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Spanish Pages 74 [71] Year 2019
CHISTES LINGÜÍSTICOS DE COMPONENTE CULTURAL PARA LA ENSEÑANZA DEL ESPAÑOL
MIGUEL GARCÍA VIÑOLO
CHISTES LINGÜÍSTICOS DE COMPONENTE CULTURAL PARA LA ENSEÑANZA DEL ESPAÑOL
CHISTES LINGÜÍSTICOS DE COMPONENTE CULTURAL PARA LA ENSEÑANZA DEL ESPAÑOL MIGUEL GARCÍA VIÑOLO
SERIE MANUALES PRÁCTICOS
© Miguel García Viñolo, 2019 Imagen de cubierta: OpenIcons © Editorial Verbum, 2019 ISBN: 9788490749555E Tr.ª Sierra de Gata, 5 La Poveda (Arganda del Rey) 28500 - Madrid Teléf.: (+34) 910 46 54 33 e-mail: [email protected] https://editorialverbum.es Todos los derechos reservados. Cualquier forma de reproducción, distribución, comunicación pública o transformación de esta obra solo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra
Índice Chiste 1 .....................................................................................
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Chiste 2 ..................................................................................... 13 Chiste 3 ..................................................................................... 15 Chiste 4 ..................................................................................... 17 Chiste 5 ..................................................................................... 21 Chiste 6 ..................................................................................... 23 Chiste 7 ..................................................................................... 25 Chiste 8 ..................................................................................... 29 Chiste 9 ..................................................................................... 31 Chiste 10 ................................................................................... 33 Chiste 11 ................................................................................... 35 Chiste 12 ................................................................................... 37 Chiste 13 ................................................................................... 39 Chiste 14 ................................................................................... 41 Chiste 15 ................................................................................... 43 Chiste 16 ................................................................................... 45 Chiste 17 ................................................................................... 49 Chiste 18 ................................................................................... 51 Chiste 19 ................................................................................... 53 Chiste 20 ................................................................................... 55 Chiste 21 ................................................................................... 57 Chiste 22 ................................................................................... 59 Chiste 23 ................................................................................... 61 Chiste 24 ................................................................................... 63 Chiste 25 ................................................................................... 67 7
Chiste 1
Un adolescente entra por primera vez a una iglesia católica para confesarse. Observa cómo los feligreses se dirigen al confesionario y, una vez que conoce todo el procedimiento, se arrodilla frente al sacerdote diciendo: —Ave María purísima. Y el padre contesta: —Sin pecado concebida. Dime, hijo mío, ¿de qué te arrepientes? 9
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El joven responde: —Padre, he cometido muchos pecados: agresiones, insultos, robos con intimidación…; ¿qué me aconseja? A lo que el cura muy preocupado le pide: —Ora, hijo mío, ora. Y el chico muy extrañado del consejo que le da el cura, mira su reloj y le dice: —Las once y media, padre. Desde un punto de vista lingüístico, el chiste juega con una homonimia en su forma oral entre las palabras ora y hora. En este sentido, ambas palabras se pronuncian exactamente igual, aunque ambas son categorías gramaticales distintas con significados distintos. La primera palabra «ora» es el imperativo (tú) del verbo orar, mientras la segunda palabra «hora» es un sustantivo, unidad de tiempo. Según el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE) tenemos diferentes acepciones ―cada uno de los significados de una palabra según los contextos en que aparece― en las siguientes categorías gramaticales: Orar: Dirigirse mentalmente o de palabra a una divinidad o a una persona sagrada, frecuentemente para hacerles una súplica. Hora: Tiempo que equivale a 60 minutos, es decir, 3600 segundos (símbolo h).
El chiste está enmarcado dentro de un componente cultural religioso. Según los datos publicados en 2017 por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS):
El 68,7 % de los españoles se declara católico; el 16,9 % creyente; el 9,3 % ateo y el 2,8 % creyente de otra religión.
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Normalmente, el sacerdote después de la confesión suele mandarnos un Padre Nuestro o bien tres Aves Marías, como parte de la penitencia para el perdón de nuestros pecados: PADRE NUESTRO
AVE MARÍA
Padre Nuestro, que estás en el cielo; santificado sea tu nombre; venga a nosotros tu reino; hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal.
Dios te salve, María, llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte.
Amén.
Amén.
Chiste 2
Un chaval con dos copas de más estaba gritando encima del Puente de Triana de Sevilla: —¡Una ballena! ¡Una ballena! La gente que pasaba por allí se quedaba mirando el río sin decir nada. De repente, un señor le dice: —¡Hombre, que son dos cajas de cerveza Cruzcampo! Entonces el chico responde: — Sí, pero… una va llena. En este chiste entran en contacto al menos dos niveles lingüísticos. En primer lugar, tenemos el nivel fonético-fonológico cuando hablamos del fonema /b/ frente al grafema «v». Apenas existe una diferencia de pronunciación entre b y v, solo en la escritura. En segundo lugar, tenemos el nivel semántico que está
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compuesto por una homonimia en su forma oral del sustantivo «ballena», frente al verbo ir + adjetivo (va llena). Según el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE): Ballena: 1. f. Cetáceo, el mayor de todos los animales conocidos, que llega a crecer hasta más de 30 m de longitud. Su color es, en general, oscuro por encima y blanquecino por debajo. Vive en los mares, preferentemente en los polares. Llena/o: 1. adj. Ocupado hasta el límite.
La interpretación personal de esta historieta aguda y disparatada es la siguiente: Se trata de un chiste andaluz, no solo por el componente cultural toponímico del Puente de Triana sobre el río Guadalquivir, sino también por su contenido exagerado, característico de los andaluces para llamar la atención. Cuando el joven borracho está exclamando «¡Una ballena! ¡Una ballena!» sobrepasa los límites de aquello que es considerado como cierto o sensato, puesto que una ballena en el río Guadalquivir no es muy común o corriente. La marca de cerveza Cruzcampo fue creada en Sevilla en 1904. En 1991 fue adquirida por Guinness, pero desde el año 2000 pertenece al grupo holandés Heineken España S.A.
Chiste 3
Un joven fue a la consulta de un médico porque tenía un dolor muy fuerte de estómago. —Doctor, me duele aquí. Y el médico le contesta: —Pues, póngase allí. Para entender este chiste lingüísticamente debemos situarnos en el nivel de la pragmática. Se trata de un contexto situacional o situación comunicativa, que es entendida por parte de los interlocutores (médico-paciente) de manera diferente. Por un lado, el paciente va al médico porque siente un fuerte dolor de estómago. Por otro lado, el doctor le aconseja al paciente que se cambie de lugar porque así no tendrá ese sufrimiento. En este chiste aparecen dos adverbios demostrativos de lugar: «aquí» y «allí». No obstante, estos adverbios en algunos países 15
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hispanoamericanos ―conjunto de los países americanos donde el español es la lengua oficial― se dice acá en lugar de aquí, y allá en lugar de allí. Además, a mis estudiantes les explico que en la lengua española tenemos un adverbio demostrativo intermedio entre aquí y allí, que es ahí. Por tanto, la clasificación es la siguiente: aquí: en este lugar → ¡Aquí no hay quien viva! ahí: en ese lugar → ¡Cuidado con ese perro que está ahí! allí: en aquel lugar → Allí en España la gente echa la siesta.
Chiste 4
Un aficionado a la pesca estaba pescando en la playa de Santa María (Cádiz). Entonces un turista que paseaba tranquilamente por la orilla del mar le pregunta: —¿Pican los peces? A lo que el pescador respondió: —No pican, son mansos. En este chiste corto, aunque no por ello menos importante, entraría la pragmática como disciplina lingüística. Pues, se trata de un enunciado en que la comunicación es interpretada de manera distinta por parte de los interlocutores. Esto se debe a que el verbo «picar» es concebido de dos formas diferentes. Una primera interpretación es la del señor que viene caminando por la playa cuando le pregunta al pescador si los peces están mordiendo 17
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el anzuelo. La segunda interpretación ―surrealista o irónica, no lo sabemos bien― es la del pescador cuando contesta que son mansos (animales que no son bravos o salvajes; sino dóciles, domésticos, tranquilos o accesibles al trato humano).
Lo ideal, según los expertos, sería que cada palabra tuviera su sentido y cada sentido su palabra. Pero ocurre que casi todas las que usamos tienen varios significados ―este fenómeno se llama polisemia―. También hay palabras de diverso origen que acaban sonando igual, lo que recibe el nombre de homonimia. Un vocablo que tiene muchas acepciones es el verbo picar. Las aves pican debido a que tienen pico, cosa que también tienen las montañas, así como picachos que, sin embargo, no pican. Pican, eso sí, los insectos y el picador con su garrocha en el morrillo del toro. Otro que pica es el obrero, con el pico y la piqueta. También pica el pez en el anzuelo, y el ingenuo que se deja embaucar. Pica el billete el revisor, y nosotros picamos cuando comemos
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entre horas. El sol lo hace en verano y el alcohol en la herida, cuando escuece. Hay pimientos picantes, como los chistes, y se pica la cebolla y la lechuga en la ensalada. Hay picapedreros y picapleitos. La caries pica los dientes y las polillas la ropa. Se pica el metal cuando se corroe y el vino cuando se avinagra. Uno puede poner una pica en Flandes o picar muy alto. También se tienen cincuenta años y pico, y hay cosas que cuestan un pico. Se pica el mar, el caballo, los aviones ―que caen en picado―, y las bolas de billar, lo que puede hacer que quien más quien menos se ponga picajoso o acabe por picarse. Y, para terminar, citamos al profesor Buenaventura Mínguez, quien en su libro Mi Habla pone punto final a un artículo sobre este asunto con un inapelable: “Hay pico de loro y pico de botijo; picadero de caballos y piquera para las colmenas; las campanas repican y el piquete… fusila”. Jesús Marchamalo
Chiste 5
Un obrero de la construcción llega a su casa después del trabajo y se encuentra una nota pegada en la puerta del frigorífico que dice: —«Me voy porque esto no funciona. María» El obrero lee con detenimiento la nota que le ha dejado su mujer y empieza a mirar el frigorífico por todas partes buscando alguna posible avería. Después de un rato, el hombre llama a su mujer por teléfono, y le dice: —Cariño, he estado revisando todo el frigorífico; y esto funciona perfectamente. Desde una vertiente lingüística, el chiste está enmarcado dentro de la pragmática como disciplina del lenguaje. De este modo entendemos un contexto situacional que es interpretado de forma distinta por la pareja. 21
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Por un lado, la esposa está harta de que su esposo siempre esté trabajando y nunca esté en casa. Por eso, su mujer decide terminar la relación de una manera tan fría con su marido, es decir, con una nota puesta en el frigorífico. Por otro lado, el marido solo piensa en trabajar, y cuando llega a casa solo quiere descansar, sin complacer los deseos de su mujer. Por esta razón, el marido no sospecha que la relación se está debilitando. Desde un aspecto pragmático, el pronombre demostrativo «esto» puede referirse tanto a la relación entre el hombre y la mujer, como al electrodoméstico que produce frío para conservar alimentos u otras sustancias.
Chiste 6
Un muchacho fue a ver a un vidente famoso porque quería conocer su futuro. Cuando llegó a la casa, este le dijo: —Yo soy vidente, y por 10 euros te digo todo el futuro. El chico, muy curioso por saber su futuro, acepta. —¿10 euros por el futuro?, vale. Entonces el vidente empezó a decirle el futuro simple del verbo ser: —Yo seré vidente, tú serás vidente, él será vidente, nosotros seremos videntes… Desde un punto de vista lingüístico, el chiste está enmarcado dentro de la pragmática, cuyo objeto de estudio es el uso del
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lenguaje en función de la relación que se establece entre enunciado-contexto-interlocutores. De este modo entendemos un contexto situacional que es interpretado de manera distinta entre el vidente y el cliente. En el primer sentido del enunciado: «Yo soy vidente…», el astrólogo se refiere al tiempo gramatical del verbo «ser» en presente y no a la definición del término como lo que está por venir o bien lo que ha de suceder con el tiempo. Sin embargo, el cliente entiende el primer enunciado en el contexto de una persona que va a consultarse para conocer su futuro. En el segundo sentido del enunciado: «yo seré vidente…» el astrólogo hace referencia al futuro simple del verbo «ser» exclusivamente.
Chiste 7
Un joven fue a la consulta de un médico y le dijo: —Doctor, últimamente me encuentro más gordo y más feo. ¿Qué tengo? Y el médico le contesta: —Mucha razón, señor. En este chiste de nuevo está presente la pragmática como disciplina lingüística. Se trata de un contexto situacional o situación comunicativa, que es entendida por parte de los interlocutores (médico-paciente) de manera diferente. Por un lado, el paciente va al médico porque no se encuentra bien; es decir, nota que ha engordado y quiere saber qué tiene como diagnóstico. Por otro lado, el médico entiende el enunciado de forma distinta; es decir, en el sentido de tener razón o bien estar en lo cierto. 25
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Estas son algunas de las locuciones extraídas del DRAE con el término «razón»: atender alguien a razones 1. loc. verb. Quedar convencido por los argumentos que se le presentan. dar la razón a alguien 1. loc. verb. Concederle lo que dice, confesarle que obra racionalmente. dar razón 1. loc. verb. noticiar. en razón a, o en razón de 1. locs. prepos. Con arreglo a, en función de. Se riegan las plantas en razón de la humedad del ambiente. 2. locs. prepos. Por causa de. Había grandes medidas de seguridad en razón de la amenaza terrorista. 3. locs. prepos. En lo relativo a, por lo que toca a. Tanto en razón del fondo como de la forma. entrar alguien en razón 1. loc. verb. Darse cuenta de lo que es razonable. fuera de razón 1. loc. adv. Sin justificación. meter a alguien en razón 1. loc. verb. Obligarlo a obrar razonablemente. no atender alguien a razones 1. loc. verb. No quedar convencido por los argumentos que se le presentan. perder alguien la razón 1. loc. verb. Volverse loco. loc. verb. Hacer o decir algo por lo que perjudica su causa o su derecho.
CHISTES LINGÜÍSTICOS
ser razón algo 1. loc. verb. Ser justo, razonable. ¿No es razón que llore su desamparo? tener razón 1. loc. verb. Estar en lo cierto. tomar razón, o la razón 1. locs. verbs. Asentar una partida en cuenta o hacer constar en un registro lo que en él debe copiarse o anotarse.
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Chiste 8
En un pequeño pueblo de la Alpujarra granadina llamado Trevélez había un profesor impartiendo la asignatura de Lengua Española. De repente, el profesor lanza una pregunta de gramática al aire: —A ver chicos, ¿quién me dice dos nombres con tilde? Acto seguido, un alumno ve a dos mujeres ancianas del pueblo y responde: —Matilde y Clotilde. Por un lado, tenemos un punto de vista lingüístico, es decir, el chiste trata sobre la ortografía como disciplina lingüística, concretamente sobre la puntuación. En este sentido, se habla de uno de los signos diacríticos que se escriben sobre las letras para indicar algún rasgo o valor distintivo como son la tilde (´) y la diéresis (¨). 29
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Por otro lado, tenemos el punto de vista del alumno que relaciona los nombres con tilde a nombres de personas del pueblo. En este caso, el alumno menciona a dos mujeres mayores del pueblo llamadas Clotilde y Matilde. El componente cultural toponímico viene representado por dos topónimos: La Alpujarra granadina: comarca situada en la parte suroriental de la provincia de Granada. Trevélez: pueblo de la Alpujarra granadina con 758 habitantes. Famoso por el jamón serrano y por ser el pueblo más alto de España, si contamos la última casa del Barrio Alto (1694 m).
Como dato histórico de gran interés, se puede estudiar la rebelión de las Alpujarras (1568-1570), que fue un conflicto donde se enfrentaron los moriscos que vivían en esta comarca contra el reinado de Felipe II. Para saber más sobre la idiosincrasia de la gente de esta comarca recomiendo tanto leer el libro de Gerald Brenan (1957) Al sur de Granada, como ver la película Al sur de Granada (2003) del director Fernando Colomo.
Chiste 9
Había una vez un matrimonio que vivía en Écija (Sevilla), y una noche de verano le dice la mujer a su marido. ―Cariño, abre la ventana para que entre el fresco. Después de un rato, el fresco entró y se llevó todo el dinero, las joyas, la televisión de plasma, el ordenador portátil, etc. Desde una perspectiva lingüística jugamos con la homonimia de la palabra «fresco». En primer lugar, se hace referencia al fresco como un viento suave o brisa, es decir, un frío moderado. En segundo lugar, se refiere a la persona desvergonzada, es decir, aquella persona que toma las cosas sin pedir permiso. En este caso particular, el fresco es interpretado como el ladrón. El componente cultural toponímico viene representado por la ciudad de Écija ―el lugar más caluroso de toda España― comparada como la sartén de España. 31
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Según el DRAE una «sartén» es un recipiente de cocina, generalmente de metal, de forma circular, poco hondo y con mango largo, que sirve sobre todo para freír alimentos. En este sentido, tenemos una noticia perteneciente a un artículo sacado del periódico digital ABC que compara a Écija con una sartén: Las zonas más calientes de España Écija hace buena la tradición de «sartén» de España. Este verano han llegado a los 48ºC. La vida en la calle se paraliza de dos a seis de la tarde con la gente refugiada en casa. Fuera, el silencio quema. Daniel Pérez / ÉCIJA ABC (09/08/2010)
Chiste 10
Una cuchara iba andando por la calle. De repente, un cuchillo la vio y exclamó: —¡Ey, cuchara! La cuchara continuó andando sin pararse, ni mirar al cuchillo. Por ese motivo, el cuchillo pensó: “Parece que no escuchara”. Para explicar este chiste en un ámbito lingüístico debemos situarnos en el nivel léxico-semántico. En este sentido, vemos una relación o semejanza entre dos palabras por su forma o sonido. Esto es lo que en lingüística se conoce como paronimia. En este caso, tenemos la confusión terminológica que se produce entre el sustantivo «cuchara» y el verbo «escuchar» en imperfecto de subjuntivo. La agrupación de sílabas que alteran el significado de las palabras ―como en este ejemplo― es lo que se denomina en retórica: calambur. 33
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Vamos a ver cómo el calambur es utilizado para la construcción de algunos acertijos: Blanca por dentro, verde por fuera; si quieres que te lo diga, espera. (es pera) Oro parece, plata no es. ¿Qué es? (plátano) Este banco está ocupado por un padre y un hijo. El padre se llama Juan, y el nombre del hijo ya te lo he dicho. (Esteban) Dicen que son de dos, pero solo son de una. (dedos) No pienses en otras cosas, pues las tienes en el mar; o las ves llegar furiosas, o las ves mansas llegar. (olas)
Chiste 11
Un chaval va a la consulta de una doctora porque le había salido mucho pelo en su cuerpo. La doctora después de examinarlo le dice: — Joven, es usted todo vello. Y el chaval enrojecido le responde: — Gracias doctora, y usted muy linda. En este chiste se juega con una homonimia en su forma oral: «vello» y «bello». Abajo mostramos el significado de ambas categorías gramaticales según el DRAE: Bello: Que, por la perfección de sus formas, complace a la vista o al oído y, por extensión, al espíritu. Vello: Pelo que sale más corto y suave que el de la cabeza y de la barba, en algunas partes del cuerpo humano. B: Segunda letra del abecedario español, que representa el fonema consonántico bilabial sonoro. 35
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V: Vigesimotercera letra del abecedario español, que, al igual que la b, representa el fonema consonántico oclusivo bilabial sonoro. ¿Existió alguna vez el fonema /v/ en español? La RAE en su Diccionario Panhispánico de Dudas dice literalmente: «En el español medieval hay abundantes muestras de confusión entre una y otra grafía, prueba de su confluencia progresiva en la representación indistinta del mismo sonido, confluencia que era ya general en el siglo XVI. La pronunciación de la «v» como labiodental no ha existido nunca en español. Sin embargo, autores como Lapesa o Penny en su Variation and Change in Spanish parecen indicar que /b/ y /v/ eran fonemas distintos hasta el siglo XV, momento en el que la neutralización en solo /b/ (proveniente de las hablas del norte peninsular) se propagó a toda la península, pues en el sur de España aún se mantendría, en mayor o menor medida, la distinción entre /b/ y /v/. Por su parte, Ariza se inclina por que no existió /v/ en español».
Chiste 12
Un cochero sevillano estaba echando una siesta a las tres de la tarde del mes de agosto en su carruaje de caballos. De repente, una pareja inglesa le pide al cochero darles una vuelta por Sevilla. Este, un poco enfadado por interrumpirle la siesta y por hacerle trabajar a esas horas empieza a enseñarles Sevilla. Esto es la Giralda, esto es el Parque de María Luisa, esto es la Torre del Oro, esto es … Una vez que el cochero terminó el recorrido turístico por la ciudad, regresa al mismo lugar para descansar. Sin embargo, los ingleses le piden otra vuelta más. El cochero no entiende que los ingleses quieran dar otra vuelta por Sevilla con tanto calor. Por esta razón, el cochero les va a cobrar el doble de dinero por el recorrido. Una vez terminada la segunda vuelta, el cochero les dice el precio: 37
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―Son 200 euros. Los ingleses que no están de acuerdo con el precio le responden: ―Muy caro, muy caro: «Mi querer ver tarifa». El cochero ―agotado por el calor, deshidratado y sudando como un cerdo― les responde: ―¿Tarifa? A Tarifa les va a llevar su puta madre. En este chiste entran en contacto al menos dos niveles lingüísticos: la semántica y la pragmática. Por un lado, la semántica que estudia el significado de las unidades lingüísticas y sus combinaciones. Por otro lado, la pragmática que estudia el lenguaje en su relación con los hablantes, así como los enunciados que estos ofrecen y las diversas circunstancias que concurren en la comunicación. Desde un punto de vista semántico existe una polisemia del sustantivo «tarifa». En un primer sentido, se hace referencia al nombre común tarifa, como un precio fijado por las autoridades para los servicios públicos. En un segundo sentido, se habla del nombre propio Tarifa, como un lugar o topónimo. Desde el punto de vista del componente cultural tenemos un topónimo: Tarifa. El nombre de esta ciudad proviene del árabe «Al Yazirat Tarif», que quiere decir isla de Tarif. Recibió este nombre porque en el año 711 d. C. las tropas musulmanas comandadas por Tarik desembarcaron en esta región de la península ibérica. Después construirían la ciudad árabe o medina que llevaría su nombre.
Chiste 13
Un joven fue a la consulta de un médico para hacerse un reconocimiento general. ―Doctor, vengo a que me reconozca. Y el médico le contesta: ―Pues, ahora mismo no caigo. En toda la serie de chistes relacionados con la temática de la medicina está presente la pragmática como disciplina lingüística. Se trata de un contexto situacional o situación comunicativa, que es entendida por parte de los interlocutores (médico-paciente) de manera distinta. Por un lado, el paciente va al médico para hacerse un reconocimiento médico general. Por otro lado, el doctor no lo reconoce; es decir, no sabe quién es. Por tanto, el chiste tiene un brillante colofón al utilizar el verbo «caer» en el sentido de venir en conocimiento, llegar a 39
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comprender. Un ejemplo de la utilización de este verbo en una oración sería: Ahora caigo en lo que querías decir. Estas son algunas de las locuciones extraídas del DRAE con el verbo «caer»: caer bien alguien 1. loc. verb. Obtener buena acogida. caer de plano 1. loc. verb. caer tendido a la larga. caer enfermo 1. loc. verb. Contraer enfermedad. caer gordo, da a alguien 1. loc. verb. coloq. Serle antipático, desagradable. caer mal alguien 1. loc. verb. Obtener mala acogida. caerse redondo 1. loc. verb. Venir al suelo por algún desmayo u otro accidente. estar al caer alguien o algo 1. loc. verb. Estar a punto de llegar, sobrevenir o suceder.
Chiste 14
Un muchacho estaba vendiendo fruta por la calle después de la Guerra Civil Española (1936-1939), es decir, en la época de la posguerra cuando había mucha necesidad. El chico iba cargado con una cesta llena de fruta al hombro pregonando: ―¡Vendo brevas y higos, vendo brevas y higos! Una mujer se asoma al balcón de su casa de un cuarto piso, y lo llama: ―Joven, ¿puede usted subir un momento, por favor? El chico mira a la señora y se da cuenta de que el bloque no tiene ascensor, sino que tiene que subir a pie por las escaleras. Una vez que llega al cuarto piso de la señora, exhausto, le pregunta: ―Dígame señora, ¿cuánto le pongo? La señora, acto seguido le responde: 41
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―Nada, no quiero nada. Yo solo te he llamado porque soy profesora de Lengua Española en la escuela. Por eso, quería advertirte de un error gramatical que cometes cuando dices «brevas y higos». En realidad, deberías decir «brevas e higos» porque la conjunción «y» toma la forma «e» ante palabras que empiezan por el sonido /i/ ¿Comprendes? El joven, que no sale de su asombro, porque piensa que ha subido las escaleras para nada, le contesta: ―Pues sí, lo he comprendido perfectamente. Muchas gracias, cabrona e hija de puta. En este chiste solo entra en juego la gramática como disciplina lingüística. Según la RAE la conjunción copulativa «y» toma la forma «e» ante palabras que empiezan por el sonido vocálico /i/ (i- o hi- en la escritura): Eres único e irrepetible; Necesito aguja e hilo. Sin embargo, existen algunas excepciones como cuando al sonido /i/ le sigue una vocal con la que forma diptongo: La mesa es de madera y hierro (no de madera e hierro). Con aquellas palabras que, como hiato o ión, pueden articularse con hiato ([i - á- to], [i - ón]) o con diptongo ([yá - to], [yón]), es válido el uso de «e» (si se pronuncia hiato) o de «y» (si se pronuncia diptongo): diptongo e hiato o diptongo y hiato; moléculas e iones o moléculas y iones. Cuando la conjunción se hace tónica y adquiere un valor adverbial en oraciones interrogativas: ¿Y Inés? (‘¿dónde está Inés?’ o ‘¿qué tal Inés?’). Si la palabra que sigue a la conjunción no es española por el sonido vocálico /i/, sigue vigente la regla, aunque por tratarse de una voz extranjera el sonido /i/ inicial no se escriba como i o hi: Escriba su teléfono e e-mail (la e de e-mail se pronuncia [i] en inglés). Paralelamente, la conjunción copulativa mantiene la forma «y» si la voz que la sigue no empieza con el sonido /i/, aunque gráficamente se escriba con i o hi: En esa fecha se produjo el encuentro entre Franco y Hitler (el apellido alemán Hitler se pronuncia con h aspirada). Hasta el momento ha sacado dos discos: Life y I adore you (I se pronuncia [ai] en inglés).
Chiste 15
Un día Francisco de Quevedo y Luis de Góngora –dos poetas del Siglo de Oro– estaban hablando sobre la discapacidad física que tenía la reina. Es decir, su majestad tenía una pierna más larga que la otra. Quevedo que no era muy simpático con la reina, le dijo a su homólogo: ―Mañana le voy a decir a la reina que es coja delante de sus narices. A lo que Góngora contestó: ―Tú estás loco, te va a matar si le dices eso. Y Quevedo le sugirió que lo acompañara … ―Mañana vendrás conmigo y presenciarás el acto. Quevedo había comprado dos ramos de flores: uno de claveles blancos y otro de rosas rojas. Se presentó ante la reina con una reverencia y le dijo: 43
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―Entre el clavel blanco y la rosa roja, su majestad escoja. Insisto en que su majestad es coja. Para explicar este chiste desde un punto de vista lingüístico debemos situarnos en el nivel léxico-semántico. En este sentido, vemos una relación de semejanza entre dos palabras por su sonido. Esto es lo que en lingüística se conoce como paronimia. En este caso, tenemos la confusión terminológica que se produce entre el adjetivo «coja» y el verbo «escoja». La agrupación de sílabas que alteran el significado de las palabras como vemos en este ejemplo (es coja frente a escoja) es lo que en retórica se llama calambur. Se dice que el calambur más famoso de la lengua española se atribuye a Francisco de Quevedo, quien llamó «coja» a la reina doña Isabel de Borbón, tras apostar el pago de una cena con sus colegas a que el propio Quevedo tenía el valor de decírselo a la cara. Desde el punto de vista del componente cultural literario, el chiste hace referencia a dos poetas del Siglo de Oro: Francisco de Quevedo y Luis de Góngora. Según la leyenda, Quevedo compró dos ramos de flores: uno de claveles blancos y otro de rosas rojas. Después se presentó en la plaza pública donde estaba la reina, y con una cortés reverencia Quevedo recitó los versos que harían que sus amigos le pagaran la cena de la apuesta. Y dijo así: «Entre el clavel blanco y la rosa roja, su majestad escoja. Entre el clavel blanco y la rosa roja, su majestad es coja».
Chiste 16
Dos amigos se encuentran en la calle después del trabajo. Uno de ellos empieza a contarle la aventura que tuvo con una mujer la noche anterior. ―Anoche estuve con una mujer increíble. Tenía unas piernas infinitas, una cintura de avispa, unos pechos exuberantes, unos labios carnosos… A lo que su compañero le pregunta: ―Y de cara, ¿cómo era de cara? Y el otro le contesta: ―De cara, carísima: 500 euros. Para entender este chiste debemos situarnos tanto en el nivel léxico-semántico de la lengua, como en el nivel pragmático. En el primer nivel existe una polisemia de la palabra «cara». Por un lado, se refiere al sustantivo cara, como la parte anterior de la 45
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cabeza humana desde el principio de la frente hasta la barbilla. Por otro lado, hace referencia al adjetivo femenino cara, que tiene un precio alto o más alto de lo normal. En el segundo nivel nos presenta una comunicación que es interpretada de manera distinta por parte de los interlocutores. La palabra cara es la que determina un sentido u otro de la comunicación. Presentamos algunas locuciones con la palabra cara según el DRAE: a cara o cruz, o a cara y cruz 1. locs. advs. Lanzando al aire una moneda que, al caer con la cara o la cruz hacia arriba, sirve para decidir entre dos posibilidades. Jugarse, echar, decidir algo a cara o cruz caérsele a alguien la cara de vergüenza 1. loc. verb. coloq. Sentirse muy avergonzado. cara a cara 1. loc. adv. En presencia de alguien y descubiertamente. 2. loc. adv. En presencia de algunas cosas inanimadas. cara dura V. caradura. dar la cara por alguien 1. loc. verb. coloq. Salir en su defensa. 2. loc. verb. coloq. Respaldarlo, responder por él. de dos caras 1. loc. adj. Dicho de una persona: De distinta opinión respecto a lo mismo según la ocasión o el interlocutor. hacer a dos caras 1. loc. verb. Proceder con doblez. lavar la cara 1. loc. verb. coloq. Mejorar de manera superficial el aspecto externo de una cosa o el cariz de un asunto.
CHISTES LINGÜÍSTICOS
2. loc. verb. coloq. Adular, lisonjear a alguien. no saber dónde se tiene la cara 1. loc. verb. coloq. Denota la incapacidad de alguien en su profesión. no tener alguien cara 1. loc. verb. Méx., Perú y R. Dom. No atreverse. no volver la cara atrás 1. loc. verb. Proseguir con tesón y constancia lo empezado. partirle a alguien la cara 1. loc. verb. coloq. Dejarlo en una pelea muy maltrecho. U. m. c. amenaza. plantar cara a alguien 1. loc. verb. coloq. Desafiarlo, oponerse a él, resistir a su autoridad. poner buena cara a alguien, a una idea o a una propuesta 1. loc. verb. coloq. Acogerlos bien. poner mala cara a alguien, a una idea o a una propuesta 1. loc. verb. coloq. Acogerlos mal. por la cara 1. loc. adv. coloq. Dicho de aspirar a algo o de hacerlo: Con atrevimiento y sin cumplir los requisitos para ello. por mi, tu, su, etc., bella, o linda, cara 1. locs. advs. coloqs. por su cara bonita. por mi, tu, su, etc., cara bonita 1. locs. advs. coloqs. U. para tachar de injustificado un logro o una pretensión de quien carece de los méritos específicos para conseguirlo.
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romperle la cara a alguien 1. loc. verb. coloq. partirle la cara. verse las caras una persona con otra 1. loc. verb. coloq. Avistarse para manifestar vivamente enojo o para reñir. volver a la cara algo 1. loc. verb. coloq. No admitirlo, devolverlo con desprecio. volver la cara al enemigo los perseguidos 1. loc. verb. Rehacerse y pelear con quienes los perseguían.
Chiste 17
Dos amigos están hablando en un bar sobre las relaciones de pareja. Uno de ellos acaba de cortar con su novia y está muy triste. Por ese motivo, el otro amigo intenta animarlo, hablando con él. ―¿Por qué ya no estáis juntos? ¿Qué pasó? El amigo que estaba hecho polvo, le responde: ―Porque ella come amigos. El otro amigo muy sorprendido porque no entiende la respuesta, le vuelve a preguntar: ―¿Cómo es que come amigos? Y el amigo desolado, con lágrimas en los ojos, le responde: ―Sí, me dijo: «te quiero, pero como amigos». Para entender este chiste debemos situarnos tanto en el nivel léxico-semántico de la lengua como en el nivel pragmático. En el primer nivel lingüístico existe una polisemia de la palabra «como». Por un lado, se refiere a la primera persona del 49
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presente del verbo comer con el significado de masticar y deglutir un alimento sólido. Por otro lado, hace referencia a la preposición en el sentido: en calidad de, en concepto de o a modo de… En el segundo nivel lingüístico, el pragmático, la información es interpretada de manera distinta por parte de los interlocutores. La palabra «como» es la que determina un sentido u otro de la comunicación.
Chiste 18
Dos estudiantes de la Universidad de Granada salieron juntos de fiesta a una discoteca de la ciudad. Al día siguiente se encontraron después de las clases y empezaron a charlar sobre la noche de marcha. —¿Qué tal se te dio la noche en la disco? Y el amigo responde: —Muy bien, al final me acosté con la americana. Y el otro amigo muy curioso, le pregunta de nuevo: —¡Qué bien! Cuéntame, ¿cómo terminó la cosa? A lo que el amigo responde: —Bien, pero hacía muchísimo calor y me la tuve que quitar. De acuerdo con un análisis sobre este chiste, existen varios niveles lingüísticos de la lengua que están interrelacionados: léxico-semántico y pragmático. 51
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En el primer nivel lingüístico se da una polisemia de la palabra «americana». Por un lado, se refiere a la chica de nacionalidad estadounidense, es decir, americana de los EE. UU. (Estados Unidos de América). Por otro lado, hace referencia a la americana como chaqueta de tela, con solapas y botones, que llega por debajo de la cadera. En el segundo nivel lingüístico, el nivel pragmático, la situación comunicativa es interpretada de manera distinta por parte de los interlocutores (estudiantes). La palabra «americana» tiene dos sentidos en este chiste: chica de América y prenda de vestir. El componente cultural histórico está representado por la Universidad de Granada. Fundada en 1531 por el emperador Carlos V, aunque los antecedentes de esta institución se encuentran en la Madraza de Granada creada por Yusuf I. Según palabras textuales de la página web de la Universidad de Granada sobre la historia de su fundación es la siguiente: Promovida por Carlos V el 7 de diciembre de 1526, durante su estancia en la ciudad y en el contexto de los acuerdos adoptados por la Congregación de la Capilla Real, la Universidad de Granada fue la única de iniciativa real entre las fundadas en España durante la época renacentista. El 14 de julio de 1531 Clemente VII expedía una bula, confirmando la fundación y erección de la Universidad de Granada atendiendo la petición del emperador de que el Estudio General era necesario «para que, en el mismo reino, se propagase el culto del nombre divino y de la fe católica», y «estimando que del estudio de las letras se deriva la salud de las almas». En ellas se concedía a sus profesores, graduados y estudiantes los mismos privilegios y exenciones que gozaban las universidades de Bolonia, París, Salamanca y Alcalá, y se nombraba al arzobispo de Granada patrono y administrador general de la institución. Como dato académico, la Universidad de Granada (UGR) es una de las primeras universidades europeas, tanto de entrada como de salida de estudiantes en el programa Erasmus (European Region Action Scheme for the Mobility of University Students).
Chiste 19
Una chica estaba haciendo cola para entrar en una discoteca. Esta llevaba un perro amarrado con una correa. Entonces el portero de la discoteca le dice a la chica de forma autoritaria: —Perdone, señorita, pero usted no puede entrar con el perro en la discoteca. La chica muy sorprendida le contesta: —Es mi perro lazarillo. Y el portero, enfadado, le dice: —Pero usted no está ciega. Entonces la chica le responde: —Deme tiempo, deme tiempo… Para entender el chiste tendríamos que situarnos tanto en el nivel léxico- semántico como en el nivel pragmático. En el primer
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nivel, la locución adjetiva estar ciego es sinónimo de estar borracho. En este sentido, esta expresión es usada entre los jóvenes cuando beben demasiado: ¡Estoy ciego! ¡Estoy pedo! ¡Qué ciego llevo! ¡Qué ciego tengo! ¡Qué tajada! ¡Llevo una tajada como un piano!… En el segundo nivel, la realidad a la que se refiere el portero no es la misma a la que se refiere la muchacha. Esto es, la palabra «ciega» es interpretada de distinta manera por parte de los interlocutores. Por un lado, el portero lleva razón cuando le dice a la chica que no está ciega. Sin embargo, la chica también tiene razón cuando espera estar ciega, pero de alcohol, una vez que entre en la discoteca. De ahí la respuesta: «deme tiempo, deme tiempo». Desde el punto de vista del componente cultural literario tenemos una novela anónima llamada El Lazarillo de Tormes. Se trata de una novela escrita en primera persona y en estilo epistolar. Se considera una de las primeras novelas picarescas por su realismo, la narración en primera persona, la estructura itinerante, el servicio a varios amos y la ideología moralizante y pesimista de la época.
Chiste 20
Pregunta a los lectores: ¿En qué se parece un ladrón a un barco? Respuesta a los lectores: En que el ladrón cuando roba, atraca; y el barco cuando llega al puerto, también atraca. Desde el punto de vista lingüístico, este chiste se entiende en el nivel semántico de la lengua. Por tanto, observamos una polisemia del verbo «atracar» con dos significados distintos. Por un lado, atracar como sinónimo de robar. Por otro lado, atracar con el sentido de amarrar el barco junto al muelle o dejarlo en el puerto sin moverlo. 55
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El componente cultural toponímico del puerto de Málaga está representado en esta ilustración. El lector puede apreciar el puerto de esta ciudad en la imagen de la derecha. Málaga es un incomparable destino turístico, con unas excelentes comunicaciones aéreas y terrestres, y su ubicación en el Mediterráneo es privilegiada, lo que le permite consolidarse como el segundo puerto español de la península en el tráfico de cruceros turísticos. Estos elementos, junto a las terminales marítimas para buques de crucero, convierten al puerto de esta ciudad en base de cruceros de máxima importancia en el Mediterráneo. Málaga también es conocida por tener un aeropuerto internacional que supera los 10 millones de pasajeros al año. El aeropuerto de Málaga-Costa del Sol es el cuarto con mayor volumen de tráfico en España, registrándose en 2017 un total de 18.628.876 pasajeros.
Chiste 21
Pregunta a los lectores: ¿Qué tienen en común un cura y un boxeador? Respuesta a los lectores: En que los dos reparten hostias. Esta situación se entiende en el nivel semántico de la lengua. En este sentido observamos una polisemia del sustantivo «hostia» con dos significados distintos: Por un lado, lo que reparte el sacerdote se refiere a la hoja redonda y delgada de pan ácimo, que se consagra en la misa y con la que se comulga. Por otro lado, lo que reparte el boxeador se refiere a los golpes, puñetazos, bofetadas, etc. Se puede decir, entonces, que los dos reparten hostias de manera diferente. 57
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Según el DRAE la palabra «hostia» puede tener varias acepciones: mala hostia 1. f. malson. Mala intención. a toda hostia 1. loc. adv. malson. A toda velocidad. de la hostia 1. loc. adj. malson. Muy grande o extraordinario. Se ha comprado un coche de la hostia. hostia, u hostias 1. interjs. malsons. Denotan sorpresa, asombro, admiración, etc. la hostia 1. loc. adj. malson. la leche. U. t. c. loc. adv. y c. loc. interj. ser alguien o algo la hostia 1. loc. verb. malson. Ser extraordinario.
Chiste 22
En una academia de español había un profesor que era calvo, es decir, no tenía pelo en su cabeza. Este profesor estaba explicando el verbo «tener» en todos sus tiempos. De repente, un estudiante levanta la mano y le pregunta: —Profesor, yo tuve pelo sería pretérito perfecto simple, ¿verdad? A lo que el profesor responde: —Sí, es verdad. Seguidamente el profesor le hace una pregunta al estudiante: —Y yo tengo pelo, ¿qué sería? —Sería un milagro, profesor. En los últimos años las academias de idiomas han crecido en cuanto al número de estudiantes y centros respectivamente. Un claro ejemplo podemos verlo en la escuela de idiomas Berlitz. 59
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Fundada en 1878 por Maximilian Berlitz en Providence, Rhode Island (Estados Unidos). Esta compañía cuenta con más de 500 escuelas repartidas en más de 70 países y un total de 50 idiomas disponibles. El método Berlitz se basa en una experiencia de inmersión con profesores nativos que se concentra principalmente en la comunicación oral: acelerando el aprendizaje y la confianza del estudiante. En consecuencia, es una forma natural de aprender nuevas lenguas, cuyo estilo de enseñanza es intuitivo y conversacional basado en el método directo que está concebido para permitir que los participantes hablen. El razonamiento subyacente trata de extraer las reglas gramaticales a partir de la lengua (hablada o escrita) sin la necesidad de explicar la teoría. El Marco Común Europeo de Referencia para las lenguas: aprendizaje, enseñanza y evaluación (MCER) es un estándar europeo, utilizado para medir el nivel de comprensión, expresión escrita y oral en una determinada lengua. Este Marco Común Europeo de Referencia para las lenguas delimita las capacidades que el alumno debe controlar en cada uno de los niveles para las categorías «comprender», «hablar» y «escribir». La categoría «comprender» integra las destrezas: comprensión auditiva y comprensión lectora; la categoría «hablar» integra las destrezas: interacción oral y expresión oral; y la categoría «escribir» comprende la destreza: expresión escrita. El Marco Común Europeo de Referencia establece una escala de seis niveles comunes para la organización del aprendizaje de lenguas y homologación de los distintos títulos emitidos por las entidades certificadas: A1, A2, B1, B2, C1, C2.
Chiste 23
Un hippie estaba haciendo el Camino de Santiago en los años sesenta. En el medio del camino se encuentra con un anciano del lugar y le pregunta por la ciudad de León. ―Perdone, señor, ¿sabe usted cuánto me falta para llegar a León? El hombre que lo mira de arriba abajo varias veces, le dice: ―Señor, solo le falta el rabo. Desde el punto de vista lingüístico, este chiste se entiende en el nivel semántico de la lengua. En este sentido observamos una polisemia del sustantivo «León» con dos significados distintos: Por un lado, León hace referencia al nombre propio como ciudad española ubicada al noroeste de la península ibérica por donde pasa el Camino de Santiago. 61
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Por otro lado, león se refiere al nombre común, es decir, al gran mamífero carnívoro félido africano, de pelaje amarillo rojizo, con la cabeza grande, los dientes y las uñas muy fuertes, la cola larga y terminada en un fleco de cerdas, y cuyo macho se distingue por una larga melena. El componente cultural religioso y toponímico viene representado por el Camino de Santiago y la ciudad de León. El Camino de Santiago es una ruta que recorren los peregrinos de todas las partes del mundo para llegar a la ciudad de Santiago de Compostela. En la catedral de esta ciudad se encuentran las reliquias del apóstol Santiago. Los restos del apóstol fueron transportados por sus seguidores desde Jerusalén a España, donde la devoción por “Santus Iacobus” se extendió rápidamente. Así, “Santus Iacobus” ―es decir, “San Jacobo”―pasó a ser, en la lengua cotidiana, “Sanct Iaco”, hoy conocido como Santiago.
Chiste 24
Estaban tres hombres mayores hablando en un bar sobre sus hijos. Y uno dice: ―Yo tengo un hijo que es sacerdote, y cuando las personas hablan con él, le llaman «Padre». El segundo hombre dice: ―Eso no es nada. Yo tengo un hijo que es cardenal, y cuando las personas se dirigen hacia él, le llaman «Eminencia». A lo que el tercero contesta: ―Eso no es nada de nada. Yo tengo un hijo que es el Papa y cuando la gente lo nombra, le dice «Su Santidad». Después de que los tres hombres terminaran de hablar, una mujer que se encontraba justo en la mesa de al lado les dice: ―Señores, eso tampoco es nada, porque yo tengo una hija con unas piernas infinitas, unas curvas de infarto, unos pechos 63
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exuberantes, unos labios carnosos, que cuando entra a un lugar todos los hombres exclaman: «¡Dios mío!». En este chiste se presentan varios grados de tratamiento en el orden eclesiástico: Padre: Sacerdote perteneciente a una orden religiosa. Eminencia: Tratamiento que se da a los cardenales de la iglesia católica. Santidad: Tratamiento honorífico que se le da al Papa. Dios: Ser supremo que en las religiones monoteístas es considerado hacedor del universo. Véase a continuación algunas de las expresiones más usadas con la palabra «Dios» según el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE): a Dios V. adiós. a la buena de Dios 1. loc. adv. Sin preparación, al azar. 2. loc. adv. coloq. Sin artificio ni malicia. anda con Dios 1. expr. U. para despedir a alguien. ay Dios 1. loc. interj. U. para expresar dolor, susto, lástima, etc. bendecir Dios a alguien 1. loc. verb. Prosperarle, hacerle feliz. Dios te bendiga. con Dios 1. expr. U. para despedirse. Dios dirá 1. expr. U. para remitir a la voluntad de Dios el éxito de lo que nos promete mos. Dios mediante 1. expr. Queriendo Dios.
CHISTES LINGÜÍSTICOS
Dios mío 1. loc. interj. U. para significar admiración, extrañeza, dolor o sobresalto. Dios sabe 1. expr. U. para indicar que algo cae fuera de nuestro saber, sea para encar ecerlo, sea para darlocomo dudoso. Dios sabe lo que me cuesta. Dios sabe dónde estará. estar de Dios algo 1. loc. verb. Estar dispuesto por la Providencia, y por consiguiente ser inevitable. hacer algo como Dios manda 1. loc. verb. coloq. Hacerlo bien, con exactitud y acierto. irse alguien con Dios 1. loc. verb. Marcharse o despedirse. juro a Dios 1. loc. interj. voto a Dios. ni Dios 1. loc. pronom. coloq. Absolutamente nadie. Ni Dios ha venido. Esto no lo arregla ni Dios. no servir a Dios ni al diablo alguien o algo 1. loc. verb. coloq. Ser inútil o inepto. ofender a Dios 1. loc. verb. pecar (cometer un pecado). oh Dios 1. loc. interj. U. para expresar asombro y horror. poner a Dios por testigo 1. loc. verb. Invocar su santo nombre para aseverar lo que se dice.
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por Dios 1. expr. U. para pedir limosna o reforzar una súplica cualquiera. 2. expr. U. para expresar protesta o como fórmula de juramento. que Dios tenga en la gloria, o en su gloria, o en su santa gloria 1. exprs. que en gloria esté. sabe Dios 1. expr. U. para manifestar la inseguridad o ignorancia de lo que se trata. vaya con Dios 1. expr. U. para despedir a alguien, cortándole la conversación o el discurso. vaya por Dios 1. loc. interj. U. para manifestar conformidad y paciencia al sufrir un contratiempo. 2. loc. interj. U. para expresar decepción y desagrado. —No podemos ir al teatro: se ha suspendido la función. —¡Vaya por Dios! vaya usted con Dios, o vaya usted mucho con Dios 1. exprs. coloqs. U. para rechazar lo que alguien propone. vete con Dios 1. expr. vaya con Dios. U. t. c. loc. interj.
Chiste 25
Dos políticos ―un catalán y un andaluz― estaban hablando sobre política lingüística y multilingüismo. El catalán le dice al andaluz: ―Ustedes, los andaluces, cuando hablan, se comen la mitad de las palabras. Por ejemplo, para decir todo dicen «tó», para decir nada dicen «ná». Se comen la /d/ intervocálica y no pronuncian la /s/ líquida al final de palabra. Por ejemplo, en vez de decir buenos días dicen «bueno día». Después de escuchar toda la explicación, el andaluz pregunta: ―¿Ustedes cómo dicen mierda en catalán? Y el catalán contesta: ―Merda. Entonces dice el andaluz:
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―Ve usted, también se ha comido ya la mitad. La Política Lingüística es la actuación de una administración, tanto oficialmente por medio de la legislación como a través de sentencias judiciales o mediante políticas que buscan determinar cómo y en qué ámbitos deben usarse las lenguas, así como cultivar las competencias que se requieren de los hablantes para cumplir con las prioridades nacionales o establecer los derechos de las personas o colectivos a usar y mantener sus lenguas. Según palabras del catedrático de la lengua D. José María Pérez Orozco, el andaluz es una variedad del español considerado como un conjunto de hablas. Esto es, el andaluz no se puede considerar un dialecto, sino una realidad mucho más maravillosa, que es un conjunto de hablas en perenne ebullición. Por ejemplo, en algunas partes de Andalucía tienen diez vocales en vez de cinco (cinco abiertas y cinco cerradas). ¿Y para qué usan las vocales abiertas? Para hacer el plural, en vez de poner una «s» o una aspiración al final de palabra, simplemente utilizan la vocal abierta. Otro ejemplo de la lengua andaluza sería cuando un amigo le pregunta a otro: «Antonio, ¿este año vas a ir al Rocío?» Y dice: «No ni ná». Si el lector se fija bien, esa frase son tres negaciones: no, ni, ná. Y es la mayor afirmación que hay en el andaluz. Cuando una persona dice «no ni ná», no le quepa duda de que es un «sí» rotundo. Además, es una figura literaria de primera categoría, es decir, son tres sílabas que son tres frases: No voy a dejar de ir al Rocío. Ni, aunque llueva, truene o ventee. Ná, me va a impedir que vaya. Las tres sílabas empiezan por la misma letra «n», esto es lo que en retórica se conoce como una anáfora.
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Según Pérez Orozco el segundo idioma más hablado en el mundo no es el castellano, sino el andaluz. Resulta que esto tiene una explicación muy lógica: el 70 % de las mujeres que fueron a colonizar América eran andaluzas o extremeñas. En este sentido, la lengua se llama lengua materna porque la enseñan las madres, y a todos los hispanoamericanos también los enseñaron las madres andaluzas. Tanto es verdad esto, que tú pones a un extranjero que no sepa nada de español, pones a hablar a un hispanoamericano y un andaluz, y no los distingues. Sin embargo, pones a hablar a un hispanoamericano y a un castellano hablante y los distingues perfectamente. En conclusión, de los 477 millones de personas que hoy hablan español, la mayoría utiliza la variante andaluza, porque, aunque los hispanoamericanos tengan también sus diferencias lingüísticas, el hispanoamericano no es de origen castellano, sino de origen andaluz. ¿Cuál es la seña de identidad del pueblo andaluz? «La base de nuestra cultura es la comunicación, es decir, el intercambio oral continuo día tras día, año tras año, siglo tras siglo… Entre los dos aspectos más aprovechados de los recursos lingüísticos están el humor y la poesía. En los periodos más importantes de la literatura española ―Siglo de Oro, la Generación del 98, la Generación del 27― hasta nuestros días la mayoría de los poetas eran andaluces. Por último, el humor no es exclusivo de Andalucía, sino que cuando se practica mucho la comunicación y se adquieren muchas destrezas de habla y mucha economía del lenguaje, hay cosas que caen por su propio peso. Para terminar, aclaramos que la característica fundamental es que el andaluz trabaja para divertirse, es decir, no habla de lo que trabaja, sino habla solo de lo que se divierte».
Abreviaturas del Diccionario de la Real Academia Española (DRAE): coloq.: coloquial d.C.: después de Cristo expr. desus.: expresión desusada expr. U.: expresión usada f.: nombre femenino interj.: interjección loc. adj.: locución adjetiva loc. adv.: locución adverbial loc. interj.: locución interjectiva loc. prep.: locución preposicional loc. pronom.: locución pronominal loc. verb.: locución verbal malson.: malsonante Méx.: México R. Dom.: República Dominicana U. t. c.: Usada también como V.: Véase
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Referencias en Internet https://www.abc.es https://www.andalucia.org https://www.berlitz.es http://www.dcine.org https://www.delcastellano.com https://es.wikipedia.org https://www.granadahoy.com http://www.hispaniclinguistics.com http://www.lasalpujarras.org http://www.miviaje.com https://www.muyinteresante.es https://www.photos.google.com http://www.tublogdeviajes.org http://www.rae.es https://www.vamosblog.co.uk https://www.youtube.com
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MIGUEL GARCÍA VIÑOLO CHISTES LINGÜÍSTICOS DE COMPONENTE CULTURAL PARA LA ENSEÑANZA DEL ESPAÑOL Chistes lingüísticos de componente cultural para la enseñanza del español es un manual pensado para los estudiantes de niveles intermedios y avanzados y, en general, para cualquier persona interesada tanto en la lingüística del humor, como en el componente cultural de la lengua española. El libro consta de 25 chistes lingüísticos donde estudiamos el lenguaje en diferentes contextos situacionales con una desigual interpretación por parte de sus interlocutores. Miguel García Viñolo es profesor de español (lector) en la Universidad Católica Pázmány Péter de Budapest (Hungría).Asimismo, es profesor de español para la televisión nacional húngara M5 en el programa Szólalj meg! Trabaja como profesor de español en otras escuelas como Berlitz y Granada Nyelviskola. Es licenciado en lingüística por la Universidad de Cádiz, con máster en Estudios Superiores de Lengua Española por la Universidad de Granada.
ISBN: 9788490749555E