Diez anos de investigacion en fraseologia / Ten Years of Investigation in Phraseology: Analisis sintactico-semanticos, contrastivos y traductologicos ... Analysis (Linguistica Iberoamericana) 8484890880, 9788484890881


255 10 7MB

Spanish Pages 326 [324] Year 2003

Report DMCA / Copyright

DOWNLOAD PDF FILE

Table of contents :
Cover
Title page
Copyright page
Índice
Prólogo
Introducción
Capítulo I:
Corrientes actuales de la investigación fraseológica en Europa
Capítulo II:
Apuntes para el estudio de la colocación
Capítulo III:
El uso de paremias en un corpus del español peninsular actual
Capítulo IV:
Usos y valores de para nada en un corpus de español peninsular
actual
Capítulo V
: Criterios generales de clasificación del universo fraseológico de las
lenguas, con ejemplos tomados del español y del inglés
Capítulo VI
: La fraseología en los diccionarios bilingües
Capítulo VII
: Tratamiento de las colocaciones del tipo A+ S/S+A en diccionarios
bilingües y monolingües (español/inglés)
Capítulo VIII:
Las colocaciones como problema en la traducción actual
(inglés/español)
Capítulo IX:
Diseño de una base de datos fraseológica para la traducción asistida
por ordenador (TAO)
Capítulo X:
Grados de equivalencia translémica de las locuciones en inglés
y español
Capítulo XI:
La traducción de la fraseología: técnicas y estrategias
Capítulo XII:
Consideraciones en torno al procesamiento y traducción al español
de la fórmula Hear, hear!
Capítulo XIII
: Fraseología y traducción
Capítulo XIV
: Acerca de la (in)traducibilidad de la fraseología
Capítulo XV:
La creatividad fraseológica: efectos semántico-pragmáticos y
estrategias de traducción
Recommend Papers

Diez anos de investigacion en fraseologia / Ten Years of Investigation in Phraseology: Analisis sintactico-semanticos, contrastivos y traductologicos ... Analysis (Linguistica Iberoamericana)
 8484890880, 9788484890881

  • 0 0 0
  • Like this paper and download? You can publish your own PDF file online for free in a few minutes! Sign Up
File loading please wait...
Citation preview

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 3

Gloria Corpas Pastor Diez años de investigación en fraseología: Análisis sintáctico-semánticos, contrastivos y traductológicos

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 4

LINGÜÍSTICA IBEROAMERICANA Vol. 20 DIRECTORES: Concepción Company Company María Teresa Fuentes Morán Eberhard Gärtner Emma Martinell Hiroto Ueda Reinhold Werner Gerd Wotjak

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 5

Gloria Corpas Pastor

Diez años de investigación en fraseología: Análisis sintáctico-semánticos, contrastivos y traductológicos

Iberoamericana



Vervuert



2003

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 6

Die Deutsche Bibliothek - CIP - Cataloguing-in-Publication-Data A catalogue record for this publication is available from Die Deutsche Bibliothek

Reservados todos los derechos © Iberoamericana, Madrid 2003 Amor de Dios, 1 – E-28014 Madrid Tel.: +34 91 429 35 22 Fax: +34 91 429 53 97 [email protected] www.ibero-americana.net © Vervuert, 2003 Wielandstrasse. 40 – D-60318 Frankfurt am Main Tel.: +49 69 597 46 17 Fax: 49 69 597 87 43 [email protected] www.vervuert.com ISBN 84-8489-088-0 (Iberoamericana) ISBN 3-89354-790-8 (Vervuert) ISBN 9783865278517 (eBook)

Impreso en España The paper on wich this book is printed meets the requirements of ISO 9706

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 7

Para Javi (1992-2002) Ahora ya tienes alas...

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 9

ÍNDICE

Prólogo

11

Introducción

15

Capítulo I Corrientes actuales de la investigación fraseológica en Europa

39

Capítulo II Apuntes para el estudio de la colocación

67

Capítulo III El uso de paremias en un corpus del español peninsular actual

83

Capítulo IV Usos y valores de para nada en un corpus de español peninsular actual

109

Capítulo V Criterios generales de clasificación del universo fraseológico de las lenguas, con ejemplos tomados del español y del inglés

125

Capítulo VI La fraseología en los diccionarios bilingües

155

Capítulo VII Tratamiento de las colocaciones del tipo A+ S/S+A en diccionarios bilingües y monolingües (español/inglés)

171

Capítulo VIII Las colocaciones como problema en la traducción actual (inglés/español)

185

Capítulo IX Diseño de una base de datos fraseológica para la traducción asistida por ordenador (TAO)

193

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 10

Capítulo X Grados de equivalencia translémica de las locuciones en inglés y español

205

Capítulo XI La traducción de la fraseología: técnicas y estrategias

213

Capítulo XII Consideraciones en torno al procesamiento y traducción al español de la fórmula Hear, hear!

225

Capítulo XIII Fraseología y traducción

245

Capítulo XIV Acerca de la (in)traducibilidad de la fraseología

276

Capítulo XV La creatividad fraseológica: efectos semántico-pragmáticos y estrategias de traducción

311

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 11

PRÓLOGO

Hay que congratularse sin salvedades por la publicación de los últimos artículos sobre fraseología de Gloria Corpas Pastor. La posibilidad de tenerlos disponibles reunidos en un volumen va a facilitar muchísimo su consulta al teórico, al lexicógrafo, al traductólogo, al traductor, y al docente estudioso, entre muchos otros profesionales y amigos de nuestro idioma y de nuestra disciplina. En la última década ha venido destacándose en España un joven grupo de lingüistas cuyas investigaciones han colocado la hispanística a la misma altura de las homólogas alemana, anglosajona y francesa, entre otras. En el campo de la fraseología hay que señalar, con entera satisfacción, los trabajos contrastivos y comparatistas español-alemán, de Carmen Mellado Blanco; los descriptivos sobre el catalán y el español de Maria Conca i Martinez y de Josep Guia; los estudios sobre el francés y el español, de Julia Sevilla Muñoz –directora, además, de la revista Paremia–; los etnolingüísticos y lexicográficos, de María Angeles Calero Fernández; los históricos y lexicográficos, de Javier Calzacorta Elorza. Todos ellos, junto con las numerosas publicaciones de Corpas Pastor, constituyen un corpus científico de primera magnitud por la abundancia de los materiales analizados, por el manejo cada vez más seguro, coherente y esclarecedor de los problemas teóricos y metodológicos, y por la utilización adecuada de la bibliografía pertinente en las principales lenguas del discurso científico europeo. Dos rasgos más, fácilmente apreciables en la producción de este grupo, merecen señalarse aparte –quizás como signos positivos de nuestro tiempo–: una profunda conciencia de la cultura y la lengua propias, y una elevada valoración de su disciplina y de su quehacer científico, que se puede constatar, por ejemplo, en el desenfado legítimo con que se citan las investigaciones propias. Están lejos de cierta actitud tradicional autominusvalorativa de, por ejemplo, un Juan de Valdés, quien tenía que conocer obras cumbres, como el Libro del buen amor, La Celestina, la poesía de Garcilaso, y, sin embargo, afirma espontáneamente que a la lengua castellana la tenía por más vulgar (que la toscana), pues “la lengua castellana nunca ha tenido quien scriba en ella con tanto cuidado y miramiento...”. Cinco siglos más adelante, tenemos todavía colegas españoles que condimentan sus estudios con declaraciones como: “volveremos más abajo sobre estas consideraciones, que a otras plumas mucho más autorizadas que la mía correspondería hacer”, o ésta otra: “Si además no se comprende que el español está sobre todo allí, al otro lado del Atlántico, y que lo nuestro es bastante marginal, peor aún...”. Esta última opinión requiere matizarse sin dilaciones. Para ello baste recordar la doctrina de Angel Rosenblat (1967) sobre la “Unidad y pluralidad de

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 12

12

Prólogo

normas en el español de España y América”. Recientemente, César Hernández Alonso ha precisado certeramente esta doctrina con el concepto de “estandarización pluricéntrica”. Participamos, en ambos lados del Atlántico, de una misma lengua culta común, suprarregional; (lo que tal vez no pueden decirles, sin más, los brasileños a los portugueses). Con ella hemos creado un espacio cultural y lingüístico común; España, aunque no alcance a presentar cuarenta millones de hablantes, no puede tildarse allí de “marginal”. En la producción científica del ilustre grupo arriba mencionado, destaca la abundante obra de Corpas Pastor, quien parece vivir en permanente estado de productividad y lucidez fraseológicas. Los trabajos ofrecidos en el presente tomo se ocupan preferentemente de la fraseología de las dos lenguas transnacionales más importantes en el mundo actual, el inglés y el español, que la autora conoce de forma admirable. Ya por esto, se le puede augurar amplias y exitosas distribución y recepción. De entre estos artículos me llaman particularmente la atención, aparte de la propuesta de clasificación del universo fraseológico, con la cual amplía considerablemente las ofrecidas antes por otros autores, los consagrados a diferentes problemas de teoría y práctica de la traducción, con documentación siempre novedosa y esclarecedora. A propósito de problemas de traductología, quisiera resaltar aquí una distinción fundamental, cuyo frecuente desconocimiento o desacato conlleva errores y desorientaciones lamentables. Se trata de la distinción que Corpas Pastor formula certeramente en términos de equivalencias al nivel del sistema y equivalencias al nivel del texto (otros hemos hablado de ‘correspondencias entre unidades al nivel de los sistemas y equivalencias al nivel de los textos –el original y el texto meta’). Al cotejar los sistemas léxicos del francés y del español, difícilmente, por no decir imposiblemente, se puede encontrar colgar como posible correspondencia de quitter; sin embargo, es el equivalente normal en la traducción de ne quittez pas!, en el marco de una conversación teléfonica, (¡no cuelgue!). El lexema madre tiene como correspondiente en el sistema léxico alemán Mutter, y así lo indican, desde luego, los diccionarios, nunca Vater –que corresponde a padre–; no obstante, en una traducción éste último puede servir como equivalente adecuado de madre, como aparece en una de las traducciones al alemán de La vorágine: Oh selva, madre de la soledad y la neblina... –Wald, Vater der Einsamkeit und des Nebels. (Desde luego, no perdemos de vista el hecho de que toda formulación lingüística representa una selección entre numerosas posibilidades). En todo caso, no es lo mismo, contrastar sistemas –abstracciones funcionales– que comparar individuos –realizaciones concretas–. La distinción debe seguirse, por supuesto, también cuando se trata de unidades fraseológicas: una cosa son las correspondencias que se pueden establecer al consultar los repertorios fraseológicos de dos lenguas, y otra cosa muy diferente, es encontrar o crear equivalencias de textos o

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 13

Prólogo

13

segmentos de texto en los que dichas unidades se encuentren empleadas (Cf. Phin 16, 67-83 [Phin= Philologie in Internet: ]). No sólo, pues, por los temas que trata sino también por la manera coherente y lúcida de tratarlos (por supuesto, estoy rememorando aquí una observación que hizo, ayudado por F. Schiller, el gran Alexander von Humboldt, al presentar la obra cumbre de su hermano Wilhelm), le auguro, con toda complacencia, a esta nueva publicación de la profesora Gloria Corpas Pastor las mejores y muy merecidas distribución y recepción, así como numerosas reseñas inteligentes. Sus lectores quedamos esperando las próximas investigaciones suyas, pues, ciertamente, ‘ella no se ha perdido para los estudios hispánicos’. Alberto Zuluaga Universidad de Tubinga Alemania

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 15

INTRODUCCIÓN

Cuando propuse a los editores de la colección “Lingüística Iberoamericana” –Gerd Wotjak y Eberhard Gärtner– la publicación de este libro recopilatorio, en seguida se mostraron entusiasmados con la idea. Ellos me animaron, además, a reflejar mi propia trayectoria y a escribir una breve introducción en la cual resumiera el estado de la cuestión en España1. De ahí que las páginas que siguen a continuación no sean en puridad una mera presentación de mis trabajos, sino más bien un panorama ilustrativo de la fraseología en español, al cual he contribuido en cierta medida. Mi interés por la fraseología surge a mediados de los años ochenta, cuando era estudiante de Filología en la Universidad de Málaga. De la mano de mi querido profesor y maestro, D. Manuel Alvar Ezquerra, me adentré, casi sin darme cuenta, por los intrincados laberintos de la lexicografía, tanto monolingüe como bilingüe. Me fascinaba, de forma especial, la forma en la que los diccionarios daban cuenta de los patrones combinatorios de las lenguas. Por aquel entonces causaban furor los diccionarios pedagógicos para la lengua inglesa, como el CCELD, el OALD y el LDOCE, entre otros. Para el español aún no disponíamos de este tipo de obras, pero, aún así, se podían realizar estudios comparativos a partir de diccionarios monolingües normativos y de uso, como el DRAE o el DUE. Fruto de aquellos primeros años fue una memoria de licenciatura que presenté en el Departamento de Filología Inglesa y Francesa durante el año académico 1988-1989, titulada Estudio contrastivo de las colocaciones en inglés y en español. Su tratamiento lexicográfico, con especial referencia al tipo A + S/ S + A. Este primer trabajo dio pie a una investigación más profunda, centrada en el componente colocacional de las lenguas española e inglesa, pero desde una perspectiva más amplia y ambiciosa. Se trataba de ubicar las colocaciones en el marco global que ofrecía una subdisciplina de la lexicología que por aquel entonces empezaba a captar la atención de los investigadores: la fraseología. Partía de la hipótesis de que, contrariamente a los postulados en boga, no sólo se podía llegar a describir el sistema fraseológico completo de una lengua (en este caso, del

1

Mi primera intención fue elaborar, a modo de guía, un listado de artículos, capítulos y libros sobre fraseología. Así pues, en el mes de mayo del 2002 comencé a escribir a los autores que trabajan en este campo con mayor o menor asiduidad. La respuesta fue tan generosa, que hubiera necesitado escribir toda una bibliografía comentada. Lamentablemente, ése no era el objetivo de esta modesta introducción, ni tampoco podía pretender dar cabida a esa cantidad ingente de trabajos en tan pocas páginas.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 16

16

Introducción

inglés y del español), sino que, además, era posible establecer una clasificación común de unidades fraseológicas que dejara al descubierto la gran similitud existente entre sistemas lingüísticos diversos. En estos años predoctorales tuve la oportunidad de contar también con el magisterio y la ayuda inestimable de grandes profesores, y más tarde amigos, cuyas luces guiaron mi travesía hacia buen puerto. Me refiero, cómo no, a John M. Sinclair (Universidad de Birmingham), Reinhart R. K. Hartmann (Universidad de Exeter), Robert Ilson (Universidad de Londres) y Anthony P. Cowie (Universidad de Leeds), quienes me dejaron su impronta personal y académica, contagiándome su entusiasmo por la investigación fraseológica. Durante el curso académico 1993-1994 defendí mi tesis doctoral titulada Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español en el departamento de Filología Inglesa de la Universidad Complutense de Madrid. Más tarde publiqué la tesis completa en microfichas por la Universidad de Málaga (1995), al tiempo que reelaboré la parte española, la cual saldría a la luz, completada y actualizada, como el volumen nº 76 de la colección “Biblioteca Románica Hispánica” de la editorial Gredos (Madrid, 1996), bajo el título de Manual de fraseología española. A partir de entonces, he seguido trabajando en fraseología desde diversas perspectivas, distintas y variadas, pero siempre complementarias: fraseología del español y del inglés, comparaciones entre los sistemas fraseológicos de ambas lenguas, estudios contrastivos y traductológicos, aplicaciones de la lingüística del corpus, fraseografía y fraseodidáctica. Muchos de estos trabajos se hallan desperdigados por revistas o actas de congreso de difícil acceso para los investigadores. Esta ha sido la razón que me ha impulsado a publicar una selección de mis trabajos sobre fraseología española: sola, en comparación con la fraseología de la lengua inglesa, o desde el punto de vista de la equivalencia y las estrategias de traducción. Por otro lado, he excluido los trabajos redactados en otras lenguas o que trataban exclusivamente del sistema fraseológico inglés. El presente volumen reúne quince trabajos en forma de capítulos2. El primero ofrece una breve panorámica de los principales enfoques y temas de investigación en fraseología. Le siguen cuatro capítulos que tratan unidades de las tres esferas: colocaciones, locuciones y enunciados fraseológicos, ya sea de forma independiente o en relación a la taxonomía propuesta. Los capítulos seis y siete abordan aspectos de fraseografía bilingüe, que sirven de bisagra para pasar a los ocho trabajos siguientes donde se estudian, entre otros, aspectos de fraseología

2 Los distintos capítulos de los que consta el libro aparecen en su forma original: sólo se han corregido errores ortotipográficos, adoptándose las normas de publicación de la editorial Vervuert/Iberoamericana. En el Apéndice figura la relación completa de trabajos incluidos, con sus referencias bibliográficas correspondientes.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 17

Introducción

17

contrastiva, diseño e implementación de bases de datos fraseológicas bilingües, la cuestión de los universales lingüísticos y los europeísmos, el papel de la semántica cognitiva para el trasvase de las fórmulas rutinarias, los criterios para establecer el tipo y el grado de equivalencia fraseológica, las técnicas, procedimientos y estrategias de traducción de las unidades fraseológicas, así como la función y los efectos desencadenados por la manipulación creativa de unidades fraseológicas en traducción. Cronológicamente, estos quince trabajos cubren diez años de investigación, que coinciden prácticamente con la década que marcó el despertar de los estudios fraseológicos no sólo en España, sino en toda la Península Ibérica3. La pléyade de monografías, estudios y repertorios publicados desde principios de los noventa son un claro exponente de ello y así lo he manifestado en varias ocasiones. No voy a repetirme, pues. Muy al contrario, quisiera ofrecer una panorámica distinta del estado actual de la investigación fraseológica en España a través de las principales tesis doctorales4 que se han defendido en nuestro país desde 1987 hasta el curso académico 2001-2002 (cf. Tablas I y II), mencionando puntualmente algunos proyectos y publicaciones recientes de especial relevancia. Junto a otros tipos de producciones científicas, las tesis doctorales5, en tanto trabajos de investigación de envergadura, sirven de termómetro fiable para comprobar el desarrollo y avances alcanzados en un determinado campo del saber.

3 Véanse los trabajos de Gloria Corpas Pastor y Károly Morvay (“Los estudios de fraseología y fraseografía en la Península Ibérica (Breve presentación y orientación bibliográfica)”), Annales Universitatis Scientiarum Budapestinensis de Rolando Eötvös Nominatae. Sectio Linguistica. XXV. 2002. 165-182); de René Pellen (“Phraséologie et phraséographie en espagnol. De la typologie à l’inventaire des ressources”, Bulletin Hispanique. 2001, 2. 607-673); así como el de Leonor Ruiz Gurillo (“Cuaderno de bitácora para navegantes fraseólogos”, Verba, en prensa). La recopilación de artículos de Antonio Pamies Bertrán y Juan de Dios Luque Ramos –(eds.), Trabajos de lexicografía y fraseología contrastivas, Granada: Método, 2000– constituyen un buen exponente de los temas de interés más sobresalientes en el seno de la fraseología contrastiva y comparada con el español. 4 Por lo general, sólo haré referencia a las tesis doctorales sobre fraseología defendidas en España, con la excepción de otras que hayan sido especialmente relevantes para el desarrollo de la disciplina en nuestro país. Quisiera señalar, así mismo, que no todas las contribuciones son de igual calidad. 5 Consúltese a este respecto la base de datos TESEO (), del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, en la cual se recogen las tesis doctorales leídas en las Universidades españolas desde 1976. Así mismo, la Biblioteca Virtual del Instituto Cervantes () permite la descarga de tesis completas en formato pdf. También puede resultar interesante la sección que la revista Paremia dedica a tesis y tesinas sobre paremiología y fraseología, así como la información sobre tesis doctorales de la Revista de la Sociedad Española de Lingüística.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 18

18

Introducción

Es de justicia mencionar, en primer lugar, la tesis de Alberto Zuluaga Ospina, defendida en 1978 en la Universidad de Tubinga (Alemania). De ella surgió la aclamada Introducción al estudio de las expresiones fijas (Francfort: Peter Lang, 1980), que sirvió de punto de partida para toda la investigación posterior que sobre fraseología se ha desarrollado en nuestro país desde entonces. En verdad, se puede considerar a Alberto Zuluaga como el precursor de la fraseología moderna en España: su decisiva aportación nos ha iluminado y guiado a todos los que hemos seguido por este camino. Y sigue siendo, sin duda, fuente constante de inspiración. Dicho esto, hay que reconocer, también, la labor pionera de los paremiólogos españoles, los cuales han dejado su legado en forma de armazón teórico serio y bien cimentado. La confluencia entre la paremiología y la fraseología ha permitido abrir los horizontes de la investigación hasta considerar otros tipos de unidades que aún no habían recibido una atención adecuada. El punto de inflexión lo marca el trabajo de Julia Sevilla, quien defendió su tesis doctoral en el año 1987. Desde una perspectiva contrastiva (español-francés), la autora se centró en el estudio del universo paremiológico referente a los animales, proporcionando, además, unos criterios taxonómicos sólidos que sirvieron de fundamentación a otros trabajos posteriores de gran trascendencia. Nos referimos, cómo no, a las tesis doctorales de M.ª Ángeles Calero Fernández6 y Maria Conca. La primera siguió una orientación socio-cultural, pero desde una perspectiva de género: estudia las paremias como manifestaciones de una determinada ideología, que, en este caso, refleja una visión del mundo androcéntrica y misógina. La autora sostiene la hipótesis de que las paremias españolas, en tanto hechos de lengua y manifestaciones del folclore popular, han de reflejar la mentalidad de la comunidad hispanohablante; esto es, la imagen que sobre la mujer traslucen los refranes tiene que ser deudora de dicha visión del mundo. Elabora, así mismo, una teoría gramatical del refrán a partir del análisis morfosintáctico, léxico y retórico. Finalmente, clasifica el corpus recopilado de 10.884 paremias relacionadas con la mujer, utilizando criterios alfabéticos y temáticos, para organizar el refranero que acompaña al estudio. La segunda, por su parte, realizó su tesis doctoral, diri-

6 Mencionamos a Calero dentro de los paremiólogos, aun a pesar de que sus trabajos abarcan muchas otras líneas de investigación, como son las relaciones entre fraseología y género, fraseología y lexicografía, además de la etnolingüística y la sociolingüística. Quisiera mencionar, en particular, su interesante trabajo sobre las unidades fraseológicas del DRAE y el DUE, así como sus análisis de los diccionarios fraseológicos monolingües y bilingües con el español, en el seno del proyecto Aproximación variacional y etnolingüística a los diccionarios contemporáneos de la lengua española” (DGICYT, PS94-0210), del cual fue investigadora principal.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 19

Introducción

19

gida por Vicent Salvador Liern7, abordando tres ámbitos sobre estudio de las paremias: por una parte, profundizó en los aspectos semánticos y pragmáticos del refrán8, por otra parte, se introdujo en aspectos históricos de la paremiología catalana, con especial referencia a la pervivencia de refranes latinos y árabes en las lenguas romances; y, en tercer lugar a partir de los aspectos textuales y diacrónicos estudiados, se realizó un ensayo de reconstrucción de un refranero catalán de finales del XV o principios del XVI: Refranys en prosa catalana glossats, que se conserva únicamente por sus traducciones castellanas9. Mención aparte merece el trabajo de Ángel Iglesias Ovejero10, coincidente en el tiempo con el de Julia Sevilla. En él se tocaban aspectos relativos a los nombres propios del refranero (incluidos los gentilicios), se establecía un tipología de nombres proverbiales y se abordaba la cuestión de la motivación y la figuración proverbial, entre otras cosas. Dicha investigación, a pesar de su indudable valor científico, no tuvo demasiada difusión entre los paremiólogos españoles,

7 Vicent Salvador –primero, en la Universidad de Valencia y, actualmente, en la Universitat Jaume I de Castellón–, está a la cabeza de la investigación que se realiza en este campo dentro de la comunidad valenciana con especial referencia a la fraseología del catalán, ya sea desde una perspectiva monolingüe o contrastiva con el español y otras lenguas europeas. Recordemos, por ejemplo, el proyecto de investigación Metaforización y idiomaticidad en la fraseología (DGICYT, 1991-1995), del cual fue investigador principal, contando con la participación, entre otros, de Maria Conca. No es éste el lugar para dar cuenta de sus innumerables publicaciones y trabajos sobre el tema. No obstante, sí quisiera destacar su importante contribución a la disciplina desde la parte más estable, prefabricada, del discurso. Recuérdense, por ejemplo, dos obras clave para el desarrollo de la fraseología en España, como son el número 18 monográfico de la revista Caplletra (1995) y el volumen colectivo El discurs prefabricat. Estudis de fraseología teórica i aplicada (Castellón: Publicacions de la Universitat Jaume I, 2000), que coeditó con A. Piquer. También quisiera mencionar otra tesis dirigida por V. Salvador y defendida en el año 2001 en la Universidad Jaume I por Heicke van Lawick Brozio, titulada Metaforicitat i traductologia: Anàlisi d’un corpus de traduccions de l’alemany (L-origen) a diverses llengües romàniques (L-meta). Dicha tesis no está incluida en la Tabla II porque sólo se dedican algunos capítulos (el cuarto, el sexto y parte del tercero) a las estrategias de traducción de unidades fraseológicas en la obra de Bertold Brecht y Frank Kafka, así como otras cuestiones relativas a la equivalencia interlingüística, con especial referencia a los somatismos brechtianos. 8 Un campo que ya había iniciado en su trabajo pionero Paremiologia (Valencia: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 1987). 9 Parte de este ingente trabajo fructificó en un libro, escrito en colaboración con Josep Guia: Els primers reculls de proverbis catalans (Barcelona: Publicacions de l’Abadia de Montserrat, 1996). 10 Ángel Iglesias Ovejero (1987-1988): Onomantique: motivation et typification du nom propre (proverbial et populaire) en espagnol. Tesis doctoral. Universidad de la Sorbona (París).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 20

20

Introducción

quizá debido al hecho de que se hubiera defendido fuera de nuestras fronteras (concretamente, en la Universidad parisina de la Sorbona), además de haberse publicado en francés. Con posterioridad han visto la luz varios trabajos de investigación11: algunos, fieles a la líneas de investigación de Julia Sevilla12, como Germán Conde Tarrío y Shih Hu Sun Ping, por ejemplo; otros, como Ahmed Salem Ould Mohamed Baba y Rosa M.ª Ruiz Moreno se inscriben más bien en la línea de Maria Conca. El de Nelson Guillermo Torres Jiménez, sobre el procesamiento psicolingüístico de las paremias, es, cuando menos, singular. De todos estos trabajos, quisiera mencionar especialmente dos tesis ya defendidas y otras cuatro que se encuentran en fase de elaboración. En primer lugar, la de Xus Ugarte Ballester (1998). En dicho trabajo la autora ofrece una reflexión teórica bastante completa sobre los problemas que plantean las unidades fraseológicas en traducción. A continuación, analiza las estrategias y procedimientos de traducción empleados para dar cuenta de locuciones y paremias en varias versiones de La Celestina en diversas lenguas europeas, entre ellas el inglés y el francés. La segunda tesis es la de Florentina Micaela Mena Martínez sobre la desautomatización de paremias inglesas por sustitución, que ha sido defendida en el 2002. Esta investigadora concibe las paremias como unidades de pleno derecho del sistema fraseológico de las lenguas. Y contempla la variabilidad fraseológica como un universal que se manifiesta como resultado de diferentes motivaciones o intencionalidades. Desde ambas premisas lleva a cabo un estudio cognitivo de la desautomatización y sus efectos potenciales a partir de un corpus de citas, empleando como herramientas de análisis los escenarios, los esquemas, espacios mentales, etc. De las otras tesis doctorales que aún se hallan en curso, dos de ellas se están realizando en la Universidad de Valencia, bajo la dirección de Maria Conca. La

11

Las universidades gallegas son especialmente activas en lo que a la paremiología se refiere. Junto a las tesis más representativas, hallamos también memorias de licenciatura y proyectos fin de carrera de gran interés, como los de L. Santos Suárez (Influencia do mundo rural na creación do refraneiro galego (estudio comparativo co inglés e o español, 1997), E. Gómez López (O campo semántico dos animais na fraseoloxía. Estudio comparativo (inglés, español, galego, 1997) y A. Vidal Castiñeiras (Proposta dun mínimo paremiolóxico para o encino da lingua galega en Traducción, 2000), todos ellos defendidos en la Universidad de Vigo. 12 Merece la pena señalar otros trabajos tutelados de doctorado y proyectos dirigidos por Sevilla en la Universidad Complutense de Madrid, como el de Claudio Klotchkov (El lenguaje coloquial: el ingrediente fraseológico ruso-español, 1993), el de Marta Melero Gómez (Dichos Zarma a través de La Geste de Zabarkane, 1993), y el de Yuriko Shibué, titulado Didáctica de las paremias españolas en la clase de español como lengua extranjera –enfocado principalmente a estudiantes japoneses (2001).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 21

Introducción

21

primera, a cargo de Josep Guia i Marín13, titulada Estudi paremiològic i fraseològic de textos literaris catalans del segle XV, gira en torno a la localización exhaustiva y el análisis de las unidades fraseológicas presentes en dos obras literarias importantes del siglo XV catalán: Tirant lo Blanc i Spill o Libre de les dones. El objetivo de la investigación es llegar a formular una propuesta teórica, a partir de las potencialidades textuales y contextuales de la fraseología, que dé cuenta de aspectos relacionados con enigmas literarios del medievo, como la localización de fuentes, la caracterización de estilos y registros, la determinación de autorías y la datación de obras. En la segunda, titulada Estudi dels refranys antroponímics catalans, Sílvia Pínter i Soler incide especialmente en el estudio de un corpus de refranes antroponímicos amplio: el contenido en el DCVB (Diccionari Català-Valencià-Balear), comparado con otros diccionarios anteriores y posteriores. La finalidad es inventariar, clasificar y estudiar este tipo de paremias –evolución diacrónica, contenido cultural y uso discursivo–, con vistas a la elaboración de un diccionario de refranes de ese tipo. El tercer trabajo de investigación doctoral, que versa sobre el minimum paremiológico español, está siendo realizado por Olga Tarnovska, bajo la codirección de Antonio Pamies Bertrán y Juan Alfredo Bellón Cazabán en la Universidad de Granada. Y, por último, en la Universidad de Lleida, bajo la codirección de M.ª Ángeles Calero y Matías López López, Xavié Pascual López estudia la pervivencia del mundo clásico en la fraseología española y catalana en su tesis, que lleva por título Fraseología española de motivo greco-romano en la competencia comunicativa de catalanohablantes y castellano-hablantes. Resulta imposible (y tampoco es mi intención) resumir en unas pocas líneas la incesante actividad del grupo de paremiólogos españoles. Sí quisiera señalar que en torno a sus principales figuras se viene desarrollando una ingente labor en este campo. Piénsese en la revista Paremia, dirigida por Julia Sevilla, donde se incluyen artículos tanto de paremiología como de fraseología; o en el convenio de colaboración científica que dicha profesora suscribiera de 1998 a 1999 con el CINDOC (CSIC) para la creación de un directorio de paremiólogos y fraseológos españoles. Cabe mencionar, así mismo, la colaboración de Julia Sevilla con Louis Combet, Jesús Cantera Ortiz de Urbina, Germán Conde Tarrío, Josep Guia, Javier Kalzakorta, por citar solo algunos, lo cual ha fructificado en diversos

13

Cabe destacar la investigación que lleva a cabo Josep Guia, propugnando la introducción de la fraseología en los estudios de estilometría, es decir, en la caracterización de los estilos literarios. Fruto de esta investigación, es el libro Fraseologia i estil (València, Tres i Quatre, 1999), así como otros trabajos aplicados a la literatura catalana medieval. También Maria Conca ha aplicado este método a la caracterización del estilo de autores contemporáneos como Enric Valor.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 22

22

Introducción

repertorios multilingües y varias ediciones críticas14, así como en proyectos de investigación financiados, de los cuales merece la pena destacar el titulado Paremiología contrastiva (español, francés, italiano, portugués y provenzal). Estudio lingüístico y contrastivo con aplicación a la enseñanza de lenguas (PB97-0322C04, 1998-2001), en el cual se dieron cita, además, Maria Conca y Ramón Almela, entre otros. En estrecha relación con los anteriores trabajan profesores de la Universidad de Santiago de Compostela, como Pilar Río Corbacho, quien acaba de defender su tesis doctoral sobre la paremia hagiográfica desde una perspectiva contrastiva, y Luis Sanjurjo Villanueva, quien se encuentra realizando su tesis doctoral sobre paremias en la farsa medieval francesa (As paremias na farsa medieval francesa), bajo la dirección de Germán Conde Tarrío. En esta misma línea se inscribe el grupo de trabajo PROHEMIO (Programme de Recherches sur Oralité, Histoire et Écriture dans le Monde Ibérique, de l’Université d’Orléans), ubicado en Francia y liderado, precisamente, por Ángel Iglesias Ovejero, quien también coordina la revista Cahiers du PROHEMIO. Por razones de claridad expositiva he hablado antes de los “paremiólogos españoles”, cuando debía haberme referido más bien a los “fraseólogos que se ocupan preferentemente de las paremias”. En verdad, no es posible establecer una separación clara y tajante entre paremiólogos y fraseólogos. Y esto por dos razones: primero, porque la mayor parte de los autores que investigan en paremiología también lo hacen sobre otros tipos de unidades fraseológicas (y viceversa); y, segundo, porque las paremias forman parte integrante del universo fraseológico de las lenguas, y, por tanto, conviene estudiarlas dentro de ese marco de referencia general. Si bien los estudios sobre paremias han favorecido la investigación en otras esferas fraseológicas, no es menos cierto que los trabajos en torno a las restricciones sintagmáticas del componente léxico también han contribuido a sensibilizar a los fraseológos españoles ante unas unidades escurridizas cuya estabilidad

14 Entre otras publicaciones, cabe destacar: 877 refranes españoles con su correspondencia catalana, gallega, vasca, francesa e inglesa (J. Sevilla, J. Cantera Ortiz de Urbina, M. Burrel Arguis, J. Calzacorta Elorza y G. Conde Tarrío (eds.). Madrid: Eiunsa. 2ª ed. revisada y ampliada, 1998/2001); 1001 refranes españoles con su correspondencia en ocho lenguas (alemana, árabe, francesa, inglesa, italiana, polaca, provenzal y rusa (J. Sevilla, J. Cantera Ortiz de Urbina, M.ª T. Zurdo Ruiz-Ayúcar, R. María Piñel López, S. L. Arora, M.ª T. Barbadillo de la Fuente, F. Ruiz Girela, A. S. Ould Mohamed-Baba, A. Arroyo Ortega, M. Burrel Arguis, F. Presa González, A. G. Matyjasczyk, M.ª P. Blanco García y G. Turover (eds.). Madrid: Eiunsa, 2001); Refranes y Proverbios de Hernán Núñez (1555) (Eds.: L. Combet, J. Sevilla Muñoz, G. Conde Tarrío y J. Guia i Marín. Madrid: Ediciones Guillermo Blázquez, 2001); y Pocas Palabras Bastan. Vida e interculturalidad del refrán (J. Sevilla y J. Cantera Ortiz de Urbina. Salamanca: Centro de Cultura Tradicional. Diputación de Salamanca, 2002).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 23

Introducción

23

dependía casi exclusivamente de la norma lingüística. La profundización en las solidaridades léxicas coserianas fue el tema de la tesis defendida por Paloma Penas Izquierdo, justo al comenzar la década de los noventa. La autora se refiere a “un tipo de colocación léxica”, estableciendo el fundamento sémico distintivo del rasgo solidario. Junto a éste, siguieron otros trabajos basados en la teoría Sentido-Texto, que concebían las restricciones combinatorias a través de las funciones léxicas. Así, la tesis de Margarita Alonso Ramos15, defendida en 1993, ofrece una nueva sistematización del modelo de Mel’cËuk a partir del análisis de materiales procedentes del DUE. Igualmente, la tesis del cubano Jesús Írsula Peña16 sobre colocaciones en español y alemán rezumaba la influencia de la teoría Sentido-Texto, por un lado, y de la gramática de valencias, por el otro, y, aunque no tuvo demasiada repercusión en España, sí dejó una marca indeleble en trabajos posteriores como el de Kazumi Koike, del cual nos ocupamos más adelante. Durante el curso académico 1994-1995 se defendía la tesis de M.ª Ángeles Zarco Tejada, consistente en la aplicación de las funciones léxicas al estudio de estructuras conceptuales que la autora denomina colocaciones, desde la perspectiva de la traducción automática, muy en la línea también de la tesis presentada un año antes por Ana de Aguilar Amat-Castillo sobre estructuras sintagmáticas léxicas (colocaciones) y sus vínculos (coocurrencias). Como se ha mencionado, durante el curso académico 1993-1994 defendí mi propia tesis doctoral sobre fraseología en sentido amplio, desde la comparación interlingüística, integrando las colocaciones como la primera esfera fraseológica, al lado de las locuciones (segunda esfera) y los enunciados fraseológicos, esto es, paremias y fórmulas rutinarias (tercera esfera). Con anterioridad se habían realizado estudios contrastivos sobre determinados tipos de unidades (cf. las tesis de Violeta Mitja y Adriana Pintori Olivoto, defendidas en 1989 y 1990, respectivamente), pero hasta la fecha no se disponía de un marco general de referencia, de una sistematización que permitiese la integración y caracterización apro-

15 Margarita Alonso es investigadora principal del proyecto titulado “Extensión de Eurowordnet con información colocacional” (BFF2002-04226-C03-01), que le ha sido concedido en el 2002 por el Ministerio de Ciencia y Tecnología, a través del Programa Nacional de Promoción del Conocimiento (Área de Filología y Filosofía). En esa misma convocatoria se le ha concedido a Ignacio Bosque, en calidad de investigador principal, otro proyecto sobre colocaciones y otros tipos de restricciones sintagmáticas desde el punto de vista lexicográfico, titulado “Base de datos para un diccionario combinatorio del español” (BFF2002-02210), el cual servirá de base para el diccionario de restricciones léxicas que actualmente coordina. 16 Jesús Írsula Peña defendió su tesis doctoral en 1993 en la Universidad de Leipzig, bajo la dirección de Gerd Wotjak. Poco después, la publicaría como monografía bajo el título de Substantiv-Verb-Kollokationen. Kontrastive Untersuchungen Deutsch-Spanisch (Francfort, Berlín: Peter Lang, 1994).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 24

24

Introducción

piada de universos fraseológicos dados. A partir de entonces se han sucedido un buen número de tesis doctorales, lo cual demuestra el auge que han adquirido los estudios fraseológicos en nuestro país. De gran importancia fue también la tesis doctoral de Leonor Ruiz Gurillo, defendida justo un año después, en la cual se abogaba por una concepción amplia de la fraseología, y, como consecuencia de ello, por una clasificación no discreta de unidades fraseológicas, desde un enfoque cognitivo. De allí surgieron dos monografías, que recogían sendas partes de su tesis: por un lado, el armazón teórico17 y, por el otro, el análisis descriptivo del tipo constituido por sintagmas prepositivos fraseológicos18. A partir de entonces, esta autora se ha convertido en una de las más prolíficas, como demuestran sus dos libros siguientes19, sin contar los innumerables artículos y capítulos de libro que ha publicado hasta la fecha. Le seguiría en el tiempo, que no en importancia, la tesis de Auxiliadora Castillo Carballo, quien iniciaría su investigación en la Universidad de Málaga, bajo la dirección de Manuel Alvar Ezquerra, aunque finalmente la defendiera en Alicante. Dicho trabajo tenía la particularidad de estar basado en un extenso corpus electrónico del español contemporáneo, cuyos sintagmas fraseológicos (locuciones y colocaciones) se habían extraído de forma automática mediante un programa de gestión de corpus, con objeto de identificar los patrones morfosintácticos más productivos. Entre ambas, Juan Antonio Martínez López presentaría en 1995 un trabajo de carácter más general, abundando en la fijación formal, semántica y pragmática de las unidades fraseológicas, desde una perspectiva eminentemente descriptiva. Diversas parcelas de la fraseología del español se han abordado con posterioridad desde diferentes ángulos. El curso académico 1999-2000 fue particularmente productivo en este aspecto. Así, por ejemplo, en la Universidad de Barcelona, bajo la dirección de Emma Martinell Gifre, se defendieron dos tesis doctorales. La primera de ellas, a cargo de M.ª del Mar Forment Fernández, estudiaba la fraseología verbal relativa al cuerpo humano en español desde la diacronía (siglos XIII al XVI), ofreciendo un modelo de glosario fraseológico, para centrarse, a continuación, en la productividad fraseológica de los somatismos en sincronía, mediante una serie de cuestionarios distribuidos entre estudiantes de Madrid y Barcelona. Tres meses más tarde se defendía la tesis de Esther Blasco Mateo, sobre las construcciones formadas por verbo, término de enlace e infiniti-

17 Aspectos de fraseología teórica española. Anejo XXIV de Cuadernos de Filología. Valencia: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 1997. 18 La fraseología del español coloquial. Barcelona: Ariel, 1998. 19 Las locuciones en el español actual. Madrid: Arco Libro, 2001; y Ejercicios de fraseología. Madrid: Arco Libros, 2002.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 25

Introducción

25

vo, con objeto de deslindar las perífrasis verbales de las locuciones, considerando las diferencias y similitudes de ambas en tanto unidades léxicas complejas, con especial referencia a los procesos de gramaticalización y lexicalización. Durante ese mismo curso académico se defendieron otras tres tesis más. La de Eva M.ª Iñesta Mena, bajo la dirección de Antonio Pamies Bertrán, abordaba aspectos valorativos, onomasiológicos y tipológicos de las unidades fraseológicas desde una perspectiva eminentemente cognitiva20. Las otras dos tesis doctorales, defendidas en la UNED, fueron dirigidas por otro de los fraseólogos más prolíficos del panorama español: Mario García-Page Sánchez21. La primera de ellas, presentada por Juan José Asensio González, versó sobre los valores fraseológicos de los signos negativos, teniendo en cuenta la expresión de la negación tanto en las unidades fraseológicas de claro valor negativo como en las que contienen entre sus elementos integrantes algún término negativo, independientemente de su significado global como unidad. La segunda de ellas, depositada dentro de ese mismo curso académico, pero defendida a comienzos del curso 2000-2001, corrió a cargo de Kazumi Koike. Dicho trabajo, publicado más tarde como monografía22, constituye uno de los estudios más completos que existen actualmente sobre las colocaciones del español. Tras ofrecer una panorámica del estado de la cuestión, Koike se centra en dos tipos con el sustantivo como elemento nuclear, tipificando los vínculos semánticos, descubriendo las relaciones existentes en las denominadas colocaciones encubiertas, y tratando con gran lucidez temas tan espinosos como la separación entre colocaciones y compuestos, la homonimia, la polisemia y la antonimia colocacional, o la codificación lexicográfica de dichas unidades. Curiosamente, desde mediados de los noventa la mayor parte de las tesis doctorales sobre fraseología que se han defendido en España abordan sistemas

20 A partir de dicha tesis, Eva Iñesta y Antonio Pamies acaban de publicar una versión reelaborada y actualizada bajo el título de Fraseología y metáfora: aspectos tipológicos y cognitivos (Granada: Método Ediciones, 2002). 21 Mario García-Page Sánchez ha publicado más de cuarenta artículos y capítulos de libro sobre fraseología española. Dedicó el capítulo II (“El lenguaje literal: su ruptura”) de su tesis doctoral, titulada La lengua poética de Gloria Fuertes (Universidad Complutense de Madrid, 1988), a la manipulación fraseológica como recurso retórico. Ha dirigido tres memorias de licenciatura en la UNED, a saber, las de J. J. Asencio Gónzalez (Expresiones fijas negativas en la lengua coloquial, 1994); la de la de Margarita Tecedor Yanguela (Un aspecto del léxico taurino: las expresiones fijas, 1995); y la de Kazumi Koike, titulada Alcance y características de las colocaciones sustantivo-verbales (1997). 22 Colocaciones léxicas en el español actual: estudio formal y léxico-semántico. Alcalá de Henares (Madrid): Servicio de Publicaciones de la Universidad; Tokio: Takoshoku University, 2001.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 26

26

Introducción

fraseológicos de otras lenguas, solos o en comparación con el español (estudios contrastivos y traductológicos). Esta investigación orientada a lo foráneo ha permitido la introducción en el contexto fraseológico nacional de corrientes, tendencias y metodologías de investigación novedosas, provenientes del resto de Europa. La primera en el tiempo, defendida por Carmen Mellado en 1996, seguía el enfoque cognitivo, tan propio de la fraseología germano-rusa, para el estudio de la metaforización en cadena y los modelos semántico-estructurales subyacentes a las unidades fraseológicas somáticas del alemán (cf. la tesis de Florentina Micaela Mena Martínez sobre paremias inglesas). Le seguiría M.ª José González Rey, con un trabajo sobre aspectos generales de la fraseología en lengua francesa, en la cual aplica gran parte de la teoría fraseológica producida en España a partir del segundo tercio de la década de los noventa: adopta, concretamente, la organización tripartita en esferas para caracterizar el sistema fraseológico francés y aplica un enfoque de base cognitiva a los procesos de metaforización23. Recientemente, se han defendido sendas tesis doctorales, una sobre fraseología terminológica de la lengua inglesa y la otra sobre locuciones del gallego. La primera de ellas, dirigida por Purificación Fernández Nistal (ITBYTE), corre a cargo de Beatriz Méndez Cendón, quien ha aplicado los principios y las herramientas de la lingüística del corpus y la terminología al estudio de las unidades fraseológicas propias de la comunicación especializada de los textos científicos médicos sobre radiología en lengua inglesa. Por su parte, María Álvarez de la Granja estudia la forma de las locuciones verbales gallegas desde el punto de vista sintáctico-semántico, con especial referencia a los esquemas funcionales fijados, la determinación y las variantes, así como sus usos discursivos. Las cuatro tesis restantes abordan el estudio de la fraseología desde la lexicografía bilingüe, la lingüística contrastiva y la traductología. En estrecha relación con algunas de las investigaciones mencionadas anteriormente –concretamente, las de Margarita Alonso, Ana de Aguilar-Amat, Jesús Írsula y M.ª Ángeles Zarco–, M.ª Isabel Tercedor Sánchez aplica la teoría Sentido-Texto en combinación con el modelo Lexemático-Funcional al estudio de los patrones colocacionales del discurso científico especializado en español y en inglés, con vistas a la traducción asistida y la redacción técnica, tomando como base la lingüística del corpus y la terminología24. De la fraseología contrastiva del par de lenguas ale-

23 Dicha tesis se acaba de publicar en forma de monografía bajo el título de La phraséologie du français (Tolouse: Presses Universitaires du Miral, 2002). 24 La tesis de M.ª Isabel Tercedor se inscribe en el seno del proyecto PB98-1342 de la DGCYT, ONCOTERM: sistema bilingüe de información y recursos ontológicos, liderado por Pamela Faber (Universidad de Granada), del cual es buen exponente.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 27

Introducción

27

mán-español se han ocupado Juan Pablo Larreta Zulategui25 y Cecilia López Roig. El primero sigue de cerca los pasos de Carmen Mellado, con un estudio contrastivo sobre los somatismos verbales en un corpus organizado ideográficamente y extraído de diccionarios y de datos proporcionados por informantes nativos. El otro trabajo, más reciente, corresponde a Cecilia López Roig, cuya tesis doctoral versa sobre aspectos puramente traductológicos en la combinación lingüística español-alemán, y se centra de manera especial en el establecimiento de tipos de equivalencia fraseológica a partir de una dimensión cuantitativa y otra cualitativa. De la combinación portugués-español se ocupa, por su parte, Ana Belén García Benito. Dicha autora se centra en las locuciones verbales, proponiendo equivalentes y agrupándolas en esferas conceptuales amplias con objeto de servir los intereses de la didáctica de segundas lenguas y de los Estudios de Traducción. A éste trabajo le ha seguido recientemente el de M.ª Isabel Santamaría Pérez26, el cual constituye una contribución al estudio de la fraseología en la lexicografía bilingüe del español con el catalán, con especial atención a la situación sociocultural de la comunidad valenciana, la localización del material fraseológico en los diccionarios analizados, así como el uso que se hace de la información fraseológica en traducción. Este breve recorrido por las principales tesis sobre fraseología ha servido para desvelar de forma clara y concisa los principales tema de investigación que se han abordado hasta la fecha27. Si se echa un vistazo a las que aún están en

25 Larreta Zulategui ha publicado su tesis doctoral, ligeramente reformada, bajo el título de Fraseología contrastiva del alemán y el español. Teoría y práctica a partir de un corpus bilingüe de somatismos (Francfort, Munich: Peter Lang, 2001). Sobre este tema merece la pena consultar también la tesis de la cubana Neyda Diaz, titulada Zum Vergleich deutscher und spanischer idiomatischer Redewendungen unter Beruecksichtigung der Ubersetzungsproblematik, que fue defendida en 1983 en la Universidad de Leipzig, bajo la dirección de Gerd Wotjak. 26 A finales del 2002 está prevista la publicación de una monografía extraída de dicha tesis bajo el título de Fraseología Española en el diccionario bilingüe (español-catalán): usos y contraste (Alicante: Servicio de Publicaciones de la Universidad). 27 Entre las tesis que he seleccionado en virtud de su representatividad, no he encontrado ninguna defendida hasta la fecha, que esté dedicada exclusivamente a la didáctica de las unidades fraseológicas o a su empleo en la enseñanza de idiomas. Sin embargo, ésta es también una línea de investigación muy prometedora en España. Sirvan de muestra los trabajos llevados a cabo por Inmaculada Penadés (cf. capítulo I) o Leonor Ruiz Gurillo (cf. nota 16); las tesis de máster que ha dirigido recientemente Paz Battaner en la Universidad de Barcelona, como, por ejemplo, las de M. Echevarría –La fraseología (Estudio de locuciones en los manuales avanzados de E/LE), 2000) y M.ª R. González (Estudio y análisis de 80 colocaciones en diccionarios de aprendizaje y manuales de E/EL, 2001); las dos tesis en curso, a cargo de Núria Morera i Taus y Antoni Teruel i Barberà, que están siendo realizadas bajo la dirección de Maria Conca; o el proyecto de investigación Lo metalingüístico en español. Estudio semántico, discursivo, fraseológico, sintáctico y sígnico. Aplicaciones en la enseñanza del español (BFF2002-00801), concedido a Ramón González Ruiz (Universidad de Navarra), por

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 28

28

Introducción

curso, el panorama resulta más alentador todavía. No hay duda de que en España se está creando escuela. Por ejemplo, en la Universidad de Granada, bajo la dirección de Juan Martínez Marín28, se están realizando tres tesis doctorales sobre el tema: concretamente, Andjelka Pejovik investiga sobre las colocaciones léxicas que tienen como elemento nuclear el verbo; Carlos Julio Rodríguez realiza un estudio descriptivo de las locuciones verbales españolas a partir de un corpus electrónico; y, finalmente, Esteban Tomás Montoro del Arco indaga sobre la existencia de una norma culta en la fraseología del español, considerada ésta en sentido amplio, es decir, intentando abarcar la variedad de normas diatópicas. También en la Universidad de Granada, pero esta vez bajo la codirección de Antonio Pamies y José Andrés de Molina, Mariana Kolomiyets lleva a cabo su tesis sobre fraseología comparada con el español, desde los postulados rusos. Las universidades valencianas29 son, en estos momentos, punto de referencia obligado en cuanto a la investigación en fraseología se refiere. En la Universidad de Valencia, Maria Conca dirige otras dos tesis de fraseología desde una perspectiva eminentemente didáctica. La primera, titulada Fraseologia i ensenyament de llengües, corre a cargo de Núria Morera i Taus. La autora parte de una aproximación holística y cognitiva a la adquisición de unidades fraseológicas en contexto, con especial referencia a la competencia fraseológica de los estudiantes en diferentes ciclos del aprendizaje, tanto en una primera lengua (L1), como en una segunda lengua (L2). Se trata de elaborar una teoría aplicada capaz de integrar el aprendizaje de la fraseología en el uso de la lengua oral y escrita, tanto en registros formales como informales. Antoni Teruel i Barberà también pasa revista a la cuestión de la competencia fraseológica en su tesis Anàlisi fraseològica del discurs col.loquial: aplicació a tres generacions de la comarca de la Ribera. La investigación se aborda desde un punto de vista sociolingüístico, atendiendo al discurso coloquial de tres generaciones para observar los cambios producidos en la competencia fraseológica de los hablantes. La finalidad es reflexionar sobre la elaboración de materiales fraseológicos didácticos desde el punto de vista del uso y la buena gestión del discurso coloquial, con objeto de enriquecer el patrimonio fraseológico en las diferentes lenguas. Así mismo, en la Universidad de

el Ministerio de Ciencia y Tecnología, dentro del Programa Nacional de Promoción del Conocimiento (Área de Filología y Filosofía). 28 También bajo la dirección de Juan Martínez Marín, Jorge Martínez Montoro analiza la obra lingüística de Julio Casares, con especial referencia a sus teorías sobre locuciones y fórmulas pluriverbales. 29 A modo de ilustración, mencionaremos también dos proyectos de investigación propios desarrollados en la Universidad de Valencia: el dirigido por J. Guia i Marín, titulado Teoria, història i ús de la fraseologia catalana (1995-1996); y el DIAFRAES (Diacronía Fraseológica del Español), dirigido por la M.ª Teresa Echenique Elizondo.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 29

Introducción

29

Alicante, Larissa Tomofeeva realiza su tesis doctoral, titulada Aspectos traductológicos de la fraseología española: estudio comparativo ruso-español, bajo la dirección de José Luis Cifuentes Honrubia y Leonor Ruiz Gurillo; Tahirisoa Ravakiniania Rakotonanahary investiga en fraseología contrastiva como tema de su tesis doctoral, titulada La metáfora en las locuciones malgaches, sus equivalentes y sus traducciones en francés y en español, bajo la dirección de Ascensión Sierra, Pedro Mogorrón y Eric Laporte (Marne La Vallée, Laboratorio de LADL, de M. Gross); mientras que Belén Alvarado estudia las fórmulas rutinarias en el español hablado, bajo la dirección de Dolores Azorín Fernández. Por otra parte, en la Universidad Rovira i Virgili, Verónica Ferrando Aramo está a punto de defender su tesis doctoral, titulada Tratamiento de los elementos lexicalizados en un diccionario bilingüe: la fraseología verbal, que viene realizando bajo la dirección de María Bargalló Escrivà. Desde el año 1999 al 2002 en dicha Universidad se ha llevado a cabo un proyecto subvencionado por el Ministerio, titulado Fraseología, régimen y sintaxis de las unidades verbales: estudio comparado español-catalán (PB98-1517, DGICYT), con la participación de María Bargalló, entre otros, bajo la dirección de Jordi Ginebra en calidad de investigador principal. Y, finalmente, hay que mencionar las tesis en curso sobre fraseología terminológica, o, si se prefiere, fraseología de las lenguas de especialidad30. En este campo sobresale la investigación que se lleva a cabo en el seno del IULATERM (Institut Universitari de Lingüística Aplicada, Universidad Pompeu Fabra), con M.ª Teresa Cabré Castellví a la cabeza. Precisamente bajo su dirección, Cleci Regina Bevilacqua se encuentra realizando su tesis doctoral, titulada Las unidades fraseológicas eventivas: reconocimiento y descripción, que es la continuación de su trabajo de investigación de segundo año de doctorado, el cual defendió en 1999 bajo el título de Unidades fraseológicas especializadas: estado de la cuestión y perspectivas31. Dicho trabajo se inserta en la líneas de investigación

30 En noviembre del 2002 se defendió en la Universidad de Málaga una tesis sobre textología contrastiva, lingüística del corpus y fraseología, que no está incluido en la Tabla II porque sólo dedica un capítulo, el quinto, a la fraseología jurídica. Me refiero al trabajo de Inmaculada Almahano Güeto, titulado El contrato de viaje combinado en alemán y español: las condiciones generales. Un estudio basado en corpus, que ha sido realizado bajo mi dirección en el seno del proyecto PB98-1399 de la DGICYT, Diseño de un tipologizador textual para la traducción automática de textos jurídicos (español ↔ inglés/alemán/italiano/árabe), del cual soy investigadora principal. 31 Merece la pena mencionar otros dos trabajos de investigación dirigidos por Teresa Cabré en el marco de los programas de doctorado sobre lingüística aplicada, léxico y discurso del IULA (Universidad Pompeu Fabra). Me refiero, concretamente, al de R. Estopà (Les unitats terminològiques polilexemàtiques en els lèxics especialitzats (dret i medicina), 1996) y al de B. Amaro de Melo (Constitución de un glosario de unidades terminológicas complejas del área de Telecomunicaciones (portugués-español), 1998).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 30

30

Introducción

de los proyectos concedidos al IULA sobre terminología y lenguajes de especialidad, en los que, de forma directa o indirecta, se han abordado problemas de fraseología. Me refiero, básicamente, a tres proyectos, a saber, La terminología científico-técnica: reconocimiento, análisis y extracción de información formal y semántica (PB96-0293, Ministerio de Educación y Cultura, 1997-2000); el TEXTERM. Textos especializados y terminología: selección y recuperación automáticas de información (BFF2000-0841, Ministerio de Ciencia y Tecnología, 2001-2003), dirigidos ambos por Teresa Cabré; y el RICOTERM. Sistema de recuperación de información con control terminológico y discursivo (TIC20001191, Ministerio de Ciencia y Tecnología, 2001-2003), cuya investigadora principal es Mercè Lorente Casafort. El otro centro por excelencia para la investigación en fraseología terminológica es el Instituto de Terminología Bilingüe y Traducción Especializada (ITBYTE) de la Universidad de Valladolid, donde se realiza una ingente labor terminológica basada en corpus, bajo la dirección de Purificación Fernández Nistal, en colaboración con José María Bravo Gozalo. Ahí se inscribe, precisamente, la tesis de Beatriz Méndez, citada con anterioridad. De 1999 a 2000, José M.ª Bravo ha dirigido un proyecto coordinado entre las Universidades de Valladolid y de Ottawa (Canadá) sobre fraseología, lingüística del corpus y lexicografía bilingüe, titulado Aplicaciones de la ingeniería lingüística al procesamiento de los lenguajes naturales: la problemática de la incorporación de las unidades fraseológicas inglesas “V + A/P” y de sus derivados nominales a la construcción de diccionarios automatizados inglés-español y español-inglés (DGES, PR19990185). En la actualidad es el responsable de la sección de fraseología del proyecto Análisis contrastivo y traducción especializada inglés-español: aplicaciones y herramientas (ACTRES), concedido por el Ministerio de Ciencia y Tecnología (BFF2001-0112, 2001-2004), que coordinan él mismo, por la Universidad de Valladolid, y Rosa Rabadán Álvarez, por parte de la Universidad de León. Fuera de nuestras fronteras también se está registrando una fuerte actividad fraseológica. Destacaré, de nuevo, el grupo PROHEMIO en Francia, el cual organiza periódicamente encuentros y coloquios sobre proverbialidad, idiomaticidad, motivación y traducción. De hecho, el grupo está inmerso en un proyecto de traducción de la fraseología (francés-español), al tiempo que se trabaja sobre los usos literarios de las unidades fraseológicas: Sylvié Fournié, bajo la dirección de Ángel Iglesias, se halla en la recta final de su tesis doctoral sobre reescritura y usos retóricos de las unidades fraseológicas en la obra de Javier Tomeo. Otro centro extranjero de indudable interés para los estudios de fraseología española es la Universidad de Eötvös Loránd (ELTE, Budapest, Hungría). Bajo los auspicios de Károly Morvay se están realizando numerosos trabajos de investigación, entre los cuales cabe destacar la tesis de Judit Lux (1984) sobre locucio-

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 31

Introducción

31

nes verbales españolas32, así como un amplio elenco de memorias de licenciatura cuyo centro neurálgico es la fraseología española, ya sea desde la perspectiva monolingüe o la traductológico-contrastiva. Suscitan gran interés las relaciones entre fraseología y literatura, y muy especialmente con respecto a la obra de Cervantes y a la de Cela33, junto a otros autores contemporáneos como José Luis Alonso de Santos o Elvira Lindo34. Otros focos de interés lo constituyen el empleo de unidades fraseológicas en los medios de comunicación35, la fraseología del español de América36, los estudios contrastivos37, así como los temáticos y cognitivos38. Por último, en la universidad alemana de Augsburgo, Luis Martín Martínez ha defendido en el 2001 una tesis doctoral –codirigida por Hans Wellmann y Reinhold Werner39– sobre el tratamiento de las unidades fraseológicas en

32 Judit Lux (1984): A spanyol igei szólások elemzése. Tesis doctoral. Universidad de ELTE (Hungría). 33 Véanse los siguientes trabajos, defendidos como tesinas en la Universidad de ELTE: Károly Morvay (1971): Tumaczenia zwiãzków frazeologicznych w polskisch przekladach “Don Kichota”; Ilona Varrók (1984): La traducción japonesa del Don Quijote; Ildikó Szakolczai (1986): La fraseología en las traducciones francesas del Quijote; Gabriella Gidró (1987): La fraseología en “La Colmena” de Camilo José Cela; Éva Bagi (1988): Fraseología en la obra de Cela; y Alexandra Tornay (1998): El lenguaje de Cervantes. 34 Me refiero, concretamente, a los trabajos de Laura Bárdos (Léxico y fraseología del lenguaje infantil español - a través de la lectura de “Manolito Gafotas”) y de Ágnes Varga (Análisis fraseológico de “Bajarse al moro”, drama de J. L. Alonso de Santos), que se leyeron en junio del 2002. 35 Véanse las siguientes tesinas leídas en la citada universidad húngara: Mónica Varga (1987): Fraseología en el lenguaje periodístico; Enikô Balázs (1994): El lenguaje de los anuncios breves. Unidades fraseológicas de la prensa española actual; y Emese Szeliánszky (2000): Expresiones coloquiales en las revistas del corazón. 36 Cf. Zsuzsa Ruppl (1998): El español de América Latina reflejado en las obras del siglo XX; Katalin Schiller (2000): El léxico y la fraseología mexicanos referidos al vestuario; y Edina Deák (2001): Léxico y fraseología en el español hablado en Argentina. 37 Cf. Krisztina Flachner (1992): Coincidencias de las expresiones idiomáticas entre las lenguas española y húngara; Bea Helga Bodnár (1998): Unidades fraseológicas frasales en español y en catalán; Enikô Kiss (1998): Análisis comparativo fraseológico español-húngaro –Dineros son calidad (Pénz beszél, kutya ugat); y Judit Gyôri (1999): Alusiones eróticas en los refranes de Hungría y España. 38 Cf. Éva Eszter Szabó (1993): Las metáforas y metonimias conceptuales del amor en español coloquial; Veronika Praefort (1994): Unidades fraseológicas con nombres de animales en la lengua española; e Ildikó Péter (1999): Religiosidad a la luz del lenguaje. 39 Bajo la dirección de Reinhold Werner, con la colaboración de Luis Martín Martínez, entre otros, se viene desarrollando un proyecto de fraseología on-line, concebido como un taller de prácticas o coloquio de investigación para los estudiantes de lingüística aplicada. Cuenta con 141 entradas hasta la fecha. Se puede consultar en la siguiente dirección URL: . También en Augsburgo, Hugo Kubarth y Fernando Varela se hallan trabajando en un nuevo proyecto de fraseografía española, con especial referencia al caudal fraseológico hispanoamericano.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 32

32

Introducción

los diccionarios bilingües alemán-español, la cual acaba de publicar como monografía con el mismo título40. De todo lo expuesto se puede concluir, sin temor a equivocarse, que la fraseología española se encuentra en estos momentos al mismo nivel que el resto de Europa41. Al igual que nuestros colegas europeos, en España se trabaja en fraseología desde una perspectiva globalizadora; y, junto a otros métodos más tradicionales, se empiezan a emplear metodologías de análisis procedentes de la lingüística del corpus, la semántica cognitiva y la semiótica (cf. capítulo I). Los intereses de investigación, en cuanto a temas priorizados, van también por los mismos derroteros, aunque aún se eche en falta una mayor profundización en la fraseología dialectal, por ejemplo, y en el estudio pragmático-discursivo de las fórmulas rutinarias, entre otros. En este sentido, también se detecta cierta escasez en cuanto a proyectos de investigación subvencionados se refiere, y poca o casi nula coordinación entre los distintos investigadores y equipos de investigación. Quizá fuera conveniente intentar un acercamiento de los fraseológos españoles, que permitiera aunar esfuerzos y optimizar recursos. Por último, uno de los rasgos distintivos de la investigación fraseológica en España es, sin duda, su vocación por la comparación interlingüística y el contraste entre los sistemas fraselógicos de lenguas diversas. Quizá esta atracción por el multilingüismo y la diversidad, por lo foráneo incluso, se deba, por un lado, a la coexistencia de cuatro lenguas oficiales dentro del territorio español, y, por el otro, a la cooficialidad de lenguas en el seno de la Comunidad Europea. En cualquier caso, es innegable que los estudios de fraseología comparada y contrastiva constituyen uno de los motores principales para el avance constante de la disciplina en estos momentos.

40

Luis Martín Martínez (2002): Phraseologie im zweisprachigen Wörterbuch DeutschSpanisch. Francfort, Munich: Peter Lang. 41 Consúltese, a este respecto, la página web de la European Society of Phraseology (EUROPHRAS) en la siguiente dirección URL: , donde se puede encontrar una relación actualizada de últimas publicaciones y jornadas organizadas sobre el tema.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 33

Introducción

33

Apéndice Relación de trabajos incluidos, por orden cronológico 1992

“Las colocaciones como problema en la traducción actual (inglés/español)”. Revista del Departamento de Filología Moderna. Universidad de Castilla-La Mancha. 2/3. 179-186.

1992

“Tratamiento de las colocaciones del tipo A+S/S+A en diccionarios bilingües y monolingües (español-inglés)”, en Euralex’90 Proceedings. Fourth International Congress. Barcelona: Vox-Biblograf. 331-340.

1995

“Diseño de una base de datos fraseológica para la traducción asistida por ordenador (TAO)”, en C. Martín Vide (Ed.), Actas del XI Congreso de Lenguajes Naturales y Lenguajes Formales. Barcelona: PPU. 389-396. (Coautor: Antonio J. Moreno Ortiz)

1996

“La fraseología en los diccionarios bilingües”, en M. Alvar Ezquerra (coord.), Estudios de Historia de la Lexicografía del español. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad. 167-182.

1997

“Grados de equivalencia translémica de las locuciones en inglés y en español”, en R. J. Sola, L. A. Lázaro, J.A. Gurpegui (eds.), XVIII Congreso de AEDEAN (Alcalá de Henares, 15-17 diciembre 1994). Alcalá de Henares: Servicio de Publicaciones de la Universidad. 335-341.

1998

“Criterios generales de clasificación del universo fraseológico de las lenguas, con ejemplos tomados del español y del inglés”, en M. Alvar Ezquerra y G. Corpas Pastor (eds.), Diccionarios, frases, palabras. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad de Málaga. 157-187.

1998

“El uso de paremias en un corpus del español peninsular actual”, en G. Wotjak (Ed.), Estudios de fraseología y fraseografía del español actual. (Lingüística Iberoamericana). Frankfurt am Main: Vervuert; Madrid: Iberoamericana 365-390.

1999

“Consideraciones en torno al procesamiento y traducción al español de la fórmula Hear, hear!”, en M. Alvar Ezquerra y G. Corpas Pastor (eds.), Léxico y Voces del Español. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad. 91-111.

2000

“Acerca de la (in)traducibilidad de la fraseología”, en G. Corpas Pastor (Ed.), Las lenguas de Europa: Estudios de fraseología, fraseografía y traducción. Granada: Comares. 483-522.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 34

34

Introducción

Apéndice (Cont.) 2000

“Fraseología y traducción”, en V. Salvador y A. Piquer (eds.), El discurs prefabricat. Estudis de fraseología teórica i aplicada. Castellón: Publicacions de la Universitat Jaume I. 107-138.

2001

“Apuntes para el estudio de la colocación”. Lingüística Española Actual. XXIII (1). 41-56.

2001

“Corrientes actuales de la investigación fraseológica en Europa”. Euskera. 98-108.

2001

“La creatividad fraseológica: efectos semántico-pragmáticos y estrategias de traducción”. Paremia. 10. 67-78.

2001

“La traducción de la fraseología: técnicas y estrategias”, en I. de la Cruz, C. Santamaría, C. Tejedor y C. Valero (eds.), La lingüística aplicada a finales del siglo XX. Ensayos y propuestas. 2 tomos. Alcalá de Henares: Servicio de Publicaciones de la Universidad. 779-787.

2001

“Usos y valores de para nada en un corpus de español peninsular actual”, en J. De Kock (Ed.), Gramática española. Enseñanza e investigación, I, Apuntes metodológicos, 7. Lingüística con corpus. Catorce aplicaciones sobre el español. Salamanca: Ediciones Universidad de Salamanca. 229-243. (Coautor: M. Alvar Ezquerra).

Los animales en los dichos, refranes y otras expresiones en francés y en español La imagen de la mujer a través de la tradición paremiológica española (lengua y cultura) Las locuciones francesas en el campo semántico de la comida y su traducción al español Procesos psicolingüísticos en la comprensión del refranero español Las solidaridades léxicas del español Modismos, locuciones y expresiones idiomáticas: estudio contrastivo italiano-castellano Las colocaciones léxicas de nombre y adjetivo. Un paso hacia la teoría semántica de la traducción Las funciones léxicas en el modelo lexicográfico de I. Mel’cËuk Teoria i història dels proverbis catalans. Aplicació a l’estudi d’un corpus paremiològic del segle XVI Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español

Julia Sevilla Muñoz M.ª Ángeles Calero Fernández Violeta Mitja Nelson Guillermo Torres Jiménez Paloma Penas Izquierdo Adriana Pintori Olivoto Ana de Aguilar-Amat Castillo Margarita Alonso Ramos Maria Conca Gloria Corpas Pastor

1987-1988

1989-1990

1989-1990

1989-1990

1990-1991

1990-1991

1993-1994

1993-1994

1993-1994

1993-1994

Tabla I Tesis doctorales defendidas en España (1987/88-1995/96)

Madrid (Complutense)

Valencia

UNED

Barcelona

Barcelona

Madrid (Complutense)

UNED

Madrid (Complutense)

Lleida

Madrid (Complutense)

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 35

Introducción

35

Estudio dialectológico y lexicológico del refranero hispanoárabe de Abu Yahya Azzajjali Un refranero popular egipcio: “Al-amtal alammiyya” de Ahmad Taymur Basa (1871-1930) El español coloquial y su fraseología: los sintagmas prepositivos fraseológicos y su incidencia funcional Las estructuras conceptuales y las funciones léxicas en el ámbito de la traducción automática: elementos relacionables del lexicón La fraseología del español. Acercamiento morfosintáctico, semántico y pragmático

Ahmed Salem Ould Mohamed Baba Rosa M.ª Ruiz Moreno Leonor Ruiz Gurillo M.ª Ángeles Zarco Tejada

Juan Antonio Martínez López

1993-1994

1993-1994

1994-1995

1994-1995

1995-1996

Tabla I (Cont.) 36

Granada

Cádiz

Valencia

Granada

Madrid (Complutense)

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 36

Introducción

M.ª Auxiliadora Castillo Carballo Carmen Mellado Blanco Germán Conde Tarrío M.ª Isabel González Rey Eva M.ª Iñesta Mena Juan Paglo Larreta Zulategui Shih Hu Sun Ping M.ª Isabel Tercedor Sánchez Xus Ugarte Ballester

1996-1997

1996-1997

1997-1998

1997-1998

1998-1999

1998-1999

1998-1999

1998-1999

1998-1999

Zaragoza Granada Sevilla Madrid (Complutense) Granada

Étude systématique des expressions figées en français pour une théorie de la phraséologie Las unidades fraseológicas: aspectos léxicos, tipológicos y cognitivos Fraseología contrastiva del alemán y el español. Un estudio sistemático Comparación sobre expresiones proverbiales de chino y español La fraseología en el lenguaje biomédico: análisis desde las necesidades del traductor

Barcelona (Autónoma)

Santiago de Compostela

Estudio comparativo de las paremias en francés, castellano y gallego

La traducció de paremies. Anàlisi retòrica de proverbis en context i en compilacions plurilingües sense context, i reflexions sobre els fenòmens de caire traductològic que plantegen

Salamanca

Alicante

Los somatismos del alemán: semántica y estructura

Unidades pluriverbales en un corpus del español contemporáneo

Tabla II Tesis doctorales defendidas en España (1995/96-2001/02)

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 37

Introducción

37

Juan José Asensio González Esther Blasco Mateo M.ª del Mar Forment Fernández Ana Belén García Benito Kazumi Koike Cecilia López Roig M.ª Isabel Santamaría Pérez

María Álvarez de la Granja

Florentina Micaela Mena Martínez

Beatriz Méndez Cendón

Pilar Río Corbacho

1999-2000

1999-2000

1999-2000

1999-2000

2000-2001

2000-2001

2000-2001

2001-2002

2001-2002

2001-2002

2001-2002

La paremia hagiográfica en francés, castellano y gallego: estudio contrastivo

Estrategias fraseológicas en el género discursivo de los artículos científicos médicos en lengua inglesa

La desautomatización de las paremias inglesas por sustitución: un estudio cognitivo

Introducción ó estudio das unidades fraseolóxicas en galego: as locucións verbais

Tratamiento de las unidades fraseológicas en la lexicografía bilingüe español-catalán

Santiago de Compostela

Valladolid

Murcia

Vigo

Alicante

Valencia

UNED

Salamanca

Barcelona

Barcelona

UNED

38

Aspectos de fraseología contrastiva (alemán-español) en el sistema y en el texto

Colocaciones léxicas en el español actual: análisis formal y léxico-semántico

Expresiones idiomáticas verbales del español y sus equivalentes semánticos en portugués

Fijación y uso de algunas expresiones fraseológicas del español

Los límites entre perífrasis verbales y unidades fraseológicas verbales

Comportamiento de la negación en la fraseología del español coloquial

Tabla II (Cont.)

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 38

Introducción

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 39

CAPÍTULO I CORRIENTES ACTUALES DE LA INVESTIGACIÓN FRASEOLÓGICA EN EUROPA

1. Introducción El despegue de la fraseología como disciplina lingüística data de finales de los setenta1. Ahora bien, el desarrollo de la disciplina ha sido muy desigual en los distintos países y según las distintas escuelas. No hay que olvidar que la lingüística generativa transformacional sumió los estudios léxico-semánticos en un profundo letargo del cual fue difícil despertar2. Tanto es así, que, tras la “revolución” ocasionada en lingüística por el estudio del uso real de las lenguas en el discurso, empezó a florecer un tímido interés por la fraseología, en tanto “discurso repetido”, “fragmentos congelados” o “secuencias prefabricadas” (cf. Corpas Pastor, 2000c). Con posterioridad, y gracias sobre todo, a la proliferación de congresos y seminarios internacionales sobre el tema, estos primeros escarceos han conducido a profundas reflexiones y, en consecuencia, a replanteamientos cíclicos que han hecho de la fraseología lo que es hoy: una disciplina independiente... a punto de alcanzar su mayoría de edad. En las páginas que siguen a continuación nos vamos a ocupar de las principales tendencias de la investigación fraseológica en la actualidad y de sus posibilidades futuras, no sin antes ofrecer un breve panorama de la actividad nacional e internacional, con especial referencia a la constitución de asociaciones y la celebración de diversos congresos y reuniones científicas. 2. La consolidación de la disciplina Durante las dos últimas décadas, hemos asistido a una incesante actividad científica en el campo de la fraseología. En 1981 tuvo lugar en Mannheim (Alemania)

1

No obstante, sus orígenes hay que situarlos a finales de los cuarenta con los trabajos de Casares y de Vinogradov. No debemos olvidar tampoco a dos grandes precursores de la fraseología del siglo XIX y comienzos del XX: Hermann Paul y Charles Bally. Sobre éstos y otros aspectos históricos remitimos al capítulo II (“Informe sobre la historia de la investigación fraseológica”) de la monografía de Zuluaga (1980). 2 A este respecto véase el análisis de corte transformacional de Weinreich (1969).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 40

40

Capítulo I

el primer encuentro internacional de fraseología, impulsado, mayoritariamente, por la escuela eslava y alemana3. Tres años más tarde (uno después de la publicación de las actas del primero), se celebró un segundo congreso en Zurich (Suiza), cuyas actas se publicaron en 1987, coincidiendo con la publicación de las actas del tercero, que se celebró en Oulu (Finlandia) en 1986. Siguieron cinco congresos más –Estrasburgo (1988), Aske (1990), Saarbrücken (1992)4, Graz (1995) y Liptovsky Ján (1997)–, con una periodicidad casi bianual, que impulsaron la investigación fraseológica en Europa al favorecer el intercambio de resultados y dar a conocer la investigación más relevante al grueso de la comunidad científica a través de la publicación de las correspondientes actas. Desde 1988, dichos congresos incluían la palabra Europhras en su denominación. Se les puede considerar, pues, como precursores de la recientemente creada European Society of Phraseology, cuyo acrónimo es, precisamente, EUROPHRAS. Dicha asociación, constituida en Bielefeld (Alemania) en 1999, con sede en Zurich5, persigue como objetivo básico la promoción del intercambio científico y la cooperación internacional en el campo de la fraseología. Esta iniciativa europea ha empezado a dar ya sus frutos. En junio de 2000 celebró su primer congreso en Uppsala (Suecia) y está previsto que se celebre otro en Loccum (Alemania) en el año 2002. EUROPHRAS aglutina a los investigadores que ya se reunían periódicamente desde principios de los ochenta, al tiempo que da cabida a nuevas incorporaciones, entre las cuales figuran nutridas delegaciones española, británica, francesa e italiana. Hoy por hoy, los fraseólogos alemanes y eslavos constituyen el centro neurálgico de la disciplina (cf. CË ermák, 2001). Merece la pena destacar los trabajos eslavos y polacos6, cristalizados en los seis volúmenes del Z problemów frazeo-

3

Véase el Apéndice I: Eventos internacionales. En realidad se trata, más bien, del comienzo de la consolidación de la disciplina en los países de Europa occidental, pues en la Europa del Este se habían tratado para entonces cuestiones básicas de la teoría fraseológica. Por ejemplo, en la segunda mitad de la década de los setenta, Lewicki (1976) publicó en Polonia un trabajo de combinatoria sintáctica y, algunos años más tarde, otro sobre la estabilidad y la variabilidad de las unidades fraseológicas (Lewicki, 1982). 4 Este congreso coincidió en el tiempo con otro de carácter internacional, aunque de ámbito más restringido, el International Conference on Idioms, que tuvo lugar en Tilburg (Holanda), y cuyas actas se publicaron ese mismo año (Everaert et al., 1992). 5 Se puede visitar su página web en la siguiente dirección URL: . 6 Sobre la fraseología rusa y eslava, véanse las dos monografías de Mokienko (2000a y b), que han sido traducidas al gallego y editadas recientemente por el Centro Ramón Piñeiro (Xunta de Galicia). Kótova (1998) ofrece una panorámica breve pero completa de las principales aportaciones de la escuela rusa al campo de la fraseología. La escuela rusa se mostró especialmente prolífica entre los años 1975 y 1985, como atestiguan los trabajos de Arutiuno-

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 41

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

41

logii polskiej i slowian´skiej (Basaj-Rytel, 1994); así como el Grupo de Westfalia7, que lleva organizando encuentros sobre fraseología y paremiología desde 1991. Muchos de sus integrantes forman parte también de la asociación arriba mencionada: por ejemplo, Harald Burger, presidente de EUROPHRAS, organiza el congreso titulado “Phraseologie und Parömiologie - neue Perspektiven der Forschung”, que tendrá lugar del 17 al 22 de junio de 2001 en Ascona (Suiza). Tampoco debemos olvidar las aportaciones de la escuela francesa, cuyos autores más relevantes han participado activamente en los distintos seminarios celebrados en Saint-Cloud, auspiciados por el Institut National de la Langue Française. Destacaremos el coloquio internacional “La locution: entre lexique, syntaxe et pragmatique. Identification en corpus, traitement, apprentissage”, celebrado en 1994, y organizado, en colaboración, por tres departamentos de l’École Normale Supérieure de Fontenay/Saint Cloud: el CRÉDIF (Centre de recherche et d’étude pour la difusión du français), el ÉLI (Équipe d’accueil linguistique et informatique) y el UMR Lexicométrie et textes politiques (InaLFCNRS). Dicho evento reunió a fraseólogos nacionales y extranjeros, cuyas contribuciones dieron lugar a la aparición de tres volúmenes sobre distintas vertientes de la investigación fraseológica, que van desde los aspectos semánticos hasta las cuestiones morfosintácticas y funcionales, pasando por estudios de corte pragmático-discursivo, aplicaciones de la lingüística del corpus, procesamiento del lenguaje natural, etc. (cf. Martins-Baltar, 1995, 1997; Fiala et al., 1997). Por su parte, la mayoría de los estudiosos de la fraseología en lengua inglesa han publicado sus trabajos en los congresos organizados por EURALEX (European Association for Lexicography), creada en 1983. Conviene recordar que desde 1994 dichos congresos han contado con una sección de fraseología. Incluso, la página web8 de la asociación acoge una extensa bibliografía de fraseología, ordenada alfabéticamente por autores. Coincidiendo en la fecha, desde 1994 se vienen celebrando también Simposios Internacionales de Fraseología orientados hacia el estudio de la lengua inglesa. El primero de ellos tuvo lugar en Leeds (Gran Bretaña). Le siguieron dos más, celebrados, respectivamente, en Moscú (1996) y en Stuttgart (1998) –coincidiendo con la publicación de las actas del primer congreso (Cowie, 1998)–, y acaba de tener lugar un cuarto simposio en Roma en abril del presente año. La idea básica era la de acercar las teorías rusas

va (1976), CË erdántseva (1977), CË erernisËeva (1977) y Kurtchatkina y Suprun (1981), entre otros (apud Blasco Mateo, 2000: 1). 7 Véase la siguiente dirección URL: . 8 Se puede consultar en la dirección URL: .

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 42

42

Capítulo I

a los fraseológos anglófonos, así como dar a conocer los desarrollos alemanes al respecto. No obstante, y salvo excepciones como Gläser (1986), estamos ante una “escuela” tradicionalmente aislada, centrada en la idiomaticidad, y desconocedora de gran parte de la investigación que se realiza en el resto de Europa9. En palabras de CË ermák (2001: 2): [...] it is astonishing, for example, to see how little scholars oriented towards English know about other schools of research, in particular about early Russian phraseological research, followed up by Polish or Czech studies, about German and Swiss activities in the field, etc., let alone about individual scholars.

En lo que a España se refiere, hay que decir que el interés por la fraseología ha surgido algo más tarde, concretamente a mediados de los noventa. Desde la primera contribución, muy completa en su día, de Zuluaga (1980) –a excepción de los trabajos exclusivamente paremiológicos de Conca (1987) y Calero (1991)–, hubo que esperar quince años a que otros autores retomaran la investigación en este campo. Surge así la obra pionera de dos autoras sobre la enseñanza de la fraseología gallega, con un intento de sistematización onomasiológica (López Taboada y Soto Arias, 1995); y aparece al mismo tiempo un número especial de la revista Caplletra (1995), donde V. Salvador y otros autores reflexionan sobre esta nueva disciplina, sus relaciones con la lingüística aplicada, y las particularidades fraseológicas del catalán. En ese mismo año se publica la tesis doctoral de Corpas Pastor (defendida en 1994), que servirá de base para el Manual de fraseología (Corpas Pastor, 1996). Este trabajo, junto con el de Martínez Marín (1996), sirve de pistoletazo de salida para los estudios sobre fraseología en España. En 1996 tiene lugar en Madrid el I Congreso Internacional de Paremiología (Sevilla Muñoz, 1997), que, a pesar de su denominación restrictiva, no sólo se ocupó de las paremias. Lo mismo se aplica a las Jornadas de literatura popular, organizadas por las Academia Vasca en Durango, cuyas contribuciones se hallan recogidas en el nº 3 de la revista Euskera (1996). Siguieron otras reuniones científicas sobre el mismo tema10: el I Coloquio Galego de Fraseoloxía, celebrado en 1997 en Santiago de Compostela, bajo los auspicios del Centro Ramón Piñeiro y la Xunta de Galicia (Ferro Ruibal, 1998); el II Congreso Internacional de Paremiología, celebrado en Córdoba ese mismo año (Sevilla Muñoz, 1999); las I Jornadas de Fraseología Comparada (Salvador y Piquer, 2000); las Jornadas de

9

A este respecto, véase la reseña de Corpas Pastor (2001) al libro de Peter Howarth (1996), especialmente en lo referente a los dos primeros capítulos. 10 Véase el Apéndice II: Jornadas en España.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 43

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

43

Literatura Popular/Fraseología, organizadas por la Academia Vasca en Bilbao en diciembre de 2000; y el XXIV Curso de Lingüística Textual de la Universidad de Murcia, organizado por Ramón Almela en marzo del presente año, y que en esta ocasión ha tratado exclusivamente de las relaciones entre la fraseología y el texto, desde una perspectiva monolingüe, plurilingüe y traductológica. El año 1996 parece haber levantado la veda también para la publicación en España de monografías sobre el tema11. Castillo Carballo (1997) publica su tesis doctoral sobre colocaciones y locuciones en el corpus Vox-Biblograf, completándolo con diversos CD-ROM de textos periodísticos. En ese mismo año sale publicada la primera parte de la tesis doctoral de Ruiz Gurillo (1997) donde se reflexiona acerca del estatus teórico de la disciplina, teniendo como telón de fondo las distintas corrientes y concepciones que imperaban en la investigación realizada hasta la fecha en Europa. Al año siguiente esta misma autora publica la segunda parte de su tesis (Ruiz Gurillo, 1998) sobre los aspectos sintácticos y pragmáticos de las locuciones adverbiales en un corpus de citas de español oral. En ese mismo año aparece el volumen colectivo sobre fraseología y fraseografía del español, editada por Gerd Wotjak (1998). Un año después aparecen cuatro monografías: un volumen conjunto sobre cuestiones generales, perspectivas aplicadas y tratamiento lexicográfico de la fraseología, editado por Juan de Dios Luque Durán y A. P. Bertrán (1998); un trabajo sobre aspectos didácticos (Penadés, 1999); y otros dos sobre la fraseología del catalán y del valenciano (Guia, 1998; Sancho Cremades, 1999). En este sentido, el centro Ramón Piñeiro (Xunta de Galicia) está realizando una importante labor en pro de la fraseología gallega. Una de sus últimas contribuciones es precisamente la publicación del estudio de Rivas (2000) sobre la fraseología de la marina luguesa. El año 2000 también ha sido testigo de la aparición de otros tres trabajos: la tesis doctoral de Blasco Mateo (2000) sobre las relaciones entre la sintaxis y la fraseología; el trabajo de Penadés (2000) acerca de las relaciones paradigmáticas que contraen las unidades fraseológicas, con especial referencia a la constitución de campos semánticos, la sinonimia y la hiponimia; así como el volumen colectivo editado por Corpas Pastor (2000) sobre aspectos de fraseología, fraseografía y traducción de unidades fraseológicas en español y en otras lenguas europeas. Los congresos y monografías que hemos mencionado, sin pretender constituir un listado exhaustivo, sí pueden servir para ilustrar fehacientemente el desarrollo y la consolidación de una disciplina que despierta un interés in crescendo. No es casualidad, pues, que en los últimos años se estén celebrando un sinfín de eventos científicos sobre fraseología ni que el número de trabajos publicados sobre este tema aumente en progresión geométrica. 11

Véase el Apéndice III: Monografías.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 44

44

Capítulo I

3. Principales temas de investigación En apenas dos décadas la fraseología ha dejado de ser una subdisciplina subdesarrollada de la lexicología para convertirse en una disciplina en toda regla, consolidada, en busca de su madurez definitiva. En la última década hemos asistido a una reflexión profunda en torno a la propia naturaleza de la disciplina. El advenimiento de un nuevo orden se podía vislumbrar también desde esta toma de conciencia generalizada. Si bien los primeros estudios sobre el tema habían sido eminentemente parciales, centrados en determinados tipos de unidades fraseológicas (UFS), y, frecuentemente, de carácter diacrónico, a partir de la década de los noventa comienza a imponerse una perspectiva sincrónica e integradora. Las investigaciones que se sucedieron a partir de entonces han tratado de definir esta nueva disciplina, establecer sus límites, y, a partir de ahí, determinar los criterios de inclusión y clasificación de las UFS12. A continuación se ha pasado a un segundo nivel de análisis en el cual se han contemplado los aspectos funcionales de las UFS en el sistema de la lengua y en el texto. Así, se han estudiado las características morfosintácticas de las UFS, su variabilidad, sus funciones discursivas y textuales, así como su relación con los lenguajes de especialidad en general, y con la terminología en particular. En este sentido, los últimos años de la década de los noventa han sido testigos de la aparición de nuevas corrientes de investigación, debido a la influencia que han ejercido dos nuevos paradigmas de investigación: la lingüística del corpus y la semántica cognitiva. Paralelamente se han venido realizando estudios de carácter psicolingüístico, centrados fundamentalmente en la ubicación y el procesamiento de las UFS en el lexicón mental de los hablantes. Y, finalmente, la fraseología comparada ha arrojado luz sobre las similitudes y diferencias que se observan al analizar en profundidad los universos fraseológicos de dos o más lenguas. 3.1. DELIMITACIONES, TIPOLOGÍAS Y OTRAS DISTINCIONES Un tema tradicional de investigación, o más bien de discusión, ha sido el establecimiento de los límites de la disciplina. Este primer estadio dio lugar a dos posturas encontradas, que se reflejaron en una concepción amplia y una concepción restringida de la fraseología (cf. Hundt, 1994: 37-43; Corpas Pastor, 1995; Ruiz Gurillo, 1997). El modelo de centro y periferia de la Escuela de Praga ha sido

12

Por razones de espacio nos vemos obligados a reducir al mínimo las referencias bibliográficas. En cualquier caso, la bibliografía proporcionada en el apartado anterior incluye numerosos trabajos sobre los distintos temas que vamos a tratar.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 45

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

45

determinante a la hora de establecer los criterios de inclusión de UFS. Desde la primera edición de la monografía de Fleischer (1997 [1982]), este concepto ha sido utilizado para separar los fraseologismos fijos e idiomáticos (el centro), de aquellos que sólo presentan fijación (la periferia). La inclusión de sólo el centro o del centro y la periferia no ha estado exenta de polémica13. La concepción estrecha o restringida de la fraseología considera al fraseologismo como una combinación fija de al menos dos palabras, que funciona como parte integrante de una oración, dentro de la cual cumple las mismas funciones que un sustantivo, un verbo, un adverbio, una preposición, etc. Dicha postura, llevada a sus últimas consecuencias, supone que solamente es lícito hablar de fraseologismos en sentido estricto para referirse a las unidades idiomáticas, distinguiéndolas de otros tipos. Desde esta visión restringida, fenómenos léxicos en el nivel oracional quedan fuera del concepto de fraseologismo, aunque compartan otras muchas características de las combinaciones de palabras. Por el contrario, la concepción amplia de la fraseología considera UFS todas aquellas combinaciones de palabras que presenten cierta estabilidad. Esto es, aquellas combinaciones compactas, que se usan generalmente como parte de oraciones, pero que no se pueden suscribir convencionalmente a una situación determinada, constituyen tan sólo un subgrupo dentro del total de UFS de una lengua dada. Si tomamos el modelo de centro y periferia de la Escuela de Praga, podríamos decir que la fraseología en sentido estricto sólo incluiría el centro, esto es, el prototipo de unidad fraseológica (idiomática y fija, o solamente idiomática, con función oracional); mientras que la fraseología en sentido amplio incluye tanto el centro como la periferia, basándose en los criterios de estabilidad e institucionalización de las combinaciones de palabras. Es decir, sólo desde una perspectiva amplia se considerarían las paremias y fórmulas como pertenecientes a la fraseología (la periferia); y en menor medida aún las colocaciones (que constituirían, por así decirlo, el ‘extrarradio’). De la delimitación de las unidades que forman parte del universo fraseológico de las lenguas, se pasa a la sistematización y clasificación de los distintos tipos y subtipos de unidades. Surgen, así, distintas tipologías en las que se mezclan criterios de tipo semántico, sintáctico, pragmático y denominativo. Citemos, a modo de ilustración, la taxonomía propuesta por Corpas Pastor (1996) para el español; la de Hundt (1994) para el portugués; las aportaciones de Fleischer (1997 [1982]), Burger (1998) y Korhonen (1998) para el alemán; y las de Gläser (1996) y Howarth (1996) para el inglés14. 13 Sobre este aspecto, véase, además de los autores citados, dos trabajos de Corpas Pastor (1998a y b). 14 Melanie Higi-Wydler (1989: 3-50) ofrece una visión clara y sucinta de las distintas clasificaciones de UFS propuestas para el ruso, el inglés, el alemán y el francés.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 46

46

Capítulo I

Una vez delimitado el objeto de estudio, clasificado el universo fraseológico, y aprehendidos los aspectos básicos de la investigación fraseológica, se abren paso los estudios puntuales sobre tipos de unidades concretos o bien acerca de las relaciones que establecen las UFS entre sí y con respecto al resto de unidades del sistema de la lengua. Tradicionalmente se vienen investigando las restricciones sintácticas y gramaticales de las UFS con respecto a otras unidades del sistema de la lengua, al tiempo que se las compara con otros fenómenos colindantes, como son los compuestos y las combinaciones libres de palabras. Todavía hoy día se dan posturas encontradas en lo referente a la separación entre fenómenos gramaticales y fraseológicos. Por ejemplo, existe bastante desacuerdo con respecto a la distinción entre restricciones léxicas y restricciones colocacionales. Lo mismo que ocurre cuando se trata de establecer una distinción clara entre unidades complejas como las perífrasis verbales y UFS como las colocaciones formadas por verbo más sustantivo o las propias locuciones verbales (cf. Blasco Mateo, 2000). Otros puntos conflictivos son las estrechas relaciones que se establecen entre determinados patrones sintácticos y ciertas fórmulas rutinarias discursivas; así como las discontinuidades y las soluciones de continuidad que muestran los mecanismos de formación de palabras y las UFS de carácter terminológico y designativo (cf. Thomas, 1992; Corpas Pastor, 1996; Fleischer, 1997 [1982]: 250-523; Díaz Hormigo, 2000). 3.2. ASPECTOS PRAGMÁTICO-TEXTUALES A medio camino entre los aspectos morfológicos y los pragmáticos se hallan los estudios acerca de la variación fraseológica en todas sus dimensiones (cf. Burger, 1999). El advenimiento de la lingüística del corpus ha proporcionado pruebas abundantes que contradicen la supuesta fijación de las UFS. Esta circunstancia ya había sido advertida por los fraseólogos en el pasado, al comprobar cómo una determinada UF contaba con varias formas canónicas en el plano de la lengua (cf. buscarle tres/cuatro/cinco pies al gato). Otras formas de variación responden a las variedades cronológicas, diafásicas, diatópicas y diastráticas de una lengua dada15. Ilustraremos nuestra exposición con algunas variantes fraseológicas diatópicas, propias, por otro lado, de lenguas supranacionales como el español, el inglés, el portugués o el alemán. Así, se pueden establecer parejas como las siguientes: tomarla con alg. (Espa-

15

Últimamente se está prestando bastante atención a la fraseología dialectal, siguiendo las investigaciones polacas de la década de los setenta. Véase a este respecto la excelente monografía de Piirainen (2000).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 47

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

47

ña)/ traerla con alg. o traer a alg. de encargo (Méjico); pôr a(s) mão(s) no fogo por a./alg. (Portugal)/ botar a mão no fogo pelo a./alg (Brasil); play truant (Gran Bretaña)/ play hook(e)y (Estados Unidos); y jmdm. an der Leine haben (Alemania)/ jmdn. am Bändel haben (Austria/Suiza). La variación fraseológica se deja sentir con fuerza también en el plano del discurso. De nuevo, los estudios basados en corpus han demostrado que las manipulaciones, modificaciones y acortamientos que presentan las UFS con respecto a sus respectivas formas canónicas cuando se insertan en un texto, lejos de constituir usos excepcionales, representan la forma típica en la que dichas unidades se utilizan en el discurso (cf. Sabban, 1998; Moon, 1998). Un tema de investigación bastante popular en los últimos tiempos ha sido, pues, la determinación de los distintos tipos de modificaciones y manipulaciones fraseológicas que ocurren frecuentemente en el discurso. Tomemos la locución dar gato por liebre (“Engañar haciendo pasar una cosa por otra mejor”, DUE). Esta unidad aparece 7 veces en el corpus Vox-Biblograf (CVB), que consta aproximadamente de unos 10 millones de palabras. De esas siete ocurrencias, cuatro de ellas presentan algún tipo de modificación, conservando como elementos clave gato y liebre: A Spieler le ocurre algo que –como siempre– conviene recordar de vez en cuando: el crítico es una especie de cojo que enseña a correr, no es un frustrado cineasta ni tiene por qué querer hacer cine para saber separar para el gran público –si es que a éste le interesa que lo hagan por él– lo que es gato de lo que es liebre. Ya se sabe que es mucho más fácil decir que algo no vale que hacerlo (CVB).

Éste parece ser el uso más corriente de la unidad al ser insertada en el discurso, a juzgar por el siguiente fragmento extraído de una columna periodística que firma nuestro último premio Cervantes, Francisco Umbral, con referencia a los “goyas” falsos del Museo del Prado: Pero ocurre que el Prado, aunque se conforme con los cuernos/plagio que le han puesto, no tiene derecho a engañar a miles, millones de españoles y extranjeros, que vienen todos los años al Prado, y especialmente a ver a Goya. Una institución oficial, como el Museo, no puede ni debe estar dando gato plagiado por liebre goyesca, aunque don Francisco era más gatuno que lebrero (El Mundo, 6/4/2001: 68)

Los estudios sobre el uso real de las UFS han prestado también bastante atención a las funciones discursivas y textuales que éstas desempeñan. Por un lado, se está investigando acerca de las valoraciones, generalmente negativas, que expresan las UFS a través de sus implicaturas convencionales fundamentalmente. Citaremos, por ejemplo, los trabajos de corte feminista de Calero (1991, 1998) y Fernández de la Torre Madueño (1988a y 1998b); o el reciente estudio sobre cuestiones de ideología y discriminación social de Zuluaga (2000).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 48

48

Capítulo I

Pero, además de la valoración implícita que supone el uso de una determinada unidad fraseológica, su empleo está sujeto a determinadas funciones textuales (cf. Zuluaga, 1997). Por ejemplo, en el primer fragmento se utiliza de forma catafórica la paremia España es diferente para introducir una opinión referente a la supuesta política intervencionista del gobierno español para atajar la inflacción de la economía. En el segundo ejemplo asistimos al uso catafórico de otra paremia inglesa: Ignorance is bliss. Dicha unidad va precedida de un presentador discursivo (“In England we have a saying”), que reduce en parte la responsabilidad del emisor, pues éste se escuda en la autoridad social y cultural que emana del uso de dicha unidad, cerrando la línea argumental y reforzando de esta manera la opinión vertida: España es diferente para muchas cosas, y en lo que a fijar precios se refiere, también. El Gobierno establece un techo que los distribuidores no pueden superar (CVB). Tell them there was an accident [...] Bring the little fella up to the quiet life. If he never knows what he is, he’ll never know what he’s missed. Is that all right? Haw Haw. In England we have a saying: ignorance is bliss (Bond, 1991: 34).

Un tercer bloque temático lo constituyen los estudios sobre la fraseología de los lenguajes de especialidad (Burger, 1999). Las locuciones terminológicas y las colocaciones especializadas constituyen, junto con los términos propiamente dichos, los rasgos identificativos más característicos del discurso especializado en sus distintos niveles. Como se ha dicho más arriba, constituyen elementos estratégicos para la construcción de un determinado discurso restringido, articulando la argumentación y señalando los puntos clave (cf. Gréciano, 1983, 1987). De ahí la estrecha relación que existe entre este tipo de estudios y los de corte discursivo-textual-funcional. La presencia de UFS como las siguientes nos hacen reconocer sin vacilaciones los textos de automoción destinados a la comunicación de especialistas a (semi-)especialistas: punto muerto, a ralentí, obstruir el convertidor catalítico, activar un relé (español); poison the catalyst, deactivate catalysts, cross the stoichiometric point, antilock brake system (inglés); y der Sonde ein (Kraftstoff-Luft)Gemisch anbieten, einen Temperaturbereich durchfahren; eine Sauerstoff-vergiftung abbauen (alemán). 3.3. ASPECTOS SEMÁNTICO-SEMIÓTICOS La vertiente semántico-semiótica, junto con la fraseología terminológica o especializada, viene acaparando una buena parte de la investigación que se realiza actualmente. En este aspecto destaca, sin duda alguna, la escuela alemana. La

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 49

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

49

década de los noventa ha supuesto el despegue definitivo del enfoque onomasiológico16. Ésta es una antigua reivindicación de la fraseología, que data al menos de medidados de los cincuenta, y que tiene en la escuela rusa su mayor y más ferviente defensora (cf. Corpas Pastor, 1998a). Se han estudiado, fundamentalmente, las relaciones paradigmáticas que establecen las UFS entre si y, en menor medida, con respecto a otras unidades léxicas del sistema de la lengua17. Aspectos como la polisemia, la antonimia, la sinonimia y la hiponimia, así como la constitución de campos léxico-fraseológicos y el análisis y descripción de grupos temáticos han ocupado un lugar privilegiado. Veamos algunos ejemplos. Así, tanto el español como el alemán y el inglés disponen de locuciones pertenecientes al campo criticar/reprender (ing. criticise, al. tadeln): – apretar las clavijas (a alg.), calentar (a alg.) las orejas, cantar (a alg.) las cuarenta, decir cuántas son cinco (a alg.), leer (a alg.) la cartilla, etc. – jmdn. in die Mangel nehmen, jmdm. den Marsch blasen, jmdm. die Leviten lessen, jmdm. den Kopf waschen, jmdm. die Ohren lang ziehen, etc. – read sb. the riot act, find fault with sb., tell sb. off, call sb. all the names under the sun, have a go at sb., get it hot and strong, etc.

Los estudios integrales de campos léxico-fraseológicos completos permiten establecer las condiciones de uso de cada UF, así como los aspectos pragmáticosemánticos de cada UF individualmente y con respecto al conjunto. La composición léxica de las unidades que entran a formar parte de tales campos también puede ser significativa. Así, resulta curioso que el alemán incluya preferentemente locuciones somáticas en el campo léxico-fraseológico tadeln (más que en español), mientras que el inglés no incluye ningún somatismo en el inventario de UFS incluidas en el campo criticise. Ello nos conduce directamente al siguiente aspecto que queríamos abordar, y que tiene que ver con los enfoques semióticoculturales.

16

En España se ha trabajado también en esta línea. Baste recordar los trabajos pioneros de Conca (1996 [1988]) y Rodríguez-Vida (1997) para el catalán; y, para el gallego, el manual de López Taboada y Soto Arias (1995) o el Refraneiro galego da Vaca, de Benavente Jarreño y Ferro Ruibal (1995). 17 Los estudios de UFS agrupadas por campos léxico-fraseológicos resultan especialmente útiles en fraseología general y fraseología comparada. Las comparaciones interlingüísticas ponen de relieve los matices más sutiles, al tomar el campo entero como punto de referencia, teniendo en cuenta los rasgos relevantes y los periféricos. Las similitudes y diferencias permiten establecer correspondencias de traducción adecuadas, ya que se parte del funcionamiento de todo un entramado conceptual.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 50

50

Capítulo I

Dentro de la descripción y comparación de grupos temáticos de UFS, siguen vigentes los estudios sobre unidades que contienen entre sus componentes denominaciones para el cuerpo humano o animal18 (somatismos), colores, denominaciones de animales19 y numerales. Frente a estudios anteriores, que se han ocupado de esos temas de forma casi anecdótica, la novedad reside en la búsqueda consciente de matices simbólicos, etnolingüísticos o culturales (cf. Dobrovol’skij y Piirainen, 1996). Al igual que en el caso anterior, esto resulta particularmente útil para la fraseología general y comparada. Por ejemplo, tanto en inglés como en español y alemán se dan UFS entre cuyos componentes figuran, respectivamente, las palabras eye, Auge y ojo. Si se tiene en cuenta la “contribución” de tales componentes al significado global de la unidad fraseológica, se observa que se pueden agrupar de acuerdo con los “valores” que adquieren: vigilancia y cautela (keep an eye on sb., andar con cien ojos, seine Augen überall/vorn und hinten haben); atención (catch so’s eye, no tener ojos más que para alguien/algo, Augen und Ohren aufhalten); rapidez (in the twinkling of an eye, en un abrir y cerrar de ojos, cf. im Augenblick) y muerte (die Auge auf Null stellen, cerrar los ojos), entre otros. Lo mismo se puede decir acerca de las UFS que contienen la denominación para lobo en las tres lenguas. Dicho animal se asocia, entre otras cosas, a la agresividad (One must haul with the wolves, Quien con lobos anda, a aullar se enseña, Mit den Wölfen huelen) y al peligro (cry wolf, ver las orejas al lobo, ein Wolf im Schafskleidung). Los valores semióticos y las asociaciones que desencadenan las denominaciones de color se conservan en las UFS de las cuales forman parte. Por ejemplo, las unidades fraseológicas que incluyen entre sus componentes black, negro y schwarz comparten en las tres lenguas una misma asociación de negatividad: paint a black picture of sth. (pesimismo), la oveja negra [de la familia] (contrario a la norma), eine schwarze Seele haben (mal carácter). Otro grupo temático que ha merecido bastante atención es el formado por UFS que contienen un numeral entre sus componentes (cf. Dobrovol’skij, 1997). Por ejemplo, las unidades con three, tres y drei suelen expresar intensidad (be three sheets in the wind, no ver tres en un burro, nicht bis drei zählen können) y perfección, en el sentido de algo completo o pleno: the three Rs, No hay dos sin tres, Aller guten Dinge sind drei.

18

Sobre este tema se puede consultar la tesis doctoral de Mellado (1999). Véase la reciente monografía de Chrissou (2000) sobre UFS que contienen denominaciones para animales o partes de éstos. Aunque el enfoque es contrastivo (alemán-griego), presenta un estado de la cuestión bastante completo. 19

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 51

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

51

3.4. ASPECTOS SEMÁNTICO-COGNITIVOS Los últimos desarrollos de la fraseología incorporan los principios de la semántica cognitiva en un intento de establecer las representaciones mentales subyacentes a las UFS. La metáfora como vía de expresión de las emociones se erige en modelo cognitivo de campos fraseológicos completos y de series fraseológicas. Quizá las aportaciones más importantes en este campo hayan sido los trabajos de Dobrovol’skij, ya sea en solitario (Dobrovols’kij, 1995 y 1997) o en colaboración con otros autores (Baranov y Dobrovols’kij, 1991; Dobrovols’kij y Piirainen, 1996). El enfoque semántico-cognitivo otorga una importancia crucial a la base metafórica en tanto modelo de representación conceptual y motivación de la idiomaticidad potencial de una determinada UF. Esto es, los significados literales e idiomáticos interactúan en el lexicón mental de los hablantes, de manera que se establece una estrecha relación entre la base de motivación metafórica y el significado unitario de la UF. Los dos tipos básicos de motivación –metafórica y simbólica– permiten agrupar las UFS pertenecientes a un campo (según el dominio meta) de acuerdo con sus esferas conceptuales figurativas (dominios fuente). A modo de ilustración vamos a considerar algunas UFS que expresan una emoción en grado intenso como es el miedo. Una primera aproximación a dichas unidades revela una fuerte base metonímica, al expresarse el efecto físico que produce la emoción en lugar de la emoción propiamente dicha (UFS cuya base es un síntoma del miedo); o bien una metáfora en tanto conceptualización imaginaria o representación mental del miedo, que es compartida por los hablantes, y, por tanto, está almacenada en su lexicón mental. El dominio fuente más común para las UFS que denotan miedo es una sensación de tipo físico. Así, un buen número de éstas se sustentan sobre la base de la debilidad física que experimentan los seres humanos al sentir miedo: esto es, debilitamiento o malfuncionamiento de los órganos vitales, hiperreacciones corporales como el exceso de transpiración, u otros síntomas de debilidad. Unidades como tragar saliva, temblarle a uno las piernas, en español; as pale as death, in a cold sweat, en inglés, y weiche Knie haben o jmdm. bleibt das Herz stehen, en alemán, comparten una misma base cognitiva: asustarse es experimentar debilidad física. En algunas UFS del tipo temblarle a alg. las carnes, give sb. the shivers y zittern vor Angst confluyen dos bases cognitivas diferentes, aunque relacionadas: por un lado, la debilidad antes mencionada, y, por el otro la sensación física de sentir frío, esto es, asustarse es sentir frío. A este dominio fuente pertenecen las siguientes unidades: ponérsele a alg. los pelos/cabellos de punta, dar diente con diente; send chills up so’s spine, go cold all over; jmdm. klappern die Zähne, kalte Füße kriegen.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 52

52

Capítulo I

Otro síntoma físico que suele acompañar a la emoción del miedo es la descomposición del vientre, de ahí que muchas UFS, especialmente numerosas en alemán, reflejen la metáfora asustarse es defecar: hacerse pipí, cagarse por las patas abajo; frighten the shit out of sb., wet oneself with fear; Aftersausen haben, sich in die Hosen machen. Otras conceptualizaciones de la emoción que nos ocupa incluyen como dominio fuente la hostilidad, concretada en la concepción del miedo como peligro y, más concretamente, como enemigo (se nombre o no como agente): herir de pie y de mano, be chocked by fear y jmdm. sitzt die Angst im Nacken. Aquí la metáfora subyacente se podría formular de la siguiente manera: asustarse es enfrentarse con un agente/una circunstancia hostil. 3.5. ESTUDIOS PSICOLINGÜÍSTICOS El interés por aprehender la realidad psicológica de las unidades fraseológicas ha estado presente desde los primeros estudios sobre el tema. Cómo almacenan los hablantes este tipo de unidades, cómo es su procesamiento, qué funciones desempeñan tales unidades en la interacción, etc., son sólo algunos de los temas más debatidos. La psicolingüística se ocupó muy pronto del tema, aunque desde una perspectiva eminentemente “idiomática”. En un primer momento se propusieron dos teorías competidoras para explicar el procesamiento de las UFS por parte de los hablantes. La primera hipótesis, denominada en inglés Idiom List Hypothesis, presupone la existencia de una lista separada de UFS idiomáticas (idioms) que los hablantes almacenan de forma independiente en su lexicón mental. Dado que tales unidades tienen un significado literal y otro compositivo e idiomático, son ambiguas y requieren, por tanto, dos modos distintos de procesamiento. Aquí se insertan los primeros estudios de Bobrow y Bell (1973) sobre reconocimiento de UFS fuera de contexto, los cuales fueron refutados posteriormente. La segunda hipótesis, la representación léxica (Lexical Representation Hypothesis, en inglés), fue defendida por Swinney y Cutler (1979). Dichos autores mantienen que las UFS idiomáticas se almacenan y se recuperan del lexicón mental como cualquier otro tipo de unidad léxica, no requiriendo ningún tipo de mecanismo especial. El reconocimiento de la unidad desencadena ambas interpretaciones (literal y figurativa), aunque los experimentos sobre reconocimiento léxico basado en la velocidad de respuesta de los sujetos parece indicar cierta preferencia por la lectura idiomática en primer lugar (Estill y Kemper, 1982). Frente a las dos hipótesis anteriores, surge una tercera, denominada acceso directo (Direct Access Hypothesis, en inglés). El énfasis ha pasado de la supuesta ambigüedad de tales unidades a la convencionalidad y fijación de éstas. Gibbs

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 53

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

53

y Gonzalez (1985) y Müller y Gibbs (1987) han comprobado que el grado de fijación e institucionalización de una UF facilita su comprensión y producción en la comunicación. Y es más, los hablantes tienden a seleccionar el significado idiomático en primer lugar, a reconocer una unidad estable, antes de descartar dicha interpretación a favor de un procesamiento literal de la secuencia en cuestión. Y en este proceso de reconocimiento, el contexto desempeña una función esencial, aunque siempre menor en comparación con las secuencias literales. Por último, Cacciari y Tabossi (1988), han propuesto una cuarta alternativa: la configuración clave (Key Configuration Hypothesis). Según los autores, las UFS no se procesan como tales, es decir, en su significado compositivo, hasta que el hablante ha detectado suficientes elementos constitutivos. Dichos elementos, que constituirían el núcleo central (key), son capaces de activar la UF correspondiente (configuración clave básica). Esta hipótesis estaría en consonancia con los modelos psicolingüísticos de activación (spreading activation). Parece, pues, que la interpretación es primero literal hasta que el hablante reconoce, y por tanto activa, la UF a partir de una configuración concreta de elementos que puede variar de individuos a individuos. Ello explicaría, por ejemplo, la comprensión y producción en el discurso de manipulaciones formales que afectan a la composición léxica de la UF. Por último, merece la pena reseñar los esfuerzos individuales de HäckiBuhofer (1989, 1993, 1996) sobre los aspectos psicolingüísticos de la representación de las imágenes subyacentes a las UFS, con especial referencia a la doble elaboración de las bases figurativas; así como su originalidad al aplicar la fraseología al estudio y tratamiento de pacientes con afasia. 3.6. ESTUDIOS COMPARADOS Cuando se analizan los sistemas fraseológicos y los frásicos de dos o más lenguas surgen otros temas propios de investigación, como son los universales fraseológicos, los préstamos y las correspondencias interlingüísticas. Los universales fraseológicos se establecen a partir de las regularidades observables teniendo en cuenta la tipología estructural de las lenguas, ya que existe una relación proporcional entre el grado de “analiticidad” de una lengua y la regularidad de su sistema fraseológico (cf. Roos, 1985; Dobrovol’skij, 1988; DÈ urcËo, 1993; Corpas Pastor, 1995b y 2000a). Los rasgos comunes a los distintos frásicos se prestan a una subdivisión en tipos de universales: universales fraseológicos propiamente dichos, a los cuales pertenecen la presencia de palabras diacríticas, la formación de series, las variantes y gradación idiomática y combinatoria; universales léxico-fraseológicos, que engloban las relaciones paradigmáticas de las UFS; y los universales semántico-

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 54

54

Capítulo I

culturales, determinados extralingüísticamente, que englobarían aspectos como la universalidad de la base cognitiva o la tendencia a expresar valoraciones y emociones intensas. Por otra parte, la fraseología comparada ha hecho hincapié en la coincidencia de forma y contenido de UFS pertenecientes a lenguas distintas (cf. Corpas Pastor, 2000a). Nos referimos concretamente a los europeísmos (Morvay, 1996). Estas unidades surgen a partir de la observación del mundo que nos rodea (europeísmos naturales), proceden de fuentes comunes de la cultura europea (europeísmos culturales) o bien comparten un mismo origen por partida doble (europeísmos naturales-culturales). Así, la caja de Pandora, cuyos orígenes se remontan a la rica mitología griega, pertenece al acervo cultural europeo, al igual que sus equivalentes en el resto de las lenguas europeas: Pandora’s box (inglés); die Büchse der Pandora (alemán); il vaso di Pandora (italiano); boîte de Pandore (francés); Pandora szelencéje (húngaro); cutia Pandorei (rumano), etc. Pero uno de los ejes centrales de la fraseología comparada, quizá el más representativo, es la búsqueda de correspondencias interlingüísticas o equivalentes fraseológicos. Frecuentemente los estudios de fraseología contrastiva se han reducido al establecimiento de relaciones de equivalencia entre UFS de dos o más lenguas. Tradicionalmente se habla de una escala gradual, que va desde la equivalencia nula (EN) a la equivalencia total (ET), pasando por distintas modalidades de equivalencia parcial (EP). La inequivalencia fraseológica se produce cuando la LM no dispone de una UF correspondiente para una determinada UF de la lengua origen (UFO), como es el caso de la locución inglesa keep the flag flying (“not fml to continue to support and represent opinions, ideas, etc., that one believes in strongly, esp. to keep up practices connected with one’s own country in another country”, LDOEI), que no tiene correspondencia en español; y, viceversa, la paremia Entre todos la mataron y ella sola se murió (“Frase con que se comenta que cierto suceso desgraciado o cierto percance no son obra de uno solo, sino de varios a los que se alude”, DUE), sin equivalente en inglés. En el otro extremo de la escala se halla la equivalencia total, típica de la fraseología denominativa y terminológica (CV joint ≈ junta homocinética), los calcos (white hope ≈ esperanza blanca) y los europeísmos, como ya hemos visto. De un extremo a otro se dan diversos grados de equivalencia parcial, como Dios los cría y ellos se juntan con respecto a Birds of a feather flock together, que se diferencian en cuanto a la base figurativa y la composición léxica, pero que presentan un plano denotativo-connotativo similar; o casos de equivalencia aparente del tipo jmdm. den Kopf waschen (“ugs. jmdm. gründlich die Meinung sagen, jmdn. scharf zurechtweissen”, DUDEN), esto es, reprender a alguien, y lavarle a alguien el cerebro (“manipular psicológicamente”, GDAS), que, por similitud

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 55

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

55

formal en cuanto a su composición léxica, a simple vista, y por error, podrían parecer equivalentes. 4. Conclusión Los últimos 10 años han supuesto un crecimiento sin precedentes de la fraseología a nivel nacional e internacional. La constitución de la European Society of Phraseology (EUROPHRAS) ha supuesto un auténtico revulsivo para la investigación fraseológica en Europa, facilitando el intercambio científico, abriendo nuevos horizontes a los distintos enfoques y corrientes, y posibilitando el enriquecimiento mutuo. Esta especie de “globalización fraseológica” está destinada a eliminar las barreras de cristal que han separado durante mucho tiempo a las distintas escuelas, algunas de las cuales han estado sumidas en un aislamiento egocéntrico apartado de la realidad. Hasta la fecha los principales temas de investigación han gravitado en torno a los aspectos semánticos y textuales de las unidades fraseológicas. Dos nuevos paradigmas –la lingüística del corpus y la semántica cognitiva– han proporcionado sendas vías de investigación, cuyos frutos empezamos a recoger. Además, los modelos actuales de procesamiento psicolingüístico parecen validar ambos enfoques, los cuales resultan ser, a la postre, complementarios. Otros temas tradicionales de investigación, como son la delimitación de la disciplina o la clasificación de unidades fraseológicas, empiezan a perder el favor del que gozaran en el pasado. En su lugar comienzan a aparecer estudios centrados en las relaciones que se establecen entre la fraseología y la sintaxis, por un lado; y entre la fraseología y los lenguajes de especialidad, por el otro. La comparación interlingüística también se abre paso paulatinamente desde una doble perspectiva contrastiva y traductológica (cf. Corpas Pastor, 2000a y b; Higi-Wydler, 1989; /Labno FaleŒcka, 1995; Roberts, 1998; Sabban, 1999; Segura García, 1998; Zuluaga, 2000-2001). Apenas nos hemos detenido en esta línea de la investigación fraseológica, como tampoco lo hemos hecho en otras vertientes aplicadas, entre las cuales sobresalen la fraseografía y la fraseodidáctica (cf. Corpas, 2000c; Kühnert, 1986; Nattinger y DeCarrico, 1988; Lorenz-Bourjot y Lüger, 2001; Penadés, 1999; Wotjak, 1998). Por su importancia y especificidad, son temas a los que desearíamos dedicar un trabajo aparte. Agradecimientos Quisiéramos agradecer a los profesores Károly Morvay y Alberto Zuluaga sus comentarios y sugerencias.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 56

56

Capítulo I

5. Apéndices 5.1. EVENTOS INTERNACIONALES Año

Lugar

Denominación/Publicación

1981

Mannheim (Alemania)

1. Internationalen Phraseologie-Symposium (MatesicË, ed., 1983)

1984

Zurich (Suiza)

Aktuelle Probleme der Phraseologie(Symposium 27-29.9.(1984 in Zürich) (Burger y Zett, eds., 1987)

1986

Oulu (Finland)

Phraseologieforschung. Internationales Symposium in Oulu (Korhonen, ed., 1987)

1988

Estrasburgo (Francia)

EUROPHRAS 88: Phraséologie Contrastive (Gréciano, ed., 1989)

1990

Aske (Suiza)

EUROPHRAS 90. Internationale Tagung der germanistischen Phraseologieforschung (Palm, ed., 1991)

1991

Bochum (Alemania)

Westfälischer Arbeitskreis “Phraseologie/Parömiologie (1991/1992)” (Chlosta et al., eds., 1994)

1992

Saarbrücken (Alemania)

EUROPHRAS 92: Tendenzen der Phraseologieforschung (Sandig, ed., 1994)

1992

Tilburg (Holanda)

International Conference on Idioms (Everaert et al., 1992) EURALEX International Congresses on Lexicography [Sección de Fraseología]

(1983)/ 1994 [desde] 1994

Saint-Cloud/INALF (Francia)

La locution: entre lexique, syntaxe et pragmatique. Identification en corpus, traitement, apprentissage (Martins-Baltar, ed., 1995, 1997; Fiala et al., 1997)

1994

Leeds (Gran Bretaña)

I Symposium on Phraseology (Cowie, ed., 1998)

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 57

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

57

Año

Lugar

Denominación/Publicación

1994

Bochum (Alemania)

Westfälischer Arbeitskreis “Phraseologie/Parömiologie 1994” (Baur y Chlosta, eds., 1995)

1995

Graz (Austria)

EUROPHRAS 95 - Europäische Phraseologie im Vergleich: Gemeinsames Erbe und kulturelle Vielfalt. (Eismann, ed., 1998)

1996

Bochum (Alemania)

Westfälischer Arbeitskreis “Phraseologie / Parömiologie 1996” (Hartmann, ed., 1998)

1996

Moscú (Rusia)

II International Symposium on Phraseology

1997

Liptovsky Ján (Eslovaquia)

EUROPHRAS ‘97: Phraseology and Paremiology (DË urcËo, ed., 1998)

1998

Stuttgart (Alemania)

III International Symposium on Phraseology

1999

Baltmannsweiler (Alemania)

Westfälischer Arbeitskreis “Phraseologie/Parömiologie 1999” (Baur et al., eds., 1999)

2000 (jun.)

Uppsala (Suecia)

I Conference of EUROPHRAS

2001 (ene.)

Münster (Alemania)

Westfälischer Arbeitskreis “Phraseologie/Parömiologie 2001”

2001 (abr.)

Roma (Italia)

4th International Symposium on Phraseology

2001 (jun.)

Ascona (Suiza)

Phraseology and Paremiology New Perspectives in Research

2001 (sep.)

Stettin (Polonia)

Neue Phraseologie in einem neuen Europa

2002 (jun.)

Loccum (Alemania)

II Conference of EUROPHRAS

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 58

58

Capítulo I

5.2. JORNADAS EN ESPAÑA Año

Lugar

Denominación/Publicación

(1996)

Madrid

I Congreso Internacional de Paremiología (Sevilla, J. (Ed.) Paremia 6, 1997)

(1996)

Durango

Jornadas de Literatura Popular (Euskera, 1996)

(1997)

Santiago de Compostela

I Coloquio Galego de Fraseoloxía (Ferro Ruibal, ed., 1998)

(1998)

Córdoba

II Congreso Internacional de Paremiología (Sevilla, J., ed., Paremia 8, 1999)

(1999)

Castellón

El discurs prefabricat. I Jornadas de Fraseología Comparada. (V. Salvador y A. Piquer, coords., 2001)

(2000)

Bilbao

Jornadas de Literatura Popular (Euskera, 2001)

(2001)

Murcia

XXIV Curso de Lingüística Textual

5.3. MONOGRAFÍAS Año

Autor

Título

1980

A. Zuluaga

Introducción al estudio de las expresiones fijas.

1987

M. Conca

Paremiología.

1991

M. A. Calero

La imagen de la mujer a través de la tradición paremiológica española (lengua y cultura)

1995

V. Salvador (Ed.)

Caplletra 18.

1995

C. López Taboada y M. R. Soto Arias

Así falan os galelos. Fraseoloxía da lingua galega.

1995

G. Corpas Pastor

Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 59

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

59

Año

Autor

Título

1996

G. Corpas Pastor

Manual de fraseología.

1996

J. Martínez Marín

Estudios de fraseología española.

1997

A. Castillo Carballo

Unidades pluriverbales en un corpus del español contemporáneo.

1997

L. Ruiz Gurillo

Aspectos de fraseología teórica española.

1998

J. de D. Luque Durán y A. P. Bertrán (eds.)

Léxico y fraseología.

1998

L. Ruiz Gurillo

La fraseología del español coloquial.

1998

G. Wotjak (Ed.)

Estudios de fraseología y fraseografía del español actual.

1999

J. Guia

Fraseología i estil.

1999

I. Penadés Martínez

La enseñanza de las UFS.

1999

P. Sancho Cremades

Introducció a la fraseología. Aplicació al valencià col·loquial.

2000

I. Penadés Martínez

La hiponimia en las UFS.

2000

E. Blasco Mateo

Los límites entre perífrasis verbales y UFS verbales.

2000

P. Rivas

Fraseoloxía do mar na Mariña luguesa.

2000

G. Corpas Pastor (Ed.)

Las lenguas de Europa: Estudios de fraseología, fraseografía y traducción.

Referencias bibliográficas BARANOV, A. N., y DOBROVOL’SKIJ, D. O. (1991): “Kognitive Modellierung in der Phraseologie: zum Problem der aktuellen Bedeutung”, en: Beiträge zur Erforschung der deutschen Sprache 10, 112-123. BASAJ, M., y RYTEL, D. (Eds.) (1994): Z problemów frazeologii polskiej I slowwiánskiej VI, Varsovia: Polska Akademia nauk Instytut slawistyki. BAUR, R. S., y CHLOSTA, Ch. (Eds.) (1995): Von der Einwortmetapher zur Satzmetapher. Akten des Westfälischen Arbeitskreises “Phraseologie/Parömiologie 1994/95” (Studien zur Phraseologie und Parömiologie, 6) Bochum: Universitätsverlag Brockmeyer.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 60

60

Capítulo I

BAUR, R. S.; CHLOSTA, C., y PIIRAINEN, E. (Eds.) (1999): Wörter in Bildern - Bilder in Wörtern. Beiträge zur Phraseologie und Sprichwortforschung aus dem Westfälischen Arbeitskrei, Baltmannsweiler: Schneider Verlag Hohengehren. BENAVENTE JAREÑO, P., y FERRO RUIBAL, X. (1995): Refraneiro galego da vaca, Vigo, Centro de Investigacións Lingüísticas e Literarias Ramón Piñeiro. Xunta de Galicia. BLASCO MATEO, E. (2000): Los límites entre perífrasis verbales y UFS verbales.Tesis doctoral. Barcelona: Publicacions Universitat de Barcelona. BOBROW, S., y BELL, S. (1973): “On catching on to idiomatic expressions”, en: Memory and Cognition 1, 343-346. BOND, E. (1991=1968): Narrow Road to the Deep North. Londres: Eyre Methuen. BURGER, H. (1998): Phraseologie: Eine Einführung am Beispiel des Deutschen. Berlín: Erich Schmidt. — (1999): “Phraseologie: Die Situation des Faches (aus germanistischer Perspektive)” en: Revista de Filología Alemana 7. 185-207. — (2000): “Konzepte von “Variation” in der Phraseologie”, en A. HÄCKI BUHOFER (Ed.): Vom Umgang mit sprachlicher Variation, Festschrift für Heinrich Löffler. Tubinga: Basel, 35-51 BURGER, H., y ZETT, R. (Eds.) (1987): Aktuelle Probleme der Phraseologie (Symposium 27-29.9.(1984 in Zürich). Berna: Peter Lang. CACCIARI, C., y TABOSSI, P. (1988): “The comprehension of idioms”,en: Journal of Memory and Language 27. 668-683. CALERO FERNÁNDEZ, M. A. (1991): La imagen de la mujer a través de la tradición paremiológica española (lengua y cultura). Barcelona: Publicacions Universitat de Barcelona. — (1998): “Sobre los oficios femeninos en el refranero español: la mujer y la costura”, en: Paremia 7, 43-52. CARBONELL BASSET, D. (2000): Gran Diccionario del Argot Soez. Barcelona: Larousse. [GDAS] CASTILLO CARBALLO, M. A. (1997): Unidades pluriverbales en un corpus del español contemporáneo. Tesis doctoral. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad. CHLOSTA, Ch.; GRZYBEK, P., y PIIRAINEN, E. (eds.) (1994): Sprachbilder zwischen Theorie und Praxis. Akten des Westfälischen Arbeistkreises “Phraseologie/Parömiologie 1991/1992” (Studien zur Phraseologie und Parömiologie, 2), Bochum, Universitätsverlag Brockmeyer. CHRISSOU, M. (2000): Kontrastive Untersuchungen zu deutschen und neugriechischen Phraseologismen mit animalistischer Lexik. Essen: Clemon. CË ERMÁK, F. (2001): “Substance of Idioms: Perennial Problems, Lack of Data or Theory?”, en: International Journal of Lexicography 14 (1), 1-20. CONCA, M. (1987): Paremiología. Valencia: Universitat de València. — (1996=1988): Els refranys Catalans. 3ª ed. Barcelona: Tres i Cuatre. CORPAS PASTOR, G. (1995): Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español. Tesis doctoral (Universidad Complutense de Madrid, 1994). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad. (Edición en microfichas). — (1996): Manual de fraseología española (Biblioteca Románica Hispánica. Manuales, 76). Madrid: Gredos.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 61

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

61

— (1998a.): “Criterios generales de clasificación del universo fraseológico de las lenguas, con ejemplos tomados del español y del inglés”, en: ALVAR EZQUERRA, M., y CORPAS PASTOR, G. (eds.): Diccionarios, frases, palabras. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 157-187. — (1998b): “Expresións fraseolóxicas e colocacións”, en: FERRO RUIBAL, X., 31-61. — (2000a): “Acerca de la (in)traducibilidad de la fraseología”, en: CORPAS PASTOR, G. (Ed.) (2000c), 483-522. — (2000b): “Fraseología y Traducción”, en: SALVADOR, V./ PIQUER, A. (eds.), 107-138. — (Ed.) (2000c): Las lenguas de Europa: Estudios de fraseología, fraseografía y traducción (Interlingua 12). Granada: Comares. — (2001): “Review of Peter Andrew Howarth, 1996, Phraseology in English Academic Writing. Some implications for language learning and dictionary making”, en: International Journal of Lexicography 14 (1), 77-80. COWIE, A. P. (Ed.) (1998): Phraseology: Theory, Analysis, and Applications (Oxford Studies in Lexicography and Lexicology). Oxford: Oxford University Press. DÍAZ HORMIGO, M. T. (2000): Disciplinas lingüísticas y formación de palabras. Cádiz: Servicio de Publicaciones de la Universidad. DOBROVOL’SKIJ, D. O. (1988): Phraseologie als Objekt der Universalienlinguistik. Leipzig: Enzyklopädie. — (1995): Kognitive Aspekte der Idiom-Semantik. Studien zum Thesaurus deutscher Idiome (Eurogermanistik. Europäische Studien zur deutschen Sprache 8). Tubinga: Gunter Narr. — (1997): Idiome im mentalen Lexikon: Ziele und Methoden der kognitivbasierten Phraseologieforschun. Trier: WVT Wissenschaftlicher Verlag. DOBROVOL’SKIJ, D. O., y PIIRAINEN, E. (1996): Symbole in Sprache und Kultur. Studien aus kultursemiotischer Perspektive (Studien zur Phraseologie und Parömiologie 8). Bochum: Universitätsverlag Brockmeyer. Duden. Redewendungen und sprichwörtliche Redensarten. Wörterbuch der deutschen Idiomatik (1996): Mannheim: Dudenverlag. [DUDEN] Ë , P. (1993): “Für eine vergleichende Enzyklopädie der Phraseme”, en: KROSLÁKODË URCO VÁ, E., y DË URCO Ë , P. (eds.), 80-84. — (Ed.) (1998): EUROPHRAS ‘97: Phraseology and Paremiology (International Symposium, September 2-5, 1997, Liptovsky´ Ján). Bratislava: Akadémia PZ. EISMANN, W. (Ed.) (1998): EUROPHRAS 95 - Europäische Phraseologie im Vergleich: Gemeinsames Erbe und kulturelle Vielfalt. Bochum: Universitätsverlag Brockmeyer. ESTILL, R., y KEMPER, S. (1982): “Understanding Idioms”, en: Journal of Psycholinguistic Research 11 (6). 559-568. EVERAERT, M.; VAN DER LINDEN, E.-J.; SCHENK, A., y SCHREUDER, R. (Eds.) (1992): Proceedings of Idioms. International Conference on Idioms, Tilburg, The Netherlands (Sept. 2-4, 1992). 2 vols: Tiltburg, ITK. FERNÁNDEZ DE LA TORRE MADUEÑO, M. D. (1998a): “Expresión del carácter femenino en unidades fraseológicas inglesas y españolas con woman y mujer”, en: VALERO GARCÉS, C., y DE LA CRUZ CABANILLAS, I. (eds.): Nuevas tendencias y aplicaciones de la traducción. Encuentros en torno a la traducción. Alcalá: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 187-193.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 62

62

Capítulo I

— (1998b): “Los términos hombre y mujer en el refranero. Naturaleza y condición de cada género”, en: M. J. JIMÉNEZ TOMÉ (Ed.): Pensamiento, imagen e identidad: a la búsqueda de la definición de género (Colección Atenea). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 155-183. FERRO RUIBAL, X. (coord.) (1998): Actas do I Coloquio Galego de Fraseoloxía, 15-18 de septiembre de 1997. Centro de Investigacións Lingüísticas e Literarias Ramón Piñeiro: Xunta de Galicia. FIALA, P.; LAFON, P., y PIGUET, M. F. (Eds.) (1997): La locution: entre lexique, syntaxe et pragmatique (Collection Saint-Cloud). París: Klincksiek. FLEISCHER, W. (1997=1982): Phraseologie der deutschen Gegenwartssprache, 2ª ed. Leipzig: Bibliographisches Institut, VEB Verlag Enzyklopädie. GIBBS, R., y GONZALEZ, G. (1985): “Syntactic frozenness in processing and remembering idioms”, en: Cognition 20, 243-259. GLÄSER, R. (1986): Phraseologie der englischen Sprache. Tubinga: Max Niemeyer. GRÉCIANO, G. (1983): Signification et dénotation en allemand. La sémantique des expressions idiomatiques (Recherches linguistiques IX). París: Klincksieck. — (1987): “Idiom und Text”, en: Deutsche Sprache 3, 193-208. — (Ed.) (1989): EUROPHRAS 88: Phraséologie Contrastive: Actes du Colloque International Klingenthal-Strasbourg, 12-16 mai 1988 (Collection Recherches Germaniques, 2). Estrasburgo: Université des Sciences Humaines, Département d’Etudes Allemandes. GUIA, J. (1998): Fraseología i estil. Enigmes literaris a la València del segle XV. Barcelona: Tres I Cuatre. HARTMANN, D. (Ed.) (1998): Das geht auf keine Kuhhaut. Arbeitsfelder der Phraseologie. Akten des Westfälischen Arbeitskreises “Phraseologie / Parömiologie 1996” (Studien zur Phraseologie und Parömiologie, 16). Bochum: Universitätsverlag Brockmeyer. HIGI-WYDLER, M. (1989): Zür Übersetzung von Idiome. Eine Beschreibung und Klassifizierung deutscher Idiome und ihrer französischen Übersetzungen, Berna, Frankfurt am Main, Nueva York, París: Peter Lang. HÄCKI-BUHOFER, A. (1989): “Psycholingistische Aspekte in der Bildhaftigkeit von Phraseologismen”, en: G. GRÉCIANO (Ed.), 165-175. — (1993): “Psycholinguistik der Phraseologie. Zum Stand der Forschung”, en: KROSLË ÁKOVÁ, E., y DË URCO Ë , P. (eds.), 148-160. — (1996): “Theorie und Methodologie der psycholinguistisch basierten Bedeutungsbeschreibung: Zur Bandbreite phraseologischer Bedeutungen”, en: WEIGAND, E., y HUNDSNURSCHER, F. (eds.) (1996): Lexical Structures and Language Use. Tubinga: Max Niemeyer, 387-389. HOWARTH, P. A. (1996): Phraseology in English Academic Writing (Lexicographica Series Maior, 75). Tubinga: Max Niemeyer HUNDT, C. (1994): Untersuchungen zur portugiesischen Phraseologie., Wilhemsfeld: Gottfried Egert. KORHONEN, J. (Ed.) (1986): Beiträge zur allgemeinen und germanistischen Phraseologieforschung. Internationales Symposium in Oulu, 13-15 Juni 1986 (Veröffentlichungen des Germanistischen Instituts, 7). Oulu: Universität Oulu.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 63

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

63

— (1998): Zur Entwicklung der intra- und interlingualen kontrastiven Phraseologie unter besonderer Berücksichtigung der deutschen Sprache. SAXA: Universität Vaasa. KÓTOVA, M. (1998): “As aportacións russas ós estudios fraseolóxicos”, en: X. FERRO RUIBAL (coord..), 247-256. KROSLÁKOVÁ, E., y DË URCO Ë , P. (eds.) (1993): Phraseology in Education, Science and Culture. Nitra: VSPN. KÜHNERT, H. (1986): Deutsche Phraseologie für ausländische Deutschlehrer. Ein Handund Übungsbuch für Deutschlehrer und Studenten. Postdam. /LABNO FALEC Œ KA, E. (1995): Phraseologie und Übersetzen. Eine Untersuchung der Übersetzbarkeit creative-innovativ gebrauchter wiederholter Rede anhand von Beispielen aus der polnischen und deutschen Gegenwartsliteratur. Frankfurt am Main, Berlín, Berna, Nueva York: Peter Lang. LEWICKI, A. M. (1976): Wprowadzenie do frazeologii syntaktycznej. Teoria zwrotu frazeologicznego. Katowice: Uniwersytet Slaski. — (Ed.) (1982): Stalosc i zmiennosc zwiazków frazeologicznych. Lublin: Uniwersytet Marii Curie-Sklodowskiej. LORENZ-BOURJOT, M., y LÜGER, H.-H. (Eds.) (2001): Phraseologie und Phraseodidaktik (Beiträge zur Fremdsprachenvermittlung. Sonderheft 4). Viena: Praesens. LÓPEZ TABOADA, C., y SOTO ARIAS, M. R. (1995): Así falan os galegos. Fraseoloxía da lingua galega, Aplicación didáctica. A Coruña: GaliNova. LUQUE DURÁN, J. DE D., y BERTRÁN, A. P. (Eds.) (1998): Léxico y fraseología (Serie Collectae). Granada: Método Ediciones. MARTÍNEZ MARÍN, J. (Ed.) (1996): Estudios de fraseología española (Cuadernos de lingüística 14). Málaga: Ágora. MARTINS-BALTAR, M. (Ed.) (1995): La locution en discours (Número especial de Cahiers du français contemporain, 2). París: Didier Érudition. — (1997): La locution, entre langues et usages (Collection Signes). París: ENS Editions Fontenay/Saint Cloud, diff. Ophrys. MATEsËIc´, J. (Ed.) (1983): Phraseologie und ihre Aufgaben. Beiträge zum 1. Internationalen Phraseologie-Symposium vom 12. bis 14. Oktober 1981 in Mannheim (Mannheimer Beiträge zur slavischen Philologie, 3) Heidelberg: Julius Groos. MELLADO, C. (1999): Los somatismos del alemán. Tesis doctoral. Salamanca: Servicio de Publicaciones de la Universidad. MOKIENKO, V. (2000a): As imaxes da lingua rusa. Ensayos históricos, etimológicos e etnolingüísticos sobre fraseoloxía. Santiago de Compostela: Centro Ramón Piñeiro, Xunta de Galicia (Traducido del ruso por E. Lossik, revisado por C. Viqueira Liñares, bajo la coordinación de X. Ferro Ruibal. Índices a cargo de M. Veiga Díaz). — (2000b): Fraseoloxía eslava. Manual universitario para a especialidade de lingua e literatura rusas. Santiago de Compostela: Centro Ramón Piñeiro, Xunta de Galicia (Traducido del ruso por K. Guerbek, revisado por I. Valiño Ferrín y M. Veiga Díaz, bajo la coordinación de X. Ferro Ruibal). MOLINER, M. (1998=1996-1997): Diccionario de uso del español. 2ª ed. 2 vols. Madrid: Gredos [DUE].

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 64

64

Capítulo I

MOON, R. (1998): Fixed Expressions and Idioms in English: A Corpus-based Approach (Oxford Studies in Lexicography and Lexicology). Oxford: Oxford University Press. MORVAY, K. (1996): “Harri batez bi kolpe. Cuestiones de fraseología comparada”, en: Euskera 3. 719-767. MÜLLER, R., y GIBBS, R. (1987): “Processing idioms with multiple meanings”, en: Journal of Psycholinguistic Research 16 (1), 63-81. NATTINGER, J. R., y DECARRICO, J. S. (1992): Lexical phrases and language teaching. Oxford, Nueva York, Toronto: Oxford University Press. PALM, C. (Ed.) (1991): EUROPHRAS 90: Akten der internationalen Tagung der germanistischen Phraseologieforschung, Aske, Schweden, 12-15 Juni 1990. Uppsala: Almquist & Wiksell International. PENADÉS MARTÍNEZ, I. (1999): La enseñanza de las unidades fraseológicas. Madrid: Arco/Libro. — (2000): La hiponimia en las unidades fraseológicas. Cádiz: Servicio de Publicaciones de la Universidad. PIIRAINEN, E. (2000): Phraseologie der westmünsterländischen Mundart. Teil 1: Semantische, kulturelle und pragmatische Aspekte dialektaler Phraseologismen (Phraseologie und Parömiologie 2). Baltmannsweiler: Schneider Verlag Hohengehren. RIVAS, P. (2000): Fraseoloxía do mar na Mariña luguesa (Cadernos de fraseoloxía galega 1). Santiago de Compostela: Centro Ramón Piñeiro, Xunta de Galicia. ROBERTS, R. (1998): “Phraseology and translation”, en: FERNÁNDEZ NISTAL, P., y BRAVO GOZALO, J. M. (coords.) (1998): La traducción: orientaciones lingüísticas y culturales. Valladolid: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 61-77. RODRÍGUEZ-VIDA, S. (1997): Diccionari Temàtic de Modismes. Barcelona: Edicions 62. ROOS, E. (1985): “Überlegungen zur deutschen, englischen und französischen Idiomatik”, en: Sprache und Literatur 56, 74-80. RUIZ GURILLO, L. (1997): Aspectos de fraseología teórica española (Anejo nº XXIV de la Revista Cuadernos de Filología). Valencia: Servicio de Publicaciones de la Universidad. — (1998). La fraseología del español coloquial. Barcelona: Ariel. SABBAN, A. (1998): Okkasionelle Variationen sprachlicher Schematismen. Eine Analyse französischer und deutscher Presse- und Werbetexte (Romanica Monacensia, 53). Tübingen: Gunter Narr. — (Ed.). (1999): Phraseologie und Übersetzen. Phrasemata II. Bielefeld: Aisthesis. SALVADOR, V. (Ed.) (1995): Caplletra. 18 (Número monográfico sobre fraseología). SALVADOR, V., y PIQUER, A. (Eds.) (2000): El discurs prefabricat. Estudis de fraseología teórica i aplicada. Castellón: Publicacions de la Universitat Jaume I. SANCHO CREMADES, P. (1999): Introducció a la fraseología, Aplicació al valencià col.loquial. Valencia: Denes. SANDIG, B. (Ed.) (1994): EUROPHRAS 92: Tendenzen der Phraseologieforschung (Studien zur Phraseologie und Parömiologie, 1). Bochum: Universitätsverlag Brockmeyer. SEGURA GARCÍA, B. (1998): Kontrastive Idiomatik: Deutsch-Spanisch. Eine textuelle Untersuchung von Idiomen anhand literarischer Werke und ihrer Übersetzungsprobleme. Frankfurt am Main, Berlín, Berna, Nueva York: Peter Lang.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 65

Corrientes actuales de la investigación fraseológica

65

SEVILLA MUÑOZ, J. (Ed.) (1997): Actas del I Congreso Internacional de Paremiología, (Nº especial de Paremia 6). — (Ed.) (1999): Actas del II Congreso Internacional de Paremiología (Número especial de Paremia 8). SUMMERS, D. (1989=1979): Longman Dictionary of English Idioms. Harlow, Londres: Longman [LDOEI]. SWINNEY, D.; CUTLER, A. (1979): “The access and processing of idiomatic expressions”. Journal of Verbal Learning and Verbal Behaviour. 18. 645-659. THOMAS, P. (1992): “Treatment of compound terminology entries”, en: TOMMOLA, H.; VARANTOLA, K.; SALMI-TOLONEN, T.; SCHOPP, J. (Eds.). (1992): Euralex ‘92 Proceedings (Studia translatologica ser. A, 2). Tampere: University of Tampere, 185-192. WEINREICH, U. (1969): “Problems in the analysis of idioms”, en: J. PUHVEL (Ed.) (1969): Substance and Structure of Language. Berkeley: University of California Press, 23-81. WOTJAK, G. (Ed.) (1998): Estudios de fraseología y fraseografía del español actual (Lingüística Iberoamericana 6). Frankfurt am Main: Vervuert; Madrid: Iberoamericana. ZULUAGA OSPINA, A. (1980): Introducción al estudio de las expresiones fijas (Studia Romanica et Linguistica, 10). Frankfurt-am-Main, Berna, Cirencester: Peter Lang. — (1997): “Sobre las funciones de unidades fraseológicas en textos literarios”, en: Paremia 6. 631-640. — (2000-2001): “Análisis y traducción de unidades fraseológicas desautomatizadas”, en: PhiN, 16, 67-83. — (2001): “Fraseología y conciencia social en Latinoamérica”, en: Euskera, 51-72.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 67

CAPÍTULO II APUNTES PARA EL ESTUDIO DE LA COLOCACIÓN

Los fenómenos de restricción combinatoria, ya sea léxica o sintáctica, han llamado la atención de lingüistas, filólogos y estudiosos en general desde muy antiguo. Un breve repaso por la historia de la lingüística de los siglos XIX y XX nos descubre autores preocupados por las combinaciones imposibles, posibles y deseables de unidades léxicas en el eje horizontal del sistema de la lengua1. Por ejemplo, a finales del diecinueve, Herman Paul (1880), uno de los “abuelos” de la fraseología, reconoce implícitamente la existencia de colocabilidad restringida al distinguir entre acusativo libre y acusativo fijado. El segundo se da en construcciones formadas por un sustantivo que sólo puede combinarse con un único verbo o con un grupo muy reducido de éstos, presentando, entonces, una acepción especial. A principios del veinte, Charles Bally (1909) se hace eco, esta vez explícito, de las preferencias de combinación léxica. Basándose en el concepto saussureano de aglutinación (en tanto grado de fijación y cohesión), el autor distingue, frente a las combinaciones libres, dos tipos de locutions phraséologiques: (1) combinaciones cuyos componentes carecen de autonomía y cuyo significado unitario no se puede inferir de los significados individuales de sus elementos integrantes (“unités phraséologiques” o “groupes agglutinés”, del tipo tout à coup); y (2) combinaciones relativamente cohesionadas, familiares y conocidas para los hablantes, cuyos componentes contribuyen al contenido semántico global (“series phraséologiques” y “groupements usuels”, como grièvement blessé y avoir de la chance). Durante los dos primeros tercios de este siglo, otros autores se ocupan también del tema, aunque desde perspectivas distintas, si bien complementarias 2. Así, Porzig (1950) se centra en los campos semánticos elementales (elementare Bedeutungsfelder), formados por sintagmas bipartitos, de combinatoria restringida, que presentan relaciones semánticas esenciales. Algunas de éstas guardan una estrecha relación con los aspectos semánticos de las colocaciones, como la tipicidad (bellen-Hund, fallen-Baum). De hecho, muchos de los ejemplos de Porzig entran dentro de las solidaridades léxicas propugnadas por Coseriu (1966, 1977 [1986]). Las determinaciones semánticas de una palabra por medio de un 1

Para este tema resulta especialmente útil el capítulo II (“Informe sobre la historia de la investigación fraseológica”) de la monografía de Zuluaga (1980). 2 Consúltense, además, Írsula Peña (1994: 28-34) y Corpas Pastor (1996: 53-65).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 68

68

Capítulo II

lexema (implicación), un archilexema (selección) o una clase (afinidad), de carácter multilateral, externo, darían lugar a parte de las colocaciones restringidas de una lengua (cf. caballo-bayo, león-rugir, etc.). El enfoque de Firth (1957, 1968) es también esencialmente semántico, y hasta cierto punto estilístico, ya que, por un lado, la combinabilidad léxica (collocation) es uno de los niveles de análisis (modes) que permite determinar la acepción que actualiza una palabra dada en contexto; y, por el otro, el contraste entre combinación usual e idiosincrásica centra el análisis estilístico y caracteriza los lenguajes de especialidad. De lo dicho hasta ahora podemos colegir que la restricción combinatoria ha sido tratada, siempre parcialmente, desde distintas parcelas del saber lingüístico. Tanto la semántica como la sintaxis han reclamado la combinatoria léxica como objeto propio de estudio, como ha expuesto Írsula Peña (1994: 27): Ihre Einbeziehung in die Phraseologie ist strittig, da andere linguistische Disziplinen wie die Lexikologie, die Lexikographie, die Semantik und die Syntax sie in ihren Gegenstandsbereich mit einbeziehen3.

Curiosamente, los diccionarios fraseológicos (de locuciones y paremias, fundamentalmente) han excluído las colocaciones sistemáticamente de sus respectivas nomenclaturas (cf. Mieder, 1989; Schemann, 1989; Hausmann, 1989). Esta tendencia refleja la influencia dispar que han ejercido los tres grandes bloques de la investigación fraseológica (cf. Corpas Pastor, 1998a y 1998b). Mientras que el bloque oriental –a saber, la antigua Unión Soviética y otros países del Este– ha primado la concepción amplia de la fraseología, en tanto estudio de las propiedades combinatorias de las palabras4, el bloque occidental (integrado por el antiguo estructuralismo europeo, especialmente la escuela ginebrina, y sus desarrollos posteriores) ha venido defendiendo una concepción restringida de la fraseología, cuyo centro está poblado por unidades fraseológicas fijas e idiomáticas al mismo tiempo. Pero, si el segundo bloque relega las colocaciones a la periferia, los estudios anglo-norteamericanos sobre idiomaticidad las han situado fuera de la fraseología, o, como mucho, en el “extrarradio”.

3

“La inclusión [=de las colocaciones] en la fraseología es dudosa, pues otras disciplinas lingüísticas como la lexicología, la lexicografía, la semántica y la sintaxis reclaman su inclusión como objeto de estudio.” (La traducción es nuestra). 4 Conviene recordar que la Teoría Sentido-Texto desarrollada por Mel’cËuk y sus colaboradores (cf., por ejemplo, Mel’cËuk y ZËolkovskij, 1970; Mel’cËuk, 1973) pretende dar cuenta de las restricciones colocacionales de las lenguas, entre otros fenómenos propios de la combinatoria léxico-sintáctica. También resulta paradigmático el estudio de Alexandrova y Ter-Minasova (1987), que lleva por título, precisamente, English Syntax (Collocation, Colligation and Discourse).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 69

Apuntes para el estudio de la colocación

69

No obstante, las tres posturas se han acercado mucho de un tiempo a esta parte, debido, sobre todo, al intercambio científico entre los autores de los tres bloques, y, cómo no, a la consolidación de la disciplina (cf. Corpas Pastor, 2001). Una de las tendencias más acusadas es, precisamente, la inclusión de las colocaciones en el ámbito de la fraseología, como un tipo más de unidad fraseológica, dado que comparten sus características definitorias. Veamos. Una unidad fraseológica (UF) es una “combinación estable de unidades léxicas formada por al menos dos palabras gráficas, cuyo límite superior se sitúa en el nivel de la oración compuesta” (Corpas Pastor, 1998a: 167). Entre sus rasgos distintivos figuran los siguientes: “polilexicalidad, alta frecuencia de aparición y de coaparición, institucionalización, estabilidad (fijación y especialización semántica), idiomaticidad y variación potenciales” (ibíd.). Si partimos de la definición anterior, las colocaciones son unidades fraseológicas de pleno derecho. En primer lugar, son polilexicales o pluriverbales, ya que están formadas por al menos dos palabras gráficas, como soltero empedernido y lluvia torrencial. Ciertos tipos de colocaciones están compuestas por dos palabras léxicas unidas por una palabra gramatical, del tipo poner en funcionamiento y racimo de uvas. También constan de más de dos palabras las colocaciones complejas, como dinero contante y sonante o llorar a moco tendido, formadas por una locución y su colocado (otra locución o una palabra léxica); y las colocaciones concatenadas del tipo sentir un miedo cerval y abrir una ventana de par en par, donde asistimos al fenómeno lingüístico de la recursividad. En segundo lugar, los colocados, esto es, los elementos integrantes de una colocación, suelen aparecer juntos con relativa frecuencia en el discurso. Además de la frecuencia de coaparición, dichas combinaciones se caracterizan por ser también frecuentes en su conjunto, esto es, como unidades. Ésta es la base de la corriente estadística, y éste es también el principio que subyace a los programas actuales de gestión de corpus y de extracción automática de colocaciones. (Cf. Choueka et al., 1983; Federici, Montemagni y Pirelli, 2000). La tercera característica definitoria se refiere a la institucionalización que presentan las colocaciones en tanto unidades fraseológicas. Dicho rasgo debe entenderse como la fijación en función de la reproducibilidad de estas unidades en el discurso. Esto quiere decir que a fuerza de reproducir una combinación, los hablantes la reconocen como familiar y la emplean como si se tratara de un fragmento prefabricado. Estamos, pues, ante la dimensión psicolingüística de la colocación, ante su realidad cognitiva, que ha sido advertida por algunos autores. Como afirma Greenbaum (1974: 83): “Collocation is more than a statistical matter: it has a psychological correlate”. Hotopf (1983), por su parte, señala la existencia de lo que él denomina “suppressed slips”, esto es, errores en la producción lingüística de los hablantes que, a diferencia de los “slips of the tongue” simples (sustitución de una palabra o fonema por otros), consisten en el empleo de una

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 70

70

Capítulo II

colocación completa (cut my nails) en lugar de la que se pretendía utilizar (brush my teeth). Esto es, las colocaciones de una lengua parecen estar almacenadas como unidades en el lexicón mental de los hablantes, como advirtiera Corpas Pastor (1994: 72) con respecto a las colocaciones formadas por un sustantivo y un adjetivo en inglés, del tipo overwhelming majority: Los resultados de nuestro experimento confirman nuestra hipótesis inicial sobre el estatus unitario de estas unidades: una vez aisladas las variables de orden de presentación y aprendizaje, las colocaciones se reconocen más rápidamente que los sintagmas formados por esas mismas palabras en distinta combinación.

La combinación institucionalizada deviene en combinación estable. En el caso de las colocaciones, esto se traduce en la restricción combinatoria y en la especialización semántica de sus elementos integrantes. En ambos casos se impone una escala gradual asimétrica. Esto es, normalmente uno de los colocados manifiesta mayor restricción. Por ejemplo, paliza se coloca con pegar, y con un reducido número de sinónimos parciales en ese contexto colocacional (dar, meter, propinar, arrear). Sin embargo, pegar se combina, además de con paliza, con un amplio grupo de sustantivos que denotan “agresión o impacto físico”: guantazo, hostia, puñetazo, palo, manta (de) palos, tunda, patada, pisotón, puntapié, picotazo, pellizco, mordisco, bocado, tirón [de orejas, de pelo], empujón, empellón, chupinazo, pelotazo, pedrada, tiro, puñalada, navajazo, etc. Otras combinaciones presentan una mayor exclusividad, por así decirlo: levar sólo se coloca con ancla, de la misma forma que izar y arriar sólo lo hacen con bandera y vela. La restricción combinatoria viene acompañada, generalmente, de la especialización semántica del elemento afectado. La especialización delexicalizada, propia de ciertos tipos de colocaciones, supone la neutralización de uno de los colocados. Si bien se puede hablar de pérdida semántica, no es menos cierto que la generalización resultante abre una nueva vía de combinación al verbo, aumentando el alcance de su posible polisemia. Las colocaciones de verbo delexicalizado se caracterizan, entre otras cosas, por la pérdida de identidad semántica del colocativo: así, cuando prestar se coloca con sustantivos como ayuda, apoyo, atención, asistencia, auxilio, colaboración, servicio, declaración, juramento, atención o interés, entre otros, experimenta un oscurecimiento de su acepción básica de “dar algo a otra persona con idea de que ésta se lo devuelva” para adquirir un significado general y gramaticalizado, funcional y auxiliar, en relación con los significados “verbales” latentes en las bases sustantivas, que son de carácter deverbal en su mayoría. A través de esta gramaticalización, el colocativo adquiere un valor morfemático semejante a la auxiliaridad verbal. La especialización de los colocados puede suponer un tipo de adición semántica. Por ejemplo, cuando levantar se coloca con sustantivos como castigo, san-

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 71

Apuntes para el estudio de la colocación

71

ción, prohibición, veda, interdicción muestra el resultado de un proceso de evolución semántica de clara base metafórica (“suspender o dejar sin efecto”), cuyo dominio fuente es la acción física de asir algo que está situado sobre otra cosa y elevarlo por encima de ésta. El castigo o la prohibición se conceptualizan como un objeto pesado que impide la movilidad (cf. pesar a alg. algo como una losa, quitarse alg. un peso de encima). La evolución semántica del sustantivo admite, pues, los verbos anteriores como colocados y permite, por tanto, un movimiento interpretativo que va de lo físico (marco cognitivo-dominio fuente) a lo abstracto (marco cognitivo-dominio meta): suspender (= ‘dejar sin efecto/quitar’) una prohibición o una sanción es suspender (= ‘asir y elevar/quitar’) el objeto que impide o entorpece la movilidad. Otro ejemplo de especialización metafórica lo hallamos en colocaciones como atacar posiciones, desarmar una teoría, palabras hirientes, lucha dialéctica, razonamiento débil, cuyo dominio fuente sería “Discutir es luchar”5. Precisamente, muchos dobletes fraseológicos se deben a la especialización de carácter metafórico (o metonímico). Nos referimos a UFS que constituyen colocaciones y locuciones a la vez, como meter un gol, tragar saliva o abrir una brecha, debido “a la metaforización de sus vínculos colocacionales correspondientes” (Koike, 2000: 32). La explicación habría que buscarla más bien en el paso de un esquema/escenario cognitivo fuente a un dominio meta totalmente distinto. Así, cuando meter un gol se emplea en el registro deportivo para referirse a la acción de “meter la pelota en la portería y marcar así un tanto en un partido de fútbol” estamos ante una colocación: Gullit metió su primer gol desde el Mundial. El jugador holandés del Milán consiguió ayer contra el Nápoles, en un partido que acabó 1-1, su primer tanto desde el Mundial de Italia (CVB6).

Pero, cuando dicha colocación se extrae de su “hábitat” natural para emplearse en un marco cognitivo distinto, se idiomatiza y adquiere un significado propio, unitario y figurativo, similar a otras locuciones que denotan la acción de engañar (dar a alg. gato por libre, meter a alg. la bacalada, llevarse a alg. al huerto, metérsela a alg. doblada, etc.). El siguiente fragmento, extraído también del corpus CVB, reproduce un fragmento de entrevista radiofónica a Jesús Gil, en calidad de alcalde de Marbella:

5 Conviene tener en cuenta que gran parte de las estructuras cognitivas metafóricas del español son herencia del latín, por lo que no queda del todo claro cuándo se trata de usos figurativos y cuándo no. 6 CVB son las siglas que emplearemos para referirnos al corpus Vox-Biblograf.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 72

72

Capítulo II

– Llevo el urbanismo; todo, aviso, ¡todo el urbanismo! Si me equivoco... si hay algo raro, yo solo. No paso una, porque ellos me han querido colocar en el pleno siete temas muy raritos... – Claro, pues entonces me estás... Jesús, ¡me estás dando la razón!, en lo que le vengo diciendo desde hace muchas semanas, [...] que se ha rodeao de una panda que le está metiendo goles.

La última característica que señalábamos más arriba como propia de las unidades fraseológicas es la variación, entendida como variante lingüística y manipulación discursiva. Las colocaciones pueden presentar variación diasistemática: pegarse un susto, darse un susto y llevarse un susto son variantes sinonímicas, la primera de connotaciones coloquiales, frente a las otras dos, de carácter neutro. Lo mismo se puede decir con referencia a hacer una pregunta, que pertenece al estilo neutro, frente a formular una pregunta, propia del estilo elevado por su connotación formal. Las variantes diatópicas dan cuenta de la variación transnacional o dialectal. Por ejemplo, en español peninsular se prefiere el verbo dar como colocativo de opinión, mientras que la variedad chilena utiliza entregar una opinión (Koike, 2000). Así mismo, la colocación peninsular riostrar la andana cuenta con una variante andaluza que conserva la forma arcaizante del verbo: arriostrar7. Los estudios sobre los lenguajes de especialidad han puesto de relieve la importancia de las colocaciones como elementos caracterizadores de un registro determinado. Por ejemplo, las colocaciones de la palabra expediente con verbos como incoar, instruir, tramitar o archivar “declaran” abiertamente su pertenencia al registro jurídico y, dentro de éste, al ámbito judicial. La “banalización terminológica”, propia de la comunicación semiespecializada y divulgativa, no invalida, sin embargo, lo dicho, pues su punto de partida es, precisamente, el discurso especializado: Los periódicos recibieron la consigna de no publicar fotografías del filósofo [=Ortega y Gasset] vivo, aunque sí se permitió la difusión de imágenes de la máscara funeraria o de la capilla ardiente... Estas consignas estaban controladas con extrema minuciosidad. Idea de ello nos da, por ejemplo, el expediente incoado a Manuel Fernández Arenal, director del Diario Regional de Valladolid en marzo de 1963 (CVB).

Por otro lado, toda unidad pluriverbal institucionalizada y, hasta cierto punto, “prefabricada” presenta cierta propensión a ser manipulada y modificada por los

7 Arriostrar: “tr. Asegurar , en una bodega, calzándola. [VAV; DRAE: riostrar]” (TLDHA).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 73

Apuntes para el estudio de la colocación

73

hablantes en el discurso. El siguiente fragmento reproduce el titular y el primer párrafo de una columna de opinión, aparecida recientemente en un periódico de tirada nacional. A JUEZ CADUCO, FALLO GARRAFAL Otra sentencia indulgente con un violador ha venido a recordarnos el poso de machismo recalcitrante que sigue quedando en algunos jueces. La Audiencia de Barcelona ha condenado a una pena mínima de seis años de cárcel a un policía que violó a una menor. El tribunal no consideró especialmente vulnerable a la víctima, de 13 años, porque tenía ‘experiencia sexual plena’, o sea, porque no era virgen: tal como si Calderón hubiera resucitado de su tumba para poner la afrenta en su justo término (El Mundo, 06/04/2001, pág. 3).

Para empezar, el titular del artículo (“A juez caduco, fallo garrafal”) sigue el esquema sintáctico propio de algunas paremias bimembres, como A lo hecho, pecho; Al mal tiempo, buena cara y A grandes males, grandes remedios. En segundo lugar, inserta la colocación “fallo garrafal” con función introductoria y referencia necesariamente catafórica. La primera lectura de la colocación es “gran error”, de acuerdo con el empleo más frecuente de dicha combinación. Así lo revelan las concordancias extraídas del CVB para garrafal y garrafales: ... inhibición absoluta que le condujese a la más garrafal ignorancia de toda problemática social y... ... nchez, minuto 60). Gol: 0-1. Minuto 66: Fallo garrafal de Juan Carlos y Sánchez, de tiro sesgado, ... ... artido es aburrido o el árbitro comete un error garrafal en su trabajo. Las relaciones entre TV3 y... Alfredo cumplió su tarea, pero deslucida por los garrafales errores ante la puerta. El Tenerife que... ... Razones del negativo. Fallos ante el gol. Los garrafales errores cometidos por los delanteros...

La palabra garrafal se coloca con error (3) y con fallo (2), en su acepción de ‘error’8. Solo después de haber leído el párrafo introductorio se cae en la cuenta de la doble lectura intencionada a la que nos dirige el autor: el fallo es un fallo

8

Nótese la colocación concatenada cometer un error garrafal. Por otra parte, la colocación con ignorancia podría ser una modificación creativa, un hapax legomena o, simplemente, un error.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 74

74

Capítulo II

garrafal. Dicho en otras palabras, esa resolución judicial es un grave error, en tanto sentencia injusta que deja ver la naturaleza machista y trasnochada de la clase de jueces que las dictan. Llegados a este punto, y habiendo mostrado la naturaleza fraseológica de las colocaciones, vamos a ofrecer dos definiciones9 que nos permitirán recordar las propiedades y características particulares de este tipo de UF. Kollokationen sind sachgerechte, grammatisch einwandfreie, einzelsprachlich typische, relevante, spezifische, usuelle, stabile und somit reproduzierbare Kombinationen, die entsprechende typische Sachverhalte, Objekte und Erscheinungen der Realität bezeichnen10 (Írsula Peña, 1994: 50). De las nociones fundamentales que cubre el término colocación, entendemos por colocación aquella propiedad de las lenguas por las que los hablantes tienden a producir ciertas combinaciones de palabras de entre una gran cantidad de combinaciones teóricamente posibles (cf. Haensch et al., 1982: 251). También denominaremos colocación a las combinaciones así resultantes, es decir, a las unidades fraseológicas formadas por dos unidades léxicas en relación sintáctica, que no constituyen, por sí mismas, actos de habla ni enunciados; y que, debido a su fijación en la norma, presentan restricciones de combinación establecidas por el uso, generalmente de base semántica: el colocado autónomo semánticamente (la base) no sólo determina la elección del colocativo, sino que, además, selecciona en éste una acepción especial, frecuentemente de carácter abstracto o figurativo (Corpas Pastor, 1996: 66).

Las dos definiciones que acabamos de ofrecer acentúan las características esenciales de la colocaciones en cuanto combinaciones de palabras estables, usuales e institucionalizadas, típicas de una lengua dada y construidas según las reglas del sistema de dicha lengua, cuya “tipicidad” o “tradicionalidad”, sancionada por la comunidad hablante, determina su restricción combinatoria característica. Precisamente, los dos enfoques básicos del estudio colocacional tienen como objetivo principal llegar a captar la estabilidad y la institucionalización

9

Alonso Ramos (1994-1995) trata las distintas concepciones de colocación desde los comienzos de la escuela sistémica hasta las últimas aportaciones de la Teoría Sentido-Texto. Castillo Carballo (1998), por su parte, se ocupa de la evolución del término colocación en la filología española. Koike (2000: 5-17) ofrece el estado de la cuestión de forma cronológica, teniendo en cuenta, además, las aportaciones japonesas de Kunihiro y Shirota. 10 “Las colocaciones de una lengua son combinaciones perfectamente gramaticales, típicas, relevantes, específicas, usuales, estables y, por ello, reproducibles, que designan los correspondientes estados, objetos y fenómenos típicos de la realidad circundante” (la traducción es nuestra).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 75

Apuntes para el estudio de la colocación

75

típicas de estas unidades desde posturas distintas, pero, a la postre, complementarias y necesarias. Nos referimos, respectivamente, a los enfoques estadísticos y semánticos de la teoría colocacional. Ambos han proporcionado herramientas de análisis muy importantes para llegar a comprender el fenómeno de la colocación. Los enfoques estadísticos surgieron del entorno neofirthiano. Los autores inmersos en esta corriente siguen el postulado básico de Firth (1968: 99): “Collocation states the habitual company a key-word keeps”11. Dado que se trataba de averiguar, en primer lugar, qué combinaciones (o coapariciones) eran frecuentes y, por tanto usuales, en una lengua dada, había que compilar corpus de lengua natural que permitiesen extraer tales combinaciones (cf. Sinclair, 1991). Se introducen así las nociones de núcleo, esto es, la palabra cuyo patrón colocacional se está analizando, y colocados, a saber, las palabras que se combinan con dicho núcleo. Núcleo y colocado no presentan diferencias de estatus. El único requisto básico es que ambos elementos estén relacionados sintácticamente. Quedan descartadas, pues, secuencias muy frecuentes como *although he (‘aunque él’) y *hall to (‘vestíbulo que da a’) (Kjellmer, 1982). La herramienta de análisis básica es la línea de concordancia o key word in context (KWIC), como las líneas que hemos utilizado para averiguar las colocaciones típicas con garrafal en el CVB. Puesto que la colocación no es un fenómeno lineal, posteriormente fue necesario introducir otras nociones básicas: la distancia colocacional (collocational span), es decir, el número de palabras, a derecha e izquierda, que separan el colocado del núcleo; y el patrón colocacional o extensión colocacional de un núcleo (collocational range), a saber, el conjunto de palabras con el que éste se coloca según la distancia colocacional que se haya establecido previamente. Se empezó a investigar la densidad colocacional de los textos y se hicieron distinciones entre colocaciones dependientes e independientes, y entre colocaciones descendentes y ascendentes (Sinclair, 1987: 326) Tales distinciones no suponían un replanteamiento de la postura aséptica y novedosa que defendían dichos autores, ya que en ningún momento se plantea la determinación semántica de algún miembro de la colocación. En realidad, lo único que se estaba haciendo era refinar el nivel colocacional para el análisis semántico de las palabras (núcleos) en contexto. Según Firth (1957: 196), la tendencia de las palabras a aparecer juntas forma parte del significado de las mismas. Por esta razón, la posible ambigüedad semántica de una palabra aislada queda resuelta mediante la sintaxis, por un lado, y mediante las colocaciones que ésta presente en un contexto determinado, por el otro. Mediante el énfasis en el análisis sintagmático, se trataba de evitar un error muy común como es la divi-

11 Sobre el término collocation y la noción que éste recubre en la filología de la lengua inglesa, véase Corpas Pastor (1995 y 1996: 55-58).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 76

76

Capítulo II

sión del significado de una colocación determinada en sememas que luego se atribuían a las palabras individuales. Aunque no se niega la existencia del significado léxico de las palabras, se propone analizar el significado en contexto, es decir, teniendo en cuenta las asociaciones de éstas en el sintagma, de donde proviene gran parte su significado global12. Dicho de otra forma, la escuela sistémica británica sólo se interesaba por la colocabilidad de las palabras en cuanto mecanismo de análisis semántico contextual, no por el tipo de vínculo semántico que pudiera existir entre el núcleo y su(s) colocado(s) en tanto combinación estable13. La extracción automática de colocaciones a partir de corpus extensos ha supuesto un auténtico revulsivo para los estudios teóricos y aplicados de la colocación14. Sin embargo, los enfoques basados en criterios de frecuencia han recibido duras críticas debido a las limitaciones que supone la simple aplicación directa de estadísticas. Esto es, a pesar de la información tan preciada que las líneas de concordancia y otras herramientas informáticas incorporadas en los programas de gestión automática de corpus pueda ofrecer al investigador humano, éste debe cribar los datos de acuerdo con una serie de criterios, generalmente de tipo semántico. Las quejas más frecuentes han sido las siguientes: 1) hay combinaciones muy frecuentes que no presentan un grado de estabilidad suficiente para ser consideradas colocaciones15; 2) hay colocaciones muy estables cuyos colocados son palabras poco frecuentes, por lo que no aparecen en un corpus dado; 3) hay colocaciones cuyos elementos aparecen muy distanciados en el discurso, por lo que no pueden ser extraídos de forma automática16; 4) la fre-

12 En este sentido, la concepción sistémica del significado se asemeja a la de Wittgenstein (1968: 80) cuando éste dice “the meaning of a word is its use in the language”. 13 Sobre la evolución léxico-semántica del nuevo contextualismo británico, véase la noción de unidad de significado (unit of meaning) propuesta por Sinclair (2000). La lingüística del corpus sirve de base para una caracterización global del núcleo mediante cuatro categorías básicas (colocación, coligación, preferencia semántica y prosodia semántica), que ponen en tela de juicio el concepto tradicional de unidad lingüística. 14 El enfoque estadístico de la colocación ha influido posteriormente en el campo aplicado de la lexicografía. A Dictionary of English Collocations (Kjellmer, 1994) y COBUILDEnglish Collocations on CD-ROM son dos diccionarios de colocaciones para la lengua inglesa que han utilizado el criterio de frecuencia aplicado a un corpus. 15 Téngase en cuenta, sin embargo, que esta crítica se aplica más bien al estudio de las colocaciones de la lengua general, ya que la frecuencia es uno de los criterios básicos para el reconocimiento de las colocaciones terminológicas. De hecho, los enfoques estadísticos y semánticos se reconcilian y complementan claramente a la hora de caracterizar de los lenguajes de especialidad. 16 La estructura sintáctica, pues, no siempre coincide con la colocacional. Tanto es así que dos colocados pueden aparecer separados a gran distancia, lo cual impediría su extracción automática mediante los programas de concordancias que se emplean actualmente.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 77

Apuntes para el estudio de la colocación

77

cuencia estadística no puede dar cuenta de la prominencia cognitiva17 (distinctiveness o salience) de algunas colocaciones muy establecidas y típicas de una lengua; 5) los programas de gestión de corpus no están diseñados para detectar colocaciones en el nivel lexemático, sólo en el nivel de la palabra gráfica (word form); 6) el enfoque estadístico no dispone de instrumentos para el análisis semántico de una determinada colocación; y 7) en ciertos casos, además, el vínculo colocacional existente entre dos lexemas concretos es heredado por todo un sintagma, que puede contener una palabra con el mismo significado léxico pero con distinta categoría gramatical o bien apuntar hacia un colocado que, sin embargo, se ha elidido en el discurso18. Como ya se ha dicho, la corriente estadística asimila la noción de colocación a la mera coaparición significativa de unidades léxicas en el discurso. Esto es, identifica colocación con combinación. Por el contrario, la corriente semántica parte de la combinación, pero tiene en cuenta otros elementos de juicio a la hora de identificar secuencias de palabras que constituyen colocaciones en una lengua dada. En primer lugar, se considera que existe cierta determinación semántica entre la base (el elemento semánticamente independiente) y su colocativo (el elemento cuyo significado está condicionado por el de su base). Las teorías semánticas de la colocación tienen en F. J. Hausmann (1979, 1981, 1989, 1998, etc.) a su principal valedor. Sus trabajos han tenido una enorme influencia en la lexicografía19. Además de señalar la relación de dependencia semántica entre la base (palabra autosemántica) y el colocativo (palabra sinsemántica), el autor aportó una primera clasificación general de los principales tipos de colocaciones que existen en virtud de las categorías gramaticales de los colocados que intervienen y las relaciones sintácticas que mantienen entre sí. Las colocaciones presentan, sin duda, algún tipo de vínculo semántico interno. Ya hemos señalado aspectos como la especialización, la delexicalización o la metaforización de los colocados. En cuanto a la independencia semántica de la base con respecto al colocado es un hecho sobre el cual todos los autores parecen

17 Esto es, el grado de lexicalización, prominencia, memorabilidad, disponibilidad, etc., de una determinada colocación. 18 En el primer caso estamos ante colocaciones encubiertas, como pagar una deuda/pagar lo que uno debe, y en el segundo caso, ante colocaciones elípticas, del tipo descartar la posibilidad [de que]/descartar [[la posibilidad de] que] (cf. Koike, 2000: 208-210). 19 Dicha taxonomía hizo mella en dos diccionarios de colocaciones, publicados en Polonia, el SEC y el EAC, que recogen colocaciones formadas exclusivamente por palabras léxicas de la lengua inglesa. El LTP, publicado recientemente en Gran Bretaña (Hill y Lewis, 1997), se limita a refundir ambos diccionarios con muy pocos cambios. El BBI, por su parte, tiene en cuenta, además, las relaciones semánticas que se establecen en el seno de una determinada colocación.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 78

78

Capítulo II

estar de acuerdo20. Lo cierto es que la dependencia del colocativo se barrunta con cierta claridad en las solidaridades léxicas coserianas. Pero éstos no son los únicos vínculos que pueden existir entre los colocados: Írsula (1994) y Koike (2000) han apuntado otros como son los de verdad, tipicidad y precisión semántica. Esto es, los miembros de las colocaciones reflejan la relación típica, y, por tanto, verdadera que mantienen los colocados en el mundo real. Por ejemplo, cargar una pistola sería colocación, pero lavar u olvidar una pistola no lo sería, pues el sustantivo pistola sólo podría establecer una relación típica en calidad de arma de fuego21. Otro rasgo semántico a tener en cuenta es el de la precisión: las colocaciones expresan un concepto inequívoco para los nativos. Y lo hacen de forma rápida y económica, facilitando enormemente el intercambio conversacional: “Así, en lugar de decir ‘intentar que alguien recuerde una cosa olvidada’, un nativo del español emplea la colocación refrescarle la memoria” (Koike, 2000: 280). En un intento por sistematizar todos los vínculos semánticos que se pueden establecer en el seno de una combinación de palabras, y desde una perspectiva combinatoria amplia, surgen las funciones léxicas de la teoría Sentido-Texto de Mel’cËuk y colaboradores. Las funciones léxicas pretenden describir la coaparición restringida de palabras, así como los fenómenos de derivación. Aquí las nociones de base y colocativo se equiparan a las de llave (la palabra a la cual se le aplica una determinada función léxica) y valor (la(s) palabra(s) resultante(s)). Por ejemplo, aplicando la función léxica Real1 a la llave promesa se obtiene el valor cumplir22. Llegados a este punto, quisiéramos concluir este trabajo no sin antes ofrecer, a modo de epílogo, algunas de las ideas básicas que lo han vertebrado. Tanto la fraseología como una posible disciplina “combinatoria” o “sintagmática” pueden

20

Cowie (1981), por ejemplo, reconoce tal dependencia cuando utiliza los criterios de idiomaticidad y restricción combinatoria para establecer su escala gradual de unidades fraseológicas. Dice el autor que la colocación es una unidad compuesta que permite la sustitución de uno de sus elementos sin que ello afecte al significado, especializado en ese contexto, del otro. Pone el ejemplo de run a business, donde run, el colocativo, adquiere el significado de ‘be in charge of’, cuando se combina con bases que denotan negocios, actividad comercial o empresa, como business, theatre, restaurant, bus company etc. La sustitución sin cambio semántico queda limitada, pues, a esta clase semántica de sustantivos. 21 Cf. cargar [...] “3 b) Introducir el cartucho o el proyectil en la recámara o el cañón [de un arma de fuego (cd)]” [DEA]. 22 Alonso Ramos (1993) sigue constituyendo la aplicación más completa de la teoría Sentido-Texto al español. Írsula Peña (1994), por su parte, ilustra abundantemente las múltiples posibilidades que ofrecen las funciones léxicas para dar cuenta de los vínculos semánticos internos de las colocaciones. La teoría Sentido-Texto ha tenido una aplicación lexicográfica en la forma de un diccionario experimental para el francés, el DEC, a cargo del mismo equipo que dirige Mel’cËuk.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 79

Apuntes para el estudio de la colocación

79

reclamar perfectamente esta parcela del saber lingüístico como objeto de estudio propio. En cualquier caso, el fenómeno léxico de la colocabilidad es un tipo de restricción combinatoria en el plano sintagmático. Las colocaciones, en tanto realizaciones concretas de las posibilidades restringidas de combinación de las unidades léxicas de una lengua, entrarían a formar parte también de la “combinatoria”. E, igualmente, por sus rasgos definitorios, las colocaciones constituyen unidades fraseológicas de pleno derecho. En definitiva, las colocaciones son de una “triple” naturaleza, en tanto propiedad y combinación resultante, por un lado, y en tanto unidad fraseológica, por el otro. Su carácter polivalente ha propiciado el desarrollo de dos enfoques contrarios, pero complementarios, el estadístico y el semántico, los cuales se han visto reflejados, a su vez, en la distinta organización y selección interna de los diccionarios de colocaciones que existen actualmente en el mercado.

Referencias bibliográficas ALEXANDROVA, O., y TER-MINASOVA, S. (1987): English Syntax (Collocation, Colligation and Discourse). Moscú: Universidad de Moscú. — (1993): Las funciones léxicas en el modelo lexicográfico de I. Mel’cËuk, Tesis doctoral. Madrid: Universidad Nacional de Educación a Distancia. ALONSO RAMOS, M. (1994-1995): “Hacia una definición del concepto de colocación: de J. R. Firth a I. A. Mel’cËuk”, en: Revista de Lexicografía I, 9-28. ALVAR EZQUERRA, M. (Ed.) (2000): Tesoro léxico de las hablas andaluzas. Madrid: Arco/Libros [TLDHA]. BALLY, C. (1951 [1909]): Traité de stylistique française. Vol. I. 3ª ed. París: Librarie Klincksieck. BENSON, M.; BENSON, E., y ILSON, R. (1986 [1977]): The BBI Dictionary of English Word Combinations. Ed. Revisada. Amsterdam, Filadelfia: John Benjamins. [BBI] CHOUEKA, Y.; KLEIN, T., y NEUWITZ, E. (1983): “Automatic Retrieval of Frequent Idiomatic and Collocational Expressions in a Large Corpus”, en: ALLC Journal 4 (1), 3438. COBUILD-English Collocations on CD-ROM. Londres, Glasgow: HarperCollins. CORPAS PASTOR, G. (1994): “Almacenamiento de estructuras léxicas en nativos ingleses”, en: L. MORA (Ed.): Investigaciones filológicas anglo-norteamericanas: Actas del I Congreso de lengua y literatura anglo-norteamericana (Colección Estudios 25). Ediciones de la Universidad de Castilla-La Mancha, 69-73. — (1995): Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español. Tesis doctoral (Universidad Complutense de Madrid, 1994). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad. (Edición en microfichas). — (1996): Manual de fraseología española (Biblioteca Románica Hispánica, Manuales, 76). Madrid: Gredos.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 80

80

Capítulo II

— (1998a.) “Criterios generales de clasificación del universo fraseológico de las lenguas, con ejemplos tomados del español y del inglés”, en: ALVAR EZQUERRA, M., y CORPAS PASTOR, G. (1998): Diccionarios, frases, palabras. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 157-187. — (1998b): “Expresións fraseolóxicas e colocacións”, en: FERRO RUIBAL, X. (coord.): 31-61. — (2001): “Corrientes actuales de la investigación fraseológica en Europa”, Euskera. 1, 21-49. COSERIU, E. (1966): “Structure lexicale et enseignement du vocabulaire”, en: Actes du premier colloque international de linguistique appliquée, 175-217. — (1986[1977]): Principios de semántica estructural. Madrid: Gredos. COWIE, A. P. (1981): “The Treatment of Collocations and Idioms in Learner’s Dictionaries”, Applied Linguistics 2 (3), 223-235. / DZIERZANOWSKA, H., y KOZLOWSKA , C.D. (1982): Selected English Collocations. Varsovia: Panstwowe Wydawnictwo Naukowe. [SEC] FEDERICI, S.; MONTEMAGNI, S., y PIRRELLI, V. (2000): “Analogy-Based Automatic Acquisition of Phraseology”, en: G. CORPAS PASTOR (Ed.): Las lenguas de Europa: Estudios de fraseología, fraseografía y traducción (Interlingua 12). Granada: Comares, 39-74. FERRO RUIBAL, X. (Coord.) (1998): Actas do I Coloquio Galego de Fraseoloxía, 15-18 de septiembre de 1997. Centro de Investigacións Lingüísticas e Literarias Ramón Piñeiro, Xunta de Galicia. FIRTH, J. R. (1957): Papers in Linguistics 1934-1951. Londres: Oxford University Press. — (1968): “Linguistic Analysis as a Study of Meaning”, en: PALMER, F. R. (Ed.): Selected Papers of J. R. Firth 1952-59. Harlow, Londres: Longmans, 12-26. GREENBAUM, S. (1974): “Some verb-intensifier collocations in American and British English”, American Speech 49 (1-2), 79-89. HAUSMANN, F.J. (1979): “Un dictionnaire des collocations est-il possible?”, Travaux de Linguistique et de Litterature 17 (1), 187-195. — (1989): “Le dictionnaire de collocations”, en: HAUSMANN, F. J. et al. (Eds.): 1000-1019. HAUSMANN, F. J.; REICHMANN, O.; WIEGAND, H. E., y ZGUSTA, L. (Eds.) (1989): Wörterbücher. Dictionaries. Dictionnaires. Ein internationals Handbuch zur Lexikographie. An International Encyclopedia of Lexicography. Encyclopédie internationale de lexicographie, Vol. I. Berlín/Nueva York, Walter de Gruyter. HILL, J., y LEWIS, M. (Eds.) (1997): LTP Dictionary of Selected Collocations. Hove: Language Teaching Publications. [LTP] HOTOPF, W. H. N. (1983): “Lexical Slips of the Pen and the Tongue: What They Tell Us About Language Production”, en: BUTTERWORTH, B. (Ed.): Language Production. Development, Writing and Other Language Processes. Vol. II. Londres, Nueva York: Academic Press, 147-199. ÍRSULA PEÑA, J. (1994): Substantiv-Verb-Kollokationen. Kontrastive Untersuchungen Deutsch-Spanisch. Frankfurt am Main, Berlín, Berna, Nueva York, París, Viena: Peter Lang. JONES, S., y SINCLAIR, J. M. (1974): “English Lexical Collocations. A Study in Computational Linguistics”, en : Cahiers de Lexicology 24, 15-61.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 81

Apuntes para el estudio de la colocación

81

KJELLMER, G. (1982): “Some Problems Relating to the Study of Collocations in the Brown Corpus”, en: S. JOHANSSON (Ed.): Computer Corpora in English Language Research. Bergen: Norwegian Computing Centre for the Humanities, 25-33. — (Ed.). (1994): A Dictionary of English Collocations. Based on the Brown Corpus. 3 vols. Oxford: Clarendon Press. KOIKE, K. (2000): Colocaciones léxicas en el español actual: análisis formal y léxicosemántico. Tesis doctoral. Madrid: Universidad Nacional de Educación a Distancia. / KOZLOWSKA , C. D. (1991): English Adverbial Collocations. Varsovia: Wydawnictwo Naukowe [EAC]. MEL’CËUK, I. (1973): “Towards a Linguistic ‘Meaning Text’ Model”, en: F. KIEFER (Ed.) (1973): Trends in Soviet Theoretical Linguistics. Vol. XVIII. Dordrecht: Reidel, 33-57. MEL’CËUK, I., y ZËOLKOVSKIJ, A. K. (1970): “Towards a Functioning Meaning-Text Model of Language”, en: Linguistics 57, 10-47. MEL’CU Ë K, I.; ARBATCHEWSKY-JUMAIRE, N.; ELNITSKY, L.; IORDANSKAJA, L., y LESSARD, A. (1984): Dictionnaire explicatif et combinatoire du français contemporain. Recherches lexico-sémantiques I. Montreal: Les Presses de l’Université de Montreal [DEC]. MEL’CU Ë K, I.; ARBATCHEWSKY-JUMAIRE, N.; DAGENAIS, L.; ELNITSKY, L.; IORDANSKAJA, L.; LEFEBVRE, M. N., y MANTHA, S. (1988): Dictionnaire explicatif et combinatoire du français contemporain. Recherches lexico-sémantiques II. Montreal: Les Presses de l’Université de Montreal [DEC]. MEL’CU Ë K, I.; ARBATCHEWSKY-JUMAIRE, N., y IORDANSKAJA, L. (1992): Dictionnaire explicatif et combinatoire du français contemporain. Recherches lexico-sémantiques III. Montreal: Les Presses de l’Université de Montreal [DEC]. MIEDER, W. (1989): “Das Sprichwörterbuch”, en: F. J. HAUSMANN et al. (Eds.): 10331044. PAUL, H. (1960 [1880]): Prinzipien der Sprachgeschichte. 5.ª ed. Halle (Saale). PORZIG, W. (1950): Das Wunder der Sprache. Berna: Francke. SCHEMANN, H. (1989): “Das phraseologische Wörterbuch”, en: HAUSMANN, F. J. et al. (Eds.): 1019-1032. SECO, M.; ANDRÉS, O., y RAMOS, G. (1999): Diccionario del español actual. Madrid: Aguilar. [DEA] SINCLAIR, J. M. (1991): Corpus, Concordance, Collocation. Oxford, Nueva York: Oxford University Press. WITTGENSTEIN, L. (1968): Philosophical Investigations. Oxford: Blackwell. ZULUAGA OSPINA, A. (1980): Introducción al estudio de las expresiones fijas (Studia Romanica et Linguistica, 10). Frankfurt-am-Main, Berna, Cirencester: Peter Lang.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 83

CAPÍTULO III EL USO DE PAREMIAS EN UN CORPUS DEL ESPAÑOL PENINSULAR ACTUAL*

1. Introducción La mayoría de los estudios sobre fraseología adolecen de un mismo defecto: la falta de una base descriptiva sólida que permita dilucidar aspectos tan importantes como la frecuencia de uso de este tipo de unidades en el discurso, sus funciones textuales y su carga ideológica dentro de una comunidad determinada. El caso de las paremias es, quizá, uno de los más llamativos a este respecto. De ocupar el centro de la investigación fraseológica a comienzos de este siglo, pasaron a convertirse en las parientes pobres de estos estudios a mediados de los cincuenta. Desde entonces se ha venido cuestionando su pertenencia a la fraseología, así como su vigencia en la lengua diaria y en la literatura. Algunos autores se han atrevido, incluso, a proclamar la defenestración de los refranes, dichos, citas y demás paremias. En opinión de Fernando Lázaro Carreter (1980: 213) estamos asistiendo a “la rápida desaparición del Refranero en nuestra actual conciencia colectiva”. Afirmaciones como ésa resultan, cuanto menos, bastante arriesgadas, dado que, en realidad, no existen estudios descriptivos fiables que nos permitan comprobar si las paremias han caído en desuso, o si, por el contrario, siguen gozando de buena salud. El objetivo de este trabajo será, precisamente, determinar la vigencia de estas unidades en la lengua de hoy día. Con este fin, haremos un breve repaso por las fluctuaciones de uso que estas unidades han experimentado a lo largo de la historia. A continuación, situaremos las paremias dentro del sistema fraseológico del español. Y, finalmente, analizaremos un corpus computerizado de diez millones de palabras de español actual, deteniéndonos en aspectos de frecuencia, lematización y funciones discursivas y textuales de estas unidades. 2. El gusto por las paremias La lengua española dispone de distintos repertorios de refranes, adagios, eslóganes, aforismos, citas, etc., que dan fe del interés que siempre han suscitado las

* El presente trabajo ha sido subvencionado por la Fundación Caja de Madrid (becas de investigación posdoctorales, área de Filología Española).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 84

84

Capítulo III

paremias. No obstante, conviene recordar que no se trata de un interés constante, ya que éste ha dependido continuamente de los gustos cambiantes de cada época1. Las primeras compilaciones de refranes vieron la luz durante los siglos XIII y XIV, A partir de entonces, se inicia un movimiento ascendente que culmina en el siglo XVI, sin duda, la época de mayor apogeo paremiológico. Baste mencionar los Refranes que dicen las viejas tras el fuego del Marqués de Santillana, obra elaborada a finales del s. XIV y publicada por primera vez en 1508, así como las colecciones de Pedro de Valles (1549), Hernán Núnez (1555), Juan de Mal Lara (1568) o Lorenzo Palmireno (1569). El gusto por los refranes se da hasta bien entrado el siglo XVII, como atestiguan las compilaciones paremiológicas de Sorapán de Rieros (1616) y Gonzalo de Correas (1627), entre otros. Tanto los autores medievales, caso del Arcipreste de Hita, don Juan Manuel o Fernando de Rojas, como los grandes escritores del Siglo de Oro (Blasco de Garay, Lope de Vega, Cervantes, etc.) cultivaron la inclusión de abundantes paremias en sus creaciones literarias. Pero la introducción en España de las grandes corrientes ideológicas provenientes de Europa supuso el comienzo del declive en las postrimerías del siglo XVI. El pensamiento humanista, de carácter abierto y crítico, no casaba bien con las creencias y ritos tradicionales que encarnan los refranes “populares” dentro de una determinada comunidad hablante, a diferencia de las paremias “cultas”, como es el caso de los denominados apotegmas, aforismos y sentencias. En el siglo XVII, por ejemplo, Baltasar Gracián criticaba duramente el uso de refranes; mientras que en el XVIII, en pleno auge de la Ilustración, el Padre Feijoo se pronunció en contra de la pretendida sabiduría tradicional de los refranes, señalando los errores que éstos contienen, en un ambiente intelectual y cultural marcado –al igual que ocurría en el resto de los países europeos– por los valores universales, el clasicismo y el gusto francés. Como consecuencia de esta censura ideológica, los refranes y demás paremias consideradas vulgares o populares desaparecen prácticamente de la literatura (salvo contadas excepciones, como Torres Villarroel y el Padre Isla) y disminuye el número de colecciones paremiológicas. El surgimiento del Romanticismo en el primer tercio del siglo XIX trajo consigo la revitalización de estas unidades, gracias a una vuelta a las fuentes y valores nacionales. Las paremias aparecen en la literatura costumbrista y en la novela realista. Al mismo tiempo, comienza una incesante actividad paremiológica. Las

1 Sobre este tema, véase la monografía de Louis Combet (1971) y el “Prólogo” al Refranero español de Juan Manuel Oliver (1983).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 85

El uso de paremias en un corpus del español

85

compilaciones aumentan en cantidad y calidad, siendo el Refranero general español de José María Sbarbi (1980 [1874-1878]) uno de los trabajos más emblemáticos de la época. En esta misma línea siguen las compilaciones aparecidas posteriormente, como las de Francisco Rodríguez Marín (fechadas desde 1895 a 1941), Julio Cejador (1928-1929) o Luis Martínez Kleiser (1928, 1945 y 1986 [1953]). Pero, a mediados del siglo XX, el interés por las paremias vuelve a decaer en España. Aunque siguen apareciendo numerosas compilaciones –Juan Manuel Oliver (1983) lista más de veinte–, la mayoría de ellas mezclan paremias con locuciones y fórmulas rutinarias, leyendas, rimas, adivinanzas, trabalenguas, etc., de forma indiscriminada. Según Combet (1971: 299-300), el declive se deja sentir en toda Europa, cuyas generaciones más jóvenes apenas usan refranes, y donde el empleo de estas unidades se empieza a percibir como marca de retraso cultural y de inferioridad social. Tal situación se refleja, así mismo, en las producciones literarias. En palabras del autor, “dans la plupart des pays européens, 1’usage proverbial littéraire ou quotidien est en nette régression à notre époque” (pág. 299). A pesar de afirmaciones como ésta, lo cierto es que el interés por las paremias sigue vivo en nuestros días. En la década de los noventa florecen los repertorios paremiológicos, entre los cuales destacan los de Juan B. Bergua (1992), Luis Junceda (1995) y Mauro Fernández (1994); además de las colecciones de unidades fraseológicas en las que se recogen refranes, como las de Eva Espinel Padura (1991), Margarita Candot y Elena Bonnet (1994 [1993]) y Gregorio Doval (1995). La fraseología, como disciplina lingüística, vuelve a interesarse por las paremias, aunque ahora se hace especial hincapié en las relaciones de éstas con otras unidades fraseológicas, y se analizan sus aspectos semánticos, comunicativos y psicolingüísticos, sus funciones textuales y discursivas, así como su tratamiento lexicográfico2. La filología española, por su parte, no ha permanecido ajena a tales avances, como demuestran los trabajos realizados por Mario García-Page Sánchez (1993), Gloria Corpas Pastor (1996, capítulos 4 y 6) o Juan Martínez Marín (1996, capítulos 5 y 6), entre otros. Ahora bien, el interés que el tema ha despertado a nivel teórico no se corresponde con la aparición de estudios descriptivos de envergadura acerca de la pervivencia y función de tales unidades en la lengua. Por el momento se carece de

2 Véanse, por ejemplo, los trabajos de Pierre J. L. Arnaud (1991, 1992), Ana C. M. Lopes (1991), Peter Gryzbek (1992), Wolfgang Mieder (1992), Pierre J. L. Arnaud y Rosamund Moon (1993), así como los trabajos sobre el tema en el volumen editado por Bárbara Sandig (1994).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 86

86

Capítulo III

datos fiables que permitan corroborar –o refutar– las tesis de Louis Combet y Fernando Lázaro Carreter acerca de la supuesta desaparición de las paremias en el español de hoy. 3. Aplicaciones de la lingüística del corpus al estudio de las paremias en contexto Una reflexión seria acerca del emplazamiento y función de las paremias en la lengua debe comenzar por el análisis empírico de estas unidades fraseológicas en contexto, teniendo en cuenta los datos fiables que sólo un estudio a gran escala es capaz de aportar. Como propone Neil R. Norrick (1985: 169), en lugar de aferrarse a una especie de lamento apocalíptico por la desaparición del refranero, conviene más bien aumentar la cantidad y la calidad de los materiales empleados para el análisis. Para paliar en parte la ausencia de trabajos empíricos en este campo, proponemos echar mano de los recursos que pone a nuestra disposición la lingüística del corpus. Se trata de una disciplina relativamente joven que está teniendo una repercusión sin precedentes en áreas tales como la descripción lingüística, la enseñanza de idiomas, la lexicografía, el procesamiento del lenguaje natural o la ingeniería lingüística. El uso de corpus electrónicos ha demostrado que las intuiciones de los hablantes sobre su propia lengua no siempre son acertadas, y que los métodos de análisis introspectivos a menudo resultan en descripciones bastante alejadas de la realidad (véase John Sinclair, 1993). 3.1. DESCRIPCIÓN DEL CORPUS UTILIZADO Para el presente estudio vamos a analizar un corpus de español peninsular que, en la actualidad, consta de unos diez millones de palabras: el corpus Vox-Bibliograf (CVB). Se trata de un corpus de referencia3 que no incorpora documentos enteros, sino fragmentos de textos, ya que el interés no reside en el texto en sí, sino en el estadio de lengua representado.

3

Para una descripción pormenorizada del CVB, véase el trabajo de Manuel Alvar Ezquerra, María José Blanco Rodríguez y Fernando Pérez Lagos (1994). Aunque en un primer momento se diseñó un corpus textual, durante su compilación se optó por incluir documentos enteros únicamente cuando éstos no fueran excesivamente largos (como, por ejemplo, las conversaciones y las emisiones radiofónicas cortas o los artículos de periódico) e incorporar fragmentos representativos de aquellos documentos más extensos (caso de las novelas o los programas de televisión de larga duración).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 87

El uso de paremias en un corpus del español

87

En cuanto a los límites del corpus, el CVB comprende textos publicados desde 1950 en adelante (preferentemente los más recientes) con objeto de conseguir un equilibrio entre modernidad y calidad. Los documentos incorporados se restringen a la norma culta peninsular, prescindiendo de las demás variedades diatópicas del español, de forma que se salvaguarda la fiabilidad y representatividad del estado de lengua reflejado. Este corpus pretende ser representativo de la lengua común y general, de ahí que no sobresalga ningún género literario en particular y ningún estilo o forma de hablar fácilmente identificables. Los documentos son, pues, heterogéneos y representativos de tantos niveles de lengua como ha sido posible, pero siempre dentro de la homogeneidad deseada. Para la elección de fuentes se ha empleado un método de selección aleatoria de acuerdo con las características discursivas primarias de los textos, siguiendo muy de cerca la composición del corpus COBUILD de la Universidad de Birmingham4. El CVB consta de un componente escrito y otro oral a partes iguales. Aunque no se especifican las directrices seguidas para determinar la proporción de tipos de textos incluidos, las principales categorías del componente escrito son no ficción (35%), ficción (35%), periódicos y revistas (25%), folletos (2,5%) y cartas (2,5%). Los textos de ficción se subdividen a su vez en novelas y relatos cortos o cuentos, mientras que los textos de no ficción se clasifican discursivamente en informativos, textos guía, textos argumentales-posicionales, textos narrativos y textos humorísticos. El componente oral comprende cuatro grandes tipos de textos, a saber, conversacionales (25%, se incluyen conversaciones, diálogos y discusiones informales, por teléfono o cara a cara); diálogos o discusiones organizadas (25%); entrevistas (25%) y exposiciones orales individuales (25%). Las tres últimas categorías incluyen documentos provenientes en gran parte de los medios de comunicación, fundamentalmente radio y televisión. 3.2. ANÁLISIS DE LAS PAREMIAS EN EL CVB Al igual que ocurre con el resto de la fraseología, los estudios sobre paremias se suelen servir de los materiales compilados en las distintas colecciones y repertorios existentes. Por lo general, se presta muy poca o ninguna atención al comportamiento real de estas unidades en el discurso, salvo raras excepciones que confirman la regla, como el trabajo de Mathilde Hain (1951) para el alemán.

4 Para una descripción pormenorizada de este corpus, véanse los artículos recogidos en Looking Up, editados en un volumen conjunto por John M. Sinclair (1987).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 88

88

Capítulo III

Incluso en aquellos casos en los que se ha optado por la observación directa de estas unidades en la lengua, los malos resultados obtenidos han obligado a los autores a abandonar esta línea de investigación. Así, en uno de los estudios más representativos de los últimos tiempos, Neal R. Norrick (1985: 6-8), tras analizar dos corpus de inglés hablado, encontró únicamente dos ejemplos en el Corpus of English Conversation de Jan Svartvik y Randolph Quirk, y ninguno en las transcripciones de conversaciones de David Crystal y Derek Davy. El análisis de un pequeño corpus escrito constituido por ejemplares del International Herald Tribune tampoco arrojó mejores resultados: tan sólo se contabilizaron tres unidades en un periodo de nueve meses. De todas formas, ello no debe causar demasiada sorpresa dado que, por un lado, Norrick utilizó corpus de dimensiones muy reducidas; y, por otro lado, se ha comprobado que la frecuencia de uso de unidades fraseológicas en el discurso es relativa, como han puesto de manifiesto Jürgen Strassler (1982: 83) y Rosamund Moon (1992: 492). Otros trabajos más recientes, donde se ha contado con la ayuda de corpus computerizados extensos, han venido a demostrar que las paremias no son tan infrecuentes como cabía suponer a la luz de los anteriores estudios. Pierre Arnaud y Rosamund Moon (1993) destacan la frecuencia de uso de estas unidades, aunque ésta dependa del tipo de texto: mientras que en inglés predominan en los textos de ficción, en francés suelen escasear en las obras literarias consideradas “serias”. Gloria Corpas Pastor (1995a), por su parte, corrobora el uso frecuente de paremias en inglés, y señala, además, las modificaciones formales y las funciones discursivas de dichas unidades. Hasta la fecha, no se han realizado estudios similares para el español. Hemos podido constatar, sin embargo, la presencia importante de paremias en un corpus de citas constituido por más de 2.000 unidades fraseológicas5, fundamentalmente en la prosa periodística y en obras literarias donde se recrea la lengua coloquial (véase Gloria Corpas Pastor, 1995b y 1996). En los apartados que siguen a continuación comprobaremos si se obtienen resultados similares al analizar un corpus computerizado extenso como es el CVB. 3.2.1. Algunas precisiones terminológicas Antes de proceder al análisis propiamente dicho, conviene aclarar algunos aspectos de terminología lingüística. Hasta el momento hemos venido utilizando la

5

Éste corpus, que aparece recogido parcialmente en Gloria Corpas Pastor (1995b), fue compilado durante un periodo de seis años a partir de periódicos y revistas de cobertura local y nacional, así como de novelas y obras de teatro de la variedad peninsular.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 89

El uso de paremias en un corpus del español

89

denominación de paremia junto a las de refrán, sentencia, aforismo y apotegma. En la filología española, paremia ha sido empleado como término abarcador (véase Juan Manuel Oliver, 1983), como sinónimo de refrán6 exclusivamente o bien en sinonimia con otras denominaciones (véase Fernando Lázaro Carreter, 1980: 222; y Juana G. Campos y Ana Barella, 1995 [1993]). Para nuestros propósitos, utilizaremos el término paremia como hiperónimo, en calidad de denominación general y abarcadora. Las paremias son unidades fraseológicas7 capaces de constituir actos de habla por sí mismas y susceptibles de funcionar como enunciados con carácter de texto. Esta clase de unidad fraseológica engloba, a su vez, distintos subtipos que no resultan fáciles de delimitar. Las taxonomías tradicionales8 se han apoyado en consideraciones de muy diversa índole, frecuentemente de carácter diacrónico, etimológico, y semántico. Recientemente, Pierre Arnaud (1991) ha propuesto cinco criterios que, actuando a modo de filtros sucesivos, permiten llegar por eliminación a lo que denomina proverbes (“refranes”): (1) lexicalización, (2) autonomía sintáctica, (3) autonomía textual, (4) valor de verdad general y (5) carácter anónimo. Por definición, toda paremia cumple los tres primeros requisitos; mientras que los dos restantes permiten establecer distintos subtipos. Así, aquellas paremias que no poseen valor de verdad, independientemente de la situación a la cual se aplican, constituyen enunciados de valor específico9. Aquí entrarían gran parte de lo que Casares (1992) denomina “frases proverbiales”, como Si te he visto no me acuerdo o No se ganó Zamora en una hora, las construcciones impersonales del tipo llover sobre mojado y haber moros en la costa; o los eslóganes y consignas que hacen referencia a una situación, a un hecho o a un producto determinado, como La imaginación al poder, España es diferente, etc.

6

Paremia: “Refrán, proverbio, adagio, sentencia” (DRAE); “proverbio (sentencia). SIN. V. Refrán” (DALE). 7 Las unidades fraseológicas son combinaciones estables de unidades léxicas formadas por dos o más de dos palabras gráficas en su límite inferior, cuyo límite superior se sitúa en el nivel de la oración compuesta. Otros rasgos característicos son la frecuencia de uso como unidades habituales de la lengua y de coaparición por parte de sus elementos integrantes; así como los diversos grados de institucionalización, estabilidad, idiomaticidad y variación que pueden presentar dichas unidades. Para una visión global del sistema fraseológico del español, véase la monografía de Gloria Corpas Pastor (1996), y, especialmente, el capítulo cuarto dedicado a las paremias. 8 Véanse, por ejemplo, las aclaraciones de Julio Fernández-Sevilla (1985) a este respecto o las definiciones de refrán, proverbio, dicho, máxima, adagio, aforismo, apotegma y sentencia en el DGILE. 9 Con objeto de detectar qué paremias tienen valor de verdad general, se les puede aplicar la frase introductoria “Esto es verdad en sí mismo”: –Esto es verdad en sí mismo: “Por la boca muere el pez”. –Esto es verdad en sí mismo: “Ahí le duele”.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 90

90

Capítulo III

El quinto criterio permite identificar un segundo grupo de paremias: las citas. Se trata de enunciados extraídos de textos escritos o de fragmentos hablados puestos en boca de un personaje, real o ficticio, que tienen un origen conocido: por ejemplo. La vida es sueño (Pedro Calderón de la Barca) y La religión es el opio del pueblo (KarI Marx). El refrán se diferencia de la cita en que su origen es desconocido, aunque la separación entre ambos tipos de paremias es una cuestión de grado. El refrán es la paremia por excelencia, pues en él se dan las cinco características definitorias mencionadas anteriormente: lexicalización, autonomía sintáctica y textual, valor de verdad general y carácter anónimo. Algunos ejemplos son Más vale tarde que nunca, No es oro todo lo que reluce o Quien mucho abarca poco aprieta. Si bien el refrán es la paremia por excelencia, el prototipo de refrán, verificable empíricamente, presenta otras características adicionales, como son significado metafórico, particularidades fónicas, anomalías sintácticas o estructuras sintácticas particulares en la que sus miembros mantienen relaciones precisas, carácter tradicional y propósito didáctico o dogmático. En el extremo opuesto a los refranes prototípicos se encuentran los denominados lugares comunes (Sólo se vive una vez, Un día es un día), que comparten las características definitorias básicas de los refranes, pero no las adicionales. 3.2.2. Frecuencia El software utilizado para el presente análisis ha sido la versión 4.6 de WordCruncher10. Este programa permite la consulta de corpus extensos de forma rápida y accesible, de acuerdo con una serie de parámetros previamente definidos por el usuario. Las referencias seleccionadas se visualizan en la pantalla a través de ventanas de diversa longitud: concordancias compuestas de una línea, fragmentos formados por varios párrafos o, incluso, textos unitarios de varios cientos de páginas. Para nuestro análisis, hemos seleccionado aleatoriamente 100 paremias (preferentemente refranes, aunque también algunas citas y enunciados de valor específico). Lo primero que llama la atención es la frecuencia de aparición de dichas unidades en el CVB. De las 100 unidades analizadas, 79 aparecen en el corpus, con un total de 166 ocurrencias (tokens): 124 de ellas en el componente escrito (74,69% en total, con un 21,08% en ficción, 18,07% en no ficción y 35,54% en periódicos) y 42 en el componente oral (25,30% en total).

10

En cuanto a las especificaciones técnicas, el WordCruncher es un programa para PC compatible que ocupa 1 MB de disco duro, requiere una memoria RAM de 640K y es ejecutable en el sistema operativo DOS (versión 2.1 o superior).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 91

91

El uso de paremias en un corpus del español

Si comparamos los resultados obtenidos en el CVB con los obtenidos para el corpus de citas en español (CC) mencionado más arriba11, se observa que el 79% de las paremias analizadas aparecen en el CVB, frente al 76% de éstas que se registran en el CC (con 103 ocurrencias). La media de ocurrencias por tipos (types) es, pues, de 2,10 en el CVB y 1,35 en el CC.

N.º de tipos N.º de ocurrencias Media

CVB

CC

79

76

166

103

2,10

1,35

Los datos anteriores ponen de manifiesto la alta frecuencia de uso de las paremias en el discurso. Así mismo, reflejan claramente las ventajas del corpus de referencia (CVB) frente al corpus de citas (CC) para el estudio de estas unidades en contexto. A pesar de contener sólo diez millones de palabras (piénsese que el Bank of English de la Universidad de Birmingham recoge más de cien millones), registra más tipos y más ocurrencias por tipos. Además, los programas de gestión de corpus permiten una gran flexibilidad a la hora de estudiar una determinada unidad. Si unas pocas líneas contextuales no bastan, se pueden examinar varios párrafos, varias páginas o, incluso, el texto entero en el que figura la unidad. Esto representa una ventaja más con respecto al corpus de citas en formato de base de datos tradicional. 3.2.3. Lematización A pesar de la relativa frecuencia de uso, la localización de las paremias en el corpus se ve dificultada por problemas de lematización. Además de la existencia de numerosas variantes, como A cada cerdo/puerco le llega su San Martín, A/Al perro flaco todo se le vuelven/son pulgas o Del dicho al hecho va mucho/un [gran] trecho, la mayoría de las paremias no aparecen con su forma canónica en el CVB. En un 40% de los casos se registra algún tipo de modificación formal en cuanto al inventario o el orden de los componentes. Y ello sin contar con los

11

Véase el apéndice final con los datos comparativos.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 92

92

Capítulo III

casos de manipulación externa, cambio de planos semánticos y juego con imágenes (ilustraciones, dibujos, fotografías) característicos de estas unidades al ser insertadas en el discurso, El tipo más frecuente de modificación interna es la reducción de la paremia mediante la eliminación de uno o más componentes. Este procedimiento representa más de la mitad (el 54,84%) de todos los casos registrados. La forma más corriente de utilizar una paremia en el discurso consiste en mencionar solo una parte, evocando así la unidad entera (ej. [1]): [1] Y el apellido Unamuno triunfa, también, en este terreno [...] Si don Miguel, el abuelo, impregnó de personalidad a una generación e hizo gala de su amor por España, Salomé, la nieta, ha motivado el entusiasmo de los emigrantes españoles y ha luchado por su integración. De casta le viene... Ahora pretende ser el paladín, el abanderado de la cultura española en Estrasburgo.

O bien se eliminan varios componentes con objeto de insertar la paremia en una frase como elemento oracional. En muchos casos, la unidad en cuestión funciona más bien como locución clausal (ej, [2]), nominal (ej. [3]) o verbal (ej. [4]): [2] El jueves voy a estar en Madrid y voy a hablar con estos niños. A la afición le pido que anime el domingo. De momento necesitamos a todos los jugadores, pero cuando acabe la temporada ya hablaré uno a uno con todos estos. Ya les llegará su San Martín. [3] ¿Y qué tal con el examen ese que has mirado? que no me has dicho... Pues que estamos igual. Examen de Comentario. Un cuatro... Pero eso es malo, o sea, muy malo. Pues si nos queda otra parte en septiembre tengo que examinarme de las dos. Es muy malo. No lo, no nos lo recuerdes menos mal que es un consuelo de tontos ¿no? Que no os quede, que no os quede. [4] Un nuevo acontecimiento vino a poner puente de plata al fugitivo. Poco antes de llegar al caserío los dos hermanos, descendía de un coche de collera el ya célebre general Castaños.

En algunos casos, tales usos llegan a institucionalizarse en la lengua, dando lugar al nacimiento de una nueva unidad. Por ejemplo, A enemigo que huye, puente de plata se registra tres veces en el CVB, una como locución nominal (puente de plata) y dos como locución verbal (poner puente de plata a alguien o a algo). De la misma forma, la unidad El hombre es un animal político aparece seis veces en el corpus, y todas ellas en calidad de locución nominal (animal político).

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 93

El uso de paremias en un corpus del español

93

Cabe señalar, así mismo, los casos en los que la reducción se limita a la eliminación de algún componente (generalmente un adverbio, un adjetivo o un adverbio) que alude, de esta forma, a la paremia en cuestión (ej. [5]): [5] [...] que a dónde iban a ir en un día de rayos y truenos como el que asediaba sin la gabardina, que la gabardina era al representante como la corona al rey, que el hábito hace al monje y que una gabardina era como el guardapolvo del tendero, su profesionalidad, la seriedad distintiva que hacía se le imaginara solvente, dominador de la profesión y garantía del producto.

Otro procedimiento bastante frecuente es la sustitución de algunos componentes de la paremia en el discurso, que representa el 16,38% de todos los casos de manipulación formal. La sustitución puede afectar a algún componente aislado (ej. [6]) o globalmente a una parte de la unidad, como se puede apreciar en el ejemplo 7. Desde “en el minuto 73” hasta el final sustituye a la segunda parte del refrán (... que al final se rompe), esto es, el equipo gaditano ejerce el dominio durante todo el partido y, a pesar de que algunos balones salen fuera, en los últimos minutos consigue marcar un gol. [6] Quien para ser médico ha de estudiar con algún provecho anatomía, histología, bioquímica y fisiología, farmacología, microbiología, las distintas patologías y tantas disciplinas técnicas más, ¿puede durante su vida escolar consagrar alguna de sus horas de estudio –y no sólo de estudio vive el hombre– al logro de una formación humanística de nivel universitario? [7] Responde el Cádiz en su dominio y en el minuto 60 Marcelo, en una bonita jugada de Mágico González, controla y lanza el esférico a la base del poste de la meta defendida por Zubeldía... Tanto va el cántaro a la fuente que en el minuto 73, Husillos, tras una genial jugada de Mágico González acompañado de Marcelo, marcaba el segundo tanto que le daba los dos puntos al conjunto amarillo.

La modificación gramatical, por su parte, es responsable del 7,15% de las manipulaciones formales que presentan las paremias analizadas en el CVB. Este procedimiento, al igual que la reducción –y, frecuentemente, en combinación con ella–, parece estar restringido a incorporar paremias como elementos oracionales mediante nominalizaciones o conversiones en cláusulas de relativo (ej. [8]): [8] Eso de que el ejército hace hombres vamos a dejarlo. Cada uno es lo que es, y uno no puede cambiar porque se ponga o se deje de poner un uniforme, ni porque le hagan marcar el caqui un año ni cinco. Es como la cabra que tira al monte porque lleva de nativitate la montanera.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 94

94

Capítulo III

Los problemas de localización derivan también de la inserción de unidades léxicas entre los elementos integrantes de las paremias. La adición representa el 5,61% de las manipulaciones encontradas. Tales intercalaciones destruyen el orden y fijación interna de los componentes de la unidad (ej. [9]): [9] Fíjense, tanto que Mendoza hablaba de Pacho Maturana en el... periodo de campaña electoral, las elecciones a la presidencia del Real Madri, pues ahora se queda que... con lo que tiene porque ha dicho: “Más vale lo malo conocido, que en este caso no es malo, que lo bueno por... conocer”.

Y, finalmente, el 14,84% de las manipulaciones registradas se deben a una combinación de varios de los procedimientos mencionados hasta ahora: reducción y adición (ej. [10]); adición y cambio de orden (ej. [11]); modificación gramatical, reducción, y adición (ej. [12]), etc. [10] Irak era un enemigo en segundo escalón, pues Sadam Hussein sólo alardeaba contra Israel (“Convertiré Judea en un mar de llamas”) y ya se preocuparía Tel-Aviv de semejante fanfarrón. De pronto, el perro ladrador muerde en Kuwait. [11] Lo que Nietzsche llama ciencia de la consciencia es la fe: la gaya ciencia. La sangre es espíritu –pensaba Nietzsche. La fe tiene que hacerse en nosotros sangre –había dicho San Pablo. La letra entra con fe, con sangre. [12] En Venecia hay buen tiempo, cine soviético recuperado con firmas de Barnet, Pudovkin, Protazanov, Petrov o Vladimir [...] Una muestra con 80 filmes en 12 días, que rugen en cola de león antes que ser cabeza de ratón en Donosti.

Todas estas manipulaciones dificultan en gran medida la búsqueda automática y la generación de concordancias en el Corpus mediante programas como el WordCruncher, el TACT o el OCP. Para que un programa de gestión de corpus sea efectivo, deberá ser capaz, pues, de determinar el núcleo fraseológico que permanece constante en todos los casos. Por ejemplo, la paremia A río revuelto, ganancia de pescadores aparece seis veces en el CVB. Solamente una vez presenta su forma canónica completa, mientras que las cinco ocurrencias restantes muestran algún tipo de modificación: – ... quiso ser, pescando en río revuelto, el candidato... – ... para apoderarse, en este río revuelto, de toda esta... – En semejante río revuelto, los pescadores sin escrúpulos hacen impunemente su agosto. – ... las minorías radicales tratarán de pescar en río revuelto... – En mitad del río revuelto, Solozábal y Manolo que echaron las redes y pescaban una final de copa...

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 95

El uso de paremias en un corpus del español

95

Está claro que el núcleo fraseológico es [RÍO REVUELTO], y que éste debe ser el punto de partida para la localización automática de la unidad en el corpus. Como parámetro auxiliar se podría recurrir a las relaciones de colocación del núcleo con una serie de unidades que comparten el mismo significado léxico –pescar y pescador–, y de éstas con otras unidades, como es el caso de pescador con respecto a echar redes.

3.2.4. Valores y funciones La frecuencia de uso de las paremias no se explica por una simple cuestión de estética; obedece más bien a necesidades funcionales y de construcción del texto. Estas unidades poseen valores y funciones propias en el discurso que justifican su empleo. Por valor discursivo de las paremias se entiende la aportación que una unidad de este tipo hace a la estructura informativa y valorativa de su cotexto (véase Rosamund Moon, 1992: 493). En términos generales, las paremias cumplen funciones informativas, evaluativas y organizadoras del discurso. En el primer caso, dichas unidades contribuyen al contenido proposicional del texto (ej. [13]). [13] Como pauta general, siempre podrá usted aplicar la norma de “A donde fueres, haz lo que vieres”, pero ni siquiera ésta le servirá en todos los casos, pues verá usted cosas harto distintas y hasta contradictorias a poco que observe los comportamientos humanos.

En el segundo caso, las paremias sirven para expresar las valoraciones y actitudes de los hablantes ante una situación, un estado de cosas, un comentario o una actuación. Sirva como ilustración el siguiente fragmento, donde uno de los interlocutores provoca al otro mediante una serie de apreciaciones negativas entre las cuales se incluye una paremia (ej. [14]): [14] –Hola, qué temprano vienes hoy. ¿Dónde has estado? –Donde siempre, tomando café con los amigos. Doña Visi besa en la calva a su marido. –¡Si vieses qué contenta me pongo cuando vienes tan pronto! –¡Vaya! A la vejez, viruelas. Doña Visi sonríe; doña Visi, la pobre, sonríe siempre. – ¿Sabes quien va a venir esta tarde? –Algún loro, como si lo viera. Doña Visi no se incomoda jamás.

Ahora bien, lo normal es que una paremia, al ser insertada, combine ambos valores, como se puede apreciar en el siguiente fragmento (ej. [15]). Uno de los hablantes emplea una paremia para aportar una información concreta (la dificultad de realizar en condiciones muchas actividades a un mismo tiempo), a la vez

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 96

96

Capítulo III

que critica veladamente a su interlocutor (se duda de su capacidad e, incluso, se insinúa que pudiera ser demasiado ambicioso), y éste opta por defenderse manipulando la unidad en cuestión. [15] Ser presidente de un club como el Real Madrid lleva muchísimo tiempo. Luego entonces, ¿qué va a hacer? Pues... dormir menos. Dormir menos... acoplar mi vida y desde luego tener muchos menos eh... ratos de... ocio. Se me... se me quita la libertad durante un tiempo; eso está claro. Y eso de que “Quien mucho abarca, poco aprieta”, usted nada, ¿no? No le preocupa nada. Yo creo que no, yo creo que quien mucho abarca, aprieta muchísimo.

Las paremias funcionan, pues, como descripciones valorativas que comentan a la vez, de forma indirecta, escudándose en valores sociales compartidos y aceptados por la comunidad hablante. Ahora bien, este tipo de unidades –se empleen o no con un doble valor en contexto– sirven, además, para aclarar o explicar algo [16]; para apoyar una determinada postura o afirmación [17]; para justificar una decisión [18] o para instar al interlocutor a una acción determinada [19]. [16] En el viñedo tenemos de todo, pero no muy viejo. Hemos hecho nuevas plantaciones y renovado lo más antiguo. Para hacer buen vino hace falta buenas uvas, pues de tal palo tal astilla. [17] ¿Que no le hacían caso? ¡Qué más da! ¿Para qué estaba la historia? Ella a todos, al fin y a la postre, hace justicia. Y si en este bajo mundo al genio no se le toma en consideración, ¿para qué preocupamos si dentro de cien años, todos calvos? [18] De pronto, sin sentarse siquiera, dijo que ya tenía veintitrés años y había decidido casarse. Había visto a la pequeña Corvo y se había enamorado de ella. La misma Biblia decía: “No es bueno que el hombre esté solo”. [19] A la gente lo que hay que darle es una de cal y otra de arena. Hacer el quite ¿comprendes? Una cara aquí y otra allí y a vivir, que son dos días. Nada de remilgos cuando se lleva como tú plomo en las alas. Nada de hacer feos ni de sentirse melindroso.

Asimismo, hemos observado que en los textos de no ficción las paremias suelen apoyar el hilo argumental como premisa introductoria o preludio de la explicación teórica o técnica que sigue a continuación (ej. [20]). A veces, incluso, sirven de punto de partida para la contra-argumentación (ej. [21]). [20] El artículo 47 se refiere al derecho de la vivienda y a la utilización del suelo [...] Pero, evidentemente, del dicho al hecho hay mucho trecho, y la disponibilidad de suelo suficiente y adecuado para viviendas exigirá un indudable esfuerzo de ordena-

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 97

El uso de paremias en un corpus del español

97

ción del territorio, la reforma del Instituto Nacional de Urbanismo (INUR) y del INV, en cuyos consejos rectores habría de estar representado el movimiento ciudadano. [21] Aquél que calla, otorga. Pero los que callan son llamados perros mudos por quienes no hablan cuando tienen que hacerlo. Ni siempre callar es virtud, ni tampoco lo será el gritar. No mantengamos silencio demasiado tiempo porque luego será tarde.

Los usos anteriores enlazan con los valores discursivos de las paremias. A menudo, estas unidades señalan la estructura discursiva de los textos. Por su carácter de verdad sancionada y de sabiduría tradicional, las paremias –manipuladas o no– constituyen una buena frase de despedida para cerrar un texto, como se observa en el ejemplo [22], que corresponde al último párrafo de una noticia de periódico: [22] Ante lo insólito de la situación, el legítimo propietario del casete solicitó la presencia de la policía para que detuviera al presunto caco. El dueño del aparato experimentó así que a veces es cierto aquel dicho de “el mundo es un pañuelo”.

De igual forma, también desempeñan funciones de apertura, pudiendo aparecer como frase temática a comienzo de párrafo (ej. [23]); como titular o subtítulo de una noticia (ej. [24]); y como título de una novela (cf. El gato encerrado, de Andrés Trapiello), una obra de teatro (cf. Genio y figura, de Juan Valera), un programa de radio (cf. Dime con quien ondas) o de televisión (cf. El tiempo es oro, de TV1). [23] España es diferente para muchas cosas, y en lo que a fijar precios se refiere, también. El Gobierno establece un techo que los distribuidores no pueden superar. [24] Juventud, divino tesoro. El envejecimiento, esto nadie lo va a descubrir, supone un proceso gradual de degradación del organismo humano, que acusa los avalares y el mal trato que suele recibir a lo largo de su existencia.

Finalmente, existen casos difíciles de catalogar. Esto ocurre, principalmente, con los textos del componente oral, donde algunas paremias parecen cumplir más bien funciones lúdicas (ej. [25]) o, simplemente, surgen como comentarios espontáneos que, a modo de reflejo, se escapan inconscientemente del lexicón mental de los hablantes (ej. [26]). [25] ¿Qué pinta, bastos? Dime otra vez, as, tres, rey, rey, ¿no? Sí. Hace calorcillo. Sí. Joer. esto empieza a a... No, no, yo he repartido. Perico, toca Periquín. Yo pido una, por si acaso [...] Alguien se pasa. Alguien se pasa, seguro. Vamos Perico y sal

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 98

98

Capítulo III

bien, por tus niños. Si, sal... bien y no mires a quien. Bien. Eso... Eso... no me ha gustado nada. Venga. [26] ¡Qué anillo más bonito! ¿Y ya se te ha perdido la piedra? Sin piedra ... Se me han perdido dos. Pues le pegamos una o algo así [...] Las dos del borde están. Sólo falta la del medio. Sólo hay una en el borde. Vamos a ver. Aquí hay dos. Dos cosas que brillan. Una en cada lao. El pegamento... Pero no es oro todo lo que bri, no no todo... no es oro todo lo que reluce. Estoy viendo perfectamente que... la da de plano así... se ve el pulido plano. Míralo tú, ya verás que hay una en cada lao.

4. Conclusión El análisis del corpus muestra claramente que los refranes y demás paremias, lejos de ser “la negación misma de la creatividad lingüística” (Fernando Lázaro Carreter, 1980: 223), representan, más bien, todo lo contrario. Su vitalidad se traduce no sólo en la frecuencia de uso en el discurso, sino también en las modificaciones formales que presentan tales unidades, signo evidente de su buena salud. La manipulación creativa de estas unidades en el discurso, unida a la existencia de variantes, ha dificultado considerablemente la localización de paremias en el corpus. Ha sido necesario extraer concordancias para los componentes aislados de cada unidad. En futuros trabajos, la búsqueda automática en el corpus deberá atender tanto a la forma canónica como al núcleo fraseológico residual. En cuanto a los tipos de textos en los que suelen aparecer las paremias, éstas predominan en los periodísticos, seguidos, por orden decreciente, de los textos orales, los textos de ficción y los de no ficción. En todos ellos, dichas unidades cumplen diversas funciones informativas, valorativas y discursivas. En el componente oral se vislumbran, además, otros usos de carácter lúdico e inconsciente. Los datos del corpus reflejan el dinamismo y permeabilidad de las paremias. Por un lado, se aprecian fácilmente las variantes más usuales de una determinada unidad. Por ejemplo, la unidad 14 del apéndice final aparece generalmente como El diablo las carga o Las carga el diablo. Por otro lado, se observa cómo las paremias se convierten en fuente de creación neológica. Las reducciones y manipulaciones que los refranes y demás paremias experimentan en el discurso las equiparan formal y funcionalmente a las locuciones. En algunos casos, una paremia puede llegar a institucionalizarse de esa forma y dar lugar al nacimiento de una nueva unidad fraseológica (cf. [poner] puente de plata a alguien o algo). Los resultados obtenidos en el presente trabajo abren nuevas vías de investigación. La aplicación de la lingüística del corpus a la fraseología es ya una necesidad para poder seguir avanzando en este campo. En lo referente a las pare-

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 99

El uso de paremias en un corpus del español

99

mias, sería interesante comprobar su funcionamiento en cada tipo de texto, teniendo muy en cuenta los distintos registros. A tenor de los datos que manejamos, las crónicas y comentarios deportivos en textos periodísticos y en el componente oral (programas de radio o televisión) podrían servir de punto de partida: constituyen un terreno abonado, repleto de locuciones, paremias y fórmulas, que les confieren ese rasgo tan propio y característico del periodismo deportivo.

Referencias bibliográficas ACADEMIA ESPAÑOLA (RAE) (1992): Diccionario de la lengua española. 21ª ed. Madrid: Espasa- Calpe. [DRAE]. ALVAR EZQUERRA, M. (1987 [1945]): Diccionario General Ilustrado de la Lengua Española. Vox: Barcelona. [DGILE] — (1990): Diccionario actual de la lengua española. Biblograf: Barcelona. [DALE] ALVAR EZQUERRA, M.; RODRÍGUEZ, M.ª J., y PÉREZ LAGOS, F. (1994): “Diseño de un corpus español en el marco de un corpus europeo”, en: ALVAR EZQUERRA, M./ VILLENA PONSODA, J. A. (eds.): Estudios para un corpus de español. (Analecta Malacitana, Anejo 7). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 9-29. ARNAUD, P. J. L. (1991): “Réflexions sur le proverbe”, en: Cahiers de Lexicologie 59, 5-27. — (1992): “La connaissance des proverbes français par le locuteurs natifs et leur sélection didactique”, en: Cahiers de Lexicologie 60, 196-238. ARNAUD, P. J. L., y MOON, R. (1993): “Fréquence et emploi des proverbs anglais et français”, en: PLANTIN, C. (Ed.): Lieux communs, topoi, stereotypes, clichés. París: Edtions Kimé, 324-341. BERGUA, J. B. (1992): Refranero Español. Colección de ocho mil refranes populares ordenados, concordados y explicados, precedidos por el “Libro de los Proverbios” de Alonso de Barrio. 12ª ed. Madrid: Ediciones Ibéricas. CAMPOS, J. G., y BARELLA, A. (1995 [1993]): Diccionario de refranes. 2ª ed. Madrid: Espasa- Calpe. CANDÓN, M., y BONNET, E. (1994 [1993]): A buen entendedor... Diccionario de frases hechas de la lengua castellana. 5.ª ed. Madrid: Anaya; Mario Muchnik. CASARES, J. (1992 [1950]): Introducción a la lexicografía moderna. Madrid: CSIC. CEJADOR, J. (1928-1929): Refranero Castellano. 3 vols. Madrid. COMBET, L. (1971): Recherches sur le “Refranero” Castillian. (Bibliothèque de la Faculté des Lettres de Lyon, XXIX). París: Société d’Edition “Les Belles Lettres”. CORPAS PASTOR, G. (1995a): “Discoursal Functions of Proverbs. A Corpus-Based Study”, en: Estudios Ingleses de la Universidad Complutense 3, 101-110. — (1995b): Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español. Tesis doctoral (Universidad Complutense de Madrid). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad (Edición en microfichas). — (1996): Manual de fraseología española. Gredos: Madrid.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 100

100

Capítulo III

CORREAS, G. DE (1967 [1627]): Vocabulario de refranes y frases proverbiales. Texte établi, annoté et présenté par Louis Combet. Burdeos. DOVAL, G. (1995): Del hecho al dicho. Madrid: Ediciones del Prado. ESPINET PADURA, E. (1991): Diccionario general de frases, dichos y refranes. Mies. FERNÁNDEZ, M. (1994): Diccionario de refranes. Antología de refranes populares y cultos de la lengua castellana, explicados y razonados. Madrid. FERNÁNDEZ-SEVILLA, J. (1985): “Paremiología y lexicografía. Algunas precisiones terminológicas y conceptuales”, en: Philologia Hispaniensa, 191-203. GARCÍA-PAGE SÁNCHEZ, M. (1993): “Texto paremiológico y discurso poético (el ejemplo de Gloria Fuertes)”, en Paremia 1, 45-53. GRYZBEK, P. (1992): “Probleme der Sprichtwort-Lexikographie (Parömiologie): Definition, Klassifikation, Selektion”, en: MEDER, G., y DÖNER, A. (eds.): Worte, Wörter, Wörterbücher. Lexikographische Beiträge zum Essener Linguistischen Kolloquium. Niemeyer: Tubinga, 195-223. HAIN, M. (1951): Sprichwort und Volkssprache. Eine volkskundlich-soziologische Dorfuntersuchung. Gießen. JUNCEDA, L. (1995): Espasa Diccionario de Refranes. Madrid: Espasa-Calpe. LÁZARO CARRETER, F. (1980): Estudios de Lingüística. Barcelona: Crítica. LÓPEZ, A. C. M. (1991): “Texte proverbial et construction du sens”, en: Degrés. Revue de synthèse à orientation sémiologique 66, c1-e12. LÓPEZ DE MENDOZA, Í. (MARQUÉS DE SANTILLANA) (1542): Refranes que dicen las viejas tras el fuego. Sevilla. MAL LARA, J. DE (1568): La Philosophía Vulgar. Sevilla. MARTÍNEZ KLEISER, L. (1928): El refranero de la casa. Madrid. — (1945): El tiempo y los espacios en los refranes. Madrid. — (1986 [1953]): Refranero general ideológico español. Ed. facsimilar. 2ª reimpresión. Madrid: Hernando. MARTÍNEZ MARÍN, J. (1996): Estudios de fraseología española. Málaga: Ágora. MIEDER, W. (1992): “General Thoughts on the Nature of the Proverb”, en: Kwartalnik Neofilologiczny 39/2, 89-102. MOON, R. (1992): “’There is reason in the roasting of eggs’: a consideration of fixed expressions in native-speaker dictionaries”, en: H. Tommola et al. (eds.): EURALEX ’92 Proceedings, 2 vols. Tampere: University of Tampere, 493-502. NORRICK, N. R. (1985): How Proverbs Mean. Semantic Studies in English Proverbs. Berlín, Nueva York, Amsterdam: Mouton. NÚÑEZ, H. (1555): Refranes o proverbios en romance. Salamanca. OLIVER, J. M. (1983): Refranero español. Madrid: Sena. PALMIRENO, L. (1569): Refranes de mesa, salud y buena crianza. Valencia. RODRÍGUEZ MARÍN, F. (1895): Los refranes en general y de los españoles en particular. Sevilla. — (1926): Más de 21.000 refranes castellanos no contenidos en la copiosa colección del maestro Gonzalo de Correas. Madrid. — (1941): Todavía 10,700 refranes más. Madrid. SANDIG, B. (Ed.) (1994): EUROPHRAS 92 - Tendenzen der Phraseologieforschung, Bochum: Universität Dr. N. Brockmeyer.

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 101

El uso de paremias en un corpus del español

101

SBARBI, J. M. (1980 [1874-1878]): El refranero general español, parte recopilado, y parte compuesto por José María Sbarbi. 10 vols. Madrid: Atlas. SINCLAIR, J. (1987): Looking Up. An Account of the COBUILD Project in Lexical Computing, Londres, Glasgow: Collins. SINCLAIR, J. (1993): “Lexicographers’ needs”, en: Zeitschrift für Anglistik und Amerikanistik 41/1, 5-14. SORAPÁN DE RIEROS, J. (1616): Medicina española contenida en proverbios vulgares de nuestra lengua. Granada. STRÄSSLER, J. (1982): Idioms in English. A Pragmatic Analysis. Tubinga: Gunter Narr. VALLÉS, P. DE (1549): Libro de refranes. Compilado por el orden ABC. Zaragoza.

Apéndice 1.

A CADA CERDO LE LLEGA SU SAN MARTÍN CC = 0 CVB = 1

2.

A DONDE FUERES, HAZ LO QUE VIERES CC = 0 CVB = 1

3.

A ENEMIGO QUE HUYE, PUENTE DE PLATA CC = 1 CVB = 3

4.

A LA VEJEZ, VIRUELAS CC = 2

CVB = 3

5.

A NADIE LE AMARGA UN DULCE CC = 1 CVB = 1

6.

A PERRO FLACO TODO SON PULGAS CC = 0 CVB = 1

7.

A QUIEN DIOS SE LA DÉ, SAN PEDRO SE LA BENDIGA CC = 1 CVB = 0

8.

A QUIEN MADRUGA, DIOS LE AYUDA CC = 0 CVB = 1

9.

A RÍO REVUELTO, GANACIA DE PESCADORES CC = 0 CVB = 6

10.

A VIVIR, QUE SON DOS DÍAS CC = 1 CVB = 5

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 102

102

Capítulo III

11.

AGUA PASADA NO MUEVE MOLINO CC = 1 CVB = 4

12.

ANDE YO CALIENTE Y RÍASE LA GENTE CC = 0 CVB = 2

13.

AÑO DE NIEVES, AÑO DE BIENES CC = 0 CVB = 2

14.

ARMA DE FUEGO, ALEJARLA, QUE EL DIABLO SUELE CARGARLA CC = 1 CVB = 2

15.

ASÍ ES LA VIDA CC = 2

CVB = 1

16.

CADA MAESTRILLO TIENE SU LIBRILLO CC = 1 CVB = 1

17.

CADA MOCHUELO A SU OLIVO CC = 0 CVB = 1

18.

CADA OVEJA CON SU PAREJA CC = 1 CVB = 1

19.

CRÍA CUERVOS Y TE SACARÁN LOS OJOS CC = 1 CVB = 1

20.

CUALQUIER TIEMPO PASADO FUE MEJOR CC = 3 CVB = 1

21.

CUANDO EL RÍO SUENA, AGUA LLEVA CC = 1 CVB = 0

22.

DÁDIVAS QUEBRANTAN PIEDRAS CC = 1 CVB = 0

23.

DE CASTA LE VIENE AL GALGO EL SER RABILARGO CC = 1 CVB = 1

24.

DE GRANDES CENAS ESTÁN LAS SEPULTURAS LLENAS CC = 2 CVB = 0

25.

DE TAL PALO, TAL ASTILLA CC = 0 CVB = 6

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 103

El uso de paremias en un corpus del español

26.

DEL DICHO AL TRECHO VA MUCHO TRECHO CC = 2 CVB = 6

27.

DENTRO DE CIEN AÑOS, TODOS CALVOS CC = 1 CVB = 1

28.

DIME CON QUIÉN ANDAS, Y TE DIRÉ QUIÉN ERES CC = 0 CVB = 2

29.

EL AMOR ES CIEGO CC = 2

CVB = 0

30.

EL DIABLO SABE MÁS POR VIEJO QUE POR DIABLO CC = 1 CVB = 1

31.

DIOS APRIETA PERO NO AHOGA CC = 1 CVB = 1

32.

DIOS ESCRIBE DERECHO CON RENGLONES TORCIDOS CC = 1 CVB = 2

33.

DONDE HAY PATRÓN NO MANDA MARINERO CC = 1 CVB = 1

34.

DONDE LAS DAN LAS TOMAN CC = 1 CVB = 0

35.

DONDE NO HAY HARINA TODO ES MOHÍNA CC = 1 CVB = 0

36.

EL HÁBITO NO HACE AL MONJE CC = 1 CVB = 1

37.

EL HOMBRE ES UN ANIMAL POLÍTICO CC = 0 CVB = 6

38.

EL HOMBRE PROPONE Y DIOS DISPONE CC = 1 CVB = 0

39.

EL HOMBRE ES UN LOBO PARA EL HOMBRE CC = 1 CVB = 2

40.

EL MUNDO ES UN PAÑUELO CC = 1 CVB = 1

103

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 104

104

Capítulo III

41.

EL MUERTO AL HOYO Y EL VIVO AL BOLLO CC = 1 CVB = 0

42.

EL TIEMPO ES ORO CC = 0

CVB = 10

EN ABRIL, AGUAS MIL CC = 1

CVB = 1

43. 44.

EN BOCA CERRADA NO ENTRAN MOSCAS CC = 1 CVB = 0

45.

EN CASA DEL HERRERO, CUCHILLO DE PALO CC = 0 CVB = 1

46.

EN ESTA VIDA, NADA ES VERDAD NI MENTIRA, TODO DEPENDE DEL COLOR DEL CRISTAL CON QUE SE MIRA CC = 1 CVB = 0

47.

EN TODAS PARTES CUECEN HABAS, Y EN LA MÍA, CALDERADAS CC = 1 CVB = 2

48.

ESPAÑA ES DIFERENTE CC = 2

CVB = 2

49.

GENIO Y FIGURA HASTA LA SEPULTURA CC = 3 CVB = 1

50.

HABER GATO ENCERRADO CC = 2 CVB = 1

51.

HABER MOROS EN LA COSTA CC = 1 CVB = 0

52.

HABLANDO SE ENTIENDE LA GENTE CC = 2 CVB = 1

53.

HAY GUSTOS QUE MERECEN PALOS CC = 1 CVB = 0

54.

HAZ BIEN Y NO MIRES A QUIÉN CC = 1 CVB = 1

55.

HAZ EL AMOR Y NO LA GUERRA CC = 1 CVB = 1

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 105

El uso de paremias en un corpus del español

56.

HIERBA MALA NUNCA MUERE CC = 2 CVB = 0

57.

JUVENTUD, DIVINO TESORO CC = 2 CVB = 1

58.

LA CABRA SIEMPRE TIRA AL MONTE CC = 1 CVB = 2

59.

LA CARA ES EL ESPEJO DEL ALMA CC = 1 CVB = 1

60.

LA CARIDAD BIEN ENTENDIDA EMPIEZA POR UNO MISMO CC = 2 CVB = 0

61.

LA IMAGINACIÓN AL PODER CC = 1 CVB = 0

62.

LA LETRA CON SANGRE ENTRA CC = 1 CVB = 1

63.

LA MÚSICA AMANSA A LAS FIERAS CC = 2 CVB = 1

64.

LA RELIGIÓN ES EL OPIO DEL PUEBLO CC = 0 CVB = 3

65.

LA VIDA ES SUEÑO CC = 1

CVB = 12

66.

LAS AGUAS VOLVERÁN A SU CAUCE CC = 1 CVB = 1

67.

LAS APARIENCIAS ENGAÑAN CC = 1 CVB = 1

68.

LAS COMPARACIONES SON ODIOSAS CC = 1 CVB = 1

69.

LAS COSAS CLARAS, Y EL CHOCOLATE ESPESO CC = 1 CVB = 1

70.

LAS COSAS DE PALACIO VAN DESPACIO CC = 2 CVB = 0

105

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 106

106

Capítulo III

71.

LLOVER SOBRE MOJADO CC = 2 CVB = 3

72.

LO POCO AGRADA Y LO MUCHO ENFADA CC = 1 CVB = 0

73.

LOS DESIGNIOS DEL SEÑOR SON INESCRUTABLES CC = 1 CVB = 0

74.

LOS DUELOS CON PAN SON MENOS CC = 2 CVB = 0

75.

MAL DE MUCHOS, CONSUELO DE TONTOS CC = 2 CVB = 2

76.

MÁS VALE SER CABEZA DE RATÓN QUE COLA DE LEÓN CC = 0 CVB = 1

77.

MÁS VALE TARDE QUE NUNCA CC = 1 CVB = 1

78.

NADIE ESCARMIENTA EN CABEZA AJENA CC = 1 CVB = 1

79.

NO DEJES PARA MAÑANA LO QUE PUEDAS HACER HOY CC = 0 CVB = 1

80.

NO ES BUENO QUE EL HOMBRE ESTÉ SOLO CC = 1 CVB = 1

81.

NO ES ORO TODO LO QUE RELUCE CC = 1 CVB = 2

82.

NO HAY MAL QUE CIEN AÑOS DURE CC = 2 CVB = 1

83.

NO HAY MÁS CERA QUE LA QUE ARDE CC = 0 CVB = 1

84.

NO JUZGUES Y NO SERÁS JUZGADO CC = 0 CVB = 1

85.

NO PASARÁN CC = 3

CVB = 1

CORPAS-01 25/2/03 10:20 Página 107

El uso de paremias en un corpus del español

86. NO POR MUCHO MADRUGAR AMANECE MÁS TEMPRANO CC = 1 CVB = 1 87. NO SE GANÓ ZAMORA EN UNA HORA CC = 0 CVB = 1 88. NO SOLO DE PAN VIVE EL HOMBRE CC = 1 CVB = 2 89. PERRO LADRADOR, POCO MORDEDOR CC = 0 CVB = 1 90. PODEROSO CABALLERO ES DON DINERO CC = 1 CVB = 2 91. POR LA BOCA MUERE EL PEZ CC = 1 CVB = 1 92. QUIEN BIEN TE QUIERE TE HARÁ LLORAR CC = 1 CVB = 1 93. QUIEN CALLA OTORGA CC = 0

CVB = 1

94. QUIEN MUCHO ABARCA, POCO APRIETA CC = 0 CVB = 2 95. SI TE HE VISTO NO ME ACUERDO CC = 2 CVB = 4 96. SÓLO SE VIVE UNA VEZ CC = 0

CVB = 1

97. TANTO VA EL CÁNTARO A LA FUENTE QUE AL FINAL SE ROMPE CC = 1 CVB = 2 98. UN DÍA ES UN DÍA CC = 1

CVB = 8

99. UNA IMAGEN VALE MÁS QUE MIL PALABRAS CC = 3 CVB = 2 100. VÍSTEME DESPACIO, QUE TENGO PRISA CC = 0 CVB = 1

107

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 109

CAPÍTULO IV USOS Y VALORES DE PARA NADA EN UN CORPUS DE ESPAÑOL PENINSULAR ACTUAL*1

1. Introducción Tradicionalmente, la filología española ha venido lamentando la falta de interés por la investigación fraseológica, pese a disponer de recopilaciones antiguas como el Diccionario de modismos de Ramón Caballero, por no citar los antiguos repertorios de refranes, o colecciones de fraseología publicados en nuestro siglo2. El trabajo pionero de Casares (1992 [1950]) ha sido durante cuatro décadas paradigma y referencia obligada –casi única– para los lexicólogos y lexicógrafos del español. Esta escasez de trabajos ha ido dibujando un panorama sombrío y desolador que, poco a poco, parece ir cambiando. De estudios parciales 3, señeros pero incompletos, como el de Ettinger (en Haensch et al, 1980) o el de Zuluaga (1980), se ha pasado a una verdadera eclosión de trabajos sobre el tema. Es evidente que la fraseología, a finales de los noventa, está de moda. Se celebran congresos interdisciplinares (Madrid, 1996; Santiago de Compostela, 1997; Córdoba, 1998); y proliferan las monografías (Corpas Pastor, 1996; Martínez Marín, 1996; Ruiz Gurillo, 1997, 1998) y los diccionarios fraseológicos (Fontanillo Merino, 1993; Candón y Bonnet, 1994 [1993]; Varela y Kubarth, 1994; Doval, 1995; Carbonell, 1995, 1996; Pénet y Gómez, 1995). Se retoman los temas clásicos relativos a la delimitación y clasificación del universo fraseológico, al tiempo que se investigan las posibilidades abiertas por los nuevos desarrollos de la lingüística. Precisamente, nuestro trabajo se inserta en el marco de la lingüística del corpus, que actualmente ofrece resultados muy interesantes. En este sentido, vale la pena mencionar, por ejemplo, los análisis estadísticos de colocaciones de Aguilar-Amat Castillo (1993), los estudios comparativos de Guia (1995, Guia y Conca, en prensa) para el catalán, así como las

* Parte de la investigación realizada ha sido financiada por la Fundación Caja de Madrid (becas de investigación posdoctorales, área de Filología Española). 1 Coautor: Manuel Alvar Ezquerra. 2 Para un rápido recorrido por esos repertorios, véase Ruiz Gurillo (1997: 18-19) 3 Un panorama bien distinto muestran los desarrollos de la fraseología cubana –de clara inspiración soviética–, representados por los trabajos de Carneado Moré y Tristá Pérez (cf. Corpas Pastor, 1996: 46-50)

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 110

110

Capítulo IV

aportaciones de Corpas Pastor (en prensa) sobre el funcionamiento discursivo y textual de las paremias en un corpus de español actual. En las páginas que siguen nos vamos a ocupar de para nada, una unidad fraseológica (UF) de uso frecuente, pero poco estudiada en la filología española. Examinaremos su distribución en un corpus de español actual, teniendo en cuenta sus valores semánticos, su funcionamiento sintáctico y sus propiedades combinatorias. Los resultados obtenidos podrán ser incorporados posteriormente a la descripción lexicográfica –hasta ahora bastante rudimentaria– de la citada unidad. 2. El corpus Vox-Bibliograf (CVB) Para el presente estudio vamos a analizar el corpus Vox-Bibliograf (CVB). Se trata de un corpus textual4 del español peninsular que incorpora documentos enteros, no fragmentos aislados, ya que el interés reside en el texto en sí y no en el estadio de lengua representado. El CVB contiene en la actualidad unos diez millones de palabras y comprende textos publicados desde 1950 en adelante (preferentemente los más recientes) con objeto de conseguir un equilibrio entre modernidad de los textos y calidad del corpus. Los documentos incorporados se restringen a la norma culta peninsular, prescindiendo de las demás variedades diatópicas del español, de forma que se salvaguarda la fiabilidad y representatividad del estado de lengua reflejado. Este corpus pretende ser representativo de la lengua común y general, de ahí que no sobresalga ningún género literario en particular y ningún estilo o forma de hablar fácilmente identificables. Los documentos son, pues, heterogéneos y representativos de tantos niveles de lengua como ha sido posible, pero siempre dentro de la homogeneidad deseada. Las fuentes del CVB han sido elegidas a través de un método de selección aleatoria de acuerdo con las características discursivas primarias de los textos, siguiendo muy de cerca la composición del corpus COBUILD de la Universidad de Birmingham5. El CVB consta de un componente escrito y otro oral a partes iguales. Aunque no se especifican las directrices seguidas para determinar la proporción de tipos de textos incluidos, las principales categorías del componente

4

Para una descripción pormenorizada del proyecto del CVB, véase el trabajo de Manuel Alvar Ezquerra, María José Blanco Rodríguez y Fernando Pérez Lagos (1994). Aunque en un primer momento se diseñó un corpus de referencia, durante su compilación se optó por incluir documentos enteros. 5 Para una descripción pormenorizada de este corpus, véanse los artículos recogidos en Looking Up, editados en un volumen conjunto por John M. Sinclair (1987).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 111

Usos y valores de para nada

111

escrito son no ficción (35%), ficción (35%), periódicos y revistas (25%), folletos (2,5%) y cartas (2,5%). Los textos de ficción se subdividen a su vez en novelas y relatos cortos o cuentos, mientras que los textos de no ficción se clasifican discursivamente en informativos, textos guía, textos argumentales-posicionales, textos narrativos y textos humorísticos. El componente oral –previsto, pero aún no finalizado– comprende cuatro grandes tipos de textos sin codificar, a saber, conversacionales (25%, se incluyen conversaciones, diálogos y discusiones informales, por teléfono o cara a cara); diálogos o discusiones organizadas (25%); entrevistas (25%) y exposiciones orales individuales (25%). Las tres últimas categorías incluyen documentos provenientes en gran parte de los medios de comunicación, fundamentalmente radio y televisión. 3. Descripción gramatical Desde un punto de vista gramatical, la locución que nos ocupa constituye un sintagma prepositivo compuesto de una preposición (para) y su término (nada). Para es una de las ocho preposiciones orientadas o dinámicas, que implica un movimiento de acercamiento (físico o figurado) a la noción designada por su término (Trujillo, 1971: 266; Alarcos Llorach, 1995 [1994]: 222-224). Esta preposición expresa fundamentalmente “virtualidad, acción o actividad proyectada” (Riiho, 1979: 255), aunque a lo largo de la historia ha gozado de un enriquecimiento semántico6. Su carga semántica básica es, pues, de carácter direccional y temporal, aunque frecuentemente presente un valor puramente final. Según el punto de vista adoptado, nada se considera un pronombre cuantitativo (Seco, 1989: 163), un indefinido de forma sustantiva y género inanimado (Roca-Pons, 1980 [1960]: 160) o, simplemente, un indefinido sustantivo (Alarcos Llorach, 1995 [1994]: 115). Esta unidad léxica es invariable en cuanto al género y al número, y rara vez se combina con el artículo, salvo en usos figurados como la nada, en cuyo caso “deja de ser propiamente indefinido” (Alarcos Llorach,1995 [19941: 115) y se refiere a la abstracción de la inexistencia de todo ser. Fernández Ramírez (1987), al tratar nada (pág. 305) dice que esta unidad tiene las mismas clases de mención que algo, y de éste escribe que “se presenta como un instrumento cómodo, apto para una mención provisional o hipotética, o dirigida a una realidad compleja y de conceptuación difícil, o que no se conoce enteramente, etc., etc.” (pág. 301).

6 Para estas cuestiones, véase Hanssen (1911), Pottier (1962, 1975), López (1970), Trujillo (1971), Alcina Franch y Blecua (1983 [1975]) y Morera Pérez (1988).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 112

112

Capítulo IV

En tanto sustantivo, nada admite modificación, ya sea mediante un adjetivo con el cual concuerda en masculino singular (nada bueno) o mediante secuencias más complejas, como una cláusula de relativo (nada que te incumba) o una cláusula comparativa (nada mejor que irse de vacaciones). Por otro lado, nada también tiene un carácter marcadamente adverbial, pudiendo funcionar bien como adyacente de un adjetivo (comportamiento nada apropiado), de un adverbio (no lo hace nada mal) o de un verbo (No nos conviene nada esa alianza). Ahora bien, las posibilidades gramaticales de nada se ven limitadas en cuanto entra a formar parte de la construcción que nos ocupa. De las 168 ocurrencias en el corpus, sólo en cuatro ocasiones recibe algún tipo de modificación, concretamente un adjetivo (ej. 1), un adverbio (ej. 2), un sintagma prepositivo (ej. 3) y una cláusula comparativa (ej. 4): [1] Soltaba tacos constantemente y decía que el mundo había que quemarlo, que no servía PARA NADA bueno. [2] En el corazón ya no queda lugar PARA NADA más, escribía Peggy Guggenheim, tras casi tres lustros de rendida fidelidad a una ciudad en quien... [3] ... posiblemente en lo más bajo de la curva emotiva aborrezcas la idea de reunirte con otras gentes PARA NADA de cierta importancia: sigue los dictámenes de tu mente y pospón ese encuentro porque posiblemente no sacarías gran provecho de él. [4] Pero su novio, la cosa era bien clara, no estaba PARA NADA más que para estarse en la cama todo el día, sin hacer nada y casi sin hablar.

Esto representa sólo un 1,19% de los casos, frente al 98,81% restante de ocurrencias.

4. Descripción semántica El contenido semántico de la UF que nos ocupa guarda una estrecha relación con los significados individuales de sus elementos integrantes. Por un lado, para selecciona su valor de finalidad. Por otro lado, nada alude a la noción neutra de cosa, de forma similar a los pronombres esto, eso, ello, aquello, sin designar entidades, sino haciendo referencia a una cantidad. Así se refleja en la primera acepción que ofrece el DUE “Pronombre equivalente a ‘ninguna cosa’ o ‘ninguna cantidad’ o en la tercera del DRAE “pron. indef. Ninguna cosa, la negación absoluta de las cosas, a distinción de las personas”.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 113

Usos y valores de para nada

113

El carácter negativo de nada se refleja, incluso, en el comportamiento gramatical de la unidad cuando se combina libremente con otras unidades del discurso. En concreto, cuando precede al núcleo verbal, ya sea el verbo principal o su auxiliar, equivale al adverbio de negación no. Sirvan como ilustración las distintas acepciones y notas gramaticales que recogen el uso mencionado: I) nada [...] gram. 1 Es invariable; se usa solo o antes del verbo. Detrás del verbo y precediendo a éste una negación conserva el sentido etimológico: no quiero ~; nunca pedía ~; 3 Es siempre correlativo de otra negación a la cual refuerza con el sentido etimológico (DGLE). nada [...] GRAM si está pospuesta al verbo, debe preceder otro elemento negativo: No tengo nada. Pero: Nada tengo (GDLE).

Nada lleva asociado un valor negativo que, en gran medida, conserva la locución de la cual forma parte, como se muestra a continuación. Con objeto de describir la unidad para nada, hemos consultado una serie de diccionarios monolingües, generales y fraseológicos. Nuestra búsqueda no ha resultado todo lo clarificadora que hubiésemos deseado, pues tal unidad no aparece ni en el DRAE, ni en el DILE, ni en el DALE, ni siquiera en un diccionario pedagógico como es el DIPELE. En el resto de los diccionarios generales utilizados se ofrecen definiciones bastante deficientes de la unidad. Así, el GDLE. que registra la unidad bajo la entrada correspondiente a nada en el apartado de locuciones (“LOC”), recurre a un simple sinónimo, a saber, “inútilmente”. También recurre a la definición sinonímica un diccionario de neologismos como es el DVUA: Nada (para) loc.adv. En absoluto, de ningún modo. El franquismo pertenece al pasado y ya no interesa para nada –asegura Isabel, alumna también del tercer curso de Bachillerato del INB Monserrat– sólo sé lo que me han contado, pero es una etapa histórica superada y ahora nadie se va a molestar en celebrar el décimosexto aniversario (Tiempo, n.º 499, 25-XI-91, 62a).

El más reciente de los diccionarios generales, de clara orientación didáctica, el CDUEA, recoge bajo la entrada correspondiente a nada, una lista de expresiones multiverbales entre las cuales figura para nada, señalada como no recogida en el DRAE, y definida de la siguiente forma: “col. Expresión que se utiliza para expresar negación total o rechazo absoluto: Para nada pienso aceptar la propuesta que me haces”. Por otro lado, la mayoría de los diccionarios fraseológicos consultados no recoge tampoco la UF objeto de nuestro estudio. Ello se debe a que en la inclusión de unidades se han seguido criterios de opacidad semántica o metaforización, como ocurre, por ejemplo, en los repertorios de Iribarren (1994), Domín-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 114

114

Capítulo IV

guez (1975), Candón y Bonnet (1994 [1993]) y Doval (1995). Tan sólo hemos encontrado esta unidad en el DPL y en el DFEM. El primero incluye bastantes locuciones de significado parcialmente traslaticio y literal, y recoge esta unidad junto a otras locuciones con nada como elemento constitutivo, definiéndola como “Nada en absoluto”. En el DFEM nos encontramos con algo parecido, aunque en este caso se indica, ademas, el ámbito de aplicación de la unidad, señalándola como propia de situaciones en las que se debe o se puede hablar oficialmente: nada [...] para nada (f.) [Refuerzo enfático de una negación] “Era un hombre muy liberal y no se mezclaba para nada en las opiniones de los demás”.

Resumiendo, la locución para nada presenta un contenido semántico de carácter esencialmente negativo, relacionado con la imposibilidad o inutilidad de algo. Los datos del corpus refuerzan las apreciaciones anteriores, mostrando, al mismo tiempo, una interesante fluctuación en los usos “traslaticios” y “literales” de la unidad en cuestión. Sólo un 1,40% de las ocurrencias de la secuencia formada por para nada presenta un significado meramente compositivo, claramente literal (ej. 5). Éste resulta aún más evidente en aquellos casos en los que sigue a la secuencia algún tipo de modificación (ej. 6). [5] Ven aquí. ¿Para qué? No, PARA NADA. Voy a buscar un platillo, ¿no querías el jamón de York en platillo? El verde. Lo voy a poner en mi platillo. No, espera, espera, espera... [6] No quedaba en Juan Lucas curiosidad PARA NADA en la tierra, pero el general Castaños suponía para él el resplandor de la gloria y el recuerdo de La Vicaria.

Junto a este bloque “compositivo”, se registran usos (un 2,50%) que ya apuntan claramente a una idea de énfasis, de intensificación de la negación, que refuerzan, incluso, la idea de inutilidad (uno de los valores propios del significado compacto de la unidad), como se observa en el siguiente ejemplo: [7] Además roba cosas que no valen PARA NADA. Ahora le ha dado por los baberos. ¿Por qué ha cogido todos esos baberos, eh? ¿Es que no tenemos ya bastantes en casa?

Siguiendo esta escala semántica, aproximadamente un 34,50% de los casos permite una doble interpretación, literal –’para ninguna cosa’– y figurativa –’en absoluto’– como se observa en el ejemplo nº 8:

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 115

Usos y valores de para nada

115

[8] ¡Mis padres no tienen nada que ver! –dice casi gritando. Tú no tienes que hablar de ellos PARA NADA. No tienes ni que nombrarlos, ¿lo oyes? Lo que pase o no pase por causa de mis padres, sólo me importa a mí.

Por otra parte, la secuencia para nada presenta en un 59,52% de los casos un significado compacto, unitario y figurativo. No admite la interpretación literal, y, la mayoría de las veces, equivale a un adverbio de negación (ejs. 9 y 10). Ello resulta todavía más evidente cuando la unidad funciona como colocativo, intensificando la base verbal y formando un “bloque” con ésta, lo cual ocurre en un 2,80% de los casos (ej. 11). [9] El tópico de “saque su dinero cuando quiera y donde quiera” PARA NADA responde a la realidad. Como siempre, la tecnología tiene sus fallos. [10] Cuenta que se siente muy a gusto en el escenario, pero aclara que “PARA NADA soy de las que dicen que se morirán cantando”. [11] Los cambios de Fuentes y Loinaz por Imanol y Belloso no sirvieron PARA NADA, y el partido concluyó con el 0-0 inicial, en parte gracias a los posibles desaciertos del colegiado gallego Garda de Loza, al que se le reclamaron dos penaltis, uno en cada área, que no pitó.

5. Distribución y funciones oracionales El corpus Vox-Bibliograf consta de un componente escrito (el 75%) y un componente oral (el 25%). De acuerdo con los datos que manejamos, la secuencia para nada aparece 126 veces en la parte escrita (74,99%), más frecuentemente en los textos de no ficción (79 veces, 47,02%) que en los de ficción (47 veces, 27,97%). En la parte oral se registran 42 ocurrencias (un 25%). Es decir, no se observan grandes diferencias de distribución según se trate de los componentes oral o escrito del corpus. En cuanto a la posición de la unidad dentro del texto, sólo un 4,76% de las veces presenta independencia enunciativa (ej. 12), y siempre dentro del componente oral. En estos casos, su funcionamiento se asemeja al de las fórmulas rutinarias, concretamente a las psicosociales expresivas que denotan recusación, del tipo ¡ni hablar!, de eso nada, qué va, etc., (cf. Corpas Pastor, 1996: 170-213). [12] Sí. Es cogerle el ritmo. Efectivamente. ¿Esta persona necesitaría viajar o no? No... PARA NADA. PARA NADA. No. En este momento no hay ninguna persona... volante en la librería. No... no hay ninguna persona que viaje... Antes sí, ¿no? porque...

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 116

116

Capítulo IV

El resto de las veces, esta secuencia funciona como elemento oracional. En posición intermedia (35,92%), la locución puede aparecer tras el núcleo verbal (ej. 15), o bien puede ir antepuesta al verbo (ej. 14). En este segundo caso, la unidad equivale a un adverbio de negación y conserva el valor negativo etimológico de nada, descrito en el apartado anterior. [13] Pero Cayetano Taronjí no se dio por ofendido y manifestó, con una placidez no menos impropia, que al señor no le convenía PARA NADA sacar las cosas de quicio, ¿a qué conduce discutir vamos a ver si ni siquiera hemos hablado de condiciones? [14] Han de continuar viviendo en casa de los padres sometidas a ellos, obligadas a ayudar en unas faenas caseras que PARA NADA les ilusionan, con escaso tiempo libre disponible. con poco dinero para sus gustos personales, pendientes de los medios audiovisuales que las fijan al hogar, controladas por los familiares y con prohibiciones expresas relativas a la vida amorosa y a las salidas nocturnas.

Según se desprende de los datos que manejamos, la posición final es la más frecuente, dándose en un 59,52% del total de ocurrencias. La posición final puede ser absoluta, como ya vimos en el ejemplo nº 7; o puede ser relativa, dándose la locución dentro de una oración subordinada –en la cláusula principal (ej. 15) o en la subordinada (ej. 16)– o, incluso, entre oraciones coordinadas, generalmente al final de la primera de ellas (ej. 17). [15] ... el antiguo Hospital del Tórax se va deteriorando y el dinero que en él se ha gastado no va a servir PARA NADA, puesto que el inmueble está siendo visitado con frecuencia por los amigos de lo ajeno, que están haciendo su agosto particular. [16] ... un regreso al espíritu abierto e impaciente de los primeros años, cuando no parecía haber límites PARA NADA, desbordaba el corazón cargado de emociones, y el ímpetu juvenil quería atropellar y romper las cortapisas que el mundo opone? [17] ... papel clavado. Me acerco y lo despego. Está escrito por mi mujer. Dice: “Pedro, me voy. Tú no me necesitas PARA NADA y te alegrarás. Yo, por mi parte, podré encontrar alguna paz lejos de ti. He ido al Banco del poco dinero...”

Por otro lado, y siguiendo la terminología de Alarcos Llorach (1995 [1994]), las dos funciones oracionales básicas desempeñadas por la locución para nada son, fundamentalmente, las de adyacente circunstancial (ej. 18) y objeto preposicional (ej. 19): [18] Su existencia no interfería PARA NADA en la inclinación de las gentes a tratarse por sí mismas, y su poder se restringía estrictamente a su saber práctico.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 117

Usos y valores de para nada

117

[19] –No sólo con fe se curará, amigo mío –les dice cariñosamente, poniendo la voz un poco confidencial–, la fe sin obras es fe muerta, una fe que no sirve PARA NADA.

Ocasionalmente, para nada puede llegar a funcionar como una oración independiente. Se trata de un uso similar al de las fórmulas de recusación, ya señalado más arriba. Otras veces, esta unidad puede funcionar simplemente como complemento de un sustantivo (ej. 20) o de un infinitivo sustantivado (ej. 21). [20] Pero a título general no está de más indicar que el ascenso de Roma al rango de potencia única e indiscutida empezó a agudizar un fenómeno PARA NADA manifiesto en los comienzos. [21] Cumple ahora con su oficio penúltimo: aguardar paciente, días y años, a que unos desocupados quieran darse una vueltecita por Sevilla, sin considerar cuanto le aburre y cansa ese ir PARA NADA por las calles de siempre.

6. Propiedades combinatorias Quizá uno de los rasgos más llamativos de las unidades fraseológicas sea la restricción que éstas suelen presentar en el eje sintagmático de la lengua, ya venga determinada por el sistema, la norma o el habla. La unidad objeto de nuestro estudio es un ejemplo más de ello. En lo referente al sistema, para nada no permite cambio alguno en el inventario de sus componentes (cf. *para ninguna cosa, para cosa alguna, *a fin de nada. *a fin de ninguna cosa). Se trata de la fijación interna característica de las locuciones. Desde el punto de vista de la norma, esta unidad no se combina libremente, sin más, con otras unidades de la lengua. El análisis realizado revela ciertas preferencias de construcción. La investigación de la extensión colocacional del nódulo [PARA NADA] nos ha proporcionado unos resultados muy interesantes. Tras analizar las unidades situadas a la izquierda y a la derecha del nódulo, se observa que los patrones colocacionales significativos se dan en el bloque de la izquierda, salvo aquellos casos en los que la locución precede al elemento verbal y sustituye al adverbio de negación no, lo cual ocurre en un 7,14% de los casos7. A una distancia colocacional de –5, es decir, hasta cinco posiciones a la izquierda del nódulo, llama la atención el elevado número de ocurrencias en las

7 Concretamente, la unidad se antepone a los siguientes verbos: contar [con], depender, ilusionar, necesitar, ocuparse [de], pretender, querer, responder, ser servir y tener (2 veces).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 118

118

Capítulo IV

que para nada se combina con el adverbio de negación no –109 veces, es decir, un 64,88% del total–, así como otras palabras que denotan negación, carencia o falta de alguna cosa: la conjunción copulativa ni (3 veces, 1,78%), la preposición sin (10 veces, 5,95%), los indefinidos ninguno/ninguna (2 veces, 1,19%), el adverbio de negación tampoco (2 veces, 1,19%) y el adverbio temporal nunca (1 vez, 0,59%). Esta distribución apunta a la existencia de un esquema fraseológico que concuerda con la descripción semántica de la unidad, y que podríamos resumir así: CUADRO 1 NO/NI SIN NINGUNO/A NUNCA TAMPOCO

VERBO

PARA NADA

Frente a este esquema, se registra otro similar, pero bastante menos frecuente, donde los adverbios son de cantidad –tanto (0,59%), todo (1,19%) y mucho (0,59%)–, y el verbo va generalmente elidido (ej. 22). [22] La careta de amabilidad, el fugaz sosiego. El tabaco quemado... Todo PARA NADA, porque cuando el conde reconoció la gran labor del religioso al pie del patíbulo, donde tantas almas había enderezado hacia el cielo...

El esquema queda de la siguiente manera: CUADRO 2 TODO TANTO MUCHO

[[VERBO]]

PARA NADA

Conforme se va reduciendo la distancia colocacional a una o dos posiciones a la izquierda del nódulo (-2/1), se obtienen resultados esclarecedores en lo referente a la identidad del componente verbal de estas combinaciones. En la mayoría de los casos, la locución objeto de nuestro estudio forma colocaciones del tipo 5 –VERBO + ADVERBIO. La unidad funciona, entonces, como colocativo de las distintas bases verbales con las que se combina, y a las que aporta un contenido semántico de modo o de intensidad.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 119

Usos y valores de para nada

119

La base verbal más frecuente es SERVIR, que ocurre 37 veces en el corpus (el 22,08% del total), en la forma canónica no servir (algo/alguien) para nada8. También se coloca con un verbo sinónimo del anterior –VALER–, aunque mucho menos frecuentemente (5 veces, es decir, un 2,97%) y siempre conjugado en tercera persona. Por orden decreciente de frecuencia le siguen TENER (14 veces, 8,33%); NECESITAR (7 veces, 4,16%); ESTAR (5 veces, 2,97%): INTERESAR y SER (4 veces cada uno, 2,38% respectivamente); CONTAR [CON], HABER y QUERER (3 veces cada uno, 1,78% respectivamente); AFECTAR, DEPENDER [DE], INTERVENIR, MENCIONAR y VER (2 veces cada uno, 1,19%). En los datos que manejamos se registra también una larga serie de verbos con los que el nódulo sólo se combina una vez en el corpus, y que representan individualmente el 0,59% de las ocurrencias, a saber, AJUSTARSE, ALTERAR, ALUDIR, APELAR, AYUDAR, CAMBIAR, CONVENIR, DAR, DESCARTAR, DOMINAR, ENCONTRAR, ESPERAR, EXISTIR, FIGURAR, GASTAR, GUSTAR, HABLAR, ILUSIONAR, IMPORTAR, INFLUIR, INTERFERIR, INTERRUMPIR, IR, LADRAR, MEDIAR, MOVERSE, OCUPARSE [DE], PARECER, PEDIR, PENSAR, PODER, PRECISAR, PRETENDER, QUEJARSE, QUEDAR, REFERIRSE, REPARAR, RESIDIR, RESPONDER, RESTRINGIR, SALIR, TOCAR Y VENDER. En su mayoría, estos verbos constituyen colocados principales de la locución para nada. Sin embargo, algunas de las combinaciones anteriores entran más bien en la categoría de colocados extendidos, por cuanto el verbo presenta un significado delexicalizado y es el sustantivo complemento el que, por su carga semántica, se coloca con la locución en cuestión. Esta situación se da frecuentemente con los verbos haber y tener. En el primer caso, tiempo es el sustantivo que forma la colocación extendida junto con haber. [22] Yo creo que no hay tiempo PARA NADA; yo creo que si el tiempo sobra es porque, como es tan poco, no sabemos lo que hacer con él. [23] Hasta entonces, y a pesar de que faltan trece días, no hay tiempo PARA NADA. [24] Pero no habría tiempo PARA NADA puesto que el joven púgil falleció en la ambulancia que le trasladaba a la capital del estado de Michoacán, por lo que regresó al lugar de partida.

También encontramos este sustantivo en colocación con otros verbos, como dar, encontrar y tener.

8 Sólo se registra un caso en el que la locución precede al verbo servir y sustituye al adverbio de negación no.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 120

120

Capítulo IV

[25] En efecto, un opositor caricaturizado es un personaje que: 1. No encuentra tiempo PARA NADA. Tiene que dedicar tanto a sus libros y clases que no dispone más que de momentos contados para sus amigos. [26] La vida a bordo es muy normal. Se trabaja mucho y no da tiempo PARA NADA más. [27]... una persona que está trabajando... 16, 20 horas, 12 horas, no tiene tiempo PARA NADA, ni siquiera para ir a un abogao, por muy bueno que sea, a pedirle... a poderle preguntar o ir al sindicato...

De hecho, para nada aparece tres veces en combinación con tener tiempo, según se desprende de los datos que manejamos. Otras colocaciones extendidas –colocaciones recursivas– del nódulo que nos ocupa son tener en cuenta (2 veces), tener paciencia, tener suerte, así como perífrasis del tipo tener que entrar/esconder/exponer/hablar/ver. Si completamos el primer cuadro con los datos relativos a las colocaciones verbales de la locución para nada, se obtiene un esquema bastante claro de sus propiedades combinatorias: CUADRO 3 NO/NI SIN NINGUNO/A NUNCA TAMPOCO

tener → necesitar valer estar interesar ser querer haber → contar [con] afectar depender intervenir mencionar

PARA NADA

7. Conclusión El estudio de la fraseología española mediante el uso de corpus textuales abre nuevas posibilidades para los estudios de lexicología y lexicografía. En cierta manera, se trata de analizar en profundidad el comportamiento lingüístico de unas unidades sobre las cuales se ha sabido muy poco hasta la fecha. Existen

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 121

Usos y valores de para nada

121

unidades fraseológicas como para nada que no han recibido la atención que merecen en las monografías sobre el tema, y, por ello, tampoco aparecen rigurosamente descritas en los repertorios lexicográficos al uso. Los resultados de nuestra investigación revelan unos patrones morfosintácticos, semánticos y combinatorios propios y característicos de la unidad que nos ocupa, y que resumiremos muy brevemente. Quizá el rasgo más sobresaliente sea la restricción que esta locución presenta en todos sus aspectos. Desde el punto de vista gramatical, rara vez admite algún tipo de modificación y, cuando lo hace, implica una lectura “compositiva” de la unidad. Según se desprende de los datos manejados, el contenido semántico de la locución fluctúa entre sus acepciones “traslaticia” y “literal”, predominando la lectura doble, y, en cualquier caso, manteniéndose la carga intensificadora de la unidad. Por lo general, la locución para nada suele desempeñar las funciones oracionales básicas de adyacente circunstancial y objeto preposicional. Frecuentemente va en posición final, con carácter de cierre oracional. Ahora bien, también es posible encontrarla en posiciones intermedias dentro de la frase, destacando los usos en los que se antepone al núcleo verbal y equivale al adverbio de negación no, al cual sustituye. Quizá uno de los datos mas reveladores del presente estudio sea la existencia de ocurrencias en las que la unidad presenta independencia enunciativa y funciona de forma similar a las fórmulas de recusación. A pesar de que el número de ejemplos encontrados ha sido más bien escaso, constituyen una muestra representativa del uso de esta unidad fraseológica en el español de hoy día. Consideramos que el análisis de corpus orales extensos, en los que se recoja la lengua hablada de nuestros días, mostrarán claramente una especialización de la locución similar a la de otras locuciones adverbiales como sin duda o por supuesto, que funcionan como fórmulas de asentimiento (cf. Corpas Pastor, 1996; Ruiz Gurillo, 1998). Las restricciones de la unidad se ponen de manifiesto de forma palpable en el nivel léxico. Las combinaciones en el eje sintagmático revelan una preferencia de la locución por aparecer correlativamente con el adverbio de negación no o con otras unidades de significado negativo, como ni, sin, ninguno/-a, nunca o tampoco. La casilla correspondiente al verbo suele ir ocupada la mayor parte de las veces por el verbo servir y, en menor medida, por su sinónimo colocacional valer. Le siguen en la escala verbos como necesitar, contar, interesar, depender, afectar, intervenir o mencionar. También forma colocaciones extendidas –fundamentalmente con el sustantivo tiempo– en combinación con los verbos haber, tener y, en menor medida, dar o encontrar. El análisis realizado a lo largo de estas páginas es una muestra de lo que se puede hacer mediante la simple extracción de concordancias a partir de un corpus actual. Estamos convencidos de que la incorporación de estos datos supon-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 122

122

Capítulo IV

drá una mejora sensible de la descripción lexicográfica de las unidades fraseológicas a muy corto plazo, conforme vayan siendo analizadas y descritas. Referencias bibliográficas ACADEMIA ESPAÑOLA (RAE) (1992): Diccionario de la lengua española. 21ª ed. Madrid: Espasa-Calpe [DRAE]. ALCINA FRANCH, J., y BLECUA, J. M. (1983 [1975]): Gramática española. 4ª ed. Barcelona: Ariel. AGUILAR-AMAT CASTILLO, A. (1993): “En torno a la combinatoria del léxico: los conceptos de colocación e idiomatismo”, en: MARTÍN VIDE, C. (Ed.): Actas del XI Congreso de Lenguajes Naturales y Lenguajes Formales. Barcelona: PPU, 267-272. ALARCOS LLORACH, E. (1995 [1994]): Gramática de la lengua española. Madrid: EspasaCalpe. ALVAR EZQUERRA, M. (dir.) (1997): Diccionario General Ilustrado de la Lengua Española. Nueva ed. Barcelona: Vox [DGILE]. — (dir.) (1995): Diccionario para la enseñanza de la lengua española. Madrid: Universidad de Alcalá de Henares/Barcelona: Biblograf [DIPELE]. — (dir.) (1994): Diccionario de Voces de Uso Actual. Madrid: Arco/Libros [DVUA]. — (dir.) (1990): Diccionario actual de la lengua española. Barcelona: Biblograf [DALE]. ALVAR EZQUERRA, M.; BLANCO RODRÍGUEZ, M. J., y PÉREZ LAGOS, F. (1994): “Diseño de un corpus español en el marco de un corpus europeo”, en: ALVAR EZQUERRA, M., y VILLENA PONSODA, J. A. (Eds.): Estudios para un corpus de español (“Anejo n.º 7 de Analecta Malacitana”). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 9-29. CABALLERO, R. (1905 [1891]): Diccionario de modismos. 2ª ed. Madrid: Librería Eugenio García Rico. CASARES, J. (1992 [1959]): Diccionario ideológico de la lengua española. 2ª ed. Barcelona: Gustavo Gili. [DILE] — (1992 [1950]): Introducción a la lexicografía moderna. Madrid: CSIC. CANDÓN, M., y BONNET, E. (1994 [1993]): A buen entendedor... Diccionario de frases hechas de la lengua castellana. 5ª ed. Madrid: Anaya/Mario Muchnik. CARBONELL BASSET, D. (1995): Diccionario fraseológico. Inglés-castellano. Castellanoinglés, Barcelona, Ediciones del Serbal. — (1996): Diccionano de refranes, proverbios, dichos, adagios. Castellano e inglés. Barcelona: Ediciones del Serbal. Clave. Diccionario de uso del español actual. (1996): Madrid, S.M. [CDUEA]. CORPAS PASTOR, G. (1996): Manual de fraseología española. Madrid: Gredos. — (En prensa): “El uso de paremias en un corpus peninsular actual”, en: WOTJAK, G., y GARCÍA PAGE, M. (Eds.) Estudios de fraseología y fraseografía del español moderno (“Lingüística Iberoamericana”). Munich: Verwuert. DOMÍNGUEZ, J. M. (1975): Fraseología española en su contexto. 2ª ed. Munich: Hueber. DOVAL, G. (1995): Del hecho al dicho. Madrid: Ediciones del Prado.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 123

Usos y valores de para nada

123

FERNÁNDEZ RAMÍREZ, S. (1997): Gramática española 3.2. El pronombre. Madrid: Arco/Libros. FONTANILLO MERINO. E. (Ed.) (1993): Larousse Diccionario Práctico de Locuciones. Barcelona: Larousse Planeta [DPL]. GUIA, J. (1995): “Introducciò a la fraseologia del Tirant lo Blanc”, en: Afers 20, 129-142. GUIA, J., y CONCA, M. (En prensa): “Manlleus fraseològics i altres intertextualitzacions de les Històries troianes al Tirant lo Blanc”, en: Atti dei Convegno dell’Associazione Italiana di Studi Catalani (Cagliari, octubre 1995). GILI GAYA, S. (1982[1961]): Curso superior de sintaxis española. 14ª ed. Barcelona: Biblograf. HAENSCH, G.; WOLF, L.; ETTINGER, S., y WERNER, R. (1982): La lexicografía. De la lingüística teórica a la lexicografía práctica. Madrid: Gredos. HANSSEN. F. (1911): “La preposición ‘para’”. Bulletin Hispanique XIII, 40-46. IRIBARREN, J. M. (1994 [1954]): El porqué de los dichos. Sentido, origen y anécdota de los dichos, modismos y frases proverbiales de España con otras muchas curiosidades (Estudio introductorio e índices de J. M. Romera). 6ª ed. Pamplona: Gobierno de Navarra, Departamento de Educación y Cultura. LÓPEZ, M. L. (1970): Problemas y métodos en el análisis de preposicione. Madrid: Gredos. MARTÍNEZ MARÍN, J. (1996): Estudios de fraseología española. Málaga: Ágora. MORERA PÉREZ, M. (1988): Estructura semántica del sistema preposicional del español moderno y sus campos de usos. Excmo. Cabildo Insular de Fuerteventura, Puerto del Rosario. POTTIER, B. (1962): Systématique des éléments de relation. Étude de morphosyntaxe structurale romane, París, Klincksiek. — (1975): Gramática del español. Madrid: Alcalá. PÉNET, C., y GÓMEZ, C. (1995): ¡No me digas! Les six mille et une expressions de l’espagnol parlé. Chennevière-sur-Marne: Assimil. RIIHO, T. (1979): Por y para. Estudio sobre los orígenes y evolución de una oposición prepositiva iberrománica. Helsinki. ROCA-PONS, J. (1980 [1960]): Introducción a la gramática (con especial referencia a la lengua española). 5ª ed. Barcelona: Teide. RUIZ GURILLO, L. (1997): Aspectos de fraseología teórica española. Valencia: Universitat de València. — (1998): La fraseología del español coloquial. Barcelona: Ariel. SÁNCHEZ PÉREZ, A. (1991 [1985]): Gran diccionario de la lengua española. 4ª ed. Madrid: Sociedad General Española de Librería. [GDLE] SECO, M. (1989): Gramática esencial del español. Introducción al estudio de la lengua. 2ª ed. Madrid: Espasa-Calpe. SINCLAIR, J. (1987): Looking up. An Account of the COBUILD Project in Lexical Computing, Londres-Glasgow: Collins. TRUJILLO, R. (1971): “Notas para un estudio de las preposiciones españolas”. Thesaurus XXVI, 234-279. VARELA, F., y KUBARTH, H. (1994): Diccionario fraseológico del español moderno. Madrid: Gredos. [DFEM]

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 124

124

Capítulo IV

ZULUAGA, A. (1980): Introducción al estudio de las expresiones fija (“Studia Románica et Linguistica” 10). Francfort: Peter D. Lang.

Lista de abreviaturas de diccionarios CDUEA DAL DFEM DGILE DILE DiPELE DPL DRAE OVUA GDLE

Clave. Diccionario de uso del español actual (1996). Diccionario Actual de la Lengua Española, por M. Alvar Ezquerra (dir.) (1990). Diccionario fraseológico del español moderno, por F. Varela y H. Kubarth (dir.) (1994). Diccionario General Ilustrado de la Lengua Española, por M. Alvar Ezquerra (dir.) (1997). Diccionario ideológico de la lengua española, por J. Casares (1992 [1959]) Diccionario para la enseñanza de la lengua española, por M. Alvar Ezquerra (dir) (1995). Larousse Diccionario Práctico de Locuciones, por E. Fontanillo Merino (Ed.) (1993). Diccionario de la lengua española, por la Real Academia Española (1992). Diccionario de Voces de Uso Actual, por M. Alvar Ezquerra (dir). (1994). Gran diccionario de la lengua española, por A. Sánchez Pérez (1991 [1985]).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 125

CAPÍTULO V CRITERIOS GENERALES DE CLASIFICACIÓN DEL UNIVERSO FRASEOLÓGICO DE LAS LENGUAS, CON EJEMPLOS TOMADOS DEL ESPAÑOL Y DEL INGLÉS1

1. Introducción En los últimos años estamos asistiendo a un espectacular avance de la fraseología como disciplina científica. Ello se ha debido a la conjunción de factores de muy diversa índole. Así, el advenimiento del contextualismo británico, los desarrollos del análisis del discurso y la lingüística del texto propiciaron el uso de unidades léxicas superiores a la palabra aislada como base del análisis lingüístico, frente a los postulados tradicionales del estructuralismo y el generativismo. Al mismo tiempo, la lingüística del corpus vino a confirmar, ya desde sus primeros albores, la existencia y productividad de las unidades fraseológicas de las lenguas, lo cual se ha visto corroborado por distintos estudios psicolingüísticos que revelan la presencia significativa de tales unidades en la adquisición y en el procesamiento de las lenguas (cf. Corpas Pastor, en prensa). Como prueba del interés sin precedentes que la fraseología despierta fuera y dentro de nuestras fronteras, mencionaremos los congresos internacionales que los fraseológos europeos vienen celebrando desde 1981 (cf. MatesËic´, 1983; Burger y Zett, 1987; Korhonen, 1987; Gréciano, 1989; Palm, 1991; y Sandig, 1994); así como los distintos seminarios y reuniones dedicados a este tema, entre los cuales destacan el International Symposium on Phraseology –que ya cuenta con dos ediciones en su haber (Leeds, 1994, y Moscú, 1996) y una tercera programada para 1998 en Stuttgart– o los distintos coloquios celebrados en Saint-Cloud, auspiciados por el Institut National de la Langue Française desde 1994, que han dado lugar a la publicación de dos volúmenes de actas (Martins-Baltar, 1995; Fiala, Lafon y Piguet, 1997) y al que seguirá otro que se encuentra actualmente en preparación, editado por Michel Martins-Baltar2.

1

Una versión anterior de este trabajo fue presentada al I Coloquio Galego de Fraseoloxía (Santiago de Compostela, 15-18 de septiembre de 1997). Los resultados obtenidos se enmarcan en una investigación a gran escala que estamos realizando sobre el sistema fraseológico de la lengua española, subvencionada por la Fundación Caja de Madrid. 2 A este respecto, resulta significativo la existencia desde 1994 de una sección sobre fraseología en los congresos bianuales de EURALEX (European Association of Lexicography).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 126

126

Capítulo V

La filología española no ha permanecido ajena a esta nueva tendencia de la investigación lingüística, como se puso de relieve en el I Congreso Internacional de Paremiología (Madrid, 1996), cuya segunda edición tendrá lugar en Córdoba en 1998; o en el I Coloquio Galego de Fraseoloxía (Santiago de Compostela, 1997), que ha reunido a los especialistas más reconocidos de la fraseología castellana, gallega, vasca y catalana. Por otra parte, los diversos diccionarios, monografías y colecciones que han visto la luz recientemente atestiguan el buen momento de la disciplina. Desde la vertiente aplicada cabe mencionar la proliferación de colecciones y repertorios lexicográficos, como los de Fontanillo Merino (1993), Candón y Bonnet (1994 [1993]), Varela y Kubarth (1994), Doval (1995) y Pénet y Gómez (1995), que vienen a paliar, en cierta medida, la escasez de obras de este tipo. La vertiente teórico-descriptiva, más desatendida durante años, también comienza a despuntar con fuerza. Baste señalar la colección de artículos de Martínez Marín (1996), el análisis global del sistema fraseológico español realizado por Corpas Pastor (1996), o el estudio de Ruiz Gurillo (en prensa) sobre la fraseología de la lengua hablada, con especial referencia a los valores discursivos y textuales de estas unidades. Ahora bien, este panorama tan brillante se ve ensombrecido por una de las deficiencias más acusadas de esta nueva disciplina: la falta de acuerdo en los criterios de inclusión y de clasificación que posibiliten un avance constante y un ambiente de cooperación en la investigación fraseológica. En las páginas que siguen a continuación nos ocuparemos, precisamente, de las unidades que constituyen el caudal fraseológico de las lenguas, así como de los rasgos más frecuentemente utilizados para el establecimiento de las distintas taxonomías. Nuestro objetivo no es otro que el establecimiento de criterios generales aplicables a más de una lengua. 2. Delimitación del universo fraseológico Las unidades idiomáticas han sido consideradas tradicionalmente como el prototipo y objeto central de la fraseología. Otros tipos de unidades, cuya cohesión e institucionalización son menores, han resultado menos evidentes para el investigador. No debe extrañar, pues, que el criterio de inclusión por excelencia haya sido el semántico, aunque otros criterios, como son la estabilidad y la fijación de estas unidades, hayan tenido también su importancia, dependiendo de las distintas corrientes de la investigación fraseológica. Tradicionalmente se han distinguido tres grandes bloques en el estudio de las combinaciones de palabras: la lingüística de la antigua Unión Soviética y sus estribaciones en otros estados del bloque oriental, por un lado; el estructuralismo

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 127

Criterios generales de clasificación

127

europeo occidental antiguo –especialmente la escuela de Ginebra– y el nuevo, por otro lado; y, finalmente, la lingüística norteamericana, a saber, la gramática generativa transformacional, junto con otras teorías competidoras (Thun, 1978). Los lingüistas de la antigua Unión Soviética, así como los del Este europeo han mostrado siempre un gran interés por las slovosocËetanije o combinaciones de palabras (Weinreich, 1970; Alexandrova y Ter-Minasova, 1987). No resulta extraño, pues, que fuera precisamente uno de ellos, Vinogradov (1947), quien confiriera a la fraseología estatus de disciplina científica. Su clasificación ha ejercido una enorme influencia tanto en los autores pertenecientes a esta corriente, como en los fraseólogos germanos, eslavos y cubanos. Los criterios de inclusión utilizados en este bloque han sido, generalmente, más amplios que en los otros dos. Como expone Kótova (en prensa), para los autores inmersos en esta corriente, la fraseología en sentido estricto engloba unidades fijas, funcionalmente equivalentes a una categoría gramatical dada, que pueden ser inmotivadas y semánticamente compactas (“adherencias”), como hacer de tripas corazón; o bien presentan cierto grado de motivación y composicionalidad (“unidades”), por ejemplo, tabla de salvación. La fraseología en sentido amplio incluye, además, otras unidades superiores del tipo Las paredes oyen y Buenos días (“expresiones, refranes, citas, locuciones proverbiales”), y las combinaciones de palabras que, aún siendo motivadas y (parcialmente) compositivas, presentan restricciones de combinación en alguno de sus componentes, como entablar conversación y dar comienzo (“combinaciones fraseológicas”). Siguiendo las enseñanzas de Vinogradov, el concepto de motivación ha servido de piedra angular en la que se sustentan la mayoría de los estudios soviéticos de fraseología. Otros conceptos clave han sido el de contexto fijo con determinación semántica (Amosova, 1963); y la frecuencia de uso, la fijación y la idiomaticidad, entendida como irregularidad sintáctica y semántica (Reichstein, 1973; Mel’cËuk, 1960). Desde un principio, los lingüistas de este primer bloque se han interesado por las colocaciones y los problemas que éstas plantean en la traducción del ruso, abarcando al mismo tiempo los fenómenos gramaticales de rección o coligación. Mención especial merece la teoría Sentido-Texto, desarrollada por I. Mel’cËuk y colaboradores (Mel’cËuk y ZÈolkovskij, 1970, 1984; Mel’cËuk, 1981; Mel’cËuk y Pertsov, 1987; Mel’cËuk y Polguère, 1987; Mel’cËuk y Warner, 1994, etc.), que ha sido concebida, precisamente, para dar cuenta de las restricciones de combinabilidad de las lenguas. Los estudios soviéticos sobre fraseología han influido –y siguen influyendo– poderosamente en los autores del segundo bloque. Una gran parte de los trabajos sobre fraseología del estructuralismo europeo incluyen numerosas referencias bibliográficas a autores del primer bloque (cf. Thun, 1978; Haensch et al., 1982; Zuluaga, 1980; Gläser, 1986; Casares, 1992 [1950], etc.). Muchos lingüistas alemanes han bebido de las fuentes soviéticas. Téngase en

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 128

128

Capítulo V

cuenta, por ejemplo, el trabajo emblemático de Häusermann (1977) sobre el alemán a partir de las concepciones clásicas de la fraseología rusa. La conexión entre ambos bloques se manifiesta, así mismo, en autores que, como Wolski (1982), se han ocupado de divulgar las investigaciones fraseológicas de la extinta Unión Soviética mediante traducciones al alemán y compilaciones bibliográficas. El modelo de centro y periferia de la Escuela de Praga ha sido determinante a la hora de establecer los criterios de inclusión de unidades fraseológicas. Desde la primera edición de la monografía de Fleischer (1997[1982]), este concepto ha sido utilizado para separar los fraseologismos fijos e idiomáticos (el centro), de aquellos que sólo presentan fijación (la periferia). La inclusión de sólo el centro o del centro y la periferia no ha estado exenta de polémica. Para Schmid (1989), por ejemplo, un fraseologismo es una combinación fija3 de al menos dos palabras, que funciona como parte integrante de una oración (cf. MatesËic´, 1983), dentro de la cual cumple las mismas funciones que un sustantivo, un verbo, un adverbio, una preposición, etc. Rossenbeck (1989), además, considera que solamente es lícito hablar de fraseologismos en sentido estricto para referirse a las unidades idiomáticas, distinguiéndolas de otros tipos. Desde esta visión restringida, fenómenos léxicos en el nivel oracional quedan fuera del concepto de fraseologismo, aunque compartan otras muchas características de las combinaciones de palabras. Por el contrario, Kühn (1984), desde una concepción más amplia, considera unidades fraseológicas todas aquellas combinaciones de palabras que presenten cierta estabilidad. Reserva el término Phraseologismus para aquellas combinaciones compactas que se usan generalmente como parte de oraciones, pero que no se pueden suscribir convencionalmente a una situación determinada, lo cual las diferencia de las fórmulas rutinarias, que constituyen el segundo subgrupo. La investigación de las colocaciones, por otra parte, se ha centrado en las perífrasis verbales con verbo soporte, del tipo poner en funcionamiento o hacer alusión (cf. Häusermann, 1977). Paulatinamente se han ido estudiando otros tipos, gracias, sobre todo, a las aportaciones de Hausmann (1977, 1979, 1984, 1985, 1989) en este campo. Como consecuencia de estos trabajos, algunos estudiosos (por ejemplo Gläser, 1986, en su trabajo sobre la fraseología del inglés basada en las teorías alemanas) han extendido el concepto restringido de fraseologismo para que incluya no sólo las combinaciones equivalentes a palabras, sino también todas aquellas que presentan estabilidad formal, unida o no

3

La fijación de estas unidades constituye también el rasgo distintivo para los fraseólogos franceses. Véanse, a este respecto, los artículos contenidos en Martins-Baltar (1995, en prensa) y Fiala et al. (1997).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 129

Criterios generales de clasificación

129

a cierta estabilidad semántica, y que funcionan en el nivel sintagmático u oracional. Otros autores han adoptado también esta posición más amplia que abarca las colocaciones, como, por ejemplo, Burgschmidt y Perkins (1985), cuya postura queda claramente expuesta en el propio título de su monografía: Phraseologie. Kollokationen - Phraseme - Idiome. La postura contraria la encontramos en los trabajos de Zuluaga (1997, en prensa), profesor colombiano afincado en Tubinga, quien considera que las colocaciones quedan fuera del ámbito de la fraseología, ya que se trata de meras solidaridades léxicas que pertenecen más bien a la gramática de las lenguas. De cualquier forma, los estudios más recientes de fraseología de este segundo bloque se están ocupando preferentemente del funcionamiento de las unidades idiomáticas en el discurso, dejando a un lado esta clase de disquisiciones teóricas (cf. B. Wotjak, 1992; Fleischer, 1997 [1982]). Los estudios anglo-norteamericanos4 sobre fraseología han tomado el criterio de idiomaticidad como criterio básico de inclusión, seleccionando como prototipo la unidad denominada idiom. Los autores inmersos en esta corriente se han centrado en la compilación de diccionarios idiomáticos donde tienen cabida unidades y combinaciones léxicas muy heterogéneas, que van desde palabras aisladas con peculiaridades semánticas o etimológicas a nursery-rhymes, pasando por toda una gama de expresiones idiomáticas o formulaicas (Arnold, 1973: 153). Los fenómenos de restricción combinatoria se han tratado como un problema de lingüística aplicada. Desde esta perspectiva práctica y pedagógica se han dejado a un lado los problemas de índole teórica que el estudio de dichas unidades pudieran plantear. De ahí que los lingüistas de este bloque muestren asistematicidad conceptual, así como una mayor diversidad terminológica. Hay que tener en cuenta que, prácticamente hasta principios de la década de los ochenta, el término abarcador en las investigaciones anglo-norteamericanas ha sido idiom, como prototipo de las unidades llamadas fixed expressions. Por esta razón, los primeros trabajos se concentran en la caracterización y clasificación del prototipo (cf. Fraser, 1970; Makkai, 1972; Fernando y Flavell, 1981, etc.). El criterio de inclusión por excelencia ha sido, como cabía esperar, el de opacidad semántica o idiomaticidad, independientemente de la función sintáctica de la unidad en cuestión. Se han tratado fundamentalmente las unidades equivalen-

4 Thun (1978) restringe este tercer bloque a los lingüistas norteamericanos, ya sigan la gramática generativa transformacional, la semántica generativa, la teoría estratificacional o cualquier otra teoría lingüística no incluida en los otros dos bloques. No obstante, también deben tener cabida aquí los trabajos de autores anglosajones, afincados en el Reino Unido o en la Europa continental.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 130

130

Capítulo V

tes a categorías gramaticales, y, en menor medida, las equivalentes a enunciados u oraciones. En cuanto a las colocaciones, la mayoría de los estudios no reconocen explícitamente la relación existente entre éstas y otros tipos de unidades fraseológicas, por lo que, o no se incluyen, o si se incluyen, se presentan como fenómenos léxicos distintos, aunque relacionados. Por ejemplo, Nattinger (1980, 1988; Nattinger y DeCarrico, 1992) hace un estudio de unidades fraseológicas, a las que denomina lexical phrases, donde no aparecen las colocaciones, aun cuando dicho autor reconoce la relación mutua existente. Sin embargo, en esta clasificación incluye, entre otras, refranes y fórmulas como A watched pot never boils y I’m very glad to meet you. De la misma forma, Alexander (1984), a pesar de la importancia que da a las colocaciones en la enseñanza de idiomas, y de reconocer la relación mutua existente (Alexander, 1989), no las incluye en su catálogo de expresiones fijas –fixed expressions–, en la que tienen cabida todo tipo de unidades, como to put the cat among the pigeons, You scratch my back and I’ll scratch yours, Long time no see!, etc. Sin embargo, el cambio de orientación que empezó a gestarse en la década de los ochenta supuso un giro hacia el aspecto más estable de las lenguas, y no tanto hacia las particularidades semánticas de las unidades sometidas a estudio. Los autores anglo-norteamericanos empiezan a tomar en consideración criterios que, como la frecuencia o la institucionalización, ya habían sido empleados tradicionalmente por los lingüistas de los otros dos bloques. No obstante, este cambio de actitud no se debió tanto a la influencia directa de rusos y germanos como a los resultados obtenidos en lingüística aplicada, a saber, las aportaciones de la lingüística del corpus, los trabajos sobre inteligencia artificial, la didáctica del léxico en segundas lenguas, el diseño de diccionarios pedagógicos, etc. La influencia de las investigaciones soviéticas y del continente europeo llegó más tarde, propiciada quizá por un ambiente lingüístico favorable a teorías generales de este tipo. Dicha influencia ha venido directa e indirectamente: Gläser (1986), por ejemplo, imbuida en la tradición soviética y en la continental, la ha plasmado en su trabajo sobre la fraseología de la lengua inglesa; Zgusta (1988), siguiendo los pasos de Weinreich (1970), ha dado a conocer las investigaciones soviéticas a occidente; Alexandrova y Ter-Minasova (1987) y Dobrovol’skij (1988) han aplicado los métodos de investigación soviéticos al estudio de la fraseología en lengua inglesa5; y, finalmente, Gramley y Pätzold (1992) han retomado los principios de la fraseología alemana para su estudio del inglés.

5 Dobrovol’skij (1988) no se restringe al estudio de esta lengua, sino que también se ocupa del alemán y del holandés.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 131

Criterios generales de clasificación

131

No es de extrañar, pues, que, una vez que se adoptan como criterios de inclusión la estabilidad y la restricción combinatoria, además de la idiomaticidad (potencial) de estas unidades, las colocaciones empiecen a considerarse como objeto de estudio de la fraseología. Las tendencias más recientes en la investigación fraseológica sitúan las colocaciones dentro de la esfera de la fraseología. Así lo pusieron de manifiesto autores como H. Béjoint, U. Heid, W. Martin o U. Reid en el coloquio internacional “Phraseologie et terminologie en traduction et en interprétation”, celebrado en Ginebra, del 2 al 4 de octubre de 1991, organizado por la Escuela de Traducción e Interpretación de esa misma ciudad (cf. Gambier, 1993). Ésta es la misma línea que se ha seguido en las dos ediciones del “International Symposium on Phraseology” (Leeds, 1994; Moscú, 1996) celebradas hasta ahora, en las que se han abordado distintos aspectos de las colocaciones, así como de su relación con el resto de las unidades pertenecientes al ámbito de la fraseología. Las colocaciones muestran su clara conexión con el resto de unidades fraseológicas6 a través de las características comunes compartidas. Aspectos como la especialización semántica, la estabilidad, la institucionalización, la variación o la frecuencia en grados diversos son reflejo de ello. Así, al igual que el resto de unidades fraseológicas, las colocaciones se caracterizan por la alta frecuencia de coaparición de sus elementos integrantes. A mediados de los sesenta, M. A. K. Halliday (1966: 158) definió el concepto de colocación como una asociación sintagmática de unidades léxicas, textualmente cuantificable como la probabilidad de que ocurran o aparezcan, en n intervalos, es decir, una distancia de n unidades léxicas, desde una unidad x, las unidades a, b,c, etc. También en la década de los sesenta J. M. Sinclair (1966) propuso estudiar la coaparición lineal de palabras, es decir, los patrones de colocaciones de la lengua inglesa mediante recuentos estadísticos de córpora extensos. En su trabajo de 1974 en colaboración con S. Jones (Jones y Sinclair, 1974: 19), redefine la noción de colocación en los siguientes términos: Collocation is the co-occurrence of two items in a text within a specified environment. Significant collocation is regular collocation between items, such as that they co-occur more often than their respective frequencies and the length of text in which they appear would predict.

6 Entendemos por unidad fraseológica (UF) una combinación estable de unidades léxicas formada por al menos dos palabras gráficas, cuyo límite superior se sitúa en el nivel de la oración compuesta. Presenta los siguientes rasgos distintivos: polilexicalidad, alta frecuencia de aparición y de coaparición, institucionalización, estabilidad (fijación y especialización semántica), idiomaticidad y variación potenciales.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 132

132

Capítulo V

En posteriores trabajos, Sinclair (1987, 1991) ha seguido abundando en la noción de frecuencia como característica básica de las colocaciones, dando lugar a la corriente estadística en la teoría colocacional. Por otra parte, las colocaciones también presentan ciertas peculiaridades formales y semánticas. En primer lugar, se da una escala de restricción combinatoria entre los colocados, como ilustran los siguientes ejemplos: – armar jaleo/bronca/escándalo/ruido – entablar conversación/amistad – fruncir el ceño En segundo lugar, las colocaciones muestran distintos tipos de especialización semántica. No en vano, la idiomaticidad, presente en buena parte de las unidades fraseológicas, es una cuestión de grado: – (a) selección de una acepción especial que restringe las posibilidades de combinación (levantar sospechas); – (b) metaforización (acariciar una idea); y – (c) delexicalización del colocativo (prestar ayuda/apoyo/atención/asistencia/auxilio/colaboración/servicio). La variación que se observa en el uso de colocaciones responde a la fijación y especialización semántica de las mismas, es decir, a su institucionalización. En el lenguaje periodístico, por ejemplo, se consiguen multitud de efectos mediante la manipulación léxica de las colocaciones, manipulación que depende de la fijación (formal o semántica) de tales unidades. En el siguiente ejemplo, la manipulación de las restricciones combinatorias de la lengua alcanza su efecto expresivo precisamente porque los hablantes son conscientes de la alusión a la colocación a partir de la cual se ha originado (cosechar una victoria/éxito). La utilización de un antónimo en la base produce, además, cierto matiz hiperbólico e irónico: La sucia campaña de Felipe González en Galicia y el intento de unir la izquierda gallega bajo la sombra de un olivo impostor del modelo italiano [...] han sido las causas de la derrota del PSOE y de sus aliados –verdes e IU-gallega– en estos comicios autonómicos donde Joaquín Almunia, que permaneció eclipsado por su predecesor, acaba de cosechar su primera derrota como secretario general del PSOE (El Mundo, 20/10/97: 5).

Por las razones que acabamos de exponer, actualmente se tiende cada vez más a incluir las colocaciones como parte integrante propia de la fraseología,

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 133

Criterios generales de clasificación

133

frente a concepciones más restringidas que limitan el universo fraseológico a aquellas unidades fuertemente estables y cohesivas con unidad denominativa globalizadora y a aquellas caracterizadas como expresiones formulísticas para determinados actos de habla. En este sentido, los últimos avances de la teoría Sentido-Texto concuerdan con la posición teórica anterior: Mel’cËuk (1993: 84; 1994), por ejemplo, incluye las colocaciones como uno de los tres tipos de frasema (phrasème, phraseme) semántico, que, junto a los de tipo pragmático, constituyen el objeto de estudio de la fraseología: 1. Frasemas pragmáticos o pragmatemas (pragmatèmes), de significado transparente pero fijados con relación a una situación determinada: fr. ing. esp. al.

C’est pour toi Good luck A tu salud Guten Tag

2. Frasemas semánticos completos o expresiones idiomáticas, es decir, completamente fijos y cuyo significado unitario no contiene el significado individual de algún componente: fr. ing. esp. al.

faire le joli coeur [avec N] to pull someone’s leg coger el toro por los cuernos ins Gras beissen

3. Semi-frasemas (demi-phrasèmes) semánticos o colocaciones, formados por dos constituyentes parcialmente fijos donde sólo se conserva el significado primario de uno de ellos: fr. ing. esp. al.

donner une conférence to crack a joke prestar ayuda Lärm schlagen

4. Cuasi-frasemas (quasi-phrasèmes) o expresiones casi idiomáticas y bastante fijas, cuyo significado unitario contiene el significado individual de sus miembros integrantes además de un sentido adicional imprevisible: fr. ing.

donner le sein [à N] to start a family

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 134

134

Capítulo V

esp. al.

poner las cosas claras [a alguien] aus den Augen verlieren

3. Hacia una taxonomía general de unidades fraseológicas Independientemente de la lengua de la que se trate, se han venido siguiendo criterios similares para establecer los límites de la fraseología y las unidades objeto de estudio. Las distintas corrientes reconocen que la fraseología es la disciplina (o subdisciplina de la lexicología) que estudia las combinaciones de palabras o unidades fraseológicas de las lenguas. Por unidad fraseológica se entiende una combinación estable de al menos dos palabras, que, en virtud de las distintas corrientes, tendrá como límite superior el sintagma o la oración compuesta y presentará como rasgos inherentes la fijación o la idiomaticidad por si solas, o bien una combinación de ambos criterios. El estudio de los sistemas fraseológicos de las lenguas muestra, paradójicamente, una cierta “universalidad”. A pesar de que tradicionalmente ha sido considerada la parte más idiosincrásica y propia de cada lengua, la fraseología, como sistema, presenta más similitudes que diferencias. De hecho, CÈernyseva (1989: 43) ha señalado que los estudios soviéticos sobre el tema demostraron ya en la década de los setenta que las unidades fraseológicas (Phraseme) de las distintas lenguas muestran más semejanzas que diferencias, prevaleciendo las propiedadas comunes de la fraseología sobre lo específicamente nacional. Idénticas conclusiones extrajo Roos (1985) a partir de la comparación de los sistemas fraseológicos del inglés, el francés y el alemán, llegando a afirmar lo siguiente: “Idiome gehören zu den sprachlichen Universalien” (pág. 74). En esta misma línea, Dobrovol’skij (1988) ha demostrado la existencia de universales fraseológicos a partir del análisis de las locuciones idiomáticas (Phraseologismen) del inglés, el alemán y el holandés. Incluso estudios sectoriales sobre el tema han llegado a conclusiones parecidas: Földes (1989) ha mostrado las sorprendentes similitudes que presentan los fraseologismos que incorporan nombres propios en lenguas muy distantes genéticamente, entre las que figuran el alemán, el ruso, el francés, el inglés, el italiano, el español, el inglés, el búlgaro o el croata. Así las cosas, no resulta descabellado intentar establecer unos criterios objetivos que pudieran servir de base para la clasificación de unidades fraseológicas en las distintas lenguas. Como resulta imposible dar cuenta en tan breve espacio de las principales clasificaciones de UFS existentes, vamos a optar por describir los criterios que hemos seguido para establecer una taxonomía de unidades fraseológicas en español; y examinaremos también otras propuestas de clasificación al uso. Dado que hemos partido de una serie de criterios generales, intenta-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 135

Criterios generales de clasificación

135

remos comprobar su validez aplicándolos también al inglés, una lengua germánica, genéticamente distante del español7. Partimos de una concepción amplia de la fraseología, que engloba todas aquellas combinaciones formadas por al menos dos palabras y cuyo límite superior se sitúa en la oración compuesta, caracterizadas por una alta frecuencia de aparición en la lengua y de coaparición de sus elementos integrantes, así como la institucionalización, la estabilidad, la idiomaticidad y la variación que dichas unidades presentan en diverso grado. Para la clasificación de las unidades que constituyen el universo fraseológico, hemos adoptado como premisa la combinación de los criterios de enunciado y fijación. Por enunciado entendemos una “unidad de comunicación mínima, producto de un acto de habla, que corresponde generalmente a una oración simple o compuesta, pero que también puede constar de un sintagma o una palabra” (Corpas Pastor, 1996: 51). La fijación8 se entiende como reproducción de estas unidades en calidad de combinaciones previamente hechas. La unión de ambos criterios nos permite establecer un primer nivel de estructuración en tres esferas. La esfera I comprende colocaciones, es decir, unidades fraseológicas fijadas sólo en la norma, es decir, sintagmas completamente libres a los que el uso les ha conferido cierto grado de restricción combinatoria. Las unidades de la segunda esfera, las locuciones, están fijadas en el sistema. Las unidades de estas dos primeras esferas no pueden formar, por si solas, enunciados completos, ni constituyen actos de habla, pues necesitan combinarse con otros elementos en el discurso. En esto se diferencian de las unidades de la tercera esfera, los enunciados fraseológicos, que, como su propio nombre indica, constituyen enunciados y actos de habla por sí mismos, además de estar fijados en el habla y formar parte del acervo sociocultural de la comunidad hablante. Cada una las esferas permite un segundo nivel de estructuración en virtud de una serie de criterios adicionales. En el caso de las colocaciones hemos tenido en cuenta la categoría gramatical, la relación sintáctica existente entre los colocados, e, indirectamente, las relaciones semánticas que mantienen la base y el colocativo. Seguimos parcialmente las propuestas de Benson et al. (1986a, 1986b) y de Hausmann (1989).

7 Para una comparación de los sistemas fraseológicos de ambas lenguas, desde una perspectiva formal, semántica y pragmática, véase Corpas Pastor (1995). 8 La fijación puede ser interna (material y de contenido), externa, analítica y pasemática (Thun, 1978; Zuluaga, 1992; Corpas Pastor, 1996).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 136

136

Capítulo V

(1) Verbo + sustantivo (sujeto) esp. ing.

estallar una guerra, ladrar un perro, declararse una epidemia9 to crow , to go off , to break out

(2) Verbo + [preposición +] sustantivo (objeto)10 esp. ing.

entablar amistad, tener repercusión, poner a prueba to draw attention, to make an attempt, to jump to a conclusion

(3) Sustantivo + adjetivo/sustantivo esp. ing.

odio mortal, ignorancia supina, viaje relámpago traumatic experience, reliable source, copycat criminal

(4) Sustantivo + preposición + sustantivo esp. ing.

un diente de ajo, un ciclo de conferencias a pinch of salt, a pride of lions

(5) Verbo + adverbio esp. ing.

desear fervientemente, felicitar efusivamente to advise strongly, to believe firmly

(6) Adjetivo11 + adverbio esp. ing.

rematadamente loco, relacionado estrechamente highly intelligent, seriously injured, piping hot12

Otros criterios de clasificación podrían ser de base semántica, tomando como referencia las funciones léxicas de la teoría Sentido-Texto de Mel’cËuk, que tiene mucho que ver con la distinción entre la base (la palabra llave), que es elemento semánticamente autónomo, y el colocativo (el valor), que es el elemento semánticamente dependiente, el cual presenta una acepción especial en virtud de

9

Este apartado también incluye construcciones personales pronominales en español. En algunos casos, el sustantivo funciona como núcleo de un sintagma preposicional. 11 También tienen cabida los participios en función adjetiva. 12 Piping es catalogado como adverbio en inglés (véase la entrada para piping2 en el LDOCE). 10

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 137

Criterios generales de clasificación

137

la base o llave con la que se coloque. Así, en ambas lenguas sería posible agrupar las colocaciones que compartan una misma función. Por ejemplo Magn (‘muy’, ‘intenso’): esp. Magn(error)=garrafal; Magn(rogar)=encarecidamente; Magn(opuesto)=radicalmente, diametralmente. ing. Magn(ignorance)=abysmal, blatant, crass, profound, total; colossal, complete, sheer; Magn(to forbid)=categorically, expressly, out right; Magn(awake)=wide.

Este sistema de clasificación sería muy útil, por ejemplo, para la confección de diccionarios bilingües y en traducción. Piénsese, por ejemplo, en los distintos valores o colocativos que selecciona la función Operi (‘verbo semánticamente vacío que toma i como sujeto gramatical y C como primer complemento) para la base juramento y su equivalente de traducción oath: esp. Operi(juramento)=prestar ing. Operi(oath)=to swear, to take (no *to lend)

La clasificación semántica de las colocaciones constituye una práctica frecuente en la fraseología rusa. Telia et al. (1994) combinan las funciones léxicas y la gramática de casos de Fillmore con un enfoque semántico-cognitivo para desarrollar un nuevo sistema de clasificación para el Diccionario de colocaciones léxicas del ruso, que se está compilando actualmente. En nuestra clasificación hemos tomado en cuenta ciertos aspectos relevantes de las funciones léxicas sólo en lo referente a la caracterización de los distintos subtipos de colocaciones. En cuanto al enfoque semántico-cognitivo, hemos hecho algún comentario al respecto en la parte dedicada a los aspectos metafóricos de las colocaciones. En todo caso, éste se presenta como una puerta abierta para la investigación tanto monolingüe como multilingüe. Por ejemplo, la metáfora “Enfadarse es acalorarse” (cf. Lakoff y Johnson, 1980) se refleja en ambas lenguas: esp. debate acalorado, calentarse los ánimos ing. heated argument, hopping mad

Las locuciones de la esfera II admiten un segundo nivel de estructuración. Estas unidades se han dividido siguiendo criterios semánticos, pragmáticos y sintácticos. La clasificación semántica se ha ocupado exclusivamente de las locuciones idiomáticas o traslaticias, teniendo en cuenta (a) la imagen evocada o (b) el concepto expresado. Por ejemplo, locuciones del tipo meter la pata, llorar con un ojo en español, y to pull someone’s leg, out of one’s head, en inglés, deno-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 138

138

Capítulo V

minadas somatismos, se clasificarían bajo el rótulo de “cuerpo humano”, teniendo en cuenta la metáfora que les sirve de base (Wotjak, 1985; Elwolde, 1987; Clay y Martinell, 1988). Aunque por el momento no se dispone de una taxonomía completa, esta línea de investigación se presenta como una alternativa interesante desde la semántica cognitiva (cf. Lakoff y Johnson, 1989; Lakoff, 1987). Otras clasificaciones de carácter semántico son las que parten del concepto expresado por la locución. Así, bajo MORIR aparecerían locuciones españolas como diñarla, espicharla, estirar la pata, estar criando malvas, pasar a mejor vida, dormir el sueño de los justos, etc., así como las inglesas to kick the bucket, to snuff it, to give up the ghost, to peg out, to snuff the candle y to pass away. El enfoque onomasiológico ha sido reivindicado en fraseología desde antiguo, especialmente en lo referente a la compilación de diccionarios y tesoros lexicográficos. Baste mencionar, entre otros, los trabajos de Ball (1958), Friederich (1966), Görner (1979), Müller (1980), Kühnert (1986), Schemann (1989), Baranov y Dobrovol’skij (1992), Dobrovol’skij y Karaulov (1993), y Dobrovol’skij (1992, 1994a, 1994b, 1995). La fraseología rusa ha sido muy activa en este campo: desde 1990 se vienen publicando una serie de diccionarios fraseológicos temáticos y de sinónimos, entre los cuales destacan el Diccionario fraseológico de las lenguas eslavas (1995) y el Diccionario de locuciones idiomáticas de la lengua rusa (1995), ambos de corte ideográfico (Kotova, en prensa). Dentro de nuestras fronteras, la fraseología en lengua catalana se presenta como auténtica pionera, destacando los trabajos de Conca (1996 [1988]) y el reciente Diccionari Temàtic de Modismes, de Rodríguez-Vida (1997). Este tipo de clasificación, no obstante, resulta poco sistemática, ya que depende, en gran medida, de la noción de campo semántico que se siga y los descriptores que se establezcan. La clasificación pragmática está menos desarrollada, pero no por ello resulta menos interesante. Quizá los trabajos más representativos sean los de Hieke y Lattely (1983) y Lattey (1986), quienes parten para su taxonomía del concepto de foco pragmático. Dividen así las locuciones según el énfasis o foco recaiga sobre el individuo: to throw in the towel, ser un culo/culillo de mal asiento; el mundo: to be touch and go, irse al garete; la interacción entre individuos: to lend someone a [helping] hand, llevarse a alguien al huerto; o entre éstos y el mundo: to burn one’s bridges [behind one], ponerse el mundo por montera. A su vez, cada uno de estos grupos se divide en positivo, negativo o neutro, según el resultado global de la acción, ya sea sobre el emisor, el receptor o una tercera persona o cosa. Por ejemplo, las locuciones inglesas to lure (someone) into a trap (‘engañar a alguien’) y to walk into someone’s trap (‘caer alguien en la trampa que otra persona le ha tendido’) entrarían dentro de la categoría INTERACCIÓN NEGATIVA ENTRE INDIVIDUOS; mientras que las españolas romper una

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 139

Criterios generales de clasificación

139

lanza por alguien y sacar (a alguien) las castañas del fuego entrarían dentro de la categoría INTERACCIÓN POSITIVA ENTRE INDIVIDUOS. Como decíamos más arriba, las locuciones se han dividido también según criterios sintácticos y gramaticales. Para ilustrar este punto, mencionaremos el trabajo clásico de Fraser (1970), cuya escala de fijación ha ejercido una gran influencia en trabajos posteriores. Este autor clasifica las locuciones de la lengua inglesa en cinco subtipos, de menor a mayor grado de rigidez sintáctica, según las operaciones de transformación que permitan: así, las locuciones del nivel 5, las menos fijas, admiten operaciones como la nominalización (cf. to let the cat out of the bag → his letting the cat out of the bag ruined the whole thing); mientras que las del nivel 0 no permiten ningún tipo de transformación, como es el caso de to trip the light fantastic, to build castles in the air o to sit on pins and needles. Los criterios gramaticales han servido para agrupar las locuciones según la categoría gramatical de sus componentes (cf. Makkai, 1972): por ejemplo, verbos con partícula, como to put off y binomios irreversibles, del tipo mondo y lirondo y kith and kin. No obstante, la clasificación gramatical más extendida toma como punto de partida la parte del discurso con la que conmute la locución (cf. Casares, 1992[1950]; Zuluaga, 1980; Gläser, 1986, etc.), es decir, tiene en cuenta el criterio tradicional de la funcionalidad, aunque se contemple la categoría gramatical de los componentes de cada unidad a la hora de caracterizar cada tipo. Para la elaboración de nuestra subclasificación de locuciones hemos seguido este último criterio, a saber, la función que desempeñen y la equivalencia que establezcan con los distintos sintagmas oracionales, sin olvidar el criterio de clase basado en el núcleo del sintagma de que se trate. Distinguimos siete tipos, que resumimos a continuación: (1) Locuciones nominales, que desempeñan las mismas funciones que un sustantivo o un sintagma nominal. esp. peso pesado, alma de cántaro, coser y cantar, el qué dirán ing. a lame duck, the man in the street, lock, stock and barrel

(2) Locuciones adjetivas, que, al igual que los adjetivos, desempeñan las funciones oracionales básicas de atribución y predicación. esp. corto de medios, mondo y lirondo, más feo que Picio, de pelo en pecho, que no se lo salta un gitano ing. long in the tooth, high and mighty, stone sober, [as] happy as the day is long

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 140

140

Capítulo V

(3) Locuciones adverbiales, que presentan una gran complejidad sintáctica y suelen desempeñar las funciones de complemento circunstancial o de modificador oracional. esp. a la chita callando, de higos a brevas, más y más, según mi leal saber y entender, boca arriba, largo y tendido ing. in the nick of time, now and again, like a ball out of hell, to cap it all, frankly speaking13

Conviene mencionar que muchas de ellas son plurifuncionales, de ahí que en español se haya propuesto un nuevo tipo de locuciones, las adjetivo-adverbiales, como al contado, a las claras, a punto de caramelo, como Dios manda14 (Castillo Carballo, 1997). En inglés también abundan las locuciones plurifuncionales: por ejemplo, beyond the pale es clasificada doblemente como adjetiva y como adverbial en el LDOEI; mientras que more or less puede modificar (atributivamente o en calidad de qualifier) a sustantivos, pronombres, adjetivos y adverbios. (4) Locuciones verbales, que expresan procesos y equivalen a un sintagma verbal. esp. dar y tomar, diñarla, tomarla con (alguien/algo), ser el último mono, costar un ojo de la cara, saber de qué pie cojea (alguien), no tener oficio ni beneficio, llevar la voz cantante [en algo], saltarse (algo) a la torera, dormir como un tronco ing. to toss and turn, to pop up15, to take after (somebody), to be left to one’s own devices, to get hold of the wrong end of the stick, not to know

13

Gläser (1986) considera que las tres últimas locuciones son fórmulas rutinarias. No obstante, optamos por considerarlas locuciones adverbiales (con claras funciones discursivas), dado que no cumplen los criterios definitorios de los enunciados fraseológicos. En este sentido, resulta significativo que Quirk et al. (1989: 615, 635) adscriban este tipo de unidades a los conjuncts (expresan cómo entiende el emisor la conexión semántica entre dos enunciados o parte de éstos) o a los adjuncts (expresan la actitud personal del emisor acerca del estilo y la forma de lo que está diciendo). 14 En un trabajo anterior (Corpas Pastor, 1996), hemos considerado como locuciones clausales unidades del tipo como quien dice, como Dios manda, como Dios le da (a alguien) a entender, de acuerdo con su estructura sintagmática. No obstante, seguiremos a Castillo Carballo (1997) quien ha argumentado, desde una postura puramente funcional, que este tipo de unidades en español constituyen, más bien, locuciones adverbiales o adjetivo-adverbiales. 15 Aquí se incluyen los verbos con partícula de la lengua inglesa. Estos han sido excluidos frecuentemente del ámbito de la fraseología por razones prácticas (cf. Roos, 1985: 76; Strässler, 1982: 79). No obstante, tales unidades entran dentro del concepto de locución. A juicio de Palmer (1986: 80), constituyen “a very common type of idiom in English”.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 141

Criterios generales de clasificación

141

where/which way to turn, to twist (somebody) round one’s little finger, to work like a Troyan

(5) Locuciones prepositivas, que constituyen el núcleo de un sintagma prepositivo. Salvo el hecho de no formar sintagmas por sí mismas, satisfacen los demás criterios identificativos. esp. gracias a, delante de, con vistas a, en pos de ing. by force of, as from, due to, instead of

(6) Locuciones conjuntivas, que no forman sintagmas por sí mismas ni pueden ser el núcleo de éstas, pero que comparten los rasgos definitorios de las unidades de esta segunda esfera. Pueden ser coordinantes o subordinantes, o bien relacionan párrafos, oraciones o parte de ellas. esp. ya... ya, más que, con tal de, según y como, al fin y al cabo, con todo ing. either... or, so that, as though, sooner than, on top of that, in addition

(7) Locuciones clausales, formadas por varios sintagmas, de los cuales al menos uno es verbal. Están provistas de sujeto y predicado, pero no forman oraciones completas porque necesitan actualizar algún actante en el discurso. Son más abundantes en español, aunque en inglés se registran algunos ejemplos. esp. salirle (a alguien) el tiro por la culata, revolvérsele (a alguien) las tripas, ponérsele (a alguien) los dientes largos, no llegarle (a alguien) la camisa al cuerpo ing. somebody’s heart sinks, the pace gets too hot for someone

Los enunciados fraseológicos de la tercera esfera se dividen, a su vez, en dos grandes grupos: paremias y fórmulas rutinarias. El criterio diferenciador es el de autonomía textual, presente en las paremias, frente a la dependencia situacional de las fórmulas. Otra diferencia fundamental es de carácter semántico: mientras que el significado de las paremias es referencial, el de las fórmulas es predominantemente social, expresivo o discursivo. Las paremias engloban, a su vez, distintos subtipos que no resultan fáciles de delimitar. Las taxonomías tradicionales16 se han apoyado en consideraciones de

16

Véanse, por ejemplo, las aclaraciones de J. Fernández-Sevilla (1985) a este respecto o las definiciones de refrán, proverbio, dicho, máxima, adagio, aforismo, apotegma y sentencia en el DRAE.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 142

142

Capítulo V

muy diversa índole, frecuentemente de carácter diacrónico, etimológico, y semántico. Se han dado, así mismo, algunos intentos de ofrecer una tipología de paremias a partir de una matriz de rasgos. Rodegem (1972, 1984) ha establecido 10 tipos de paremias en francés mediante la combinación de los siguientes rasgos: – – – – – – – –

estructura rítmica (R) analogía de la situación (A) carácter denotativo (D) norma general (g) norma específica (s) norma restringida (r) norma directiva (Dir.) norma indicativa (Ind.)

[1] [2] [3] [4] [5] [6] [7] [8] [9] [10]

Proverbe: {R, A, g, Dir., Ind.} Maxime: {R, D, g, Dir.} Aphorisme: {R, D, g, Ind.} Dicton: {R, A, s, Dir., Ind.} Slogan: {R, D, s, Dir., Ind.} Adage juridique: {R, D, s, Dir., Ind.} Loc. proverbiale: {A, r, Dir., Ind.} Apopthegme: {R, r, Dir., Ind.} Devise: {R, D, r, Dir., Ind.} Wellérisme: {Ø}

Si comparamos los tipos 1 y 3, por ejemplo, se observa que ambos presentan una estructura rítmica y expresan de forma implícita una norma sancionada socialmente, de carácter general e indicativo, que puede ser también directiva en el caso del “proverbe”. Ahora bien, ambos se diferencian en que el uso del “proverbe” supone una analogía con el contexto de la situación comunicativa, cosa que no ocurre en el caso del “aphorisme”, cuyo significado es puramente denotativo. La ausencia de rasgos en el “wellérisme” se debe a que éste, en opinión del autor, constituye sólo un subtipo marginal, de carácter cómico y anecdótico, donde se parodia la norma. Otro intento interesante de formalización es el de Norrick (1985), quien intenta deslindar las paremias de otros géneros afines de la lengua inglesa en virtud de los siguientes rasgos: – turno de la conversación (T) – carácter conversacional (C) – tradicional (Trad.)

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 143

Criterios generales de clasificación

– – – – – – – –

143

oral (O) fijación formal (F) didáctico (D) general (G) figurativo (Fig.) rasgos prosódicos (P) ameno (“entertaining”) (A) humorístico (H)

[1] [2] [3] [4] [5] [6] [7] [8] [9] [10] [11]

Proverb: {T, C, Trad., O, F, D, G, Fig.*, P*}17 Cliché: {T, C, Trad., O, F, G*, Fig.*, P*, H*} Wellerism: {T, C, Trad., O, F, Fig.*, P*, A, H} Curse: {C, Trad., O, F, Fig.*, P*, H*} Proverbial phrase: {C, Trad., O, F, Fig., P*, H*} Riddle: {Trad., O, F*, D*, F*, P*, A, H*} Joke: {Trad., O, Fig.*, A, H} Tale: {C, O, D*, Fig.*, A, H*} Song: {Trad., F, D*, Fig.*, P, A, H*} Slogan: {T, O*, F, D*, Fig.*, P*, H*} Aphorism: {T*, F, D*, G, Fig.*, P*, A, H*}

Comparando de nuevo los tipos 1 y 11, se observa que ambos comparten la fijación formal y el carácter de generalidad, así como la posibilidad de presentar rasgos prosódicos y contenido figurativo. El “proverb” tiene carácter didáctico y puede constituir un turno conversacional, rasgos éstos que sólo se presentan opcionalmente en el “aphorism”, el cual se distingue, además, por ser ameno e incluso humorístico en algunos casos. Para nuestra clasificación hemos seguido, no obstante, las propuestas de Pierre Arnaud (1991), el cual ha establecido cinco criterios que, actuando a modo de filtros sucesivos, permiten llegar por eliminación a lo que denomina proverbes (“refranes”): (1) lexicalización, (2) autonomía sintáctica, (3) autonomía textual, (4) valor de verdad general y (5) carácter anónimo. Por definición, toda paremia cumple los tres primeros requisitos; mientras que los dos restantes permiten establecer distintos subtipos. (1) Enunciados de valor específico, que no poseen valor de verdad, independientemente de la situación a la cual se aplican.

17

El asterisco indica que se trata de un rasgo optativo.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 144

144

Capítulo V

esp. Las paredes oyen, haber moros en la costa, Haz el amor y no la guerra, España es diferente ing. The sky is the limit, The game is not worth the candle, Your country needs you

(2) Citas, que se caracterizan por tener un origen conocido, ya que proceden de textos escritos o de fragmentos hablados puestos en boca de un personaje, real o ficticio. esp. La vida es sueño (Pedro Calderón de la Barca) y La religión es el opio del pueblo (Karl Marx). ing. To err is human, to forgive, divine (Pope), Cast thy bread upon the waters (Libro de los Proverbios, 2:1)

(3) Refranes, que se diferencian de las citas en que su origen es desconocido, aunque la separación entre ambos tipos de paremias es una cuestión de grado. El refrán es la paremia por excelencia, pues en él se dan las cinco características mencionadas anteriormente, a las que habría que añadir las que definen al refrán prototípico18. esp. De tal palo, tal astilla, Por la boca muere el pez, Sólo se vive una vez ing. Out of sight, out of mind, The early bird catches the worm, You live and learn

Las fórmulas rutinarias se han clasificado desde una doble vertiente. Por un lado, siguiendo un criterio funcional, Coulmas (1985) y Roos (1985) han distinguido entre fórmulas discursivas, fórmulas sociales y fórmulas expresivas. Steel (1985) y Gläser (1986), por su parte, han seguido más bien un criterio semántico. La taxonomía que proponemos pretende aunar ambos criterios, tomando en consideración algunos aspectos pragmáticos relevantes. En primer lugar, hacemos una división bipartita entre fórmulas discursivas y fórmulas psico-sociales. (1) Fórmulas discursivas, que cumplen funciones organizadoras del discurso, manteniendo la fluidez de los intercambios y mostrando la actitud del emisor. Se subdividen, a su vez, en dos tipos: (1.1.)

18

Fórmulas de apertura y cierre, que operan en los límites de la interacción.

A saber, significado metafórico, particularidades fónicas, anomalías sintácticas o estructuras sintácticas particulares en la que sus miembros mantienen relaciones precisas, carácter tradicional y propósito didáctico o dogmático (Arnaud, 1991: 22).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 145

Criterios generales de clasificación

145

esp. ¿Qué hay?, A ver, Hasta luego ing. How are you keeping?, What brings you here?, See you

(1.2.)

Fórmulas de transición, que estructuran y regulan los intercambios conversacionales. esp. A eso voy, Y es más, ¿Qué te digo yo? ing. You see what I mean, Wait a minute, You know

(2) Fórmulas psico-sociales, que sirven para facilitar el desarrollo normal de la interacción social o para expresar el estado mental y los sentimientos del emisor. Siguiendo criterios semánticos y pragmáticos (carga ilocucionaria y tipo de acto de habla), hemos establecido seis tipos, con ulteriores subdivisiones. (2.1.)

Fórmulas expresivas, que constituyen actos de habla expresivos o actitudinales. De acuerdo con la fuerza ilocucionaria, la proyección y la responsabilidad del acto, y el verbo performativo relacionado, distinguimos los siguientes subgrupos: – Fórmulas de disculpa esp. Con perdón, Perdone que le moleste, Lo siento [mucho] ing. Please accept my apologies, Excuse me, No hard feelings

– Fórmulas de consentimiento esp. Ya lo creo, Y tanto, Con/de mil amores ing. Hear, hear, You can say that again, Fair enough

– Fórmulas de recusación esp. Ni hablar, A otro perro con ese hueso, Y un jamón ing. My foot!, You must be joking, Tell it to the marines

– Fórmulas de agradecimiento esp. [Que] Dios te (le, etc.) bendiga, Muchas gracias, [Que] Dios se lo pague ing. That’s very kind/nice/sweet of you, Thank you, Much obliged

– Fórmulas de réplica esp. De nada, No las merece, No hay de qué ing. You’re welcome, Don’t mention it, My pleasure

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 146

146

Capítulo V

– Fórmulas de desear suerte esp. Feliz Navidad, Suerte y al toro, Que aproveche ing. Happy birthday, Fingers crossed, Good luck

– Fórmulas de solidaridad esp. ¡Qué mala suerte!, ¡Qué se le va a hacer!, Le acompaño en el sentimiento ing. Hard luck, Dear me!, I know the feeling, May I express my sympathy

– Fórmulas de insolidaridad esp. ¡A mí, plin!, ¡Allá tú!, ¿Y qué? ing. It serves you right

(2.2.)

Fórmulas comisivas, de promesa y amenaza, que se caracterizan por implicar al emisor en un hecho futuro: esp. Cruz y raya, Ya ajustaremos cuentas ing. Cross my heart (and hope to die), Just you wait

(2.3.)

Fórmulas directivas, que implican al receptor en un hecho futuro, y que se dividen en: – Fórmulas de exhortación esp. ¿Te ha comido la lengua el gato?, Al grano ing. Come off it, Get lost

– Fórmulas de información esp. ¿Qué pasa?, ¿Qué mosca te (le, os, etc.) ha picado? ing. What’s the big deal?, Say when

– Fórmulas de ánimo esp. No se (te) ponga(s) así, No es para tanto ing. Take it easy, Cheer up

(2.4.)

Fórmulas asertivas, mediante las cuales los hablantes transmiten información que declaran verdadera, ya sea factual o relativa a

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 147

Criterios generales de clasificación

147

sus sentimientos, sin que se produzca implicación del emisor o el receptor en un acto pasado o futuro: – Fórmulas de aseveración esp. Lo que yo te diga, Por mis muertos ing. You [can] bet your [sweet] life [that], God knows

– Fórmulas emocionales esp. ¡No te fastidia!, Válgame Dios ing. Holy smoke, You don’t say [so]

(2.5.)

Fórmulas rituales, que se relacionan con las secuencias de apertura y cierre del acto comunicativo: – Fórmulas de saludo esp. Buenos días, Dichosos los ojos [que te/le ven] ing. How do you do?, Good evening

– Fórmulas de despedida esp. A seguir bien, [Ve/Vaya usted] con Dios ing. Good night, Yours sincerely

(2.6.)

Miscelánea, es decir, fórmulas para las que no existe verbo performativo que traduzca su fuerza ilocucionaria: esp. Al agua, patos, Pelillos a la mar ing. Come to think of it, You name it

4. Conclusión Durante largos años la fraseología ha sido considerada como una pura anécdota, una mera irregularidad que no casaba bien con el estudio científico de las lenguas. Hoy día, destronada la palabra en favor del texto como unidad lingüística, los resultados obtenidos en varios campos de investigación han puesto de relieve la importancia que tienen estas combinaciones léxicas para la comunicación humana. Las distintas corrientes, tendencias y enfoques de la investigación fraseológica convergen, cada día más, en lo relativo a los límites del universo fraseológico,

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 148

148

Capítulo V

así como en cuanto a los criterios taxonómicos que se vienen aplicando. En este sentido, el presente trabajo ha venido a demostrar la posibilidad de establecer una misma clasificación general que sea válida para dos lenguas distantes genéticamente, a saber, el español y el inglés. Sospechamos que esta situación se repite con respecto a otras lenguas de las familias romance y germánica, dado que tanto en francés como en alemán, pongamos por caso, se dan colocaciones: fr. gravement malade, al. schwer krank (‘gravemente enfermo’); locuciones: fr. arriver à point nommé (‘venir como anillo al dedo’), al. auf den Fersen seien (‘pisar los talones [a alg.]’); paremias: fr. Le diable n’est pas aussi noir qu’on le dit (‘No es tan fiero el león como lo pintan’), der Apfel fällt nicht weit vom Stamm (‘De tal palo, tal astilla’); y, por supuesto, fórmulas: fr. mon Dieu! (‘Vaya por Dios’), al. Das glaubst du doch selber nicht! (‘Venga ya’, ‘Cuéntame otra’). Por otro lado, en lo que a esta clasificación general se refiere, cabe señalar que no estamos ante tipos discretos, perfectamente separables. Las unidades fraseológicas presentan una gran flexibilidad a este respecto. Así, se dan unidades de una esfera que evolucionan hasta convertirse en unidades de otra esfera: piénsese en el paso de muchas paremias a locuciones, por ejemplo; en las similitudes de refranes como Así es la vida y You live and learn con respecto a las fórmulas rutinarias; o bien en la proximidad existente entre las fórmulas catalogadas como “miscelánea” y los enunciados de valor específico. También puede ocurrir que unidades de una misma esfera sean susceptibles de pertenecer a varios subtipos a la vez dentro de éstas, como en el caso de las locuciones plurifuncionales (como Dios manda, more and more) o las fórmulas del tipo Faltaría más (de recusación y de consentimiento) y I beg your pardon (de sorpresa, información o recusación). Si bien un primer paso de la investigación fraseológica actual puede ser el establecimiento de clasificaciones más o menos generales, válidas para una gran número de lenguas, el segundo paso debe ser la comparación efectiva de los distintos sistemas fraseológicos desde sus vertientes formal, semántica, discursiva y pragmática. Sólo entonces podremos conseguir resultados relevantes que puedan ser aplicados con éxito a otras disciplinas afines, como son la lexicografía y la traducción. Habremos de comprobar, pues, si, como postula Stedje (1989), las verdaderas diferencias entre los sistemas fraseológicos se acusan al confrontar una unidad concreta con su correspondiente equivalente de traducción. Referencias bibliográficas ACADEMIA ESPAÑOLA (RAE) (1992): Diccionario de la lengua española. 21 ed. Madrid: Espasa-Calpe [DRAE].

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 149

Criterios generales de clasificación

149

ALEXANDER, R. (1984): “Fixed expressions in English: reference books and the teacher”, en ELT Journal 38 (2), 127-134. — (1989): “Fixed expressions, idioms and collocations revisited”, en: MEARA, P. (Ed.): Beyond Words. Papers on the annual meeting of BAAL Seminar. Exeter 1988. Londres: BAAL/CILT, 15-24. ALEXANDROVA, O., y TER-MINASOVA, S. (1987): English Syntax (Collocation, Colligation and Discourse). Moscú: Universidad de Moscú. AMOSOVA, N. N. (1963): Osnovy anglijskoj frazeologii. Leningrado. ARNAUD, P. J. L. (1991): “Réflexions sur le proverbe”, en Cahiers de lexicologie 59, 5-27. ARNOLD, I. V. (1973): The English Word. Leksikologija sovremennogo anglijskogo jazyka. 2ª ed. Moscú: Naukowe. BALL, W. J. (1958): A Practical Guide to Colloquial Idioms. Londres: Longmans, Green & Co. Ltd. BARANOV, A., y DOBROVOL’SKIJ, D. (1992): “K probleme postroenija tezaurusa russkich idiom”, en: Izvestija RAN (Serija literatury i jazyka 5), 60-67. BENSON, M.; BENSON, E., y ILSON, R. (1986a): Lexicographic Description of English. Amsterdam: John Benjamins. BENSON, M.; BENSON, E.; ILSON, R (1986b): The BBI Combinatory Dictionary of English: A Guide to Word Combinations. Amsterdam: John Benjamins. BURGER, H., y ZETT, R. (eds.) (1987): Aktuelle Probleme der Phraseologie. Symposium 27.-29.9.1984 in Zürich. Berna. CANDÓN, M., y BONNET, M. (1994 [1993]): A buen entendedor... Diccionario de frases hechas de la lengua castellana. 5ª ed. Madrid: Anaya/Mario Muchnik. CARNEADO MORÉ, Z. V. (1985): La fraseología en los diccionarios cubanos. La Habana: Editorial Ciencias Sociales. CARNEADO MORÉ, Z. V., y TRISTÁ PÉREZ, A. M. (1985): Estudios de fraseología. La Habana: Academia de Ciencias de Cuba. CASARES, J. (1992 [1950]): Introducción a la lexicografía moderna. Madrid: CSIC. CASTILLO CARBALLO, M. A. (1997): Unidades pluriverbales en un corpus del español contemporáneo. Tesis doctoral (Edición en microfichas). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad. CÈERNYSEVA, I. (1989): “Strukturtypologische Phraseologieforschung in der sowjetischen Germanistik (Überblich und Ausblick)”, en: GRÉCIANO, G. (Ed.): EUROPHRAS 88. Phraséologie Contrastive. Actes du Colloque International Klingenthal-Strasbourg, 12-16 mai 1988 (Colection Recherches Germaniques 2, Université des Sciences Humaines, Dept. d’Etudes Allemandes). Estrasburgo, 43-49. CLAY, C., y MARTINELL, E. (1988): Fraseología español/inglés, denominaciones relativas al cuerpo humano. Barcelona: PPU. CONCA, M. (1996 [1988]): Els refranys Catalans. 3ª ed. Valencia: Tres i Quatre. CORPAS PASTOR, G. (1995): Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español. Tesis doctoral (Universidad Complutense de Madrid, 1994). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad. — (1996): Manual de fraseología española (Biblioteca Románica Hispánica). Madrid: Gredos.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 150

150

Capítulo V

— (en prensa): “Expresións fraseolóxicas e colocacións: clasificación”, en: X. FERRO RUIBAL (Ed.): Actas do I Coloquio Galego de Fraseoloxía (Santiago de Compostela 15-18 de setembro de 1997). Publicacións do Centro de Investigacións Lingüísticas e Literarias Ramón Piñeiro, Xunta de Galicia. COULMAS, F. (1979): “On the Sociolinguistic Relevance of Routine Formulae”. Journal of Pragmatics. 3, 239-266. — (Ed.) (1981a.): Conversational Routine. Explorations in Standardized Communication Situations and Prepatterned Speech. Vol. II. (Rasmus Rask Studies in Pragmatic Linguistics 3). La Haya: Mouton. — (1985): “Diskursive Routine im Fremdsprachenerwerb”, Sprache und Literatur in Wissenschaft und Unterricht. 56 (2), 47-66. COWIE, A. P. (1988): “Stable and creative aspects of vocabulary use”, en: CARTER, R., y MCCARTHY, M. (eds.): Vocabulary and Language Teaching (Applied Linguistics and Language Study). Londres, Nueva York: Longman, 126-139. — (1990): “Pedagogical descriptions of language: lexis”, en: Annual Review of Applied Linguistics 10, 196-209. COWIE, A. P.; MACKIN, R., y MCCAIG, I. (1985b): Oxford Dictionary of Current Idiomatic English Vol. 2.: Phrase, Clause and Sentence Idioms (1983). 4ª reimpresión. Oxford: Oxford University Press [ODOCIE2]. DOBROVOL’SKIJ, D. O. (1988): Phraseologie als Objekt der Universalienlinguistik (Linguistische Studien). Leipzig. — (1992): “Phraseologie und sprachliches Weltbild. Vorarbeiten zum Thesaurus der deutschen Idiomatik”, en: FÖLDES, C. (Ed.): Deutsche Phraseologie in Sprachsystem und Sprachverwendung. Viena: Praesens, 171-195. — (1994a): “Idioms in a Semantic Network: Towards a New Dictionary-Type”, en: MARTIN, W.; MEIJS, W.; MOERLAND, M.; TEN PAS, E.; VAN STERKENBURG, P., y VOSSEN, P. (eds.): Euralex 1994 Proceedings. Papers submitted to the 6th EURALEX International Congress on Lexicography in Amsterdam, The Netherlands. Amsterdam, 263-270. — (1994b): “Thesaurus deutscher Idiome”, en: SANDIG, B. (Ed.) (1994): EUROPHRAS 92. Tendenzen der Phraseologieforschung. Bochum: Universität Dr. N. Brockmeyer, 35-64. — (1995): Kognitive Aspekte der Idiom-Semantik. Studien zum Thesaurus deutscher Idiome. Tubinga: Narr. DOBROVOL’SKIJ, D. O., y KARAULOV, J. (1993): “Idiomatika v tezauruse jazykovoj licËnosti”, en: Voprosy jazykoznanija. 2, 5-15. DOVAL, G. (1995): Del hecho al dicho. Madrid: Ediciones del Prado. ELWOLDE, J. F. N. M. (1987): Aspects of the Collocational Analysis of Meaning with Special Reference to Some Biblical Hebrew Anatomical Idioms. Tesis doctoral. University of Hull: Ann Arbor (UMI, BRDX85382). FERNÁNDEZ-SEVILLA, J. (1985): “Paremiología y lexicografía. Algunas precisiones terminológicas y conceptuales”, en: Philologica Hispaniensia, 191-203. FERNANDO, C., y FLAVELL, R. (1981): On Idiom. Critical Views and Perspectives (Exeter Linguistic Studies, 5). Exeter: University of Exeter.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 151

Criterios generales de clasificación

151

FIALA, P.; LAFON, P., y PIGUET, M. F. (Eds.) (1997): La locution: entre lexique, syntaxe et pragmatique (Colection Saint-Cloud). París: Klincksieck. FLEISCHER, W. (1997 [1982]): Phraseologie der deutschen Gegenwartssprache. 2ª ed. Tubinga: Max Niemeyer. FÖLDES, C. (1989): “Onymische Phraseologismen als Objekt des Sprachvergleichs”, en: GRÉCIANO, G. (Ed.), 127-140. FONTANILLO MERINO, E. (Ed.) (1993): Larousse Diccionario Práctico de Locuciones. Barcelona: Larousse Planeta. FRASER, B. (1970): “Idioms within a transformational grammar”, en: Foundations of Language 6, 22-42. FRIEDERICH, W. (1966): Moderne deutsche Idiomatik. Systematisches Wörterbuch mit Definitionen und Beispielen. Munich. GAMBIER, Y. (1993) : “Phraseologie et terminologie en traduction et interprétation”, en: META. XXXVIII (2), 389-391. GLÄSER, R. (1986): Phraseologie der englische Sprache. Tubinga: Max Niemeyer Verlag. GÖRNER, H. (1979): Redensarten. Kleine Idiomatik der deutschen Sprache. Leipzig: Bibliographisches Institut. GRAMLEY, S., y PÄTZOLD, K-M. (1992): A Survey of Modern English. Londres, Nueva York: Routledge. GRÉCIANO, G. (Ed.) (1989): EUROPHRAS 88. Phraséologie Contrastive. Actes du Colloque International Klingenthal-Strasbourg, 12-16 mai 1988 (Colection Recherches Germaniques 2, Université des Sciences Humaines, Dept. d’Etudes Allemandes). Estrasburgo. HAENSCH, G.; WOLF, L.; ETTINGER, S., y WERNER, R. (1982): La lexicografía. De la lingüística teórica a la lexicografía práctica. Madrid: Gredos. HALLIDAY, M. A. K. (1966): “Lexis as a Linguistic Level”, en: BAZELL, C. E.; CATFORD, J. C.; HALLIDAY, M. A. K., y ROBINS, R. H. (Eds.): In Memory of John Firth. Londres: Longmans, 148-162. HÄUSERMANN, J. (1977): Phraseologie. Hauptprobleme der deutschen Phraseologie auf der Basis sowjetischer Forschungsergebnisse, Tubinga: Niemeyer. HAUSMANN, F. J. (1977): “Splendeurs et misères du Tresor de la langue française”, en: Zeitschrift für französische Sprache und Literatur. 87, 212-231. — (1979): “Un dictionnaire des collocations est-il possible?”, en: Travaux de Linguistique et de Litterature 17 (1), 187-195. — (1984): “Wortschatzlernen ist Kollokationslernen”, en: Praxis des Neusprachlichen Unterrichts 31 (4), 395-406. — (1985): “Kollokationen im deutschen Wörterbuch: Ein Beitrag zur Theorie des lexikographischen Beispiels”, en: BERGENHOLTZ, H., y MUGDAN, J. (Eds.): Lexikographie und Grammatik: Akten des Essener Kolloquiums zur Grammatik im Wörterbuch 28.30.6.1984 (Lexicographica Series Maior 3). Tubinga: Max Niemeyer, 118-129. — (1989): “Le dictionnaire de collocations”, en: HAUSMANN, F. J.; REICHMAN, O.; WIEGAND, H. E., y ZGUSTA, L. (Eds.): Wörterbücher. Dictionaries. Dictionnaires. Ein internationales Handbuch zur Lexikographie. An International Encyclopedia of Lexi-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 152

152

Capítulo V

cography. Encyclopédie internationale de lexicographie. Vol. 1. Berlín, Nueva York: Walter de Gruyter, 1010-1019. HIEKE, A. E., y LATEY, E. (1983): Using Idioms: Situationsbezogene Redensarten. Tubinga: Niemeyer. JONES, S., y SINCLAIR, J. M. (1974): “English Lexical Collocations. A Study in Computational Linguistics”, en: Cahiers de Lexicologie 24, 15-61. KORHONEN, J. (Ed.) (1987): Beiträge zur allgemeinen und germanistischen Phraseologieforschung. Internationales Symposium in Oulu 13.-15.Juni 1986 (Veröffentlichungen des germanistischen Instituts der Universität Oulu 7). Oulu. KÓTOVA, M. (en prensa): “As aportacións rusas ós estudios fraseolóxicos”, en: FERRO RUIBAL, X. (Ed.) KÜHN, P. (1984): “Pragmatische und lexikographische Beschreibung phraseologischer Einheiten: Phraseologismen und Routineformeln”, en: WIEGAND, H. E. (Ed.): Studien zur neuhochdeutschen Lexikographie IV (Germanistische Linguistik 1-3/83). Hildesheim: Georg Olms, 175-235. KÜHNERT, H. (1986): Deutsche Phraseologie für ausländische Deutschlehrer, ein Handund Übungsbuch für Deutschlehrer und Studenten. Postdam. LAKOFF, G. (1987): Women, Fire and Dangerous Things: What Categories Reveal about the Mind. Chicago: University of Chicago Press. LAKOFF, G., y JOHNSON, M. (1980): Metaphors We Live By. Chicago: University of Chicago Press. LATTEY, E. (1986): “Pragmatic classification of idioms as an aid for the language learner”. International Review of Applied Linguistics XXIV (3), 217-233. MAKKAI, A. (1972): Idiom Structure in English. La Haya: Mouton. MARTÍNEZ MARÍN, J. (1996): Estudios de fraseología española. (Cuadernos de lingüística 14), Málaga: Ágora. MARTINS-BALTAR, M. (Ed.) (1995): La locution en discours (Número especial de Cahiers du français contemporain 2). Didier Érudition: París. MARTINS-BALTAR, M (Ed.) (En prensa): La locution: entre langue et usages (Collection Signes, ENS Editions Fontenay/Saint-Cloud). Ophrys: París. MATESËIC´, J. (Ed.) (1983): Phraseologie und ihre Aufgaben. Beiträge zum 1. Internationalen Phraseologie-Symposium (Mannheimer Beiträge zur slawischen Phraseologie 3). Heidelberg: Julius Groos Verlag. MEL’CËUK, I. A. (1960): “O terminach “ustojcËivost”, en: Voprosy jazykoznanija. 4, 73-80. — (1993): “La phraséologie et son rôle dans l’enseignement/apprentisage d’une langue éstrangère”, en: Etudes de linguistique appliquee 92, 82-113. — (1994): Collocations and lexical functions. Ponencia presentada al I International Symposium on Phraseology, celebrado en la Universidad de Leeds, del 18 al 20 de abril de 1994. MEL’CU Ë K, I. A., y PERTSOV, N. V. (1987): Surface Syntax of English: a formal model within the meaning-text framework. Amsterdam: John Benjamins. MEL’CËUK, I. A., y POLGUÈRE, A. (1987): “A Formal Lexicon in the Meaning-Text Theory (or How to Do Lexica with Words)”, en Computational Linguistics 13 (3-4), 261-275.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 153

Criterios generales de clasificación

153

MEL’CËUK, I. A., y WARNER, L. (1994): “Towards an Efficient Representation of Restricted Lexical Occurrence”, en: MARTIN, W.; MEIJS, W.; MOERLAND, M.; PAS, E.; STERKENBURG, P VAN, y VOSSEN, P. VAN (eds.), 324-338. MEL’CËUK, I. A., y ZÈOLKOVSKIJ, A. K. (1970): “Towards a Functioning Meaning-Text Model of Language”, en: Linguistics 57, 10-47. MÜLLER, W. (1960): Englische Idiomatik nach Sinngruppen. Berlín: Walter de Gruyter & Co. NATTINGER, J. R. (1980): “A Lexical Phrase Grammar for ESL”, en TESOL Quaterly XIV (3), 335-344. — (1988): “Some current trends in vocabulary teaching and language study”, en: NATTINGER , J. R., y D ECARRICO , J. S. (eds.), Lexical phrases and language teaching. Oxford, Nueva York, Toronto: Oxford University Press. 62-82. NORRICK, N. L. (1985): How Proverbs Mean. Semantic Studies in English Proverbs. Berlín, Nueva York, Amsterdam: Mouton. PALM, C. (Ed.) (1991): EUROPHRAS 90. Akten der internationalen Tagung zur germanistischen Phraseologieforschung Aske/Schweden 12.-15. Juni 1990 (Acta Universitatis Upsaliensis, Studia Germanistica Upsaliensia 32). Uppsala. PALMER, F. R. (1986 [1976]): Semantics. 2ª ed. Cambridge: Cambridge University Press. PÉNET, C., y GÓMEZ, C. (1995): ¡No me digas! Les six mille et une expressions de l’espagnol parlé. Chennevières-sur-Marne Cedex: Assimil. QUIRK, R.; GREENBAUM, S.; LEECH, G., y SVARTVIK, J. (1989): A Comprehensive Grammar of the English Language. Londres: Longman. REICHSTEIN, A. D. (1973): “Zur Analyse der festgeprägten Sätze im Deutschen”, en: Deutsch als Fremdsprache 4, 135-137. RODEGEM, F. (1972): “Un problème de terminologie: les locutions sentencieuses”, en: Cahiers de l’Institut de linguistique de Louvain. I (5), 677-703. — (1984) : “La parole proverbiale”, en: La Richesse du proverbe: travaux et recherches de l’Universite de Lille III. II, 121-135. RODRÍGUEZ-VIDA, S. (1997): Diccionari Temàtic de Modismes. Barcelona: Edicions 62. ROOS, E. (1985): “Kontrastive Überlegungen zur deutschen, englischen und französischen Idiomatik”, en: Sprache und Literatur in Wissenschaft und Unterricht 56 (2), 74-80. ROSSENBECK, K. (1989): “Lexikologische und lexikographische Probleme fachsprachlicher Phraseologie aus kontrastiver Sicht”, en: SNELL-HORNBY, M.; PÖ HL, E. (eds.), Translation and Lexicography, Papers read at the EURALEX Colloquium held at Innsbruck 2-5 July 1987. Amsterdam, Filadelfia: John Benjamins; Euralex, 197-210. RUIZ GURILLO, L. (En prensa): La fraseología del español colloquial. Barcelona: Ariel. SANDIG, B. (Ed.) (1994): EUROPHRAS 92. Tendenzen der Phraseologieforschung. Bochum: Universität Dr. N. Brockmeyer. SCHEMANN, H. (1989): Synonymwörterbuch der deutschen Redensarten (con la colaboración de R. Birkenhauer). Straelen: Straelen Manuskripte. SCHMID, A. (1989): “Wörterbücher als Hilfe zur Übersetzung von Phraseologismen”, en: SNELL-HORNBY, M., y PÖLH, E. (eds.), 121-127. SINCLAIR, J. M. (1966): “Beginning the study of lexis”, en: BAZELL, C. E.; CATFORD, J. C.; HALLIDAY, M. A. K., y ROBINS, R. H. (eds.), 410-430.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 154

154

Capítulo V

— (1987): “The Nature of the Evidence”, en: SINCLAIR, J. M. (Ed.) Looking Up. An Account of the COBUILD Project in Lexical Computing. Londres, Glasgow: Collins, 150-159. — (1991): Corpus, Concordance, Collocation. Oxford, Nueva York: Oxford University Press. STEDJE, A. (1989): “Beherztes Eingreifen oder ungebetenes Sich-Einmischen. Kontrastive Studien zu einer ethnolinguistischen Phraseologieforschung”, en: GRÉCIANO, G. (Ed.), 441-452. SUMMERS, D. (Ed.) (1987): Longman Dictionary of Contemporary English. Harlow, Essex: Longman [LDOCE]. TELIA, V.; BRAGINA, N.; OPARINA, E., y SANDOMIRSKAYA, I. (1994): “Lexical Collocations: Denominative and Cognitive Aspects”, en: MARTIN, W.; MEIJS, W.; MOERLAND, M.; PAS, E.; STERKENBURG, P., y VOSSEN, P. VAN (eds.), 369-377. TRISTÁ PÉREZ, A. M. (1988): Fraseología y contexto. La Habana: Editorial Ciencias Sociales. THUN, H. (1978): Probleme der Phraseologie. Untersuchungen zur wiederholten Rede mit Beispielen aus den Französischen, Italienischen, Spanischen und Rumänischen (Beihefte zur Zeitschrift für Romanische Philologie 168). Tubinga: Max Niemeyer. VARELA, F., y KUBARTH, H. (1994): Diccionario fraseológico del español moderno. Madrid: Gredos. VINOGRADOV, V. V. (1947): Ob osnovnij tipaj fraseologicheskij iedinits v ruskom yazike. Moscú. WEINREICH, U. (1970): “Lexicology”, en: SEBEOK, T. A. (ED.): Current Trends in Linguistics: Soviet and East European Linguistics. Vol. 1. La Haya: Mouton, 60-93. WOLSKI, W. (Ed.) (1982): Aspekte der sowjetrussischen Lexikographie: Übersetzungen, Abstracts, bibliographische Angaben (Reihe Germanistische Linguistik 43). Tubinga: Max Niemeyer. WOTJAK, B. (1985): “Zu Inhalts-und Ausdrucksstruktur ausgewälter somatischer Phraseolexeme”, en: Deutsch als Fremdsprache 4-5, 270-277. — (1992): Verbale Phraseolexeme im System und Text. Tubinga: Max Niemeyer. ZGUSTA, L. (1988): Lexicography Today. An annotated bibliography of the theory of lexicography (con la colaboración de D. M. T. C. Farina). Tubinga: Max Niemeyer. ZULUAGA, A. (1980): Introducción al estudio de las expresiones fijas (“Studia Romanica et Linguistica 10), Francfort, Peter D. Lang. — (1992): “Spanisch: Phraseologie”, en: HOLTUS, G.; METZELTIN, M., y SCHMITT, C. (eds.), Lexikon der Romansistischen Linguistik. Vol. IV, 1. Tubinga, Max Niemeyer, 125-131. — (1997): “Sobre las funciones de los fraseologismos en textos literarios”, en: Paremia 6, 631-640. — (En prensa): “Expresións fraseolóxicas e colocacións: trazos distintivos”, en: FERRO RUIBAL, X. (Ed.), Actas do I Coloquio Galego de Fraseoloxía (Santiago de Compostela - 15-18 de setembro de 1997). Publicacións do Centro de Investigacións Lingüísticas e Literarias Ramón Piñeiro, Xunta de Galicia.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 155

CAPÍTULO VI LA FRASEOLOGÍA EN LOS DICCIONARIOS BILINGÜES

1. Introducción La necesidad de ofrecer información fraseológica en los diccionarios bilingües constituye un hecho ampliamente reconocido por la lexicografía teórica (Haas, 1962). Sin embargo, durante bastante tiempo se ha aportado muy poco sobre el tema, salvo reivindicaciones puntuales sobre la necesidad de introducir información fraseológica en el diccionario. No debe resultar extraño, pues, que una de las deficiencias más comunes de los diccionarios bilingües sea, precisamente, el relativo abandono en el que se encuentran las unidades pluriverbales (Meyer, 1988). Esta situación se debe a que, hasta hace muy poco tiempo, la fraseología ha ocupado un lugar muy secundario en la investigación lingüística (Schemann, 1991). De ahí que no haya recibido demasiada atención en lexicografía, puesto que ello requiere previamente un extenso análisis lexicológico, como han apun/ tado Boguslawski (1979) y Martínez Marín (1991). A lo largo de este trabajo nos vamos a centrar en la información fraseológica que proporcionan tres de los diccionarios bilingües español-inglés más usados hoy día, a saber, el Collins Diccionario Español-Inglés/Inglés-Español (CDEI), el Larousse Gran Diccionario Español-Inglés/Inglés-Español (LGDEI) y el Diccionario Oxford Español-Inglés/Inglés-Español (DOIE), todos ellos de características similares, en un solo volumen, bifuncionales y bidireccionales, es decir, concebidos para tareas codificadoras y descodificadoras, y orientados tanto hacia los usuarios hispanohablantes como hacia los de lengua inglesa, según consta en los prólogos. Con este fin hemos seleccionado algunos ejemplos representativos de los cuatro tipos principales de unidades pluriverbales que abarca la fraseología en ambas lenguas: colocaciones, del subtipo formado por verbo más sustantivo (to cast a spell, adoptar una postura), locuciones verbales (to call it a day, remover Roma con Santiago), refranes (Better late than never, Muerto el perro se acabó la rabia) y fórmulas rutinarias (Tell it to the marines, ¡Ni hablar del peluquín!). Las unidades pluriverbales son combinaciones léxicas formadas por al menos dos palabras gráficas y cuyo límite superior se sitúa en el nivel de la oración compuesta. Se caracterizan por su polilexicalidad, institucionalización, frecuencia, idiomaticidad y variación potenciales, todo ello en diverso grado. Los distin-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 156

156

Capítulo VI

tos tipos mencionados se distinguen atendiendo a la clase de fijación y especialización semántica que presenten estas unidades, a la capacidad de constituir enunciados y actos de habla por sí mismas, y a la posibilidad de tener autonomía textual (cf. Corpas Pastor, 1995).

2. Localización La localización de la información fraseológica en los diccionarios, junto con los criterios de ordenación alfabética, constituye uno de los temas más debatidos. Los teóricos de la lexicografía no se ponen de acuerdo sobre este punto. Hay autores que defienden su inclusión en la macroestructura de los diccionarios (cf. Zgusta, 1971; Verstraten, 1992). No obstante, la mayoría coincide en presentar la fraseología en la microestructura, siguiendo un orden alfabético, generalmente según la primera palabra léxica, y en una sección independiente (cf. Duhme, 1990; Schemann, 1991). Es decir, las unidades pluriverbales se encuadrarían dentro de lo que en la microestructura del diccionario se conoce como la parte sintagmática. Salvo raras excepciones, como ciertas locuciones sustantivas inglesas en la macroestructura del CDEI, los tres diccionarios analizados siguen esta misma línea, pues la fraseología aparece como un tipo más de información sobre un determinado lema, aunque el grado de especificación varía de diccionario a diccionario. El CDEI, por ejemplo, no proporciona indicación alguna sobre los criterios de inclusión de unidades fraseológicas, ni sobre los procedimientos utilizados para ello. Se limita a señalar “the most common collocations” –que traduce por “ejemplos más usados” en español– en la explicación de la organización de sus entradas (XVI); y, al hablar del orden del material, tan sólo menciona las dificultades que presenta la localización de los “giros” (traducción que da para “phrases” y “collocations”). En el prólogo, el LGDEI hace mención expresa de su voluntad de incluir los “idioms” y “giros genuinos de cada país”. A tal efecto, especifica la localización, por orden alfabético y en cursiva, de las “locuciones y expresiones” (o “phrases and expressions”) en el apartado de frases y modismos, tras la acepción correspondiente, y señalado mediante una doble barra vertical seguida de guión, de la cual se prescinde cuando hay una sola unidad pluriverbal. El DOIE, por su parte, menciona la inclusión de colocaciones (“collocations”) –entre paréntesis angulares y en cursiva– para distinguir diversas acepciones de una palabra (pp. XXIV, XL); y de modismos (“idiomatic phrases”) y proverbios (“proverbs”) como ejemplos ilustrativos del uso de un determinado lema en cuya entrada aparecen (pp. XI, XVII).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 157

La fraseología en los diccionarios bilingües

157

3. Palabra clave Otra dificultad añadida a la ya por sí complicada localización de las unidades pluriverbales atañe a la palabra clave. En los prólogos y guías de uso es donde suelen darse este tipo de indicaciones, aunque ello varía de diccionario a diccionario. Por ejemplo, el DOIE pone especial énfasis en ayudar al usuario en la localización de una unidad pluriverbal determinada, mientras que el CDEI sólo se refiere a los “giros” formados por dos palabras y el LGDEI no proporciona información alguna al respecto. Cada diccionario emplea unos criterios de ordenación alfabética diferentes, que suelen aplicar de forma asistemática. En la guía de uso del DOIE, concretamente en la sección “Cómo buscar los giros idiomáticos y los proverbios” (XXXIX), se indica que estas unidades se incluyen dentro del artículo correspondiente al primer sustantivo, y, en su defecto, lo hacen bajo el primer verbo o adverbio. Efectivamente, muchas unidades se localizan bajo el primer sustantivo: to call it a day, Out of sight, out of mind, Do me a favour; armar una bronca, dar coces contra el aguijón, Agua pasada no mueve molino, etc.; o bajo uno solo de sus componentes, ya sea el verbo –to venture an opinion, Forget it (pero Easy come, easy go, bajo easy)–, el adjetivo –Dear me–, u otra categoría –No hay de qué, bajo qué. Pero también se da bastante duplicidad, pues una misma unidad puede aparecer en las entradas correspondientes a varios de sus elementos integrantes, como to launch an offensive, bajo ambos componentes, to sleep like a log, bajo sleep y log, o A falta de pan buenas son tortas, bajo faltar y torta. Por otra parte, el CDEI especifica el sistema seguido para la ordenación de los “giros” (“phrases” y “collocations”) formados por dos palabras en la microestructura de las entradas (XXII). Por ejemplo, cuando ambas palabras pertenecen a la misma parte del discurso, el “giro” figura bajo la primera; los formados por sustantivo y adjetivo van listados bajo el adjetivo (o como entradas independientes) en la parte inglés-español, pero bajo el sustantivo, en la parte español-inglés; mientras que los formados por verbo más sustantivo, lo hacen bajo el sustantivo (sin embargo, to launch an offensive y cursar una orden aparecen bajo sus respectivos verbos). Nada dice, sin embargo, de la localización de las unidades formadas por más de dos palabras. Éstas pueden venir listadas indistintamente bajo varios lemas, aunque la localización de las locuciones, los refranes y las fórmulas resulta bastante homogénea: suelen listarse en ambas secciones bajo la entrada correspondiente al primer sustantivo: to get hold of the wrong end of the stick aparece bajo end; Cuando el río suena, agua lleva, bajo río; Ni hablar del peluquín, bajo pelu-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 158

158

Capítulo VI

quín, etc. Cuando la unidad en cuestión no incluye sustantivo alguno, ésta suele aparecer en la entrada correspondiente al verbo, como to ride; y, en su defecto, bajo otras categorías gramaticales, como adjetivos (Good for sb/sth) y adverbios (Desde luego). Sólo ocasionalmente se repite la unidad pluriverbal en las entradas correspondientes a varios de sus componentes individuales (cf. Two is company but three is a crowd y dar coces contra el aguijón, listadas bajo ambos sustantivos). En las fórmulas, en cambio, abundan las duplicidades, e incluso se da alguna que otra remisión interna. Así, Too true, Do me a favour, Nada de eso, aparecen bajo ambos componentes; y Le acompaño en el sentimiento aparece en bajo la entrada correspondiente al verbo, y como remisión interna bajo el sustantivo. Por otra parte, el LGDEI no proporciona al usuario información acerca de la palabra clave bajo la cual aparece una determinada unidad pluriverbal. En comparación con los diccionarios anteriores, presenta un mayor grado de redundancia. Así, una misma unidad suele aparecer listada bajo varios componentes a la vez, frecuentemente mediante remisiones internas. Algunos ejemplos son to cast a spell, to lead sb. up the garden path, bajo lead y garden; Out of sight, out of mind, bajo sight y out; adoptar una actitud; Genio y figura hasta la sepultura, que se incluye bajo los sustantivos primero y tercero; o A nadie le amarga un dulce, bajo amargar y dulce. En el caso de las fórmulas, lo más normal es encontrar una misma unidad varias veces bajo distintas entradas (cf. Well done y Desde luego). Cuando la fórmula consta de tres o más elementos individuales, resulta difícil vislumbrar un método de ordenación sistemático: Mind your own business aparece bajo el verbo y el sustantivo; Not at all, bajo el adverbio y el pronombre; Con mucho gusto, bajo la preposición y el sustantivo, etc. Tampoco se siguen criterios de ordenación sistemáticos cuando una unidad pluriverbal es listada bajo uno solo de sus componentes. Así, las colocaciones pueden aparecer bajo el sustantivo (to pass sentence) o el verbo (to raise the alarm); mientras que las locuciones pueden figurar bajo el primer sustantivo, como en to have a chip on one’s shoulder, arrimar el ascua a la sardina de uno; o en la entrada correspondiente al segundo sustantivo –to know which side one’s bread is buttered (bajo bread) y poner una vela a Dios y otra al diablo (bajo Dios)–; o bajo el verbo, independientemente de que la unidad en cuestión contenga algún sustantivo, como ocurre en to paint the town red. Al igual que en el CDEI y el DOIE, solamente se observa cierta homogeneidad en el caso de refranes y fórmulas, cuya palabra clave suele ser el primer sustantivo (cf. My foot, Agua pasada no mueve molino) y, en su defecto, el primer verbo (cf. Once bitten, twice shy; Qué va) o adjetivo (cf. Fair enough, De ningún modo).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 159

La fraseología en los diccionarios bilingües

159

4. Procedimientos El estudio realizado revela el uso de procedimientos distintos para dar cuenta de la fraseología, según se trate de colocaciones o del resto de las unidades pluriverbales. En el primer caso, estas unidades suelen aparecer especificadas bajo los colocativos; mientras que las locuciones, refranes y fórmulas aparecen en los ejemplos, como acepciones independientes en la entrada correspondiente a la palabra clave, o en apartados reservados a tal efecto. Las colocaciones reciben un tratamiento diferenciado en estos tres diccionarios. Lo más normal es que se las incluya en la entrada correspondiente al verbo, donde vienen especificadas en calidad de bases. Esto no resulta extraño si tenemos en cuenta que los componentes de una colocación –los colocados– no comparten el mismo estatus. La base, que es el elemento semánticamente autónomo, determina la elección del otro, mientras que la traducción del colocativo varía según la base con la que se coloque: así, pay en to pay attention y en to pay a visit se traduce en español por prestar y hacer respectivamente (Corpas Pastor, 1992). De ahí que las colocaciones de verbo más sustantivo vengan especificadas bajo los colocativos, aunque cada diccionario use una tipografía distinta. Así, en el CDEI, bajo la entrada para el verbo, aparece en cursiva el sustantivo con el que se coloca el verbo, seguido de la traducción de éste, en letra redonda, cuando se coloca con dicha base (cf. to sweep a channel y marcar el compás). Éste es el mismo procedimiento usado en el DOIE, con la salvedad de que el sustantivo, en cursiva, aparece entre paréntesis angulares (cf. to issue a statement y tomar cariño). En el LGDEI se da la traducción del verbo según el sustantivo con el que se coloque, sustantivo que aparece entre paréntesis, todo ello en letra redonda, como en el caso de to score a goal e incumplir un contrato. Con este sistema, se corre el riesgo de confundir colocaciones y discriminadores semánticos pues ambos aparecen de la misma forma. La tónica general parecer ser, no obstante, la repetición de las colocaciones también bajo las bases mediante procedimientos reservados, en principio, al resto de las unidades pluriverbales. De otro modo, no estaríamos ante diccionarios bifuncionales, sino de comprensión. Según Hausmann (1985), las colocaciones deben aparecer bajo sus bases en los diccionarios de producción, y bajo los colocativos en los de comprensión; pero en el caso de un diccionario bifuncional, estas unidades deberían ser listadas doblemente bajo las entradas correspondientes a la base y al colocativo. Por su parte, Cop (1991) es partidaria de incluir las colocaciones siempre bajo el colocativo y su base, ya que, contrariamente a lo que ocurre en los diccionarios monolingües, los usuarios de diccionarios bilingües pueden partir de

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 160

160

Capítulo VI

ambos colocados en tareas codificadoras. Además, las colocaciones cumplen funciones distintas en ambas secciones. Los ejemplos –completos o quebrados– constituyen el procedimiento más frecuentemente utilizado para incluir la fraseología en el diccionario. Se trata de un hecho ampliamente aceptado en lexicografía, aunque quizá menos debatido porque tradicionalmente se admite que los ejemplos sirvan para dar cuenta del componente fraseológico de las lenguas (Zgusta, 1971; Debyser, 1981). Es más, ésta constituye una de las funciones típicamente desempeñadas por los ejemplos. Así, Roberts (1992) divide la categoría de ejemplos en combinaciones libres de palabras, colocaciones y expresiones fijas. En este sentido, conviene recordar que la lexicografía bilingüe recurre a “ejemplos, frases, modismos y construcciones” para completar el artículo, cuando, a pesar de las traducciones y observaciones incluidas, el usuario siga teniendo dudas acerca del significado o el uso de un determinado lema (Alvar Ezquerra, 1981 [1993]). El CDEI suele presentar la fraseología de esta forma, generalmente tras la acepción correspondiente, sin un orden alfabético, y mezclada con los ejemplos propiamente dichos, con los cuales comparten, además, idéntica tipografía: en negrita (el lema sustituido por una tilde) –tras los posibles equivalentes de traducción del lema y separados de éstos por punto y coma–, seguidos de su traducción correspondiente en letra redonda (o traducciones, separadas por comas o puntos y comas), separada por un espacio, y por punto y coma de los otros ejemplos. Este procedimiento se emplea para dar cuenta de todos los tipos de unidades pluriverbales en ambas secciones del diccionario: algunas colocaciones (cf. adoptar una postura, bajo postura; to shed tears, bajo tear); locuciones (to drive sb. up the wall, bajo wall, y remover Roma con Santiago, bajo remover); refranes (Every cloud has a silver lining, bajo cloud; El que no llora no mama, bajo llorar); y fórmulas (My foot, bajo foot, Ni hablar del peluquín, bajo peluquín). El LGDEI también echa mano de ejemplos para presentar algunas unidades pluriverbales, las cuales van en cursiva tras la traducción de la acepción correspondiente de la palabra clave, separadas de aquella por dos puntos y seguidas de la traducción correspondiente. Se trata, no obstante, de un procedimiento secundario, pues se utiliza principalmente para mostrar colocaciones y locuciones incluidas mediante diversos procedimientos en las entradas correspondientes a otras palabras clave. Éste es el caso de to pay a compliment, como ejemplo bajo compliment, pero como especificación de colocado bajo pay; de to sleep like a log, ejemplo bajo sleep, pero incluido en el apartado de frases y modismos en la entrada correspondiente a log. El DOIE también recoge las unidades pluriverbales en la sección de ejemplos, con la tilde en sustitución de la palabra clave, separados por puntos y comas, y seguidos, tras un espacio, por su traducción correspondiente. A diferen-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 161

La fraseología en los diccionarios bilingües

161

cia del CDEI, emplea una tipografía distinta para las unidades pluriverbales, lo cual facilita su localización. Así, frente a los ejemplos, que van en negrita redonda, las locuciones, los refranes y ciertas fórmulas lo hacen en negrita cursiva, como to blow sb’s brains out (bajo brains), Over my dead body! (bajo body) y El hombre propone y Dios dispone (bajo hombre). Los ejemplos propiamente dichos también se emplean para dar cuenta de algunas colocaciones (cf. correr peligro, bajo ambos lemas), así como de un buen número de fórmulas: Do me a favour, bajo favour; Well done!, bajo well; No hay de qué, bajo qué; Desde luego, bajo ambos lemas, etc. A veces se indica que se trata de una “frase hecha”, como en el caso de Le acompaño en el sentimiento, bajo acompañar. En menor medida, y al igual que en el LGDEI, funcionan como procedimiento secundario, especialmente para dar cuenta de colocaciones en la entrada correspondiente a la base (cf. to throw light; descifrar un código). Algunos autores se han manifestado en contra de esta práctica habitual de presentar los ejemplos y la fraseología como una misma cosa, pues con ello se dificulta y alarga considerablemente la búsqueda de dichas unidades en el diccionario (Tomaszczyk, 1981). Además, los ejemplos constituyen por sí mismos una categoría formal de la microestructura del diccionario bilingüe, aunque por influencia de la lexicografía monolingüe se los haya identificado de forma vaga con la fraseología (Jacobsen, Manley y Pedersen, 1991). Otro de los procedimientos comúnmente empleados consiste en presentar una unidad pluriverbal como si se tratara de una acepción independiente, bien sola, o bien acompañada de otras expresiones de similar categoría. El CDEI usa este procedimiento casi exclusivamente para dar cuenta de las locuciones, como en el caso de to read the riot act to sb. (bajo riot) y enseñar el cobre (bajo cobre); aunque a veces también lo emplee para indicar algunas paremias y fórmulas, como en How dare you!, bajo dare en la sección inglés-español, y Eso es agua pasada, que figura en la acepción (c) del lema agua (la palabra clave en este caso), junto a otras unidades pluriverbales. En ocasiones se introduce un lema en la macroestructura con la única función de mostrar una unidad determinada, como ocurre con la entrada de hook(e)y en el CDEI, en la que sólo figura la unidad to play hookey más su traducción correspondiente; o con la entrada correspondiente a San Quintín que aparece como lema en el DOIE con el único propósito de introducir la unidad armar(se) la de San Quintín. A veces el CDEI indica explícitamente que se trata de una acepción dedicada a “phrases” o “locuciones”. Véase, por ejemplo, la acepción (b) de tell, donde, tras la indicación “(gen: idiomatic uses)” figuran numerosas fórmulas como Tell me another!, You’re telling me! ...; la acepción (b) de card2, dedicada a

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 162

162

Capítulo VI

“(idioms)”; la acepción (c) de casa, donde, tras la indicación “(hogar: locuciones con verbo)”, se incluyen unidades como tirar la casa por la ventana y empezar la casa por el tejado; o la acepción (a) de chuparse, que sólo sirve para introducir la fórmula ¡Chúpate ésa! Aunque rara vez, este procedimiento también se emplea en el DOIE. Valga como ejemplo la acepción 6 de mal3 –“(en locs)”– donde se incluyen unidades pluriverbales del tipo hacer mal, ¡Menos mal! (en negrita redonda, como ejemplos propiamente dichos) y estar a mal con alguien, tomarse algo a mal (en negrita cursiva). Relacionado con el anterior, se da un cuarto procedimiento que consiste en presentar la fraseología en un apartado independiente destinado a tal fin. Es el método que sigue el LGDEI por excelencia, tal como indica en su guía de uso. Aquí se incluyen colocaciones: to cast a spell, bajo ambos lemas, pegar un susto, bajo pegar; locuciones: to twist sb. round one’s little finger, bajo finger, darle a uno la nariz, bajo nariz; refranes: The early bird catches the worm, bajo bird, Muerto el perro se acabó la rabia, bajo perro; y fórmulas: Fair enough, bajo fair, De nada, bajo nada.

5. Equivalentes de traducción La traducción de las unidades pluriverbales en los diccionarios bilingües ha sido objeto de una menor atención en los trabajos sobre el tema (Boguslawski, 1979). Independientemente del grado de equivalencia translémica del que se trate, los tres diccionarios analizados emplean cuatro técnicas básicas para dar cuenta de los equivalentes de traducción, a saber, (a) unidad pluriverbal equivalente; (b) unidad léxica equivalente, (c) paráfrasis, y (e) traducción alternativa de ejemplos que contengan la unidad pluriverbal de la lengua de origen. La primera técnica se suele emplear para dar cuenta de aquellas unidades pluriverbales de la lengua de origen que presentan equivalencia translémica total o parcial (por diferencia de imagen) con respecto a otra unidad pluriverbal de la lengua meta, como se observa en los tres diccionarios: to poach an egg → escalfar un huevo; quemar las naves → to burn one’s boats/bridges; Once bitten, twice shy → (El) gato escaldado del agua fría huye; y Desde luego → Of course. La equivalencia parcial resulta más problemática, pues al no tener en cuenta las diferencias semánticas o pragmáticas existentes, se asocia una determinada unidad pluriverbal en la lengua de origen con otra(s) de la lengua meta, con la(s) cual(es) sólo comparte algunos sememas. Esto provoca numerosos errores de traducción. Buena prueba de ello es la traducción que ofrecen los tres diccionarios de la locución to spend a penny: “euph not fml to urinate ... This phrase is

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 163

La fraseología en los diccionarios bilingües

163

usually used to or by children or their mothers” (LDOEI). En el LGDEI encontramos “FIG. FAM. llamar por teléfono (to go to the toilet)”; “cambiar el agua al canario” en el CDEI; y “hacer pis (fam)” en el DOIE. Esta última posibilidad es quizá la que mayor grado de equivalencia presenta con la unidad inglesa, ya que pis, en lenguaje infantil, significa orina (cf. DRAE). Por otra parte, la falta de discriminación semántica entre los distintos equivalentes propuestos, hace que el usuario asuma la sinonimia de éstos, como, por ejemplo, en las traducciones que ofrece el CDEI para refrán español A buen entendedor pocas palabras (le bastan): “a word to the wise is sufficient; enough said!”. Si bien A word to the wise (is enough/sufficient) presenta equivalencia plena, no en vano ambas unidades provienen del dicho latino Verbum sat sapienti, no ocurre lo mismo con la fórmula Enough said! Ésta se emplea para indicar que no es necesario decir nada más, ya que la opinión del emisor o sus intenciones han quedado suficientemente claras (cf. ODOEI). Falta, pues, el elemento de discreción y perspicacia que se supone tanto en el primer equivalente como en la unidad de la lengua de origen. En relación con esto, merece la pena destacar la frecuente traducción de unidades pluriverbales de la lengua de origen mediante una perífrasis explicativa, aun cuando exista en la lengua meta una unidad equivalente. Por ejemplo, Two is company, three is a crowd se traduce como “con dos basta y sobra uno” en el CDEI, en lugar de su equivalente en español Dos son compañía, tres son multitud. Algunas unidades pluriverbales tienen como equivalente una unidad léxica en la lengua meta: to cast a spell → “hechizar” (LGDEI); mentarle la madre a algn. → “to swear at sb.” (CDEI). En estos casos se pierden las connotaciones y aspectos figurativos presentes en la lengua meta, a no ser que se empleen unidades léxicas simples cargadas connotativa y afectivamente, como My foot! → “¡narices!” (LGDEI), o bien glosas explicativas que compensen la infratraducción que ello supone, como la traducción que ofrece el DOIE para mentarle la madre a algn. → “to insult sb. (by referring to his/her mother)”. La falta de información pragmática puede dar lugar a errores de traducción, como en el caso de to make an honest woman (out) of sb.: “not fml often humor (of a man) to marry (a woman), esp. when she has had a sexual relationship with him for some time or has had many love affairs” (LDOEI). El DOIE, que, al igual que los otros dos diccionarios, no recoge la variante con out, incluye la marca diastrática “(hum)”, pero no hace alusión alguna a que el sujeto es un hombre y éste se casa con una mujer, ni tampoco a las implicaturas pragmáticas de esta unidad, pues la traduce simplemente por “casarse con algn”. El LGDEI, por su parte, no proporciona información estilística (como tampoco lo hace el CDEI), pero da cierta información pragmática mediante el uso del

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 164

164

Capítulo VI

femenino en uno de los equivalentes de traducción que proporciona: “casarse con, tomar por esposa a”; mientras que el CDEI se extralimita claramente a este respecto, a juzgar por la versión tan sui generis que da: “casarse con una (a causa de haberla dejado encinta)”. Las lagunas léxicas en ambas lenguas suelen traducirse mediante paráfrasis que expresan de forma aproximada el significado denotativo de la unidad en cuestión. Dado que tales equivalentes explicativos (en el sentido que le da Zgusta, 1971) no vienen identificados como tales mediante marcas o mediante el uso de una tipografía distintiva, pueden llegar a confundir al usuario, quien a menudo los considera verdaderos equivalentes de traducción. Las perífrasis explicativas reflejan el significado denotativo de las unidades de la lengua de origen, pero con ellas se pierden alusiones y valores connotativos. Éste es el caso de la locución española ponerse el mundo por montera, cuyo significado denotativo –“No hacer caso de los juicios o críticas de la gente” (DUE)– es traducido fielmente como “to care nothing for public opinion” (CDEI), “not to care what people think o what people say” (LGDEI), y “to scorn the world and its ways” (DOIE). Se pierde, sin embargo, toda alusión al mundo del toreo. Recuérdese que la palabra montera, en su acepción segunda, significa “gorro de terciopelo negro y pasamanería de seda que lleva el torero en armonía con el traje de luces” (DALE). Precisamente, a ello se refiere el LDPL cuando define la mencionada locución: Ponerse el mundo por montera. Actuar según el propio criterio, sin prestar atención a la opinión ajena (montera: prenda de cabeza que puede tomar diversas formas; se aplica en particular a la que usan los toreros).

También se pierden frecuentemente las valoraciones personales implícitas en estas unidades. La locución hacer (uno) de su capa un sayo se traduce por “to act freely” (CDEI) y “to do as one pleases” (LGDEI), sin referencia alguna a la posible irresponsabilidad del acto: “hacer alguien en sus asuntos o con sus cosas lo que quiera, aunque no sea razonable o sensato” (DUE). Lo mismo ocurre con la locución inglesa to talk shop, de cuyas traducciones en la lengua meta –“hablar del propio trabajo, hablar de asuntos profesionales” (CDEI), “hablar de negocios, hablar de asuntos profesionales” (LGDEI) y “hablar del trabajo” (DOIE)– falta el aire de reproche o descortesía implicado por esta unidad en la lengua de origen: talk shop [V + O] discuss (with colleagues) matters connected with one’s trade or profession (often in circumstances when general conversation maight be more suitable, eg in the presence of others who are not interested). (ODOEI)

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 165

La fraseología en los diccionarios bilingües

165

Así pues, no siempre se logra una traducción fiel. Por ejemplo, el refrán All work and no play makes Jack a dull boy es traducido por “trabajar sin descansar agota a cualquiera” (LGDEI) y “hay que dejar tiempo para el esparcimiento” (DOIE). Además de no indicarse en ningún momento que suele aparecer acortado como All work and no play (cf. LDOEI), ninguno de los dos equivalentes anteriores logra dar cuenta de la interpretación estándar que corresponde a este refrán inglés, ni tampoco de sus implicaciones pragmáticas: All work and no play makes Jack a dull boy. It is not healthy for someone to work all the time and never play. (Often used to exhort someone to stop working, or justify why you have stopped working. You can substitute the name of the person you are addressing for Jack). (NTC)

A veces se intenta paliar esta situación mediante el uso de glosas explicativas: así, to carry a torch for sb –“not fml to be in love with (someone), esp. someone who does not return one’s love” (LDOEI)– se traduce por “FIG. estar enamorado de alguien [sin ser correspondido]” en el LGDEI y, con cierta confusión de géneros, por “(fig) seguir enamorada de uno (esp a pesar de no ser correspondido por él)” en el CDEI (pero simplemente como “estar perdidamente enamorado de alguien” en el DOIE). Nótese la ausencia de marcas estilísticas en los tres diccionarios. Otras veces, en un esfuerzo por encontrar un equivalente de traducción adecuado, se dan supuestas unidades pluriverbales, que son “inventadas”, pues no existen en la lengua meta, como la traducción que ofrece el LGDEI de Quien fue a Sevilla perdió su silla: “he who goes to the fair looses his chair”, la cual, aunque no exenta de gracia, es totalmente incorrecta (cf. la traducción ofrecida por el DOIE: “if you go away you can’t expect people to keep your place for you”). Cuando no es posible dar una traducción válida para un gran número de contextos, se opta por dar la traducción de diversos ejemplos que contengan la unidad en cuestión. Por ejemplo, el DOIE no traduce directamente las fórmula My foot! Forget it!, o la locución empinar el codo, sino que los equivalentes hay que buscarlos dentro de la traducción de los ejemplos que ofrece en cada entrada, con indicaciones estilísticas en ambas lenguas. El mismo tratamiento reciben Here’s to X! en el LGDEI y to sweep sth. under the carpet en el CDEI. Hay que distinguir esta técnica de la mera inclusión de ejemplos ilustrativos al lado de sus correspondientes traducciones, tras la unidad pluriverbal y su equivalente de traducción general, como levantar la mirada y to take care en el CDEI; o sabérselas todas, en el DOIE, donde el ejemplo viene indicado como tal mediante el uso de una tipografía distinta (en negrita redonda). A los problemas que acabamos de mencionar, hay que añadir los derivados de la falta de rigurosidad y sistematicidad en las traducciones ofrecidas para una

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 166

166

Capítulo VI

misma unidad pluriverbal cuando ésta viene listada bajo varios componentes a la vez. Por ejemplo, el DOIE proporciona los siguientes equivalentes de traducción para A falta de pan buenas son tortas: “half a loaf is better than none” bajo faltar, pero “we’ll/they’ll just have to make do” bajo pan. Del mismo modo, to lead sb up the garden path se traduce en el LGDEI como “engañar or embaucar a alguien” bajo garden, pero como “hacer tragar el anzuelo a alguien” bajo lead. Too true! se traduce por “¡muy bien dicho!, ¡y cómo!” en la entrada correspondiente a too, pero por “¡es verdad!”, bajo true en el CDEI. También nos hemos encontrado asiduamente con inconsistencias en ambas secciones del diccionario bilingüe. Por ejemplo, Silence is golden se traduce en el CDEI bajo silence por “el silencio es de oro”, a pesar de que ofrece esta unidad en la sección español-inglés como traducción de dos refranes españoles equivalentes: Por la boca muere el pez y Al buen callar llaman Sancho. De la misma forma, la colocación to pass sentence, traducida por “sentenciar”, “condenar” en el LGDEI, no figura en las entradas correspondientes a dichos lemas en la sección español-inglés. Y lo mismo ocurre en el DOIE: to twist sb. round one’s little finger se traduce por “meterse a algn. en el bolsillo”, la cual, a su vez, se traduce por “to get sb. eating out of one’s hand” en la sección español-inglés. Por último, las inconsistencias también se dan de diccionario a diccionario. Si tomamos como ejemplo la unidad anterior –to twist sb. round one’s little finger–, se observa que los tres diccionarios analizados no se ponen de acuerdo en cuanto a su equivalente de traducción en español: “meterse a algn. en el bolsillo” (DOIE), “manejar a uno a su antojo” (LGDEI) y “hacer que uno baile al son que le tocan” (CDEI).

6. Conclusión El componente fraseológico de las lenguas forma parte de la microestructura de los diccionarios bilingües, pero su tratamiento lexicográfico deja mucho que desear. Por un lado, no se da información precisa sobre los procedimientos utilizados para dar cuenta de las unidades pluriverbales, como tampoco se especifican los criterios de ordenación alfabética utilizados. Además, la práctica ausencia de marcas tipográficas distintivas y de apartados donde se incluya la fraseología de forma exclusiva hace que el usuario deba emplear mucho tiempo y esfuerzo en la búsqueda de una determinada unidad. Por otro lado, los equivalentes de traducción ofrecidos son a menudo incorrectos o bien carecen de glosas explicativas que compensen los casos de infra- o sobretraducción originados por el anisomorfismo de las lenguas, es decir, aquellos aspectos semánticos (denotativos y connotativos) y pragmáticos que se pier-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 167

La fraseología en los diccionarios bilingües

167

den ineludiblemente al traducir de una lengua a otra. La escasez de verdaderos ejemplos que ilustren el funcionamiento real de estas unidades, junto con la asimilación de las perífrasis explicativas a los auténticos equivalentes de traducción, viene a complicar aún más las cosas. En este sentido, se observa una gran inconsistencia en los equivalentes de traducción de una determinada unidad pluriverbal. Dejando a un lado el hecho de que varios diccionarios ofrezcan traducciones distintas para una misma unidad, también se dan graves inconsistencias dentro de un mismo diccionario, ya que se ofrecen diversas traducciones para una determinada unidad pluriverbal cuando ésta aparece listada en varios de sus componentes; o bien no hay correspondencia entre ambas secciones del diccionario. Un tratamiento sistemático de la fraseología en la lexicografía bilingüe debe pasar, pues, por la clarificación de los criterios de localización y ordenamiento alfabético, así como por un profundo análisis contrastivo que conduzca a la traducción efectiva de las unidades pluriverbales (Corpas Pastor y Moreno Ortiz, 1995). Habrán de tenerse en cuenta también otros aspectos tales como la inclusión de etiquetas de uso y de variantes, de los cuales no nos hemos ocupado en este trabajo por razones de espacio. Y, finalmente, la lingüística del corpus deberá ser un punto de referencia obligado en este tema, pues los resultados obtenidos arrojarán luz sobre los criterios de selección, lematización y orden de presentación de los equivalentes, así como acerca del uso y las funciones reales de estas unidades en el discurso. Referencias bibliográficas ACADEMIA ESPAÑOLA (RAE) (1992): Diccionario de la lengua española. 21ª ed. Madrid: Espasa-Calpe [DRAE]. ALVAR EZQUERRA, M. (Dir.) (1990): Diccionario actual de la lengua española. Barcelona: Biblograf [DALE]. — (1993 [1981]): “Los diccionarios bilingües: su contenido”, Lingüística Española Actual, III, 1981 (Recogido en ALVAR EZQUERRA, M., Lexicografía descriptiva. Barcelona: Biblograf, 1993, 145-164). BERTRAM, A. (1993): NTC’s Dictionary of Proverbs and Clichés. Lincolnwood, Illinois: National Textbook Company [NTC]. / , A. (1979): “Zum Problem der Phraseologie in zweisprachigen WörterbüBOGUSLAWSKI chern”, en: Kwartalnik Neofilologiczny XXVI 1, 29-36. COP, M. (1991): “Collocations in the Bilingual Dictionary”, en: HAUSMANN, F. J., et al. (eds.): Wörterbücher. Dictionaries. Dictionnaires. Ein internationales Handbuch zur Lexikographie. An International Encyclopedia of Lexicography. Encyclopédie internationale de lexicographie. Vol. 3. Berlín, Nueva York: Walter de Gruyter, 27752778.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 168

168

Capítulo VI

CORPAS PASTOR, G. (1992): “Las colocaciones como problema en la traducción actual (Inglés/Español)”, en: Revista del Departamento de Filología Moderna. Universidad Castilla-La Mancha 2/3. 179-186. — (1995): Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español. Tesis doctoral (Universidad Complutense de Madrid, 1994, edición en microfichas). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad. CORPAS PASTOR, G., y MORENO ORTIZ, A. J. (1995): “Diseño de una base de datos fraseológica para la traducción asistida por ordenador (TAO)”, en: MARTÍN VIDE, C. (Ed.), Actas del XI Congreso de Lenguajes Naturales y Lenguajes Formales. Barcelona: PPU, 389-396. COWIE, A. P.; MACKIN, R., y MCCAIG, I. R. (1993): Oxford Dictionary of English Idioms Oxford, Oxford University Press. (Anteriormente publicado con el título de Oxford Dictionary of Current Idiomatic English. Vol. 2.: Phrase, Clause and Sentence Idioms, 1983) [ODOEI]. DEBYSER, F. (1981): “De meilleurs dictionnaires bilingues”, en: Le français dans le monde. 159 (81), 37-42. DUHME, M. (1990): “It’s all Greek to me –kontrastive Phraseologieforschung Deutsch–Englisch im Bereich der Phraseographie”, en: Neuphilologische Mitteilungen XCI 1, 9-22. FONTANILLO MERINO, E. (Ed.) (1994): Larousse Diccionario Práctico de Locuciones. Barcelona: Larousse Planeta [LDPL]. GALIMBERTI JARMAN, B., y RUSSELL, R. (Eds.) (1994): El Diccionario Oxford EspañolInglés/Inglés-Español. Oxford: Oxford University Press [DOIE]. GARCÍA-PELAYO, R. (1983): Larousse Gran Diccionario. Español-Inglés. Inglés-Español. Barcelona, París: Larousse [LGDEI]. HAAS, M. R. (1962): “What belongs in the bilingual dictionary?”, en: HOUSEHOLDER, F. W., y SAPORTA, S. (eds.): Problems in Lexicography. Bloomington: Indiana University Press, 5-50. HAUSMANN, F. J. (1985): “Kollokationen im deutschen Wörterbuch: Ein Beitrag zur Theorie des lexikographischen Beispiels”, en: B ERGENHOLTZ, H., y MUGDAN, J. (eds.), Lexikographie und Grammatik: Akten des Essener Kolloquiums zur Grammatik im Wörterbuch 28.-30.6.1984 (Lexicographica Series Maior 3). Tubinga: Max Niemeyer, 118-129. LONG, T. H. (Ed.) (1989): Longman Dictionary of English Idioms. 10ª reimpresión. Harlow, Londres: Longman [LDOEI]. MARTÍNEZ MARÍN, J. (1991): “Fraseología y diccionarios modernos del español”. Voz y Letra II/I, 117-126. MEYER, I. (1988): “The General Bilingual Dictionary as a Working Tool in Thème”, en: META XXXIII 3, 368-376. MOLINER, M. (1988): Diccionario de uso del español. 2 vols. Reimpresión. Madrid: Gredos [DUE]. ROBERTS, R. P. (1992): “Organization of information in a bilingual dictionary entry”, en: Euralex’90 Proceedings. Actas del IV Congreso Internacional. Benalmádena (Málaga) 28 agosto-1 septiembre 1990. Barcelona: Biblograf, 219-231.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 169

La fraseología en los diccionarios bilingües

169

SCHEMANN, H. (1991): “Die Phraseologie im zweisprachigen Wörterbuch”, en: HAUSMANN, F. J., et al. (eds.), 2789-2794. SMITH, C. (1994 [1992]): Collins Diccionario Español-Inglés Inglés-Español. 3ª ed. 2ª reimpresión. Glasgow, Nueva York: HarperCollins [CDEI]. TOMASZCZYK, J. (1981): “Issues and Developments in Bilingual Pedagogical Lexicography”, en: Applied Linguistics II 3, 287-296. VERSTRATEN, L. (1992): “Fixed Phrases in Monolingual Learners’ Dictionaries”, en: ARNAUD, P. J. L., y BÉJOINT, H. (eds.): Vocabulary and Applied Linguistics. Basingstoke, Londres: MacMillan, 28-40. ZGUSTA, L. (1971): Manual of Lexicography. La Haya: Mouton.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 171

CAPÍTULO VII TRATAMIENTO DE LAS COLOCACIONES DEL TIPO A+S/S+A EN DICCIONARIOS BILINGÜES Y MONOLINGÜES (ESPAÑOL/INGLÉS)

1. Las colocaciones y los diccionarios pedagógicos Según se desprende de un reciente estudio (Summers, 1988), la mayoría de los estudiantes de inglés como segunda lengua (L2) prefieren un diccionario bilingüe, además de un buen monolingüe. Las tareas que estos estudiantes llevan a cabo con ayuda de los diccionarios son, básicamente, dos: la descodificación y la codificación (Marello, 1987), a las que cabría añadir la transcodificación de una lengua a otra. Precisamente para la correcta realización de dichas tareas, se hace necesario tener un buen conocimiento de las propiedades colocacionales de las palabras. De un lado, cuando se trata de comprender un texto, se han de tener en cuenta las colocaciones de las palabras para captar sus sutilezas semánticas. De otro lado, muchos errores típicos de la producción se deben al desconocimiento de estas propiedades (Channell, 1981), desconocimiento que, en la traducción de una lengua a otra, puede ocasionar interferencias negativas de los diferentes patrones colocaciones de las lenguas. Así, viento flojo en español no es *weak wind en inglés, sino light wind. La noción de colocación ha sido definida de muchas formas desde que fuera expuesta por Firth en 1957. Mientras que para algunos autores una colocación no es más que la coaparición lineal de unidades léxicas (Halliday y Hasan, 1976), para otros, como Cowie (1981), una colocación es una unidad compuesta (“composite unit”) que permite la sustitución de al menos uno de sus constituyentes. Nuestro objetivo no es exponer en todo detalle el problema teórico de qué constituye una colocación. Baste decir que, en líneas generales, se entiende por colocación aquella propiedad de las lenguas por la que los hablantes tienden a producir ciertas combinaciones de palabras entre una gran cantidad de combinaciones teóricamente posibles (cf. Haensch et al., 1982). También se denomina ‘colocación’ a las combinaciones resultantes, cuyos rasgos distintivos son la frecuencia de coaparición de sus colocados, o elementos constitutivos, así como la diversidad que presentan en cuanto a patrones sintácticos y grados de restricción interna se refiere. En este trabajo vamos a examinar el tratamiento lexicográfico que recibe un tipo de colocaciones: aquellas formadas por adjetivo más sustantivo en inglés y en español.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 172

172

Capítulo VII

2. Las colocaciones A+S/S+A en los diccionarios bilingües Hemos escogido para nuestro análisis dos de los diccionarios más usados en la actualidad: el Collins Diccionario Español-Inglés/English-Spanish (CDEIES) y el Larousse Gran Diccionario Español-Inglés/English-Spanish (LGDEIES). El CDEIES suele indicar las colocaciones fundamentalmente bajo la entrada correspondiente al adjetivo, aunque también bajo el sustantivo o bajo las entradas correspondientes a ambos colocados. Los procedimientos que utiliza para ello, tanto en la sección español-inglés como en la sección inglés-español, son los siguientes: A) Bajo la entrada para el adjetivo, aparece en cursiva el sustantivo con el cual se coloca, y tras éste se da la traducción del adjetivo en dicha colocación. Los sustantivos en cursiva no siguen el orden alfabético, pero se agrupan por acepciones. Ésta es la forma en la que el CDEIES incluye las colocaciones fiery speech o relaciones estrechas: fiery adj (burning) ardiente; (red) rojo; taste muy picante; pícaro (LAm); temperament, speech apasionado, vehemente; horse, fogoso; liquor, ardiente, muy fuerte. estrecho 1 adj (a) (angosto) narrow, tight; cuarto, cramped, small; pantalón, tight, narrow, close-fitting; estos zapatos me están muy ~s these shoes are too small for me, these shoes pinch my feet. (b) dinero etc tight, short; vida austere. (c) relación etc close, intimate; amistad close.

Otras veces, la palabra puede venir precedida por una acotación de uso que indica, por ejemplo, un uso figurado de la palabra en esa acepción y, por consiguiente, en esa colocación. Esto ocurre para colocaciones como broad hint o defensor acérrimo. broad 1 adj (a) ancho; extenso, amplio; 3 metres ~ ancho de 3 metros; it’s as ~ as it is long (fig) lo mismo da; ~ bean haba f gruesa; ~ jump (US*: Sport) salto m de longitud. (b) (fig) ancho; view comprensivo; mind tolerante, liberal; hint claro, inconfundible; accent marcado, cerrado. acérrimo adj (fig) defensor etc very strong, staunch, out-and-out; enemigo bitter.

B) La colocación aparece como ejemplo en negrita, seguida de su equivalente de traducción, en letra redonda. Las colocaciones se agrupan por acepciones y aparecen al final, tras los distintos equivalentes de traducción de la entrada, así

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 173

Tratamiento de las colocaciones del tipo A+S/S+A

173

como las indicaciones en cursiva de las colocaciones. De esta forma aparecen las colocaciones raw material y éxito rotundo. raw 1 adj (a) (uncooked) food crudo; spirit puro, sin mezcla; de baja calidad; leather, silk etc bruto, sin refinar, crudo; cotton en rama; ~ data datos mpl brutos (or en bruto); ~ material materia f prima. éxito nm (a) (resultado) result, outcome; buen ~ happy outcome, success; con buen ~ successfully; tener buen ~ to succeed, be successful; tener mal ~ to have an unfortunate outcome, fail, be unsuccessful. [...] (c) (Mús, Teat, t fig) success, hit; ~ editorial, ~ de librería bestseller; ~ de taquilla box-office success, successful play ~ clamoroso, ~ fulminante, ~ rotundo huge success, overwhelming success; (Mús etc) hit song, smash hit; los mejores ~s de ... the greatest hits of …

El LGDEIES también recoje las colocaciones A+S/S+A, principalmente bajo el adjetivo, aunque también bajo ambos colocados y, en menor medida, bajo el sustantivo. Este diccionario se vale de los siguientes procedimientos para dar cuenta de las colocaciones: (A) En primer lugar, la colocación puede aparecer como ejemplo más traducción, tras el equivalente de traducción de una determinada acepción del lema, separándose las acepciones por medio de dos barras verticales. Tanto la traducción del adjetivo, como la traducción del ejemplo van en redonda. El ejemplo, a diferencia del CDEIES, va en cursiva. La claridad visual es menor de esta manera, como se observa en los siguientes ejemplos correspondientes a las colocaciones close game y accidente aparatoso: close adj. Cercano, na: close relative, pariente cercano. || Íntimo, ma: close friend, amigo íntimo ... || Reñido, da: close game, partido reñido. || Igualado, da; reñido, da: the voting was very close, la votación estaba muy igualada. aparatoso, sa adj. Pompous (pomposo). || Spectacular: accidente aparatoso, spectacular accident. || Showy, flashy, ostentatious (vistoso): un traje aparatoso, a showy dress.

(B) Otro procedimiento utilizado por el LGDEIES consiste en dar la traducción del adjetivo según el sustantivo con el que se coloque, sustantivo que aparece entre paréntesis, todo ello en letra redonda, como en el caso de wry smile y respeto profundo. wry adj. Torcido, da; doblado, da: wry neck, cuello torcido. || Retorcido, da (humour, remarks, etc.). || Forzado, da (a smile). || Irónico, ca (speech). || To pull a wry face, torcer el gesto, poner mala cara.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 174

174

Capítulo VII

profundo, da adj. Deep: un pozo profundo, a deep well. || FIG. Profound: pensamientos profundos, profound thoughts; miseria profunda, profound poverty. | Utter (ignorancia). | Deep, heartfelt (respeto).

Al igual que el CDEIE, este diccionario también da acotaciones de uso donde se señala el uso figurativo de la entrada en dicha colocación; por ejemplo en untarnished reputation: untarnished adj. Sin oxidar (a metal). || FIG. Sin mancha, no mancillado, da (reputation).

(C) Un tercer procedimiento consiste en presentar la colocación como frase en cursiva, seguida de su traducción correspondiente en letra redonda. El comienzo de esta sección, que va al final del artículo, se señala mediante el uso de un guión. Las frases, separadas por dos barras verticales, siguen un orden alfabético, y, a diferencia del CDEIES, no se agrupan por acepciones, como se observa en la entrada que recoge la colocación close friend. Algunas veces se fuerza una acepción independiente a partir de la frase, como ocurre en good riddance. ciego, ga adj. Blind (que no ve): quedarse ciego, to go blind; ciego de nacimiento, blind from birth. || FIG. Blinded, blind (cegado): ciego de ira, blinded by anger, blind with anger. || Blocked up, plugged, stopped (cañería). || Closely baked (pan). || With no holes (pan, queso). || – FIG. y FAM. Está ciego con los naipes, he is mad about cards. | Estar ciego, to be blind drunk, to be sozzled, to be paralytic (borrach). || FIG. Fe ciega, blind faith. friend n. Amigo, ga: he’s a friend of mine, es un amigo mío; lifelong friend, amigo de toda la vida or de siempre. || FIG. Amigo, ga: friends of the poor, amigos de los pobres; friends of the arts, amigos de las artes. || Cuáquero, ra (Quaker). || Partidario, ria (supporter). || Aliado, m. (ally).|| – A doctor friend of mine, un médico amigo mío. || FIG. A friend in need is a friend indeed, en la necesidad or en el peligro se conoce al amigo. || Bosom o close friend, amigo íntimo. riddance n. Liberación, f. || Good riddance!, ¡vete con viento fresco! (go to blazes!), ¡menudo alivio!, ¡qué bien! (what a relief!).

Aunque a primera vista pudiera parecer que las colocaciones del tipo A+S/S+A reciben un tratamiento sistemático, lo cierto es que no se puede decir que los diccionarios bilingües analizados estén aplicando criterios homogéneos. De hecho, ambos diccionarios suelen dar un tratamiento distinto a una misma

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 175

Tratamiento de las colocaciones del tipo A+S/S+A

175

colocación en casos en los que ésta aparece bajo las entradas correspondientes a ambos colocados. Así, una colocación puede venir indicada en cursiva bajo la entrada para el adjetivo, y como ejemplo o frase en negrita bajo el sustantivo. Este es el caso de private life y sueño pesado en el CDEIES. Lo mismo se puede decir del LGDEIES, donde una colocación puede aparecer como ejemplo bajo una de las entradas, y como frase bajo la otra, tal como se puede constatar para las colocaciones close friend y momento oportuno. 3. Las colocaciones en los diccionarios monolingües Los diccionarios bilingües analizados no tratan las colocaciones de forma uniforme, puesto que los diversos procedimientos que utilizan para dar cuenta de éstas no se corresponden con ningún tipo de criterio o clasificación serios. Según Tomaszcyk (1981), la investigación sobre los diccionarios bilingües depende de los resultados en la investigación de los diccionarios monolingües. Cabe preguntarse, pues, si los diccionarios monolingües utilizan criterios objetivos de clasificación y presentación que puedan aplicarse a la futura confección de diccionarios bilingües. 3.1. LAS COLOCACIONES EN LOS DICCIONARIOS MONOLINGÜES INGLESES Los diccionarios monolingües ingleses que hemos analizado son el Longman Dictionary of Contemporary English (LDOCE) y el Collins COBUILD English Language Dictionary (CCELD). Ambos son diccionarios pedagógicos centrados en las colocaciones. Los diccionarios ingleses dan un tratamiento extenso a este tipo de colocación. A menudo se indican bajo las entradas para ambos colocados, aunque también pueden aparecer bajo la entrada correspondiente a uno solo. Los procedimientos que emplean para ello son: (A) Las colocaciones suelen presentarse en forma de ejemplos (como racial prejudice en el CCELD), que en el LDOCE, tipográficamente, van en negrita, acompañadas de aclaración de su significado entre paréntesis, si se trata de colocaciones que presentan una fijación considerable, como overwhelming majority. o·ver·whelm·ing adj. very large; too great to oppose: overwhelming generosity | An overwhelming majority voted against the proposal. – ~ly adv

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 176

176

Capítulo VII

racial. 1. An unpleasant act that is racial is done to people because ADJ CLASSIF: USU they belong to a particular race. EG … attrib fight against racial ATTRIB discrimination… …the crudest kind of racial prejudice… …an alarming rise in racial harassment. ◊ racially. EG The attack was racially motivated. ◊ ADV

(B) Las colocaciones forman parte de la macroestructura, es decir, se las presenta como entradas independientes, con remisiones internas desde los artículos correspondientes a los sustantivos. Éste es el caso de industrial action en el LDOCE y de juvenile delinquent en el CCELD. industrial action [U] esp. BrE action by workers (such as STRIKE or WORK-TO-RULE) intended to put pressure on employers to agree to the workers’ demands. Juvenile delinquent, juvenile delinquents. A juvenile delinquent is a young person who is guilty of a crime, especially vandalism or some form of violence.

N COUNT

↑ Offender

(C) El LDOCE, por su parte, también suele presentar las colocaciones en el régimen lexemático de la definición del adjetivo, y, algunas veces, además de la colocación típica, aparece un ejemplo más concreto, como en pungent smell: pun · gent adj 1 (of a taste or smell) strong, sharp, and stinging: the pungent aroma of garlic 2 (of speech or writing) producing a sharp direct effect: pungent remarks about my lateness – ~ly adv –gency n [U]

(D) El CCELD también muestra un procedimiento característico, que consiste en incluir las colocaciones en las definiciones de las acepciones de las palabras, encabezando dicha definición, como se comprueba para la colocación fat wallet: fat, fatter, fattest; facts. 1 A person or animal that is fat has a lot of flesh on their body that they do not need. EG My father is fat – he weighs over fifteen stone… She was fatter than when he last saw her. ◊ fatness. EG Resistance to disease has nothing to do with fatness.

ADJ QUALIT ↑ large = overweight ≠ thin, slim

4 A fat profit, fee, wallet, etc is one which involves or contains a large amount of money; an informal use. EG This made a fat profit ◊ UNCOUNT for the manufacturer. ADJ QUALIT: ATTRIB = hefty ≠ slimp

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 177

Tratamiento de las colocaciones del tipo A+S/S+A

177

3.2. LAS COLOCACIONES EN LOS DICCIONARIOS MONOLINGÜES ESPAÑOLES Los diccionarios utilizados para nuestro análisis son el Diccionario de uso del español (DUE) y el Diccionario General Ilustrado de la Lengua Española (DGILE). Estos diccionarios no mencionan explícitamente la noción de colocación, pero registran colocaciones en los ejemplos y en las notas de uso. A diferencia de los diccionarios ingleses que hemos visto, los diccionarios españoles no suelen repetir las colocaciones bajo ambas entradas. Mientras que en los diccionarios ingleses las colocaciones solían aparecer dentro de ejemplos formados por una oración completa, los diccionarios españoles, la mayoría de las veces, presentan como ejemplo al sintagma formado por una colocación. Los procedimientos empleados por estos diccionarios para dar cuenta de las colocaciones son los siguientes: (A) Ambos diccionarios coinciden en presentar las colocaciones bajo las entradas de los adjetivos correspondientes, concretamente en el régimen lexemático de la definición. En el caso del DUE, el régimen lexemático forma parte de la perífrasis definitoria, y viene señalado por las consabidas fórmulas “se aplica a”, “aplicado a”, “dícese de” o “se dice (de)”. De esta forma se incluyen colocaciones como mal crónico. El DGILE, por su parte, separa claramente el régimen lexemático de la perífrasis definitoria gracias al empleo de paréntesis cuadrados, como en amigo íntimo. crónico, -a. Se aplica a los males o vicios que no son nuevos ni momentáneos: ‘La mala administración es un mal crónico en este país’. (V.: “ARRAIGADO, ENDÉMICO, Se aplica particularmente a las *enfermedaINVETERADO. *PERMANENTE”.) des, por oposición a “agudo”: ‘Bronquitis crónica’. íntimo, -ma (l. –mu) adj. Más interior o interno. 2 fig. Que forma parte de la esencia de una cosa. 3 [amistad] Muy estrecho; [amigo] de confianza.

(B) Otra forma de indicar las colocaciones consiste en incluirlas como ejemplos. En el DUE van en letra redonda y entre comillas simples, como en el caso de la colocación autor material. En el DGILE, el ejemplo va en cursiva (medida drástica), pudiendo incluir, ocasionalmente, una aclaración del significado de alguno de los colocados. De esta forma aparece incluida la colocación cuestión candente. material. De [De la] materia: ‘Un objeto [Una impresión] material. La presencia material de alguien’. «Físico». Por oposición a «espiritual», del cuerpo o que afecta a los sentidos: ‘Interés [Dolor, Goce] material’. Se aplica especialmente a «valor, interés» y palabras semejantes. Por oposición a «moral», se aplica

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 178

178

Capítulo VII

a las acciones realizadas físicamente y a quien las realiza: ‘El autor material del hecho’. drástico, -ca (gr. –kós < drao, obrar) adj. Que actúa rapida y violentamente. – 2 adj. s. Purgante enérgico que actúa irritando la mucosa intestinal. 3 fig. Enérgico, autoritario, draconiano: la autoridad dictó medidas drásticas. cuestión (1. quaestione). f. Pregunta que se hace o propone para averiguar la verdad de una cosa controvertida. 2. Punto controvertible, problema que se trata de resolver, materia sobre la cual se disputa: ~ batallona o candente, la que acalora los ánimos y a que se da mucha importancia.

(C) El DUE, por su parte, también utiliza otros procedimientos idiosincrásicos. Así, da la colocación bajo la entrada del sustantivo concretamente al final del artículo correspondiente, en el apartado de frases y modismos, indicándolas, tipográficamente, mediante la utilización de versales, como situación difícil. A veces, se especifica que se trata de una combinación de palabras frecuente, como ocurre, por ejemplo, para la colocación fe inquebrantable. situación (fem.; pronunc. «sit(ua)ción»). Accidente de las cosas por el que ocupan un *lugar determinado: ‘La situación de la finca [de una estrella]’. S. APURADA [COMPROMETIDA, DIFÍCIL]. *Apuro económico o de otra clase. 1 fe. (Del lat. «fides», deriv. de «fídere»; v. «FIAR, fiel». Fem.) («Tener; Inspirar»). *Creencia en algo sin necesidad de que esté confirmado por la experiencia o por la razón propias: ‘Tengo fe en lo que él me diga’. (V.: «Confianza, he. Fedatario, fehaciente. *Confiar. *Creer».) FE INQUEBRANTABLE. Enlace frecuente.

(D) Otra forma de indicar las colocaciones en el DUE consiste en especificarlas en versalitas en los “catálogos de palabras afines”, apartado en el que se recogen colocaciones como vida agitada. En ocasiones se especifica que se trata de una combinación frecuente, como en momento oportuno. vida (Del lat. «vita», deriv. de «vívere»; v.: «viable, vital, VIVIR; porvida; vitamina».) Facultad para crecer, renovar la propia substancia, reproducirse, etc., que tienen los animales y las plantas: ‘Los seres orgánicos son los dotados de vida’. FUERZA, PRINCIPIO VITAL, SAVIA. AGITADA, *AZAROSA, BOHEMIA, BORRASCOSA, descerrajada, DESORIENTADA, DESTROZADA, fortunosa —ant.—, IRREGULAR, METÓDICA, ORDENADA, RECOLETA, RELAJADA, ROTA, SEDENTARIA.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 179

Tratamiento de las colocaciones del tipo A+S/S+A

179

momento. (Del lat. «moméntum», deriv. de «movere»; v. «MOVER».) «Instante». Punto en el *tiempo: ‘La velocidad de un móvil en un momento dado’. Algunos adjetivos frecs.: “AGUDO, ÁGIDO, CRÍTICO, CULMINANTE, OPORTUNO; buen MOMENTO, mal MOMENTO”.

(E) El DGILE también utiliza otro procedimiento para presentar las colocaciones, que consiste en indicarlas como acepciones independientes en cursiva, seguidas de definición, generalmente bajo la entrada para el sustantivo. Ésta es la forma en la que recoge la colocación mercado negro1. mercado (l. –atu) m. Contratación pública en paraje destinado al efecto. 2 Sitio público destinado para comerciar (comprar). 3 Concurrencia de gente en un mercado. 4 Plaza o país de especial importancia en un orden comercial cualquiera. 5 ~ negro, estraperlo.

3.3. TRATAMIENTO SISTEMÁTICO A pesar de la variedad de procedimientos empleada por los diccionarios monolingües, no se puede decir que hayan conseguido dar cuenta de las colocaciones de forma sistemática. En este sentido, la variedad de procedimientos no se corresponde con un tratamiento uniforme de las éstas, en virtud de las restricciones combinatorias, las peculiaridades semánticas o la frecuencia de coaparición de una colocación determinada. Así, por ejemplo, el tratamiento que estas colocaciones reciben en el LDOCE no es siempre homogéneo, puesto que una colocación –como overwhelming majority– puede aparecer en negrita bajo la entrada correspondiente a uno de sus colocados, al tiempo que aparece simplemente como ejemplo más aclaración del significado bajo la entrada para el otro colocado. En el caso de las colocaciones

1 Aunque el sintagma “mercado negro” es considerado como compuesto por autores como Gisbert (1986), nosotros lo consideramos colocación atendiendo la definición que da Cowie (1981: 224):“A collocation is by definition a composite unit which permits the substitutability of items for at least one of its constituent elements (the sense of the other element, or elements, remaining constant).” “Mercado negro” forma una unidad compuesta que permite la sustitución paradigmática del sustantivo “mercado”, sin que por ello el adjetivo pierda el significado figurativo que presenta en dicha combinación. Así, frente a “mercado negro”, encontramos “dinero negro”, siendo el significado del adjetivo en ambos casos equivalente a “ilegal”. Esto se ve en el siguiente ejemplo: “De otra, se ha pasado a ser el refugio del dinero negro. El rigor fiscal que se está empleando hace que éste busque refugio, y la adquisición de inmuebles es un lugar adecuado.” (ABC, 19/02/89.) Estamos, pues, ante una colocación restringida, cuyo rango colocacional es muy limitado.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 180

180

Capítulo VII

que han sido incluidas en la macroestructura del diccionario, puede ocurrir que éstas aparezcan como ejemplo bajo la entrada correspondiente al sustantivo. Éste es el caso de la colocación capital punishment. El CCELD, por su parte, no sigue criterios estables, por cuanto se dan casos de colocaciones que, como bitter struggle, aparecen encabezando acepciones independientes bajo una entrada, y como simple ejemplo bajo la otra. En cuanto al DUE, el hecho de que una colocación aparezca como frase, como ejemplo, dentro de los “catálogos de palabras afines”, o que venga especificada en el régimen lexemático de la definición no obedece a ninguna razón especial. Más bien parece el resultado de la elección caprichosa de su autora. Sólo así se explica que colocaciones que aparecen en el apartado de frases y modismos bajo la entrada para uno de los colocados, aparezcan en el régimen lexemático de la definición de la otra entrada, como ocurre con sueño pesado, por ejemplo. El DGILE suele indicar las colocaciones sólo en el artículo correspondiente a uno de los colocados. De las pocas veces que repite la colocación, no ofrece un tratamiento uniforme. Así, una misma colocación puede aparecer como acepción independiente más explicación bajo la entrada correspondiente el adjetivo, y como ejemplo de una acepción determinada más explicación bajo la entrada para el sustantivo, como en el caso de cuestión candente. 4. Conclusiones 1. Los diccionarios bilingües recogen una cantidad importante de colocaciones. Además de registrar las colocaciones más características de ambos idiomas, es interesante señalar que éstos incluyen colocaciones que ilustran los distintos patrones colocacionales de las lenguas. Convendría ampliar, pues, la noción de colocación para incluir este último tipo de colocaciones. En este sentido, se hacen necesarios estudios contrastivos para poner en claro estos patrones colocacionales distintos, de forma que el resultado de dichos estudios se incorpore como mejora sustancial en la futura confección de diccionarios bilingües. 2. En cuanto hasta qué punto pueden servir los diccionarios monolingües como corpus y como guía para la inclusión de colocaciones en los bilingües, hay que decir que, en el caso de los españoles analizados, éstos recogen incluso menos colocaciones que los bilingües2. Así, mientras que el LGDEIES y el

2

No obstante, ambos diccionarios recogen una gran número de colocaciones del tipo verbo más sustantivo (objeto), especialmente el DGILE, que está más completo y más al día que el DUE.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 181

Tratamiento de las colocaciones del tipo A+S/S+A

181

CDEIES recogen competencia desleal, caída aparatosa y obrero especializado, por ejemplo, ni el DUE ni el DGILE las recogen. Estos diccionarios, además, no parecen hacer distinciones en cuanto a los diferentes grados de restricción que presentan los colocados. Y, como se ha visto más arriba, el tratamiento que cada colocación individual recibe dista mucho de ser sistemático. La situación de los diccionarios monolingües ingleses es muy distinta. Se les puede tomar como corpus y como modelos para la futura confección de diccionarios bilingües. Por un lado, presentan un mayor número de colocaciones que los bilingües, incluyéndolas bajo las entradas correspondientes a ambos colocados, facilitando así su localización. Por otro lado, dan ejemplos completos que constituyen una ayuda inestimable para comprobar el uso de una colocación determinada en la lengua. Aunque no siempre se dan correspondencias entre distintos diccionarios, ni dentro de un mismo diccionario, lo cierto es que se observa un esfuerzo consciente por distinguir los diferentes grados de fijación o restricción de las colocaciones (cf. el uso de negrita en el LDOCE, y las colocaciones en las definiciones del CCELD). 3. Las colocaciones más estables presentan un problema adicional a los lexicógrafos. En la tradición anglosajona, algunos las tratan como palabras compuestas, incluyéndolas como entradas independientes, mientras que otros las incluyen como ejemplos. Así, strong point aparece como entrada independiente en el LDOCE, en la definición en el CCELD, y como ejemplo más traducción en el CDEIES y el LGDEIES. En la tradición española, este tipo de colocaciones no suelen aparecer como entradas independientes. El tratamiento que éstas reciben varía de diccionario a diccionario. Así, sueño pesado aparece en el apartado de frases y modismos en el DUE, dentro del régimen lexemático de la definición del adjetivo en el DGILE y como ejemplo más traducción en el CDEIES y el LGDEIES. 4. La gran variación existente en el tratamiento de las colocaciones apunta la necesidad de estudios que pongan en claro el estatus léxico de este fenómeno. Lexicógrafos y lexicólogos han de unir sus esfuerzos para establecer los criterios a seguir a la hora de determinar en qué lugar de la microestructura debe aparecer una colocación determinada, así como qué colocaciones deben introducirse en la macroestructura de un diccionario. En cuanto a ésto último, se han barajado varios criterios, como el de la frecuencia, la rigidez sintáctica o la lexicalización semántica (Cowie, 1988; Béjoint, 1989), pero aún no se ha llegado a una solución satisfactoria. Esto se debe, en parte, a que no se pueden trazar límites claramente definidos, puesto que las colocaciones presentan distintos grados en su cohesión interna. Por lo tanto, futuras investigaciones deberían proporcionar criterios objetivos que guíen a los lexicógrafos en la confección de las micro- y macroestructuras de sus obras. Sólo entonces se podría dar un tratamiento sistemático al fenómeno léxico de la colocación.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 182

182

Capítulo VII

Referencias bibliográficas I. DICCIONARIOS CCELD: Collins COBUILD English Language Dictionary. Por SINCLAIR, J. (Ed.), Londres-Glasgow, Collins, 1988 (1987). CDEIES: Collins Diccionario Español-Inglés/English-Spanish. Por SMITH, C., et al., Londres-Nueva York-Toronto, Collins, 1989 (21988). DGILE: Diccionario General Ilustrado de la Lengua Española, nueva edición coord. Por ALVAR EZQUERRA, M., Barcelona, Vox, 1987 (1945). DUE: Diccionario de uso del español. Por MOLINER, M., Madrid, Gredos, 1988, 2 vols. LDOCE: Longman Dictionary of Contemporary English. Por SUMMERS, D. (Ed.), Harlow, Essex, Longman, 1987 (1978). LGDEIES: Larousse Gran Diccionario Español-Inglés/English-Spanish. Por GARCÍAPELAYO Y GROSS, R., et al., Barcelona, Larousse, 1989 (1983).

II. BIBLIOGRAFÍA SOBRE EL TEMA AISENDSTADT, E. (1981): “Restricted Collocations in English Lexicology and Lexicography”, en: ITL Review of Applied Linguistics 53, 53-61. ALVAR EZQUERRA, M. (1981): “Los diccionarios bilingües: su contenido”, en: Lingüística Española Actual 3, 175-196. BÉJOINT, H. (1989): “Codedness and lexicography”, en: JAMES, G. (Ed.), Lexicographers and their works (Exeter Linguistic Studies 14). Exeter: University of Exeter, 1-4. BUSTOS GISBERT, E. DE (1986): La composición nominal en español. Salamanca: Universidad de Salamanca. COWIE, A.P. (1981): “The treatment of collocations and idioms in learner’s dictionaries”, en: Applied Linguistics 2 (3), 223-235. — (1989): “Multiword lexical units and communicative language teaching”. Comunicación presentada al International Colloquium on ‘Vocabulary and Applied Linguistics’, celebrada en la Universidad Lumière, Lyon. CHANNELL, J. (1981): “Applying Semantic Theory to Vocabulary Teaching”, en: English Language Teaching Journal 35 (2), 115-122. HALLIDAY, M. A. K., y RUQAIYA, H. (1976): Cohesion in English. Londres: Longman. HAUSMANN, F. J. (1989): “Le dictionnaire de collocations”, en: HAUSMANN, F. J.; REICHMANN, O.; WIEGAND, H. E., y ZGUSTA, L. (eds.), Wörterbücher/Dictionaries/Dictionnaires (Ein internationales Handbuch zur Lexikographie/An International Encyclopedia of Lexicography/Encyclopédie internationale de lexicographie. Tomo I. Berlín, Nueva York: Walter de Gruyter, 1010-1019. HAENSCH, G.; WOLF, L.; ETTINGER, S., y WERNER, R. (1982): La lexicografía. De la lexicografía teórica a la lexicografía práctica. Madrid: Gredos. MARELLO, C. (1987): “Examples in contemporary Italian bilingual dictionaries”, en: COWIE, A. P. (Ed.), The Dictionary and the Language Learner. Papers from the

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 183

Tratamiento de las colocaciones del tipo A+S/S+A

183

EURALEX Seminar at the University of Leeds, 1-3 April 1985. Tubinga: Max Niemeyer, 224-237. SUMMERS, D. (1988): “English Language Teaching Dictionaries: Past, Present, and Future”, en: English Today 4, 10-16. TOMASZCZYK, J. (1981): “Issues and Developments in Bilingual Pedagogical Lexicography”, en: Applied Linguistics 2 (3), 287-296.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 185

CAPÍTULO VIII LAS COLOCACIONES COMO PROBLEMA EN LA TRADUCCIÓN ACTUAL (INGLÉS/ESPAÑOL)

1. Importancia de las colocaciones en traducción Desde finales de los setenta, el fenómeno léxico de la colocación ha ocupado un lugar destacado en los Estudios de Traducción. El reconocimiento de la importancia de las colocaciones en este campo ha sido fruto de la aplicación de los resultados de las investigaciones que desde hace dos décadas se vienen llevando a cabo en lingüística aplicada y en lexicografía. Traductores y traductólogos (cf. Emery, 1988; Heid y Freibott, 1991) han seguido muy de cerca estos desarrollos, dando como resultado el refinamiento de la teoría y la práctica de la traducción. Concretamente, un autor tan reconocido como Newmark (1988: 213) ha llegado a afirmar lo siguiente: Recognising whether or not a collocation is familiar, natural, or just acceptable is one of the most important problems in translation... Translation is sometimes a continual struggle to find appropriate collocations... If grammar is the bones of a text, collocations are the nerves, more subtle and multiple and specific in denoting meaning, and lexis is the flesh.

Las colocaciones constituyen, por tanto, la piedra angular de toda traducción, ya que son las responsables de la idiomaticidad y naturalidad de la misma. Pero no sólo son esenciales a la hora de recodificar el texto de origen (TO) en texto meta (TM) –también tienen una importancia fundamental en la descodificación. Por un lado, las colocaciones proporcionan los matices semánticos cuya comprensión es imprescindible para poder conseguir una traducción fiel; por otro lado, numerosos efectos estilísticos se basan en la manipulación creativa de aquellas colocaciones que presentan un alto grado de institucionalización.

2. Características lingüísticas de las colocaciones Cualquier caracterización lingüística de las colocaciones debe tomar en cuenta la importancia de la norma. Así pues, este fenómeno léxico puede ser definido como la tendencia de los hablantes a producir ciertas combinaciones de palabras

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 186

186

Capítulo VIII

entre una gran cantidad de combinaciones teóricamente posibles (cf. Haensch et al., 1982: 251). Las combinaciones así resultantes, también denominadas colocaciones, se caracterizan por la alta frecuencia de coaparición de sus elementos constitutivos o colocados, así como por presentar una gran variedad de patrones sintácticos y diversos grados de restricción interna (Aisenstadt, 1981) y de institucionalización (Béjoint, 1989). Los colocados no tienen un estatus similar, puesto que uno de ellos determina la elección del otro. En este sentido, hay que distinguir entre la base –la palabra que determina con qué palabras puede combinarse– y el colocativo –el (los) elemento(s) determinado(s) (cf. Hausmann, 1985). Así, por ejemplo, en to pay a visit, “visit” constituye la base, mientras que “pay” es el colocativo. Y lo mismo ocurre para la colocación llamar la atención: “atención” es la base y “llamar” el colocativo. Esta distinción queda patente en la producción lingüística, donde se parte de la base hacia el colocativo. Es decir, se parte de “visit” o “atención” para buscar el verbo apropiado. Por esta razón, tal distinción es de suma importancia en traducción, pues, como se verá más adelante, es la base la que determina la traducción de sus colocativos. Y es de la base de donde parte el traductor, especialmente en ta traducción inversa. Las características lingüísticas de estas combinaciones pueden obstaculizar la tarea del traductor, e impedir la consecución de una traducción fiel, es decir, correcta y coherente. En la mayoría de los casos, estas propiedades impiden la simple traducción literal de las colocaciones de la lengua de origen (LO) a la lengua meta (LM).

3. Problemas planteados por las colocaciones en traducción Básicamente, todos los problemas que plantean las colocaciones para la práctica de la traducción tienen un origen común: cada lengua presenta colocaciones propias e idiosincrásicas. Por un lado, cada una de las palabras de una lengua determinada tiene un rango colocacional específico y parcialmente distinto del resto. Por ejemplo, en inglés, los rasgos colocaciones de palabras como “crime” y “outrage” sólo coinciden en parte: ambas se colocan con “to commit”, pero sólo la primera se puede colocar con to perpetrate (to perpetrate an outrage). Y lo mismo se puede comprobar en español, con respecto a los rasgos colocacionales de dos palabras con relación de sinonimia parcial: “conferencia” y “ponencia” se colocan con “dar”, mientras que la combinación con “pronunciar” sólo es posible para “conferencia” (*pronunciar una ponencia).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 187

Las colocaciones como problema

187

Por otro lado, este carácter arbitrario se hace más patente aún al comparar los diferentes patrones colocacionales de las distintas lenguas: una palabra en la LO y su equivalente de traducción en la LM rara vez comparten el mismo rango colocacional. Esto significa que si se hace un análisis contrastivo de las colocaciones de dos lenguas, se obtiene como resultado que las dos lenguas utilizan colocaciones distintas para expresar un mismo concepto: por ejemplo, el “tráfico” es “denso” en español, mientras que en inglés es “heavy”.

3.1. COLOCACIONES EQUIVALENTES Cuando una colocación en la LO tiene por equivalente de traducción a otra colocación en la LM, se pueden dar los siguientes casos:

A) Traducción equivalente con rango colocacional idiosincrásico En este caso sólo la base es susceptible de ser traducida independientemente de la colocación, mientras que los equivalentes de traducción de los colocativos dependen de la base por la cual vienen determinados. Así, “traffic” al ser la base, se traduce independientemente del contexto de la colocación por su equivalente de traducción general: “tráfico”. El adjetivo, al ser el colocativo, no puede ser traducido sin más por su equivalente más general (“pesado”), puesto que éste depende del contexto de la colocación, debido a que ambos –colocativo y equivalente de traducción general– presentan rangos colocacionales distintos, aunque parcialmente coincidentes, como muestran los siguientes ejemplos: heavy

(suitcase) (sleep) (smell) (traffic) (blow) (crop) (defeat) (liquid) (sky) (sol)

pesada pesado fuerte denso duro abundante grave espeso encapotado arcilloso

(maleta) (sueño) (olor) (tráfico) (golpe) (cosecha) (derrota) (líquido) (cielo) (suelo)

Este mismo fenómeno se observa al comprobar ejemplos del rango colocacional de “poner” con uno de sus equivalentes de traducción (“set”):

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 188

188

Capítulo VIII

poner

(reloj) (tarea) (objeción) (mesa) (telegrama) (multa) (cuidado)

set set/give raise lay send impose take

set

(problem) (clock) (task) (jewell) (hair) (sail) (snare)

poner/plantear poner en hora poner/asignar engastar/montar marcar despegar tender

En relación a esto, frecuentemente ocurre que en la LO se aplica un mismo colocativo a distintas bases, mientras que en la LM se aplican diversos colocativos. Así, cuando la LO es el inglés, un verbo como “to perform” se coloca con “duty”, “task” y “function”, mientras que en español, como LM, los equivalentes de traducción correspondientes exigen distintos colocativos, según la base de que se trate: desempeñar un deber, realizar una tarea y ejercer una función. De la misma manera, “desempeñar”, siendo el español la LO, se coloca tanto con “deber”, como con “cargo” o “papel”; y, sin embargo, los equivalentes de traducción de dichas bases en inglés como LM se colocan con verbos distintos: to perform a duty, to fill an office y to play a role, respectivamente. En todos los ejemplos aducidos hasta ahora, el sustantivo es la base y el adjetivo o el verbo son los colocativos. Sin embargo, en los tipos formados por verbo más adverbio, o por adjetivo más adverbio, las bases son los verbos y los adjetivos correspondientes. Así, por ejemplo, la traducción de un adverbio como “rotundamente” dependerá de la base a la que se aplique: si se coloca con “negar”, le corresponde un equivalente de traducción distinto (“flatly”, to reject flatly) al que le corresponde cuando se coloca con afirmar (“emphatically”, to state emphatically). De igual forma, un adverbio como “sumamente” se traduce por “highly” en combinación con “intelligent”, y por “greatly” cuando modifica a “popular”. B) Infratraducción Además de presentar distintos patrones colocacionales, con los problemas que ello plantea, las colocaciones también pueden dar lugar a otros tipos de dificulta-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 189

Las colocaciones como problema

189

des. Así, se pueden dar casos de infratraducción cuando en el TM faltan aspectos semánticos presentes en el TO. Se puede tratar de determinados aspectos figurativos de una colocación en la LO que no aparezcan en su equivalente de traducción en la LM, como la traducción de crítico corrosivo por severe/harsh/unkind critic –adjetivos éstos que, junto con “impartial”, constituyen los colocativos correspondientes a “critic” según el diccionario combinatorio de Benson et al. (1986). Ninguno de estos posibles equivalentes de traducción por separado recoge suficientemente el carácter figurativo y la fuerza plástica de la colocación de la LO. Otra posibilidad se refiere a la ausencia en la LM de diferentes actitudes asociadas a una determinada colocación en la LO. Así, to purse one’s lips conlleva asociada una actitud de desprecio o desaprobación que no presenta su equivalente de traducción en español: fruncir los labios.

C) Sobretraducción. Se puede dar el caso contrario de sobretraducción; es decir, el equivalente de traducción en la LM presenta aspectos semánticos ausentes en la colocación de la LO. Por ejemplo, para esbozar una sonrisa el diccionario Collins da los siguientes equivalentes de traducción: to smile wanly y to force a smile. Ambos equivalentes presentan un contenido semántico parcialmente equivalente a la colocación de la LO, ya que, en el primer caso se hace referencia a una sonrisa que refleja enfermedad, cansancio o tristeza. Estos aspectos no están presentes en la colocación española. Como tampoco está necesariamente presente la indicación de desgana que se da en el segundo caso.

D) Otros Los problemas también pueden ser de otra índole, como los ocasionados por las diferencias referentes al nivel de formalidad. Así una colocación en LO puede pertenecer al nivel informal (to crack a joke), mientras que en la LM pertenece al medio o neutro (contar un chiste).

3.2. COLOCACIONES NO EQUIVALENTES El anisomorfismo de las lenguas hace que, a menudo, una colocación no tenga como equivalente de traducción otra colocación, debido fundamentalmente a las siguientes causas:

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 190

190

Capítulo VIII

A) El concepto expresado por la colocación en la LO no está lexicalizado en la LM En estos casos se puede optar por distintas técnicas de transferencia, como se observa en la traducción que el diccionario Collins da de la colocación a chorus of praise en la frase “a chorus of praise greeted the book”: “el libro recibió la aprobación de todos”, “el libro se mereció las alabanzas de todos”.

B) Al concepto expresado por la colocación en la LO le corresponde un solo lexema en la LM Así, por ejemplo en inglés se dan colocaciones como scalding hot, to commit suicide o to catch a glimpse que se traducen al español mediante una sola palabra: hirviendo, suicidarse y vislumbrar. En español existen colocaciones como librar una batalla, hacer hincapié o dar la bienvenida, a las que les corresponde como equivalente de traducción un sólo lexema: to fight, to insist y to welcome respectivamente.

C) La colocación en la LO se traduce bien por una frase o por una locución en la LM De esta forma se traduce la colocación inglesa formada por adverbio más adjetivo stark naked por las locuciones españolas en cueros y en pelota. Otro ejemplo lo tenemos en una colocación formada por adjetivo más sustantivo como raving lunatic que se traduce por una locución en español: loco de atar.

4. Conclusión Tras esta breve introducción al fenómeno léxico de la colocación y sus repercusiones para los Estudios de Traducción, podemos decir, a modo de conclusión, que las colocaciones, debido a sus propiedades lingüísticas, ofrecen dificultades de orden teórico-práctico. Puede ocurrir que una colocación en la LO no se traduzca por otra colocación en la LM. Sin embargo, cuando esto sí es posible, los problemas se derivan básicamente del hecho de que los colocativos no sean traducibles independientemente de sus bases. La traducción, por tanto, ha de hacerse globalmente, teniendo en cuenta la colocación entera. Por esta razón, se puede considerar a las colocacio-

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 191

Las colocaciones como problema

191

nes como traslemas o unidades de traducción. De hecho, dichas combinaciones se encuadran perfectamente dentro de la definición que autores como Julio C. Santoyo y R. Rabadán (1991: 322) han dado de tal término. Referencias bibliográficas AISENSTADT, E. (1981): “Restricted Collocations in English Lexicology and Lexicography”, en: ITL Review of Applied Linguistics 53, 53-61. BÉJOINT, H. (1989): “Codeness and Lexicography”, en: JAMES, G. (Ed.), Lexicographers and their Works. Exeter: University of Exeter, 1-4. BENSON, E.; BENSON, M., y ILSON, R. (1986): The BBI Combinatory Dictionary of English. A Guide to Word Combinations. Amsterdam: John Benjamins. EMERY, P. G. (1988): “Collocation-A Problem in Arabic/English Translation?”, en: Quinquereme 11 (2). 178-184. HAENSCH, G.; WOLF, L.; ETTINGER, S., y WERNER, R. (1982): La lexicografía. De la lingüística teórica a la lexicografía práctica. Madrid: Gredos. HAUSMANN, F. J. (1985): “Kollokationen im deutschen Würterbuch: Ein Beitrag zur Theorie des lexikographischen Beispiels”, en: BERGENHOLTZ, H., y MUGDAM, J. (eds.), Lexikographie und Grammatik: Akten des Essenes Kolloquiums zur Grammatik im Worterbuch. Tubinga: Max Niemeyer, 118-129. HEID, U., y FREIBOTT, G. (1991): “Collocations dans une base de donnés terminologique et lexicale”, en: META 36 (1), 77-91. NEWMARK, P. (1988): A Textbook of Translation, Londres: Prentice Hall. SANTOYO, J. C., y RABADÁN, R. (1991): “Basic Spanish Terminology for Translation Studies: A Proposal”, en: META 36 (1), 318-322. SMITH, C. (Ed.) (1989): Collins diccionario español-inglés/English-Spanish. 2ª ed. Londres: Collins.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 193

CAPÍTULO IX DISEÑO DE UNA BASE DE DATOS FRASEOLÓGICA PARA LA TRADUCCIÓN ASISTIDA POR ORDENADOR (TAO)1

1. Introducción Los traductores utilizan una gran variedad de fuentes de documentación durante el proceso de la traducción. Además de los habituales glosarios y diccionarios (monolingües o bilingües, generales o especializados, tradicionales o en soporte informático), la mayoría de los traductores profesionales tiene acceso a herramientas informáticas de diverso grado de sofisticación en su mesa de trabajo (the translator’s workbench): desde los programas de procesamiento de texto hasta los sistemas de traducción (semi-) automática, pasando por los correctores (checkers) ortográficos, gramaticales y estilísticos, las bases de datos léxicas y de conocimiento, y los bancos terminológicos (cf. Höge et al., 1992). En el sentido amplio del término, los sistemas de traducción asistida por ordenador (TAO) comprenden los útiles informáticos que acabamos de mencionar, a excepción de la traducción automática, aunque tal distinción no es siempre fácil de hacer. El presente trabajo se enmarca, precisamente, en el seno de los sistemas de TAO. En concreto, vamos a exponer los criterios de diseño que han de tenerse en cuenta para la implementación de una base de datos orientada hacia la traducción de la fraseología inglesa y española. 2. La fraseología en traducción Diversos autores han puesto de relieve la importancia de la fraseología en la construcción del discurso (cf. por ejemplo Strässler, 1982; Gläser, 1986; Palm, 1989; Corpas Pastor, 1994). Las unidades fraseológicas o pluriverbales sirven de hilo conductor de la narración, indican diversos niveles de estilo, expresan de forma implícita las relaciones sociales que mantienen los interlocutores, e, incluso, funcionan como instrumentos para lanzar críticas veladas que, desde el principio de cortesía lingüística (politeness), no constituyen actos amenazadores de la imagen personal de los interlocutores (face-threatening acts).

1

Coautor: Antonio J. Moreno Ortiz.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 194

194

Capítulo IX

Por esta razón, es importante mantener el efecto producido por las unidades pluriverbales en la traducción, sobre todo una vez que se ha comprobado que éstas funcionan en los planos pragmático y discursivo de forma idéntica en las dos lenguas que nos ocupan, el inglés y el español (Corpas Pastor, 1994). Ahora bien, la fraseología constituye uno de los aspectos más problemáticos en traducción (Gläser, 1984; Eismann, 1989; Baker, 1992; y Menacere, 1992, entre otros). Además de la dificultad de detectar tales unidades en el texto de origen, resulta complicado determinar las estrategias de traducción adecuadas en cada momento. Salvo los casos raros de equivalencia total (por ejemplo, en los europeísmos), la mayoría de las veces se trata de equivalencia nula, aparente, o, en el mejor de los casos, parcial. Para resolver estos problemas el traductor cuenta con recursos un tanto pobres. De un lado los diccionarios monolingües y bilingües presentan lagunas y deficiencias importantes (Meya, 1990; Roberts, 1990; Corpas Pastor, 1992), dada la poca atención que se ha prestado a este tema en lingüística, lo cual ha / incidido negativamente en la lexicografía (Boguslawski, 1979; Martínez Marín, 1991; Schemann, 1991). De otro lado, los sistemas de traducción automática tampoco ofrecen una solución satisfactoria, ya que los diccionarios que le sirven de base tan sólo se limitan a identificar a las unidades pluriverbales como tales o a listarlas en una sección aparte, sin aportar más datos que un equivalente de traducción aproximado o una perífrasis en la lengua meta (cf. Lewis, 1992). Hasta la fecha tampoco tenemos noticia de que se hayan desarrollado herramientas informáticas en el seno de los sistemas comerciales de TAO que puedan ser de utilidad en este tema. No obstante, creemos que la creación de bases de datos en este entorno constituye un paso decisivo hacia la resolución de los problemas planteados por la fraseología en traducción.

3. Elementos de información fraseológica El diseño de una base de datos conlleva la consideración previa de las características de la información que se quiere almacenar, así como de los distintos compartimentos que van a servir para dar cuenta de ella, sin dejar de lado las posibles restricciones de diseño impuestas por la rutas de acceso y recuperación de información que se estimen oportunas. Para que una base de datos fraseológica, informatizada e incorporada a un sistema de TAO, sea efectiva debe contemplar los siguientes elementos de información: [1] Idioma: (en este caso “inglés” o “español”).

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 195

Diseño de una base de datos fraseológica

195

[2] Tipo de unidad: 2.1. Colocación. 2.2. Locución. 2.3. Paremia (subtipos) 2.4. Fórmula rutinaria (subtipos) [3] Neologismo: (“sí”/”no”) [4] Identificación de la unidad: 4.1. Lema. 4.2. Frecuencia. 4.3. Variantes. 4.4. Variaciones diatópicas, diastráticas y diafásicas. 4.5. Pronunciación (rasgos fonéticos y prosódicos). [5] Características semánticas: 5.1. Motivación. 5.2. Contenido semántico (tipo de significado expresado por el colocativo; significado unitario –traslaticio o gramaticalizado, total o parcial– en las locuciones y distintas acepciones; interpretación estándar en las paremias y significados situacionales en las fórmulas). 5.3. Contextos ilustrativos. [6] Características sintácticas: 6.1. Estructura interna. 6.2. Parte del discurso (en el caso de las locuciones). 6.3. Restricciones sintácticas (en el caso de las locuciones). 6.4. Contextos ilustrativos. [7] Restricciones estilísticas y expresivas: 7.1. Preferencias de registro y género (genre). 7.2. Niveles de estilo. 7.3. Connotaciones expresivas. 7.4. Contextos ilustrativos. [8] Características pragmáticas y discursivas: 8.2. Valoraciones implícitas. 8.3. Implicaturas. 8.4. Actos de habla típicos. 8.5. Potencial textual y funcionamiento discursivo. 8.6. Contextos ilustrativos.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 196

196

Capítulo IX

[9] Marcos de situación: (para fórmulas) 9.1. Participantes. 9.2. Escenario. 9.3. Objetivo. 9.4. Secuenciación. 9.5. Obligatoriedad. 9.6. Acciones y gestos concomitantes (también es aplicable a algunas locuciones) [10] Manipulaciones: 10.1. Secuencia identificativa. 10.2. Modificaciones externas (subtipos). 10.3. Modificaciones internas (subtipos). 10.4. Contextos ilustrativos. [11] Unidades pluriverbales relacionadas: (determinadas previamente o generadas de forma automática) [12] Unidades monoverbales relacionadas: (determinadas previamente o generadas de forma automática) [13] Equivalentes de traducción: (determinados previamente o generados de forma automática)

4. Modelado de la base de datos Una vez determinados los elementos de información fraseológica que deben incluirse en la base de datos, la segunda decisión importante atañe a la organización del almacenamiento de esa información. De ello dependerá, en gran medida, el dinamismo de la base de datos, los distintos medios de recuperación de información posibles, y, en definitiva, los posibles usos que de ella puedan hacerse a través de un sistema gestor de bases de datos (DBMS: Database Management System). Estaría fuera del ámbito de este trabajo una exposición detallada de los diversos modelos de datos. Una clasificación tradicional es la ofrecida por Brodie (Brodie, 1984: 28), quien distingue modelos primitivos (orientados a ficheros), modelos clásicos (el jerárquico, el de redes y el relacional), modelos semánticos (especialmente el modelo de Entidad-Relación) y modelos específicos. A esta tipología habríamos de sumar y hacer especial mención al más novedoso (y más semántico) de los modelos usados en la actualidad, el modelo Orientado al Objeto.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 197

Diseño de una base de datos fraseológica

197

La gran mayoría de los DBMS comerciales actuales están basados en el modelo relacional, si bien la mayor parte no cumple todas las formas normales del álgebra relacional que les sirve de base (Codd, 1990). No cabe duda de que este modelo, si bien resulta idóneo para las típicas aplicaciones comerciales y como base en sistemas cliente-servidor, plantea numerosos problemas en cuanto a la representación de información léxica, especialmente en lo que respecta a estructuras jerárquicas tales como las que presenta una entrada típica de diccionario (Ide et al., 1994) o una estructuración en campos semánticos jerarquizados (Moreno Ortiz, 1995), incluso usando novedosos modelos relacionales no normalizados (NF2), los cuales admiten anidamiento en sus atributos. Las deficiencias de un modelo no ideado en principio para este tipo de información compleja se ponen de manifiesto al intentar forzar objetos estructurados en tablas planas, que al fin y al cabo es lo único que el DBMS relacional es capaz de manejar. El modelo Orientado al Objeto suple estas deficiencias drásticamente, ofreciendo una representación de la información enormemente ajustada a la realidad que intenta modelar. Sin embargo, su implantación en sistemas comerciales de bases de datos queda aún bastante lejos de lo alcanzado en los terrenos para los que en principio fue ideado: los lenguajes de programación. Por otra parte la transición a ODBMSs desde modelos relacionales, que han venido siendo usados por lingüistas desde hace décadas, no es todavía fácil, con lo cual el elemento fundamental de reutilización de información no estaría garantizado. Por lo que se refiere a la implementación de una base de datos fraseológica, consideramos que el modelo relacional ofrece las características necesarias para un correcto modelado que garantice niveles adecuados en cuanto a información redundante, y reutilización y recuperación de información. Por ello, y por la experiencia acumulada con este modelo de datos, hemos decidido plantear nuestro modelado en términos relacionales. La notación que vamos a utilizar para presentar nuestro diseño está basada en el modelo de Entidad-Relación (Chen, 1976), el cual puede ser considerado como un intento de dotar de capacidades de modelado semántico al modelo relacional. Este modelo utiliza diagramas E-R para presentar de forma gráfica el nivel conceptual de una base de datos. Los diagramas E-R nos pueden servir, pues, para exponer la estructura general de nuestra base de datos. A continuación describiremos de forma sucinta las convenciones más importantes de este conocido sistema de modelado de datos. Los rectángulos designan entidades, que de ser detalladas, se corresponderán con tuplas en la base de datos relacional. Los óvalos designan propiedades de estas entidades; se corresponderían con los atributos de una tupla. Finalmente, los rombos designan relaciones entre entidades. Los números y letras a ambos

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 198

198

Capítulo IX

lados de una relación hacen referencia al tipo de relación (una a una, una a muchas, muchas a muchas). Existen otras muchas convenciones pero estas nos bastarán para exponer brevemente nuestro diseño. En primer lugar, hemos de subrayar el que consideramos esta base de datos no de forma aislada, sino como el conjunto de tablas que se encargan de la información de índole fraseológica en el conjunto global de la información léxica, de modo que mostraremos punteros a estas otras tablas principales así como a tablas comunes, usadas también por unidades léxicas no complejas desde el punto de vista estructural. Por otra parte, para exponer nuestro diseño utilizaremos diagramas E-R parciales por motivos evidentes de espacio y de claridad gráfica. La figura 1 presenta únicamente las relaciones que la entidad principal desde esta perspectiva, UNID_FRAS, tiene en común con la entidad LEMA. En el modelado, las relaciones de muchos a muchos, tales como la que mantienen estas dos entidades no se corresponden exactamente con tablas de la base de datos ya que este tipo de relación ha de ser implementada usando tablas “puente”. El hecho de que ciertas propiedades de la entidad sean implementadas a modo de relaciones implica que esta información puede ser también usada por otro tipo de entidades léxicas. Por ejemplo, una unidad fraseológica contiene un número de lemas, los cuales a su vez poseen información de índole morfológica, semántica, etc., pues bien, sería deseable aprovechar esta información para los lemas contenidos en las unidades fraseológicas sin necesidad de repetirla. Esto es lo que conseguimos con el diseño propuesto (Fig. 1). Las unidades fraseológicas, por otra parte, tomadas como conjunto también poseen información de este tipo. Por ello establecemos relaciones de forma directa con las tablas que contienen dicha información, asegurando así tanto información no redundante como un diseño compacto y abierto. De este modo, por regla general, modelaremos como relación a otra entidad toda aquella información susceptible de ser compartida por otras entidades –información fonética, sintáctica, semántica, etc. Evidentemente, cada una de estas otras entidades tiene sus propiedades, que no detallamos en el diagrama; éstas se corresponden, por lo que a los elementos fraseológicos se refiere, con los elementos de información enumerados en el punto 3. Por tanto, es de resaltar que los diagramas que presentamos no están detallados por razones de espacio, y en cualquier caso no consideramos los detalles técnicos como relevantes en este artículo, nuestro principal objetivo es exponer el diseño general de la base de datos. Este diseño es válido para los dos idiomas, de hecho lo único que necesitamos hacer es añadir otra tabla para el segundo idioma y establecer las relaciones con las mismas tablas que utilizamos para definir el primero, haciendo uso así de toda la información y consiguiendo un diseño flexible.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 199

Diseño de una base de datos fraseológica

UNID_FRAS

LEMA

Fig. 1

UNID_FRAS_ENG

UNID_FRAS_ESP M

M

Fig. 2

199

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 200

200

Capítulo IX

En la figura 2 mostramos estas relaciones entre unidades fraselógicas de los dos idiomas –en la práctica, los equivalentes de traducción– así como los elementos de información que, siendo exclusivos de las unidades fraseológicas, son susceptibles de ser modelados como relaciones: las unidades monoverbales y pluriverbales relacionadas. Por supuesto, estas tablas relacionadas, mantienen a su vez relaciones con las tablas mostradas en la figura 1, proveyéndolas así de la información lingüística necesaria. Finalmente, en la figura 3 mostramos el resto de la información que reclamábamos para las unidades fraseológicas, la cual es plasmada como atributos (o propiedades) de la tabla principal.

Fig. 3

El traductor tiene ahora a su disposición todo lo necesario para un tratamiento óptimo de las unidades fraseológicas. No sólo posee todos los posibles equivalentes de traducción de una unidad fraseológica determinada, sino también toda la información relativa a cada uno de ellos, así como de otras unidades relacionadas y, por supuesto, toda la información lingüística relativa a cada uno de los lemas componentes de esas unidades. De igual forma, el diseño que proponemos pretende alcanzar unos niveles adecuados en cuanto a independencia de datos, de modo que aunque la aplicación más directa es la TAO, esta información puede ser usada para otros fines más elaborados como la traducción automática.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 201

Diseño de una base de datos fraseológica

201

5. Conclusión La fraseología constituye uno de los aspectos más problemáticos en traducción. Sin embargo, todavía no se dispone de herramientas adecuadas para la resolución de las dificultades planteadas por las unidades pluriverbales. Un primer paso puede ser la implementación de bases de datos fraseológicas en el seno de los sistemas de TAO. Ello facilitará enormemente la tarea del traductor, proporcionándole ayuda y guía continuas no sólo en la fase de análisis, sino también, y muy especialmente, en la de síntesis. El tipo de base de datos fraseológica relacional que proponemos presenta múltiples posibilidades. Por un lado, en la fase de análisis, permite el estudio pormenorizado de la fraseología de cada lengua con respecto a tantos aspectos como apartados y subapartados constituyen la base de datos. La estructuración de esta base de datos también se presta a la realización de estudios desde una perspectiva contrastiva. Los resultados parciales obtenidos sirven entonces para establecer con cierta precisión el equivalente de traducción más adecuado. De forma totalmente automática sería posible comprobar si a una unidad de la lengua de origen le corresponde en la lengua meta: (a) (b) (c) (d) (e) (f) (g)

una unidad del mismo tipo y subtipo; una unidad del mismo tipo pero de distinto subtipo; una unidad de distinto tipo; una combinación libre de palabras; una palabra; un morfema; o la ausencia de equivalencia.

En los tres primeros casos se podría establecer de forma automática, tras contrastar y cuantificar los elementos de información anteriores, si se trata de equivalencia plena, parcial, nula o aparente. La propia estructura de la base de datos permitirá detectar posibles discrepancias, como, por ejemplo, que el equivalente de traducción sea una unidad neológica o no, que dicho equivalente presente una frecuencia de distribución distinta; que se den diferencias diastráticas entre los equivalentes, etc. El uso de bases de datos fraseológicas permite, así mismo, el acceso a otros tipos de información necesaria para el traductor no sólo en la fase previa de análisis, sino también en la de síntesis. Así, por ejemplo, estas bases pueden servir como tesauros al establecer de forma automática campos léxico-fraseológicos y seleccionar unidades pluriverbales (y monoverbales) sinónimas o antónimas. En este sentido, el usuario de la base de datos cuenta con la ayuda adicional de los

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 202

202

Capítulo IX

contextos ilustrativos que pueden servir de textos guía (textos paralelos y traducciones modelo) para la identificación de posibles equivalentes y estrategias de traducción en el proceso de composición del texto meta. Las bases de datos fraseológicas pueden ser de una gran utilidad no sólo en el campo de la traducción, sino también en lexicología (por ejemplo, en el estudio de la fraseología neológica o de las transferencias figurativas de la semántica cognitiva), en lexicografía (diccionario monolingües o bilingües, tradicionales, en soporte informático y modulares), o para el enriquecimiento léxico de los sistemas de procesamiento de lenguaje natural, la enseñanza de idiomas y como material base para la confección de libros de texto. Referencias bibliográficas BAKER, M. (1992): In Other Words. A coursebook on translation. Londres: Routledge. BOGURAEV, B., y BRISCOE, T. (Eds.) (1989): Computational Lexicography for Natural Language Processing. Londres, Nueva York: Longman. / , A. (1979): “Zum Problem der Phraseologie in zweisprachigen WörterbüBOGUSLAWSKI chern”, en: Kwartalnik Neofilologiczny XXVI 1, 29-36. BRODIE, M. L. (1984): “On the Development of Data Models” en: BRODIE, M. L.; MYLOPOULOS, J., y SCHMIDT, J. W.: On Conceptual Modelling. Perspectives from Artificial Intelligence, Databases, and Programming Languages. Nueva York: Springen-Verlag, 19-47. CHEN, P. P.-S. (1976): “The Entity-Relationship Model -Toward a Unified View of Data”, en: Transactions on Database Systems VI 1, 9-36. CODD, E. F. (1990): The Relational Model for Database Management: Version 2, Reading, Mass.: Addison-Wesley Publishing. CORPAS PASTOR, G. (1992): “Tratamiento de las colocaciones del tipo A+S/S+A en diccionarios bilingües y monolingües (español-inglés)”, en: Euralex’90 Proceedings. Actas del IV Congreso Internacional. Benalmádena (Málaga) 28 agosto-1 septiembre 1990. Barcelona: Biblograf, 331-340. — (1994): Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español. Tesis doctoral. Universidad Complutense de Madrid. EISMANN, W. (1989): “Zum problem der Äquivalenz von Phraseologismen”, en: GRÉCIANO, G. (Ed.), EUROPHRAS 88. Phraséologie Contrastive. Actes du Colloque International Klingenthal-Strasbourg. 12-16 mai 1988. Estrasburgo : Université des Sciences Humaines, Département d’Etudes Allemandes, 83-93. GLÄSER, R. (1984): “The Translation Aspect of Phraseological Units in English and German”, en: Papers and Studies in Contrastive Linguistics 18, 123-134. — (1986): “A plea for phraseo-stylistics”, en: KASTOVSKY, D./ SZWEDEK, A. (eds), Linguistics across Historical and Geographical Boundaries. In Honour of Jacek Fisiak on the Occasion of his Fiftieth Birthday. Vol. 1: Linguistic Theory and Historical Linguistics. Berlín, Nueva York, Amsterdam: Mouton de Gruyter, 41-52.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 203

Diseño de una base de datos fraseológica

203

HÖGE, M.; HOHMANN, A., y MAYER, R. (1992): Evaluation of TWB - Operationalization and Test Result. Informe final elaborado para el proyecto SPRIT “Translator’s Workbench”, Universidad de Stuttgart. IDE, N.; MAITRE, J. LE, y VÉRONIS, J. (1994): “Outline of a Model for Lexical Databases”, en: ZAMPOLLI, A., y CALZOLARI, N. (eds.): Current Issues in Computational Linguistics: in Honour of Don Walker. Pisa: Giardini editori e stampatori; Norwell, MA: Kluwer Academic Publishers, 267-281. LEWIS, D. (1992): “Computers and Translation”, en: BUTLER, C. S. (Ed.): Computers and Written Texts. Oxford: Basil Blackwell, 75-113. MARTÍNEZ MARÍN, J. (1991): “Fraseología y diccionarios modernos del español”, en: Voz y Letra. II/I, 117-126. MENACERE, M. (1992): “Arabic metaphor and idiom in translation”, en: META XXXVII (3), 567-572. MEYER, I. (1988): “The General Bilingual Dictionary as a Working Tool in Thème”, en: META XXXIII (3), 368-376. MORENO ORTIZ, A. J. (1995): “Semantic Modelling and Lexical Knowledge”, en: Procesamiento del Lenguaje Natural 16, 44-59. PALM, C. (1989): “Die konnotative Potenz usueller und okkasioneller Phraseologismen und anderer festgeprägter Konstruktionen in Christa Wolfs Roman Kindheitsmuster”, en: GRÉCIANO, G. (Ed.): EUROPHRAS 88. Phraséologie Contrastive. Actes du Colloque International Klingenthal-Strasbourg. 12-16 mai 1988. Estrasburgo: Université des Sciences Humaines, Département d’Etudes Allemandes, 313-326. ROBERTS, R. (1990): “Translation and the Bilingual Dictionary”, en: META. XXXV (1), 74-81. SCHEMANN, H. (1991): “Die Phraseologie im zweisprachigen Wörterbuch”, en: HAUSMANN, F. J.; REICHMAN, O.; WIEGAND, H. E., y ZGUSTA, L. (eds.): Wörterbücher. Dictionaries. Dictionnaires. Ein internationales Handbuch zur Lexikographie. An International Encyclopedia of Lexicography. Encyclopédie internationale de lexicographie. Vol. 3. Berlín, Nueva York: Walter de Gruyter, 2789-2794. STRÄSSLER, J. (1982): Idioms in English. A Pragmatic Analysis. Tubinga: Gunter Narr.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 205

CAPÍTULO X GRADOS DE EQUIVALENCIA TRANSLÉMICA DE LAS LOCUCIONES EN INGLÉS Y ESPAÑOL

1. Introducción A lo largo de este trabajo intentaremos establecer los grados de equivalencia translémica que se dan entre las locuciones de un par de lenguas dadas (inglés y español en este caso). Nuestro objetivo no es otro que el de determinar la existencia de translemas a estos niveles lingüísticos, así como su posible implicación para los Estudios de Traducción. 2. Postulados teóricos 2.1. TRANSLEMA Y BINOMIO TEXTUAL En primer lugar conviene aclarar los conceptos teóricos que nos van a servir de instrumentos en nuestro trabajo. Siguiendo la acertada propuesta de J. Santoyo y R. Rabadán (1991: 322), entendemos por TRANSLEMA: Unidad bitextual de cualquier tipo o nivel constituida por un mismo contenido y dos manifestaciones formales diferenciadas pero solidarias y cuya existencia depende de la relación global de equivalencia subyacente a cada binomio textual TO-TM.

A su vez, entendemos por BINOMIO TEXTUAL: Todo par TO-TM unido por una relación de equivalencia translémica, es decir, un TO y su TR. (Santoyo y Rabadán, 1991: 319)

Es decir, un translema es la unidad de traducción formada por una entidad lingüística de cualquier nivel y su equivalente de traducción. [TO=texto de origen; TM=texto meta; TR=(equivalente de) traducción.] 2.2. DEFINICIÓN DE LOCUCIÓN Las locuciones constituyen un tipo de unidad pluriverbal, que, al igual que los demás, se caracterizan por presentar institucionalización, frecuencia de uso y de

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 206

206

Capítulo X

coaparición de sus elementos integrantes, estabilidad (fijación e idiomaticidad potencial), variantes y modificaciones creativas en el discurso. Las locuciones se diferencian de otros tipos de unidades pluriverbales en que funcionan como elementos oracionales, y no constituyen actos de habla ni enunciados independientes por sí mismas (Corpas Pastor, 1994). Algunos ejemplos son los siguientes: – to lead sb. up the garden path, a cold fish, more or less; – coger el toro por los cuernos, a la luna de Valencia, de bote en bote.

3. Implicaciones para la traducción El primer paso hacia la traducción efectiva de las unidades que nos ocupan debe ser un ejercicio de lexicología contrastiva. Sólo así se hace posible predecir problemas y adelantar posibles soluciones que faciliten la labor del traductor. Así pues, aquí tiene gran importancia el establecimiento de translemas más o menos fijos. 3.1. GRADOS DE EQUIVALENCIA TRANSLÉMICA Las locuciones presentan cuatro tipos de equivalencia (cf. Gläser, 1986a, 1986b): equivalencia total, equivalencia parcial, equivalencia nula y equivalencia aparente (“faux amis”) 3.1.1. Equivalencia total Dos locuciones presentan relación de equivalencia total cuando ambas forman un traslema en todo momento, es decir, cuando ambas se traducen mutuamente mediante la técnica de transferencia denominada sustitución. En este caso ambas unidades presentan el mismo significado denotativo y connotativo (expresivo, emocional y estilístico), dándose en los mismos niveles diastráticos, diafásicos y diatópicos. Tales unidades no presentan mayor problema siempre y cuando el traductor las reconozca como tales, es decir, sea consciente de su institucionalización en ambas lenguas. Fundamentalmente se trata de unidades literales. Aquí se incluyen las locuciones denominativas o terminológicas, que corresponden a conceptos internacionales, relacionados con el mundo de las ciencias, la técnica, el cine, los deportes, la política, etc.:

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 207

Grados de equivalencia translémica

207

red card → tarjeta roja (dep.) acid rain → lluvia ácida (cienc.)

Pero también pueden presentar equivalencia total las locuciones traslaticias, bien porque tengan un origen (metafórico o no) común en ambas lenguas, o bien porque formen parte de la misma herencia cultural europea: the black sheep (of the family) → la oveja negra (de la familia) to burn one’s boats → quemar las naves1

3.1.2. Equivalencia parcial Se da equivalencia parcial cuando una locución de la LO se traduce por una locución en la LM que presenta diferencias de significado denotativo o connotativo, o que pertenece a una variedad (diastrática, diafásica y diatópica) distinta; o es traducida por una unidad léxica simple carente de los valores expresivos de la locución en cuestión. No obstante, tales binomios textuales son identificables como translemas, por cuanto presentan el mismo valor funcional y son comunicativamente equivalentes. Para su traducción se puede optar, por tanto, por la técnica de la sustitución. La equivalencia parcial, cuando no es compensada en contexto, puede producir infratraducción o sobretraducción. El primer caso se da cuando en la locución del TM faltan aspectos semánticos, estilísticos o connotativos presentes en la del TO. En el segundo caso, el equivalente de traducción en la LM presenta aspectos ausentes en la locución de la LO. Esto se puede compensar mediante el uso de glosas o notas explicativas. Las diferencias que se observan en los casos de equivalencia parcial conciernen, en líneas generales, a las distintas imágenes implicadas (metáfora, metonimia, comparación, símil, etc.); a los distintos significados denotativos y connotativos; o también puede estar ocasionada por la traducción de la locución de la LO por un lexema simple en la LM, por lo que se pierden los valores expresivos y figurativos de la misma (infratraducción), aunque la traducción mediante un compuesto figurativo puede compensar esta pérdida:

1 Alusión histórica a las naves destruidas por Hernán Cortés al comenzar la conquista de Méjico.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 208

208

Capítulo X

to put the cart before the horses → empezar la casa por el tejado to pull the wool over someone’s eyes2 → dar gato por liebre3 verdad de Perogrullo → platitude, truism a clever dick (infml) → un sabelotodo (infml)

3.1.3. Equivalencia nula Bajo este apartado se incluyen todas aquellas locuciones de la LO que no presentan un equivalente de traducción en la LM. Se trata de casos de realidades lingüísticas en la LO que no se lexicalizan en la LM (“lexical gaps”) por razones puramente lingüísticas, o de orden cultural, histórico, etc. En estos casos ya no es posible la sustitución, por lo que el traductor debe optar por la paráfrasis o por alguna otra técnica de transferencia para expresar el significado de la unidad, perdiéndose, generalmente, las connotaciones correspondientes. Los siguientes ejemplos muestran algunas de las soluciones propuestas por diversos diccionarios bilingües, así como los comentarios sobre las distintas connotaciones y alusiones que aparecen en algunos monolingües: beyond the pale → estar excluido de la buena sociedad, ser un indeseable (CSD)4. a dark horse5 → A) incógnita, figura misteriosa; contendiente desconocido (in a race); candidato poco conocido (US: in election); vencedor inesperado [winner] (CSD). → B) no ser favorito, ser un “outsider” (horse); tenérselo bien callado (persona) (LGD). ponerse el mundo por montera6 → not to care what people think (CSD). cold fish7 → Ø8

3.1.4. Equivalencia aparente Los casos de equivalencia aparente se dan en aquellas unidades de la LO y la LM que presentan similitud formal con respecto a sus elementos constitutivos, pero 2

LDOEI: “to deceive or trick (a person)”. DRAE: “engañar en la calidad de una cosa por medio de otra inferior que se le asemeja”. 4 Pérdida de la alusión histórica: “a pale was a fence and the area that the fence surrounded. In Ireland, pale referred to the area inside which the laws of the English kings had to be obeyed”. (LDOEI) 5 Pone de manifiesto la importancia del mundo de los caballos en la cultura anglosajona (Lawrence, 1988). 6 Refleja el lugar importante que ocupa el toreo en la cultura española. 7 ODOCIE2: “a person who is never much moved by emotions of any kind, and is considered to be unattractive for this reason”. 8 El CSD y el LGD no ofrecen equivalente de traducción para esta unidad. 3

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 209

Grados de equivalencia translémica

209

diferencia semántica. Son los denominados “false friends”, tan temidos en la enseñanza de idiomas. Por ejemplo, la locución inglesa to have one’s wires crossed no se corresponde con la locución española tener los cables cruzados, sino con la expresión sufrir un malentendido. to have one’s wires crossed → ≠ tener los cables cruzados → = sufrir un malentendido

En estos casos, el establecimiento de los translemas correspondientes facilita en gran medida la labor del traductor. 4. Conclusiones El análisis realizado indica que es posible hablar de translemas cuando existe equivalencia translémica total, parcial o aparente entre una locución de la LO y la LM. En todos estos casos se identifica el translema correspondiente, y se aplica simplemente la técnica de la sustitución. En la equivalencia parcial, además, se deben tomar precauciones para compensar los posibles casos de infra- y sobretraducción que pudieran producirse con respecto a las diferencias semánticas, connotativas y estilísticas presentes en el binomio textual. En la equivalencia aparente, la identificación a priori del translema correspondiente evita posibles confusiones. En los casos de equivalencia translémica nula no podemos hablar de translemas propiamente dichos. Por ello, no se puede adelantar el tipo de técnica apropiada para cada caso. Ya no es posible la simple sustitución por una locución equivalente en la LM. Así pues, se pierde la institucionalización e idiomaticidad conferida por las locuciones, y el traductor deberá optar por una paráfrasis o por alguna otra técnica de transferencia para aproximarse al significado denotativo de la unidad, perdiéndose, generalmente, el significado connotativo. Finalmente, la traducción de las locuciones se complica considerablemente cuando bajamos del plano léxico al plano discursivo, donde dichas unidades se caracterizan por presentar todo tipo de manipulaciones creativas, como ilustramos a continuación: old flame9 “She laughed. Jeff? He hardly ever goes to Warley. No, he’s an old flame. Extinct, in fact” (J. Braine, Life at the Top, 58).

9 CD: “amante de otro tiempos”. Se trata de una manipulación externa, donde se explotan los sentidos literal y figurativo.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 210

210

Capítulo X

con las manos en la masa10 “Parece que el fin de siglo les pilla a todos con las manos en la Visa” (Sur. Suplemento Cultural, 9/2/91: 1).

Pero, por limitaciones de espacio, nos vemos obligados a dejar este importante aspecto para futuros trabajos. Referencias bibliográficas I. DICCIONARIOS ACADEMIA ESPAÑOLA (RAE) (1992): Diccionario de la lengua española. 21ª ed. Madrid: Espasa-Calpe [DRAE]. COWIE, A. P.; MACKIN, R., y MCCAIG, I. R. (1985 [1983]): Oxford Dictionary of Current Idiomatic English. Vol. 2:Phrase, Clause & Sentence Idioms. Oxford: Oxford University Press [ODOCIE2]. GARCÍA-PELAYO Y GROSS, R. (Coord.). (1989 [1983]): Larousse Gran Diccionario Español-Inglés/Inglés-Español. Barcelona: Larousse [LGD]. SINCLAIR, J. (Ed.) (1988 [1987]): Collins COBUILD English Language Dictionary. Londres, Glasgow: Collins [COBUILD]. SMITH, C. (1992): The Collins Spanish Dictionary. Spanish-English, English-Spanish. 3ª ed. Glasgow, Nueva York: HarperCollins [CSD]. SUMMERS, D. (Ed.) (1987[1978]): Longman Dictionary of Contemporary English. Harlow, Essex: Longman [LDOCE].

II. BIBLIOGRAFÍA SOBRE EL TEMA AWWAD, M. (1990): “Equivalence and Translatability of English and Arabic Idioms”, en: Papers and Studies in Contrastive Linguistics 26, 57-67. CORPAS PASTOR, G. (1994): Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español. Tesis doctoral. Universidad Complutense de Madrid. GLÄSER, R. (1986a): “A plea for phraseo-stylistics”, en: KASTOVSKY, D., y SZWEDET, A. (eds.), Linguistics across Historical and Geographical Boundaries. Vol. 1. Berlín, Nueva York: Mouton de Gruyter, 41-51. — (1986b): Phraseologie der englischen Sprache. Tubinga: Max Niemeyer. NEWMARK, P. (1988): A Textbook of Translation. Nueva York, Londres: Prentice Hall.

10 CD: “red handed”. En este caso asistimos a la manipulación de la unidad mediante el procedimiento interno de la sustitución.

CORPAS-02 25/2/03 10:12 Página 211

Grados de equivalencia translémica

211

RABADÁN, R. (1991): Equivalencia y traducción. Problemática de la equivalencia translémica inglés-español. Universidad de León: Secretariado de Publicaciones. SANTOYO, J. C., y RABADÁN, R. (1991): “Basic Spanish Terminology for Translation Studies: A Proposal”, en: META 36, 318-322.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 213

CAPÍTULO XI LA TRADUCCIÓN DE LA FRASEOLOGÍA: TÉCNICAS Y ESTRATEGIAS

1. Introducción El término fraseología cubre un amplio espectro de unidades (Corpas Pastor, 1996b, 1998a, 1998b). Cada unidad fraseológica (UF) encierra una serie de planos de significación muy complejos e interrelacionados, que se actualizan de forma diversa en los distintos contextos de uso. Dichas unidades no siempre pasan bien de unas comunidades lingüístico-culturales a otras, debido no sólo a su complejidad interna, sino también a cuestiones de otra índole, como son la posible falta de competencia lingüística y cultural del traductor, las manipulaciones típicas del uso de unidades fraseológicas (UFS) en el discurso, las conceptualizaciones de realidades de la LO inexistentes en la LM, o, la propia predisposición del traductor ante lo que considera como más idiosincrásico y particular de la comunidad de origen, y, por tanto, de difícil o imposible traducción a la comunidad meta. En este trabajo vamos a abordar las dificultades que plantea la traducción de la fraseología, con especial referencia a la competencia fraseológica del traductor y a su capacidad de interpretar y buscar equivalentes en contexto.

2. La competencia fraseológica En abril de 1999 tuvimos la ocasión de realizar un pequeño test de competencia fraseológica entre los asistentes al seminario que impartimos sobre el tema. Seleccionamos 10 unidades fraseológicas muy frecuentes en inglés y en español: ESPAÑOL (1) (2) (3) (4) (5) (6) (7)

Éramos pocos y ... ... ... [parió la abuela] Más vale solo que ... ... [mal acompañado] Haber ... encerrado [gato] No hay más cera ... ... ... ... [que la que arde] ... ... de la misa ... ... [No saber --- la media] ... que se duerme se lo lleva la ... [Camarón --- corriente] ... de salvación [Tabla]

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 214

214

Capítulo XI

(8) ... un pollo [montar] (9) El que se fue a Sevilla ... ... ... [perdió su silla] (10) ... atención [prestar] INGLÉS (1) (2) (3) (4) (5) (6) (7) (8) (9) (10)

like a ... out of hell [bat] A little knowledge is a ... ... [dangerous thing] a ... in the neck [pain] Top ... the morning (... ...) [of --- to you] paint ... ... red [the town] nothing to write ... ... [home about] let the ... out ... ... bag [cat --- of the] to have a chip ... ... ... [one one’s shoulder] every Tom, ... ... ... [Dick and Harry] ... a compliment [pay]

Ambas listas fueron presentadas mediante transparencias en las cuales se habían sustituido algunos componentes (arriba entre corchetes) por puntos suspensivos. En un primer momento, se pidió a los asistentes que completaran las listas y explicasen el significado de las unidades. Diecinueve de las veintisiete personas que asistieron al seminario tenían el español como lengua materna. Las ocho restantes tenían como lengua materna el polaco (una), el malgache (una), el alemán (uno), el inglés (dos) y el japonés (tres). Pasamos en primer lugar las unidades fraseológicas del español. Los hablantes españoles no tuvieron dificultad alguna en reconocer e interpretar todas las unidades fraseológicas, salvo la 6 y la 8, restringidas diatópicamente a Andalucía y zona centro-sur. Los asistentes ofrecieron, además, dos variantes para la UF n.º 5: no saber de la misa la media/la mitad. Por el contrario, los ocho extranjeros apenas reconocieron ninguna de las UFS, salvo el grupo de japonesas y la hablante de malgache, quienes reconocieron al menos tres. Los dos asistentes de habla inglesa y el de alemán (quien, además, tenía nivel de nativo en inglés) no tuvieron mayores problemas para reconocer e identificar las UFS propuestas en la segunda lista. El resto de los asistentes identificaron la mayor parte de las unidades, a excepción de la 1, la 4, la 8 y la 9. La interpretación de las unidades aisladas fue más complicado aún, dado que, a lo sumo, se aventuraron algunas UFS supuestamente equivalentes así como ciertas paráfrasis más o menos afortunadas. En cuanto al establecimiento de correspondencias, los nativos de español fueron capaces de ofrecer algunas UFS equivalentes para las unidades en len-

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 215

La traducción de la fraseología

215

gua inglesa. No ocurrió lo mismo para las UFS españolas, para las cuales sólo se mencionaron algunos equivalentes. El grupo de hablantes no nativos mostró un nivel mucho más bajo, y sólo fueron capaces de ofrecer alguna paráfrasis aislada. Los resultados de esta prueba informal muestran el bajo nivel fraseológico de los asistentes al seminario. En general, el nivel sube ligeramente en lo concerniente a la identificación e interpretación de las UFS, pero empeora sensiblemente a la hora de buscar equivalentes de traducción. Si bien los resultados obtenidos no son generalizables ni extrapolables, sí son una ilustración palpable de las deficiencias que acusan los traductores en este terreno. Ahora bien, como apuntábamos al principio, los problemas que plantea la traducción de unidades fraseológicas no se originan únicamente en la “incompetencia” de los traductores en este tema, sino que depende también, y en gran medida, de las diferencias existentes entre los universos fraseológicos de las lenguas.

3. La identificación e interpretación de unidades fraseológicas El primer paso para la traducción de la fraseología consiste en reconocer una UF como tal. Una vez identificada la unidad, hay que pasar a interpretarla correctamente en contexto. El traductor debe valorar la carga potencial de la unidad, contrastándola con la aportación efectiva que ésta hace al hilo argumental del TO, es decir, sopesando la actualización semántica, discursiva y funcional que supone el empleo de dicha UF, y que puede variar grandemente con respecto a su uso en otros contextos o niveles La fase de identificación no está exenta de problemas. Si bien es verdad que el traductor puede servirse de algunas “pistas” para detectar la presencia de UFS en el TO, incluso cuando no se trata de su lengua materna, éstas no son siempre totalmente efectivas. La irregularidad gramatical y semántica pueden servir como índices fiables de idiomaticidad (Baker, 1992; Corpas Pastor, 1999). De acuerdo con estos criterios, el traductor debería reconocer fácilmente unidades como by and large (‘generally speaking; in general’, LDOEI), donde una preposición sin su correspondiente término va unida mediante conjunción a un adjetivo; y a ojos vista (‘a la vista, de manera evidente y manifiesta’, LDPL), que viola las reglas de concordancia de género y número en español; unidades con palabras diacríticas entre sus componentes internos, del tipo dressed (up) to the nines (‘infml wearing one’s best and most formal clothes’, LDOCE) y la de Mazagatos (‘situación difícil, ocasión arriesgada, pendencia, riña’, DRAE); así como UFS semánticamente incongruentes, como es el caso de under the weather (not fml unwell or

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 216

216

Capítulo XI

not cheerful’, LDOEI) y, en español, como los chorros del oro (‘Comparación ponderativa que se aplica a personas o cosas muy limpias’, LDPL). No obstante, la mayoría de las UFS no presentan irregularidades tan evidentes que delaten su carácter fraseológico. En general, se trata más bien de unidades homófonas respecto a las secuencias literales correspondientes. Por ejemplo, grease somebody’s palm presenta dos lecturas: una literal, que sería algo así como ‘untar de grasa la palma de la mano de alguien’, y la idiomática, ‘give sb money either as a tip or brave’ (ODOCIE), perteneciente a un nivel de lengua informal. Otro ejemplo de esta clase en español es lavarse las manos, que, en tanto locución, significa ‘mostrar inocencia, (afirmar) no tener responsabilidad en un asunto’ (DFEM), pero que, como secuencia libre construida según las reglas del sistema de la lengua, tiene también una lectura literal: ‘limpiarse las manos con agua u otro líquido’. Podría decirse que este tipo de UFS es fácilmente identificable en contexto, donde la interpretación literal carece de sentido. Pero esto no siempre ocurre así. Piénsese en las frecuentes manipulaciones externas que consisten, precisamente, en la actualización de ambas lecturas (la literal y la idiomática). Y, por otro lado, a veces el traductor no llega a identificar la UF como tal aún cuando la interpretación literal de la secuencia “chirríe” en contexto. Finalmente, cuando el traductor no es capaz de interpretar la carga semántico-discursiva de la UF a partir de su propia competencia fraseológica en la LO, se hace necesario una búsqueda contrastada a partir de distintas obras de referencia, entre las cuales mencionaremos diccionarios generales y fraseológicos, bilingües y monolingües, semasiológicos y onomasiológicos; bases de datos y glosarios personalizados que condensen la experiencia profesional y académica del traductor (cf. Corpas Pastor y Moreno Ortiz, 1995; Corpas Pastor, 1996c).

4. La búsqueda de correspondencias Tras las fases de identificación y posterior interpretación, el traductor procede al establecimiento de correspondencias, primero en el nivel lexicológico, el plano teórico, para, a continuación, bajar a los niveles textual y discursivo, en una palabra, al plano real. La primera etapa de la tercera fase corresponde, grosso modo, a la localización del translema en el lexicón bilingüe. Esto es, se trata de establecer las correspondencias en el plano léxico. Para ello el traductor cuenta, de nuevo, con la ayuda de distintas obras de referencia, aunque, por lo general, el tratamiento que recibe la fraseología, especialmente en los diccionarios bilingües, generales o fraseológicos, deja mucho que desear (Corpas Pastor, 1996a). Queda lo más

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 217

La traducción de la fraseología

217

complicado, pues, para la segunda etapa, que consistirá en buscar un determinado equivalente de traducción para un TM dado, una vez analizada la aportación global y particular de la UF en el contexto del TO. 4.1. EN EL PLANO LÉXICO En el plano léxico se dan tres grados de equivalencia fraseológica que requieren distintos procedimientos de traducción (Corpas Pastor, 1997). No se trata, sin embargo, de compartimentos estancos, claramente delimitados y definidos, sino más bien de una escala gradual de límites borrosos e imprecisos. A un extremo de la escala se encuentra la equivalencia plena. Ésta se produce cuando a una UF de la LO le corresponde otra UF de la LM, la cual presenta el mismo significado denotativo y connotativo, la misma base metafórica, la misma distribución y frecuencia de uso, las mismas implicaturas convencionales, la misma carga pragmática y similares restricciones diastráticas, diafásicas y diatópicas. Este tipo de equivalencia es raro por cuanto sólo se da en el caso de los europeismos (talón de Aquiles=Achiles’ heel), los calcos (Dos son compañía, tres son multitud=Two is company, three is a crowd) y las UFS denominativas o terminológicas (parque temático=theme park). En este caso, la simple sustitución de la unidad por su equivalente en la LM podría ser suficiente, salvo que en contexto la UF de la LO presente algún tipo de modificación interna o externa; o bien mantenga relaciones discursivas complejas con otros elementos del TO. En el extremo opuesto encontramos la equivalencia nula. Se trata de UFS de la LO que denotan realidades y situaciones no conceptualizadas, y, por tanto, no lexicalizadas, en la LM del tipo It takes two to tango –‘Some things cannot be accomplished by one person acting alone (Often accusatory; implies that the person about whom you say it is cooperating to produce some unpleasant situation)’ (NTC)–. Por lo general, estamos ante unidades que reflejan un aspecto idiosincrásico de la cultura de la comunidad de origen. Sirvan de ejemplo todas aquellas UFS del español relacionadas con el mundo del toreo que carecen de equivalente en inglés1: ver los toros desde la barrera, a toro pasado, ponerse el mundo por montera, echarle a alguien un capote, salir por la puerta grande, lleno hasta la bandera, darle a uno la oreja y el rabo, hacer el paseillo, dar a alguien la puntilla, ciertos son los toros, pillar el toro a alguien, más cornás da el hambre, etc. Al no existir el equivalente en la LM, el traductor trabaja a partir de una

1

Existen, no obstante, algunos equivalentes de traducción para UFS relacionadas con el mundo del toreo. Se trata de calcos como el que popularizara Ernest Hemingway –to take the bull by the horns– a partir de la locución castiza coger el toro por los cuernos.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 218

218

Capítulo XI

paráfrasis de la carga semántica, pragmática y discursiva de la UF en el TO, valorando las posibilidades que le ofrecen los distintos procedimientos (oblicuos y directos) de traducción. De nuevo las manipulaciones ocasionales y la incardinación discursivo-textual de la UF en cuestión serán determinantes con respecto al (los) procedimiento(s) empleado(s). Entre un extremo y otro se da toda una serie de UFS que no tienen una correspondencia “exacta” en la LM. Las diferencias pueden afectar a la base metafórica que vehicula el contenido semántico-pragmático de la unidad, del tipo Dios los cría y ellos se juntan frente a Birds of a feather flock together; o bien a la distinta distribución y frecuencia de las UFS en ambas lenguas, como put the cart before the horses, para la cual existen en español al menos dos UFS equivalentes: poner el carro delante de los bueyes, de similar base metafórica, pero menos frecuente y generalizada que empezar la casa por el tejado. En ambos casos se podría optar por la sustitución de la UF con vistas a conseguir una equivalencia funcional. No obstante, las manipulaciones e interrelaciones contextuales pueden hacer inviable dicha opción. La equivalencia parcial también se produce generalmente por las divergencias y solapamientos en cuanto al contenido semántico o las restricciones diasistemáticas de las UFS implicadas. Así, la locución out-herod Herod presenta ciertas coincidencias con la UF española ser más papista que el Papa (‘mostrar más celo en un asunto que los directamente interesados en él’, LDPL) tan sólo en su segunda acepción, por extensión figurativa –‘exceed sb named in a quality mentioned or understood’ (ODOCIE)–, pero no con respecto a su primera acepción: ‘be extremely wicked, cruel, violent etc. (the reference being to King Herod, ruler of Palestine when Jesus Christ was born)’ (ODOCIE). Otras diferencias afectan a las restricciones de las UFS, como la fórmula rutinaria de saludo Buen día, que pertenece a las variedades americanas del español, con respecto a la fórmula supranacional del inglés Good morning. También se encuadran aquí aquellas UFS cuyos equivalentes de traducción en la LM se reducen a unidades léxicas simples, por lo que su uso en el TM conlleva una pérdida efectiva de expresividad y de institucionalización fraseológica, como ocurre cuando se traducen las locuciones de matute, a la chita callando o por lo bajini mediante el adverbio inglés secretly. Un caso aparte lo constituyen los denominados falsos amigos, esto es, UFS con contenidos semánticos distintos que, a primera vista, resultan aparentemente equivalentes por cuanto presentan semejanzas formales en la selección y disposición interna de sus componentes individuales. Así, por ejemplo, to resume a lesson no es resumir una lección, sino retomar una lección. Las relaciones de equivalencia parcial entre UFS posibilitan el empleo de la sustitución como técnica de transferencia para trasladar la unidad del TO al TM. Esta opción, rápida y cómoda, no está exenta de problemas. En primer lugar, por su propia naturaleza, esta relación de equivalencia supone una pérdida más o

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 219

La traducción de la fraseología

219

menos importante en los niveles semántico, pragmático y discursivo que puede derivar en infratraducción (o, a la inversa, en sobretraducción). De ahí que el traductor a menudo eche mano de otras técnicas de transferencia con objeto de compensar tales desequilibrios. En otro orden de cosas, las relaciones de equivalencia parcial entre UFS pueden dejar de funcionar en determinados contextos. Ni que decir tiene que las manipulaciones y modificaciones que pudieran sufrir las UFS invalidan la sustitución como procedimiento de traducción.

4.2. EN EL PLANO TEXTUAL El establecimiento de correspondencias fraseológicas se complica aún más si bajamos del plano teórico o léxico al plano real o textual. En estos casos puede ocurrir que el traductor (1) no identifique la UF como tal; (2) la reconozca, pero no sea capaz de interpretarla correctamente en contexto; (3) o bien la reconozca y la interprete correctamente, pero no ofrezca el equivalente adecuado. Para ilustrar lo anterior, hemos extraído algunas de las UFS utilizadas por Tom Sharpe en Wilt, contrastándolas con los equivalentes propuestos por J.M. Álvarez Flores en la traducción que realizó para RBA Editores (Barcelona, 1993). En el primer caso tenemos la locución inglesa as cool as a cucumber. Aún cuando la lectura literal de la unidad queda descartada por el contexto, el traductor no ha sabido reconocer este indicio de idiomaticidad, habiéndola interpretado como una metáfora ad hoc, reproducible tal cual. La traducción propuesta fresco como un pepino no tiene, pues, sentido alguno. En español existen varios equivalentes parciales, como más fresco que una lechuga, [fresco] como una rosa, entre otros. Si bien es cierto que en este contexto ninguno de ellos serviría, por cuanto el primero hace referencia a la “cara dura” de la persona a la que se refiere, mientras que el segundo incide en el aspecto físico, descansado y atractivo, de dicha persona, sí se podría haber optado por otras alternativas posibles como quedarse/estar tan fresco/pancho. Have you ever known a murderer sit through thirty-six hours of questioning as cool as a cucumber when he knows we’ve got the body of his victim pinpointed to the nearest inch? (pág. 132) ¿Ha visto usted alguna vez un asesino que haya aguantado treinta y seis horas de interrogatorio y esté fresco como un pepino, sabiendo que hemos localizado el cuerpo de la víctima? (pág. 151)

En el siguiente ejemplo de nuevo el traductor no reconoce la UF inglesa (serve something somebody right) y ofrece una paráfrasis que reproduce a gran-

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 220

220

Capítulo XI

des rasgos la lectura literal de la secuencia. Al igual que en el caso anterior, la traducción propuesta no tiene sentido alguno (¿qué le está bien? ¿el zapato, el vestido, ...?), a menos que se trate de una errata de impresión y “empleado” (estar algo bien empleado a alguien) haya sido elidido. Serve her right for giving him that disgusting doll. She’d regret that to the end of her days. (pág. 151) Le estaba bien, por enviarle aquella muñeca repugnante. Lamentaría aquello hasta el fin de sus días. (pág. 173)

El fragmento que reproducimos a continuación contiene una colocación –complete idiot–, que el traductor ha sabido reconocer e interpretar. No obstante, a la hora de ofrecer su equivalente en español, éste se topa con su propia falta de competencia fraseológica en la LM: imbécil de remate es un error colocacional, puesto que la extensión típica de la locución de remate se restringe a los adjetivos loco o tonto. Algunas alternativas posibles podrían haber sido como un auténtico imbécil..., ...fui tan gilipollas de arrojar..., ...y yo, tan imbécil/gilipollas/idiota, voy y arrojo..., ...se me ocurrió, idiota/imbécil/insensato de mi..., etc. ‘The facts are these,’ said Wilt. ‘Like a complete idiot I made the mistake of dumping an inflatable doll down the bottom of a pile of shaft and someone poured concrete in and my wife is away from home and…’ (págs. 116-117). –Pues los hechos son estos –dijo Wilt–: Como un imbécil de remate, cometí el error de arrojar una muñeca hinchable al agujero de un pilote, y alguien vertió hormigón en ese agujero, y mi esposa se marchó de casa y... (pág. 133).

Como vimos en el primer ejemplo, algunas veces ni siquiera sirve el equivalente de traducción que existe en el plano léxico. La locución inglesa walk a tightrope corresponde en español a estar en la cuerda floja. En este caso, el traductor reconoce la UF inglesa, conoce la locución equivalente en español y utiliza la simple sustitución de una unidad por otra. Ahora bien, la UF inglesa presenta modificación interna por adición de un elemento externo (fucking), por lo que la sustitución como técnica de transferencia resulta a priori inviable. El traductor resuelve la situación mediante una amplificación y la omisión injustificada del elemento enfático. Quizá se podría haber optado por la compensación mediante una fórmula emocional del tipo No me joda (o simplemente joder) –que, a su vez, equivaldría a la fórmula inglesa más la fuerza de fucking– y la equivalencia mediante otra UF más idónea para ese contexto, como pasarse un huevo, tener cuidado, andarse con cuidado/ojo, (no) dar un paso en falso, hin-

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 221

La traducción de la fraseología

221

chársele a alguien las narices, etc.: “No me joda/Joder, Wilt, ya se está pasando un huevo” o “Joder, Wilt, no se pase un pelo que se me están hinchando las narices”. ‘Jesus wept, Wilt,’ snarled the Inspector, ‘you’re walking a fucking tightrope with my patience’ (119). –Santo cielo, Wilt –farfulló el inspector– está usted en la cuerda floja... No abuse de mi paciencia... (136).

Las deficiencias en la traducción de la fraseología pueden tener incluso consecuencias negativas para la comprensión de todo un pasaje. En el siguiente fragmento, varios profesores están reunidos para discutir sobre la conducta reprobable del protagonista, Wilt. En un momento de la discusión, uno de los profesores se pronuncia en contra de los profesores de Humanidades en general, mientras que otro le apoya utilizando para ello la fórmula de consentimiento y aprobación Hear, hear! ‘Commited?’ said the Head of Catering with a snort. ‘Commited to what? Abortion, Marxism or promiscuity? It’s bound to be one of the three. I’ve yet to come across a Liberal Studies lecturer who wasn’t a crank, a pervert or a red-hot revolutionary and a good many have been all three.’ ‘Hear, hear’, said the Head of Mechanical Engineering, on whose lathes a demented student had once turned out several pipe bombs (pág. 12).

Dicha fórmula (1) es propia del discurso hablado (o del escrito que reproduce la cadena hablada); (2) está restringida diatópicamente a la variedad británica del inglés; (3) expresa aprobación y acuerdo enfático del emisor con lo dicho por el interlocutor, cuyo turno interrumpe o solapa; (4) suele darse en un entorno más o menos formal, como intervenciones públicas y debates parlamentarios (especialmente en la Cámara de los Comunes, en cuyo caso lleva asociada la acción de golpear el escaño con documentos o con los nudillos); y (5) cuando se utiliza en niveles de lengua informales o coloquiales adquiere connotaciones jocosas e irónicas (Corpas Pastor, 1995, 1999). La traducción propuesta (Bien, bien) resulta a todas luces insatisfactoria por cuanto expresa justamente lo contrario: la intervención del segundo personaje no transmite el acuerdo intenso y enfático con lo dicho anteriormente, sino más bien una tímida oposición de éste, el cual, sin embargo, parece querer huir de cualquier enfrentamiento expreso, en la línea de “bueno, no estoy muy de acuerdo, pero será mejor que corramos un tupido velo”. De la versión española se desprende que el traductor ha detectado la presencia de una UF; que la ha identifica-

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 222

222

Capítulo XI

do como una fórmula rutinaria; pero que no la ha interpretado correctamente; y, que, por tanto, no ha sabido traducirla correctamente. –¿Comprometido? –preguntó con un bufido el jefe del Departamento de Abastecimiento–. ¿Comprometido con qué? ¿El aborto, el marxismo o la promiscuidad? Ha de ser con una de esas tres cosas. Aún no he conocido ni a un solo profesor auxiliar de Humanidades que no fuese un chiflado, un pervertido o un revolucionario radical, y muchos de ellos eran las tres cosas. –Bien, bien –dijo el jefe del Departamento de Ingeniería Mecánica, en cuyos tornos un alumno chiflado había fabricado varias bombas de tubería (pág. 13).

5. Conclusión La fraseología sigue siendo una asignatura pendiente para la inmensa mayoría de traductores. Los problemas se presentan ya desde la identificación e interpretación de la unidad; y se agudizan en la fase de transferencia, lo cual desemboca en innumerables errores de traducción de diversa gravedad. Quizá una buena medida sería proporcionar mayor preparación en este terreno a los futuros profesionales. Pero no hay que olvidar que los docentes estamos poco preparados para afrontar esta tarea, ya que, por un lado, la didáctica de la traducción está aún en mantillas; y, por el otro, hay una gran escasez de obras de referencia de calidad, léase repertorios léxicos y estudios especializados, que puedan servir de guía para adentrarse en la “jungla” fraseológica. Pero esto, desde luego, es harina de otro costal. Referencias bibliográficas ACADEMIA ESPAÑOLA (RAE) (1992): Diccionario de la lengua española. 21ª ed. Madrid: Espasa-Calpe [DRAE]. BAKER, M. (1992): In Other Words. Londres: Routledge. BERTRAM, A. (1993): NTC’s Dictionary of Proverbs and Clichés. Lincolnwood, Illinois: National Textbook Company [NTC]. CORPAS PASTOR, G. (1995): Un estudio paralelo de los sistemas fraseológicos del inglés y del español. Tesis doctoral (Universidad Complutense de Madrid, 1994, edición en microfichas). Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad. — (1996a): “La fraseología en los diccionarios bilingües”, en: ALVAR EZQUERRA, M. (coord.), Estudios de Historia de la Lexicografía del Español. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 167-182. — (1996b): Manual de fraseología española (Biblioteca Románica Hispánica). Madrid: Gredos.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 223

La traducción de la fraseología

223

— (1996c): “The Bilingual Dictionary: Friend or Foe?”, en: PÉREZ GUERRA, J. (Ed.), Proceedings of the XIXth International Conference of AEDEAN. Vigo: Departamento de Filoloxía Inglesa e Alemana, Universidad de Vigo, 201-204 — (1997): “Grados de equivalencia translémica de las locuciones en inglés y en español”, en: SOLA, R.; LÁZARO, J.A., y GURPEGUI, J.A. (eds.), Actas del XVIII Congreso de AEDEAN (Alcalá de Henares, l5-l7 diciembre 1994). Alcalá de Henares: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 335-341. — (1998a): “Criterios generales de clasificación del universo fraseológico de las lenguas, con ejemplos en español y en inglés”, en: ALVAR EZQUERRA, M., y CORPAS PASTOR, G. (coords.), Diccionarios, frases, palabras. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 57-187. — (1998b): “Expresión fraseolóxicas e colocacións: clasificación”, en: FERRO RUIBAL, X. (Ed.), Actas do I Coloquio Galego de Fraseoloxía. Centro Ramón Piñeiro, Xunta de Galicia, 31-61 — (1999): “Consideraciones en torno al procesamiento y traducción al español de la fórmula Hear, hear!”, en: ALVAR EZQUERRA, M., y CORPAS PASTOR, G. (coords.), Léxico y voces del español. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 89-109. CORPAS PASTOR, G., y MORENO ORTIZ, A. (1995): “Diseño de una base de datos fraseológica para la traducción asistida por ordenador (TAO)”, en: MARTÍN VIDE, C. (Ed.), Actas del XI Congreso de Lenguajes Naturales y Lenguajes Forrnales. Barcelona: PPU, 389-396. COWIE, A. P.; MACKIN, R., y MCCAIG, I. R., (1985[1983]): Oxford Dictionary of Current Idiomatic English. Volume 2. Phrase, Clause & Sentence Idioms. Oxford: Oxford University Press [ODOCIE]. FONTANILLO MERINO, E. (1993): Larousse Diccionario Práctico de Locuciones. Barcelona: Larousse Planeta [LDPL]. SHARPE, T. (1978 [1976]): Wilt. Londres: Pan Books. — (1993): Wilt. Barcelona: RBA Editores (traducción de J. M. Álvarez Flores). SUMMERS, D. (1987 [1978]): Longman Dictionary of Contemporary English. Harlow, Essex: Longman [LDOCE]. VARELA, F., y KUBARTH H. (1994): Diccionario fraseológico del español moderno. Madrid: Gredos [DFEM].

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 225

CAPÍTULO XII CONSIDERACIONES EN TORNO AL PROCESAMIENTO Y TRADUCCIÓN AL ESPAÑOL DE LA FÓRMULA HEAR, HEAR!

1. Introducción La década de los setenta marcó un cambio de orientación en las investigaciones psicolingüísticas sobre la cognición humana. Hasta entonces, la comprensión de los enunciados era una cuestión de simple descodificación secuencial del input lingüístico. No obstante, las investigaciones sobre la memoria episódica, la memoria semántica, la memoria de procedimiento (procedural) (cf. Tulving, 1972, 1985; Tulving y Thomson, 1983) y, más recientemente, la memoria de trabajo (cf. Baddeley, 1992 [1986]) demostraron la combinación efectiva de los procesos ascendentes (bottom-up processing) y descendentes (top-down processing) en la cognición humana. El carácter holístico y gestalt del procesamiento humano se vio corroborado por las investigaciones de Kintsch (1974), Minsky (1975), Schank y Abelson (1977), Kintsch y van Dijk (1978) y Lehnert (1979). Siguiendo la teoría de los esquemas1, estos autores pusieron de manifiesto la existencia de estructuras de conocimiento prototípicas, de las que se sirven los hablantes para organizar la percepción, memorización y reconstrucción de información nueva sobre la base de experiencias anteriores. A lo largo de estas páginas nos vamos a servir de las teorías cognitivas del procesamiento lingüístico para dar cuenta de una fórmula inglesa de consentimiento: Hear, hear! Como telón de fondo, nos ocuparemos de los problemas generales que plantea la traducción de unidades fraseológicas. A continuación, examinaremos el tratamiento que recibe la unidad objeto de nuestro estudio en los diccionarios bilingües y monolingües del inglés. Tras señalar las deficiencias más acusadas, analizaremos esta fórmula mediante un marco de situación que nos permita describir adecuadamente la carga semántica, pragmática y funcional

1 Los orígenes de la teoría hay que situarlos en la obra pionera de Bartlett (1932). Este psicólogo británico sostenía que la memoria actúa de forma activa en la interpretación textual, proporcionando información no explicitada en el texto. Las estructuras de conocimiento almacenadas en la memoria (schemata) sirven de puente de unión entre la información nueva y los conocimientos previos del hablante.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 226

226

Capítulo XII

de esta unidad. Finalmente, extraeremos algunas conclusiones de especial relevancia para la didáctica de la traducción. 2. La traducción de la fraseología Uno de los escollos más frecuentes con el que se enfrenta el traductor es, sin duda, el establecimiento de correspondencias para las unidades fraseológicas. Por lo general, los problemas comienzan ya a la hora de reconocer la unidad en cuestión, cosa que no siempre resulta fácil, especialmente para un hablante no nativo. Se trata, en primer lugar, de identificar e interpretar una unidad fraseológica (UF), de forma que se aprehendan todos los matices semánticos y pragmáticos que se derivan de su uso en el texto de origen (TO). Una segunda dificultad básica se plantea a la hora de trasladar toda esa carga semántica, pragmática y funcional al texto meta (TM). Existen, no obstante, indicios fraseológicos que facilitan en gran medida el reconocimiento de estas unidades (cf. Baker, 1992: 63). La incongruencia semántica (por ejemplo, to rain cats and dogs, en inglés, y comulgar con ruedas de molino, en español), así como la anomalía gramatical y sintáctica (por ejemplo, to trip the light fantastic, en inglés, y a ojos cegarritas, en español) se pueden considerar como índices fiables de la idiomaticidad –y, por tanto, de la fijación fraseológica– de determinadas unidades. Más problemática resulta la identificación de unidades homófonas con su correspondiente literal, esto es, UFS que permiten dos lecturas: una interpretación unitaria, fraseológica, y una interpretación literal, que sería simplemente la suma de los significados, individuales y aislados, de sus componentes. En inglés, la locución verbal to sit on the fence presenta el significado unitario de ‘stay neutral and not take sides’ y ‘be undecided which of two opposite courses of action to take’ (EI); mientras que esta misma secuencia, tomada literalmente, vendría a significar algo así como ‘estar sentado/sentarse en lo alto de una verja’. Igualmente, unidades como echar leña al fuego, en español, pueden dar lugar a equívocos pues, en tanto locución, significa ‘avivar una discordia’ o ‘agravar o acrecentar un mal’ (DFEM). Esta misma secuencia, además, presenta un significado literal en tanto combinación libre según las reglas del sistema de la lengua. Por otro lado, el establecimiento de correspondencias es otro aspecto espinoso de la traducción de UFS. En trabajos anteriores hemos señalado la existencia de cuatro grados básicos de equivalencia translémica en el nivel lexicológico (Corpas Pastor, 1997). La equivalencia total se produce cuando una UFS de la LO y su equivalente de traducción en la LM forman un translema en todo momento, es decir, presentan el mismo significado denotativo y connotativo, así como las mismas restricciones diatópicas, diafásicas y diastráticas. Se trata fun-

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 227

Consideraciones en torno al procesamiento

227

damentalmente de unidades denominativas o terminológicas (rain forest = selva tropical), pero también se engloban aquí unidades traslaticias que tienen una misma base metafórica o bien constituyen europeísmos (crocodile tears = lágrimas de cocodrilo). La técnica de transferencia más adecuada para estos casos es, simplemente, la sustitución. No obstante, tres factores pueden afectar negativamente al establecimiento de correspondencias incluso a este nivel. Como decíamos más arriba, a veces el traductor no es capaz de reconocer una determinada UF como tal en el TO, no es consciente de su institucionalización en la LO, y, como consecuencia, no es consciente de la existencia de un equivalente en la LM. En segundo lugar, la equivalencia total puede no ser tal en tanto el binomio fraseológico no presenta una distribución o una frecuencia similar en ambas lenguas. Y, finalmente, las manipulaciones creativas y demás modificaciones que sufren estas unidades al ser empleadas en el discurso pueden hacer inviable la simple sustitución. La equivalencia parcial se produce cuando una UF y su equivalente presentan diferencias de significado –denotativo o connotativo–; distintas restricciones en los niveles diatópico, diafásico y diastrático; o bien diferencias formales o estructurales. UFS como Every cloud has a silver lining y No hay mal que por bien no venga presentan el mismo valor funcional y son comunicativamente equivalentes, a pesar de las diferencias existentes con respecto a la base metafórica subyacente y a la elección de componentes internos. Lo mismo se puede decir de una colocación como a pack of dogs, que en español se traduce por un lexema simple (una jauría). Al igual que en el caso anterior, se puede optar por la sustitución para dar cuenta de este tipo de equivalencia léxica. Son aplicables también aquí los tres factores a los que aludíamos anteriormente, con la salvedad de que, cuando se trata de modificaciones formales o manipulaciones creativas, internas o externas a la unidad en cuestión, la sustitución es casi siempre inviable. Cuando las relaciones de similitud entre UFS de distintas lenguas obedece a una razón puramente formal, sin correspondencia alguna en el nivel conceptual, estamos ante casos de equivalencia aparente. Son los tan temidos “falsos amigos” que a veces se cuelan en el TM, como la locución inglesa to have one’s wires crossed, que no corresponde en español a tener los cables cruzados, sino a sufrir un malentendido. El anisomorfismo de las lenguas es responsable de la ausencia de equivalente para determinadas UFS. Estas realidades lingüísticas de la LO no se lexicalizan en la LM, dando lugar a la existencia de lagunas fraseológicas. Algunos ejemplos son The dog returns to his vomit, cold fish, en inglés; y El que se pela se estrena, ver los toros desde la barrera, en español. Ante la imposibilidad de utilizar la sustitución para trasladar la UF a la LM, se debe optar por otra técnica de transferencia (compensación, modulación, transposición, adición, etc.) que

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 228

228

Capítulo XII

exprese los contenidos semánticos y pragmáticos de la UF insertada en el TO. Si, además, pasamos del nivel léxico al nivel discursivo, de nuevo las modificaciones y manipulaciones constituyen una fuente adicional de problemas traductológicos.

3. Hear, hear!, una fórmula rutinaria de consentimiento Las fórmulas rutinarias constituyen, junto con las paremias, un tipo de UF –el enunciado fraseológico– que se caracteriza por presentar fijación en el habla y pertenecer, por tanto, al acervo sociocultural de la comunidad hablante. A diferencia de las paremias, las fórmulas rutinarias carecen de autonomía textual y su aparición en el discurso viene condicionado por circunstancias y situaciones comunicativas precisas. Ésta es la razón por la que dichas unidades suelen presentar un significado social, expresivo o discursivo, en lugar de contenidos referenciales. La UF inglesa Hear, hear es una fórmula rutinaria de las denominadas psicosociales, las cuales desempeñan funciones facilitadoras del desarrollo normal de la interacción social, o bien funciones de expresión del estado mental y los sentimientos del emisor. Dentro de éstas, Hear, hear pertenece al subgrupo de fórmulas expresivas de consentimiento, que se caracterizan por implicar al receptor en un hecho del pasado más o menos reciente. Su fuerza ilocutiva, expresada mediante un verbo performativo, es to accept, to agree y verbos similares en inglés. Ejemplos del mismo tipo son [That’s] Fair enough, You said it, You can say that again, Too true y That’s it. Comparten un mismo significado básico con diversos matices. Otras fórmulas de consentimiento en inglés como Don’t I know it y You’re telling me!, indican, además, que se trata de información conocida; mientras que That’s my boy/girl/daughter/baby, etc., There’s a good boy/girl/fellow, etc., That’s a good boy/girl, etc. y Good for (somebody)! expresan aprobación hacia una determinada acción o actitud de alguien. Cuando además se le felicita se usa la fórmula Well done. En español también se dan fórmulas de este tipo, aunque fundamentalmente indican el acuerdo del emisor con lo dicho anteriormente por el receptor, como Ni que decir tiene, A ver, Y tanto, Ya lo creo, Sí, señor, Y que lo diga(s). En otros casos, el asentimiento se refiere a algo que el emisor aprecia por sí mismo, como Ya [lo] veo; o supone una respuesta positiva a una pregunta o petición, como Claro que sí, Desde luego, Con mucho gusto; o bien indica la gran seguridad que asiste al hablante al asentir mediante una fórmula como Por descontado. Otras fórmulas, como A la orden, implican la aceptación de una determinada jerarquía.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 229

Consideraciones en torno al procesamiento

229

3.1. DESCRIPCIÓN LEXICOGRÁFICA: DE LA PERÍFRASIS EXPLICATIVA AL EQUIVALENTE DE TRADUCCIÓN

La existencia de fórmulas para asentir en español presupone la posibilidad de una traducción funcional mediante la simple sustitución de la UF por su correspondiente en español. Sin embargo, tal operación no resulta fácil dado que cada una de las UFS de este subgrupo encierra una gran variedad de matices y suele ser plurifuncional. Esto quiere decir que las relaciones de equivalencia posibles son, generalmente, de carácter parcial e, incluso, nulas. La simple sustitución de una fórmula de recusación del TO por otra fórmula de recusación, supuestamente equivalente, de la LM no garantiza la adecuación de la traducción. Volviendo al caso de la fórmula inglesa Hear, hear, hemos consultado varios diccionarios bilingües con objeto de comprobar qué equivalentes de traducción o, en su defecto, qué paráfrasis explicativas ofrecen al usuario. Para nuestro análisis hemos seleccionado dos diccionarios semi-bilingües y nueve diccionarios bilingües: siete generales, uno pedagógico y otro fraseológico. De los diccionarios semi-bilingües, el PEDSS no incluye la citada fórmula, mientras que el VCELD sí lo hace como subentrada, en negrita, bajo hear. Se especifica la restricción diatópica, ya que se trata de una fórmula del inglés británico, y se define de la siguiente forma: “a shout to show that one agrees with what a speaker has said (eg in Parliament or at a meeting)”. La traducción que encontramos de esta unidad es simplemente “¡muy bien!”. En cuanto a los bilingües, salvo el fraseológico, los demás incluyen la UF de una forma u otra. El CSD, el LGD y el OAPEI ofrecen “¡muy bien!” como equivalente de traducción para esta fórmula de consentimiento. Los tres la sitúan en la entrada correspondiente a hear, pero, mientras el primero lo hace como simple ejemplo de uso, los dos últimos la presentan en el apartado dedicado a locuciones, giros y expresiones. El MADU también da cuenta de la fórmula Hear, hear en la parte fraseológica de la microestructura, bajo el lema hear, especificando que se trata de una fórmula exclusivamente británica. Se ofrecen dos equivalentes de traducción, seguidos de sendos discriminadores semánticos: “¡oye!, ¡oye!” (to call attention) y “¡muy bien!” (to applaud). El CSED y el SAS optan por “bravo!” [sic] y “¡bravo!, ¡bravo!”, respectivamente. Incluyen la citada fórmula al final de la entrada, como ejemplo en el primer caso, y como frase hecha en el segundo. Solamente el OSD se aparta un tanto de los anteriores, al ofrecer “¡eso, eso!” y “¡bien dicho!”, sin ningún tipo de glosa explicativa, como equivalentes de traducción de la fórmula Hear, hear!, la cual aparece como ejemplo de uso del verbo hear en su acepción tercera. Las traducciones que encontramos en los diccionarios bilingües consultados resultan a todas luces insatisfactorias, ya que no consiguen expresar todos los

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 230

230

Capítulo XII

matices de la fórmula Hear, hear. Debemos reconocer que ésta es una ardua tarea, dado que en español es muy difícil, si no imposible, encontrar una traducción totalmente equivalente a la fórmula inglesa. Las deficiencias de la lexicografía bilingüe con respecto a la inclusión y tratamiento de la fraseología es un hecho consabido del cual nos hemos ocupado en diversos trabajos (cf. Corpas Pastor y Moreno Ortiz, 1995; Corpas Pastor, 1996a y 1996b). Esta situación se repite con respecto a la fórmula que nos ocupa, puesto que los diccionarios bilingües no proporcionan al usuario la información que necesita: no se preocupan de incluir glosas y discriminadores semánticos adecuados, ni siquiera se encuentran perífrasis explicativas del contenido semántico de la fórmula en cuestión. Si bien los diccionarios bilingües no resultan de gran ayuda para el traductor que se enfrenta con esta fórmula, los diccionarios monolingües tampoco satisfacen sus necesidades por completo. De los nueve diccionarios consultados, hay tres fraseológicos, seis pedagógicos y uno general. De los fraseológicos sólo uno de ellos incluye la fórmula que nos ocupa, definiéndola mediante un sinónimo que resume su fuerza ilocutiva, seguido de un discriminador semántico entre paréntesis que restringe el ámbito de acción a actos públicos: hear! hear! I agree! (used to express agreement with a person making a speech in public). (LDOEI)

El COD, por su parte, se limita a describir los contextos de uso en una acepción independiente: hear [...] 5. ~, ~!, (as form of cheering a speaker or iron, derision etc.). (COD)

En cuanto al tratamiento de la fórmula en los diccionarios pedagógicos, hay que decir que todos ellos la incluyen, generalmente mediante acepciones independientes bajo el lema hear y haciendo referencia a su contenido ilocutivo, esto es, a su uso como fórmula para expresar el acuerdo del emisor con lo dicho por su interlocutor. Algunos diccionarios hacen mención expresa de las connotaciones positivas de la fórmula, o bien subrayan su carácter enfático o la circunstancia de que, generalmente, se pronuncie a voz en grito. hear [...] 4 Hear! Hear! (a shout of agreement). (LDOCE) hear [...] 7 Hear, hear! a shout of agreement. (LASD) hear [...] 6 (idm) ,hear! ‘hear! (used to express agreement and approval). (OALD.) hear [...] If someone says hear, hear! they are strongly agreeing with what someone else has said (CIDE).

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 231

Consideraciones en torno al procesamiento

231

Únicamente el OWD y el CCELD se detienen algo más en la explicación de las condiciones de uso de la UF. Así, el primero indica que es una fórmula dialogal propia de los debates, mientras que el segundo especifica los emisores y situaciones prototípicas asociadas a esta unidad: hear [...] (IDIOMS) hear, hear! (used for showing that you agree with what sb has just said, especially in a meeting). (OWD.) hear [...] 12 ‘Hear hear’ is something that people such as politicians say during debates to show that they agree with what the speaker is saying (CCELD).

De las descripciones lexicográficas anteriores se deduce que la fórmula Hear, hear (1) es propia del discurso hablado (o del escrito que reproduce la cadena hablada); (2) suele darse en un entorno más o menos formal, como reuniones y debates; (3) expresa aprobación y acuerdo enfático del emisor con lo dicho por el interlocutor; (4) puede emplearse de forma irónica. Queda patente, pues, que las traducciones propuestas (“muy bien”, “eso, eso”, “bien dicho”, “bravo”) además de aleatorias, contienen equivalentes en todo caso muy parciales: por un lado, no consiguen expresar toda la carga semántica de la unidad; y, por el otro, se podrían haber ofrecido otras fórmulas para asentir en español que incluso están más petrificadas pragmática y semánticamente que las anteriores (Así se habla, Ya lo creo [que sí], Eso es, etc.). Hemos registrado, además, un caso de equivalencia aparente, en el que la fórmula aparece traducida como una mera llamada de atención (“¡oye!, ¡oye!”). 3.2. DESCRIPCIÓN COGNITIVA: EL USO DE MARCOS DE SITUACIÓN La cognición humana está regulada por una combinación de procesos ascendentes y descendentes. Ello supone, por un lado, que los hablantes procesan el significado individual de las palabras y la estructura sintáctica de las frases que conforman un texto para llegar a una apreciación global. Al mismo tiempo, el mecanismo cognitivo incluye un componente predictivo por el cual es posible anticipar lo que sigue a continuación con ayuda del contexto y de la información previamente procesada. En palabras de Kussmaul (1995: 92): [...] comprehension is a dynamic process, an interplay between our knowledge, our experience and our expectations on the one hand and the linguistic utterances we hear or read on the other.

Las estructuras de conocimiento almacenadas por los hablantes forman parte del componente predictivo, guiando la comprensión, la actuación y la comunica-

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 232

232

Capítulo XII

ción. Tienen un marcado carácter subjetivo, pues su activación está sujeta a la consideración del hablante individual. A pesar de esto, tales estructuras o esquemas constituyen entidades culturalmente específicas que son compartidas en diverso grado por los hablantes de una determinada comunidad. Schemata are considered to be conventional knowledge-structures which exist in memory and are activated, under various circumstances, in the interpretation of what we experience (Yule, 1991 [1985]: 112).

En la literatura sobre el tema se han distinguido diversos tipos de esquemas. Carrell (1983) propone dos tipos básicos, esquemas conceptuales (content o general knowledge schemata) y esquemas formales (formal schemata). Los primeros proporcionan información general sobre el campo de conocimiento en el que se inscribe el contenido del texto (medicina, deportes, electrónica, moda, etc.). Los segundos proporcionan también información general, pero no acerca del contenido, sino de la forma del texto, de su organización interna y de la estructura retórica típica de los distintos tipos de textos (editoriales, titulares y columnas periodísticas, manuales de instrucciones, anuncios, recetas de cocina, novelas, etc.)2. La noción de esquema no constituye un concepto monolítico y homogéneo. La propuesta de Shank y Abelson (1977) –modificada posteriormente por Shank (1982, 1986)– establece una jerarquía de niveles para la comprensión y el establecimiento de la coherencia textual: esquemas (y subtipos) y marcos. Los esquemas se dividen en guiones (scripts), planes (plans), objetivos (goals) y temas (themes). Los guiones (scripts) representan una serie de acciones predeterminadas y estereotipadas características de una determinada situación. Se dan guiones instrumentales, como poner la lavadora; personales, como ser un cotilla; y situacionales, como estar en el cine o ir en autobús3. Los guiones contienen casillas que son realizadas por entidades y acontecimientos concretos. Los planes (plans) también constan de casillas ordenadas, pero no se asocian a situaciones concretas, sino a la realización de un determinado objetivo. Se

2

En el ámbito de los estudios literarios se distingue, además, otro tipo de esquema: el story schema, que hace referencia a las expectativas de los lectores con respecto a la estructura general de las narraciones (Rumelhart, 1975; Mandler y Johnson, 1977; Thorndyke, 1977). Se distinguen dos subtipos: los denominados character schemata y location schemata, mediante los cuales resulta posible concebir las localizaciones y los personajes ficticios de un texto. Relacionado con lo anterior, Emmot (1994) señala la existencia de un tipo de esquema (text-specific schemata o frames) que permite a los lectores apreciar la línea argumental incluso cuando se emplea la técnica del flashback. 3 Sanford y Garrod (1981) proponen la denominación de scenario para los guiones situacionales.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 233

Consideraciones en torno al procesamiento

233

recurre a los planes cuando no existen guiones establecidos para tal fin. Cada uno de estos planes posibles comparte una misma estructura esquemática, aunque los elementos del plan serán diferentes dependiendo de la meta que se pretenda alcanzar. Los objetivos (goals) permiten deducir la existencia de un plan cuando éste no es explícito. Se dividen en primarios (satisfacción, disfrute, consecución, conservación y maneras de actuación en momentos de crisis) y secundarios. Cuando no es posible reconocer los objetivos de un texto (ni, por supuesto, los planes o guiones), se recurre a los temas (themes) para establecer la coherencia textual. Se dan tres grandes grupos de temas: role themes (ser abogado, ser enfermera, etc.); interpersonal themes, relaciones interpersonales basadas en nociones de estatus e intimidad (ser médico o paciente); y life themes, referidos a diversos aspectos de la vida (ser servicial, desear ser rico, etc.). A diferencia de los esquemas (y subtipos), los marcos (frames4) constituyen representaciones fijas del conocimiento del mundo, es decir, estructuras estáticas, no dinámicas (Minsky, 1975). Las palabras y frases de un texto activan uno (o varios) marco(s), que a su vez comportan una serie de componentes fijos. Por ejemplo, el marco de una estación ferroviaria contiene, entre otros, los siguientes elementos: trenes, vías, supervisores, pasajeros, kioskos de periódicos y refrescos, servicios, etc. Van Dijk y Kintsch (1983: 307-8) agrupan los anteriores subtipos y establecen cuatro categorías básicas de estructuras de conocimiento. Las dos primeras se orientan hacia la organización interna del conocimiento, mientras que las dos últimas hacen más bien referencia a las necesidades que tienen los hablantes de alcanzar una serie de objetivos (hacer algo, conseguir algo, influir en algo o alguien) en la interacción cotidiana. Los marcos constituyen estructuras de conocimiento almacenadas con respecto a un determinado concepto general. Por ejemplo, el marco de un barco comprende las partes de las que consta, los materiales de los que está hecho, los usos que pueden hacerse de él, etc. Los esquemas están restringidos por una secuencia de ordenación de los estados y acontecimientos desde el punto de vista de la progresión de los distintos elementos durante la actualización del discurso. Es decir, se trata de marcos organizados en serie. Por ejemplo, el esquema de un barco supondría secuencias como las que describirían el orden en que han sido colocados sus elementos al construirlo, el orden en que dichos elementos van apareciendo al recorrerlo de visita, etc.

4 Véase Konerding (1993) sobre los orígenes de la noción y el término frame, así como las distintas teorías actuales sobre el tema.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 234

234

Capítulo XII

Los planes se definen según el objetivo que se pretenda alcanzar, con respecto a los cuales resulta relevante. Se trata de esquemas dirigidos por un objetivo. En el caso del ejemplo del barco, los planes serían distintos si se trata de comprarlo, alquilarlo, construirlo o simplemente visitarlo. Los guiones suponen la existencia de instrucciones dadas a los participantes en un evento acerca de lo que deberían hacer y cómo deberían comportarse de acuerdo con los distintos papeles asignados. En este sentido, constituyen planes que se han estabilizado socialmente. Por ejemplo, el guión de un barco contiene las instrucciones que corresponden a las actuaciones del capitán, de los distintos miembros de la tripulación, del médico, etc. Los modelos ascendentes de comprensión holística y la teoría de los esquemas han tenido una gran repercusión en otros modelos cognitivos de corte semántico5 desarrollados también en los años setenta. Nos referimos a la teoría de los prototipos6 y el modelo de scenes-and-frames. La investigaciones de Rosch (1973, 1975, 1977) sobre el lexicón mental de los hablantes desvelaron la existencia de conceptos prototípicos dentro de las categorías naturales y semánticas. La autora demostró, por ejemplo, que, en inglés americano7, un petirrojo (robin) es más representativo de la categoría “pájaro” que un pingüino (penguin) o un avestruz (ostrich). Estudios posteriores confirmaron dichos resultados. Así, el establecimiento de categorías por parte de los hablantes conlleva el establecimiento de prototipos, a partir de los cuales se clasifican jerárquicamente los demás elementos integrantes de las categorías; de ahí que al activar una palabra se activen también, de forma inconsciente, tales jerarquías (cf. Rosch y Lloyd, 1978; Armstrong, Gleitman y Gleitman, 1983). De igual forma, en el modelo psicolingüístico de Fillmore (1976, 1977), el procesamiento de las unidades lingüísticas (frames) conlleva la activación del conocimiento almacenado en el lexicón mental (scenes). El significado de las palabras y enunciados depende de los contextos en los que el hablante los haya procesado, de la misma forma en que la comprensión de éstos depende de su contexto actual y del recuerdo de otros contextos en los que el hablante los haya encontrado8.

5 En esta misma línea se inscribe el modelo de comprensión holística de Johnson-Laird (1983, 1988). 6 Para una visión global sobre los prototipos y la caracterización lingüística, véase Wierzbicka (1985, 1988), Tsohatsidis (1990), Lakoff (1987), Aitchinson (1994[1987]) y Taylor (1995[1989]). 7 En inglés británico se prefiere el mirlo (blackbird) como prototipo de pájaro (Aitchinson, 1994: 92). 8 Fillmore acusa la influencia de las teorías sobre la memoria episódica. Dichas teorías, introducidas por Tulving (1972) a principios de los setenta, sostienen que los hablantes almacenan las palabras junto con los contextos físicos y los co-textos en los cuales las han experimentado.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 235

Consideraciones en torno al procesamiento

235

Una de las características más sobresalientes de las fórmulas rutinarias es, precisamente, su dependencia contextual y situacional. Estas UFS tienen, como hemos visto anteriormente, unos contenidos sociales y expresivos que vinculan su aparición a circunstancias y situaciones concretas. De ahí que muchas de ellas tengan un carácter protocolario, casi obligatorio a veces. Tomadas en su conjunto, las fórmulas rutinarias constituyen una especie de “etiqueta social” o “manual de buenos modales” cuyo objetivo es el de facilitar la interacción y la comunicación entre los hablantes. Son, en definitiva, estructuras de conocimiento estereotipadas, aceptadas y compartidas socialmente, esto es, marcos cognitivos cuyo uso activa toda una serie de casillas con contenidos más o menos fijos, sancionados por la comunidad hablante. Como cualquier otra UF de este tipo, la fórmula inglesa de consentimiento Hear, hear está asociada indisolublemente a su marco de situación correspondiente. Los marcos para fórmulas rutinarias constan de casillas para: (a) los participantes en el acto comunicativo, donde se especifica el género, la edad, el papel social, la jerarquía y la autoridad de los interlocutores; (b) el escenario, esto es, las coordenadas espaciotemporales del acto; (c) la razón que motiva el uso de esa determinada fórmula; (d) las restricciones contextuales que gobiernan el uso de la fórmula, con especial referencia a la manera y orden de enunciación, a los niveles de uso y al grado de obligatoriedad de la unidad; así como (e) los gestos, movimientos o cualquier otro tipo de acción asociada a esta fórmula. El análisis que ofrecemos en el cuadro de las páginas siguientes refleja el marco prototípico que regula el funcionamiento de la fórmula Hear, hear.

4. Algunas implicaciones para la didáctica de la traducción Las investigaciones acerca de los aspectos cognitivos del procesamiento textual no han pasado desapercibidos en traducción. En concreto, los modelos ascendentes han influido en el análisis del TO con vistas a su comprensión y posterior traducción a la LM (cf. Nord, 1991): [...] translation begins with the text-in-situation as an integral part of the cultural background, whereby text-analysis proceeds from the macrostructure of the text to the micro-unit of the word, this being seen, not as an isolatable item, but in its relevance and function within the text (Snell-Hornby, 1988: 2).

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 236

236

Capítulo XII

HEAR, HEAR! I. PARTICIPANTES Género Edad Papel social Jerarquía Autoridad Familiaridad

II. ESCENARIO Tiempo Lugar

9

La fórmula puede ser usada independientemente del género de los interlocutores. Estos suelen ser adultos, aunque no hay restricciones por diferencia de edad entre los mismos. El emisor es típicamente un político9, frecuentemente un parlamentario, o una persona de cierto estatus social10, en relación con lo dicho por otro interlocutor (generalmente de su propio partido, de ideología semejante o de ideas afines) de igual jerarquía y autoridad, ante la presencia de varios interlocutores. La fórmula no indica familiaridad entre los hablantes, salvo que se trate de un uso irónico11.

No hay restricciones temporales. Esta fórmula es propia de debates o intervenciones públicas.

Sirva como ejemplo el siguiente intercambio: SICINIUS: Well, is he our man? 1ST CITIZEN: He’s got our vote. BRUTUS: Let’s hope he deserves it. 2ND CITIZEN: Hear, hear, to that. But it seemed to me, he didn’t think much of anyone, not himself even (APCIR, 46).

10 Véase el siguiente ejemplo, donde varios miembros de la Universidad discuten sobre un compañero:

‘Commited?’ said the Head of Catering with a snort. ‘Commited to what? Abortion, Marxism or promiscuity? It’s bound to be one of the three. I’ve yet to come across a Liberal Studies lecturer who wasn’t a crank, a pervert or a red-hot revolutionary and a good many have been all three.’ ‘Hear, hear,’ said the Head of Mechanical Engineering, on whose lathes a demented student had once turned out several pipe bombs (WILT, 12). 11 Esta fórmula también es frecuente en situaciones de discusión entre personas allegadas, creando un efecto irónico y humorístico. En el siguiente ejemplo, Norman está muy divertido por la seriedad que está tomando la discusión entre Ruth y su hermana; por ello hace uso de esta fórmula de asentimiento para apoyar a su mujer de forma irónica:

RUTH: You imply it. You use those children like some awful weapon. I alone who have borne children know the true meaning of suffering. NORMAN: Hear! Hear! (TM, 74)

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 237

Consideraciones en torno al procesamiento

III. MOTIVACIÓN Razón

IV. RESTRICCIONES CONTEXTUALES Secuenciación12 Niveles de uso Obligatoriedad

V. ACCIONES CONCOMITANTES Gestos Movimientos

237

El hablante A desea expresar su aprobación y su conformidad con lo que dice el hablante B, y apoyarle de esta manera frente a la posible oposición de otros interlocutores. El hablante A usa esta fórmula una vez que el hablante B ha empezado a hablar, al cual interrumpe o cuyo turno solapa, tras la idea u opinión con la cual está de acuerdo. Está unidad está restringida en el nivel diastrático, pues requiere cierta formalidad. Nótese, no obstante, un uso informal de la fórmula con connotaciones irónicas y jocosas. En el nivel diatópico, esta unidad está restringida a la variedad británica. Esta fórmula no es obligatoria.

En debates parlamentarios el uso de esta fórmula lleva asociado un leve golpear el escaño con papeles o documentos. En otros contextos, no se dan acciones concomitantes asociadas a esta fórmula.

La aprehensión holística del significado de las palabras y la activación del conocimiento almacenado en el lexicón mental ha sido objeto de considerable atención. Snell-Hornby (1988) y Handwerker (1988) han aplicado la teoría de los prototipos al campo de la traducción. Algunos de estos autores también han investigado el uso del modelo cognitivo de Fillmore (Vannerem y Snell-Hornby, 1986; Snell-Hornby, 1988; Vermeer y Witte, 1990). En concreto, Kussmaul (1994, 1995) combina ambas teorías con el análisis componencial para dar cuenta de la supresión (o activación) de rasgos centrales o periféricos de las palabras y enunciados en los textos y las consecuencias derivadas para la actividad trans-

12 La secuenciación tiene que ver muy directamente con los guiones. Brown y Yule (1983: 243) han señalado que la diferencia entre éstos y los marcos reside en que estos últimos son tratados en general como estructuras de conocimiento esencialmente estables acerca del mundo, mientras que los primeros incorporan una secuencia estándar de acontecimientos en su descripción de la situación.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 238

238

Capítulo XII

lativa. El traductor debe decidir, en virtud de consideraciones pragmáticas, si reproduce en el TM los rasgos centrales (hard core), los periféricos (fuzzy edges), o ambos. Pone como ejemplo la palabra inglesa bedroom (‘dormitorio, habitación’) y su “equivalente” en alemán Schlafzimmer (‘dormitorio’). Los prototipos y las escenas evocadas por las dos palabras son parcialmente distintos en ambas lenguas: el concepto alemán activa una escena asociada a la noche, al dormir y al descanso, que representa una habitación con una serie de muebles (cama, armario, mesita de noche); en inglés, la habitación se destina además a otras actividades (escuchar música, leer, estudiar) y, en algunos contextos, como en los anuncios por palabras, se neutraliza con respecto a room (‘habitación’) pues se suprime el rasgo “contiene una cama”. En tales casos conviene traducir únicamente los rasgos periféricos, por lo que el equivalente más adecuado es una palabra más general: Zimmer (‘habitación’). Por otra parte, los esquemas y demás subtipos no han recibido demasiada atención en traducción, a pesar de su indudable importancia para el procesamiento del discurso. Diversos estudios han demostrado que las diferencias culturales de los esquemas interfieren de forma negativa en la comprensión y en la producción de segundas lenguas (Carrell, 1990a [1988]; Eisterhold, 1990; Friedlander, 1990). Ahora bien, la correcta aplicación de los esquemas conceptuales y formales tiene efectos positivos para la lectura en L2, ya que éstos facilitan y aumentan la comprensión y el recuerdo de los textos (Carrell, 1994; Floyd y Carrell, 1994). Por otra parte, Zaro Vera (1995) ha señalado los problemas que para la enseñanza de L2 y para la traducción se derivan de los distintos esquemas mentales asociados a la palabra inglesa pub y sus traducciones y adaptaciones al español. En opinión del autor, la teoría de los esquemas debería ocupar un lugar destacado en la didáctica de la traducción: “The relevance of schema theory in FL and Translation teaching programmes seems to be beyond dispute” (Zaro Vera, 1995: 45). Idéntica opinión comparte Wills (1996), que dedica un capítulo entero de su última obra a la teoría de los esquemas y las posibles aplicaciones de ésta para los Estudios de Traducción en general. Ciertamente ha de tenerse muy en cuenta la especificidad cultural de los esquemas en el ámbito de la traducción. Así, un TO puede ser coherente en la situación comunicativa original, y para los destinatarios originales, sobre la base de un esquema determinado. Pero puede ocurrir que dicho texto deje de ser coherente (y por tanto interpretable) en la comunidad de llegada si ésta carece del esquema pertinente o bien activa otro distinto. Imaginemos un texto inglés donde se hace referencia o se describe el darse un baño. El guión típico para la noción having a bath en Gran Bretaña conlleva llenar la bañera de agua, meterse dentro, enjabonarse, enjuagarse, salirse y secar-

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 239

Consideraciones en torno al procesamiento

239

se con una toalla. En la India, esta misma noción activa un guión distinto, y, por ende, un escenario diferente, pues bañarse consiste en echarse un cubo de agua por la cabeza (Aitchinson, 1994: 94). Al producir el TM en hindi, el traductor deberá sopesar la necesidad de compensar estas diferencias y actuar en consecuencia, de manera que produzca un nuevo texto coherente y plenamente comprensible en la cultura de llegada. Volviendo a la fórmula que nos ocupa, resulta evidente que Hear, hear actualiza un marco cognitivo culturalmente específico que dificulta grandemente su trasvase al español. Así pues, a menos que el traductor, consciente o inconscientemente, disponga de toda la información contenida en la estructura de conocimiento descrita más arriba, difícilmente podrá aprehender los matices semánticos y pragmáticos que se derivan del uso de esta UF en el discurso y, mucho menos aún, podrá optar por un equivalente de tradución adecuado. Una vez haya tomado en consideración los datos anteriores y haya evaluado la carga semántica y funcional de la fórmula en el TO, podrá seleccionar un equivalente de entre las fórmulas de consentimiento del español, arbitrando formas de compensar las pérdidas originadas por el trasvase lingüístico-cultural, o bien hacer uso de paráfrasis u omisiones cuando ello sea necesario. Evidentemente, no estamos sugiriendo que cada vez que el traductor se enfrente con fórmulas rutinarias de difícil traducción deba optar por este tortuoso y lento camino para alcanzar una solución medianamente aceptable. Estaríamos, sin duda, ante una propuesta poco práctica y, desde luego, totalmente irrealista. Lo que sí puede tener más sentido es acudir a este recurso pedagógico en la enseñanza de la traducción. Dado que la estructura del marco de situación es perfectamente aplicable para el español (Corpas Pastor, 1996: 177-179), un buen ejercicio de clase sería usar el modelo para contrastar la descripción de ésta (u otra) fórmula inglesa con la de otras fórmulas funcionalmente equivalentes en español. De esta manera se hará ver al alumno que (1) existen lagunas fraseológicas de difícil traducción; (2) los mecanismos cognitivos del procesamiento lingüístico pueden ser útiles para solucionar algunos problemas de análisis; (3) la comparación rigurosa de cada casilla permite establecer diversos grados de equivalencia; y (4) este modelo constituye una herramienta adecuada para detectar la actualización o supresión de información relativa a alguna casilla en los niveles discursivo y textual. Este ejercicio, llevado a la práctica regularmente, se automatizará de forma que se convierta en una estrategia de las denominadas inconscientes que proporcionará a los futuros traductores e intérpretes una base sólida a partir de la cual tomar decisiones con respecto al TM y solucionar los problemas planteados por el uso de fórmulas rutinarias en el TO. Servirá, además, para afinar la sensibilidad de estos profesionales ante las eventuales dificultades originadas por la fre-

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 240

240

Capítulo XII

cuente desautomatización (modificación/manipulación) de las fórmulas rutinarias en el discurso13. Referencias bibliográficas AITCHINSON, J. (1994 [1987]): Words in the Mind. An Introduction to the Mental Lexicon. 2ª ed. Oxford: Blackwell. ARMSTRONG, S.; GLEITMAN, L., y GLEITMAN, H. (1983): “What some concepts might not be”, en: Cognition 13, 263-308. AYCKBOURN, A. (1977 [1975]): Table Manners, en The Norman Conquest. A Trilogy of Plays. Harmondsworth, Middlesex: Penguin [TM]. BADDELEY, A. (1992 [1986]): Working Memory. Bristol: Oxford Science Publications. BAKER, M. (1992): In Other Words: A Coursebook on Translation. Londres: Routledge. BARLETT, F. C. (1932): Remembering.Cambridge: Cambridge University Press. BROWN, G., y YULE, G. (1983): Discourse Analysis. Harlow: Longman. CARBONELL BASSET, D. (1995): Diccionario fraseológico. Inglés-Castellano. CastellanoInglés. Barcelona: Ediciones del Serbal [DFIC]. CARRELL, P. L. (1983): “Some issues in the role of schemata, or background knowledge, in second language comprehension”. Reading in a Foreign Language 1/2, 81-92. — (1990 [1988]): “Some causes of text-boundedness and schema interference in ESL reading”, en: CARRELL, P.L.; DEVINE, J., y ESKEY, D. (eds.), Interactive Approaches to Second Language Learning. Cambridge: Cambridge University Press, 123-134. — (1994 [1990]): “Awareness of Text Structure: Effects on Recall”, en: CUMMING, A. H. (Ed.), Bilingual Performance in Reading and Writing. Ann Arbor: Language Learning; Filadelfia: John Benjamins, 23-41. CORPAS PASTOR, G. (1996a): “La fraseología en los diccionarios bilingües”, en: ALVAR EZQUERRA, M. (Ed.), Estudios de Historia de la Lexicografía del Español. Málaga: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 167-182. — (1996b): Manual de fraseología española. Madrid: Gredos. — (1996c): “The Bilingual Dictionary: Friend or Foe?”, en PÉREZ GUERRA, J.; CANEDA CABRERA, M.T.; DAHLGREN, M.; FERNÁNDEZ-COLMEIRO, M.T.; VARELA BRAVO, E.J. (eds.), Actas del XIX Congreso Internacional de la Asociación Española de Estudios Anglo-norteamericanos, Vigo: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 201-204.

13

El siguiente fragmento ilustra la manipulación creativa de esta fórmula en contexto: 2ND CITIZEN: What’s he on about? We only want to ‘hear’ from you. Wages, prices, schemes, rehabilitation works, hours, conditions. CORIOLANUS: You shall, my friend. 1ST CITIZEN: Hear, hear. 2ND CITIZEN: What are you ‘hear, hearing’? (APCIR, 45)

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 241

Consideraciones en torno al procesamiento

241

— (1997): “Grados de equivalencia translémica de las locuciones en inglés y en español”, en: SOLA, R. J.; LÁZARO, L. A., y GURPEGUI, J. A. (eds.), Actas del XVIII Congreso de AEDEAN (Alcalá de Henares, 15-17 diciembre 1994). Alcalá de Henares: Servicio de Publicaciones de la Universidad, 335-341. CORPAS PASTOR, G., y MORENO ORTIZ, A. (1995): “Diseño de una base de datos fraseológica para la traducción asistida por ordenador (TAO)”, en: MARTÍN VIDE, C. (Ed.), Actas del XI Congreso de Lenguajes Naturales y Lenguajes Formales. Barcelona: PPU, 389-396. COWIE, A. P.; MACKIN, R., y MCCAIG, I. R. (1993): Oxford Dictionary of English Idioms (edición revisada del Oxford Dictionary of Current Idiomatic English, vol. II: Phrase, Clause, and Sentence Idioms, 1983, por los mismos autores). Oxford: Oxford University Press [ODOEI]. CROWTHER, J. (1995): Oxford Advanced Learner’s Dictionary of Current English (5ª ed.; 1ª edición 1948). Oxford: Oxford University Press [OALD]. DIJK, T. VAN;, y KINTSCH, W. (1983): Strategies of Discourse Comprehension.Nueva York: Academic Press. EISTERHOLD, J. C. (1990): “Reading-writing connections: toward a description for second language learners”, en: KROLL, B. (Ed.) (1990), Second Language Writing, Nueva York: Cambridge University Press, 125-137. EMMOT, C. (1994): “Frames of Reference: contextual monitoring and the interpretation of narrative discourse”, en: COULTHARD, M. (Ed.), Advances in Written Text Analysis. Londres: Routledge, 34-51. FILLMORE, C. (1976): “Frame Semantics and the Nature of Language”, en: HARNARD, J., et al. (eds.), Origins and Evolution of Language and Speech. Annals of the New York Academy of Sciences. Vol. 280. Nueva York, 20-32. — (1977): “Scenes-and-Frames Semantics”, en: ZAMPOLLI, A. (Ed.), Linguistic Structure Processing. Amsterdam: North Holland, 55-88. FLOYD, P., y CARRELL, P. L. (1994): “Effects on ESL Reading of Teaching Cultural Content Schemata”, en: CUMMING, A. H. (Ed.), 309-329. FOWLER, H., y FOWLER, F. G. (Eds.). (1983 [1982]): The Concise Oxford Dictionary of Current English. 7ª edición. Oxford: Oxford University Press [COD]. FRIEDLANDER, A. (1990): “Composing in English: effects of a first language on writing in English as a second language”, en: KROLL, B. (Ed.), 121-132. GALIMBERTI, B., y ROY, R. (Eds.) (1994): The Oxford Spanish Dictionary. Oxford: Oxford University Press [OSD]. GÁMEZ, T. DE (Ed.). (1973): Simon and Schuster’s International Dictionary, English-Spanish, Spanish-English. Nueva York: Simon and Schuster. [SAS] GARCÍA-PELAYO, F. (1996): Multimedia Auzou Diccionario Universal. Español-Inglés. Inglés-Español. Madrid: SGEL [MADU]. GARCÍA-PELAYO Y GROSS, R. (Ed.). (1983): Gran Diccionario Español-Inglés, InglésEspañol. Marsella, México: Larousse [LGD]. GOOCH, A., y GARCÍA DE PAREDES, A. (Eds.) (1990 [1978]): Cassell’s Spanish Dictionary. Spanish-English. English-Spanish. Nueva York: MacMillan Publishing Company [CSED].

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 242

242

Capítulo XII

HANDWERKER, B. (1988): “Wortbedeutung und Textverstehen”, en: ARNTZ, R. (Ed.), Textlinguistik und Fachsprache. Hildesheim: Olms, 333-347. JOHNSON-LAIRD, P.N. (1983): Mental Models: Towards a Cognitive Science of Language, Inference and Consciousness. Cambridge: Cambridge University Press. — (1988): The Computer and the Mind: An Introduction to Cognitive Science. Londres: Fontana. KERNERMAN, L. (Ed.) (1991): Password English Dictionary for Speakers of Spanish. Madrid: SM [PEDSS]. KIRPATRICK, E. M. (Ed.). (1990): Vox Chambers English Learner’s Dictionary. Con traducción al español. Barcelona: Biblograf [VCELD]. KINTSCH, W. (1974): The Representation of Meaning in Memory. Potomac: Lawrence Erlbaum. KINTSCH, W., y DIJK, T.A. VAN. (1978): “Toward a model of text production and comprehension”. Psychological Review 85, 363-394. KONERDING, K.-P. (1993): Frames und lexikalisches Bedeutungswissen. Untersuchungen zur linguistischen Grundlegung einer Frametheorie und zu ihrer Anwendung in der Lexikographie. Tubinga: Max Niemeyer. KUSSMAUL, P. (1994): “Semantic Models and Translating”, en: Target 6 (1), 1-13. — (1995): Training the translator.Amsterdam, Filadelfia: John Benjamins. LAKOFF, G. (1987): Women, Fire and Dangerous Things: What Categories Reveal about the Mind. Chicago: University of Chicago Press. LEHNERT, W. G. (1979): “The role of scripts in understanding”, en: METZING, D. (Ed.), Frame Conceptions and Text Understanding. Berlín: Gruyter, 79-95. LONG, T. H. (Ed.). (1979): Longman Dictionary of English Idioms. Londres: Longman [LDOEI]. MAINGAIN, S. (1991): Longman Active Study Dictionary of English. Harlow, Essex: Longman [LASD]. MANDLER, J.M.; JOHNSON, N.S. (1977): “Remembrance of things parsed: story structure and recall”. Cognitive Psychology 9, 111-151. MCDERMOTT, A.; GOLDSMITH, P., y PÉREZ ALONSO, M. A. (Eds.) (1996): Diccionario Oxford Avanzado para Estudiantes de Inglés. Oxford: Oxford University Press [OAPEI]. MINSKY, M. L. (1975): “A framework for representing knowledge”, en: WINSTON, P. (Ed.), The Psychology of Computer Vision. Nueva York: McGraw-Hill, 211-227. NORD, C. (1991): Text analysis in translation. Amsterdam, Atlanta, GA: Rodopi. OSBORNE, J. (1973): A Place Calling Itself Home. Londres: Faber and Faber [APCIH]. PROCTER, P. (1995): Cambridge International Dictionary of English. Cambridge: Cambridge University Press [CIDE]. ROSCH, E. (1973): “Natural Categories”, en: Cognitive Psychology 4, 328-506. — (1975): “Cognitive representation of semantic categories”, en: Journal of Experimental Psychology: General 104, 192-233. — (1977): “Classification of real world objects: origins and representations in cognition”, en: JOHNSON-LAIRD, P. N., y WASON, P. C. (eds.), Thinking: Readings in Cognitive Science. Nueva York: Academic Press, 212-223.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 243

Consideraciones en torno al procesamiento

243

ROSCH, E., y LLOYD, B. B. (1978): Cognition and Categorization. Hillsdale, NJ: Lawrence Erlbaum Associates. RUMELHART, D. E. (1975): “Notes on a schema for stories”, en: BOBROW, D. G., y COLLINS, A. M. (eds.), Representation and Understanding: Studies in Cognitive Science. Nueva York: Academic Press, 211-237. SANFORD, A. J., y GARROD, S. C. (1981): Understanding Written Language. Chichester: John Wiley & Sons. SCHANK, R. C. (1982): Dynamic Memory. Cambridge: Cambridge University Press. — (1986): Explanation Patterns. Hillsdale, NJ: Lawrence Erlbaum. SCHANK, R. C., y ABELSON, R. (1977): Scripts, Plans, Goals and Understanding. Hillsdale, NJ: Lawrence Erlbaum. SEIDL, J., y MCMORDIE, W. (1988): English Idioms. 5ª ed. Oxford: Oxford University Press [EI]. SHARPE, T. (1978 [1976]): Wilt. Londres: Pan Books. [WILT] SINCLAIR, J. (Ed.). (1987): Collins Cobuild English Language Dictionary. Londres: Collins [CCELD]. SMITH, C. (Ed.) (1994 [1992]): The Collins Spanish Dictionary. Collins Diccionario Español-Inglés, Inglés-Español. 3ª ed. 2ª reimpresión., Glasgow y Nueva York: HarperCollins [CSD]. SNELL-HORNBY, M. (1996 [1988]): Translation Studies: An Integrated Approach. Amsterdam y Filadelfia: John Benjamins. SUMMERS, D. (Ed.). (1987 [1978]): Longman Dictionary of Contemporary English. Londres: Longman [LDOCE]. TAYLOR, J. R. (1995 [1989]): Linguistic Categorization. Prototypes in Linguistic Theory. 2ª ed. Oxford: Oxford University Press. TSOHATSIDIS, S. (Ed.) (1990): Meanings and Prototypes: Studies in Linguistic Categorization. Londres: Routledge. TULVING, E. (1972): “Episodic and Semantic Memory”, en: TULVING, E., y DONALDSON, W. (eds.), Organization and Memory. Nueva York: Academic Press, 383-403. — (1985): “How Many Memory Systems Are There?”, en: American Psychologist 4 (4), 385-398. VANNEREM, M., y SNELL-HORNBY, M. (1986): “Die Szene hinter dem Text: ‘scenes-andframes semantics’ in der Übersetzung”, en: SNELL-HORNBY, M. (Ed.): Übersetzungswissenschaft. Eine Neuorienterung zur Integrierung von Theorie und Praxis. Tubinga: Francke Verlag, 184-205. VARELA, F., y KUBARTH, H. (1994): Diccionario fraseológico del español moderno. Madrid: Gredos [DFEM]. VERMEER, H. J., y WITTE, H. (1990): Mögen Sie Zistrosen? Scenes & frames & channels in translatorischen Handeln. Heidelberg: Gross. WEHMEIER, S. (Ed.) (1994 [1993]): Oxford Wordpower Dictionary. Oxford: Oxford University Press [OWD]. WIERZBICKA, A. (1985): Lexicography and Conceptual Analysis. Ann Arbor: Karoma Publishers. — (1988): The Semantics of Grammar. (Studies in Language Companion Series 18). Amsterdam, Filadelfia: John Benjamins.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 244

244

Capítulo XII

— (1996): Semantics. Primes and Universals. Oxford: Oxford University Press. WILLS, W. (1996): Knowledge and Skills in Translator Behaviour. Amsterdam, Filadelfia: John Benjamins. YULE, G. (1991 [1985]): The study of language. 2ª ed. Cambridge, Nueva York: Cambridge University Press. ZARO VERA, J. J. (1995): “Schema Theory and Sociocultural Contents in FL and Translation Teaching”, en: ELTS 3, 41-46.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 245

CAPÍTULO XIII FRASEOLOGÍA Y TRADUCCIÓN

1. Introducción El panorama actual de la fraseología se caracteriza, entre otras cosas, por una auténtica eclosión de aportaciones teóricas y aplicadas que dan fe de la buena salud de la disciplina. Tales estudios no han surgido por generación espontánea, más bien han sido fruto del desarrollo espectacular experimentado por la lingüística de base léxica durante los últimos treinta años. La traductología, a pesar de su relativa juventud, no ha permanecido ajena a estos avances, por lo que la traslación de unidades fraseológicas empieza a imponerse ya como objeto de estudio propiamente dicho. En las páginas que siguen a continuación vamos a plantear de forma esquemática la evolución que ha permitido el despegue actual de la disciplina. Veremos también el papel predominante de la lingüística contrastiva, los principales temas de investigación de la fraseología comparada, y qué aspectos han recibido mayor atención en los estudios fraseológicos de corte traductológico. Para concluir, ofreceremos un resumen de las ideas más relevantas desarrolladas en el trabajo. 2. Del “giro léxico” de los setenta a la fraseología comparada de los noventa El establecimiento de la fraseología1 como disciplina propia e independiente ha sido una de las consecuencias más importantes del “giro léxico” experimentado por la lingüística a comienzos de los años setenta. El advenimiento del análisis del discurso y de la lingüística del texto, los comienzos de la pragmática, la investigación en torno a la adquisición y procesamiento del lenguaje (L1 y L2), así como los avances en la descripción de las lenguas mediante corpus computerizados permitieron descubrir el papel central que desempeña el componente léxico de las lenguas, en contraposición a la primacía que hasta entonces había

1 Denominamos fraseología a la disciplina lingüística que estudia las unidades fraseológicas de las lenguas en todas sus vertientes.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 246

246

Capítulo XIII

ostentado la sintaxis. Dichos estudios pusieron en tela de juicio la supuesta libertad del hablante en la construcción del discurso, recalcando la naturaleza esencialmente estable de las lenguas y la importancia del “discurso prefabricado” como fuente de creatividad (Corpas Pastor, 1995 y 1998b; Salvador Liern, 1995). En este contexto, las unidades fraseológicas constituyen el paradigma de la repetición, la institucionalización, la fijación y la creatividad lingüística. Como corolario de su nuevo estatus, se impone, en primer lugar, una reflexión profunda en torno a la propia naturaleza de los universos fraseológicos en sincronía, en contraposición a los estudios aislados de corte diacrónico propios de etapas anteriores. Se trataba de perfilar los límites de la nueva disciplina, identificar los criterios de inclusión y definir el concepto de unidad fraseológica 2. Este primer estadio dio lugar a dos posturas encontradas, que se reflejaron en una concepción amplia y una concepción restringida de la fraseología (cf. Corpas Pastor, 1995 y 1988a; Ruiz Gurillo, 1997). Si tomamos el modelo de centro y periferia de la Escuela de Praga, podríamos decir que la fraseología en sentido estricto sólo incluiría el centro, esto es, el prototipo de UF (idiomática, fija, o ambas cosas, con función oracional); mientras que la fraseología en sentido amplio incluye tanto el centro como la periferia, basándose en los criterios de estabilidad e institucionalización de las combinaciones de palabras. Los intentos de clasificación de las unidades fraseológicas constituyen un segundo gran tema de investigación fraseológica. Surgen, así, distintas tipologías en las que se mezclan criterios de tipo semántico, sintáctico, pragmático y denominativo3. De las relaciones que se establecen entre las UFS y otras unidades del sistema de la lengua derivan otros estudios morfosintácticos y semánticos. De un lado, se han investigado las restricciones sintácticas y gramaticales de las UFS con respecto a otras unidades del sistema de la lengua, al tiempo que se las comparaban con otros fenómenos colindantes, como los compuestos y las combinaciones libres de palabras. De otro lado, se ha ahondado en otros temas de carác-

2 Entendemos por unidad fraseológica (UF) la combinación estable formada por al menos dos palabras gráficas, cuyo límite superior se sitúa en la oración compuesta. Las unidades fraseológicas (UFS) se caracterizan por su frecuencia, así como por la institucionalización, la fijación, la idiomaticidad y la variación que presentan en diverso grado. Se distinguen tres grandes grupos: colocaciones (prestar atención ≈ pay attention), locuciones (estirar la pata ≈ kick up the bucket) y enunciados fraseológicos, que a su vez se dividen en paremias (No es oro todo lo que reluce ≈ All that glitters is not gold) y fórmulas (Buenos días ≈ Good morning). 3 A este respecto, véase Corpas Pastor (1996) para el español; Hundt (1994), para el portugués; Fleischer (1997), Burger (1998) y Korhonen (1998) para el alemán; y Corpas Pastor (1995), Gläser (1996) y Howarth (1996), para el inglés. Melanie Higi-Wydler (1989: 3-50) da una visión clara y sucinta de las distintas taxonomías fraseológicas propuestas para el ruso, el inglés, el alemán y el francés.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 247

Fraseología y traducción

247

ter semasiológico, como la polisemia, la antonimia y la sinonimia, la expresividad, la denotación y la connotación. No obstante, hoy día se priman los aspectos estilísticos, discursivos, textuales y pragmáticos de las UFS, por un lado; y, en estrecha conexión con lo anterior, los mecanismos psicolingüísticos que explican la realidad psicológica de tales unidades, su procesamiento por parte de los hablantes, la base metafórica y semiótico-cultural, así como las manipulaciones que sufren frecuentemente al ser actualizadas en el discurso. Estos grandes temas de la investigación fraseológica, que corren paralelos a las distintas disciplinas lingüísticas, han encontrado eco en la enseñanza de segundas lenguas (cf. el modelo léxico de Nattinger y De Carrico, 1992) y, fundamentalmente, en la codificación lexicográfica de las UFS, dando lugar a una nueva subdisciplina: la fraseografía. Ahora bien, ¿de qué forma han afectado tales desarrollos a la fraseología comparada? La fraseología comparada o contrastiva persigue como objetivo general la determinación de las semejanzas y diferencias existentes entre los sistemas fraseológicos de dos o más lenguas; y, de modo particular, estudia las relaciones contraídas por sus respectivos universos fraseológicos o frásicos4, esto es, las correspondencias que se establecen entre una UF (o varias UFS) de una lengua dada y las unidades de la(s) otra(s) lengua(s) con la(s) cual(es) se compara5. La comparación interlingüística, ya sea global o particular, puede partir de uno o varios de los temas de investigación fraseológica mencionados anteriormente, a saber, (a) concepto de fraseología y caracterización de unidad fraseológica en las lenguas en cuestión; (b) comparación de las tipologías desarrolladas para los frásicos correspondientes; (c) estudios contrastivos de aspectos morfosintácticos, semasiológicos y semióticos; (d) comparación de rasgos discursivos, textuales, estilísticos y pragmáticos; y, por último, (e) identificación de los paralelismos y las discordancias relevantes en cuanto a los aspectos cognitivos del procesamiento de los sistemas fraseológicos objeto del estudio. No obstante, la fraseología comparada, pionera en la extinta Unión Soviética, no ha profundizado en todos los campos por igual. Por influencia de la fraseología general, se ha centrado en los temas que se exponen a continuación. 1. Grupos temáticos. Dentro de la descripción y comparación de grupos temáticos de unidades fraseológicas, destacan, entre otros, los formados por unidades que contienen entre sus componentes:

4 El frásico es el conjunto formado por todas las UFS que componen el sistema fraseológico de una lengua (cf. Guía i Marín, 1998 y 2000). (También denominado universo fraseológico). 5 La fraseología alemana también ubica aquí la comparación de tipo intralingüístico (variedades cronológicas, diafásicas, diastráticas y diatópicas, cf. Korhonen, 1998).

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 248

248

Capítulo XIII

(a) Denominaciones para el cuerpo humano o animal (somatismos). Ejemplos: mano: a mano alzada, de mano en mano, echar una mano, írsele a uno la mano, tener mano izquierda. hand: at first hand, give the glad hand, hand in glove, out of hand, an old hand.

(b) Denominaciones de animales. Ejemplos: pájaro: pájaro bobo, de pájaro, asarse los pájaros, matar dos pájaros de un tiro, haber volado el pájaro, quedarse como un pájaro, tener la cabeza a pájaros. bird: as free as a bird, do bird, an early bird, a bird in a gilded cage, a home bird, a lone bird, a rare bird, Fine feathers make fine birds.

(c) Colores. Ejemplos: blanco: dar en el blanco, de punta en blanco, en blanco y negro, parecerse en el blanco de los ojos, quedarse en blanco. white: Bleed white, a white elephant, swear black is white, the (great) white hope, white lie.

A menos que dichos componentes aporten algún matiz simbólico, etnolingüístico o intercultural (cf. Dobrovol’skij y Piirainen, 1997), tales estudios no dejan de ser una pura anécdota, sin mayor validez para la comparación de la fraseología de las distintas lenguas. Mayor valor tienen, empero, los estudios que toman como punto de partida UFS agrupadas de acuerdo con criterios semánticos o pragmáticos (cf. Dobrovol’skij, 1995 y 2000). Pongamos, por ejemplo, el campo léxico cuyo archisemema sería loco/insane: –estar como una cabra/regadera, estar ido, estar chocheando, faltar a uno un tornillo, perder la cabeza, secarse el cerebro. –have bats in the belfry, as nutty as a fruitcake, off one’s rockers, soft/weak in the head, out of one’s mind.

2. Universales fraseológicos. Otra gran línea de investigación dentro de la fraseología comparada es el establecimiento de universales fraseológicos a partir de las regularidades observables teniendo en cuenta la tipología estructural de las lenguas (cf. Roos, 1985; Dobrovol’skij, 1988; DurcËo, 1993; Corpas Pastor, 1995b y 2000; Stumpf, 1997). Existe una relación proporcional entre el grado de “analiticidad” de una lengua y la regularidad de su sistema fraseológico. Esto es, cuanto más analítica sea una lengua, mayor regularidad presentará su sistema fraseológico.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 249

Fraseología y traducción

249

Los rasgos comunes a los distintos frásicos se prestan a una subdivisión en tipos de universales. Constituyen universales fraseológicos propiamente dichos la presencia de palabras diacríticas en el inventario de UFS, la formación de series a partir de un mismo constituyente base, las variantes fraseológicas y la existencia de una escala gradual de idiomaticidad y restricción combinatoria. A los universales léxico-fraseológicos pertenecen las relaciones de homonimia, polisemia, sinonimia y antonimia que mantienen las UFS entre sí y con otras unidades léxicas del sistema de la lengua, con las cuales llegan a formar los correspondientes campos léxicos. La tendencia a denotar fenómenos que marcan una experiencia emocional intensa o simpatía externa en grado máximo; las valoraciones negativas; la universalidad del concepto o la imagen subyacentes; y las operaciones de pensamiento universales que determinan la interpretación de una UF ilustran los universales determinados extralingüísticamente (o semántico-culturales). 3. Préstamos interlingüísticos. Los préstamos interlingüísticos han llamado también la atención de los fraseólogos. Al comparar los frásicos de las distintas lenguas se observan UFS coincidentes en cuanto a su forma y a su contenido (cf. Wotjak, 1983; Negreanu, 1975; Ross, 1985; Vaporschiew, 1975; Hessky, 1987; Morvay, 1996; y Corpas Pastor, 2000a). Nos referimos concretamente a los europeísmos, cuyo origen común puede ser natural, cultural, o bien una mezcla de ambos. a) Europeísmos naturales. Los europeísmos naturales surgen a partir de la observación del mundo que nos rodea: el comportamiento de los seres vivos, forma y función de las partes del cuerpo humano y animal, descripción y efectos de los fenómenos naturales, etc. Citemos los siguientes ejemplos, que proceden de una práctica común en cetrería: Español

cortarle a uno las alas

Inglés

clip someone’s wings

Alemán

die Flügel stutzen/beschneiden

Francés

rogner les ailes de qqn.

Italiano

tarpare le ali a qualcuno

Rumano

A ti Ia aripile cuiva

Húngaro

vki szárnyát szegi vkinek6

6 Agradecemos al Dr. D. Károly Morvay los ejemplos en húngaro y a D.ª Dana Orghidan, los ejemplos para el rumano.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 250

250

Capítulo XIII

b) Europeísmos culturales. En este caso, las UFS proceden de fuentes comunes de la cultura europea, como son las traducciones de la Biblia y los autores clásicos en las distintas lenguas vernáculas, las traducciones y referencias intertextuales a las obras maestras de la literatura, el folklore popular, etc. Los ejemplos siguientes tienen su origen en la mitología griega: Español

La caja de Pandora

Alemán

die Büchse der Pandora

Francés

boîte de Pandora

Italiano

il vaso di Pandora

Inglés

Pandora’s box

Rumano

cutia Pandorei

Húngaro

Pandora szelencéje

c) Europeísmos naturales-culturales. Se trata de UFS encuadrables bajo ambos subtipos a la vez, ya que comparten un mismo origen común por partida doble: por un lado, pertenecen al acervo cultural europeo, y, por otro, reflejan una misma concepción de la realidad. Por ejemplo las UFS Ojo por ojo y diente por diente ≈ An eye for eye, and a tooth for a tooth (Éxodo 21, 23-25) proceden de la Biblia y, al mismo tiempo, incluyen somatismos idénticos como parte integrante de sus respectivas composiciones léxicas. Español

Ojo por ojo y diente por diente

Francés

Oeil pour oeil, dent pour dent

Italiano

Occhio per occhio, dente per dente

Inglés

An eye for an eye, and a tooth for a tooth

Alemán

Auge um Auge, Zahn um Zahn

Húngaro

Szemet szemért, fogat fogért

Rumano

Dinte pentru dinte

4. Correspondencias interlingüísticas. Por último, uno de los ejes centrales de la fraseología comparada, quizá el más representativo, es la búsqueda de

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 251

Fraseología y traducción

251

correspondencias interlingüísticas o equivalentes fraseológicos. Frecuentemente los estudios de fraseología contrastiva se han reducido al establecimiento de relaciones de equivalencia entre UFS de dos o más lenguas. Tradicionalmente se habla de una escala gradual, que va desde la equivalencia nula (EN) a la equivalencia total (ET), pasando por distintas modalidades de equivalencia parcial (EP)7. La inequivalencia fraseológica se produce cuando la LM, por razones lingüísticas, históricas o socio-culturales, no dispone de una UF correspondiente para una determinada unidad fraseológica de la lengua origen (UFO). Así pues, la equivalencia nula supone ausencia de correspondencia y, por tanto, asimetría absoluta en la LM, con respecto a todos los niveles significativos de la UFO en cuestión. Esta parte idiosincrásica e irreductible del frásico de las lenguas se explica por el tipo de motivación subyacente en cada caso: a) Fuentes literarias. Parte de las lagunas fraseológicas entre el inglés y el español provienen de fuentes literarias y citas de personajes ilustres no compartidas por ambas lenguas, como ships that pass in the night (‘people who meet each other only once, or people who meet but do not become very intimate’, NTC) –del poema de Henry Wadsworth Longfellow, Tales of a Wayside Inn–; y Decíamos ayer, frase con la que empezó Fray Luis de León su primera lección tras cuatro años de cárcel por haber traducido sin autorización el Cantar de los Cantares (Clarasó, 1978 [1970]), en español. b) Estereotipos. Los estereotipos nacionales y supranacionales también ocupan un lugar destacado en la formación de UFS sin correspondencias en otras culturas que no comparten tales concepciones valorativas. Por ejemplo, en español contestar a la gallega atribuye a los gallegos “esa loable habilidad de saber contestar con evasivas a una pregunta indiscreta o a la que no se considera prudente responder” (Cantera Ortiz de Urbina, 2000: 438). Por su parte, la comunidad anglosajona comparte una visión un tanto negativa del pueblo holandés –por no decir xenófoba, ya que se les tacha de cobardes, bebedores, tacaños, severos, y, al mismo tiempo, también de ingenuos–, como se desprende de las siguientes UFS: Dutch courage (‘the courage that you get by drinking alcoholic drinks; an informal expression’, CCELD), double Dutch (coll speech, words, etc., that cannot be understood’, LDOEI), I’m a Dutchman! (‘used to express incredulity’, OADLD), a Dutch treat (‘a meal, an entertainment, etc. at which each person

7 Se trata de las teorías clásicas de RajchsËtejn (1980) y Soloducho (1982), las cuales fueron retomadas posteriormente por otros fraseólogos y traductólogos, como, por ejemplo, Gläser (1985), Higi-Wydler (1989), Eismann (1989), Földes (1990), Hessky (1993), DurcËo (1994), Korhonen (1991, 1995), Corpas Pastor (1997 y en prensa), Dobrovol’skij (1997) y Mellado Blanco (2000), entre muchos otros autores.

CORPAS-03 25/2/03 10:13 Página 252

252

Capítulo XIII

pays for himself’, OADLD), y a Dutch uncle (‘not fml a man who talks to someone severly and openly, as if he were the person’s father or uncle’, LDOEI). Un apartado especial lo constituye la fraseología onomástica, donde el nombre del personaje (real o ficticio) adquiere un valor simbólico y representativo de alguna cualidad, defecto, habilidad o disposición especial que raras veces halla parangón en la comunidad meta. Por ejemplo, en la locución española ser un Juan Lanas (‘inf. Persona de natural tranquilo, DFEM) el nombre propio representa la figura “del hombre sencillo y simple, fácil de engañar” (Cantera Ortiz de Urbina, 2000: 441). La locución inglesa a Florence Nightingale (‘not fml a person who looks after someone who is ill; a nurse’, LDOEI) procede del nombre de una famosa y abnegada enfermera británica, precursora de la enfermería moderna, que prestó sus servicios en distintos hospitales durante la guerra de Crimea. c) Costumbres y creencias. Las preferencias de la cultura anglosajona por el juego y las apuestas en general, y por el mundo de los caballos en particular, han dado origen a lagunas fraseológicas del tipo a dark horse (‘coll a person or thing whose true character or worth is unknown but may be better than is thought [...]