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Spanish Pages [308] Year 2009
i
de aquel hecho memorable, que tanta influencia ha tenido en el
desarrollo de la civilización
moderna y en la
felicidad del
género humano.
Los europeos no tenian ningún conocimiento déla exisuna intuición del
tencia de este vasto continente; apenas, por
genio, algunos fdósofos antiguos hablan previsto que allá
mas
de los límites occidentales del viejo mundo, debian exis-
tir islas
ó continentes en el vasto océano, por el cual ningún
navegante era osado á penetrar; y aunque es indudable que á íines del siglo X los Normandos ó Scandinavcs descubric-
HISTORIA ARGENTINA,
18 ron una parte de
nombre de
América septentrional, á que dieron
la
el
Yinlandia, preciso es reconocer que ese aconts-
cimiento quedó ignorado del
menor influencia en progresos de
la
Después de
mundo
y no tuvo la en los
civilizado,
los adelantos de las ciencias ni
humanidad.
desmembración
la
del imperio
comercio del Oriente, que proveía á
la
romano,
el
Europa de sedas,
especerías, piedras preciosas y otros géneros, se hacia por los puertos italianos,
y á
él
debian su grandeza las repúbli-
cas de Yenecia, de Pisa y Genova, que derramaban en los
demás Estados
las
riquezas recojidas por sus naves en los
puertos de Levante.
Habiendo adquirido España y Portugal en
una grande importancia
política, aspiraron
el
siglo
XY,
naturalmente á
«¡manciparse del monopolio que los lombardos (como se
/llamaban entonces) ejercían en aquel valiosísimo arte de
tráfico.
El
navegar habia hecho muchos progresos; se habia ge-
neralizado
el
uso de
la
Brújula descubierta á mediados del
si-
glo XIII, y los Portugueses hablan aplicado el astrolabio para
tomar
A
y arreglar
la altura del sol
fines del siglo
XIY
la
las tablas
tado las islas Canarias, una de las cuales
desde
el
límite del
de su declinación.
España habia descubierto ó frecuen(la
de Ferro) servia,
tiempo de Ptolomeo, de primer meridiano, como
mundo
conocido; á principios del
por casualidad un marino portugués
la isla
XV
descubrió
de Puerto SaiUo
(1418); y sus pobladores visitaron dos años después la de
Madera.
A
la vuelta
de poco tiempo se descubrieron tam-
bién las de Cabo Yerde (1446) y las de los Azores (1449).
Estos descubrimientos se hacian accidentalmente, porque el
camino que
de
la costa occidental
(d
Sud, con
la
los navegantes deí siglo
XY
seguían, era
el
de África, que iban reconociendo hacia
esperanza de doblar su úhimo estremo, para
llegar por allí rectamente á los
mercados de
la India, eiiipre-
EL DESCUBRIMIENTO.
20 de Noviembre de 1497 por
fué realizada en
sa
que
el
navegante portugués Vasco de Gama.
al fin
IQ
Colon
Pero cinco años
un Nuevo Mundo, siguiendo un rumbo diferente con la mira de llegar al mismo resultado por un camino nuevo y mas directo. antes
CrxiSTÓBAL
,
Genova por
Cristóbal Colon nació en
Desde su mas
tierna
habia descubierta
los años de 1436.
edad se dedicó á
hizo su aprendizaje bajo
la
la
dirección de
que, según parece, se ocupaba de hacer el
navegación
el
hija
la
habia estado
gobernador de Santo
de Bartolomé Parestrello
al servicio del infante
la isla
Casó en Lis,
marino qué
D. Juan, y habia sido
recientemente descubierta de Puerta
y este matrimonio
;
é
Hacia
corso.
año de 1470 se estableció en Portugal.
boa con
,
un pariente suyo,
puso en posesión de los
le
instrumentos, cartas náuticas, y diarios de viaje de aquel
navegante esperimentado. Sus estudios, escritos antiguos á
mientos adquiridos
la
lectura de los
que aludimos mas arriba, en un viaje
que
hal)ia
los conoci-
hecho
á
ís-
landia en 1477, el testimonio de otros pilotos y su propia
esperiencia
sobre
la
le
,
dieren márjen
navegación por
India, pues
«
á conjeturar y discurrir
Occidente para dirijirse á
el
que del mismo modo
(dice
nando) que los Portugueses navegaron tan lejos dia, tierra
podria
navegarse
vuelta
la
al
medio
Occidente y hallar
en aquel viaje.»
Imbuido en
esta
grande idea, demasiado avanzada para
su época, hizo Colon su á
de
la
su hijo D. Fer-
cabo proponiéndola
al
primera tentativa
para llevarla
rey de Portugal, en cuyo pais
residía.
Algunos han referido que primeramente habia propuesto su proyecto voino
un sueño
á la Señoría de 6
una fábula.
declararen poco mas ó
monos
Genova,
lo
que se despreció
Los cosmógrafos portugueses lo
mismo; y Colon
se
puso en
HISTORIA ARGENTINA.
20
España en 1484 con
viaje para
esperanza de alcanzar
la
protección de los Reyes Católicos.
la
Poco propicias eran para encontrar pañola hacia
allí
las
circunstancias de aquel reino,
mas
acojida
favorable.
La nación
es-
último esfuerzo para espulsar á los Moros
el
que, después de una ocupación de
siete siglos,
conservaban
todavía en su poder el rico reino de Granada; y Fernando é Isabel estaban haciendo personalmente los preparativos
para abrir
campaña contra Boabdil y
la
En tales
completamente de recursos, se presentó
un
y viajando
sándose en
un poco de agua y pan para
á pedir
el
Así
su
á pasar
prior fray Juan Pérez de Marchena, é intere-
la suerte
de los viajeros, supo quien era Colon
proyecto con que iba á España. Fray Juan Pérez, aper-
el
cibido de la importancia de este proyecto,
autor á Fray Fernando
recomendó
Talavera, confesor de
Colcn partió en busca de
los
la
á su
la reina;
Reyes católicos que á
estaban en Córdoba, próximos á abrir los
á pié.
La Rábida,
pequeño Diego, que llevaba consigo. Acertó
por su lado
y
fujitivo
dia alas puertas del ccnvento de
en Andalucía, hijo
el Zagal.
circunstancias, llegó Colon á España, destituido
la
y sazón
campaña contra
Moros.
Engolfados en los asuntos de taron poca atención resolvieron que
el
al
facultades én la
lugar en frailes
el
guerra, los reyes presal
cabo de un año
proyecto fuera examinado en Salamanca
por una junta de Maestros en estas
la
recien venido, y
astrolojia y cosmografía que leían
Universidad.
Las conferencias tenian
convento dominico de San
eran los únicos
que apoyaban
Esteban,
á Colon;
ausilio redujo á su opinión á algunos de los
junta, particularmente
pués ascendió
mas decidido
al
al
cuyos
y con su
sabios de
la
dominico Diego de Deza, que des-
Arzobispado de Sevilla y fué siempre el Sin embargo, como
protector del Almirante.
EL DESCUBRIMIENTO. ios
2Í
demás cosmógrafos no pudieron comprender
las
razones
en que fundaba éste sus cálculos, nada se decidió por entonces, y Colon tuvo que resignarse á andar siguiendo á la corte,
que
se trasladaba de
cesidades de
la política
un punto
á otro, según las ne-
con
ó de la guerra,
la
esperanza de
conseguir algún dia una resolución favorable á sus intentos. Al
fin,
urjida por las instancias de Colon, la junta de
sabios se pronunció declarando que su proyecto «era vano,
«impracticable y fundado en bases demasiado frájiles para «
merecer
el
apoyo del gobierno
sentencia fué acompañada de
consideración cuando acabase
Colon entonces se
»
la
la
dirijió á los
pero esta desalentadora
;
promesa de tomarlo en guerra.
poderosos duques de Me-
dina Sidonia y de Medina Cceli, y aunque de ambos obtuvo la
mas
cortés acoj ida, habiendo vivido dos años á espensas
pudo concertar con
del segundo, nada
grande empresa que meditaba.
ellos respecto á
la
Perdida ya su esperanza
en España, se resolvió á pasar á Francia, á consecuencia de cartas que habia recibido de aquella corte; y con ese objeto se
encaminó
hijo Diego
que
al
allí
convento de La Rábida
El digno prior fray Juan Pérez,
presionado con
la
desagradablemente im-
resolución de Colon,
detuviera hasta saber
el
suplicó que se
le
resultado de una nueva tentativa
que iba á hacer personalmente cerca de de quien en otro tiempo habia sido fraile
á recojer á su
habia quedado educándose.
la
reina Isabel,
El buen montó una noche en su muía, y atravesando las confesor.
comarcas recientemente ganadas á los moros, se presentó
en
la
nueva ciudad de Santa-Fé, que
fundar en
hlemente
la
Vega de Granada.
los reyes
La reina
acababan de
recibió favora-
al prior; y apoyada su instancia por la marquesa de Moya y los dos Contadores mayores, ó Ministros de Hacienda de Aragón y de Castilla, consintió en reanudar las
HISTORIA ArxGE>'TINA.
22
negociaciones con Colon, á quien se
le invitó á
trasladarse
á Santa-Fé, dándole del real tesoro cuanto necesitaba para
su viaje y para presentarse dignamente en
la brillante
corte
de los Reyes católicos.
Colon acudió á
en vísperas de rendirse Granada,
la cita,
de cuyo acontecimiento fué
testigo.
Admitido á presencia
espuso nuevamente y con gran calor los fundamentos de su hipótesis, procurando despertar la conode los reyes
,
,
cida avidez del rey Fernando, repitiendo las espléndidas
descripciones
hechas por Marco
Mangi y de Cathay; y
la
Isabel con la perspectiva de
conquistas de
la
El inspirado
Polo de los
reinos de
piedad de
inagotable
la
Cruz.
marino terminó protestando que toda
ganancia de su empresa queria que
se
mismo Colon en su
el
Altezas se rieron, y dijeron que
les
la
emplease en
diario de viaje
la
(como
conquista del Santo Sepulcro; «oyendo lo cual
recuerda
reina
estensos paises abiertos alas
)
lo
Vuestras
placía, y que sin esto tenían
aquella gana.
La negociación
se había entablado bajo los mejores aus-
y prometía cumplido éxito, cuando se presentó un obstáculo que hubo de malograrla. Colon exijia como re-
picios,
compensa de sus título
servicios, para
sí
y sus herederos,
el
autoridad de Almirante y Yirey de todas
y que descubriese, y que en ella se obtuvieran. la
tierras
la
las
décima parte de los productos
La reina
,
por consejo de su
confesor Talavera, declaró inadmisibles estas exijencias, y como Colon no quiso modificarlas, la negociación fué rota,
y él se puso en camino desesperado y abatido. Pero sus amigos hicieron valer razones tan poderosas en el ánimo de
la
magnánima
Isabel
,
que
al fin
,
cediendo á los im-
pulsos de su corazón generoso, declaró que ella asumia responsabilidad de
la
empresa para su corona de
la
Castilla,
EL DESCUBRIMIENTO. y que
no alcanzaban, empeñaria
los fondos del tesoro
si
23
sus propias joyas para llevarla á cabo.
Un mensajero
alcanzó
1492 quedaron ajustadas
Abril de
las cuales los
Reyes
y
—El nombramiento
^
tierras firmes
noticia;
las
dos
á
17 de
el
y
capitulaciones, por
como señores
católicos
acordaron á D. Cristóbal Colon 1.
Colon
desconsolado
al
leguas de Granada con la agradable
mar océano,
del
lo siguiente:
de Almirante, en todas
que descubriese, para
sí
las islas
y sus sucesores
perpetuamente.
— El
2.° ral
nombramiento de Virey y gobernador geneterritorios, con derecbo á elejir y pre-
en los mismos
sentar tres personas para cada
para
el
empleo de
—La décima de todo cuanto dentro de mismos. 4.® — La y ó en sus delegados. 5.° — El derecho de tener un octavo de ^
3.
los necesarios
gobierno de los paises descubiertos por parte
se
él.
adquiriese
los
jurisdicción civil
mismos
toda
espedicion
siera
poner otro tanto de
á
los
criminal, privativa en él,
paises
,
en
en
beneficio
que
él
qui-
capital.
Asi terminó esta larga y memorable negociación, en cual,
según
la
espresion de un poeta italiano
gente marino que
,
el
la
indi-
andaba prometiendo imperios, encon-
en una mujer de
noble corazón y en dos apoyo y protección que necesitaba para demostrar con evidencia la verdad de su tró
al
frailes
teoria,
fin
de
alta intelijencia,
que
demencia.
los
sabios
,
el
de
aquel tiempo clasificaban de
(1)
La mujer, Isabel la Católica; los dos frailes, Fray Juax 1. Pérez Marchena, franciscano; Fray Diego de Deza dominico. De la reina, dice Colon en una de sus cartas: "En todos hobo incredulidad;/ á la reina mi Señora dio dello nuestro Señor el espíritu de iutelíjeucia y esfuerzo grande, y la hizo de todo heredera coinu ,
HISTORIA ARGENTINA.
24
La reina espidió órdenes urjenles para que se aprontaran naves y se buscasen los hombres á propósito para
las
La pequeña
aquella arriesgada aventura.
villa
de Palos fué
obligada á poner á sus órdenes prontas para navegar dos carabelas;
y
otra
fué armada por
Martin Alonso Pinzón,
vecino de aquel lugar, que tomó parte
muy
principal en la
ospedicion, con dos hermanos y otros parientes y amigos
suyos. las muchas contrariedades que ofrearmamento déla espedicion, por la natur¿ileza misma una empresa tan nueva, hecha en parte con hombres
Después de vencer cia el (le
forzados,
todo
en los primeros dias de
estuvo pronto
Agosto; y esta famosa armada destinada á descubrir un mundo fabuloso en mares desconocidos, se componia de tres
pequeños buques, uno con cubierta, llamado Santa en que iba
diaria,
Jai Pinta,
el
Almirante; y dos pequeñas carabelas.
mandada por Martin Pinzón, y
la JSiña,
por su
hermano Vicente Yañez. Tripulábanla noventa marineros; incluso el y el número total de personas embarcadas ,
Almirante y oficiales, era deciento veiat3 hombres! Colon, seguido de sus compañeros de fortuna, se preparó atan
^Tande aventura, asistiendo íiesta
de
la
el dia
Virgen María en
en donde recibieron t)dos
el
de manos de fray Juan Pérez,
el
2 de Agosto
á la gran
Convento de La Rábida,
sacramento de (1)
que veia
la
Eucaristía
al fin
pronto á
muy amada hija. La ip^noraucia en que hablan estado todos (luisieronenmendallo traspasando el poco saber á fablar en inconvenientes y gastos. Su alteza lo aprobaba al contrario y lo sostuvo íasta que pudo. (Navarrete T. ], p. 26íi.) De los otrof! protectores íí que alude el texto, dice en la introducción al tercer viaje: "Porque todos los que habian entendido en ello y oido esta plática, todos á una lo tenian á burla, saho dos frailes que siempre fueron constantes." (T. 1, p. 242)
á cara y
1.
"Washington Irving; History and
life
of Colymbus.
EL DESCüBRmiENTO. realizarse
y
un hecho que con
dio la vela de
1492,
barra de Saltes en
la
á las 8
el
12, y
hasta
el
se detuvo haciendo
Setiembre,
6 de
de
mañana,
la
Puerto de Palos, con
dirección á las islas Canarias. Llegó á allí
promovido;
tanto ardor hahia
viernes,' 3 de Agosto de
el
25
la
Gomera
reparaciones en
dia
el
Pinta
la
en que dio principio
su
á
inmortal viaje de descubrimiento, internándose en las des-
conocidas soledades del océano.
Contando desde ese tierra americana,
pasó
ellos
el
dia,
duró
el
hasta que tocó en viaje
treinta y
primera
la
ocho
En
dias.
Almirante supremas angustias, porque po-
cos estaban animados de su fé en
el
resultado, y ninguno
firme como Todo el viaje fué favorecido por tiempos bonancibles, como que se hacia en los primeros dias del otoño. Sin embargo, un hecho, alarmante por su novedad, ocurrió en aquella navegación, capaz de conmover un alma menos serena que la del Almirante. El 13 de Setiembre, estaba dotado de carácter tan perseverante y
el
suyo.
hallándose á unos 2J grados al oeste del meridiano de las Azores, se notó por la primera vez en la historia
de la navegación,
variación
la
magnética de
suceso puso en gran cuidado á
Este
Colon
lo
el
movimiento notado estaba en
en
el
píritu
lo
que tuvo
sobresaltado de sus
mansedumbre de
las
agujas.
pero
Pilotos,
con razones especiosas, diciendo, que
esplicó
imán, con
los
la
mar y
la
la
estrella
no
polar y
fortuna de aquietar
es-
el
compañeros, para quienes la
tranquilidad
misma de
vientos, era motivo de nuevas alarmas, porque decian
no los tendrian para volverse á España.
la
los
que
Halagados, sin
embargo, con los indicios que á medida que avanzaban hacia
el
occidente iban
creyeron ver tierra á
descubriendo, en dos
lo lejos,
ocasiones
y en una llegó Colon en
su piadoso entusiasmo á arrodillarse y entonar
el Gloria;
26
HISTORIA ARGENTINA.
mas no tardaban en desvanecerse sus
ilusiones, crecía el
desaliento de los navegantes, y al fin llegó á arraigarse en
mayor
la
de ellos
parte
avanzaban
que cada paso que
idea de
la
aproximaba
les
á
una pérdida segura.
Mo-
mentos hubo en que todo pudo malograrse por estos mores; y solo la enerjía y la constancia del marino, lograron sobreponerse á los peligros de
te-
inspirado la sedición
del temor.
y
Al cabo de tantas
mentaron de
la
los
tierra;
zozobras,
bandadas
sobre los mástiles de
de
ser el precursor
de
11 de Octubre
marino
al
la
au-
proximidad
pasaban volando por
pájaros
pequeña escuadra anunciando
la
la
un pedazo de madera labrada vino
cercanía de los bosques; á
el dia
signos que indican
la
proximidad del hombre
—Los
ánimos recobraron entonces serenidad y confianza, y el Almirante ordenó la mayor vigilancia y las precauciones oportunas para no dar en
de
la costa
A
de improviso.
las
10
noche creyó Colon ver una luz que se movia, y por á las dos de la madrugada un marinero de la Pinta,
la
fin
que llevaba
la delantera,
descubrió á
la luz
tierra,
fuego á
mecha gritando alborozado:
la
Cuando
de
la
luna una
y lanzándose sobre una lombarda, dio
punta de
aclaró
el
dia
apareció
tierra, tierra!
á la vista
de
los
fe-
lices navegantes
una
posesión de
en nombre de los Reyes católicos y la le daban el nombre de
de lujosa vejetacion, y poblada de gente hermosa y desnuda. El Almirante tomó ella
isla cubierta
llamó San Salvador: los naturales
Guanahaní y está situada entre 24« y 25^ de latitud norte. Colon visitó en seguida las pequeñas islas inmediatas; recorrió
en
la
una parte de
la
de Cuba, y fundó una fortaleza
de Haití, que denominó
Enero de 1493 emprendió su
la ílispaniola:
y en
el
mes de
viaje de regreso.
La navegación fué tempestuosa, y
el
gran secreto
de
la
EL DESCUBRIMIENTO. existencia de al
27
un nuevo mundo que acababa de arrancar
océano, bubo de quedar sepultado en sus profundos se-
nos.
Pudo
al fin
donde fué
entrar de arribada al rio Tajo,
bien acojido por
el
rey de Portugal Juan
de los que
las pérfidas intenciones
II,
no obstante
aconsejaron que lu-
le
de su
ciera matar á Colon para privar á Castilla del fruto
descubrimiento.
De el
mismo
puerto de Palos, de donde babia
meses y once
dias antes. Inútil seria encarecer
pasó
allí
salido siete
al
alborozo de los habitantes de aquella pequeña población
marítima,
en
al
verde regreso á
mare tenehrosum
.
([ue se hallaba
que creian perdidos
los
mar
soledades de aquel
las
á
que
los antiguos
Colon se encaminó sin tardanza
quizcá
llamaban
á
la
corte
en Barcelona, siendo su tránsito por toda
España un continuado
triunfo,
la
porque de todas partes sallan
y conocer al descubridor del ISuevo Mundo. mediados de Abril llegó Colon á la capital de Cata-
á saludar
A luña,
allí
fué recibido por los reyes con las
muestras de aprecio. Los emplados y
mas señaladas
nobleza salieron
la
á recibirle á las puertas de la ciudad; y al presentarse en la sala del trono,
monarcas españoles
los
encuentro tendiéndole
la
sin ejemplo en aquella corte ceremoniosa.
ciones, observa Isabel, las
el
salieron al
le
mano, rasgo de condescendencia
historiador
reservadas siempre
al
Estas demostra-
americano de rango ó á
la
la
grande
fortuna, ó á
empresas militares que cuestan lágrimas y sangre el homenaje tributado á la capacidad ,
eran en esta ocasión intelectual
empleada en beneficio de los mas nobles inte-
reses de la humanidad.
Colon hizo á los reyes
la
relación
pomposa de sus des-
cubrimientos y de la riqueza que prometían en toda clase de producciones naturales; y terminó encareciendo el vasto
campo que
se
abria á
la
difusión
de
las luces del cris-
28
HISTORIA ARGENTINA.
tianismo, en los habitantes de las nuevas tierras descubiertas.
Cuando terminó su elocuente descripción, y todos
los
coro de
presentes, cayeron
la Capilla real
entonaba
el
de rodillas, el
rey, la reina
mientras
el
Te-Deiwi en acción de
gracias al
Todo-Poderoso por un suceso tan estraordinay cuya trascendencia en lo futuro apenas podian vagamente presentir los contemporáneos. rio,
CAPÍTULO
II.
AMERÍCO VESPUCIO. Como
se dio al
nuevo mundo
el
nombre de America— Biografía
de Vespucio.
1512. El desbubrimiento del nuevo mundo se habia hecho de «na manera providencial. Cristóbal Colon buscaba por el Occidente una ruta mas corta para llegar á los estreñios del Asia; le hacia
y cuando se encontró con la tierra que su jénio prever hacia ese rumbo, creyó efectivamente que
habia dado con las islas déla Especería, ó de él decía.
Regresado
la
India
como
España, fué provisto por los reyes catóUcos con mejores elementos para adelantar sus desá
cubrimientos, y entres viajes mas que hizo, tomó posesión ellos de las islas Antillas y de una parte
m nombre de de
que
la costa
firme, adquiriendo
al fin el convencimiento de eran parte de un gran contientonces desconocido.
las tierras descubiertas,
nente intermedio y hasta Sus empresas abrieron vastísimo campo á la ambición 3^ á la fortuna. El doble atractivo de la novedad y de la riqueza, movió
á los pilotos
que
le
habían acompañada
,
29
EL DESCUBRIMIENTO.
en su primer viaje, á lanzarse tras de sus huellas; y en una de esas espediciones, armada por el hazañoso Alonso no se sabe en que carácter so embarcó (le Ilojeda AMÉrxico Vespucio, cuyo nombre se ha inmortalizado ,
,
por un verdadero capricho de
con
el
la
fortuna, identificándose
Es propio
descubrimiento del Nuevo Mundo.
di3
una breve noticia de aquel hombre y de lo que dio motivo á su celebridad inmerecida. Un año después del fallecimiento de Colon (1) se publicó en Lorena un tratado de Cosmografía, seguido de este lugar dar
cuatro relaciones de viajes
de Américo Yespucio, en que cuarta parte del
se atribuye á este el descubrimiento
de
Mundo, y Amcyicak
de dar
se
varias
la
propiedad
recien
paises
los
traducido á Italia
insinúa
la
el
nombre do
descubiertos. Este libro fué
lenguas, y popularizado en Alemania,
y otros paises; y aunque en España, donde
no era conocido,
se les (laba entonces,
nombre de
fin prevaleció universal-
siempre,
el
ment3
de América con que fué dada á conocer
el
Indias,
nuevamente descubierta, en circulaban en
Pero esta
el
mundo
injusticia
al
el libro
y se les conservó la tierra
los tratados de geografía
que
civilizado.
no
seria tan chocante, si
no fuera
la
revelación que han venido á hacer modernas investigacio-
nes históricas, de nes de viaje
las cuales se infiere,
escrit'.s
que aquellas relacio-
por Yespucio, no están basadas en
la única noticia que hay de Nuevo Mundo hecho por él, es la que mas arriba he recordado, y aun en esa, no siendo Américo el gefe
observaciones personales, pues
un
viaje al
de
la
espedicion, mal podia atribuirse les honores del gran
Cristóbal Colon murió en Valhdolid el 20 de ]\rayo de 1506, edad de 70 años, próximaiiieute. Sus resfos fueron trasladados ú la isla de Santo Domingo (Haití) venando esta pasó á los Irán ceses, se llevaron á la Habana, en cuya Catedral exit^ten. 1.
ú
la
^
30
HISTORIA ARGENTINA.
ílescubrimiento.
Justo es decir, sin embargo, que
la crítica bistórica
figurado viajes que no bizo, no le atribuye por eso
pación déla gloria de Colon, puesto que no fué editor del libro
dio
al
bien
si
acusa á Yespucio de impostura per baber
mencionado
Nuevo 3íundo
el
la
él,
usur-
sino
el
antes, quien por la primera vez
nombre de América.
Américo Yespucio nació en Florencia, y recibió una buena educación bajo
la
dirección de su
tio
Fr. Jorge, religioso
de San Marcos; pasó después á España, en donde como dependiente ó asociado, se encontraba en 1495 en la casa de comercio de su paisano Juan Berardi, vecino de Sevilla, el cual
como amigo y después apoderado
del Almiranta
Co-
lon, fué comisionado en varias ocasiones por el gobierno
para los aprestos de las la el
flotillas
que se despachaban para
Española.
Berardi murió afines de aquel año; y desde siguiente fué confiada á Yespucio la comisión que él
desempeñaba.
En 1499
fué llevado por Ilojeda en la
es-
pedicion que armó para descubrir en Tierra firme, y es est i la única vez que consta hubiese navegado estando en Es-
De ese viaje regresó en 1500; y entonces parees que pasó á Portugal, desde donde pudo hacer algunos viajes en clase de subalt9rno; pues no hay constancia en los archi-
paña.
vos de aquel reino, de que hubiese sido empleado por gobierno, ni el menor rastro de navegaciones en que lomase parte.
En 1505 obtuvo en España pleado por el rey, con
carta de naturaleza, y fué
el título
el
el
em-
de Capitán, en asuntos de
navegación; se ocupó después en negocio de provisión de buques, y en 1508 se le espidió el título de Piloto mayor, con encargo de examinar á los demás pilotos, ganando el sueldo de 75 mil reales
al
año, y siendo de su deber organi-
zar un Padrón real en que se demarcase con exactitud las tierras pertenecientes
á
la
España.
Desempeñando
estas
EL DESCUBRIMIENTO. funciones,
31
permaneció en Sevilla hasta su fallecimienta
que ocurrió á 12 de Febrero de 1512. Tal es la sucinta biografía de este hombre, que después ^
de haber pasado por uno de los mas famosos descubridores del Nuevo Mundo, y de haber identificado con él su
nombre, llamado
á juicio ante el tribunal de la Historia,
ha sido despojado de
la
aureola gloriosa con que aparecía
ceñido por un capricho de
la fortuna.
CAPÍTULO
III.
JUAN DÍAZ DE SOLIS. División entre los dominios de España y Poríugal: Bulada Alejandro VT: Tratado de Tordesillas— Descubrimientos hacia el Sud—
Noticia de Solis— Descubre
Kio de
el
la Plata,
y muere en
su márjen izquierda.
1515 á 1516. Luego que
los españoles reconocieron las
costas
sep-
demás que forman certidumbre de que las
tentrionales del continente del Sud, y las el
seno mejicano, adquirieron
tierras descubiertas
y aunque
este
las rej iones
no eran
del oro,
la
la
India que buscaban; los
hacia dueños de
su ambición no se encontraba satisel
que producían
pié en las
la
seda.
Ya hemos dicho en
el
capítulo 1.
buscaban, desde muchos años llas
de
hallazgo inesperado
fecha mientras no pusieran especería y
la
las
rejiones siguiendo
las-
antes,
^ que
los Portugueses
un paso
directo á aque-
costas meridionales del África. Sus
descubrimientos fueron escrupulosamente respetados por Ins reyes españoles, como se ve por las instrucciones con que
despachaban á
los
marinos que enviaban á descubrir
iiai-Kv
32
HISTORIA ARGENTINA. Pero
el occidente.
importancia de los que estos hacían,
la
y las ideas admitidas en aquellos tiempos, les indujo á buscar en un una autoridad acatada universalmente por los poderes europeos, un
título
que
les garanliese la
posesión
tranquila de sus nuevas adquisiciones.
Desde
época de
la
las
se hablan habituado del
Sumo
á
Cruzadas, los príncipes cristianos reconocer
la
soberanía eminente
Pontífice sobre los paises ocupados por infieles.
Los Portugueses hablan tenido cuidado de asegurar sus posesiones de África,
obteniendo bulas
varios Papas. Los monarcas españoles á la al
misma
de concesión de ocurrieron,
pues,
autoridad para asegurar las que ellos hacian
occidente;
y con ese
fin
espidió Alejandro YI su famosa
bula de 4 de Mayo de 1493, por la cual se dividían los do-
minios de España y Portugal, por una línea imaginaria y que pasarla á distancia de cien le-
tirada de polo k polo
guas
al
Oeste de las islas Azores y de Cabo Yerde.
Fundándose en año siguiente
el
este título, las
nea mencionada en al
Oeste de las
dos coronas celebraron
Tratado de Tordesillas, por
islas
la
el
cual la
el lí-
Bula, debia colocarse á 370 leguas
de Cabo Yerde.
Tal es
el oríjen
de
la
España y Portugal, cuestiones, que hoy mismo es-
división de límites entre las coronas de
que debia dar lugar
á tintas
tán todavía sin resolverse entre
los pueblos
pado
se
los territorios
que entonces
que han ocu-
esploraba.
,
Mientras que los navegantes castellanos continuaban ha-
ciendo sus descubrimientos hacia
el
occidente, los portu-
gueses adelantaban los suyos siguiendo hacia el Sud, hasta que Yasco de
Gama
las costas
dobló
el
de África
cabo me-
de aquel continente en 1497 y por el rumbo del oriente se dirijió á la India. Yicente Yañez Pinzón, uno de ri.lional
los gefes )!ost.i
de
la
primera espedicion de Colon, corriendo
firme de América, fué
el
la
primer piloto europeo que
EL DESCUBRIMIEINTO.
33
atravesó la equinoxial y reconoció la costa del Brasil
de Enero de 1500. Por
una espedicion guiendo
la ruta
tado hacia
océano
al
mismo tiempo
el
mando de
Pedro Álvarez
descubierta por
el
20
de Portugal
salia
Cabral
si-
Gama, y habiéndose apar-
oeste de las costas africanas, las corrientes del
el
lo arrastraron,
y tocó por casualidad, en Abril de
aquel año, en las mismas costas que Pinzón acababa de reconocer. Cabral tomó posesión de ellas por
portuguesa, y tras de
él
empezó
la
la
colonización de
ccrona la tierra
de Santa Cruz. Entre las varias espediciones que salieron entonces de
España para
el
Nuevo Mundo, debe
fijar
nuestra atención
la
que partió de San Lúcar
el
la
primera que se acercó á
las costas argentinas,
ber venido en ella P»io
de
el
29 de Junio de 1508, por ser y por ha-
célebre Juan de Solis, descubridor del
la Plata.
Era Solis natural de Lebrija, en Andalucía; y aunque no podemos afirmarlo, parece que se hizo notable en el arte de
la
navegación estando
servicio del rey de Portugal,
al
de quien se quejaba en 1512,
cruzados que
1506
salió
le
porque no
le
pagaba 800
adeudaba por cuenta de sus servicios.
con Vicente Pinzón
mientos de Colon en
la cesta
á
En
proseguir los descubri-
firme, esplordudo parte de la
península de Yucatm.
-Cuando regresaron sado á Ñapóles, con
ganado para
la
á
España,
el
el
rey Fernando habia pa-
doble objeto de visitar este reino
corona de España por
Capitán^ y de vigilar la conducta de este
que causaba celos
al
la
espada del Gran
poderoso vasallo,
monarca suspicaz. El rey volvió á
en Agosto de 1507 y hasta entonces no volvió á pensar en sus conquistas de ultramar, que habia tenido Castilla
apartadas
y de
la
de su
memoria
á
causa del mencionado viaje
delicada situación en
que
los
asuntos internos ó
HISTORIA ARGENTINA.
34 habían quedado
na
consecuencia de
á
la
muerte de
la rei-
Isabel.
En Febrero
de 1508, llamó, pues, á
la corte á los pilotos
Yespucio, La Cosa, Solis y Pinzón, con el objeto de consultarles, y después de oirlos resolvió que estos dos últimos salieran á descubrir á espaldas de Castilla del Oro, (1) para lo cual era necesario doblar
conocido aun, de
el
Los esploradores corrieron toda saron á
estremo meridional, no
las tierras descubiertas.
la altura del
Rio de
garon bástalos 40 grados de
la costa del
Brasil; pa-
Plata sin encontrarlo,
la
latitud
y lleSud, tomando pose-
sión por la Corona de Castilla de las tierras que recorrían,
«La falta de buena armenia, dice Navarrete, y que hubo entre los principales caudillos de
la
Lo cierto unes de Octubre de 1509.» De aquí
un
coartaron sus progresos.
es
pleito en-
fué enviado preso
pero poco después fué declarado libre de toda
á la Corte;
culpa, y elevado á
Nombróle
el
mayores honores.
rey, á la muerte de Yespucio, para el pues-
de Piloto mayor que este desempeñaba,
to
espedicion
que regresaron á
resultó
consecuencia del cual Solis
tre ellos, á
los altercados
el
28 de Marzo
de
1512; y el 24 de Abril se le pagó del real tesoro una indemnización de 34 mil maravedís, fuera de su sueldo que era de 75 mil, con deducción de 10 mil en favor de la viuda de su antecesor. Solis fué
comisionado poco después para mandar una
espedicion que debia
de
resolvió
por dt'l
1.
ir
á descubrir por Malaca
y
las islas
Especería, pero habiendo quedado esta sin efecto,
la
él
emprender á su costa
el
y Pinzón seis años antes, de
nuevo continente, con Aíii se
llamaba
lo
que
es
la
descubrimiento tentado las costas
meridionales
esperanza de encontrar
hoy Centro America.
el
pa-
— EL DESCUBRIMIENTO. SO que debía conducir
al
35
mar que Vasco Nuñez de Balboa El 24 de Noviembre de 1514
había descubierto en 1513.
se firmó el contrato para llevar á cabo
Rey puso en
este viaje de descu-
empresa 4,000 ducados de oro, siendo obligación de Solis preparar una carabela de El
brimiento.
la
sesenta toneladas y dos de treinta, y hacer todos los gastos de
la
Los beneficios que de
espedicion.
taran serian divididos en tres partes, una para
para Solis y
la
tercera para las tripulaciones.
demás
ella resul-
rey, otra
el
El rey dio
también, con cargo de devolución, cuatro lombardas gran-
y sesenta coseletes con sus armaduras de cabeza. le adelantó año y medio de sus sueldos de Pi-
des,
Ademas,
mayor
loto
res
que
le
y un año
del reino,
á su
cuñado Francisco Tor-
acompañaba como segundo; todo
esto sin perjui-
recompensas que prometía hacerle según fuese
cio de otras
naturaleza de los servicios que hiciera á
la
la
Corona en
la
espedicion.
Cerca de once meses tjrdó esta en aprontarse; y
al
fin,
dejando nombrado á un hermano suyo para que desempeñase su empleo en Sevilla, dio la vela del puerto de Lepe
La
8 de Octubre de 1515.
el fe,
y pasó á
te,
marcando
titud
la costa del
las latitudes
que reconoció prolijamen-
de todos los puntos con
Llegando
á
Islas
las
de Lobos,
Este y tomó puerto en Maldonado,
Nuestra Señera de conjeturar
dad.
la
exac-
que permitían los instrumentos náuticos de aquel
tiempo.
1516
Teneri-
escuadrilla tocó en
Brasil,
día (1)
la
al
que dio
la
el
Candelaria, cuya circunstancia
que descubrió aquel lugar que
rumbo al nombre de
hizo
Iglesia
Siguió desde
católica
allí la
el
me
hace
2 de Febrero de
consagra á esta
festivi-
dirección de la cesta, hasta que
Esta opinión es esclusivamente mia, y la fundo en la conocilos viajeros de aquella época de dar á los paise» que descubrían el nombre de la fiesta, ó del santo del dia. 1.
da costnmbre de
HISTORIA ARGENTINA.
36 reconociendo
la calidad
del agua en
que navegaba, dio
el
nombre de Mar Dulce, á lo que es hoy el Rio de la Plata. No tardó el esperto marino en reconocer que el grande donde
estuario
no podia ser sino
se encontraba,
cadura de un gran rio, tanto por
por
la
la
la
embo-
poca hondura, como
dulzura del agua; y dejando fondeadas dos
de
las
carabelas, al abrigo de la isla de San Gabriel, entró el mis-
mo
en una
latina,
con
el
factor
Marquina y
contador
el
Alarcon, para reconocer de cércala costa inmediata, que era Asi llegaron hasta
la del Norte.
la isla
de Martin García;
y aproximándose á la costa firme, notaron que habia casas de indios, y que muchos observaban sorprendidos la embarcación y las gentes desconocidas que iban en ella. Solis quiso reconocer y tomar posesión de aquella tierra
en cumplimiento de sus instrucciones, cuyo artículo transcribimos literalmente, para que se forme idea
final
el lector
de los usos de aquella época:
«La manera que habéis de tener en «
el
tomar de
la
pose-
sion de las tierras é partes que descubriéredes ha de ser,
«
que estando vos en
«
hagáis ante escribano público y
ó parte que descubriéredes
«
que pudiéredes
«
acto
la tierra
el mas número de testigos mas conocidos que bebiere, un de posesión en nuestro nombre cortando. árboles
é los
ramas, é cavando ó haciendo
hobiere disposición
«
é
«
algún pequeño edificio, é que sea en parte donde haya
«
algún cerro señalado ó árbol grande, é decir cuantas le-
«
guasestá de
«
é
la
si
mar, poco mas ó minos,
é
una horca,
é
que señas tiene, é hacer
alli
á
que parte
que algunos
como nuestro
«
pongan demanda ante vos,
«
juez, lo sentenciéis y determinéis de
«
toméis
«
part3
«
vincia ó isla, é dello sacareis teslimcnio sinado del dicho
la
dicha posesión,
donde
la
la
é
capitán, é
manera que en todo
cual ha de ser por aquella
tomáredes, é por todo su partido é pro-
EL DESCUBRIMIENTO. « escribano, « á «
en manera que faga
37
Fecho en Mancilla,
fé.
24 días del mes de Noviembre de 1514 años.
Rey,
Yo
el
etc.»
desembarcó con los dos
Solis
acompañaban, y seguido de
que
reales
oficiales
y de
ellos
siete
le
hombres mas,
se int3rnó algunos pasos, para plantar la cruz, y hacer el acta de
toma de posesión
á la vista de los indijenas
que los
Pero una emboscada de flecheros que los
observaban.
españoles no hablan notado, cayó sobre ellos de improviso,
y todos fueron víctimas de su estremada confianza, con escepcion de uno, que quedó entre los indios hasta
la sola
Los
11 años después.
manos y
salvajes les cortaron la cabeza, las
y poniéndolos á asar en sus fogones, los comieron con feroz alegría, á la vista de los que habian los pies,
permanecido en
la
carabela, les cuales se alejaron cons-
ternados á reunirse á los otros dos buques que habian que-
dado mas
atrás.
Así terminó su vida
nombre aparece en
la
El cronista Herrera
le
tiempo en su arte
— Su
sacrificó en esta parte
el
primer capitán cristiano, cuyo
primera pajina de nuestra historia. llamó
el
mas
escelente
hombre de su
vida generosa fué la primera que se del
mundo en
holocausto á
la civili-
zación, planta que no se aclimata sino después que la riega la
sangre de. sus mártires. Los compañeros de Solis dieron
su nombre
al rio
que habia descubierto, y
se pusieron
en
seguida de regreso, huyendo de aquellas costas inhospitalarias.
Su segundo Torres lomó
el
mando y
recaló en
un
puerto del Brasil, donde embarcó 515 quintales de palo de tinte,
60 cueros de lobo y una muchacha que llevaron es-
clava, siendo este todo el fruto de
aquella
empresa. Para colmo de desgracia una de naufragó en tripulación.
la
Laguna de
La
los Patos,
desventurada
las tres carabelas
quedando
allí
part3 de su
noticia de este desastre llegó el 4 de Sep-
38
HISTORIA ARGENTINA.
tiembre de 1516, á oidos del Cardenal Ximenes, que rejente de Castilla, después de la muerte de Católico acaecida el 23 de Enero de ese año.
CAPÍTULO
erar
Fernando
el
IV.
HERNANDO DE MAGALLANES. Descubrimiento de Montevideo— ¿Cual es el verdadero Rio de Solis?— Lanao Victoria dala vuelta al Mundo.
1530. Tres años después de llegada sastre
que acabamos de
referir,
á
España
la noticia del
de-
fué despachado el marino
Portugués Hernando de Magallanes con una armada de cinco naves y2G5 individuos, á buscar el paso que el desgraciado Solis
no pudo
hallar. Magallanes siguió el
su predecesor;
el
mismo derrotero de
10 de Enero de 1520 reconoció
Santa Maria, y siguiendo
al
el
cabo de
Oeste avistó una montaña he-
día como un sombrero, dice el derrotero, y le pusieron nombre Monte Vidi; continuó la costa que corre á O. N. O.
y en seguida dobla hoy la Colonia.
al S.
O. hasta llegar
—Desde
está
allí
despachó
buques llamado Santiago, á descubrir
el
ban, y se encontraren con unas isletas y iinnj (jrande,
De
est-is
que era
el rio
punto donde
menor de sus
pasaje que buscala boca
de
un
palabras del derrotero de Magallanes, resulta
que
mo
han repetido todos
el actual rio
rio
de Solis. (1)
claro, lo
al
el
déla Plátano es
el rio
ea
de Solis, co-
los historiadores, sin
escepciou
Frente á la boca del Guazú, 12 millas al norte de Martin 1. Garcia, hay una isla que vulgarmente se llama Sola y cuya verdadera denominación es Solis, del nombre de su descubridor. La carta del Uruguay, por el Capitán Sullivaji. la llama así.
39
EL DESCUBRIMIENTO.
ninguna, hasta hoy; y restableciendo la verdad histórica auténticos que nos tal cual se desprende délos documentos el Uruguay, de cuya es Solis, de rio el guia de sirven (1)
embocadura no pasó aquel insigne navegante. La carabela desanduvo las 25 leguas que habia avanzado,
(2)
y se reunió con
el resto
quince dias de separación.
con
el
de
la
armada, después de
Entre tanto, otros dos buques,
Gefe á bordo, habian ido a reconocer
la
costa del
—
El 8 de Sur, que encontraron á 20 millas de distancia (3) de San cabo el por pasó Febrero el intrépido Magallanes al Sud y reconociendo toda la costa Padel Estrecho, que encontró después de busca tagónica, en aventuras, el 21 de Octubre de terribles fatigas grandes y
Antonio siguiendo
1520, dejando en
él
inmortalizado su nombre.
Pocas espediciones marítimas recordará la historia en que se haya requerido mas firmeza en el propósito, mas energía en
el
peligro y mas las que desque eventualidades, se hizo en que primero viaje, el
mando, mas serenidad en
decisión para afrontar las
plegó Magallanes en este
el
derredor del mundo. De las cinco naves, todas pequeñas, con que dio la vela de San Lúcar de Barrameda, solo una, la Victoria, volvió á
jeto de la costa
la
España, después de completado
el
ob-
espedicion. De las otras cuatro, una naufragó en
Patagónica, otra desertó desde
el
Estrecho,
la otra
quemada en una de las islas Filipinas, y la Capitana quedó perdida en las Molucas— Insurreccionados los Gefes
fué
1.
Navfirrete— Colección
ele
Viajes.
Colonia, hasta cerca de la isla de Solis, hay precisamente la distancia de '25 leguas que marca el derrotero. 3. El derrotero publicado por Navarrete dice 5¿0 leguas, pero la es sin duda error de copia, pues la distancia entre la Colonia y Punta de Lara, que son los puntos indicados, es de 20 millas ma2'.' edición.) rinas, como decimos en el texto. (Nota de la El largo del cable del Telégrafo eléctrico establecido e» Octubre tí.
Desde
la
de Ibbb entre eso* des puntos, es de ¿4
millas.
40
HISTORIA ARGENTINA.
de tres naves en
el Puerto de San Julián, fueron castigados crueldad propia de soldados de aquella época: uno fué muerto en el acto de rendirlo, el otro fué degollado
con
la
y
descuartizado, y el tercero, Juan de Cartajena, fué dejado en aquel desierto, con un clérigo, que habia
tomado parte
en
mismo Gefe de laespedicion, Magallanes, murió paleando como un héroe con los bárbaros de la isla la sedición.
El
de Zebú, una de las Filipinas; y por fin, solo lograron volver á España 21 individuos, de los que tripulaban las cuatro naves que atravesaron el Estrecho.
CAPÍTULO
V.
SEBASTIAN CABOTO. El Emperador Carlos
V.-Espedicion de Diego García al Rio de y de Sebastian Caboto á la India— Entra al Rio y esplora el Uniguay— Penetra en el Paraná— Oríjen de la denominación del Rio de la Plata— Regresa á España—Lucía Solis,
Miranda y
las
primeras cautivas.
*
1526 á 1530. Antes de
salir
brado en 1518
el
Magallanes de España, ya habia sido nomveneciano Sebastian Caboto para ocupar
mayor del reino, vacante por muerte de Caboto se habia hecho célebre desde que, al servicio de Enrique YII de Inglaterra, habia descubierto, en 1496,
la
plaza de piloto
Solis.
una parte de
la
América del Norte, buscando por
allí
camino
para las islas Molucas.
Caries
V ocupaba
el
trono de España, y empezaba, lleno
del ardor de la juventud, su brillante carrera de conquistas
y de engrc.ndecimiento. El Capitán de la Victoria^ Sebastian
de Elcano, cubierto de gloria por haber sido
el
primero que
41
EL DESCUBRIMIENTO.
mundo, había regresado á su país, descrila mansedumbre del Océano
tUó la vuelta al
biendo
paso del Estrecho,
el
Pacífico, y las maravillosas riquezas de las islas de la Esel sentimiento de ambición y de amor en los pechos de los castellanos, cuyas armas habian sido irresistibles en Granada, en Argel y en Italia, hallaban abierto vastísimo campo á su ambición
pecería. á
Aguzado
gloria
la
siguiendo
banderas
las
de los conquistadores de Méjico
y del Perú, ó buscando en rados del
Nuevo Mundo
los paises todavía
el atractivo
no esplo-
de nuevas y halagado-
ras aventuras.
Apartada
la
atención del gobierno español del pais des-
cubierto por Solis, volvió
al
cabo de diez años á refrescarse
su memoria, quizá porque veia inclinarse hacia
él
la afi-
ción de los Portugueses, que iban ocupando con sus conquistas las vecindades del Brasil.
Dus espediciones
se prepararon casi á
un mismo tiempo
y Magallanes, una en la Garcia, Diego de Coruña á las órdenes y otra en Cádiz á las como le llaman los Gaboto, ó Caboto, Ssbastian célebre del
para seguir las huellas de Solis
cronistas españoles.
De
la relación del viaje
archivo de Sevilla
cho un viaje
al
(1)
de Garcia, que se conserva en
Rio de Solis, y que uno de los buques de su
espedicion habia naufragado en la costa del Brasil.
esperimentado piloto fué confiado
que
el
consta que quince años antes habia he-
el
A
este
mando de una armada
se equipó bajo la dirección de la casa de contratación
de especería, que se estableció en
la
Coruña cuando Se-
bastian de Elcano volvió de su famoso viaje de circunvalaLa espedicion partió de la Coruña el 15 de Enero ción.
de 1526, y
1.
habiendo sufrido muchas contrariedades en
Navarrete, tomo V.
el
42
HISTORIA ARGENTINA.
viaje, arribó al establecimiento
portugués de San Vicente
el
15 de Enero del año inmediato, en donde se demoró por mucho tiempo.
Tres meses después del Capitán Diego Garcia, habia salido Sebastian Cabolo, de Sevilla, el 1». de Abril de
en viaje para
las islas
de Magallanes.
Molucas, pasando por
mando, con
1526,
Estrecho
Esta espedicion, que tardó once meses en
aprontarse, se componia de cuatro el
el
el
Llevaba Caboto
naos.
cargo de Capitm General, que debia ejer-
cer en las tierras que descubriese; y por su tsnients se nombró á Martin Méndez, que habia sido contador de la
célebre nao
Victoria
en
la
espedicion de Magallanes.
Los
Capitanes de las otras naves eran Gerónimo Caro, Francisco de Rojas y Miguel de Rufis. El equipaje, pasaba de 600
personas, á quienes voluntariamente acompañaban muchos hijos-dalgos y personas principales; entre
cuales ve-
los
nían tres hermanos del insigne Vasco Nuñez de el
Balboa,
descubridor del mar del Sud.
Habiendo faltado los víveres,
las
tripulaciones empeza-
ron á amotinarse, y Caboto, cediendo á sus exijencias, arribó al Puerto de los Patos, perteneciente á España por el Tratado de
Tordesillas, (por
los
con ánimo de no seguir viaje á
28^ grados de las islas
de
la
S.)
lat.
Especería
Después de refrescar sus víveres, re-
(Indias Orientalei).
solvió seguir el derrotero de Solis; tocó en el cabo de Santa
Maria, y
al
le
en
penetrar
capitanes destinados
á
el rio,
censuraban públicamente por
á su viaje, dejó
mana de
los
barbarie
de
al
mundo
caracteres la
sabiendo que los tres
reemplazarle en la
caso
de muerte,
mala dirección que daba
otro ejemplo de la dureza inhu-
de aquella época, tan cercana á
edad media:
Caboto abandonó á los
la
tres
capitanes sediciosos en una isla desierta que encontró á su
paso, que es probablemente la que ahora se llama de Cor-
43
EL DESCUBRIMIENTO.
Continuó luego hasta la isla que denominó de S Gabriel, á la cual llegó á mediados de 1527. Pasó después
riti.
de San Juan, cerca del lugar donde once años antes había perecido su predecesor Solis, y encontró al único de sus compañeros que habia salvado de la. catástrofe. al rio
Construyó
allí
un pequeño
fuerte,
y envió
al
Capitán
J.
A.
embarcaciones menores á reconocer el rio, remontando su curso— Este oficial penetró por el Uruguay embocadura V llegó hasta el rio de San Salvador, cerca de la
Ramoneen
las
de otro que los naturales llamaban Him^ que quiere decir Negro; y al regresar pereció con muchos de les suycs á
manos de
los salvajes— En seguida reconoció Cabotola cos-
en que está hoy Buenos Aires, y remontó con dos embarcaciones el Paraná, por el brazo que llamó de las Palta
mas, llegando
hasta
el
Tercero, donde fundó
Carcarañal,
el fuerte
ó
embocadura
del rio
de Sancti Spiritus, que vul-
garmente se llamaba después, de Gaboto. Dejó aqui parte de su gente, y con una pequeña embarcación
siguió
remontando el Paraná hasta el Salto de Agua 20" lat: 56« 48' lonj. de G.) retrocedió de allí
ó de Itú,(27« 27'
el rio Paraguay, penetró en él é hizo donde tuvo lugar un combat3 Bermejo, reconocer el Rio mas beUcosa que encontratribu la Agaces, indios con los
(Marzo 1528) hasta
estarmiy que en pocos años fué que ocupaban el pais situado entre ambos rios, recibió Caboto algunas piezas de plati, que estos hablan adquirido de los Charcas, cuyo metal entendió que abundaba en todo el pais. Alucinado con est3 hallazgo, de ó queriendo con él alucinar á la corte y á les armadores
ron
los conquistadores,
nada.
De
los indíjenas
su espedicion,
de esta conquista, á
paña
el
se le confirmase en el gobierno que no venia destinado, mandó á Es-
para que
aviso de sus descubrimientos,
plata rescatada y de algunos indíjenas
acompañado de
la
tomados, y esto dió
^^
HISTORIA ARGENTINA.
lugar á que
la
rado recibiera
magnífica corriente de agua que había esplcel nombre de Rio de la Plata, en la suposi-
ción de que el pais abundaba en este metal. Corriendo el tiempo se limitó esta denominación al grande estuario que Solis
denominó Mar
Dnlce,
que concurren á formarlo
tomando los
los
dos grandes rios
nombres que
daban los
les
guaranís, Paraná, y Uruguay. Junto con los informes de Caboto, llegaron á la metrópoli los del Capitán Diego Garcia, que habia arribado al
fin
á su destino,
que Caboto
pero que no se animó
a
asumir
el
gobierno
usurpaba. (1) Los oficiales abandonados por Maldonado, habian elevado también sus quejas al rey; de todo lo cual resultó que los armadores de la espedicion se negaron á enviar nuevos recursos. le
este cerca de
Caboto entonces resolvió volverse á España, como lo 1530, dejando el fuerte de Sancti Spiritus con una guarnición de 110 hombres á las órdenes del efectuó en
Capitán Lara. Entre los que la componían, estaba Sebastian Hurtado, casado con Lucía Miranda, de quien I).
Ñuño de
se
enamoró perdidamente el indio Mangora, gefe de una tribu de Timbús que vivia en paz con los españoles. Una noche logró
el
indio introducirse en la fortaleza con algunos
de ausencia de una parte de la gente que habia salido en busca de víveres. Cuando la guarnición se entregó al sueño, los indios cayeron sobre los
ella,
suyos, aprovechando
quemaron
la
la fortaleza,
mataron
á todos los
hombres,
y se llevaron á las mujeres y los niños. sus compañeras, fueren las
Lucia Miranda y primeras cautivas de los salva-
La relación orijinal de la espedicion de Diego Garcia ha sido 1. encontrada, eu muy mal estado, por Navarrete, en el Archivo do Simancas, que pasó ó Sevilla. Herrera dá de ella idea muy confuir* en la Década IV. Lib. 1.= (Nota déla 2^ edición.) Guiado sin duda por esta indicación, consta que el Sr. Mitie pidió á Sevilla copia de ella y la tiene en su poder.
EL DESCUBRIMIEMO. jes
que recuerdan
las crónicas
Áo
argentinas; las cuales refie-
ren que los indios después quemaron viva á Lucia, matan-
do también
Cuando
á su
marido que habia ido en su busca.
la partida
que se hallaba ausente volvió
al fuerte,
y encontró les vestijios de aquel desastre, su Capitán Rui Garcia de Mosquera, resolvió abandonar
la
naciente colonia,
que era imposible conservar con 40 soldados, únicos que quedaban de la espedicion de Caboto; y asi, embarcándose con aquellos restos desgraciados en 1532,
salió al
mar y
arribó á San Vicente, último estremo meridional de las po-
sesiones portuguesas, según
Mosquera
el tratado
se estableció luego algo
ya citado
mas
al
— Garcia de
Sud, en Iguape;
allí por el donatario y gobernador, á prede que eran tierras del rey de Portugal, se retiró á la
pero hostilizado testo isla
de Santa Catalina cuya propiedad nadie cuestionaba u
la
España. Asi terminó
de
la
Plata.
el
primer ensayo de colonización en
Pero con
quedó esplorado todo
la el
el
Rio
espedicion de Sebastian Caboto, pais
que bañan
los grandes rios
liasta
Paraguay, y mas arriba del Bermejo, sus raudiiles que derrama la embocadura del Negro,
en
Uruguay.
hítsta
el
afluente del
-
SECCIÓN
11.
lA CONQUISTA.
CAPÍTULO D.
I.
PEDRO DE MENDOZA, PRIMER ADELANTADO.
Crítica situación de la
España— Sojuzgamiento de los Incas Necesidad de ocupar el pais argentino— Espediciou de D. Pedro de xMendoza— Sus instrucciones— Primera fundación de Buenos A n-es— Resistencia de los indígenas, segundada por el hambre y por la peste— Conquista del Paraguay— Muerte de Mendoza.
1535, La
corte de
ios ausilios
España no habia tratado de enviar
que pedia,
á
Caboto
á causa de los grandes aconteci-
mientos que se desenvolvian ó se preparaban en Europa por aquel tiempo. La revolución religiosa, encabezada por Lutero, amenazaba conmover les pueblos cristianes por su base; y Carlos V que preveia el peligro en que la propa-
ganda berética iba á poner sus dominios de Alemania, tenia ya á la mano el que amagaba sus posesiones en Italia, por la nueva invasión que babian hecho en ella las armas del
resentido prisionero de Pavia.
En
cuanto á los asuntos de
las indias, toda la atención estaba concentrada sobre la
quista ya realizada del rico imperio de
descubrimientos en
las Indias
con-
Motezuma, sobre
los
Orientales, y principalmentí
LA CONQUISTA.
47
sobre los progreses que hacían en esos momentos en
Perú
las
el
armas españolas.
Ejecutada en
la
noche
29 de Agosto de 1533
del
cua sentencia de Pizarro, por
la
que perdió
pa, quedó abierto á los conquistadores
el
la
la ini-
vida Atahual-
camino del Cuzco,
en donde entraron victoriosos el dia 15 de Noviembre, con lo cual quedó completamente sometido el imperio de los Incas. noticia de estas ventajas, renovó en el
La pañol
empeño de
el
abrir
Gobierno
una comunicación entre
espais
el
esplorado por Caboto, y aquel imperio, pues era ya evidenconveniencia de poner en contacto ambas conquistas,
te la
para asegurar su tranquilidad y aproximar
el
Perú á
me-
la
trópoli.
D.
Pedro de Mendoza,
hom-
natural de Guadix, gentil
bre de Cámara del Emperador, acababa de regresar de
guerra de
Italia,
donde habia servido
destable de Borbon, y habia
saqueo de
tomado parte en
Roma. Mendoza
ciudad de
la
á las órdenes del
la
Con-
el asalto
y
el
volvió rico á Espa-
ña con su parte de botín; y cuando supo que el gobierno por escasez de fondos no se resolvía á enviar una espedicion rio
al
Rio de
la Plata,
de los incas,
él se
para tomar por retaguardia
el
impe-
ofreció á prepararla á su costa, y á
conducirla á su destino.
Para este
fin, se
preparó
la
mas
brillante espedícion
había salido de puertos españoles para
poníase de
la
América.
que
Com-
mas de 2,000 soldados aguerridos, entre ellos á cuyo número pertenecía Ulderico Schmidel,
150 alemanes, el
primer cronista de
la
época colonial.
Entre los oficiales
venían muchos caballeros de distinción. El gefe de
mas
era
el
las ar-
Capitán de infantería D. Juan de Osorio, militar
esperimentado, respetable por su liberalidad y sus virtudes. El
mando de
la
armada estaba á cargo de D. Diego, hermano
48
HISTORIA ARGENTINA. t
del Adelantado
—Era
Alguacil mayor, D. Juan de Ayolas,
íntimo amigo suyo; los capitanes mas notables eran D. Francisco de Mendoza;
ballej'o
mingo Martinez de
el
ca-
célebre vizcaino Do-
el
contador Felipe Cáceres; y los
Irala; el
capitanes, Juan de Ortega, montañés, y Juan de
Salazar,
Gonzalo de Mendoza y Diego de Abreu, todos andaluces co-
mo
el
gefe de la espedicion.
Las capitulaciones para esta empresa se firmaren en
nombre
del
Emperador Carlos V,
el
21 de Mayo en 1534,
siendo las principales de ellas las siguientes;
Que habia de venir
al
Rio descubierto por Solis y esplo-
rado por Caboto, y entrar por
llos
la tierra
hombres en dos
del Sud, trayendo mil
hasta llegar á la
mar
viages, y cien caba-
y yeguas, para continuar la esploracion y conquista del Que su gobierno se estenderia, desde los
pais á su costa. límites
con
el
Portugal, doscientas leguas hacia
de Magallanes. Que tendria
el titulo
el
Estrecho
de Adelantado^ con las
amplias facultades civiles y militares, anexas á este empleo,
y el sueldo de 2,000 ducados anuales y otros tantos de ayuda de costas, pagado de las rentas de la tierra Que ha-
—
bia de levantar tres fortalezas, de
D. Pedro alcaide perpetuo, y la
la
una de
las cuales seria
vara de Alguacil Mayor de
población seria para sus herederos
— Que
llevaría
ocho
religiosos para la ccnversicn de los indios al cristianismo,
recomendándole sobre todo por ser
la
cosa que
mas
el
el
buen tratamiento de estos
rey estimaba y tenia
en su
corazcu.
La armada
salió
1534, se detuvo en
de San Lúcar el
el 1°.
enfermado gravemente D. Pedro, delegó Juan Osorio; pero no tardó este
gefe, cuya
prendes.
de Setiembre de
Janeiro algún tiempo, y habiéndose el
mando en D.
en formarse un partido contra
popularidad crecia en razcn desús buenas
Hicieron
entender á
D. Pedro que Oscrio
le
LA CONQUISTA.
49
y un dia, mientras se paseaba por la orilla del mar, fué acometido y muerto á puñaladas de orden del Adetraicionaba,
lantado, por Ayolas, Salazar y otros dos oficiales. Grande impresión causó este acto de tiranía en los espedicionarios:
muchos disgustados resolvieron quedarse allí; y cuando el hermano deD. Pedro,que ya viajaba hacia el Rió de la Plata,lo supo, esclamó contristado: Plegué á Dios que
hombre y su muerte, no
A
principios de 1535 entró la espedicion
Plata,
y fondeó en
la Isla
mandó
en seguida
reconocer
á D. Diego, á se trasladó
Febrero de 1535
el
A
L\
allí
El Adelan-
costa meridional y con la gente, abriendo el 2 do la
cimiento de una trinchera de tapia, en
cuyo recinto se construyeron ñoles.
Rio de
al
de San Gabriel á donde ya habia
llegado con tres naves el almirante de la flota.
tado
de este
la falta
sea causa de la perdicicnde todos.
Espa-
los alojamientos de los
esta población se le dio el
nombre de Puerto de
Santa Maria de Buenos Aires, con motivo de haber esclama-
do
el
poner
capitán Sancho del Caujpo, cuñado de Mendoza, el
pié en tierra: qué buenos aires son
Ocupaban