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Spanish; Castilian Pages 85 [32] Year 2005
Dedicatoria A mi amada familia, por su capacidad de entenderme y paciencia en el proceso, pero especialmente por apoyarme para contar mi historia y con el mismo amor entender cada día y noche de entrega en la construcción de estas líneas.
Agradecimientos
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Tengo un profundo sentimiento de gratitud con mi paciente esposo, mis amadas hijas, mis padres y mis lectores, porque además de ser mi motor e inspiración, me mantuvieron firme durante la construcción del libro. Cada día que escribía mis pensamientos estaban situados en las experiencias personales y de ustedes mis lectores, que unidos por una dolencia, me animaron a hacer parte de sus vidas.
1.
Dolor y más dolor.
¿Qué esta sucediendo en mi vida?, ¡oh no! ¿qué es lo que pasa cada noche?, por favor que pare este dolor, eran preguntas continuas, sentimientos desde el fondo de mi alma, 3
exclamaciones, pero sin sentido. No sabía que pasaba, me estaba enloqueciendo de pensar si tenía una grave enfermedad o alguna degenerativa, algo incomprensible pasaba, no sabía nada, lo único de lo que estaba segura era que tenía múltiples dolores, que ya ni sabía de donde provenían, si estaban focalizados, si eras aislados o si eran todos juntos. Repetía en mi mente una y otra vez, ¿por qué a mí? ¿qué he hecho para merecer esto? Me levantaba de la cama, caminaba, trataba de dormir sin conseguir un objetivo tan simple como dormir, en las mañanas sentía escalofríos y mi cuerpo muy caliente como si la fiebre me consumiera, mis extremidades entumecidas, dolor abdominal incesante, el dolor lumbar se apoderaba de mis fuerzas y el cuello sentía que estallaría en cualquier momento, no es posible, ¡nadie puede vivir así.! Pasaban los días y empeoraba, cada noche era una pesadilla sin fin, no veía el horizonte, definitivamente la mente me consumía de dolor y me decía que tenía algo muy grave, así que le comenté a mi esposo que algo estaba pasando y sentía un dolor muy profundo, decidimos entonces ir al médico y consultar, como estaba en embarazo era limitante el tipo de exámenes que me podían hacer, así que solo hasta el fin del embarazo podía revisar que era lo que estaba pasando, pero aparentemente mis exámenes de sangre y demás pruebas que podían practicarme eran perfectas, ahora estábamos más desconcertados que antes, pero asociamos que se trata de algo ligado al embarazo, así que tome paciencia del tema y esperaría hasta finalizar. Dos meses después de padecer este dolor que cada vez era peor mi embarazo llegó a su término. En ese momento me practicaron otra tantas pruebas y exámenes de rigor, resonancias magnéticas, visitas a especialistas: reumatólogo, ortopedista, neurólogo y todas las especialidades, ninguno descubría nada al respecto y mi esposo y yo estábamos desesperados por saber al menos de que se trataba algo que no me permitía llevar una vida normal. Cada vez mi vida se veía más opacada por el dolor que me tomaba en aquellas noches y días sin fin. Un día cuando los dolores eran imposibles de sobrellevar, mi esposo que me vio derrumbarme y llorar como una pequeña niña, decidió que volveríamos a visitar los médicos necesarios y los exámenes suficientes para descubrir que era lo que tenía. 4
Repetimos las pruebas, acudimos a unos 12 médicos aproximadamente hasta que uno de ellos al revisar todos los exámenes y demás, diagnostico algo que jamás habíamos escuchado: Fibromialgia. Eso cambio nuestras vidas. Era este diagnostico de Fibromialgia el que me había mermado todas las fuerzas y me tenía consumida en desesperantes dolores. Mis días parecían eternas jornadas de 72 horas, puesto que no dormía ni un solo minuto por dos o 3 días, mi cerebro estaba colapsado, así que debía dejar mi trabajo, era imposible trabajar o hacer cualquier actividad sin dormir por más de 24 horas seguidas, incluso era peligroso para mi salud. Entonces me retire del trabajo, de mis actividades diarias como el deporte, salir, divertirme con mi familia, era una vida diferente a la que yo había construido. Ahora el médico formulo medicamentos específicos para Fibromialgia en una dosis menor, pero el dolor persistía, era peor aún, así que incremento el medicamento en menos de un mes a la máxima dosis, sin resultados exitosos, lo único que conseguía era ocasionar los famosos efectos secundarios. Luego debido a esta reticencia a los medicamentos, cambiaron a medicamentos más fuertes, incluso opioides que producían los peores efectos secundarios: vómito, mareos continuos, inestabilidad y lo peor tremendas depresiones. A veces me ponía en un rincón a llorar como si fuere un pequeño desamparado, llena de temores, mucho miedo y un tremendo sentimiento de haberlo perdido todo, sentía que la vida no tenía sentido, que era el momento de darle fin a mi existencia, pero algo me decía en mi interior que no era yo la que hablaba y mucho menos quien pensaba de esa forma, porque no era mi estilo, no era mi forma de ver la vida antes de sufrir y sufrir, a consecuencia de este dolor que se había incrustado en mi vida de manera despiadada. Es insensato incluso que de repente aparezca en tu vida, sin consultarte, sin esperarlo, algo que se llame Fibromialgia y peor aún que no te mate, sino que signifique dolor crónico para toda la vida, es lo que dice el médico cuando te diagnostica. Qué despiadadas palabras, cuando uno tiene una vida por delante, una vida que quiere vivir intensamente, era mi situación, y la pregunta era, ¿tiene cura?, ¿existe algún tratamiento para ello?, ¿por favor que alguien responda si esto tiene fin? En efecto, ninguna 5
respuesta, solo una, no existe cura, solo respuestas que divagan como se están realizando estudios, puedo calmar tu dolor con medicamento o un grupo interdisciplinario de médicos, bajo ayuda psicológica y en fin…, respuestas que no tienen sentido. Porque ¿cuál es el sentido de la vida?, si es para estar dormidos y sin pensamientos, solo en función del dolor, realmente no tiene sentido, es como estar muerto en vida, es ser un mueble más de tu casa, pero que clase de vida es esa. ¿Que alguien me ayude? Era otra pregunta que pasaba por mi mente todos los días, le decía a mi esposo en las noches en las que el me acompañaba un sin número de días, pero que podemos hacer para remediarlo, no es posible que este diagnostico sea crónico, eso no tiene sentido, no me quedaré esperando a que la vida pase y yo la vea pasar, tenemos dos hijas, una familia hermosa, trabajo, metas, cosas por hacer y todo ello no se puede quedar estancado como si el mundo hubiese dado un giro completamente. Sentía que mi mundo era otro, vivía en un lugar diferente, acaso me había dormido y ahora estaba en una dimensión desconocida, como es posible que exista gente con dolor crónico para toda la vida, no es justo, nosotros conocíamos el dolor, todos hemos experimentado dolor alguna vez, pero es algo temporal, puede durar segundos, horas, días o meses, pero no una vida entera. La Fibromialgia es una enfermedad que miles de personas la padecen en el mundo y hoy las investigaciones no avanzan como todos deseamos, porque no se trata de dormir o cambiar todo tu estilo de vida, sino de mitigar el dolor para poder llevar una vida completamente normal. La única forma de cambiar tu historia es crear tu propio método y es lo que te contaré a través de estas páginas. Lee cada palabra, todo lo que nos une, interioriza y disfruta de una nueva forma para ver tu vida desde otra óptica. Al escribir este libro, mi idea además de plasmar mi historia después de un diagnóstico como la Fibromialgia es ayudarte a comprender que se puede vivir de otra forma, que no es necesario que te enfrasques en tu dolor, que solo vivas en función de ello, no es necesario sobrevivir. Es una invitación a retomar tu vida con más pasión que antes y con una actitud mejorada. Nuestra historia es la misma, nuestras motivaciones distintas, pero el mismo cerebro que 6
produce señales de dolor, es el mismo que produce señales de felicidad, así que lo único que hace falta es que tomes la decisión de salir de ese camino que parece no tener salida, pero hoy una persona en el mundo y cientos que se han inspirado en mi historia están disfrutando de sus vidas como antes solían hacerlo.
2.
¿Y que es Fibromialgia, que sucede con tu vida?
Cuando el médico me diagnostico Fibromialgia, la primera pregunta que hacemos, es ¿qué significa?, ¿qué daños ocasiona? Y por supuesto el médico responde desde el ámbito médico y técnico, dolores generalizados y agotamiento intenso, palabras más palabras menos, dolor por siempre. Pero realmente el médico en ese momento no se detiene a pensar que es lo que te está diciendo, solo se dedica a mostrarte el panorama más oscuro, prácticamente te dice que tu visa acaba de cambiar, pero tranquilo que no te va a matar, solamente es dolor crónico, y lo que pasa por la mente de toda persona que acaban de diagnosticar con Fibromialgia es: pero si eso es casi la muerte. Ahora tu vida ha sido transformada en minutos, todo cambio para ti, tu estilo de vida, tu forma de ver las cosas y hasta tu propia personalidad. La Fibromialgia es mucho más que dolor, es el cambio dramático de un ser humano que no está preparado para afrontar dolor y más dolor. En mi caso al igual que el de ustedes, mi vida cambio de repente, sin avisarme, un día tenía dolores en todas partes, intensas jornadas de dolor, eternas noches de insomnio, cambios en tu estado de ánimo, altibajos emocionales constantes, depresión a causa la mayoría de las veces de los medicamentos y especialmente un incomprensible 7
pensamiento una y otra vez de que no eres merecedor de esta mala pasada. Muchas veces pensaba lo ingrata que había sido la vida conmigo, cuando yo me había esmerado por hacer las cosas bien, tener una bella familia, construir una reputación laboral, ser una profesional intachable, una madre ejemplar, hija dedicada, amiga incondicional y llena de sueños algunos cumplidos y otros por conseguir y precisamente me había pasado esto. No es justo me repetía una y otra vez, me niego a pasar el resto de mi vida así. Pero el dolor me consumía, me estaba absorbiendo en el túnel más extenso y oscuro y no era sensatamente capaz de escapar de ello. Cuantas veces te has preguntado lo mismo, lo se, siento como si te estuviera viendo y recuerdo aquellos días insistentes donde la única palabra que pasaba por mi mente era Fibromialgia, le tenía miedo, pavor a cada día con sus noches, llorando tantas veces como nunca en mi vida lo había hecho, incluso mi esposo se sorprendía y también terminaba afectado porque sabía que no era el tipo de persona que se rendía fácil o lloraba por cualquier condición, sabía que si estaba llorando era porque el dolor me había superado, algunas veces encontré a mi esposo llorando, mi hija mayor y mi madre, todos estaban afectados por esto que ahora no solo estaba cambiando mi vida, sino también la de ellos, al verme devastada y totalmente fuera de control, de mi control particular, el que me caracterizaba. Comprendo exactamente como te sientes y no te juzgaré porque nadie puede hacerlo, pero te invito a vivir la vida conmigo, a retomar tu rumbo y darle forma y un color especial. No te dejes vencer, tienes el potencial para salir de esto, el talante para avanzar y no detenerte en un camino que espera por ti. Eres tan valiente como yo, tan fuerte y lleno de vitalidad, solo necesitas un poco más de actitud y llegarás, eso te lo garantizo. No te niego que muchas veces flaqueé, me desvanecí en el temor y perdí todas las esperanzas, por supuesto que si porque somos humanos, humanos con sentimientos puros y profundos, así que es normal que muchas veces pasen sentimientos negativos por tu mente, ganas de dormir eternamente, deseos de no seguir luchando, pues piensas que ya no tiene solución, pero no lo hagas, no te detengas, sigue adelante, te puedo decir que los beneficios son múltiples y significativos. Momentos que jamás olvidarás, siempre 8
podrás contar una historia fascinante.
3.
Aprendiendo a combatir la Fibromialgia o dolor crónico.
Soy Camila, una mujer de 37 años, madre de dos hermosas niñas, esposa de un maravilloso hombre, hija, trabajadora incansable, entregada y llena de vida y experiencias, a través de este libro les contará mi historia y les diré la manera de transformar sus vidas de dolor en excepcionales historias de vida. Un día, después de llevar una vida maravillosa, sana, con un esposo extraordinario, dos hermosas hijas, de repente, sentí que un dolor me embarcaba, de pronto ese dolor crecía y crecía y se extendía día tras día, en varias partes de mi cuerpo. Esto comenzó a preocuparme, así que le preguntaba a mi esposo lo que el pensaba del tema, entre los dos decidimos que pasarán unos meses, dado que me encontraba en embarazo en el sexto mes. El dolor aumentaba, era insoportable hasta que llegó el fin del embarazo, nació una de nuestras hermosas niñas. Con ello pensábamos que el dolor acabaría, pero no fue así, igualmente esperamos otro tiempo, dado que era posible que después de la recuperación, del posparto pasaría y desaparecería. Cuatro meses después el dolor fue empeorando, eran insufribles días y peores las noches, así que ahora mi esposo y yo estábamos muy preocupados e iniciamos un periplo médico, fuimos a médicos especialistas, internistas, reumatólogos, ortopedistas y neurólogos. Todos ellos decían diagnósticos diferentes, me solicitaban realizar exámenes de su especialidad, pero ningún examen evidenciaba que tenía algo que pudiese explicar este terrible dolor que cada noche se encargaba de demostrar que existía algo por encima de mis fuerzas. He sido una mujer fuerte, divertida, emprendedora, que nada la vence y este dolor lograba devastarme y vencerme, logró transformarme en una persona diferente a la que 9
todos conocían y admiraban. Era una persona desesperada, llena de incertidumbre, solo pensaba en aquel dolor que permanecía en mi cuerpo, era un ser humano que no conocía antes, yo misma me asombraba de quien era yo. Después de cientos de pruebas, visitas a médicos, 8 meses después, descubrieron que mi diagnóstico era FIBROMIALGIA, a partir de este momento mi vida cambio para siempre. Sabía que era un dolor crónico, que el médico insistía en aclarar que no era un dolor que desaparecía, sino para siempre, una palabra que te trastorna y todos mis pensamientos positivos se convirtieron en terribles pensamientos. El dolor me embargaba de melancolía y los medicamentos que me recetaban cada vez más fuertes ocasionaban en mis efectos secundarios devastadores, vomitaba, me deprimía, cuando en mi vida antes de esto jamás había experimentado lo que significaba la depresión, tenía insomnio, pérdida de apetito, en conclusión, mi vida era un desastre. De este modo cuando pasaron dos meses con la misma situación donde veía sufrir a mi esposo, hija mayor de 9 años y bebe que acaba de nacer, tenía tan solo 10 meses y mis padres, incluso mis amigos, sentía que mi actividad laboral se estaba estancando, cuando era el momento cúspide de mi historia, reflexioné, pensé en aquellos días y noches que el dolor no podía acabar con mi vida. Mis grandes amores estaban sufriendo por esta situación, son mi motor para vivir, son todas mis razones para hacer las cosas bien, así que tenía que hacer algo para finalizar con estos días interminables donde la protagonista era yo, donde el dolor no solo me afectaba a mi, sino que afectaba todo mi entorno. Se me ocurrieron varios métodos para mitigar el dolor, pensé en lo que más me motivaba y definir una manera de vivir de manera extraordinaria con FIBROMIALIGIA, sin afectar todas las áreas de mi vida. Sabía que existía una forma de vivir feliz, aún sufriendo cada noche dolores insufribles que me desgastaban cada día más y medicamentos que entorpecían mi estilo de vida natural, el cual amaba y me apasionaba. No podía perder todo lo que había construido, así que inicie un modelo de vida con dolor, pero sin perder la esencia de la misma. Todos los seres humanos sin excepción sabemos que tenemos un amigo incondicional, un 10
aliado que no te falla, tu mente, tu cerebro, si de el proviene el dolor, también puedo contralarlo o mitigarlo, puedo vivir la vida, sin destruir tantas maravillosas experiencias. De este modo en las noches, cuando estaba despierta y todos dormían pensaba en todo lo extraordinario que la vida me había regalado, en lo que más me apasionaba y en lo que haría en los días, meses y años venideros, sin pensar cada minuto en el brutal dolor que tenía, de repente sentía una mejoría mental absoluta, donde mi mente controlaba a mi cuerpo y no me dejaba consumir por el dolor exasperante y despiadado que tenía ya desde hace varios meses. Después, decidí asumiendo mi propio riesgo que eliminaría ciertos medicamentos de los que me habían recetado, los que al retirarlos ocasionaban síndrome de abstinencia: mareos, vómito, sudor frío, visión borrosa, depresión y más depresión, pero sabía que esto tardaba máximo una semana, de esta forma mi cuerpo se desintoxicaba y al menos volvería a la normalidad en cuanto a mi, a mi personalidad, no estaría durmiendo todo el día o pensando solo en mi dolor, porque sencillamente no era yo, era un nuevo ser humano, con todos aquellos medicamentos me había convertido en un ser que no conocía, en una persona que no tenía sueños ni esperanzas, así que decidí tomar el riesgo, no lo consulte y los primeros días eran brutales, pensaba que había hecho lo incorrecto dejando todos mis medicamentos, pero seguí adelante con mis planes, estaba decidida, cada vez era mas consciente de ello. Solo veía a mi familia y sabía que todos me necesitaban y yo a ellos, así que nada me hizo parar, solo pensaba en que mi mayor deseo era volver a ser la misma de antes, aquella mujer dinámica, que siempre estaba haciendo cosas, innovando y amando con todas sus fuerzas a su familia, era suficiente para no desistir. Una vez paso una semana de terribles síntomas, me quedé con una dosis mínima de un solo medicamento, el dolor por supuesto continuaba incrustado como si se hubiese adherido a mi sin querer dejarme en paz, pero eso no me mortificaba, yo tenía un compromiso con mis amados seres queridos, conmigo misma y con mi vida, el de ser una persona completamente normal sin pensar en dolor día y noche. Mi decisión estaba tomada, estaba aprendiendo a combatir el dolor. Y ¿qué es combatir el dolor? Es aferrarse a la vida con ímpetu, dedicación, tesón y una gran entereza. Es lo que le sugiero a cada persona que esta leyendo este libro hoy y ha decidido cambiar su vida. 11
Este libro no solo te hará comprender que puedes combatir el dolor, sino también otras tantas áreas de tu vida de manera excepcional. Te acompañaré en tu proceso y combatiremos juntos todos tus miedos, incertidumbres y así mismo saldrás adelante viviendo completamente feliz. Te mereces ser feliz, debes tener claro que la vida es un regalo maravilloso y por tanto pensar en dolor todo el día no es una condición sana para tu espíritu, cuerpo y alma. Cada día que pasa en mi vida agradezco aquella luz que me ilumino para cambiar el rumbo de mi historia, una voz interna que indicó el camino transformador, no solo para hacerlo por mi, por mi familia, sino también para ayudar a miles de personas en el mundo que padecen y viven la misma historia. Ustedes también son parte de mi historia y yo espero profundamente hacer parte de la suya, que cada uno cuente la maravillosa transformación que tuvo en su vida cuando me cruce en su camino para mostrarle al mundo que todo se puede cuando confías en ti mismo y sacas partido de cualquier situación. La vida esta llena de momentos de felicidad infinita, dolor, decepción, depresión, angustia, incertidumbre, quizás, todo ello ha pasado por tu mente desde el momento en que te dijeron que tenías dolor crónico o FIBROMIALGIA para toda la vida. No te preocupes, no lo tomes como una desgracia, tómalo como una gran experiencia de vida que te ayudará a descubrir lo mejor de ti y de los que te rodean, te enseñará que solo tu puedes alcanzar lo inalcanzable, vivir con dolor y ser un héroe de batallas que todos admirarán, completamente feliz y que da lecciones de vida. Mi objetivo era combatir el dolor y yo lo he conseguido, buscar el método o modelo a seguir para sacarlo de mi vida, aprender cada día a combatirlo sin mirar atrás, solo con una visión clara del significado de la vida. Combatir el dolor crónico o FIBROMIALGIA es más fácil de lo que se oye, seguramente, tu has pensado tantas veces que esto nunca te dejará vivir feliz, que quizás tu vida cambio para siempre y con ello vino la tristeza, la pérdida de ti mismo y el cambio negativo de tu vida, pero no es así, ahora tendrás más experiencias que contar y una historia apasionante, te convertirás en el ejemplo que muchos buscan, solo necesitas el espíritu y entereza para sacar todas tus fuerzas y valentía, demostrarte a ti mismo, que 12
puedes hacerlo todo y llegar más allá de tus propias expectativas. Cuando conozcas como lo logré yo, no querrás volver atrás, solo verás un futuro lleno de emociones, de amor y de sueños por cumplir, sueños que se convertirán solo en hermosas realidades, después de combatir la FIBROMIALGIA, estas preparado para afrontarlo todo y llegar a donde nunca jamás imaginaste. Es posible combatir el dolor crónico y ser completamente feliz. No es una simple historia, es una experiencia de vida, cada línea escrita es sentimiento puro del alma, de las vivencias de cada día, cada página la he escrito con el corazón, recordando, visualizando y pensando en todos aquellos que están leyendo en este momento y disfrutando de una lectura agradable como inicio de su combate personal. ¿Y tu estás preparado para combatir tu FIBROMIALGIA? Por supuesto que si, estás preparado para afrontarlo todo, solo necesitas un impulso, tu motor propio, tus motivaciones personales y seguramente encontrarás miles de cosas para vivir completamente feliz sin pensar en aquellos días y noches de dolor, porque ahora el protagonista eres tu y no tu dolor, ahora es tu momento, es tu historia, otra más para contar. Al igual que yo contarás tu propia experiencia al mundo y entenderás el verdadero significado de la vida. Todo tiene sentido cuando encuentras tu propia fuerza y sacas lo mejor de ti.
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4.
Las terribles crisis de dolor en la fibromialgia.
Para avanzar y contarte como combatir la fibromialgia debes conocer el fondo de la historia, el cual tu debes vivir cada día las 24 horas. Existen lo que piensas tu como insuperables crisis de dolor. Este es un punto del que no me gusta hablar, pero debo hacerlo para encararlo y comprender en profundidad todo lo que he llegado a lograr, después de superar estas crisis. Durante el día los dolores insoportables por varias partes de mi cuerpo, dicen los médicos que entre 11 a 18 puntos, pero todos sabemos que parecen 50 puntos, los dolores son imposibles de sostener. Cualquiera con un solo dolor provocado por la FIBROMIALGIA, desea mantenerse dormido para no preguntarse ¿por qué? Esta pasando esto en su vida. Pero para completar esta situación existen momentos del día, del mes y del año que los dolores se llevan al máximo nivel de supervivencia. Son dolores físicos, sientes que la piel te quema, como si tuvieras fiebre de 40 o más y te pinchan con agujas inexplicables, nadie merece esto, tú te preguntas y ¿qué es lo que he hecho para merecer tanto dolor despiadado?, ¿Acaso jamás dejaré de sentir esto? Y todas estas preguntas que vienen y van especialmente en la noche cuando tienes entumecidos los dedos y sientes que el cuello se te parte en dos, la cadera en 100 pedazos, tus piernas, costillas y columna, ya ni sabes donde está el dolor, parece que se te desplazo por todas partes y no es posible vivir 14
con ello, pierdes el control, incluso aumentas tu medicamento, ruegas a tu médico que te aplique lo que sea, te medique algo más fuerte, pero por favor que pare este dolor infinito que se te clavo en el cuerpo, alma y corazón. Algunas veces ni eres capaz de levantarte de la cama, no es posible para ti mantenerte en pie y es que además de los dolores extravagantes que pasan por todo tu cuerpo, el medicamento fuerte e intenso te mantiene en un estado de somnolencia indignante, síntomas secundarios precisamente para no vivir una vida, sino para sobrevivir y quien dijo que nosotros queremos sobrevivir, si nacimos para vivir y vivir la vida a tope, al máximo nivel de experiencias extraordinarias. En estas páginas se que te sentirás completamente identificado conmigo, porque has pasado los mismos días que yo en crisis que parecen interminables y sin horizonte. Estas crisis aparecen de repente, inesperadamente. Son una total desagradable sorpresa que vienen acompañados de un insomnio eterno, extremo frío como si la hipotermia te consumiera, visión borrosa, falta de concentración, por tanto, falla la memoria reciente, un dolor de cabeza incesante, que se aferra a ti, día y noche. Pero aún no es suficiente así que la crisis aumenta y esto es apenas el principio, es cuando aparecen mareos, vértigo y náuseas. Me pasaba algunos días que me sentía inquieta, ansiosa, deprimida, intranquila, como si ya nada fuera igual, sentía desesperación por realizar 100 actividades al tiempo y cambio en mi estado de ánimo, especialmente mal humor y no es para menos, porque nadie debe juzgarte cuando se trata de un dolor que alcanza los más altos niveles de tolerancia. Sabes que esa crisis se incrementará y se suman aquellos dolores cervicales, lumbares, en mi caso el hombro me pesaba como si tuviese una maleta encima, la cadera como si se fuere a partir en 10 pedazos, dolores punzantes y no para aquella crisis. Me preguntaba cuando ¿parará esto?, ¿podré superarlo?, ¿podré pensar en una vida diferente a la del dolor?, donde el único protagonista es el mismo dolor y aún cuando estaba en mi peor momento aparecían mas síntomas como debilidad, propensión al catarro, baja de defensas, taquicardia, sientes un vacío enorme que te distancia de tu 15
mundo, de tu vida real, como si estuvieras suspendido y no comprendes porque te ha pasado esto a ti. Preguntas día y noche porque fuiste el elegido, porque a ti y no a otros, pero después piensas pobre de otros donde sufrieran este dolor, son pensamientos aislados, disipados y desesperados, que buscan una única respuesta: calmar tu dolor, desaparecerlo de tu vida. Otros de los síntomas que llegue a experimentar en mi día a día con fibromialgia era el dolor en mi mandíbula, boca seca, colón irritable, inestabilidad y mareos continuos. Sin lugar a dudas este dolor no es posible que lo tolere alguien era el pensamiento que venía a mi mente una y otra vez. En las crisis se acentúa la sensibilidad en la piel, no soportaba ni el roce de la ropa, nada que rozara mi piel, sentía que me quemaba, pasaba semanas enteras durmiendo tan solo de una a dos horas, día eterno en los que veía el amanecer sin ninguna luz de esperanza. Durante las noches hacia muchas cosas, leía sobre fibromialgia, veía televisión, pero el dolor no me dejaba ni concentrar en una película, mi vida se había reducido a una sola cosa, el dolor. Entonces era cuando venían episodios de tremenda depresión donde todo me parecía insoportable y no le encontraba el verdadero sentido a la vida. Todos los seres humanos conocemos el significado del dolor, pero la ventaja es que todos sabemos que de alguna manera este tendrá fin o es como nos lo han enseñado a entender, sabemos que no interfiere de manera crónica en nuestras actividades cotidianas y menos en nuestra vida en general. Así es como ninguno desea experimentar dolores que no te permiten llevar a cabo una vida con sus actividades diarias y mucho menos que nos impida cumplir con obligaciones típicas del ser humano. Son estos dolores inimaginables los que cada uno de los que padecemos fibromialgia experimentamos. Dolores intensos, insoportables y despiadados, que están por encima de nuestras propias fuerzas. Para agudizar el cuadro de dolor, no es un solo lugar donde se experimenta, sino varios puntos, que maximizan el dolor al mayor nivel. En mi caso, no solo tenía dolores físicos, intensos y desmedidos, también experimentaba dolores emocionales que jamás había percibido, no era ese tipo de ser humano, siempre 16
había sido una persona fuerte, positiva, de entereza y dinamismo y ahora era una persona triste y totalmente transformada. Recuerdo aquella sensación quemante y punzante en todo mi cuerpo y solo pensando en ello me da escalofrío, noches enteras sufriendo y padeciendo como sino existiera en el mundo nada más que dolor. No es justo es el pensamiento que se encarna en la mente, pero no se trata de justicia, sino de una enfermedad de difícil diagnóstico como dicen los médicos. Pero mi concepto en ese momento sobre este diagnóstico era que se trataba de una mala jugada, así que me había entregado definitivamente al dolor, al cansancio y a la depresión, lo que no era una conducta típica en mí. Así sucedió una noche en una de esas crisis insoportables, mientras me levantaba una y otra vez de la cama, vi a mis dos hermosas hijas, llegue de nuevo a mi habitación y se encontraba dormido mi amado esposo, pensé que no existía ningún dolor que superara el amor que sentía por mi familia, por los seres que amo y por las cosas que más disfruto hacer, así que tenía suficientes motivaciones para no seguir en un círculo sin salida. Mis motivaciones estaban ahí, en ese instante, cuando sentía un dolor incesante por todo mi cuerpo, pero pensé que solo era dolor y mi mente estaba preparada para comprenderlo y sacar lo mejor de mi. Cuando llegó el amanecer mis pensamientos estaban claros, más claros que nunca, durante esa noche decidí que jamás volvería a entregarme al dolor, que no me dominaría, por el contrario, yo lo controlaría. Inicie un proceso de reflexión donde revise las motivaciones más importantes para mí, los temas más relevantes y prioritarios en mi vida, luego organice un plan para llevar a cabo actividades que me hicieran olvidar que aquel dolor me acompañaba de manera crónica. Sabía que el camino era difícil, pero que con constancia, amor y entereza podía alcanzar lo que imaginaba, la felicidad absoluta y por supuesto lo más importante recuperar mi vida, una vida que me pertenecía. A mi familia le hacía falta de nuevo la persona que alguna vez conocieron y yo quería devolverla a la vida, sin pensamientos negativos, solo yo, la misma de antes, de mente positiva, abierta y siempre dispuesta a 17
dar lo mejor. Esa era la persona que mi familia quería y necesitaba y ahora yo estaba ahí de nuevo para brindarles todo mi amor, todo lo que soy. Ya estaba cansada de crisis, dolor, medicamentos y más dolor, estaba agotada de pensar y pensar en lo que pasaría hacía el futuro. Estábamos devastados de visitar un médico y otro sin respuestas. Así que ¿cuál era la mejor solución? Yo era la solución, yo tenía las respuestas, no quería sobrevivir, yo estaba dispuesta a todo por mi familia y por mi. Es lo que me dediqué a hacer desde aquellos días y comprendí que ahora todo tenía sentido. Se que al final de este libro estarás preparado para afrontar estas crisis, que serán solamente momentos para contar, pero no con melancolía, sino como una experiencia que te hizo fuerte y así llevarás la vida que antes tenías o mejor aún, ahora tendrás una vida extraordinaria, pues después de superar algo así, podrás superarlo todo en tu vida.
5.
El límite que le pones a la fibromialgia
Un día estaba pasando una de aquellas crisis y sentí que no podía soportar un día más y se que al igual que tu, pasaron pensamientos terribles por mi mente, incluso pensamientos de suicidio, en un momento dije, pero ¿qué estoy pensando?, me desconozco, no se quien soy, como puedo pensar algo tan brutal, si esa no es una solución, contrario a ello son cientos de problemas para mi familia. Así que ese mismo día decidí que debía finalizar con esta situación, pero la pregunta era y como si todavía tengo ese dolor crónico que ha cambiado mi vida, ¿cómo transformar algo tan físico en 18
algo positivo?, preguntas como esta me impulsaron a pensar en alternativas diferentes al medicamento, tratamientos, ayuda psicológica o cualquier otro método. Pensé en alternativas propias y muy diferentes al suicidio, porque esta no es una opción, cuando existen miles de motivaciones particulares en la vida de cada uno. Así es como comencé a revisar que debía hacer, a reencontrarme conmigo, entender porque me había anclado a vivir con dolor y hasta ahí había llegado mi vida, me di cuenta que la única persona que bloqueaba mis sueños era yo misma, que mi mente era suficientemente poderosa para volver a mi vida anterior, pero ahora mucho mejor y renovada. Comprendo que tienes tus propios límites, se que pasas noches y días completos sufriendo, tratando de mitigar tu dolor, nadie podrá llegar a entender como tu los niveles extremos de dolor o solo los que hemos vivido una experiencia igual o similar, muchas veces has querido dormir semanas completas, tomar cientos de medicamentos y doparte para no saber que pasa en tu vida, miles de veces no has querido hablar con nadie, te has deprimido y hasta pensaste en acabar con tu vida porque te preguntas pero si mi vida ya esta acabada, para que seguir adelante, entonces es mejor suicidarme. No pienses más en ello, acaba con esos pensamientos negativos y reemplázalos por extraordinarias ideas, porque nada es demasiado para pensar en quitarte la vida, ni siquiera un dolor insufrible, no es suficiente ni que sientas que tu cuerpo se queda o no puedes ni levantarte de la cama, no es suficiente para perderte todo lo que te ofrece la vida, lugares hermosos, personas increíbles, momentos inolvidables y sueños para convertir en realidades. En este punto quiero decirte que todos los seres humanos tenemos la capacidad de enfrentar cualquier situación por difícil que parezca. Podemos incluso superar algo tan complicado como el dolor crónico y muchas veces pensarás que no tienes las fuerzas, pero piensa en que existen muchas personas como yo que lo han logrado, inspírate en ellos, que sea tu modelo a seguir, tu referente para seguir adelante y seguramente tu recompensa será volver a vivir con todo lo que ello implica. El límite lo pones tu, no tu dolor, así es como limitas que avance sin piedad tu fibromialgia. No existen límites para el dolor, pero tampoco existen límites para equilibrar 19
tu vida aún con ese dolor que creíste se había convertido en tu compañero de día y noche, tu único compañero debe ser tu propia fortaleza, tu capacidad de darle fin a esas crisis y no dejarlas como el centro de tu historia. Construye una historia propia, con experiencias nuevas, anécdotas por contar, viajes por realizar y motivaciones para compartir. No desistas, aunque las fuerzas te fallen, aunque pienses que no eres lo suficientemente audaz para conseguirlo, incluso cuando creas que estas pasando el peor momento de tu vida, no desistas, continúa, lucha, insiste, persevera y lo lograrás. Todos hemos pasado pruebas en la vida impresionantes como lo es el dolor de la fibromialgia o incluso otro tipo de pruebas complejas, pero siempre debes tener la convicción de que incluso esas pruebas tienen su límite. No es necesario sentarte y llorar y pensar lo terrible que es tu vida o que eres el único que esta pasando una situación difícil, porque tu eres mucho más que eso, mucho más que dolor. ¿En qué momento pones el límite? Yo te puedo decir que el mío llegó cuando estaba pasando por mi peor crisis. Sufría sin medida, sentía que se me agotaba la paciencia, las fuerzas se me perdían y me desvanecía en el tiempo. Pensaba que no podía seguir adelante con esta situación, pero algo me decía en mi interior que yo había sido una mujer perseverante, optimista y entregada a mis convicciones, así que esta vez no sería la excepción. No me dejaría vencer por algo físico, cuando mi mente podía ser más fuerte, así que me preparaba todos los días para encarar un nuevo reto con energía y emoción. Cada día siendo un reto para mi me animaba más para seguir adelante, para incluir en mi vida nuevas ideas que me aportarán y brindarán alternativas y emocionantes momentos. Al igual que yo, quiero que cuentes tu historia, que seamos miles de personas que podamos contarle al mundo y a otros que padecen Fibromialgia, como logramos superar algo que para otros es acabar con sus vidas y convertirlas en una terrible experiencia. Tu vida y la mía ya no estarán ligadas por dolores, crisis y Fibromialgia, ahora estaremos ligados por superar con entereza y felicidad un reto que para otros parece imposible de superar. Y es mejor aun cuando nuestras historias se unen en el punto positivo de la historia, se juntan en aquella experiencia de vida, de amor y esperanza. Es lo que espero 20
contándote mi vida a partir de aquel día que me diagnosticaron Fibromialgia y especialmente lo que pretendo es ayudarte a pasar este proceso, no solo, sino apoyado y acompañado por alguien que al igual que tu conoce tus sentimientos, conoce lo que se siente y ha vivido intensamente los momentos más difíciles, pero también los mas maravillosos. Cuando tome el reto con mis manos, con mi energía, sabia que llegaría donde quería, a vivir feliz y controlar el dolor a través de las motivaciones personales que me indicaban que era el camino correcto, un camino decidido y enfocado a superar mis propios miedos, a alcanzar todo aquello que me había propuesto. Sería de nuevo la Camila de antes, pero en una versión mejorada, una persona llena de emociones y feliz para contar una historia al mundo que sabría cambiaría las vidas de otros. La importancia de conocer mis límites, implica conocer profundamente mi mente. Para ello se requiere de una tremenda voluntad, mucha paciencia y especialmente a comprender nuestros alcances. Te puedo asegurar que no existe nada que temer, lo único que debes hacer es tomar el riesgo, pero cual riesgo, si lo único que podrás perder es el dolor y eso es precisamente lo que pretendemos eliminarlo o controlarlo. Yo puedo aseverar que es posible, existen límites para la Fibromialgia, pero no existen límites para la mente, confía en ella, es tu mayor aliada. La mente esta llena de conocimiento, control, experiencia y creatividad. Podemos educar nuestra mente y el momento es cuando tenemos la voluntad de iniciar una nueva vida, fue en ese preciso instante donde me di cuenta de la poderosa herramienta con la que contaba, el mismo cerebro que producía tanto dolor era el mismo que me salvaría. Muchas veces en la noche lloraba, al igual que tu los haces, pensaba que desistiría, pero pensaba en quienes me necesitaban, en mi esposo que es un apoyo incondicional, en mis bellas hijas que son todas mis ilusiones, en cada uno de mis proyectos y definitivamente no tenía lugar para dudas, sabía que tenía suficiente potencial para encarar esta situación y valía la pena, tenía claro que luego me reiría de aquellos días de dolor, porque no había permitido que este dominará mi existencia, ahora era yo tomando el control de mi vida 21
por los seres que más amaba y aquellas cosas que me llenaba de emoción volver a hacer. Lo más importante en este proceso es tomar una decisión firme y consistente, sin mirar atrás, solo hacia delante, es la única opción en tu vida, seguir y caminar al futuro, un prometedor futuro junto a lo que más anhelas, lo que deseas con todas las fuerzas que te acompañan, controlar el dolor y vivir al 100% como cualquier otra persona. Te contaré un hermoso secreto lo que hará que tu mente conciba tus sueños y proceso tus deseos es tu corazón, lo más importante es mezclar mente y corazón para un efecto exitoso, conocerte a ti mismo, conocer tus emociones te harán libre, te desprenderán del dolor, mantendrás una actitud despierta y llena de energía orientada al control total de tu ser. Cada uno a pesar de que tiene sus propios límites, por naturaleza tiene mente y fortaleza interna, pero la mejor forma de utilizar tu fuerza es cuando es tu única opción, es así como todos sin excepción podemos llegar a controlar algo tan despiadado como el dolor crónico. Todos tenemos la capacidad de superar cualquier tipo de dificultad, claramente algunos con mayor facilidad que otros, pero todos podemos, algunos tardan un poco más, pero siempre lo logramos. No es cuestión de tiempo, es cuestión de entereza, de actitud y perseverancia. Incluso existen quienes demuestran ser héroes de diversas maneras, cuando demuestran que es lo mejor que tienen dentro y aportan valor a las vidas de otros. Y yo les estoy invitando a un proceso desconocido y como todo proceso implica complejidad, pero esta se minimiza, cuando el espíritu y la actitud llevan la delantera y especialmente si crees en ti como en nadie en el mundo, aún cuando tu eres tu propio enemigo, el mismo que te aleja de tus convicciones y de aquel camino que te llevará a liberarte de ese dolor indefinido e interminable. Así es como muchas veces puedes sentir que desistirás, pero tu sabes que es lo que posees y es a ti mismo, el mismo que puede obtener todo lo que se propone. Y yo se, según mi experiencia de vida, que un proceso de cambio implica expectativa y la necesidad de obtenerlo en el menor tiempo posible, pero no es así, aún cuando el tiempo 22
sea un poco más extenso para algunos, lo recibido provocará tanta felicidad en ti que valdrá la pena esperar. La ventaja es que tu eres el motor de tu historia y ello te llevará a obtener lo que quieras y especialmente a darle límites a la Fibromialgia y no frenar las ventajas de tener una gran vida llena de beneficios y satisfacciones. Tus pones el límite, tu abres tu mente, tu cuerpo y tu corazón a un nuevo capítulo en tu vida. Yo puse el límite y ahora estoy contándote mi historia.
6.
Estilo de Vida y Mitigación del Dolor 23
Ahora te contaré que hice para aprender a vivir con Fibromialgia y no verla como un obstáculo en mi vida, sino como la experiencia para encontrar mi fortaleza, mi audacia y capacidad para afrontar algo más allá de un reto, mitigar mi dolor de manera sorprendente. La primera gran cosa que hice fue trazarme objetivos, superando los desafíos del día a día a corto, mediano y largo plazo, no en tiempos extensos, sino por el contrario me ponía una meta diaria, semanal y mensual. Seleccionaba lo que más me gustaba hacer antes de diagnosticarme Fibromialgia, antes de cambiar mi estilo de vida y centrarme únicamente en el dolor. Cuando se complicaban los días pensaba que ya había iniciando un proceso y que había tomado una decisión firme, consistente y consecuente, así que no había vuelta atrás. No le comenté a mi familia lo que estaba planeando, pero comencé a hacer actividades que ya no hacia. Decidí eliminar ciertos medicamentos y mantener una dieta muy sana, evitar grasas para no presentar colón irritable y con ello favorecer mi digestión. Pero muy por encima de comer balanceadamente que también aporta valor al nuevo modelo de vida, más allá de finalizar con algunos medicamentos, lo más importante era mi actitud. Me sentía enérgica y apenas algunos días atrás había iniciando toda esta idea de controlar mi dolor desde mi propio cerebro, aquel que lo ocasionaba. Pero ¿qué era lo que realmente me había impulsado? Me había impulsado mi actitud, el amor por mi amada familia y el deseo de retomar mi vida con espíritu e ímpetu. Me sentaba algunas noches y usaba mi imaginación para aliviar el dolor, y era capaz de concebir más imágenes y ser lo más creativa posible, pensando en un viaje fascinante con mi familia, una experiencia económica increíble o cualquier tema que disipará y desviará mi mente del dolor. La imaginación es muy importante para mitigar el dolor, es tan fuerte este método que puede ayudarte a dormir tranquila y pasivamente, desligándote del estrés que te proporciona el dolor, imaginar resulta una divertida manera de evitar crisis. Otros días me levantaba y recuerdo muy emocionada que buscaba múltiples actividades para distraerme, es una de las formas más atractivas de desviar la atención del dolor. Puedes ver las películas que mas te gustan, leer lo que más te agrada, 24
realizar cualquier actividad de tu preferencia. Siempre que estés distraído podrás notar como el dolor se vuelve más suave e incluso existen momentos en los que piensas que te has sanado de repente. Logró sentir varias veces del mes prácticamente sin dolor, pues me mantengo distraída, realizando una y otra actividad. Una de mis alternativas para evitar pensar en aquellos dolores, es la de relajarme, tomar un baño por un largo tiempo, dedicarme tiempo, el cabello, las uñas, la piel, consentirme, tomar un te o aromática y de inmediato irme a dormir sin desviar mi atención con otras actividades, con el fin de conciliar un sueño tranquilo y reparador, pues es claro que el sueño reparador ayuda en un proceso para mitigar el dolor, pues es una forma de darle un descanso al cerebro para que envíe señales de dolor. Lo correcto es enviar señales de felicidad y bienestar. Mi estilo de vida siempre ha sido sano, pero con la llegada de la Fibromialgia, dedicada al dolor, a los medicamentos, a la depresión y desesperación, me olvide del significado de un estilo de vida, pues no se le puede llamar así a algo que solo esta en exclusiva para el dolor. Así que retomar este estilo de vida fue uno de los mayores retos en la reconstrucción de mi vida, ahora sabía que debía dejar el medicamento atrás, aquellas noches infinitas de crisis de dolor, esos días totalmente justificados de depresión y por supuesto eliminar cualquier tipo de pensamiento negativo que me llevará a la desesperación. ¿Cómo hacerlo? No era fácil, algunas veces cuando había tomado esta decisión quería volver atrás, pero me repetía a mi misma, no es posible, si ya he avanzado tanto no volveré atrás. Si ya he avanzado, solo debo seguir adelante, así que cuando te pasen estos sentimientos inadecuados, piensa en lo que te estoy diciendo en este momento y sigue adelante. Nunca jamás pares, nunca hacia atrás, siempre adelante, estarás más cerca de la felicidad. Y debo comentarte que para estar más cerca de la felicidad, debes tener claridad de que la forma de hacerlo es a través de tu propia experiencia, donde es muy importante el apoyo de quienes te aman, una persona, un amigo especial, tu pareja, tus hijos, tus padres, la persona que sea es vital para respaldarte cuando te sientas confundido porque cuando esto pasa, esta persona te recordará el camino que has recorrido y será ese apoyo incondicional, una especie de voz interior que te escuchará y estará para ti. 25
Cuando decidí escribir este libro habían pasado más de 3 meses, es un corto tiempo para retomar una vida, teniendo en cuenta que un alcohólico, un drogadicto o cualquier dependiente se tarda años en superarlo, pero esta situación que incluso resulta más compleja de manejar que cualquiera de las mencionadas adicciones, al tratarse de dolor, de un tema 100% físico y controlado por el cerebro, aún así 3 meses después prácticamente mi vida era normal de nuevo. Fue cuando decidí escribir para el mundo, decidí emprender este reto que implica sentarse por horas, pensar, meditar, reflexionar y decirles en cada detalle de la manera adecuada la forma de mitigar su dolor y ayudarles a retomar sus vidas. Es el mayor reto que determine llevar a cabo, cuando apenas recuperaba mi vida con Fibromialgia, pero que mejor que un reto para definir si el método funcionaba o no, pues puedo asegurarles que funciona, hoy tu estás leyendo mis páginas y yo me siento feliz de que así sea porque se que al final sentirás la misma energía que a diario yo siento que fluye y pasa por mi cuerpo para emprender cada día ya no como un reto, sino como una maravillosa experiencia de vida. Se que la Fibromialgia es crónica, pero es posible vivir y no tener que sobrevivir, lo que sino admito es que digan que no es posible controlar el dolor, que solamente el medicamento puede o la dieta, la terapia psicológica y el deporte, por supuesto que son importantes, pero es claro que quien no va a necesitar terapia psicológica, si su vida ha cambiado totalmente y solo se esta sometiendo al dolor. Por ello tu debes perseverar, no dejes que otros te digan que ya estas destinado a vivir esta vida y que te mantengas al límite de tus fuerzas, que suficiente con que te mantengas en una cama, tranquilo y durmiendo todo el día para aliviar el dolor, pues no es una solución, realmente se trata de mantenerse al margen de tu vida y la idea es que tu seas el que controle tu vida, eres uno solo y con ello tu eres el centro de todo, puedes llegar a ser tan maravilloso y casi como un héroe para el resto del mundo porque es así como las personas que logramos sacar adelante esta situación nos vemos, como héroes sin límites. Cada vez que pasaba el tiempo me acercaba más a la meta que me había propuesto, volver a ser feliz, retomar mi estilo, mis actividades y todo aquello que le daba valor a mi vida, pero algunas veces el temor se apoderaba de mi, pensaba y si no funciona?, pero rápidamente yo misma respondía claro que va a funcionar, una vez tus 26
motivaciones comiencen a surgir, estarás encaminado a la cima, así que no existe ninguna duda de que es así, el camino es arduo a veces, pero cuando llega, llega para siempre. No existe un momento del día en el que no agradezca haber entendido el verdadero sentido y valor de la vida, cuando me he demostrado a mi misma y a mi familia que todos podemos hacer lo que queramos y llegar a lo inimaginable con suficiente actitud, entereza y control mental. Se que te sientes agotado, incluso perdido, fuera de ti, te sientes muchas veces innecesario y devastado, pero todo ello no es suficiente para no cambiar tu forma de ver la vida, lo que hoy para ti parece una tortura continua, una terrible jugada de la vida, no te preocupes, al igual que tu, yo me sentía igual, pero eso es lo que me motivo a sacar todas mis energías y ponerlas a funcionar. Créeme que esos días quedaron atrás cuando me levantaba y decía para que otro nuevo día, si todos son iguales, uno igual a otro, sin consistencia, ni motivaciones, esos días ya no existen en mi pensamiento, no existen en mi vida porque soy mucho mejor que eso, soy una persona integral, que puede concebir la vida solo de una forma, de manera positiva, alegre y perseverante. El optimismo es vital en el proceso para retomar tu vida, implica dedicación, mente abierta, entrega y automotivación, no te desesperes, se que el dolor, suele ser un terrible enemigo, que te dice que naciste solo para sufrir, pero no es cierto, nadie merece vivir así, o mejor, en otras palabras no mereces sobrevivir así, es como te digo entonces, que la satisfacción es múltiple cuando sabes que superaste algo tan complejo como el dolor, que te convertiste en tu propio modelo a seguir, lo puedes todo y se lo puedes contar al mundo con orgullo, puedes poner la cabeza en alto y decirle al mundo que eres tenaz y por ello ahora no solo controlas tu dolor, sino que puedes llegar a metas que jamás imaginaste. Este proceso no solo te ayudará para retomar tu vida, te ayudará a reencontrarte contigo, a comprender que esto que paso en tu vida, solo tenía un significado, descubrir lo mejor de ti, descubrir que tienes talentos ocultos, habilidades secretas, que cuentas con gran entereza y una tenacidad increíble. Cuando lo experimentes sabrás de que te estoy hablando, confía en mi, he padecido lo mismo y ahora vivo extraordinariamente feliz. Algunas veces pensaba en otros que estaban pasando la misma situación y saben que les 27
confieso algo, ustedes también me motivaron a escribir, a plasmar todos mis sentimientos y especialmente a diseñar un modelo de vida que no tomará como protagonista el dolor, sino por el contrario, los protagonistas somos nosotros. Así que cuando inicie este libro pensé en lo que podía aportarle al mundo, a miles de personas que hoy han sido diagnosticadas con Fibromialgia y no tienen quien los aliente y les diga que si se puede ser feliz, a pesar de que parece imposible, ustedes también fueron un motor importante para continuar cada día escribiendo cada página con pasión, sin pensar en si tenía dolor o no, eso ya no era importante para mi, ahora estaba motivada a contarle al mundo como se vive feliz cuando se supera cualquier cosa y más aún cuando se supera el dolor, cuando la razón, la mente y el corazón superan algo tan físico como el dolor. Que maravilla se ha sentido escribir cada página para ustedes, para quienes hoy decidieron tomar como suyo mi libro y entenderlo como una práctica sana no solo para su diagnostico de Fibromialgia, sino también para su vida en general.
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7.
La estrategia que me llevo a controlar el dolor
Yo no te voy a dar formulas milagrosas para enfrentar el dolor, te diré mi experiencia personal, mi forma de hacerlo y obtener resultados. Si tienes dolor, el dolor puede estar, pero es diferente a que percepción tienes del mismo. La percepción del dolor cambia cuando tu cerebro esta dispuesto a afrontar el reto de vencer el dolor. Mi estrategia comenzó con la capacidad de ver las cosas de una manera objetiva, ¿qué pasaría si permaneciera con dolor toda la vida como dicen los médicos? Es una pregunta que me hice, así que la respuesta era simple, debía continuar con mi vida o acabar con ella, pero no sobrevivir, pero como acabar con la vida o sobrevivir no son una opción, yo tomé la alternativa de continuar con mi vida, viviendo. Debes estar dispuesto a vivir de nuevo, a sentir, a amar, a dejarte amar, a compartir, a divertirte, debes estar dispuesto a trabajar, a trazarte metas, a obtener tus sueños, si estas dispuesto, este modelo de vida es para ti. Una vez abras tu mente a los retos que implica retomar tu vida, después de pasar centrado en el dolor, estarás preparado para cualquier cosa en la vida. Pueden haber pasado días, meses e incluso años consumido en el dolor, pero la ventaja de mi estrategia es que no importa cuando tiempo haya pasado, lo único que importa es la disposición que tienes para salir delante de esta historia en la que te habías anclado. Distribuye tu tiempo en diversas actividades de tu preferencia, si trabajas, aporta ideas, diseña una manera de tener una actividad que te motive, igualmente selecciona las cosas 29
que más te gustaba hacer antes de que te dijeran que tenías Fibromialgia. Además, descubre tus habilidades, si algún día te gusto la pintura o te encanta leer, eres amante de la escritura o incluso un critico del cine maravilloso, entonces potencia sus habilidades, sean grandes o pequeñas, es un excelente distractor del dolor. Planea un viaje corto o largo, a un lugar diferente o inesperado, trázate una meta personal: comprar un mejor carro, una mejor casa, estudiar algo nuevo o cualquier meta personal que te lleve a pensar la satisfacción que tendrás cuando finalices, es otro de los factores que utilice para distraer mi mente del dolor. El deporte es vital en este proceso, si, nunca antes has sido amante al deporte, es una buena oportunidad para serlo, al principio se que es un tanto aburrido, yo no he sido deportista consagrada, la primera semana, pensaba que desasistiría, pero ya todo lo asociaba con retomar mi vida y renovada, así que este era el mejor momento para convertir el ejercicio en uno de mis mejores aliados, una semana después tres veces a la semana practicaba una rutina de mi preferencia y ya me hacia falta, todo es cuestión de disciplina, entereza y mucha actitud, el ejercicio se volverá una pasión para ti y además de distraer el dolor, aporta a tu salud, estética y belleza. Comparte con tu esposo, pareja, amigo, amiga, hijos, padres, comparte una y otra vez, agenda alguna actividad en la semana con uno de ellos o con todos y utiliza un espacio imparcial a tu casa, un café, centro comercial, y conversa sobre aquello que te hacia reír en otro momento, recuerda aquellas historias que te divertían y disfruta 100% de ese momento con los seres que te aman. A la hora de dormir, una de mis prácticas es la de la imaginación, pues lo maravilloso del cerebro es que puede ser tan creativo, innovador e imaginativo que puedes apoyarte en el para concebir sueños y convertirlos en realidades. Múltiples veces en la noche pienso en algo extraordinario, lo siento, lo interiorizo y finalmente me quedo dormida, en el sueño más profundo. Distraer el cerebro con imágenes, momentos especiales, experiencias motivadoras vividas, suele ser una manera muy benéfica para conciliar el sueño. Cada una de estas prácticas te llevarán a obtener beneficios increíbles, tanto en el manejo de dolor, como en cualquier área de tu vida. Se trata del conjunto de una dieta saludable, 30
una rutina de ejercicio, desarrollo de actividades de preferencia, conocimiento de tus habilidades para explotarlas a tu favor, sueño reparador y siempre distraer tu mente. Yo lo hice y ahora disfruto de mi vida como una persona completamente normal, sin dolor, porque el protagonista de mi vida soy yo. No permito que vengan a mi pensamientos negativos y mucho menos una fuerza que me haga desistir, toma mi fuerza y tenacidad las utilizó para hacer todo lo que me he propuesto, toda mi actitud la pongo cada día en práctica y puedo dar fe de ello, puedo demostrarte que mi vida se ha transformado a través de estas línea, si el dolor fuese mi centro no habría escrito para ti, no sería capaz de pasar horas y horas, extensas jornadas escribiendo y pensando cada palabra para ayudarte a ti y a miles de personas que hoy necesitan mi ayuda, tu ayuda. Transforma tu vida, no existe ningún riesgo, solo es cuestión de decisión, actúa y ejecuta. Ahora que te lo he contado todo, solo espero haberte ayudado, pero especialmente haber dejado en ti una huella especial, una inspiración de vida para que lleves a cabo tu historia con la actitud y entereza suficientes, hoy mismo es tu momento y yo estoy aquí para ayudarte. Cuando tus fuerzas fallen lee, detente en las estrofas que más te llenaron de emoción, que más te aportaron y continua, no mires atrás, eso nunca, tu eres un héroe que junto a mí podrás contar tu historia y al igual que yo cuando les he contado a mis amigos, a mi familia, sus ojos se llenan de lagrimas y de admiración al saber todo lo que he pasado para volver a ser la misma de antes, en una mejor versión de mi. Gracias es lo único que puedo decir por la maravillosa experiencia de vivir intensamente la vida cada día, cada instante y dejarme ser yo misma.
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Índice Dolor y más dolor. ¿Y que es Fibromialgia, que sucede con tu vida? Aprendiendo a combatir la Fibromialgia o dolor crónico. Las terribles crisis de dolor en la fibromialgia. El límite que le pones a la fibromialgia Estilo de Vida y Mitigación del Dolor La estrategia que me llevo a controlar el dolor
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