de lcs ciudadesº -Las precarias condiciones de vida incrementaban el descontento popular y propiciaban la organizaci6n del pueblo.
Los gremios
presionaban contra el alto
costo de la vida y la especulación a que estaba sometida la poblaci6n.
La lucha econ6mica se transf orrn6
en lucha pal!-
tica, puesto que el objetivo principal de los sectores populares era derrocar la dictadura. En las condiciones de lQ dictadura la Confederación General de Trabajadores llamó a su primer Congreso en 19i7.(32) El Congreso discutió sobre los problemas econ6micos, en especial el de las subsistencias.
Solicitó la promulgaci6n de
una ley de protección al consumidorJque pretendía castigar a los acaparadores y especuladoreso ·.:·
En cuanto a resoluciones políticas, su decisión fue la de La no participación de los trabajadores en política.
Proba-
blemente estuvieron presionados por las condiciones políticas del momento. Sin embargo, el
movL~iento
obrero no sólo no estuvo aje-
no a la lucha política, sino que las reivindicaciones econ6micas que se impulsaron adquirieron el carácter de luchas contra ' .:\,,~,
$fr:~{{_
72.
el r~imen.
Grupos de trabajadores se incorporaron al movi-
miento armado contra la dictadura;•. que organiz6
la Junta Re-
volucionaria insta1ada en Nicaragüa. En mayo de 1919 se declararon en huelga los gremios de panaderos, de pureras, y cigarreraso les exigieron aumento de salarios.
Los empleados municipaLos panaderos de Heredia
tambi~n fuerona..B. huelga demandando disminuci6n de 1a jornada
de trabajo y aumento de salarioso(33)
A estos
movimiento~
,
de protesta se agregaron los maestros)encabezados por Carmen
Lyra >exigiendo aumentos salariales y oponiéndose finnemente a los recortes de personal en el Magisterion
Las plantacio-
nes bananeras fueron escenario de conflictos sociales que se reprimieron duramente por las autoridades nacionales del gobierno tinoquista.
Los estudiantes del Liceo de Costa Rica
y de la Escuela de Derecho se lanzaron a las calles en protesta contra las arbitrariedades del régimenº L a volun t a d y
. . , de d ecJ.sior.
tente el 13 de junio de 1917
1 uc~.:.a 'h d e.1 pue bl o se. h.izo pa-
~~ando
los maestros concluyeron
una manifestaci6n con la quema del per16dico ·LA INFORMACION, vocero gobiernistao(34) gimen era tan Costa Ricaº
~anifiesta
rl
estas alturas la oposición al ré-
que los Tinaco dicidieron huir de
De esta forma se abri6 paso
el retorno a la cons-
tituciónalidado En los movimientos
~uelguísticos
de 1920 y 1.921 se puso
de manifiesto la e>...rperiencia ch-.; lucha acumulada por los gremios y sindica.tos, puesto cr__¡e la huelga general de 1920 dio
73.
origen a1 establecimiento de la jornada de 8 horas para 1os empleados p~blicos. Este movimiento de las ocho horas y aumento general de salarios. fue iniciado por los Ebanistas y Carpinteros.
Las
demandas no fueron aceptadas por los patronos, por lo que se.
decidi6
crear un Comité que adquiri6 funciones de Comité de
Hue1ga, por encontrarse en paro los traba]adores.
La primera
medida que impuls6 el Comité, fue la de extender el·movimiento a otros gremios y
ciudades~para
convertirlo en una lucha
liaciona1. Por esta raz6n se fueron
sumando al paro los car-
pinteros, mecánicos y pintores del Ferrocarril al Pacífico, los obreros de los Talleres de Obras P6blicas, los trabajadores de la F~brica Nacional de Licores, y de otras dependencias del
gobierno.(3~)
favorable a los
La ~Y!..!elg;:t_
cadu
VE:Z
vislumbraba más
se
trabaj~dorcs.
E1 movimiento
apoyado en todo momento por la Con-
estuv--:
federaci6n de Trab2jadores, pero no exactamente dirigido por ella, sino por el
Comit~
ese entonces los obreros
de Huelga. ~ebasaran
Es muy probable que para en inciativa
a 1a Confede-
raci6n. E1 ambiente lleg6 a ser-tan tenso que la mayoría
de 1os
establecimientos-pÚblL::os>y de comercio se encontraban cerrados.
Sin embargo, el mov·imiento se ampliaba cada vez máso Los
empleados del mercado, como las costureras, pureras, zapateros, se sumaron a
~l
e incorporaron sus demandas referentes a la
lucha contra el alto ~-~;>~··. _J ••
cos~o
de los
al~~ileres
y
la usurao(36)
74.
posteriormente se integraron los empleados del trabajadores de la Planta de los Anonos, M~s
pintores, tip6grafos.
tranvía, los
zapateros, panaderos,
tdrde pasaron a formar
parte
los
empleados de la Traube, los saloneros, los marineros de1 Go1-
fo de Nicoya, Lim6n y Puntarenas y los cocheros.(37) ~e
La para1izaci6n
las dependencias del Estado y de mu•
ellos servicios y actividades evidenci6 la presencia de una hue1-
ga genera1.
La prensa editorializaba
urgi~ndo1e
su intervenci6n para poner soluci6n al conflicto. momento la actitud derecho de huelgd
no quisiesen
Hasta ese
la de reconocer el
los trabajadores, pero paralelamente de
d~·
proteger y obligar
gobierno había sido
dPl
a1 gobierno
.l
que
partiri~ar
se respeta.se ld voluntad de los que
en "alterar el orden plSblicG" ..-·
y combatividad de los trabajadores lleg6 a ser
La presi6n
tan gigantesca que el gobierno se decidi6 a intervenir en el conflicto, y
d
aceptar las demandas en lo concerniente a empea-
dos del estado.
fue una realidad
Por lo tanto a partir del 4 de febrero de 1920 lci jornada de 8 horas, y un aumento de salarios
de1 20%.(38) Pero, no todos los patronos tomaron esa actitud, por lo que la huelga dur6 varios días más.
In~luso,
muchos gremios
continuaron luchando , hasta que se promulg6 la Ley Ne.100 de1 9 de diciembre de 1920, donde se legaliz6 la jornada de trabajo de 8 horas para ios jornaleros,
artesanos, trabajadores de fin-
cas y empresas similares, y 10 horas para los empleados de comercio.(39)
75.
Sin embargo, ahí no terminaron las luchas de ese año.
En junio de 1920 se produjeron grandes manistacio-
nes frente al Congreso cuando
se discutía el
importaci6n y exportaci6n del azúcar Los
reivindicat~vas
trabajadorP~
y
problema de la
de las subsistencias.(40)
se negaron a que el Congreso permitiera
la exportaci6n de az6car, puesto que la
misma
e1 costo del producto en el mercado naciona1o
había ,elevado En realidad, la
protesta de los manifestantes no era s610 contra las exportaciones sino que estaba dirigida contra el alto costo dela comercio y la especulaci6no cer el
di~logo
con los
vida~
el
Los diputados trataron de estable-
manifestantes~
pero la falta de madurez
pol!tica y los ánimos caldeados hicieron que el asunto terminara en un apedreo
al Congreso ; y
a algunos diputados quienes
se manifestaban a favor dela exportaci6no Entre los organizadores de este movimiento se encontraban el dirigente obrero Juan Rafael P~rez, el
Dr.
Aniceto Montero
y el diputado Gerardo Matamoros, y contaban con el apoyo de la
Conf ederaci6n. Lo sucedido en el Congreso sirvi6 de pretexto al qobierno para
elaborar una ley con el objeto de que se castigase a los
responsables de ese tipo de actos. llegaron al
concenso de que tales
Sin
embargo~
los diputados
acontecimie~tos,
eran una
protesta general contra la política econ6mica del gobierno. Las manifestaciones continuaron, la mayoría de ellas dirigidas contra los comerciantes. En 1921 Lim6n fue conmocionado por numerosos movimientos
76.
hue1gu{sticoso
A partir de 1913 la producción bananera man-
tenía una tendenci;;t a c1ismirn.1.Ír ld pro~;:cci6n, ocasionando
graves problemas P.í")n(5micos y socL.ües r.:-n la provincia. Compañía atribuía
·:;u baja en la producci6n al surgimiento
de plagas, como la de la mosca prietao pleo motiv6 a la car un mayor
La
La amenaza de.1 desem-
Federación de Trabajadores de Lim6n a bus-
acercamiento con la de San José, y con ese fin
sus dirigentes se reunieron para coordinar esfuerzos y entregarse solidaridad mutua. Simultáneamente, la Compañía decidió
entrar en un seve-
ro régimen de economía, y decretó el despido masivo de trabajadores.
La Federación de Trabajadores de Limón declaró la
huelga general de todos sus asociados en demanda de la restituci6n de los trabajadores despedidos
v un alza general de
salarios.(41) Por supuesto la cienes.
Compañía no aceptó ninguna de las candi-
Por otro lé:tdo, solicitó al goblerno el resguardo de
sus bienes, para lo cual se envió un contingente de policía, que lo primero que hizo fue detener a los principales dirigentes.
Seguidamente se realizó una gr2l.n r.1anifestación de pro-
testa, durante la cual se intent6 quemar las instalaciones de la Compañía, razón ¿or la que se destituyó al Presidente de la Federación Carlos Monge
Cr~~~.
Como respuesta la policía
incendió el local de la Fede'!:""~ciÓno Día a día la huelga se extendía por la provincia de Lim6n.
La Confederaci6n General de
Tru~ajadores
organizaba la
77.
solidaridad en el resto de1 país, en especial, recogiendo fondos econ6micoso La tesis sostenida por el E·stado fue la de que los empresarios tenían el derecho de contar con los
trabajado~s
que
quisiesen, y disminuirlos cuando el negocio lo ameritara. La huelga tenía más de un mes, cuando la United rea1iz6 otro despido masivo de trabajadores bajo los mismos argumentos. Esto afianz6 aún más la huelga, la cual se mantuvo todo febre-
ro.
En esas circunstancias estalló el conf 1icto limítrofe con
Pan~,
y tanto 1a Confederaci6n como la Federacióñ de Trabaja-
dores de Lim6n, renunciaron a sus peticiones y llamaron a los ~rabajadores
a incorporarse a la defensa de la Patria.
Ante
esta situaci6n el movimiento huelguístico se ahogó, pese a que contaba con grandes perspectivas de triunfo.(42) La guerra con Panamá era una guerra creada
por compañías
petroleras· imperialistas, una de ellas establecida en Panam~
y la otra en Costa Rica.
Ambas estaban dispuestas a variar la
línea fronteriza a costa de lo que fuese, ante la expectativa de encontrar yacimientos petrolíferos enla,frontera suro En nuestro país, Aniceto Montero y Vicente Sáenz, no encontraron apoyo en sus denuncias sobre el carácter de la guerraº
Esto demostraba que el movimiento obrero todavía no su-.-
peraba los marcos de la lucha economicista>y aún le faltaba mucho desarrollo para lograr su independencia ideológica de la
burguesía. Las luchas campesinas
en las primeras décadas de este
780 sig1o~
est~n
estrechamente vinculadas al proceso de concentra-
ci6n y acaparamiento de la propiedad.
En sus investigaciones
De la Cruz detectó una serie de actos que la prensa denomin6 "1and~licos
o de bandolerismo agrario, que se caracterizaron
por la quema de siembras y cosechas, a las que atribuye el ca-
r&cter de "lucha social instintiva de los grandes sectores campesinos, que se ve!an amenazados de ser expropiadoso••"(43) Reflejan estas formas de lucha un nivel de conciencia muy embrionario y espontáneo.
De la CrJz define estos movimientos
como "ludismo agrario", por el. paralelismo primeras luchas contra el
capitalis~o
existente- con las-
industrial.
Por su par-
te, Lowell Gudmunson plantea un análisis muy interesante-sobre 1as modalidades de la lucha agraria en el Guanacaste, lugar donde se generaron las más violentas hasta ese entonceso(44)
En síntesis,
Gudmunson destaca la existencia de dos ti-
pos de luchas agrarias protagonizadas por dos tipos de campesinado, con raíces hist6ricas diferentes: los de las tierras bajas del 1itoral)quienes se situaban dentro de las grandes haciendas ganaderas, y los campesinos parcelarios ubicados en 1a zona cercana al distrito minero de Tilarán y Abangares.
Las
causas del conflicto y las rci·vindicacion.es de los campesinos fueron distintas para Cdda grupoo Los campesinos de las
tierras
b~jas
formaban parte de una
economía que en lo fundamental era t3e subsistenciao
La tierra
se encontraba inexplotada, en abundancia, y se consideraba un bien libre y gratuitoº
Las razones de lo anterior radicaban
79.
en. l.a ausencia de mercados y en el carácter ausentista de los
propietarios, muchos de los cuales no habían tomado posesi6n ·de su propiedad. Para estos campesinos los problemas se iniciaron alrede:dor de 1880 cuando 1·os procesos de desarrollo pactaron por primera vez.
En 1886 se abri6
capitalista imel Registro PÚbli-
co de la Propiedad para Guanacaste, por lo que muchos hacenda-
dos inscribieron sus títulos colonidles de propiedad• y luego, solicitaron título para las tierras contiguas que habían ocupado sin· derecho legal,
s!as".(45}
Algunas de esas demasías eran tan extensas que a--
barcaban pueblos enteros. blo de
conocidas con el nombre des '' dema~
Se registra el hecho de que
e~
pue-
"Cañas Dulces" debi6 :!.evantarse en armas para defender
su existenciao
Los hacendados iniciaron tambi~n la explotaci6n
de 1os bosques con el fin de exportar maderas finas, altamente cotizadas en el mercado mundial.
En esta actividad algunos se
enriquecieron.y eso les permiti6 introducir pastos artificiales
y nuevas razas ganaderas como el cebú, con el fin de atender la creciente demanda de carne de las ciudades
del Valle Centra1.
Este proceso de penetraci6n capitalista y posesi6n de las tierras provoc6 una fuerte reacci6n en los campesinos. quienes se
negaban a creer
que la tierra tuviera dueño. pues partían
de una antigua tradici6n corr.unalo
Su lucha no buscaba la apro-
piaci6n de una parcela, sino el mantenimiento de la ca1idad de bien 1ibre para la tierrao Se rebelaron ante la posibilidad de transformarse en arrendatarios aunque fuese a precios simb6licos.
80.
~ re~umen,
se oponían a los ~ntentos de los hacendados
tomar posesi6n efectiva de su propiedad.Y de los turales con que ellas contabano
de
recursos na-
La resistencia de los campe-
sinos se centr6 en el ataque contra la posesi6n de la tierra, y el cercamiento de l~s h~ciendas.
Los campesinos impidieron
fí-
sicamente la medici6n de las haciendas, e incendiaron los campos y utilizaron
armas para
amedrentar a sus dueños.
Radicalmente distinta fue
~a
lucha por la tierra
empren-
dida por los campesinos de la regi6n de Tilarán y Abangareso En primer lugar, estos campesinos eran originarios del interior del pa!s, del Valle Central, una economía monocultivista
donde habían estado integrados a y de mercado~ por lo que en· ellos
se había enraizado la rioci6n de propiedado
Dichos campesinos
habían emigrado a esas tierras buscdndo una parcela con la intención de transformarse Supon!an
en propietarios o de seguir si~ndoloo
que esas tierras constituían baldíos
La situaci6n de estos campesinos vari6
nacionales.
cuando la Compa-
ñía "River Plate" reclam6 por la usurpaci6n de los terrenos y pidi6 ayuda al gobierno para expu~sarloso sido
Esas tierras habían
entregadas a esa Compañía por concepto de indemnizaci6n,
por los fondos que había facilitado al Estado durante la const.rucci6n del ferrocarril al
Atlántico hc:teia 1870.(46)
Por su-
puesto que el principal interés de Keith y sus asociados) lo constituía los yacimientos de oro y plata de Tilarán y Abangares, sin embargo, se sentían amenazados por la expansión continua de los campesinos y
el
cf_:rcannento de ras propiedadesº
81.
En 1911 los vecinos de Tilarán solicitaron tambi~n la int.ervenci6n del gobierno y exigieron un repartimiento de 1as tierras. Esta solicitud fue apoyada por el Estado, por lo que
éste
debi6 entrar a negociar con l.a Compañía.
Posteriormente
hubo otros casos similares y los resultados fueron los mismos. Pero también se presentaron luchas violentas,cuando la compá~
ñ!a se neg6 a permitir la siembra en tierras en disputa. campesinos respondieron
Los
saqueando e incendiando las bodegas
de la Compañía,y hubo intercambios de disparos con la policía. En
esta zona el resultado ¿!e estos conflictos llev6 a la ac-
ci6n del Estado, la :rue recayó en favor de los campesinos, en una actitud abiertamente reformista.
Se observa así cómo el fenómeno de la penetraci6n capitalista y la concentraci6n de la tierra, gener6 diferentes m6vi1es y formas de lucha dependiendo de los rasgos especÍf icos de cada regi6n. En este segundo período no puede dejar de mencionarse la Revoluci6n Rusa de 1917, uno de los acontecimientos sociales más importante hasta el presente. que provoc6 un viraje radica1 en el destino de Rusia y del mundo. paso·
de una nueva época,
mo al socia1ismoo
E11a va a marcar el
la de la transici6n del capitalis-
La gran revoluci6n socialista 11en6 1a vida
de1 mundo de un nuevo contenido.
No se
limit6 al. pueb1o ruso
sino que creó nuevas expectativas a los trabajadores de todo el mundo, porque por primera vez la clase obrera y sus aliados tomaban el poder políticoº
82. De 1a Cruz p1antea que 1a primera repercusi6n po1Ítica de la Revoluci6n Rusa en Costa Rica, fue el intento del Dr. Aniceto Montero de transf orrnar su Centro Socialista, fundado en 1919, en un Partido
Socialista.(47) E1 Dr. Montero se ha-
bÍa educado en Bélgica de donde regres6 impregnado de ideas socialistas. Siempre
se destac6 por su identificaci6n con el
pueblo y su vinculación al movimiento popular. Fue un gran admirador de la Revo1uci6n Rusa, y un difusor de las ideas socialistas y comunistas, las cuales no logró concretar en un programa político aglutinador de los trabajad9res costarricenses. Los discursos y proclamas del Dr. Montero fueron mucho más claros y precisos que el programa
~ei.
fallido Partido So-
cialista, y son realmente los que lo ubican, conjuntamente con su práctica política, en la línea de la construcción de una
ar~
ganizaci6n política independiente de los trabajadores. Muestra de ello es la justif icaci6n histórica que elabor6 del surgimiento del Partido Socialista. "E1 Partido
Socialista se organiza porque hemos llegado a
un momento en que las
ideas deben lanzarse a la lucha contra la
rutina de una sociedad satisfecha.
Hoy en día el mundo de los
harapientos. de los oprimidos, de los miserables se levanta contra e1 Im.lndo de los ahítos.
E1 pueblo en Europa asesta
zos en la testuz de la vieja sociedad.
La fiebre de
maza-
reforma
invade el universo y es preciso que nosotros también resolvamos nuestros problemas sociales y los estudiemos. E1 movimiento es sano. A la reacción responde la rebeli6n pro1etaria, precursora
830
fle una revo1uci6n, a los ele
a·bajo ( ••• )
despoti~mos
de arriba, la heroicidad
Nuestra finalidad es suprimir toda explota-
ci6n del hombre por el hombre, abolir la divisi6n de la sociedad
en clases, aplastar a los explotadores ( ••• )
No puede ha-
ber democracia donde la igualdad política no se basa en la igual·· dad econ~rnica".(48)
Esa c1aridad política de don Aniceto en relaci6n a desarroilar 1a organización independiente de los trabajadores se reafirma enlas siguientes frases, expresadas daci6n
en el acto de recor-
de Vladimir Ilich Lenin en 1924. ..Debems organizar a1
proletariado en un pdrtido de clase y con él obtener la conquista del poder político por el proletariado ( •• o) porque mismo Manifiesto lo dice, el poder político en manos de
ciases proletarias, la lucha franca
dos reformistas no hay que confundirlos,
socialistas.
.
.
,
econ6micas y sociales
que originan el antagonismo actual de clases (o •• ) .. -..
las
de clases ( •• º) supra.mira,
gracias a la revolución las condiciones
~
éomo el
los parti-
no son revolucionarios,
Un partido que no es de lucha de clases ni de Re-
voluci6n social, puede ser ~ás o menos liberal, pero nunca socialista.
Esto, la Revolución Social
de Lenin ••• •
es en síntesis la obra
( 49)
Sin embargo, el Programa del Partido Socialista no correspondÍa a la línea política e-;,.. ... • r s ele búnano del Pac1fi-
co a Alemania mientras dure restringi6 las compras
.:i
cst~ :n2la
situación" (25) •
la UFCO
los prod,.Jctore~; r:dr.ionales a ta1 punto
queg segt1n 1as declaraciones dt:; :-~ar~.a.:!o Gu¿:trdi.a, "todos
ductores de banano van a tener
abandonar esct actividad
~ue
que la United Fruit Company
est~
que se est~ convirtie!ldo er:
l~ ri..~.eñ.a ún.:.ca
q~e
se
( º. º).
4n~nr.i¿b2
dos se SE.--gu!a estimulaY!do a los ;?:.nductores
no descuiden el producto,
la situaci6n (27) ¡
qu:~
ya
atsorbiendo todo de tal manera
si•t uaci. 6 n se presentara, con los productores de Sin embargo, a pesar de
los pro-
sea
cuídado,
ca~a
Esta misma de azúcar" ( 26;~
el cierre de mercanaci anales a "
que
porqtJe puede mejorar
ilusiones .,,-agds, pues la disminuci6n se daba
c1ararnente, de 1930 a 1931 el
v~lor
de la exportaci6n de banano
1370
baj6 en
4
834.375,oo.
El desempleo en US..P. . o y Europa. ocasiona-
ba la restricci6n del consu:no de la f rutao
En 1932 parte de la pr0ducci6n bananera estaba paralizada como lo ilustra la
siguit::ntf~
" Mil ochocientos acrc·s
obliga
·:Loticia:
ce
banano abandonados,
la depresión
a la UFCO a tomar esa medida en la divisi6n de Costa Ri-
Muchas serán las personas que quedarán sin trabajo y que se
ca.
vendrían al interior, ( ••• )
donde la desocupaci6n ya es considerable
Se pierde alrededor de un millón de racimos mensuales"(28)
En lo que se refiere a la producci6n cacaotera, la fuente periodística nos dice que para este producto llegó a .. su período más Lo que nos demuestra que
crítico el precio del cacao" (29)
los
tres productos principal.es de nuestra exportación, estaban sensiblemente afectados por la crisis y que nuestra riqueza proveni·ente de1 comercio exterior se vió reducida en este período. A partir de 1932, aproximadamente, costarricense
la oligarquía cafetalera
empieza a buscar nuevos mercados: San Francisco
de Califorma,USA,
fundarr~entalmente,
puesto que al parecer ofre-
cía facilidades de fletes en el transporte y era un centro de distrubuci6n del granoº Además desde 1931, las organizaciones de productores (Asociación Nacional de Cafetaleros) planteaba la necesidad de encontrar nuevos mercados,
dad~-
la posible competencia
en el mr:.~rcado inglés, por parte del café qu.e se empezaba a produ-
cir en laa colonias
brit~nicaso(30)
Tanto Costa Rica como otros países
en varias formas de
def~nder
s~s
latinoamericanos tratarcr
intereses como productores de
138~
materias prirr.a.s,
e!: el
m0rcr.~clc:
inter:-:3 e..:. :n-la]_ '3 Se dieron inten-
tos de organización intern~cionalo
interés en los
EE11L-;~.
esta noticia:
Vc2~os
por sz;;.ber si
.
~e
;
resucita~a
"H~y
e 1 proyecto
de formar
un;-:-1 ::~.sociación de productores centroamericanos" ( 31)
el
de los
c.ons~..:.mo
los
.:.~·rn-:1uctos,
;
compradores,etc.
pais~~
La crisis er~ profllnda e~-: +:odos los &:nbitc·s del sistema capita, . lista, y tanto los centros h egemonicos como lc.s colonias, su-
frieron las consecucr. . cias dE:l colapso de la economía internacional
a la CUCJ.1 estaban sGmetidosa
En 1930 las i.:rportacicn.es se habÍ...!n recucic1o en ur.. 50%, pa
ra 1932 en un 75% del ;:non to qv. e
,,
corr~:spond1a
a 19 2 9
º (
3 2 ) - e 1 pu n -
, b . r ! l cic_o ', ~aJo ~e t o mas c.t".rtico,,
2 o 2.
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CRISIS
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re~=h.Jcción
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de impar .::::.cJ_ones y
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inmediatc-~ment8
crisis se reflej6 entradc:s e:.duaneras
1..legar,~-:-i1..,_
..... en 1930, el primer ano
sea, en un
. ,
,
,
.
la desvalor:..::::2ci0:.:. etc .......-::.s exportaciones,
de
~.
L:
en eJ. :: iscoo ( 34) s1J.r.-,?.
~:-:
de
.. crisis bajaron a
23 ~ 5
la
En 1929, las millonesº
Y
rj, 12.7 millones
o
47%~
En el mes de abril de l932, las entradas aduanales no llegaron ni a un mil1Óno(35) Carlos Merz recomendaba "la combi::1aciór.. prudente de la im-
posición tributaria directa e indirecta" Flores lo había intentado ~
o
Sin embargo, González
la clase ClomiD~1.:ite r._'";"1bÍa respondido
con una cruel dictadura militaro Las leyes Proteccionistas de
Agricult~~1ra
(cereales, conser-
vas, granos, verduras, frutas secas, etc.·)· disminuyeron el ingreso real del
consu:nido~,
y
gc~""'2raron
C:8p~c-.:..l2cianes
y
cares-
tías.
L& oligarquía no incrementó la
dencioa No s6lo atribuía l::i c~isi.s . ·t ernc:ci.ona . 1 in
~
sustituy6 las
2.
los problemas del mercado
. , 01 despilfarro popular y la dess1.no que aet.1sa0t::.
med.ida importaci6n de artículos c.1 e 11:..jo ::ntes de 19300
Dos tipos de
~edidas
fisc2:2s se
inst~uraron
a~te
la crisis•
en términos generales: ele,.r2c.:·=:¡: de imr::-~.lf?~::tos y :;¡_usteridad
pueblo o
El gobie!:'":-o decretó ir:-\r. 1;estos ~},
identidad,
a
la g;:-tc-:.':.l-2..nz:: ~
.:'J.
lo~:-;
r--afé,
ci~.:::.?.-r-i11n c::-ue tenia a intenci n
de no solamente proveer de tie!'"ra a. los futuros colonos, sino de ayudarles en los pri:neros :.neses, y~ fu8¡_-a ¿roporcionándoles herramientas de trabajo o un-:t ¿eque::a su.::Yvenci.Ón en dinero. Como se comprenderá, el Estado no estéJ.ba e!! condiciones económicas de estimular las cnloniz.·:lcio:ies ~ rec;iones vírgenes, y las experienci~s anteriores :-:abÍ.:-:•n derr.0strado que sin infraestruc, • tura econom1ca y
..,.,
pos1~1
• ....:!
.:td e
iuaL
_,
~ercaceo
para 1 os pro ductos, 1 os
proyectos se desv~necía~. En
.,. . a
.
. ,
~nform::1cion
. a' . encont ra:t-:1os c;-ue sólo una coperio istica,
lonia se abrió, la de Pococí, por
,.g2r.tc~s
pobres llegados del
168.
interior sin recursos econ6micos de ninguna especie, quienes hicieron sus siembras de maíz y frijoles, yuca y otros productos en proporción reducida".(74), sin contar con apoyo estatal. Las migraciones originadas por la concentraci6n d~ la tie-
rra en el Valle Central, acentuadas por el impacto de la crisis económica se efectuaron en forma espontánea y desorganizada hacia regiones como Tilarán,
Abangares, San Carlos, San I-
sidro del General y Turrialba. Encontramos una noticia que reporta sobre un grupo de obreros sin trabajo, quienes visitaron al Secretario de Fornento para pedirle facilidades para trasladarse a El General, hoy Pérez Zeledón.
E1 año de 1931 el qobierno brindó facilidades,. como por e• jemplo, extender pasajes a los desocupacos que quisieran trasladarse a la zona de Turrialba a coger café. Sin embargo, esa . , - rnuch.. os ar t esanos y t ampoco tenia , " no era 1 a so 1 ucion ?ara carac-
ter permanente, porque las exigencias de mano de obra en las regiones cafetaleras eran sólo para la época de cosecha, lo que corresponde a
3 o 4 meseso
169.
3.- LA CRISIS POLITICA. Para1e1amente a los efectos econ6micos y socia1es apunta-
dos, y no como un fenómeno pcsterior, se dcsencaden6 en el país . . , itica , . d e 2..;:¡s una crisis pc ..
historia de
~asta
,
~as
.-
...:1
prorun._~as
. :;u.e h a b' lél. conocido 1a
Rica.
La vulnerabil.idad del apare.to estatal y del "equi1ibrio"
de las fuerzas pol.Íticas fue demostrada al iniciarse l.a agudización de.los problemas econ6micos,
tal extranjero.
y las presiones del capi-
Tanto la estructura econ6mica como la pol!ti-
ca mostraron su poca fortaleza y la gran dependencia externa, ante los primeros asomos de crisis. Se empez6 a generar en el país ur.. est¿:,do de desconfianza
en el grupo hegemónico que controlaba el aparato del Es~ado y, cada vez result6 más dif Ícil ma~:tener el "consenso" necesario
entre las distintas fracciones de la clase dominante, y entre éstas y las c1asP.s dominadas.
Se le objetó a la clase gobernan-
. , la cistri"'-:.ución de te su incapacidad de orgtinizar i-.. pro d ucc.i.on, (..~
los bienes y
fa1coso les
recursos del Est~do, y se le aet.1só de múltiples ce~
Se produjo un incremento en los conflictos interestata-
(Ejecutivo~
Legis1ativo, Legislativo
Secretarías o Minis-
terios,
Legislativo - Oficinas estatales, Secretarías Ministe-
riales
oficinas estatales etc.), situaci6n que expresaba una
crisis dentro del bloque social
~e
controlaba los diferentes
in~
trumentos del poder político. Lo político no es un reflejo automático de lo econ6mico.La
170.
n~turaleza
de l.a dinámica política cuenta con especificidades
particulares y una conducta propia.
La crisis política puede
anteceder o desencadenar la crisis económica. ..
.
,
.
ser paralelas, incluso lu crisis economica crisis políticaº demos que
Depende de
.la esfera
cad~
Ambas pueden
puede generar la
caso cqncreto, aunque enten-
de lo político tiene su sustento en 1o so-
cia1 y en dltima instancia en lo económico, que le da ~u "ba-
se originaria". Compartimos la conceptualización de Nicos Pou1anzas~ en el sentido de cara:t:.erizar la crisis política como una ci6n
agudiza-
de contradiccion_es, una reorganizacién en la composición
de las fuerzas políticas que pugnan tanto dentro de1 bloque social que controla el aparato del Estado, como entre ~ste y las clases subordinadasº
"La crisis política (todavía falta distinguir entre las distintas crisis políticas) implica, el poder, una acentuación considerable
con respecto al bloque en
ce
las contradicciones,
una puesta en duda de la hegemonía de la fracción hegem6nica por parte de otras fracciones que forman parte. del bloque en el poder, y a menudo una modificación en la relación entre distintos componentes de este bloque,
una crisis ideol6gica que lleva
una ruptura del lazo representantes -
a
representados entre las
clases y las fracciones de clase del bloque en el poder".(75) El poder Legislativo reflejo de las principales fuerzas en el poder, entr6 en 1930,
•
en un período de grandes pugnas y con-
flictos con otros organismos del Estado, tales como Ejecutivo, Ministerios, dependencias etc ••
Se presenté una puesta en duda
1710
,
de la hegemonía del sector de clase mas poderoso dentro del
bloque en el poder,
generalmente representado por el Ejecu-
tivo. En ju1io de 1930, el Congreso Naciona1 trat6 de fiscalizar mediante una comisi6n nombrada por el Le~is~ativo al Presidente de la República,
dado el grado de desconfianza en su gesti6n(76)
Durante 1os años 1930 x._1931, fueron constantes las censuras por parte estatalo
del Congreso a diferentes organismos del aparato
Al Secretario C.e la cartera de Fomento se le objet6
su política de reorganizaci6n departamentalº (77) Se sancion6 al Secretario de Seguridad PÚblica y a varios funcionarios militares; el Comandante de la Primera Secci6n de Policía, Sr•Brearpariente de1 Presidente don Cleto González VÍquez - fue a-
1y -
cusado
de sustracci6n
ce
fondos (78).
En mayo de 1930, se pre-
sent6 la renuncia de todo el gabinete, por causa de las negociaciones
entre la Compañía Simmons y el gobierno, dado que el Sr.
Fabio Baudrit
sobrino de don Cleto González VÍqu.ez - era e1
abogado de la citada compañía y a su vez, Primer Designado de la RepÚb1ica.(79) A mediados de junio del mismo a?:.o,
se volvi6 a producir una
crisis parcial del gabinete, motivada por 1as contrataciones bananer:as (S: